Sucesión Intestada
Sucesión Intestada
Sucesión Intestada
apretada vida social, económica y política bajo un Pater Familiae a ser una familia individualista.
Reconoce al inicio la relevancia de la cognación en la sucesión como complemento de la agnación.
Por último se simplificaron las formalidades del testamento para facilitar el ejercicio de
disposiciones de última voluntad.
Inicialmente en Roma se determinaba al sucesor del Pater Familiae como heredero por agnación,
le sucedía el primer Sui Iuris. Continuaba no solo por los bienes, sino políticamente y
religiosamente. Las mujeres se encargaban de mantener el fuego Sagrado en la familia o de ser
Vestales vírgenes destinadas al culto hasta los 25 años, el fuego Sagrado significaba la unidad de la
familia por la religión Etrusca, era la continuación de los ancestros al fallecer el Pater Familiae, por
esto era que la familia agnaticia (Civil) estaba sobre la cognaticia (de sangre).
En la Sucesión se dio lugar a la familia cognaticia para suplir el lugar faltante de la agnaticia.
Inicialmente la familia Agnaticia, la familia civil, tenía preponderancia sobre la familia de Sangre,
posteriormente a la familia de Sangre se le otorgaron derechos por los cuales se los denominó
herederos forzosos, y tomaron finalmente una posición por encima de los herederos agnaticios o
civiles
Con la institución del Testamento se crean los herederos forzosos como los cognaticios, y se la
herencia Legítima para éstos. Por la Ley Falcidia se le otorgó al heredero forzoso ¼ parte de la
herencia en forma obligatoria dentro del testamento. Se testaba todo o no se testaba nada, no se
podía testar una sola parte del patrimonio.
La sucesión legítima o Abintestato se daba cuando no existía testamento o éste se había anulado,
entonces la ley suple la posible voluntad del causante llamando a las personas que éste había
llamado a reconocer su herencia. En la primera etapa del Derecho romano el criterio para
determinar las personas que reconocían la herencia era el parentesco Civil, es más con el correr
del tiempo al variar los fundamentos de la herencia, se tiene mas en cuenta el parentesco
sanguíneo. Así van apareciendo instituciones nuevas tales como los herederos forzosos.
Protegía a los sucesores intestados, solo eran considerados los que estaban bajo la patria
potestad bajo la línea de varón, Hijos o nietos en primer lugar. En segundo lugar estaban los
agnados y si no había agnados los gentiles que eran los parientes lejanos.
Cuando se fallecía sin dejar testamento la citada ley instituye el siguiente orden sucesorio:
1. Herederos suyos y necesarios: El hijo, la hija, el nieto y la nieta por línea del varón y los
demás descendientes bajo la patria potestad del fallecido. Para que el nieto pueda acceder
a la herencia el padre debe estar emancipado o muerto, o haber sufrido incapacidad de
hecho o derecho.
2. El agnado más próximo: Los parientes civiles más próximo por línea masculina. Entre
ellos se dividía la herencia si todos pertenecían al mismo grado de parentesco.
Se presentaba una dificultad cuando el causante había emancipado a uno de sus hijos
conservando la patria potestad sobre el nieto, o sea sus nietos en esta caso por la Bonorum
Possesio eran llamados junto con su padre emancipado otorgándoles y tienen derecho todos a la
mitad de la parte adjudicada, esto fue introducido por el Edicto de Salvio Juliano, conocido como
cláusula Juliani.
Por medio de ella se corrigen defectos del derecho civil, llamando sucesión en tercer orden a los
cognados de éste en lugar de los gentiles.
El derecho Civil impuso una restricción a la ley de las XII tablas, la de instituir o desheredar
nominativamente a los herederos en caso contrario el testamento era nulo, aunque muriesen
antes del testador. Las hijas y otros descendientes podían desheredar tanto en conjunto como de
a uno. El testador debía nominarlo al desheredado, y debía ser por justa causa.
El Pretor, ante la imperfecta solución del Derecho civil en la materia, y la desprotección en que
quedaban los hijos emancipados instaura las siguientes reglas:
2. Las hijas emancipadas corrían la misma suerte, con la diferencia que podían ser
instituidas o desheredadas inter-caeteros o sea en conjunto.
Resuelve Justiniano en su novela 115 que todos los descendientes agnados, bajo potestad o
emancipados sin distinción de sexo o grado, debían ser instituidos o desheredados
nominativamente en el orden en que fueran llamados a sucesión abintestato. Resolviendo así
mismo que no podían ser desheredados sino solo en caso de haberse hecho culpables de
ingratitud hacia el testador ya sea por atentar contra su vida, por acusación criminal debiendo esta
constar en el testamento.
La colación.
Es una institución que permite la protección entre coherederos, para que la repartición de la
herencia sea equitativa y proporcional y no favorezca mas a uno de los herederos. Permitía las
aciones de colación.
Evolución, Rescripto de Marco Aurelio: Fue establecida para ciertos casos por un
Rescriptio de Marco Aurelio. Justiniano por su parte, establece que esta porción legítima,
con relación a los hijos era de un tercio cuando los herederos no pasaban de 4, y a la mitad
del patrimonio cuando el número de hijos era mayor.
Inicialmente la legítima era de 1/3 y posteriormente pasó a ser del ½ , la legítima es la porción
reservada para los herederos forzosos.
Unde Liberi. “Está constituida por los sui del derecho civil, y, además, por emancipados y sus
descendientes. Quedan fuera de llamamiento los hijos dados en adopción que no hayan sido
emancipados por el padre que los adoptó, los hijos adoptivos emancipados y la uxor o la nurus
remancipada”.
Unde Legitimi. “Está formada por los herederos del Derecho civil. En realidad, tan sólo por los
agnados, ya que, de una parte, los sui heredes son llamados en la clase de los liberi, y de otra, la
sucesión de los gentiles llegó a desaparecer”.
Unde Cognati. “Comprende los parientes consanguíneos del difunto por linea masculina o
femenina, hasta el sexto grado, y del séptimo los hijos de primos segundos del causante –sobrino
sobrinave nati et nate. Dado que en este llamamiento se atiende, por modo único, al parentesco
natral, nada dicen ahora las calificaciones civiles –emancipati, capite deminuti, sui filiifamilias. Los
hijos ilegítimos suceden a la madre y a los parientes maternos. Entre los cognados, el más próximo
excluye al más lejano, y los de igual grado suceden por cabezas.
Unde Vir et uxor. “El pretor establece, por último, un derecho reciproco de sucesión entre marido
y mujer, siempre que se trate de matrimonio iustum, disuelto por la muerte”.
Collatio bonorum:
El derecho civil no llamaba, como se ha precisado, a los hijos emancipados del causante, a la
herencia de éste, por no encontrarse bajo la patria potestad al momento del fallecimiento del de
sucesor agnado. El pretor modificó en ese sentido al derecho civil, incorporó a los hijos
emancipados a la herencia de padre, confiriéndoles la bonorum possessio contra tabulas, en el
supuesto de que hubieren sido omitidos o no incluidos en el testamento de su padre; o bien les
acordó la bonorum possessio unde liberi, para el caso de que el causante hubiere fallecido ab-
intestato. En estos casos, se les señaló a los hijos emancipados la obligación en que se
encontraban de concurrir a la herencia, con parte de los bienes que hubieren adquirido en el lapso
comprendido desde la emancipación hasta la muerte del causante, que por lo demás es bastante
equitativo, ya que las pertenencias de los hijos bajo patria potestad beneficiaban al pater familias,
aumantando el patrimonio.
Collatio dotis:
El pretor estableció que la hija o nieta que concurriere a la sucesión, debía llevar a colación la dote
profecticia, ya que el causante, al constituir dote a favor de su hija, había desprendido parte del
patrimonio hereditario en beneficio de aquélla. Se descontaba a la hija de lo que le correspondía
por herencia, la porción que había recibido en dote, manteniéndose el principio de la igualdad.