Tratado Histórico y Práctico de La Vacuna
Tratado Histórico y Práctico de La Vacuna
Tratado Histórico y Práctico de La Vacuna
~it~ /2~3.3
JJISTORICO y PRACTICO
DE LA VACUNA.
I
Caula qu.e lil 'Dide/!I. nune quid aglfldUÍ!' Jjt &onlidiyatt.
Cie. pro Ltje Manilia.
!. •
DE LA VACUNA,
r'i Que contiene en compendio el orígen y los resnlta-
. QOs de las observaciones y experimentos sobre la va-
cuna I con un exámen imparcial de sus ventajas, y de
las objeciones que se le ' han puesto, con todo 10,
de maS que concierne á la práctica del nuevo
modo de inocular.
TRADUCIDO
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®Biblioteca Nacional de Colombia
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mismo que el de las picaduras; pues sa-
len otros en dístintas partes del cuerpo, y
no pocas veces aparecen nuevas erupciones
cutáneas parecidas al sarampion, y otras á
pequeños diviesos, que tardan mucho en ci-
catrizarse.
Entre los muchos exemplares de falsas
vacunas observados en esta corte, presenta":
reI tan so1o el· .
sIgmente, por verse en e'1 per-
I
En testimonio de gratitud, de
estimacion J de respeto
/, /)
l a. .
;; , l .
J.
/ 2 ".
.9."
I J.
LIBRO l.
LIBRO n.
Confirmadon y félii;¡plication del descubri-
miento de Jennef en Inglat,erra~
. LIBRO nI.
Inda~cio.nes f fncperime.nt:o~ oe Jenner y
P~arsell, de 'iue x.emltan muchos . hechos que
prop'ilgan f desarr-olianel descubrimiento
de la vacuna. "
XXXVI
bre la 'meula ,del virus 'fJarioloso con
el humor 'Vacunal, , sobre el desarro-
llo simultáneo de ambas 'Viruelas........ 78
CAP. III. Experimentos con la mezcla del
humor 'Vacunal, del 'Vírus 'Varioloso... 8I
CAP. IV. De muchos resultados relativos
al e:rámen de esta qüistion; de si ¡ti
inoculacion de la 'Vacuna"es preferible ' }
á la de las 'Viruelas ordinarias. Ex-
tracto de la extensa relacion que los
redactores de la Biblioteca británica
han publicado sobre la obra de Wood-
'ViJle ......................... :....................... 8!t
CAP. v. De las obser'Vaciones de los ex- -
.perimentos de Mr. P6arson sobre las
erupciones parecidas á ¡as de las 'Vi-
ruelas , , que sobre'Vie~en alg~nas 'Ve-
ces en la inoculacion de la 'Va&tma....... 9:C
CAP. VI. Continua.cion de la propagacion
de la 'Vactma en Inglaterra................ 98
LIBRO V.
XXXVII
CAP. JI. Propagacion de la 'Vacuna en ge-
neral...... ........................................... zx8
CAP. III. Propagacion de la 'Vacuna en
Ginebra y en 'el departamento de Le-
malz ........................................ ::....•... 1.26
CAP. IV. Progresos de la 'Vacunacion en
París ~ y "elacion hecha á la ju~ta mé-
dica~ ............................................... :.. Z5~
CAP. v. Establecimimto de la vacuna e1l
Jl.heims .......... , ................................... z5 I
LIBRO l.
LIBRO Il.
LIBRO IIl.
LIBRO IV.
.' "
DE LA
INOCU~ACION DE LA V ACUNA.
§. lo
PARTE PRIMERA.
Como los resultados de los experimentos so'
bre la vacuna son demasiado importantes, y
sobre todo tan inesperados, que -deben pre-
sentarse por menor todas las circunstanclas re-
lativas á este gran descubrimiento, daré muc~a
extension á esta primera parte, cuyos objetos
se dividirán en varios libros y capítulos.
LIBRO I,
l. CAPITULO I,
/
®Biblioteca Nacional de Colombia
DE LA VACUNA. 13
güiente razonamiento tan sencillo en la ' apa~
nenCla.
Las personas que tocan las pústulas ó ul~
ce raciones de las vacas que padecen el cow~
pox enferman: tienen tambien pústulas, y
despues estan exentas .de .las viruelas, éUyos
ataques son tan temibles. Enterémonos de es-
te experimento: nevemos nuestros hijos entre
las vacas: hagámosles algunas pequeñas ind-
siónes en las manos , )y procure,mos que jugan~
do con las tetas de las vacas infectadas, con-
traigan una enfermedad que los libre despues
del contagio de las viruelas.
Ni aun el instinto maternal pudo elevar~
se á este pensamiento fecundo y saludable; y
el singular efecto de la vacuna )hubiera per-,
manecido largo tiempo estéril ¡ sUa casualidad
no hubiese hecho ·á Mr. Jennet; , su testigo y
observador. Este acontecimiento sucedió par:J
bien de la humanidad; y desde esta memora"';
ble épóca buscar el orígen del cowpox, confir7
mar el efecto preservativo de la vacuna, y.
conducirse á gene'ralizar y á utilizar, su uso
por una serie de experimentos y observacio~
nes exactas, fuéron los primeros pasos de est~
observador, de este hombre bienhechor, 4
quien la posteridad reconocerá cOmO destruc-
CAPITULO n.
Opinion de Jmner sobre el orígen del cowpox.
24 DE LA IN:OCULACION
fluente ' ó algun accidente mortal, ni el de
volver á contagiarse.
- El Dr. Jenner en una nueva disertacion
ha persi~tido en su opinion sobre el orígen del
cowpox, pero sin apoyarla con pruebas expe-
rimentales. El pasage siguiente de una(diserta- _
cion de Mr. Pearson me parece nos obliga á
/ mirar el cowpox, á lo menos hasta que nos l1a-
ya ilustrado la observacion, como una enfer-
medad constitucional. ,; Las viruelas en las va-
"cas se manifiestan espontán~amente en las' Vil·
"cadas ,en el mes de mayo, y algunas veces
"tambien en otoño y en invierno." La mayor
parte de los médicos y cirujanos con quienes
he seguido correspondencia sobre este objeto,
las miran como independientes del gabarro.
Mr. 'Woodmas, cirujano de AJlesburJ, es el
único' que sigue sobre 'este punto la opioion de
Mr. Jenner: opinion que en todo lo demas está
generalmente recibida en el pais, y aun entre
los ganaderos inmediatos á Londres. Pero yo he
hallado que el cowpox se ha manifestado en
muchas haciendas, sin qUfl en la vacada se ha-
ya introducido nuevamente ninguna 'bestia,
sin· que ninguna' de las-personas empleadas en
ordeñarlas, se ~aya acercado á los cabalIos, y
SIn qqe haya habido caballo alguno en la ha-
CAPITULO 111.
Obser'Vacion 11.
Obser'Vact"on V.
CAPITULO IV.
, Obs~r'Vadon III.
Obser'Vacion IV,
• J
LIBRO n.
.
~ l ....
EN .INGL-ATERR¡\..
( ' I • t \ • '1
ti. , J f.
' " t
CAPITULO I.
I '1'
De ' los diferentes modos 'Con -que JU~ reéibiílo el
descubrimiento de' la :.vacuna j 'parte de un l
_, : '
"
CAPITULO n.
De algunas obser7)aciones hechas en difermtes
condados que co/!ftrman tambien las ,
de Jenner.
46 DE, LA INOCULACION
militares, me dixo uno de ellos, .qpe sabia pox;
vm. que las viruelas de las vacas, 'que eran en·
démicas en e.1 condado de Glocester. preser-
~aban de las viruelas ordinarias. Deseoso de
'i nstruirme de este hecho, me informé con mu-
cho cuidado, luego que las circul!.stancias me
traxéron á este condado; y estoy convencido,
que en efecto se observa el cowpox, y pU9do
asegurar que las personas en quienes no babia
producido efecto mi inoculacion, han debido
's u preservacion al haber padecido anterior-
=
mente esta afecdon. Dr. I?arke, Cirujano. ·
. Carta IL
Carta, 111.
CAPITULO lII.
· V
Caso primero.
Casó tercero.
Scgtmdo hecho.
Tercer hecho.
Quarto hecho.
LIBRO IlI.
6o DE LA INoct1LACION
modo riguroso con que se han practicado 10$
hech~s é indagaciones que no tienen relacion
directa con el efecto preservativo de la vacuna,
me ha obligado á incluiJ;las aquí, para hacer,
las mas apreciables: por 10 qual he creido de-
ber 'juntar en un capítulo separado muchas
observaciones y fenómenos fisiológicos, que
sin ser agenos de las verdades fundamenta}es
establecidas por las indagaciones sobre la va-
cuna I podian sin embargo separarse de ella
con ventaja, y presentarse como accesorios mas
ó menos interesantes del principal objeto.
CAPITULO l.
Primer hecho.
Tercer hecho.
Por mas benignas que hayan sido las vi·
ruelas de las vacas en el cuerpo humano, CCln
tal que se hayan manifestado ' antes del mo·
mento de exponerse al, contagio de las virue-
las ordinarias, conservan siempre aquellas su
propiedad de precaver completamente de esta's.
Isabel Wyll11C habia padecido las viruelas ,
de las vacas á la edad de 19 años, pero tan
CAPITULO II.
CAPIITULO JII.
CAPITULO IV.
,
De algunos resultados que se Izan confirmadrJ
jPor eXjPerir.nentos ulteriores.
,
Primer afoiismo.
Segundo aforismo .
., ,
~
-, •
CAPITULO l. .1
Hccno primero.'
¡
76 DE · LA INOCULACJON
/ Segundo hec71~.
CAPITULO n.
Experimentos d~ Wood'ViJ/e sobre la un ion del
'Vírus' 'Varioloso con el humor de la 'Vacuna,
J del desarrollo simultáneo de ambas
'Viruelas.
Segundo hecho.
CAPITULO nI.
CAPITULO IV.
CAPITULO V.
I
. 100 DE LA INOCULACTON
graciado olvido ha sido para muchos paises del
globo, á que hemos llevado las viruel as, la
cau§a de un azote, cuyos gérJ1lenes debemos
apresurarnos á destruir por la introduccion re-
paradora de la vacuna, si nuestros corazones
no estan enteramente corrompidos y cerrados
para siempre á la voz de la justicia y de la
hu~anidad l. l.
En cumplimiento de las ,órdenes del go-
·1 Hace algunos meses que fui á suplicar al C. F our-
cr'!:l' me suministrase algunas ideas 'para la composicion de
una memoria sobre el plan detallado dd Mzmo de la So-
ci"dad de los observadores del homb~e, que el Capitan
Baudin pidió á esta Sociedad antes de partirse al via-
ge filosófico y científico, á que el gobierno frances le ha
comisionado. I
•
®Biblioteca Nacional de Colombia
1o ~ DE LA INÓCULACION
en las Indias los Bracmanes, baxando todas las
primaveras desde las montañas para iñocul~r,
en el nombre de Dios de misericordia que ellos
ador,a n. á los que no han tenido las viruelas:
del mismo modo lográron los misioneros Jesui-
tas del Brasil y del Paraguay arrancar por me-
dio de la inoculacion inum,e rables víctimas á
esta enfermedad que los Europeos les lle..,á-
ron, y que desolaban á aquellos desgraciados
paises.
U n conjunto de circunstancias felices han
'coMribuido á propagar la vacuna en la Gran
Bretaña; y en el dia no solo se llSa ya en las
ciudades grandes, donde los inventos y prácti-
cas nuevas hallan ordinariamente mejor acogi-
da, sino tambien en las campiñas y entre las úl-
timas clases de la sociedad, que son los que mas
tardan en participar del beneficio de los ade-
lantamientos mas recientes.
En la actualidad el número de vacunados
en Inglaterra podrá ascender á mas de cincuen-
ta mil personas de a~bos' sexos, de todas eda~
des, 'y con quantas circunstancias y variaciones
pueden ocurrir en la vida, sin que jamas se ha-
ya visto faltar la virtud preservativa de la va-
cuna, á pesar de que se 'han sujetado por 10
menos una tercera parte de ellos á los experi-
•
®Biblioteca Nacional de Colombia
p ' DE LA VACUNA. 103
,mentos en tontrario , y de que muchos de los
otros ,.acunados se han expuesto en medio de
lots epidemias variol~sas.
En tan considerable número de vacunados
como ha habido en Inglaterra, solo ha pereci-
do un niño en el hospital de Mr. Woodville,
y este por la falta de exactitud y defecto de los
experimentos de este profesor, como lo heÍllos
demostrado ya. ¿ Pero acaso la muerte de este
niño debe atribuirse á la vacuna? ¿Y podrémos
convenir en que la idea de una sola víctima
sacrificada por esta enfermedad deberá ser'v,ir
de objecion Lvista de sus inmensas ventajas?
Una reflexlon imparcial responderá á esta qües-
tion: voy á presentarla del mismo modo que la
ha publicado mi concolega y amigo Biman.
"Hemo~ visto que Mr. Woodville, médico de _
"un hospital de inoculados, viviendo por con-
" siguiente siempre en una atmósfera vario 10-
"sa, y formando él mismo un hogar contagio-
"so, observaba freqiientemente -en su hospital
"erupciones variolosas entre sus vacunados.
"Por otra parte este médico convino, luego
" que llegó á Paris, en que era muy cierto que
"estos niños habian adquirido las viruelas en
"su hospital, y que tal vez él mismo habia si-
"do quien les ' habia comunicado el contagio.
LIBRO V.
CAPITULO l.
I~ I 2 DE ' L~ INOCULACION
cion quando debería proclamar su triunfo" y
reconocer solemnemente sus saludables resul-
tados.
" Entre las diferentes partes del globo, en
,donde se recibió mas bien la inoculacion,Jué-
·ron desde luego muchos parages de Ami rica
,y Europa. La memori'a de la Condamine hizo
que directamente, y casi sin dificultad alguna,
.se estableciese la ihoculacíon en Suecia, Dj~a
i1llarca y Noruega. Troltchin introduxo la in-
;O.culacion en Ginebra su patria" quando. esta
práctica es.taba aun limitada en Europa á solas
hs "islas Br:itánicas. Hallet: y Bernouill, Ja hi~
ciéron penetrar' en Suiza y .en otros muchos
lugares, en dond~ la memoJia que en 17 S4-
publicó la 'Condamine, próduxo un buen efec-
10,: contra el qual se op\l'siérpn-, aup. mucho
tiempo desp.ue~ ,infinitos obstácul.os en la patria
de este distingu'¡d.o sabio.
En esta parte , de la Francia, patria de la
Condamine, se (¡onoció la inoculacion casi al
mismo tiempo que en Inglaterra; pero se prac-
ticó poco, y esto en medio de todos los obstá-
culos que podian ponerle muchas y poderosas
preocu paciones.
El autor de una obra intitulada Medicina
te..ol6gica '. y Hcequet en su d}sertacion p~bli-
CAPITULO n.
Propagacion de la 'Vacuna en general. I
CAPITULO nI.
Propagacion de -¡a 'Vacuna en Ginebra y en el
. departamento de Leman. ,
1 32 DE LA INOCULACION
brimiento, que se ha practicado desde media-
~os de mayo hasta setiembre con el mas fe-
liz éxito en cerca de ochocientas personas, de
las quales ninguna, á pesar qe la actividad de
la epidemia rey nante , ha sido afectada del
contagio.
El Dr. Odier ha hecho conocer los feli-
ces resultados de las difer.entes .vacunaciones
en Ginebra, por una instruccion que formó .' y
cuyo extracto el Prefecto del departamento de
Leman procuró hacer repartir por todo el
distrito. con el fin ~e fácilitar la propagacion
de la benéfica y saludable vacuna.
CAPITULO IV.
Segundo caso.
Tercer caso.
A. P elletier, de 7 año~ de edad, constitu-
cíon delicada, cútis blanca y suave, pelo y ce-
jas rubias, habia padecido una ligera afeccion
escorbútica en las encías, y algunos dias antes
tuvo algunos accesos de calentura; pero en
esta época gozaba de buena salud. En 21 de
agosto se le inoculó la vacuna de la manera
misma que á los dos niños anteriores. Al dia .
tercero se presentó un granito sobre el sitio de
la insercion, pero desapareció al siguiente: es
dudable que haya sido producido por la in-
oculacion, porque solamente se manifestó una
ligera irritacion al rededor de la pústula el día
·25 : esta rubicundez se desvaneció al 26, Y
al 27 se le inoculó segunda vez, sin que re-
sultase ningun efecto.
Este diario se ha extraido del excelente
discurso preliminar de la traduccion francesa
/
®Biblioteca Nacional de Colombia
DE LA VXCUNA. 149
nota. Este mal local le parece ageno de toda
especie de infeccion variolosa, y que ha sido
producido por el efecto de la cisura hecha en
la cútis, de la qual ha ' dimanado el grano Re-
monoso, y la supuracion que sobrevino; que
la materia variolosa que se habia inxerido se
quedó depositada en la parte, de donde ha
podido extraerse otra vez con toda su "activi-
dad; y finalm"ente, que no ha vuelto á ver es-
ta 'afeccion local, despues que ha empleado el
pus vacunal , ni tampoco mas illfeccion vario-
losa, sino en el nbjo á qu ien se hab ia inocula-
do dos ailos despues de haber pasado esta en-
fermedad d~ la manera mas constante, 10 que
atribúye ·á 10 benéfico de esta nueva práctica.
Añade la junta que despues del aviso da-
do por su última nota, ha hecho en dos niños
el ensayo con la materia extraida de los qua-
tro sugetos vacunados, que del mismo modo
que el citado Blondeau han sufrido en la¡rein-
ocuJacion de las viruelas un mal local en al-
gunas de sus picaduras, y que de esta inocu-
lacion' no resultó sirio una liger;t inflamacion,
que en pocos dias se disipó. Hasta el dia el re-
sultado de los experimentos hechos por la jun-
ta comisionada, es t, inoculados con' la vacuna
doscientos: niños vacunados qu,e.;e..sQmetiéron
CAPITULO V.
LIBRO l.
CAPlTULQ l.
/'
CAPITULO II.
, r 11
Prepa#'acion.
CAPITULO III.
. 'CAPITULO · ÍV.í~ .
. I!:~ J .'. ~ i
• lit ••
J . ~ ~.
'-
Descripcion de la vacuna.
~ f; ~ .. .., t It,
.1(, .L .. .o.
;;;?d
Madres demasiado s~nS:iBles, y c~yaclciega ~ ......
ternura -desea q:jbertar ás'u's -adorados' hrijos de Ctl
- una muy ligera herida que asegura su vida) qú~ \~"' Y~.)
~'t
.
es 1a vuéstra' mIsma, la •·fiJalltfopla
r·· , y 1a "a11115- ... ........
CAPITULO II.
208 DE LA INOCULACION
tiva; y despues de la época en que el Dr. In-
gles tuvo !!sta opinion, han comprobado ·mu
chas observaciones, que la calentura no es un
fenómeno esencial de la vacuna.
Quando este síntoma, que se puede mirar·
como accesorio, se manifiesta, su aparicioll no es'
regular; pues tan presto se verifica hácia el
quinto ó sextp dia como al octavo: viel1e aco n-"
pañada de laxitud, y dolorés de riñones y ¿a_o
beza: sin embargo, entre los vacunad0s~ cuya
grave alteracion les obliga á guardar la cama,
y aun entre los niños solamente se observa un
poco d~ palidez, agitacion y mal humor. Mr.
W oodville y otros prácticos han observado al-
gunas convulsiones; pero esto .ha sido entre las.
personas qu'e ya las padecian .antes de ser va-
cunadas. "
Los otrqs fenómenos secundarios de la va . .
cuna se manifiestan sobre diferentes puntos
del órgano de la cútis, y manifiestan 'lma va-
riadon " ' y una nueva modificacion vital e'n
ella. Sus o"principales fenómenos son la ex-
tension irregular de la areola, la inflamacion
del brazo, y ,diferentes erup.ciones sobre 'lás ·
quales nos ·falta todavia adquirir muchos co· ·
\ ., .
nOClmlentos. "
La areola que ordinariamente rodea el
CAPíTULO IIl.
"
.. De la 'Vacuna bastarda 6 falsa.
DE LA VACUNA. iI7
hasé del tumor' ó grano vacunal.', Si acaso se
halla alguna tension al rededor de la lbga, es
irregular y superficial, y así este ,grano no de-
xá cicatri:z; alguna, sino solamente una mancha
en la cútis. Sin embargo de que la costra se
ha formado tan desde luego, no por eso cae
mas presto que la de la verdadera vacuna, .pre-
~entándose algunas veces con .el mismo aspec-
to que la de esta con solo la diferencia de ser
menos larga y gruesa.
, La 2 ~ 'especie de falsa vacuna es la que
se ha dicho sobreviene de resultas de una ir-
r-itacion en el sitio de las picad~lfas hechas pa-
ra la vacunadop'. la qual no' ,se observa sino
quando se h~j v~<;uiíado . á un ,s ugeto que no
habiendo padecido ..rum las ;viruelas ordinarias
se ha empleado e1,pus. vacuria-l' se;C_Q qpe¡ se. h.a
elld)'u.ecidó 'entre' ias :.hilas ó sobre ·la ¡¡luceta;
;¡dquiriendo una!cousistencia sóLida y forma v,Í~
trea. En estos'·dos casos así , las hilas , como - el
pu.s_vacuna1 ) oorao::' al prihcipjor.como cuerpos·
. extraños, ,y lue.go , co h~inuaú SllS 'efe¡:tos seme-
jantes á los de~ humor vacnnaLfresco. La ac-
c{on que deter.minan en ·la parte que los ha
recibido es doplé p pues depende primeramen-
te de la dureza de la hila . de la solidez y for-
m'.l vítrea del pus vac.u nal, y lllego de la ác-
CAPITULO IV.
co de contagio.
Segun esto se pue- Si se hubiesen in-
de juzgar hasta qué oculado otros muchos
punto se debe contar niños, hubiéramos vis-
sQbre la 1noculacion to el mismo resultado;
de la vacuna, y qué porque la incision en
grado de confianza se -que ~e depositó el ví-
deberá con.ceder á sus rus varioloso en 'el
partidarios. .~ R u b'10, debe mI-
Dlno l.
rarse por todo médico
instruido como un fo-
co y un reservatorio
en que estuvo conser-
vado el vírus.
Por lo que á tní La conclusion del
toca; vuelvo á decir, inoculador es tan exac-
no habrá nada que me ta como su razona-
pueda obligár á set;- miento, y un hecho
virme de un ·vírus des- lo va á probar. De-
conocido en F~anci~, ' seando los individuos
siendo de igual sentir de la junta médica
los profesores dé V e~ convencer á MM. ,
terina ría ; y mientras Goetz y Salmade, in-
tanto qtie no vea ha- ocu1áron con el vírus
cer los experimentos varioloso á muchos
con el cowpox sacado niños "que habian pa-
directamente de los sado las' viruelas de la
. .) LIBRO III.
I
, CAPITULO L
. ,, :primer heche¡.
" " -, )
Tercer hecho.
Quarto hecho.
Quinto' hecho.
CAPITULO n.
De las 'Ventaj as de la 'Vacuna para la es-
p ecie I.lUtllttna , J de que este solo medio lit liberta
para siempre de los destrozos de las
'Viruelas.
I
RrL6S0FO.
, sENollA ••
FIL6s0FO.
SEN'O:RA.
"
FlLÓsol<'O.
SERoltA.
S 2
• 1
FILÓSOFO.
SENollA.
matura. 1
. ..
entonces en la carrera de la vida, á cuya en-
trada parecia deber atajarles una muerte pre- I#~
,....',..., ..
, . :~... ,,~""Ú'
'¿ff . "~'~
. ," ~L
. ,
"~ ,..¡.~ ~;
JI ce ' ", ~"
I Estos hechos citados por el jóven fil6sofo no so~~ v ~ ;"
" '
.enomenos . Id
als ' 1ares. y cuya exp l"¡CaCIOn no ~;¡¿, BOUO
a os e' ¡rregu
· a, una gran I
tIe pue da re fcenr ey ed orgamzaclOn, ~ (f'R.'/las '
nuestra "
porque deben record ar á los fisiologistas y prácticos ilus- ~
trados: 1.0 los efectos felic~s de ~n movimiento febril en
algunos casos de enfermedades crónicas que Boerhaa'DI
ha ~xpresado en este aforismo: Feb,.¡s s~P( sanationis op-'
tima cafua • y que el e, Dumas ha exa¡ñinado con gran
sagacidad en una memoria premiada en 1781 por la an-
tigua Real Sociedad de Medicina: 2.0 la accion general
de los irritantes d~ la cútis. como los sinapismos. los 'D(-
R.'igatorios y aun la /no.va, en un gran número de afec-
. ciones enfermizas por causa de debilidad ó de irregulari-
dad de la accion nerviosa; y la influenc,ia de la aparicion
SERoRA.
.
CONTiNUACION
. DE LAS VENTAJAS DE LA VA-
CUNA COMPARADAS CON LAS DE LAS VIRUELAS
it. . ~
SERollA.
I SERo¡l.A.
,.
~
. FIL6s0FO • .
. \
FIL6s0FO.
. SESORA.
FIL6s0FO. e (. ,
,1
SERoRA.
SENoRA.
FIL6s0FO.
Pt"imcr lucho.
manchas y cicatrices
- .
QUi1ZtO hecho. , . .J
mente semejantes á
los que se presentáron
en las picaduras, en
la cabecita, cara y nal-
gas. Los síntomas fué-
ron aumentándose has-
ta. el 1 8 ; Y por' dic-
támenrde varios vacu-
-nadores, á quienes con-
sultáren ,se le 'aplicá-
ron deis veces 10~ ve-
xiga!orios. El dia 21
le sobreviniéron deH..
rios 'y convuhiones \
que ,acabáron con su -
vida al dia siguiente,
habiéndl?se conserva-
do casi siempre el mis-
mo grosor de los gra- ,1
nos.
Sexto lucho.
se hizo sofocante; y
no pudiendo ya respi.
rar, se ahogó. Tal es la
expresion de los padres
. I
y asistentes '; y os ase-
guro, ciudadanos, que I
1,
no ha habido en este su-
ceso desgraciado -nia·
gun defecto que pueda
~tribuirse á persona al·
guna, sino á la misma
vacunacion. Este niño
gozaba de la mas be·
11a sal ud, no padecia
, usagre ni erupcion al·
guna, de modo que
jamas habrá vacunado
la junta un sugeto mas
bello y sano. En fin,
por expresarme con )
las mismas voces de
sus padres, diré que
ellos hubieran puesto
todos sus bienes en ca-
beza de este niño: que·
\
riéndome dar una idea
de.1o sucedido me hi-
ciéron ver á una de
sus hermanas; y efec-
tivamente no he visto
nunca un su geto me-
jor constituido. Tam-
poco podemos acusar
al vacunador, porque
en nombrándole esta--
r.eis seguros de que el
l·
niño. ha estado baxo
la direcdon de un
profesor que reune la .
prudencia con sus 'ta-
lePtosO, y qu~ ' no · es
novicio en los experi-
mentos sobre 'la va-
cuna.
No me detendré mas tiempo en el exámen
de los perjuidos de l ~ vacuna; porque los que
n@ estuvieren bastante convencidos por las
respuestas que he dado á los fenómenos que
Mr. Baume presenta alterados ' y desfigurados,
con solo el fin de hacer objeciones, pueden
consultar en el número del mes de abril del
qiario ~e Medicina por los ciudadanos ¡~ Rou.-r.
CAPITULO V. ! "
; ,.
Continuacion del exámen de las objecionu dí-
rígidas contra la 'Vacun~ : , ardi~es J conductt!
industriosa de Un célebre
, " inoculador.
¡ , , r
Los acontecimier\tos desgraciados sobre que
apoya sus reclamaciones Mr. Baume " laeÍlr
fermedad ert!ptiva de la niña Crosmier , y otros
múchos' hechos inventados, y 'desnaturalizados, '
nada prueban! contra la benignidad y certr-
dumbre del 'efecto preservativo de la vacun~. '
'CSerán ,¡¡caso, mas 'felices los opositores en, lo
$l1cesivo? ¿Llegará en fin.,}In: día <enoque ulte" .
He',p;ocurado reunir,. ~
ordenar ~'ó§~;~inci
pa1es resultados de los ,e.x'perimentos, de ,la va-
cuna; y.sin embargQ ~e~ ,esta cole¡:G\on de he-
chos tán numerosos y .w;riados, qu~dail} . ªpn
por decidirse muchas -,qiiestiones iIitefesantes;
y aurique riada aume.nten la certiduITIbre del
efecto: preservativo de la vacuna; 4,a.s ,nuevas
indagaciones y ensayo~ que se haga!! ~ s@ryirán
para enriqueéer la ciencia médica c@,n .o,luclps
verdade¡ ' i~portantes." .• .J " ",; , .
X~
Pt:imera qiiestion.
¿ Se puede determinar la época fixa y
cierta' de-l 10TÍgen de ,la vacuna? ¿ quál será la
causa:prtmitiva del có'Wpox? ¿ es solo Glocest,er '
el 'único {ugar del glóbo en que esta enfer-
medad 'parece indígena" y su transmision de
la vaca a~ "'hombre no ~Jrece un fenómeno, de
cuya ' naturaleza nos podríamos instf1;1ir, por
compa-raciones de la patología comparada,
qua'ndo ' esta ciencia, l!O menos útil Y' fecunda
en' resiül'aQos que la anat omía de -los íanim;l-
les, haya hecho algunos progresos? '
Segunda qüestion.
¿ Podríamos sujetar á diferentes analisis el
,-Írus vacunal sin exigir demasiado á la quí-
mica, y sin desconocer las leyés de la vida y ,
las de afinidad? ¿ perderia él sus propiedades
mezclándolo con .difer.entes ácidos? la luz cu-
ya influencia en muchas circunstancias parece
tiene un 'influxo químico muy notable, ¿ nQ
podda alterar y destruir estas mismas propie-
dades del pus vacunal, si los vidrios entre
los quales se conserva no estan bien cerrados y
en parageobscuro? ~ atIernas ¿ los otn;>s agen-
tes qUÍ,micos no causarian algun efecto en el
vÍrus v.acunal? ¿ Y sL se sometiese al ,e xpe ri-
mento mismo que hizo Cruickshank",s,obre el
pus varioloso, perderia Sll principal propie-
dad? t J'. ,,[
1 Vé~se el capítulo sobre la, conservacion de la va- /
cuna.
2 Cruiclshank inoculó !Í tres soldados en el brazo iz-
ctuierdo con el pus ' que expuso. du·rante al gÚllos minut os,
á una corriente del gas ácid.o muriático oxí'genado. Eu el
brazo derecho los inoculó ~o n el p us solamente. Las pri-
meras incisiones no tu viéron efecto alguno ; pe rb las del
brazo derecho lo p roduxéron muy grande. E ste expe ri .
mento se ha vuelto á repetir, y si~mpre ha dado el mismo
resultado.
Tercera qüestion.
Quarta qüestion.
" .
Los beneficios de la vacuna i podrán ex-
tenderse hasta en los animales, y libertar, por
exemplo ~ á los carneros de la morríí~i, enfer-
medad t an contagiosa y mortífer.a, y cuya na-
tural e,z4,parece tener alguna analogía con las
viruelas ? !)or otro lado , ¿el estí~ulo que cau-
Quinta qt"iestion.
Sexta qüestion. .
CAlUTULO n.
Adicion al ar,tículo relati-vo ' al orígen
de la -vacuna:";
Otro extracto.
CAPITULO IV.
. §. l ..
§. IIl.
I
De do:r 'Vacunaciones hechas, una en un caso
\ .
de oftalmia escrofu/osa, )' la otra sobre
una superJicie herpética. .
§. IV.
§. V.
I ¿
DE LA VACUNA'3S9
inento~, y propagado sus efectos benéficos, no
siendo una sola provincia de Inglaterra" todo
este teyno y la Europa entera las únicas par-
tes que la' vacuna ha libertado de los desa~:
tres que causan las viruelas, sino que tambien
participan Je: este bendido otras regiones mas
remotas'; y sin embargo se presentan oposicio-
nes á esta útil propagadon, y á pesar de los
experimentos mas decisivos, 'permanecen aun
las dudas é incertidumbre', La calumnia, ig-
norancia y pérfidos .rodeos hacen que se des~
precie una mano benéfiéa, que caiga la ciuda<;l
de Ginebra en una consteníacion general por
la muerte de uno de sus mas amados ciudada-
nos 1, Por otra parte quedan aislados y esparci-
dos muchos hechos interesantes, se' olvidan los'
servidos distinguidos y o'bsequiosos de un fi-
se
lantropo', satiriza á unos ciudadanos útiles
'y generosos, quedando impunes los miserables
reos de lesa hbmanidad: ¿qué deberá hacerse
en circunstancias en que objetos tan diversos.
..
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