Guay Cur Ues

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Los Guaicurúes

Guaicurúes, guaycurúes o guaykurúes son los nombres que recibe un conjunto de pueblos indígenas de origen
pámpido-patagónico que habita la región del Gran Chaco, en la Argentina, Bolivia, Paraguay y Brasil. De esta familia
forman parte los mocovíes, toba, pilagás y caduveos. En el pasado también incluyó a los ya extintos abipones,
mbayaes y payaguaes. Las distintas lenguas guaicurúes habladas son muy afines entre sí.

El nombre de guaicurúes tuvo su origen en el apelativo ofensivo dado por los guaraníes a una parte de los mbayaes
del Paraguay, que después se amplió a todo el conjunto, aun hoy entre los guaraní-parlantes la palabra guaykurú
tiene un significado que se traduce aproximadamente por "bárbaro" o "salvaje".

A estos pueblos del Chaco Oriental, los españoles les dieron el nombre de frentones (en guaraní: toba) por la
costumbre muy común entre ellos de raparse la parte anterior de la cabeza, dando la impresión de una frente más
amplia de los normal.

Son altos y de fuerte constitución física, con piernas robustas y anchas espaldas. Excelentes cazadores y recolectores

Los Caingang

Los káingang (en idioma kaingáng: hombres del bosque), cáingang, kainhgág, kañganj, guayanés, guayanás,
caingangues, coroados o bugres, son el pueblo indígena del biotipo láguido del centro-sur del Brasil que en el pasado
habitó también la mesopotamia argentina, Paraguay y el norte del Uruguay en donde constituyeron el sustrato
previo a la expansión guaraní. Su lengua pertenece a la familia lingüística Ge.

Los descendientes actuales de los káingang continúan viviendo en el sur del Brasil. Actualmente sus actividades
principales son la agricultura y la artesanía.

Vivían en numerosos grupos de 150 a 200 personas, en un extenso territorio en que abundaban los bosques de
araucaria o pino del Paraná, cuyos piñones recolectaban como base de su alimentación, especialmente entre marzo
y mayo y del que fabricaban harinas y bebidas y que conservaban en canastos tapados que se ataban a un lazo y se
sumergían en un pozo de agua de un río. Recolectaban también palmito, diversos frutos, hojas, larvas y miel
silvestre, con la que hacían hidromiel. Usaban la yerba mate para preparar infusiones y en los rituales. Extraían la
fibra de la ortiga brava. Pescaban con trampas y cazaban venado, danta, pecarí, coatí, monos y diversas aves.
Combinaban la vida nómada en campamentos con la agricultura en pequeña escala, sembraban maíz, fríjol y
calabazas. No fabricaron cerámicas hasta que recibieron la influencia guaraní.

Eran algo bajos y con piernas y brazos gruesos. Cara redonda y achatada y piel de color oscura aceitunada. Las caras
las tienen todas iguales y como cortadas por el mismo modelo. No son ovales, sino redondas y achatadas; no son
negras como las de los Negros del África, sino de color marrón o blanco verdoso (...)

Se agrupa históricamente a los káingang en cuatro grandes divisiones: los coroados, en el Guayrá; los camperos (o
cabelludos); los gualachíes o gualachos, en Misiones (luego refugiados en el Guayrá), y la de los ibirayarás en el
medio río Uruguay (entre ellos posiblemente los yaros).

En la región de los gualachíes, los jesuitas Antonio Ruiz de Montoya y Francisco Díaz Taño fundaron la reducción de
Purísima Concepción (o Inmaculada Concepción) en 1627, y José Cataldino fundó la de San Pedro en los Pinares en
1628. Ambas reducciones fueron destruidas por los bandeirantes en 1630, y sus habitantes participaron del éxodo
guayreño hacia Misiones a fines de 1631. Ruiz de Montoya hizo un perdido catecismo en lengua gualachí. En 1633 el
jesuita Francisco Jiménez fundó la reducción de Santa Teresa en la región del Tapé, incluyendo posiblemente a
algunos káingang.

Los primeros españoles que llegaron a la zona norte de la mesopotamia argentina se encontraron con estos pueblos,
que posteriormente fueron suplantados allí por guaraníes y charrúas.
A fines del siglo XIX todavía se encontraba una tribu káingang en la zona de San Pedro en la provincia argentina de
Misiones. Juan Bautista Ambrosetti, quien realizó entre 1892 y 1894 tres viajes a Misiones, recogió un vocabulario
kaingáng a partir de su estadía entre ellos, publicado como Los indios Kaingangues de San Pedro (Misiones), con un
vocabulario. Al morir su último cacique, Bonifacio Maidana, la tribu se dispersó y desapareció. Es probable que
hayan emigrado desde el Guayrá en el siglo XIX, ya que parecen estaban emparentados con los coroados. Como
apéndice de su primera publicación, Ambrosetti publicó en 1894 el Vocabulario Kaingángue (Coroado) del Pikiry (al
Norte del Guayra), con el trabajo de recolección realizado por el teniente brasileño Edmundo Barros. En 1896
Ambrosetti publicó Materiales para el estudio de las lenguas del grupo Kaingangue (Alto Paraná), un vocabulario de
los ingáin o tains, quienes según Ambrosetti vivían en el alto Paraná y que él catalogó como káingang. Sin embargo,
otros autores ponen en duda la existencia de los ingáin ya que obtuvo el vocabulario de indígenas peones de
estancias sin visitar a esos pueblos.2

Los guayanás que habitaron a ambos lados del río Paraná (Misiones y Paraguay) desde el norte de Corpus hasta el
Salto del Guairá, incluyendo la zona de Iguazú, eran también del grupo káingang. Para ellos y para los guaraníes
cainguás creó fray Bonifacio Ortiz la reducción dominica de San Francisco de Paula luego de la expulsión de los
jesuitas en 1768. Ubicada primero al occidente del Paraná, fue luego en 1770 trasladada a doce leguas al este de la
reducción de Corpus Christi en Misiones, en las cercanías de la actual Jardín América. Esta reducción todavía existía
en 1832 cuando fue visitada por Francisco Cabañas. Otro grupo también denominado guayaná vivía en la costa
atlántica entre Angra dos Reis y las islas Cananéias.

Los yaros (o yaróes, yaroses o jaros) fueron un pueblo que se supone pertenecía al grupo de los káingang. Es casi
seguro que son los cainaroes o camaroes mencionados por la expedición de Sebastián Caboto, que los situaba entre
los guaraníes al norte de Corrientes y los mbeguaes al sur de Entre Ríos, distinguiéndose netamente de los primeros
por no practicar la agricultura. Ulrico Schmidl, quien viajó con Juan de Ayolas en 1536, describe a estos pueblos
diferenciándoles racialmente de los guaraníes. También se los conoció como chaná-salvajes. En tiempos de la llegada
de los españoles, los yaros vivían en la costa oriental del Uruguay entre los ríos Negro y San Salvador (actuales
departamentos de Río Negro y Durazno en la República Oriental del Uruguay) y en la zona del bajo Uruguay en la
provincia argentina de Entre Ríos.

Los gualachies que habitaron Corrientes y Misiones antes de ser desplazados por los guaraníes, parecen ser del
mismo grupo que los yaros, junto con otros grupos étnicos del interior de Corrientes mencionados por las fuentes
históricas del siglo XVIII como los guayquirarós, los cupizalós y los eguarós. Al fundarse la ciudad de Corrientes en
1588 algunos grupos kaingáng fueron entregados en encomiendas, pero la mayoría de los que vivían en la zona se
refugiaron en los Esteros del Iberá debido a la presión de los españoles y de los guaraníes. Entre ellos estaban los
mepenes, capesales y caracaróes o caracarás que asesinaron al sacerdote Pedro Espinosa en la zona de Goya y luego
asaltaron la reducción franciscana de Santa Lucía, estos indígenas fueron atacados por los españoles de Corrientes
en 1639.3 Se organizó una expedición compuesta por 230 indígenas y 100 españoles al mando de Cristóbal Garay y
Saavedra para escarmentar a los caracarás, mepenes, capesales y algunos guayquirarós. Remontaron el río
Corrientes hacia los esteros del Iberá, pero hallaron muy pocos indígenas, quienes se habían internado en los esteros
y desaparecieron poco después, quedando la leyenda de que aún se encuentran allí escondidos.4

Los bohanes para algunos estudiosos pertenecían al núcleo racial de los yaros, para otros eran una parcialidad de los
charrúas con quienes se fusionaron posteriormente. Dominaban la costa izquierda del río Uruguay desde el río
Negro al Cuareim, pasando algunos grupos a Entre Ríos.

Los guaraníes o avá, según su autodenominación étnica original (que significa "ser humano"), son un grupo de
pueblos indígenas suramericanos que se ubican geográficamente en Paraguay, noreste de Argentina (en ciertas
zonas de provincias de la Región del Litoral), sur y suroeste de Brasil (en los estados de Río Grande del Sur, Santa
Catarina, Paraná y Mato Grosso del Sur) y sureste de Bolivia (en los departamentos de Tarija, Santa Cruz y
Chuquisaca) y norte de Uruguay
Origen del nombre

El muy difundido nombre guaraní lo escucharon los españoles que, al invadir su territorio, habrían oído, entre los
gritos de guerra de este pueblo, la frase guará-ny, que significa "combatir-los". Por otra parte el nombre dada
significa en guaraní 'guerrero', "ava" que significa "hombre" y se pronuncia en forma grave entre los chiriguanos (ava
guaraníes).

Otra versión afirma que la denominación fue tomada de la deformación de una palabra guaraní, guariní que significa
precisamente "guerra" o "guerrear". Al parecer los mismos indígenas se denominaron de esa manera, indicando con
ello que se consideraban guerreros.

Los Charrúas

Los charrúas fueron un pueblo amerindio que en el siglo XVI vivía en el sur de Uruguay. En el siglo XVIII los charrúas
ampliaron su territorio en su guerra contra españoles y guaraníes misioneros avanzando sobre el norte de Uruguay,
el sur del estado brasileño de Río Grande del Sur y la provincia argentina de Entre Ríos, alcanzando ocasionalmente
también las de Corrientes y Santa Fe. A raíz de ese avance se fusionaron con otros pueblos que ocupaban esos
territorios, tales como los chanás y minuanes y se fusionaron y/o exterminaron a pueblos presumiblemente
cáingangs como los yaros y bohanes. El término charrúa pasó a ser el denominador común de ese conjunto de
pueblos, por lo que hoy se los denomina como complejo charrúa o nación charrúa.

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