José Leonardo Chirino

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 14

José Leonardo Chirino

Nace en Curimagua (Edo. Falcón)


Muere en Caracas el 10.12.1796

José Leonardo Chirino


Ilustración realizada por Francisco Maduro.
Líder de la insurrección de negros y zambos desarrollada en
la serranía de Coro en 1795. Hijo de un esclavo al servicio
de la familia Chirino, nació libre debido a que su madre era
una india. Se casó con una mulata de nombre María de los
Dolores con quien tuvo 3 hijos: María Bibiana, José Hilario
y Rafael María. Tiempo después sirvió a José Tellería, rico
comerciante y síndico procurador de Coro, a quien
acompañó en uno de sus viajes al Santo Domingo francés
(posteriormente llamado Haití). Allí escuchó hablar a
Tellería y otros comerciantes acerca de la Revolución
Francesa y los ideales de ésta (libertad, igualdad y
fraternidad). Asimismo, estableció contacto con el proceso
que se vivía en Haití donde los negros esclavos se habían
levantado contra los blancos y estaban luchando con éxito
para obtener su libertad. De regreso a Venezuela se
incorporó a un grupo de conjurados que se reunían en el
trapiche de la hacienda Macanillas (Curimagua, Edo.
Falcón), entre los que se encontraba José Caridad González,
un negro congolés muy informado de las ideas de la
Revolución Francesa.
El día 10 de mayo de 1795 estalló la insurrección, que
establecía en su programa revolucionario el establecimiento
de lo que llamaban la Ley de los Franceses, es decir la
República; eliminación de la esclavitud e igualdad de las
clases sociales; supresión de los privilegios; derogación de
los impuestos de alcabala. La mayoría de los seguidores de
Chirino eran negros de la tribu de los "loangos" o "minas",
del Reino del Congo. En términos generales, el objetivos de
los insurrectos era tomar todas las haciendas de la zona,
reclutar hombres, asegurar el paso hacia Coro y después
hacer entrada a esa ciudad. Luego de perpetrar el asesinato
de algunos blancos y saquear sus propiedades, se entregaron
a la celebración demorando la toma de Coro, con lo cual
dieron tiempo a las autoridades de organizar la defensa. Los
rebeldes fueron repelidos y muchos de ellos asesinados o
apresados. En cuanto a Chirino, perseguido por las
autoridades, pudo escapar y refugiarse en la selva hasta que
traicionado por un conocido en Baragua, fue capturado por
las autoridades en agosto de 1795. Trasladado a Caracas, la
Real Audiencia lo condenó a la horca, el 10 de diciembre de
1796, sentencia que se ejecutó en la plaza Mayor de esa
ciudad (hoy plaza Bolívar). Como escarmiento y para
desalentar futuras rebeliones, la cabeza de Chirino fue puesta
en una jaula de hierro que se colocó en el camino hacia los
Valles de Aragua y Coro. Además, sus 2 manos cortadas se
fijaron en Caujarao y Curimagua. Sus familiares no corrieron
con mejor suerte, ya que, fueron vendidos como esclavos
lejos del sitio donde vivían: María de los Dolores y Rafael
María, en Caracas, y María Bibiana y José Hilario, en Puerto
Cabello, su esposa murió antes de ser trasladada a algún
sitio.
El movimiento encabezado por Chirino y José Caridad
González, fue una insurrección que impactó política, social y
económicamente a la sociedad colonial venezolana. Con el
objeto de cumplirse en 1995, 200 años de la rebelión
acaudillada por Chirino, el Ejecutivo Nacional, el Congreso
de la República y diversas instituciones culturales del país,
acordaron homenajear al luchador social. Entre los actos
conmemorativos, se develó una placa en el Panteón
Nacional, el 10 de mayo de 1995, con lo cual quedó
reconocida oficialmente su presencia al lado de los otros
próceres venezolanos.

Francisco de Miranda
Nace en Caracas el 28.3.1750
Muere en España el 14.7.1816
Francisco de Miranda
Ilustración realizada por Francisco Maduro
¿Quién es este ilustre venezolano del que dijo Napoleón: ". ..
Este Quijote, que no está loco, tiene fuego sagrado en el
alma..." Y al que el mismo Bolívar calificó como: "... el más
ilustre colombiano..."¡Quién es este personaje cuyo nombre
está grabado en el Arco del Triunfo; su retrato colocado en la
Galería de los Personajes en el Palacio de Versalles y su
estatua erigida frente a la del General Kellerman en el propio
campo de Valmy, en Francia? ¿ Quién es en definitiva este
hombre, que a lo largo de su vida estableció estrechas
relaciones con personajes de la talla de Bolívar, Napoleón,
Andrés Bello, William Pitt, O' Higgins, Sucre, Catalina de
Rusia, Wellington, Dantón y San Martín, entre otros?
Sus años en Venezuela: El rechazo
Francisco de Miranda nació en Caracas el 28 de marzo de
1750. Hijo del canario Sebastián de Miranda Ravelo y de la
caraqueña Francisca Antonia Rodríguez de Espinoza. A los
doce años inicia estudios en la "Clase de Menores" de la
Universidad de Caracas. Durante dos años estudia latín, la
Gramática de Nebrija y el Catecismo de Ripalda. Desde
1764 a 1766 cursó la "Clase de Mayores", profundizando sus
conocimientos del latín a través del estudio de los clásicos de
Virgilio y Cicerón. Asimismo, el curso requería nociones de
historia, religión, aritmética y geografía. Finalmente cursa
"Artes", completando su educación con estudios de lógica,
física y metafísica, obteniendo el título de Bachiller en 1767.

El nombramiento de su padre como Capitán de una


Compañía de "blancos isleños" en 1764, produjo un fuerte
rechazo de la sociedad "mantuana", expresión del conflicto
que enfrentaba a los"blancos españoles y a los "blancos
criollos", preámbulo de la lucha de Independencia
Hispanoamericana. Ante tal circunstancia, decide marcharse
en 1770 a España para servir al Rey.
25 de enero de 1771: Comienzo de una
etapa trascendental en su vida
El 25 de enero de 1771, sin haber cumplido todavía los 21
años se embarca para España, con el propósito de servir en el
ejército real, dando con esto inicio a un largo periplo que lo
llevará a combatir en tres continentes: África, Europa y
América; y, a participar en tres de los eventos más
importantes de la historia universal contemporánea: la
Independencia de los Estados Unidos, la Revolución
Francesa y la Revolución de Independencia
Hispanoamericana.
En 1772, con la obtención del Rey (Carlos III) de un puesto
como oficial en el ejército español, dará inicio a una rápida y
ascendente carrera militar que comienza como Capitán del
Regimiento de Infantería de la Princesa. El año siguiente está
de guarnición en las posesiones españolas del Norte de
África y participa luego en la defensa de Melilla (1774-
1775) contra las fuerzas del Sultán de Marruecos y en la
expedición contra Argel (1775). Nombrado capitán del
Regimiento de Aragón y Edecán del general Juan Manuel
Cajigal, en 1781 acompaña a éste con las tropas españolas
que refuerzan el sitio puesto a la plaza de Pensacola,
ocupada por los ingleses en la Florida Occidental. Su
conducta en la toma y capitulación de esta plaza en mayo de
1781, le valen ser ascendido a teniente coronel. Es en
Pensacola, contexto de la independencia norteamericana,
donde Francisco de Miranda concibe por primera vez la idea
de una gran patria libre para Hispanoamérica, a la que
llamaría poco después Colombia o Colombeia. En abril de
1782 participa en la expedición naval española que sale de
Cuba para conquistar las islas británicas de las Bahamas.
Como Edecán del general Cajigal negocia la capitulación de
esas islas el 8 de mayo. De ahí se traslada a Cabo Francés
(Haití), donde tendrá que enfrentar por primera vez, las
denuncias e intrigas, que siempre rodearon su vida. Se le
acusaba que en junio de 1781 había permitido la visita del
general inglés Campbell a las fortificaciones de La Habana,
por lo que es arrestado, y liberado gracias a su amigo
Cajigal. De regreso a La Habana tiene que esconderse para
no ser sometido a prisión, embarcándose hacia Estados
Unidos (1.6.1783.) donde pasará 18 meses. Allí estudia el
proceso norteamericano, frecuentando a prominentes
ciudadanos como Jorge Washington, Alexander Hamilton,
Thomas Paine y Gilbert M. de La Fayette; esbozando su
primer proyecto de Independencia para todo el continente
Hispanoamericano. En diciembre de 1784 se embarca a
Inglaterra, siempre con el propósito de conseguir ayuda para
sus proyectos independentistas. Sin embargo, el momento no
es el más propicio y Miranda se dedicará a perfeccionar su
cultura, que llegará a ser imponente. Miranda llegó a
dominar 6 idiomas, y traducir del latín y griego. Con el
tiempo construyó en su casa de Londres, una biblioteca
conformada por más de 6.000 volúmenes, muchos de ellos
representativos de la cultura del Siglo de las Luces (Diderot,
Voltaire, Rousseau, Montesquieu, Locke, Hume).
Durante 4 años (1785-1789), emprende un largo viaje a
través de Europa. Visita parte de Holanda, Prusia, casi toda
Italia, Alemania, Francia, Suiza, Bélgica y Grecia. Pasa al
Asia Menor y al Imperio Turco (Constantinopla). En Kiev, el
14 de febrero de 1787, es presentado a Catalina de Rusia que
hace de él uno de sus predilectos y le autoriza a utilizar el
uniforme del ejército ruso. En este período el gobierno de
Madrid hace vigilar a Miranda, preparando su extradición.
Para escapar a las persecuciones de la corona española, usa
el nombre de Monseiur Meyrat. El 18 de junio de 1789
regresa a Inglaterra donde reanuda conversaciones con el
Primer Ministro William Pitt, sobre la proyectada
emancipación de Hispanoamérica, presentándole planes y
estudios de operaciones militares en América. La
indiferencia de Pitt ante sus planes, obligará a Miranda a
buscar nuevos horizontes para la realización de su ideal
independentista continental.
El 23 de marzo de 1792 llega a París, donde establece
estrecha amistad con el alcalde de la ciudad, Jerónimo
Petión. El 25 de agosto de 1792 es nombrado Mariscal de
Campo del Ejército Revolucionario francés, cargo que acepta
Miranda como medio para promover la causa de
independencia hispanoamericana. En poco tiempo cosecha
grandes éxitos militares. Al mando de una división, obliga a
retroceder el 12 de septiembre de 1792, en las batallas de
Morthomme y Briquenay, a las fuerzas prusianas; las cuales
se retiraran de manera definitiva el día 20 del Campo de
Valmy. En octubre se encarga como petición de Carlos
Dumuriez de los ejércitos del norte. Acto seguido ocupa
Amberes y toma el mando del ejército en Bélgica. Se ve
obligado a levantar el sitio de la ciudad de Maastricht
(Holanda). La derrota de Neerwinden (Bélgica) le obliga a
retirarse. Estos reveses militares serán utilizados por
Dumuriez, quien pensaba pasarse al enemigo (los austríacos)
para acusarlo de traición ante Dantón y la Convención
Francesa El 28 de marzo llega Miranda a París, para
comparecer y enfrentar los cargos en su contra. No obstante,
los hechos darán un giro inesperado, cuando la rivalidad
entre girondinos y jacobinos lo lleven ante el Tribunal
Revolucionario, ante el cual hace una magistral defensa que
le permite evitar la guillotina y ser liberado el 13 de enero de
1795.
El 15 de enero regresa a Londres, donde reanuda sus
gestiones con el primer ministro Pitt y el gabinete británico,
así como con las autoridades norteamericanas para lograr la
ayuda necesaria para la ejecución de su plan de operaciones
en Hispanoamérica. Al no concretarse ni la ayuda británica,
ni la norteamericana, emprende Miranda con la ayuda de
algunos amigos una expedición a bordo del
bergantín Leander (por el nombre de su primer hijo Leandro)
el 2 de febrero de 1806 hacia Jacmel (Haití). En el puerto
haitiano se unen al Leander las goletas Bee y Bacchus. El 12
de marzo es creada por Miranda la bandera tricolor
(amarillo, azul y rojo). Desembarca en La Vela de Coro el 3
de agosto de 1806, toma el fortín e iza la bandera, lo cual
hace también en la ciudad de Coro, pero donde no recibe el
apoyo de los pobladores, retirándose ante la amenaza
realista.

Monumento a la bandera
Vela de Coro
10 de octubre de 1810: La empresa
definitiva
El 10 de octubre, luego de conversaciones en su casa de
Londres (n° 27 de Grafton Way) con los comisionados de la
Junta Suprema de Gobierno de Caracas (formada por Andrés
Bello, Simón Bolívar y Luis López Méndez), Miranda
decide regresar a Venezuela. El 10 de diciembre del mismo
año, después de hacer escala en Curazao, llega a La Guaira.
Es nombrado teniente general de los ejércitos de Venezuela
el 31 de diciembre de 1810. Impulsa la instalación de la
Sociedad Patriótica y en 1811 se incorpora al Congreso
Constituyente. Sostiene la necesidad de declarar la
Independencia definitiva, lo que se realiza el 5 de julio de
1811, adoptándose como bandera nacional la traída por
Miranda en 1806. A raíz del terremoto del 26 de marzo de
1812, y la derrota de Bolívar a manos de Domingo
Monteverde en Puerto Cabello, Miranda comenzará una serie
de negociaciones con los realistas, que concluirán con la
Capitulación de San Mateo el 25 de julio de 1812 y la
pérdida de la Primera República.

Castillo de San Felipe en Puerto Cabello, donde estuvo preso


Miranda
El fracaso del primer intento de independencia de España
por parte de Venezuela, y el creciente rechazo hacia su
persona, hacen renunciar a Miranda a su cargo de General en
Jefe de Tierra y Mar de la Confederación de Venezuela.
Durante la noche del 30 al 31 de julio, cuando se preparaba a
embarcarse en La Guaira rumbo a Curazao, un grupo de
militares y civiles (entre los que se encontraba Bolívar) lo
arresta, acusándolo de traición. Poco después de su arresto,
las fuerzas realistas entran a La Guaira y se apoderan de él.
El 4 de junio es trasladado a la fortaleza de El Morro en
Puerto Rico, y a fines de 1813 llevado a España. A
principios de enero de 1814 está encarcelado en un calabozo
del Fuerte de las Cuatro Torres, en el arsenal de La Carraca,
donde morirá en la madrugada del 14 de Julio de 1816.
Dando fin a la vida del primer venezolano universal, el
precursor de la Independencia Hispanoamericana y el
"criollo más culto de su tiempo".

Manuel Gual
(La Guaira, Venezuela, 1749 - San José de Oruña, Trinidad, 1800) Militar y
patriota venezolano que encabezó, junto con José María España, la llamada
«conspiración de Gual y España» (1797), que fue el primero de los levantamientos
independentistas del proceso de emancipación de Venezuela.
Manuel Gual

Hijo de militar, Manuel Gual ingresó en el ejército en 1764. Después de treinta y


tres años se retiró del mismo y, desanimado por el escaso reconocimiento de sus
servicios entre las autoridades españolas, empezó a adquirir una conciencia
política cada vez más liberal.

Influido por las noticias que llegaban acerca de la Revolución Francesa y por las ideas
progresistas de algunos españoles deportados a La Guaira, como Juan Bautista
Picornell y Manuel Cortés Campomanes, Gual se integró en un grupo republicano.
Este grupo entabló contacto con José María España, máximo representante del
descontento contra las autoridades españolas de América. José María España y
Manuel Gual elaboraron un plan de sublevación, para el que contarían con ayuda
francesa y británica.
En julio de 1797 debía producirse la rebelión, pero fue descubierta por las
autoridades, forzando la huida de los cabecillas a las Antillas. Dos años después
José María España, que había regresado a Venezuela para reiniciar la insurrección,
fue capturado en La Guaira y ejecutado en Caracas. Manuel Gual, por su parte,
proyectó una invasión de Venezuela con el precursor Francisco de Miranda, pero
falleció antes de poder consumarla, al parecer envenenado por un espía español.

osé María España


(La Guaira, Vargas, 1761 - Caracas, 1799) Militar y político venezolano que
protagonizó, junto con Manuel Gual, la llamada «conspiración de Gual y España»
(1797), primera intentona independentista venezolana que precedió a las
tentativas también fallidas de Francisco de Miranda.
José María España

Hombre de una amplia cultura, José María España conoció tempranamente la


filosofía política de la Ilustración y se empapó del ideario liberal surgido de
la Revolución Francesa. En 1793 fue nombrado Teniente Justicia Mayor de la población
costera de Macuto, cargo que le permitió dejar en libertad a los españoles Manuel
Cortés, Juan Bautista Picornell y los hermanos Lax, que habían sido deportados
desde España a Venezuela por sus ideas revolucionarias y se hallaban presos en
las bóvedas de La Guaira.
José María España y otro coterráneo suyo, Manuel Gual, conspiraron con los citados
reos para organizar un movimiento revolucionario, conocido posteriormente en la
historiografía como la «conspiración de Gual y España». Este movimiento, de gran
repercusión en La Guaira, Caracas y otras poblaciones del país, ha sido
considerado como uno de los más importantes proyectos independentistas de la
América colonial, tanto por el número de participantes como por las
revolucionarias propuestas que allí se formularon; se hicieron circular textos y
documentos que contenían la declaración de los derechos del hombre y del
ciudadano, así como máximas republicanas y un discurso dirigido a los
americanos, todo lo cual tendría una considerable influencia en el movimiento
emancipador de Hispanoamérica.

Descubiertos por una delación, José María España, junto con otros implicados,
escapó a las Antillas (1797), donde entró de nuevo en contacto con Manuel Gual.
Luego viajó a Barcelona, y en 1799 regresó secretamente a La Guaira y se ocultó
en su hogar, desde donde intentó organizar una sublevación de los esclavos
negros de su propia hacienda de cacao de Naiguatá.

Tras ser denunciado por uno de sus esclavos, José María España fue descubierto y
hecho prisionero. Se le trasladó a Caracas, donde fue juzgado y condenado a
muerte por el delito de sedición. La sentencia disponía que se le cortara la cabeza
y que su cuerpo fuera descuartizado; que la primera, encerrada en una jaula de
hierro, fuera exhibida en La Guaira, y el resto de su cuerpo en otros lugares. Así se
hizo.

También podría gustarte