Cadena Epidemiológica Del Sida
Cadena Epidemiológica Del Sida
Cadena Epidemiológica Del Sida
Agente causal
Por lo tanto, a los efectos de vigilancia epidemiológica, el SIDA se define por criterios clínicos que
son la aparición de estas enfermedades secundarias con evidencia de infección por VIH. Es
evidente que, desde este punto de vista, debe distinguirse el SIDA como enfermedad de la
infección por VIH, que incluye situaciones asintomáticas o con clínica distinta de la incluida en los
criterios internacionales de definición de caso de SIDA.
El reservorio
El reservorio y fuente de infección del VIH es el hombre, tanto enfermo como portador, ya que el
virus permanece en las células infectadas durante años y es posible detectar antígenos virales en
muestras de personas infectadas a lo largo de toda la historia natural de la enfermedad. En
principio debe asumirse, por tanto, que las personas infectadas son fuente de infección potencial a
todo lo largo de su historia natural.
Es la forma o medio que utiliza el agente para llevar desde la puerta de salida del reservatorio a la
puerta de entrada del huésped. Puede trasladarse o entrar al organismo.
El virus se ha aislado en leucocitos de sangre periférica, plasma, semen, saliva, lágrimas, líquido
cefalorraquídeo, leche materna, secreciones vaginales, orina, cérvix uterino, líquido alveolar,
líquido amniótico y tejidos de órganos internos de personas infectadas. Sin embargo, hasta ahora
sólo se han implicado en la transmisión la sangre, el semen, la leche materna y quizás las
secreciones vaginales.
Si bien el virus se encuentra en la saliva de los enfermos, no se ha probado la transmisión por esta
vía, por medio de besos o mordeduras, ni tampoco a través de instrumentos que pudieran estar
contaminados por saliva, como son vasos o cubiertos. Evidentemente, es difícil aislar este tipo de
contactos de otras conductas de riesgo, por lo que este tipo de transmisión sería difícilmente
comprobable aunque existiera.
Tampoco se ha evidenciado que las lágrimas sean un vehículo eficaz de transmisión del VIH,
aunque se haya aislado el virus no sólo en lágrimas, sino también en tejidos oculares e incluso en
lentes de contacto.
Si bien los vehículos naturales de transmisión del VIH son por tanto sangre, semen, leche materna
y secreciones vaginales, también se ha demostrado la transmisión a través de transplantes de
otros órganos y tejidos, lo que indica que en general cualquier tejido podría considerarse
protencial vehículo de infección. Merecen mención aparte los instrumentos médicoquirúrgicos
que pueden ser vehículos de infección cuando están contaminados con sangre infectada por el VIH
y no han sido adecuadamente esterilizados.
Al ser el virus muy lábil y poco resistente a las condiciones extemas, para que el contacto con el
VIH sea contagiante, es necesario que estos líquidos orgánicos sean inoculados directamente en la
sangre de la persona susceptible, a través de punción intravenosa o de lesiones abiertas en piel o
mucosas. No se han descrito nunca las puertas de entrada respiratoria ni digestiva. El mecanismo
de transmisión es, por tanto, persona a persona, mediante el contacto directo del semen o la
sangre de la persona infectada con la sangre del sujeto susceptible, siendo tres los mecanismos de
transmisión: sexual, parenteral y perinatal.
MODOS DE TRANSMISIÓN
Los factores de riesgo específicos para la transmisión sexual se han identificado en múltiples
estudios epidemiológicos realizados en población homosexual. Los factores de mayor
trascendencia son la prevalencia de infección por VIH y el número de parejas sexuales, seguido del
coito anal receptivo y otras prácticas relacionadas con traumatismos rectales. Aunque cualquier
práctica sexual que implique exposición a sangre o semen supone un riesgo, varios estudios
sugieren que el coito insertivo anal u oral representa un riesgo menor que el coito anal receptivo.
También se han comunicado casos de transmisión homosexual en mujeres tras prácticas sexuales
traumáticas.
La transmisión sexual del VIH, tanto homo como heterosexual, se asocia a la presencia de otras
enfermedades de transmisión sexual (ETS), como sífilis, gonococia y herpes genital. Esta asociación
puede deberse en parte a que, tanto la infección por VIH como el resto de las ETS, se relacionan
con un elevado número de parejas sexuales, pero además las ETS pueden facilitar la transmisión
del VIH a través de las lesiones que provocan en la mucosa genital. Algunos estudios han
demostrado una asociación entre sífilis e infección por el virus herpes, con la infección por VIH,
independientemente del número de parejas o de prácticas sexuales específicas
Adictos a drogas por vía parenteral: Al igual que para la transmisión por vía sexual, en estos
últimos años se han publicado numerosos trabajos sobre los factores que pueden tener influencia
sobre la probabilidad de transmisión del VIH en ADVP. Se han relacionado con esta probabilidad la
utilización compartida de agujas y jeringuillas, el número de personas con las que se comparten, la
utilización compartida con personas extrañas y la inyección de drogas en las llamadas shooting
galleries (galerías de chute). La antigüedad de la adicción, la frecuencia de inyección de drogas y la
utilización de drogas en fechas recientes también se asocian al riesgo.
Por otro lado, está plenamente demostrada la transmisión tanto de los clientes a las prostitutas
como de las prostitutas ADVP a sus clientes. Por estas razones se ha considerado la prostitución, y
sobre todo la prostitución asociada al consumo de drogas, como un mecanismo importante para la
difusión de la infección por VIH. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud ha elaborado
una serie de recomendaciones para reducir este riesgo potencia.
A pesar de este bajísimo riesgo, el número cada vez mayor de enfermos de SIDA o infección con
VIH supondrá una mayor probabilidad de exposiciones accidentales, por lo que los trabajadores
sanitarios deben adoptar las precauciones universalmente recomendadas para todos los
enfermos. Estas precauciones deben ser igualmente observadas por los trabajadores de
laboratorios de investigación que manejan el VIH, ya que se han publicado dos casos de infección
en estos trabajadores
PUERTA DE ENTRADA: Es donde se aloja el patógeno y donde se multiplica; cuando este entra al
organismo el sistema inmunitario forma su defensa.
Después de que el VIH entra en el cuerpo de una persona sana forma anticuerpos dentro de 6
semanas de periodo de 1 año en algunos casos cualquier prueba serológica durante este periodo
podría dar negativo. Durante la incubación, la persona está infectada con el SIDA, mas no tiene
evidencia clínica pero puede transmitir la infección de otros.
Una vez que vuelve a formar anticuerpos, la sangre se convertirá en caso positivo de VIH.
CÓLERA.
Es una enfermedad bacteriana intestinal aguda que en su forma grave se caracteriza por un
comienzo repentino, con diarrea acuosa profusa, vómitos ocasionales, deshidratación rápida,
acidosis y colapso circulatorio. Existe, no obstante, un alto porcentaje de casos leves, sólo con
diarrea (sobre todo en niños) o asintomáticos, que son de gran trascendencia epidemiológica por su
papel en la transmisión. En los casos graves no tratados la letalidad puede exceder el 50%, pero con
tratamiento adecuado esa tasa es menor del 1%.
EL AGENTE es del tipo bacilo gram-catalasa y oxidasa (+), está asociado a peces y mariscos, se
encuentra en agua dulce, ríos y lagos, sus cepas (brote) es ogawa o1 toxígena e inaba o139.
La transmisión es fecohídrica, con un papel crítico del agua de bebida en la transmisión. Los
alimentos contaminados directa o indirectamente con heces de pacientes o portadores infectados
son también fuente importante de transmisión. Los pescados y mariscos pueden servir de vehículo
transmisor si se comen crudos o mal cocinados
El periodo de incubación de la enfermedad varía desde unas horas a 5 días, pero por lo general
pasan 2-3 días desde la exposición hasta la aparición de los síntomas. El periodo de
transmisibilidad dura mientras se emiten heces positivas, que generalmente es hasta pasados
pocos días del restablecimiento, pero puede persistir meses. Se ha demostrado en muy raras
ocasiones la existencia de infección crónica biliar, que dura años con eliminación intermitente de
vibriones en las heces. El tratamiento con antibióticos eficaces contra las cepas infectantes acorta
el periodo de transmisibilidad.
El huésped susceptible a esta enfermedad es cualquier persona de cualquier edad con baja acidez
gástrica y con malos hábitos higiénicos (que no se lave las manos, no bañarse, no lavar sus alimentos,
ya sean verduras o pescado más que nada, comer alimentos crudos como mariscos, o si fuera el
caso, realizar las anteriores actividades a medias. La susceptibilidad a la infección es variable,
afectándose con mayor frecuencia personas con grupo sanguíneo 0 o con aclorhidria gástrica,
estando protegidos los niños que se alimentan exclusivamente de leche materna. Los estudios de
campo indican que la infección por V. cholerae 0:1 del biotipo clásico brinda protección contra
futuras infecciones por ese biotipo y por el biotipo El Tor. Sin embargo, la infección inicial por biotipo
El Tor sólo brinda protección parcial contra ese mismo biotipo. La infección por cepas 0:1 no protege
contra la infección por cepa 0:139 ni viceversa.
file:///C:/Users/Microsoft/Downloads/S0300289615313831.pdf
https://ocw.unican.es/pluginfile.php/1010/course/section/1165/tema14-sida.pdf
https://prezi.com/8i5md73aekmn/cadena-epidemiologica-del-vihsida/
http://cps-pqe.blogspot.com/2008/11/cadena-epidemiolgica-del-sida.html
https://www.amse.es/informacion-epidemiologica/76-colera-epidemiologia-y-situacion-mundial
http://201enfeaquilinocadenaepidemiologica.blogspot.com/2016/06/ejemplo-cadena-
epidemiologica-del-colera.html
https://prezi.com/tku2g5d_avpc/colera/