LouLovesHazz

Capítulo 1 Capítulo 25
Capítulo 2 Capítulo 26
Capítulo 3 Capítulo 27
Capítulo 4 Capítulo 28
Capítulo 5 Capítulo 29
Capítulo 6 Capítulo 30
Capítulo 7 Capítulo 31
Capítulo 8 Capítulo 32
Capítulo 9 Capítulo 33
Capítulo 10 Capítulo 34
Capítulo 11 Capítulo 35
Capítulo 12 Capítulo 36
Capítulo 13 Capítulo 37
Capítulo 14 Capítulo 38
Capítulo 15 Capítulo 39
Capítulo 16 Capítulo 40
Capítulo 17 Capítulo 41
Capítulo 18 Capítulo 42
Capítulo 19 Capítulo 43
Capítulo 20 Capítulo 44
Capítulo 21 Capítulo 45
Capítulo 22 Epílogo
Capítulo 23
Capítulo 24
 Tank
Chico lindo superficial, engreído folla chicos, inmaduro payaso. Elige el que quieras, todos ellos
aplican para Brewer. El mundo es su buffet de culos y todos estamos en el menú. Nunca he
odiado a nadie como odio a Brewer. Pero cuando Rebel nos empareja para hacer una escena,
tengo que admitir que estoy deseando desahogar toda mi irritación en él… bueno, tú entiendes.
Pero cuando la escena se vuelve en toda una relación falsa, no estoy seguro de que vayamos a
salir de esto sin algo de derramamiento de sangre.

Brewer
Tank tiene que ser el culo más aburrido y arrogante que jamás he conocido. El hombre no sabe
cómo divertirse, ni siquiera cuando está haciendo una escena. Y si hay una razón para sonreír,
es trabajar conmigo, ¿cierto? Mucho más razón para ocultarle mi verdadero yo porque se
burlaría de mí. Pero cuando tenemos que fingir que de verdad nos agradamos, algo inesperado
sucede. Entre más tiempo pasamos juntos, más veo un diferente lado de él… y me atrevo a
mostrar un diferente lado de mí. ¿Qué diablos está pasando?
 TANK
Mi mandíbula se aprieta cuando veo a Brewer coquetear alrededor del club. Chico bonito y
superficial, folla-chicos presumido, imbécil inmaduro. Haz tu elección, todas se aplican a
Brewer. El mundo es su puto buffet y todos estamos en el menú.
Cerdo arrogante.
Brewer lanza su cabeza hacia atrás y se ríe de algo que el hombre sobre su brazo está
diciendo. Luego se da la vuelta y agita su culo para recibir una fuerte palmada de su
compañero.
Bufo y regreso a mi cerveza. Debe ser agradable pensar que todo es una broma, pasar
por la vida como si fuera nada más que una fiesta, obtener todo en bandeja de plata.
Pendejo egocéntrico.
—¿Cómo te va, hombre? —pregunta Rebel, subiendose al taburete junto a mí en la barra.
Supongo que Rebel y yo somos lo que llamarías amigos de trabajo. Pero cuando tu
“trabajo” es mamar y follar frente a una cámara… terminas muy cerca de tus…compañeros
de trabajo.
Recientemente Rebel dio un paso atrás de la actuación para asumir un rol más creativo
y directivo con Estudios Ballsy Boys, y no podría estar más feliz por él. Era genial frente a la
cámara, con una resistencia increíble, una pesada verga y una mirada ardiente que volvían
locos a hombres y mujeres. Pero él fue y se enamoró, así que puedo entender porqué no
querría seguir follando por dinero cuando tiene un hombre en casa esperándolo. Rebel tiene
una habilidad especial para armar una escena y elegir los ángulos perfectos. Parece
apasionado acerca del trabajo detrás de cámara.
—Todo bien —respondo, inclinando mi cerveza en su dirección.
Algunos de estos chicos—como Rebel y Brewer—son personas de por vida. Aman la
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industria del porno. Para mí, es una manera de pagar las deudas mientras obtengo mi título
de arquitectura e ingeniería. Voy a diseñar puentes un día, y si tengo que chupar algunas
vergas para cubrir el costo de las clases, no es exactamente un sacrificio. De la manera que lo
veo, lo estaría haciendo de cualquier manera, pero de esta forma puedo terminar sin
préstamos estudiantiles. Me encanta follar, y esto paga un infierno de muchas más deudas
que tú trabajo promedio de medio tiempo, por lo que es un ganar-ganar.
—¿Cómo te sientes para la filmación que preparé para ti mañana? —pregunta Rebel con
cautela.
En los dos años que he estado con Ballsy Boys nunca he filmado una escena con Brewer.
No creo que Bear tuviera las bolas para ponernos juntos, temiendo que uno de nosotros
terminara en el hospital. Considerando que ni siquiera puedo mirar su puto presumido rostro
sin querer poner mi puño en él, pienso que es una apuesta justa.
—Me siento bien. No puedo esperar para sacar mi frustración en ese apretado culo suyo.
Además, no podrá soltar esa boca con mi verga metida en ella.
La sonrisa de Rebel se ensancha—. Eso es exactamente lo que quería escuchar —Rebel
me da una palmada en la espalda.
Termino mi cerveza y cierro mi cuenta.
—¿Ya te vas? —una joven voz pregunta detrás de mi.
Me doy la vuelta para ver a Pixie, nuestro valioso twink en Ballsy Boys. Es un buen niño
y uno de los miembros más nuevos del equipo. Hay algo dulce e inocente acerca de él que
encuentro atractivo, incluso si nunca se lo diré.
Gruñó una respuesta en afirmación. Su rostro cae un poco y en realidad me siento como
un gran imbécil. Él ha estado tratando de hacer amigos desde que comenzó hace algunos
meses. Pero la cosa es, no soy un chico del tipo cálido. A la larga será mejor para el niño si se
da cuenta ahora de que está ladrándole al árbol equivocado.
Heart capta mi atención un poco más abajo, donde está hablándole a Campy y Bear, y
me da un pequeño saludo. Aparte de Pixie, Heart es el otro Ballsy Boy más nuevo. Se está
convirtiendo rápidamente en un favorito de los fans con sus tatuajes, su personalidad de chico
malo y las intensas expresiones que hace en escenas. Ni siquiera sé cuantos gifs he visto del
rostro de Heart mientras tiene un orgasmo. Campy ha estado en el estudio tanto tiempo
como yo, pero él es incluso más cerrado que yo, si eso es posible. Es un misterio, y parece feliz
de que siga siendo así. Y, por supuesto, ahí está Bear. El dueño de Ballsy. En su momento fue
una estrella porno gay enormemente popular, tomó esa fama y construyó Ballsy desde cero.
Me gustaría estar bien descansado para mi escena con Brewer mañana.
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No estaba bromeando con Rebel, no puedo esperar para darle a Brewer la follada de su
vida. Mi verga comienza a hincharse sólo de pensarlo. Aunque tengo que mantener todo eso
para mañana. Nunca me mastubo el día o dos antes de filmar, porqué quiero estar seguro de
que tengo una buena carga para la cámara.
 Deslizo mi pierna en mi moto y me relajo con la sensación del motor retumbando entre
mis piernas. No hay terapia o liberación mental cómo subir a mi motocicleta y dejar todo atrás.
Aquí en la carretera, con la ciudad en mi espalda, puedo olvidarme de todo, incluyendo Brewer
y al chico con el que puede o no estar follando mientras hablamos. No es que importe con
quién carajos folla.

Entro en mi departamento y arrojo mis llaves sobre la mesa junto a la puerta.

Quitandome los zapatos, me dirijo a mi cama y me dejo caer en ella.
Nunca había tenido a ninguno de los chicos en mi casa, ni siquiera a Rebel. Si entraran
aquí, podrían morir de sorpresa. O peor aún, se darían cuenta de que saben menos de mí de
lo que pensaban.
En la mesa de café hay una pila de libros de ingeniería, y en la parte superior de mi mesa
de noche hay varios modelos de rascacielos. Dentro del cajón superior de la cómoda hay
cientos de bocetos de diseños de edificios y puentes. Estos últimos son algo que mis padres
nunca entendieron.
Crecer en una granja lechera de trescientas cabezas en Wisconsin, se encabronaban
cuando olgazaneba con mis deberes en favor de dibujar y soñar. El día que me gradué de la
preparatoria, subí a mi destartalado Toyota y me dirigí directamente a LA.
No sé porqué me decidí por LA—tal vez porqué era diferente a cualquier otro lugar en el
que había estado antes. Eso fue hace doce años y nunca miré hacia atrás otra vez. Por seis
años trabajé en empleos ocasionales para sobrevivir. Entonces, una noche en el club, me
encontré con Bear y mi vida cambió. Me ofreció un trabajo en Ballsy y yo salté a la
oportunidad. Sabía lo que era Ballsy—estoy muy seguro de que cada hombre gay ha visto
videos de Ballsy. Y yo conocía su reputación de tratar bien a sus estrellas. Finalmente,
haciendo más que suficiente para sobrevivir, pude inscribirme en la universidad como siempre
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había soñado. Le debo mucho a Bear, porqué sin él, probablemente aún sería un obrero de
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construcción, en ningún lugar cerca de lograr mi sueño de convertirme en arquitecto.

 Desabrocho mis pantalones y me los quito antes de poner la alarma para la mañana.
Estaría mintiendo si dijera que no tengo deseos de follar hasta la mierda de Brewer mañana.
Ese pendejo no va a saber que lo golpeó. Juego de palabras.1

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Pendejo en inglés es asshole que también es ano.
 BREWER
Veo su motocicleta mientras camino desde el estacionamiento a la entrada del estudio. Ya
está aquí, como siempre. Puedes decir lo que quieras sobre Tank, pero él es puntual como la
mierda.
La primera vez que lo vi sobre su moto, tuve que hacer una doble toma. Lo había tomado
por el tipo de motocicletas Harley. Ya sabes, el tipo que pule con un paño de microfibra cada
noche y que todo el mundo adula. Habría encajado su culo tatuado y vibra ruda. En vez de
eso, él conduce una no tan sexy, pero practica Honda que es antigua, pero funcional. Es muy
parecido a mi auto, aparte del hecho que tiene dos ruedas en vez de cuatro.
Escucho la ducha corriendo arriba cuando entro, y sé que es Tank. Es uno de sus otros
hábitos, bañarse aquí justo antes de una escena—uno que he escuchado de otros, ya que
nosotros nunca hemos hecho una filmación juntos.
Bueno, eso no es exactamente cierto, reflexiono mientras hago mi camino hacia
adentro. Aparecimos en la misma mini-película que Bear rodó el año pasado, y nosotros
incluso tuvimos algunas escenas juntos, pero esas fueron todas escenas de hablar. O más
específicamente, él gruñendo en respuesta a los otros personajes y yo estando parado
luciendo bonito. Oigan, es en lo que soy excelente, así que no lo desestimen.
Esta vez, sin embargo, estaremos haciendo mucho más que hablar. Tengo que dárselo a
Rebel, el guión que escribió es malditamente caliente. Estaría totalmente emocionado, si fuera
con alguien más excepto Tank.
Él es… exasperante. Tiene un enorme palo metido en el culo y no del tipo bueno. Dios,
él es tan jodidamente serio todo el tiempo. Este es el único chico que no sabe como tener un
buen momento, tal vez con excepción de cuando está follando. Incluso entonces, es tan
jodidamente intenso. ¿Le dolería sonreír de vez en cuando? Quiero decir, estar hasta las bolas
en otro hombre sería una razón principal para mostrar algunos putos dientes, ¿cierto? Nop,
no Tank. Él sólo toma este estilo oscuro y folla incluso más duro.
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Y maldición, el chico puede follar. No sólo he escuchado los rumores—Vi cada puta
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escena que filmó para prepararme. Él es salvaje. Escuché a Bear decir que no está dispuesto a
conceder a los espectadores su constante solicitud de emparejar a Tank y Pixie, porqué puto
infierno, Tank destrozaría el culo de ese lindo niño.
 Y sé que también va a intentarlo conmigo. Esta es la única área donde Tank no sacará lo
mejor de mí, puedo prometerte eso. Sé que va a querer follar la alegria fuera de mí, debido a
que por alguna razón, también sacó lo peor de él, pero no lo dejaré. Yo y mi perfecto culo
estamos más que preparados para él.
Rebel y Bear están hablando en voz baja cuando entro, y Joey y Bryce, el nuevo chico de
cámara, caminan alrededor, ocupados preparando su equipo. Respiro profundamente. ¿Es
estúpido que esto se sienta como en casa para mí en cierto sentido?
—Hey, Brewer —llama Rebel cuando me ve. Él da una vibra genuinamente feliz también.
Es un buen chico, a pesar de su horrible idea de emparejarnos. Verlo a él y Troy juntos es dulce
y nauseabundo al mismo tiempo, porqué irradian tanta maldita felicidad, es molesto como el
carajo.
Bear me da una sólida palmada en las espalda cuando llego a los dos—. Parece que estás
de camino a la guillotina, mi hombre —dice.
—Viejo, ese guión que escribió el chico Rebel aquí es casi mi sentencia de muerte, te das
cuenta de eso, ¿cierto?
Bear sonríe, pero Rebel se ve un poco sorprendido—. Tank no te haría daño —dice algo
indignado—. Me ha follado no sé cuantas veces, incluyendo algunas DP, y él nunca me ha
lastimado deliberadamente.
Para alguien que ha estado en la industria tanto tiempo como él lo ha hecho, Rebel
puede ser encantadoramente ingenuo—Babe, le gustas. Por supuesto, es cariñoso y amable
contigo, incluso cuando luce más duro en la cámara. Él odia mis putas entrañas, ¿asi que
realmente crees que va a ser suave conmigo?
La cara de Rebel cae un poco y le lanza a Bear una mirada interrogante, pero el jefe sólo
sonríe—. Te dije que era una mala idea emparejar a estos dos, pero hey, estabas empeñado en
hacerlo.
—¡Dijiste que amabas mi guión! —protesta Rebel.
—Lo hago —dice Bear, el humor bailando en sus ojos—. No quiere decir que crea que
fuera inteligente.
—Me alegra saber que podemos estar de acuerdo en eso —dice la voz de Tank detrás de
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mí. El sutil olor a pino de su gel de baño me hace cosquillas en la nariz.

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—Nadie te ha acusado de ser inteligente —espeto a Tank, sin siquiera molestarme en

darme la vuelta.
Él se acerca, un sólido muro de hombre detrás de mi espalda, y acerca su boca a mi
oído—. Voy a disfrutar tanto follarte la vida fuera de ti.
 Intento mantenerme relajado, pero un pequeño escalofrí baila por mi espalda—. Tráelo.
Puedo tomar lo que sea que puedas darme.
Por un segundo o dos, está absolutamente silencioso, todos los ojos enfocados en Tank
y en mí. Luego Tank me golpea el culo con tanta fuerza que arde—. Espero que no estuvieras
planeando poder caminar a tu auto después.
Tengo que llamar a todo mi auto control—y nunca fue mucho cuando se trata de este
pendejo para empezar—para noquearlo. No es que esté seguro de poder hacerlo. La
mandíbula del chico debe ser tan dura como su corazón. Y su verga, la cual sentí frotarse
contra mí cuando me manoseó justo ahora. Es la única satisfacción a la que me aferro: debajo
de todo su odio, él todavía me desea.
Rápidamente me cambio en el vestuario al atuendo que Rebel escogió para mí, todavía
furioso con ese pendejo insensible. No puedo creer que Rebel pensara que esta era una buena
idea. ¿En qué demonios estaba pensado?
Nosotros básicamente tenemos dos tipos de escenas aquí en Ballsy Boys. Están las
escenas simples de sólo follar, que consisten en que dos o tres de nosotros hablemos un poco
antes y luego nos movemos naturalmente para besar, chupar y follar. No importan cuán cliché
pueda sonar, estos videos son increíblemente populares, principalmente porqué Bear—y
ahora también Rebel—eligen bien a sus Ballsy Boys. La mayoría de nosotros tenemos química
genuina con quien nos emparejen. He hecho docenas de estas, y por los general son muy
divertidas.
Luego están las filmaciones con historia, las más largas y complicadas donde realmente
tenemos un guión, roles y líneas. No todos podemos llevarlas a cabo, aunque Campy es el
maestro absoluto en eso, y concedido, Tank tampoco es tan malo. La mayoría de estas se
graban dentro de nuestro estudio, donde pueden cambiar fácilmente el fondo con algunos
accesorios, pero también hemos filmado en locaciones.
En este caso, Rebel ha transformado el estudio en lo que parece un sitio de construcción,
con un andamio de metal contra una pared, una seria colección de herramientas eléctricas y
algunos cubos de pintura y mierda. Rebel está hablando con Tank, que está vestido con un
clásico atuendo de trabajador de construcción, completo con un casco. Maldición, él luce…
intimidante.
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Con cuidado toco mi estilizado cabello, reviso mis jeans y la camisa blanca lisa para
asegurarme que estoy impecable, y entro—. Estoy aquí.
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Lamentablemente, mi voz no refleja del todo el nivel de confianza que estaba buscando
y la boca de Tank se arquea en una pequeña sonrisa.
 —Bien, entonces empecemos —Rebel me lanza una mirada como si quisiera darme una
última oportunidad para cancelar, pero esa no es una opción. ¿Concederle la derrota a Tank?
Definitivamente no va a pasar.
Después de unos minutos de pruebas con las luces, estamos listos para comenzar. Rebel
hace señales para completar el silencio en el estudio, y respiro profundamente. Eso es todo.
Que cualquier dios que esté escuchando tenga misericordia de mi alma, porqué Tank seguro
como el carajo que no tendrá nada de ella en mi culo.
Espero hasta que Rebel dé la señal, luego me dirijo con confianza a Tank, que está
haciendo algo con el andamio—. Hey, Hank, terminado. ¿Tienes algo más para que haga?
Tank se da la vuelta, irritación pintada en su rostro—. Lo siento… jefe. Jesús, si hubiera
sabido que eras tan imbécil, nunca te habría dejado follarme.
Da un calculado paso en mi dirección, viéndose poderoso y masculino—. Y si yo hubiera
sabido que no eras sólo un pequeño y desagradable folla-chicos, sino que también te
convertirías en uno de mi equipo, nunca habría parchado ese culo.
Hago un puchero mientras me doy la vuelta ligeramente hacia un lado y saco mi culo—.
Pero totalmente vale la pena, ¿cierto?
La mirada burlona de Tank es perfecta—. ¿Eso? Un sólido ocho.
Se está saliendo del guión aquí, pero debo admitir que es una línea perfecta—. ¿A quién
llamas ocho? Mi culo es un diez todo el camino, bebé.
Tank se burla—. Piensa muy alto de ti mismo, folla-chicos. Como siempre. Fue una buena
follada, pero nada espectacular.
Pongo mis dos manos en mis caderas—. ¿Nada espectacular? Eso tiene que ser por tu
manera torpe de follar, porqué nunca he tenido quejas antes.
Tank da otro paso hacia mí, sus ojos se oscurecen—. No reconocerías una buena follada
si te tropezaras en la oscuridad, mierdecilla engreida. Has sido follado por tantos chicos que
ni quiera reconoces cuando un verdadero hombre viene por ti.
Mis mejillas arden con el insulto y me levanto en toda mi altura, tratando de mirarlo—.
He sido follado por los mejores… y definitivamente no te estoy contando entre ellos. Te
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sentiste como si no supieras qué mierda estabas haciendo, pendejo.
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Tank llega con un moviendo rápido como un rayo y agarra mi muñeca. Con un tirón, me
jala contra contra él. Es tal vez sólo dos centimetros más alto que yo, pero de repente me
siento mucho más pequeño, como un niño comparado a este hombre—. Mira, una vez más
demuestras que no sabes de qué carajos estás hablando.
 Su mano derecha todavía está sosteniendo mi muñeca, pero su izquierda serpentea
alrededor de mí y da golpecitos mi agujero en un movimiento increíblemente degradante—.
Tú eres el pendejo… y yo soy el imbécil, ¿recuerdas? 2
Dios, él es bueno en esto, y mis mejillas arden aún más en pura indignación—. Si crees
que voy a dejar que vuelvas a tenerme, estás delirando —espeto. Ahora estamos tan
horriblemente fuera del guión, que espero que Rebel grite “!Corte!” en cualquier segundo. Al
menos estamos más o menos dentro de los parámetros de los personajes que Rebel creó.
El rostro de Tank se abre en una sonrisa perezosa que es tan jodidamemte depredadora
que tengo que tragar—. Ambos sabemos que te doblarás para mí cada vez que diga la palabra.
—¡En tus sueños! —escupo.
La mano de Tank se mueve de mi culo a mi verga, y él la toma tan fuerte que roza lo
doloroso—. ¿Quieres decirme eso de nuevo cuando tú verga no esté tan dura ante el
pensamiento?
Dos pueden jugar este juego, y antes que se dé cuenta, mi mano libre está en su verga,
que está tan dura como la mía—. ¿Estabas diciendo?
Nuestros ojos se encuentran y la tensión entre nosotros podría iluminar una puta
ciudad. Según el guión, se supone que debo ponerme sobre mis rodillas y chupársela, pero
puede irse al carajo. No estoy inclinándome por él, no así, no cuando me desea justo como yo
lo deseo.
Nos miramos el uno al otro por unos segundos, y luego me agarra del cuello y me tira
más fuerte, estrellando su boca contra la mía.

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Juegos de palabras. Asshole = pendejo/ano; dick = verga/imbécil.
 TANK
Muerdo el labio inferior de Brewer hasta que pruebo sangre y luego meto mi lengua
profundamente en su boca, conteniendo un gemido. No es mi estilo actuar de manera
exagerada para la cámara con fuertes quejidos y gemidos. Y que me condenen si le doy a
Brewer la satisfacción de obtener uno de mí.
Aflojo mi firme agarre sobre su verga, y Brewer deja escapar un pequeño suspiro contra
mis labios. Con mi mano libre, empuño su cabello y tiro su cabeza hacia atrás para poder
chuparle el cuello. Él jadea y gime cuando mis dientes rozan su pulso y me alegro de que
finalmente encontré la manera de que se callara para variar. Demonios, si hubiera sabido que
era tan fácil como empujar mi lengua por su garganta, lo habría hecho hace años.
—Estoy bastante seguro de que esta es la parte en que me chupas la verga —desafío con
una voz áspera.
Él y yo sabemos que eso es lo que dice el guión que viene a continuación, y ví el desafío
en sus ojos antes de besarlo. Y la lucha que él está poniendo—la oportunidad de romperlo—
hace que esto sea más divertido para mí.
Brewer entorna sus ojos hacia mí y su lengua sale disparada para lamer el pequeño hilo
de sangre que todavía emana de su labio inferior donde lo mordí. Sin pensarlo, me inclino
hacia adelante y le doy un beso más suave en su magullada boca, y acaricio la pequeña herida
con mi lengua.
Brewer inhala con mucha sorpresa, y repentinamente me recuerdo a mí mismo. ¿De
donde coño salió esa basura tierna?
Lo libero de mi agarre y tomo una respiración profunda para ordenar mis pensamientos.
Por el rabillo de mi ojo veo una mirada interrogante en el rostro de Rebel. También se está
preguntando qué acaba de suceder. Pero no voy a arruinar la filmación. Ya estamos fuera de
guión y necesitamos volver al camino.
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Desabrocho mis pantalones, saco mi dura verga y le doy unas cuantas caricias hasta que
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el pre-semen comienza a bordear la punta. Brewer la mira con interés, y esta vez, se pone de
rodillas sin luchar.
—Supongo que te daré una oportunidad más para demostrar que sabes cómo trabajar
esta monstruosa verga.
 —Deja de hablar y ahógate con mi verga —le ordeno, apretando la base de mi verga y
poniéndola entre los labios de Brewer.
Me da otra mirada fulminante, pero se abre ampliamente y la toma. He visto las
habilidades de tragar de Brewer en sus otros videos, y por mucho que odie al arrogante
estúpido, lo admitiré, estaba ansioso por experimentar esto por mí mismo.
Estiro mi mano y la pongo alrededor de su garganta para poder sentir su manzana de
Adán moviéndose mientras follo profundamente su garganta. Un gruñido se desgarra desde
mi garganta mientras Brewer chupa más fuerte, tomándome todo el camino hasta la base una
y otra vez sin protestar. Y Jesús, las cosas que su lengua consigue hacer mientras me chupa.
Una fisura de electricidad sube por mi espina dorsal y muerdo el interior de mi mejilla.
Brewer me mira con una expresión que dice con claridad que cree que ha ganado esta
ronda, y luego busca entre mis piernas y le da un fuerte apretón a mis pesadas bolas,
tirándome instantáneamente de vuelta al borde.
Aprieto los dientes, decidido a no darle la satisfacción de superarme y follo su garganta
con más fuerza, determinado a encontrar los límites de su aparente falta de reflejo nauseoso.
Los ojos de Brewer comienzan a lagrimear, pero nunca se estremece ni intenta
apartarse. Es una batalla de voluntades que ninguno de nosotros está a dispuesto a perder.
—Corte —la voz de Rebel se escucha a través de los sonidos de succión descuidados que
impregnan el estudio.
Aprieto mi culo contra las ganas de seguir follando hasta que Brewer se atragante con
mi carga.
—¿Estás bien, Brewer? —pregunta Rebel.
Brewer le da un pulgar hacia arriba y casi me rió. De acuerdo, jodidamente lo odio, pero
debo admitir que el hombre es dedicado al trabajo.
—¿Por qué no nos adelantamos y pasamos a la follada? Estás preparado, ¿cierto, Brewer?
Esta vez, Brewer realmente saca mi verga de su boca y toma una respiración profunda
para responder.
—Claro, déjame sacar el plug realmente rápido —su voz suena como grava por el
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tratamiento rudo que acabo de darle, y es sexy como el carajo.

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Aprieto la base de mi verga con fuerza para relajarme de lo cerca que él estuvo de
hacerme venir con esa mamada. Mi verga luce jodidamente bien, toda mojada con su saliva y
goteando pre-semen.
 No puedo evitar echar un rápido vistazo a Brewer cuando saca el plug anal que tenía
dentro y lo deja caer al lado de donde la cámara no enfocará.
—Tengo que decir que estoy un poco decepcionado. Me estaba preparando para un
trato realmente rudo de tu parte, hombre grizzly. Mi garganta ha sido follada más fuerte que
eso por Pixie.
Me erizo y me levanto, listo para agarrarlo y mostrarle cómo de duro puedo follar esa
inteligente boca suya.
—De vuelta en posición —dice Rebel, recordándome que estoy aquí para hacer un
trabajo, no poner a un folla-chicos resongón en su lugar. Aunque, si puedo manejar ambos a
la vez, ¿por qué no tomarlo como un bono?
Brewer vuelve a ponerse de rodillas , esta vez tomando sólo la punta de mi verga en su
boca, listo para que yo lo empuje y lo ponga sobre sus manos y rodillas.
—Acción —llama Rebel.
Agarro el cabello de Brewer y lo aparto de mi verga. Calor pulsa a través de mí al ver a
Brewer sobre sus rodillas, a mí merced, sus labios hinchados, su barbilla mojada con saliva y
sus mejillas sonrojadas.
Jodidamente hermoso.
Con un gruñido, fuerzo a Brewer sobre sus manos y rodillas.
—Voy a destrozar este culo —le prometo, dándole la nalga izauierda de Brewer un golpe
firme y disfrutando del rebote.
—Trata de hacerlo un poco más memorable que la última vez —sugiere Brewer con
sarcasmo, haciendo un mejor trabajo manteniéndose en el personaje que yo.
Abro las nalgas de Brewer, amando la vista de su agujero ya resbaladizo y preparado.
Enrollo un condón con movimientos practicados y me salto las sutilezas cuando alineo la
cabeza de hongo de mi verga en su entrada y empujo hacia adentro con un rápido embiste.
—Jesús —gruñe Brewer, y yo me inmovilizo por un segundo.
Sólo toma unos segundos antes de que sienta su apretado canal relajarse, y lo tomo
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como mi señal para moverme de nuevo. Levanto mis caderas hacia atrás y las estampo hacia
delante otra vez. Mis pesadas bolas rebotan contra las de Brewer y el sonido de mis caderas
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golpeando sus nalgas llena la habitación. Su codicioso culo me traga profundamente con cada
empuje y una corriente eléctrica viaja a lo largo de mi columna vertebral.
Salgo y le doy la vuelta a Brewer sobre el piso de cemento. Su pecho se agita con cada
respiración jadeante que toma. Orgullo ruge a través de mis venas al ver la palpitante verga
roja de Brewer, goteando en su estómago ahora que está acostado. Su mandíbula está
apretada en desafío. Él no quiere que se sienta bien, pero estoy presionado todos sus botones.
Agarro sus tobillos y fuerzo sus rodillas hasta su pecho, y luego golpeó de nuevo contra
su apretado culo. Los ojos de Brewer se cierran con fuerza, y su cabeza cae hacia atrás; sus
dientes se hunden en su ya maltratado labio inferior. Mi mirada se enfoca en el aleteo de su
pulso en su cuello, y embisto dentro de él a tiempo con sus rápidos latidos.
—Oh, Dios —gime Brewer entre dientes.
Me inclino hacia adelante y paso mi lengua a lo largo de su pulso, mis empujes nunca
vacilan.
—Admite que amas mi verga, puta —gruño cerca de su oído, pero lo suficientemente
fuerte como para que el chico de sonido lo capte.
—No —protesta Brewer, con puños apretándose.
Agarro su culo y cambio mi ángulo. Puedo sentir toda mi longitud arrastrarse contra ese
esponjoso lugar de placer dentro de Brewer con cada empuje. Mis bolas se tensan y envuelvo
mi puño alrededor de la verga de Brewer. Brewer grita, arqueando su espalda y apretando su
culo alrededor de mí.
—Dí que amas mi verga —exijo nuevamente, bombeando su verga, su pre-semen
haciendo una excelente lubricación.
—La amo, jódete, pero la amo —llora Brewer mientras su cuerpo se tensa, su culo aprieta
mi verga y gruesas cuerdas de semen chorrean sobre su estómago, pecho, incluso alcanzando
su barbilla mientras lo acaricio a través de su orgasmo.
Cuando termina, suelto sus piernas, salgo y me quito el condón. Apuntando a su
estómago, masturbo mi propia verga con furia hasta que mi semen se une al suyo, cubriendo
la dorada piel de Brewer.
Cuando mis bolas están vacías, me inclino hacia adelante y paso mi lengua por nuestra
liberación y luego agarro a Brewer de su nuca y lo empujo hacia adelante para compartir un
sucio beso con el sabor de nuestra corrida. Él gime en mi boca mientras nuestras lenguas se
enredan y se baten a duelo.
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Mi ritmo cardíaco y mi respiración vuelven lentamente a la normalidad, y suelto a Brewer,
parpadeando para regresar a la realidad.
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—Corte —llama Rebel y siento que el cuerpo de Brewer se hunde un poco. ¿Está feliz
porque terminó?—. Santo infierno, ustedes dos incendiaron este estudio. No tengo palabras
para lo caliente que fue eso.
 —Bien, ¿eso significa que hemos terminado por el día? —pregunto bruscamente
mientras me pongo de pie.
—Sí, creo que estamos bien —concuerda Bear.
Brewer todavía está sobre el suelo, luciendo un poco aturdido, así que le ofrezco una
mano para ayudarlo a levantarse.
Aún odio al pendejo, pero embestir su culo definitivamente alivió un poco mi irritación,
al menos por el momento.
—Gracias —murmura, tomando mi mano y poniéndose de pie.
Tan pronto cómo está de pie, tiro de mi mano hacia atrás y me dirijo a la ducha para
lavar el sudor y el sexo de mi cuerpo.

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 BREWER
Amo mi trabajo.
Recibir dinero por follar o ser follado es genial y todo eso, pero mi trabajo en el Hospital
St. Francis significa diez veces más para mí. He trabajo aquí durante dos años y tomo tantos
turnos como puedo entre clases y mi otro trabajo. El pago es un mierda total, por supuesto,
especialmente comparado con lo que Bear me paga, pero no lo hago por el dinero. Estoy aquí
porque, honestamente, amo pasar el tiempo aquí, aprender cosas nuevas todos los días.
Debido a que sólo puedo trabajar horas flexibles en torno a mis clases y mis
compromisos con Ballsy Boys, me rotan a través de los departamentos para ayudar donde sea
necesario. Realmente me gusta eso porque me ha dado la oportunidad de aprender cómo
funcionan las diferentes especialidades.
Este mes estoy en el ala de medicina interna, lo que significa muchos pacientes de edad
avanzada. No son los favoritos de todos, debido a que la comunicación puede complicarse
por deficiencias auditivas o deterioro de la salud mental, pero a mí no me importa.
Mucho de lo que hago, aparte de ayudarlos a comer, la higiene personal y vestirlos, es
ayudarlos a moverse un poco. Es importante que los adultos mayores se mantengan móviles
tanto como sea posible. Una vez que los pacientes mayores se vuelven sedentarios, su
independencia disminuye rápidamente, e incluso si vivían antes de manera independiente, a
menudo tienen que ser ingresados en un asilo de ancianos después.
A primera hora de la mañana, acompañé a la Sra. Morris —Nina, como ella insistió que la
llamara—una mujer de noventa y tras años, durante veinte minutos, por el pasillo. Se está
recuperando de una caída desagradable debido a la hipoglucemia, un nivel extremadamente
bajo de azúcar en la sangre. La pobre ha sido diabética durante los últimos años y arruinó su
ingesta de insulina, inyectando demansiada.
Deberías haber podido escuchar las historias que esta señora podía contar. Eran como
19
fotos instantáneas de otro tiempo y otra época, otra vida. Ella creció aquí en LA, a diferencia
de mí, y recordaba los días de gloria del viejo Hollywood, como ella lo llamaba. Trabajó como
Página

asistente de un director durante años y, sí, ella tenía algunas cuantas historias.
Todavía estoy pensando en ella mientras le doy un baño de esponja al señor Jordan en
la habitación 415. Él sólo está medio despierto, todavía se está recuperando de un ataque de
pancreatitis, y no está de humor para charlar. Eso me deja solo con mis pensamientos, lo cuál
no me importa luego de la semana loca que he tenido.
Esa escena con Tank ayer fue… otra cosa. Digan lo que quieran, pero tuvimos una
química explosiva. Estoy seguro de que va a salir bien. No es que alguna vez vaya a verla. Rara
vez veo mis propios videos, y no tengo ganas de ver a Tank sacar su frustración en mi culo.
Todavía lo siento, así que no hay necesidad de recordatorios visuales.
Levanto la vista cuando Kate, la jefa de enfermeras, entra con lo que parece ser un nuevo
residente. Es lindo con su cabello oscuro desordenado y un cuerpo alto y delgado. También
está haciendo que mi gaydar se active como una alarma de incendio. No que me vaya a
enrollar con él ni nada. Nunca mezclo sexo y trabajo aquí. Tengo suficiente de eso en mi otro
trabajo, donde el sexo es mi trabajo.
—Cada habitación está equipada con… Oh, hola, Micah —dice Kate cuando me ve.
El residente centra su atención en mí y veo que sus ojos se agrandan. Oh, joder. Él es
gay y además sabe quién soy—. Tú eres—
—Micah Evans —digo rápidamente, extendiendo mi mano. Necesito cortar esto de
inmediato y esperar que el chico entienda—, soy un AEC3.
Él duda por un segundo antes de acercarse y tomar mi mano—. Oliver. Dr. Reed, quiero
decir. Soy el nuevo residente quirúrgico.
Él está nervioso como el infierno, y mentalmente le estoy rogando que lo mantenga todo
junto. Me he esforzado por mantener mi vida porno y mi vida laboral separadas. Hay algunas
personas que saben, en su mayoría enfermeros gays, pero han sido muy buenos al respecto y
me han ayudado a mantenerlo en secreto.
—Encantando de conocerte, Dr. Reed. Espero que tengas una maravillosa residencia aquí
—le digo, aparentando su mano por última vez antes de soltarla.
Kate nos mira con una sonrisa divertida . Entonces ella se dio cuenta de algo, pero o bien
no sabe lo que hago, o ha elegido no comentar al respecto. Cualquiera funciona para mí. Ella
sabe que soy gay, y el Dr. Reed aquí tampoco es exactamente un miembro encubierto del
club, así qué tal vez ella piense que es una chispa volando.
—Continuemos —ella le dice a Oliver, y después de una última mirada en mi dirección,
20

se enfoca en ella. Sus mejillas están ligeramente rojas y está nervioso, pero al menos no dijo
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nada. Putas gracias por los pequeños favores.

Lo encuentro en el baño de los empleados dos horas más tardes, mientras está
liberándose en uno de los urinarios. Se sonroja de nuevo cuando me ve. Es molesto como el

3
Asistente de Enfermería Certificado.
carajo porque atrae demasiada atención. Él necesita ordenar su mierda. Simplemente asiento,
pero, por supuesto, era demasiado esperar que captara mi insinuación anterior, y comienza a
hablarme mientras guarda su verga.
—No estaba esperando ver a alguien como tú trabajando aquí.
Reviso rápidamente los cubículos, que están felizmente vacíos—. ¿Alguien como yo?
Hay algo en la forma en que lo dijo que me hace sentir incómodo.
Se ríe mientras camina hacia el lavabo para lavarse las manos, pero es una risa algo
incómoda—. Ya sabes, alguien famoso.
—Viejo, no soy famoso. Pocas personas aquí saben lo que hago en el otro lado, y en caso
de que no lo hayas notado, me gustaría que siguiera siendo así.
—Puedo imaginarlo —dice, y ahí está de nuevo ese tono. No puedo poner mi dedo sobre
ello. No puede ser que tenga un problema con el porno gay, porque primero que todo, es gay
como un unicornio y, en segundo lugar, el simple hecho de que me haya reconocido significa
que ha visto nuestros videos. Pero hay una sutil desaprobación que me frota de una manera
incorrecta. Así que simplemente me encojo de hombros, esperando que ese sea el final.
Sin embargo, parece que realmente no puede captar una pista—. Tengo curiosidad de
por qué siquiera estás trabajando aquí en primer lugar. Quiero decir, tu otro trabajo debe
pagar mucho mejor.
—No estoy aquí por el dinero —digo, no estoy dispuesto a explicarle mis razones.
Absolutamente no es su puto negocio.
—Entonces, ¿por qué estás aquí? Es un trabajo extraño para alguien como tú.
Rechino mis dientes—. Pensé que ya habíamos establecido que no soy tan famoso como
crees que soy.
Se seca las manos con una toalla de papel y hace un gesto desdeñoso—. Oh, no quise
decir eso así. Me refiero a más, como, eres Brewer, ¿sabes? Follas para vivir, tienes este… —
mueve su mano hacia arriba y abajo para indicar mi cuerpo—. Este cuerpo perfecto… quiero
decir, te he visto, así que sé cómo te ves bajo ese uniforme. Parece un desperdicio de tus…
activos pretender ser serio acerca de un trabajo en la vida real.
21

¿Pretender ser serio? Santa mierda, quiero desgarrar a este pendejo en uno nuevo. Lo
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qué no puedo, obviamente, porque no quiero perder mi trabajo, y estoy bastante seguro de
que sacar a un residente quirúrgico muerto va a hacer que me despidan, no importa cuán
imbécil él sea. Sin embargo, eso no significa que vaya a dejarlo ir así.
—Sólo porque tengo un culo perfecto y la mejor verga de la ciudad, no significa que mi
cerebro esté vacío, imbécil.
 Debato agregar mi promedio casi perfecto de la preparatoria, pero decido dejarlo ir. Es
inútil tratar de convencer a las personas de que tengo un cerebro cuando ya han decidido que
no soy nada más que un cuerpo sexy.
Eso es tan bueno como está tan pronto como termino con las palabras, así que
rápidamente hago mi salida.
No debería dejar que me moleste, opiniones de personas como él, pero lo hacen. No me
importa que me vean sexy o que la gente delire con mi trabajo en Ballsy Boys. Viene con ese
trabajo, y por extraño que parezca, estoy orgulloso de los videos que hacemos allí, al igual
que estoy orgulloso de mi cuerpo. Joder, trabajo lo suficiente para mantenerme en buena
forma.
En un club, donde simplemente me enrollo con los hombres, no podría importarme un
carajo lo que piensen de mí más allá de que ellos quieren follarme. Pero aquí, en este lugar
donde trabajo tan duro para hacer un buen trabajo, donde trato ser lo mejor que puedo ser,
es diferente. Odio no ser visto por quién soy. Odio que este estúpido llegue y me haga sentir
como un impostor. Como si yo necesitara alguna ayuda con eso.
Hasta ahora sólo he tomado un curso de iniciación en psicología, pero no necesitas un
puto título para ver de donde provienes. Una cosa más por la que agradecer a mis padres. Lo
añadiremos a la lista. Suspiro.

22
Página
 TANK
El sol me golpea en la espalda mientras camino por el campus hacia el edificio académico para
reunirme con mi asesor. Gracias a todo el dinero que he estado ahorrando de mis cheques de
pago en Ballsy, puedo inscribirme en clases adicionales este semestre. Lo que significa que
sólo estaré a treinta créditos más para obtener mi título.
El solo hecho de pensar en lo que cerca que estoy de lograr este gran objetivo hace que
mi corazón se sienta demasiado grande para mí pecho. Este ha sido un sueño abstracto
durante tanto tiempo, el tipo de cosa que nunca pensé que se haría realidad. Y ahora sólo me
faltan tres semestres a tiempo completo para conseguirlo. Se siente surrealista.
Desearía que hubiera alguien con quién compartir esto. Alguien a quién pudiera
confesarle mis miedos y alegrías, y que me dijera lo orgulloso que está. Sacudo ese
pensamiento. Si hay algo que he aprendido en mi vida, es que no sirve de nada insistir en
cómo desearías qué las cosas fueran. Las cosas son como son, punto.
Mi teléfono vibra en mi bolsillo y lo saco para ver a mi madre llamando. Suspiro. Es como
si conjurara su llamada con mis deseos infantiles.
—Hola, mamá —contesto.
—Peter, ¿es tanto pedirte que llames a tu madre de vez en cuando? —reprende.
—Lo siento, he estado ocupado —sin mencionar que llamar a mis padres siempre me
hace sentir como un completo fracaso.
Mi madre hace tsk—. ¿Demasiado ocupado para llamar a tu madre? No puedo imaginar
qué hayas estado más ocupado que tu padre y yo. Todo por nuestra cuenta, tratando de dirigir
una granja lechera en quiebra, despertar al amanecer todos los días para llevar a las vacas al
cuarto de ordeñado, lidiando con la caída de los precios de la leche. Tuvimos un brote de BVD4
en la primavera y casi nos arruinó.
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Escuchó en silencio sus quejas. No sé qué se supone que haga al respecto. Incluso si me
hubiera quedado en Wisconsin y hubiera aprendido a manejar el negocio como ellos lo habían
Página

deseado, ¿qué demonios iba a hacer para detener un brote de BVD o la caída de los precios
de la leche?

4
Diarrea vírica bovina
 —¿Tal vez es momento de vender la granja y retirarse? —sugiero. Sé que estoy golpeando
a un caballo muerto con eso, pero si es tan malo como ella dice, podría ser tiempo pasado.
Vender todo a un productor de lácteos más grande y terminar con eso.
—¿Esperas que tu padre simplemente tire una granja que ha estado en su familia durante
generaciones? Todavía tiene esperanzas de que vuelvas a casa y tomes el control como lo
soñaba cuando naciste.
—Necesita superar eso, ya que no va a pasar nunca. Casi termino mi carrera y tengo una
buena vida aquí en LA.
—¿Esos bocetos tontos? Sé real, Peter.
—Tengo que irme, mamá. Llego tarde a una cita —golpeo mi dedo contra el botón rojo
de colgar antes de que pueda escuchar su respuesta y meto el teléfono en mi bolsillo.
Un extraño pensamiento cruza mi mente. Me pregunto si Brewer se lleva bien con sus
padres. ¿Están orgullos de él? No pueden ser tan malos; de lo contrario, él no podría ser tan
despreocupado como lo es. Estoy seguro de que todo en su vida ha sido como un maldito
cuento de hadas.
Resoplo y paso mis manos sobre mi rostro, luego me obligo a desechar todas la basura
que mi madre me arrojó en una caja en la esquina de mi mente y la cierro firmemente. No
pueden tocar mi vida aquí. Entonces, ¿qué pasa si no tengo a nadie aquí para celebrar la
graduación conmigo? Así es la vida, y necesito superarlo.
Después de reunirme con mi asesor y planear mis próximos tres semestres para así poder
graduarme, encuentro un mensaje perdido de Rebel.
Rebel: Santa mierda, viejo. Tu escena con Brewer está explotando. ¡Han tenido 150k
visitas en una semana!
Tank: Diablos. Supongo que no soy el único que quería ver a Brewer finalmente callarse.
¿Es este un buen momento para pedir un aumento? Lol.5
Rebel: Si sigue así, no lo descartaría. Las personas en los comentarios y en Twitter están
seguros de qué tú y Brewer tienen algo fuera del trabajo. Insisten en que no hay manera de
que puedan fingir esa química explosiva, Lol.
24
Tank: Já, déjalos que confundan el odio con la pasión.
Página

Rebel: Lo que sea que tengas que decirte a ti mismo, viejo.

Frunzo el ceño ante la respuesta de Rebel y me reprendo a mi mismo. Brewer y yo juntos
es lo más tonto que he escuchado. Nos mataríamos en una semana. Los espectadores que

5
Laughing out Loud = Me Muero de Risa.
tienen esa teoría idiota son una cosa. Ellos no me conocen. Todo lo que ven cuando hacen
clic en uno de mis videos es a un chico con un vocabulario aparentemente limitado a órdenes
gruñidas, que folla con una intensidad que están seguros que les encantaría experimentar.
Con ese fin, no es como si Rebel o cualquiera de los otros chicos me conocieran mucho
mejor que eso. Diablos, los chicos con los que he salido no me conocen mejor que eso. ¿Por
qué mantengo a todos a distancia? Probablemente esa sea una pregunta para un terapeuta,
porque lo único que sé es que no le veo el punto en dejar que alguien se acerque demasiado
cuando sé que sólo me verán como un bruto grande y torpe. Eso es todo lo que mis padres
han visto. ¿Por qué alguien más en el mundo sería diferente?
Sobre mi moto, alejándome del campus, no tengo ganas de ir directamente a casa para
sentarme solo. No me malinterpreten, me encanta pasar tiempo a solas. Prefiero el tiempo a
solas que estar cerca de otras personas. Pero la llamada de mi madre me dejó sintiéndome
como una mierda, como parecen hacer siempre mis padres.
Conduzco por un rato, sintiendo el calor del sol en mi espalda y el viento en mi cara.
Seguro, el tráfico en LA es una pesadilla, pero en una moto no es tan malo. No es hasta que
termino afuera de Ballsy que me detengo. ¿Es patético pasar el rato en el trabajo cuando no
estás programado? Algunos de los otros chicos lo hacen, por lo que no puede ser tan malo.
Entro y me encuentro de inmediato con el sonido de sexo. Heart está siendo follado, si
tuviera que adivinar. No reconozco los otros gruñidos tan fácilmente. Deblo la esquina del
estudio y veo a Heart sobre sus manos y rodillas en una cama con uno de nuestros no tan
regulares chicos, Otter, embistiéndolo por detrás.
Desde que Rebel retrocedió, ha sido más frecuente que algunos de los chicos menos
conocidos hayan estado filmando más escenas. Honestamente, probablemente no estaría de
más contratar a unos cuantos chicos más, pero Bear es exigente como el carajo acerca de
quién se llama a sí mismo un Ballsy Boy. Se ha vuelto más extraño desde que apareció Pixie,
pero ni siquiera voy a tocar todo ese desastre.
Rebel me nota y me da un saludo, con una mirada de sorpresa en su rostro. Sé lo
suficiente como para mantener mi boca cerrada mientras una escena está rodando, debido a
que esos micrófonos detectan todo. Asiento hacia Rebel y continuó viendo la cogida a un
metro de distacia.
25
Me sorprende lo extraña que es mi vida. Es jodidamente increíble, no me malinterpreten,
pero nunca pensé que estaría en un estudio pornográfico viendo a las personas follar como si
Página

fuera jardinería o alguna actividad igualmente mundana. Nunca esperé meterme en el porno,
pero no me arrepiento ni por un segundo. Este no es el trabajo en el que quiero estar para
siempre, pero me encanta hacerlo, y no me avergüenzo de ello.
 Sé que se supone que las estrellas porno son el colmo de la inmoralidad sexual o alguna
mierda. A mi modo de ver, estamos brindando un servicio. Estamos aquí para todos los
hombres sexualmente confundidos, todas las mujeres que quieren explorar más su propia
sexualidad, las parejas que quieren darle sabor a su vida amorosa y todos los millones hombres
y mujeres que están aburridos y calientes. Somos prácticamente putos santos. Juego de
palabras intencionado.6
Para cuando la escena termina, estoy medio duro.
—Hey, hombre, ¿qué te trae por aquí? No estás filmando hoy, ¿cierto? —pregunta Heart
mientras se limpia a sí mismo, caminando hacia mí con un ceño fruncido y una sonrisa en el
rostro.
—No, sólo estaba aburrido y en la zona, así que pensé en pasar por aquí.
—¿Por qué estabas en la zona? —salto al oír la voz de Brewer detrás de mí.
—Jesús —me quejo, dándome la vuelta para enfrentarlo. Tan pronto como mi mirada se
enfoca en su arrogante sonrisa, con el aroma del sexo persistente a nuestro alrededor, mi
verga pasa de media dura a un mástil completo en segundos.
—Aw, ¿te asusté, oso pardo? Oh, alguien está feliz de verme —dice mientras sus ojos
caen en mi erección.
—He estado aquí de pie observando a Heart ser embestido durante la última media hora.
—Seguroooo —se burla Brewer, acercándose y trazando su dedo a lo largo de la cintura
de mis jeans.
Aprieto los dientes, tratando de reprimir un escalofrío. Mi cuerpo quiere abalanzarse
hacia Brewer—levantarlo, tirarlo en la desordenada cama a un par de metros de distancia y
follarlo hasta que los dos nos derrumbemos del agotamiento.
¿Qué carajos está mal conmigo? ¿Lo follé una vez y ahora mi cuerpo ruge por una
repetición? Jesús, necesito juntar mi mierda.
Golpeo su mano y gruño.
—Aw, no te enojes, oso pardo. Sabes que me gusta jugar contigo.
26
—¿Cuántas veces tengo que decirte que mantengas tus manos alejadas de mí? No soy
uno de tus juguetes para follar, fin de la historia. ¿Qué demonios estás haciendo aquí de todos
Página

modos? No estás programado para hoy.

—¿Conoces mi horario? —provoca—. Dios, eres como una especie de acosador sexy.

6
Juego de palabras. En inglés la oración se presta para dar a entender también que están follando santos.
 Aprieto los puños y me doy la vuelta, decidido a alejarme de Brewer antes de que lo
golpee. No sé porqué vine aquí de todos modos. Fue estúpido. Hay una razón por la que me
quedo encerrado solo en mi departamento.
—Hey, Tank —Rebel me atrapa en mi camino hacia la puerta.
—¿Qué pasa, hombre?
—¿Todo está bien? Normalmente no vienes aquí en tu día libre.
—Si, sólo estaba conduciendo por ahí y pensé en detenerme. Me voy a ir a casa ahora.
—apunto mi pulgar hacia la puerta para enfatizar.
—Una vez que terminemos todo aquí, me encontraré con Troy para cenar a la vuelta de
la esquina, ¿quieres unirte a nosotros? Heart va a ir y también Brewer.
Ah, así que por eso Brewer estaba aquí.
—Uh…—miro entre Rebel y la puerta tratando de decidir si quiero soportar la basura que
sale de Brewer sólo para salir con Rebel, Troy y Heart.
—Vamos —insiste Rebel.
—Okay, bien.
Deambulo mientras Rebel se pone a arreglar el equipo de filmación y le dice al personal
del estudio lo que necesita que hagan para tenerlo listo para la sesión de mañana entre Campy
y Pixie. Tal me pase para ver esa también. Pixie es lindo como el infierno frente a la cámara.
Hay algo en él que te ilumina por dentro. Es imposible estar de mal humor con Pixie cerca.
Probablemente sea bueno que Bear no me haya dejado hacer una escena con Pixie. Creo que
el niño me gusta demasiado como para follarlo.
Cuando todo está en orden y Heart se ha bañado, nos dirigimos a un pequeño
restaurante mexicano a dos cuadras del estudio. Troy y su amigo Mason nos están esperando
con una canasta de chips a medio comer y un par de margaritas sobre la mesa.
Estoy sorprendido cuando Hear saluda a Mason con un beso en la mejilla y el rostro de
Mason se ilumina en rojo brillante. Balbucea un extraño saludo antes de voltear
accidentalmente la canasta de chips y casi derribar su bebida.
27
—Lo siento, nos tardamos. Otter y Heart estaban haciendo un buen espectáculo, no
quería decirles que acabarán demasiado rápido.
Página

—Tu trabajo es genial —murmura Troy con asombro antes de darle un beso rápido pero
aparentemente descuidado.
Hay una extraña punzada en mi corazón al verlos juntos. Nunca he sido muy bueno en
tener novio. Pero de vez en cuando me dan ganas de conseguir uno. Entre la escuela y el
trabajo, no hay forma de que tenga tiempo ahora, pero sería bueno tener a alguien con quien
volver a casa al final de la noche.
Brewer suspira con nostalgia.
—¿Qué fue eso? ¿Tienes ganas de un novio? —Troy se burla de Brewer.
—No, sólo recordando lo bueno que Rebel solía dármelo. Extraño esa verga, hombre.
Las cejas de Rebel se arquean, y la expresión de Troy se endurece mientras mira inseguro
entre Rebel y Brewer.
—Cómo haciendo escenas juntos, o…
Sintiendo que esto está a punto de irse rápidamente al sur, agarro el brazo de Brewer y
lo atraigo hacia mí—. Ven conmigo a la barra a conseguir bebidas para el resto de nosotros —
sugiero con los dientes apretados.
—La mesera—
—Ahora, folla-chicos —gruño.
Brewer abre la boca para darme lo que estoy seguro que será una respuesta sarcástica,
pero golpeo mi mano sobre su boca antes de que él pueda decir algo. Luego lo arrastro hacia
la barra.
—¿Qué coño fue eso? —se queja cuando finalmente lo suelto, lejos de la mesa.
—Me quitaste las palabras de la boca. ¿Qué coño, pendejo?
—¿Qué hice?
—Es algo bueno que seas sexy, porqué claramente tienes mierda en lugar de cerebro.
Brewer retrocede como si lo hubiera abofeteado, su cara poniéndose de un rojo brillante
ante mi insulto.
—Jodéte, pendejo. Lo siento, no todos somos tan miserables como tú. Y no puedo creer
que tengas el valor de llamarme estúpido cuando apenas puedes unir dos frases sin gruñir
como un hombre de las cavernas.
Ira brota dentro de mí tan caliente que toma toda mi fuerza de voluntad no acercarlo y
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golpearlo—. Jodéte —le devuelvo—. Consigamos unas putas bebidas y terminemos esta
Página

comida. Y haznos un favor a todos y mantén la boca cerrada acerca de lo que tú y Rebel tenían
antes de conocer a Troy, ¿quieres?
Brewer me para ambos dedos y camina el resto del camino a la barra para pedir bebidas.
Esto va a ser divertido, así que me alegro de haber decidido salir.
 BREWER
Si no supiera que el video de mí y de Ethan estaba yendo tan malditamente bien, estaría muy
preocupado de ser llamado a la oficina. No estoy a menudo en el estudio cuando no tengo
una filmación, y no recuerdo que Bear me haya llamado sólo para hablar antes. ¿He estado
alguna vez en su oficina desde mi entrevista y audición? Tal vez alguna vez para cambiar mi
dirección o algo así, pero eso es todo.

Lo medito en el viaje hacia allí. Rebel me dijo que a Ballsy Boys le está yendo lo
suficientemente bien como para ponerlo en la nómina a tiempo completo. Entonces los
despidos no son probables, e incluso si el jefe quisiera perder a algunos chicos, estoy seguro
que no sería a mí. He estado aquí un tiempo, y sé que a mis videos les va bien.
Sin embargo, nunca he hecho explotar nada como lo hizo mi video con Tank. Rebel me
dijo que tuvieron seriamente que actualizar la capacidad del servidor porque demasiadas
personas lo estaban viendo y tratando de descargarlo al mismo tiempo. Como Campy
bromeó, Tank y yo rompimos internet.
Me pregunto qué había acerca del video para hacerlo resonar tanto. Seguro, Tank es un
tipo grande y peludo, y verle follar la mierda de alguien suele ser divertido, pero no es como
que el contraste entre él y yo sea tan grande en términos de tipo de cuerpo.
Él es un poco más alto que yo y un infierno de mucho más musculoso, pero no soy un
twink frágil. Soy activo tanto como pasivo, y hasta ahora, ambos tipos de videos han
demostrado ser los más populares, especialmente en los que aparezco con Rebel y Campy.
Así que, ¿por qué las personas disfrutan tanto ver a Tank follarme?
Por supuesto, el guión fue perfecto considerando la natural animosidad entre Tank y yo.
Eso fue puro ingenio de parte de Rebel, para capitalizar eso. Y aunque no he podido ver el
video—no tengo deseos de ver la prueba demasiado-evidente de mi humillación—estoy muy
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seguro de que era muy caliente. El amor y el odio pueden estar en los extremos opuestos del
espectro, pero proporcionan muchas chispas. Una follada salvaje todavía es una gran follada,
Página

¿cierto?
Veo su moto cuando estaciono mi auto. ¿También le pidieron que viniera? Sé que no
está haciendo una escena, debido a que revisé el horario esta mañana. No es que estuviera
interesado específicamente en el horario de Tank, diablos no, pero tenía algo de curiosidad
de lo que Rebel había planeado para él después de nuestro rodaje. Aparentemente, nada,
porque ninguno de nuestros nombres estaba allí.
Él ya estaba en la oficina de Bear cuando entré, al igual que el jefe y Rebel. Me dejé caer
en una silla y le di a Tank un pequeño asentimiento de cortesía. Su cabeza se movió tal vez
medio centímetro en respuesta. Mamón.
—Gracias por venir, chicos —dice Bear. Le lanza a Rebel una mirada que no puedo
descifrar, y Rebel respira hondo.
—Entonces, como ya saben, el video que grabamos con ustedes dos le está yendo
realmente bien. Se está volviendo viral, supongo se podrían decir, y hemos tenido un montón
de otros sitios que nos piden permiso para mostrarlo también.
Y de repente sé lo que viene, porque es tan malditamente obvio, y suspiro interiormente.
De todos los videos que he hecho, ¿por qué este tenía que ser tan jodidamente popular?
Miró a Tank, y su rostro es incluso más gruñón de lo normal, así que supongo que
también lo sabe. ¿Dirá que sí? Tengo muchas ganas de decir que no, pero sé que lo haré si
ofrecen una bonificación suficiente, y lo harán, si las cifras de ventas son tan buenas.
—Quieres hacer otro video —detuve el largo monólogo de Rebel—. Con nosotros.
Sip, hay un nosotros. Apenas puedo reprimir la necesidad de vomitar ante el
pensamiento.
—Sí —dice Rebel—. Queremos hacer una filmación de continuación con los mismos
personajes, la misma historia. Se basaría en lo que hicimos antes.
Me obligo a decir las palabras—. Seguro, no hay problema.
Tank levanta un dedo—. Espera, folla-chicos, todavía no han terminado de preguntar.
Rechino mis dientes. Dios, quiero golpearlo tan mal que mis manos pican físicamente.
Pero tiene razón, y eso me enfurece aún más.
Rebel se aclara la garganta—. Sí, entonces no les estamos pidiendo sólo un video más.
Queremos hacer una serie de diez grabaciones, cada una basada en la historia y los personajes
que hicimos en la primera.
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—¿Diez grabaciones? —mi voz se eleva a un nivel que ya no es exactamente una voz
interior y Rebel se encoge visiblemente. En este momento, no me importa. Es mi puto amigo,
Página

así que, ¿cómo demonios puede sugerir que el enemigo me folle no una vez, sino diez veces
seguidas? Puto traidor
—¿Cerrarás tu puta boca por una vez para que él realmente pueda terminar con su
propuesta? ¿O necesito empujar mi verga por tu garganta otra vez para evitar que hables? —
Tank explota. Me lanza una mirada tan oscura que haría a la leche ponerse agria, y me encojo
un poco en mi silla.
—Me gustaría verte intentarlo —murmuro indignado, pero la atención de Tank ya había
vuelto a Rebel.
—Correcto —dice Rebel—. Tenemos algunas condiciones si deciden firmar el contrato,
pero las hemos incluido en este documento.
Me entrega a mí y a Tank una hoja de papel. Echo un vistazo a través de ella rápidamente.
Diez grabaciones, una a la semana. Tenemos la última palabra en los guiones de los actos
sexuales, como de costumbre. También están las esperadas cláusulas que se encuentran en
nuestro contrato original con Ballsy Boys, pero luego mi atención capta algo que no estoy
esperando. Una rápida inhalación me dice que Tank también lo está leyendo.
Oh, Dios, esto es perfecto. Es como la mañana de Navidad, disfrazado como algunos
términos legales en una hoja de papel. No podrían haber hecho este trato más dulce para mí
si lo intentaran. La sonrisa que ya está en mi rostro se ensancha cuando veo la compensación
económica. Eso recorrerá un largo camino hacia mi fondo de colegiatura. Estoy más que
dentro.
—¿Dónde firmo? —digo, apenas haciendo un esfuerzo para suprimir mi sonrisa.
—Esperemos a Tank —dice Rebel. Se está mordiendo el labio inferior, y puedo entender
por qué. La mierda se va a venir abajo.
Tank levanta la vista del documento, entrecierra sus ojos—. ¿Quieren que yo sea… —su
voz es baja y llena de ira.
—Creo que la palabra que estás buscando es “pasivo”, Tank. Tendrás que abrir esas
piernas para mí y dejar que tenga tu culo peludo —esto es oro puro, no es broma. La ira que
irradiando de él podría calentar mi departamento durante una semana, si no es que más.
—No voy a ser pasivo para él —gruñe Tank.
Rebel endereza sus hombros—. Entonces el acuerdo se cancela. No podemos filmar
nueve videos más con sólo tú follandolo. Nuestros fanáticos saben que Brewer es versátil, y
no quieren que sólo reciba. Además, hemos tenido toneladas de solicitudes a lo largo de los
años, como sabes muy bien. Esta sería la razón perfecta para que lo hagas.
31

—No con él —Tank está prácticamente escupiendo las palabras.

Página

—Oh, por el amor de Dios, Tank. Madura un poco —explota Bear. Sale disparado de su
silla y golpea su puño sobre su escritorio—. Joder, ¿dondé estás, en la secundaria?
 Él toma una respiración profunda, probablemente para calmarse otra vez, y se sienta
nuevamente en su silla. Sin embargo, sus ojos aún están ardiendo y siento su impacto a pesar
de que están disparando dagas a Tank y no a mí.
—Esta es una parte no negociable del contrato. Sé un profesional y fírmalo o camina
lejos de una puta cantidad de dinero. Nunca te presionaré para que hagas algo que no quieras,
lo sabes mejor que nadie. Pero si estás dispuesto a ser pasivo, pero no con Brewer, necesitas
seriamente mejorar tu actitud. No estoy manejando un club después de la escuela aquí,
hombre. Haz tu puto trabajo.
No puedo resistirme a arrojar un poco de combustible al fuego—. Yo no tengo ningún
problema con esa cláusula en absoluto —digo con dulzura.
Bear voltea su cabeza y enfoca esa mirada mortal en mí—. Sigue atacándolo y
agregaremos una cláusula que no te gustará, sólo para nivelar el campo de juego.
Eso me calla rápidamente, porqué Bear sabe el tipo de cosas que odio hacer.
—Bien —dice Tank. Saca una pluma del porta lapiceros sobre el escritorio de Bear y firma
el contrato con un garabato enojado—. Ahí. Hecho. Déjame saber dónde y cuándo aparecer.
Segundos después, sale por la puerta.
Firmo mi contrato de una manera más tranquila, todavía sonriendo ante la justicia
poética de todo esto—. Aquí tienes —digo mientras se lo doy a Bear—. Disfrutaré muchísimo
follando la mierda fuera de él —Dios, prácticamente me estoy frotando las manos mientras
me lo imagino.
—Brewer —dice Rebel en voz baja—. No estoy seguro de si alguna vez haya sido pasivo
antes.
Me encojo de hombros—. Sé eso. Es estrictamente activo con nosotros.
Rebel sacude la cabeza—. No, Brew, no me refiero al video, quiero decir nunca. No creo
que haya sido pasivo antes. Necesitas hacerlo fácil para él. Creo que está muerto de miedo.
¿Asustado? ¿Tank? Ahora, esas son dos palabras que nunca pensé escuchar en la misma
oración. Mi sonrisa vacila cuando la realidad me golpea—. No puedo tomar su virginidad en
un rodaje —le digo, mi estómago se hunde.
32

Rebel me da una sonrisa temblorosa—. Esperaba que llegaras a esa conclusión. Tienes
Página

un par de semanas, porque los diálogos para las próximas filmaciones aún están ajustadas
para ti siendo el activo.
¿Cómo demonios voy a convencer a Tank de que necesita dejarme follar su velludo culo
antes de esta sesión? Nunca va a admitir que está asustado, entonces, ¿qué razón puedo
usar? Sinceramente, no tengo ni puta idea.
 TANK
Mis músculos están rígidos mientras lanzo una pierna sobre mi moto. Cuando ruge a la vida
entre mis muslos, me relajo una fracción. Al carajo Rebel por ponerme en esta posición.
No es como si estuviera en contra de ser pasivo. He tenido algunos novios a los que
incluso les pedí que me follaran. Pero ninguno de ellos quiso hacerlo.
Siempre pensé que eventualmente dejaría que alguien me penetrara. Probablemente un
novio, con suerte alguien a quien realmente amara y en quien confiara en un mundo perfecto.
Pero aquí estoy, aceptando dejar que un hombre que odio lo haga, sólo para no perder la
profesionalidad… o una puta tonelada de dinero.
Firmé el contrato, así que ahora estoy atascado haciéndolo. Pero santo infierno, no
quiero perder la virginidad de mi culo frente a millones de espectadores. No puedo pensar en
muchas buenas opciones, desafortunadamente. No puedo regresar el contrato que acabo de
firmar. Ese dinero recorrerá un largo camino como adelanto de mi colegiatura y gastos de la
casa. Además, no voy darle esa satisfacción a Brewer.
Supongo que lo mejor que puedo hacer es encontrar a alguien que me folle antes de
ponerme frente a la cámara, así al menos no será la primera vez. ¿Pero quién? Si Rebel fuera
soltero, probablemente le preguntaría debido a que es lo más cercano que tengo a un amigo.
No puede ser Campy o Pixie; eso simplemente no se siente bien. Heart es una opción, pero
está en ese nebuloso espacio de ser alguien que conozco demasiado bien para un enrolle de
una sola vez, pero no lo suficiente como para pedir un favor como este.
Entonces, ¿dónde me deja eso? Podría ir a un bar y elegir al azar, pero la idea de eso me
molesta.
Puto infierno, no hay una buena manera de salir de esto.
33
Lo único lógico es ir a Bottoms Up e intentar encontrar a alguien para que me folle. Me
estremezco interiormente ante la idea de dejar que alguien al azar se meta en mi culo. Pero la
Página

alternativa de recibirlo por primera vez en cámara es mucho más aterradora.

Tomo una respiración profunda y me dirijo hacia el club. Si no lo hago esta noche,
terminaré pensando demasiado en esto. Mejor terminar con esto. Será como arrancar una
curita. Quién sabe, tal vez incluso me guste.
 Dudoso.
La fila de Bottoms Up sale de la puerta y termina en la calle, como siempre lo está. Pero
uno de los beneficios de follar frente a una cámara es que siempre te dejan saltar la fila en un
club gay. Me acerco al portero, Greg, con un propósito.
—Tank, ¿cómo estás, hombre? —pregunta Greg cuando lo alcanzo.
Gruño en respuesta y me encojo de hombros.
—Uno de estos días voy a encontrar las palabras mágicas para romper el exterior de
granito —me advierte Greg con una sonrisa juguetona.
Hmm, tal vez esto será más fácil de lo que pensaba.
—¿Eres activo? —pregunto directo.
Greg parpadea en sorpresa y se toma unos segundos para recuperarse de su conmoción.
—Soy versátil —responde, mirando de reojo a los chicos en la parte delantera de la fila
que se encuentran fascinados por nuestra conversación.
—¿Quieres follar cuando salgas del trabajo?
Greg mira a los otros hombres de nuevo y luego dobla su dedo para que me acerque.
—Eres sexy como el carajo, semental, pero en realidad no eres mi tipo. Lo siento —
susurra—. Me gustan los chicos bonitos, como Brewer o Pixie.
Asiento en comprensión y le doy una palmada en el hombro para mostrarle que no hay
resentimientos. Me da una sonrisa de disculpa y luego se aparta para dejarme atravesar la
puerta.
Sabía que eso habría sido demasiado fácil. Eso está bien, hay un club lleno de hombres.
Uno de estos tipos querrá follarme, ¿cierto?
Camino directamente a la barra, pido un whisky en las rocas y luego me siento en la
esquina del bar para ver el área. Hay muchos hombres calientes aquí esta noche, pero ninguno
que me sorprenda particularmente. Pero ese no es el punto de esta noche. No se trata de
encontrar a mi próximo novio, se trata de conseguir que alguien me folle el culo para que
pueda dejar pasar esto de una vez.
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Mi culo se contrae ante el pensamiento. Mentalmente sé que debe ser placentero,

Página

considerando que toneladas de hombres eligen exclusivamente ser pasivos. Pero no se siente
correcto en mi mente. Se siente mal en múltiples niveles, pero no hay tiempo para la auto
compasión y basura idealizada. La vida no siempre funciona como esperas que lo haga. He
aprendido esa lección muchas veces como para sorprenderme en este punto.
 —¿Este asiento está ocupado? —pregunta una tímida voz por encima de mi hombro
izquierdo.
Giro mi cabeza para ver quién podría ser el afortunado ganador de esta noche. Pero sólo
se necesita una mirada para saber que no es el indicado. Le ofrezco al niño una media sonrisa.
Ni siquiera estoy seguro de que sea lo suficientemente mayor como para estar en un bar, y
tiene escrito twink por todas partes. No que un sujeto femenino no pueda ser activo, pero él
tiene ojos de fóllame.
Una de las preguntas más frecuentes que las personas quieren preguntarte si eres un
hombre gay es, ¿cómo decides quién es activo? Y la respuesta es, es todo acerca de la mirada.
Hay una silenciosa comunicación que parece que todos hemos codificado en nuestro ADN.
Unos pocos segundos de contacto visual y puedo decir exactamente lo que el otro chico está
esperando.
El desafío que sabía que enfrentaría esta noche es el esteriotipo de que un gran oso
como yo sólo quiere ser activo. Cualquier otra noche sería cierto, jódete mucho, Rebel. No
entiendo por qué las personas se atascan tanto en su cabeza sobre los roles esperados.
—Estoy esperando a alguien —le miento al niño.
Se desinfla un poco, pero luego me da una rápida sonrisa que dice que no hay malos
sentimientos. Regreso a mi bebida y sigo mirando alrededor del club. Mi estómago está en
nudos mientras trato de convencerme a mí mismo de que es una buena idea. No puedo perder
la virginidad de mi culo con Brewer frente a la cámara. En serio, jodidamente no puedo.
Mi mano se aprieta alrededor de mi vaso, y bebo el resto de mi bebida de un trago rápido
antes de señalar al barman de nuevo.
—¿Estás bien, grandote? —pregunta Nick, el barman, cuando se acerca para rellenar mi
bebida.
—Eh —me encojo de hombros—. ¿Eres activo?
Nick me mira de arriba abajo y resopla—. Dulzura, estoy seguro de que eres un viaje al
que no sobreviviría.
Suspiro con resignación y me hundo en el taburete, concentrándome en mi nueva
bebida. Voy a necesitar otro plan, y voy a necesitarlo rápido, porqué sólo tengo unas pocas
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semanas antes de que mi culo le pertenezca a Brewer.

Página
 BREWER
Ser una estrella porno suena glamoroso, pero hay mucho más que la parte de follar. Promover
a los Ballsy Boys es parte de nuestro contrato, y eso significa presentarse en ciertos eventos,
fiestas o actividades promocionales.
En este caso, una sesión de fotos para una nueva marca de suspensorios llamada BB.
Significa Beautiful Booty, pero como también es el acrónimo de Ballsy Boys, su agencia de
marketing se acercó a Bear para ver si algunos de nosotros queríamos participar en una sesión
de fotos. Es por eso que Campy, Pixie y yo nos reportamos a las ocho de la mañana para que
nos tomen unas fotos. Al parecer, Heart no estaba disponible por alguna razón, y no querían
el culo peludo de Tank. Gran sorpresa allí.
—Es demasiado temparano —se queja Campy mientras caminamos desde el
estacionamiento donde nos reunimos hasta la dirección, subrayando la veracidad de su
declaración con un gran bostezo.
—Lo sé —suspiro mientras trato de frotar un punto dolorido en mi cuello. Supongo que
dormí mal o algo así, porque está rígido—. ¿Cómo estás, bebé? —le pregunto a Pixie cuyos
ojos están bien abiertos. Sus mejillas lucen sonrojadas y se limpia las manos en sus shorts.
—Estoy un poco nervioso —confiesa.
—Has hecho tomas promocionales para Ballsy Boys antes —trato de tranquilizarlo.
—Joe hizo esas. Es diferente —explica Pixie.
—Estará bien —dice Campy—. Brewer y yo te ayudaremos si es necesario.
Toco el timbre y la puerta se abre casi de inmediato por una chica.
—Hola —dice—. Soy Kendra, la asistente del fotógrafo. Entren.
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Pasamos al interior y nos llevan a una habitación pequeña, donde un fotógrafo está
Página

ocupado preparando su equipo. Nos da un pequeño saludo antes de continuar con su

instalación.
Kendra nos entrega a cada uno dos paquetes con los suspensorios que supuestamente
debemos modelar.
 —Hay un vestuario allí —señala.
Minutos después, estamos vestidos con ropa interior colorida. Pixie lleva uno azul claro
que le queda bastante bien, el mío es rojo fuego y va bien con mis tatuajes, y el de Campy es
blanco. El tipo siempre tiene un bronceado, por lo que se ve bien en él.
Cuando terminamos de cambiarnos, un maquillista nos está esperando y nos turnamos
para sentarnos en su silla, arreglarnos el cabello y el maquillaje. Odio esas cosas en mi rostro,
pero sé que es necesario para cualquier sesión. Y tengo que admitir que incluso mi rostro se
ve mejor con maquillaje.
Cuando todos estamos lo suficientemente maquillados, Kendra aparece de nuevo
mientras el chico de maquillaje se va—. Si están listos, chicos, nos gustaría ir con Campy
primero —dice Kendra—. Ustedes dos pueden esperar aquí.
Frunzo el ceño. ¿Por qué los tres nos cambiamos si él no nos fotografiará al mismo
tiempo? No hace mucho frío dentro del estudio, pero tampoco es exactamente cómodo en
suspensorios. No es que me vaya a quejar de esto. Bear nos enseñó a todos a ser agradables
al trabajar y no mostrar ningún comportamiento de diva.
Me encojo de hombros y envuelvo una toalla alrededor de mis hombros. Pixie sigue
rápidamente mi ejemplo, temblando cuando el aire acondicionado entra en acción. Hay un
banco de madera en la habitación, y nos apoyamos contra la fría pared.
—¿Cómo fue la escena con Tank? —pregunta Pixie.
—Explosivo —le digo—. Creo que Rebel estuvo bastante feliz con el resultado.
—También Bear —dice Pixie—. Dijo que ustedes incendiaron el estudio.
Levanto mis cejas—. ¿Lo dijo? ¿Y cuando el jefe te habló de mí, eh?
Ese súper lindo rubor está de vuelta, pero Pixie se encuentra con mis ojos—. El viernes
pasado cuando todos salimos, pero no estabas allí. ¿Dónde estaba de todos modos? Teniendo
sexo, sin duda.
Estaba trabajando un turno tarde, pero no le voy a decir eso a Pixie. No es que no confíe
en él, pero realmente quiero mantener esa parte de mi vida separada de mi vida Ballsy Boys.
Si eso signica que asumen que estoy saliendo de fiesta y follando por ahí, que así sea.
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—Tenía que quitarme el olor de Tank —bromeo.

Página

—Él no es tan malo —dice Pixie, su tono un poco a la defensiva.

—¿Cómo sabrías? Él nunca ha tenido tu culo, ¿o sí?
La nariz de Pixie se arruga y hace un puchero—. No. Bear no lo permite, por alguna razón.
 —Es protector contigo —digo con una suave sonrisa.
—No soy tan frágil como piensa, ya sabes. O tan joven. Tampoco me deja hacer una DP.
—¿Te gustaría eso?
—Diablos, sí. Tienes que intentar todo una vez, ¿cierto? ¿De qué otra manera sabrías lo
que te gusta o amas?
Dice esto con tanto entusiasmo que no puedo evitar sonreír—. ¿Alguna vez has hecho
una DP? —le pregunto.
—No… pero estoy seguro de que podría hacerlo. Sé que ha habido solicitudes de otros
estudios y estrellas para filmaciones conmigo, incluso para DP y algo de mierda pervertida,
pero Bear está tan malditamente reacio.
Creo que sé exactamente por qué Bear se muestra reacio, pero eso es algo que tienen
que resolver ellos mismos. Eso no signica que no pueda empujar al oso un poco—. Si quieres,
haré una DP contigo y Campy. Lo hemos hecho antes, y sabemos cómo hacerlo bueno para
ti. Dile a Bear eso. De esa manera, él realmente no pude decir que no.
Los ojos de Pixie se iluminan—. ¿En serio? Eso sería increíble.
Antes de darme cuenta, se ha arrastrado a mi regazo—. Tengo frío —dice en tono de
disculpa.
Lo atraigo más cerca y envuelvo mis brazos a su alrededor—. Está bien, bebé —acarició
su cabello—. No me importa abrazarte.
Pixie pone su mejilla contra mi hombro, y su aliento hace cosquillas en mi piel—. ¿Algunas
vez deseas poder enamorarte de alguien fácil? ¿Alguien como yo?
—¿Te estás llamando fácil?
Golpea mi pecho juguetonamente—. No así. Quiero decir fácil como sin complicaciones.
Tú y yo seríamos felices juntos, ¿sabes? Nos divertiríamos, compartiríamos buen sexo,
disfrutaríamos la vida.
La manera en que lo dice lo hace sonar mucho más mayor de lo que es. Hay una
melancolía que me toca—. ¿Qué te hace pensar que no podría enamorarme de ti?
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Resopla—. Por favor, ni siquiera lo intentes. Ambos sabemos que no soy tu tipo.
Página

No lo es, pero, ¿cómo diablos lo sabe? No es que no tengamos química, porque hicimos
una buena escena juntos. Es sólo que él es demasiado… demasiado joven para mí, ¿tal vez?
Demasiado frágil, en cierto modo. Necesita a alguien que lo proteja, cuide y lo abrace, y ese
no soy yo. En todo caso, yo necesito a alguien así. No es que alguna vez vaya a encontrar a
uno, porque todos los hombres quieren de mí diversión y una buena follada.
 —Ojalá lo fueras —digo con sorprendente honestidad.
Levanta la cabeza y me besa suavemente en la boca—. También yo. Pero no puedes hacer
que tu corazón sienta algo que no siente, ¿verdad? O evitar que sienta lo que siente.
Nos sentamos en silencio, su delgado cuerpo recostado contra el mío. El hecho de que
mi verga ni siquiera se mueva a pesar de que está sentado prácticamente desnudo en mi
regazo dice mucho.
Toma un tiempo antes que Campy entre y cuando lo hace, su rostro está tenso de ira.
Sus ojos buscan los míos, pero antes de que pueda decir algo, Kendra entra tras él—. Es el
turno de Pixie —dice ella.
Pixie se desliza de mi regazo, deja caer la toalla en el banco y la sigue después de una
rápida revisión en el espejo para ver si su cabello se ve bien. Kendra cierra la puerta detrás de
él, y tan pronto como se va, Campy se acerca—. No podemos dejarlo solo con ese pendejo.
Ese fotógrafo es un total asqueroso.
Mis ojos se estrechan. Lamentablemente, me he topado con mi parte justa de personas
que piensan que debido a que somos estrellas porno, tienen acceso gratuito a nuestros
cuerpos. He tenido mujeres que me agarran el culo e incluso mí verga sin ninguna apariencia
de vergüenza, y también ha habido algunos hombres.
—¿Qué hizo?
Campy no ha estado en el negocio tanto tiempo como yo, así que, ¿tal vez está
exagerando ante un poco de coqueteo? Sin embargo, él no es el tipo. Campy es generalmente
relajado como un pepino, un poco distante incluso. Está tan lejos de ser una reina del drama,
por eso su nombre porno siempre ha tenido un toque irónico.
—Me agarró el culo más de una vez —dice Campy y luego se acerca aún más—. Viejo,
tenía su dedo sobre mi agujero. Supuestamente para posicionarme, pero si no me hubiera
alejado, él habría…
Ni siquiera espero a que continue para agarrarlo por la muñeca—. Ven conmigo.
Cuando entramos, el tipo tiene a Pixie con la espalda contra la pared, y los ojos de
nuestro chico están tan abiertos como un ciervo frente a un foco. La mano del fotógrafo está
en su verga, a punto de deslizarla bajo sus suspensorios.
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—¡Oye! —gritó, ardiente furia quemando dentro de mi—. Quítale las putas manos de
Página

encima.
El fotógrafo se da la vuelta y Pixie casi se hunde contra la pared.
—Puto pedazo de mierda, ¿qué coño crees que estás haciendo? —grito.
 El pendejo tiene el valor de encogerse de hombros—. Tuve que posicionar su verga
correctamente. No hay necesidad de crear tal drama.
Aprieto mis puños, mentalmente me obligo a controlar mi temperamento—. Vamos,
bebé, vístete —le digo a Pixie—. Nos vamos.
—No pueden irse —dice el fotógrafo, su rostro es un poco más blanco que antes.
Apunto mi dedo tan cerca de su rostro que él salta—. No puedes decirme lo que puedo
y no puedo hacer. Nos vamor a ir y le explicarás a tu cliente por qué abandonamos la sesión.
Y ten por seguro que nosotros haremos lo mismo, así que cualquier idea loca que tengas sobre
esto acerca de que es nuestra culpa no volará.
—¿Realmente crees que tomarán la palabra de una estrella porno sobre la mía? —intenta,
pero él sabe tan bien como yo que está alardeando, por lo que ni siquiera le respondo.
Simplemente me doy la vuelta y regreso al vestidor, donde Campy está ayudando a un
tembloroso Pixie a vestirse.
Kendra entra vacilante al vestidor—. Miren —ella comienza—. Sé que él puede ser un
poco…
—¿Un poco imbécil? ¿Estás jodidamente ciega? —espeto mientras me ato los cordones
rápidamente—. Esta no puede ser la primera vez que hace algo como esto, considerando que
le tomó menos de cinco minutos bajar la ropa interior de Pixie. Así que espero que te sientas
muy orgullosa de ti misma ahora por no haber dicho nada.
Campy pone una mano sobre mi hombro—. Retrocede, Brew. Ella también podría ser una
víctima.
Tiene razón, por supuesto, pero en este momento, estoy demasiado enojado para
encontrar compasión. Deslizo mi brazo alrededor de Pixie, quien todavía está temblando y lo
guio afuera—. Llama a Bear —le digo a Campy.
—No, por favor no lo hagas —dice Pixie, lo primero que ha dicho desde que interrumpí
su sesión—. Si lo haces, nunca me dejará hacer algo así de nuevo.
—Bebé, él tiene que saber. Nos salimos durante una sesión fotográfica. Tendremos que
decirle por qué.
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El rostro de Pixie luce como si estuviera a punto de estallar en lágrimas—. Nunca más
me dejará hacer nada divertido —dice con una voz delgada.
Página

Estoy tentado a decirle que Bear es su jefe, no su papá, pero no creo que ahora sea el
momento adecuado. Campy ya está hablando por teléfono con Bear, e incluso desde aquí
puedo escuchar que Bear está furioso.
 Pobre Pixie. Creo que puede tener razón con que Bear no lo dejará hacer cosas cómo
esta nunca más. Ojalá pudiera decir que lo culpo, pero Pixie provoca un extraño insitinto
protector, incluso en mi. Y lo de daddy protector no es mi estilo habitual.
Aún así, veré si puedo persuadir a Bear para que nos permita a Campy y a mí hacer una
DP con el pequeño diablillo. No he hecho una en un tiempo, así que podría ser divertido. Todo
lo que necesito hacer es dejar esas temidas diez escenas con Tank a un lado, de esta manera
tengo cosas divertidas que esperar. Tomaría el dulce culo de Pixie antes que ser follado por
ese peludo oso pardo cualquier día.

41
Página
 TANK
Comprar comestibles es la pesadilla de mi existencia. No es que no me guste comer, y en
realidad amo cocinar comida saludable, encontrar nuevas maneras de hacer que sepa bien.
Pero la mierda en LA es terriblemente cara.
Recojo una marca de arroz integral y me estremezco ante el precio de seis dólares. ¿Seis
dólares por arroz? Jesús, el arroz debería estar como en un dólar. Gruño mientras lo tiro en mi
carrito de compras.
Una cosa acerca de crecer en una granja es que odio la idea de pagar por la comida.
Comemos lo que cultivamos. Era una ocasión rara tener algo en el refrigerador o en la
despensa que no viniera de la granja. El negocio era de lácteos, pero también teníamos
suficiente tierra como para una pequeña cantidad de cultivos, y por supuesto, un gallinero.
Nuestros armarios siempre estaban llenos de conservas que mamá hacía ella misma.
Comíamos la mayor parte de las vacas que teníamos que sacrificar, y siempre había huevos
frescos y vegetales. No era la dieta más variada, pero era agradable alimentarte con el trabajo
de tus propias manos.
Recojo una manzana magullada y gimo de frustración.
—¿Peter?
Me doy la vuelta para ver a Ryan, un ex mío de hace unos tres años. Está de pie a unos
metros de distancia, apoyado en su carrito, sonriéndome. Eso era lo que más me gustaba de
Ryan, su sonrisa fácil.
—Hey, ¿Cómo te va? —lo saludo con un pequeño saludo de mano, que él ignora, yendo
directamente a la incómoda opción de abrazarme.
—Bien, ¿cómo has estado, Godzilla? Te he visto en el sitio web de Ballsy.
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Forzo una sonrisa incómoda, frotando mi nuca y rezando para que alguien comience un
Página

incendio o algo para terminar este intercambio. Porqué, ¿soy sólo yo o es extraño decirle a un
ex que te masturbaste con el porno que él protagoniza? No es que él haya dicho que se
masturbó, pero está implícito. Además, me olvidé totalmente de ese apodo idiota que tenía
para mí.
—Oh, sí. Ya sabes, lo mismo de siempre —me encojo de hombros.
 —Te ves bien —se acerca y coloca una mano en mi bíceps, dándole un pequeño apretón.
Sus ojos brillan con lujuria, y se lame sus labios.
Ugh, olvidé esto acerca de Ryan. Su fetiche por mis músculos. No estoy seguro de hacer
un buen trabajo escondiendo mi mueca mientras recuerdos de Ryan provocando peleas en
los bares sólo para que yo acudiría a su recate se precipitan a mi mente.
—Gracias. Escucha, debo irme, pero fue bueno toparme contigo —me alejo de su toque
y me apresuro a poner mi carrito entre nosotros antes de que él pueda comenzar a
manosearme de nuevo.
—Sí, mi número sigue siendo el mismo si alguna vez tienes ganas de llamar.
—Uh, tal vez —miento antes de apresurarme para poner algo de distancia entre él y yo.
Rebel siempre se quejó de la dificultad de salir con una estrella porno. Eso tiene sus
desafíos, pero no peor que los desafíos de citas que parecen venir al ser yo. No por ser
totalmente detestable, porque en general estoy contento con quien soy, pero por alguna
razón, parece que los chicos no pueden ver más allá de mi tamaño y mi exterior peludo. Es
una cagada cuando tu interior no coincide con tu exterior, pero supongo que así la vida. Tal
vez algún dia encuentre a alguien que pueda ver más allá de mi corpulento exterior y se dé
cuenta de que preferiría pasar una noche acurrucándome en el sofá viendo películas, que
metiéndome en una pelea de puños.
Ahora que estoy lejos de Ryan y pensando más claramente, me doy cuenta de que
debería haber aceptado su oferta para una follada y haber tratado de convencerlo de que me
penetrara. Él es versátil, lo mencionó varias veces mientras salíamos. Pero, supongo que
probablemente no terminaría mejor que el bar, debido a que se negó rotundamente a follarme
la única vez que estuve lo suficientemente borracho como para preguntarle. Dijo, y cito, si
quisiera follar con alguien, buscaría a un pequeño y bonito twink. Te mantengo cerca para
que me folles, mantenlo así.
Gruño ante el recuerdo y meto algunos artículos finales en mi carrito de compras, luego
me dirijo a la caja.
Encontrarme con Ryan tiene otra cosa en mi mente ahora también. Su perro, Pudgy.
Sonrío ante el recuerdo del pequeño pug gangoso y gaseoso que probablemente fue la razón
por la que me quedé con Ryan tanto tiempo como lo hice. Era agradable ir allí al final de un
43

largo día y tener un pequeño peludo acurrucado en mi regazo. Lo triste es que, creo que Ryan
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podía decir que su perro me gustaba un poco más que él.

Supongo que no es sorprendente que siempre haya sido una persona de animales, ya
que crecí en una granja. Siempre los he encontrado mucho más fáciles de entender que los
humanos. Los animales no juegan juegos, no tienen ideas preconcebidas de ti, toman la
información que les das y reaccionan a ti en base a eso.
 Debería conseguir un perro.
Siempre pensé que no tendría tiempo suficiente para un perro, pero ahora que tengo la
idea en mente, se siente vital. Apuesto a que Rebel y Bear no les importaría que llevara un
perro al estudio, siempre y cuando se portara bien. Y paso la mayor parte de mi tiempo en
casa, aparte de clases, así que no se quedaría solo por mucho tiempo. Además, sería bueno
tener alguien a quien cuidar, alguien que confíe en mí día a día. Este último pensamiento me
produce una punzada de anhelo, no sólo por una mascota, pero eso es demasiado en lo que
pensar en este momento.
Con mis compras guardadas en mi mochila, decido ir al refugio de animales cerca de mi
departamento esta tarde, sólo para mirar.

Cuando entro en el refugio me saluda una sinfonía de aullidos, gruñidos y maullidos. El

olor podría ser mejor, pero supongo que cuando hay cientos de animales alojados en un solo
lugar, habrá una cierta cantidad de aromas desagradables.
—Hola, ¿en que puedo ayudarte? —me saluda una mujer joven sentada en el mostrador
de bienvenida.
—Estoy buscando un perro. Creo que sólo estoy echando un vistazo, pero tal vez si el
perro correcto llama mi atención…
—Entiendo. Veremos si tu nuevo mejor amigo está aquí en alguna parte —me asegura,
y una rara y genuina sonrisa se extiende por mi rostro. Un nuevo mejor amigo, eso suena bien.
Obviamente, soy patético, pero aún así suena bien.
Ella me conduce a las perreras donde parece qué hay un número desproporcionado de
Boxers mezclados.
—Estos pobres chicos tienen un tiempo difícil, ya qué hay una prohibición con los
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Pitbulls. Como ellos están etiquetados como Boxers, no tenemos que llevarlos de inmediato,
Página

pero generalmente no encuentran hogares —explica con tristeza.

—Eso es terrible —frunzo el ceño y me agacho para acariciar a un chico particularmente
inquieto—. Desearía poder llevarte a casa, amigo.
—¿Supongo que estás buscando algo del lado más pequeño?
 —Sí, no hay mucho espacio en mi departamento —le explico—. Tal vez un perro más viejo
con algo de entrenamiento, porqué estoy planeando llevarlo a atrabajar conmigo.
—Oh, eso es genial. ¿En que trabajas?
—Uh… —sí, caminé directamente a eso—. Porno —admito después de unos segundos de
incómodo silencio.
Sus ojos se agrandan y un ligero rubor se desliza sobre sus mejillas, y luego sus ojos
comienzan a vagar, sin duda preguntándose cómo me veo desnudo.
—Oh, ah… eso es genial.
Un impaciente aullido de una perrera cercana rompe el momento incómodo, y hago mi
camino hacia allí para ver quién está interesado en algo de atención. Me río entre dientes
cuando mis ojos se posan en un perrito desaliñado. Parece que pesa alrededor de nueve kilos,
pero es delgado, por lo que probablemente tenga entre once y trece cuando esté bien
alimentado. Sus hebras de pelaje gris y marrón están volando en todas direcciones, como si
tuviera un caso permanente de problemas para dormir, y cuando abre su boca en una
pequeña sonrisa perruna, me doy cuenta de que le faltan algunos dientes.
—¿Cuál es su historia?
—No estamos seguros. Fue traído el mes pasado por alguien que lo encontró hurgando
en la basura detrás de un restaurante chino. No tenía un collar o un microchip, pero sí sabía
algunas órdenes básicas. Al principio era tímido, pero se ha encariñado rápidamente con el
personal. Desafortunadamente, es un poco feo, por lo que nadie se interesa mucho por él.
—No es feo —discuto, arrastrando los pies más cerca de la jaula y metiendo un dedo
para que pueda olfatearme—. Está bien, tal vez lo es un poco. Pero es un feo lindo.
—Su nombre es Shaggy. Pienso que le gustas.
Su nariz se mueve a lo largo de mi mano, y luego tentativamente me lame antes de
retroceder para esperar mi reacción.
—También me gustas —sonrío y hago un chasquido con mi lengua contra mis dientes
para volver a llamarlo—. ¿Quieres ir a casa conmigo, pequeño? ¿Qué piensas, Shaggy?
¿Podemos ser amigos?
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Agita la cola y suelta otro pequeño ladrido de emoción.

Página

—¿Quieres que empiece el papeleo?

—Sí, hagámoslo —concuerdo, levantándome de mala gana y alejándome de su jaula—.
Una vez que complete la solicitud, no hay ninguna posibilidad de que alguien más lo lleve a
casa antes que me aprueben, ¿cierto?
 —Absolutamente no, lo pondremos en espera, y sólo nos llevará un día o dos aprobarlo
para que puedas recogerlo. Siempre le digo a las personas que este es un buen momento para
asegurarse de que tengan sus suministros. Tengo una checklist que puedo darte y algunas
recomendaciones para la comida. ¿Qué tal suena eso?
—Suena genial —ahora que lo conozco, no puedo esperar para llevar a Shaggy a casa.
Estaría bien tener algo para acurrucarse en la cama junto a mí por la noche, para cuidar.

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Página
 BREWER
Para cuando está programada la segunda grabación, todavía no he contactado a Tank. No es
que no lo haya pensado, porque lo he hecho. Simplemente he estado ocupado, como siempre
lo estoy. El nuevo semestre comenzará en diez días, así que ya comencé a prepararme leyendo
con anticipación para bioquímica y fisiología, dos clases que tienen libros masivos con los que
tengo que trabajar. También estoy tomando una clase de Inducción a la literatura inglesa,
pero aún no tengo idea de cuál es la asignación para esa.
Además, sí traté de encontrar alguna razón plausible para contactar a Tank, y el
resultado fue un rotundo nada. Tank y yo no podemos soportar vernos el uno al otro,
entonces, ¿qué razón podría haber para que pueda comunicarme con él? Si hay una, no he
podido pensar en ella. Él y yo tenemos cero en común, excepto el hecho de que ambos somos
gay y trabajamos para la misma compañía porno. Eso es todo. No sé qué usar como excusa
para enviarle un mensaje y hacerlo creíble.
El guión para la siguiente grabación es jodidamente brillante de nuevo. Mis sentimientos
por Rebel son partes iguales de admiración por su ingenio en esto y puro odio por hacerlo
posible. Maldición, desearía haber estado en posición de decir no a esto, pero por esa cantidad
de dinero, no hay mucho que yo no pueda hacer. Incluso que mi culo sea violado una vez más
por Tank.
Es cierto que la última vez no estuvo tan mal. Ni siquiera estaba tan dolorido el día
siguiente, no más de lo que normalmente estoy después de una filmación. Mi garganta puede
doler un poco después de una ruda mamada, pero eso no es nada que el té con miel y regaliz
holandés no puedan curar. Tuve un estudiante de intercambio que me dio esa mierda una vez,
y es la mejor cosa del mundo. Ahora los pido en línea en esta tienda holandesa y me aseguro
de siempre tener algunas bolsas en mi habitación.
Aun así me preparé bien, pero no es la follada lo que más me preocupa. Es la interacción
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que Rebel ha creado antes de que realmente follemos. Es absolutamente brillante, pero, al
Página

mismo tiempo, asusta como el carajo. Sólo puedo esperar y rezar para que su fe en las
habilidades de Tank esté justificada, porqué él podría lastimarme seriamente en este
intercambio.
Cuando entro al vestuario, Tank acaba de terminar de bañarse. Se está secando su
masivo cuerpo con movimientos ásperos y rápidos.
 —Hola —le digo, sin querer ignorarlo.
—Hey.
Dejo caer mi bolso en mi casillero y empiezo a desabrocharme los shorts—. ¿Por qué
siempre te bañas justo antes de una escena?
Me mira como para determinar si estoy tirando de su cadena de alguna manera, pero
honestamente no. Tengo curiosidad porque por lo que sé, él es el único que hace esto. La
mayoría de nosotros nos bañamos después, aunque sólo sea porque estamos cubiertos de
semen, pero, ¿por qué hacerlo dos veces?
—Cortesía a mi compañero —dice con voz ronca.
—¿Incluso cuando ese compañero soy yo? —me atrevo a preguntar.
Él duda, pero luego se encoge de hombros—. La fuerza del hábito.
No decimos una palabra hasta que estamos vestidos y listos para irnos. Casi nos
cruzamos en la puerta, y de repente me mira a los ojos—. No te agaches —dice.
Frunzo el ceño—. ¿Qué?
—Tienes que confiar en mí y no te agaches. Si lo haces, puedo hacerte daño.
Está hablando de la escena y esa locura que Rebel puso allí. ¿En serio espera que confíe
en él? Supongo que sí, porque claramente no está bromeando. Su rostro está muy serio, sus
ojos perforándome. Simplemente asiento, incapaz de encontrar algún tipo de respuesta
verbal en este momento.
Santo infierno, es demasiado lo que está pidiendo. Especialmente con él. Quiero decir,
si hubiera sido Rebel o Campy, no habría tenido ninguna duda. ¿Pero con Tank? ¿Realmente
creo que él no usaría esta oportunidad para vengarse?
Rebel nos está esperando, el estudio una vez más se transformó en un sitio de
construcción—. ¿Están listos para hacer esto, chicos? —pregunta.
Simplemente asiento mientras me pongo el casco de seguridad amarillo, mi cerebro
todavía luchando con si debo o no confiar en Tank con esto. Parece que tengo pocas
opciones, pero maldito infierno, no me gusta esto en absoluto. Odio cuando las cosas están
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fuera de mi control, especialmente cuando involucra a un hombre como Tank que claramente
odia mis entrañas.
Página

Rebel está diciendo algo acerca de nuestras posiciones exactas, de esta manera las
cámaras nos captan y vuelvo a asentir, aunque no he escuchado una palabra de lo que dijo.
Respiro profundo. Hora del show.
 Rebel se va y Tank y yo tomamos nuestros lugares. Él está pretendiendo mirar planos
arquitectónicos, apoyado en el andamio. Se ve amenazante con un par de jeans ajustados,
botas negras de seguridad y una camiseta negra sin mangas, pero no puedo negar que
también se ve sexy como el infierno. Quiero decir, si él no fuera un monumental imbécil,
totalmente dejaría que me follara. Bueno, lo dejaré hacerlo de todos modos, ya que para esto
me pagan, pero no me gustará.
Probablemente.
—Hey, jefe —comienzo tan pronto como Rebel me da la señal de acción, y entro en
cámara.
Tank levanta la vista de sus planos, su rostro se ensombrece—. Llegas tarde.
Miro mi reloj—. Por cinco minutos. Relájate, hombre.
Él visiblemente rechina sus dientes—. No me digas que me relaje. ¿Cuál es tu razón para
llegar tarde? Será mejor que sea una buena.
Me acerco más como dice el guión, luego le disparo una sonrisa arrogante—. Estaba
follando a tu hermano. Ya sabes —le digo, dando otro paso mientras el rostro de Tank
comienza a parecer una tormenta—. David es bueno follando. A diferencia de ti. Ese es un
dulce culo, tengo que decírtelo.
Tank se inclina hacia atrás y luego esa carnosa mano está viniendo hacia mi rostro, y no
pienso. Todo lo que veo es el puño y los ojos furiosos de Tank, y mi cabeza se mueve a un
lado.
Un segundo después, mi rostro estalla en dolor y me tambaleo hacia atrás. Mis ojos se
cierran cuando mi estómago se agita con la cegadora agonía. Mi visión se vuelve negra, y lo
último que siento son dos manos fuertes en mis bíceps.
Cuando vuelvo en sí, estoy de espaldas sobre el suelo y furiosas voces están apuñalando
mi palpitante cabeza. Puta madre, ¿qué sucedió?
—Tenemos que llamar a una ambulancia —dice Rebel, puro pánico en su voz.
¿Una ambulancia? ¿Para quién? Dios mío, ¿por qué me duele tanto la cabeza? ¿Por qué
estoy en el suelo?
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Entonces lo recuerdo y mis ojos se abren de golpe, causando que otro dolor se dispare
Página

por mi pómulo.
—Está despierto —dice Tank.
Se necesitan uno o dos segundos para que mis ojos se enfoquen, y la imagen borrosa
se transforma en los rostros preocupados de Bear, Rebel y… Tank.
 —¡Tú jodidamente me noqueaste! —le grito, luego hago una mueca porque maldición,
eso duele. Gritar duele. Moverse duele. Todo duele.
—Bajaste la cabeza —dice Tank—. Te dije que no te agacharas.
Lágrimas se forman en mis ojos porque el dolor sigue rodando por mi cabeza y no cede—
. ¿Qué harías si vieras a un sujeto furioso lanzándote un puñetazo? —pregunto con los dientes
apretados.
—Si llamamos a una ambulancia, esto va a los libros como una lesión en el trabajo —dice
Bear, su voz más firme que la de Rebel—. Tendrán que investigar y pueden cerrarnos
temporalmente, sólo porque ellos pueden. Somos un estudio de porno gay; esos son dos
strikes contra nosotros.
Suspiro, manteniendo los ojos cerrados porqué eso parece ayudar un poco—. No
necesito una ambulancia.
—Él necesita que lo revisen —ese, sorprendentemente, es Tank—. Le di fuerte.
—Pensé que habías dicho que podrías hacer esto, Tank, hacerlo parecer como si lo
hubieras golpeado fuerte pero sin lastimarlo realmente —Rebel está enojado, eso está muy
claro.
—¡Lo habría hecho, maldición, si él no hubiera movido la cabeza! Le dije que se quedara
quieto, y él movió su cabeza.
—Estoy de acuerdo con Tank. Él necesita ser revisado. Alguien tiene que llevarlo a una
sala de emergencias y que le revisen la cabeza —ese es Bear, tranquilo como siempre.
—Estoy bien —digo—. Si alguien puede sólo llevarme a casa, estaré bien.
—Lo llevaré a la sala de emergencias —dice Tank.
Mis ojos se abren de golpe otra vez—. No, tú no. Eres quién me golpeó, por el amor de
Dios.
—Con mayor razón, debería asegurarme de que estés bien.
Frunzo el ceño—. Ni siquiera tienes un auto. ¿Qué vas a hacer, ponerme en la parte
trasera de tu moto?
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Tank cruza sus brazos—. Conduciré tu auto.

Página

—Si Brewer está lo suficientemente bien como para discutir con Tank, creo que podemos
decir con seguridad que todo va a estar bien —dice Bear.
—Jodidamente duele —murmuro.
 Ni siquiera noté que Rebel había desaparecido hasta que regresa y me da una bolsa
ziploc con cubitos de hielo.
—Necesito una toalla —le digo—. No se puede poner hielo directamente en la piel, ni
siquiera con el plástico de por medio. Se congelará y dañará la cosa superior de tu piel —
explico cuando todos me miran como si estuviera loco.
—Sí, creo que estará bien —dice Rebel finalmente, pero obedientemente me consigue
una toalla y la envuelve alrededor de la bolsa de hielo.
Antes de que pueda decir algo, Tank se agacha detrás de mí, agarra mis brazos y
lentamente me empuja para sentarme. Maldición, ese chico es fuerte. Quiero alejar sus
manos, pero la verdad es que estoy un poco mareado, así que por ahora aprecio que me haya
estabilizado.
Con cuidado toco mi pómulo para verificar que nada esté roto. No se siente así, aunque
estoy seguro de que terminaré con un moretón gigantesco.
—¿Cómo se siente? —pregunta Tank. Giro mi cabeza para ver su rostro, no estoy seguro
de si es en serio o no, pero sólo hay preocupación en sus ojos.
—Está sensible, pero no creo que nada esté roto. El hielo debería hacer el truco.
—¿Ahora eres médico? —dice.
Muerdo mi respuesta. Si él sólo supiera. Pero él no puede ver esa parte de mí. Ninguno
de ellos lo hace.
—He tenido huesos rotos antes —digo con tanta calma como puedo manejar—. Estoy
bastante seguro de que sería capaz de sentirlo si estuviera roto.
—Aun así te llevaré a la sala de emergencias —dice.
—Rebel, ¿no puedes tú—
—Rebel y el estudio no van a estar en ninguna parte cerca de esto —Tank me interrumpe
con una voz que no deja espacio para la discusión—. Si uno de ellos toma partido, es posible
que tengan que responder preguntas y mentir o implicar al estudio. Yo hice esto, yo soy quien
se hará cargo de ti.
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Está claro que hemos llegado al punto en que discutir no me ayudará, así que me entrego
a lo inevitable. A decir verdad, mi mejilla duele como un hijo de puta, por lo que una radiografía
Página

es probablemente una buena idea.

Rebel me ayuda a cambiarme a mi propia ropa y le entrega las llaves de mi auto a Tank.
Estoy demasiado agobiado por el dolor como para molestarme siquiera en establar una
conversación, y no me doy cuenta a qué hospital me ha llevado hasta que da la vuelta hacia
el estacionamiento.
Mi hospital.
Oh, puto infierno. Esto es malo en muchos niveles.

52
Página
 TANK
Puta madre. No puedo creer que Brewer malditamente se agachara cuando le dije que no lo
hiciera. Le daría un puñetazo de nuevo si no me sintiera ya como una completa mierda.

Me detengo en el lugar de estacionamiento más cercano posible al hospital. Me

desabrocho el cinturón de seguridad y miro a Brewer, que de repente se ha puesto blanco
como un fantasma.
—¿Estás bien? ¿Te sientes mareado o algo así?
—Realmente no tenemos que ir allí. Estoy bien —protesta débilmente Brewer.
—Buen intento. Vamos a entrar allí para que yo pueda aliviar mi conciencia. Lidia con
ello.
Salgo del auto y me dirijo a su lado para ayudarlo a salir. No sé por qué creo que necesita
ayuda, pero como sea. La mandíbula de Brewer está tensa cuando sale del auto, todavía
presionando el hielo en la hinchazón con forma de puño.
Camino unos pasos detrás de Brewer hacia el hospital, y por un segundo, mis ojos vagan
a su bonito y redondo culo. Si él no se hubiese movido, ahora mismo estaría hasta las bolas
dentro de su culo. Que mierda de día se convirtió esto.
Sigo a Brewer a través de las puertas automáticas hacia el vestíbulo del hospital. Se
dirige directamente al mostrador de emergencias, camino a la sala de espera y me acomodo
en una silla.
La madera barata de la silla se queja bajo el peso de mi grande forma. Un hombre a unas
pocas sillas de distancia tose ruidosamente sin molestarse en taparse la boca, y me
estremezco. Algunas otras personas también están esperando, todos mirando distraídamente
a la televisión reproduciendo algún programa de entrevistas matutino.
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Vuelvo a mirar a Brewer y me doy cuenta de que está hablando con la enfermera que
Página

está detrás del mostrador. Él está sonriendo y gesticulando salvajemente mientras la

enfermera se ríe. Una punzada de irritación me atraviesa. Todo le viene tan fácil. Debe ser
bueno hacer amigos donde quiera que vayas y que la vida te dé todo lo que deseas.
 La enfermera finalmente le entrega a Brewer un sujetapapeles y una pluma, y él hace su
camino hacia mí. Sin reconocerme, Brewer se deja caer en la silla a mi lado y comienza a llenar
los formularios mientras cruzo los brazos sobre mi pecho e intento ver la mierda tonta que
hay en la televisión.
—¿Por qué estás haciendo pucheros, oso pardo? —pregunta Brewer sin levantar la vista
de su papeleo.
—No estoy haciendo pucheros —me quejo.
—Estás haciendo pucheros y ahora estás gruñendo. ¿Qué le molesta al gran osito? —
Brewer me toca el costado con su pluma, y aprieto mi mandíbula contra otro gruñido,
sabiendo que eso sólo le dará munición.
—Debería haberte golpeado más fuerte.
—Siempre hay una próxima vez —ofrece Brewer.
—Fuiste muy amigable con esa enfermera. ¿Ahora también te gustan las chicas?
—¿A ti qué te importa?
Buena pregunta, ¿por qué me importa?—. No me importa —resoplo
—La conozco —murmura Brewer después de un segundo.
—Micah, ¿qué estás haciendo aquí en tu día libre? —pregunta otra enfermera,
acercándose a nosotros con una sonrisa.
Levanto mis cejas a Brewer. Creo que Micah como que sí le queda, pero no puedo pensar
en él como algo más que Brewer. Nunca me he preguntado nada acerca de Brewer—aparte
de si se revisa con la frecuencia suficiente cada vez que folla por ahí—pero siento curiosidad
por saber cómo se decidió por su nombre porno. ¿O Bear lo escogió? Pero su nombre porno
tiene que irse a otro lado, porque ahora mismo estoy tratando de entender qué quizo decir
ella con ‘en tu día libre’.
—¿Trabajas aquí?
El rostro de Brewer se sonroja de un rojo brillante.
—¿Trabaja aquí? Micah es el mejor enfermero que tenemos. Deberías ver a este chico
54

controlar a un paciente intoxicado o calmar a un niño asustado. Él hace nuestro trabajo casi
Página

demasiado fácil —ella lo alaba, y su sonrojo se profundiza.

—Sólo estoy aquí porque este gran idiota accidentalmente me dejó inconsciente
mientras estábamos bromeando. Estoy muy seguro de que estoy bien, sólo una pequeña
mejilla magullada y un golpe en la cabeza —Brewer corta los elogios mientras se pone de pie
y le entrega su portapapeles.
 La enfermera frunce el cejo—. Será mejor que vengas conmigo para que pueda evaluar
si hay una conmoción cerebral.
Brewer la sigue, y me siento allí tratando de reconciliar todo lo que sé sobre Brewer con
el hombre que ella acaba de describir. El único Brewer que he visto es un chico que no toma
nada en serio. Un hombre que vuela de hombre en hombre en el club y rara vez se va solo a
su casa. El Brewer que conozco es un completo folla-chicos.
Entonces, ¿quién diablos es Micah? ¿Algún tipo de enfermero con una inclinación por
calmar a los pacientes? ¿Y por qué me importa tanto?
Treinta minutos después, Brewer regresa.
—¿Cuál es el veredicto? —pregunto.
—Una contusión cerebral menor, nada de lo que preocuparse. Y no hay huesos rotos,
sólo algunos moretones.
—Realmente lo siento, lo tenía bien planead, si sólo hubieras confiado en mí…
—Sí, bueno, no puedes culparme exactamente por no confiar en que no me pegues.
Un gruñido comienza en mi pecho, y sé que Brewer está a punto de llamarme oso pardo
de nuevo, pero no puedo evitarlo. Seguro, no puedo soportar su culo, pero nunca he sido una
persona violenta, y no me gusta que él me vea de esa manera.
—Como sea, sólo soy un gran matón que resuelve sus problemas con sus puños.
—Y yo sólo soy un folla chicos que no toma nada en serio —él me nivela con una mirada
que saca el oxígeno de mis pulmones.
—Probablemente sea más fácil si simplemente mantenemos nuestras percepciones de
los demás tal y como son.
—Funciona para mí, oso pardo.
—Y no te preocupes, no le diré a nadie que tienes un trabajo serio y qué realmente te
preocupas por algo, folla chicos.
Brewer asiente, y nos dirigimos a su auto con nuestra silenciosa comprensión colgando
entre nosotros.
55

De regreso al estudio para buscar mi moto, me doy cuenta de que si Brewer tiene una
Página

contusión cerebral, probablemente no debería estar conduciendo y tampoco quedarse solo

toda la noche.
—¿A dónde vamos? —pregunta Brewer cuando hago un giro a la izquierda.
—De vuelta a mi casa para que pueda vigilarte esta noche.
 —Estoy bien. Es una contusión menor —argumenta Brewer.
—Si mueres mientras duermes, eso quedará en mi conciencia por el resto de mi vida, y
eso es lo último que necesito. Tu molesto culo probablemente me cazaría.
—Mi culo no era molesto cuando me estabas follando la semana pasada.
—Es verdad. Pero cuando mi verga no está enterrada allí, tu culo es tan molesto como
el infierno —bromeo con el indicio de una sonrisa, sorprendiéndome a mí mismo antes de
volver a fijar mi habitual cejo fruncido.
Logro encontrar un lugar para estacionar su auto a pocas cuadras de mi
estacionamiento, y caminamos a mi departamento.
Mi estómago es un revoltijo de nervios con Brewer a mi espalda mientras abro la puerta.
Estoy tratando de imaginar como dejé mi departamento esta mañana antes de salir corriendo
para la grabación. ¿Dejé ropa interior sucia o mi fleshjack7 afuera hace algunos días? No es
como si alguna vez hubiera estado aquí con alguien, por lo que generalmente no me preocupo
demasiado por lo que dejo por ahí.
Sería particularmente embarazoso si él viera mi fleshjack, porque hace unos meses en la
exposición porno a la que fuimos en Nueva York, compré uno por capricho. Y resultó ser el
Fleshjack Sensación Brewer que supuestamente tiene la forma exacta de su agujero. Y ahora
que he tenido ambos, debo decir que hicieron un excelente trabajo con el diseño. Me
pregunto cómo lo hacen. Tal vez algún día tendré que preguntarle a Brewer como toman un
molde de un ano.
No estoy seguro de por qué compré el de Brewer; fue sólo el que tomé al azar por
curiosidad. No significaba nada.
—Hemos estado aquí parados por un tiempo realmente largo, sabes —señala Brewer.
Gruño en respuesta y abro la puerta. Hago un chequeo rápido del lugar en busca de
cualquier cosa vergonzosa a la vista y suspiro de alivio cuando no veo nada.
—Te preocupaba de que hubieras dejado juguetes sexuales o algo afuera, ¿cierto?
—No —miento.
Shaggy se levanta de donde está durmiendo sobre mi cama y escucho un ruido sordo
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en el suelo cuando se lanza afuera, chillando con entusiasmo mientras se dirige hacia
Página

nosotros.
—Oh, por Dios, ¿tienes un perro? —Brewer se agacha y le ofrece su mano a Shaggy.

7
Juguete sexual para masturbarse. Imita la forma y la sensación de tener un ano alrededor del pene.
 —Lo acabo de adoptar, por lo que todavía se está acostumbrando —le explico—. Su
nombre es Shaggy.
—Aw, es tan perfecto. Él es adorable —arrulla Brewer, dejándose caer sobre su culo y
dejando que Shaggy se suba a su regazo. Se ríe mientras Shaggy lame su rostro con
entusiasmo durante unos minutos. Luego, Shaggy decide que debe ser momento de comer,
porque se levanta del regazo de Brewer y se apresura a ir hacia su tazón de comida en la
cocina.
Brewer se levanta y sacude sus pantalones, aún sonriéndole a Shaggy.
—No es gran cosa, los juguetes sexuales, quiero decir. Si te llevara a mi casa, verías mi
columpio sexual cuando abriera la puerta y no me sentiría avergonzado.
—Tú tendrías un columpio sexual —gruño.
—¿Qué significa eso?
—¿No sabes que siempre estás follando un montón? —desafío
—¿Y qué? Estoy soltero, no le debo nadie no divertirme. Tal vez deberías follar más. Tal
vez entonces no serías un pendejo tan miserable.
—Vete al carajo.
—¿Por qué me odias tanto? —pregunta Brewer en tono burlón.
—Porque no te tomas nada en serio. La vida es como una maldita broma para ti —digo
con dientes apretados.
—No —discute Brewer con la más furiosa sonrisa en su rostro—. Creo que es por eso que
quieres odiarme. Pero, no es por eso por lo que realmente me odias.
—¿Ah, si? —camino hacia él, acercando a Brewer a la pared y encerrándolo con mi
cuerpo—. ¿Por qué no me iluminas entonces, pensejo? ¿Por qué te odio?
Brewer me mira fijamente a los ojos, irguiéndose para internar igualar mi altura. Mi
cuerpo vibra con una mezcla de ira y algo más cuando se inclina hacia mí. Su respiración me
hace cosquillas en el cuello y la oreja, pero me niego a mostrar alguna reacción, incluso si mi
verga está dura como el acero en mis pantalones.
57

—Me odias porque me deseas, y eso te está volviendo loco —susurra Brewer en un tono
Página

provocador. Sus manos descansando en mis caderas, convirtiendo el intento de un gesto

intimidante en algo íntimo. Me hace hervir la sangre.
—Te he tenido, casanova —señalo, imitando su tono—. ¿O ya olvidaste como llené tu
garganta hasta que no podías respirar? Sé que recuerdas la forma en que te rompí el culo en
dos la semana pasada —agarro su culo con la palma de mi mano y arrastro su cuerpo contra
el mío.
Brewer se ríe entre dientes, y es tan jodidamente condescendiente que podría darle un
puñetazo.
—Muchos hombres han tenido sus vergas dentro de mí, aunque concedo que la tuya es
malditamente impresionante. Pero eso no significa que ninguno de ellos me haya tenido.
—Semántica —resoplo.
—No, no lo es. Estás molesto porque quieres reclamarme, poseerme, llevarme a tu cueva
y llamarme sólo tuyo.
Mi mandíbula está apretada contra las emociones rabiando dentro de mí por sus
palabras.
—Eres un imbécil arrogante, ¿lo sabes? —gruño antes de enredar mis dedos en su cabello
y arrastrarlo hacia mí. Estrello mis labios contra los suyos, lo suficientemente fuerte como
para dejar moretones.
Brewer jadea contra mis labios, y aprovecho la oportunidad para empujar mi lengua
dentro de su boca. Su húmeda lengua se desliza contra la mía dentro de su caliente boca.
Arrastro mi mano de su cabello y sobre su rostro cuando él hace una mueca y se aparta.
—Oh, mierda —murmuro cuando recuerdo la hinchada mejilla de Brewer—. Lo siento,
ese fue un movimiento estúpido.
—Wow, no sabía que eras capaz de ser tan consciente de ti mismo. Tal vez puedas ser
cuidadoso después de todo.
—Realmente no hay una manera de callarte, ¿no?
Brewer sonríe y se desliza bajo mi brazo para escapar de mi agarre. Se pasea por mi
departamento como si fuera el dueño del lugar, recogiendo y tocando todo lo que está a la
vista. Cuando llega a mi tocador con mis modelos de Lego, me apresuro hacia él.
—No toques esos, por favor.
Él atrae su mano hacia atrás en disculpa.
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—Voy a preparar el sofá para ti, ¿de acuerdo?

Página

—Sí —Brewer acepta—. ¿Podemos ver una película o algo así?

Eso me saca de onda. Nunca imaginé pasar el rato con Brewer en mi departamento como
amigos—. Seguro, lo que sea.
—Buen oso pardo.
 Frunzo el cejo, y Brewer se ríe entre dientes antes de que nos acomodemos en el sofá
para escoger una película.
—Sabes, estaba pensando que ahora que sabes mi nombre real, es justo que yo sepa el
tuyo.
Miro de reojo a Brewer. Diciéndome que mi nombre real se siente como darle algo para
usar en contra de para mí. Pero tampoco creo que lo deje pasar a menos que se lo diga—. Es
Peter.
—¿Peter? ¿Cómo un pene? —se ríe entre dientes.
—Jódete.
—Ooh, qué malhumorado Peter —se burla Brewer. Gruño, y él se ríe más fuerte—. Lo
siento, pararé. Es un lindo nombre, simplemente no lo esperaba. Tank te queda bien. ¿Peter?
No tanto.
—Sí —concuerdo.
Shaggy se levanta de un salto y se sienta sobre el regazo de Brewer. Traidor.
Abro mi cuenta Prime y me arrepiento de inmediato cuando mi lista de recomendaciones
aparece primero.
—¿Tu mamá tiene acceso a tu cuenta de Prime o algo así?
Siento mi rostro calentándose con la pregunta de Brewer—. Eh, no —murmuro—. Me
gustan las películas clásicas.
—¿De verdad? Eso es genial. No creo haber visto muchas de estas —dice Brewer,
robándome el control remoto y hojeando mi lista.
—¿Nunca has visto Casablanca?
—No. Por lo general me gustan las películas donde mierdas explotan.
—Claro que sí.
—¿Vamos a hacer esto de nuevo? —desafía Brewer—. Escoge una película, amplia mis
horizontes.
59

Hago clic en una película de Hitchcok en mi lista y me recuesto, con cuidado de dejar
Página

unos centímetros de espacio entre Brewer y yo.

 BREWER
Cuando me levanto a la mañana siguiente, me toma unos segundos recordar dónde estoy.
Cierto. El departamento de Tank. O debería decir, el departamento de Peter. Dios, eso suena
mal de diez maneras diferentes. Ese nombre no le queda para nada.
Él de hecho me dejó dormir en su cama, diciendo que su sofá estaba lleno de bultos y
que yo necesitaba dormir. Tengo que admitir que dormí bien, probablemente mejor de lo que
lo hice hace algunas semanas. No es fácil dormir lo suficiente entre dos trabajos y clases.
Además, la cama de Tank era súper cómoda, e incluso la arregló con sábanas limpias que olían
a lavanda. Me apagué como una luz tan pronto como mi rostro adolorido tocó la almohada.
Recuerdo vagamente que Tank me despertó dos veces para preguntarme algo estúpido.
Supongo que prestó atención cuando le expliqué el protocolo que tenía que seguir ante la
contusión cerebral. Sé que respondí y luego volví a dormirme.
Mi rostro duele y también mi cabeza, así que probablemente debería tomar otro
analgésico. No es como si fuera a trabajar hoy. La grabación de ayer fue un fracaso,
obviamente, así que tenemos que reprogramar eso, y esta mañana tengo clases que tendré
que perder. No hay modo de que esté lo suficientemente bien como para conducir todavía.
Maggie, la enfermera de la sala de emergencias, ya contactó al supervisor de horarios para
informarle que no iré a mi turno de noche, por lo que todas las bases están cubiertas.
Me arrastro fuera de la cama, gimiendo suavemente cuando una ola de nauseabundo
dolor me golpea tan pronto como estoy en vertical. Maldita sea, Tank me golpeó fuerte.
Pendejo. Mierda, el dolor es incluso mayor que mi erección matutina habitual, lo que
demuestra una vez más que puede que me guste una buena follada ruda y algo de cabello
siendo jalado, pero el dolor en general no me excita.
Después de enjuagarme—haciendo una cara cuando veo mi mejilla morada en el espejo
60
mientras me lavo las manos—con cuidado me pongo algo de ropa y camino a la sala de estar
donde está Tank sentado en una mesa de comedor, sosteniendo una taza de café y leyendo
Página

algo en su laptop.
—Buenos días —gruño.
Tank de inmediato levanta la vista—. ¿Cómo te sientes?
 —¿Va a aplicar para un trabajo en mi hospital?
Sus ojos se estrechan—. Estaba preocupado, folla chicos, pero veo que eres tú mismo
de nuevo.
Suspiro—-. En realidad, duele.
Se levanta lentamente, luego para mi sorpresa, agarra mi barbilla y gira un poco mi
cabeza para estudiar mi mejilla—. Se ve doloroso. Realmente te golpeé fuerte.
Hay algo en su voz que no puedo ubicar—. Lo hiciste.
—Lo siento.
Eso es tan inesperado que no tengo palabras.
Él suelta mi rostro y mete sus manos en los bolsillos de sus jeans—. No debería heberle
dicho a Rebel que podía hacer esto. Debería haber sabido que te agacharías.
—¿Tú no lo harías? —respondo, pensado que todavía me está culpando.
Se encoge muy ligeramente—. Eso es lo que estoy diciendo. No tenemos el nivel de
confianza requerido para hacer esto.
—Oh —levantó la cabeza, haciendo una mueca cuando el dolor pasa por mi cabeza.
Espero que los analgésicos hagan efecto rápidamente, porque un día entero de esto no es
divertido.
Tank suspira—. Te haré algo de desayunar.
—Estoy bien con cualquier barra de granola que tengas por ahí.
Sacude su cabeza—. Esos analgésicos son un infierno con el estómago vacío. Te haré
algo de comida real.
Él no espera mi respuesta para entrar en su cocina. ¿De verdad se estaba disculpando?
No vi venir eso. Tiene que ser un ataque de culpa temporal, inspirado por mis moretones.
Me tumbo en una silla de su comedor, olfateando cuando un delicioso aroma sale de la
cocina. Tocino. Joder, eso huele bien. Por lo general no soy una persona de desayuno, pero no
voy a decir que no a eso. Aparentemente, Tank es hábil en la cocina. Otra cosa inesperada
61
acerca de él.
Página

Miro alrededor de su departamento otra vez. Es más grande que el mío con una sala de
estar, una cocina semi-abierta, dos habitaciones e incluso dos baños. Esto último es algo por
lo que mataría, considerando que a mi compañero de habitación le gusta acaparar la ducha.
He salido corriendo por la puerta más de una vez porque el mamón no se molestó en
apresurarse para que yo también pudiera hacer mi rutina de aseo por la mañana. Pero
teniendo en cuenta que es su departamento y que yo simplemente estoy rentando una
habitación, no hay mucho que pueda hacer.
Tank entra con dos platos humeantes y coloca uno sobre la mesa frente a mi. Él hizo
tocino crujiente, huevos revueltos y pan tostado. No cualquier pan tostado, sino un pan
tostado marrón dorado perfectamente cortado en cuatro triángulos—. Gracias —digo por
costumbre.
Comemos nuestro desayuno en silencio. La comida está deliciosa y me alegra ver que
los analgésicos están surtiendo efecto, adormeciendo las punzadas de dolor cada vez que
mastico.
—Voy a tomar una ducha —digo—. Y después de eso, puedes llevarme a casa.
—¿Puedo? —dice Tank, su voz llena de sarcasmo.
—¿Qué, quieres que te diga por favor y gracias?
—Los modales nunca fueron tu punto fuerte, así que no es como si estuviera esperando
algo más de ti.
Es un cabrón amargado, pienso por décima vez mientras estoy en la ducha. Cada vez
que me doy cuenta que, debajo de ese exterior gruñón, él no es tan malo, dice algo reprobador
como la mierda otra vez y me recuerda que sí, él realmente es un imbécil.
Me pregunto por qué me molesta tanto. Me encuentro con personas críticas todo el
tiempo, pero rara vez me llegan. Más aún, soy el tipo de persona que rara vez tiene un
problema con otras personas. Puede que no tenga un montón de amigos cercanos, lo que
probablemente se deba a mi poca disponibilidad de tiempo entre mis dos trabajos y mis clases,
pero tengo pocos enemigos.
Paul, mi compañero de habitación y yo no somos exactamente amigos, por ejemplo,
pero no me odia. Nos molestamos entre nosotros porque tenemos puntos de vista opuestos
sobre pequeños detalles, como por ejemplo, la higiene. Se ofendió cuando me negué a comer
sopa que había dejado sobre el mostrador durante dos días, incluso después de explicarle que
la sopa es el ambiente ideal para que las bacterias crezcan. Hemos tenido diferencias similares
en la limpieza de la cocina y el baño. Pero es sólo eso, molestia.
Ahora que lo pienso, Tank es la única persona que puedo pensar que realmente me odia.
62

Y tengo que decir, el sentimiento es mutuo. ¿Qué hay con él que me frota de la manera
Página

incorrecta? ¿Por qué es que puedo deshacerme fácilmente de la desaprobación de otras

personas, pero no de él? Sus señalamientos, por alguna razón. Las únicas personas que tienen
un efecto similar en mí son…
Cuando me golpea, casi meto un dedo jabonoso en mi ojo. No puedo creer que nunca
me haya dado cuenta antes. Tank me hace sentir igual que mi madre. Esa constante sensación
de ser juzgado, de desaprobación, de culpa que ella provoca en mí, él tiene el mismo efecto
en mí.
Culpa por ser feliz.
Culpa por divertirme.
Culpa por disfrutar la vida.
Culpa por estar vivo.
Eso es; por eso no puedo soportar estar cerca de Tank. Él constantemente me hace
sentir que debería disculparme por lo que soy. Mis padres me dan suficiente de eso, es la
razón por la que permanezco tan lejos de ellos como puedo. Razón de más para hacer
exactamente lo mismo con él. Follaremos nuestros camino a través de esas nueve grabaciones
extras y eso es todo.

63
Página
 TANK
Los platos del desayuno están en la rejilla del lavaplatos y estoy limpiando la barra, ignorando
lo incómodamente excitada que está mi verga con Brewer desnudo en mi departamento
ahora mismo. El sonido de la ducha corriendo está distrayéndome.
Mi teléfono vibra ruidosamente contra la mesa. Frunzo el cejo mientras lo alcanzo. Nadie
me llama nunca. A veces Rebel, supongo, pero la mayoría son mensajes. Y hablé con mamá
recientemente, por lo que ella no volverá a llamar durante al menos un mes con otra ronda de
viajes de culpa. Cuando lo recojo, una linda foto de Pixie está iluminando la pantalla.
—Hola, nene, ¿qué pasa? —respondo.
—Necesito un favor.
—¿El tipo de favor que me va a llevar a la cárcel o simplemente me meterá en problemas
con Bear?
Pixie suelta una risita en el otro extremo del teléfono y el sonido calienta un poco mi frío
corazón. Es imposible no amar al chico, lo juro.
—Ninguna de las dos —me asegura—. En realidad, es un favor para aliviar la mente de
Bear y aún así permitirme vivir un poco, afuera en el mundo y todo.
Gruño, dándome cuenta de que esto debe tener algo que ver con un evento o una
grabación que Pixie quiere hacer. Ese fotógrafo pendejo del asunto de los suspensorios tiene
suerte de que yo no estuviera allí cuando tenía sus manos sobre Pixie y Campy. Él habría
terminado esa tarde en el hospital si lo hubiera atrapado.
—¿Qué necesitas, Pix? —le digo, dándome cuenta de que el sonido de disgusto lo hizo
callarse.
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—¿Conoces el club Vibe? Querían pagarme por una aparición este fin de semana. Todo
lo que tengo que hacer es aparecer, firmar algunos autógrafos y pasar un buen rato. Es dinero
Página

fácil y gran publicidad.

—¿Y Bear no te deja?
—Él dijo que no es seguro que vaya solo y qué hay hombres por allí que les encantaría
aprovecharse de mí —dice Pixie con un pequeño temblor en su voz, seguido de un sorbo.
 —Oh, hombre, no llores, bebé —le ruego.
—¿Ese es Pixie? —pregunta Brewer, entrando en la cocina con el cabello colgando en una
maraña húmeda de la ducha—. ¿Por qué está llorando? —exige, alcanzando el teléfono sin
darme la oportunidad de responder.
—Pixie, es Brewer. ¿Qué pasa?
Mientras Pixie le explica todo de nuevo a Brewer, dejo que mis ojos vaguen sobre le
moretón alrededor de su ojo, y me siento como un completo pendejo otra vez. Tristemente,
darle un puñetazo a Brewer en el rostro no fue tan satisfactorio como siempre imaginé que
sería.
—Por supuesto, Tank irá contigo y te mantendrá a salvo —le asegura Brewer.
Levanto mis cejas y cruzo mis brazos sobre mi pecho—. Lo haré, ¿en serio?
—Sí, lo harás —Brewer me mira con lo que estoy seguro que se supone es una mirada
amenazadora, y tengo que morderme el interior de mi mejilla para no reírme.
Extiendo mi mano para que me devuelva el teléfono otra vez, y Brewer me lo entrega.
—¿Cuándo es esto, y que tan tarde voy a tener que cuidar de tu lindo culo?
—Es el sábado, y prometo que no será mucho tiempo, a más tardar a la una.
Resoplo una risa. Debo estar envejeciendo demasiado si los niños piensan que la una de
la mañana no es tarde estos días. Aunque, para ser justos, recuerdo mi parte considerable de
todas las noches en los clubes cuando me mudé a LA por primera vez. Sin embargo, superé
eso bastante rápido cuando me di cuenta de lo costoso que era y de lo mucho que apestaba
trabajar en la construcción con resaca.
—Lo tienes. Dile a Bear que te vigilaré para que se relaje.
Es el turno de Pixie de reírse en el otro extremo del teléfono—. No sé porqué está tenso
sobre todo lo que tiene que ver conmigo. Campy también fue manoseado, y Bear no lo está
tratando como la porcelana fina de la abuela.
Sí, voy a seguir adelante y asumir que eso es retórico, porque no voy a tocar eso—. Te
veré el sábado.
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—Gracias de nuevo, Tank. Te debo una.

Página

—Gracias por el desayuno. Será mejor que me vaya. Tengo muchas cosas que hacer hoy
—dice Brewer en cuanto cuelgo el teléfono con Pixie.
No estoy seguro de por qué hay una extraña punzada en mi pecho cuando Brewer se
dirige a la puerta rápidamente.
 —Oh, sí, por supuesto. Nos vemos más tarde —hago un gesto casual cuando camina
hacia la puerta sin mirar atrás.
Bufo con irritación y me giro para limpiar la cocina. Es tan fácil para él simplemente
despedirme así, ¿verdad? Él no es diferente a cualquier otro chico bonito que haya conocido
en mi vida. Presuntuoso, lleno de sí mismo. ¿Cree que es demasiado bueno para mi? Bueno,
qué se joda. En todo caso, yo soy demasiado bueno para él.
Aprieto mis dientes mientras la familiar sensación de rechazo me recorre. Soy lo
suficientemente bueno como para follar por un cheque de pago, pero no lo suficiente como
darme un segundo pensamiento una vez que las luces y las cámaras se apagan. Nada nuevo
allí. Cada ex que he tenido se ha sentido de la misma manera. Fui lo suficientemente bueno
como para presumir y ser visto como una follada novedosa, pero nunca para nada más.
Esa es la vida, y es hora de deshacerse de la mierda melancólica, la auto compasión y
seguir con mi día.

El sábado por la noche, estoy parado afuera del departamento de Pixie, esperando que
baje para poder salir a esta aparición por la que está tan emocionado. Estacioné mi moto a la
vuelta de la esquina, y ahora me pregunto si sería mejor un Uber para ir a Vibe en lugar de
poner a Pixie en la parte trasera de mi moto. Si algo nos sucediera, sé que Bear literalmente
me despejellaría vivo.
Me llevó a su oficina ayer por la tarde para asegurarse de que entendiera cuán en serio
él esperaba que tomara el deber de cuidar a Pixie esta noche—. Si atrapas a un solo pendejo
ponerle una mano no deseada sobre él, espero que le rompas los dedos. ¿Estamos claros?
Me rio por lo bajo ante el recuerdo de sus palabras y la intensidad en sus ojos. Está tan
obsesionado con este niño, que en realidad es un poco conmovedor.
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—Hey, Tank —dice Pixie mientras sale volando del edificio. Lo miro de arriba abajo y
suspiro interiormente. No va a hacer fácil mi tarea esta noche con un par de apretados jeans
Página

de corte bajo, y una camiseta sin mangas con lentejuelas que muestra una gran cantidad de
piel. Es obvio que no lleva ropa interior.
 —¿Usas cera, o eres naturalmente así de lampiño? —le pregunto. Literalmente, no hay
nada de pelo en todo el cuerpo del chico. Obviamente, él se depila con cera sus bolas, pero,
¿cómo es posible que alguien sea tan suave por todos lados?
—Sólo uso cera en mis vellos púbicos, el resto es todo natural. Sólo tengo que afeitar mi
rostro una vez al mes —se encoge de hombros—. No todos tenemos la suerte de ser grandes
peludos osos pardos.
—Ugh, no dejes que el apodo tonto que Brewer tiene para mí se te enganche. Sé que
eres lindo y te sales con la tuya con lo que sea que quieras, pero voy a pintar una línea dura
con esto.
Pixie saca su labio inferior en un puchero exagerado. Sacudo mi cabeza y me río entre
dientes.
—¿Pediste un Uber? —pregunta.
—No, pensé que tomaríamos mi moto, ¿si estás de acuerdo con eso?
Él se ilumina, saltando sobre los dedos de sus pies y aplaudiendo con sus manos.
—Oh, muy divertido. Pero, no le digas a Bear que me llevaste en ella. Nunca me dejaría
montar una motocicleta.
Levanto una ceja ante esa afirmación, preguntándome de nuevo si hay algo más entre
esos dos que sólo un doloroso anhelo en ambos extremos.
—No le diré. A mí sería a quien le morderían el culo por llevarte si él lo descubriera.
Pixie suelta una risita, pero no discute mi evaluación.
Lo llevo a la esquina y hacia la cuadra donde me estacioné, mientras habla de lo
emocionado que está acerca de esta noche y de la escena que hizo hace unos días con Heart.
No puedo evitar sonreír ante su entusiasmo contagioso sobre casi todo. Vemos a alguien
paseando a un perro y él suelta un aww, y se lanza a una historia acerca de un perro callejero
que solía alimentar en su casa. Luego le cuento sobre Shaggy y exige ver las fotos en mi
teléfono.
Cuando llegamos a mi motocicleta, le doy mi casco de repuesto, y luego subo mi pierna
y espero a que haga lo mismo. Sus delgados brazos se envuelven alrededor de mi cintura y se
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acomoda contra mi espalda.

Página

—Sostente fuerte, niño.

Deja escapar un pequeño chillido emocionado mientras la moto se lanza hacia adelante.
Para cuando llegamos a Vibe, hay una línea a la vuelta de la esquina y un gran cartel
anunciando la aparición de Pixie esta noche. Nos encontramos con porras y silbidos mientras
nos acercamos a la puerta, y Pixie brilla bajo la atención. Unos cuantos chicos también gritan
mi nombre, y ofrezco saludos y asentimientos.
—Esto es genial —susurra Pixie, agarrando mi brazo.
El portero nos hace pasar y nos reunimos con el gerente del club que nos muestra hacia
dónde ir. Han colocado a Pixie en la sección VIP, donde podrá firmar autógrafos, y luego podrá
mezclarse, bailar, invitar personas a unirse a él en VIP, cualquier cosa que quiera hacer por la
noche, siempre y cuando parezca que se lo está pasando bien y tome muchas fotos para
publicar en Instagram y Twitter.
Me paro a un lado para poder vigilar a todos los hombres y mujeres que se acercan a
pedir autógrafos. Unos pocos intentan ponerse un poco tocones, pero un gruñido bajo y una
mirada afilada los pone en su lugar. Pierdo la cuenta de cuantos hombres traen una bebida
para Pixie. Trago tras trago hace que se tambalee un poco después de aproximadamente una
hora.
—Es posible que quieras reducir la velocidad un poco —sugiero cuando se levanta para
bailar y tropieza con sus propios pies. Lo atrapo sin problemas, pero lo último que necesita es
caerse en la concurrida pista de baile.
—Estoy bien, sólo algo torpe —me desestima, y lo observo desde la distancia mientras
baila y acepta más bebidas.
Un hombre más grande que parece tener más de cuarenta años se acerca a Pixie y
comienza a bailar cerca. Pixie lo nota y se mueva más cerca, frotándose contra él y susurrando
algo en su oído con una sonrisa coqueta en sus labios.
Ya que Pixie parece interesado, sólo observo un rato para asegurarme de que el chico no
se ponga demasiado cariñoso con él. No estoy seguro de cuál es mi directiva si Pixie decide
que quiere irse a casa con este sujeto. Técnicamente él es un adulto, y puede irse a casa con
quien quiera. De alguna manera, dudo que Bear esté de acuerdo con esa excusa si fuera a
descubrir que dejé a Pixie irse a casa con un extraño.
Afortunadamente, eventualmente se alejan, Pixie sacude su cabeza y le da una mirada
de disculpa. Se tambalea hasta donde estoy esperando en la sala VIP, claramente al menos
cuatro hojas al viento. Me da una señal para que me agache cuando me alcanza.
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—No me siento muy bien —dice en una voz tan baja que casi no puedo escuchar sobre
la música, a pesar de que esta hablando directamente en mi oído.
Página

—Ya lo sospechaba. Vamos a llevarte a casa antes de que comiences a vomitar.

Pixie gime y asiente.
 Para cuando salimos, es obvio que no está en condiciones de sostenerse a la parte
trasera de mi moto. Pero no quiero dejarla aquí para que alguien se la robe. No puedo
permitirme exactamente otro juego de ruedas. Bueno, puedo, pero no quiero.
Después de algunos minutos de deliberación, decido morder la bala y llamar a Brewer.
—¿Hola? —responde al segundo timbre, sonando distraído y cansado.
—Hey, ¿estás trabajando o algo en este momento?
—Mmm, no. ¿Por qué?
—Pixie está borracho y desafortunadamente, lo llevé al club en mi moto, así que necesito
otra forma de llevarlo a casa para no dejar mi moto aquí. ¿Podrias venir a recogerlo y llevarlo
a casa?
—Oh, seguro. Puedo estar allí en media hora. ¿Estarás bien esperando con él hasta
entonces? —pregunta Brewer.
—No hay problema.

—Jesús, no estabas bromeando —dice Brewer mientras dispongo a un dormido Pixie en

el asiento trasero de su auto—. No creo que deba estar así solo. Lo llevaré de vuelta a mi casa.
—Iba a quedarme con él en su casa esta noche. Imaginé que querría tener su propia
cama, y podría dormirme en su sofá y cuidar de él cuando comience a vomitar los galones de
alcohol que ha consumido esta noche.
Brewer duda por un segundo antes de asentir.
Cuando regresamos al departamento de Pixie, saco sus llaves de su bolsillo y luego lo
levanto para llevarlo arriba.
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—¿Te importaría adelantarte para abrir la puerta por mi? —le pregunto a Brewer.
Página

—Oh, sí, por supuesto.

Afortunadamente, Pixie pesa menos que nada, por lo que el viaje desde donde nos
encontramos estacionándonos hasta su departamento no podría incluso considerarse un
ejercicio menor.
 —¿Estás seguro de que puedes manejarlo solo? —pregunta Brewer una vez que tiene
abierta la puerta del departamento de Pixie.
—Si quieres quedarte, quédate —me encojo de hombros. Sé que Brewer tiene una
debilidad por el pequeño diablillo, así que no me sorprende que quiera quedarse y asegurarse
de que esté bien.
—¿Crees que deberíamos ponerle una pijama o algo así? —me pregunta Brewer cuando
pongo a Pixie sobre su cama.
—¿Es eso extraño?
Brewer se encoge de hombros—. No es como si no lo hubiéramos visto desnudo, y no
vamos a tocarlo ni nada, sólo vamos ponerle ropa más cómoda.
—Supongo que eso debería estar bien.
Con los dos trabajando, sólo toma un minuto o dos cambiar a Pixie a un pantalón de
pijama rosa que tenía en su vestidor. Decidimos dejar la camiseta sin mangas y dejarlo así.
Una vez que está acostado con un cubo junto a su cama, Brewer y yo nos dirigimos a
la sala de estar.
—Buen trabajo cuidándolo esta noche —dice Brewer con sarcasmo.
—No dejé que nadie lo tocara; ese era mi trabajo, no impedir que un adulto bebiera
demasiado.
—Tu trabajo era asegurarte de que llegara a casa en una sola pieza —cuenta Brewer.
—¿Quieres entrar allí y contar todos sus apéndices? Él está en una sola pieza. Mañana
tendrá resaca, gran cosa.
—¿Por qué no le dices a Bear que no es gran cosa? —desafía.
—No peleen —dice una suave voz. Brewer y yo giramos nuestras cabezas para ver a Pixie
de pie en la puerta de su habitación, ahora sin camisa.
—No estabamos peleando, bebé —le asegura Brewer, apresurándose a llevarlo de vuelta
a la cama.
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—Lo estaban —argumenta Pixie—. Tank cuidó de mí, simplemente soy malo cuidándome
a mí mismo.
Página

—Eso está bien, para eso estamos aquí —dice Brewer, pasando sus manos a través del
cabello de Pixie.
—Pero yo quiero a Bear —Pixie empieza a llorar.
 —Oh, bebé—
Antes de que Pixie pueda terminar lo que estaba por decir, Pixie se pone una mano en la
boca y corre hacia el baño. Las arcadas suenan desde el baño, y después de unos minutos, el
lavamos se abre y Pixie vuelve a salir.
—¿Puedes venir a dormir conmigo? —pregunta a nadie en particular.
Brewer y yo compartimos una mirada.
—Iré a acostarme contigo —le asegura Brewer mientras Pixie entierra su rostro en el
cuello de Brewer y comienza a llorar.
Ahora sabemos que Pixie es un ebrio triste.
—Estaré en el sofá si me necesitan —grito, y Brewer onde una mano para hacerme saber
que me escuchó.
Me instalo en el sofá con un suspiro. Creo que es bueno que Brewer se haya quedado,
porque no soy bueno con las lágrimas y él parece saber lo que está haciendo. Al menos parece
que Brewer tiene una buena cualidad aparte de su culo sexy.

71
Página
 BREWER
Miro mi reloj. Maldición, llego tarde a clase. ¿Tal vez porque, subconscientemente, estoy
temiendo que toda esta clase de Literatura Inglesa sea obligatoria? No tengo idea de cómo
eso me ayudará a alcanzar mi meta profesional. Además, no es que tenga mucho tiempo para
leer. Con los primeros pagos adicionales de mi contrato con Tank, he podido tomar más
clases. Es locamente ocupado, pero estoy emocionado de finalmente lograr un sólido
progreso hacia mi objetivo.
Rápidamente tiro un libro de estudio en mi mochila, reviso si tengo mis llaves y cierro la
puerta de mi departamento. En un buen día, es un viaje de veinte minutos al campus. Tengo
diecisiete minutos. Murmurando, corro hacia mi auto y conduzco tan rápido como puedo sin
romper ningún límite de velocidad. Ya tengo algunos puntos en mi contra y no puedo perder
mi licencia.
Parece que los dioses del tráfico están en un estado de ánimo benevolente, porque todas
las luces son verdes, no hay accidentes, y al parecer la mitad de LA decidió quedarse en casa
hoy. Llego al edifico correcto con un minuto de sobra y me lanzo a la sala de conferencias
indicada, donde me encuentro directamente con una espalda ancha demasiado familiar.
Tank se da la vuelta, y sus ojos se agrandan cuando me ve.
—¿Qué demonios estás haciendo aquí?
Decimos al mismo tiempo, y hace que algunas personas que nos rodeen nos miren
fijamente.
—Si los dos caballeros en la parte trasera encuentran un asiento, podemos empezar —
dice la profesora. Tank y yo nos miramos el uno al otro por otro segundo, antes de que sé
voltee y encuentre un lugar en un asiento vacío. Ni siquiera lo pienso, me siento justo a su
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lado.
Página

¿Qué coño está haciendo Tank aquí? No tenía idea de que estaba asistiendo a la
universidad, pero apuesto a que él está pensando lo mismo de mí. ¿En que podría estar
especializándose?
—Bienvenidos a la clase de Literatura Inglesa Moderna, también conocida como esa
clase obligatoria que esta universidad hace que todos los estudiantes tomen, sin importar su
especialización. La mala noticia es que, sí, se requiere la lectura de lo que ustedes considerarán
libros extremadamente aburridos. La buena noticia es que si este curso es puramente un
obstáculo que deben tomar para alcanzar objetivos más elevados y desafiantes, lo haré tan
indoloro como sea posible.
Mi atención está completamente enfocada en la mujer de cincuenta y tantos, de
aspecto afilado que está enseñando esta clase. Ya me gusta. Quiero decir, vamos, me tuvo
con lo de extremadamente aburrido.
—Hoy, en esta primera clase, les pediré que se registren en esta clase como una de las
dos categorías. Voluntariamente significa que habrían elegido este curso si no hubiera sido
necesario, y realmente están interesado en aprender más sobre la Literatura Inglesa.
Registrarse como tal significará que tendrán que hacer la tarea de forma individual, pero
también significa que su calificación aprobatoria los llevará al siguiente nivel en el curso de
Literatura Inglesa.
Eso no me suena como una opción atractiva, así que espero que lo que venga a
continuación sea mejor.
—Sin embargo, también pueden registrarse como requisito. Eso significa que se les
permitirá hacer la tarea con otra persona, lo que les permitirá distribuir la carga de trabajo.
Pero también significa que no se les permitirá ingresar al curso de siguiente nivel. Aun as
obtendrán una calificación aprobatoria, siempre que sus asignaciones al menos sean
satisfactorias, pero tendrán que volver a hacer el curso individualmente si deciden pasar al
curso del siguiente nivel.
Aleluya. En serio, que alguien le dé a esta profesora un bono grande y gordo. Finalmente,
alguien que comprende a los estudiantes y no sufre por la ilusión de que todos estén
igualmente fascinados por su tema como lo está ella.
Miro a Tank sin ser demasiado obvio al respecto, y él asiente sutilmente ante las palabras
de la profesora, un indicio de sonrisa jugando en sus llenos labios. Entonces supongo que
tampoco está haciendo esta clase por diversión.
Ahora, todo lo que necesito es a un compañero con quién hacer la tarea… y luego me
golpea. Mi cabeza gira completamente hacia un lado al mismo tiempo que la de Tank.
Oh, diablos, no. Esto es demasiado loco para siquiera considerarlo.
73

Pero haría las cosas más fáciles. No conozco a ninguno de los otros estudiantes, aparte
Página

de un rápido saludo entre clases. Y con mi agenda, será una complicada locura reunirme con
alguien. De todos modos, tengo mierda programada con Tank, ¿así que tal vez podríamos
combinarlo?
 Levanta su barbilla y arquea sus cejas en una pregunta silenciosa. Mi corazón late con
fuerza, y luego asiento. Compañero de Tank en una clase de Literatura Inglesa. ¿Qué infiernos
acaba de suceder?
Trato de concentrarme en la profesora mientras explica la tarea, pero mi mente sigue
divagando el concepto de que Tank asiste a la misma universidad que yo. ¿Rebel o Bear de
alguna manera le dijeron que hiciera esto? No, eso no tiene sentido. En primer lugar, ellos ni
siquiera saben que voy aquí, y además, Tank se sorprendió genuinamente al verme. No
esperaba toparse conmigo más de lo que yo esperaba hacerlo con él.
Eso significa que es un verdadero estudiante aquí, lo que plantea la pregunta sobre en
qué se está especializando. El hecho de que todavía esté tomando esta clase significa que
recién está empezando, como yo. Entonces, ¿qué elegiría?
Tiene que ser algo más o menos práctico. Él no es del tipo para nada teórico o
especulativo. Ninguna psicología para él, ni filosofía o alguna mierda. No, le gusta usar sus
manos, hacer o diseñar algo en concreto. Ingeniería, ¿tal vez?
Entonces recuerdo las construcciones de Lego que vi en su casa. Esa torre en Dubai de
la cual no puedo recordar el nombre. Y de repente es muy claro. Arquitecto. Él quiere ser un
arquitecto.
No sé por qué eso me hace sentir cálido y confuso por dentro, pero lo hace. Le queda
bien, y de alguna manera me hace extrañamente feliz que tampoco él esté contento con sólo
hacer porno.
Me pregunto cuál piensa que es mi especialidad. Probablemente nunca lo adivine. Nadie
lo hace nunca. Nadie me ha mirado nunca y dicho: Ese chico está destinado a ser un doctor.
Ni siquiera mis propios padres. Especialmente no mis padres. Todo lo que piensan cuando me
ven es Dean.
Recuerdo haber visto las películas de Harry Potter hace años. Está esta cosa con la que
se refieren a Harry: El niño que vivió. Así es como me siento cuando estoy con mis padres. El
niño que vivió. Eso es todo lo que soy para ellos, y todo lo que siempre seré. Soy el afortunado,
él que sobrevivió, el que no tiene el defecto cardíaco. Soy el niño que vivió, pero en sus ojos,
podría bien estar muerto. Todo lo que soy para ellos es la sombra de Dean.
Así que no estoy haciendo esto por ellos. Dejé de intentar que me vieran hace mucho
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tiempo. No, esto es por mí. Y tal vez un poco por Dean, quién nunca tuvo la oportunidad de
Página

vivir. Él sigue siendo parte de mí, mi hermano gemelo.

Lo observo por el rabillo de mi ojo mientras Tank hace notas detalladas con una letra tan
ordenada y regular que parece impreso. Por lo general, también escribo como loco, aunque
es bastante menos ilegible, pero por ahora confío en él para que cumpla con los requisitos de
nuestra asignación mutua.
 Tan pronto como muestra clase termina, Tank me lanza una mirada oscura—.
Necesitamos hablar.
Encontramos un lugar en la parte trasera de una cafetería en el campus, yo con un té
con miel y Tank con un café con diez aditivos impronunciables que parece sorprendente
femenino para un tipo como él.
—¿Tú realmente vas aquí? —Tank dispara su primer golpe tan pronto como nos
instalamos. Le lanzo una mirada incrédula, y él suspira, rascándose su barba—. Lo siento,
pregunta estúpida. No esperaba verte aquí.
—Bueno, eso es completamente mutuo —nos miramos el uno al otro por unos
segundos—. Así que, la asignación de Literatura Inglesa —digo.
Sacude su cabeza—. Te estás saltando algunos pasos. ¿Qué estás haciendo aquí? Quiero
decir, ¿eres nuevo o has estado aquí por un tiempo o cúal es tu plan?
Los dos somos cuidadosos, al parecer, no estamos dispuestos a exponernos. ¿Tal vez
porque ambos sabemos que las cosas están a punto de cambiar? No hay vuelta atrás en esto,
de descubrir el verdadero yo. El folla chicos que siempre ve en mí no es el mismo que el pre-
doctor Micah, quién está decidido a realizar su sueño de ser doctor.
—He estado haciendo algunos cursos en el último año —le digo—. Pero apenas me
inscribí completamente después de firmar nuestro contrato, debido a que no tenía el dinero
para hacer más.
Alguien tiene que empezar. Bien podría ser yo.
Él asiente—. Lo mismo aquí.
—¿Quieres adivinar qué es lo que quiero hacer? —pregunto. Hay una extraña sensación
en mi estómago que se parece mucho a los nervios. No es como si su respuesta significara
algo para mí, pero aún así, mentalmente me preparo contra sus bajas expectativas, sin duda.
Me estudia por un segundo—. Mi primera suposición fue enfermería, pero creo que vas
a tomar medicina. Y deberías, porqué eres inteligente —dice, dejándome sin palabras.
Me siento allí, completamente congelado en mi asiento, mientras lágrimas inesperadas
se forman en mis ojos. No puedo recordar una sola vez que alguien dijera algo como esto.
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Siempre he sido el chico divertido, tonto, bromista. Nadie nunca me ha tomado en serio. Y
aquí está este sujeto brusco, casi mi archienemigo el año pasado, y sin pestañear, expresa su
Página

creencia en mí.
Intento alejar las lágrimas porque son jodidamente vergonzosas, pero él las ve de todos
modos y su expresión se suaviza. Trago para deshacerme del nudo en mi garganta—. Estás
estudiando arquitectura, ¿cierto?
 Es su turno de estar sorprendido, y mis adentros hacen esta cosa extraña y retorcida
cuando presencio la total incredulidad en su rostro. Dios, ¿no somos un par jodido y patético?

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Página
 TANK
Ver a Brewer en clase fue un poco de cogida mental. Al principio de todos modos. Supongo
que necesito reajustar mi percepción de él de folla chicos a… no estoy seguro de saber
exactamente qué. Sin embargo, es más profundo de lo que esperaba.
Tan pronto como lo vi en la clase, hizo clic. Entendí las miradas de admiración que la
enfermera del hospital le estaba dando, comprendí todos los conocimientos médicos
aleatorios que tiende a recitar de vez en cuando. No puedo ver a Brewer como doctor. ¿Pero
a Micah? Tiene doctor escrito sobre él.
Y cuando adivinó correctamente que quiero ser un arquitecto...
—Entonces, esta tarea de Literatura —solté, cortando esa línea de pensamiento antes
de salirme tan mal de los rieles.
—Uh, sí —está de acuerdo Brewer—. Necesito mantener mi promedio de calificaciones
para poder seguir compitiendo por un puesto en la escuela de medicina. Pero también odio
estas tontas clases que no tienen una base objetiva como la ciencia y las matemáticas. Por lo
tanto, tratemos de hacerlo de la manera más eficiente posible.
—Estoy de acuerdo en todos los aspectos —tomo un sorbo de mi café y asiento con
torpeza, sin estar seguro de qué agregar o de cómo hacer que mi cabeza se ocupe de tratar
civilizadamente con Brewer.
—Al menos la tarea no es terrible, simplemente seleccionar un libro de la lista y hacer
una presentación, discutir los temas.
—Sip, como quitarle un dulce a un niño —concuerdo—. ¿Cuándo aplicas a la escuela de
medicina? —no sé por qué lo pregunto. Nunca antes había dado dos mierdas acerca de la vida
personal de Brewer.
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—No he podido pagar clases de tiempo completo hasta ahora, así que todavía tengo que
Página

terminar cuatro semestres, pero puedo aplicar en tres semestres. Pasará mucho tiempo antes
de que sea realmente un doctor, pero valdrá la pena —inclino mi cabeza un poco hacia la
izquierda, tratando de encajar este nuevo lado de Brewer en mi marco mental—. ¿Qué quieres
diseñar?
 —Puentes —respondo con facilidad—. Siempre quise ser arquitecto, pero la primera vez
que puse mis ojos en el Golden Gate, me asombró tanto que sabía que eso era lo que quería
hacer. Así que estoy sacando una doble especialización en ingeniería y arquitectura.
—Eso es impresionante como el infierno.
Siento el calor subir por mi cuello. Aclaro mi garganta y desvío la mirada de Brewer.
—Gracias —murmuro.
Por alguna razón, mi dilema sobre ser pasivo por primera vez frente a la cámara viene a
mi memoria, y me pregunto si debería admitir ante Brewer que no lo he hecho antes.
Miró a Brewer de nuevo. Está mirando su té, revolviéndolo lentamente, aparentemente
perdido en sus pensamientos. Mi corazón late un poco demasiado rápido hasta que aparto la
mirada y me sacudo de vuelta a la realidad. Por supuesto, no puedo derramarle toda esa
mierda a Brewer. Tendría un día de campo, riéndose de mi vulnerabilidad. No lo dejaría pasar,
le diría a todos los demás chicos que conseguió mi virgen culo.
—¿Por qué estás frunciendo el cejo? —pregunta cuando levanta la vista de su té.
—Nada —gruño, fijando mi rostro en una máscara neutral. ¿Quién diablos va a follarme
antes de dárselo a Brewer?
—Tengo otra clase en veinte minutos, así que será mejor que me vaya —dice Brewer
después de uno o dos minutos de incómodo silencio entre nosotros—. Te veré más tarde.
Asiento y le doy un saludo una vez que ha recogido su mochila. Y definitivamente no
robo un vistazo a su culo cuando se aleja.
Estoy en el proceso de deshacerme de cualquier rareza que parece haberme poseído
esta tarde, cuando un chico se me acerca. Levanto la vista de mi café, sorprendido de
encontrar a un hombre de pie junto a la mesa con una sonrisa tímida.
—Hola, soy Trevor.
—Um, hola, Trevor. Soy—
—Sé quién eres, Tank —dice mi nombre como si fuera un rezo, y una pequeña punzada
de irritación me atraviesa. Sé que la mayoría de los chicos se prender al usar personajes pornos
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para coquetear, pero me frota de la manera incorrecta. Fuera de la pantalla, prefiero que mis
compañeros me conozcan como Peter.
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—En realidad—
—Sé que probablemente te invitan a salir todo el tiempo, pero no puedo creer que estés
aquí sentado en una cafetería como una persona normal —suelta.
 —Soy una—
—Pero podría morir feliz si pudiera tener una cita contigo. Haré que valga mucho la pena.
—Um…—paso mis manos por la parte posterior de mi cuello, tratando de decidir qué
hacer. Mi mente vuelve al confuso encuentro que acabo de tener con Brewer, y eso es todo
lo que se necesita para tomar mi decisión—. Seguro, por qué no.

Después de mis clases, decido pasar por el bar para tomar una copa rápida. A veces, es
preferible sentarse en el bar y observar a la gente que sentarme solo en mi tranquilo
departamento. No a menudo, pero a veces.
—¿Qué te ofrezco? —pregunta Nick, el barman.
—Dos dedos de whisky.
—Ya viene.
Me deslizo en un taburete y apoyo los codos en la parte superior de la barra. Nick regresa
con mi bebida un minuto después y tomo un trago, disfrutando de la quemadura mientras el
líquido se desliza por mi garganta. Girando en mi siento, miro alrededor del bar a los otros
clientes.
En la esquina veo a dos chicos acurrucados en un banco corrido. Es obvio por la forma
en que se miran, susurran, sonríen y se roban toques inocentes que están en una relación. No
es algo que admita en voz alta, pero una parte de mí anhela una relación como esa.
Obviamente disfruto del sexo y he tratado de hacer que las relaciones funcionen, pero no creo
haber encontrado a alguien que realmente me vea a mí. A los chicos con los que he salido, les
gustaba porque me veían como una bestia grande para presumir con sus amigos. Ellos no
sabían acerca de mis inseguridades o nada sobre mí, aparte de los aspectos más superficiales.
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¿Qué tan triste es que en este punto, la persona que más odio es la que mejor me
conoce? Aunque, creo que Brewer no es tan terrible cuando no está actuando como un
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imbécil. Uno a uno, él no es tan malo.

—Hey, Tank —me saluda Campy, deslizándose en el taburete a mi lado.
—Hey, hombre —asiento hacia él. Es común encontrar al menos a un Ballsy Boy en este
bar en un momento dado, por lo que no me sorprende ver a Campy.
 —No te importa si me siento aquí, ¿verdad? —pregunta, de repente nervioso.
Lo desestimo con la mano. Me agrada Campy, se mantiene solo y no actúa como un
imbécil. Y tengo la sensación de qué hay mucho más de él de lo que nos está dejando ver. Por
un segundo, considero preguntarle qué hace cuando no está trabajando. ¿También está en la
escuela? ¿Tiene padres solidarios como Rebel, o son más como los míos?
—Entonces… tú y Brewer aún no se han despedazado el uno al otro. Eso es algo bueno,
¿no?
Resoplo dentro de mi vaso mientras tomo otro trago de mi whisky—. Ni lo digas; todavía
tenemos grabaciones por las que pasar.
—Justo —Campy inclina su cerveza hacia mí en acuerdo—. Entonces, ¿qué te tiene aquí
bebiendo solo?
—Podría preguntarte lo mismo —señalo.
—Día largo y jodido —responde Campy después de unos segundos de silencio.
—Lo siento, ¿quieres hablar de eso?
Él deja espaciar una risa sin humor.
—Prefiero beber y literalmente hablar de cualquier otra cosa, ¿si eso está bien?
—Eso es exactamente lo que esperaba que dijeras —termino mi whisky y le digo a Nick
que lo vuelva a llenar—. Oh, oye, tú tenías un fleshjack hecho con el molde de tu culo. ¿Cómo
lo hacen?
La boca de Campy cae abierta ante mi pregunta, y luego sacude su cabeza y se ríe entre
dientes.

80
Página
 BREWER
No tengo muchos amigos, pero Rebel es definitivamente una de las personas que considero
un buen amigo. Siempre me ha gustado salir con él, y para ser honesto, extraño eso ahora
que él está con Troy. No me malinterpreten, Troy es genial y me gusta, pero la dinámica ha
cambiado.
Por un lado, ya no puedo follar con Rebel, lo que solíamos hacer de vez en cuando. Nada
serio, pero nos conocíamos tan bien que era fácil, reconfortante. El hecho de que conozcamos
el cuerpo del otro tampoco dolió. A veces soóo estás humor para una buena follada, por muy
estúpido que parezca, y no quieres aburrirte actuando con un novato.
Pero como dije, esa parte de mi relación con Rebel se terminó y lo entiendo totalmente.
No significa que no sueñe de vez en cuando con un trío con él y Troy, pero probablemente
sea un sueño imposible. Aunque escuché en la vid que casi hicieron un trío con algún bonito
twink que conocieron en su viaje por carretera, ¿así qué, quién sabe?
Al menos Rebel todavía me invita de vez en cuando a pasar el rato. Estoy de camino a
su departamento ahora, y creo que Heart también vendrá. Estoy exhausto después de un
agotador turno en la sala de emergencias, pero no quiero perderme esto, así que tomé dos
bebidas energéticas y estoy listo para ir.
Troy abre la puerta, y después de una breve vacilación, me envuelve en un corto abrazo.
Eso es algo importante para él, debido a que no le gusta tocar y esa mierda. Justo cuando
quiero preguntarle cómo va su juego, hay un fuerte ruido y palidece.
—Mason, ¿qué dejaste caer ahora? —grita con una mezcla de molestia y resignación.
—Yo… es… sólo el tazón de nachos —balbucea Mason atrás.
Reprimo una sonrisa. Él es lindo en esa manera súper nerd, pero Masón realmente es un
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peligro para sí mismo. Y para todas las cosas rompibles.
Página

—Le ayudaré a limpiarlo —grita Heart, y luego tranquiliza a Mason con una voz más
tranquila—: Está bien, no te preocupes. Traje otra bolsa, así que todo está bien.
Él es un amor, ese chico, debajo de todo ese exterior duro. Debo admitir que estaba un
poco receloso cuando lo conocí, porque parece un poco salvaje, pero es realmente una buena
alma.
 —Sí, pues —dice Troy suspirando—, entra. Debería haber comida, si Mason deja de tirar
mierda.
—¿Tal vez hay que mantenerlo fuera de la cocina? —sugiero.
Troy se encoge de hombros—. O traer más de todo —dice y sonríe.
Rebel me saluda con un abrazo un poco más largo, y me desplomo en el sofá. Hay un
enorme tazón con pretzels en la mesa de café, y con gusto cavo en él.
—¿Cómo va tu juego? —le pregunto a Troy. A él y Mason se les ocurrió una idea genial
para un juego móvil, y aunque no pretendo entender la mitad de eso, suena increíble.
—Realmente bien —dice Troy. Se deja caer en el reposabrazos de la silla en la que está
sentado Rebel, y de nuevo me soprende lo hermosos que son estos dos juntos. Además, súper
dulces. Están bien emparejados, y puedo ver que Troy se está sintiendo cada vez más cómodo
con las muestras de afecto de Rebel, incluso buscándolas y devolviéndolas. No sé cuál es su
historia, pero está claro que fue herido de alguna manera.
—Tenemos dos inversionistas interesados en una demostración para determinar si
quieren invertir, por lo que tenemos dos reuniones potencialmente determinantes que se
planean a principios de la próxima semana —dice Troy, su rostro radiante.
—Wow, eso es impresionante —le digo.
—Es una gran oportunidad para nosotros. En este momento no tenemos el dinero para
llevar esto al siguiente nivel, pero con su respaldo, lo haríamos.
Mason se sienta en sofá junto a mí, empujando sus gafas hacia atrás—. Estoy asustado
como la mierda —dice—. ¿Qué pasa si derribo o dejo caer algo? Es todo lo que hago.
—No te están contratando para ser mesero —dice Heart—. Todo lo que necesitas hacer
es mostrarles que sabes tu mierda cuando se trata de ese juego y lo harás bien.
Heart como hablador motivacional, ¿quién lo sabría?
—¿Viste mi email? —pregunta Rebel un momento después. Me he llenado de pretzels y
también estoy bien en mi camino para limpiar el tazón de nachos.
—¿Sobre el asunto de San Francisco? Sí, lo vi. Aún no he tenido la oportunidad de
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responder, pero intentaré ir.
Página

Rebel frunce el cejo—. Esto es un evento crucial para nosotros, Brew. Estoy contando
contigo para estar allí.
—Dije que lo intentaré, ¿de acuerdo? Tengo muchas cosas que hacer.
 —Viejo, todo lo que tienes son las escenas con Tank, así que haz de esto una prioridad,
¿okay?
Reprimo mi respuesta. No tiene idea de qué estoy haciendo malabares en este momento,
o de cuánto me molesta este comentario. Sé que técnicamente no es su culpa, debido a que
le he estado ocualtando mi otro trabajo y mis clases, pero, ¿no podía al menos dame algo de
crédito? Y este es el chico que pensé era uno de mis mejores amigos no hace menos de una
hora.
Mi ira se va tan rápido como vino, y en cambio, hay una triste melancolía. Las
experiencias cómo estás confirman lo que he sido desde que era un niño: en última instancia,
estás solo en la vida. Eso no pretende ser amargo, pero es la simple verdad. No puedes contar
con que alguien esté allí para ti, excepto tú mismo. Aunque quizás en este caso, yo tengo la
culpa. Después de todo, mi amistad entera con Rebel está basada en Brewer, el payaso de la
clase, el gracioso. Él no tiene idea de quién es Micah, y eso por mí.
—Hablando de Tank —dice Rebel, bajando su voz—. ¿Algún progreso ya con todo el
asunto de ser pasivo?
—No.
Ahí está el cejo fruncido otra vez, la desaprobación goteando de su rostro y su voz—.
Brewer, pensé que habíamos acordado que te encargarías de esto.
—¿Cómo es que este es mi problema ahora, eh? Tú eres quién decidió ponernos juntos
en una grabación, fuiste tú el que nos convenció para hacer diez filmaciones y luego le exigiste
que él fuera pasivo… ¿por qué demonios es mi trabajo arreglar esto?
—No fue idea mía que él fuera pasivo; ese fue Bear —dispara de vuelta Rebel.
—Entonces Bear puede jodidamente penetrarlo parra lo que me importa. Creaste este
desastre, así que puedes limpiarlo. No es mi puto problema.
Los ojos de Rebel se ensanchan—. Brew, no quieres decir eso… sabes que nosotros no
podemos ponerlo como pasivo por primera vez frente a la cámara.
Me inclino, nuestros rostros a centímetros de distancia—. ¿Nosotros? No hay un
nosotros aquí. Hay un tú, orquestando todo esto, y yo, a quien culparás por fallar cuando sólo
cumplo órdenes. ¿Y por qué debería importarme? Tank odia mis putas entrañas, ¿por qué
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debería hacerle un favor?

Página

La mano de Rebel cae inesperadamente sobre mi hombro—. Porque no eres esa persona,
Brew. Te importa, y sabes que no puedes hacerle esto —suspira—. Y tienes razón, no debería
haber hecho de esto tu problema porque técnicamente no lo es. Bear incluyó esto en el
contrato, y no sé cómo hablarlo con Tank. Él no es exactamente la persona más accesible.
 A pesar de mi frustración, me río—. ¡Me lo estás diciendo a mí! ¿Qué mierda te hace
pensar que incluso me dará la hora del día? Te lo dije, odia mi culo. Bueno, tal vez no mi culo,
pero definitivamente el resto de mí.
Rebel sacude su cabeza, con una suave sonrisa en su boca—. No creo que te odie tanto
como piensas… o como él piensa.
—Estás delirando… en serio.
Aprieta mi hombro una última vez y lo suelta—. Sólo prométeme que tratarás de hablar
con él sobre esto… ¿por favor?
Me recuesto en el sofá. A mi lado, Troy, Mason y Heart están furiosamente tratando de
vencerse en un ruidoso juego dee PS4.
—Lo prometo. Pero jodidamente me debes una. Y aun así digo que estás demente sobre
Tank y yo. Él me odia. Nada va a cambiar eso.

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Página
 TANK
Me remuevo en mi asiento y miro hacia la entrada del café. No sé en qué demonios estaba
pensado cuando acepté una cita. No estaba pensando, esa es la verdadera respuesta. Si no
hubiera sido por mi cerebro revuelto por el extraño vudú que Brewer parecía estar haciendo
conmigo, nunca le hubiera dicho que si a este niño demasiado entusiasta.
La única forma en que puedo ver si este tiempo vale la pena es si él quiere follarme para
poder lidiar con ese horror impío y dejarlo detrás de mí.
—Oh, por Dios, todavía no puedo creer que esté viéndote en la vida real —dice Trevor,
abanicándose dramáticamente.
—Uh, sí, acerca de todo eso, me gusta mantener mi vida personal separada de mi vida
laboral, así que preferiría que me llamaras—
—Oh, por Dios, ¿puedo saber tu verdadero nombre? Espera, necesito presumir mucho
en Twitter —saca su teléfono sin esperar una respuesta, claramente no está tan preocupado
por aprender realmente mi nombre real. Gruño una respuesta. Este fue un puto error
gigante—. Ese gruñido, querido Señor, podría desmayarme.
Me muerdo la lengua para reprimir otro gruñido de molestia, debido a que
aparentemente demasiados gruñidos pueden hacer que este niño se venga en sus pantalones.
—Escucha, lo olvidé, en realidad necesito estar en otro... lugar.
—Oh —su rostro cae, y finalmente guarda su teléfono—. ¿Ni siquiera puedes quedarte
para una taza de café?
Suspiro y me desplomo en mi asiento.
—Sí, puedo quedarme un rato.
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—Yeii —aplaude y se desliza en el asiento opuesto al mío—. Debe ser tan genial ser una
Página

estrella porno.
—Es un trabajo —me encojo de hombros, realmente no queriendo decirle demasiado a
un chico que no conozco y al que no volveré a ver de nuevo.
 —Sí, pero puedes follar con los hombres más calientes del planeta y te pagan por ello.
De todos los Ballsy Boys, ¿quién es el mejor en la cama?
—No lo sé, es difícil comparar —le respondo, lanzando una mirada incómoda hacia la
puerta, preguntándome si es demasiado tarde para escapar—. Realmente no quiero hablar de
trabajo, ¿si eso está bien?
—Oh —su rostro cae de nuevo, pero se recupera rápidamente—. Está bien, bueno,
entonces, ¿qué estabas haciendo en el campus el otro día? Sé que no puedes ser un
estudiante.
—¿Por qué no puedo ser un estudiante?
—Realmente no pareces del tipo. Eres muy… físico. No puedo imaginarte sentado detrás
de un escritorio todo el día o en la biblioteca.
—Hmm —no es nada que no haya escuchado antes, pero eso no significa que no me
moleste cada vez que alguien hace ese tipo de suposiciones sobre mí. Tonto, más músculo
que cerebro… he escuchado todas estas cosas en mi vida. Hubo en tiempo en que también
las creí. Pensé que no era bueno para nada más que parecer un imbécil musculoso. ¿Necesitas
que alguien mueva algo pesado? ¡Llama a Tank! ¿Necesitar resolver un problema de física
compleja? Nah, ese chico apenas puede atarse sus propios zapatos.
—¿Está todo bien? De repente tienes una clase de mirada sexy y aterradora en tu rostro.
—Sí —miento—. Tengo que irme después de todo —me pongo de pie sin esperar su
respuesta y salgo por la puerta sin mirar atrás.
Ahora que mi tarde se fue al infierno, decido ir a casa y recoger a Shaggy para poder
llevarlo al parque. No puedo creer que haya estado todos estos años sin un perro. Él ha hecho
mi vida cien por ciento mejor sólo con existir.
Subo las escaleras hacia mi departamento y como siempre, una cola meneante me
saluda cuando abro la puerta.
—Hey, Shaggy. ¿Quieres salir a pasear? —pregunto con esa voz estúpida que no puedes
evitar usar cuando hablas con un perro.
Shaggy ladra y corre hacia donde está colgada su correa detrás de la puerta. Rebota
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arriba y abajo cuando intento sujetar la corre a su collar.
Página

—Siéntate —le ordeno, y con mucho esfuerzo, se las arregla para dejarse caer sobre su
trasero y dejarme atarle la correa.
En un hermoso día para ir al parque, sólo alrededor de veintiséis grados y soleado, por
supuesto. Otra ventaja de tener un perro, en realidad me hace salir al parque. En los años que
he vivido en ese departamento, nunca había visitado el parque a sólo unas cuadras de
distancia.
Cuando llegamos al parque, me doy cuenta de qué hay algún tipo de clínica de
vacunación gratuita establecida. Shaggy y yo evitamos la multitud y caminamos alrededor del
agua. Hay una ligera brisa que hace que el clima sea aún más perfecto.
Al principio cuando me mudé a LA, no estaba seguro de poder soportar el calor. Después
de todo, estaba acostumbrado a que al menos la mitad del año fueran ventiscas y
temperaturas bajo cero. Ahora, no sé cómo alguna vez regresaría a eso.
—¿Tank? —miro por encima de mi hombro para ver quién me llama y veo a Brewer. Está
vistiendo un uniforme azul que odio admitir que lo hacen lucir realmente sexy.
—Oh, hey —saludo con un torpe gesto.
—Aw y Shaggy —Brewer se agacha para acariciar a Shaggy. Es obvio que Shaggy está
emocionado de verlo, saltando para lamer su rostro y agitando su cola tan fuerte que está
perdiendo el equilibrio.
—¿Estás haciendo la cosa de la clínica de vacunación? —pregunto cuando Brewer se
levanta.
—Sí, era una cosa voluntaria y las cosas voluntarias siempre se ven bien en las solicitudes
de la escuela de medicina, ¿sabes?
—Eso tiene sentido.
—Ya terminé —dice torpemente, gesticulando hacia atrás y luego mordiendo su labio.
—Oh, ah… ¿quieres caminar con nosotros o algo así? —le ofrezco, sin estar seguro de si
eso es lo que estaba buscando o no.
—Sí, está bien —responde rápidamente—. ¿Esto es todo lo que vas a hacer hoy?
—Sip. Bueno, en realidad, ¿tuve como una cita antes?
—¿Eso es una pregunta? —Brewer se ríe de la extraña inflexión con la que termino la
frase.
—Algo así —me río entre dientes—. Se suponía que era una cita, pero se desmoronó al
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instante.
Página

—Ni siquiera sabía que ibas a citas —reflexiona Brewer—. Quiero decir, obviamente
tienes citas. No puedo imaginarte en una cita, supongo.
 —Sí, no soy muy bueno en eso. Creo que siempre escojo a los chicos equivocados. O tal
vez, realmente no hay un hombre correcto para mí —admito, y de inmediato me pregunto por
qué le dije algo tan vulnerable—. ¿Olvida que dije eso?
—Aw, no te preocupes, oso pardo. No le diré a nadie de tu profundo y oscuro secreto,
que realmente tienes un corazón bajo todo ese hielo —se burla Brewer y gruño en respuesta
para alejar el comentario—. ¿Entonces por qué fue tan mala la cita?
—Él sólo estaba presumiéndole a sus amigos que tenía una cita con Tank —sacudo mi
cabeza—. Honestamente, incluso antes de estar en el porno, esa parecía ser la forma en que
la mayoría de los hombres me trataban. No es que importe. Estoy bien por mi cuenta.
—Por supuesto que lo estás —concuerda Brewer—. Aunque es bueno tener a alguien a
veces. No que yo lo sepa —se ríe de sí mismo.
—Tienes chicos cayendo todos sobre ti.
—Para una follada, no para una relación. Las personas sólo quieren una noche divertida
con Brewer —él hace más o menos un eco de lo que acabo de decir, y me sorprende. Lleva su
personaje de Brewer tan bien como yo llevo el de Tank. ¿Realmente alguien sabe quién está
debajo de nuestras máscaras?

88
Página
 BREWER
No estoy sorprendido cuando me despierto con un dolor de cabeza floreciendo detrás de mis
ojos. Tanto mi mente como mi cuerpo saben que fecha es hoy y lo que me espera. Podría
obviarlo, por supuesto, pero en teoría esa es solo una opción. La realidad es que tengo que
estar allí todos los años en esta fecha durante los últimos veinte años. Los primeros años no
fue mi elección, obviamente, pero a medida que crecí, siempre entendí que este compromiso
no era negociable.
Me salto el desayuno porque mi estómago no se siente capaz de manejar los alimentos
en este momento, y estoy en mi auto para conducir hacia el sur justo después del peor
embotellamiento matutino. Quiero decir, esto es LA, así que no es como si el tráfico pudiera
empeorar el doble, pero es la diferencia entre estar atrapado por dos horas en la autopista o
sólo una hora.
Son diez para el mediodía cuando conduzco por el camino de entrada de mis padres. Mi
dolor de cabeza se ha convertido en una cosa en toda la regla ahora, y tomo otro ibuprofeno
antes de salir del auto. Realmente debería haber comido algo, esa mierda destruirá el forro
estomacal en un estómago vacío, pero la idea de la comida me produce náuseas, así que me
arriesgaré.
Me miro en el espejo lateral para asegurarme de que mi corbata azul claro esté recta y
me quito un poco de pelusa de la chaqueta de mi traje azul oscuro. Si solo mis Ballsy Boys
pudieran verme ahora, su folla chicos Brewer todo vestido con un traje. Se reirían hasta el
culo.
Como siempre, toco el timbre. Todavía tengo una llave, en algún lugar, pero nunca la
usaría. Eso requeriría un grado de familiaridad que no está presente con mi familia.
Mi papá abre la puerta—. Micah —dice, extendiendo su mano.
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—Hola, papá.
Página

—Estamos contentos de que pudieras haber llegado. ¿Cómo estuvo el tráfico?

—Lo de siempre, no tan mal.
 Tan pronto como mi papá cierra la puerta principal detrás de mí, mi madre entra desde
la cocina—. Hola, Micah —dice, inclinando su cabeza hacia mí para que pueda besar su
mejilla—. ¿Cómo estás?
—Estoy bien, mamá, gracias.
—Podemos irnos, Howard —le dice a mi padre—. Hay poco sentido en quedarse aquí.
Papá asiente y minutos después, estamos saliendo por la puerta. El viaje a la iglesia se
realiza casi en silencio, con sólo comentarios indirectos acerca del clima—esperan lluvia esta
semana, lo cual es un evento de interés periodístico en LA—un nuevo desarrollo que están
construyendo adyacente al vecindario en el que viven mis padres, y deportes. ¿Qué hay de los
Dodgers, eh?
El sacerdote es el mismo que ha dirigido esta misa privada durante los últimos ocho
años, y tiene una mirada solemne. Nos da un momento para encontrar un asiento en el frío y
duro banco de madera y luego comienza su ritual anual de lamentar la muerte de mi hermano.
Él no lo conocía ya que comenzó a trabajar para esta iglesia cuando yo era un adolescente,
pero conoce el procedimiento. Todos lo hacemos, me incluyo.
Digo todas las palabras esperadas, hago todos los gestos apropiados en el momento
adecuado y me las arreglo para mantener mi rostro con la expresión requerida. Solemne.
Pensativo. Reflexivo. Tres palabras que nadie usaría para describirme. Sólo toma unos quince
minutos antes de que terminemos. Terminemos con la misa, eso es. Por supuesto, tenemos
la siguiente parte del programa para asistir.
Es un corto trayecto de la iglesia al cementerio, y mi madre agarra el ramo de lirios
blancos del auto, sus ojos escondiéndose detrás de los lentes de sol oscuros. No necesito
verlos para saber cómo se ven. Los veo en el espejo todos los días, menos la tristeza siempre
presente.
La tumba de mi hermano es prístina, como siempre. No es de extrañar, debido a que mi
madre todavía la visita todos los domingos, como un reloj. Me dan escalofríos como siempre
cuando veo mi propia fecha de nacimiento en la lápida.
Dean Michael Evans. Precioso hijo y hermano. Un ángel en los brazos de Dios.
No lo recuerdo, por supuesto, aunque hay muchas fotos de los dos. Pero incluso en las
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fotos, puedes ver quién es el saludable. Soy el que tiene la piel besada por el sol, la sonrisa, la
energía que irradia fuera de la foto.
Página

Dean es el pálido con las bolsas bajo sus ojos, el niño de aspecto enfermizo con solo un
fantasma de sonrisa en sus labios azulados. Y eso es antes de las fotos de él acostado en esa
cama de hospital, con tubos y cables y máquinas conectadas a él.
 Murió días antes de nuestro sexto cumpleaños por un defecto cardíaco congénito que
incluso cuatro cirugías no pudieron solucionar. Gemelos idénticos, excepto por ese pequeño
detalle de su corazón no funcionando. Murió, yo viví, y no pasa un día que no me pregunté
cómo habría sido mi vida si él hubiera sobrevivido.
—Habría cumplido veinticuatro años —susurra mi mamá, con la voz apretada por la
emoción. La mano de mi padre se extiende para cubrir la de ella, un gesto que lo he visto hacer
tantas veces que tiene que ser pura memoria muscular para él—. Lo extraño mucho.
Después de un momento de mirar fijamente la lápida, ambos me miran, esperando mi
respuesta. ¿Pero qué demonios se supone que debo decir? Sí, madre, sé que habría cumplido
veinticuatro años en cinco días, porqué adivina qué, también es mi cumpleaños. De alguna
manera, no creo que vaya a salir bien. Y tampoco les diría eso, no, realmente no extraño a mi
hermano porqué A, no lo recuerdo, y B, ustedes lo extrañan lo suficiente por todos nosotros.
En cambio, suspiro y digo—: Lo sé, mamá.
Es todo lo que puedo ofrecer, debido a que nada de lo que haga o diga compensará lo
que perdieron.
Después de unos minutos, mi madre se levanta de su posición arrodillada, ayudada por
mi padre—. Te daremos unos minutos con tu hermano.
También esto, es parte de lo que se espera de mí. Mi madre tiene conversaciones
completas con Dean, o mejor dicho, con su lápida. A veces le habla como si aún fuera un
pequeño niño, otras veces le habla como el adulto que él sería ahora. De niño, me asustaba
mucho cuando mi madre me arrastraba aquí todos los domingos después de misa. No tengo
ningún deseo de hablar con mi hermano muerto, pero, por desgracia, eso no contaba.
Conozco el procedimiento, así que cuando mis padres se retiran a una distancia
respetuosa, me agacho en el suelo después de comprobar cuidadosamente por caca de
pájaro. No quiero arruinar este hermoso Hugo Boss que conseguí hace unas semanas.
Inclino un poco la cabeza y cruzo los brazos sobre mi rostro para que mis padres no
puedan ver si estoy hablando o no. ¿Cuánto tiempo estaremos haciendo esto? Han pasado
dieciocho años desde que murió, aunque entiendo completamente que la pérdida siempre
estará allí, este ritual anual se ha vuelto tan… vacío. Todo esto es vacío. Demonios, sentarse
aquí fingiendo hablar con él es un gesto vacío.
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No soy ateo, lo que probablemente sea sorprendente considerando que hago porno gay.
Página

Creo que mi educación católica quedó lo suficientemente arraigada en mí como para no poder
descartar la posibilidad de la existencia de Dios. Por lo tanto, no sé si hay un paraíso, pero si
lo hay, estoy seguro de que habría habido un lugar para un lindo niño con hermosos ojos color
chocolate.
 Me siento en silencio por unos minutos, con un fino sudor sobre mi espada bajo el
sofocante sol. Cuando pienso que ha sido lo suficientemente largo, me levanto y digo las
últimas palabras que le digo a mi hermano cada año—. Lamento que yo viviera.

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Página
 BREWER
El moretón en mi mejilla se ha desvanecido lo suficiente como para que un poco de corrector
lo oculte, y eso significa que es hora de hacer la segunda grabación después de todo. No estoy
tan ansioso por esto. Por mucho que detestaba trabajar con Tank antes, ahora es aún peor,
porque después de toda la escena en el hospital y nosotros cuidando a Pixie, encontrándonos
en la escuela y luego en el parque, las cosas son súper incómodas.
Antes, existía la realidad de saber que odiábamos las entrañas del otro. Tal vez era triste,
pero había una cómoda previsibilidad. Sabíamos donde estábamos parados el uno con el otro.
Ahora, no tanto.
Nunca tuve la intención de que alguien se enterara de mi trabajo paralelo y de mis clases,
y mucho menos Tank. Seguro, no ha soltado ni una palabra al respecto por lo que puedo decir,
e incluso cuando lo descubrió, no fue negativo al respecto. Pero se siente como una pérdida
de control para mí, algo que estaba en esta burbuja segura que ahora está en el mundo grande
y cruel, y no me gusta.
—No lo voy a golpear otra vez —escucho decir a Tank con vehemencia mientras camino
en el estudio.
—No tienes que hacerlo. Si ambos están de acuerdo, podemos usar las imágenes de la
última vez —dice Bear con cuidado—. Por mucho que odie que hayas salido lastimado, Brewer,
los dos estaban en una posición perfecta y lo tenemos completamente enfocados desde dos
ángulos diferentes. Si nos das tu permiso, podemos usar eso.
Me encojo de hombros. ¿Qué me importa?
—No quiero que se vea como si realmente le hice daño —dice Tank.
Mis cejas se levantan con sorpresa.
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—No lo hará —le asegura Rebel.

Página

—Cortaremos justo después del golpe y seguiremos con lo que filmemos hoy. Ya que los
espectadores verán a Brewer continuar, llegarán a la conclusión de que no resultó herido.
—En ese caso, está bien. No me gusta que me vean como un chico abusivo.
 Comenzamos la escena justo donde la dejamos, conmigo repitiendo las últimas líneas
del diálogo acerca de la follada con su hermano. Esta vez, Tank hace como que me golpea, y
me dejo caer, según lo acordado.
—Puto infierno, hermano, ¿no puedes tomar una broma? —grito con indignación.
Tank se inclina y me pone de pie jalando el cinturón de herramientas—. ¿Fue una broma?
—Por supuesto que lo fue. ¿Qué demonios, hombre?
—Pensé que estabas hablando en serio. Davey se merece algo mejor que un jugador
como tú.
Levanto mis cejas—. ¿De verdad? ¿Por eso me golpeaste, estabas preocupado por tu
hermano?
Tank me suelta, mete ambas manos en los bolsillos de sus jeans de trabajador—. ¿Por
qué otra cosa estaría molesto?
Le envío una sonrisa arrogante—. Estás celoso.
Resopla—. ¿Celoso? ¿Por ti? ¿No eres muy engreído?
—Me parece que protestas demasiado.
—No quería que mi hermano estuviera acostándose con un folla chicos como tú, eso es
todo. Además, se merece algo mejor que una deplorable cogida como tú. Quiero decir, tu culo
encaja bien alrededor de mi verga, te concederé eso, ¿pero tú de activo? Él se lo merece mejor.
Suspiro dramáticamente—. ¿Veo que estamos de nuevo en el tema de la deplorable
cogida? ¿Pensé que lo habíamos resuelto la última vez?
Sonríe—. Dejamos en claro la gran follada que soy la última vez. No probamos nada sobre
ti, aparte de que tu boca se ve malditamente bien con mi verga en ella… y tiene la ventaja
añadida de hacer que te calles.
Cruzo mis brazos—. ¿Sabes qué? Vamos a resolver esto de una vez por todas… con una
apuesta. Te la chuparé, y si puedo hacerte venir en menos de tres minutos, te follaré la próxima
vez.
—¿Quién dice que habrá una próxima vez?
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—Viejo, por favor. No finjas que no me quieres. Ambos sabemos que ya estás duro como
Página

una roca con la sola idea de tener mi apretado culo de nuevo. Así que vamos a hacer esto. ¿O
tienes miedo de perder?
Se desabrocha sus pantalones, baja sus bóxers para revelar su verga goteante—. No hay
forma de que me hagas volar mi carga en menos de tres minutos.
 Sonrío—. Famosas últimas palabras. Establece un cronómetro.
Me pongo de rodillas, listo para empezar tan pronto como él me dé una señal. Todo esto
es parte de la trama, aunque hemos vuelto añadir totalmente el diálogo. Según el guión, Tank
se vendrá en menos de tres minutos, asegurándonos una próxima vez. Rebel me aseguró de
que lo editarían para que funcione, pero juro que lo haré explorar en ese periodo de tiempo.
Si voy a probar su culo, me lo voy a ganar.
—¡En sus marcas, listo, fuera! —me desafía Tank.
Sin un segundo de retraso, me lo trago entero, enterrando mi nariz en su pubis. Dios,
amo la sensación de vello en mi cara cuando tengo una verga gorda metida en mi garganta.
La mayoría de los Ballsy Boys mantienen recortados sus vellos púbicos, pero los de Tank son
más largos, ajustándose a sus pesadas bolas y su gran verga.
Me alejo un poco para respirar, y luego lo tomo de nuevo. Mi falta de reflejo nauseoso
me ha servido bien en la industria, pero tengo algunos otros trucos bajo la manga. Mi garganta
se aprieta alrededor de su verga, luego la relajo. Tuve un ex novio que podía hacer eso, y era
la sensación más increíble de todas.
Uso mi otra mano para tomar las bolas llenas de Tank y hacerlas rodar en mi palma,
lentamente. Sé de ver sus videos que él es sensible allí, y le encanta cuando un chico juega
con sus bolas. Si tuviera más tiempo, las chuparía. Apuesto a que también sabrían y se
sentirían increíbles en mi boca.
Mis ojos empiezan a lagrimear, pero puedo prolongarlo un poco más. Tank suelta un
gemido, y puedo sentir sus bolas tensándose en mis manos. Se está acercando. Las vuelvo a
rodar, luego toco el punto sensible detrás de sus bolas con mi pulgar. He dejado suficiente
saliva en sus bolas que tengo un poco de lubricante, y hago mi camino por el áspero sendero
que lleva a su agujero. ¿Se da cuenta de que está extendiendo sus piernas un poco más?
Lo escucho jadear justo cuando libero su verga, respirando desesperadamente algunas
grandes inhalaciones. Apenas puedo ver a través de mis ojos llorosos, y sé que mi barbilla está
llena de saliva, pero no me importa. Quiero que me vea así, que sepa qué soy yo quién lo lleva
al límite… y lo hace correrse.
—Quedan treinta segundos —dice con voz ronca.
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—Entonces será mejor que haga que cuente —respondo, mi voz sonando como papel de
lija—. Vamos, grandote, folla mi boca con esa gorda verga. Sabes que quieres mostrarme
Página

quién es el jefe, ¿no es cierto?

Tank gruñe y empuja su verga con tanta fuerza, que tiene que sostenerme del hombro
para evitar que caiga. Pero lo tengo exactamente donde lo quiero, porque ahora me está
follando la garganta en lugar de dejarme hacer todo el trabajo. Mis manos continúan
acariciando sus bolas, y Tank suelta otro bajo gemido que envía escalofríos por mi espalda. Él
no es muy vocal, este chico grande, así que me encanta poder hacerlo perder ese control de
hierro, sólo un poco.
Un escalofrío recorre su cuerpo, y mi pulgar derecho encuentra ese punto áspero detrás
de sus bolas nuevamente, sólo que esta vez no me detengo. Incremento la presión mientras
me deslizo más y más lejos. Sus músculos tiemblan contra mi cuerpo, y de repente, presiono
mi resbaladizo pulgar en su agujero, no lo suficientemente fuerte como para que se deslice
hacia adentro, pero lo suficiente como para provocar una poderosa reacción. Se sacude en mi
boca, y me aprieto alrededor de él mientras toco su agujero de nuevo, y luego se viene. Se jala
hacia atrás y pinta mi cara bruscamente con semen y más semen, gruñendo de una manera
primitiva que es profundamente satisfactoria.
Estoy mareado y me balanceo un poco, pero él me sostiene con manos fuertes sobre
mis hombros. Levanto la vista, todavía jadeando por aire con jadeos rasposos, y sus ojos
llameando.
—Eso… no estuvo mal —admite. Baja sus manos a mis axilas y me levanta. Estoy en el
extremo receptor de otra de esas miradas ardientes, y luego me besa, a pesar de su semen en
mi rostro.
Me duele la garganta por la dura mamada y mi mejilla aún está sensible, por lo que me
preocupa un poco que lo empeore, pero su beso es mucho más suave de lo que esperaba.
Está empuñando mi cabello con ambas manos, pero tiene cuidado de no presionar mi mejilla
o mi garganta.
Suspiro un poco en su boca y me pego contra él. Estoy duro como una roca y empapado
con pre-semen, e intento encontrar algo de fricción contra ese poderoso cuerpo. Mete su
mano entre nosotros para palmearme. Sin vergüenza, empujo en su mano. Dios, amo lo
grande y fuerte que es. Sabe exactamente cuánta fuerza contraria utilizar para que yo pueda
follar su mano. Estoy tan jodidamente caliente.
Él rompe el beso—. ¿Quieres que te ayude con eso? —pregunta, su voz baja.
—Joder, por favor.
El guión dice que él me masturbe, y con mucho gusto habría aceptado sus dedos ásperos
y fuertes alrededor de mi verga, pero Tank tiene otra idea.
96

—¿Quieres hacer otra apuesta? —pregunta, saliéndose completamente del guión.

Página

Levanto mis cejas, nuestras narices a un centímetro de distancia—. ¿Qué tenías en

mente?
—Si puedo hacer que te corras en menos de tres minutos, nos olvidaremos de esa idea
descabellada de tú follándome.
 Mi boca se abre un poco—. ¿Vas a chuparme?
—¿Por qué haría eso cuando tienes un perfecto culo para enterrar mi verga? No, folla
chicos, voy a follarte como la mierda, y haré que te vengas en menos de lo que te tomó
hacerme venir a mí.
Me olvido de mi dolor de garganta y mi mejilla dolorida—. Estás tan lleno de ti mismo.
Acaricia mi verga a través de mis jeans—. ¿Crees que puedes aguantar por tres minutos?
Me inclino en su mano, dejo salir un pequeño gemido—. ¿Con la posibilidad de tener la
oportunidad de ir por tu culo? Diablos que sí. Vas a tener que traer todo lo que tengas, jefe, y
aún así no será suficiente.
Me besa de nuevo, esta vez un poco más áspero, pero no me importa. Sus ágiles dedos
desabrochan mis jeans con una mano, y la mete para envolver sus dedos alrededor de mí.
Rompo nuestro beso y doy un paso atrás—. ¿Quieres comenzar el reloj?
Su boca se levanta en una sonrisa torcida—. ¿Quieres desnudarte primero?
Me quito mis zapatos, seguido de mis pantalones y ropa interior. Incluso me quito
rápidamente mis calcetines. No me molestan, pero regularmente recibimos acaloradas
solicitudes de nuestras espectadoras para que nos quitemos los calcetines. Al parecer, los
calcetines no son sexys. ¿Quién coño sabría?
Arrastro mi camisa sobre mi cabeza y rápidamente la uso para limpiar el semen de mi
rostro. Esa mierda comienza a picar muy rápido, créanme.
Permito que Tank me dé la vuelta y agarro el andamio con ambas manos, inclinándome
para darle un buen ángulo. A pesar de que no planeamos esto, aún así me preparé de cualquier
manera. Me gusta estar preparado para cualquier cosa, especialmente con este chico, así que
demándenme. Está totalmente justificado ahora.
El hecho de que esté sacando un condón de su bolsillo me dice que esto no es tan
espontáneo como parece. Bastardo astuto. Lo tiene enrollado en él en segundos.
¿Qué hará ahora? No sabe que me preparé, pero nunca mostramos lubricante frente a la
cámara ya que no es realmente sexy, así que tiene que pedir un corte—algo que puede hacer,
debido a que estamos en el punto donde ellos fácilmente pueden hacer una transición—o
97

follarme sin lubricante, lo cuál no va con nuestro código de conducta. Sí, tenemos un código
Página

de conducta. Si alguna vez hubo un negocio en el que necesitarás uno, este es el caso.
Tank vuelve a sorprenderme cuando esa gran mano desciende sobre mi espalda baja y
suavemente sigue la pendiente de mi culo, primero mi nalga derecha, luego mi izquierda—. Ya
sabes, folla chicos, por mucho que deteste esa actitud arrogante tuya, no puedo negar que
realmente me gusta tu culo.
 Mi respiración se engancha en mis pulmones. Santa mierda, ¿Tank está realmente
haciéndome cumplidos? Este mundo debe estar acabándose.
—¿Quieres saber que me gusta? Te sientes como un hombre. Eres rudo, y tienes todos
estos músculos que me dicen que haces ejercicios o una mierda, y eres fuerte, y en serio, en
serio me gusta eso.
Él traza mi grieta con dos dedos, y me estremezco involuntariamente. Se acerca más,
inclina su cabeza hacia mí para que su boca esté junto a mis oídos, pero su voz es lo
suficientemente fuerte como para ser captada por el micrófono—. ¿Quieres saber por qué me
gusta esto?
Esa es una pregunta retórica, ¿cierto? Por alguna razón el taciturno Tank está hablando
de repente, y sus palabras son hipnotizantes. Así como lo son sus dedos que viajan cada vez
más abajo, antes de finalmente encontrar mi agujero.
—Me encanta porque no necesito tener cuidado contigo, ¿no es cierto?
De repente, dos dedos empujan hacia adentro y no puedo contener un pequeño gemido.
El pendejo escurridizo ha encontrado una forma discreta de prueba para ver si me preparé. El
hecho de que pueda deslizarse de esa manera le dice todo lo que necesita, y sé que debería
poder sentir el lubricante que aún está adentro.
—Oh, no, no tengo que tratarte como si fueras una porcelana delicada, porque puedes
tomar mi verga, ¿no?
No es hasta que él me agarra de mi cabello y tira de mi cabeza hacia atrás, que me doy
cuenta de lo que está haciendo. Puta madre. Ha visto mis videos, al igual que yo vi los suyos.
Y tiene mi número a fondo.
Charla sucia, listo.
Jalón de cabello, listo.
Follada ruda, ¿cuánto quieren apostar que eso es lo que va a suceder?

98
Página
 TANK
Empujo dentro de Brewer duro y rápido. Suerte para él, estaba bien preparado previamente,
porque no voy a perder ni un solo preciado segundo de mis tres minutos. Estamos muy fuera
de guión, y Rebel se va a molestar debido a que sé qué para la próxima sesión tengo que ser
pasivo para Brewer, independientemente de si gano esta apuesta. Pero no pude resistir la
oportunidad de borrar la arrogante sonrisa del presumido rostro de Brewer.
—Oh, joder —llora Brewer mientras jalo su cabello y golpeo su próstata con un fuerte
empujón. Lo haré venirse tan rápido que no sabrá que lo golpeó.
Salgo casi todo el camino y lo follo de nuevo, esta vez más lentamente para que pueda
sentir cada centímetro de mi gorda verga arrastrándose a lo largo de su próstata. Los
músculos de Brewer se tensan, y deja escapar un bajo gemido, y sé que lo tengo justo donde
lo quiero. Comienza a retorcerse sobre mi verga y se empuja hacia atrás para encontrarse con
cada golpe.
—Eso es, monta mi verga —me inclino hacia adelante y muevo mi brazo alrededor de la
cintura de Brewer para poder envolver mi mano alrededor de su goteante verga. Gruñe y
comienza a follar mi mano. Muerdo el hombro de Brewer, y gime, su hinchada verga en mi
puño y su culo apretándose alrededor de mí.
Lo follo a través de su orgasmo y luego salgo, me quito el condón y me masturbo
bruscamente hasta que estoy pintando sus nalgas con gruesas cuerdas de mi semen.
—Corte —grita Rebel.
—Maldición, eso fue bueno, bastardo —se ríe Brewer—. ¿Cuál fue mi tiempo?
Me sorprendo un poco por el cumplido y tomo la toalla que Rebel me ofrece para
limpiarme la mano y luego el culo de Brewer.
99

—Dos minutos. Gané.

Página

—¿Estás enojado, Rebel? —pregunta Brewer.

—Nah, está bien. De hecho, decidí atrasar la fecha de la escena unas cuantas semanas
más —dice Rebel, nivelando a Brewer con una mirada que no puedo descifrar.
 Respiro un pequeño suspiro de alivio. Sé que sucederá eventualmente, pero tener
algunas semanas adicionales para adaptarse a la idea no es algo malo.
—¿Hemos terminado aquí? —compruebo. Rebel asiente, y le lanzo la toalla de vuelta y
me dirijo al vestuario para tomar otra ducha.
Parándome bajo el chorro de agua caliente, dejo escapar un pequeño gemido de placer.
No sé qué hay acerca de una buena ducha después de una dura follada, pero juro que es el
paraíso en la tierra.
Mi mente revolotea en relación a la última hora, persistiendo en la sensación de los
músculos de Brewer bajo mis manos, su apretado culo exprimiéndome, los fuertes gemidos
que follé fuera de él. Mi verga salta, medio dura entre mis piernas mientras vierto una
generosa cantidad de gel de baño en mi mano y comienzo a enjabonarme.
—Hey, oso pardo —dice Brewer, tirando de la cortina de la ducha hacia atrás y metiendo
su cabeza.
—¿Te importa? —gruño, alcanzando la cortina y tirando de ella para cerrarla de nuevo.
—Lo siento, gruñón. Quería comprobar si vas a ir a tomar algo cuando termines allí.
—Es viernes por la noche, por supuesto que voy a ir.
Todos salimos a tomar algo los viernes por la noche, siempre lo hemos hecho. Por qué
Brewer sintió la necesidad de interrumpir mi ducha para preguntar, eso está más allá de mí. Y
ahora mi verga está completamente dura de nuevo gracias a él. No es culpa de mi verga que
se confunda cerca de las personas que hemos follado. De acuerdo, no sucede con Rebel, Heart
o Campy, pero aun así… no es como que me guste Brewer, es un pendejo. Es una buena
follada, y un cheque de pago fácil, eso es todo.
—Bueno, si vas a encargarte de esa gigante erección, entonces hazlo rápido para que
podamos irnos.
—¿Podrías jodidamente dejar de mirar a través de la cortina?
—Lo siento —se burla Brewer.
Una vez que Brewer se ha ido, vierto un poco más de jabón en mi mano y la envuelvo
100
alrededor de mi verga. Todavía estoy sensible por haberme corrido hace unos minutos, así que
sólo se necesitan unos cuantos fuertes tirones antes de rociar la pared de la ducha con mi
Página

semen. Y si me imaginé a Brewer mientras me masturbaba, eso es sólo porque acabo de

follarlo.
 Como es costumbre, no tenemos ningún problema saltándonos la larga fila en Bottoms
Up para entrar.
—Esas escenas contigo y Pixie son calientes —dice Pixie en un tono conversacional
mientras ambos nos paramos en el bar esperando nuestras bebidas.
—Gracias, niño.
—Parece que ustedes dos tienen mucha química —continúa.
—¿A qué te refieres? —pregunto, estrechando mis ojos hacia él.
—Oh, nada —me da una dulce sonrisa y luego toma la bebida que el mesero pone frente
a él—. Ahora, si me disculpas, necesito bailar.
Con mi bebida en mano, me dirijo hacia el resto de los chicos. Rebel y Troy ya parecen
haber desaparecido, estoy asumiendo que a la pista de baile. Y parece que Brewer ha
encontrado algo de diversión por la noche.
Siento un gruñido empezando a construirse en mi pecho y me alegra que la música del
club sea más que suficiente para cubrir el sonido. Me coloco al lado de Brewer y el chico que
está colgando encima de él—no porqué quiera tener nada que ver con él, sino porque Heart
está junto a él y quiero hablar con Heart.
—Hey, hombre, ¿cómo te va? —le pregunto a Heart.
Comienza a responder, pero mi atención se desvía hacia la conversación que tiene lugar
a mi lado.
—Eres incluso más sexy en persona.
—Aw, gracias, dulzura. Tú también eres terriblemente sexy.
Ruedo mis ojos. Pensarían que una de sus conquistas objetaría que se les llame por algún
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ñoño apodo cariñoso. Es obvio que olvida sus nombres tan pronto como los escucha.
Personalmente, no me gustaría follar con alguien que no supiera mi nombre. Bueno, con
Página

excepción del trabajo, obviamente.

—¿Quieres ir a algún lado? —pregunta dulzura, y mi mandíbula tiembla mientras espero
escuchar el inevitable acuerdo de Brewer.
 —Gracias por la oferta, pero no es un gran día para eso. Estoy seguro que has visto la
cogida que ese hombre grande allí me ha dado últimamente y filmamos otra escena hoy, así
que estoy un poco sensible.
—Oh, bueno, estoy de acuerdo con ser pasivo si eso está mejor. O, podría simplemente
chupártela —¿sobre entusiasta?
—Gracias, dulzura, tal vez la próxima —regreso mi atención a Heart con una extraña
sonrisa tirando de mis labios.
Una mano descansa en mi hombro, y me doy la vuelta para encontrar a Brewer allí.
—Puede que esto suene extraño, pero no estarías listo para regresar a tu casa y ver una
película, ¿cierto?
Mi boca cae abierta con sorpresa antes de lograr que mi expresión vuelva a ser neutral.
—Sí, seguro —concuerdo con un encogimiento de hombros. Dejando el resto de mi
bebida, coloco el vaso vacío en una mesa cercana y luego asiento a Brewer hacia la puerta.
Ya que vinimos por separado, también conducimos de esa manera hacia mi casa. El aire
cálido de la noche pasa volando mientras viajo por la calle en mi moto, y mi mente da vuelta
a todas las razones posibles por las que Brewer dejaría a un chico y me pediría que
regresáramos a mi departamento para ver una película. No tiene ningún sentido. Brewer y yo
no somos amigos, e incluso si lo fuéramos, esto está fuera de lugar para él.
Dentro de mi departamento, Brewer se deja caer en mi sofá y durante varios segundos
me quedo parado mirándolo. Shaggy salta a su regazo inmediatamente y comienza a lamer
su rostro. Brewer le rasca las orejas y hace ruidos para bebé a mi perro, haciendo que mi
corazón palpite un poco más rápido.
Cuando Shaggy se calma y se acurruca junto a Brewer, un incómodo silencio cae entre
los dos.
—¿Soy yo o esto es extraño? —pregunto.
Brewer se encoge de hombros—. Sí, supongo.
—¿Cuál es la trampa aquí? —pregunto cuando Brewer no ofrece ninguna explicación por
102
su cuenta.
—No lo sé. Supongo que me sentía algo claustrofóbico en el club. No quería arruinar la
Página

diversión de nadie más, y tú de todos modos eres un palo en el barro, así que no pensé que
te molestaría irte antes.
—¿No querías estar en el club? Pensé que era tu hábitat natural. Entre eso y rechazar una
follada, me estoy preguntando si necesitas regresar al hospital.
 —Simplemente no lo tenía ganas. Sé que piensas que no soy más que un culo fácil. Lo
creas o no, no siempre estoy de humor para el sexo. Me follaste como el infierno hace rato,
estoy más que listo para el resto de la noche.
—Está bien —le digo, sin saber como se supone que debo responder a eso—. ¿Qué
quieres ver? —pregunto, hundiéndome en el sofá junto a él.
—¿Podemos ver otra de este tipo Hitchcock como la última vez?
—Seguro.

103
Página
 BREWER
Tank y yo nos hemos enviado mensajes de ida y vuelta varias veces para coordinar una fecha
para trabajar en nuestro proyecto de Literatura Inglesa. Bueno, no una cita8, sino una fecha
para encontrarnos. No fue fácil entre mis dos trabajos y nuestras clases, pero nos las
arreglamos para encontrar un momento después de nuestras clases matutinas y entre mi
turno nocturno en el hospital.
Rápidamente como una barra de cereal del auto y lavo el sabor de cartón seco con agua.
El tráfico es una pesadilla, como siempre, así que llego diez minutos más tarde de lo planeado.
—Lo siento, tráfico —digo cuando Tank abre la puerta de su departamento.
—Está bien —dice simplemente, mientras me deja pasar más allá de él. Con los otros
chicos, siempre abrazo o recibo besos tiernos—ese sería Pixie, que es tan cariñoso que debería
haber nacido siendo un cachorro—pero con mi oso pardo aquí, no sé cómo actuar. A juzgar
por la forma en que me mira por un segundo o dos antes de meter sus manos en sus bolsillos,
él tampoco lo sabe. De alguna manera, eso me ayuda a relajarme.
—Hola —digo y avanzo para un rápido beso en su mejilla.
—Hola —vacila, luego me da una especie de palmadita en el hombro. Joder, somos como
dos adolescentes torpes en el baile de graduación.
Shaggy aparentemente está durmiendo la siesta, pero ahora viene corriendo hacia mí,
lamiendo mi mano y exigiendo que acaricie su panza, algo que no puedo rechazar, por
supuesto. Esa pequeña bola de pelo tiene que ser el perro feo más lindo que he visto en mi
vida.
—¿Dónde quieres sentarte? —pregunto. 104
—Cierto. Limpié la mesa del comedor.
Lo sigo a su sala de estar, donde nos espera una mesa de comedor casi vacía, con solo
Página

una laptop y las notas de Tank.

—¿Puedo conseguirte algo de beber?

8
Fecha y cita en inglés se escribe igual: date.
 —¿Tienes té?
Él asiente y se retira a su cocina para hacer té. Vuelvo a dar vueltas por su departamento,
Shaggy siguiéndome de cerca. Ha cambiado algunos de sus modelos de Lego, me doy cuenta.
Sobre su mesa de café, hay un enorme libro con un elegante edificio en la cubierta en blanco
y negro. Me siento en el borde del sofá y lo abro con cuidado, debido a que parece que podría
haber sido costoso.
Es un foto-libro con imágenes que llenan páginas de todo tipo de edificios y estructuras.
Hay un capítulo sobre los rascacielos de todo el mundo, uno con edificios de oficina, luego
hay puentes e incluso pequeñas casas.
Tank entra en la habitación con nuestra bebidas.
—Muéstrame algo que ames —le pido.
Duda por un segundo, pero luego toma un lugar en el sofá a mi lado y hojea el libro hasta
que se detiene en una fotografía de un puente moderno—. Este es el puente Erasmus en
Rotterdam, Holanda.
Estudio la imagen que muestra un puente asimétrico, cruzando un río—. ¿Qué tiene de
especial este puente?
Tank apunta hacia el lado izquierdo del puente en la foto—. ¿Ves lo que hicieron allí? El
poste tiene cables que soportan el puente, pero debido a que hicieron la forma tan única y le
dieron ese color azul brillante, también hace que el puente se vea elegante. Es llamado el
cisne, porque en conjunto con la amplia base del poste, tiene la forma estilística de uno desde
la distancia.
Entrecierro los ojos y veo lo que quiere decir. Hmm. Eso es genial—. ¿Por qué no hicieron
un mismo poste y cables al otro lado del puente para hacerlo simétrico?
Tank me sonríe—. Siempre hay una tensión en la arquitectura. Por un lado, las personas
tienden a gravitar hacia la simetría, debido a que crea una sensación de estructura y orden
que nos gusta. Pero la simetría también suele ser aburrida porque es lo que se espera. La
creación asimétrica, una interrupción bien pensada de la norma, resulta en una tensión que
es profundamente satisfactoria a nivel estético. Si hubieran creado el mismo poste en el otro
extremo del puente, no habría sido tan hermoso.
105

Miro hacia la foto otra vez y trato de imaginarla simétricamente. Tiene razón en que no
Página

se habría destacado tanto—. Nunca me di cuenta de eso —digo.

—En este caso, también había una razón práctica. El puerto de Rotterdam es el más
grande de Europa y la ciudad recibe una gran cantidad de tráfico de agua de los grandes
barcos, algunos de ellos demasiado grandes para pasar debajo del puente. En realidad, es el
puente basculante más grande de Europa y tiene el panel más grande de su tipo en el mundo.
Me fascina que algo tan práctico y fuerte pueda ser tan hermoso al mismo tiempo.
Nunca he visto a Tank tan animado y apasionado. Normalmente es un chico taciturno,
pero ahora está gesticulando y hablando con tanto entusiasmo que parece que es un hombre
diferente—. Eso es súper interesante —digo—. ¿Has visto muchos de estos en la vida real?
¿Sabes, para inspirarte o algo así?
—Es mi sueño ir a Europa y ver estos increíbles diseños en persona. Europa occidental
es un lugar tan emocionante para la arquitectura moderna, especialmente Alemania y
Holanda, pero también Francia y España…
El profundo anhelo en su voz me golpea—. ¿Tal vez después de que te gradúes puedes
tomar un viaje?
La alegria en su rostro se atenúa un poco—. Tal vez. Es caro.
—Sólo tendrás que follar tu camino a Europa, entonces —bromeo, esperando sacarle
otra sonrisa—. Si tus videos se vuelven más populares, eso podría funcionar, y admítelo,
follarme no es exactamente un sacrificio…
Los ojos marrones de Tank se enfocan en mí, algo indescifrable destellando sobre su
rostro—. No —dice—. No lo es.
Me mira fijamente por un segundo o dos, la tensión se calienta a fuego lento entre
nosotros, y luego gira bruscamente su cabeza—. Tenemos que empezar a trabajar en nuestro
proyecto.
—¿Tienes alguna idea para un tema? —le pregunto cuando nos instalamos en el
comedor, Shaggy se deja caer de nuevo en su pequeña cama de perro. Se supone que
debemos encontrar cuatro libros con un tema en común y discutir cómo cada uno aborda el
tema.
Tank frota su barba con un gesto lento, un ceño fruncido entre sus ojos—. ¿Estaba
pensando que podríamos hacer algo con la medicina? Como, ¿doctores como personajes, o
una enfermedad, tal vez?
Mi boca se abre un poco antes de recomponerme—. Eso es… eso sería genial, gracias.
106
¿Estás seguro de que no preferirías hacer algo que te interese?
Se encoge de hombros—. La ingeniería y la arquitectura no son tan interesantes de leer,
Página

creo. Son más cosas que tienes que hacer o ver. ¿Conoces algún libro que se ajuste a un tema
de medicina?
Realmente me gusta la idea de escoger libros con doctores en ellos. No es que haya leído
mucha literatura, porque soy más un tipo de chico de thrillers, pero si tengo que leer, los
doctores lo harían mucho más intesante—. No en la punta de mi cabeza, pero podemos buscar
en Google.
Tank tararea en aprobación y pegamos nuestras cabezas juntas detrás de su laptop para
ver qué podemos encontrar—. Catch-22 —dice Tank—. En realidad leí ese. Fue interesante. Y
no he leído One Flew Over the Cuckoo’s Nest, pero he visto la película.
—Tampoco lo he leído, pero suena bien para mí. Doctor Zhivago, también ese suena
genial. ¿Lo conoces?
Tank frunce el ceño—. ¿No es el que está ambientado en Rusia? Sé que fue adaptado a
película.
Una idea aparece en mi cabeza—. ¿Y si hacemos un poco más? ¿Qué pasa si elegimos
libros que también se han convertido en películas y comparamos tanto los libros como las
películas? Tendríamos un tema doble con el que podríamos trabajar, medicina y adaptación
cinematográfica. Te gustaría la parte de la película, ¿cierto?
Tank me dispara una inesperada sonrisa. No sé por qué eso me hace feliz, pero por
alguna razón lo hace.

107
Página
 TANK
El agua caliente cae en cascada sobre mi cuerpo mientras observo la espuma escurrirse hacia
el desagüe. Mi verga ya esta dura en anticipación de la escena que estamos filmando hoy. Se
suponía que esta era la escena donde yo sería pasivo, pero ya que Rebel lo cambió, se supone
que debo comer el culo de Brewer y masturbar nuestras vergas juntas en compensación.
Incluso con este aplazamiento de una semana, sé que el reloj se está acabando y con él
mi oportunidad de encontrar a alguien más para que me folle antes de que Brewer pueda
hacerlo. Lo jodido es que en las últimas semanas, Brewer se ha convertido en la persona que
mejor me conoce. Jesús, sólo pensar eso es como un mundo bizarro.
Tal vez, en cierto modo, Brewer no es tan malo como pensé que sería. Él no es tan
superficial como siempre parecía. Seguro, todavía hace de tonto como el infierno de
comentarios y folla su camino a través de la vida. Pero, tal vez no lo odio como pensé que lo
hacía. No es que me guste. Jadeo ante mis errantes pensamientos y cierro el agua.
—Hey, oso pardo —saluda Brewer cuando salgo de la ducha.
—Hey, folla chicos —respondo con un indicio de sonrisa.
Se está cambiando a su traje de trabajador de construcción, y me permito unos
segundos para apreciar la vista de su bonito y redondo culo mientras se inclina para subirse
sus pantalones. Me endurezco una vez, dos veces… un silencioso gemido se escapa de mis
labios cuando se da la vuelta con una obvia erección en sus pantalones.
—¿Viéndote ansioso por mi lengua en tu culo? —bromeo con voz ronca.
—Mmmm, amo un buen rimming.
Me rió entre dientes y sacudo mi cabeza. ¿Cómo debe ser simplemente decir cualquier
108
cosa inapropiada, sexy y ridícula que aparezca en tu cabeza sin vergüenza?
Agarro una toalla y me seco rápidamente. Luego me visto por cuarta vez con el traje de
Página

obrero de contracción y camino hacia el estudio.

—Hey, chicos, ¿están listos para ir a trabajar? —pregunta Rebel cuando llegamos al final
de las escaleras.
—Nacimos listos —declara Brewer, y yo simplemente asiento.
 —Sólo para que ambos sepan, la escena de Tank siendo pasivo es en tres semanas.
Tenemos la próxima semana libre por la convención en San Francisco, luego tenemos una
escena en donde Tank se folla a Brewer, y después Tank de pasivo. ¿Estamos claros con esa
línea de tiempo?
Trago y mi culo se aprieta involuntariamente. Mirando a Brewer, lo encuentro luciendo
incómodo bajo la mirada interrogadora de Rebel.
—Claro como el cristal, jefe —Brewer le da una saludo a Rebel y luego se gira y hace lo
mismo con Bear.
Tres semanas para ser follado fuera de cámara o dejar que el mundo me vea siendo
pasivo por primera vez.
Miro a Brewer de nuevo, y él me está mirando de forma extraña, casi como si hubiera
algo que quisiera decir pero no puede. ¿Es posible que sepa que nunca he sido pasivo? No es
tan difícil suponer que no lo he hecho, dada mi presentación. Incluso los hombres gays
tienden a comprar los estereotipos.
—¿Listo el estudio? —pregunta Bear, incitándonos a que nos apresuremos al lugar. El
estudio es un nuevo sitio de construcción, con andamios y herramientas por todas partes.
Tomo una respiración profunda y mentalmente sacudo afuera todo lo que no sea el
trabajo en cuestión. Nada importa ahora, excepto hacer esto con Brewer. Un cálido cosquilleo
comienza en la boca de mi estómago con ese pensamiento y acaricia mi verga de vuelta a la
dureza.
—Acción —grita Bear.
—Te vi mirándome hoy —acusa Brewer, fácilmente metiéndose en el personaje.
—Estaba mirando porque estabas haciendo un trabajo de mierda, y necesito asegurarme
de que el lugar que estamos construyendo no se caiga una vez que hayamos terminado —me
burlo, dejando que el veneno se filtre en mi voz.
—¿Oh, sí? ¿También es por eso que tu verga está dura? —provoca, acercándose a mí y
palmeando mi erección a través de mis pantalones.
Gruño con irritación, golpeando su mano lejos como lo haría en la vida real.
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—El trabajo duro me pone caliente; no tiene nada que ver contigo, pendejo.
Página

—El trabajo duro también me pone caliente —Brewer desabrocha sus pantalones para
exponer su dura y palpitante verga—. Si los dos estamos calientes, también podríamos hacer
algo al respecto.
 Gruño mi acuerdo y rápidamente bajo mis propios pantalones. Brewer patea fuera sus
zapatos y sale de sus pantalones. Con mis propios pantalones desechados, agarro a Brewer
por la garganta, no fuerte, pero haciendo que parezca que estoy siendo rudo con él. Su
respiración se detiene y su verga se contrae contra mi cadera. Hmm, al folla chicos le gusta.
—Agarra esa viga y agáchate —le ordeno bruscamente, dándole un empujón mientras lo
suelto. Los ojos de Brewer brillan con calor que fácilmente podría ser indignación o lujuria, tal
vez un poco de ambos. Pero él hace lo que le digo, asumo que por el guión, pero una posesiva
voz en el fondo de mi mente insiste en que es debido a que él quiere que lo toque.
Corro mi mano a lo largo de su espalda, siguiendo la pendiente de su culo, y luego agarro
sus dos nalgas redondas en mis manos y las separo para poder ver su agujero. Puedo sentir
una cámara sobre mi hombro, sin duda acercándose para poder capturar la vista de su bonito
y rosado anillo.
Escupo en su agujero y uso mi pulgar para frotarlo alrededor. Los gemidos de Brewer
son ruidosos, y por alguna razón, encuentro irritante saber que los sonidos son sólo para
mostralos. Sacudo la cabeza hacia mí mismo. Por supuesto, es para montar un espectáculo,
estamos haciendo un trabajo.
Gruño bajo en mi garganta mientras empujo mi pulgar dentro en su entrada apretada, y
él gime.
—Mmmm, ¿te gusta mi culo, oso pardo? —se burla Brewer y luego se inmoviliza cuando
se da cuenta de lo que acaba de decir. Gira su cabeza hacia donde están parados Bear y
Rebel—. Mierda, ¿podemos editar eso? El mundo no necesita saber que mi estúpido apodo
para Tank se me salió.
Bear asiente y hace un movimiento con su mano para que sigamos. Respiro un suspiro
de alivio, pero el resbalón me deja un poco desequilibrado por razones que no puedo señalar.
Después de unos minutos más de jugar con su culo con mis dedos, me pongo de rodillas
como el guión indicaba que debería.
Muerdo la curva de la nalga izquierda de Brewer, y él deja escapar un pequeño chillido
chistoso.
—Lo siento, me dio cosquillas —se ríe, y presiono mi rostro contra su muslo para ocultar
110
mi propia sonrisa. Parece que la pobre producción va a tener un gran trabajo editando este.
Página

Forzando una expresión neutral, vuelvo a la tarea en cuestión, evitando el lugar

aparentemente cosquilloso donde el culo de Brewer se encuentra con su muslo. El sabor
almizclado y salado de la piel de Brewer bajo mi lengua hace que me duela la verga.
 Arrastro mi lengua desde sus bolas hasta su agujero, haciendo que Brewer se
estremezca y gima. Lamo alrededor de su anillo, amasando sus nalgas en mis manos y
sacando sonidos cada vez más desesperados de él.
Alterno entre largas lamidas a través de su anillo y meter mi lengua dentro de su agujero
ablandándose. Brewer empuja su culo contra mi rostro gimiendo y rogando por más. Estiro
mi mano entre mis piernas y me acaricio a mí mismo.
—Por favor, estoy cerca —advierte Brewer, su mano encontrando su camino hacia su
verga.
Me pongo de pie y le doy la vuelta a Brewer, tomando un segundo para catalogar sus
mejillas enrojecidas y la necesidad en sus ojos. Presiono mi cuerpo contra el suyo, alineando
nuestras vergas para poder sostenerlas en una mano.
Brewer deja escapar un grito ahogado cuando empiezo a masturbar nuestras vergas
furiosamente con solo un de poca saliva y nuestro pre-semen como lubricante. Él rasguña mi
pecho, su cabeza cayendo hacia atrás en un gemido desesperado.
—Oh, Dios, oh, joder. Me vengo —jadea, y gruño mi aprobación, añadiendo el más ligero
giro cuando alcanzo nuestras cabezas, y recogiendo su semen mientras chorrea en mi palma.
Con la lubricación adicional, tiro de mí más fuerte, más rápido a medida que Brewer monta
las últimas olas de su orgasmo. Gimo ruidosamente mientras mi propia verga da una fuerte
pulsada, y cubro a Brewer con mi propia liberación.
Ordeño hasta la última gota y luego levanto mi mano cubierta de semen hasta la boca
de Brewer. La abre perezosamente y lame mi mano cuando se acerca lo suficiente. En un
impulso, lo acerco para un beso cuando termina, queriendo probar nuestra liberación
combinada en su lengua.
—Corte —grita Rebel.
Dejo salir una larga respiración mientras suelto a Brewer, sintiendo que mi cerebro entró
en una extraña niebla durante esa escena.
—¿Estuvimos bien? —compruebo. Rebel asiente, y tomo la toalla que me arrojó uno de
los miembros del equipo. 111
Limpio unas cuantas gotas de semen de ambos, y luego Brewer y yo regresamos al
vestuario en silencio.
Página

—Buen trabajo hoy —le digo con torpeza mientras Brewer se vuelve a poner sus
pantalones.
 —Gracias, también tú, osito de peluche —me dispara una sonrisa juguetona por encima
de su hombro—. ¿Tú, um, quieres estudiar juntos o algo? Quiero decir, probablemente tengas
cosas que hacer hoy, lo cuál está bien, yo sólo…
—Sí, eso suena genial. ¿Me dejas tomar una ducha realmente rápida primero?
—Okay, sí, eso suena bien.
Una sensación extraña y ligera me persigue a las duchas y aún persiste cuando me quito
la toalla. No puedo poner mi dedo en ello, pero casi creo que tiene algo que ver con Brewer.

112
Página
 BREWER
Rebel nos invitó a todos a un evento de construcción de equipo, como él lo llamó. Algo sobre
aumentar el nivel de confianza entre los grandes nombres de la alineación de los Ballsy Boys
ahora mismo. Eso significa yo, Campy, Pixie, Heart, y por supuesto, Tank. Luego está el propio
Rebel, Bear, y los dos camarógrafos Joey y Bryce, porque Rebel quiere que establezcamos una
relación con ellos también, sea lo que sea que eso signifique.
No tengo dudas de que es por el extraño accidente que pasó con Tank, pero no importa.
Siempre y cuando él entienda que trazo la puta línea en las caídas de confianza. Si me pides
que me deje caer hacia atrás con los ojos vendados y que confíe en que alguien más me atrape,
me voy. Eso nunca va a pasar.
Para mi sorpresa, la dirección en donde nos dijeron que apareciéramos a las siete es un
gimnasio de escalada cubierto. Mi estómago cae cuando veo las inmensas paredes en varias
inclinaciones inversas con todo tipo de perillas y ganchos y agarraderas. De repente, las caídas
de confianza no parecen tan importantes.
—Hey, estás aquí —Rebel me saluda con una fuerte palmada en la espalda. Hacemos una
cosa de medio abrazo masculino, y luego lo sigo a una habitación donde los otros chicos están
pasando el rato, charlando unos con otros. Tank está en la esquina de la habitación, hablando
con Bear. No es que lo estuviera buscando ni nada.
—Estamos esperando a que llegue Heart, y luego estamos listos para empezar —dice
Rebel.
—¿Qué planeaste exactamente para nosotros? —pregunto, tratando de mantener el
estrés fuera de mi voz.
Se encoge de hombros—. Empezaremos con algunos juegos para conocernos mejor, y
ya veremos después. 113
Meneo mis cejas, asumiendo mi personalidad de Brewer—. Pensé que ya nos
conocíamos bastante bien.
Página

Eso me gana una bofetada en la nuca, y sonrío. Algunas cosas nunca cambian. Tank me
lanza una mirada asesina desde el otro extremo de la habitación, y apenas puedo reprimir el
impulso de sacarle la lengua.
 Heart entra unos segundos después, y una vez que terminamos con otra ronda de
abrazos de hombres, Rebel se pone manos a la obra—. Bueno, como expliqué en el correo
electrónico, el objetivo es llegar a conocerse un poco mejor, crear más confianza y también
divertirse. Empezaremos con esto último y jugaremos una ronda de Cartas Contra la
Humanidad.
Hay risas y sonrisas por toda la habitación. Esto será divertido en realidad. No necesito
mirar a Tank para saber que su cara se parecerá a la mía después de haber comer algo amargo.
Esto no es su tipo de cosas. Yo, sin embargo, vivo para este tipo de mierda.
Pedimos algunos refrescos y luego nos sentamos alrededor de la gran mesa ovalada en
el centro de la habitación—. Para facilitar las cosas, empezaré como el Zar de las cartas —dice
Rebel.
Él nos entrega todas nuestras tarjetas blancas, y yo las leo rápidamente. Tiene algunas
buenas, pero por supuesto todo depende de lo que diga la tarjeta negra.
—Bien, aquí va —dice Rebel—. Dame tu mejor opción para... aprendí por las malas que
no puedes alegrar a un amigo afligido por...
Rápidamente releo mis opciones y ya empiezo a sonreír cuando veo uno que lo va a
matar. Todos deslizamos nuestras opciones hacia Rebel, boca abajo por supuesto, y él las
baraja rápidamente antes de leer en voz alta. La primera—Ébola—ya nos tiene riendo y para la
tercera—la masturbación—todos estamos muriendo. Pero aún no ha leído la mía
—Bien, la siguiente —dice Rebel—. Aprendí por las malas que no puedes alegrar a un
amigo afligido hablando del tamaño de tu pene en televisión en vivo.
Apenas se las arregla para decirlo antes de reírse, y en cuestión de segundos, todos nos
unimos a él. Pixie se hunde contra Heart, sosteniendo su estómago, e incluso la cara de Tank
se abre en una sonrisa.
—Brewer lo lograría —dice Joey, secándose las lágrimas de los ojos.
Ensancho mis ojos y finjo inocencia—. ¿Moi?
—Ni siquiera intentes negarlo. No tienes vergüenza —dice Campy.
Me encojo de hombros. ¿Qué puedo decir? Me conocen bien.
114

Rebel lee las últimas respuestas en esta ronda, pero este punto impresionante es mío,
Página

como era de esperar.

Campy es el siguiente, y tiene una buena—, El Cosmo de este mes: condimenta tu vida
sexual trayendo... punto, punto, punto... a la habitación.
 Miro mis opciones de nuevo. Hmm, ¿cuál debería escoger? Tengo ‘bebés muertos’, que
es un poco espeluznante, o ‘muslos poderosos’, que podría funcionar. Tal vez mi mejor opción
sea ‘apetitosas bubis’. Deslizo esa hacia Campy.
Hay algunas combinaciones hilarantes otra vez. Campy lee la mía a la tercera, y resulta
en unas risas burlonas—. No bubis para mí, muchas gracias —dice Pixie, riendo—. Prefiero las
bolas.
—Bolas apetitosas, entonces —bromeo.
Pixie sacude su cabeza hacia mí—. Las bolas son siempre de apetitosas... aunque todas
saben diferente.
—Oh, ahora queremos un ranking. Clasifícanos a todos en cuáles son las bolas que saben
mejor —lo desafío.
Pixie sonríe, haciéndolo aún más lindo. Es tan adorable que hay días en los que sólo
quiero llevármelo a casa para acurrucarme con él—. En primer lugar, no es una buena
pregunta, porque estás sugiriendo que los he tenido a todos ustedes, lo cual no es cierto.
Aparte de Joey y Bryce, obviamente, está el esquivo Tank con el que no he tenido el placer
de... conectar.
Casi contengo la respiración, esperando que Tank lo despida con un gruñido, pero me
sorprende diciendo—: Di la palabra, bebé, y con gusto pondré mis bolas en tu boca.
Desde el rabillo del ojo, veo a Bear ponerse rígido por un segundo antes de volver a pegar
una sonrisa en su cara. ¿Qué está pasando entre esos dos? No puedo evitar hurgar, sólo un
poco—. También está Bear, por supuesto. No has probado sus bolas, ¿verdad?
Pixie se pone rígido, y sus mejillas se ponen rojas, mientras que los demás simplemente
se ríen y descartan la idea. Bear, sin embargo, no se está riendo. Está tratando de mantener
la compostura, pero ahora mismo me está disparando ojos de láser y, estoy feliz de sentarme
al otro lado de la mesa
Joey se inclina hacia atrás en su silla y dice—: Yo tomaré las bubis ante las bolas cualquier
día.
—Estás completamente jodido, hombre —dice el corazón—. Ves porno gay en vivo casi
115
todos los días, ¿y sigues siendo heterosexual? ¿Cómo coño es eso posible?
Joey se encoge de hombros—. Es lo que es, hombre. No me importa observar sus culos
Página

todo el día, pero realmente no hace nada por mí, lo siento chicos.
—Bueno, si el buen culo de Brewer no te hace gay, nada lo hará —bromea Heart.
—O la verga de Rebel —bromeo—. Esa cosa es una obra de arte.
 Rebel me para el dedo, pero con una gran sonrisa en la cara—. ¿Me extrañas?
Le lanzo un beso con la mano—. Sabes que sí, bebé.
—¿Te gusta más el culo de Brewer que el mío? —Pixie le pregunta a Heart con un puchero.
Heart se recupera rápidamente—. Nada ni nadie puede llegarle tu culo, bebé.
—Llgarle —dice Pixie y suelta una risita—. Puedes llegarme en cualquier momento.
Salta en el regazo de Heart, todo burbujeante y felizmente ingenuo. ¿Se da cuenta de
que Bear no está nada contento con su coqueteo? Si lo hace, parece que no le importa
mientras besa a Heart en la boca y luego se asienta en su regazo.
Me pregunto si Dean no hubiera muerto, si yo sería tan feliz y despreocupado como él,
si mi exterior coincidiría con mi interior. Pero, ¿cómo sé que es realmente feliz por dentro? No
importa lo que basura diga Rebel acerca de conocernos mejor, ninguno de nosotros realmente
nos conocemos el uno al otro. Seguro como el carajo que nadie me conoce.

116
Página
 TANK
Veo como la sonrisa de Brewer se desliza un poco, y por un breve instante, dolor aparece
detrás de sus ojos. Se siente como un puñetazo en el pecho, pero tan pronto como la máscara
se desliza, se vuelve a colocar en su lugar con una sonrisa aún más brillante.
—Me estás poniendo celoso. Quiero que ese lindo culito se mueva en mi regazo —
coquetea Brewer, mirando a Pixie. Heart aprieta su agarre alrededor de la cintura de Pixie y
dice algo acerca de que Brewer tiene que pelear con él para llegar al culo de Pixie. Todo el
tiempo, Bear observa con el ceño fruncido apenas escondido.
Pero el obvio flechazo de Bear por Pixie no es de mi incumbencia en este momento. Ver
a Brewer coquetear y reír aún más después del microscópico momento de dolor tiene los
engranajes en mi mente girando. No sé qué significa, pero tiene que significar algo.
—Asumo que como estamos sentados a medio metro de una pared de escalada, ¿eso
está en la agenda? —pregunta Campy, mirando la pared con interés.
—Por supuesto. La construcción de confianza y toda esa buena mierda —dice Rebel—.
Por qué no se emparejan y traeremos al instructor con los arneses y todo eso.
Heart reclama Pixie mientras que Campy y Joey se emparejan, así como Bear y Bryce, lo
que me deja con...
—¿Has hecho esto antes? —pregunta Brewer, mirando la pared—. Es bastante alto,
¿verdad?
—Lo he hecho una o dos veces. Parece de una altura estándar, probablemente de seis
metros.
La manzana de Adán de Brewer crece mientras traga—. ¿6 metros? Eso es bastante alto
—repite. 117
—Agarra un arnés y Mike te ayudará a ponértelo correctamente para que no te caigas y
te rompas el cuello.
Página

—¿Rompernos el cuello? —murmura Brewer, su voz baja, pero llena de ansiedad.

—¿Estás bien? —susurro.
—¿Qué? Oh sí, estoy fabuloso —Brewer pega una sonrisa poco convincente. Sus manos
están temblando notablemente mientras se estira por un arnés.
 Mi mente examina algunas opciones posibles: podría ignorar las señales de miedo que
Brewer está enviando y dejar que se retire de hacer esto o que encuentre sus bolas y vaya por
ello. Podría comentarle por la fobia que obviamente tiene, o...
—Ah, ow —digo en voz alta, agachándome y agarrándome el estómago.
—¿Estás bien, Tank? —pregunta Rebel, poniendo su mano en mi espalda mientras sigo
gimiendo.
—No sé, puede que necesite ir a casa y acostarme. ¿Puedes llevarme, Brewer?
—Por supuesto —dice rápidamente, ayudándome a pararme y poniendo mi brazo sobre
su hombro para poder ayudarme a llegar al auto—. ¿Seguro que no necesitas ir al hospital?
¿Te han extirpado el apéndice? ¿Qué hay de tu vesícula biliar? Podría ser diverticulitis, también,
que es dolorosa y puede requerir cirugía si hay suficiente daño en partes de su intestino
grueso.
—Brewer —corté su preocupación—. Estoy bien. Estaba fingiendo para sacarte de la
escalada.
—¿Qué? —jadea, deteniéndose abruptamente—. ¿Por qué harías eso? ¿Cómo lo supiste?
—Era obvio que estabas enloqueciendo, y pensé que no querías que nadie se diera
cuenta de que le tenías miedo a las alturas. No estoy seguro de por qué es un gran problema,
es una fobia común, pero eso depende de ti compartirlo o no.
—Bueno, gracias. Pero sigo sin entender por qué harías eso por mí. Podrías haber
disfrutado viéndome hacer el ridículo, teniendo un ataque de pánico a medio metro del suelo.
Brewer me mira y me estudia mientras trata de averiguar mis motivos. La verdad es que
ni siquiera sé por qué lo hice. Me sentí bien en el momento, así que me fui con ello.
—Sí, bueno, ahora me debes una, así que todos ganamos
—Brewer sonríe, una sonrisa genuina esta vez.
—Gracias, osito de peluche.
Gruño en respuesta, porque es más fácil que lidiar con la emoción en la voz de Brewer. 118
—¿Quieres ir a comer o algo? —sugiero después de unos segundos de silencio incómodo.
—Sí, ahora que lo mencionas, no he comido.
Página

—¿En todo el día?

Las mejillas de Brewer se ponen rosas y él mira hacia otro lado.
 —Sí, todo el día —murmura de una manera que me hace pensar que está mintiendo.
¿Cuánto hace que no come? ¿Y por qué?
Sigo a Brewer hasta su auto y me pongo en el asiento del pasajero.
—Entonces, ¿crees que Pixie y Bear se enrollaron o es sólo Bear caliente por él? —
pregunta Brewer conversacionalmente cuando salimos del estacionamiento.
—Ni idea, y no es asunto nuestro.
—No eres divertido —se queja Brewer—. Tal vez ese debería ser tu nuevo apodo, Capitán
No Diversión —me mira con una sonrisa de satisfacción, luego extiende la mano y la mete bajo
mi camisa, acariciando con sus dedos el pelo de mi estómago—. Nah, creo que me quedaré
con oso pardo.
Gruño bajo en mi pecho, más debido al calor que su tacto está chispeando en la boca de
mi estómago que por la irritación, para variar.
—Manos fuera, folla-chicos. Te lo dije antes, no soy uno de tus juguetes —empujo su
mano fuera.
—Pero eres un juguete tan divertido, oso pardo —provoca Brewer con una voz ronca que
es como un agarre apretado en mis bolas.
—Guarda esa mierda de coqueteo para los otros chicos, ¿quieres?
—No son tan divertidos para burlarse como tú.
—Estoy seguro —refunfuño, ignorando la extraña sensación de satisfacción floreciendo
en mi pecho.
Llegamos a una de mis hamburgueserías favoritas y el estómago de Brewer gruñe.
—Te dije que tenía hambre —se ríe mientras salimos del coche. Como de costumbre,
volteo unas cuantas cabezas cuando entramos, lo que generalmente pone a la gente nerviosa
por mi tamaño amenazador y mi ceño fruncido típico. Brewer gira cabezas por una razón
totalmente diferente, y vuelve a encender ese punto gruñón en mi pecho. Debe ser agradable
pasar por la vida siendo adulado, teniendo todo lo que quieres que se te entregue. Entonces
recuerdo el destello de dolor de antes, y me pregunto de nuevo si hay algo detrás de la imagen
119
despreocupada y del folla-chicos que le muestra al mundo.
Nos sentamos y terminamos hablando de nuestra tarea de inglés y de otras clases que
Página

estamos tomando hasta que llega nuestra comida. Brewer ataca su hamburguesa como si no
hubiera comido en una semana, comiendo grandes bocados y gimiendo mientras se chupa la
grasa de sus dedos.
—¿Cuándo comiste por última vez? —pregunto en un tono forzado e informal.
 Brewer me mira y se mete tres papas fritas a la vez a la boca—. Soy un chico grande,
puedo cuidarme solo.
Levanto las manos en rendición y luego me concentro en mi propia comida. Tiene razón,
es un adulto. Si quiere andar sin comer, es asunto suyo. Incluso si el pensamiento se sienta
pesado en la boca de mi estómago.

120
Página
 TANK
Un millón de escenarios horribles revolotean en mi mente mientras entro en el estudio y me
dirijo hacia la oficina de Rebel. La última vez que Brewer y yo tuvimos que reunirnos con Bear
y Rebel, terminé con un contrato firmado para que Brewer me diera por el culo. No puedo
decidir si lo que sea que tengan que decirnos hoy podría ser peor.
Me tiene un poco perturbado que terminaran dejando algunos momentos extraños en
la última escena, como la risa de Brewer cuando mi mordida le hizo cosquillas. Me imaginé
que lo editarían como editaron a Brewer llamándome accidentalmente oso pardo.
Toco la puerta y Rebel grita para que entre. Brewer ya está sentado en una silla frente a
Rebel y Bear, luciendo sexy como el demonio, pero tan nervioso como yo. No es obvio, pero
su cabello está un poco torcido como si él hubiera estado tirando de él antes de entrar, y su
labio inferior está hinchado.
Me siento en la silla vacía al lado de Brewer, cruzo los brazos y miro a Rebel mientras
espero la bomba que está a punto de lanzar.
—Gracias por venir, chicos —dice Rebel con una sonrisa alegre.
—Sí, sí. ¿Podemos saltarnos las sutilezas e ir al grano?
—Revisa tu actitud, Tank —reprende Bear, y Brewer se ríe de mí por ser regañado.
—Este es el trato, chicos —Rebel me fija con una mirada y luego se gira hacia Brewer—.
Sabes que los espectadores te adoran. Esta serie que hemos estado filmando con ustedes dos
es la más popular hasta ahora. Y todos están salivando por finalmente verte ser pasivo, Tank.
Gruño en reconocimiento. Aunque se suponía que mi escena de pasivo iba a ocurrir
antes, Rebel había decidido retrasarla y construir la anticipación un poco más. Al menos, esa
fue su explicación. Por alguna razón, tengo la sensación de que había algo más, basado en la
mirada que pasó entre él y Brewer cuando nos lo dijo.
121

—¿Estás añadiendo más cláusulas o quieres más de diez escenas? —adivina Brewer.
Página

—Algo así —sonríe nerviosamente y luego mira a Bear, que levanta las manos como si le
dijera a Rebel que lo deje fuera de esto—. La cosa es que he estado haciendo un montón de
estudios de mercado, y creo que hay un potencial sin explotar. Aparentemente, a muchos
espectadores les encanta ver parejas de la vida real en la pantalla. Y después de que dejamos
algunos de los momentos crudos y juguetones de la última escena, la gente está bastante
segura de que están juntos. El Hashtag Trewer es tendencia.
Mi estómago cae.
—Oh, demonios no —sacudo la cabeza y fijo mi expresión en una mirada de enojo—. De
ninguna manera, Rebel.
—¿Ni siquiera por diez mil más cada uno?
Me desinflo y echo un vistazo a Brewer.
—Espera, ¿diez mil más por qué exactamente? —pregunta Brewer.
—Quiere que finjamos ser novios en la vida real —pongo al corriente a Brewer.
—¿Qué? —Brewer frunce el ceño—. ¿Qué tendríamos que hacer exactamente?
—No mucho —Rebel se apresura a tranquilizarnos—. Publicar unas cuantas fotos en
Instagram, tomarse de la mano en público un poco. Aparte de eso, déjenme toda la emoción
de las redes sociales a mí —explica Rebel—. Oh, y no puedes decirle a nadie que es una treta.
Ni siquiera los otros chicos, por si a alguien se le sale o algo así.
Me muevo en mi asiento y miro a Brewer de nuevo. Eso no suena a demasiados
problemas por tanto dinero como lo que ofrecen.
—No puedes follar por ahí mientras seamos novios —le señalo a Brewer, mi voz más
áspera de lo que pretendía.
Brewer me mira con los ojos entrecerrados.
—Entonces tú tampoco puedes.
—Oye, no hay problema —levanto las manos—. No soy el que se tira a un tipo diferente
cada fin de semana. La mitad del tiempo no puedes ni siquiera molestarte en llevártelos a
casa, simplemente te los coges en el baño del club.
—Discúlpame. No me di cuenta de que eras mi puta madre —espeta Brewer.
Me levanto rápidamente, mi silla retumbando en el suelo detrás de mí. 122
—Chicos —grita Bear mientras Brewer también sale disparado de su silla—. Esto no va a
funcionar si no pueden fingir que se agradan el uno al otro —la expresión de Brewer se
Página

transforma de enojada a una sonrisa azucarada.

—Eso no es problema. ¿Qué es lo que no hay que amar de mi gran hombre oso pardo?
—se burla Brewer, extendiendo su mano y metiéndola bajo mi camisa. Sus dedos acarician el
parche de pelo oscuro de mi estómago, y suprimo un escalofrío—. Te das cuenta de que si no
se me permite follar con nadie más, eso significa que tendrás que cuidarme fuera de cámara.
 —¿Tu mano derecha está rota? —desafío.
—Ese es el trato, osito de peluche, tómalo o déjalo —Brewer me mira fijamente con
desafío en sus ojos.
—Dame el maldito papel para firmar —exijo, extendiendo mi mano hacia Rebel.
Él empuja los papeles hacia nosotros y Brewer y yo firmamos rápidamente.
—Esto va a ser divertido, labios de azúcar —se burla Brewer.
—Oh sí, mucha diversión.
—¿Por qué no agarran sus cheques de bonificación y van a hacer algo juntos en público?
—sugiere Bear—. Y juega limpio.
Salimos juntos del estudio y Brewer me agarra de la mano. La arranco instintivamente
antes de recordar que se supone que es mi novio ahora.
—Espera un segundo, oso pardo —dice Brewer, tirando de mí hasta detenerme.
Saca su teléfono de su bolsillo y luego me apunta con el dedo para que me acerque más.
—¿Qué estamos haciendo? —pregunto, mirando su teléfono.
—Ganandonos ese gran cheque que los dos acabamos de recibir. Sólo trata de parecer
feliz de estar conmigo, ¿de acuerdo?
Gruño una respuesta y él sostiene el teléfono frente a nosotros y luego me besa la mejilla
mientras saca una foto. Una pequeña chispa de algo me sacude ante contacto casual.
Los otros chicos nunca parecen tener problemas para ser cariñosos entre sí, siempre
besándose y tocándose fuera de los rodajes. Nada necesariamente sexual, sólo una cómoda
familiaridad con el otro. Pero nadie ha tenido la valentía de intentarlo conmigo. No estoy
seguro de qué habría hecho si Pixie hubiera intentado darme un beso rápido en los labios
como lo hace con Heart y Brewer.
Es extraño que alguien me toque de una manera tan dulce, ya que Brewer hace unas
cuantas poses más y toma más fotos. Incluso mis ex-novios no eran los más sentimentales.
Para cuando termina la improvisada sesión de fotos, me siento extrañamente
123
desequilibrado.
Página

—¿Ya casi terminamos? —gruño.

—Sí, sólo déjame publicar esto, y luego podemos ir a almorzar juntos —Brewer escribe
una publicación en su teléfono, y miro por encima de su hombro para ver lo que está poniendo
en la descripción de las fotos.
 El gato ha salido de la bolsa, los rumores son ciertos. Tank y yo estamos juntos. ¿Creyeron
que era posible fingir tanta química? Y sí, es tan salvaje en la cama fuera de cámara como en
cámara ;) #BallsyBoys #NoviosEstrellasPorno #BallsyTank #BallsyBrewer #Trewer

Pulsa el botón del publicar y luego guarda su teléfono.

—¿Quieres subir a mi moto? —sugiero.
—Demonios, sí —concuerda Brewer.

124
Página
 BREWER
—Pareces cansado.
Juro a todos los que me escuchen que voy a matar a este pendejo un día de estos. Me
tomo el tiempo y la molestia de ponerme un puto traje de mono y las primeras palabras que
salen de la boca de Tank son, ¿te ves cansado?
Que se joda. Y que se joda Rebel y su loca idea de hacernos pasar por novios. Como si
alguien que nos viera se lo creyera por un segundo. Como si no fuéramos a terminar
matándonos antes de que termine nuestro contrato.
—Gracias —digo con todo el sarcasmo que puedo. Él, por supuesto, se ve sexy como el
carajo. ¿Quién iba a saber que un hombre como Tank haría que un esmoquin pareciera sexy?
Quiero decir, en serio, la tela se extiende alrededor de su cuerpo masivo, mostrando en todos
los lugares correctos. Yo había imaginado que parecería un poco fuera de su elemento, ya que
es un tipo de vestimenta tan casual, pero esto es más que sexy.
No que alguna vez se lo vaya a admitir. Diablos, no. Tank no necesita más municiones
para usar en mi contra.
Casualmente toma mis manos y une nuestros dedos entre sí—. ¿Turno de noche ayer?
—pregunta.
Estoy tan sorprendido que me tropiezo al entrar, y él tiene que estabilizarme para evitar
que me caiga de bruces—. Erm, sí, de hecho. Hice uno doble porque necesitaba esta noche
libre.
Él asiente con la cabeza—. Me lo imaginé.
Esta tiene que ser la primera vez desde que lo conocí que no asume lo peor. Quiero decir,
hace dos meses se habría hecho una burla algo sobre mí por ir a una fiesta o algo así. 125
El salón de baile del hotel está decorado como si alguien hubiera vomitado rosa por
dentro. Cada superficie está cubierta de serpentinas brillantes, globos, pancartas, todo de
Página

color rosa. Sé que es para una organización benéfica para el cáncer de mama, y créame, sé lo
importante que es la financiación para investigar esta horrible enfermedad, pero hay algo
como demasiado rosa, y llegaron a esa etapa hace quince mil globos rosados. Supongo que
soy demasiado gay para apreciar la obscenidad de esto. O no lo suficientemente gay, quién
coño sabe. Pero oigan, estamos aquí para apoyar a Rebel, y eso es lo que pretendo hacer.
 —¡Hola, chicos!
Es la dulce voz de Pixie. Casi salta hacia nosotros, todo feliz e inocente. A veces desearía
poder llevarlo a casa, ya saben, sólo para animarme cuando estoy deprimido. Es una pequeña
burbuja de felicidad, y Dios, quiero eso en mi vida.
—Hola, muchacho —digo, y le doy un beso rápido en esos labios rosados—. Te ves súper
lindo.
También está usando un esmoquin, pero con una camisa rosa suave y una faja rosa más
oscura y corbata de lazo. Se ve adorable en él.
Hace una pequeña mueca—. Iba por lo sexy —dice.
—No podrías dejar de lucir sexy —le dije y alboroté su cabello.
Me envía una sonrisa cegadora, y luego le da a Tank el mismo tratamiento. Le concede
una de sus raras sonrisas, y estoy agradecido de que él logre superar su habitual hosquedad
por el chico. Soy extrañamente protector con él, como la mayoría de nosotros lo somos. Pero
quizás Tank también, porque es más amistoso con él que cualquier otro.
—Me alegró mucho saber que están saliendo —Pixie se ilumina—. Sabía que ustedes
serían perfectos el uno para el otro una vez que consiguieran superarse a ustedes mismos.
Esnifo—. ¿Superarnos? ¿Qué quieres decir?
Pixie se encoge de hombros—. Ustedes fingiendo odiarse.
Tank y yo nos miramos. Hemos prometido mantener la treta, pero eso no significa que
vaya a mentir sobre todo—. Erm, odio reventar tu burbuja, pero realmente lo odiaba, y estoy
seguro de que era mutuo.
Pixie mira de mí a Tank y de vuelta—. ¿En serio? ¿Sigues con eso? Cielos, habría pensado
que un par de estrellas porno reconocerían el juego previo cuando lo encuentran.
Tank aprieta mi mano tan fuerte que hago un gesto de dolor.
—¿Juego previo? —susurra grita.
Varias cabezas alrededor de nosotros giran en nuestra dirección, pero Pixie está
126
tranquilo—. Sí, juego previo. Ustedes han estado bailando alrededor del otro antes de ceder a
la tensión sexual. Todo fue un juego previo. Por eso la primera escena fue tan explosiva. Tenían
Página

mucha tensión acumulada para salir de su sistema.

Mi boca se abre un poco, pero la de Tank está funcionando bien. Suelta mi mano como
si fuera una papa caliente y le envía a Pixie una mirada desdeñosa—. Estás delirando.
 —Hey —Rebel se une a nosotros, afortunadamente terminando con la línea de
conversación más que incómoda de Pixie.
Juego previo. ¿Qué tipo de drogas está tomando ese chico?
Me doy la vuelta para saludar a Rebel y a Troy correctamente y parpadeo unas cuantas
veces cuando los observo—. Santo cielo, ustedes dos deberían venir con una advertencia. Esa
es demasiada sensualidad para una pareja.
Rebel se ve especialmente muy sexy con su esmoquin. Dios, amo su pelo. Tengo muchos
buenos recuerdos de sostenerlo con las dos manos mientras me lo follaba. Bueno, tengo
muchos buenos recuerdos de follar con él en general o de ser follado por él. Su verga es otra
cosa, se los aseguro, y él también sabe cómo usarla.
—Si alguna vez quieren hacer un trío, yo—
Una mano carnosa me cubre la boca antes de que pueda terminar esa frase—. Está
haciendo un intento de broma —dice Tank con esa voz baja y severa—. Un intento bastante
pobre, debo añadir.
Quiero decir algo, pero su mano aún está en mi boca, y no está siendo sutil al respecto.
¿Cuál es su problema?
Entonces me doy cuenta de dos cosas. En primer lugar, se supone que estoy saliendo
con Tank, así que mi broma fue de mal gusto. Y segundo, hay algo en los ojos de Troy que me
hace arrepentirme de lo que dije. Es un destello de incertidumbre que causé, y me siento como
un completo idiota.
—Perdona a Brewer, Troy —dice Tank—. Su sentido del humor deja un poco que desear.
Estamos trabajando en ello.
¿Podría él ser más condescendiente? Lo dudo mucho. Mis adentros arden, pero no puedo
negar que fue un movimiento culero de mi parte, incluso si no fuera intencional. Así que me
relajo contra la mano de Tank y me permito recostarme contra su cuerpo en una entrega
parcial.
Él emite un pequeño gruñido en su cuerpo que probablemente nadie escuchó, excepto
yo, y lentamente retira su mano como si estuviera probando si voy a decir algo más estúpido.
127
Luego se inclina y pone su boca junto a mi oreja—. ¿Necesito llenar tu boca con mi verga
otra vez para asegurar que mantengas la boca cerrada?
Página

Para mi consternación, mi primera reacción es sí, por favor. Gracias al carajo que me las
arreglo para mantener eso dentro, porque demonios, Tank tendría un día de campo con eso.
Aun así, no puedo reprimir un pequeño temblor, pero trato de disimularlo sacudiendo
suavemente la cabeza.
 —No, me portaré bien.
¿Me portaré bien? ¿Pero qué carajos? ¿Cuándo se convirtió Tank en mi daddy? Dios,
necesito controlarme antes de avergonzarme aún más.
Quiero alejarme de Tank, que todavía es como una pared de músculo detrás de mí, pero
casualmente pone un brazo alrededor de mi cintura y me jala hacia atrás contra él. Me muevo
en protesta, pero luego siento su verga contra mi culo. Está dura como el hierro. Por una vez,
estoy agradecido de llevar un saco, porque cubre mi propia verga, que se llena
inmediatamente cuando siento esa erección masiva contra mí.
Levanto la vista y encuentro a Pixie estudiándome, sacudiendo suavemente la cabeza.
Hay una mezcla de tristeza y anhelo en sus ojos—. Como dije, juego previo.
Rebel y Troy se dan una mirada confundida, pero los ignoro. Pixie, también, ya que a
estas alturas ya no sé qué decir. Es difícil negar la tensión sexual entre Tank y yo ahora mismo
cuando ambos estamos muy duros.
—Sí, entonces, dice Rebel, aclarando su garganta—, muchas gracias por venir. Hay un
buffet primero, pero a las nueve, empieza la sesión de fotos. Hemos contratado a un fotógrafo
y tenemos un telón de fondo perfecto. Los invitados pagan tanto como quieran por una foto
con uno o más de nosotros, pero la donación mínima es de veinticinco dólares. Usen
solamente corbata de moño y pantalones.
Esto no es información nueva, pero de repente se me ocurre que dentro de una hora,
Tank y yo tendremos que quedarnos ahí parados durante horas, posando para fotos con
cientos de personas, sin tener nada que nos cubra. Más específicamente, al no tener nada que
oculte esta erección que estoy llevando.
Empujo sutilmente hacia atrás con mi culo. Sí, la suya tampoco se ha ido a ninguna
parte.
Mientras Rebel explica un poco más sobre los eventos de la noche, yo sigo frotando mi
culo contra la entrepierna de Tank. Su brazo que aún me serpentea por mi cintura se aprieta.
—Deja de frotarte —sisea en mi oído cuando todos estamos viendo a una mujer dar el
discurso de bienvenida. 128
Mi respuesta es empujar aún más fuerte. Si tengo que sufrir, él va a compartir mi miseria.
Además, llámame sadomasoquista, pero disfruto tanto apretando los botones de Tank, en
Página

este caso más o menos literalmente.

Durante unos minutos, jugamos este juego en el que me froto contra Tank sin que nadie
se dé cuenta, mientras él intenta evitarlo sin alejarme y atraer demasiada atención a sí mismo
y a su... problema. Está haciendo esa cosa de gruñir bajo de nuevo, y sólo me está incitando.
 Entonces su mano se mueve de mi cintura a mis bíceps, y esos dedos fuertes se clavan
con fuerza—. Discúlpennos —le dice Tank a los demás, y antes de que puedan decir una
palabra, me saca a rastras del salón de baile. Una vez que estamos en el pasillo del hotel, mira
alrededor, pero no suelta mi brazo.
Aparentemente, él encuentra lo que busca, porque me arrastra mientras camina más por
el pasillo, hasta que llegamos a una puerta. Es un baño familiar. Tank me empuja hacia adentro
y cierra la puerta con llave.
Me doy la vuelta para enfrentarme a él, pero antes de que pueda decir una palabra, su
boca está sobre la mía, aplastándome, invadiéndome. Me abro inmediatamente, gimiendo
contra sus labios exigentes, su lengua resbaladiza.
Su mano se envuelve en mi garganta, un gesto que ambos sabemos me excita
jodidamente demasiado. Dejo salir otro gemido, y se mezcla con su bajo gruñido de
aprobación. Su otra mano desabrocha mi saco, luego me desabrocha el cinturón, y esos dedos
largos se cuelan bajo mi cintura y se burlan de la cabeza de mi verga.
Retrocedo, lo miro fijamente con el pecho agitado—. No podemos arrugar estos trajes
de mono. Todo el mundo lo sabrá.
Me quita la mano de la garganta—. Desnúdate.
Me está diciendo tanto como él, y los dos nos quitamos rápidamente los sacos, luego
los zapatos y los pantalones, y los colocamos suavemente en una mesa plegable destinada a
cambiar a los bebés. Incluso me quito la camisa, queriendo asegurarme de no terminar con
semen en ella.
—No me voy a quitar los calcetines —dice Tank desafiantemente, y resoplo.
—Viejo, como si me importara —digo, sacando un condón y un paquete de lubricante de
mi billetera—. Además, este es un baño público. De ninguna manera voy a andar por aquí
descalzo.
Y luego sonríe. Es la primera vez que Tank me ha mostrado esa rara sonrisa suya, y mi
estómago hace una pequeña cosa en la que no quiero pensar demasiado.
Estira su mano y me toma un segundo darme cuenta de que está pidiendo el condón y
129
el lubricante. Aun así, hay algo en sus ojos, algo vulnerable, como si no estuviera seguro de
que se los vaya a entregar. Y luego lo entiendo.
Página

—No tengo ningún interés en penetrarte ahora mismo —le digo, con voz ronca—. Estoy
muy caliente, y necesito que hagas que me venga para poder pasar el resto de la noche sin
que se me ponga duro otra vez.
Su sonrisa se ensancha—. Creo que puedo complacerte.
 No necesita decir nada. Me doy la vuelta y me apoyo contra la pared, con el culo hacia
atrás y alzando mis caderas.
En segundos, él tiene el condón enrollado y lo oigo abrir el lubricante. Me encantan los
hombres que saben lo que hacen.
Sin decir una palabra, sus dedos lisos encuentran mi entrada, y empuja dos dedos hacia
dentro con facilidad. Una vez que él está dentro, espera a que me he relajado alrededor de él,
y luego comienza a estirarme con movimientos metódicos. Como siempre, mi cuerpo se
ajusta rápidamente, y él añade otro dedo.
—¿Estás bien? —comprueba una vez que mete ese con facilidad.
—Sí.
Entonces ese cuerpo tosco y fuerte se alinea con el mío, y exhalo con un pequeño
gemido mientras su verga gorda me estira. Yo no sabía cuánto necesitaba esto, lo necesitaba
a él, hasta que me llena, lenta, pero completamente, hasta que sus grandes bolas están
frotándose contra mí.
—Oh, joder —gruñe, dando el último empujoncito hasta que está enterrado todo el
camino.
Espero que empiece a embestir, pero no lo hace. En vez de eso, una mano viene
alrededor de mí para envolver mi verga, lo que manda un escalofrío por mi columna vertebral.
Entonces su otra mano encuentra mi boca y mete dos dedos.
—Chupa —me ordena, y yo me abro automáticamente.
Entonces empieza a deslizarse dentro y fuera de mí con movimientos lentos y gráciles,
y la sensación combinada de esa verga gruesa en mi culo, esa presión perfecta en mi propia
verga, y mi boca chupando sus dedos es una sobrecarga completa para mi sistema. Lo juro,
un minuto de esto y explotaré como un puto volcán.

130
Página
 TANK
El culo apretado de Brewer se aprieta alrededor de mi verga mientras me entierro
profundamente, salgo y lo hago todo de nuevo. Está chupando mis dedos con el mismo
entusiasmo que tiene cuando chupa verga, su saliva goteando en mi palma mientras meto los
dedos en su boca.
Brewer llora y le tiemblan las piernas mientras clavo su próstata. Sacando mis dedos de
su boca y envuelvo mi brazo alrededor de su torso para sostenerlo.
—Pon las manos contra la pared —gruño y Brewer obedece inmediatamente.
Con mucha fuerza ahora, lo embisto más fuerte y más profundo, nuestras respiraciones
jadeantes y gemidos llenan el pequeño espacio.
—Oh, joder, justo ahí —jadea Brewer, su cuerpo tensándose en mis brazos y su verga
hinchándose en mi mano. Lo acaricio más rápido hasta que suelta un grito estrangulado, y su
apretado canal se sujeta con fuerza alrededor de mi verga.
Me lo follo a través de su explosión, y luego me doy cuenta de que no estamos en
cámara, y no tengo que salirme para una buena toma de semen.
Gruño profundamente en mi garganta mientras entierro mi adolorido longitud tan
profundo como puedo y me dejo ir.
—Oh, Jesús —jadeo mientras froto mis caderas en el alegre culo de Brewer,
aprovechando cada gramo de placer de la experiencia.
Cuando termino, me derrumbo contra Brewer, que aún se está apoyando contra la
pared. Mi frente descansa contra su espalda, justo entre sus omóplatos, mientras inhalo
respiraciones rasposas.
—Maldición —Brewer se ríe y luego jadea mientras lo suelto, y mi verga gastada se
131
desliza de su culo.
Me quito el condón y lo tiro a la basura, y cuando me doy la vuelta, Brewer ya está medio
Página

vestido. Cuando se gira hacia mí y sonríe, siento la más extraña urgencia de darle un beso
rápido en los labios. Toda esta mierda del novio falso debe estar metiéndose en mi cabeza.
Me pongo la ropa rápidamente, refunfuñando en voz baja cuando no puedo volver a
ponerme la corbata correctamente. Brewer se acerca y quita mis manos de encima y luego
toma la tela roja y sedosa que tiene entre los dedos y la ata en un moño perfecto. Suaviza el
frente de mi camisa una vez más y me mira con una sonrisa suave.
—Te ves muy bien, oso pardo.
—Lo mismo digo, folla-chicos —respondo sin mi veneno habitual, y luego dejo caer ese
beso rápido contra sus labios.
Brewer jade en sorpresa cuando mis labios se encuentran con los suyos con una ternura
inusitada. Se acabó tan rápido como empezó. Retrocedo y me doy la vuelta para salir del baño
antes de que pueda dejar que esta interacción se salga de control.
—Ahí están. Nos preguntábamos dónde se habían metido ustedes dos —dice Heart,
mirando entre Brewer y yo con una sonrisa de satisfacción.
—Qué puedo decir, el hombre grande de aquí no se cansa de mi culo.
—Jesús, Brewer, que seamos estrellas porno no significa que todos quieran oír hablar de
nuestra vida sexual.
—Yo quiero oír hablar de su vida sexual —dice Pixie.
—Yo también —añade Heart.
—Yo podría tomarlo o dejarlo —dice Campy con una sonrisa de satisfacción.
—Aunque estoy seguro de que a Tank le encantaría contarles a todos ustedes historias
sobre el trasero de Brewer—que por cierto, casi todos ustedes han tenido, así que no estoy
seguro de dónde radica el interés—necesitamos prepararnos para la sesión de fotos —Rebel
nos empuja a todos hacia el área de montaje que él preparó para que nos quitáramos las
camisetas y nos aseguráramos de que estuviéramos listos para la toma de fotos.
La fila de gente que espera para tomarse fotos con nosotros es más larga de lo que
esperaba cuando entramos al set de fotos. A pesar de lo feliz que estoy de ayudar a recaudar
fondos para la investigación del cáncer de mama, esta va a ser una larga y maldita noche.
Posamos y sonreímos, la mayoría de los chicos tonteando con los asistentes. Estoy más
que feliz de pararme y verme sexy mientras los hombres y las mujeres se cubren de mí y las
cámaras se disparan.
132
Miro a Brewer, que está completamente en su elemento, encantando a todos, riendo y
luciendo radiante. Mi corazón hace algo gracioso, girando y revoloteando. Brewer gira la
Página

cabeza, atrae mi mirada y me da un guiño coqueto.

—Estuve tan emocionada cuando ustedes dos anunciaron que estaban saliendo.
Ustedes son perfectos el uno para el otro —dice la siguiente mujer en la fila mientras se acerca
a mí—. ¿Puedo tomarme una foto con los dos?
 —Por supuesto —le señalo a Brewer con la mano que se acerque, y ambos la abrazamos
y sonreímos para la cámara mientras mi mente trata de girar sobre el hecho de que todos
parecen estar tan seguros de que Brewer y yo somos perfectos juntos, y no entiendo lo que
eso significa.
Las horas siguientes se desdibujan mientras tomamos innumerables fotos con más
hombres y mujeres de lo que yo hubiera pensado que cabrían en este enorme salón de
convenciones. Para cuando acaba la noche, estoy listo para desplomarme por el cansancio.
Miro a Brewer y me doy cuenta de que se ve peor de lo que yo me siento. Está muerto
de pie, balanceándose ligeramente, círculos oscuros bajo sus ojos. Parece que no ha dormido
en una semana. Al menos sé que comió esta noche, ya que la comida se proporcionó más
temprano en la noche.
—Gracias por su ayuda esta noche, chicos. Nunca he visto una participación tan grande
en una de estas. Estoy seguro de que volamos nuestras metas de recaudación de fondos.
—Es una gran noticia —golpeo a Rebel en la espalda y le doy a Troy un rápido abrazo
lateral.
—Llevémoste a casa y a la cama —le gruño a Brewer con un toque sexy en mi voz. Sus
ojos se ensanchan, sorprendido, y yo me rio—. Necesitas dormir, folla-chicos Estás muerto de
pie —digo más en voz baja para que sólo él pueda oír.
—No te preocupes por mí —se eriza.
—No puedo hacerlo, soy tu novio, ¿recuerdas?
Brewer resopla y sacude su cabeza, pero no protesta más mientras lo saco por la puerta.
El valet trae el coche de Brewer y yo lo guío al lado del pasajero. De nuevo, no discute, y estoy
empezando a preguntarme si está más cansado de lo que parece.
—¿Tu casa o la mía? —bromeo mientras me deslizo en el asiento del conductor.
—No me importa, en cualquier lugar con una cama —bosteza y apoya la cabeza contra
el reposacabezas.
—¿Por qué no has estado durmiendo? —pregunto, intentando mantener mi tono
informal.
133

—Demasiado ocupado —murmura Brewer—. Dos trabajos y trabajo escolar, trata de

Página

encontrar tiempo para dormir. De hecho, sólo puedo permitirme unas horas antes de tener
que estudiar para un examen de Bioquímica que tengo esta semana.
—No, necesitas dormir —digo con firmeza—. Te llevaré a mi casa y te meteré en la cama.
Si te atrapo fuera de la cama antes de las nueve de la mañana, te pondré sobre mis rodillas y
te daré unas nalgadas.
 —Maldición, eso es caliente —Brewer desliza una mano entre sus piernas, y yo refunfuño
por la distracción mientras estoy tratando de conducir.
—No es caliente; es amenazante —corrijo, alejando su mano de su erección para poder
concentrarme en el camino.
—Sí, señor —provoca Brewer.
—Espero que estés bromeando, porque lo de D/S9 no es lo mío.
—Sí, estaba bromeando. No creo que pueda ser muy sumiso.
—Bien, no quiero que seas sumiso —atrapo mis palabras a medida que salen de mi boca
y las termino con una risita torpe—. Quiero decir, no te quiero... ya sabes a lo que me referí.
—Sé a qué te refieres, osito de peluche —Brewer bosteza de nuevo y luego se queda
callado el resto del viaje de vuelta a mi casa. Un pequeño ronquido cada pocos minutos me
hace saber que está profundamente dormido.
Cuando encuentro un lugar para estacionar cerca de mi edificio, me acerco y le doy una
pequeña sacudida al hombro de Brewer.
—¿Hmmm? —murmura, alejándose de mi toque.
—Despierta, viejo. Es hora de subir y dormir.
—Estoy durmiendo —argumenta Brewer con voz gruesa.
—Jesucristo —murmuro para mí mismo antes de cerrar la puerta y dar la vuelta al lado
de Brewer del coche para poder cargarlo.
Toma un poco de esfuerzo para abrir la puerta mientras sostengo a Brewer, pero me las
arreglo. Shaggy salta sobre mí, tratando de llamar mi atención mientras llevo a Brewer a mi
habitación y lo tiro sin ceremonias en mi cama y me pongo a trabajar quitándole sus zapatos.
Una vez hecho eso, me doy cuenta de que no puedo dejarlo dormir con esmoquin, así que le
desabrocho los pantalones y se los arranco.
—¿Te estás saliéndote con la tuya? —pregunta adormilado.
—No, folla-chicos, te estoy poniendo cómodo para que puedas dormir.
134
—‘Kay.
Página

No tarda mucho en dejarlo en sus bóxers y meterlo bajo las sábanas.

9
Dom/sumiso.
 —Que duermas bien —palmeo su hombro y me doy la vuelta para salir de la habitación.
No puedo decir que me emocione dormir en mi pequeño y abultado sofá. Pero es lo que es.
—¿Te acuestas conmigo? —pregunta Brewer antes de que yo llegue a la puerta.
—¿En serio?
—¿Por favor?
Me encojo de hombros, no como si importara dónde duermo.
—Déjame llevar a Shaggy afuera y volveré enseguida.
Hago el camino rápido, y cuando vuelvo me desnudo sin ceremonias, dejando mi ropa
en el suelo antes de meterme en la cama con nada más que mis bóxers.
—Okay, me estoy acostando contigo. Ahora duérmete.
—¿Deberíamos hablar de lo de antes? —pregunta Brewer, sonando irritantemente
despierto ahora que estamos en la cama.
—¿Qué pasó antes?
—Follamos.
—Hemos follado un par de veces antes de eso, por si lo olvidaste.
—No fuera de cámara —señala.
—Sí, bueno, dijiste que era un requisito para firmar ese estúpido contrato. Con o sin
cámara, aún era trabajo. Considéralo ganarnos nuestros bonos.
—Sí —concuerda Brewer, su voz casi decepcionada.
—Duérmete —repito.
—‘Kay. Buenas noches.

135
Página
 BREWER
Emito una serie de maldiciones bastante imaginativas cuando mi alarma suena a las ocho.
Ayer tuve un turno de noche, y después de eso, trabajé en ese maldito proyecto de Literatura
Inglesa porque no quiero defraudar a Tank. Eran las cuatro de la mañana cuando mi cabeza
finalmente golpeó la almohada, y ya es la cuarta noche consecutiva que no he dormido más
de cinco horas. Pero le prometí a Rebel que ayudaría a mover las cosas de Troy a su casa y el
resto a Goodwill10, así que subo.
Me he quedado en la cama todo el tiempo que he podido, así que rápidamente me salpico
agua en la cara, me peino y me visto. Caliento las sobras del té de ayer en el microondas, así
tengo algo para beber y agarro una barra saludable rápida para que me dé algunas calorías.
Creo que he perdido algo de peso recientemente. No es de extrañar, ya que apenas tengo
tiempo para dormir, y mucho menos para ir a hacer la compra o cocinar.
Cinco minutos después, estoy en mi auto, bostezando tan fuerte que brotan lágrimas
en mis ojos. Nunca he estado en la casa de Troy, pero las direcciones son fáciles, y una vez allí
veo un camión de U-Haul, así que estoy bastante seguro de que estoy en la dirección correcta.
El té y la barra que he tenido hacen poco por el dolor de cabeza persistente, así que me tomo
un ibuprofeno antes de salir de mi coche.
Cuando lo hago, veo a Tank cabalgando por la calle y levanto la mano. Estaciona justo
detrás de mi coche y se quita el casco.
—Hola —digo una vez que apaga su moto—. No sabía que tú también vendrías.
—Sí, necesitaban todas las manos que pudieran conseguir, creo. Para las cosas pesadas.
No es que no pudieras hacerlo, pero... —su voz se apaga.
Mi boca se eleva—. Sé a qué te refieres.
Me da un repaso con los ojos, su mirada permaneciendo un poco más en mi cara. Me
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paso una mano por el pelo con timidez. Sé que me he visto mejor, pero no puedo hacer nada
al respecto. Todo lo que necesito es una buena noche de sueño y una comida decente, y
Página

volveré a ser yo mismo.

10
Tienda de cosas de segunda mano, a la cual se puede donar.
 Tank finalmente arranca sus ojos y asegura su moto, y entramos juntos donde
encontramos la puerta principal ya abierta. Entramos vacilantes en el departamento, donde
casi chocamos con Rebel.
—¡Gracias por venir!
Hacemos esa complicada cosa del apretón de manos que sólo él puede hacer, y me
sorprende ver que él y Tank intercambian un abrazo varonil.
—Bueno, no sabía que venirse estaba involucrado —bromeo.
Es un tiro fácil, lo sé, pero siento que es algo que se espera de mí. Rebel sonríe, y oigo
una risita de algún otro lugar en el departamento, Troy, probablemente. Pero Tank frunce el
ceño y me envía una mirada indescifrable. Supongo que todavía no aprecia mi sentido del
humor.
—Entonces, ¿a quién más esperamos? —le pregunto a Rebel.
—Viene Campy, y trae a su nuevo compañero de cuarto, quien amablemente se ofreció
a ayudar. Aparentemente, es del sur, así que es de mucha ayuda y es muy amigable. Y Pixie y
Bear también vienen.
—¿Juntos?
Las cejas de Rebel se disparan hacia arriba—. ¿Qué quieres decir con ‘juntos’? ¿Pixie y
Bear? Por supuesto que no. Jesús, son como, qué, ¿veinte años de diferencia?
—Sí, ¿y qué? —me encojo de hombros—. ¿Nunca has visto cómo lo mira Bear?
Rebel abre la boca, luego la cierra de nuevo, frunciendo el ceño. O nunca ha pensado
tanto o no quiere hablar de ello conmigo. No puedo decir que me haya pasado horas
preguntándome si mi jefe y mi lindo compañero de trabajo lo están haciendo, pero
ciertamente he notado que algo está pasando entre esos dos. Además, algo pasó cuando
compartieron una habitación en Nueva York, estoy seguro. Pero estoy de acuerdo con Rebel;
debemos mantenernos al margen.
—¿Qué hay de Heart? —Tank quiere saber.
—No pudo venir. Aparentemente, tiene alguna obligación los sábados o algo así. Y no le
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preguntamos a Mason porque él es...
Troy entra al pasillo y le da una nalgada a Rebel—. Es un gran nerd que probablemente
Página

tropezaría con sus propios pies y se caería por las escaleras mientras sostiene mi cara vajilla,
es lo que Rebel está tratando de decir.
—¿Tienes vajilla cara? —pregunto, meneando mis cejas—. Diablos, no, pero si lo hiciera,
mi chico Mason se las arreglaría para romperla. Así que decidimos dejarlo fuera de esto.
 Hay ruido detrás de nosotros, y luego un vaquero real se acerca a la vista. Su cara es
demasiado rugosa para que lo llamen bonito, pero seguro que es guapo con su camisa a
cuadros y jeans rasgados con la hebilla grande del cinturón, y tiene un cuerpo que parece que
cada músculo se ganó con el trabajo duro, no en un gimnasio. Y juro que ya hay setenta y
tantos grados ahí afuera, y él está usando un puto sombrero de vaquero.
—Hola a todos —arrastra las palabras y se quita el sombrero.
Este, obviamente, es el nuevo compañero de cuarto de Campy con el nombre apropiado
de Jackson, y nosotros, los Ballsy Boys, compartimos algunas miradas de admiración entre
nosotros mientras nos presentamos ante él. Su acento es perfecto y perezoso, y podía
escucharlo todo el día.
—Cierra la boca, folla-chicos. Estás babeando —exhala Tank en mi oído.
Dios, su voz baja siempre me llega por alguna razón, especialmente cuando me hace
cosquillas en la oreja con su barba, como lo hace ahora.
—No lo estoy —protesto débilmente, pero Tank me lanza una mirada que me hace callar.
Okay, estaba babeando. Un poco. Es muy agradable de ver... y de escuchar.
Luego llega Pixie, con Bear detrás de él, y es hora de empezar. He ayudado a bajar un
sofá hecho jirones y un armario enorme que era mucho más pesado de lo que parecía, y estoy
a mitad de camino bajando las escaleras levantando otro armario, cuando me mareo. Mi
cabeza gira violentamente y siento que todas mis fuerzas me abandonan, convirtiéndome en
gelatina. El armario se me escapa de los dedos y me caigo por las escaleras.
—Brewer, ¿qué carajo? —grita Rebel, luego maldice, mientras yo estoy
desesperadamente tratando de mantenerme consciente—. ¡Que alguien me ayude!
Creo que perdí unos segundos, porque de repente soy levantado en brazos fuertes, y mi
cabeza se balancea contra su pecho.
—¿Qué le pasa? —ese es Bear, y parece preocupado.
Ojalá pudiera responderle, pero en realidad permanecer despierto me está costando
suficiente energía, así que ni siquiera lo intento. Mi visión sigue siendo borrosa, y sigo
parpadeando para tratar de aclararla.
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Tank se baja en una de las últimas sillas y me pone en su regazo. Mi cabeza cae contra
su hombro, y estoy demasiado cansado para levantarla.
Página

Acuna mi mejilla—. Oye, folla-chicos, quédate conmigo, ¿okay? —a pesar de usar su

término burlón favorito para mí, en realidad parece preocupado. Y gentil.
—Difícil —logro decir.
 —¿Alguien tiene jugo? ¿Algo con azúcar? —pregunta Tank.
Todo se siente como si estuviera sucediendo en otra parte, Tank hablando, y alguien
dándole una botella de jugo multivitamínico. Lo pone contra mi boca, diciéndome que
empiece a beber.
El jugo es maravillosamente frío y dulce, y sigo bebiendo y bebiendo hasta que he
vaciado toda la botella.
—¿Tenemos que llevarlo a un médico? —pregunta Bear.
—Creo que está un poco deshidratado y definitivamente agotado. Creo que debemos
dar por terminado el día. Necesita dormir un poco.
Quiero protestar por las decisiones de Tank, pero estoy muy cansado. Se pone de pie,
todavía sosteniéndome, y es entonces cuando dejo de intentar luchar contra ello. Pongo mi
cabeza contra su pecho, respiro profundamente y me quedo dormido en sus brazos.

139
Página
 TANK
Puedo sentirme temblando mientras sostengo a Micah a mi pecho. Se puso pálido tan rápido
y luego cayó como una piedra. Yo estaba al final de las escaleras cuando se desmayó, y apenas
llegué a tiempo para evitar que se cayera.
—¿Está bien? —pregunta Rebel mientras levanto a Micah más cerca, tratando de
asegurarme de que mi agarre sobre él sea seguro.
Miro a Micah en mis brazos, y mi corazón se aprieta un poco ante la expresión pacífica
de su rostro dormido. Si hubiera estado prestando más atención hace una hora cuando
llegamos aquí, habría notado las ojeras bajo sus ojos. No ha estado durmiendo bien, ya lo
sabía. Y he sospechado durante unas semanas que no come como debería. Ya ha sido
bastante difícil para mí hacer malabares entre la escuela y el trabajo, además Brewer tiene un
segundo trabajo. No es de extrañar que se haya estrellado contra el suelo.
—Estará bien. Necesita descansar y una buena comida o dos —le aseguro a Rebel por
segunda vez—. Voy a llevarlo a casa.
—No debería estar solo —señala Bear con preocupación.
—Quise decir que lo llevaré a mi casa —corrijo—. No se preocupen, me encargaré de él.
Rebel y Bear se ven un poco sorprendidos cuando equilibro a Micah en un brazo y uso
mi mano libre para quitarle el pelo de la frente. Murmura mientras duerme y se acurruca más
cerca.
—Si necesita algo, no dudes en llamarme —dice Rebel después de deshacerse de la
sorpresa.
—Gracias. En realidad, ¿puede alguien sacar las llaves de sus bolsillos muy rápido? No
puedo llevarlo en mi moto así —Campy está más cerca, así que se estira por los jeans de Micah.
Mete la mano y excava un segundo.
140

—Si estás sintiendo algo ahora mismo, te romperé la mano —le advierto a Campy cuando
Página

tarda demasiado con la mano en el bolsillo de Micah.

—Dios, casi pensé que todo esto de las citas era falso, pero maldición, eres territorial —
se queja Campy mientras finalmente libera las llaves.
 Casi espeto que sí es falso, pero eso no significa que vaya a tolerar que alguien toque a
mi novio falso tampoco. Pero me atrapo y me conformo con un gruñido en respuesta. El
comentario de Campy me saca de cualquier momento raro que estuviera teniendo. Este no
es Micah, es Brewer, y necesito recordar eso.
—Nos vemos luego, chicos —cargo a Brewer por las escaleras y me las arreglo para
meterlo en el asiento del pasajero de su coche, y luego pongo en marcha el aire acondicionado
para que pueda refrescarse un poco.
Para cuando llego a mi casa, Brewer se mueve—. ¿Dónde estamos? —pregunta,
frotándose los ojos y mirando alrededor—. Oh, ¿estamos en tu casa? Puedes llevarme a mi
casa si quieres.
—No puedo, dejé mi moto en la casa de Troy, así que te quedas conmigo esta noche
hasta que puedas llevarme a buscarla mañana.
—Oh, okay —todavía parece cansado mientras se desabrocha y se baja torpemente del
coche.
Salto y me doy prisa para asegurarme de que no caiga de cara en la acera. Cuando lo
alcanzo, pongo mi brazo alrededor de su cintura para estabilizarlo.
—Estoy bien —protesta Brewer, tratando de alejarme.
—Acabo de verte casi dar un salto mortal por las escaleras. Compláceme, por favor —se
relaja en mi toque y me deja guiarlo por las escaleras hasta mi casa. Dentro, lo siento en el
sofá y me dirijo a la cocina a buscar un vaso de agua—. ¿Has comido hoy?
El largo silencio que responde a mi pregunta confirma mi sospecha. En lugar de esperar
a que me diga una mentira adecuada, empiezo a preparar un plato de fruta y queso para que
lo ayude mientras preparo el almuerzo.
—Gracias —dice Brewer en voz baja, aceptando el plato y el vaso de agua cuando se los
ofrezco. Shaggy se mete en el regazo de Brewer y él acaricia su cabeza distraídamente.
—No compartas esa comida con el perro, tienes que comértela toda.
—Sí, mamá. 141
Ignoro el sarcasmo y vuelvo a la cocina.
—Tienes que cuidarte mejor. ¿Y si yo no hubiera estado allí para amortiguar tu caída?
Página

Podrías haberte roto el cuello al caer por las escaleras. Eres doctor; estoy seguro de que
puedes averiguar lo malo que es tener el cuello roto.
—Aún no soy doctor.
—Y no lo serás si sigues tratándote así —advierto.
 —Lo siento, no me di cuenta de que eras mi madre —se queja.
—Discúlpame por preocuparme —espeto, girándome sobre mis talones y volviendo a la
cocina.
La cafetera está en silencio durante unos minutos mientras preparo un pollo y un arroz
horneados y lo meto en el horno. Cuando miro de nuevo, está mordisqueando una fresa y me
mira con curiosidad.
—¿Qué? —pregunto.
—¿Te importo? —pregunta, su voz apenas es más que un susurro.
Me erizo y me doy la vuelta para lavarme las manos en el fregadero de la cocina—. Es
una forma de hablar.
—Oh —el sonido derrotado se instala en mi pecho y me hace sentir como un completo
idiota.
Suspiro y me giro hacia él—. Por supuesto que me importas. Somos amigos.
El ceño fruncido de Brewer se transforma lentamente en una tímida sonrisa—. Sí, somos
amigos —concuerda.
—Me alegra que lo hayamos aclarado. Elige algo para ver y tendré un buen y saludable
almuerzo listo para ti en media hora.

142
Página
 BREWER
Ojalá supiera por qué sigo invitándome a ver películas con Tank. No es que no tenga amigos.
Aparte de Tank, quiero decir, aunque todavía dudo en llamarlo amigo. Pero es lo que somos,
supongo.
Están Rebel y Troy, con los que es divertido pasar el rato, incluso si verlos me enferma
físicamente a veces porque son tan fastidiosamente felices. Campy suele estar dispuesto a
tomar una cerveza y algo divertido. Él y yo podemos pasar horas hablando de todas las cosas
raras que vemos. Heart parece un poco preocupado últimamente, y no tengo ni idea de qué.
Parece ser muy amigo últimamente del amigo de Troy, Mason, ese lindo chico nerd. Supongo
que podría llamar a Pixie... pero no quiero.
Qué me den, pero me gusta ver películas con Tank. Es... relajante. No tengo que fingir
que soy feliz y gracioso todo el tiempo. Nunca pensé que lo diría, pero por alguna razón, soy
más yo mismo con él que el payaso de la clase que he estado interpretando durante años.
Tank silencia la televisión a medida que los créditos finales se desplazan lentamente por
la pantalla—. ¿Quieres ver otra? —pregunta.
Dudo. Shaggy se durmió en su cama de perro hace años, ya que no es exactamente
temprano. Tenemos grabación mañana, y debería irme a casa, pero estoy cansado y no tengo
ganas de irme todavía. No es que se lo diga a Tank. Puede que nos hayamos hecho amigos,
pero estamos lejos de ser mejores amigos.
—Si quieres irte a casa, está bien —dice Tank, con su cara mostrando algo que se parece
mucho a la inseguridad—. Es una escena dura la que haremos mañana.
Me apoyo en lo que sé hacer mejor—. Bueno, espero que sea dura. Si no, no sería muy
divertido.
Tank suspira—. ¿Por qué siempre haces eso? —pregunta, con la cara apretada—. Es
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patético, y tú eres mucho mejor que eso.
Mis cejas se levantan sorprendidas—. ¿Tú crees?
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—Brewer, eres inteligente. Estás estudiando para convertirte en médico, por el amor de
Dios. ¿Por qué insistes en retratarte como un payaso tonto?
Sus palabras se acercan tanto a mis pensamientos anteriores que mis defensas caen, y
suelto la verdad—. Porque es todo lo que conozco.
 Apaga la televisión y se da la vuelta para mirarme, apoyándose con la espalda contra el
costado de su sofá—. ¿Qué quieres decir?
Sí, metí la pata, ¿no? Ya no hay vuelta atrás—. Es lo que la gente espera de mí, ¿sabes?
Brewer, el fiestero, el payaso de la clase. Tú mismo lo has dicho, llamándome folla-chicos
demasiadas veces para contarlo. Es por lo que soy conocido, por hacer reír a la gente, por
pasarlo bien.
—Pero tú creaste esa imagen. Es quien quieres que piensen que eres. ¿Por qué?
Me froto los ojos, evitando su mirada seria. La cantidad de interés genuino en su cara
me hace sentir incómodo—. Tenía un hermano —digo antes de poder convencerme de no
compartir. Diablos, no le he dicho a nadie esto, nunca.
Tank se sienta derecho, con los ojos fijos en mí—. ¿Qué pasó?
Trato de evitar sus ojos. No están acusando ni nada, pero me hacen sentir vulnerable.
Inquieto. No es una sensación que me guste especialmente.
—No puedo hablar cuando me miras así. Me hace sentir como si fuera un insecto,
retorciéndome bajo el microscopio.
La cara de Tank se suaviza, mostrando una mirada que no puedo ubicar—. Entonces,
tendremos que hacértelo más fácil —dice, agarrándome suavemente y obligándome a girar
también de lado, hasta que me encuentre en el sofá entre sus piernas, con la cabeza apoyada
en su pecho.
No puedo ver su cara, lo que ayuda, y la sensación de sus fuertes brazos alrededor de mí
hace algo raro en mi estómago. Quiero decir, hago ejercicio, pero Tank es otra categoría de
fuerte. Su aliento cálido me hace cosquillas en el oído, y me encuentro aún más relajado.
—¿Qué le pasó a tu hermano? —incita Tank.
Envuelto en sus brazos, me encuentro compartiendo—. Era mi hermano gemelo. Su
nombre era Dean. Mis padres son católicos conservadores que se negaron a someterse a un
examen prenatal porque temían que los médicos los presionaran para que abortaran al bebé
si algo estaba mal. Sabían que iban a tener gemelos, pero eso fue todo. Dean nació seis
minutos después que yo y luchó desde el primer día. Resulta que nació con un defecto
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cardíaco congénito.
Suspiro mientras la inevitabilidad de todo esto me golpea de nuevo—. Tuvo cuatro
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cirugías mayores y una serie de procedimientos más pequeños, pero fue en vano. Murió unos
días antes de nuestro sexto cumpleaños.
—Maldición —dice Tank—. Es demasiado joven... ¿Lo recuerdas?
 —No —digo yo, jugando con los vellos del brazo derecho de Tank—. Ojalá lo hiciera, pero
en realidad no. Pero mis padres eran diferentes a otros padres, de eso me di cuenta a una
edad temprana.
—Una pérdida como esa te impacta —dice Tank.
—Claro, pero... no sé cómo explicarlo. Es estúpido, probablemente.
—Pruébame —dice Tank.
Busco las palabras—. Es como si se hubieran ido después de que Dean muriera. Estaban
allí y se ocuparon de mí. Nunca me faltó nada físicamente. Pagaban por todo lo que yo quería,
deportes, pasatiempos, lo que sea. Pero nunca estuvieron realmente allí. Emocionalmente, se
habían ido.
Tank hizo hmm—. Pero te aman —checan conmigo.
Inesperadamente, se me forman lágrimas en los ojos—. No lo sé.
Sus brazos se aprietan alrededor de mí, pero aparte de eso está callado, lo que realmente
aprecio.
—Me parece que el amor es más que atender las necesidades físicas de tu hijo. Nunca
me han pegado, ni siquiera han levantado la voz con rabia, y no pestañearon cuando salí del
clóset. A veces, desearía que lo hubieran hecho, porque al menos habrían demostrado que les
importaba lo suficiente como para enojarse. Es como si apenas reconocieran que existo, y
ciertamente no están interesados en mí de ninguna manera. De alguna manera, cuando
perdieron a Dean, me perdieron a mí también.
—Entonces, te imaginaste que harías el papel de payaso y no dejarías que nadie viera
cuánto sufres —dice Tank.
Me burlo—. ¿Seguro que no vas a estudiar psicología en vez de arquitectura?
—No es tan difícil de descifrarlo, ahora que te entiendo mejor...
—Dicen que tu memoria consciente empieza a los cuatro, pero tu memoria inconsciente
empieza mucho antes. Se llama tu viejo cerebro, y es altamente primario, enfocándose más
en las emociones básicas que en los recuerdos matizados. En realidad no se puede acceder a
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él, pero explica las reacciones primarias incluso en adultos a ciertas situaciones. Mi viejo
cerebro, creo, es principalmente tristeza y estrés.
Página

—¿Cómo lo sabes?
—Cuando miro las fotos de antes de que Dean muriera, todo lo que ves es a mis padres
preocupados y cansados... y Dean está tan pálido y enfermo, y luego estoy yo, demasiado
sano y sonriendo inapropiadamente... Es tan jodido.
 Los brazos de Tank se aprietan alrededor de mí, y es una sensación maravillosa y
segura—. Eras sólo un niño pequeño, Micah. Estaba bien para ti que fueras feliz y saludable.
—¿Quieres saber lo más triste? En mis fotos posteriores, después de cumplir cuatro años
más o menos, ya no sonrío. Me enseñaron que la respuesta apropiada a la enfermedad mortal
de mi hermano era estar triste... No hay una sola foto mía en la escuela a lo largo de los años
en las que esté sonriendo. Todas son igualmente solemnes, incluso mi retrato de graduación.
Las únicas fotos que tengo donde parezco feliz son las que tomaron mis amigos, las que
nunca les mostré a mis padres. Había un Micah triste y tranquilo en casa, y luego había un
Micah feliz y despreocupado en la escuela y con mis amigos. No ha pasado un día desde que
Dean murió que no me sintiera culpable por estar vivo....
He dicho mucho más de lo que quería, de lo que debería, especialmente a Tank. No sé
qué me hizo compartir demasiado con él, pero ahora me arrepiento mucho. Va a pensar que
soy un imbécil deprimido que sólo siente lástima de sí mismo. Pero, para empezar, no es que
yo le gustara mucho, así que tal vez no importe tanto.
—Lo siento mucho por ti —dice Tank después de un largo silencio—. Siento que perdieras
a tu hermano y más aún que tus padres te hicieran sentir culpable por ello cuando obviamente
no fue tu culpa.
Hmm. No esperaba que reaccionara así.
—Pero... —continúa él.
Ah. Lo sabía. Aún no habíamos llegado a la parte de la reprimenda, la parte en la que me
sermonea sobre ser un pedazo de mierda egoísta.
—Ojalá te sintieras lo suficientemente seguro para ser tú mismo, al menos conmigo. No
me gusta el Brewer falso, el folla-chicos que siempre finge que la vida es una gran fiesta. Me
gusta Micah, el trabajador y ambicioso CNA que está decidido a hacer algo de sí mismo.
Jódanme, eso no lo vi venir, y estoy demasiado atónito para responder. ¿Le gusto a Tank?
¿En qué universo paralelo he aterrizado ahora?
Durante mucho tiempo, me quedo en sus brazos, tratando de averiguar qué significa
todo esto. Todo esto de enemigos a novios falsos a amigos de verdad hace que me duela la
cabeza. Y ni siquiera puedo hacer una broma estúpida para burlarme de ello, porque Tank no
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me deja salirme con la mía. Es más, como que me gusta no poder.
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Santo infierno, ¿cuándo empezó a gustarme Tank?

 TANK
Termino de empacar mi mochila y echo un vistazo a mi departamento para asegurarme de
que no se me olvida nada. Había dejado a Shaggy con una niñera de perros esta mañana.
Estoy seguro de que pensó que estaba loco cuando repasé una lista muy detallada de
instrucciones de cuidado. Sí, me he convertido en ese tipo de dueño de perro, con
instrucciones sobre qué juguete prefiere después de la cena y cómo quiere que le preparen
las mantas para la cama. Pero reto a cualquiera a que se resista a su cara peluda.
Las convenciones y las apariciones son lo que menos me gusta de hacer porno. No me
gusta nada la autopromoción. Rebel me regañó durante meses para que abriera una cuenta
de Instagram y Twitter hasta que finalmente las abrió para mí y las mantiene por su cuenta.
Entiendo que la gente se emocione sintiendo que te conocen, y es más probable que sean
espectadores leales si haces toda la mierda de las relaciones públicas. Pero ese no soy yo.
Apretaré los dientes durante la convención este fin de semana porque es un fin de
semana pagado de sonreír y no gruñir abiertamente a nadie. Eso no significa que me guste.
Esta es la mierda por la que viven Brewer y Pixie, pero sé que no soy el único que teme estas
apariciones obligatorias.
El teléfono suena en mi bolsillo y lo saco para ver que es Brewer quien me hace saber
que me está esperando afuera. Me pongo la bolsa sobre el hombro y me aseguro de cerrar
con llave al salir. Curiosamente, me encuentro esperando ansiosamente el viaje con Brewer.
Puede que tenga una forma especial de irritarme, pero también se las arregla para
mantenerme alerta. Es difícil aburrirse con Brewer cerca. No he descifrado si eso es algo bueno
o no.
Encontré a Brewer estacionado en doble fila frente a mi edificio, esperándome. Cuando
me ve, salta del auto y va al asiento del pasajero.
—Supongo que quieres que conduzca.
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—Sí, estoy cansado como el infierno. Mirar las líneas de la carretera durante las próximas
seis horas sin duda terminaría con nosotros dos muertos.
Página

—Buena decisión. Puedes dormir la siesta mientras conduzco. ¿Has comido? ¿Puedo
volver a subir y prepararte algo rápido? ¿O podríamos parar y recoger algo cuando salgamos
de la ciudad?
 —Estoy bien —Brewer lo hace menos—. Tú conduces durante la primera mitad, y yo
conduciré la segunda mitad.
—Funciona para mí.

—Estoy aburrido —se queja Brewer dos horas después del viaje de seis horas.
—Entonces podemos intercambiar antes —sugiero.
—Sabes que siempre estoy dispuesto para un intercambio —responde Brewer con un
sugestivo lirismo a su voz. Gemí ante la insinuación.
—Vamos, viejo. Hemos hablado de esta mierda del folla-chicos falso. Déjala estando
cerca de mí, ¿quieres?
—Lo siento, la fuerza de la costumbre.
Gruño en respuesta. Entiendo que es difícil de cambiar. Diablos, yo tampoco he dejado
caer mi impenetrable cortina de acero. ¿Es justo que yo espere que Micah deje la suya?
—¿Qué haces normalmente cuando te aburres?
Brewer se encoge de hombros, inclinando la cabeza para mirar por la ventana—.
Pajearme normalmente —responde con indiferencia al cabo de unos segundos.
Me muevo en mi asiento, mi verga inmediatamente tomando interés en su comentario—
. No te vas a masturbar en el auto —resoplo, mis pantalones ahora incómodos.
La cabeza de Brewer se mueve a su alrededor, y estrecha sus ojos hacia mí—. No iba a
hacerlo, pero si vas a tomar esa actitud mamona conmigo, creo que seguiré adelante y me
entretendré después de todo. 148
Lamo mis labios secos, forzando mi mirada a permanecer en el camino en lugar de
perseguir la imagen periférica de los dedos largos y delgados de Brewer jugando sobre la
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cremallera de sus jeans mientras se inclina hacia atrás y abre las piernas.
—Brewer —su nombre sale como media irritación, tiene una súplica sin aliento. Quiero
que pare, es irresponsable e inmaduro. Pero, tal vez una pequeña parte de mí quiere que siga
adelante.
 —Shhh, osito de peluche, sé que quieres verme hacer un desastre de mí mismo —bromea
Brewer en voz baja, el sonido de sus respiraciones se vuelve más áspero.
Arriesgo un vistazo y encuentro la larga y bonita verga de Brewer en su mano. Miro de
nuevo a la carretera para asegurarme de que todavía está recta y despejada, y luego vuelvo a
Brewer mientras baja sus pantalones para exponer también sus bolas. Sus bolas gordas y sin
vello son fascinantes cuando rebotan con cada uno de sus tirones.
Mi verga palpita, atrapada contra mi muslo en mis jeans apretados. Tenía demasiada
prisa esta mañana para molestarme con la ropa interior, así que la tela de mezclilla áspera se
frota contra mi sensible verga.
—Brewer —gemí esta vez, su nombre sintiéndose mal en la lengua. Él gira su cabeza
hacia mí y, por un momento, me quedo con su sonrisa perezosa y sus ojos de párpado medio.
—Juegas de forma tan directa, pero te gusta un poco de peligro con tu sexo. ¿Verdad,
Pete?
No, no creo que sea el peligro. Creo que podrías ser simplemente tú. Está en la punta de
mi lengua, pero regreso al camino para evitar decir lo que realmente quiero decir. Quizá no
odie tanto a Brewer. ¿Quizás me gusta un poco como persona? Mierda, nunca pensé que eso
pasaría.
—Oh, joder —gime y mi verga gotea en mis pantalones—- Oh Jesús, Pete —una mano cae
en mi muslo, tan cerca de mi verga que gimo—. Dios, amo tener tu monstruosa verga dentro
de mí; es en lo único que pienso cuando me masturbo.
—Pensé que habías dicho que no te masturbabas —pregunto sin aliento.
—Nunca dije eso, lo que dije fue que tenías que cuidarme fuera de cámara. Si voy a tener
un novio falso, también podría cosechar los beneficios.
—Bastardo escurridizo —me río entre dientes. Su mano se clava en mi muslo y mi risa se
convierte en un gemido. Micah me acuna a través de mis jeans, apretando pero cuidando de
ser gentil con la ya áspera tela.
Oigo un ligero golpe cuando su cabeza cae hacia atrás contra el reposacabezas y el
sonido de sus caricias se hace más rápido. Cada respiración sale en un fuerte resoplido,
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mezclándose con gruñidos. Todo el tiempo su mano continúa dándome masajes,
acercándome al borde con él. Luego se tensa, un fuerte gemido se le escapa mientras el olor
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a semen llena el coche. Mi verga pulsa fuerte, atrapada entre su mano y mi pierna. La parte
interior de mi muslo está cubierta de una liberación caliente y pegajosa.
 En el lobby del hotel, es como un déjà vu cuando tratamos de decidir con quién
compartimos habitación. La última vez que salimos de la ciudad, fue Nueva York, y terminé
compartiendo con Rebel. Esa fue la noche en que él y Troy hicieron las cosas oficiales. Habían
estado peleando y Rebel estaba deprimido de que pudieran estar terminando las cosas,
entonces Troy voló a Nueva York para sorprenderlo. No hace falta decir que no pude pasar
mucho tiempo en la habitación después de eso ya que estaban ocupados follando como
conejos.
—Me alojaré con Bear —se ofreció Rebel—. Entonces Campy, Heart y Pixie pueden
compartir.
Echo un vistazo a Brewer. Obviamente, tenemos que compartir para mantener la
artimaña, pero me sorprende que no me importe. De hecho, si se me hubiera dado la
oportunidad de elegir con quién alojarme, habría elegido a Brewer por mi cuenta. ¿Cuándo
demonios pasó eso? Esto de la amistad realmente me sorprendió. Pero debo admitir que
Brewer no se parece en nada a lo que supuse que era durante tanto tiempo.
—¿Quieres ir a ver nuestra habitación? —sugiere Brewer—. Podemos romper la cama
antes de la convención —menea sus cejas para enfatizar.
—¿Qué tal si rompemos la cama con una siesta? —contraofrezco, porque las bolsas bajo
sus ojos se están oscureciendo de nuevo.
Sus hombros caen un poco y me ofrece una sonrisa de agradecimiento.
Las tres habitaciones están una al lado de la otra. Bear nos deja con instrucciones para
que estemos listos para ir al centro de convenciones en el primer piso en tres horas.
Dentro de nuestra habitación, tomo la maleta de Brewer y la pongo junto a la cómoda,
junto a la mía. Agarro el control remoto y encuentro una película al azar, luego pongo el
volumen bajo. Brewer ya está en la cama cuando me doy la vuelta, sin más que un par de
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calzoncillos verdes apretados y su camiseta. Me despojo de mis pantalones manchados de
semen, así como de mi camisa y calcetines, y me arrastro a la cama a su lado. Mi corazón da
Página

un extraño y lento balanceo dentro de mi pecho mientras él se acurruca más cerca de mí,
apoyando su cabeza en mi pecho y enrollando su cuerpo alrededor de mí.
Por un segundo, considero protestar, pero la mirada pacífica en su rostro cuando
empieza a dormirse me impide perturbarlo.
 BREWER
No recuerdo exactamente cuándo sospeché por primera vez que era gay, pero puedo precisar
el momento exacto en que estuve cien por ciento absolutamente seguro. Fue cuando Lance
Dorset, un estudiante del último año de mi escuela y la estrella del equipo de baloncesto de
nuestra escuela, se emborrachó cegadoramente en una fiesta y realizó un striptease
espontáneo.
Yo era un estudiante de segundo año que no tenía nada que hacer en esa fiesta, excepto
por el hecho de que los chicos de último año me amaban por ser un bromista y payaso de
primera clase y siempre me invitaban a sus fiestas. Sí, literalmente era el payaso de la clase y
no sólo de mi propia clase.
Esa fiesta fue particularmente salvaje, en la que participaron tequilas barato y chicas
haciendo un concurso de camisetas mojadas en el extremo poco profundo de la piscina. Los
chicos no querían ser superados y anunciaron un concurso de striptease. Mientras Lance se
despojaba de un par de apretados y elásticos bóxers deportivos Adidas, supe sin lugar a dudas
que yo era gay. Quería besar cada músculo de su perfecto six pack, luego lamer y mordisquear
mi camino hacia abajo y darme un festín con su verga. Porque en serio, el tipo estaba cargado.
Me acuerdo de ese momento cuando me encuentro en un gigantesco centro de
convenciones viendo a un tipo marcado y escasamente vestido dar una demostración en pole
dance. Su cuerpo perfectamente proporcionado muestra cada curva y músculo mientras se
dobla alrededor de ese tubo, girando, bajando y volteándose sin esfuerzo. Está cubierto de
una especie de capa de brillo, y es fascinante verlo.
No soy el único que no puede quitarle los ojos de encima. Alrededor de mí hay cientos
de hombres gays, todos mirando a este hombre perfecto mostrando su cuerpo y sus
habilidades. En ese orden. Es en momentos como éste cuando me acuerdo de lo gay que soy.
—Cinco minutos más y la mitad de los chicos se vendrán en sus pantalones —gruñe Tank
151
en mi oído.
Página

—Cierto —suspiro, y finalmente le quito los ojos de encima al hombre caramelo.

Tenemos que reportarnos en nuestro stand en diez minutos, así que será mejor que nos
pongamos en marcha.
—Vamos —dice Tank, su mano carnosa me lleva en la dirección correcta.
 Me siento mucho mejor después de esa siesta, aunque me sorprendió despertarme
junto a Tank. Me imaginé que se levantaría en algún momento o incluso caminaría, pero se
acostó pacientemente a mi lado durante dos horas mientras yo dormía. No estoy seguro de
qué hacer con eso, pero estoy agradecido por el descanso extra. Dios sabe que lo necesitaba,
ya que me estaba quedando sin gasolina otra vez.
—Tenemos un turno de dos horas en la cabina —me informa Tank, con la boca cerca de
mi oreja mientras caminamos.
—¿Alguna instrucción específica? —pregunto.
West Coast Pride es el mayor evento gay de la costa oeste, y los Ballsy Boys tienen un
stand, por supuesto. Bear espera atraer nuevos espectadores, pero también explorar algunos
nuevos potenciales Ballsy Boys. La serie con Tank y conmigo está atrayendo a muchos nuevos
suscriptores, y Rebel y Bear nos han hecho saber que necesitan nuevos chicos.
—Me dijeron que fuera amigable —refunfuña Tank, y no puedo evitar reírme.
Me pongo de lado y pellizco su mejilla—. Te ayudaré a sonreír, oso gruñón.
—Si sigues tocándome así, te mostraré lo gruñón —dice Tank, pero no hay calor detrás
de sus palabras. Ahora es una broma, la vieja animosidad reemplazada por algo alegre.
—¡Oh, Dios mío, son Tank y Brewer! —alguien grita en cuanto doblamos la esquina y nos
acercamos al stand.
Tank y yo nos detuvimos por completo cuando registramos la escena que teníamos
enfrente. Hay una fila frente al stand de los Ballsy Boys, que se escabulle a la vuelta de la
esquina y pasa a lo largo de otros diez stands, y juro que es de al menos cien personas. La
mayoría de esas caras se vuelven hacia nosotros ahora con emoción, y veo Sharpies y
camisetas y putas postales con nuestras caras en ellas. ¿Qué demonios está pasando?
—¿Qué carajo? —dice Tank, expresando mis pensamientos exactamente.
Rebel se apresura hacia nosotros—. Bien, están aquí. Parece que tenemos un poco más
de entusiasmo por su sesión de firmas de lo que esperábamos. La seguridad está en camino,
así que esperen unos minutos antes de que empiecen a firmar mierda.
Mi boca se abre antes de atraparme—. ¿Están todos aquí para vernos? —digo con partes
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iguales de fascinación y horror.
Página

Rebel envía a Tank una mirada como si estuviera evaluando en cuántos problemas está
metido—. Sí. Anunciamos su turno, y empezaron a aparecer hace una hora... Pixie y Campy
los han estado entreteniendo, pero son ustedes dos a los que quieren.
Tank y yo compartimos una mirada. Sé que él odia esta mierda de todos modos, así que
sólo puedo imaginarme lo poco feliz que debe estar ahora mismo. Así que, tomo su mano y
entrelazo mis dedos a través de los suyos—. Okay —digo con mucha más confianza de la que
siento, porque incluso para un tipo que ama a los fans como yo, esto es mucha gente—.
Nosotros nos encargamos de esto.
Tank me lanza una mirada de desesperación silenciosa, pero sigue mi ejemplo mientras
tomamos posición en el stand frente a un telón de fondo de Ballsy Boys que es perfecto para
tomarnos selfies. Y vaya, sí nos tomamos selfies. Sonreímos y posamos y firmamos todo lo
que nos ponen delante.
Dos horas después, parece que la línea ni siquiera se ha encogido, y estoy empezando a
preocuparme. Tank lo está intentando, de verdad, pero puedo decir que está a punto de llegar
al final de su tolerancia con esta mierda. ¿Cuánto tiempo exactamente espera Bear que
sigamos con esto? Aun así, la sonrisa en mi rostro permanece en su lugar mientras respondo
las mismas preguntas una y otra vez.
El siguiente en la fila es un tipo que hace que Tank parezca un twink, aunque es unos
cuantos centímetros más bajo. Está construido como un... Honestamente, ni siquiera tengo
palabras. El tipo desafía cualquier descripción. Basta decir que se parece a Arnold
Schwarzenegger en sus días de gloria que tuvo un bebé con Hulk. El resultado es aterrador,
pero me las arreglo para ser amigable.
—Claro, nos encantaría posar contigo —le digo, y volvemos a ocupar nuestro lugar en el
trasfondo.
—Viejo, tengo tantas ganas de follarte que ni siquiera es gracioso —gruñe el tipo
mientras sostiene su teléfono para tomar una selfie.
Giro mi cabeza en shock ante esa declaración descarada, sólo para descubrir que no se
dirige a mí, sino a Tank. Mierda, esto se va a poner feo.
—No soy pasivo —dice Tank, dando un paso atrás tan rápido que casi se tropieza con
sus propios pies. Su tono es apenas civilizado, pero me impresiona que siga usando palabras.
—Hermano, te lo haría bien, lo juro. Me encantan los tipos que pueden tomarlo, ¿sabes?
Y con eso, su mano cae sobre el culo de Tank con una nalgada que hace eco en el stand.
Detrás de mí, Rebel jadea, y veo que la mandíbula de Tank se aprieta, señalando que está a
punto de entrar en erupción.
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Toco al Hulk en su hombro para llamar su atención—. Quieres mantener tus manos
Página

alejadas de mi hombre —digo, luchando para mantener mi tono amigable.

Se gira para mirarme y sonríe, pero no es una sonrisa feliz—. ¿O qué?
 Demasiado para mantenerlo amigable, entonces—. ¿O qué? ¿Estás jodidamente
bromeando? Ese es mi novio en caso de que no lo notaras. Te lo digo, tienes que irte antes de
que las cosas se pongan feas.
El tipo da un paso hacia mí, y me enfrento a una pared de músculo—. Tal vez él quiere
experimentar lo que es ser follado por un hombre de verdad.
No puedo evitarlo, pero me río. Ni siquiera es con la intención de antagonizarlo, porque
Dios sabe que no soy tan estúpido, pero esa frase es tan horriblemente cliché que sólo me río.
—Estoy bastante seguro de que dejamos de equiparar los músculos con la masculinidad
real en los años ochenta... Además, Tank no tiene nada que ver con nadie más que conmigo,
y yo soy el hombre que necesita. E incluso si él quisiera, tendría más gusto para ser follado
por un hombre que lo llama hermano y viejo. Mi consejo es que dejes los esteroides y tomes
una o dos clases de coqueteo, porque apestas en eso. Ahora vete al carajo antes de que
seguridad te eche.
Me he asegurado de que mi voz fuera lo suficientemente fuerte como para oírse hasta
el frente de la fila, donde la gente está empezando a agitarse—. Déjenlo en paz —dice alguien.
Manos fuertes me tiran hacia atrás, y luego me dan vueltas y me sostienen contra el
pecho de Tank—. Eso —gruñe en mi oído—. Fue sexy como el carajo. Me gustas cuando te
pones un poco celoso.
Antes de que pueda decir nada, su boca cubre la mía con un beso tan posesivo, que
apenas registro los gritos que brotan a nuestro alrededor. Cuando finalmente salimos a tomar
aire, Hulk ya no está, y Tank parece un gato que se las arregló para robar un pez entero de la
encimera de la cocina.
—Así de sexy, ¿eh? —logro decir, y muevo mi boca a su oído para susurrarle—: ¿Lo
suficientemente sexy como para tener mi camino con tu culo?
Me imagino que es la oportunidad perfecta para probar este problema que aún no he
resuelto. El tiempo se acaba, considerando que tenemos esa sesión en unos días. Tank se
congela bajo mis manos, lo que me da la respuesta que siempre sospeché.
—Te mostraré lo que es ser follado por un hombre de verdad —digo, imitando la voz de
ese tipo.
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Tank mira de vuelta, y cuando ve mis ojos riendo, y cae en cuenta que estoy bromeando,
Página

rompe en una sonrisa. Lo tengo, pero ahora no es el momento. Puede esperar un poco más,
a diferencia de los cientos de fans que todavía nos esperan.
 TANK
Estoy agotado cuando volvemos a la habitación después de nuestro turno firmando mierda
en el stand. Terminamos haciendo casi cuatro horas en lugar de dos porque la línea parecía
nunca terminar, y no queríamos decepcionar a tantos fans. Cuando mi mano empezó a tener
calambres, le puse fin, diciéndole a Bear que si él conseguía direcciones, yo firmaría algunas
cosas y las enviaría en las próximas semanas para apaciguar a los que se quedaron en la fila.
Luego, Brewer y yo nos detuvimos en el bar del vestíbulo y compramos una botella de tequila
antes de regresar arriba, ambos listos para relajarnos.
Todavía no puedo superar a ese idiota que pensó que nalgueándome y diciéndome que
quería penetrarme me metería en la cama. Concedido, hace unas semanas probablemente lo
hubiera aceptado sólo para terminar con esto. Pero desde que Brewer y yo nos hicimos
amigos, he empezado a pensar que tal vez debería pedirle que me penetre antes de la
grabación. Sólo necesito encontrar una manera de preguntar y mantener mi dignidad intacta.
Me quito los zapatos y caigo en la cama cuando entramos en la habitación. Espero que
Brewer se una a mí, y cuando no lo hace, abro un ojo para verlo todavía parado al pie de la
cama.
—Tenemos que hablar.
—¿Estás rompiendo conmigo? —pregunto sarcásticamente.
—No —responde Brewer, mirándome fijamente—. Tenemos que hablar del hecho de que
no puedo dejarte que seas pasivo por primera vez en una película.
—¿Cómo lo supiste?
—¿Suposición salvaje? 155
—Bien, tienes razón. No he sido pasivo antes, y francamente tampoco me emociona
hacerlo en cámara. Traté de encontrar a alguien que me follara, pero no me fue muy bien.
Página

Brewer levanta las cejas y me sonríe—. No has agotado todas tus opciones, oso pardo.
—¿Quieres follarme?
—Como no te imaginas —me guiña el ojo.
 —¿Podemos hablar en serio sobre esto por un segundo?
—Sí, está bien. No puedo, con la conciencia tranquila, dejar que tu primera vez sea una
escena. Así que, estoy ofreciendo mis servicios antes de la filmación en unos días.
Dejo escapar un largo aliento, froto mis manos sobre mi cara. De cualquier manera, mi
culo le pertenece a Brewer. Pero, ¿hará que las cosas sean demasiado raras y complicadas si
dejo que lo tenga en privado así? ¿La intimidad de esto cambiará las cosas entre nosotros?
—Deja de pensar tanto; te vas a torcer algo —bromea Brewer, y yo le paro el dedo—. En
serio, no puedo hacerlo en cámara, y te prometo que lo haré bueno para ti. Yo... yo no quiero
que tengas a algún imbécil yendo hacia ti sin preocuparse por tu satisfacción.
Levanto una ceja ante la inesperada preocupación de Brewer por mí. Claro, nos hemos
estado acercando, pero esto va más allá de la llamada de cualquier amistad tentativa que
hayamos creado. Pero tiene razón, ¿a quién más voy a conseguir para hacerlo? El tiempo se
ha acabado. Y no es que no estuviera pensando hace unos minutos que Brewer sería la mejor
opción. Tiene razón, sé que lo hará bien para mí.
Después de unos segundos de contemplación, asiento, y una sonrisa aparece en la cara
de Brewer.
—¿Quieres un trago? —pregunto, sosteniendo la botella de tequila.
—Diablos que sí —sostiene los paquetes de sal y el limón que logró convencer al
camarero que nos diera.
Pone una servilleta y lucha por cortar el limón con un cuchillo de plástico mientras yo
miro con una sonrisa. Me mira y levanta una ceja hacia mí.
—¿Algo gracioso? —pregunta. Sacudo la cabeza y tomo un trago de la botella.
—Gracias —digo después de un momento.
—No es como si esto fuera a ser una dificultad.
—Tal vez no para ti —murmuro, y Brewer se ríe—. No te preocupes, seré gentil.
Con el limón finalmente cortado, Brewer los trae, junto con los paquetes de sal, a la
cama donde se sienta a mi lado.
156

Brewer muerde el limón y se estremece antes de tirar la cáscara en la mesita de noche.

Página

—Entonces, ¿sólo sales con chicos pasivos o qué? —pregunta conversacionalmente.

Me encojo de hombros y tomo mi propio trago de tequila, ignorando la quemadura
mientras se desliza por mi garganta. Luego tomo una rodaja de limón de la servilleta y me la
meto en la boca para ahuyentar algo del amargo sabor del tequila barato.
 —No exclusivamente —finalmente respondo cuando me doy cuenta de que Brewer me
va a esperar.
—Entonces, ¿todos han estado demasiado asustados de hacerte su perra por la noche?
—se burla Brewer.
Le disparo una mirada llena de todo el veneno que pude lograr. Me está presionando a
propósito, lo sé. Él no ve ser pasivo como una sumisión. He visto su cara cuando es follado; él
se siente poderoso, no dominado.
—Darte mi culo no me convierte en tu perra. No te confundas, folla-chicos.
—¿No? Supongo que no eres de los que se acuestan y lo toman, ¿no? Lo de la cámara no
es un acto, te gusta follar duro. Y apuesto a que a ti también te gustará ser follado duro. No
te preocupes, oso pardo, voy a ser el dueño de ese culo y te tendré rogando por mi verga otra
vez.
Un escalofrío recorre mi espina dorsal y mi verga llena la parte delantera de mis jeans,
tensándose ante sus sucias palabras.
Brewer toma un vaso de plástico de la mesita de noche y sirve un trago de tequila y me
lo da. Luego, abre un paquete de sal y toma un trozo de limón. Con el limón y la sal en una
mano, Brewer se sube a mi regazo y presiona su pecho contra el mío. Inclina la cabeza hacia
la izquierda, exponiéndome el lado derecho del cuello.
—Lame —instruye, y yo obedezco sin pensarlo, arrastrando mi lengua sobre su punto de
pulso, saboreando el sabor de su sudor y sus feromonas.
Él toma el paquete de sal y esparce un poco sobre la mancha húmeda dejada por mi
boca. Luego, se mete la rodaja de limón en la boca y me guiña un ojo. Mi cerebro tarda un
segundo en procesar lo que él quiere, pero tan pronto como lo hago mi corazón late con la
sangre llena de lujuria que palpitando a través de mis venas.
Levanto el vaso de plástico hasta mis labios y bajo el líquido con una inclinación de mi
cabeza. Entonces, agarro a Brewer por el pelo y lo jalo hacia mí. Arrastro mi nariz contra la
áspera barba de su mandíbula e inhalo su esencia. Mis dientes muerden en el punto justo
detrás de su oreja, y finalmente, paso mi lengua a través de la sal. 157
Brewer gira la cabeza y luego estrella su boca contra la mía. El limón se desliza en mi
boca como un pasajero en la lengua de Brewer. Tiro el vaso de plástico al suelo, sin que me
Página

importe lo que le pase, y empuño los lados de la camisa de Brewer, tirando de él. Cuando
tenemos que separarnos para poder sacársela por su cabeza, escupo el limón en algún lugar
cerca del vaso y luego vuelvo a atacar sus labios.
Mordisqueamos y lamemos los labios del otro mientras los gemidos, gruñidos y
maldiciones llenan el aire. Es como si él estuviera succionando todo el aire de mis pulmones
porque juro que no puedo respirar bien. Pero al carajo si me importa. Todo lo que quiero es
respirar a Brewer; quiero estar rodeado de él y lleno de él. Quiero cosas que me niego a
reconocer ahora mismo, cosas que planeo culpar por estar borracho de lujuria y tequila.
Nos revolcamos juntos para quitarnos los pantalones y echarlos de la cama. No llevaba
ropa interior, así que mi verga llena y goteante se presiona contra la tela áspera de los
calzoncillos de Brewer. Su propia verga apenas está contenida, la cabeza casi asomándose.
Brewer corre su mano por detrás de mi muslo y mi nalga. Me mira con una expresión
dulce y tímida, y por un segundo, estoy completamente fuera de mi zona. Estoy tan
acostumbrado a odiar a Brewer; lo he hecho desde el momento en que nos conocimos, y él
estaba coqueteando con un chico guapo. Apenas me dio una pizca de interés antes de
desestimarme. Se disculpó después, diciéndome que había sido cautivado por un culo, pero
que ya lo había superado. Era demasiado tarde; yo ya sabía quién era Brewer entonces. Era un
folla-chicos que estaba más preocupado por un pedazo de culo caliente que por otra cosa.
Era superficial y mamón. Él era demasiado bueno para mí, y él lo sabía.
Una fuerte nalgada me asusta fuera de mis pensamientos—. Te estás poniendo muy
melancólico. Es hora de que te muestre los placeres ocultos del juego de culo.
Me aparto de él para que se levante. Dudo, no estoy seguro de cómo vamos a hacer
esto.
—Manos y rodillas, muchachote —ordena Brewer.
Asumo la posición, sintiendo todo tipo de mala vibra en este lado de las cosas.
—Dios, tienes un lindo culo. No creí que los peludos me atrajeran, pero en ti, osito de
peluche, todo este pelaje es sexy como el carajo. Eres tan varonil y jodidamente sexy —elogia
mientras amasa los globos de mi culo.
—¿Podemos saltarnos el soliloquio de tu nuevo fetiche peludo y poner en marcha este
espectáculo?
—De ninguna manera, osito de peluche. Esto no es una escena, y no hay manera de que
me salte el juego previo —la voz de Brewer vuelve a ser ronca, sexy, e intento esconder mi
escalofrío. 158
Abro las piernas un poco mientras Brewer se acerca, y mi verga se flexiona, desesperada
por cualquier fricción.
Página

Me tenso cuando sus manos agarran mis nalgas y las separa. Resisto la urgencia de
darme vuelta y esconderme de su vista. Es muy incómodo tener a alguien mirándote el culo,
y sí, me doy cuenta de la ironía de esa afirmación como estrella porno.
 Dejo salir un grito de sorpresa cuando la lengua de Brewer toca mi agujero. Su risa vibra
contra el sensible manojo de nervios, y aprieto los puños. La siguiente vuelta de la lengua de
Brewer es desde mis bolas hasta la parte superior de mi grieta, simplemente pasando más allá
de mi agujero, y me retuerzo.
Cada lamida es diferente a la última, la longitud de la caricia, la presión, el camino,
Brewer me mantiene alerta, y al poco tiempo, me olvido de sentirme cohibido. Él agita su
lengua a lo largo de mi entrada y el calor se asienta en la boca de mi estómago. Presiono hacia
atrás, necesitando más. Cuando su lengua estira mi agujero, maldigo, y mi verga palpita,
balanceándose entre mis muslos, todavía anhelando el tacto, la fricción, cualquier cosa que
me ayude a venirme.
Brewer lame mi culo con entusiasmo, lamiendo y chupando en mi agujero con sonidos
descuidados y gemidos codiciosos hasta que estoy seguro de que realmente podría venirme
sólo con esto, y no estoy seguro de cómo sentirme al respecto.
Y entonces su boca se va, y suelto un gruñido de desaprobación.
—Te gustó eso, ¿no? Tal vez hagamos de ti un buen chico pasivo.
Aprieto los dientes juntos y gruño en voz baja, ganándome otra risita de Brewer. Le daré
esto, sus provocaciones y bromas están ayudando a calmar mis nervios mejor de lo que
cualquier juego previo podría hacerlo.
—Un poco de frío —advierte Brewer, metiendo sus resbaladizos dedos en mi hendidura.
Me tenso, medio esperando que sólo vaya a ello y meta sus dedos—. Relájate, princesa, seré
gentil con tu sensible trasero.
—Jódete —gruño a través de dientes apretados.
—No, es tu turno esta noche, oso pardo. Ahora respira hondo y presiona cuando empuje
hacia adentro, ¿entendido?
Respiro y asiento. ¿Cuántas veces he usado alguna variación de esas palabras? Suficiente
para saber cómo instruir un pasivo nervioso. Nunca pensé que estaría de este lado de la
ecuación.
Sin embargo, no lo hace de inmediato. Brewer desliza sus dedos alrededor de mi anillo
159
hasta que realmente comienza a sentirse bien. Dejo escapar una respiración que no me había
dado cuenta de que estaba aguantando y me dejo relajar.
Página

Una vez que lo hago, siento la punta de un dedo empujar dentro de mí. Hay una leve
quemadura incluso con una invasión tan pequeña; no puedo imaginarme cómo una verga se
va a sentir como cualquier otra cosa que no sea fuego en mi trasero. Poco a poco va entrando
y saliendo el dedo hasta que empieza a parecer interesante. Luego roza algo dentro de mí que
me hace gruñir y empujar contra él, necesitando más como si necesitara oxígeno.
 —Wow, ya sabes, he aprovechado el poder de la próstata en muchos hombres, pero
nunca supe cómo...
Lo hace de nuevo, y yo rompo mi sentencia en un largo y bajo gemido.
—Aún no has visto nada, bebé.
Un segundo dedo se une al primero y la quemadura comienza de nuevo. Esta vez es más
rápido en volverse placentero. Cuando agrega un tercero, sé que espero la quemadura, y no
me pongo tenso, y santo infierno, estoy sorprendido de lo bien que se siente. Presiono hacia
atrás, follándome en los dedos de Brewer, necesitando más, más, más.
—¿Estás listo para mí? —susurra con voz ronca.
Asiento, mi cerebro demasiado revuelto para formar palabras, y mucho menos frases.
Oigo cómo se abre el paquete de condones, y segundos después, sus dedos se deslizan fuera
de mí y algo mucho más grande choca contra mi entrada.
—Recuerda no tensarte —instruye Brewer y empuja lentamente.
—Hijo de puta —siseo, colapsando mis antebrazos sobre la cama.
—Sólo respira, Pete.
El uso de mi nombre real detiene mi corazón por un segundo, y estoy lo suficientemente
distraído como para relajarme y dejar que Brewer empuje más profundamente. Aprieto los
puños y trato de mantenerme relajado. Es demasiado. No sé cómo le gusta esto, pero no, no
para mí.
Entra lentamente con empujones superficiales mientras yo respiro durante la invasión.
El ardor comienza a disminuir, pero la sensación de estar estirado y lleno es... extraña. No
necesariamente desagradable, pero tampoco nada por lo cual perder la cabeza.
—¿Estás bien, Grizzly? —Brewer comprueba, su voz áspera con contención.
—Sí —le aseguro.
—Espera entonces, porque está a punto de ponerse bueno.
Brewer me tira de las caderas y me obliga a subir un poco más. Cuando se retira y vuelve
160
a empujar en un nuevo ángulo, y ooooh, el hormigueante calor regresa, se extiende desde mis
bolas, a mi verga, a la boca de mi estómago.
Página

Balanceo mi peso en un brazo y busco mi verga con el otro, pero Brewer ladra una
reprimenda.
—No te toques. Voy a follar el semen fuera de ti, oso pardo.
Puta madre eso es caliente.
 Gruño y vuelvo a bajar mi brazo. Me está follando con empujones lentos y superficiales,
y necesito más. Empujo contra él y tomándolo hasta que sus bolas chocan contra las mías.
Brewer gime esta vez y clava sus dedos en mis caderas mientras trata de no perder el
control. Se recupera después de unos segundos y se estrella fuerte y profundo dentro de mí
una y otra vez, golpeando mi próstata hasta que estoy temblando, follando de regreso en él
mientras persigo el calor eléctrico que se propaga por la parte inferior de mi cuerpo.
—Oh Micah, joder, eso es... —mis palabras son cortadas por un largo gemido mientras
clava mi próstata otra vez.
—Peter —jadea, sus dedos clavándose más fuerte en mis caderas y sus empujes
volviéndose más erráticos.
Mi verga palpita y un empujón más me tiene pintando el edredón y mi pecho con semen.
Mi agujero pulsa alrededor de la verga de Brewer, enterrada hasta la empuñadura. Puedo
sentir su placer en respuesta a medida que su cuerpo se tensa y se hincha dentro de mí.
Se inmoviliza y luego da unas cuantas sacudidas débiles más cuando sale mientras
monta las réplicas. Me siento aliviado de poder colapsar cuando él se retira, ya que mi propio
cuerpo ha sido estrujado por el placer.
—Les pedí a algunos de ellos que me follaran, y no lo hicieron. Yo sólo era un gran bruto
para ellos, follarme habría destrozado esa imagen, creo.
Giro la cabeza y lo encuentro sacando el condón y tirándolo a la basura. Luego se sube
de nuevo a la cama a mi lado y se vuelve hacia mí.
—Aw, bueno, siempre supe que eras mi perra, así que ninguna imagen se rompió —
bromea Brewer.
—Jódete —gruño sin veneno.
—Mmm, quizás la próxima vez.
Se acuesta y cierra los ojos. Hay algo de paz en su cara cuando está durmiendo. O tal
vez sea el tequila hablando.
Me quedo despierto, tamizando un millón de pensamientos y sentimientos corriendo
161
por mi mente. Yo había tenido razón, dejar que Brewer tuviera mi culo fuera de cámara sí se
sintió íntimo. Pero no puedo encontrar en mí el arrepentirme. Odio admitirlo, pero si hubiera
Página

tenido que soñar con el escenario perfecto de mi primera siendo pasivo, Brewer cubrió cada
urna y algunas más. Me hizo sentir seguro y cómodo, e hizo que me viniera más fuerte de lo
que sabía era posible. En general, dejaría que Brewer me penetrara de nuevo. Bueno, dejaré
que me penetre de nuevo en cámara. Pero incluso podría considerarlo fuera de cámara
también.
 TANK
Estoy en ropa interior, haciendo café cuando llaman a mi puerta. Shaggy salta del sofá,
ladrando excitado. Por un segundo, considero ponerme unos pantalones, pero la única
persona que podría ser es Brewer.
Y seguro, cuando abro la puerta, está ahí parado con una sonrisa en la cara y un regalo
en las manos. Mi corazón se estremece y me quedo boquiabierto.
—¿Qué es eso? —pregunto, mi garganta se seca de repente.
—Un pajarito me dijo que era el cumpleaños de alguien —dice Brewer con suficiencia,
empujando el regalo hacia mí—. Será mejor que te vistas, ya estamos retrasados.
—¿Retrasados para qué? —pregunto mientras pasa a mi lado y se deja caer en mi sofá.
—Para tu cumpleaños —responde como si fuera la cosa más obvia del mundo.
—Okay, retrocede. ¿Quién te dijo que era mi cumpleaños?
—Eché un vistazo a tu expediente laboral. Basta de preguntas, abre tu regalo.
Lo miro con la boca abierta durante varios segundos, el peso del regalo pesado en mis
manos. No recuerdo la última vez que recibí algo para mi cumpleaños. Mis padres no creían
en los regalos de cumpleaños después de los diez años. Dijeron que los cumpleaños eran para
niños. Ni siquiera puedo empezar a preguntarme por qué él estaba mirando mi expediente o
qué lo poseyó a conseguirme un regalo y aparentemente planear algún tipo de salida. Pero
está haciendo que mi pecho duela y que mi garganta se sienta apretada.
Mis dedos tiemblan al arrancar el papel de colores brillantes del regalo, y soy lanzado
aún más fuera de balance cuando veo lo que hay dentro. 162
—Esto es... yo no... —tartamudeo, dándole vueltas en mis manos en asombro.
—Te gusta, ¿verdad? —pregunta Brewer, con los dientes mordiendo su labio inferior—.
Página

Sé que te gustan los modelos, y dijiste que el puente Golden Gate te inspiró, así que…
—Es perfecto —le aseguro, volviendo a mirar la imagen de la caja—. No puedo esperar a
construirlo y ponerlo al lado de los otros.
—Bien —exhala lo que suena como un alivio—. Ahora vístete.
 —¿Será que puedo saber a dónde vamos?
—Ugh, Iba a esperar hasta que llegáramos para decírtelo, pero tengo la sensación de que
serás más cooperativo si lo sabes. Tengo entradas para un festival de cine hoy. Todos los
clásicos: Casablanca, Singing in the Rain y The Sound of Music, por nombrar algunos.
Estoy tan abrumado por el gesto, que me encuentro caminando por la habitación y
sacando a Brewer del sofá. Iba a ser un abrazo, pero antes de que me dé cuenta de lo que está
pasando, mis labios están contra los suyos, mis manos en su pelo. Brewer gime contra mis
labios mientras chupo su labio inferior y luego empujo mi lengua contra la suya.
—Esto definitivamente nos hará llegar tarde —advierte Brewer, meneándose contra mi
prominente erección.
Gruño, y Brewer se ríe. A regañadientes, lo bajo. Corro mi pulgar a lo largo de su ahora
hinchado labio inferior y miro sus ojos, brillantes con su sonrisa contagiosa.
—Gracias, Micah.
—Cuando quieras, Pete.
Me dirijo a mi tocador y pongo mi nuevo modelo en el suelo, emocionado por trabajar
en él más tarde y completamente sin palabras de que me conseguiría un regalo tan perfecto.
Mi cabeza nada con emociones confusas mientras me pongo un par de jeans y una camiseta
negra.
—¿Quieres café? —pregunto mientras regreso a la cocina para servir mi café en una taza
de viaje.
—No, pero tomaré té si tienes.
—Claro, dame un minuto para hacer agua caliente. ¿Es demasiado asumir que realmente
desayunaste? —el silencio de Brewer responde la pregunta, así que pongo unas cuantas
rebanadas de pan en la tostadora y saco un recipiente con bayas del refrigerador—. Tengo
pan tostado y fruta que puedes comer en el coche mientras conduzco.
—Tank, no tienes que hacer eso.
—Alguien tiene que cuidarte. Porque francamente, estás haciendo un trabajo de mierda
163
por tu cuenta —espero que discuta con esa evaluación, y cuando no lo hace, casi me pregunto
si es peor de lo que pensaba—. ¿Mermelada de fresa o frambuesa?
Página

—Frambuesa, por favor.

Con el desayuno preparado, le entrego un pequeño recipiente de viaje con la fruta y pan
tostado dentro y luego hago un gesto hacia la puerta.
 —Por cierto, ¿cuándo es tu cumpleaños? —pregunto una vez que estamos en el coche y
nos dirijimos hacia el Hotel Hollywood Roosevelt donde Brewer me dijo que se está
celebrando el festival de cine.
—No importa —Brewer responde a mi pregunta.
—Viejo, después de todo esto hoy, puedes apostar tu culo a que voy a hacer de tu
próximo cumpleaños una locura.
—No te preocupes, no lo celebro.
Mi corazón se retuerce dolorosamente—. ¿Por tu hermano? Supongo.
—Sí. ¿Podemos dejar esto, por favor?
—No puedo, no hasta que me digas cuándo es.
Brewer suspira—. Fue el mes pasado, el 5 de septiembre.
—Espera, ¿no fue esa la noche que quisiste venir a mi casa en vez de pasar el rato en el
club?
—Supongo que sí —dice Brewer sonando indiferente mientras mastica el pan tostado.
—¿No querías ponerte loco en tu cumpleaños? ¿Quizás tener sexo?
—Tuve sexo en mi cumpleaños —señala Brewer.
—Esa fue una escena, así que eso no cuenta —argumento.
—Sentí como si contara cuando me vine tan fuerte que casi me desmayé.
Sus palabras envían un pulso de calor directo a mi verga—. Sabes lo que quiero decir —
insisto.
—Mmm —hace un ruido sin comentario en la parte de atrás de su garganta—. Lo que
estoy escuchando es que si no termino este evento de cumpleaños con una cogida, por así
decirlo, será un fracaso.
—Eso no es lo que estoy diciendo.
—Sólo estoy bromeando, osito de peluche. Sin embargo, tengo la intención de dejarte
164
seco más tarde. Es tu cumpleaños, después de todo. Y tienes razón: el sexo de cumpleaños
es obligatorio.
Página

Ignoro mi pulso golpeando mi verga ahora dura, presionando contra mi cremallera—. Lo

que nos lleva a mi pregunta original de por qué quisiste venir a mi casa en vez de acostarte
con ese tipo en tu cumpleaños.
—No lo sé —responde Brewer con un suspiro—. Pero tuve un buen cumpleaños.
 —Me alegro. Pero el año que viene, haré algo más por ti.
—Gracias.
Me estiro y le doy un pequeño apretón a su mano. Y, sólo porque se siente bien tocarlo,
dejo que se quede allí por el resto del viaje.
En el teatro, compramos bocadillos y encontramos asientos cerca del frente. Echo un
vistazo a Brewer por el rabillo del ojo mientras nos acomodamos. No puedo creer que haya
organizado esto para mí. Me ha dado más de un vistazo a su infancia menos que ideal, así que
es justo que le devuelva el favor.
—No he celebrado un cumpleaños desde que tenía diez años —admito mientras
esperamos que empiece la primera película.
—¿Por qué no?
—Mis padres son... —trato de pensar en una buena manera de describir a mis padres.
Porque no son malas personas y no quiero dar esa impresión—. Son gente muy práctica.
¿Sabías que crecí en una granja lechera?
—No —se ríe con sorpresa—. Pero te veo tirando fardos de heno por ahí.
—Sí, a mis padres les encantaba que yo fuera un tipo grande por naturaleza, ponía
músculos fácilmente. Era perfecto para el trabajo agrícola —concuerdo con una pizca de
amargura en mi voz. Tal vez si hubiera sido un niño flaco, no se habrían decepcionado tanto
de mí.
—Pero tú nunca quisiste trabajar en la granja. Siempre quisiste ser arquitecto.
—Sí. Pensaron que era muy frívolo y tonto. Querían que sacara mi cabeza de las nubes y
me concentrara en el trabajo real.
—Diseñar puentes es un trabajo real —me asegura Brewer, poniendo su mano sobre la
mía—. Y un día, cuando atraviese un puente que tú diseñaste, estaré muy orgulloso de ti.
Lágrimas arden en mis ojos y giro la cabeza para que Brewer no pueda ver la emoción
en mi cara. Afortunadamente, las luces se apagan y comienza la primera película, así que no
tengo que pensar en una respuesta a la cosa más perfecta que Brewer podría haber dicho.
165
Página
 Después de la maratón de películas, Brewer insiste en que paremos en una panadería de
camino a mi casa para comprar un pastel.
—¿Qué voy a hacer con todo este pastel? —pregunto, mientras me subo al auto de
Brewer sosteniendo un pastel de arcoíris, Brewer insistió en que era perfecto.
—¿Comerlo?
—Sabelotodo —resoplo y sacudo la cabeza.
Cuando volvemos a mi casa, Shaggy rebota felizmente, y Brewer se inclina para saludarlo
mientras yo pongo el pastel en la barra de la cocina.
—Ven a comer un poco de pastel. No me vas a dejar con todo esto solo.
—Espera, no lo cortes todavía —insiste Brewer, corriendo hacia mí.
Mete la mano en su bolsillo y saca una vela—. Sólo tenía uno en casa, y pensé que
encender treinta velas sería un dolor de cabeza. Así que, esto debería servir.
Pega la vela en el pastel y saca un encendedor para encenderla.
—Por favor, no cantes —ruego.
—Aguafiestas —se queja Brewer—. No cantaré, pero tienes que pedir un deseo.
Miro la llama parpadeante por un segundo, tratando de recordar qué tipo de cosas
frívolas siempre deseé cuando era niño. No es como si fuera real de todos modos, así que no
sé por qué estoy pensando tanto en qué desear. ¿Un millón de dólares? ¿Una personalidad
más alegre?
Miro a Brewer, sonriéndome sobre el pastel, y una cálida sensación llena mi pecho.
Desearía que esto fuera real.
El pensamiento es como un puñetazo en mi pecho, haciendo que el aire salga volando
de mis pulmones y mi corazón se acelere. Fue un pensamiento fugaz. Por supuesto, no lo digo
en serio. Me apresuro a apagar la vela antes de que se manifiesten más pensamientos locos.
—¿Qué pediste? —pregunta Brewer.
—Deseé una mamada —bromeo.
166

—Ya sale.
Página
 BREWER
Realmente necesito dejar de programar un turno de noche después de un rodaje. Ya era
mucho cuando rodaba con otros, pero después de una escena con Tank estoy agotado. No
estoy seguro de por qué exactamente. Al principio, odiarlo requería mucha energía, pero
tenemos una especie de amistad, supongo, y ha sido... interesante.
No es el hombre que creí que era, y apuesto a que siente lo mismo hacia mí. Estoy un
poco avergonzado de haber tenido todas estas nociones fijas sobre él que estaban tan lejos
de la verdad cuando odio tanto cuando los demás me ven sólo como el folla-chicos. Tank
todavía me llama así, pero ya no me importa tanto. Ahora es más bien una broma, ya que
ambos sabemos que lo hemos superado.
Pero las escenas con él son intensas por alguna razón. Hicimos una escena de mamada
mutua hoy, seguida por Tank teniendo una oportunidad con mi culo de nuevo, y fue otra
escena ardiente. No puedes negar la química entre nosotros, pero ese nunca fue nuestro
problema. Ahora que somos amigos, esperaba que las escenas fueran diferentes... menos
cargadas, pero no lo son. Las espero con ansias y les temo por igual.
Tank me pidió que viniera a cenar después. Había hecho lasaña casera, dijo, y se me hizo
agua la boca al pensarlo. Desgraciadamente, mi turno empezó a las seis, así que no pude ir.
Demonios, apenas tuve tiempo de comer, así que era otra barra de plátano y granola para mí.
También tuve un brownie, que me sobró de una enfermera que celebró su cumpleaños ese
mismo día y puso las sobras para el turno de noche en la sala de enfermería.
Sin embargo, para el tiempo que termina mi turno, estoy un poco mareado por la falta
de comida. ¿Y sueño, tal vez? Ha sido otra semana muy ocupada. De ahí mi conclusión de que
tengo que dejar de programar un turno de noche después de un rodaje. He estado trabajando
desde las nueve de la mañana hasta medianoche, y lo estoy sintiendo.
167
Afortunadamente, el tráfico es factible a esta hora de la noche, así que llego a casa desde
el hospital en quince minutos. Veo la luz que se derrama bajo la puerta principal, así que
Página

aparentemente Paul sigue despierto. Cuando entro, él y su novia Lorie están ocupados
arreglándose la ropa, así que supongo que interrumpí algo.
—Hola —digo, fingiendo no notar que la blusa de Lorie está al revés.
 Tiro mi bolsa de mensajería en mi habitación y me quito los zapatos. Necesito algo de
comer y luego necesito una ducha. Acabo de programar el tiempo de mi comida en el
microondas cuando Paul entra en la cocina, sujetando la mano de Lorie.
—Tenemos noticias emocionantes —dice.
Me trago media lata de Sprite antes de concentrarme en ellos. Parecen muy felices para
ser una pareja que lucha tanto como ellos. Tienen una relación a larga distancia, así que Lorie
sólo está aquí un fin de semana al mes o así, y Paul también conduce a Seattle cada dos fines
de semana.
—Escupe —digo, tratando de despertar un poco de entusiasmo. Estoy tan cansado que
apenas puedo aguantar más.
Lorie pone en mi cara su mano que muestra un enorme anillo. Sólo me toma un segundo
antes de que las implicaciones de ese anillo me golpeen. Pero antes de que pueda decir nada,
ella dice—: ¡Paul me propuso matrimonio y dije que sí!
Me enorgullece decir que puedo obtener la respuesta adecuada, que es felicitarla a ella
y luego a él, y fingir que me interesan los detalles.
—Lorie consiguió un trabajo en un bufete de abogados aquí en Los Ángeles —dice Paul.
Quito el plástico de mi cena de microondas. Se supone que es lasaña, pero no puedo
evitar pensar que se ve bastante triste, especialmente cuando me imagino cómo habría sabido
la de Tank. Es un buen cocinero, Peter, otro talento inesperado.
—Ni siquiera sabía que ya habías pasado el examen de abogacía aquí —comento, y luego
doy mi primer mordisco. Sabe a cartón mojado, pero al menos está caliente y supuestamente
tiene vitaminas extras, lo que es una tontería, por supuesto, pero me ayuda a fingir que es
algo saludable.
—Obtuve los resultados hoy —dice Lorie.
—Día ocupado para ti.
Ella irradia—. El mejor día de mi vida. Pasé el examen, conseguí un trabajo y una
propuesta, todo en un día. 168
—Bien por ti —digo con la boca medio llena—. Ahora todo lo que necesitas es encontrar
un lugar para vivir, ¿verdad?
Página

Y entonces me doy cuenta. Ella ya tiene un lugar para vivir. Aquí mismo, en el
departamento de su prometido.
—Sobre eso —dice Paul, y mi estómago se hunde—. No tiene mucho sentido que Lorie
intente encontrar su propio lugar cuando nos casemos de todos modos...
 Lo juro, este tipo es el rey de la pasividad agresiva. En vez de decírmelo a la cara, quiere
que saque la conclusión por él. Estoy tan jodido—. ¿Cuánto tiempo tengo hasta que me eches?
—pregunto, frotando mis sienes.
—El contrato dice dos semanas —interviene Lorie.
Mi cabeza se alza—. ¿Dos semanas? ¿Me estás tomando el pelo? ¿Cómo diablos se
supone que voy a encontrar algo en dos semanas? Apenas tengo tiempo para mirar entre mis
dos trabajos y mis clases.
Lorie cruza los brazos—. Es lo que dice el contrato.
Hablado como un puto abogado de verdad. No tengo idea de cómo voy a resolver esto,
pero ya se me ocurrirá algo. Siempre lo hago. Y maldita sea si voy a dejar que esta perra fría
tenga el placer de verme perdido.
—Bien —digo yo—. Me mudaré dentro de dos semanas a más tardar. Felicidades por tu
compromiso. Si me disculpan, necesito dormir. Traten de no hacer ruido cuando retomen sus
actividades sexuales, ¿quieren?

Diez días después, todavía no tengo ni idea de adónde ir. He intentado todo lo que se
me ha ocurrido, he respondido a todos los anuncios de búsqueda de compañero de cuarto en
Craigslist que he podido encontrar, pero es inútil.
Hasta ahora, he sido rechazado porque era hombre, hombre gay, y porque no estaba
dispuesto a entregar un depósito de dos mil dólares. Ni siquiera mencionemos al tipo que me
reconoció y que estaba más que dispuesto a dejarme pagar parte de la renta de otras maneras.
Imagínate eso viniendo de un tipo de cincuenta y tantos con mal aliento y barriga de cerveza,
y eso resume mi semana perfectamente. AL CARAJO MI VIDA. 169
Honestamente no sé qué intentar después, aparte de rogarle a Paul y Lorie que me
concedan una prórroga. O mudarme a un motel barato, tal vez, pero eso apestaría. Todavía
Página

estoy tratando de encontrar una solución cuando entro en el estudio para mi sexta grabación
con Tank.
Él está en la ducha cuando entro al vestuario, y grito un saludo a medias para que no
sienta que lo estoy ignorando. Lentamente me cambio al traje de trabajador al que ya casi me
he acostumbrado. Cuando Tank pasa a mi lado, sin siquiera molestarse en ponerle una toalla
en las caderas, apenas levanto la vista. Tiene que haber una solución, pero ¿qué no estoy
viendo?
—¿Qué pasa? —pregunta Tank.
Levanto la vista de atar mis botas de punta de acero para encontrarme con su expresión
de preocupación—. Nada.
Él frunce el ceño, así que agrego—: Nada serio. Es sólo que... —suspiro mientras termino
de atarme las botas y me paro derecho—. La novia de mi compañero de cuarto se va a mudar,
así que me quedaré sin casa en unos días. Si conoces a alguien que busque un compañero de
cuarto, házmelo saber.
—Diablos, Campy estuvo buscando uno durante años y ese tipo Jackson se mudó hace
sólo unas semanas —dice Tank.
—Sí, qué mal momento por mi parte. Si lo hubiera sabido antes, obviamente me habría
mudado con Campy. Ninguno de los otros chicos necesita un compañero de cuarto ni siquiera
tiene una habitación vacía, excepto Rebel, y yo no puedo—
—No puedes preguntarle —me interrumpe Tank, su voz severa.
—Lo sé, grandote, así que retrocede. No hace falta que te pongas como un oso pardo
conmigo, ¿de acuerdo? Lo sé.
Se pone la camisa y luego los pantalones cargo sobre sus largas piernas. Me encanta
cuando anda sin ropa interior en estos rodajes. Es jodidamente sexy.
—Puedes mudarte conmigo.
Me congelo. No hay forma de que haya oído eso correctamente, ¿verdad? Tank no me
ofreció dejarme mudarme con él.
—¿Qué? —pregunto estúpidamente.
—Múdate conmigo. Tengo una habitación libre.
Su cara es seria. No es que Tank sea el tipo de persona que hace bromas y especialmente
no bromas como esta, pero ahora mismo está muy serio. No sé qué decir. Con toda
honestidad, nunca pensé en preguntarle, lo cual es extraño en cierto modo, ya que sé que
170
tiene una habitación libre.
Página

—A menos que no quieras... —dice Tank, y sólo entonces me doy cuenta de que he
estado mirándolo todo ese tiempo sin responderle. El destello de dolor en su cara me dice
que no se lo tomó muy bien.
—Gracias... estoy… sin palabras. Esto es más de lo que esperaba de ti.
 —Porque todavía piensas que soy un mamón.
Por primera vez, oigo el dolor detrás de esa afirmación. Tal vez todas las burlas y peleas
que hicimos lo afectaron más de lo que pensaba.
—No, porque aún no me he adaptado al hecho de que ahora somos amigos. Sigo
pensando que me ves como el enemigo, así que ni siquiera se me ocurrió preguntarte.
—Tuve un compañero de cuarto antes, pero no me gustó porque era un vago y dejaba
su mierda por todas partes. Además, él seguía jugando con mis modelos.
Sonrío mientras levanto las manos—. Manos fuera de los Legos, te lo prometo. Y sabes
que soy bueno limpiando y esa mierda.
Me devuelve una sonrisa cuidadosa, como si no pudiera creer que esto esté pasando—.
Lo sé. Y puedes quedarte hasta que encuentres otro lugar para vivir. No tienes que quedarte
mucho tiempo si no quieres.
¿Es esta su forma pasivo-agresiva de decir que sólo se ofrece a ser educado y quiere que
me vaya lo antes posible? De alguna manera, no parece ser Tank, que siempre ha sido muy
directo en su comunicación.
—¿Seguro que no te importa que me quede contigo? —pregunta seguro.
Se encoge de hombros—. Será agradable tener a alguien con quien ver películas.
—O cocinar —añado, una sonrisa jugando en mis labios.
—Eso también —dice con ternura inusitada, y mis ojos se abren a otra verdad. Se siente
solo. Nunca lo admitirá, pero se siente solo. Anhela contacto humano, tal vez alguien a quien
cuidar un poco. Mi corazón se ablanda en mí, y antes de darme cuenta, avanzo y lo beso
suavemente en su boca.
—Gracias, Peter. Realmente lo aprecio, y no puedo esperar.
Su amplia sonrisa rompe algo dentro de mí, algo que ha estado duro y congelado
durante mucho tiempo. Él me ve. De toda la gente que conozco, es Tank quien me ve... y aún
me quiere.
—Yo tampoco —dice.
171
Página
 TANK
Cuando las palabras salieron de mi boca, invitando a Brewer a mudarse, estaba seguro de que
había perdido la cabeza. Pero cuanto más lo pensaba, más sentido tenía. Después de todo,
no estaría de más tener un compañero de cuarto que redujera un poco la renta. Los Ángeles
es un lugar muy caro para vivir, y diluir algunas de mis cuentas me pondrá en una mejor
posición cuando me gradúe. Y, a lo largo de los años, he aprendido que soy demasiado irritable
para la mayoría de mis compañeros de cuarto.
Eso es lo que hacía a Brewer perfecto. Ya sabe lo malhumorado que soy. Lo que significa
que no habrá sorpresas. Mientras no sea un vago secreto, no habrá problemas.
Y, no es que lo admita en voz alta, hacer que Brewer se mude significará que puedo
ocuparme mejor de él. He estado haciendo todo lo posible para que coma y duerma, pero es
difícil hacerlo a distancia. No preguntes por qué me importa tanto. He llegado a aceptar que,
por la razón que sea, es importante para mí que Brewer esté sano y cuidado.
Shaggy se sienta a mis pies, meneando su cola, esperando a que me fije en él. Me
recuerda a Brewer. Necesita que me ocupe de él, lo que presiona a todo tipo de botones
profundos en los que no quiero pensar demasiado. Y, como Brewer, Shaggy no pedirá ayuda.
Se quedará ahí sentado luciendo muy guapo hasta que me dé cuenta de que necesita algo de
mí. Okay, quizás estoy pensando demasiado en esto hasta cierto punto. Pero creo que este
acuerdo será beneficioso para ambos.
—¿Qué te parece, Shaggy? ¿Te alegras de que Brewer se mude aquí?
Shaggy ladra emocionadamente y corre hacia la puerta como si esperara que Brewer
apareciera en cualquier momento. Menos mal que Brewer es bueno con Shaggy, y a Shaggy
le gusta. De lo contrario, Brewer estaría por su cuenta. Okay, probablemente no, pero tendría
que aprender a querer a mi perro.
Sintiéndome inquieto, decido llevar a Shaggy a los estudios Ballsy para visitarlos y salir
172
del departamento por un rato. Cuando agarro la correa de Shaggy, se vuelve loco por un
minuto, y yo sonrío. Los perros son los mejores. Oye, esa es otra forma en que Shaggy me
Página

recuerda a Brewer. Ambos son pequeños psicópatas a veces, pero en secreto, les encanta
relajarse en el sofá y ser perezosos todo el día.
Como no puedo llevar a Shaggy en mi bicicleta, hacemos una larga caminata, ambos
necesitamos agua para cuando lleguemos a Ballsy.
 —Hola, Tank —dice Heart cuando entro—. Dios mío, ¿tienes un perro? —se agacha, con
nada más que un suspensorio, debo añadir, y saluda a Shaggy.
—Sí, y aparentemente ama a los hombres medio desnudos tanto como yo —bromeo
mientras Shaggy salta encima de Heart, lamiéndolo y chillando emocionado.
—Santa mierda, ¿fue una broma? Parece que Brewer se te está pegando.
Gruño de una respuesta, no queriendo admitir que quizás Brewer me está forzando a
aligerarme un poquito.
—Heart, ¿adónde fuiste? Campy está atado en la cama, esperándote.
—Oh, mierda —Heart se pone de pie rápidamente y limpia la baba del perro de su
barbilla—. Es culpa de Tank. Dame un minuto para ponerme la verga dura.
Me río de lo absurdo de esta profesión y avanzo más lejos con Shaggy atrás.
—Oh, hey, hombre —saluda Rebel, sus ojos se ensanchan cuando ve a Shaggy—. Aw, que
lindo.
—Si hubiera sabido que los perros eran un imán de vergas, lo habría conseguido hace un
año.
—Bueno, ahora tienes uno, así que en un mes más o menos puedes ponerlo en uso —
señala Rebel en voz baja para que Heart y Campy no oigan.
Mis entrañas se retuerce ante la implicación de Brewer y yo rompiendo. Quiero decir,
obviamente, no es una ruptura real, porque no estamos en una relación real. Entonces, ¿por
qué se siente tan mal pensar en ello? Sabíamos desde el principio que esto terminaría en unos
meses. No es como si fuéramos a fingir una cita para siempre.
—Sí —murmuro—. Hablando de Brewer, nos vamos… ah… a mudar juntos.
—¿Ustedes qué? —pregunta Rebel, con la mandíbula abierta—. ¿Me estás jodiendo ahora
mismo?
—Dios mío, ¿acabo de oír a Tank decir que él y Brewer se van a mudar juntos? —llama
Campy desde la cama donde está atado de águila al marco de la cama, esperando que Heart
esté listo para comenzar su escena.
173

Mierda. No es que fuera un secreto, supongo, pero... sí, las cosas acaban de complicarse.
Página

—Sí. Perdió la habitación que estaba rentando, y tenía sentido, así que... —me encogí de
hombros.
 —¿Estás seguro de que es una buena idea? —pregunta Rebel, soltando la voz de nuevo
para que sólo yo pueda oír—. Sabes que esto va mucho más allá del contrato que firmaste,
¿verdad?
—No se trata del contrato —me erizo—. Y hemos estado pasando mucho tiempo juntos;
ahora nos entendemos mejor. Somos... amigos.
—Wow —Rebel se frota la frente, la sorpresa es clara en su expresión—. Eso es genial.
Estoy muy contento de que algo bueno haya salido de todo esto. Estaba un poco preocupado
de que ustedes dos me odiaran por orquestarlo, así que me alivia saber que está funcionando.
—Lo es —concuerdo.
—Ustedes dos están... —Rebel se calla, y levanto las cejas, esperando oír cómo va a
terminar esa pregunta. ¿Estamos seguros de que mudarnos es una buena idea? ¿Estamos
deseando que acabe la farsa? ¿Estamos enamorados el uno del otro?
—Estoy listo —dice Heart, entrando desnudo al set con su erección balanceándose
frente a él.
—Voy a buscar un poco de agua de la cocina, y luego Shaggy y yo vamos a volver a salir.
Pero escucha, ¿crees que serías capaz de reunir a las tropas para ayudar con toda la mierda
de la mudanza mañana por la mañana?
—Claro que sí. ¿A qué hora nos necesitas en la casa de Brewer?
—¿Las ocho y media? ¿Necesitas la dirección? —ofrezco.
—No, he estado en el departamento de Brewer muchas veces —Rebel se ríe, y recuerdo
lo cerca que eran Brewer y Rebel antes de que llegara Troy. Por alguna razón, ese recordatorio
hace que un gruñido retumbe en mi pecho.
—Genial. Nos vemos mañana, entonces. Y gracias por ayudarme.
—Cuando quieras —Rebel me da una palmada en el hombro y le indica al grupo que están
listos para empezar la escena cuando salgo con Shaggy de nuevo.
Cuando llego a casa, Shaggy toma uno de sus juguetes y se retira a su cama de perro. Y
me pongo a trabajar desempolvando y limpiando la habitación extra que ahora será la
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recámara de Brewer. Ha pasado un año desde que tuve un compañero de cuarto, así que hay
mucho polvo y aspirado con el que lidiar. Pero es mejor hacerlo ahora que esperar a que las
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cosas de Brewer llenen el lugar mañana.

Sí, será agradable tener a alguien más en el departamento para variar.
 BREWER
Si alguien me hubiera dicho hace unos meses que me mudaría con Tank, me habría reído de
ellos directamente desde la habitación. Y después de eso, los habría mandado a hacerse un
escáner de cabeza para ver si hay un tumor cerebral. El concepto de mí y Tank no sólo
coexistiendo, ¿pero viviendo juntos y siendo amigos? Es muy difícil de entender.
Sin embargo, aquí estamos, un jueves por la mañana, muy temprano, listos para cargar
mis cosas en una furgoneta rentada. Tank estuvo aquí a las ocho en punto, trayendo el
desayuno. En serio, el tipo me hizo sentarme en la mesa de la cocina y terminar el tazón de
yogur griego con granola y fresas frescas que me hizo.
Mientras tanto, él lanzó lo último de mi ropa en unas cajas que conseguí confiscar en
una tienda de la esquina. Digan lo que quieran, pero Tank tiene una ética de trabajo diferente
a muchos otros. Supongo que tenemos eso en común.
Paul y Lorie se hicieron los desaparecidos, lo que era de esperarse. Lo último que Lorie
me dijo fue que esperaba que dejara mi habitación "completamente desprovista de efectos
personales y lo suficientemente limpia para comer del suelo". Paul se encogió cuando ella dijo
eso, probablemente porque está empezando a darse cuenta de que ella era mucho más
atractiva como novia a larga distancia que como novia que vive en casa. Buena suerte con
eso, imbécil.
Estoy enjuagando mi tazón y poniéndolo en el fregadero cuando suena el timbre.
—Refuerzos —dice Tank.
Levanto las cejas—. ¿Estábamos esperando gente?
Él sonríe—. No creo que tú lo estuvieras, pero yo sí. No pensaste que tenías que hacerlo
todo tú solo, ¿verdad?
Me gana al llegar a la puerta principal y la abre, revelando una colección de Ballsy Boys
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apenas despiertos. Campy parece que literalmente se levantó de la cama hace diez minutos,
y Rebel está medio cargando a Troy, cuyos ojos aún no se han abierto del todo. Bear gruñe
Página

algo parecido a un saludo, mientras que Pixie es su yo normalmente feliz y me abraza antes
de que yo sepa lo que está pasando. Heart es el único que se las arregla para lucir fresco y con
estilo en esta hora impía, pero entonces, él siempre lo hace.
 Pero no me importa si se ven malhumorados y medio vestidos. Ya están aquí. Ni siquiera
pensé en pedirles ayuda, lo que es un poco estúpido ahora que lo pienso. Quiero decir, cuando
Troy se mudó con Rebel, todos ayudamos, así que ¿por qué no harían lo mismo por mí? Este
es uno de esos momentos en los que quiero abofetearme por esperar ser ignorado.
Me giro hacia Tank, quien me está observando con una suavidad inusual en su cara—.
Gracias, oso pardo —digo. Me inclino y lo beso, un beso suave y largo que hace que mi
estómago haga cosas raras.
Pone su fuerte y gran mano en mi cuello, apretando suavemente. Él no dice nada, pero
yo no necesito palabras. Su rostro lo dice todo.
—Ustedes dos son tan dulces —suspira Pixie. Nos estudia con ojos grandes y blandos,
como un emoji con ojos de corazón. Mientras que antes, yo habría dicho algo sarcástico,
ahora estoy contento con dejar que sus palabras permanezcan.
—Gracias por venir, chicos —dice Tank.
La broma demasiado fácil está en la punta de mi lengua, pero me la trago, lo que me
hace ganar una mirada de Tank que sólo puedo describir como orgulloso. Pasitos de bebé,
supongo, pero tiene razón. Tengo que dejar de ser payaso todo el tiempo y permitir que la
gente vea más de lo que realmente soy, especialmente estos hombres que son como mi
familia.
—¿Quién está a cargo? —pregunta Bear—. ¿Quién nos dirá qué hacer?
Es lo más raro, pero ni siquiera tengo que pensar en ello—. Tank —digo—. Tiene todo
esto planeado.
En cuestión de minutos, Tank ha dividido las tareas. Rebel y Troy están desmantelando
dos de mis estanterías de libros que estaban en la sala de estar, Pixie y Campy están
empacando las últimas cosas en cajas, y Tank, Bear y Heart han empezado a quitar las
primeras piezas grandes.
—Se van a mudar juntos, ¿eh? —pregunta Campy.
Hasta donde todos saben, realmente nos estamos mudando juntos. No como
compañeros de cuarto, sino como novios. Obviamente, Bear y Rebel saben más, pero ni
176
siquiera sé si Rebel se lo dijo a Troy. Supongo que lo hizo, porque es algo importante como
para ocultarle a tu novio, pero para lo que sé, Troy sabe una mierda. Ciertamente estoy
Página

manteniendo las apariencias, así que asiento.

—Sí —digo—. Es rápido, pero cuando perdí mi habitación aquí, no tenía mucho sentido
gastar mucho tiempo y energía en encontrar un nuevo lugar. Estamos moviendo mi cama y
cosas al cuarto de huéspedes de Tank ya que estaba vacío.
 —Eso tiene sentido —dice Campy—. Aunque me hubiera encantado tenerte como
compañero de cuarto.
Tiro mis zapatos dentro de una caja y la cierro con cinta adhesiva para asegurarme de
que no se caiga nada—. Claro, pero tu nuevo compañero de cuarto es un muy buen trato,
¿cierto?
—¿Qué quieres decir? —dice Campy con brusquedad inusitada.
—Viejo, el tipo es sexy como el carajo con toda esa cosa de vaquero que lleva, incluyendo
ese acento sureño. No me digas que no te diste cuenta. Sólo su voz me dio una erección.
Campy está de repente ocupado sacando un montón de ganchos de mi armario,
escondiendo convenientemente su cara. ¿Qué está pasando ahí? ¿He tocado un nervio de
alguna manera?
—Es genial —dice finalmente—. Jackson es sexy, seguro, pero también es súper amable.
—No hay razón por la que no pueda ser ambos —dice Pixie—. No me importaría que un
compañero de cuarto se viera así.
—Es hetero —dice Campy.
Ah. Eso explica la susceptibilidad que detecté antes. Nada peor que engancharse de un
tipo, sólo para descubrir que es hetero. Ojalá pudiera asegurarle a Campy que se equivoca,
pero ahora que lo pienso, Jackson no me ha dado ninguna vibra gay.
—Eso apesta —dice Pixie.
Se encoge de hombros, pero es demasiado indiferente para convencerme—. No estoy
interesado en él de esa manera. Saben que no salgo con nadie.
Pixie pone sus manos en sus caderas—. ¿Y por qué es eso? ¿Por qué no estás interesado
en encontrar un novio?
Otro encogimiento de hombros demasiado estudiado—. ¿Quién necesita un novio
cuando eres una estrella porno y te tiras a los chicos más sexys sin complicaciones? Funciona
para mí.
Hace seis meses, esa habría sido mi respuesta. Demonios, he dicho esas palabras literales
177
en más de una ocasión. Y las creía de todo corazón, pero algo ha cambiado. No sé qué pasó,
pero en algún momento de las últimas semanas, meses, tal vez, mis puntos de vista han
Página

cambiado. Yo he cambiado.
Sí, ser una estrella porno es genial, y me encanta mi trabajo, pero no es la clave de la
felicidad. La principal razón por la que me encanta no tiene nada que ver con el sexo y todo
con la amistad. No es el sexo lo que me hace seguir haciéndolo, aunque todavía lo considero
una forma divertida de ganar dinero. Es la amistad con los otros Ballsy Boys, la camaradería.
Son las bromas y las burlas y los abrazos y besos afectuosos. Son ellos apareciendo aquí tan
temprano para ayudarme a mudarme.
—Sabes, yo sentía lo mismo —digo.
¿Cómo puedo explicar esto sin sonar como un completo chiflado? ¿O peor, como una
de esas personas que de repente ha visto la luz y ahora predica todo el día, todos los días y
no se calla? Tenía un amigo que descubrió el yoga después de atacarlo durante mucho tiempo,
y él era jodidamente insufrible en su deseo de convertir a la gente.
Campy levanta la mirada de la caja que está cerrando cuando yo no continúo—. ¿Estás
diciendo que te sientes diferente ahora?
—Por supuesto que sí. Ahora está con Tank —dice Pixie casi indignado.
Como invocado, Tank entra en la habitación, limpiándose la cara con su camisa—. ¿Ya
terminaron aquí? Hemos arrastrado las cosas grandes a abajo, así que podemos llenarlas con
las cajas ahora.
—Esta es la última —señalo a la caja que Campy está cerrando.
—Bien. Tomaremos un pequeño descanso y luego cargaremos las cajas —Tank me
estudia por un segundo, luego entra a la cocina y regresa con agua embotellada y un plátano—
. Aquí. Necesitas comer algo.
—No estoy—
—No estaba preguntando.
Murmuro algo en voz baja, pero obedientemente me bebo la mitad de la botella antes
de comerme el plátano—. ¿Estás contento ahora? —pregunto con el ceño fruncido.
Tank se inclina y me besa—. Acostúmbrate.
Me quedo mirando a su espalda mientras se va. Me parece que esto me llevará mucho
menos tiempo acostumbrarme de lo que había imaginado.
Pixie suelta una risita—. Y es por eso que a Brewer ahora le encanta tener un novio. 178
Página
 BREWER
El estudio está casi vacío cuando entro. Joey está allí para filmar, por supuesto, y Bryce está
haciendo la iluminación y el sonido hoy, pero aparte de eso, es sólo Rebel. Ni siquiera Bear
está presente. Estoy agradecido de que todos ellos hayan honrado mi petición de darle a Tank
tanta privacidad como sea posible por primera vez como pasivo en cámara. Puede que le haya
quitado la virginidad de su culo, pero sé que mi oso pardo aún está muy nervioso por ello.
—¿Está listo? —me pregunta Rebel en voz baja cuando me ve.
Asiento con la cabeza—. Sí. Y recibiste mi mensaje, ¿verdad?
—¿Sobre querer mostrar la preparación? Sí. Me preguntaba por qué, ya que
normalmente no lo mostramos...
—Lo haré sexy, lo prometo —digo rápidamente.
Rebel pone una mano en mi hombro—. Brew, no es eso. Sólo tengo curiosidad.
—Es... Mira, va a ser bastante obvio que él no ha hecho esto mucho, ¿de acuerdo? Los
espectadores lo notarán. Y si lo hacen, quiero que sepan que me tomé el tiempo para
prepararlo. No quiero que un adolescente vea esto y piense que puede intentarlo con el culo
virgen de su novio, ¿sabes? Tú y yo estamos acostumbrados, y los espectadores lo saben. Pero
Tank es diferente, y quiero respetar eso.
Rebel me aprieta el hombro y luego me suelta—. Ve a vestirte. Tank ya se está duchando.
Como si necesitara que Rebel me dijera eso. Sonrío cuando entro en el vestuario. La
fragancia de pino del gel de ducha de Tank cuelga en el aire, y yo lo huelo profundamente. La
cosa es perfecta para él, por alguna razón.
Tank saca su cabeza por la esquina de la cortina de la ducha.
—Hey —dice, sus ojos parpadeando con incertidumbre.
179

—Hola.
Página

Después de una breve vacilación, baja la cortina. Me desnudo tan rápido como puedo, y
luego me meto en su cabina de ducha. Tank no lo sabe, pero necesita que yo marque el tono.
No puede hacer esto si tiene alguna duda de que puede confiar en mí.
—Oye —protesta—. ¿Qué estás haciendo?
 Le doy un beso húmedo en la boca—. Asegurándome de que te limpies bien.
—Me he estado duchando solo desde que tenía siete años —me informa Tank, pero el
rabillo de su boca se está levantando en una sonrisa.
—Bien por ti, pero ya me conoces. Soy una persona orientada a los detalles.
—¿Va a hacerme un examen físico, Dr. Micah?
Dios, me encanta cuando Tank hace una broma. Es tan raro que me enorgullece tener
esa influencia en él—. ¿Cuándo fue la última vez que te hiciste un examen de próstata? —le
devuelvo las bromas.
Tank me maniobra con la espalda contra los azulejos y pone una mano a ambos lados
de mi cabeza. Es dominante, controlador, y caliente como el carajo—. Hace unos días —
murmura, llevando su boca tan cerca de la mía que su aliento me hace cosquillas en los
labios—. Cuando un arrogante folla-chicos se salió con la suya conmigo...
Una sonrisa curva mis labios—. ¿Logró siquiera encontrar tu próstata?
—Oh, la encontró muy bien.
Dejo que mi mano trace su espalda, esos fuertes y grandes músculos temblando bajo mi
ligero toque de pluma. Su aliento se atasca cuando llego a su grieta—. ¿Crees que otro examen
sería útil?
Mis dedos se deslizan sobre su agujero, provocando, mientras mi boca encuentra su
cuello y mordisquea un camino a un punto detrás de su oreja donde es súper sensible.
—Brewer...
Su voz es una mezcla de lujuria y miedo. Supongo que su cuerpo me quiere, pero su
mente está asustada, incluso después de la última vez—. Te tengo, oso pardo. Te prometo
que lo haré bueno para ti...
Su mano se mueve hacia mi cuello, y me hace hacia atrás para mirarme a los ojos.
Después de un segundo sin aliento, asiente—. Confío en ti.
Una ola de calor me atraviesa. Hemos llegado lejos, Tank y yo. ¿Quién lo hubiera
pensado?
180

Mantengo el tono provocador y ligero mientras nos ponemos la toalla y nos vestimos
Página

para nuestra escena. Tank sigue observándome, siguiéndome con sus ojos, como si fuera su
guía turístico en una ciudad extraña. Él nunca lo admitiría, pero está nervioso y asustado, y lo
entiendo. Se ve obligado a ser más vulnerable ante las cámaras que nunca antes y eso da
miedo.
 Me las arreglo para señalarle a Rebel que podemos saltarnos su habitual discurso previo
al rodaje. Tank y yo sabemos qué hacer, y necesito que él mantenga sus ojos en mí. Cualquier
otra cosa ahora mismo sólo hará que se meta en su propia cabeza y se asuste.
Nos movemos a la perfección en arreglo para el rodaje, que es un par de líneas sobre mí
exigiendo finalmente que acepte perder la apuesta y me deje tener su culo. Tank hace la
cantidad apropiada de gruñidos como reacción a mi descarado coqueteo, y entonces estamos
listos para irnos.
Ya le he dicho a Rebel que me voy a tomar mi tiempo, así que él tendrá que aceptar una
escena más larga o tendrá que editarla. No estoy apresurando esto, porque Tank no puede
ser apresurado. El hombre es como una montaña que no se puede mover. Todo lo que puedes
hacer es tratar de persuadirlo de que se mueva por su propia voluntad.
Empezamos con besos, muchos y muchos besos húmedos y profundos hasta que mis
labios se hinchan por los suyos. Mis manos se deslizan bajo la pretina de sus jeans para
envolverse alrededor de su verga. El pequeño suspiro que emite en mi boca hace que mi
estómago se debilite.
—¿Te gusta mi mano en tu verga —susurro, sabiendo que los micrófonos lo captarán.
—Joder, sí... —se frota mi mano, muy metido en ello, tarda un rato antes de recordar su
siguiente frase—. Pero me encantaría aún más tu boca.
—¿Ah, sí?
—Es una de mis dos vistas favoritas, tu boca envuelta alrededor de mi verga... —
improvisa.
Esto no estaba en el guión, y me pregunto a dónde quiere llegar con esto. Aprieto
suavemente su verga, haciendo que suelte uno de esos gruñidos que siempre se disparan
directamente a mis bolas—. ¿Cuál es la otra? —pregunto.
Me besa la garganta, con la barba raspando mi piel de una manera deliciosa—. Ver mi
verga gorda desaparecer en tu codicioso agujero....
Puto infierno, si sigue hablando sucio, esta escena no será tan lenta y larga como había
planeado. Le doy un último beso y luego me pongo de rodillas—. Qué tal si te concedemos
181
uno de esos deseos, ¿eh?
La verga de Tank ya está dura como una roca cuando la saco, y lo tengo temblando en
Página

cuestión de minutos. Acaricio sus bolas con la nariz, respirando su olor almizclado. Me
encanta que no se afeite como muchos hombres, sino que tenga vello púbico completo y
negro. Hay algo intoxicante en ese olor, esa sensación de los gruesos vellos contra mi cara
mientras lo chupo.
 Ruedo las bolas en las manos mientras lo chupo profundamente, impulsado por los
pequeños gruñidos que él está haciendo. Dios, amo su sabor, la forma en que su verga llena
mi boca y mi garganta completamente. Nunca he estado tan agradecido por mi falta total de
reflejo de náuseas.
—Oh maldita sea, me voy…
Se está viniendo. Tank, el hombre que ostenta el récord de la filmación más larga sin
orgasmos, está perdiendo el control de hierro que siempre ha tenido sobre sí mismo. No me
detengo, pero le permito que me agarre la cabeza con ambas manos y me empuje
profundamente mientras explota en mi garganta, su semen espeso y cremoso. Está
temblando bajo mis manos, completamente deshecho.
Lo lamo limpio, y luego me pongo de pie rápidamente para capturar su boca en un beso.
No quiero que empiece a disculparse y a llamar la atención sobre lo que acaba de pasar. Se
asusta por un segundo, luego se mete codiciosamente en mi boca donde puede saborearse a
sí mismo.
Rebel puede que tenga problemas para editar esto, pero honestamente no me importa.
Por dentro, estoy mareado por la satisfacción de haber hecho que Tank perdiera la
compostura. Lo hice venirse, y maldita sea, qué subidón.
Apenas hablamos, nuestras líneas para la grabación olvidadas. Se quita la camisa y se
quita los zapatos y los pantalones. El sabelotodo no estaba usando calcetines, lo que nos
ahorra todo ese baile incómodo de quitarse los calcetines con un solo pie.
Lo posiciono gentilmente con su espalda hacia mí, sus piernas abiertas para que yo
tenga acceso. Cubro su espalda con pequeños besos, mientras tomo el lubricante de mi
bolsillo y vierto un poco en mis dedos. Joey se acerca con la cámara y desde el rabillo de mi
ojo, capto a Bryce cambiando también a la cámara para obtener una toma desde un ángulo
diferente. Rebel tiene razón en que no solemos mostrar esto, pero eso no significa que no
debamos hacer excepciones.
Mis dedos resbaladizos encuentran su agujero—. ¿Me vas a dejar entrar, grandote?
Gruñe, pero logra relajarse bajo mis ministraciones. Joey me indica que le dé un ángulo
diferente a mi cuerpo para que tenga una mejor oportunidad. Rebel debe haberle instruido
182
que no interrumpa como siempre lo haría, y le estoy agradecido. Doy un paso al costado para
que pueda ver mis dedos entrando y saliendo lentamente del culo de Tank.
Página

—Están tan jodidamente apretado... —digo—. Eso se va a sentir tan bien alrededor de mi
verga.
Sí, ya lo sé. Es un cliché del sexo, pero en mi defensa, tengo mucho a lo que prestar
atención ahora mismo y no tengo que tener capacidad cerebral para encontrar algo
innovador. Además, lo crean o no, a los espectadores les encantan estos comentarios. Lo
probamos. “Apretado” tiene un puntaje alto como una palabra sexy, mientras que “mojado”
parece ser la palabra más odiada. Las cosas que aprendes cuando trabajas en la pornografía...
El agujero de Tank se está abriendo lentamente para mí. Joey se acerca aún más para
obtener una toma perfecta de dos, y luego tres de mis dedos hundiéndose con facilidad—.
Deberías ver tu agujero, viejo... Es un pequeño bastardo codicioso el que tienes ahí.
Saco mis dedos, y su agujero se mantiene abierto por unos segundos, queriendo más,
hasta que tiembla y se cierra, sólo para succionarme de nuevo cuando lo hago de nuevo. Tank
empuja su culo hacia atrás en una demanda sin palabras.
—¿Estás listo para mí? —pregunto.
—Sí.
Mira por encima de su hombro, y la confianza en sus ojos me deja estupefacto—. Te
tengo a ti —digo, rompiendo completamente el guión.
Tank sonríe. De verdad sonríe. En cámara. Eso va a romper Internet, me doy cuenta
estúpidamente.
—Sé que lo haces, folla-chicos.
Hasta ahora, ni siquiera me he bajado los pantalones, así que me quito la camisa y
simplemente me los quito después de sacar los suministros. El contraste de Tank desnudo y
yo todavía medio vestido hará que el atractivo sea seductor. Enrollo un condón y le pongo un
poco más de lubricante, luego tiro el envoltorio del condón y la botellita al piso.
Tank se tensa cuando me siente alineado, así que pongo una mano tranquilizadora en
su cadera. Tengo que mantenerme en el personaje, pero él necesita sentir que voy a ir
despacio. Y lo hago. Empujo suavemente dentro de él, esperando a que se relaje.
Abre un poco más las piernas y agáchate un poco más. No puedo estar de puntillas todo
el tiempo.
Él obedece inmediatamente, empujando su culo hacia atrás en el ángulo correcto. Él se
ha follado a suficientes sujetos en esta posición para saber cuánto importa. 183
Avanzo, tomándome mi tiempo con empujones superficiales, completamente
sintonizado con el poderoso cuerpo que hay debajo de mí. Tank gruñe, pero es un gruñido
Página

lujurioso, un gruñido de excitación.

—¿Cómo estás, grandote? —compruebo para estar seguro.
—Sigue adelante.
—No planeaba parar, no te preocupes.
 Finalmente estoy completamente dentro, y suspiro con alivio de que mi estrategia esté
funcionando. Mis movimientos son lentos y precisos a medida que empiezo a introducirme
con movimientos profundos, pero constantes. Hoy no habrá sexo duro, ni nalgadas. Tank lo
va a sentir mañana de todos modos, pero no voy a ser duro con él.
Me muevo un poco hasta que puedo apuntar mis empujes justo más allá de su próstata,
como un evidenciado pero gemido no tan sutil cayendo de sus labios—. Se siente bien, ¿no?
Una verga grande y bonita en tu culo —provoco.
Tank mira por encima de su hombro, y su mirada haría que los hombres de menor
categoría perdieran la erección. Sólo sonrío y continúo mi gentil asalto a su trasero. Su mano
alcanza su verga, y empieza a masturbarse al mismo ritmo que yo me lo follo. Esperaré a que
se venga otra vez, para que Joey tenga su oportunidad y después se concentre en mí.
Incluso aunque Tank ya se vino, no tarda mucho en jadear y gruñir como lo hace justo
antes de venirse. Me aseguro de clavar en su dulce punto de lleno y unos pocos empujes
después, echa la cabeza hacia atrás y pinta la pared con su semen.
Ya estoy luchando contra mi propia liberación, así que no espero a que recupere el
aliento, sino que acelero mis empujes, tratando de ser lo más fluido posible, al mismo tiempo
que obtengo esa pequeña fricción extra que necesito. Joey está en ello, acercándose. Salgo,
me saco el condón con un sólo movimiento y siento que mis bolas se aprietan, contrayéndose
contra mi cuerpo. Tres, cuatro empujones y luego me rindo ante lo inevitable y mis orgasmos
ruedan a través de mí, dejándome jadeando y jadeando hasta que estoy vacío y la espalda y
culo de Tank están goteando con mi semen.
Mis rodillas se doblan, pero Tank estira su mano hacia atrás para agarrarme, luego se da
la vuelta y me jala contra él. Me dejo caer contra él, acariciando su cuello hasta que recupero
el aliento.
—Eso fue... perfecto —digo después de un rato.
Tank agarra un puñado de mi pelo y tira de mi cabeza hacia atrás. Busca en mi cara, ¿tal
vez porque quiere asegurarse de que no le estoy tomando el pelo? Entonces su cara se
suaviza, y roza un tierno beso sobre mis labios magullados.
—Estoy de acuerdo.
184
Página
 TANK
Me despierto sintiéndome como si estuviera en un horno. Me quito las sábanas y siento que
alguien se mueve a mi lado. Miro por encima de mi hombro y veo a Brewer despertando
lentamente de su sueño también. No es de extrañar que estuviera a punto de morir de
insolación; anoche dejé las persianas abiertas y el sol de la mañana nos estaba cocinando.
Añádanle eso a mi gran edredón, y el cuerpo caliente de Brewer ocupando la mitad de mi
cama, y estoy sudando hasta el culo.
Cuando Brewer se mudó, nunca pensé que terminaría durmiendo en mi cama todas las
noches. No es que me esté quejando. De hecho, una cosa que siempre extraño cuando estoy
soltero es la sensación de tener a alguien a mi lado cuando duermo.
—Lo siento, estaba encima de ti, haciéndote sudar —se disculpa Brewer, frotándose los
ojos y bostezando.
Lo hago menos con la mano y me levanto de la cama, haciendo una mueca ante la
sensible molestia en mi culo por el rodaje de ayer.
Shaggy salta de su cama y empieza a bailar junto a mis pies. Me agacho y le doy una
palmadita en la cabeza, asegurándole que lo sacaré en unos minutos.
—¿Quieres café? —pregunto a Brewer.
—Claro, gracias, osito de peluche.
Sacudo la cabeza ante el tonto apodo, pero un poco de calor también me atraviesa. No
sé por qué, pero me gusta cuando me ve como un osito de peluche en vez de como un viejo
oso pardo.
—¿Qué te pareció la escena de ayer? —pregunta Brewer, saliendo de la cama y
siguiéndome a la cocina, tan indiferente a su desnudez como yo. No lo pensé cuando me
levanté, pero cuando me di cuenta de que ambos estábamos parados en la cocina con
185
nuestros penes blandos balanceándose con la brisa, se sentía extrañamente íntimo y
demasiado familiarizados con el otro.
Página

—Bien. Raro, pero bueno. Estoy seguro de que se convertirá en una de las favoritas de
los espectadores, por fin tú teniendo tu camino conmigo.
—Demonios, sí, hasta yo voy a verlo una y otra vez hasta que muera —se ríe Brewer, y
gruño sin ningún calor detrás. La idea de que Brewer se masturbe con una de nuestras escenas
en algún momento en un futuro lejano me calienta hasta la médula—. Gracias por hacer el
desayuno —dice Brewer.
Asiento y empiezo a tomar café y luego vuelvo a mi cómoda para ponerme bóxers.
—¿Puedo preguntarte algo? —pregunta Brewer, encaramándose en mi cama, todavía
desnudo como el día en que nació, mirándome con una pizca de inseguridad en los ojos.
—Claro —accedo vacilantemente.
—He estado pensando mucho en ello, y me pregunto...
—Escúpelo ya —puntualizo.
Sus ojos se iluminan con el obvio doble sentido que está a punto de hacer, pero lo fijo
con una mirada severa, y se desploma un poco. Abre y cierra la boca varias veces antes de
soltarlo.
—¿Por qué me odias?
Mi estómago se tuerce ante la tristeza en su tono y la vulnerabilidad en su expresión—.
No te odio.
No creí que eso fuera algo que le diría a Brewer, pero en las últimas semanas, las cosas
han cambiado entre nosotros. Me ha dejado ver más allá de la fachada de hombreriego. Y él
me ha visto de maneras que nadie más lo ha hecho.
—Pero lo hacías —dice Brewe—. No sé por qué me importa, pero me ha estado
molestando.
Respiro profundamente y le doy la espalda a Brewer, fingiendo que busco algo en mi
tocador para no tener que mirarlo mientras admito esto.
—La primera vez que nos vimos, cuando empecé en Ballsy, me miraste y me
desestimaste por completo. Supongo que eso golpeó una inseguridad muy arraigada.
Entonces, cuanto más te conocí, vi lo opuestos que éramos, y se me irritó. No sabía que todo
era una fachada. Me imaginé que sólo eras un imbécil legítimo.
Salto al sentir las manos de Brewer en mi espalda. 186
—Siento haber sido un imbécil cuando nos conocimos. No te equivocaste, actuaba como
un completo pendejo. A veces creo que olvido dónde termina Brewer y dónde empieza Micah.
Página

Me doy la vuelta y le pongo una mano en la parte baja de la espalda, tirando de él contra
mí.
—Eso es fácil. Brewer es un odioso folla-chicos. Micah es un hombre brillante, divertido
y un poco inseguro con quien en realidad es bastante genial pasar tiempo.
 —Aw, si no te conociera mejor, osito de peluche, pensaría que tienes un pequeño
flechazo por mí —se burla.
—Desafortunadamente, tanto Micah como Brewer son unos mierdecitas engreídas —me
río y luego le agarro por la nuca y lo arrastro para un beso. Sus labios se abren para mí sin
vacilar, su lengua se encuentra con la mía.
—Tenía toda la razón, me odiabas porque me querías —se jacta entre besos.
—Déjalo ya o tendré que callarte de la única manera que sé —amenazo, mordiéndole el
labio inferior.
—Uuhh, estoy temblando. Tank el Malote me va a meter su verga en mi garganta. No me
asustas, porque conozco a Peter igual que tú conoces a Micah. Y Peter es más un gatito que
un oso grande y viejo.
—¿Tienes algo planeado para hoy? —pregunto, claramente sorprendiéndolo.
—Sólo estudiar, ¿por qué?
—Pensé que podríamos ir a hacer algo divertido. ¿Has estado alguna vez en el muelle de
Santa Mónica?
—No —Brewer sacude la cabeza, una sonrisa en los labios.
—Ahí es donde vamos a ir hoy.
—Okay —concuerda, sus ojos ahora bailan con emoción.

—¿Cómo es que nunca he estado aquí? —pregunta Brewer, sus ojos se iluminan de
emoción mientras mira alrededor todos los juegos, puestos de comida y la rueda de la fortuna
en la distancia.
187

—Supongo que porque has estado demasiado ocupado trabajando hasta la tierra para
Página

tomarte tiempo para algo inútil y divertido como esto.

—Uh, sí, creo que tienes razón —Brewer concuerda tímidamente.
En un capricho, paso mis dedos por los suyos, diciéndome a mí mismo que esto es en
caso de que alguno de nuestros fans nos descubra.
 —Oh, esto es perfecto para un momento Instagram, espera —Brewer saca su teléfono y
gira para tener la rueda de la fortuna en el fondo. Pongo mi brazo alrededor de sus hombros
y me inclino para la foto—. Eso se ve muy bien. Al menos, Rebel estará feliz con nosotros.
—Síp, tengo que ganarme ese sueldo.
El sueldo, para eso estamos aquí. Todo se trata del cheque gordo que Bear nos escribió.
Me recuerdo a mí mismo una y otra vez mientras caminamos por el muelle agarrados de la
mano.
—Dios que huele a paraíso, ¿qué es eso? —pregunta Brewer, oliendo el aire.
—Supongo que pastel de masa frita… pastel embudo o algo así.
—Nunca he tenido uno —admite.
—¿En serio? Los tienen en cada feria y básicamente en cualquier parque de diversiones.
—Nunca he estado en uno.
—¿Una feria o un parque de diversiones? —pregunto con incredulidad. No que mi familia
fuera muy divertida y de juegos, pero íbamos a la feria del condado todos los años por lo
menos.
—Ninguno de los dos. No hicimos nada de eso cuando era niño, y supongo que nunca
lo pensé como adulto —Brewer se encoge de hombros, pero hay una tristeza inquebrantable
en sus ojos que inexplicablemente me hace querer llevarlo a Disney World en cada
continentes.
—Ven, vayamos a conseguirte un pastel de embudo —lo arrastré hasta el primer puesto
donde vi un pastel de embudo publicitario. Pido dos y le paso uno a él.
—Gracias —dice con una pizca de sorpresa en su voz, como si mi incapacidad de actuar
como un idiota durante cinco minutos fuera impactante. Supongo que me lo merezco.
Nos sentamos, y Brewer saca algunas fotos de nuestra comida y las publica en Instagram
con un millar de hashtags.
—¿Supongo que nunca has estado en una Rueda de la Fortuna tampoco? 188
—No —sacude la cabeza, mirando el paseo a lo lejos.
—Vamos, algo para tachar de tu lista.
Página

—Lo creas o no, estar a mil pies de altura no está en mi lista.

—No son más de doscientos pies —argumenté, mirando la atracción en busca de mi
mejor estimación.
 —Aun así, no quiero —dice Brewer, moviendo la cabeza al mirar la atracción.
Me acerco y jalo a Brewer contra mí, envolviendo mis brazos alrededor de su cintura y
rozándole los labios contra la oreja—. ¿Y si te tomo de la mano y te mantengo a salvo?
Brewer tiembla y se relaja en mis brazos—. ¿Prometes mantenerme a salvo? —pregunta
escépticamente—. ¿No estarás tratando de convencerme de que suba sólo para que puedas
lanzarme y hacer que parezca un accidente?
Me río y muerdo su oreja a Brewer, haciéndolo jadear—. No te preocupes, si decido
matarte, tengo un plan mucho mejor que tirarte de una Rueda de la Fortuna.
—Eso me hace sentir mucho mejor —dice Brewer sarcásticamente, retorciéndose en mis
brazos.
—Vamos, ¿por favor? —pido una vez más.
—Bien, pero si me altero, será mejor que no te burles de mí.
—Nunca —presiono mis labios contra los suyos y luego lo suelto. Noto una extraña
mirada en los ojos de Brewer después de dejarlo ir. No puedo culparlo. Estoy actuando raro y
no lo entiendo más que él.
Caminamos por el muelle con la multitud a nuestro alrededor—. Oh, Dios mío, ¿Tank y
Brewer? —pregunta con emoción un lindo twink bajito cuando nos cruzamos con él. Brewer
me jala para detenerme y gruño en voz baja. Entiendo que nuestros fans son la razón por la
que recibimos un cheque de pago, pero eso no significa que disfrute de la atención.
—Hola, siempre es agradable conocer a un fan —lo saluda Brewer con una sonrisa
coqueta. Me erizo un poco recordando todas las veces que Brewer desaparecía del club con
un fan.
—¡No puedo creer que los esté conociendo! Esto es tan genial. ¿Le importaría si tomo
una foto para publicarla en Instagram?
—Por supuesto que no —accede Brewer. Se estira por mí, y cuando me resisto por un
segundo, fija conmigo una clara mirada de compórtate bien—. No le hagas caso a Tank, no ha
estado socializado adecuadamente. Es básicamente un animal salvaje. 189
—Muy gracioso —me quejo, tomando un lugar para la foto con el chico entre nosotros.
—Muchas gracias, esto me alegró el día.
Página

—Cuando quieras, pastelito —Brewer le da un beso en la mejilla, y juro que el niño casi
se viene en los pantalones mientras su cara se pone roja y tartamudea otro gracias.
Finalmente se aleja, y arranco mi mano de Brewer otra vez.
 —¿Qué es lo que te tiene tan gruñón?
—Siempre estoy gruñón —señalo.
—Esto es extra gruñón, y estabas bien antes de que ese chico nos reconociera. ¿No
quieres que te vean conmigo en público o algo así?
—No me importa que me vean contigo en público. Acababa de besarte en público, por
el amor de Dios.
—¿Entonces qué? —Brewer exige, tirando de mí hasta detenerme de nuevo.
—Nada, supongo que sólo estoy preguntándome si estás deprimido porque no pudiste
follarte a ese chico. Sé que te gusta enrollarte con fans.
—En primer lugar, jódete —Brewer me empuja el hombro lo suficientemente fuerte como
para hacerme tropezar.
Espero con una contrición silenciosa para saber qué podría ser lo segundo, pero está
claro que no me lo va a poner fácil mientras está mirándome fijamente como si estuviera
pensando en darme un puñetazo en la cara. Creo que ambos sabemos que lo único que
probablemente logrará es romperse la mano, pero dudo que eso le impida intentarlo.
—¿Hay un en segundo lugar? —pregunto por fin.
—Sí, en segundo lugar, jódete.
—Creo que eso fue lo de en primer lugar —señalo, tratando de mantener la cara seria en
vista de que Brewer claramente quería darme una patada en las bolas.
—Sí, y en tercer lugar, jódete —se da la vuelta y empieza a marcharse, pero yo le agarro
el brazo para detenerlo.
—Lo siento, fue una cosa mamona de mi parte. ¿Puedo intentarlo de nuevo? —pregunto.
La mandíbula de Brewer permanece apretada durante varios segundos antes de que
finalmente asienta.
—Lo que quise preguntarte es, ¿ha sido difícil para ti estar sólo conmigo últimamente
cuando estás acostumbrado a más variedad? 190
Su postura finalmente se suaviza, y suelto mi agarre—. Pensé que lo sería, pero no ha
sido malo. Probablemente porque estoy muy ocupado y muy cansado para ir al club todo el
Página

tiempo.
—Sí —concuerdo—. ¿Perdóname?
—Supongo —Brewer se encoge de hombros, pero está claro que no está listo para volver
a la diversión que estábamos teniendo antes de que yo metiera la pata.
 Por el rabillo del ojo, veo uno de esos juegos en los que se usa el mazo para golpear el
gong y ganar un premio.
—Vamos —agarro su mano de nuevo y lo tiro hacia el juego.
Doy mis cinco dólares, confiado en que puedo ganar tan fácilmente. Levanto el mazo de
madera sobre mi cabeza y lo bajo con todas mis fuerzas, con la campana en la parte superior
sonando fuerte.
Cuando el operador del juego entrega un osito de peluche marrón, se lo ofrezco
inmediatamente a Brewer.
—¿Qué es esto? —pregunta Brewer, luchando contra una sonrisa.
—Un osito de peluche con el que puedes jugar —le digo con una media sonrisa.
—Ya tengo un osito de peluche con el que jugar —tienta, moviendo una ceja hacia mí,
desafiándome a discutir.
Sólo sacudo la cabeza, sin morder el anzuelo para variar—. Vamos, enfréntate a tu miedo
a las alturas conmigo y te invitaré a comer.
Brewer suspira, pasando su dedo índice por la nariz del osito y luego me ofrece su mano
libre. La fila para la Rueda de la Fortuna se mueve lentamente, pero estamos contentos de
que la gente mire y disfrute del hermoso día mientras esperamos. Hablamos de nuestras
clases y de la película que deberíamos ver durante nuestra próxima noche de películas.
No entiendo cómo sucedió esto, pero Brewer se ha convertido en una de las pocas
constantes de mi vida. Es algo con lo que cuento. ¿Cómo demonios se me escapó eso?
Cuando finalmente es nuestro turno, Brewer está comenzando a temblar a mi lado,
masticando su labio inferior mientras inclina la cabeza para volver a mirar hacia arriba.
—¿Estás seguro de que quieres hacer esto? —compruebo. Sé que me burlé de él y lo
presioné a ello, pero lo último que quiero es que Brewer sienta que no le estoy dando otra
opción.
—Lo estoy. No lo haré por mi cuenta, y no creo que confiaría en nadie más para
mantenerme a salvo, así que es ahora o nunca.
191
Dejo que esas palabras me impregnen. No creo que confiaría en nadie más.
Página

Nos acomodamos en nuestros asientos, y Brewer toma mi mano, dándole un fuerte

apretón a medida que la barra de metal desciende sobre nuestras piernas. Empezamos a
movernos, y Brewer emite un chillido gracioso, apretando fuerte sus ojos.
—No es divertido si no ves la vista —le digo, dándole a su mano un apretón alentador—.
Vamos, abre los ojos.
 Él abre un ojo y luego lo cierra de nuevo apresuradamente. Lo intenta unas cuantas
veces más, haciendo ruidos hilarantes cada vez que el viaje se mueve para dejar que la
siguiente pareja suba a bordo. Cuando llegamos a la cima, me inclino más cerca de Brewer,
mi aliento ondeando a través de su cabello.
—Abre los ojos, folla-chicos —susurro contra su oído.
—No-oh —difiere, sacudiendo la cabeza y apretándome más fuerte.
—Abre —repito.
Esta vez abre lentamente un ojo y luego jadea—. Carajo, estamos en lo más alto.
—Olvídate de eso. Mira la vista; es hermosa, ¿no?
—Supongo —concuerda.
—Eres imposible —me río.
—Básicamente me llamaste fácil antes, así que ahora lo haré imposible.
Sacudo la cabeza y acerco un poco más a Brewer para disfrutar de la sensación de que
está contra mi costado mientras yo disfruto de la vista.

192
Página
 BREWER
No puedo creer que me haya subido a la rueda de la fortuna. Y después de que mi miedo de
caer en picado a una muerte espantosa se había calmado un poco, fue... divertido. Nunca se
lo diré a Tank, por supuesto, pero me alegro de que me haya convencido de ir. Con él
sosteniendo mi mano, su fuerte cuerpo protegiendo el mío, no fue tan malo.
Pero eso fue ayer. Hoy significa un turno en el hospital otra vez. Tank me dejó esta
mañana y me informó que me recogería cuando terminara. No estoy completamente seguro
de por qué no quería que condujera yo mismo, pero no voy a protestar. Este lado protector y
cariñoso de él es completamente nuevo para mí, pero no me importa. Incluso me preparó el
almuerzo, ¿qué tan adorable es eso? ¿Quién iba a decir que ese irritable oso tenía un corazón
tan blando?
Este mes sigo trabajando en medicina interna, ya que les falta personal, pero no me
importa. Cuando mis ojos captan el nombre de mi próximo paciente, frunzo el ceño.
—Sra. Morris, ¿qué hace de vuelta tan pronto? —digo mientras entro en su habitación—
. ¿Me extrañó así de mucho?
Gira su cabeza hacia mí, sus ojos azules brillando a pesar de la fragilidad de su cuerpo—
. Te dije que me llamaras Nina. Y sí, descubrí que no podía vivir sin ti.
Sonrío y entro más en la habitación, sólo entonces me doy cuenta del chico guapo está
sentado al lado de su cama—. Lo siento —le dije—. No quise interrumpir. No me di cuenta de
que tenía una visita.
—No seas bobo —dice Nina, alzándose sobre la cama con esfuerzo—. Puedes interrumpir
en cualquier momento. Micah, quiero que conozcas a mi nieto Brayden. Brayden, él es Micah,
193
el mejor enfermero del hospital.
Página

Sonrío mientras tomo la mano de Brayden, mi radar gay apuntando como loco. Es
malditamente lindo, ¿no lo es?—. Asistente de enfermería —corrijo a Nina—. Y es un placer
conocerte.
 Su mano es cálida y firme, y tiene los ojos azules y brillantes de su abuela, las líneas de
risa muestran que sabe cómo pasar un buen rato. Su lectura de mí es lenta y deliberada antes
de que hable—. Igualmente. He oído hablar mucho de ti.
Ah. Alguien ha estado jugando al cupido, ¿eh? No puedo evitar reírme. Esta es un
desmadre—. ¿Dejaste que te admitieran para que Brayden y yo pudiéramos vernos, o tuviste
problemas con tu nivel de azúcar otra vez? —le pregunto a Nina.
Ella suspira—. Me pasé un poco en una fiesta de cumpleaños.
—Comió una enorme porción de pastel de chocolate y cometió un error con su insulina
—explica Brayden, estirándose por la mano de Nina y dándole un beso—. Nos tuvo
preocupados por un momento.
—Brayden insistió en que me quedara a dormir —dice Nina—. Es un paramédico.
Mis ojos se ensanchan. ¿Un chico guapo y tiene un trabajo como ese? Eso es doble
peligro—. Es un trabajo duro, hombre.
Él sonríe—. Y el tuyo también.
La forma en que lo dice me hace preguntarme si me ha reconocido de mi otro trabajo,
pero no hay juicio en su voz. Más bien un doble significado. Si sabe que soy Brewer, no tiene
ningún problema con eso.
—Mi trabajo hoy es sacar su perezoso trasero de la cama, mujer, y llevarla a dar un paseo
—le digo a Nina.
—La llevé arriba y abajo del pasillo cinco veces —dice Brayden.
—Ya me gustas —bromeo—. ¿Seguro que hiciste suficiente ejercicio por ahora, Nina?
Ella asiente—. Sí. Creo que quiero tomar una pequeña siesta. Chicos, salgan o lo que sea.
Sacudo suavemente la cabeza—. Sutil no eres, mi señora, pero obedeceremos sus
órdenes. Pasaré más tarde para ver cómo está, ¿de acuerdo?
En su defensa, en realidad parece cansada, noto, antes de salir de la habitación con
Brayden en mis talones. 194
—Salir —dice Brayden—. ¿Es esa siquiera una opción considerando que estás trabajando?
—Puedo tomarme mi descanso de media hora ahora mismo —le digo—. ¿Quieres tomar
Página

un café en la cafetería de abajo?

Conversaciones fluyen fácilmente cuando bajamos a la cafetería en el área de recepción
del hospital, después de una rápida parada en el refrigerador de empleados para recoger mi
almuerzo. Brayden es dos años mayor que yo, ha trabajado como paramédico durante tres
años y tiene un título universitario en periodismo que no sabe qué hacer con él.
—En fin —dice después de que hayamos hablado un rato—. No estoy seguro de cuál es
la etiqueta aquí, pero sólo quería que supieras que te reconocí en cuanto entraste en esa
habitación.
—Me lo imaginé
Levanta una ceja—. ¿Cómo? Pensé que lo había escondido bien.
—Lo hiciste, pero eres un hombre gay en Los Ángeles. No hay muchos hombres
orgullosos en esta ciudad que no conozcan a los Ballsy Boys, y si lo hacen, me conocen a mí.
Simple deducción.
Se ríe—. Cierto. De todos modos, pensé que debía mencionarlo, para que ambos
sepamos dónde estamos parados.
Me alegro de que no sea un problema para él, y de que no esté totalmente enamorado
de mí. Ambas cosas son igualmente molestas.
Abro mi bolsa de almuerzo, la que me compró Tank para que me preparara el almuerzo
cuando quisiera. Me ha hecho un sándwich de ensalada de huevo, pero también hay un
pequeño recipiente con almendras, así como uvas frescas y una bolsa de papas fritas asadas
al horno. Sonrío mientras lo veo, ya que es tan típico de Tank.
Entonces las palabras de Brayden se registran conmigo y yo frunzo el ceño—: ¿Dónde
estamos parados? —pregunto.
—Pues, sí. Estás con Tank, y ese no es el tipo con el que quiero meterme... A menos que
esa relación no sea más que un truco publicitario, en cuyo caso esperaré a que siga su curso
para invitarte a salir.
No es hasta que escucho esas palabras que me doy cuenta de lo que pasó. Brayden es
un hombre lindo, inteligente y gay que dio todas las señales de que está interesado en mí... y
lo zonifiqué como amigo desde el momento en que nos conocimos. Claro, reconocí que era
lindo y que teníamos cosas en común, pero nunca se me ocurrió la idea de enrollarme con él,
mucho menos salir con él. ¿Cómo es eso posible?
195
Los ojos de Brayden viajan de mi cara a mi bolsa del almuerzo y viceversa.
Página

—Pero no lo es, ¿verdad? —dice con un poco de tristeza.

—¿Perdón? —pregunto, confundido de a qué se refiere.
—Lo que tienes con Tank. Es real.
—¿Cómo lo sabes?
 Señala a mi almuerzo—. Mi suposición es que no lo empacaste para ti, porque cuando
lo abriste, estabas claramente sorprendido. Eso significa que alguien más lo hizo... Tank.
Empacar el almuerzo para alguien, eso no es enrollarse. Eso no es un truco publicitario. Eso
es de verdad, hombre. Está enamorado de ti.
Lentamente bajo el sándwich que he estado comiendo—. ¿Amor? —digo, tragando—.
¿Conseguiste todo eso de un almuerzo empacado?
Brayden sonríe—. Mis padres llevan casados treinta años. Mi padre es conductor de
autobús escolar. Todos los días, desde que tengo memoria, mi mamá le prepara un almuerzo
para que no coma comida rápida todo el tiempo. Él tiene un trabajo donde se sienta todo el
día, y ella quiere asegurarse de que se mantenga saludable. Eso es amor. No lo haces por
alguien que simplemente te gusta. Te está cuidando, lo que significa que te ama.
¿Peter me ama? Hace meses, esa idea habría sido demasiado absurda para contemplarla,
pero ahora, mi corazón palpita salvajemente al pensar ante el pensamiento. ¿Podría él? Si lo
hace, probablemente ni siquiera se dé cuenta porque no ha dicho nada. Pero tampoco yo, y
yo...
Me congelo completamente. Oh. Por. Dios. ¿Cómo se me pasó esto por alto?
Me he enamorado de Peter.
—¿Micah? —pregunta Brayden—. ¿Estás bien?
Me vuelvo a centrar en él—. Sí. No. Estoy... estoy enamorado de él —suelto.
Es increíblemente insensible decirle a un hombre que acaba de confesar estar interesado
en mí, pero mi filtro no funciona ahora mismo. Mi mente todavía está tambaleándose al darse
cuenta de que de alguna manera, en algún lugar, mi odio por Tank se convirtió en amistad y
luego en infinitamente más.
—Eso es algo bueno, ¿cierto? Entonces, ¿por qué parece que podrías desplomarte en
cualquier momento?
—Es complicado —ofrezco.
—Cariño, el amor siempre lo es. 196
Yo no lo sabría, ¿o sí? Nunca he estado enamorado, ni siquiera he tenido una relación
real con nadie. Todo lo que sé es enrollarme, divertirme y seguir adelante. Pero con Peter, no
Página

quiero seguir adelante. Se acerca nuestra última grabación y no quiero que esto termine.
No sé si Brayden tiene razón en que Peter está enamorado de mí. Y hasta que esté
seguro, no voy a decir nada. Si él quiere que haya un ‘nosotros’ también, tendrá que salir y
decirlo.
 Sobreviví a que mis padres no me quisieran, pero me costó una gran parte de mi
confianza y autoconfianza. Algo me dice que si Peter me rechaza, mi corazón se dañará
permanentemente.

197
Página
 TANK
—Santa mierda, ¿esto es lo que creo que es? —asomo mi cabeza a la vuelta de la esquina para
ver lo que Brewer está mirando.
Se me revuelve el estómago cuando veo lo que tiene en la mano.
—¿Qué demonios? ¿Estabas revisando mis cosas? —bajo el cuchillo que estoy usando
para cortar verduras, y marcho a donde él estaba parado al lado de mi cama. Le quito el cilindro
de las manos y lo tiro a la cama.
—Cálmate, estaba afuera, así que no creí que fuera un gran secreto.
Resoplo en molestia—. Aun así no te da el derecho. ¿Quieres que vaya a ver todos tus
plugs anales o lo que sea que carajos tengas?
—Eres bienvenido, no me avergüenzo de ello.
—Yo tampoco —me quejé—. Tengo un Fleshjack, ¿y qué? Toneladas de tipos los tienen.
La expresión de Brewer pasa de ser defensiva a desafiante—. Ese no es cualquier
Fleshjack, oso pardo —me pongo rígido. Maldita sea, vio el nombre de la marca en el costado—
. ¿Es tan bueno como el de verdad?
Me resoplo nuevo, esta vez en un intento de cubrir mi creciente excitación.
—Está bien. Es un agujero para meter mi verga —me encojo de hombros con fingida
indiferencia.
—Tsk, esa respuesta no ayuda. Soy un hombre de ciencia; tú más que nadie deberías
entender eso. Vamos a tener que hacer un pequeño experimento.
—¿Qué clase de experimento? —pregunto con voz ronca, mi verga ya dura como el acero.
198

—¿Por qué no terminas de cocinarnos la cena, y luego lo averiguarás?

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¿Hacer la cena con una furiosa erección? Claro, no hay problema. Ajusto mi erección y
Brewer sonríe, claramente satisfecho consigo mismo por mi situación.
—Hazme un favor y llévate a Shaggy a dar un paseo mientras termino de cocinar,
¿quieres?
 —No hay problema, oso pardo.
Regreso a la cocina mientras Brewer saca a Shaggy. Me muevo por la cocina, terminando
de cortar las verduras y revisando el pollo para asegurarme de que está casi listo. Tener a
alguien más a quien alimentar es infinitamente más satisfactorio que cocinar para mí. Y saber
que Brewer probablemente no se molestaría en comer si no estuviera cocinando para él, me
hace sentir extrañamente orgulloso de ser la persona que se asegura de que se alimente.
Desearía entender por qué, pero no voy a pasar mucho tiempo pensando en ello.
La puerta se abre y el sonido de las uñas de Shaggy contra el piso de madera llega a mis
orejas, justo cuando estoy sacando el pollo al romero del horno.
—La cena está lista —le digo a Brewer.
Emplato nuestra comida y la llevo a la mesa donde Brewer está esperando. He notado
que desde que hemos estado pasando más tiempo juntos y lo he estado alimentando
regularmente, su piel tiene un brillo más saludable.
—Esto se ve bien. Gracias, oso pardo.
—Ni lo menciones.
Miro a hurtadillas a Brewer durante toda la comida para asegurarme de que esté
disfrutando de todo. He tenido que tomar notas mentales de sus reacciones a las cosas
porque Brewer nunca sale y dice que no le gusta algo que yo he cocinado. Pero tiene una cara
de póquer de mierda, así que no es tan difícil de descifrar.
Odia los espárragos incluso cuando los cocino con un poco de grasa de tocino, y
tampoco es un gran fan de las chuletas de cerdo. Parece que le gusta mucho el pollo y las
zanahorias cocidas que he hecho hoy, así que me aseguraré de añadirlas a mi lista de cocinas
en el futuro. No es que yo espere cocinarle a Brewer para siempre. Ese pensamiento me golpea
en el estómago de una manera desagradable.
No hemos hablado de lo que sucederá una vez que el contrato de novio haya terminado
y volvamos a nuestro horario habitual de filmación. Parte de mí espera que la amistad que
hemos construido se mantenga, pero es imposible saberlo.
—¿Qué pasa con el ceño fruncido?
199
—Nada —me sacudo de la depresión en la que esa línea de pensamiento me puso, y
empiezo a pensar en los comentarios de Brewer antes de la cena. Mi verga comienza a llenarse
Página

mientras mi mente conjura todas las formas posibles en que Brewer podría torturarme cuando
terminemos de comer.
—Pensando en lo que voy a hacer contigo, ¿no? —provoca Brewer.
Gruño en respuesta y me meto un bocado de pollo en la boca.
 Se siente como si se necesitara una eternidad para terminar de comer. Pero tan pronto
como el último bocado de comida es retirado del plato de Brewer, lo arrojo sobre mi hombro
y me dirijo al dormitorio para ponerlo al lado de la cama.
Mordisqueo y lamo los labios de Brewer mientras sus manos vagan sobre mi pecho y
estómago bajo mi camisa. Tiemblo cuando sus dedos rozan mi ombligo y se dirigen hacia el
sur para fallar al abrir el botón de mis jeans. Su lengua baila y se enreda con la mía, mis propios
dedos enredados en su pelo, impidiéndole romper el beso. El sabor de su boca es adictivo a
medida que lo lamo, saboreando cada aliento que me da. Brewer se las arregla para bajarme
los pantalones alrededor de los tobillos y me pone una mano contra el pecho y me empuja
hacia atrás.
—Acuéstese boca arriba y pon los brazos detrás de la cabeza —instruye Brewer. Recibir
órdenes me irrita, pero la palpitación de mi verga me impulsa a cumplirlas. Cualquier cosa para
acelerar este proceso hasta su inevitable conclusión.
Me quejo, pero me quito los pantalones y hago lo que él dice. Mi verga yace pesada
contra mi estómago, goteando pre-semen en el grueso vello de mi parte inferior del
estómago.
Brewer se lame los labios, sus ojos me consumen y hacen a mi verga imposiblemente
más dura. Se necesita toda la fuerza de voluntad que tengo para no agarrar su pelo y forzarlo
a ahogarse en mi verga.
Se sube encima de mí y tira del dobladillo de mi camisa. Entiendo la indirecta y me siento
lo suficiente como para dejar que la jale por mi cabeza. En vez de desecharla, la dobla en una
tira delgada y me la levanta en la cara.
—¿Qué estás haciendo?
—Es una venda, oso pardo. Será divertido, lo prometo.
Lo miro con cuidado durante unos segundos antes de asentir. La sensación de renunciar
tanto control me enjaula, pero una vez que mi visión se ve obstaculizada, tengo que admitir
que hay una pequeña emoción en la boca de mi estómago.
El peso de Brewer desaparece de encima de mí, y oigo el crujido de la ropa que se quita.
Un pequeño gemido se escapa de mis labios mientras me imagino a Brewer desnudándose
200
para mí. Su cuerpo es un sueño húmedo que cobra vida.
Página

Sé que todo el mundo habla de la verga de Rebel y el culo de Pixie, pero por mi dinero,
aceptaría a Brewer cualquier día. Su verga es un poco más pequeña que la de Rebel, pero es
un poco más gruesa y tiene un bonito tono rosa. Y Pixie puede tener un culito dulce, pero
Brewer tiene un frondoso trasero que exige ser mordido y nalgueado y luego follado hasta la
semana que viene.
 Mi verga palpita mientras las imágenes de Brewer doblado, tomando mi verga, llenan mi
mente. El sonido de la apertura de mi tocador es seguido por el chorro de lubricante.
Salto mientras Brewer coloca un condón en la punta de mi verga y lo hace rodar en un
movimiento rápido. Entonces, su mano esbelta rodea mi longitud.
—Lo siento, debí haberte dado una pequeña advertencia —se ríe, acariciándome
lentamente desde la base hasta la punta, cubriendo mi verga y haciendo que me duelan las
bolas.
El peso de Brewer encima de mí mientras me acaricia me lleva cerca del borde demasiado
rápido, con los muslos tensos por el esfuerzo de no empujar en su puño. Su pulgar se desliza
sobre la sensible V en la parte inferior de mi cabeza y luego sobre la hendidura y alrededor de
mi cabeza hasta que estoy temblando y maldiciéndolo para que me deje venir.
En la siguiente caricia hacia abajo, se detiene cuando llega a mi base y le da a mi verga
un fuerte apretón, ralentizando mi liberación y haciéndome gemir. Algo suave y arrugado se
aprieta contra mi punta y por un segundo es difícil saber si es el culo de Brewer o el Fleshjack.
Aprieta la cabeza de mi verga cuando empieza a envolverme, mis manos en puños detrás de
la cabeza para evitar que agarre a Brewer y tome el control.
Jadeo cuando rompo el anillo exterior apretado y se hace obvio que no es la cosa real.
No me malinterpreten, me encanta mi Fleshjack, pero es una pobre imitación del calor de un
verdadero culo que me agarra fuerte, con los músculos revoloteando con cada golpe mientras
conduzco a Brewer cerca del borde.
—Ese es el Fleshjack, ahora dame el verdadero —ruego con voz áspera y áspera.
Brewer se ríe, y el juguete se retirado con un sorbo obsceno. Su peso se desplaza sobre
mí, y puedo sentir sus redondas nalgas acurrucando mi verga entre ellas. Su agujero ya está
abierto y listo para mí, así que debe haber estado haciendo varias tareas a la vez mientras
usaba el juguete conmigo. Se desliza arriba y abajo a lo largo de mi longitud, sus nalgas
sujetándome con la fuerza suficiente para llevarme al borde de la cordura.
Gruño, empujando contra su agujero, desesperado por estar enterrado en su interior.
—Es como montar un toro mecánico —bromea Brewer mientras muevo mis caderas. 201
—Brewer —digo su nombre con los dientes apretados, y hartó de su provocación.
—Me encanta ese gruñido de oso pardo. Es tan malditamente sexy —alaba Brewer,
Página

finalmente sosteniendo mi verga derecha, presionando contra su entrada.

Empujo mis caderas de nuevo, esta vez logrando estirando su agujero, los dos soltando
un profundo gemido mientras me meto en su apretado culo. Jalo mis brazos de detrás de mi
cabeza, listo para luchar contra él si trata de detenerme, pero dejando la venda en los ojos
porque es bastante caliente no poder ver nada.
Agarro sus caderas mientras sus manos descansan sobre mi pecho. Sus dedos se
enroscan en el pelo de mi pecho mientras usa su agarre como palanca para follar mi verga. Lo
agarro con fuerza, encontrándome con cada uno de sus empujones hacia abajo con uno de
los míos, y conduciéndome profundo y duro, cada uno de sus jadeos como una enredadera
en mis bolas, enloqueciéndome.
—Joder, eres tan bueno, Pete —jadea Brewer, el sonido de mi verdadero nombre en sus
labios me hace vacilar por un segundo—. No te detengas, oso pardo, por favor —sigue
suplicando como si no se hubiera dado cuenta de su error.
Lo empujo fuera de mi cabeza y uso mi agarre en sus caderas para cambiar ligeramente
su ángulo. Emite un grito estrangulado cuando clavo su próstata fuerte y rápido. Mis bolas
están pesadas y duelen por disparar mi semen profundamente dentro de Brewer.
Probablemente lo que más me gusta de estar fuera de cámara es sentir su culo agarrándome
cuando estallo, pulsando fuerte contra sus músculos internos apretados. El solo pensamiento
me lleva más cerca del borde.
La verga de Brewer rebota contra mi estómago con cada empuje. La envuelvo con mi
mano y empiezo tirar de ella al mismo tiempo que sus movimientos. Su canal se tensa
alrededor de mí, puedo sentir sus músculos revoloteando alrededor de mi longitud a medida
que se acerca a la liberación.
—Oh, joder, oh, Dios, me vengo —grita, follándose más fuerte hasta que su culo se
aprieta como una enredadera y semilla caliente se derrama sobre mi puño. Gruño mientras se
me aprietan las bolas y me vacío en el condón, en lo más profundo de su culo.
Espero a que Brewer ruede de mí para quitarme la venda de los ojos y luego el condón.
—Entonces, ¿supongo que es un parecido bastante pobre ya que lo adivinaste tan
rápido? —pregunta Brewer.
—El exterior se siente bastante realista, pero una vez que estuve dentro, era obvio que
no era un culo real.
—Qué lástima —Brewer bosteza y se estira en la cama—. ¿Quieres ver una película?
202

—Claro, folla-chicos, lo que quieras —me río entre dientes.

Página
 TANK
Hoy filmamos nuestra séptima escena juntos. Esta fue mucho más fácil que la anterior, sólo
una escena de mamada mutua. Se siente raro saber que dentro de unas semanas habrá un
video para que el mundo vea de mí tomándomelo por el culo. No es tan malo como esperaba
que fuera. Pero, sin embargo, es raro. No leo comentarios en nuestros videos de todos modos,
pero me aseguraré de evitarlos en caso de que algún troll decida que no le gusta verme ser
pasivo.
Brewer se estira y pone su mano sobre la mía, sorprendiéndome. Volteo mi mano y
enlazamos nuestros dedos juntos, disfrutando de la calidez de nuestra conexión por un
momento. Sólo nos quedan tres vídeos para completar nuestro contrato, y Rebel me dijo hoy
que quieren terminarlos para finales de la próxima semana si Brewer y yo estábamos de
acuerdo. Contrataron a unos cuantos chicos nuevos en la convención, y Rebel y Bear están
ansiosos por tenerlos programados, pero nuestras escenas conjuntas están obstaculizando
un poco esos planes.
Al igual que la última vez que Rebel mencionó que nuestro tiempo se agotaba, un dolor
sacude la boca de mi estómago. Miro a Brewer, cuya mirada está fija en el tráfico que circula
por delante, y me sorprende la sensación de revoloteo en mi pecho.
Cuando llegamos a casa, extraño la sensación de su mano en la mía casi
inmediatamente. Subimos las escaleras, mi mente sigue luchando con los sentimientos
inesperados causados por el hecho de que nuestra relación contractual terminará en dos
cortas semanas.
Brewer abre la puerta, y me sorprende que Shaggy no nos salude inmediatamente.
Siempre está esperando en la puerta con el trasero ondulado cuando entro.
—Shaggy —grito y luego doy un pequeño silbido. Cuando no viene, voy a buscarlo,
empezando por mi habitación. Encuentro mi habitación vacía, así que me dirijo a la de Brewer,
203
con él pisándome los talones, obviamente tan preocupado por Shaggy como lo estoy ahora.
La puerta de Brewer está ligeramente entreabierta, lo que ya es sospechoso, y cuando
Página

la empujo el resto del camino oigo un crujido y un chirrido que me permite respirar de nuevo.
Shaggy está aquí.
—¿Qué estás tramando, amigo?
 Brewer va alrededor de su cama para ver en qué se está metiendo Shaggy, y deja salir
un jadeo que me convierte en hielo.
—¿Qué es esto? ¿Qué pasa?
—Carajo, mierda, puta mierda —Brewer baja y se levanta con Shaggy en sus brazos.
Busco a Shaggy con mis ojos tratando de averiguar cuál es el problema. Está moviendo
la cola y dándome una de sus sonrisas de perrito tonto. No parece estar herido.
—¿Qué pasa?
—Tenía una botella de ibuprofeno en mi mesita de noche y la masticó. Carajo, no sé
cuánto comió o lo malo que es que comiera plástico.
—Oh, joder —concuerdo, buscando a Shaggy, necesitando abrazarlo antes de que cunda
el pánico. —. ¿Qué hacemos? Los perros no pueden tomar ibuprofeno, ¿verdad?
—No lo creo —concuerda Brewer, sacando su teléfono y cliqueando en él—. Mierda, sí,
dice que es realmente tóxico. Tenemos que llevarlo al veterinario ahora mismo. Hay uno a sólo
dos cuadras de aquí, vamos.
—¿Llamas y les dices que estamos en camino?
No me molesto en agarrar la correa de Shaggy, decidido a cargarlo en caso de que dejarlo
caminar pudiera de alguna manera acelerar la absorción de la medicación o algo así.
—Nos estarán esperando —dice Brewer cuando cuelga. Para entonces ya estamos en el
vestíbulo de nuestro edificio, y oigo que la llave de Brewer se mueve en su mano.
—Manejar tomará demasiado tiempo a esta hora del día. Incluso unas pocas cuadras
llevarán media hora. Corramos —sugiero.
Brewer no discute, sólo corre a mi lado, ignorando las miradas locas que la gente nos da
cuando pasamos con un perro ondulado en mis brazos y una mirada de miedo en mi cara.
¿Qué tan rápido absorben los AINEs los perros? ¿Cuántos se comió? ¿Qué tan tóxico es?
Cuando llegamos al hospital veterinario de emergencia, hay una joven que nos espera
con una sonrisa amable—. Este debe ser Shaggy? 204
—Sí, no sabemos cuánto comió —le dice Brewer—. Pero se lo estaba comiendo cuando
llegamos a casa hace diez minutos, así que no ha estado en su sistema por mucho tiempo.
Página

Probablemente también comió un poco de plástico.

—Okay, es bueno saberlo. El plástico es un poco preocupante, pero necesitamos sacar
esas pastillas de su sistema rápido, así que voy a llevarlo atrás para inducir el vómito y luego
tomaremos una radiografía para ver si todavía hay plástico en su estómago.
 —Sí, hagan lo que tengan que hacer —concordé, entregándolo.
—Tengo que hacerle saber que con el plástico, hay una pequeña posibilidad de daño al
esófago cuando vomite. ¿Estás de acuerdo con el riesgo?
—No tenemos elección, ¿verdad?
—No. El ibuprofeno es muy tóxico para los perros.
—Bien, entonces haz todo lo que puedas por él.
Tan pronto como el médico se lo lleva, me derrumbo en una silla en la sala de espera, mi
corazón martilleando no sólo por la carrera, sino por la preocupación por Shaggy.
Brewer se desliza en la silla a mi lado, pareciendo tan sacudido como yo.
—Lo siento mucho —me dice después de unos minutos de silencio.
—¿Por qué?
—Que tuviera la botella de ibuprofeno afuera. Si las hubiera puesto en mi cajón, él nunca
se habría llegado a ellas. Esto es mi culpa.
—Micah —digo su nombre como una suave advertencia—. Ven aquí —acaricio mi regazo
y él me mira con escepticismo—. Iré por ti si no lo haces tú mismo.
Brewer me da una mirada llena de escepticismo tímido antes de levantarse y volver a
sentarme en mi regazo.
—Siento que estoy a punto de recibir una paliza o algo así —bromea con una risa forzada.
—Nada de bromas ahora mismo —o abrazo y le beso el hombro—. No es tu culpa. Nunca
hubiera pensado en guardar un frasco de pastillas. Shaggy nunca ha hecho algo así antes, y
ninguno de nosotros podría haberlo previsto. Debí haberlo llevado al set hoy. Podemos jugar
al juego de la culpa toda la noche. Lo importante es que está en buenas manos. Si no hubieras
sido tan rápido con tus pies, no estoy seguro de que lo hubiera traído a tiempo. Estaba un
poco congelado cuando lo encontramos.
—Estar fresco bajo presión es algo así como una necesidad para un futuro doctor.
—Vas a ser un doctor increíble.
205

—Gracias —se acerca más a mí y dejo que su peso contra mí me calme mientras
Página

esperamos noticias del veterinario.

Cuarenta minutos después, el veterinario vuelve a salir, y Brewer se levanta de mi regazo
para que podamos averiguar cómo está Shaggy.
 —Buenas noticias, le sacamos ocho pastillas y algo de plástico. No había sangre en el
vómito, así que no tengo ninguna razón para creer que el plástico haya causado ningún daño.
Y las radiografías parecen claras. Le di a Shaggy un poco de carbón activado para que ligara
las toxinas que quedaban, pero lo trajeron aquí lo suficientemente rápido como que no espero
que haya ningún problema. Dale una dieta blanda durante las próximas veinticuatro horas, y
si notas algún letargo o sangre en sus heces, avísame de inmediato.
Respiro un suspiro de alivio y vuelvo a jalar a Brewer contra mí para besarle el costado
de la cabeza y deleitarme con mi alivio.
—Muchas gracias —le digo al doctor.
—Para eso estoy aquí. Te traeré a Shaggy en unos minutos.
Cuando una asistente veterinaria trae a Shaggy, está moviéndose y emocionado por
vernos, como si nada hubiera pasado. Lo pongo en mis brazos y beso su cara peluda.
—No te atrevas a asustarme así otra vez, carita de pelo.
—Eso también va conmigo —concuerda Brewer, dándole a Shaggy un beso en la nariz
también.
Nuestro camino a casa es mucho más tranquilo y Shaggy parece decidir que le gusta
que lo lleven en brazos en lugar de caminar él mismo, porque mantiene la cabeza alta como
si fuera el Príncipe de Inglaterra y dando una sonrisa de perrito a todos los que pasamos.
De vuelta en casa, Shaggy carga uno de sus juguetes felizmente mientras Brewer me
ayuda a hervir pollo y arroz para la cena y el desayuno de Shaggy de mañana. No es que se
necesiten dos manos para cocinar la comida, pero es bueno tener a Brewer conmigo en la
cocina mientras los dos estamos todavía agitados por todo lo que pasó.
Me parece que Brewer también ama a Shaggy, y eso me hace sonreír.
No estoy seguro de que vaya a poder dejar ir a Brewer.

206
Página
 BREWER
Por primera vez, nuestro set no es una escena de construcción, sino una sala de estar poco
decorada. Es nuestra última escena, y el momento que había estado esperando durante tanto
tiempo ya tiene mi estómago hecho nudos. ¿Qué nos pasará cuando esto termine, cuando
Rebel nos dé luz verde para romper? Una tristeza me invade al pensarlo.
Tank no ha dicho nada sobre querer estar juntos... o sobre lo que siente por mí. Ha
habido momentos en los que estaba seguro de que Brayden tenía razón, que Tank también
me ama, pero en otros momentos parecía distante. No sé qué hacer, pero sé que no puedo
arriesgarme a decírselo y ser rechazado. No soy tan fuerte.
Trato de deshacerme de esa sensación de inseguridad al caminar desde el vestuario
hasta el set, donde Rebel y Tank ya me están esperando. Trago cuando lo veo, vestido con
bóxers azules brillantes y apretados que resaltan su verga y sus bolas, y una camisa azul aún
más oscura con una V profunda.
El pelo de su pecho se riza sobre el cuello de su camisa, y no puedo esperar a dejar que
mis manos corran a través de él. Me encanta que esté velludo en todas partes. Es tan
masculino, la personificación de lo sexy, al menos para mí.
No sé cuándo cambió eso. No sé cuándo se transformó de irritante como la mierda en...
sí, ¿en qué, exactamente? No sé lo que es, pero es mucho más que mi enemigo, mi compañero
de trabajo e incluso mi novio de mentira. Y quiero que sea aún más. Quiero que sea todo, pero
¿cómo se lo digo?
Cuando me encuentro con sus ojos, veo reflejada parte de mi propia confusión, y eso
me tranquiliza. No necesito tener todas las respuestas ahora mismo. Él tampoco las tiene.
Pero al menos estamos juntos en esto, sea lo que sea y a donde sea que nos lleve.
—Hola —digo alegremente y hago un incómodo intento de saludo con la mano. 207
—Hola —me responde, enviándome una sonrisa cuidadosa.
Rebelde suspira—. Tantas semanas de pasar el rato y pretender ser novios y esto es lo
Página

lejos que han llegado... ¿Hola? Wow, ustedes dos son elocuentes.
Él no se da cuenta de cuánta emoción hay en esa simple palabra. Solía ser porque Tank
y yo no teníamos nada más que decirnos, pero ahora es porque tenemos mucho que decir,
pero no sabemos por dónde empezar. Tal vez Ronan Keating tenía razón con esa canción de
amor increíblemente sentimental. Tal vez lo decimos mejor cuando no decimos nada en
absoluto. ¿Quizás pueda mostrárselo?
Como si estuviera leyendo mi mente, Tank me tiende la mano y yo la tomo,
permitiéndole que me acerque a él. Calor está irradiando de él, y cuando hace esa cosa en la
que me hace cosquillas en la oreja con su barba, suspiro un poco.
La boca de Rebel cae un poco, porque obviamente no se esperaba esto.
—Dinos lo que quieres, Rebel, aparte del guión que nos enviaste —dice Tank, su voz
amigable, su mano fuertemente alrededor de la mía.
—Correcto. Sí, okay. Bueno, como debería haber sido obvio en el guión, hemos movido
la historia hacia el amor entre ustedes dos. Brewer, has estado pensando en ese último
encuentro, y no puedes sacártelo de la cabeza, así que inesperadamente te pasas por aquí
para obtener algunas respuestas sobre lo que Tank siente por ti. No queremos que se declaren
amor eterno, pero queremos verlo en la escena de sexo. Estamos apuntamos a algo lento,
chicos. Hagan que parezca natural y real, y sobre todo, romántico.
Tank asiente con una expresión seria—. Nos pediste que nos preparáramos y el guión no
decía nada específico sobre el sexo, así que, ¿alguna nota para nosotros allí?
—Hagan que dure. Eso es todo. Honestamente, no me importa quién hace qué, pero que
dure.
Hay ese toque de sonrisa en los labios de Tank, esa expresión que tanto me gusta—.
Sabes que puedo durar horas —dice.
—Conmigo no —me meto.
Su sonrisa se ensancha—. Cierto. No contigo.
Rebel se aclara la garganta—. Bien, ¿todo listo entonces?
Asentimos y ocupamos nuestros puestos. Todavía estoy vestido, pero estoy seguro de
que Tank lo remediará muy pronto. Han creado la apariencia de una puerta principal, así que
en el momento justo, finjo que estoy tocando el timbre. Luego editarán en sonido.
Tank abre la puerta, y por un segundo o dos mi mente se queda en blanco. Palabras,
208
necesito palabras.
—Necesito hablar contigo —logro decir y entro.
Página

—¿Sobre qué? —dice, tan severo como siempre.

Y entonces las palabras caen de mis labios por sí solas, porque no tengo que actuar en
absoluto—. Sobre nosotros. Sobre si hay un nosotros. Sobre la última vez que me follaste, y
me abrazaste después, y no se sintió como el sexo que habíamos tenido antes.
 —¿Cómo se sintió? —su voz es ronca ahora.
—Como más. Como si no fuera sólo sexo.
Nos miramos el uno al otro durante unos segundos, y luego él toma mi mano, me empuja
muy lentamente hacia él. Y yo voy, porque siempre voy cuando él me atrae, como un imán
atraído por el hierro. No me suelta hasta que nuestras narices están a un centímetro de
distancia, e incluso entonces, se aferra a mi mano, entrelaza nuestros dedos juntos.
—No creo que haya sido sólo sexo, folla-chicos.
Y luego me besa. No los besos crudos y exigentes de antes, sino un beso más suave, un
beso que me derrite por dentro hasta que soy fuego líquido y quiero arrastrarme dentro de él.
Es un beso que hunde sus tiernas garras en mí hasta que me engancho y no quiero dejar sus
brazos.
Nos besamos durante lo que parece media hora, y cuando finalmente me suelta, sus
labios están hinchados por los míos. Pone nuestras frentes juntas, y amo que seamos casi de
la misma altura—. ¿Qué quieres, bebé?
El término cariñoso hace que mi corazón se detenga por un segundo. Nunca me ha
llamado así, nunca. Y no puedo hacer otra cosa que rendirme. No más peleas. Él ha ganado.
Pero yo también gané.
—Tú. Te quiero a ti. Todo tú.
Él sonríe—. Bebé, ya me tienes.
—Entonces muéstrame.
Veo el entendimiento amaneciendo en sus ojos. Ya no quiero luchar por supremacía.
Quiero que él dirija. Aquí mismo, ahora mismo, quiero que me muestre todo lo que siente por
mí... y le mostraré mi corazón.
—Con mucho gusto —susurra antes de volver a besarme.
Me besa hasta que ambos nos quedamos sin aliento, y luego mete sus manos debajo de
mis jeans y los desabrocha hábilmente. Saco mi camisa sobre mi cabeza mientras él se arrodilla
para quitarme los zapatos, luego los calcetines y los jeans.
209
Arrastra su dedo índice desde mi tobillo hasta el borde de mis bóxers cuando se levanta,
y tiemblo—. ¿Vas a hacer que te suplique de nuevo? —digo.
Página

Sacude la cabeza—. No. Nada de suplicar esta noche.

Nuestras bocas se encuentran en otro beso profundo y lento. Mis manos encuentran un
punto bajo su camisa, acariciando esa espalda fuerte, esos músculos poderosos. Gruñe
suavemente cuando mis manos se mueven hacia su trasero y le amasan ambas nalgas.
 Pone sus manos en mis caderas y me levanta, sorprendiéndome. Solté un pequeño
chillido y le puse mis piernas alrededor de la cintura. Acaricia mi cuello con sus labios, luego
con la barba mientras me lleva a la cama, donde me baja suavemente antes de quitarse la
camisa.
Me hace un gesto para que me arrastre por la cama, y me pongo de espaldas, abriendo
bien los brazos cuando se sube encima de mí. Me encanta que los dos sigamos usando ropa
interior. No estoy acostumbrado a tomármelo con calma, pero hay algo maravillosamente
erótico en estar casi desnudo, en lugar de estar completamente desnudo.
Después de unos besos más lánguidos, empieza a moverse por mi cuerpo. Primero,
planta pequeños besos en mi garganta, sonríe cuando gimo—. Eres tan sensible allí —dice.
Su boca hace un camino caliente y húmedo hacia abajo, hacia mi pezón derecho. Primero
le da vueltas con el pulgar, hasta que está duro y listo para su boca, y luego alterna la succión
con una suave rasgadura con los dientes.
Muevo las manos sin descanso, buscando algo a lo que anclarme, y él agarra mis dos
manos con su mano derecha y las clava sobre mi cabeza, mientras comienza la misma lenta
tortura en mi otro pezón.
Lame su camino hacia mi ombligo, suelta mis manos cuando ya no puede alcanzarlas y
se arrastra sobre la cama para tener un mejor acceso. Se burla de mi ombligo con la lengua
hasta que mis manos encuentran su cabeza, agarrándose de su pelo corto.
Esta vez, él no las aleja, pero permite aferrarme a él mientras continúa su asalto a mis
sentidos. Es como si necesitara tocarlo para mantenerme firme, porque las cosas que me está
haciendo me provocan tal tormenta de sensaciones que no sé qué hacer conmigo mismo. Mi
cuerpo está en llamas, y él es la causa y la solución.
Ha llegado a mis bóxers, que muestran una mancha donde mi verga está goteando a
través del algodón. Primero, acaricia mi verga con la nariz, golpeándola suavemente hasta que
la cabeza se asoma por debajo de la pretina. Entonces abre su boca y muerde suavemente mi
verga a través de la tela, y maldición, gimo tan fuerte que casi me asusto a mí mismo.
—Por favor, oh, joder, por favor —ruego.
—Oh, me encanta cuando suplicas —susurra—. Tienes esta desesperación en tu voz, y
210
me pone tan jodidamente duro.
Página

Él arrastra mis bóxers hacia abajo, y suspiro con alivio. Necesito más. Lo necesito a él.
Sin embargo, Tank no está dispuesto a acelerar las cosas. No sé si es porque tiene en
mente las instrucciones de Rebel o porque tiene otras razones, pero el hombre está decidido
a tomarse su tiempo.
 Lame y mordisquea mi verga, lo que dispara zarcillos de fuego a mis bolas y al resto de
mi cuerpo. Raspa mis bolas con sus dientes, las raspa con su barba, lo cual me vuelve
completamente loco.
Cuando empuja contra mis piernas para que las jale hacia arriba, ni siquiera me doy
cuenta de lo que está planeando, hasta que mueve su lengua hacia abajo. Luego su barba me
raspa mi culo mientras lame mi agujero, primero con lamidas tentativas, y luego más audaz,
con empujones profundos que me hacen empuñar su cabello de nuevo. Estoy balbuceando,
gimiendo, rogándole que por favor, por favor, me folle, pero no se desalienta.
Su lengua es reemplazada por un dedo resbaladizo, luego dos y tres. Incluso en mi
aturdimiento, me doy cuenta de que lo que está haciendo es extraordinario, porque
normalmente no mostramos preparación, pero me está follando con los dedos, y se siente
tan bien, y es tan jodidamente sexy, y ¿puede por favor, por favor, por favor, poner su verga
dentro de mí?
Para cuando él baja sus propios bóxers y rueda un condón, yo soy un lío llorón, rodando
alrededor de la cama con los ojos cerrados y apretados. Queda poco de la estrella porno
experimentada que se supone que soy. Ahora mismo, todo lo que soy es un hombre
hambriento de verga, un agujero vacío y tembloroso que quiere desesperadamente ser
llenado.
Y cuando me llena, cuando desliza esa verga gorda, todo lo que puedo decir es—:
Gracias, gracias. Oh, Dios, por fin.
Y me sonríe y me besa para callarme. Oh, Dios, él trabaja esa verga, primero empujando
suavemente en mí, luego aumentando en velocidad y profundidad. Me da en la próstata y
estoy tan nervioso que apenas tengo tiempo de dar la señal de que estoy a punto de venirme.
Mis bolas estallan, no hay otra palabra para eso, y me vengo sobre todo su pecho y el
mío, incluso dándome en mi cara con un chorro grueso. Él espera a que yo termine de temblar
y gemir, y sonríe, con una sonrisa suave y amorosa, y lame el semen de mi cara.
—Eres tan jodidamente hermoso cuando te vienes —dice.
Espero que cambie de posición, porque eso es lo que hacemos normalmente, pero se
queda donde está—. Quiero mirarte cuando me venga —susurra—. Quiero ver el orgullo en tu
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cara de que tú me haces esto, bebé. Eres tan perfecto alrededor de mi verga, y tan
jodidamente guapo, y nunca quiero dejar de mirarte.
Página

Sus ojos clavan en los míos cuando empieza a follarme de verdad, y me doy cuenta de
que se reprimió antes para hacer que yo me viniera primero. Abro las piernas, abro mi culo
para él y lo tomo lo más profundo que puedo.
 Mis manos encuentran su lugar favorito en sus nalgas, y me aferro a él mientras me folla
con golpes profundos y poderosos. Puedo decir cuando está a punto de venirse, y jala su
verga, despojándose del condón. Nuestras manos se enroscan a su alrededor y juntas, lo
llevamos a un orgasmo explosivo.

212
Página
 TANK
Bebidas para celebrar la filmación de nuestra última escena juntos pareció ser una buena idea
cuando Rebel lo sugirió.
Brewer ciertamente parecía estar de acuerdo con la celebración. Claramente listo para
terminar de filmar conmigo. Puede volver a las escenas en las que se divierte tanto con Heart,
Campy y Pixie. Sé que ha estado tratando de convencer a Bear de que deje que Heart y él
mismo hagan una DP con Pixie. No estoy seguro de cómo va a ir eso, pero de cualquier
manera, es hora de que ambos volvamos a nuestros horarios regulares de trabajo.
No puedo evitar preguntarme qué significará esto para todo lo demás. ¿Nuestra amistad
se desmoronará poco a poco? El pensamiento comienza un dolor en mi pecho. Rebel nos dijo
que no podemos romper por lo menos otro mes más, así él puede obtener la mayor cantidad
de oportunidades de mercadeo posible de nuestras últimas escenas. Pero después de eso,
¿entonces qué? Estoy seguro de que Brewer se mudará tarde o temprano. Todo volverá a la
normalidad. Volveré a ver películas solo y cocinaré para mí. Bueno, al menos ahora tengo a
Shaggy. Cocinaré para mí y para Shaggy.
—¿Qué pasa, amigo? Me imaginé que estarías emocionado por haber terminado con
Brewer. Y sólo unas semanas más antes de que puedas ser totalmente libre de nuevo. ¿Por
qué no estás celebrando? —pregunta Rebel.
—No lo sé —miento, levantando mi bebida hasta los labios y bebiéndola rápidamente.
Puedo sentir los ojos de Rebel mientras espera que diga la verdad. Supongo que fui menos
convincente de lo que pensaba. Me parece justo, ya que no me esforcé en esa mentira—. Creo
que... joder... no puedo creer que esté diciendo esto, pero creo que podría estar enamorado
de él."
La expresión de asombro en la cara de Rebel—ojos saliéndose y boca cayendo abierta—
es casi suficiente para hacer que la confesión valga la pena por sí sola—. Wow... quiero decir,
213
eso es... wow.
—Sí —concuerdo solemnemente—. No soy tan estúpido como para pensar que Brewer
Página

podría sentir lo mismo. Le gusta estar de fiesta, divertirse, y yo soy lo opuesto a la diversión
por cualquier métrica que se te ocurra. Sin mencionar, que fui un completo pendejo con él
durante los primeros años que nos conocimos. Estoy seguro de que pasará, supongo que no
estoy listo para que se acabe la treta, ya que es todo lo que tendré de él.
 —¿Has hablado con él sobre esto o estás asumiendo que no siente lo mismo sin siquiera
preguntar? —Rebel desafía, claramente ya adivinando la respuesta correcta.
—¿Cómo podría sentirse de la misma manera?
—¿Cómo podría no? Ustedes dos obviamente se entienden en un nivel más profundo del
que el resto de nosotros hemos sido capaces de acceder. No puedo fingir que sé lo que está
pasando entre ustedes dos, pero eres un gran tipo, y Brewer sería afortunado de tenerte. Es
un tipo inteligente, él también debe saberlo.
—¿Tú crees? —pregunto con incertidumbre.
—Nunca lo sabrás a menos que te subas los pantalones y se lo digas.
—Okay, sí —concuerdo—. Se lo diré.

Las palabras de Rebel corren por mi mente en los próximos días. ¿Es posible que Brewer
sienta lo mismo que yo? Y si no lo hace, ¿puedo soportar la humillación de exponerme sólo
para ser rechazado? Me duele el estómago al pensarlo.
—Oye, ¿ya revisaste la pizarra para nuestro grado de Literatura Inglesa? —llama Brewer
desde su habitación.
—No, ¿tú sí?
Oigo su puerta crujir al abrirse y estiro mi cuello para verlo entrar en la sala de estar. Se
arrodilla en el sofá a mi lado con una gran sonrisa, y su teléfono en su mano extendida. Lo
tomo de él y miro el sitio web de la universidad que él ha puesto nuestra página de clases de
inglés.
—Obtuvimos el 100 por ciento —declara Brewer, añadiendo un pequeño puño de
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victoria para puntuar.
—Hacemos un buen equipo —ofrezco con indiferencia.
Página

—Sabes, oso pardo, creo que tienes razón.

Me besa la mejilla ruidosamente y me quita el teléfono. Está en la punta de mi lengua
decirle que creo que también podríamos hacer un buen equipo en la vida. Preguntarle si es
posible que se enamore de mí. Pero no puedo sacar las palabras.
 Antes de que me dé cuenta, está volviendo a su habitación.
Tal vez esta sea realmente una especie de prueba cósmica en la que tengo que superar
mi mayor temor. Si ese es el caso, la única manera de darle al universo el dedo medio y probar
que soy digno de Brewer es con la posibilidad de humillación pública.

—Gracias de nuevo por prestarme el set por un tiempo —le digo a Rebel, ganándose una
palmadita en el hombro—. No quería hacer esto en el apartamento por si acaso... bueno, ya
sabes.
—Estoy orgulloso de ti por encontrar tus bolas y decirle a Brewer cómo te sientes.
—Yo también —concordé, respirando hondo en un intento de disipar mis nervios—. Sólo
espero no terminar haciendo el ridículo.
—Estás haciendo el ridículo en nombre del amor; no hay nada más noble que eso.
Me río y le doy a Rebel un abrazo rápido antes de ahuyentarlo para poder llegar a la
potencial humillación.
Saco mi teléfono y abro mi cuenta de Instagram, la que Brewer tuvo que mostrarme
cómo entrar ya que él ha sido el que la ha actualizado por mí. Respiro hondo, me niego a
pensar en las formas en que esto podría resultar contraproducente, y hago clic en el icono
para iniciar un vídeo en directo.
—Hola chicos, Peter aquí, aunque todos me conocen mejor como Tank. Y estoy seguro
de que todos se sorprenderán al ver que puedo armar oraciones coherentes por mi cuenta.
He visto los comentarios, y sé que todos piensan que soy un cavernícola gruñón con cejo
fruncido. Así es como me ve la mayor parte del mundo. Después de todo, soy un bruto
gigante, y juego bien con el estereotipo. Sólo una persona había mirado más allá de eso y
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había visto mi verdadero yo. Brewer. Lo odiaba cuando lo conocí, y nuestra relación comenzó
como un truco de relaciones públicas, pero me enamoré de su arrogante y sexy trasero en el
Página

camino. Y espero que me dé la oportunidad de hacer esto realidad.

Le sonrío a la cámara, pensando en lo imbécil que me estoy haciendo ver. Con suerte, al
final valdrá la pena. Y si no es así, me alegro de ponerlo ahí afuera para que Micah sepa lo que
realmente está sobre la mesa. Quiero todo con él: un hogar compartido, un futuro
compartido, la oportunidad de cuidarnos el uno al otro.
 —Estoy seguro de que ya me he avergonzado bastante por un día, así que voy a ir ahora y
cruzaré los dedos para que Brewer traiga su buen culo aquí cuando vea esto. Cuídense, muchachos
—doy un pequeño saludo y termino el video.
Tiro mi teléfono al suelo e inclino mi cabeza hacia atrás, frotando mis manos sobre mi cara. No
pasa mucho tiempo antes de que escuche la puerta del estudio abrirse, y mi corazón salta a mi
garganta. Tiene que ser Micah. ¿Pero estará aquí para decirme que siente lo mismo? ¿O me hará un
agujero nuevo por derramar toda esa mierda en línea para que el mundo la vea?
Respiro hondo y me paro justo cuando él entra al set. Me sorprende que Micah se arroje a mis
brazos. Me tropiezo hacia atrás, casi perdiendo el equilibrio mientras me agarro a su trasero para no
dejarlo caer.
Y luego sus labios están en los míos, duros e insistentes. Muerde mi labio inferior y cuando abro
los labios con un jadeo, mete su lengua. Gimo ante el sabor de él en mi boca, caliente y húmedo
mientras nuestras lenguas acarician y enredan juntas.
—Creo que siempre fue real, Peter. Los dos teníamos la cabeza muy metida en el culo
para verlo —dice cuando nuestras bocas se separan y nuestras frentes descansan una contra
la otra mientras los dos tratamos de recuperar el aliento.
—Te amo —nunca le he dicho esas palabras a nadie en mi vida, pero son más fáciles de
lo que esperaba.
—Yo también te amo, osito de peluche.
Me besa de nuevo, y esta vez lo acompaño a la cama mientras nuestros labios se deslizan
juntos. Lo lanzo y me paso la camisa por mi cabeza mientras se ríe sorprendido.
—Espera, una pregunta —dice, poniendo una mano contra mi pecho para ralentizarme
cuando me subo encima de él.
—Sí, a veces puedes ser el activo.
—Es bueno saberlo, pero esa no era mi pregunta.
—Okay, habla mientras te desnudo —sugiero, ya desabrochándole los pantalones antes
de que tenga la oportunidad de responder.
—Si estamos juntos, ¿qué pasa con Ballsy? ¿Tenemos que dejar el porno?
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Mis manos se inmovilizan—. ¿Quieres que renunciemos los dos? —sé que ninguno de los
Página

dos planeaba hacer porno para siempre, pero también sé que ambos necesitamos el cheque
de pago mientras terminamos nuestros estudios. Y siempre he pensado que ambos lo
disfrutamos.
—¿Honestamente? —pregunta, con las cejas juntas.
 —Sí, bebé, creo que la honestidad es la única manera de que esto funcione.
—No quiero renunciar. Me gusta hacer porno. Y no hay otro trabajo que pague las
cuentas y nos impida tener préstamos estudiantiles cuando terminemos.
—Estoy de acuerdo.
—Pero, ¿qué hacemos? No podemos hacer escenas sólo con nosotros dos, ¿verdad? Eso
sería aburrido para los espectadores, y dudo que Rebel y Bear lo acepten.
Asiento y trato de imaginarme lo que sería estar sentado en casa sabiendo que Brewer
estaba siendo follado por Heart o deslizándose dentro del pequeño y apretado culo de Pixie.
Espero sentir un destello de celos como el que experimenté cuando él llevaba a los chicos al
baño a follar en el club, pero no encuentro ninguno.
—Creo que me parece bien que sigas haciendo escenas con los otros chicos. Mientras
estés fuera de cámara, eres sólo mío. Pero, ¿qué te parece si hago escenas con los otros
chicos?
Se toma unos segundos para reflexionar antes de responder.
—¿No dejes que nadie más te dé en cámara? —pregunta.
—Hecho —concuerdo fácilmente. No es que me entusiasmara la idea de dejar que
alguien más me penetrara de todos modos. Y estoy seguro de que eso es algo que Rebel y
Bear no tendrán problemas con aceptar, ya que he sido estrictamente activo durante años.
—Genial, ya está decidido, volvamos a la parte de la desnudez.
—Buen plan —le quito la camisa por encima de la cabeza y la tiro a un lado. Mirando a
Micah, desplegado en la cama sonriéndome, el calor se extiende por todo mi cuerpo y me
hace sonreír.
—Me gusta cuando sonríes, Pete —traza mis labios con su dedo índice, con una mirada
de asombro en su cara—. Me gusta que yo sea el único que te haga sonreír.
—A mí también me gusta eso.
217
Página
 BREWER
De alguna manera pensé que el mundo tal como yo lo conocía dejaría de existir después de la
épica declaración de amor de Peter... pero no fue así. Por supuesto, las cosas han cambiado
entre nosotros, pero los cambios son mucho más sutiles de lo que esperaba.
Ya me había mudado con él y nunca había usado su cuarto de huéspedes para nada más
que para tirar mis cosas. Ya estábamos durmiendo juntos, literalmente y en el sentido bíblico,
así que nada cambió allí. Todavía logro sacarlo de su caparazón y hacerlo reír. Y Peter ya se
encargó de mí de cien maneras diferentes que nunca había notado, pero ahora sí.
Tal vez esa sea la diferencia, que vemos y reconocemos lo que tenemos y lo especial que
es. Hay un entendimiento entre nosotros, un equilibrio y una paz que no existían antes. Pixie
tenía razón, en retrospectiva, sobre el juego previo. Todo el odio y las chispas, fueron el
preludio de algo mucho más profundo y más grande e infinitamente más hermoso.
Okay, una cosa ha cambiado. Ahora soy un ñoño total. Les pido disculpas a todos de los
que me he reído por ser ñoños cuando estaban enamorados, a Rebel y a Troy en primer lugar.
Dios, fui un idiota...
Tenemos una cosa más que hacer, y ambos estamos muy nerviosos. Uno pensaría que
un par de estrellas del porno gay no se asustaría por nada, y mucho menos confesaría algo
que realmente no es escandaloso ni nada a sus amigos más cercanos. La realidad es que Peter
y yo hemos discutido esto hasta la saciedad antes de finalmente acordar que necesitábamos
hacer esto.
Así que, aquí va nada.
Es el cumpleaños de Bear y como todos los años, le hemos hecho una pequeña fiesta de
cumpleaños con todos los Ballsy Boys del estudio. Lo hemos hecho en un restaurante antes,
pero nos topamos con algunos problemas el año pasado cuando el restaurante se opuso a
que no sólo fuéramos gays, sino que también lo fuéramos en el mundo del porno. Ugh,
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algunas personas apestan.
Página

De todos modos, Rebel nos prometió que se aseguraría de que el estudio se viera festivo
y mientras Peter y yo entramos, tomados de las manos, tengo que admitir que hizo un gran
trabajo. Hay serpentinas brillantes y globos por todas partes, y Rebel ha preparado algunas
mesas y sillas para alquilar. Una empresa de catering ya ha entregado el pastel y ha montado
un delicioso buffet que se encuentra contra la pared.
 —¡Hola chicos!
Pixie se lanza hacia nosotros para un abrazo de grupo, y lo acomodamos con gusto.
Es una ráfaga de abrazos, palmadas en la espalda y saludos, lo cual es gracioso porque
es como si no nos hubiéramos visto en meses cuando sólo han sido días para la mayoría de
nosotros. Aun así, me considero afortunado de trabajar con estos tipos increíbles.
Un poco más tarde, todos estamos sentados alrededor de la mesa, con la comida apilada
en los platos frente a nosotros. Peter me señala con un pequeño asentimiento que es hora, y
yo respiro hondo—. Entonces, chicos... tenemos que decirles algo.
—¡Estás embarazado! —bromea Campy, pero se calla cuando ve mi cara seria.
Pedro extiende su mano y toma la mía, y la sensación de esa mano fuerte alrededor de
mi mano me da el valor para decir las palabras.
—Como saben, Peter y yo estamos juntos ahora... y antes que nada, queríamos
disculparnos por haber mentido antes. Estábamos fingiendo ser una pareja, y lamentamos no
haber sido honestos con ustedes.
—Eso es por mí —dice Rebel. Mira alrededor de la mesa—. Les pedí que mantuvieran la
treta en secreto, incluso para todos ustedes... En retrospectiva, debería haber confiado en
ustedes para poder manejar la verdad.
Veo unos cuantos asentimientos, y me inspiran a continuar—. Pero también mentimos
sobre otra cosa. Todos sabemos que en el porno, proyectamos una cierta imagen. Mostramos
lo que queremos que los espectadores vean de nosotros. Es parte del trabajo. Pero a veces,
olvidamos que eso sólo se aplica a las cosas que hacemos en la cámara o en el trabajo. Nos
acostumbramos tanto a mostrar esa imagen que nos olvidamos de ser reales con nuestros
amigos.
Mi garganta se contrae inesperadamente y tengo que tragar.
Peter aprieta mi mano.
—Brewer no es real, pero era una imagen que creé para poder mantener mi vida
pornográfica y mi vida real separadas. Me quedé tan atrapado con él que olvidé ser Micah con
ustedes... si eso tiene sentido.
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Rebel asiente—. Completamente. Tomó de Troy darme cuenta de que era más que
Página

Rebel...
Animado, continúo—. Quería presentarles a todos a Micah, si les parece bien.
 Me oigo añadir las últimas palabras y me estremezco, estúpidamente consciente de mi
inseguridad, incluso ahora. Ese miedo al rechazo es tan profundo, que sigue apareciendo
cuando ni siquiera me doy cuenta.
No sé si Peter se da cuenta de que estoy luchando o simplemente quiere hacer esta
parte, pero dice—: Micah trabaja como asistente de enfermería en un hospital, y es muy bueno
en eso. Está trabajando duro para ser admitido en la facultad de medicina, y no tengo dudas
de que tendrá éxito.
El orgullo en su voz es audible, y mi corazón hace una voltereta una y otra vez. Dios,
amo tanto a este hombre.
—Eso es tan genial —dice Campy, el primero en reaccionar—. No me extraña que supieras
tanto sobre todas esas cosas médicas raras.
Todo el mundo interviene, pero Bear me estudia en silencio hasta que dice—: ¿Es posible
estar sorprendido y no estar sorprendido al mismo tiempo? Siempre supe que había mucho
más en ti que la imagen de folla-chicos que nos mostraste, pero esto me está volando la
cabeza. Estoy muy orgulloso de ti.
Mis ojos se ponen llorosos, y tengo que esconderme un poco contra el pecho de Peter
porque es demasiado para mí. Realmente soy un noño, ¿no? Cuando me he calmado un poco,
me aclaro la garganta y me vuelvo a sentar derecho.
—No soy el único con secretos. Peter tampoco es lo mismo que Tank. Donde Tank es un
hombre gruñón de pocas palabras, Peter es... Bueno, todavía no es muy hablador, y siempre
será mi oso pardo, pero es mucho más que eso. Es súper inteligente en realidad, y está a sólo
unos meses de terminar una doble licenciatura en arquitectura e ingeniería civil.
Esta vez, hay verdaderos jadeos, y Troy emite un sincero—: De ninguna puta manera.
Peter está nervioso cuando responde a una tonelada de preguntas, pero también puedo
ver el alivio y el orgullo de que finalmente podamos compartir esto.
Bear se ve pensativo cuando estamos todos sentados de nuevo, comiendo y charlando—
. ¿Qué tienes en mente, jefe? —pregunto cuando hay una pausa en la conversación.
Se rasca la barba—. Por mucho que me guste el hecho de que hayan compartido esto
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con nosotros hoy, no puedo evitar sentirme triste de que hayan tenido que mantener oculta
esta parte tan importante de ustedes por tanto tiempo. Siempre pensé que éramos tan
Página

cercanos como Ballsy Boys, pero tal vez no somos tan cercanos como me imaginaba.
Quiero saltar y contradecirlo, pero la verdad es que tiene razón. Peter y yo guardamos
los aspectos más definitorios de quiénes somos escondidos, y al hacerlo, no mostramos
nuestro verdadero yo a nuestros amigos.
 —No necesitas responder, pero, ¿por qué sentiste que no podías contarnos sobre tu otro
trabajo o tus estudios? —Rebel me pregunta.
Antes de que pueda responder, Campy habla—. Miedo al rechazo. Claro, ser un estudio
pornográfico gay significa que estamos abiertos a confesiones sexuales, pero cualquier otra
cosa sigue siendo un riesgo. Hay cajas en las que esperamos que encajen unos con otros, y
cuando no encajas tan fácilmente o quieres salirte de la caja que otros crearon para ti, da
mucho miedo.
Yo mismo no podría haberlo parafraseado mejor—. Exactamente. Brewer era popular,
porque todos querían follarme, ser follados por mí, o verme follar. Ustedes se rieron de mis
insinuaciones sexuales, de mis coqueteos incesantes, de mis encuentros... era lo que se
esperaba de mí. ¿Cómo se supone que iba a salir de eso y demostrar que puedo hablar en
serio? Tenía demasiado miedo de que se rieran de mí.
—Entonces tenemos que hacer un mejor trabajo para demostrar que realmente estamos
aceptando —dice Bear lentamente—. Y retarnos a romper las cajas en las que ponemos a
otros.
—Sí, tenemos —dice Peter—. Yo incluido.
—Me encantaría eso —dice Rebel, y comparte una mirada con Campy que no entiendo
del todo.
Entonces Pixie se pone de pie y, sin dudarlo, se estaciona en el regazo de Bear. Los
brazos de Bear se ponen alrededor de él cuando Pixie levanta la boca y besa suavemente a
Bear en su boca—. Harías bien en escuchar tu propio consejo... papi.
Lo juro, estamos tan callados que podemos oír el jadeo de Bear antes de que se sonroje
rojo carmesí. Miramos hacia otro lado, queriendo darles la privacidad que realmente no tienen.
Parece que nuestro pequeño diablillo tiene el corazón puesto en Bear, y todo lo que puedo
pensar es que es una pareja hecha en el cielo.
El resto de la noche es más ligera, aunque es más seria de lo que solíamos ser. Algo ha
cambiado, creo, y todos lo sentimos. Pero se siente como un buen cambio, un cambio
necesario. No sé qué secretos esconden Campy y Heart o cuál es la historia de Pixie y Bear,
pero quizás ahora tengan más valor para ser ellos mismos.
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Me aferro a Peter mientras conducimos a casa en su motocicleta. Cómo me encanta
sentir ese gran cuerpo frente al mío. Nunca me di cuenta de lo mucho que necesitaba que
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alguien me viera, que cuidara de mí, hasta que lo conocí. Él es la única razón por la que puedo
ser yo mismo ahora.
Me mira con curiosidad mientras entramos en su departamento. Nuestro departamento.
 —¿Estás bien? —pregunta mientras se quita la chaqueta de cuero y luego me ayuda a
salir de la que me compró, porque no me quería que anduviera con él todo el tiempo sin
equipo de protección
—Mejor que nunca —le digo. Pongo sus dos mejillas, su barba suave contra mis manos—
. Te amo —digo con una seriedad inusitada.
Él parece sentir mi estado de ánimo y simplemente sonríe suavemente mientras
responde—. Yo también te amo. Vayamos a la cama para que pueda mostrarte cuánto.
Mis ojos se iluminan—. ¿Puedo ser yo el activo?
—Cuando quieras, folla-chicos. Cuando quieras.

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Página
 BREWER
Un año después
Casi tropiezo con mis propios pies en mi prisa por abrir la puerta y entrar en nuestro
departamento. Shaggy viene corriendo hacia mí, felizmente ladrando, contento de que haya
vuelto.
―¿Dónde está papi? ―le pregunto, dándole una caricia rápido―. ¿Dónde está tu papi,
Shaggy?
El olor a pollo asado me informa que Peter está en la cocina, cocinando una tormenta.
El hombre se ha convertido en un chef de verdad, no bromeo. Diablos, incluso empezó a ver
programas de cocina para inspirarse. Por la noche, cuando estoy estudiando para los
exámenes, él mira a Gordon Ramsey, audífonos grandes en sus orejas para no molestarme.
Que no me atrape nunca, pero es un blandito, mi oso pardo. Exterior espinoso, pero con un
corazón tan grande.
―Hola, bebé ―Peter me saluda mientras entro. Entonces ve mi cara, y suelta la cuchara
de su mano―. Dime.
Mi cara se abre en una sonrisa tan grande que casi me duele―. ¡Entré!
Tank, mi gran oso pardo duro, emite un grito que toda la cuadra puede oír, luego me
levanta del suelo para balancearme y abrazarme con fuerza―. ¡Lo lograste! Dios, Micah,
estoy tan orgulloso de ti...
Lo logré. Me aceptaron en la facultad de medicina. Todavía no puedo creerlo, pero el
correo electrónico que recibí hace unos minutos lo confirma.
―No pude haberlo hecho sin ti ―e dije, y lo digo en serio.
Él terminó su carrera hace seis meses. Cuando se graduó, sus padres no estuvieron allí
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como se esperaba, pero yo había robado un asiento en primera fila. Cuando lo llamaron por
su nombre, me animé tanto que todas las cabezas del auditorio se giraron hacia mí. En la parte
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de atrás, se oía la sección de porristas de los Ballsy Boys. Nunca he visto una sonrisa tan
grande en la cara de Peter como ese día.
Tan pronto como terminó su carrera, Peter solicitó un trabajo en una empresa
consultora de ingeniería civil. Está en el nivel de entrada, pero le encanta, y junto con las
filmaciones quincenales que sigue haciendo el fin de semana para Ballsy Boys, era suficiente
para mí para reducir seriamente mis filmaciones y concentrarme en mis estudios y en mi
trabajo en el hospital. Insiste en cuidarme, y nunca me he sentido más amado en mi vida.
―Sabía que entrarías ―me dice Peter, y me vuelve a besar antes de bajarme.
―No podías saberlo. ¿Sabes cuánta gente se inscribe y cuántas no entran? La
competencia es una locura ―protesto.
Simplemente sonríe, y luego se acerca a la pequeña esquina de estudio en la sala de
estar donde creó un escritorio para que yo trabajara. Frunzo el ceño. ¿Qué está tomando?
Vuelve con un sobre en la mano.
―Esto es lo mucho que creí que podrías hacerlo....
Me da el sobre y lo abro. Dos hojas impresas caen, y las despliego. Son boletos de avión
a... Se me saltan los ojos―. ¿Hablas en serio? ¿Cómo podemos...
―Nuestra serie no sólo batió todos los récords de Ballsy Boys, sino que atrajo un
montón de nuevos suscriptores. Bear y Rebel querían mostrar su aprecio con un bono extra,
y les pedí que lo mantuvieran en secreto para ti por un tiempo, porque quería sorprenderte
una vez que obtuvieras tus resultados.
Mis ojos se llenan inesperadamente. Nadie ha hecho nunca algo así por mí. Nadie me ha
amado lo suficiente. Si yo no amara ya a Peter más de lo que puedo expresar con palabras,
me enamoraría de él otra vez.
―¿Nos vamos a Europa? ―pregunto, mi voz delgada.
Asiente, sus propios ojos sospechosamente húmedos también―. Tres semanas, bebé.
Tú y yo.
Me pongo en sus brazos y me deleito con la sensación de ese cuerpo fuerte contra el
mío. Él es mío, este hombre generoso y cariñoso. ¿Quién iba a saber que todo lo que hacía
falta era que a él se le permitiera cuidar de alguien? Me encanta su protección y su
preocupación por mí, asegurándose de que duermo lo suficiente, bebo mi agua y como sano.
―Por favor, dime que vamos a Holanda a ver ese puente que tanto te gusta ―digo. 224
Inclina mi cabeza hacia atrás para besarme―. Es nuestra primera parada.
Dios, lo amo.
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