Las 5 Etapas Del Desarrollo Psicosexual
Las 5 Etapas Del Desarrollo Psicosexual
Las 5 Etapas Del Desarrollo Psicosexual
Sigmund Freud
Etapa oral, anal, fálica, de latencia y genital. ¿Qué visión tenía Freud sobre la
sexualidad humana?
La corriente del psicoanálisis iniciada por Sigmund Freud hace más de 100 años
en una de las principales influencias de la cultura occidental contemporánea.
Pero las repercusiones de esto no tienen que ver simplemente con localizar el
inicio de nuestro desarrollo sexual en uno u otro punto de nuestro calendario vital.
Tiene implicaciones profundas en el modo en el que freud relacionaba nuestra
personalidad con nuestra vertiente íntima, afectiva y basada en impulsos.
Así, si los factores externos a un niño hacen que no pueda satisfacer estas
tendencias tal y como se desearía (por ejemplo, a causa de las reprimendas de
sus padres), esta angustia se traduce en una fijación que tiene que ver con ideas
relacionadas a una zona erógena en concreto (que no tiene por qué estar en el
área genital). Para Freud, por tanto, en el desarrollo psicosexual interviene tanto
la biología como la crianza.
A partir de los diferentes modos en los que la etapa de crecimiento de los menores
condiciona la aparición de uno u otro tipo de fijación, Sigmund Freud formuló la
teoría que uniría la sexualidad con el desarrollo del inconsciente freudiano.
Como para el padre del psicoanálisis la libido es asumida como el principal tipo de
energía que mueve a las personas, estos retos y conflictos de cada fase de
maduración tendrán una vinculación más o menos velada con su manera de
experimentar la sexualidad (entendida en un sentido muy amplio en el que
participan todo tipo de simbolismos).
1. Etapa oral
Si se impide tajantemente que los bebés utilicen su boca para satisfacerse, esto
podría producir un bloqueo que haría que ciertos problemas quedasen fijados en
el inconsciente (siempre según Freud).
2. Etapa anal
Esta etapa se produciría desde el fin de la etapa oral y hasta los 3 años de edad.
Se trapa de la fase en la que se empiezan a controlar el esfínter en la defecación.
Para Freud, esta actividad está vinculada al placer y la sexualidad.
Las fijaciones relacionadas con esta fase del desarrollo psicosexual tienen que ver
con la acumulación y con el gasto, vinculadas con el espíritu ahorrador y la
disciplina en el primer caso, y con la desorganización y el derroche de recursos en
el segundo. Sin embargo, según el padre del psicoanálisis, estas dinámicas de
gasto y ahorro no se expresarían solamente o principalmente a través de la
gestión del dinero.
3. Etapa fálica
Esta fase pulsional duraría entre los 3 y los 6 años, y su zona erógena asociada es
la de los genitales. De este modo, la principal sensación placentera sería la de
orinar, pero también se originaría en esta fase el inicio de la curiosidad por las
diferencias entre hombres y mujeres, niños y niñas, empezando por las evidentes
disimilitudes en la forma de los genitales y terminando en intereses, modos de ser
y de vestir, etc.
Además, Freud relacionó esta fase con la aparición del "complejo de Edipo", en el
que los niños varones sienten atracción hacia la persona que ejerce el rol de
madre y sienten celos y miedo hacia la persona que ejerce el rol de padre. En
cuanto a las niñas que pasan por esta etapa del desarrollo psicosexual Freud
"adaptó ligeramente la idea con Complejo de Edipo para que englobas a estas, a
pesar de que el concepto había sido desarrollado para que cobrase sentido
principalmente en los varones. Fue más tarde cuando Carl Jung propuso el
complejo de Electra como contraparte femenina al Edipo.
4. Etapa de latencia
Esta fase empieza hacia los 7 años y se extiende hasta el inicio de la pubertad. La
etapa de latencia se caracteriza por no tener una zona erógena concreta asociada
y, en general, por representar una congelación de las experimentaciones en
materia de sexualidad por parte de los niños, en parte a causa de todos los
castigos y amonestaciones recibidas. Es por eso que Freud describía esta fase
como una en la que la sexualidad queda más camuflada que en las anteriores.
5. Etapa genital
La zona erógena relacionada con este momento vital vuelve a ser la de los
genitales, pero a diferencia de lo que ocurre en la fase fálica, aquí ya se han
desarrollado las competencias necesarias para expresar la sexualidad a través de
vínculos de unión de carácter más abstracto y simbólico que tienen que ver con el
consenso y el apego con otras personas. Es el nacimiento de la sexualidad adulta,
en contraposición a otra ligada solo a las simples gratificaciones instantáneas y
obtenidas mediante actividades estereotípicas.
La teoría freudiana, en contexto