Sembrar Ediciones Entrehermanos 2caps - Pedro Fuentes
Sembrar Ediciones Entrehermanos 2caps - Pedro Fuentes
Sembrar Ediciones Entrehermanos 2caps - Pedro Fuentes
HERMANOS
UNA RELACIÓN EDIFICANTE
Pedro Fuentes
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Entre hermanos : una relacion edificante . - 1a ed.
Buenos Aires : Sembrar Ediciones Cristianas, 2011.
128 p. ; 20x14 cm.
ISBN 978-987-24864-4-0
1. Espiritualidad Cristiana. I. Título.
CDD 248.5
Fecha de catalogación: 04/07/2011
Editorial
Sembrar Ediciones Cristianas
www.sembrarediciones.com.ar
Impreso en Argentina
Diseño de cubierta e interior: Lucas Fuentes
www.lucasfuentes.com.ar
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ENTRE
HERMANOS
UNA RELACIÓN EDIFICANTE
Prólogo p.5
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Prólogo
por Carlos Morris
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eso me ha interesado en forma especial este manuscrito que
mi dilecto amigo y compañero de servicio, Pedro Fuentes, me
ha enviado, con el sugestivo título de “Entre Hermanos”, para
que tenga el privilegio de escribir el prólogo.
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sido de aquellos que trabajan a medio fuelle, él ha dedicado
mucho del escaso tiempo que le queda al estudio y análisis mi-
nucioso de la Palabra de Dios, y eso se deja ver aquí.
Por todo ello, gracias Pedro Fuentes por esta contribución tan
valiosa en un área de gran necesidad. Puedo asegurar al lector
del mismo que se verá enriquecido espiritualmente por el con-
tenido de este libro. Recomiendo pues su lectura a todos aque-
llos que aspiran a seguir creciendo espiritualmente, buscan ser
más efectivos en su vida y servicio cristiano, y en especial de-
sean mejorar su relación tanto con su Padre Celestial, como
con los demás miembros de la “Familia de la fe”.
Carlos A. Morris
Sevilla, España
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Dedicatoria
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Introducción
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tianos van a aceptar el mensaje que les predicamos y desearán
formar parte de esta familia si ven que funcionamos bien.
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CAPITULO 1
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es un ser social y si no preguntémosle al famoso marinero Ro-
binson Crusoe, qué sintió durante esos largos años en aquella
solitaria isla.
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Habitar los hermanos juntos en armonía es el segundo pará-
metro para la comunión. La idea de la frase en el idioma he-
breo (como nos enseñaba un profesor) es “juntos y también en
armonía”, es decir que juntos no incluye armonía. Esto suele
verse con frecuencia en la relación de muchas familias: viven
juntos, comparten la misma casa, duermen bajo el mismo te-
cho y sin embargo no hay ni una pizca de armonía, su relación
es como “perro y gato”. Dios espera que la relación entre her-
manos no tenga ese tinte, sino que estemos juntos “no dejando
de congregarnos”, pero que ese congregarnos para estar juntos
incluya una relación de armonía.
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rar en un mismo lugar. Y hubo contienda entre los pasto-
res del ganado de Abram y los pastores del ganado de Lot;
y el cananeo y el ferezeo habitaban entonces en la tierra.
GENESIS 13:5-7
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Esta es la manera como los hermanos debemos resolver nues-
tras diferencias. Lo primero que debemos recordar es nuestra
condición: “somos hermanos”. Por ello no importa quién tiene
razón y ni siquiera importa mucho si debemos separarnos el
uno del otro, porque aunque lo tuviéramos que hacer lo ha-
ríamos en paz. Porque siempre será más importante el lazo de
hermandad que nos une a cualquier diferencia que podamos
tener. Abram dice “no haya altercado”, la versión de las Amé-
ricas traduce “te ruego que no haya contienda entre nosotros”
es decir, como solemos decir a veces “te ruego por lo que más
quieras” esa es la idea que transmite el texto.
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CAPITULO 2
¿Envídia o Cuidado?
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Abel. Ambos se estaban criando juntos, sus padres habían vivi-
do muchas experiencias que podríamos llamar extraordinarias
en todo sentido. Seguramente les contarían cómo ellos fueron
los primeros humanos que aparecieron en el planeta, siendo
los únicos sobre la faz de la tierra que vivieron la experiencia
de una comunión directa con Dios, y de la felicidad que esto
significaba. Adán y Eva deben haberles contado a sus dos hijos
la tragedia que significó desobedecer a Dios y les deben haber
advertido de las consecuencias tremendas que les ocasionó el
pecado. Pero parece que esto no fue suficiente para Caín, él no
tomó debida nota de esas advertencias. Leamos el relato bíbli-
co para detenernos unos momentos en la relación de estos dos
hermanos:
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hermano. En lugar de mirar lo que había en su conducta que
no le agradaba a Dios, prefirió descalificar a su hermano y pro-
curar su destrucción, como si esto hubiese podido mejorar su
situación. Por el contrario, esto sólo empeora la vida de una
persona. El descalificar al hermano es algo que Dios no aprue-
ba y siempre termina en un homicidio, aún cuando no llegue
a ser físico (Mt. 5:21).
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de Jesús”. Matthew Henry, Comentario Bíblico, 1 Juan (obra
completa sin abreviar) pag.1889.
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pondió: No sé. ¿Soy yo acaso guarda de mi hermano? Y él le dijo:
¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano clama a mí
desde la tierra. GENESIS 4:9.
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seos de la carne” dando la posibilidad de seguir una de las dos
alternativas sin tomar la otra. Para que se nos clarifique mejor
la idea y veamos como el Señor desea que superemos nuestra
conducta carnal, miremos este texto en otras versiones.
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que la relación entre hermanos no debe ser de envidia de sus
logros, ya que esto conduce a tragedias en la relación herma-
nable, sino de cuidado unos por otros. Cuando escribe Judas su
breve pero significativa carta, al hablar de los falsos maestros a
quienes el Señor condena nos advierte:
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