Guía de Lenguaje Claro
Guía de Lenguaje Claro
Guía de Lenguaje Claro
1. Presentación............................................................................................. 4
2. Introducción.............................................................................................. 6
Autoría....................................................................................................... 23
Agradecimientos...................................................................................... 23
El objetivo de poner en marcha esta guía no es otro que proponer una reflexión acerca de
la manera en que las Administraciones y otras Instituciones se dirigen a la ciudadanía. Se ha
detectado que en numerosas ocasiones esto se hace de modo difícilmente comprensible. Si se
utiliza una lengua administrativa hermética, los ciudadanos y los gobernantes no están en situa-
ción de igualdad. Necesitamos entender la información que nos ofrecen llas Administraciones
para ejercer nuestros derechos y cumplir nuestras obligaciones, sin complicaciones y sin ayuda
de intermediarios.
Queremos dejar constancia de nuestro sincero agradecimiento a todas las personas e insti-
tuciones que, desinteresadamente han dedicado su tiempo para que este documento vea la luz.
Uno de los elementos que debieran conformar nuestra condición de ciudadanos libres es
la lucha por conseguir que la inevitable posición del Estado y su Administración, que generan
un tecnolenguaje específico que no puede soslayarse, no justifique en ningún caso la oscuri-
dad del mensaje ni la dilución de la responsabilidad del poder respecto de los ciudadanos. El
Estado y su Administración son un modelo de producción lingüística y, por ello, son esenciales
para la mejora del uso del español. Los esfuerzos por mejorar el “lenguaje institucional” no son
una mera querencia cultista, sino un elemento trascendental en el proceso de legitimación.
La lengua del Estado debe ser clara, modélica y comprensible para todos los hablantes y no
debe dejarse atrapar por la inmediatez del discurso mediático y por la imperante tendencia a
la autocomplacencia. El Estado debe remover los obstáculos que impiden o dificultan la pleni-
tud de la libertad y la igualdad de los individuos y uno de ellos es el deficiente acceso de los
ciudadanos a la plena comprensión de la “lengua legítima”; sin dicha comprensión, será cada
vez más acusada la brecha entre unos ciudadanos y otros. La esencia del Estado es mantener
la cohesión y la estructuración de la sociedad, uno de cuyos elementos conformadores es el
vehículo de comunicación de que se dota. Es, pues, tarea ineludible del poder público mejorar
los medios que permiten el acceso de los ciudadanos, en condiciones de igualdad, a los recur-
Cuando el poder público se expresa, debe hacerlo sin perder nunca de vista que el desti-
natario de su mensaje es el mismo propietario legítimo que lo permite generar. Un mensaje
oscuro delata una intención en quien lo emite que no puede calificarse únicamente de igno-
rancia. Se busca la opacidad deliberadamente, amparándose en la obligada tecnificación del
lenguaje, y ello acaba dinamitando el flujo mismo de la comunicación, pues el receptor deja
de entender el mensaje. Y ello afecta a la esencia misma de la democracia y la libertad de los
ciudadanos. El poder público en un Estado democrático de Derecho debe transmitir mensa-
jes, actos, disposiciones y normas comprensibles, claras, transparentes, entendibles por los
ciudadanos. Y no estamos hablando únicamente de establecer los medios oportunos para
lograr la accesibilidad cognitiva en personas con dificultades de comprensión, personas con
alguna discapacidad intelectual, con bajo nivel educativo, personas con discapacidad sensori-
al o cualquier otra barrera que impida la comunicación. Estamos hablando de que TODOS los
ciudadanos debemos comprender el mensaje, porque, entre otras razones, lo pagamos.
El lenguaje claro tiene grandes similitudes con la denominada Lectura Fácil, la cual, aboga
por la accesibilidad de la información escrita y la comprensión de los mensajes escritos.
Algunos autores indican que la Lectura Fácil cuenta con varios niveles:
• N
ivel I: El más sencillo, cuenta con abundancia de ilustraciones y escaso texto de com-
plejidad sintáctica y variación lingüística baja.
Por tanto, la Lectura Fácil no consiste en traducir textos, tampoco son textos menores o
mermados de contenidos, ni textos con enfoque pedagógico o textos para niños ni con enfo-
que infantil. Son materiales elaborados con especial cuidado, siguiendo una técnica definida
cuyo objetivo es conseguir que sean leídos y comprendidos por el máximo número de perso-
nas, en especial por aquellas con dificultades lectoras.
1. E
fectividad e impacto del mensaje. Si se utiliza un lenguaje claro, el mensaje llegará
a su destinatario y éste lo comprenderá. Por ello, el impacto del mensaje será mayor si
utiliza un lenguaje comprensible porque resultará accesible y es preferido por su lector
o escuchante.
2. S
eguridad frente a ambigüedad. Hay seguridad en la comprensión cuando no hay va-
rias posibles interpretaciones, en especial, malas interpretaciones que induzcan a error.
3. L
ocalización de la información. En un enunciado claro debe poder identificarse con
claridad el mensaje, y dentro de él, la idea principal de la secundaria.
4. R
educción de tiempo y costes evitando conflictos. Si el mensaje es claro, no nece-
sita dedicar otros recursos a volver a explicar lo que no se entiende. Se evitan conflictos
que pueden acabar en los tribunales para buscar responsabilidades por la falta de cla-
ridad, en contratos, normas, etc.
5. R
educción de la discrecionalidad, impulso de la transparencia y refuerzo de la demo-
cracia.
6. G
eneración de confianza. Lo que no entendemos nos produce desconfianza. Lo que
entendemos, genera esa confianza. Así, el cumplimiento de las obligaciones ciudada-
nas será consecuencia directa de la generación de confianza en las instituciones, lo
que pasa por la exposición clara de normas justas.
• A
decuar el lenguaje al destinatario del mensaje, utilizando para ello palabras comunes.
Por ejemplo: La palabra petitum en Derecho es un tecnicismo innecesario, en su lugar
utilizaríamos la palabra petición, que no genera duda alguna.
• R
edactar oraciones y párrafos de extensión breve. Máximos propuestos: entre 2 y 3
líneas en una oración. Entre 12-15 líneas en un párrafo.
• L
imitar el uso de abreviaturas a contextos muy determinados como por ejemplo: listas,
fórmulas de tratamiento, referencias escuetas, etc.
• Cuidar los signos de puntuación, los cuales son esenciales para comprender.
• U
tilizar la voz activa, y en general, las formas verbales apropiadas para cada tipo de
escrito.
• R
ecordar que una imagen (casi siempre) vale más que 1000 palabras. Por ello, puede
utilizar gráficos, dibujos o fotografías para ilustrar su mensaje.
• E
vitar los arcaísmos típicos pero desfasados: «si se le hubiere entregado» en vez de «si
se le ha entregado».
• Y
siempre al final, revisar y comprobar el resultado, realizando un test de claridad al
texto, con el fin de evidenciar que se ha tenido en cuenta las sugerencias previas a esta.
• Plan inicial:
A) E
xplicar términos técnicos o poco comprensibles: según el receptor del mensaje y
de la dificultad de su contenido, explique los términos que puedan resultar difíciles
de entender.
B) T
ener en cuenta que la memoria a corto plazo retiene brevemente. Si expone varias
ideas, es útil emplear una introducción en la que exponga, esquemáticamente, la
idea general y las ideas en que se subdivida su tema.
C) R
ecapitular al final en forma breve, haciendo un resumen de lo dicho a lo largo de
ella.
– U
tilizar un tono medio, ni muy alto ni muy bajo y que sea desigual para evitar la
monotonía, es decir, ponga énfasis unas veces, y suavice en otras.
B) E
nsayar: intente conocer previamente el lugar de su exposición oral y practique para
estar más seguro y evitar el miedo escénico.
C) L
a gesticulación y los movimientos son importantes. También la cortesía o la buena
educación, la puntualidad y la indumentaria.
D) Practicar.
También será importante que la ciudadanía pida aclaración sobre todo aquello que no esté
suficientemente claro o deje lugar a diferentes interpretaciones.
Es misión de cada persona ofrecer y exigir claridad, transparencia y credibilidad por la uti-
lización de un lenguaje claro y sencillo en todos los ámbitos de la sociedad. La ciudadanía lo
demandará y está en su derecho.
AUSTRALIA: Este movimiento comenzó en 1987 creándose una unidad encargada de rees-
cribir formas y documentos ya existentes, con el fin de ahorrar gastos utilizando el uso del
lenguaje claro. A partir de ahí han surgido varias iniciativas:
Office of Parliamentary Counsel (1990): aprueba el “Green Paper,” para introducir el inglés
sencillo en la actividad de la Administración.
Federal Court of Australia: En su página web se recogen apartados de información a modo de
ayuda, por ejemplo: glosarios de términos para las personas que han de acudir o actuar ante
los Tribunales.
Law and Justice Foundation: Iniciativa privada promovida por la Fundación Derecho y Justicia,
cuyo objetivo principal es la promoción del inglés sencillo para hacer más comprensible la
CANADÁ: Desde 1971 con la Comisión para la Reforma de Ley y a partir de 1976 con la
Conferencia de Lenguaje Uniforme, se elaboraron las Convenciones para Escritura Legislativa
incorporando principios de lenguaje sencillo y claro con el fin de modernizar y estandarizar
los estilos de escritura en todo documento normativo. A partir de ese momento, existe un es-
fuerzo gubernamental permanente a través del Comité Intersecretarial de Plain Language y la
Secretaría Nacional de Alfabetización para adoptar el uso de las técnicas del lenguaje sencillo
y claro. http://bit.ly/1aIKiCb
Claudia Poblete y Lisbeht Arenas han realizado diversas publicaciones para la formación en
lenguaje claro dirigidas a los estudiantes de Derecho en la Universidad Católica de Valparaiso:
http://bit.ly/2eJs6yq
Comisión de modernización del lenguaje jurídico. Se creó en 2009 en el seno del Ministe-
rio de Justicia para estudiar la situación del lenguaje jurídico en España. El resultado fue un
informe. Disponible en: https://www.administraciondejusticia.gob.es/paj/publico/ciudadano/
informacion_institucional/modernizacion/modernizacion_lenguaje_juridico
Estudio “Políticas públicas comparadas”. Dirigido por Cristina Carretero González, (Univer-
sidad Pontificia Comillas) para la Comisión de modernización del lenguaje jurídico”. Edita Mini-
sterio de Justicia. Gobierno de España. Estudio de campo sobre iniciativas públicas y privadas
de España, Europa y otros continentes sobre lenguaje jurídico. http://bit.ly/1hG3jqy
Grupo de investigación Val.Es.Co (Valencia, Español Coloquial) surgido en el seno del De-
partamento de Filología Española de la Universidad de Valencia en 1990. Su principal objeto
de estudio es el español coloquial. http://www.valesco.es/
ESTADOS UNIDOS: A raíz de la publicación del libro Plain English for Lawyers (Lenguaje
Llano para Abogados) y la aprobación de una ley especial en el 1976, se promovió el uso del
lenguaje llano en las normas jurídicas. Además, a finales de la década de 1990, el presidente
Bill Clinton lo incorporó en un memorándum presidencial formalizando el requerimiento de que
todas las nuevas normas y regulaciones de su gobierno fueran escritas en este estilo.
http://www.plainlanguage.gov/index.cfm
FRANCIA: Creación del COSLA (Comité d’orientation pour la simplification du langage ad-
ministratif) con la misión de mejorar la calidad del lenguaje oficial siendo más claro para los
ciudadanos. http://bit.ly/2fs0yKQ
MÉXICO: En 2004 se lanzó la iniciativa para el uso del Lenguaje Ciudadano y realizándose
varias acciones, entre las que destacan: la entrega de los Reconocimientos de Lenguaje
Ciudadano con el fin de valorar el esfuerzo que las instituciones gubernamentales realizaban
para fomentar la claridad de sus documentos. Se forma y evalúa a algunos servidores públi-
REINO UNIDO: En 1979, el Reino Unido inició una campaña de Plain English para combatir
el “gobbledygook”, argot burocrático percibido como confuso y tedioso. Como parte de esta
campaña, se inició un concurso público para otorgar el premio Clarity a aquellas instituciones
gubernamentales cuya comunicación escrita fuera eficaz en su comunicación con la ciuda-
danía.
Uno de los proyectos más significativos dentro de la iniciativa de Plain English es volver a
escribir la legislación de impuestos, continuándose hoy con otras leyes. Tal vez la enseñanza
más importante de esta experiencia sea que el proyecto reconoce que la claridad y legibilidad
de los documentos depende no sólo de su texto sino también de la manera en que son pre-
sentados. http://www.plainenglish.co.uk
Jorge M. Pérez
Presidente Instituto Lectura Fácil.
Luis Lanne-Lenne
Director Técnico Instituto Lectura Fácil.
Agradecimientos
Queremos dejar constancia del agradecimiento a todas las personas e instituciones que lo han
hecho posible. En especial, a las siguientes:
Claudia Poblete
Clarity Chile.
Álvaro Reinoso
Ilustraciones.
ISBN: 9788416963133
Notas: Los recursos que se ofrecen en este documento (texto, pictogramas, imágenes, etc), al igual que los Materiales elaborados a
partir de éstos, se publican bajo Licencia Creative Commons (BY-NC-SA), autorizándose su uso siempre que se cite la fuente, autor, se
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