Parcial 1
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Vivir de prestado: filosofía ¿positivista? Para formar una identidad nacional y la búsqueda
de una opción superadora
INTRO
Durante la primera mitad del S xix argentina se debatio entre encarnizadas luchas civiles
en busca del poder, dando paso a un nuevo periodo donde una flamante oligarquía
llegaría al poder y con ellas todo un conjunto de ideas amparadas bajo el paraguas de la
ilustración y el racionalismo, estas ideas surgidas del iluminismo que tanto se habían
expandido al momento de la liberación del yugo español hoy eran tomadas por las fuerzas
de turno como base para la generación de una fuerte idea, la idea de que había que
poblar no solo las tierras “desiertas” con europeos sino también las mentes de las
personas con una idea nacional igualmente exportada.
Entra en juego un gran tema decimonónico, la integración del territorio nacional. Ya Roca,
hombre emblema del pensamiento positivista, Habia logrado, armas mediante, integrar el
territorio considerado “desierto”. Ahora desde su mirada faltaba una cosa: Poblarlo y a eso
se dispusieron, Argentina se constituye en uno de los principales receptores de la
inmigración de ultramar debido a que el gobierno oligárquico liberal formuló y promovió un
desarrollo capitalista dependiente basado en la afluencia de capital y mano de obra
extranjeras. La inmigración fue percibida por las élites dominantes como un elemento
esencial en la creación de una sociedad y una comunidad políticas modernas.
Pasada las encarnizadas luchas civiles en busca del poder se dio un nuevo periodo en el
país donde una flamante elite tomaría las riendas de la nación y con ellos traerían todo un
conjunto de ideas amparadas bajo el paraguas de la ilustración, el racionalismo y el
positivismo. En ellas basarían su concepto de que había que poblar no solo las tierras
“desiertas” con inmigrantes de su idealizada Europa sino también las mentes de las
personas con una nueva identidad nacional igualmente exportada. Estas ideas
acompañaran el transcurso de la historia oficial y formaran parte indiscutible de la
formación académica, pero frente a los cambios de paradigmas surgirían nuevas voces
que se preguntarían: ¿Negar todo pasado por considerarlo indigno puede ser la forma
correcta de generar una cultura con identidad y respeto por lo propio?
La integración del territorio nacional, gran tema decimonónico, ya había sido en parte
llevado a cabo, armas mediante, por un hombre emblema del pensamiento iluminista y
positivista de la elite dominante: Julio A. Roca. Ahora solo quedaba comenzar con las
ideas planteadas por pensadores como Alberdi y Sarmiento y continuadas por la
generación del 80 bajo el lema gobernar es poblar” se generara un nuevo aluvión
inmigratorio, fenómeno que no tendra, ni antes ni después, un crecimiento tan sostenido
como el que se dara en el periodo 1869-1914
Citando los datos censales se verá que para el periodo intercensal del 1869-1895 la
población saltara de 1.800.000 a casi los 4 millones de habitantes y para el censo de 1914
ya rozaba los 8.000.000 millones. El fenómeno inmigratorio se verá reflejado en el
número total de extranjeros que pasara del 12 % en 1869 al 30% en 1914. Aunque
predominaron los italianos y españoles (llegaron a ser el 77% del total de extranjeros)
llegaron al país desde franceses hasta rusos y polacos así como también sirios, turcos y
armenios.
Este aluvión inmigratorio tan heterogéneo implicaba una intrusión abrupta al país que
había que integrar, y la elite gobernante liberada por los hombres del 80, de pensamiento
liberal y positivista, no dudo en tomar el modelo eurocéntrico como un símbolo de
modernidad y a Francia como modelo cultural indiscutido provocando, adrede, una
abrupta renovación de las formas de vida tradicionales
La llamada generación del 80 (hijos culturales y políticos de la generación del 37)
encontraran en el positivismo y el culto al racionalismo la matriz fundante de las nuevas
ideas de nación, consideraran que todas esas formas mantenidas desde la época de
dominación española eran símbolo de atraso y rechazaran todo desarrollo
autoconsciente de identidad nacional que resultara del aporte de la cultura
hispanocriolla, tales elementos culturales de autoconciencia como la poesía gauchesca o
la arquitectura colonial rioplatense serán vistas como barbarie de otra época se hará tabla
rasa sobre el pasado llevando a cabo un proceso de aculturación e imitación, sin
reflexión ni adaptación alguna, de modelos culturales considerados mas “nobles” todo en
pos de mostrar al mundo una nueva nación a la cual se le auguraba “un destino peraltado”
El proyecto de una escuela laica gratuita y obligatoria de Sarmiento promulgado luego
por Roca será una herramienta más para al nuevo ser nacional. Las grandiosas escuelas
palacio, de arquitectura tan extranjera como su modelo pedagógico y cultural, verán en el
modelo positivista y su fe ciega en el conocimiento científico el modo de enseñar,
haciendo culto a la razón pura y el racionalismo como la única forma posible de
conocimiento buscaran formar los cimientos de una argentina moderna que asimilara a los
nuevos habitantes del país y hará que sus hijos se sientan argentinos mediante la
formación una cultura e identidad nacional acorde que toma los valores del “progreso”
europeo y Pone bajo la alfombra todo pasado tanto indígena como criollo e hispánico
considerado atrasado ahora se priorizaba lo universal sobre lo particular y se daba una
pérdida de autoconocimiento, un distanciamiento de lo propio a la vez que un desprecio
por lo local y tradicional.
Esta forma de ver la historia seria la versión oficial de la educación institucionalizada sin
oposición en los ámbitos académicos. Sin embargo, un modo de ver tan poco reflexivo
con la realidad y con el pasado no tardaría mucho en encontrar sus primeras críticas que
se harían eco de la ironía del discurso. Se rechazaba toda forma cultural del pasado
ligada al régimen colonial opresor, pero se abalaban y cubrían nuevos modos de
colonialismo igual de nefastos: por un lado el colonialismo pedagógico y cultural ya
mencionado en las formas de aprendizaje y en la cultura afrancesada de las elites que no
eran mas que un espejismo cultural y por otro lado un semi-colonialismo económico
llevado a cabo por el imperio británico
Argentina era el sexto dominio británico” y esto se veía en el modelo agrícola-ganadero
exportador de materias primas acorde a algunos intereses locales por un lado y a los
británicos por otro, convirtiéndonos en un país semi-colonial dominado por uno industrial y
a merced de sus inversiones en ferrocarriles frigoríficos y puertos. Lo que los ingleses no
habían podido con las armas lo habían logrado mediante la diplomacia y el oscuro
entradamado de negocios con una acomodada oligarquía local. El país era, en boca de
Abelardo Ramos, “una sociedad agraria tan dependiente como estéril” (la bella época)
En este contexto económico y cultural tan dominado y disfrazado de prosperidad, viajes a
Europa y magnifica arquitexctura historicista publica y privada surgen nuevas voces se la
mano escritores como Raul Scalabrini Ortiz, Arturo Jauretche y Homero Manzi entre otros
Impulsados por el avance de los sectores populares y el Yrigoyenismo que formarna la
Fuerza de Orientacion Radical de la Joven Argentina (FORJA) una agrupación de vital
importancia en el surgimiento de una ideología y movimiento nacional contrapuesto a la
corriente liberalista y positivista y que serviría como un puente entre los movimientos de
masas mas importantes del siglo XX en la Argentina: el Yrigoyenismo y el Peronismo.
Esta agrupación no solo criticara el proceder económico del pais sino también aquella
forma de escribir la historia por políticos liberales como Mitre en la que se cortaba todo
lazo con la cultura hispanocriolla, se ponía a europa como centro de la cultura y se
pretendía hacer despreciaba todo pasado criollo, americanista e indígena. Forja hara un
gran aporte a la cuestión del revisionismo chocando con la lógica mitrista rompiendo
viejos paradigmas y revalorizando figuras de caudillos y heroes populares otrora
castigados.
La corriente historiográfica liberal y mitrista que tenia como modelo dominante la idelogia
positivista de Comte es puesta en jaque, queda a la luz que no alcanza con Priorizar la
educación de los hechos de la ciencia si se olvida el individuo la cultura.
Sabato señalaba estas debilidad en su genial ensayo hombres y engranajes “Y así
aprendimos brutalmente una verdad que debíamos haber previsto, dada la esencia
amoral del conocimiento científico: que la ciencia no es por sí misma garantía de nada,
porque a sus realizaciones les son ajenas las preocupaciones éticas “
Es asi que el revisionismo llega para quedarse aportando desde la heurística como y en
gran medida desde la hermenéutica formando nuevas interpretaciones sobre la
información y nuevos modos de ver la historia haciendo asi grandes aportes al
pensamiento nacional que buscara nuevas fuentes de conocimiento en diversos aspectos
provenientes de los estímulos sensoriales, de la imaginación creativa, del sentido común,
y de elementos que los pueblos periféricos forjaron dentro de sus procesos históricos
específicos. La nueva información aportada por los “nacionales” implicará nuevos criterios
y modalidades de reflexión –autorreflexión– sobre las cuestiones del país y la región
A pesar de que el El Pensamiento Nacional fue negado y desnotado es innegable su
exitencia y su importancia y como tal su aporte al choque de ideas se produce un rechazo
de una sobre la otra que debe ser abordado de una manera integral recuperando lo mejor
de cada uno, un proceso que valorize las expresiones culturales, surgidad tanto del
mestizaje y criollismo que tanto se intento eliminar como de las ideas que el liberalismo
busco afirmar como propias y que hoy forman parte tanto de nuestro patrimonio material
como inmaterial
…la historia de la cultura no es otra que la historia de préstamos culturales. Las culturas
no son impermeables; así como la ciencia occidental tomó cosas de los árabes, ellos las
tomaron de los indios y los griegos. La cultura no es nunca cuestión de propiedad, de
tomar y prestar con garantías y avales, sino más bien de apropiaciones, experiencias
comunes, e interdependencias de toda clase entre diferentes culturas.