El Modernismo y Neruda
El Modernismo y Neruda
El Modernismo y Neruda
PABLO NERUDA
Luis Veres
Facultad de Ciencias de la Información
CEU San Pablo
Universidad Politécnica de Valencia
Octavio Paz en El caracol y la sirena señala que esta fue la gran puerta por
la que Neruda dio salida a la melancolía de sus primeros versos.
Y más adelante:
"Tal es la situación de la poesía chilena cuando comienzan a aparecer
los primeros libros de Neruda. Las conquistas del modernismo han sido
incorporadas a la lírica chilena que ahora forma un remanso del romanticismo".
(3)
Oh pedazo de miseria
que recuerda el verso del poema XV de Cantos de vida y esperanza:
frente a:
Estos principios son recogidos por Neruda en Tentativa del hombre infinito
para rechazar los principios de la teoría creacionista como poder universal.
En México, Manuel Maples Arce también dirigiría sus críticas más duras
contra el modernismo. En el manifiesto "Actual n° 1", texto pegado en los muros de
Puebla en el año 1921, arremete en contra de la poesía inmediatamente anterior. Es
bastante evidente su repudio en la plasticidad de la imagen "los que no han ido a
lamer los platos en los festines culinarios de Enrique González Martínez" o
cuando habla de la caducidad de la estética anterior en términos de "edores de
pulquería y rescoldos de fritanga". Maples Arce abogó por una estética nueva: "de
la pesadez nos hemos sacudido los prejuicios" y califica de sagradas las nuevas
leyes ("tablas evangélicas").
Neruda logra mostrar una nueva versión de una modalidad tan manida en el
principio del S.XX como el nocturno, no realizado desde una postura tradicional
sino vanguardista, como preludio de la temática del viaje nocturno. Vemos, pues,
como Neruda recoge el léxico de la tradición y cómo a partir de un molde del
pasado logra un producto novedoso en línea con las nuevas tendencias artísticas.
Pero fue sin duda en Crepusculario donde Neruda arrancó de los moldes
tradicionales, especialmente en cuanto a esquemas métricos se refiere: dísticos
pareados en Melisanda" y "El estribillo del turco", dísticos blancos en "Farewell" y
"La muerte de Melisanda; cuartetos asonantes en "Dame la maga fiesta", en
"Aromas rubios en los campos de Lancoche", en "Aquí estoy con mi pobre cuerpo",
en "Hoy que es el cumpleaños de mi hermana"; cuartetos consonantes en "Tengo
miedo" y en "El pueblo"; tercetos encadenados en "El padre"; romances en "Me
peina el viento los cabellos"; y cuatro sonetos de versos alejandrinos conforme al
modelo modernista en "Esta iglesia no tiene...", en "Pantheos", en "Viejo ciego
llorabas" y en "El nuevo soneto a Helena". El verso libre, marca preferente de la
nueva poesía, aparece sólo en las composiciones poco relevantes y que escasean a
lo largo del libro. Todas ellas de arte menor: "Puentes" y "Los jugadores". Para
Hugo Montes en este variado panorama son dos las notas que destacan: la variedad
métrica y una gran independencia frente a la retórica anterior. Es por ello que
frecuentemente varían las estrofas dentro de una misma composición. (12)
Para Hugo Montes este hecho tiene una gran significación: el deseo de
distanciamiento por parte de Neruda de los moldes modernistas. Para el crítico
chileno, Neruda sigue una trayectoria parecida a la de su amiga Gabriela Mistral,
cuyo poemario Desolación se enmarca en la estética rubendariana que será
abandonada y depurada en sus libros posteriores.
Neruda a los dieciséis años había leído ya a Darío, a Vargas Vila, a Amado
Nervo, a Pezoa Veliz, a escritores franceses como Sully Prudhome, André Spire,
Henry de Reguier, Paul Fort, Baudelaire, Verlaine y Bataille. Por encima de
este universo poético, a Neruda le influye "el mundo natural de la frontera,
respirado desde la más tierna infancia, con sus bosques y sus ríos, su noche, su
mar y sus trigales". (14)
Sin duda Neruda con su Residencia trastoca los cánones del modernismo
sobre todo en el terreno sintáctico, pero no es menos cierto que siguen apareciendo,
aunque en menor medida, rastros del modernismo en determinadas expresiones y
vocablos. Por ejemplo en "Tango del viudo":
Manuel Durán por su parte señala dos ejemplos en que ese modernismo
avanzado no ha desaparecido del todo. El primero corresponde a "Arte poética":
Este aspecto es importante pues Neruda sigue una trayectoria similar, ya que
arrancando desde las voces del modernismo es en los Veinte poemas y en Anillos
donde ha tomado una ruta personal que se manifestará más evidentemente en
Residencia en la tierra, aunque en esta obra seguirán leves ecos darianos. Era
imposible permanecer impasible ante el influjo del poeta que había revolucionado
las letras hispanoamericanas.
Notas:
1.Citado por Raúl Silva Castro: Rubén Darío a los veinte años, Madrid,
Gredos, 1956, p. 14.
2.J.Alazraki: Poética y poesía de Pablo Neruda, Nueva York, Las
Américas, 1965, p.64.
3.Op., cit., p.65.
4.Op., cit., p. 79 y 80.
5.A.Roggiano: "Ser y poesía en Pablo Neruda, del Castillo sin ventanas
a Una responsabilidad compartida", en E. Rodríguez Monegal, Pablo Neruda,
Madrid, Taurus, 1980,p.249
6.J. Schwartz, Las vanguardias latinoamericanas, Madrid, Cátedra,
1991, p.19 .
7.Volodia Teitelboim: "Neruda siempre", en Rodríguez Monegal, Pablo
Neruda, Madrid, Taurus, 19 , p. 44 y 45.
8.Citado por J.Schwartz: Las vanguardias latinoamericanas, Madrid,
Cátedra, 1991 , p. 75.
9.Carlos Ripoll:, "Índice de la revista Avance", Nueva York, Las
Américas, 1969, p.10.
10.Citado por J.Schwartz, Las vanguardias latinoamericanas, Madrid,
Cátedra, 1991, p.336.
11.René de Costa "Tentativa del hombre infinito, notas para una
revaloración", en Rodríguez Monegal, Pablo Neruda,
Madrid, Taurus, 1980,p.111.
12.Hugo Montes, Para leer a Neruda, Buenos Aires, Francisco Aguirre
Editores, 1974. .
13.Guillermo Araya, "Veinte poemas de amor y una canción
desesperada", Bulletin Hispanic, Université de Burdeaux,
1982, p.154.
14.Hernán Loyola: Ser y poesía en Pablo Neruda, Santiago de Chile, Ed.
Santiago, 1976, p.35.
15.Saúl Yurkievich: "Residencia en la tierra, paradigma de la primera
vanguardia", en A través de la trama. Sobre
vanguardias literarias y otras concomitancias, Barcelona, Mario
Muchnick, 1984, p.56
16.Manuel Durán, " Sobre la poesía de Neruda, la tradición simbolista y
la desintegración del yo", en Simposio Pablo
Neruda, University of South Carolina, 1975, p.134.
17.Op., cit., p.134.
18.Ricardo Gutiérrez Mouat: "La presencia de ciertos textos de Darío en
Residencia en la tierra", Hispamérica, nº34,
diciembre, 1974, p.85.