Transhumanismo y Post

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 12

Transhumanismo y Post-humano:

principios tericos e implicaciones


bioticas
Elena Postigo Solana
El transhumanismo ha sido definido como un movimiento cultural, intelectual y cientfico
que afirma el deber moral de mejorar las capacidades fsicas y cognitivas de la especie
humana, y de aplicar al hombre las nuevas tecnologas, para que se puedan eliminar
aspectos no deseados y no necesarios de la condicin humana, como son: el sufrimiento, la
enfermedad, el envejecimiento y hasta la condicin mortal"

Transhumanismo y post-humano:
principios tericos e implicaciones
bioticas[1]

1. Qu es el transhumanismo?
El transhumanismo ha sido definido como un movimiento cultural, intelectual y cientfico
que afirma el deber moral de mejorar las capacidades fsicas y cognitivas de la especie
humana, y de aplicar al hombre las nuevas tecnologas, para que se puedan eliminar
aspectos no deseados y no necesarios de la condicin humana, como son: el sufrimiento, la
enfermedad, el envejecimiento y hasta la condicin mortal[2]. De este modo, Nick
Bostrom, uno de los mayores tericos de esta opinin, Presidente de la World
Transhumanist Association (WTA), afirma que el Transhumanismo representa una nueva
concepcin operativa del futuro del hombre; concepcin que rene a cientficos y expertos
procedentes de distintos sectores del saber: Inteligencia artificial, neurologa,
nanotecnologa, y otros investigadores en biotecnologa aplicada. A stos se unen filsofos
y hombres de cultura, con el mismo fin: el de cambiar, mejorar la naturaleza humana, y
prolongar su existencia.

La misma definicin del Transhumanismo plantea ya una serie de interrogantes


fundamentales: Qu entendemos cuando hablamos de una mejora (Enhancement) de la
especie humana?[3] Dnde est la frontera entre terapia y mejora? El hombre ha utilizado
desde siempre medios naturales o artificiales para potenciar sus facultades habituales
(como, p. ej., en el caso de las gafas), mejorar su cuerpo o fortalecer su inteligencia.
Existen lmites ticos para estas operaciones? Cundo se puede afirmar de un hombre que
es normal y cundo no lo es? El criterio de normalidad se establece con arreglo a unos
estndares fsicos y a estadsticas del nmero de seres humanos que poseen esa
normalidad? Tambin el asunto del Enhancement plantea de por s numerosos
interrogantes que requieren un estudio especfico, cientfico y tico. No desarrollaremos
aqu una exposicin de este tema estrechamente vinculado al Transhumanismo -, sino
que nos limitaremos solo a enunciar algunos de los fundamentos tericos e implicaciones
ticas de este ltimo[4].

Es tambin Bostrom el que precisa la diferencia entre un ser transhumano y otro


posthumano. El primero sera un ser humano en transformacin, con algunas de sus
capacidades fsicas y psquicas superiores a las de un ser humano normal, pero todava no
posthumano. En cambio, un posthumano sera un ser (no se especifica si natural o
artificial) con las siguientes caractersticas: una esperanza de vida superior a los 500 aos;
capacidades intelectuales dos veces superiores a lo mximo que el hombre actual pudiera
tener, y dominio y control de los impulsos de los sentidos, sin padecimiento psicolgico. Se
tratara por tanto de alguien con unas capacidades que sobrepasaran de modo excepcional
las posibilidades del hombre actual. Esta superioridad sera tal que eliminara cualquier
ambigedad entre el ser humano y el posthumano: el posthumano sera completamente
distinto. Este ltimo sera un ser ms perfecto que el ser humano y el transhumano. Un
posthumano, segn afirma Bostrom, podra gozar de una prolongacin de la vida sin
deteriorarse, tendra mayores capacidades intelectuales (sera ms inteligente que los
dems), tendra un cuerpo conforme a sus deseos, podra engendrar copias de s mismo y
dispondra de control absoluto sobre sus emociones.

2. Declaracin de los principios del Transhumanismo


El movimiento transhumanista ha reunido los principios fundamentales de la teora que lo
anima en la siguiente declaracin[5]:

La humanidad ser transformada de modo radical por la tecnologa del futuro. Prevemos la
posibilidad de proyectar la condicin humana de modo que se evite el proceso de
envejecimiento ahora inevitable; se superen las limitaciones del entendimiento humano (y
del artificial); se supere un perfil psicolgico sometido y dictado por las circunstancias ms
que por la voluntad individual; se elimine nuestra cautividad en el planeta tierra y el
sufrimiento en general.

Ser necesario el esfuerzo de una investigacin sistemtica con el fin de comprender el


impacto de este desarrollo todava solo en el horizonte y darse cuenta de las consecuencias
que implica a largo plazo.

Los partidarios del transhumanismo consideran que para aprovechar las nuevas tecnologas
es necesario gozar de una amplitud de miras que nos permita emplear estas tecnologas en
lugar de intentar prohibir su uso o desarrollo.

Estos mismos partidarios sostienen que hay un derecho moral a emplear mtodos
tecnolgicos nuevos por parte de los que lo deseen, con el objetivo de incrementar las
propias capacidades fsicas e intelectuales, y de aumentar el control sobre sus vidas.
Aspiran, de este modo, a conseguir un crecimiento personal que supere decididamente las
limitaciones biolgicas que ponen barreras a la vida del hombre actual.

Es necesario, cuando se piensa en el futuro, valorar el impacto de un progreso tecnolgico


constantemente acelerado. En efecto, la prdida de posibles beneficios debida a la
tecnofobia o a prohibiciones no justificadas y no necesarias sera una tragedia para el
gnero humano. Sin embargo, hay que tener presente que una calamidad o una guerra
provocada por una tecnologa avanzada, podra suponer la extincin de toda vida
inteligente. Por lo general, para los transhumanistas, esto no supondra un problema, la vida
humana no tiene un valor especial respecto a otros tipos de vida.

Es necesario crear lugares de encuentro donde se debata racionalmente qu pasos se han de


dar hacia el futuro; es necesario tambin crear las estructuras sociales en las que se puedan
tomar y llevar a cabo decisiones responsables.

El transhumanismo es partidario del bienestar para todos los seres dotados de sentido: ya
sean seres humanos, inteligencias artificiales, animales o posibles seres extraterrestres.
Incluye, en este sentido, muchos principios del humanismo moderno. El Transhumanismo,
en cambio, no est suscrito a ningn partido poltico ni vinculado a un programa del mismo
tipo.

3. Breve historia del Transhumanismo y autores


relevantes
Bostrom describe en un artculo cules fueron las etapas e hitos fundamentales en la
historia de la Filosofa y de la Ciencia que llevaron a la teora transhumanista[6]. Esta teora
hunde sus races en la antigedad griega, pero encuentra a lo largo de toda la historia los
elementos que han provocado su nacimiento. Desde siempre, en efecto, el hombre dese
mejorar sus capacidades fsicas y mentales con diversos mtodos y aspir a la felicidad. Sin
embargo, la Revolucin Cientfica y el pensamiento moderno constituyeron un giro
decisivo, tanto en el modo de desarrollar la Ciencia positiva como en la visin concreta del
hombre. En particular, con D. Hume, I. Newton, T. Hobbes y F. Bacon se ponen los
cimientos de un racionalismo que fomenta el desarrollo cientfico y que siempre es
optimista acerca de sus posibilidades. Al mismo tiempo, desde Descartes en adelante, por lo
que se refiere a la concepcin del hombre, se sostiene un dualismo en la naturaleza humana
o un reduccionismo a la materia. Por una parte, el hombre es considerado como una res
cogitans, es decir, como un ser que entiende y piensa, a menudo reducido al ejercicio
puntual y concreto de sus capacidades racionales. De esta postura procede la opinin
funcionalista, segn la cual el hombre es tal en la medida en que ejerce su capacidad
racional y realiza actos racionales puntuales. Por otra parte, sin embargo, la naturaleza
humana es considerada segn la opinin de Hume, como algo reducido a sus propiedades
materiales. Como bien sabemos, este reduccionismo del concepto del hombre a materia,
junto con la visin funcionalista, origina la idea del hombre propia del neurobiologicismo.
El hombre es solo su capacidad racional, y esta ltima se identifica con la realidad material.
Se sostiene as una versin puesta al da del hombre-mquina de La Mettrie, segn el cual
el hombre no es ms que un engranaje perfecto formado por partes materiales; esta misma
visin es presentada hoy por el cyborg (un ente que es mitad ciberntico, mitad orgnico).
Influyen sobre las opiniones de los transhumanistas, adems del concepto de naturaleza
propio de Hume, tambin las teoras utilitaristas de J. Bentham y J. Stuart Mill, as como la
tica pragmatista posterior de C. Peirce y W. James.

Otro hito del pensamiento de Occidente muy importante para el Transhumanismo lo


constituye la formulacin de la teora evolucionista, enunciada por Darwin en su obra El
Origen de las especies (1859). En ella Darwin quiere apoyar cientficamente la tesis
materialista de Hume acerca de la naturaleza humana. Segn el evolucionismo, como se
sabe, la evolucin es un fenmeno solo material, un fenmeno que consiste en una
combinacin entre los cambios materiales y el azar, y est todava en desarrollo. Segn los
autores del transhumanismo, nos encontraramos en un momento especial, en el cual el
homo sapiens technologicus estara en condicin de cambiar su naturaleza por medio de las
biotecnologas y otros medios, para dirigirla hacia una nueve especie posthumana ms
perfecta. Cuanto a las races de esta teora, finalmente, los autores atribuyen la paternidad
del trmino Transhumanismo a J. Huxley, que fue el primero en emplear esta palabra en
1927, aunque la expresin transhumanar sea utilizada ya por Dante en la Divina
Comedia.

La tesis transhumanista cobr fuerza tambin gracias a los estudios llevados a cabo sobre la
Inteligencia Artificial en la segunda mitad del siglo XX. Se puede pensar en A.M. Turing
en la dcada de los 50, y en todos los autores posteriores, as como en los llamados
futuristas de Amrica, activos entre 60 y 80. Entre ellos: E. Dexler (Engines of
Creation, 1986), C. Peterson, R. Ettinger y la criogenizacin que plante como hiptesis en
1964 en su libro The prospect of immortality. Llegamos as a 1997, ao en que se fund la
World Transhumanist Association, presidida por Nick Bostrom[7]. Entre los autores que
promovieron y desarrollaron esta teora, podramos citar tambin: D. Pearce, A. Standberg,
(cientfico sueco, experto en Inteligencia Artificial, que trabaja en el Oxford Uehiro Center
for Practical Ethics de la Facultad de Filosofa de la Universidad de Oxford[8]), S. Youg, J.
Huges (Citizen Cyborg), R. Naan (More than human, Embracing the promise of biological
Enhancement), M. Moore y T. Morrow (que fundaron en 1992 el Extropy Institute), A.
Chislenko, R. Hanson, J. Harris (Profesor Ordinario de Filosofa en la Universidad de
Manchester, que public en 2007 un controvertido libro: Enhancing the species), y muchos
estudiosos ms, no tan conocidos por ahora, que trabajan en la misma lnea.

En el mismo seminario citado anteriormente en el que Bostrom recorri las etapas de la


historia del transhumanismo, encontramos tambin algunas de las observaciones crticas
recibidas en los ltimos diez aos y, en particular, encontramos una referencia explcita a
autores como F. Fuknyama[9], L. Kass en la obra The wisdom of repugnance (1997) y Life,
Liberty and the Defence of Dignity (2002), B. McKibben en Enough (2003), a los que
podemos aadir dos obras sucesivas, muy lcidas, que ponen en evidencia los problemas y
algunas de las incongruencias de la teora transhumanista: indirectamente el libro de J.
Habermas, The future of human nature (2003) y el volumen de J. Ballesteros:
Biotecnologa y Posthumanismo[10].
Como puntos fundamentales de la teora transhumanista se pueden considerar los tres
siguientes: a) una gran confianza y optimismo en las posibilidades muchas de ellas
todava desconocidas de la ciencia; b) la naturaleza humana, reducida a pura materia; y c)
la mente humana, reducida a simples conexiones neuronales. El cuadro general presenta,
por lo tanto, una idea de la ciencia como algo absoluto, en la cual los genes y las neuronas
desempean toda actividad. Volveremos ms adelante sobre la validez de estos supuestos.

Bostrom considera que el desarrollo creciente de algunos sectores de la ciencia, como la


medicina contra el envejecimiento, la ingeniera gentica, la inteligencia artificial, la
nanotecnologa, la criogenizacin, etc., muestran que existen suficientes razones cientficas
para pensar que la hiptesis de trabajo pueda llegar a realizarse. Las posibilidades sobre el
futuro del hombre, que Bostrom expone, son fundamentalmente tres: a) la extincin o la
desaparicin del hombre; b) la evolucin hacia una especie superior, la posthumana; y c) el
quedarse en una fluctuacin incesante entre la mejora de lo humano y lo posthumano, sin
llegar a realizar esta posibilidad. En su artculo titulado The Future of Humanity, Bostrom
ofrece una presentacin de cmo procede el futuro de la humanidad segn describimos en
el apartado siguiente[11].

4. Cmo se logra el transhumanismo en la prctica?


Despus de haber enunciado los principios fundamentales de la teora, veamos ahora cules
son los modos concretos a travs de los cuales siempre segn la opinin de los autores
que defienden esta teora tendr lugar este paso de la especie humana a otra superior[12].

En primer lugar est la aplicacin de la tcnica eugensica prenatal a embriones, eso es, la
seleccin de seres humanos sin defectos ni patologas y la eliminacin de los seres
enfermos con la tcnica oportuna. De hecho, el movimiento transhumanista y los
representantes de la eugentica liberal, como, por ejemplo, J. Savulescu, sostienen no solo
la licitud de la eleccin de los embriones sanos y la eliminacin de los que presentan
patologas, graves y no graves, sino que adems hablan ya de la obligatoriedad moral para
que no nazcan nios enfermos. Por supuesto, para ellos sera lcita tambin la eliminacin,
mediante el aborto, de fetos que presenten anomalas congnitas[13]. Incluso en los ltimos
tiempos algunos de ellos (Giubilini y Minerva) han planteado el infanticio neonatal de
discapacitados graves como algo lcito y necesario, o al menos consecuente con sus teoras.
En segundo lugar, se mira a la nanotecnologa molecular, que, a travs de la introduccin
de microchips en diversas partes del cuerpo, quiere activar y potenciar las distintas
capacidades, especialmente las cerebrales. Como analoga, cabe pensar en lo que acontece
en algunas patologas o discapacidades, cuando, gracias a la introduccin de microprtesis
auditivas u pticas, o bien con partes del cuerpo humano de origen binica, se incrementan
algunas facultades humanas. Todo esto encontrara su aplicacin, segn opinan los
transhumanistas, no solo en el mbito teraputico, sino tambin, y de modo especial, para
potenciar la actividad de algunos rganos humanos, como, por ejemplo, los del aparato
cardiorespiratorio.

Otra posibilidad la representan los frmacos que favorecen el control el bienestar emocional
(los antidepresivos), que tienen la finalidad de limitar el impacto negativo de algunas
experiencias, bloqueando los centros de control y los neurotrasmisores. Si el entendimiento
humano como ya dijimos antes y toda su actividad se reduce a puras conexiones
neuronales, que, en gran medida, despliegan su actividad a travs de reacciones fsico-
qumicas, es obvio que, si se conocen bien los mecanismos de accin, se pueden introducir
sustancias qumicas que influyen en los mecanismos, cambindolos o impidindolos. Del
mismo modo, la toma de pldoras de la personalidad podra modificar esta ltima, de
modo que supere limitaciones como la timidez, o bien que se incremente la capacidad
creativa o emocional. En definitiva, se considera esta posible aplicacin como algo anlogo
a lo que se hace hoy, en el mundo del deporte, con el doping. No es de extraar, por
tanto, que algunos autores, como J. Savulescu, justifiquen moralmente el doping de los
deportistas.

Los transhumanistas toman en cuenta, adems, las posibilidades de una prolongacin de la


esperanza de vida, gracias al empleo de terapias gnicas o mtodos biolgicos que permitan
detener el envejecimiento celular. En la actualidad esto no es posible. Tal vez se puede
frenar el proceso, pero no pararlo. En nuestra opinin, esta finalidad aparece por lo menos
utpica, tanto ahora como en el futuro, porque supondra la superacin de una condicin
intrnseca al transcurso del tiempo en las sustancias orgnicas. La temporalidad y el
envejecimiento de los seres orgnicos son, en efecto, caractersticas propias e inevitables de
la materia viva. A pesar de todo, algunos opinan que se podr superar la frontera de la
muerte, a travs de la crioconservacin y la reanimacin de pacientes mantenidos en
suspensin criognica. De hecho, en algunos centros se est llevando a cabo la
crioconservacin de personas fallecidas, con la esperanza de poderlas devolver a la vida, y,
en un futuro y con el progreso de la ciencia, emplear soluciones teraputicas todava
desconocidas. Sin embargo, posibilidades como estas a medio camino entre la utopa y
una fe ciega en el progreso cientfico suscitan perplejidad, por no decir un escepticismo
total, porque, si se tiene una concepcin del hombre como de alguien que no est
constituido solo de materia, estas opiniones aparecen como vacas de sentido y fundadas en
pretensiones absurdas.

Pero la enumeracin de los fines que los transhumanistas quieren alcanzar no es todava
completa. Algunos autores, en efecto, al partir siempre de una visin mecanicista del
hombre, segn la cual el cerebro y sus informaciones se pueden reducir a la sola materia,
han llegado a formular la hiptesis de una existencia post-biolgica. En un primer
momento, por medio de una especie de scanner se podra obtener una escansin de la
matriz sinptica de un individuo animal, con la finalidad de reproducirla, en un segundo
momento, en un ordenador (computer). De este nodo, en analoga con lo que sucede en una
transmisin de datos de tipo virtual, se podra realizar la transferencia de lo vivido subjetivo
a partir de un cuerpo biolgico (ya fallecido) ya sea a otro ser orgnico (trasplante de
cerebro), ya sea a un substrato material-digital. De modo coherente y de acuerdo con lo que
se ha dicho, algunos autores han pensado en la posibilidad de crear mquinas super-
inteligentes, en las que se produzca una combinacin entre una parte ciberntica y otra
parte orgnica: los llamados cyborg (cybernetics organism), una entidad en parte
orgnica y en parte mecnica, ser humano o mquina?

Todas las afirmaciones y los mtodos enunciados que integran el proyecto de alcanzar los
fines del transhumanismo hacia un posthumano, reciben en conjunto el nombre de
Postulado tecnolgico. El Postulado tecnolgico, segn estos autores, se llevar a cabo
en los prximos 100 aos, con la ayuda y el apoyo del Foresight Institute para la
investigacin y la nanotecnologa, y del Extropy Institute para la expansin de las
capacidades, la autotrasformacin y el optimismo dinmico, dirigido por M. More, ambos
Institutos creados a finales de los ochenta.

5. Anlisis crtico de las premisas antropolgicas de la


teora y sus implicaciones bioticas
Frente a la teora y al contenido del postulado transhumanista, en parte ya puesto en
prctica pinsese, por ejemplo, en la seleccin gentica de embriones que presentan una
patologa -, surgen numerosos interrogantes, algunos de los cuales quedan sin respuesta por
parte de los transhumanistas. Procuraremos enumerarlos en este apartado.

F. Fukuyama defini el transhumanismo como una de las ideas ms peligrosas del


mundo[14], porque altera la naturaleza humana y el concepto de la absoluta igualdad entre
todos los seres humanos, que es el fundamento de toda sociedad demcrata. Tambin J.
Habermas critic la teora y los supuestos del Transhumanismo y del Enhancement porque
eliminaran la posibilidad de la autonoma moral del individuo, ya que sta estara sometida
a los intereses sociales, polticos o econmicos y adems eliminara la igualdad entre los
hombres. En nuestra opinin, lo problemtico de esta teora reside, en primer lugar, en sus
postulados o premisas de tipo antropolgico, asumidos como verdaderos y absolutos,
cuando son, en cambio, muy discutibles y, de hecho, no reconocidos o aceptados por todos.
A continuacin examinaremos los ms relevantes, proponiendo un breve anlisis crtico de
ellos.

En primer lugar, se plantea el problema de cul es el concepto de la naturaleza humana y


del hombre, reducido a simple materia: los autores que sostienen la teora transhumanista
proceden, en su mayora, de la tradicin anglosajona, y, en muchos casos, prescinden
completamente de las conquistas del pensamiento clsico, como, por ejemplo, las de
Aristteles, Toms de Aquino o Kant, pero tambin de algunos pensadores
contemporneos, que se inspiran en los clsicos, como son R. Spaemann, A. MacIntyre, M.
Nussbaum, Ricoeur y otros. Las teoras de estos ltimos son rechazadas por unos
prejuicios sin fundamento, sobre todo sin el soporte de una crtica de las teoras clsicas,
que califican sin ms de vacas, abstractas y carentes de sentido prctico. Todo esto es una
especie de falacia ad hominem, puesto que las teoras clsicas son descalificadas sin
argumentos. De este modo, estos autores tranhumanistas, que aceptan y asumen solo la
filosofa moderna, especialmente la que se inspira en Hume, el empirismo y el neo-
empirismo, derivado de sus teoras, caen en una asuncin totalmente acrtica, porque carece
de la confrontacin con otras teoras. Estos autores afirman que ens est percipi, es decir,
que el hombre es solo lo que tiene la facultad de percibir, una realidad material, un
cuerpo, una estructura, excluyendo su potencialidad, su finalidad intrnseca o la existencia
en l de algo inmaterial. El hombre es materia. De este modo, se opera el primer
reduccionismo biologicista, que, unido a la falacia naturalista, establece que no es
posible fijar una tica que surja de la naturaleza humana (finalizada y racional). Los fines,
segn esta teora, son elegidos o de modo autnomo por la racionalidad de la persona, o
bien por criterios extrnsecos de una utilidad pragmtica. Estos autores no asumen nunca la
carga de la prueba; es decir, no aceptan que la naturaleza humana pueda dirigirse a un fin.
Simplemente lo niegan, pero sin aportar argumentos fuertes o detallados. Se manifiestan as
al menos dos cosas: la primera es que no conocen a autores como Aristteles, Toms, etc.;
la segunda es que, si los conocen, no los toman en consideracin.

El hombre, por lo tanto, es considerado como un mecanismo material complejo, que


funciona como una mquina (pinsese en el hombre-mquina supuesto por J-O. De la
Mettrie), y no sorprende que se hable de la posibilidad de crear ciertos seres, en los que la
ciberntica y la nanotecnologa sustituiran completamente a la naturaleza humana,
llevando al hombre hacia una especie de ser artificial o post-humano. Si somos
totalmente materia, y si logramos un da entender perfectamente cmo funciona el hombre,
qu dificultad encontraremos para hacer un hombre artificial? Ya en la pelcula Blade
Runner se plantea la pregunta de la diferencia entre el ser humano y el replicante producido
artificialmente. Llegar un momento, piensan los transhumanistas, en que podremos hacer
unas rplicas humanas perfectas, idnticas al hombre, pero artificiales.

A este reduccionismo materialista se une adems un segundo nivel de reduccionismo o un


segundo reduccionismo, es decir, el reduccionismo neuronal. No somos solo materia, sino
que somos sobre todo conexiones neuronales. El da en que el hombre pueda descifrar con
claridad cmo funciona el cerebro, habremos descubierto cmo funciona el hombre entero,
ya que para los transhumanistas el hombre es su cerebro. A propsito de esta forma de
reduccionismo se pueden hacer dos observaciones: 1. Se han planteado numerosas crticas
al reduccionismo neurobiologicista, como la de R. Penrose, que, inspirndose en G. Gdel,
afirma que un ordenador es capaz solo de un razonamiento algortmico (fundado en
secuencias lgicas), mientras que el cerebro humano est abierto a la improvisacin y a lo
inesperado, a lo catico, lo que equivale a decir que es creativo; 2. Pensamos que afirmar
que el hombre es solamente el fruto de conexiones neuronales es una hiptesis que carece
de demostracin. Ahora bien, un postulado que no tiene una demostracin emprica
correspondiente es un postulado que contradice el fundamento mismo y el punto de partida
del empirismo: solo existe lo que se puede percibir y sentir; es decir, lo que se afirma no se
da todava. Todava no somos capaces de traducir todos los estados mentales en estados
neuronales o conexiones neurofisiolgicas. El cerebro es ms complejo de lo que
pensamos, y la actividad mental no se puede reducir a una actividad fisiolgica, ya que la
mente no es solo cerebro. Por otra parte, este asunto, la relacin entre mente y cerebro, ha
sido ampliamente discutido por muchos autores, como, por ejemplo, E. Husserl, H.
Bergson, J. Eccles y K. Popper, P. Ricoeur, etc., por citar solo algunos nombres. Sabemos
que las respuestas a este interrogantes son tres: el hombre es identificado con su cerebro
(tesis del fisicismo neurobiologicista); el hombre es en parte mente y en parte cerebro (tesis
dualista interaccionista); o, finalmente, el hombre es una unidad dual de mente y cuerpo.

En segundo lugar, en la teora transhumanista se produce una eliminacin de la realidad


personal en su plenitud, porque la persona se reduce exclusivamente a racionalidad. Como
bien sabemos, en la Edad Moderna se produjo una deriva del esse al agere, con lo cual el
concepto de persona pas del mbito sustancial a un mbito operacional, del ser a la
conciencia. De este modo, es persona solo quien aqu y ahora es capaz de razonar, no es
persona, en cambio, quien no est en condicin de razonar, como son: los fetos, los
embriones, los discapacitados privados del uso de razn, las personas en estado vegetativo
persistente o en coma. Adems, segn esta teora, el estatuto personal se podra atribuir
tambin a seres no humanos, que en apariencia razonan (como son algunos primados
superiores). Ahora bien, los transhumanistas llegan ms all, porque afirman en nuestra
opinin paradjicamente que podran ser personas tambin unas mquinas que fueran
aparentemente inteligentes. Este reducionismo funcionalista llev a considerar la persona
solo como ente racional y, desde una perspectiva de eficiencia, como un ente que produce
actos de razn.

En tercer lugar, una vez que el concepto de persona ha sido entendido equivocadamente
hasta identificarlo con una racionalidad en funcin, se produce una incapacidad para
entender la dignidad ontolgica, intrnseca, de todo ser humano. Si se elimina el
fundamento ontolgico que hace que el hombre sea esencialmente distinto de otros seres
vivos, se reduce al hombre a un ser material como son otros seres, se produce un
igualitarismo ontolgico cuantitativo, no de grado (somos solo ms complejos que los
animales o las mquinas u objetos superinteligentes, desde el punto de vista cuantitativo,
pero nada ms). En este caso, el concepto de dignidad humana queda expuesto a que se le
atribuyan significados totalmente subjetivos (calidad de vida[15], capacidad de autonoma,
etc.), e incluso se llega a considerar que debera ser eliminado del todo de la discusin
sobre la antropologa y la biotica (pinsese, en este sentido, en el debate acerca del
concepto de dignidad reflejado en revistas de biotica, donde es a veces calificado como
un concepto vaco e intil). Con esto no queremos decir que estos factores, como la calidad
de vida y la autonoma, estrechamente relacionados con la dignidad humana, no sean
importantes, sino que consideramos que su significado se deriva o es anlogo de un
concepto principal, que es el de la dignidad de la persona o de su valor intrnseco, que nace
con la generacin del ser humano y desaparece con su muerte. Adems, si el ser humano no
tuviera un valor por s mismo, qu sentido tendra hablar de mejorar la calidad de vida del
hombre o de concederle autonoma? La dignidad o es poseda desde el origen, y el hombre
la posee por ser hombre, o es concedida. En este segundo caso, quin es el que la concede
o la reconoce? En efecto, lo que est sucediendo es que de la prdida de la nocin de
dignidad humana como propiedad ontolgica y, por tanto, con un valor intrnseco e
irrenunciable de cada hombre, procede directamente la consecuencia de que la dignidad
puede ser reconocida o no por las personas, por el poder tecnocrtico o hasta por el poder
poltico. Recurdese, por ejemplo, cmo la afirmacin vidas no dignas de ser vividas,
empleada como criterio decisivo por las polticas nazis en la Operacin eutanasia T4,
produjo de hecho la discriminacin y la eliminacin fsica de personas deformes o con
demencias graves. Por otra parte, qu sentido tendra hablar de la igualdad en los derechos
del hombre, si el fundamento de esta asercin no fuera el hecho que todos tenemos la
misma naturaleza, y que esta ltima tiene un valor en si? Desgraciadamente, el
iuspositivismo moderno, procedente de un concepto empirista de naturaleza humana, ha
llevado a considerar estos derechos como frutos de un consenso, ms que algo intrnseco al
mismo ser humano.

Adems de las cuestiones a las que hemos aludido (sentido de la naturaleza humana, de la
persona, de la dignidad), en nuestra opinin el Transhumanismo deja otras muchas
cuestiones sin resolver, algunas de ellas verdaderas aporas.
Sealamos aqu algunas de ellas:

a) Los autores transhumanistas suelen identificar la felicidad psicolgica con la perfeccin


fsica, lo que equivale a decir: cuanto ms perfecto eres en el fsico, tanto ms feliz sers.
Pero esta equivalencia no siempre es cierta. La realidad muestra que se pueden dar
situaciones en las que la imperfeccin gentica no engendra infelicidad, o que hay personas
que, aunque padezcan una enfermedad grave, viven una vida feliz. La constatacin de este
hecho pone en evidencia que la felicidad humana no es solo una cuestin de perfeccin
gentica, sino algo ms profundo, que pertenece al mbito de lo moral, algo que se
relaciona con la persona en su conjunto (lo que es prueba, en alguna medida, de que no
somos solo materia). La experiencia demuestra, adems, que lo que nos hace ms felices no
es un bien material o algo que se puede someter a un experimento cientfico positivo
(pinsese, por ejemplo, a situaciones de amistad o amor). Esto equivale a decir que el
hombre no est orientado a conseguir solo bienes materiales, sino tambin bienes que son
valores en si mismos. En los autores transhumanistas se produce una confusin entre las
capacidades fsicas y las cualidades morales o metamateriales. Tendramos, adems, que
preguntarnos si la evolucin es solo un proceso material casual, como ellos afirman, o algo
ms. Estos autores asumen como un dogma que la evolucin es un fenmeno materialista y
casual, sin darse cuenta de que, en buena medida, esta afirmacin est en contraste con sus
principios racionalistas. Por qu creer en el progreso ilimitado de las ciencias, si la
realidad demuestra que la ciencia se equivoca y, a veces, hasta retrocede? Tampoco est
demostrada la utopa de un progreso cientfico lleno de optimismo. En realidad, en sus
obras se encuentra al mismo tiempo una confianza dogmtica en la ciencia y la acusacin
de dogmatismo fidesta no demostrado a la metafsica. Pero, en definitiva, son ellos los que
caen en un dogmatismo fideista de cuo materialista y cientifista.

b) Adems de estos interrogantes fundamentales, surgen otros relativos al aspecto prctico:


antes de llegar a producir un hombre perfecto o posthumano, qu hacer con todos los
hombres no perfectos? Mientras conviven humanos y posthumanos Quin establece los
relativos derechos, y con arreglo a cules principios sern todos iguales? O, tal vez,
derechos y deberes no sern iguales? Cul ser el fundamento de la igualdad o de la
desigualdad? Por qu se supone, como cosa cierta, que vivir indefinidamente es algo
deseable? Tenemos la obligacin moral de mejorar al ser humano o de darle solo una vida
lo mejor posible? Y qu significa mejor? Esta mejora tiene un sentido solo biolgico o
tambin moral? Quin establece los lmites y las normas de la mejora biotecnolgica? El
estado, los tecncratas?

c) En nuestra opinin, el proyecto transhumanista es irrealizable en su totalidad. Lo


consideramos una utopa en la situacin actual. Sin embargo, es preciso considerar que
algunos de sus mtodos y de sus premisas estn ya presentes. Se puede pensar en la
eugentica y en el materialismo neurobiologista. Por otra parte, el ser humano es capaz de
hacer todo porque es libre; hasta puede destruirse a s mismo. En este sentido, el ttulo de
una obra de C.S. Lewis, La abolicin del hombre, escrito en 1943, aparece como una
premonicin.

d) Desde el punto de vista biotico, las implicaciones ms graves que pueden verificarse si
se llevan a cabo estas teoras son: la eliminacin eugentica de seres humanos
imperfectos o con malformaciones (caso del aborto eugentico y diagnstico previo a la
implantacin con finalidad selectiva[16]); la creacin de embriones humanos ms
perfectos; la eliminacin de la igualdad entre todos los seres humanos; el empleo de
nanotecnologas con aplicaciones humanas, sin pensar con anterioridad en cules seran las
consecuencias en el hombre (se puede pensar, por ejemplo, en la privacin, disminucin o
control de la libertad y de la conciencia); la criogenizacin del ser humano, etc. Todo esto
llevara, adems, al crecimiento de una mentalidad reduccionista sobre hombre, eficientista
y que no respeta la dignidad del ser humano, sea cual sea la situacin en que se encuentra.

e) Consideramos, en conclusin, que la teora transhumanista, adems de apoyarse en unas


hiptesis antropolgicas discutibles en el plano terico, y llevar a unas consecuencias
ilcitas en el plano prctico, no es en absoluto un humanismo posmoderno y laico, como
pretenden sus partidarios, sino ms bien un antihumanismo que ofrece engaosamente
unos fines deseables para la especie humana, pero que, en el momento de su realizacin
prctica, pasa por la eliminacin del hombre para llegar al posthumano ms perfecto. De
este modo elimina, como algo que carece de valor, al hombre vulnerable y frgil, sin tener
en cuenta que precisamente la fragilidad del cuerpo humano, su limitacin en el tiempo y
en el espacio, es signo de su grandeza. Pero una toma de conciencia de este tipo solo es
posible desde un punto de vista no materialista, no reduccionista, que no reduzca a materia
la naturaleza humana y la persona. Habr que partir, por contrario, de una visin
antropolgica en la que prevalezca la dimensin filosfico-sapiencial sobre la tecnolgica e
instrumental, tan solo as se podr captar la grandeza de lo humano, que nunca ser
reductible a mero objeto.

[1] Traduccin del artculo publicado en italiano en la Revista Medicina e Morale


2009/2: 267-282. No realizada por la autora.

[2] N. Bostrom, Intensive Seminar on Transhumanism, Yale University, 26 June 2003.


Nick Bostrom es un filsofo sueco, experto en Inteligencia Artificial, que trabaja en la
Facultad de Filosofa de la Universidad de Oxford. Dirige actualmente el Future of
Humanity Institute de la misma Universidad. Se pueden encontrar todos sus artculos y
otras publicaciones en: http//www.nickbosrom.com.

[3] Sobre este asunto quiero sealar el ltimo volumen publicado por los defensores del
Enhancement y de la eugenesia liberal; este volumen rene aportaciones de los principales
exponentes de esta corriente: P. Singer, J. Harris, A. Sandberg, J. Savulescu, N. Bostrom: J.
Savulescu, N. Bostrom (eds.), Human Enhancement, Oxford, Oxford University Press,
2009.

[4] Cfr N. Bostrom, R. Roache, Ethical Issues in Human Enhancement, en Ryberg et Al.
(eds.), New Avances in Applied Ethics, Palgrave, Macmillan, 2007.
[5] Cfr. la web http//www.transhumanism.org. Se pueden encontrar adems numerosos
elementos de la teora en el volumen de S. Young, Designer Evolution: a transhumanist
manifesto, New York, Prometheus Books 2006.

[6] Cfr N. Bostrom, A History of Transhumanist Thought en Journal of Evolution and


Tecnology 2005, 14(1), 1-25.

[7] Cfr. Ibid.

[8] Se pueden encontrar los datos de algunas de sus publicaciones y sus ideas en el sitio
web: http//www.aleph.se (acceso del 20.04.2009). Se pueden encontrar, adems,
informaciones sobre el Proyecto Amejoramiento, que lleva adelante el Inatitute for the
Future of Humanity de la Universidad de Oxford, en el sitio web:
http//www.enhanceproject.org (acceso del 20.04.2009).

[9] Fukuyama desarrolla su crtica en la obra Our Posthuman Future: Consequences of the
Biotechnology Revolution, New York: Farrar, Straus and Giroux; 2002.

[10] J. Ballesteros, E. Fernndez (eds.), Biotecnologa y Posthumanismo, Navarra,


Ediciones Aranzadi, 2007.

[11] Cfr N. Bostrom, The Future of Humanity, en Berg Olsen (eds.) New Waves in
Philosofy of technology, Palgrave, MacMillan 2007.

[12] Cfr. N. Bostrom, What is transhumanism? acceso del 20.04.2009 a


http//www.transhumanism.org/index.php/WTA/more/151.

[13] Cfr J. Savulescu, New breeds of humans:the moral obligatios to enhanceEthics, Law
and Moral Philosophyof Reproductive Biomedicine 2005, I, 36-40. N. Agar, Liberal
Eugenics in Defence of Human Enhancement, Oxford, UJ, Blackwell 2004.

[14] Cfr. F. Fukuyama, Our Posthuman Future

[15] Cfr N. Bostrom, Dignity and Enhancement en Human Dignity and Bioethics: Essays
Commissioned by the Presidents Council on Bioethics (Washington D.c.) 2007, en sitio
web: http//www.nickbostrom.com, acceso del 20.04.2009. En este artculo el autor
sistematiza el concepto de dignidad en la visin del Enhancement, y constata que esta
visin excluye el valor ontolgico de la dignidad humana. Se puede ver tambin sobre este
aspecto, Idem. In Deffence of posthumanism dignity, en Bioethics 19(3) 202-210.

[16] A este propsito se puede consurlar el artculo de A. Postigo-M. Daz, Nueva


Eugenesia: la seleccin de embriones in vitro, en J. Ballesteros, A. Aparisi (eds.),
Biotecnologa, dignidad y Derecho: bases para un dilogo, Pamplona, Eunsa, 2004, 79-110.

3 (60%) 2 votos

También podría gustarte