Cladograma
Cladograma
Cladograma
Un clado puede estar conformado por una especie o por miles. Los clados están anidados
dentro de otros, lo cual refleja que la clasificación biológica es jerárquica.
Los biólogos usan los cladogramas para tres propósitos: 1. Probar hipótesis sobre la
evolución. 2. Aprender sobre las características de las especies extintas y los linajes
ancestrales. 3. Clasificar los organismos según las características que heredaron de un
ancestro común de forma tal que la clasificación revele la evolución de las especies.
Basados en el anterior cladograma podemos afirmar también que un ratón está más
emparentado con una lagartija que con un pez ya que el nodo de bifurcación entre los
linajes del ratón y la lagartija está más próximo que el nodo de bifurcación de los linajes
que llevan al pez y al ratón.
Como se nota en el cladograma anterior todos los organismos se colocan en las hojas, y
cada nodo interior se divide en dos ramas. Los taxones que resultan de cada bifurcación se
denominan taxones hermanos o grupos hermanos. Cada clado se define en base a una
serie de características que aparecen en sus miembros y que fueron heredadas a sus
descendientes. Estas características identificadoras del clado se
llaman sinapomofías (caracteres compartidos derivados). Por ejemplo, la presencia del
cráneo es una sinapomorfia de los vertebrados, mientras que los pulmones es una
sinapomorfia de los pulmonados.
Durante mucho tiempo los biólogos han cometido algunos errores en la clasificación
debido a la idea de "la gran cadena del ser" del filósofo griego Aristóteles. Esta idea
sostiene que hay organismos más perfectos que otros y organiza los seres en una escalera,
colocando en la parte superior a Dios y en la escala más inferior a los minerales. El
hombre está ubicado a mitad de la escalera, justo debajo de los ángeles y por encima de
los animales. Esta idea pasó a la Europa cristiana, por lo que fue tomada en cuenta por los
primeros naturalistas que trabajaron en la clasificación de los seres vivos. Debido a la
influencia de "la gran cadena del ser" se ha generado la creencia que hay organismos "más
evolucionados" que otros.
En la siguiente filogenia se muestra un evento de especiación que dio origen a dos linajes:
Uno condujo a los musgos y otro llevó a los helechos, los pinos, los cerezos. Los musgos
de hoy en día han acumulado la misma cantidad de tiempo de evolución que las plantas
del otro linaje. Las especies de musgos actualmente existentes NO son los antepasados de
nuestros pinos y cerezos. Los musgos actuales son primos de las otras plantas.
Es importante tener en cuenta que en un cladograma se representa el parentesco de
diferentes linajes (A, B. C y D), no una escalera como la que pensó Aristóteles.
Este punto ilustra un error común que ya se ha tratado aquí en Sindioses. Los humanos no
descienden de los chimpancés. Los humanos y los chimpancés son primos evolutivos,
pues descienden de un mismo antepasado. Tampoco se puede afirmar que los humanos
son "más evolucionados" que los chimpancés, pues ambos linajes (humano y chimpancé)
han recorrido sus propios trayectos evolutivos que los han adaptado a sus respectivos
ambientes. Muchas veces es necesario dejar esto en claro para evitar los malentendidos
arriba mencionados, que son muy frecuentes en la mayoría de las personas cuando se
habla de evolución.
Grupos naturales