Libro Verde Presuncion de Inocencia
Libro Verde Presuncion de Inocencia
Libro Verde Presuncion de Inocencia
Bruselas, 26.4.2006
COM(2006) 174 final
LIBRO VERDE
La presunción de inocencia
ES ES
LIBRO VERDE
La presunción de inocencia
El Libro Verde contiene una serie de preguntas (en recuadros). Se ruega enviar las respuestas,
antes del 9 de junio de 2006, inclusive, a la siguiente dirección:
ES 2 ES
1. ¿POR QUÉ LA UE ESTÁ OCUPÁNDOSE DE LA PRESUNCIÓN DE INOCENCIA?
1.1. Antecedentes
1
Conclusiones de la Presidencia del Consejo Europeo de Tampere, 15/16 de octubre de 1999.
2
Comunicación de la Comisión “Hacia un espacio de libertad, seguridad y justicia”: “Las normas
procesales deberían, en general, responder a las mismas garantías, por las que se asegure que las
personas no van a ser tratadas de manera diferente según el órgano jurisdiccional que conozca del
asunto” y que “las normas pueden ser diferentes, siempre que sean equivalentes”. COM (1998) 459, 14
de julio de 1998.
3
Programa de medidas del Consejo y la Comisión – DO C 12, 15.1.01
4
COM (2003)75 de 19.02.03.
5
COM (2004) 328 de 28.04.2004.
ES 3 ES
En 2004, la Comisión dispuso la realización del estudio The Laws of Evidence in Criminal
Proceedings throughout the European Union (las normativas de los Estados miembros en
materia de pruebas en los procesos penales)6. Las referencias a las legislaciones nacionales
que aparecen en el presente documento proceden de ese estudio.
Los artículos 297 y 31 del TUE confieren a la UE facultades en materia de justicia penal.
Artículo 31:
“La acción en común sobre cooperación judicial en materia penal incluirá, entre otras:
[…];
6
El estudio titulado The Laws of Evidence in Criminal Proceedings throughout the European Union,
puede obtenerse en la Comisión Europea, DG JLS/D3, Unidad de Justicia Penal, B-1049 Bruselas, ref.
CMO.
7
Artículo 29 del TUE: “[…] el objetivo de la Unión será ofrecer a los ciudadanos un alto grado de
seguridad dentro de un espacio de libertad, seguridad y justicia elaborando una acción en común entre
los Estados miembros en los ámbitos de la cooperación policial y judicial en materia penal […].Este
objetivo habrá de lograrse mediante la prevención y la lucha contra la delincuencia, organizada o no, en
particular el terrorismo, la trata de seres humanos y los delitos contra los niños, el tráfico ilícito de
drogas y de armas, la corrupción y el fraude, a través de:- […];
-una mayor cooperación entre las autoridades judiciales y otras autoridades competentes de los Estados
miembros […], de conformidad con lo dispuesto en los artículo 31 y 32;
- […].”
8
Programa de La Haya, conclusiones del Consejo Europeo, 4/5 de noviembre de 2004.
9
Plan de acción por el que se aplica el Programa de La Haya sobre refuerzo de la libertad, la seguridad y
la justicia en la UE (DO C 198, 12.8.2005, p.1), punto 4.2.
10
COM (2005) 195 de 19.05.2005.
ES 4 ES
para facilitar el proceso de reconocimiento mutuo. La protección adecuada de los derechos
individuales es una prioridad de la Comisión que infundirá a los profesionales de la justicia un
sentimiento más intenso de pertenencia a una cultura judicial común.
El plan de acción del Programa de La Haya11 prevé para 2007 una propuesta sobre las
garantías relativas a los medios de prueba. La Comisión desea saber si las garantías relativas a
los medios de prueba son esenciales para la confianza mutua, en lo que respecta al
intercambio transfronterizo de pruebas.
11
Punto (h), dentro de “Aproximación”, Propuesta de normas mínimas relativas a la práctica de la prueba,
con vistas a la admisibilidad mutua (2007).
12
X v. FRG n° 4483/70 – Demanda considerada inadmisible.
13
Barberà, Messegué y Jabardo v . Spain, A146 (1989), apartado 77.
ES 5 ES
1. ¿Está usted de acuerdo con los aspectos de la presunción de inocencia anteriormente
expuestos? ¿Existe algún otro aspecto que no ha sido mencionado?
Generalmente, la acusación debe demostrar la culpabilidad del acusado fuera de toda duda
razonable. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha manifestado que la carga de la
prueba recae en la acusación y que cualquier duda será favorable al acusado. En
consecuencia, corresponde a la acusación presentar las pruebas suficientes para condenarlo20.
(a) En este caso, la acusación debe presentar pruebas que demuestren que el acusado cometió
el acto material (actus reus) de la infracción, pero no tiene que mostrar que su intención era
14
Minelli v. Switzerland A62 (1983), apartado 38.
15
Krause v. Switzerland N° 7986/77, 13DR 73 (1978)
16
Allenet de Ribemont v. France A 308 (1995). 37, 41.
17
COM(2004) 562, 17.8.2004.
18
Skoogström v. Sweden N° 8582/72 (1982)
19
Peers v. Greece N° 28524/95
20
Barberà, Messegué and Jabardo v. Spain, A146 (1989), apartado 77.
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actuar de esa manera o producir ese resultado. Estas infracciones están reguladas en el CEDH,
pero el Estado no está obligado a demostrar la "intención dolosa" (mens rea) del acusado. El
Tribunal de Derechos Humanos ha comprobado que las legislaciones penales de los Estados
tipifican las infracciones de responsabilidad objetiva21. En lo que respecta a estas
infracciones, sólo debe demostrarse el hecho de que el acusado cometió el acto y, si se
demuestra, puede existir una presunción en su contra. El Tribunal ha señalado que estas
presunciones deberían someterse a unos límites razonables que tengan en cuenta la
importancia del asunto de que se trate, y respetar los derechos de la defensa”.
(b) En este caso, la acusación debe demostrar que el acusado actuó de determinada manera, y
el acusado debe presentar una explicación de sus acciones que muestre su inocencia. La carga
sobre el acusado es mayor que en el caso (a) anterior. El Tribunal Europeo de Derechos
Humanos ha manifestado que esta situación puede aceptarse en caso de infracciones “menos
graves”22.
El estudio sobre las normativas de los Estados miembros en materia de pruebas puso de
manifiesto que, mientras que la postura predominante en la UE era que el peso de la prueba de
culpabilidad del acusado recae en la acusación, en determinadas ocasiones, en casos
excepcionales como las infracciones de normas y las infracciones documentales, una vez que
la acusación ha demostrado la existencia de una obligación, sobre el acusado recae la carga
contraria de demostrar que la ha cumplido. También ha habido ocasiones en que el acusado ha
tenido que alegar argumentos en su defensa (por ejemplo, legítima defensa, enajenación
mental, coartada) antes de que la acusación haya tenido que refutarlas.
3. (a) ¿En qué circunstancias puede aceptarse que la carga de la prueba se invierta o se
modifique de alguna forma?
(b) ¿Ha conocido usted situaciones de cooperación transfronteriza en las que la carga de
la prueba haya creado un problema?
21
Salabiaku v. France A 141-A apartado 28 (1988).
22
Ídem.
23
Welch v. UK n° 17440/90 (9 de febrero de 1995), Philips v. UK n° 41087/98, (5 julio 2001).
ES 7 ES
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos24 ha declarado que, aunque no se mencione
específicamente en el CEDH, el derecho a no inculparse es un principio internacional
generalmente reconocido que forma parte fundamental de la noción de proceso justo. Este
derecho protege al acusado contra la coacción indebida por parte de las autoridades, de forma
que reduce el riesgo de errores judiciales y pone en práctica el principio de igualdad de
condiciones. La acusación debe demostrar sus argumentos sin recurrir a pruebas obtenidas por
coacción o por fuerza. El orden público y la seguridad no pueden justificar la supresión de
estos derechos25. Se trata de derechos relacionados entre sí, de modo que cualquier coerción
para obtener pruebas inculpatorias constituye una violación del derecho al silencio. El Estado
conculca el derecho al silencio del acusado al intentar obligarle a presentar declaraciones
bancarias a los inspectores de aduanas26. La coerción para cooperar con las autoridades en la
fase previa al juicio puede infringir el derecho a no inculparse, y poner en peligro la
imparcialidad de las audiencias posteriores.
24
Heaney and McGuiness v. Ireland n° 34720/97 (21 diciembre de 2000).
25
Ídem.
26
Funde v France A 256-A (25 de febrero de 1993).
27
Murray v. UK, nº 18731/91 (8 de febrero de 1996).
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cuestión de si las consecuencias desfavorables extraídas del silencio del acusado infringen el
derecho a la presunción de inocencia depende de la importancia que les atribuyan los
tribunales nacionales en la valoración de las pruebas, y del grado de coerción ejercida. Para
exigir una respuesta, las pruebas de cargo deben ser suficientemente graves. El tribunal
nacional no puede concluir que el acusado es culpable sólo porque decide permanecer callado.
Únicamente en el caso de que las pruebas contra él “exijan” una explicación que el acusado
esté en condiciones de dar y no lo haga, puede extraerse la conclusión de sentido común de
que no existe ninguna explicación y el acusado es culpable. Sin embargo, cuando la escasa
fuerza probatoria de los argumentos de la acusación no requiera ninguna respuesta, el hecho
de no responder no justifica la conclusión de que el acusado es culpable. El Tribunal de
Derechos Humanos ha señalado que las conclusiones razonables extraídas del
comportamiento del acusado no deben surtir el efecto de trasladar la carga de la prueba a la
defensa, de forma que se infrinja el principio de presunción de inocencia.
El Tribunal de Derechos Humanos no se ha pronunciado sobre la aplicación de este derecho a
las personas jurídicas. El Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas (TJCE) ha
mantenido que las personas jurídicas no tienen el derecho absoluto a permanecer calladas. Las
personas jurídicas deben contestar las preguntas sobre los hechos, pero no pueden ser
obligadas a admitir que han cometido una infracción28.
4. (a) ¿Cómo se protege el derecho al silencio en su Estado miembro?
(c) ¿En qué medida las personas jurídicas disfrutan de este derecho?
La necesidad de equidad y de reducir el riesgo de que el acusado sea condenado por su propia
declaración29 prevalecen sobre el principio de que el tribunal debe tener acceso a todas las
pruebas. Al definir el alcance del derecho, el Tribunal de Derechos Humanos ha distinguido
entre datos obtenidos por medios coercitivos y datos que existen independientemente de la
voluntad del sospechoso: el derecho de no inculparse está relacionado especialmente… con el
respeto de la voluntad del acusado de permanecer callado. Tal como se entiende
generalmente… no se extiende a la utilización, en procesos penales, de datos que hayan
podido obtenerse del acusado por medios coercitivos pero que existen independientemente de
la voluntad del sospechoso tales como, entre otros, los obtenidos por orden judicial, las
muestras de aliento, sangre y orina, así como los tejidos corporales para realizar pruebas de
ADN30.
28
Orkem v. Comisión, asunto 374/87, ECR 3283, apartados 34-35
29
Saunders v United Kingdom (N° 19187/91).
30
Ídem.
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Se plantea la cuestión de si el derecho a no presentar pruebas se aplica a las personas
jurídicas. Los tribunales comunitarios (TJCE y Tribunal de Primera Instancia) han declarado
que no se aplica; podrá exigirse la presentación de documentos31.
(c) ¿En qué medida las personas jurídicas disfrutan de este derecho?
El artículo 6 del CEDH reconoce el derecho del acusado a “defenderse por si mismo”. Las
definiciones del concepto “en rebeldía” difieren entre si. Algunos Estados miembros tienen
legislaciones que permiten celebrar el juicio en ausencia del acusado, mientras que otros
consideran obligatoria la comparecencia del acusado en el juicio, y pueden castigar el
incumplimiento de esta obligación. La Comisión dedicará un Libro Verde a los
procedimientos en rebeldía y, entre tanto, desea establecer las circunstancias en que dichos
procedimientos pueden respetar la presunción de inocencia.
2.8. Terrorismo
31
Mannesmannröhren-Werke v. Commission, asunto T-112/98, ECR 729, apartado 65; Opinion del AG
en el asunto C-301/04 P, Comisión v. SGL
32
Adoptadas por el Comité de Ministros, 11 de julio de 2002.
33
Allenet de Ribemont v. France , véase la nota 16, apartado 36.
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2.9. Duración
Cuestiones generales
(b) ¿En qué medida estos problemas están relacionados con los diferentes enfoques
adoptados por otras jurisdicciones?
(c) Las propuestas de la UE ¿podrían aportar algún valor añadido? En caso afirmativo,
¿cómo?
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