Analisis Ciro Alegría
Analisis Ciro Alegría
Analisis Ciro Alegría
Ciro Alegría
Ciro Alegría Bazan fue un hombre mulyifacético, fue periodista y político, sin embargo
el ámbito creativo más extenso y productivo de este ilustre peruano se encuentra en la
literatura, la sencillez de su prosa y la fuerza de sus relatos le han hecho merecedor de
un lugar muy especial entre los escritores latinoamericanos contemporáneos. El escritor
nació en Sartimbamba, departamento de La Libertad, el 4 de noviembre de 1909. Hijo
de unos hacendados de privilegiada posición económica, José Eliseo Alegría y María
Herminia Bazán, oriundos de Huamachuco. Ciro Alegría vivió hasta los cuatro años en
una hacienda llamada Quilca, luego en la hacienda Marcabal Grande, aquí mundo de la
hacienda conoció e interactuó con las comunidades indígenas de la zona; situación que
conmovió su sensibilidad de una forma muy profunda, ya que la mayoría de su obra
literaria tiene como tema el problema de la cuestión indígena en nuestro país y América
Latina, es decir, denuncia en todo momento la injusticia y maltrato de la población
originaria, haciéndose partícipe de la corriente literaria del indigenismo.
En 1917, tuvo el privilegio de ser alumno del admirado poeta César Vallejo en el
colegio nacional de San Juan. Luego, en 1920, conoció, por su padre, al pintor José
Sabogal, pionero del indigenismo, movimiento artístico e ideológico que inspiró la obra
de Ciro Alegría. Y, en 1924, toma la decisión de dedicar su vida a la escritura, alentado
por su familia, comenzó a desarrollar sus primeros relatos y poemas. Pero, al principio,
alternó las letras con un trabajo de racionero de peonaje y ayudante en la bodega que su
tío Constante Bazán le ofreció, en la hacienda Galindo. Más tarde, acude a donde el
escritor y filósofo Antenor Orrego, miembro de la Bohemia Trujillana y, además,
director del diario El Norte, que lo acepta como reportero. Cuando entró a la
Universidad de Trujillo decidió militar en el APRA, partido fundado por Haya y
Orrego. Su nivel fue tal en el grupo que fue miembro del comité ejecutivo del APRA.
Por dicha situación, durante la oposición a la dictadura de Leguía, fue perseguido y
torturado.
Más tarde, en 1953, Ciro Alegría acudió al Congreso Martiano de La Habana, fue
reconocido entre un centenar de escritores de Europa y América. Radicado en la isla,
trabajó con la revista Letras Peruanas. Ese mismo año se casó con la poetisa cubana
Dora Varona, junto con ella decidió regresar a su patria. Y en septiembre de 1963, sale a
la luz su libro de relatos Duelo de caballeros, en la editorial Populibros de Manuel
Scorza. De regreso a su país, el crítico Antonio Cornejo Polar lo invita al Primer
Encuentro de Narradores Peruanos, convocado por la Casa de la Cultura de Arequipa.
El mismo año Alegría asumió el rol de presidente de la Asociación Nacional de
Escritores y Artistas, venciendo a Luis Alberto Sánchez, rector de la Universidad de San
Marcos.
La obra es considerada como una de las obras más destacadas de la novela indigenista y
obra maestra de su autor. Por eso, Mario Vargas Llosa ha afirmado que esta constituye
el punto de partida de la literatura moderna peruana y su autor nuestro primer novelista
clásico, además, “El mundo es ancho y ajeno” recibió el importate premio
latinoamericano de novela, convocado por la editorial estadounidense Farrar &
Rinehart; y cuenta con numerosas traducciones a múltiples idiomas como inglés,
francés, portugués, hebreo, holandés, ruso, italiano, sueco, alemán, noruego y danés.
Por su parte, el título de la obra quiere decir que el mundo es ancho, grande, pero ajeno
porque cada persona habita un cierto lugar y éste no puede ser de otro refiriéndose a la
propiedad privada de la que los indígenas no gozaban ya que cualquier hacendado se la
podían quitar como le pasó a la comunidad de Rumi. Rosendo Maqui era el alcalde de
esta comunidad, era un hombre justo y sabio que defendió los derechos de los de los
indios, pero fue engañado por el Mágico, Zenobio García y Bismarck Ruiz, el abogado
a quien había encargado la defensa de la comunidad y que lo traicionó aliándose con
Álvaro Amenábar. La ley favorecía a los hacendados y perjudicaba al indio quitándoles
sus tierras y explotándolos. Los comuneros no entendían nada de leyes y Bismarck Ruiz
los engañó con una defensa se basaba en artículos de ley y pruebas bien definidos.
Rosendo Maqui pensaba siempre en el bien de la comunidad, aun estando en la cárcel y
aún muerto su alma siempre viviría allí. Rumi pasó a manos de Álvaro Amenábar, un
hacendado dueño de Umay, era explotado y se valía de cualquier medio para lograr lo
que quería y deseaba las tierras de Rumi sólo para que los indios trabajaran para él en
otra hacienda, pero los comuneros se alojaron en Yanañahui. El indio murió
defendiendo sus tierras ya que las amaba. El mundo es ancho y ajeno es una obra
realista porque nuestra vida del indio, las injusticias, las explotaciones y la pobreza que
sufrían.
Análisis
Fragmento:
Invitaba a ser vista la lenta ondulación y el hombre sentose sobre una inmensa piedra
que, al caer de la altura, tuvo el capricho de detenerse en una eminencia. El trigal
estaba amarilleando, pero todavía quedaban algunas zonas verdes. Parecía uno de
esos extraños lagos de las cumbres, tornasolados por la refracción de la luz. Las
grávidas espigas se mecían pausadamente produciendo una tenue crepitación. Y, de
repente, sintió Rosendo como que el peso que agobiaba su corazón desaparecía y todo
era bueno y bello como el sembrío de lento oleaje estimulante. Así tuvo serenidad y
consideró el presagio como el anticipo de un acontecimiento ineluctable ante el cual
sólo cabía la resignación. ¿Se trataba de la muerte de su mujer? ¿O de la suya? Al fin
y al cabo eran ambos muy viejos y debían morir. A cada uno, su tiempo. ¿Se trataba
de algún daño a la comunidad? Tal vez. En todo caso, él había logrado ser siempre
un buen alcalde.
Desde donde se encontraba en ese momento, podía ver el caserío, sede modesta y
fuerte de la comunidad de Rumi, dueña de muchas tierras y ganados. El camino
bajaba para entrar, al fondo de una hoyada, entre dos hileras de pequeñas casas que
formaban lo que pomposamente se llamaba Calle Real. En la mitad, la calle se abría
por uno de sus lados, dando acceso a lo que, también pomposamente, se llamaba
Plaza. Al fondo del cuadrilátero sombreado por uno que otro árbol, se alzaba una
recia capilla. Las casitas, de lechos rojos de tejas o grises de paja, con paredes
amarillas o violetas o cárdenas, según el matiz de la tierra que las enlucía, daban por
su parte interior a particulares sementeras —habas, arvejas, hortalizas—, bordeadas
de árboles frondosos, tunas jugosas y pencas azules. Era hermoso de ver el cromo
jocundo del caserío y era más hermoso vivir en él. ¿Sabe algo la civilización? Ella,
desde luego, puede afirmar o negar la excelencia de esa vida. Los seres que se habían
dado a la tarea de existir allí, entendían, desde hacía siglos, que la felicidad nace de
la justicia y que la justicia nace del bien de todos. Así lo había establecido el tiempo,
la fuerza de la tradición, la voluntad de los hombres y el seguro don de la tierra. Los
comuneros de Rumi estaban contentos de su vida.
Simplemente, hace mención a a sus comuneros y la felicidad que les brinda el vivir en
caseríos debido a su forma de sosteneser y ser dirigidos, cuando dice “estaban contentos
de su vida”. Por otro lado, en estas partes en específico también se manifiesta otra
particularidad de esta corriente literaria, la cual es es que el autor centra la obra en el
indio, en este caso Rosendo, y su entorno social, los comuneros, volviéndolos
protagonistas de esta, nos damos cuenta de esto porque cuando menciona a la
civilización no se extiende más en el tema, tan solo lo usa para poder introducir el hecho
de que los indígenas están felices de lo que tienen y donde viven, a pesar de no cnocer
más allá de eso, pero no solo en esta parte se puede apreciar esto, sino a lo largo de todo
el texto.
La palabra “pomposo” significa que llama la atención por ser vistoso o lujoso en
exceso, es decir que el hecho de que se ponga : “llamado pomposamente”, expresa que
desde su punto esas partes de la ciudad sí eran lojusas y vistosas y no envidiaban las
nuevas tecnologías que los europeos habían traído a la ciudad.
Por otro lado, también encontramos otra cualidad, el autor relaciona a la persona con su
ambiente, en este caso al indígena con su contexto y se evidencia en:
El protagonista supone que algo va a pasar por la forma en que la naturaleza se expresa,
dando a entender la íntima relación en la que se encuentra con respecto a esta y
mostrándonos la importancia que tiene sobre el comportamiento de los indígenas, en
este caso era la tenue crepitación de las grávidas espigas que se mecían pausadamente
produciéndola la cual lo aliviaba y eso lo consideró como un presagio de que iba a pasar
algún suceso para el cual debía mostrar resignación, que tenía que ver con su mujer o
con él o con la comunidad entera; y la naturaleza lo estaba ayudando a darse cuenta. En
pocas palabras, el indio se considera parte de la naturaleza y considera que esta es parte
de él.
Fragmento:
¡Desgracia!
Una culebra ágil y oscura cruzó el camino, dejando en el fino polvo removido por los
viandantes la canaleta leve de su huella. Pasó muy rápidamente, como una negra
flecha disparada por la fatalidad, sin dar tiempo para que el indio Rosendo Maqui
empleara su machete. Cuando la hoja de acero fulguró en el aire, ya el largo y
bruñido cuerpo de la serpiente ondulaba perdiéndose entre los arbustos de la vera.
¡Desgracia!
Nada había fuera de esa existencia escondida. De súbito, un gorrión echó a volar y
Rosendo vio el nido, acomodado en un horcón, donde dos polluelos mostraban sus
picos triangulares y su desnudez friolenta. El reptil debía estar por allí, rondando en
torno a esas inermes vidas. El gorrión fugitivo volvió con su pareja y ambos piaban
saltando de rama en rama, lo más cerca del nido que les permitía su miedo al
hombre. Éste hurgó con renovado celo, pero, en definitiva, no pudo encontrar a la
aviesa serpiente. Salió del matorral y después de guardarse de nuevo el machete, se
colocó las prendas momentáneamente abandonadas —los vivos colores del poncho
solían, otras veces, ponerlo contento— y continuó la marcha.
En este fragmento se sucita cuando Rosendo se encuentra con una serpiente en el campo
y trata de matarla con un machete pero no lo logra, entonces decide seguir su camino.
Aquí se puden apreciar características que ya se han reconocido en el anterior
fragmento, tales como el protagonismo que se le da al indio y a su entorno social dentro
de la obra y se puede notar a lo largo de toda esta parte del texto, en todo momento
habla con bastante precisión sobre el cómo se sentía y actúa el indígena con respecto a
la problemática, por ejemplo en:
el buen sentido».”
Aquí se hacen suposiciones acerca de lo que la gente que vive con él pensaría o diría si
lo ven en esa situación.
Aquí, el autor hace referencia al poncho, este es una prenda de abrigo que consiste en
una manta cuadrda o rectangular, con una abertura en el centro para pasar la cabeza, y
que cubre desde los hombros hasta la cintura, el cual es característico de la sierra. Y este
use de este elemento se hace más eficaz más adelante, ahora describe cómo es el poncho
y le agrega otro rasgo más para hacerlo más ditintivo y que el lector se de cuenta con
mayor claridad que pertenece a la cultura indígena; y se expresa de la siguiente manera:
ponerlo contento”
Esta características está relacionada con otra que ya vimos con anterioridad, la
afirmación absoluta de lo autóctono, en este caso sería el poncho propio de nosotros.
Dentro de todo el contexto que se estaba dando, el lector plasma que los indígenas usan
objetos oriundos que en realidad sí les funcionan para ellos, no usan herramientas,
prendas o cualquier tipo de objeto nuevo que es consecuencia de la colonización,
prefieren eguir utilizando lo de ellos, esto también se ve cuando se menciona el machete
que Rsendo tenía y con el que planeaba matar a la serpiente; el autor podría haber
puesto un arma de fuego como herramienta en su libro para matar a dicho reptil, pero no
lo hace y utiliza lo que usualmente se haría en una comunidad indígena cualquiera antes
de la llegada de estos europeos y sus innovaciones.
También, se nos presenta la oportunidad de distinguir otro rasgo que pertenece al
indigenismo, la descripción de su entorno. Desde el inicio del fragmento se ve una muy
clara y minuciosa descripción sobre dónde y cómo se encuentra Rosendo , por ejemplo
cuando dice:
túnel.”
Con estas descripciones nos queda claro que se encuentra en el campo tratando de
encontrar una serpiente veloz con su cuerpo cerca de la tierra con un machete para
matarla.