Este documento ofrece consejos sobre habilidades parentales positivas como la escucha activa, poner normas claras y consistentes, demostrar afecto abiertamente, y cuidar el vínculo afectivo con los hijos. Recomienda no recurrir a la agresividad y establecer límites de una manera respetuosa que implique a los hijos desde edades tempranas.
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Este documento ofrece consejos sobre habilidades parentales positivas como la escucha activa, poner normas claras y consistentes, demostrar afecto abiertamente, y cuidar el vínculo afectivo con los hijos. Recomienda no recurrir a la agresividad y establecer límites de una manera respetuosa que implique a los hijos desde edades tempranas.
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Practica la escucha activa con MENTAL DE PELARCO.
tu hijo o hija.
Presta atención a lo que quiere
decirte y devuelve esta información para asegurarte de que lo has entendido. Trata de ¡Cuídate y quiérete tú ponerte en su lugar y expresa también! cómo te sientes, para que él o ella también te entienda a ti. Busca espacios para ti, para disfrutar y relajarte con algo que No recurras nunca a la te guste. Ejercer una parentalidad violencia o la agresividad, no positiva requiere mucho esfuerzo sirve para nada. y generosidad. Tú hijo o hija necesita que seas feliz y estés en HABILIDADES No utilices actitudes agresivas forma. como insultos, amenazas, reproches. No le compares con PARENTALES otros niños. Las imposiciones de poder como “en mi casa se hace lo que yo diga” o “aquí mando yo”, no sirven de nada, solo generan sentimientos negativos, distancia y desconfianza.
Respira hondo y piénsalo dos
veces.
No pongas normas, sanciones o
intervengas en un conflicto si estás cansado o furioso. Puedes tomar decisiones erróneas o poco efectivas. No pongas sanciones poco realistas que no podrán cumplirse, desproporcionadas o demasiado difíciles de alcanzar o mantener. CESFAM, ÁREA DE SALUD estés enfadado ni muy cansado! A partir de los 3 años puedes ¿Cómo hacerlo? Competencias Atiende y entiende sus introducir normas. Asegúrate de que tienen un sentido claro, que demandas. los acompaña una explicación parentales El bienestar emocional y el coherente y cuida que el lenguaje correcto desarrollo del sistema esté adaptado a la etapa de Es una forma de referirse a las nervioso del niño y de sus crecimiento del niño o la niña. capacidades prácticas que capacidades (lenguaje, memoria, Desde pequeño tiene que tener tienen los padres para cuidar, atención) dependen de la claro que hay límites, deberes y proteger y educar a sus respuesta protectora del adulto. Si responsabilidades. Las normas se hijos, asegurándoles un las necesidades del bebé no son establecen sin amenazas, desarrollo suficientemente atendidas rápidamente, hablando e implicando al niño o la sano. experimenta ansiedad, tristeza y niña y previamente a que surjan Fomentando la práctica de un frustración, sentimientos de los conflictos, no en mitad de una estilo educativo adecuado, indefensión que afectan discusión. No deben ser percibidas caracterizado por el respeto negativamente a su desarrollo. como imposiciones o castigos, Conforme va creciendo, también sino como acuerdos necesarios mutuo y la participación necesita tu atención y que para la convivencia. activa, aceptando la etapa entiendas sus necesidades. en que se encuentran sus hijos Déjale participar en las y reconocer las necesidades Ármate de paciencia. decisiones: escucha su de ir adaptando la relación Cuando el niño o la niña tenga opinión. familiar. una rabieta, no quiera colaborar o Permite que el niño o la niña a se muestre esquivo, ármate de partir de los 5 años participe en el paciencia. Puede ser por un sinfín establecimiento de normas de de motivos (miedo, sueño, convivencia familiar y también en frustración, inseguridad, querer las posiciones sanciones. Sentirá conseguir algo que no le que su opinión importa y permites). Ayúdale a verbalizar lo desarrollará su sentido de la que siente y trata de confortarle. responsabilidad. Tu hijo o hija Añadir más tensión a la situación necesita saber qué se espera de con gritos o amenazas no servirá él o ella y cuál es su papel en la de nada. familia. Pon normas claras, realistas y consistentes: ¡Pero no cuando Demuestra abiertamente que le quieres con abrazos y atención. Cuidar el vínculo afectivo desde que es bebé y durante las distintas etapas de la relación con tu hijo o hija, te ayudará a superar más abiertamente (con palabras y gestos), dedica tiempo a escucharle desde que es pequeño: qué le preocupa, qué le hace feliz, sus miedos. No esperes que tenga 14 años para hablar con él o ella ni para pedirle que confíe en ti, será demasiado tarde. Y ofrece amor incondicional y apoyo siempre, te guste o no cómo es o las cosas que piense o decida.