Recuperar La Energia Del Cuerpo
Recuperar La Energia Del Cuerpo
Recuperar La Energia Del Cuerpo
Ejercicios Hipopresivos
Suelta todo el aire, vaciando los pulmones y bloquea la entrada de aire por la nariz y
por la boca.
Ahora haz como si quisieras realizar una inspiración pero sin tomar aire, dejando
que las costillas se abran y sintiendo cómo el abdomen se mete hacia dentro.
Pueden realizarse también sin apnea, o lo que es lo mismo, respirando normalmente, pero la
ventaja de realizarlos en apnea es que se potencian los efectos beneficiosos de los
ejercicios hipopresivos.
Conclusión
Los ejercicios hipopresivos son indispensables para la activación de la musculatura que nos
protege de las alteraciones en la espalda, del suelo pélvico y del diafragma.
El vacío durante los hipopresivos disminuye la presión en el abdomen y las tensiones,
relajánte y ejercitándote al mismo tiempo.
El concepto Hipopresivo, hace alusión a la escasez de presión o disminución de la presión
intraabdominal.
2. Principios técnicos
Existen una serie de signos anatómicos asociados a la correcta ejecución técnica y que
delatan el efecto hipopresivo como son: abertura del arco costal, movilización del ombligo
hacia dentro (figura 2) y hendidura en las fosas claviculares (figura 3).
Cada postura articular incluida en los ejercicios ha sido diseñada para facilitar la acción
hipopresiva y poder ejercitarse al máximo de las posibilidades articulares.
Los ejercicios se realizan con un ritmo lento y respiración pautada por el terapeuta o
monitor. Las posturas se repiten un máximo de tres veces con una duración mínima de sesión
entre veinte minutos y una hora según objetivo a alcanzar.
3. Errores más comunes
Esto provocaría el efecto visual tan llamativo del hundimiento abdominal mucho más
pronunciado que una maniobra de contracción abdominal.
Otra hipótesis planteada sobre la mala interpretación en la técnica es la observación de
vídeos, imágenes o incluso lecturas sobre la temática que llevan a los usuarios o técnicos a
practicar en casa o en el centro deportivo el ejercicio sin supervisión o formación previa.
Será fundamental por parte del técnico incidir en el aprendizaje de los fundamentos técnicos
y metodología para asentar los fundamentos del método desde la iniciación.
En este sentido, las descripciones erróneas o descuidos metodológicos pueden llevar a una
mala praxis de los practicantes.
Relájate antes de empezar: para concentrar bien la respiración es importante estar bien
relajado.
Así que antes de empezar respira profundamente unas 10 veces.
No tengas prisa: seguramente no domines los tres tipos distintos de respiraciones, por eso te
aconsejo tomártelo con calma e ir aprendiendo poco a poco.
La postura es:
Sentado, con la espalda bien recta- como se te tironearan del centro de la cabeza-
Acostado, ideal, con un suplemento en la cintura y nuca, para lograr la espalda bien recta.
1. Si vas al piso, coloca la esterilla o colchoneta en el suelo y túmbate boca arriba. Si lo haces
sentada, encontra la posición correcta.
2. Ahora intenta relajarte unos segundos antes de realizar la primera respiración.
3. Sitúa una mano sobre el esternón y toma aire por la nariz, luego vas soltándolo poco a poco.
4. Esta es la respiración torácica.
5. Vuelve a relajarte antes de comenzar la segunda respiración.
6. Pon las manos sobre las costillas, hacia los lados. Ahora toma aire por la nariz como si
trataras de abrir las costillas y luego suéltalo progresivamente. Esta es la respiración costal.
7. Por último, la respiración abdominal. Emplaza una mano por debajo del ombligo y vuelve a
tomar aire por la nariz. Acto seguido, vas soltándolo mientras notas como se va hinchando el
abdomen.
8. Ya has aprendido las tres maneras distintas de respirar.
LA GIMNASIA HIPOPRESIVA REEDUCA LA RESPIRACIÓN
Las personas que no están acostumbradas a practicar disciplinas donde la respiración es un
punto fundamental, como la gimnasia hipopresiva o el yoga, es normal que respiren de forma
errónea.
El principal fallo es tomar aire con la boca y volver a echarlo por la boca.
Gracias a esta disciplina conseguirás reeducar la respiración y notarás mejoras considerables
en el organismo, como por ejemplo un aumento de la capacidad pulmonar.
La clave del método hipopresivo: la reprogramación
La musculatura de la faja abdominal y del suelo pélvico está diseñada para ejercer de sostén
de los órganos situados en la cavidad que envuelven.
En la vida cotidiana se producen constantes aumentos de la presión abdominal: al toser,
gritar, reír, cantar, cargar pesos, mantener relaciones sexuales, practicar deporte, etc.
Debido a estos y otros factores, como la inactividad, los embarazos o la menopausia,
esta faja abdominal y la musculatura perineal pueden verse afectadas y dejar de realizar
correctamente sus funciones de sujeción.
Con los ejercicios hipopresivos podemos devolver esta función reprogramando la respuesta
muscular ante las situaciones de aumentos de presión del día a día.
Asimismo, se puede mejorar la respuesta muscular ante los aumentos de presión puntuales,
ya que incrementa el soporte central ante las actividades que demandan fuerza.
La postura. No debes decuidar la postura. Al principio puede parecer difícil, pero con
la práctica vas a adquirir todos los detalles de los ejercicios. Atento a cómo colocas
brazos, hombros, cadera y rodillas.
La incomodidad es parte de los ejercicios, ya que estás activando músculos que no
acostumbras a utilizar.
Usa ropa confortable
Busca un espacio en el cual realizar los ejercicios, que incluya una colchoneta o una
alfombra en las posturas en las que debes acostarte en el suelo.
No hagas ejercicios hipopresivos si vas a comer o dormir. Preferiblemente escoge
realizar los hipopresivos temprano, por la mañana.
Si no te sientes cómodo con un ejercicio determinado del método hipopresivo, busca
variantes. Hay ejercicios con herramientas especiales, ejercicios en parejas,...
1. De rodillas sobre una colchoneta, alfombra o el suelo con una almohada para proteger
las rodillas. La cadera debe estar alineada con las rodillas
2. Manos apoyadas en el suelo, intentando que las puntas de las manos se toquen entre
ellas.
3. Frente apoyada en el suelo, a la misma altura a la que se encuentran las manos.
4. Estira la columna.
5. Barbilla intenta tocar el pecho.
6. Separa los codos.
1. Acuéstate boca arriba, con rodillas extendidas y una pierna encima de la otra. Empuja
los talones como si te estiraran desde los pies.
2. Brazos por encima de tu cabeza, buscando el estiramiento de la columna. Intenta que
no toquen el suelo.
3. Lleva la barbilla al pecho.
Si bien hay una gran variedad de posiciones y posturas, Marco advierte que es importante no
tratar de hacerlas todas desde un inicio e ir evolucionando a medida que aumenta el estado
físico del cuerpo.
También hay otras posturas sencillas como la sedestación (sentado con las piernas dobladas)
o la genuflexión (arrodillado, inclinado con los antebrazos contra una pared), y otras más
avanzadas como la plancha.
Deberemos seguir haciéndolo solo con una sola pierna durante el tiempo que dura el
ejercicio y luego cambiaremos de extremidad.
Esto requiere un crujido en el torso, y trabaja efectivamente el núcleo abdominal, con el fin
de mantener el equilibrio mientras levantamos esa pierna.
Abdominales de pie – Paso diagonal
Este ejercicio es ideal para mejorar el equilibrio, la participación del flexor de la cadera, los
abdominales inferiores y los oblicuos.
Los beneficios de este ejercicio van más allá de simplemente tonificar nuestro núcleo
abdominal, pues involucra otras partes musculares como de la pierna.
Éste aumenta el ritmo cardíaco y las calorías quemadas, todo mientras que trabajamos los
abdominales oblicuos.
Si tenemos que parar y tomar un descanso, podemos hacerlo, pero nos debemos asegurar de
que los hacemos a la perfección.
Deberemos girar los dedos de la pierna izquierda, y luego llevaremos la rodilla izquierda
hasta el codo izquierdo.
Sentiremos cómo trabajamos principalmente los abdominales oblicuos, sin embargo,
nuestro núcleo también tiene que mantener la firmeza, siendo un ejercicio excelente para
ejercitar todo el cuerpo.
Fermentados
Kéfir
El kéfir es un alimento muy saludable y digestivo que deberías pensar en incluir en tu dieta.
Contiene menos lactosa que el yogur y es muy rico en fermentos vivos.
Para hacerlo en casa, debes adquirir el hongo del kéfir; éste hace la fermentación en 48h,
luego se cuela y se guarda en la nevera hasta la próxima vez. ¡Casi una mascota!
Yogur
El yogur, además de muy accesible para todos, es un alimento muy sano por su acción
probiótica; aunque hay que ver las etiquetas nutricionales para evitar algunos muy ricos en
azúcares o grasas, o aditivos.
El yogur se puede hacer en casa fácilmente, con o sin yogurtera. Si no tenéis, aquí os dejo la
receta:
– 1 litro de leche
– una col
– 1 litro de agua
– sal
Hay que trocear fina la col y colocarla en una olla donde se le añadir la sal, masajeando para
que se mezcle bien.
Se cierran bien los botes y se deja fermentar de 5-15 días de guardarlo en la nevera. Dura
unas dos semanas y es sanísimo como acompañamiento de pescados y carnes a la plancha;
combina bien con patatas hervidas.
Kombucha
La kombucha esta cogiendo más y más popularidad y esta en boga en el mundo de la
nutrición. En California se consume habitualmente, se sirve ya en restaurantes, hay bares
especializados en kombucha, se hacen fiestas donde se sirve este te fermentado, rico en
probióticos y de sabor peculiar.
Las burbujas y un muy muy bajo contenido en alcohol ha atraído la curiosidad de muchos
que ya lo preparan en casa.
Miso
El miso es una pasta producida con la fermentación de granos de soja y opcionalmente
mezclada con algunos cereales, como arroz o trigo. La palabra “miso” en japonés significa
“fuente de sabor”, y es que este alimento tiene un sabor fuerte pero agradable. Lo destacado
son sus numerosos beneficios: favorece el equilibrio de la flora intestinal, es alcalinizante,
calienta y tiene un gran poder antioxidante, además de ser rico en aminoácidos esenciales y
minerales y vitaminas.
El miso se añade a sopas, una cucharadita pequeña es suficiente para cambiar el sabor del
plato (añadir demasiado lo hace muy salado).
No hay que añadirlo cuando la sopa hierve ya que el calor destruiría las enzimas.
El miso ya se puede adquirir en muchos establecimientos especializados o no en comida
japonesa. No es muy recomendado para las personas con hipertensión.
Germinados
Preparación:
Cuece el arroz en agua con sal, escurre y deja enfriar (puedes hacerlo el día anterior).
Pica las verduras en cuadraditos y sofríelas en una sartén con un poquito de aceite de oliva.
Añade las setas. Cuando estén listas incorpora el arroz y saltéalo. Rectifica de sal y añade el
orégano y las hierbas provenzales.
Crema de aguacate y espinacas con langostinos
Ingredientes para 2 personas:
4 langostinos frescos 20 ml aceite de oliva
Preparación:
Pela los langostinos, retira la cabeza con cuidado y conserva las colas. Dora las cabezas en
una sartén con un poco de aceite. Retira del fuego y añade el aceite de oliva restante.
Parte el aguacate por la mitad a lo largo, rodeando el hueso y gira sobre sí mismo para
separar las 2 mitades. Ponlo boca abajo y córtalo en láminas.
Dora las láminas de aguacate en una plancha a fuego vivo y luego elabora la crema con las
espinacas, triturando ambas con la batidora. Reserva en la nevera.
Dora las colas de los langostinos en una sartén con una parte del aceite de saltear las cabezas.
Reserva. En la misma sartén saltea los ajos cortados por la mitad y los brotes de soja. Añade
la mostaza y retira del fuego.
Reparte el salteado en 2 platos hondos. Coloca encima los langostinos calientes y por último
rodea con la crema.
Nota: Cocinar el aguacate a la plancha unos segundos es la mejor forma de que la crema
tenga un color intenso. Haz lo mismo con las espinacas. El contenido en grasa del aguacate
facilita que la crema adquiera una textura cremosa. Si se prefiere más líquida, añade agua
fría embotellada.
Sandwich de pavo con brotes
Ingredientes para 2 personas:
4 rebanadas de pan con semillas 50 g de germinados de berros o rúcula
Preparación:
Pela y corta la cebolla en aros. Reserva. Lava y corta los tomates en rodajas. Reserva.
Unta las rebanadas de pan con la mostaza. Agrega las hojas de espinacas, las rodajas de
tomate, los germinados, la pechuga de pavo ahumada, el queso suizo y los aros de cebolla.
Tapa el sándwich con el resto de rebanadas. Sirve.
1. Alfalfa. Ésta es rica en enzimas, las cuales ayudan sobre todo a mejorar la digestión, por
lo que su consumo frecuente hará que tu organismo elimine restos de alimentos que no
necesita. Además de ello es muy bajo en calorías.
3. Rábano. Gracias a que tiene una gran concentración de clorofila, un compuesto que de
manera natural ayuda a eliminar toxinas y reduce la absorción de grasas por el organismo.
4. Trigo. De acuerdo con la Universidad de California, cuando éste se encuentra
germinado contiene menos gluten, difícil de digerir para muchas personas, por lo cual lo
hacen bueno para su salud. También ayuda a digerir de manera más rápida
los carbohidratos de otros alimentos.
Aunque generalmente los germinados que te ayudan a adelgazar suelen comerse crudos en
ensaladas, debes tener mucho cuidado de lavarlos y enjuagarlos bien, si te es posible puedes
hervirlos por un minuto para eliminar todas las bacterias.
El proceso es súper fácil! Solo hay 3 pasos importantes que debes recordar:
1. Remojar
2. Escurrir
3. Germinar
– Un kit para germinación como éste. (muy económico y te durará toda una vida)
– Un recipiente de vidrio de boca ancha como éste con una tapa germinadora. También
funciona una tela para hacer queso (como la que usé en las fotos), aunque después de hacer
muchos germinados finalmente me compré el kit. Es mucho más práctico tener un solo
recipiente para esta tarea, retira mejor el agua, y es reusable.
– Semillas específicamente para germinación. Muchas de las semillas que encontramos han
sido tratadas con calor y han perdido parte de su capacidad de germinar, o toda.
Preferentemente las semillas serán libres de GMOs (Organismos Genéticamente
Modificados), y orgánicas o ecológicas. En iherb puedes encontrar una gran cantidad de
semillas para germinar.
Antes de empezar, recuerda que los brotes son susceptibles al crecimiento de bacterias así
que es muy importante utilizar utensilios limpios. Es por eso que para mí es muy importante
invertir unos minutos en la cocina haciendo mis propios brotes, uno nunca sabe por donde
anduvieron los brotes que se encuentran en muchos supermercados. Una vez que hayas
terminado con el proceso de germinación, guarda tus brotes en un recipiente limpio en
el refrigerador y utilízalos dentro de unos días.
Coloca las semillas en tu recipiente de vidrio. Una cucharada a la vez es suficiente para
llenar mi recipiente de 1 litro y es todo lo que nos podemos comer en unos días en mi casa.
Si tienes un recipiente más grande o una familia más grande, coloca otra cucharada o dos.
Agrega 2 a 3 tazas de agua filtrada. Remoja tus semillas por 8 a 12 horas a temperatura
ambiente.
Escurre el agua utilizada para remojar a través de la tapa germinadora.
Agrega agua fresca y sacude el recipiente para que las semillas reciban un enjuague.
Escurre nuevamente el agua y repite el último procedimiento, enjuagando las semillas una
segunda vez.
Luego de que hayas retirado el agua, coloca tu kit germinador boca encima de un recipiente
profundo (ver foto), para eliminar toda el agua.
Deja tu kit germinador en esta posición a temperatura ambiente, evitando el directo contacto
con el sol pero asegurando que reciba al menos un poco de luz natural.
Necesitarás repetir este proceso al menos 2 veces al día, hasta que tus semillas empiecen a
brotar.
La mayoría de las semillas empezarán a brotar durante los primeros dos días y el proceso de
germinación terminará en unos 2 a 4 días. Los brotes están listos cuando veas los rabitos
verdes salir de las semillas.
Cuando los brotes están listos, enjuaga una última vez, asegurandote de retirar bien todo el
agua. Trata de colocar los brotes en un colador grande y dejarlos secar en un área iluminada
por el sol. Los brotes muy húmedos se pueden echar a perder. Luego de que estén secos,
colócalos en un recipiente de vidrio seco y guardalo en el refrigerador.
5.0 from 4 reviews
C O M O H A C ER G ER M IN A D O S Y BR O TE S C A S ER O S
IM P R IM IR
T IE M P O D E PR E P AR A C IÓ N
5 mins
T IE M P O D E C O C C IÓ N
48 horas
T IE M P O T O T A L
48 horas 5 mins
IN G R E D I E N TE S
Dieta Detox
Sugerencias detox
Comience cada comida principal con caldo o sopa de hortalizas con 1 cucharada de
salvado de trigo o avena, 1 cucharadita de levadura de cerveza en polvo y 1
cucharadita de germen de trigo.
Beba sin límite agua, soda, caldo light, infusiones sin azúcar. Coma gelatinas light a
discreción. Incorpore por lo menos dos litros y medio de agua al día.
Consuma abundante cantidad de frutas y hortalizas frescos y en jugos, licuados y
sopas.
Consuma cereales integrales (pan integral, arroz integral, masas integrales) y
legumbres.
Coma más pescado.
Consuma lácteos descremados.
Evite embutidos, chacinados, fiambres, manteca, mayonesa y frituras (por su excesivo
contenido en grasas).
Reduzca el consumo de sal. Use condimentos y hierbas para dar sabor a las comidas.
Tome té verde, de manzanilla, valeriana, tilo o cedrón para reemplazar al café.
Muévase más cada día: borre el ascensor de su mente, elija caminar o ir en bicicleta
para usar menos el auto, haga una actividad física de su agrado y conviértala en
hábito.
Día 1
Desayuno
1 vaso de licuado de frutilla y naranja sin azúcar
1 tostada de pan integral con queso blanco descremado
Media mañana
2 rodajas de melón
Almuerzo
Brótola al horno con cebolla, cebolla de verdeo y aji
Ensalada de remolacha y tomate
1 pomelo
Media tarde
1 banana chica
Merienda
1 vaso de jugo de pomelo y mandarina exprimidos sin azúcar
1 miñón integral con 1 feta de queso de máquina
Cena
Hamburguesa de soja
Ensalada de lechuga, rúcula y apio
1 pera en compota con canela
Día 2
Desayuno
Infusión con ½ taza de leche descremada
2 galletas de arroz con mermelada light
Media mañana
Postre de leche light con 4 almendras picadas
Almuerzo
Tomate relleno con atún, ají, cebolla y 4 aceitunas verdes
Ensalada de repollo blanco y zanahoria
1 manzana
Media tarde
Gelatina con trozos de frutas
Merienda
Infusión de té verde
1 tostado de pan integral con queso port salut light y orégano
Cena
Omellette de champignon (con 1 huevo y dos claras)
Ensalada de chaucha y choclo
2 kiwis
Día 3
Desayuno
1 vaso de licuado de manzana y naranja sin azúcar
3 galletitas light con ricota descremada
Media mañana
Yogur descremado con cereales sin azúcar y 1 cdita. de semillas de lino
Almuerzo
Pechuga de pollo a la plancha con limón
Zapallitos y berenjenas grilladas
2 ciruelas
Media tarde
3 orejones de duraznos
1 vaso de jugo de mandarina y naranja exprimidas sin azúcar
Merienda
3 galletitas de sésamo con queso port salut untable light
Cena
1 plato tamaño postre de fideos con salsa fileto
Brócoli y calabaza al vapor
Ensalada de frutas
Día 4
Desayuno
Infusión con ½ taza de leche descremada
2 tostadas de pan multicereal con dulce de leche light
Media mañana
Mousse de chocolate light con 2 mariposas de nuez picadas
Almuerzo
3 milanesas de berenjena con queso port salut light
Ensalada de pepino, tomate y zanahoria
1 racimo de uvas
Media tarde
2 duraznos chicos
Merienda
1 vaso de jugo de soja light
2 galletitas de pasas de uva y avena
Cena
Peceto al horno con cebolla y ají
Ensalada de rúcula, tomates cherry y hongos
Brochette de naranja y banana
Día 5
Desayuno
1 vaso de licuado de durazno y ananá en almíbar light
1 tostada de pan integral con manteca light
Media mañana
Yogur bebible descremado con frutas y 1 cda. de semillas de sésamo
Almuerzo
Merluza con vegetales al wok (zapallitos, brotes de soja, cebolla, ají, zanahoria)
1 rodaja de sandía
Media tarde
15 pistachos
Infusión de té verde
Merienda
3 tostadas de gluten con queso blanco descremado
Cena
Ensalada de arroz integral, lechuga, tomate, zanahoria, ají y apio
1 palito de helado de agua
Lo que no puede faltar
Te verde. Contiene catequinas, que ayudan a disminuir el riesgo de cáncer.
Hortalizas. Ricas en fibra, agua y nutrientes antioxidantes (vitamina C, betacarotenos,
licopeno, flavonoides).
Frutas. Tienen fibra, agua y nutrientes antioxidantes (vitamina C, betacarotenos,
licopeno, flavonoides).
Frutas secas. Aportan fibra, nutrientes antioxidantes como vitamina E y compuestos
fenólicos, y grasas insaturadas.
Cereales integrales y semillas. Fuentes en fibra y nutrientes antioxidante como
vitamina E.
Pescado. Carne de bajo contenido en grasas (principalmente saturadas) y rica en
omega 3 (destacado en los pescados grasos como atún, caballa, jurel, salmón, trucha).
¿Cuántas veces por semana consume pescado?
Detox de 3 dias
Al despertar
Desayuno
Almuerzo
Cena
Colaciones
Ingredientes:
2 ramas de apio
1 pepino
1 limón completo
5 rodajas de jengibre fresco
un bol de espinacas frescas
3 manzanas verdes
una cucharada sopera de perejil fresco
OTRO
Ingredientes:
1 zanahoria
3 ramas de apio
1 manzana verde
1 puñado de perejil
OTRO
Ingredientes:
2 tazas de espinacas (hoja lavada)
2 pepino,
3 tallo de apio
2 manzanas verdes
1 limón
Limonada:
ideal para comenzar el día alcalinizando y barriendo toxinas.
1 Limón
miel (azucar mascabo opción veganos)
5 rodajas de jengibre
1 cucharada sopera de cúrcuma
1 cucharadita de pimienta de cayena.
Elixir Naranja:
repara y enraiza
2 Zanahoria,
1 manzana verde
1 limón.
Tónico Violeta:
hidratante y antiinflamatorio
2 Manzana verde
2 remolachas
1 limón
5 rodajas de jengibre.
Verde Puro:
revitaliza y rejuvenece.
2 Manzanas verdes
1 atado espinaca
3 ramas de apio
5 rodajas de jengibre
1 limón
OTRO
2 naranjas
1 limón
10 hojas de espinaca
1 pepino
media pera
3 tomates
1 rama de apio
3 pimientos verdes
1 col pequeña
4 cebollas
Agua
Pimienta negra
Una puntita de cayena molida (opcional)
Preparación: