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Tesis - 2022

La investigación tuvo como objetivo determinar la calidad de sentencias de primera y segunda instancia sobre delitos de violación sexual de menor de edad en el expediente N° 01630-2014-35-2001-JR-PE-04 del Distrito Judicial de Piura - Piura, 2022. Los resultados revelaron que la calidad de la sentencia de primera instancia fue mediana, mientras que la de segunda instancia fue alta. Se concluyó que la calidad de las sentencias fue mediana para la de primera instancia y alta para la de segunda instancia.

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Tesis - 2022

La investigación tuvo como objetivo determinar la calidad de sentencias de primera y segunda instancia sobre delitos de violación sexual de menor de edad en el expediente N° 01630-2014-35-2001-JR-PE-04 del Distrito Judicial de Piura - Piura, 2022. Los resultados revelaron que la calidad de la sentencia de primera instancia fue mediana, mientras que la de segunda instancia fue alta. Se concluyó que la calidad de las sentencias fue mediana para la de primera instancia y alta para la de segunda instancia.

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FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIA POLÍTICA

ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO

CALIDAD DE SENTENCIAS DE PRIMERA Y SEGUNDA


INSTANCIA SOBRE DELITOS CONTRA LA LIBERTAD
SEXUAL, EN LA MODALIDAD DE VIOLACIÓN SEXUAL
DE MENOR DE EDAD, EN EL EXPEDIENTE N° 01630-
2014- 35-2001-JR-PE-04, DEL DISTRITO JUDICIAL DE
PIURA – PIURA. 2022

PROYECTO DE TESIS PARA OPTAR EL TÍTULO PROFESIONAL


DE ABOGADA

AUTORA
SAENZ MIO, NELLY PAOLA
ORCID: 0000-0002-5599-5725

ASESOR
Mgtr. MURRIEL SANTOLALLA, LUIS ALBERTO
COD. ORCID: 0000-0001-8079-3167

CHIMBOTE – PERÚ
2022

i
EQUIPO DE TRABAJO

AUTOR
Saenz Mio, Nelly Paola
ORCID: 0000-0002-5599-5725
Universidad Católica Los Ángeles de
Chimbote, Egresado de Pregrado, Chimbote,
Perú

ASESOR
Mgtr. Murriel Santolalla, Luis Alberto
COD. ORCID: 0000-0001-8079-3167
Universidad Católica Los Ángeles de Chimbote,
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas,
Escuela Profesional de Derecho, Chimbote, Perú

JURADO EVALUADOR DE TESIS

Mgtr. Huanes Tovar, Juan De Dios


ORCID: 0000-0003-0440-0426

Mgtr. Centeno Caffo, Manuel Raymundo


ORCID: 0000-0002-2592-0722

Mgtr. Gutiérrez Cruz, Milagritos


Elizabeth ORCID: 0000-0002-7759-3209

ii
AGRADECIMIENTO

A Dios:

Por haberme dado la vida y la sabiduría y


permitirme desarrollar mi carrera profesional.

A mi Tutor:

Mgtr. Murriel Santolalla, Luis Alberto por haberme


brindado una excelente enseñanza y una gran
dedicación.

Saenz Mio, Nelly Paola

iii
DEDICATORIA

A mis padres:

A mi madre por ser el Pilar más importante y por demostrarme


siempre su cariño y apoyo incondicional, a mi padre, a pesar
que no está conmigo físicamente, pero sé que con sus
enseñanzas y sus valores hicieron de mí mi gran inspiración
para lograr el desarrollo de toda mi carrera profesional.

A mis hermanos:

Que con sus buenos consejos, me enseñaron a que con esfuerzo


y sacrificio se logra los objetivos trazados, además por lo que
representan para mí una hermosa familia siempre unida.

Saenz Mio, Nelly Paola

iv
RESUMEN

La investigación tuvo como objetivo general, determinar la calidad de las sentencias de


primera y segunda instancia sobre violación sexual en menor de edad según los
parámetros normativos, doctrinarios y jurisprudenciales pertinentes, en el expediente N°
05374-2016-2-2001-JR-PE-01 del Distrito Judicial de Piura – Piura, 2022.

Es de tipo, cuantitativo cualitativo, nivel exploratorio descriptivo, y diseño no


experimental, retrospectivo y transversal. La recolección de datos se realizó, de un
expediente seleccionado mediante muestreo por conveniencia, utilizando las técnicas de
la observación, y el análisis de contenido, y una lista de cotejo, validado mediante juicio
de expertos.

Los resultados revelaron que la calidad de la parte expositiva, considerativa y resolutiva,


pertenecientes a: la sentencia de primera instancia fueron de rango: alta, mediana y alta;
y de la sentencia de segunda instancia: mediana, muy alta y muy alta. Se concluyó, que
la calidad de las sentencias de primera y de segunda instancia, fueron de rango mediana
y alta, respectivamente.

v
ABSTRACT

The overall objective research was to determine the quality of the judgments of

first and second instance damages according to there levanter gulatory, doctrinal

and jurisprudential parameters, file Nº 05374-2016-2-2001-JR-PE-01, the Judicial

District of Piura -Piura, 2022's type, quantitative and qualitative, descriptive

exploratory level, not experimental, retrospective and cross-sectional design.

Data collection was performedon a selected file using convenience sampling,

using the techniques of observation, and contentana lysis, and a check list valida

ted by expert judgment.

The results revealed that the quality of the narrative, preamble and operative part

belonging to: the judgment of first instance wererank: high, medium, and high;

and thejudgment of second instance: Medium, high and veryhigh. I twas

concluded that the quality of the judgments of first and second instance, were very

high, high and very high, respective ly range.

vi
CONTENIDO

Pág.
Carátula i
Equipo de Trabajo ii
Jurado evaluador iii
I. INTRODUCCIÓN 01
PLANTEAMIENTO DEL PROYECTO 01
CARACTERIZACION DEL PROBLEMA 02
ENUNCIADO DEL PROBLEMA 02
OBJETIVOS DE LA INVESTIGACION 03
II. MARCO TEÓRICO 08
2.1. ANTECEDENTES 08
2.2. BASES TEÓRICAS 13
2.2.1. Desarrollo de Instituciones Jurídicas Procesales relacionadas con las
sentencias en estudio 13
2.2.1.1. Garantías Constitucionales del Proceso Penal 13
2.2.1.1.1. Garantías generales 13
2.2.1.1.2. Garantías de la Jurisdicción 15
2.2.1.1.3. Garantías procedimentales 16
2.2.1.2. El ius puniendi del estado en materia penal 20
2.2.1.3. La jurisdicción 21
2.2.1.3.1. Definiciones 21
2.2.1.3.2. Elementos 21
2.2.1.4. La competencia 22
2.2.1.4.1. Definiciones 22
2.2.1.4.2. Criterios para la determinación de la competencia penal 22
2.2.1.4.3. La regulación de la competencia 23
2.2.1.4.4. Determinación de la competencia en el caso en estudio 24
2.2.1.5. La acción penal 24
2.2.1.5.1. Definición 24
2.2.1.5.2. Clases de acción penal 25
2.2.1.5.3. Características del derecho de acción 25
2.2.1.5.4. Titularidad en el ejercicio de la acción penal 26
2.2.1.5.5. Regulación de la acción penal 26
vii
2.2.1.6. El proceso penal 26
2.2.1.6.1. Definiciones 26
2.2.1.6.2. Principios aplicables al proceso penal 27
2.2.1.6.3. Finalidad del proceso penal 30
2.2.1.6.5. Clases de Proceso Penal 30
2.2.1.6.5.1. Proceso Penal Común 30
2.2.1.6.5.1.1. Etapas del proceso penal común 31
2.2.1.6.5.1.2. Etapa de investigación preparatoria 31
2.2.1.6.5.1.3. La etapa Intermedia 32
2.2.1.6.5.1.4. Etapa de Juicio oral 34
2.2.1.6.5.2. Procesos especiales 34
2.2.1.6.5.2.1 El proceso inmediato 34
2.2.1.6.5.2.2. Proceso de terminación anticipada 35
2.2.1.6.5.2.3. Proceso por faltas 35
2.2.1.6.5.2.4. Proceso de Seguridad 36
2.2.1.6.5.2.5. Proceso por delito de ejercicio privado de la acción penal. 36
2.2.1.6.5.2.6. Proceso por colaboración eficaz 36
2.2.1.6.5.2.7. Proceso por razón de la función pública 36
2.2.1.6.5.4. Identificación del proceso penal de donde surgen las sentencias. 37
2.2.1.7. Los medios técnicos de defensa 37
2.2.1.7.1. La cuestión previa 37
2.2.1.7.2. La cuestión prejudicial 37
2.2.1.7.3. Las excepciones 38
2.2.1.8. Los sujetos procesales 39
2.2.1.8.1. El Ministerio Público 39
2.2.1.8.1.2. Atribuciones del Ministerio Público 40
2.2.1.8.2. El Juez penal 42
2.2.1.8.2.1. Órganos jurisdiccionales en materia penal 42
2.2.1.8.3. El imputado 44
2.2.1.8.3.1. Derechos del imputado 44
2.2.1.8.4. El abogado defensor 44
2.2.1.8.4.1. Requisitos, impedimentos, deberes y derechos 45
2.2.1.8.4.2. La defensa particular 46
2.2.1.8.4.3. El defensor de Público 47

vii
i
2.2.1.8.5. El agraviado. 47
2.2.1.8.5.1. Intervención del agraviado en el proceso 47
2.2.1.9. La prueba. 48
2.2.1.9.1. Definiciones 48
2.2.1.9.2. El objeto de la prueba 49
2.2.1.9.3. La valoración probatoria 50
2.2.1.9.4. El sistema de sana crítica o de la apreciación razonada 51
2.2.1.9.5. Principios de la valoración probatoria 52
2.2.1.9.6. Etapas de la valoración de la prueba 53
2.2.1.9.7. Las pruebas actuadas en el proceso judicial en estudio 55
2.2.1.9.7.1. La denuncia 55
2.2.1.9.7.1.1. Regulación de la denuncia en el Código Procesal Penal 55
2.2.1.9.7.1.2. La Denuncia en el proceso judicial en estudio 56
2.2.1.9.7.2. La testimonial 56
2.2.1.9.7.2.1. Concepto 56
2.2.1.9.7.2.2. Regulación 57
2.2.1.9.7.2.3. Valor probatorio 57
2.2.1.9.7.2.4. La testimonial en el caso concreto en estudio 58
2.2.1.9.7.3. Documentos 62
2.2.1.9.7.3.1. Concepto 62
2.2.1.9.7.3.2. Clases de documentos 62
2.2.1.9.7.3.3. Regulación 62
2.2.1.9.7.3.4 Valor probatorio 63
2.2.1.9.7.3.5 Documentos existentes en el caso concreto en estudio 63
2.2.1.9.7.4. Reconocimiento 64
2.2.1.9.7.4.1. Concepto 64
2.2.1.9.7.4.2. Regulación 64
2.2.1.9.7.4.3. Valor probatorio 65
2.2.1.9.7.4.4. Reconocimiento en el caso concreto en estudio 65
2.2.1.9.7.5. La pericia 66
2.2.1.9.7.5.1. Concepto 66
2.2.1.9.7.5.2. Regulación 66
2.2.1.9.7.5.3. Valor probatorio 67
2.2.1.9.7.5.3. La pericia en el caso concreto en estudio 67

ix
2.2.1.10. La sentencia 68
2.2.1.10.1. Etimología 68
2.2.1.10.2. Definición 68
2.2.1.10.3. La sentencia penal 68
2.2.1.10.4. La motivación de la sentencia 69
2.2.1.10.4.1. La motivación como justificación de la decisión 69
2.2.1.10.4.2. La motivación como actividad 69
2.2.1.10.4.3. La motivación como discurso 70
2.2.1.10.5. La función de la motivación en la sentencia 70
2.2.1.10.6. La motivación como justificación interna y externa de la decisión 71
2.2.1.10.7. La construcción probatoria en la sentencia 71
2.2.1.10.8. La construcción jurídica en la sentencia 71
2.2.1.10.9. La motivación del razonamiento judicial 71
2.2.1.10.10. Estructura y contenido de la sentencia 72
2.2.1.10.11. Parámetros de la sentencia de primera instancia 72
2.2.1.10.11.1. De la parte expositiva 72
2.2.1.10.11.2. De la parte considerativa 73
2.2.1.10.11.3. De la parte resolutiva 81
2.2.1.10.12. Parámetros de la sentencia de segunda instancia 82
2.2.1.10.12.1. De la parte expositiva 82
2.2.1.10.12.2. De la parte considerativa 83
2.2.1.10.12.3. De la parte resolutiva 83
2.2.1.10.13. La sentencia con pena efectiva y pena condicional 85
2.2.1.10.14. La sentencia en el caso concreto en estudio 85
2.2.1.11. Impugnación de resoluciones 85
2.2.1.11.1. Definición 85
2.2.1.11.2. Fundamentos normativos del derecho a impugnar 86
2.2.1.11.3. Finalidad de los medios impugnatorios 86
2.2.1.11.4. Los medios impugnatorios según el Nuevo Código Procesal 86
Penal.
2.2.1.11.5. Formalidades para la presentación de los recursos 89
2.2.1.11.6. De la formulación del recurso en el proceso judicial en estudio 89
2.2.2. Desarrollo de Instituciones Jurídicas Sustantivas relacionadas
sentencias en estudio 90

x
2.2.2.1. Instituciones jurídicas previas, para abordar el delito investigado en el
proceso judicial en estudio. 90
2.2.2.1.1. La teoría del delito 90
2.2.2.1.2. Componentes de la Teoría del Delito 90
2.2.2.1.3. Consecuencias jurídicas del delito 92
2.2.2.2. Del delito investigado en el proceso penal en estudio 92
2.2.2.2.1. Ubicación del delito de violación sexual de menor de edad en el Código
Penal 92
2.2.2.2.2. El delito de violación sexual de menor de edad 92
2.2.2.2.2.1. Tipicidad 93
2.2.2.2.2.2. Elementos de la tipicidad subjetiva 96
2.2.2.2.2.3. Grados de desarrollo del delito 97
2.2.2.2.2.4. La pena en el delito de violación sexual 99
2.3. MARCO CONCEPTUAL 100
III. METODOLOGÍA 102
3.1. Tipo y nivel de investigación 102
3.2. Diseño de investigación 102
3.3. Objeto de estudio y variable en estudio 103
3.4. Fuente de recolección de datos. 103
3.5. Procedimiento de recolección 103
3.6. Consideraciones éticas 104
3.7. Rigor científico. 104
IV. RESULTADOS 115
4.1. Análisis de resultados 153
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 106
Anexo 1. Cuadro de Operacionalización de la variable
Anexo 2. Cuadro descriptivo de recolección, organización, calificación de datos y
determinación de la variable
Anexo 3. Declaración de Compromiso Ético
Anexo 4. Sentencias de primera y segunda instancia.

xi
I. INTRODUCCIÓN
El acceso a la justicia es un derecho humano de trascendental importancia y
fundamental en el desarrollo social, ya que impulsa a que un sistema democrático tenga
por objeto garantizar los derechos de todos por igual. Cuando otros derechos son
vulnerados, constituye la vía para reclamar su cumplimiento ante los tribunales y
garantizar la igualdad ante la ley (Birgin & Kohen, 2006).

Dentro de este marco, los sistemas de justicia, vale decir el Poder Judicial, y las
instituciones públicas y privadas relacionadas con la administración de justicia, cumplen
un papel esencial para consolidar la modernización del Estado y propiciar el bienestar
común. Es de conocimiento público que, durante muchas décadas, la justicia ha sido
subestimada, tanto por el desconocimiento de su necesaria independencia y la dotación
de los recursos necesarios al Poder Judicial, como por la falta de acceso a la justicia de
la mayor parte de los ciudadanos (Castro, 2015).

En virtud de lo antes expuesto, se entiende por administración o sistema de justicia el


conjunto de normas, instituciones y procesos, formales e informales, que se utilizan para
resolver los conflictos individuales y sociales que surgen como consecuencia de la vida
en colectividad, así como las personas que forman parte de dichas instituciones o
participan en tales procesos. (CNC Panamá, 2011)

Por otra parte, el sistema de administración de justicia pasa por un momento crítico, así
lo expresa Herrera (s/f) quien afirma que “la negativa percepción ciudadana sobre la
transparencia de las principales entidades que lo conforman pone en entredicho la
consecución de la seguridad jurídica y la justicia pronta que defiende” (pág. 76).
En el ámbito internacional se observó: La OEA se lleva adelante un proceso de apoyo
para promover la modernización de los sistemas de justicia y del contenido, alcance y
modalidades de la cooperación jurídica y judicial, acciones avaladas al más alto nivel
político, en las Cumbres de las Américas, en las Asambleas Generales de la OEA, y en
las reuniones de Ministros de Justicia de las Américas. (Lagos, 2006).

En América Latina
Se realizó la II Cumbre de las Américas de Santiago de Chile en 1998, en la que los
líderes políticos del continente, decidieron apoyar la celebración de reuniones

12
periódicas de Ministros de Justicia en el marco de la OEA. De esta manera estas
reuniones adquieren el carácter de un proceso prolongado en el tiempo para el
tratamiento de la temática de la reforma de los sistemas de justicia. (Lagos, 2006). De
otro lado la tercera reunión de ministros de justicia o de ministros o procuradores
generales de las Américas se realizó San José, Costa Rica - 1 al 3 de marzo de 2000. En
este encuentro se abordaron, entre otros, el tema de la extradición y la necesidad de
establecer una red de intercambio de información en Internet integrada por las
autoridades competentes conteniendo datos y mecanismos de asistencia jurídica en
materia penal, con información actualizada para facilitar los procesos de extradición y la
colaboración en materia jurídica y judicial. En lo relativo a los medios alternativos de
resolución de conflictos, se recomendó continuar mejorando el acceso a la justicia a
través de la promoción y uso de métodos alternativos de solución de conflictos, con
canales judiciales y extrajudiciales ágiles y expeditos. (Lagos, 2006)

En Bolivia, durante la presentación del Informe 2014, sobre la situación de los Derechos
Humanos en Bolivia", Racicot (2014) representante de la Oficina del Alto Comisionado
de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) insistió en señalar
que los problemas estructurales y de larga duración de la justicia, no solo que
persistieron, sino que en muchos casos se agravaron durante el 2014, "de hecho es uno
de los informes más preocupantes". Una reforma que empezó hace 5 años. "Estas
deficiencias que aún no se han corregido, continúan siendo un reto para Bolivia a pesar
de que la reforma de la justicia empezó hace más de cinco años. Por eso, la oficina
exhorta a las autoridades a desarrollar un plan amplio de reforma de la justicia y la
implementación gradual de la carrera judicial que fue adoptada en 2014 y que
promoverá la independencia judicial", aseveró. Asimismo, Racicot citó varios procesos
emblemáticos en la justicia que aún no fueron esclarecidos, ni tampoco llegaron a
sentencias condenatorias "que revelan una considerable retardación de justicia y, por
ende, la impunidad.

No obstante, en Guatemala, Helen Mack Chang (2000) Presidenta de la Fundación


Myrna Mack, reflexiona que la corrupción es uno de los principales problemas que
aquejan a la administración de justicia en Guatemala y de acuerdo con las
investigaciones realizadas por la Fundación Myrna Mack (FMM), a partir del estudio de
casos judiciales concretos, es un mecanismo fundamental en el proceso de generación
13
de la impunidad y de las condiciones de fragilidad, deficiencia y atrofia, características
del sistema judicial. Asimismo, manifiesta de que el fenómeno de la corrupción se
extiende a todas las instituciones de justicia. Sin embargo, resulta difícil y complejo
determinar con precisión su amplitud, manifestaciones concretas e implicaciones. No
obstante, sí es posible determinar la existencia de sistemas que producen o que facilitan
la corrupción, y de ahí la importancia de poner en marcha métodos dirigidos al
diagnóstico de estos sistemas y a la definición de políticas de prevención y combate.

De otro lado, en Argentina, para la psicóloga Leticia Marín (2000), integrante del
Proyecto de Investigación “Psicología Política” señala: en la Argentina actual, hasta la
justicia como institución ha caído en el descrédito y amplios sectores de la población,
manifiestan su desconfianza en los procedimientos y decisiones judiciales. No sólo hay
jueces corruptos, algunos de los cuales han terminado presos luego que la prensa los
expusiera y presionara públicamente, sino que la vida institucional del país estuvo
durante muchos años teñida por los llamados “jueces del poder”, cuya complacencia
con la voluntad del gobierno, generó un clima de absoluta impunidad, que no cabe
dudas es el terreno fértil de la corrupción.

En el ámbito nacional peruano, se observó lo siguiente:


En el caso peruano, los resultados del estudio de Libertad Económica 2014, ubican al
Perú en el puesto 47 e identifican, como los principales problemas que afectan las
libertades analizadas, la corrupción gubernamental y la debilidad para defender los
derechos de propiedad. De igual forma, la Encuesta Nacional sobre Percepción de la
Corrupción en el Perú 2013, señala que nuestros principales problemas son la
delincuencia y la corrupción, y que las instituciones más corruptas son el Congreso de la
República, la Policía Nacional y el Poder Judicial, entidades, estas últimas, de la
administración pública, las cuales, junto con el Ministerio Público, el Tribunal
Constitucional, la Defensoría del Pueblo, el Ministerio de Justicia, el Instituto Nacional
Penitenciario, la Academia de la Magistratura y el Consejo Nacional de la Magistratura,
integran el sistema de administración de justicia. (Herrera, pág. 78)
En efecto, la administración de justicia en el Perú requiere de un cambio de paradigma
para solucionar los problemas que tiene y así responder a las necesidades de los usuarios
y recuperar el prestigio de los jueces y de la institución. Es cierto que el sistema judicial
abarca a personas e instituciones públicas y privadas que no están en el Poder Judicial
14
como son, entre otras, el Tribunal Constitucional, el Ministerio de Justicia, los
abogados, las facultades de Derecho, los colegios de abogados y los estudiantes de
Derecho; sin embargo, nos enfocaremos en el Poder Judicial por ser especialmente
representativo. En este contexto se plantea la siguiente interrogante ¿Quién debe estar a
cargo de la reforma judicial? el desprestigio de la institución judicial es una realidad.
Sin embargo, no es correcto atribuir toda la responsabilidad de esta situación a los
actuales integrantes del Poder Judicial. Para los jueces o fiscales la reforma judicial le
compete a quienes tienen a su cargo la labor justiciable (es decir, a ellos). Por su parte,
los otros poderes del estado (Legislativo y Ejecutivo) han insistido en que dicha labor
de revisión y enmienda les
compete. Finalmente, este interés también lo tienen las organizaciones nacionales e
internacionales. (Agenda, 2011)

A su vez, se plantea otra interrogante ¿Cómo mejorar la administración de justicia? Al


respecto (Cade 2014) señala: el Poder Judicial es una de las instituciones con peor
reputación en el Perú. Reformarlo es una tarea urgente y titánica, que no pasa solamente
por conseguir mejores magistrados.

Siendo ello así, el primer problema es la carga procesal, es decir, la elevada cantidad de
casos que deben resolver los jueces. Cada año ingresan al sistema judicial más de un
millón de casos, de acuerdo a cifras del Poder Judicial en el 2012 ingresaron 1.1
millones, en tanto que en el 2013 ingresaron 1.04 millones. Sin embargo, sólo alrededor
del 90% de estos casos puede ser resuelto, ya que también deben resolverse los casos
pendientes de años pasados. Así, año a año se van acumulando y más casos acrecientan
la carga procesal. (Cade 2014)
En esa línea de ideas, en el año 2015, el presidente del Poder Judicial, Víctor Ticona,
pidió al Congreso de la República que apruebe el proyecto que busca poner fin a la mala
práctica de algunos abogados de interponer demandas de hábeas corpus en juzgados
ajenos a la jurisdicción en la que ocurrieron los hechos. Esta iniciativa también tiene
como propósito restablecer la vigencia de la jerarquía organizacional del Poder Judicial
en la tramitación de los procesos constitucionales, de manera que un órgano
jurisdiccional de menor jerarquía ya no pueda conocer y rescindir sentencias firmes
dictadas por órganos superiores (El Comercio, 2015).

15
En el ámbito local:
El presidente de la Corte Superior de Justicia de Piura, Dr. Pedro Germán Lizana
Bobadilla, realizó una visita administrativa a las sedes donde funcionan los juzgados en
la provincia de Piura donde dialogó con los magistrados y servidores judiciales
escuchando las dificultades que presentan y las sugerencias propuestas. Pedro Lizana,
acompañado de la jefa de la Oficina de Administración de la Corte Superior de Justicia
de Piura CPCC Doris Marcela Chunga Rojas, llegó a la sede de Mártires Petroleros
donde conversó con los jueces de los Juzgados Especializados, así como de Juzgado de
Paz Letrado.
Una de las urgencias, fue la expresada por el juez Dr. Jaime Luis Rodríguez Manrique,
quien indicó que era preciso seguir contando con un asistente de audio para la
realización de las audiencias, que, durante este mes de julio, fue trasladada a Piura, en
previsión del aumento de carga procesal en agosto. Al respecto tanto la
administradora como el presidente expresaron que se trataba de una medida temporal
(sólo durante el presente mes) dado el gran número de expedientes que se tramitan en el
juzgado contencioso administrativo laboral de Piura. Tras las sugerencias por parte de
los servidores y con el fin de darle mayor dinamismo a la atención al usuario y mesa de
partes, se dispuso instalar en la sede donde funcionan los juzgados laborales, una
terminal de cómputo, que estará interconectado con el Centro Cívico de los Juzgados
Penales y que permite, tal como lo expresaron los propios abogados y litigantes, tener
un mejor control de los expedientes y coadyuvar a la transparencia de la administración
de justicia.

Cabe indicar que en la sede del Centro Cívico donde operan los juzgados penales, los
especialistas y asistentes manifestaron los problemas generados por los exhortos
dirigidos a otras cortes del país, que no se devuelven oportunamente. Al respecto la
presidencia de la Corte Superior de Justicia de Piura dispuso que se oficie a los otros
distritos judiciales para que den cumplimiento oportuno de las notificaciones referidas.
(República, 2017, s/n) Por su parte el presidente de la Corte Superior Pedro Lizana, en
el año 2017, durante la celebración del sexto aniversario de dicha Corte, manifestó que:
Cada día se incrementa la carga por los conflictos sociales, laborales, de familia.
Tenemos distritos turísticos donde vienen extranjeros y los delincuentes aprovechan

16
para sustraerles sus bienes, o problemas familiares. Es donde más se experimenta la
carga procesal. Cada juzgado tiene una carga de 1,500 expedientes adicionales en toda
la jurisdicción. Tienen un exceso de
40 a 50%. Hay lugares donde ya han colapsado y hemos pedido más órganos
jurisdiccionales. Por ejemplo, los procesos de familia, alimentos y laboral son asumida
por la Sala Civil Mixta, allí se congestionan los expedientes y como tienen que evaluar
varias especialidades, entonces el incremento del área laboral es excesivo. (Correo,
2017) De otro lado en el ámbito institucional universitario:
ULADECH Católica conforme a los marcos legales, los estudiantes de todas las carreras
realizan investigación tomando como referente las líneas de investigación. Respecto, a
la carrera de derecho, la línea de investigación se denomina: “Análisis de Sentencias de
Procesos Culminados en los Distritos Judiciales del Perú, en Función de la Mejora
Continua de la Calidad de las Decisiones Judiciales” (ULADECH, 2015); para el cual
los participantes seleccionan y utilizan un expediente judicial. Es así que al haber
seleccionado el expediente Nº 05374-2016-2-2001-JR-PE-01, perteneciente al Distrito
Judicial de Piura, se observó que la sentencia de primera instancia fue emitida por el
Juzgado Colegiado Penal de Piura donde se condenó a la persona de A. por el delito de
violación sexual de menor de edad en agravio de B., a una pena privativa de la libertad
de treinta años con la calidad de efectiva, y al pago de una reparación civil de mil
nuevos soles, lo cual fue impugnado, y elevado el proceso al órgano jurisdiccional de
segunda instancia, conformado por los Jueces integrantes de la Sala Penal de
Apelaciones de la Corte Superior de Justicia de Piura, donde se resolvió confirmar la
sentencia condenatoria. Asimismo, en términos de tiempo, se trata de un proceso penal
donde la denuncia se formalizó, en síntesis, concluyo luego de 6 meses y siete días
aproximadamente.

II. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA:


Es así, que en base a la descripción precedente que surgió, la siguiente interrogante:
¿Cuál es la calidad de las sentencias de primera y segunda instancia sobre delitos contra
la libertad sexual en la modalidad de violación sexual de menor de edad, según los
parámetros normativos, doctrinarios y jurisprudenciales pertinentes, en el expediente Nº
01630-2014- 35-2001-JR-PE-04, del Distrito Judicial del Piura. Piura, 2022?

Para resolver el problema planteado se trazó un objetivo general. Determinar la calidad

17
de las sentencias de primera y segunda instancia sobre delitos contra la libertad sexual
en la modalidad de violación sexual de menor de edad, según los parámetros
normativos, doctrinarios y jurisprudenciales pertinentes, en el expediente Nº 05374-
2016-2-2001-JR- PE-01, del Distrito Judicial del Piura. Piura, 2022.

Igualmente, para alcanzar el objetivo general se trazaron objetivos específicos


Respecto a la sentencia de primera instancia
1. Determinar la calidad de la parte expositiva de la sentencia de primera instancia, con
énfasis en la introducción y la postura de las partes.
2. Determinar la calidad de la parte considerativa de la sentencia de primera instancia,
con énfasis en la motivación de los hechos, del derecho, la pena y la reparación civil.
3. Determinar la calidad de la parte resolutiva de la sentencia de primera instancia, con
énfasis en la aplicación del principio de correlación y la descripción de la decisión.
Respecto de la sentencia de segunda instancia
4. Determinar la calidad de la parte expositiva de la sentencia de segunda instancia, con
énfasis en la introducción y la postura de las partes.
5. Determinar la calidad de la parte considerativa de la sentencia de segunda instancia,
con énfasis en la motivación de los hechos, del derecho, la pena y la reparación civil.
6. Determinar la calidad de la parte resolutiva de la sentencia de segunda instancia, con
énfasis en la calidad de la aplicación del principio de correlación y la descripción de la
decisión. Finalmente, la presente investigación se justificó, porque los resultados
obtenidos coadyuvaron a realizar un análisis crítico sobre la calidad impartida en las
sentencias emitidas aplicando parámetros considerados tanto en el marco normativo
como doctrinario y jurisprudencial relacionado con la sentencia, pues como se advierte,
el tema de administración de justicia que emana del Estado, no es solo un fenómeno de
ámbito local, sino también en marco nacional e internacional y debido a ello se ha
evidenciado mucha incertidumbre y desconfianza por parte de la sociedad, misma que
ha sentido insatisfacción frente a la necesidad de justicia que requiere.

La utilidad de esta investigación, servirá para motivar a las autoridades, profesionales y


estudiantes de la carrera de derecho, así como a la sociedad en general a tomar
conocimiento de la realidad de la administración de justicia, e incitarlos a participar
buscando en conjunto un modelo adecuado para una correcta administración de Justicia.
Asimismo, esta investigación se justifica porque la administración de justicia que se

18
imparte en el Perú, está revestida de problemas entre las cuales la lentitud de los
procesos, la corrupción, decisiones tardías, actúan en detrimento de quienes requieren
solución a sus conflictos de intereses. En base a ello, la utilidad de esta investigación
constituirá una gran fuente de consulta, no solo para estudiantes sino también para los
operadores de Justicia.
Por lo cual es preciso señalar que con la presente investigación se busca sensibilizar a
los responsables de la labor jurisdiccional, pues los resultados revelaron aspectos en los
cuales los operadores de la justicia han demostrado a cabalidad su desempeño, y muy
posiblemente, también, insuficiencias. Dicho resultados sirven de base para crear y
sustentar propuestas de mejora en la calidad de las decisiones judiciales, cuya acogida y
aplicación por parte de los interesados puede constituir una respuesta para lograr mitigar
las necesidades de justicia, que en nuestro contexto social se reclama, se exige, con
acciones muchas de ellas avizoradas no solamente en protestas multitudinarias frente a
los establecimientos destinados para la administración de justicia, sino también
proliferada en los diferentes ámbitos de medios de comunicación actualmente.

En síntesis, la investigación sirvió de escenario para ejercer un derecho de rango


constitucional, previsto en el inciso 20 del artículo 139 de la Constitución Política del
Perú, que establece como un derecho el analizar y criticar las resoluciones judiciales,
con las limitaciones de ley. El trabajo de investigación es de tipo cuantitativo y
cualitativo, teniendo un nivel exploratorio descriptivo y corresponde a un diseño no
experimental porque es ajeno a la voluntad del investigador, asimismo la investigación
obedece a un estudio retrospectivo porque se da sobre hechos ocurridos en el pasado y
transversal ya que ocurre en un determinado momento en el desarrollo del tiempo,
mientras que la unidad de análisis fue el expediente N° 05374-2016-2-2001-JR-PE-01,
del distrito judicial de Piura, Piura. 2020, siendo la variable la calidad de las sentencias,
se aplicaron las técnicas de la observación y el análisis de contenido en las distintas
etapas. Igualmente se procedió a la recolección de datos a través de un plan de análisis,
donde la primera etapa fue una actividad abierta y exploratoria, que consistió en una
aproximación gradual y reflexiva al fenómeno, orientada por los objetivos. La segunda
etapa, fue una actividad más sistemática que la anterior y la tercera etapa fue un análisis
sistemático de carácter observacional, analítica de nivel profundo orientada por los
objetivos donde hubo articulación entre los datos y la revisión de la literatura. Se
presentó una matriz de consistencia lógica que representa el resumen de la

19
investigación.

20
III. MARCO TEÓRICO Y CONCEPTUAL:
2.1. ANTECEDENTES
El autor Schönbohm (2014) infatigable impulsor de las reformas judiciales en América
Latina, en su “Manual de Sentencias Penales”, nos enseña:
La fundamentación de la sentencia es la parte más difícil en la elaboración de una
decisión judicial. Una sentencia debe ser fundamentada con todos los elementos
esenciales que respaldan la parte dispositiva. Para cualquier juez esta es una tarea
difícil. Y se complica aún más pues, además de tener que ser comprensible para el
acusado, las víctimas y el público en general tiene que convencer al tribunal de alzada
de que la decisión asumida es correcta. Esto significa que el juez tiene que esforzarse
para que, la sentencia pueda ser comprendida sin problema. Si las partes no entienden la
sentencia esto ocasiona que aumenten los recursos contra las decisiones judiciales y que
éstas no encuentren credibilidad para ser aceptadas, todo lo cual afecta severamente la
seguridad jurídica. También implica eliminar lo excesivo del texto, lo cual se puede
detectar quitando una palabra o frase sin que el texto pierda su comprensibilidad, es
decir, sin afectar la asociación de ideas que conducen a la decisión. Cumplir con esta
exigencia lleva como consecuencia no copiar partes de otros textos u otras sentencias en
la fundamentación, pues existe el peligro que las partes copiadas no aporten nada
indispensable a la fundamentación de la sentencia, impidiendo en muchos casos
observar con claridad una relación directa con el caso resuelto, siendo únicamente
excepcional el uso de éstas, tanto más, si prescindiendo de todo ello, también se
evitarían contradicciones en la fundamentación. (p. 33)
El autor en mención, aporta un crucial conjunto de conocimientos, pues exhorta a los
jueces, como operadores esenciales de la relación jurídica procesal en debate, puesta a
su jurisdicción a que se esfuercen en la medida que pueda ser comprensible aquellas
decisiones que emite y establece en la sentencia, ya que si las partes no pueden
comprender el fruto razonado del Juez, es más frecuente que la ciudadanía interponga
medidas impugnatorias sobre la base de esas falencias en mérito a la incomprensión de
dichas resoluciones. Es por ello que la motivación en la sentencia es una exigencia
fundamental que debe ser seguida a cabalidad por los órganos jurisdiccionales.
De otro lado, en el San Salvador (Artiga, 2013) en su trabajo de investigación “La
Argumentación Jurídica en las Sentencias Penales” proporciona a los jueces,
herramientas que les permitan lograr una mejor racionalidad y justificación en sus
decisiones judiciales, presentando entre sus conclusiones:

21
1) El estudio de la Teoría de la Argumentación Jurídica, dentro del ámbito del Derecho
en su desarrollo, histórico ha esclarecido que el razonamiento judicial trata de establecer
y justificar la solución de una controversia, a partir de una serie de argumentos
producidos y manejados bajo los distintos procedimientos impuestos legalmente,
instaurándose de esta forma la obligación de motivar las decisiones judiciales, para
asegurar de esta forma la correcta administración de justicia. Históricamente siempre ha
existido la problemática de aplicar una correcta teoría de argumentación jurídica, y
nuestro sistema judicial no se encuentra excluido de este problema.
2) La Teoría de Argumentación Jurídica dentro del campo del derecho actual cumple
una triple función: Teórica, práctica y moral. (a) Teórica, en cuanto esta contribuye a
una comprensión más profunda del fenómeno jurídico, puesto que pretende integrar por
lado el sistema de normas sustantivas con el sistema adjetivo o procedimental para la
toma de decisiones y resolución de litigios, (b) Práctica, ya que la Teoría de
Argumentación Jurídica es capaz de ofrecer una orientación útil, en la tarea de producir,
interpretar y aplicar derecho y (c) Moral, la función moral de la Teoría de
Argumentación Jurídica en el derecho moderno, es la de adoptar decisiones jurídicas
mediante instrumentos argumentativos que lleven a la más correcta de las decisiones,
puesto que el sistema jurídico no ofrece una sola alternativa de decisión, y será el
juzgador quien estime la más acertada, aunque tenga plena conciencia de que la misma
no es a la que lleva inmersa el derecho positivo, ya que los textos legales no siempre
reflejan la realidad jurídica. 3) En la Teoría de la Argumentación Jurídica encontramos
en la figura del juez, no solo un funcionario judicial, sino al decisor por excelencia, un
motor fundamental de esa maquinaria transformadora llamada Derecho (p. 146).
Como una apreciación personal, el autor en mención ha desarrollado fehacientemente
cual es la finalidad de la Teoría de Argumentación Jurídica, teoría que sirve de base al
Juzgador para dotar de sentido congruente y lógico sus decisiones, siendo relevante el
comportamiento garantista que ofrece el Magistrado, en aras de establecer seguridad a
los justiciables. En virtud del poder que ostenta en nombre del Estado, el Juez tiene que
decidir sobre la base de argumentos lógicos, cuya motivación debe estar latente.
Por su parte Laurence (2014), expone: Es de importancia señalar que si bien la
elaboración de una sentencia es siempre responsabilidad del juez, ocurre que algunos
jueces no redactan sus sentencias. Cuentan con la colaboración de un asistente de juez,
que les ayuda con la redacción de las mismas. Su tarea, conforme a las disposiciones de
la propia institución, es la de verificar la existencia de vicios procesales, buscar la

22
doctrina

23
y jurisprudencia aplicable al caso y dar cuenta de cualquier cuestión que pueda incidir
en la resolución del caso.
En algunos casos, se sabe, que cuando el Poder Judicial no ha asignado uno, pero la
carga es tanta que, los procesos para sentenciar superan las varias decenas, el juez
aprovecha a los secigristas y practicantes para que le ayuden en la tarea de la
composición de las partes expositivas, que son la parte más pesada de la transcripción:
verificar las pretensiones de las partes, hacer numeración de los medios probatorios y
elaborar resúmenes de los dichos de los testigos y hasta anotar las consideraciones
jurídicas que puedan tener relevancia para el conflicto.

La calidad, sin embargo, no es una variable fácil de baremar. La Academia de la


Magistratura refiere que, las exigencias numéricas y la excesiva carga procesal son
graves barreras para el estudio y el análisis teórico de las materias expuestas en
conflicto. Resaltan las partes procesales, el tipo de proceso, la materia a atender. No es
lo mismo procesar una solicitud de rectificación de partida, que uno de alimentos y, a la
vez son distintos respecto de la nulidad del reconocimiento de paternidad.
Es de diferente tratamiento un proceso penal de omisión a la asistencia familiar donde
sólo existe un imputado, que dar trámite a un proceso de peculado con siete
funcionarios y servidores públicos y, cada cual con su propio abogado. Sin embargo, al
final, cada sentencia siempre tiene el mismo valor.
De hecho, si en el proceso de peculado uno de ellos no se presenta a juicio, pero se
logra sentenciar a seis, esa sentencia tiene "menos valor" que la de alimentos por el sólo
hecho de que el proceso no ha concluido.
Y no hablemos de costos de tiempo: en el primer caso, se puede efectuar todo el juicio,
incluyendo la sentencia, en una hora; un proceso de peculado puede requerir veinte
horas de actuación probatoria y cinco horas de elaboración de la sentencia; pero al final,
ambas sentencias se contabilizan por igual.

Con referencia a la calidad también está el criterio jurisdiccional. Se acepta con cierta
homogeneidad que, la calidad puede medirse en atención al hecho de haber sido
confirmada o revocada la sentencia por el superior jerárquico. El asunto es que, ni
siquiera los jueces superiores piensan uniformemente.
De hecho, el Tribunal Constitucional siendo uno en todo el país- expone con frecuencia
sentencias que asumen un criterio y al día siguiente retoman otro distinto. No todo está

24
dicho en el derecho, de allí que los problemas de justicia no siempre tienen el mismo
resultado. Hay casos en los que hasta la confianza en el juez de primera instancia pesa
para el resultado final en la segunda instancia. He visto, en el antiguo modelo –cuando
no existía la sistematización informática- que una misma apelación diera lugar a dos
cuadernos finalmente resueltos en sentidos contradictorios. Entonces ¿fue mala la
resolución impugnada? En estos tiempos se han puesto de moda los acuerdos plenarios
y los precedentes jurisdiccionales para uniformizar criterios. En todo caso, lo que logran
medir esas pautas de conformidad con el precedente y/o la confirmatoria o revocatoria
es la unidad de criterio jurisdiccional y hasta la predictibilidad de las resoluciones. La
calidad está más allá de esos conceptos (s/n).

Es menester, hacer hincapié lo esgrimido por el autor, dado que analiza la problemática
que refleja la actividad jurisdiccional como órgano decisor de las controversias
existentes, básicamente en la labor del Poder judicial, cuya esencia se materializa en el
Juez, que si bien es cierto debe actuar con objetividad al momento de emitir sus
decisiones, lo cierto también es que al momento de redactar la mismas este acude a la
ayuda de terceros, no legitimados En algunos casos, de personas ajenas a la admiración
de justicia quienes aportan en la trascripción de la estructura de las resoluciones. Cabe
anotar, que dicho autor nos conmina a brindar un mejor manejo de propuestas para que
el Juzgador al momento de elaborar las mismas, no adolezca de criterios, que no haya
percibido, sino que sean fruto de su conocimiento en base a las reglas de la sana crítica.
Sobre la base de las ideas expuestas, es de suma importancia destacar cada uno de las
pautas que nos establecen los autores citados, debido a que en este informe de
investigación, se corroborará con las instituciones que ponen de manifiesto el deber
constitucional de los magistrados en motivar las sentencias, criterio que este
investigador comparte tal como se ha expresado en el presente estudio. En virtud de
ello, sería necesario empezar una reforma por cuanto materialice ámbitos de exclusiva
competencia para jueces que tengan que decidir sobre un caso y que por el poco tiempo
que dispongan no lo hagan a cabalidad, pues como se sabe, el Juez tiene 48 horas luego
de cerrado el debate oral, para emitir una sentencia, ya sea condenatoria o absolutoria,
ante lo cual no siempre va a disponer de dicho tiempo, porque debido a las exigencias
laborales que a mérito que a su jurisdicción les recae, les es difícil avocarse a una causa
para valorar de una manera más eficaz los medios probatorios actuados en el proceso
penal con las garantías y principios que recoge nuestro actual sistema. En aras de

25
fortalecer el desarrollo eficiente de la labor decisora del Juez, es que el aporte de estos
autores antes citados debe ser asiduamente compartido y profesionalmente valorados.
3.1. BASES TEÓRICAS
3.1.1. Desarrollo de Instituciones Jurídicas Procesales relacionadas con las
sentencias en estudio
3.1.1.1. Garantías Constitucionales del Proceso Penal
3.1.1.1.1. Garantías generales
Principio de Presunción de Inocencia. Para Arbulú (2014) este principio tiene
sustento positivo en la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano en
Francia, que en el articulado 9, indicaba que debía presumirse inocente a todo hombre
hasta que no haya sido declarado culpable, igualmente es recogida por su declaración
universal de los derechos Humanos y el Pacto de San José de Costa Rica en su artículo
8. En virtud de todo lo expuesto esta garantía del acusado no puede ser desvirtuada
hasta que se determine su responsabilidad por sentencia.

Por su parte Talavera (2009) manifiesta que en el Sistema Internacional de Protección


de los Derechos Humanos, el derecho a la presunción de inocencia aparece considerado
en el artículo 11º.1 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en el sentido
de que toda persona acusada de delito tiene derecho a que se presuma su inocencia
mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley y en juicio público en el que se
le hayan asegurado todas las garantías necesarias para su defensa.
De igual modo, el citado derecho es contemplado en el artículo 14º.2 del Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos, y en el artículo 8º.2 de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos. En concordancia con estos instrumentos
internacionales de protección de los derechos humanos, el artículo 2º, inciso 24, de la
Constitución establece que “Toda persona es considerada inocente mientras no se haya
declarado judicialmente su responsabilidad”. De esta manera, el constituyente ha
reconocido la este principio como un derecho fundamental.

Principio del Derecho de Defensa. Tal como establece Espinoza (2016), es un derecho
fundamental de naturaleza procesal que forma parte de las garantías del debido proceso
y, en ese sentido, se le concibe de dos maneras: como principio de interdicción para
afrontar cualquier indefensión y como principio de contradicción de los actos procesales
que pudieran repercutir en la situación jurídica de alguna de las partes.
26
Por su parte Neyra (2015) enseña que el derecho de defensa está reconocido
constitucionalmente en el art. 139, inciso 14, el cual señala que son principios y
derechos de la función jurisdiccional el principio de no ser privado del derecho de
defensa en ningún estado del proceso. En ese sentido, Neyra (2015) haciendo un
análisis dentro del marco constitucional, afirma que este principio constituye una
garantía para todo sujeto de imputación penal, de ser asistido por una defensa técnica en
todos los estados del proceso, pudiendo ofrecer medios de prueba que considere
necesario a efectos de que se declare su absolución.
A propósito, Rioja (2016) menciona que el ejercicio al derecho de defensa en materia
penal abarca dos modalidades, la defensa material y la defensa técnica. La primera es
aquella que le corresponde ejercer directamente al sujeto a quién se le imputa un ilícito,
la segunda, es decir la defensa técnica, es la que ejerce un profesional en derecho,
técnicamente preparado apto para el ejercicio de la abogacía. En efecto, según Rioja, la
importancia de esta garantía constitucional, radica en que con su ejercicio se busca
impedir actuaciones arbitrarias por parte de los entes legitimados para imponer
sanciones y evitar condenas injustas.
En ese contexto, tal como se ha establecido en el Recurso de Nulidad N° 2019-2010
Cajamarca, del 11 de marzo del 2011, considerando tercero y cuarto. Sala Penal
Transitoria: Toda persona sometida a un proceso o procedimiento no quede en estado de
indefensión, por lo que su contenido esencial queda afectado cuando en el seno de un
proceso judicial, cualquiera de las partes resulta impedido, por concretos actos de los
órganos judiciales, de hacer uso de los medios necesarios, suficientes y eficaces para
ejercer la defensa de sus derechos e intereses legítimos (Landa, 2012, p. 20)
Principio del debido proceso. Al respecto Rioja (2016) nos dice que es un derecho
fundamental de carácter instrumental que se encuentra conformado por un conjunto de
derechos esenciales, tales como el derecho de defensa, los cuales impiden que la
libertad y los derechos individuales sucumban ante la ausencia o insuficiencia de un
proceso o se vean afectados por cualquier sujeto de derecho.
En ese sentido Bustamante, (citado por Rioja, 2015) postula que la dimensión material
del debido proceso exige que todos los actos de poder, sean normas jurídicas, actos
administrativos o resoluciones judiciales, inclusive, sean justos, es decir, que sean
razonables y respetuosos de los derechos fundamentales y de los demás bienes
constitucionalmente cautelados, a tal punto que su inobservancia debe ser sancionada
con su invalides.

27
Por su parte Chirinos & Chirinos (2014) exponen: Debido proceso es aquel que se
desarrolla conforme a la normatividad preexistente y a cargo de los magistrados
designados por ley. El debido proceso impide que a un inculpado se le desvíe de la
jurisdicción establecida previamente por la ley o se le someta a trámites y
procedimientos distintos de los legalmente fijados o, por último, se le juzgue por
tribunales creados especialmente, sea cual fuese su denominación. (p. 371)

Derecho a la tutela jurisdiccional efectiva. Al respecto Rioja (2016) manifiesta que el


Tribunal Constitucional ha precisado que el “derecho a la tutela jurisdiccional efectiva,
implica que cuando una persona pretenda la defensa de sus derechos o intereses
legítimos, ella deba ser atendida por un órgano jurisdiccional mediante un proceso
dotado de un conjunto de garantías mínimas” (p. 587).
En ese sentido Rioja (2016) afirma que tal derecho es un atributo subjetivo que integra
una serie de derechos, entre los cuales destacan el acceso a la justicia, es decir el
derecho del que goza cualquier persona de instar al aparato jurisdiccional para que se
pronuncie, sin que se le impida irrazonablemente.
Igual posición sostiene Landa (2012) cuando enseña que se trata de un derecho genérico
o complejo que se descompone en otros diversos derechos que sub yacen dentro de él, y
algunos otros implícitos, entre los cuales cabe destacar el derecho de promover la
actividad jurisdiccional del Estado y el derecho a que se efectivice el contenido de las
resoluciones emanadas de las autoridades a quienes se les encomendó tal fin con arreglo
a la constitución.

3.1.1.1.2. Garantías de la Jurisdicción


Unidad y exclusividad de la jurisdicción. El Estado peruano en conjunto, posee un
sistema jurisdiccional unitario, en el que sus órganos tienen idénticas garantías, así
como reglas básicas de organización y funcionamiento. De ello no se deduce que el
Poder Judicial sea el único encargado de la función jurisdiccional, pues tal función
también se le ha encargado al Tribunal Constitucional, al Jurado Nacional de
Elecciones, a la jurisdicción especializada en lo militar y, por extensión al arbitraje, sino
que no exista ningún órgano jurisdiccional que no posea las garantías propias de todo
órgano jurisdiccional. Como se ha mencionado, la función jurisdiccional del Estado es
una sola y debe ser ejercida con todas las garantías establecidas en la Constitución.
(Rioja, 2016, p. 575)

28
Juez legal o predeterminado por la ley. Tal como lo ha señalado García, (citado por
Rioja, 2016) el Tribunal Constitucional ha establecido que se trata de un principio
constitucional y que este reviste de una doble vertiente, así de un lado se refiere al
impedimento de ejercer función judicial por parte de quien no ha sido nombrado en la
forma que señala la Constitución o la Ley y de otro lado está dirigido a evitar que una
persona sea pasible de juzgamiento por parte de quien no ha sido nombrado en la forma
que señala la Constitución.
En ese sentido Rubio (citado por Rioja 2016) precisa que quien ostenta la función
jurisdiccional, tiene que haber sido nombrado tal como establecen las prescripciones
legales, caso contrario no habría seguridad por parte de la sociedad respecto de la
persona que ejerce tal función, siendo el Consejo Nacional de la Magistratura el ente
encargado de la designación de magistrados.
Imparcialidad e independencia judicial. En efecto (Arbulú V, 2014) sostiene que este
principio implica que el juzgador al estar dentro de un proceso, debe mantener
objetividad, equilibrio y prudencia respecto de las partes, ya que la inclinación a favor o
en parte de alguien de ellos, podría posibilitar la duda de su imparcialidad, de tal forma
que se pueda recusar.
De otro lado, Salas (s.f) manifiesta: La imparcialidad es un requisito esencial para el
juzgador, sin el cual este vería desnaturalizadas sus funciones y atribuciones. El juez,
pues, debe de resolver en atención a la razonabilidad, legalidad y probanza de los
argumentos vertidos por las partes durante el desarrollo del juicio. Todo elemento
extraño como inclinaciones políticas o religiosas, prejuicios, sobornos, entre otros
perturbarán la imparcialidad del juez y, por ende, la legalidad y justicia que todo fallo
judicial debe tener. (p.33)
Por su parte (Chirinos & Chirinos, 2014) afirman que en concordancia con lo
establecido por el tercer párrafo del artículo 43º que consagra el principio de separación
de funciones, la función jurisdiccional es independiente. Estando en trámite un proceso
judicial, ninguna autoridad ni organismo puede avocarse a su conocimiento ni interferir
en el ejercicio de su función.

3.1.1.1.3. Garantías procedimentales


Garantía de la no incriminación. Según Arbulú (2014) nadie está obligado, desde la
perspectiva penal, a confesar ser autor de la comisión de un hecho punible, bajo esa
premisa, este principio es una garantía para el imputado, pues frente a los cargos

29
formulados por el Ministerio Público que tiene la carga de la prueba, el procesado no
tiene que contribuir a darle solidez a la teoría del caso del fiscal.
Entre las consecuencias más importantes de este derecho fundamental, yace el hecho de
que de bajo ninguna circunstancia se puede obligar ni inducir al sujeto que está siendo
pasible de una imputación, a reconocer su culpabilidad, empero también este principio
contiene el derecho a que, de la negativa a declarar, del silencio del imputado no se
pueda extraer conclusiones de culpabilidad. (Salas s.f,)
Por su parte San Martin (2015) afirma que el derecho a no declarar sobre sí mismo y a
no declararse culpable es calificado como un derecho de autodefensa, el cual emerge
como garantía frente al ius punendi, y por ende la persona que es objeto de inculpación
tiene derecho a defenderse no actuando contra sí mismo si no lo desea y permanecer
callada, sin admitir los hechos ni los fundamentos jurídicos que derivan de la
imputación en su contra. Asimismo, el autor en mención, enfatiza en que, por este
principio, está prohibido utilizar medios coercitivos para la obtención de declaraciones o
confesiones inculpatorias. Derecho a un proceso sin dilaciones. Reyna (2015) afirma
que la lentitud de los procesos judiciales, constituye uno de los problemas más graves
que afronta la administración de justicia, debido a que el hecho de encontrase sometido
a un proceso penal, ya sea como procesado o como víctima de delito, el ciudadano
asume una carga muy pesada, que supone la intromisión del poder del estado en una
esfera importante de sus derechos. Asimismo, indica el referido autor que la garantía del
juzgamiento dentro de un plazo razonable tiene por finalidad no solo evitar que la
prolongación excesiva del proceso penal suponga una especie de condena informal para
el procesado, sino que adicionalmente pretende evitar una abreviación del juzgamiento
que derive en la vulneración de los derechos fundamentales de todo ciudadano.
La garantía de la cosa juzgada. Es importante destacar lo manifestado por (Rioja,
2016) cuando afirma que esta garantía busca, cuando un proceso ha concluido, con las
garantías de un debido proceso y a través de una decisión final, adquiera la firmeza y
seguridad de que esta no va a sufrir modificaciones posteriormente, bajo ninguna
circunstancia, en tal sentido esta disposición constitucional pretende proteger la
seguridad jurídica y la tutela jurisdiccional efectiva. De igual forma ha precisado que
esta protección se materializa en el derecho que tiene todo ciudadano a que las
resoluciones judiciales sean ejecutadas en el término que fueron establecidas.
La publicidad de los juicios. Tal como lo sostienen (Chirinos & Chirinos, 2014): Una
de las garantías para la correcta administración de justicia es la publicidad en los juicios

30
penales, en efecto, la publicidad asegura que la opinión pública, de manera directa o a
través de los llamados medios de comunicación social, vigile el comportamiento de los
jueces. La regla en el desarrollo de los juicios penales es pues, la publicidad. La
excepción en cambio, son la privacidad y la reserva. (p. 372). Por su parte, para Rioja
(2016) este principio constituye una garantía esencial del funcionalismo del Poder
Judicial en una sociedad democrática, no solo porque fortalece la confianza pública en
la justicia, sino también porque fomenta la responsabilidad de los órganos de
administración de justicia. Lo dicho por el autor en mención se condice con lo ya
señalado por el Tribunal Constitucional, cuando sostiene que este dispositivo relaciona
la publicidad de los procesos con la parte oral de los mismos. Similar prevención
estatuye el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos en su art. 14.1: La prensa
y el público podrán ser excluidos de la totalidad o parte de los juicios por
consideraciones de moral, orden público o seguridad nacional en una sociedad
democrática, o cuando lo exija el interés de la vida privada de las partes o, en la medida
estrictamente necesaria en opinión del tribunal, cuando por circunstancias especiales del
asunto la publicidad pudiera perjudicar a los intereses de la justicia, pero toda sentencia
en materia penal o contenciosa será pública, excepto en los casos que el interés de los
menores exija lo contrario, o en las actuaciones referentes a pleitos matrimoniales o a
tutela de menores. (Rioja, 2016, p. 472) La garantía de la instancia plural. Según
Arbulú (2014) la doble instancia es una garantía de la administración de justicia, que es
reconocida en el modelo procesal, de tal manera que la parte que se considere afectada
por una decisión que le cause agravios, puede tener la posibilidad que una instancia de
mérito reexamine la sentencia o auto que le agravia.
Por su parte (Chirinos & Chirinos, 2014) expresan: “que toda resolución judicial que
ostenta el rango de sentencia o auto es susceptible de ser revisada por un juez o tribunal
de rango superior al que lo expide” (p. 374).
Dentro de esta perspectiva, Rioja (2016) señala que, respecto al contenido de este
derecho, se trata de un derecho fundamental, cuyo objeto es garantizar que tanto las
personas, naturales o jurídicas, que participen en un proceso judicial tengan la
oportunidad de que lo resuelto por un órgano jurisdiccional sea revisado por órgano
superior de la misma naturaleza, siempre y cuando haya hecho uso de los medios
impugnatorios pertinentes, formulados dentro del plazo legal.
La garantía de la igualdad de armas. En efecto, Arbulú (2014) manifiesta que las
partes en el proceso penal deben tener el mismo conjunto de derechos y armas

31
defensivas y ofensivas en paridad. Si bien la parte acusada no tiene que probar su
inocencia, la fiscalía sí tiene que probar su culpabilidad, pues tiene la carga de la
prueba, pero al actuar con objetividad, debe también valorar las pruebas de descargo
que favorecen al acusado.
A su turno Ortiz (2014) menciona que dicho principio, se refiere básicamente a que, en
el proceso, las partes deben tener las mismas posibilidades, derechos y garantías, para
poder defenderse, accionar, impugnar, alegar o intervenir. Ello tiene profunda
relevancia en el desarrollo de todas las etapas procesales, dado que implica, para la
actuación de las partes, un permanente y debido conocimiento de la marcha del proceso,
para poder hacer uso de su derecho de defensa y del derecho a la prueba y poder
accionar en permanente igualdad.
En tal sentido, Salas (s.f.) nos enseña: Esta garantía derivada genéricamente del inciso 2
del artículo 2 de la Constitución política va de la mano con el principio de
contradicción. De ese modo, se tiene que, por un criterio de justicia, tanto la parte
acusadora como la parte que defiende al imputado tengan la posibilidad de actuar en
igualdad de condiciones en el proceso penal. Es decir, que las partes dispongan de
iguales derechos y oportunidades similares en el procedimiento a fin de expresar lo que
convenga a sus intereses y sirva para sustentar su posición. (p.57)
La garantía de la motivación. El artículo 135 de la Constitución Política del Perú
consagra como Principio de la función jurisdiccional el derecho la debida motivación de
las resoluciones judiciales. Al respecto, Rioja (2016) expone que constituye una
garantía fundamental al permitir que el justiciable pueda ejercer su derecho de defensa,
ya que el juez debe expresar en su decisión, de manera expresa respecto de todos y cada
uno de los aspectos controvertidos o alegados en el proceso judicial, es decir precisar las
razones por las cuales arriba a su conclusión.
Por su parte, (Vargas, 2011) sostiene que este principio está sustentado en la garantía
que tienen los justiciables en la obtención de una respuesta razonada motivada y
congruente con las pretensiones que oportunamente se formularon durante las etapas del
proceso, de tal forma que se pueda conocer cuál ha sido la deliberación que se ha
seguido para arribar a una decisión que tenga por finalidad la resolución del conflicto,
misma que no puede estar sustentada en el libre albedrio del juzgador sino en datos
objetivos tanto de los hechos, como del ordenamiento jurídico.
Asimismo Vargas (2011) menciona: El deber de motivación es sin duda una expresión
de la labor jurisdiccional, de allí que la obligación de motivar adecuadamente una

32
resolución judicial permita a la ciudadanía realizar un control de la actividad
jurisdiccional, y a las partes que intervienen en el proceso conozcan las razones por las
cuales se les concede o deniega la tutela concreta de un derecho o un específico interés
legítimo; en tal sentido los jueces tienen la obligación de expresar el proceso mental que
los ha llevado a decidir una controversia, asegurando que le ejercicio de impartir
Justicia, se haga con sujeción a la Constitución y la ley y, así mismo, facilitando un
adecuado ejercicio del derecho de defensa de los justiciables. (s.n) En efecto, el acuerdo
plenario, N° 6-2011/CJ-116, sobre la motivación escrita de las resoluciones judiciales,
emitido por la Corte Suprema de Justicia, en el VII pleno jurisdiccional de las salas
penales permanente y transitoria, en su fundamento 11° exponen: 11°. La motivación de
las resoluciones es una exigencia constitucional específica reconocida por el artículo
139°.5 de la Ley Fundamental, y a la vez es un derecho que integra el contenido
constitucionalmente garantizado de la garantía procesal de tutela jurisdiccional, que
impone al juez la obligación de que las decisiones que emita han de ser fundadas en
derecho.

Derecho a utilizar los medios de prueba pertinentes. Al respecto, Picó (s.f) expone:
El derecho a la prueba es aquel que poseen las partes consistente en la utilización de los
medios probatorios necesarios para formar la convicción del órgano jurisdiccional
acerca de lo discutido en el proceso, por lo que todas las pruebas pertinentes solicitadas
cumpliéndose los requisitos legales, deben ser admitidas y practicadas. En
consecuencia, la no práctica de un medio probatorio inicialmente admitido es o puede
ser una denegación tácita del derecho a la prueba (s.n).
Por su parte San Martín (2015) propone que la prueba (ya sea anticipada) o el acto de
investigación que se pretende postular, deben guardar conexión con los hechos materia
del proceso, así como que este tenga un grado de incidencia sobre el mismo, a afectos
de que pueda repercutir sobre la base de la acusación.
Como reflexión personal del investigador, tenemos que estos la importancia a estos
principios, radica en estos no solo son pautas o guías al amparo del poder que ostentan,
para concretizar los fines que persigue el proceso, sino que también establecen criterios
fundamentales, cuya práctica debe ser invocada no solo por quienes están revestidos del
poder de la jurisdicción, sino también por los demás sujetos procesales, cuyas
directrices fortalezcan el irrestricto respeto de sus derechos constitucionalmente
reconocidos.

33
3.1.1.2.El ius puniendi del estado en materia penal
Al respecto, Bustos (citado por Villa, 2014) define al ius puniendi por la potestad de
cual está premunido el Estado para declarar punible determinados actos, cuyas
consecuencias de esta declaración son las penas o medidas de seguridad.
A su vez, Velázquez, citado por Villa (2014) conceptúa “como la potestad radicada en
la cabeza del Estado, en virtud del cual, revestido de su poderío o imperio, declara
punible determinados comportamientos que por su especial gravedad atentan contra la
convivencia humana” (p. 128). Sobre ello, Villa, afirma que a través del ius puniendi,
los ciudadanos entregan al Estado, el poder de castigar las conductas antijuridicas
establecidas en la ley.

3.1.1.3.La jurisdicción
3.1.1.3.1. Definiciones
Sánchez (2009) define a la jurisdicción como aquella potestad jurisdiccional,
consistente desde la perspectiva constitucional en juzgar y hacer ejecutar lo juzgado,
atribuyéndose forma exclusiva a los juzgados y salas que los detentan en toda su
plenitud. En ese sentido, Echandía, citado por Sánchez, manifiesta que se debe entender
por jurisdicción aquella función pública de administrar justicia, en efecto al ser emanada
del estado y ser ejercida por un órgano especial, se declara el derecho.
Al respecto Oré (2016) nos enseña tres acepciones: como función, se refiere a la
actividad que lleva a cabo el Estado en aras de hacer efectiva la legislación sustantiva;
como poder, supone la atribución exclusiva y excluyente que tiene el Estado de
solucionar válida y oficialmente todo conflicto de intereses, e impedir la realización de
la justicia por propia mano. Así la jurisdicción también es entendida como la potestad
que tiene el Estado de aplicar el ius puniendi a aquel que haya infringido la norma;
como potestad, implica el “poder de ejercicio obligatorio”, por parte de ciertos órganos
del Estado, de aplicar el derecho objetivo a una controversia especifica. Por su parte
Rosas Yataco (2009) define a la jurisdicción como aquella potestad jurisdiccional,
consistente desde la perspectiva constitucional en juzgar y hacer ejecutar lo juzgado,
atribuyéndose forma exclusiva a los juzgados y salas que los detentan en toda su
plenitud. En virtud de ello, esta exclusividad supone que la jurisdicción es indelegable a
otros órganos y poderes.

34
3.1.1.3.2. Elementos
Al respecto Mamani (2015) enseña:
a). La notio, según es la facultad que tiene el juez de conocer el proceso penal durante el
juzgamiento, para lograr este objetivo deberá cerciorarse primero si es competente para
conocer el caso.
b) La vocatio: es la autoridad de la cual está revestida el juez de obligar a las partes del
proceso, para que concurran a la audiencia de juicio oral, bajo apercibimiento de ser
conducidos compulsivamente por la fuerza pública.
c) La coertio: es otra facultad que tiene el magistrado de compeler coactivamente al
cumplimiento de las medidas que ordena en el proceso.
d). El judicium: es el elemento por medio del cual el juez, tiene la autoridad de dictar
sentencia, para poner fin al proceso, con la autoridad de cosa juzgada.
e). La executio: implica que el juez requiere del auxilio de la fuerza pública para
ejecutar las resoluciones judiciales paraqué las sentencias cumplan con su objetivo,
tanto para acusado como para víctima. (p. 180)

3.1.1.4.La competencia
3.1.1.4.1. Definiciones
Tal como expone Peña Cabrera (2009), la competencia es la medida de la jurisdicción,
ya que el juez tiene jurisdicción, pero puede adolecer de competencia para conocer un
caso concreto; siendo ello así, el autor en mención refiere que etimológicamente, el
termino competencia viene de competeré, que significa corresponder, incumbir a uno
cierta cosa. Dentro de esta connotación, agrega el citado autor que la competencia es
debe entenderse como la medida en que la jurisdicción se distribuye entre las diversas
autoridades judiciales.
A su turno, Ore (2016) señala que la competencia es la potestad otorgada a un juez o
tribunal para tener conocimiento sobre determinados conflictos de relevancia jurídico
penal. En base a ello el autor enfatiza que la competencia penal conlleva la atribución de
dicha potestad a determinados juzgados o tribunales para conocer asuntos que versan
exclusivamente sobre materia penal.

3.1.1.4.2. Criterios para la determinación de la competencia penal


En efecto Oré (2016) señala: que son tres los criterios para determinar la competencia
penal, y estos son. Objetivo. que atiende a razones de materia y persona. Funcional. que

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atiende a la función que cumple un órgano jurisdiccional dentro del proceso. Territorial.
que atiende a razones geográficas.
a) Competencia objetiva: Al respecto Peña Cabrera (2012) define a la competencia
objetiva como aquella que se determina según la naturaleza del injusto, es decir se toma
en consideración la gravedad del delito, en razón del impacto social o la repercusión que
esta pueda generar en el ámbito de la sociedad.
De modo similar Ore Guardia (2016) expresa que dicha competencia está compuesta
por un conjunto de normas procesales que distribuyen el conocimiento de los asuntos
penales entre los órganos jurisdiccionales, analizando la menor o mayor gravedad de la
infracción penal y la calidad de quien se le imputa un hecho punible.
Competencia por razón de materia. El Código Procesal Penal, al determinar la
competencia por razón de gravedad del delito, establece que los juzgados penales
colegiados conocerán de los delitos señalados en el Código Penal, cuyo extremo mínimo
imponga una pena privativa de libertad mayor a seis años (art. 28.1 CPP 2004). En los
demás casos, serán competentes los juzgados penales unipersonales. (28.2 CPP 2004)
Competencia por razón de la persona. Según Sánchez, citado por Oré (2016) afirma
que “en este caso la distribución de la competencia está dada en razón de la función o
cargo que ocupa el imputado en el aparato estatal” (p. 207).
Competencia funcional En opinión de Peña Cabrera (2012) se determina según el grado
jerárquico del magistrado, dado que la Ley Orgánica del Poder judicial reconoce varios
grados funcionales de forma ascendente, que se inicia con los jugados de paz letrado,
hasta llegar a la máxima instancia jurisdiccional que es la Corte Suprema.
La etapa de la investigación, cuya dirección está a cargo del Ministerio, es el Juez de
investigación preparatoria quien asume el control de la legalidad y la constitucionalidad
de las actuaciones que se desarrollen en esta fase (art. 323 CPP) En la fase intermedia,
el CPP establece que el juez de la investigación preparatoria es el órgano competente
para conocer esta fase. En la fase de juicio oral, el CPP establece que el juez penal
unipersonal es el órgano competente para dirigir la fase de juicio oral en los procesos
por delitos sancionados con pena privativa de la libertad que su extremo mino de la
pena, no mayor a seis años (art. 28. CPP). Mientras que en los procesos por delitos
sancionados con pena privativa de la libertad que en su extremo mínimo de la pena es
superior a seis años, el órgano competente es el juzgado penal colegiado (art. 28.2 CPP).

Competencia territorial: Según el artículo 21° del Código Procesal Penal, la

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competencia por razón de territorio se establece en el siguiente orden: 1. Por el lugar
donde se sometió el hecho delictuoso o se realizó el último caso de tentativa, o ceso la
continuidad o la permanencia del delito. 2. Por el lugar donde se produjeron los efectos
del delito. 3. Por el lugar donde se descubrieron las pruebas materiales del delito. 4. Por
el lugar donde fue detenido el imputado. 5. Por el lugar donde domicilia el imputado.
2.2.1.4.2. La regulación de la competencia
Las competencias objetiva y funcional están reguladas en el capítulo II del Título II (La
competencia), sección III (La jurisdicción y competencia), del Libro Primero del
Código Procesal Penal, ya que tal como señala Rosas (2009) en cada una de las
disposiciones mencionadas se señala las competencias objetiva y funcionales de la
Sala Penal de la
Corte Suprema, de las Salas Penales de las Cortes Superiores; la competencia material y
funcional de los juzgados penales, la competencia de los Juzgados de Investigación
Preparatoria y finalmente de los juzgados de Paz letrado. La competencia territorial por
su parte se encuentra prescrita en el capítulo I del Título II (La competencia), sección III
(La jurisdicción y competencia) del Libro Primero del Código Procesal Penal.

2.2.1.4.3. Determinación de la competencia en el caso en estudio


En el caso concreto de estudio, los hechos que dieron origen a la denuncia, sucedieron
en la provincia de Piura, por lo tanto, de acuerdo a la competencia territorial, el proceso
penal se desarrolló en sus tres etapas, por órganos jurisdiccionales competentes del
distrito judicial de Piura. A ello debe agregarse que el espacio punitivo que prevé el
delito imputado, consiste en una pena privativa de la libertad no menor de 30 ni mayo
de 35 años, por lo que, de acuerdo a la competencia funcional, la sentencia fue emitida
por el Juzgado Colegiado Penal de la Corte Superior de Justicia de Piura y en Segunda
Instancia por la Sala Penal de Apelaciones de la Corte Superior de Justicia de Piura.

3.1.1.5.La acción penal


Peña Cabrera (2009) enseña que la acción o la teoría de la acción, es un tema de gran
relevancia el derecho procesal debido a que en la actualidad es evidente la injerencia del
estado al tratar de resolver conflictos de intereses surgidos entre los ciudadanos a través
del ejercicio de la función jurisdiccional.
De esta forma quedó desterrada la autodefensa, en la que primaba la venganza personal
o privada, asimismo señala el citado autor que, producida la acción de un delito, es

37
necesario que haya un actor para dar vida a la pretensión punitiva del estado, indicando
que este actor es el Ministerio Público, llamado también acusador y no el particular
afectado por el delito, como sí ocurre en el proceso civil.

3.1.1.5.1. Definición
Montero (citado por Neyra, 2015) define la acción penal como aquella facultad que
tiene el sujeto procesal, de instar el proceso, pidiendo que se ponga en marcha la
potestad jurisdiccional del Estado.
Por su parte Alcalá y Castillo (citados por Arbulú, 2014) la definen como el poder
jurídico de instar al aparato jurisdiccional a fin de que el juzgador se pronuncie acerca
de la punibilidad de los hechos que el titular de la acción penal establece como
constitutivos de delitos. En efecto Arbulú (2014) con una opinión personal, destaca que
la acción penal es la potestad de acudir al órgano jurisdiccional cuando se trata de
delitos de persecución pública, cuya potestad radica en el Ministerio Público, que
conforme a la ley penal puede disponer de esta.
De otro lado, Peña Cabrera (2009) considera a la acción penal como la potestad jurídica
persecutora contra la persona física que vulnere la norma jurídico penal, consiguiéndose
de esta forma promover la actividad del órgano jurisdiccional para descubrir el autor y
participes del hecho punible materia de imputación y aplicar la ley penal con una
sanción, para finalmente lograr el resarcimiento de los daños ocasionados por la
comisión del delito.

3.1.1.5.2. Clases de acción penal


Tal como enseña Nerya (2015) el C.P.P. señala que el ejercicio de la acción penal en los
delitos de persecución pública, corresponde al Ministerio Público, el cual la ejercerá de
oficio, a instancia del agraviado por el hecho delictuoso o por cualquier persona, ya sea
natural o jurídica, mediante acción popular.
De otro lado, para incoar la acción penal en los delitos de persecución privada, tal como
afirma Neyra (2015) corresponde ejercerla al directamente ofendido por el delito e
instarla ante el órgano jurisdiccional que goza de competencia.
Aunado a ello, refiere el citado autor que hay casos en los que se requiere la previa
instancia del directamente ofendido por el delito, para que el Ministerio Público ejerza

38
la acción penal, es decir el ejercicio de la acción penal por parte el Ministerio Público
está condicionada a la denuncia de la persona autorizada para hacerlo, en estos casos se
denomina acción penal semipública.

3.1.1.5.3. Características del derecho de acción


Para Sánchez, citado por (Neyra, 2015), tiene las siguientes características:
a) Pública: es de naturaleza pública, toda vez que existe una relación pública entre el
Estado y el justiciable, además, que existe un interés colectivo sobre el hecho que se
investiga, por encima de los intereses individuales.
b) Indivisible: pues la acción penal comprende a todas las personas involucradas en la
investigación judicial.
c) Irrevocable: En tanto que una vez iniciada la acción penal debe continuarse con la
investigación judicial y culminarse en una sentencia.
d) Intrasmisible: porque solo existe un legitimado para ejercerla, quien en la mayoría de
los casos será el fiscal (p. 267).

3.1.1.5.4. Titularidad en el ejercicio de la acción penal


Neyra (2015) sostiene que si bien el ejercicio de la acción penal en los delitos de
persecución pública, corresponde al Ministerio Público; en los casos de persecución
privada le corresponde ejercer directamente el ofendido por el delito ante el órgano
jurisdiccional competente. A su turno, según el maestro San Martín (2015), a través de
la disposición de formalización y continuación de la investigación preparatoria, el
Ministerio Público es quien promueve la acción penal, en el ejercicio público.

3.1.1.5.5. Regulación de la acción penal


El artículo IV, numeral 1 del Título Preliminar del Código Procesal Penal, establece:
“El Ministerio Público es titular del ejercicio público de la acción penal en los delitos y
tiene el deber de la carga de la prueba. Asume la conducción de la investigación desde
su inicio”. (C.P.P. 2004)

3.1.1.6.El proceso penal


3.1.1.6.1. Definiciones

39
En efecto Oré (2016) manifiesta que el proceso penal, es la sucesión de actos
procesales, previamente establecidos por ley, que están encaminados a aplicar el ius
puniendi, mediante la emisión de una sentencia que ponga fin al conflicto sometido al
órgano jurisdiccional, en esa línea argumental, el autor señala que los actos procesales
deben ser realizados de manera dinámica, desde el primer acto, hasta el último, puesto
que el primero es requisito del segundo, y así sucesivamente hasta finalizar el proceso.
Además, estos actos deben realizarse cumpliendo las exigencias y formalidades que la
ley procesal exige. El Código Procesal Penal Peruano, puesto en vigencia a través del
Decreto Legislativo 957, se adscribe a un sistema acusatorio contradictorio, no obstante
para el autor Neyra Flores (2015) lo contradictorio comprende una clara delimitación de
roles tanto para el fiscal, el imputado, como para el juzgador; en base a esas ideas, el
autor en mención citando a Gimeno Sendra, también refiere que: En cuanto a su
estructura, contempla un juicio concebido como contienda entre varios sujetos, como
relación triangular entre dos partes confrontadas (acusación y defensa) y un tercero, el
juez o tribunal, que ordena el debate, garantizando la igualdad de armas. Es lo que se
denomina esquema tríadico del proceso (p. 114). Por su parte Reyna (2015) refiere que
el proceso penal peruano ha asumido un sistema acusatorio con ciertos rasgos
adversariales. En efecto conforme al artículo IV del Título Preliminar del CPP, el
Ministerio Público asume la conducción de la investigación desde su inicio, mientras
tanto, conforme al artículo V del Título Preliminar del CPP, corresponde al órgano
jurisdiccional la dirección de la etapa intermedia y especialmente de juzgamiento, así
como expedir las sentencias y demás resoluciones previstas en la ley; de conformidad
con estas disposiciones, según el autor en mención se deduce las distintas funciones que
corresponde al Ministerio Público y al Juez.

3.1.1.6.2. Principios aplicables al proceso penal


Al respecto Neyra (2015), señala que los principios son máximas que configuran las
características esenciales del proceso (…) que dan sentido o inspiran a las normas
concretas, a falta de estas normas, los principios pueden resolver directamente los
conflictos (p. 117). De otro lado, Ore (2013) enseña que los principios del proceso penal
son criterios de orden jurídico político que sustentan y orientan el proceso en el marco
de una política global del Estado en materia penal. En virtud de ello el autor en mención
destaca que estos constituyen las bases sobre las cuales deben apoyarse los legisladores
y gobernantes para establecer, aislada y/o en conjunto, las formas procedimentales a las

40
que debe sujetarse el derecho penal de una nación.
Aunado a ello, refiere que los principios procesales cobran vital importancia, pues
desempeñan una labor esencial en la interpretación de diversas normas, permitiendo
comprender el sentido de leyes que muchas veces son imprecisas o vagas, asimismo
mediante una función integradora, permiten subsanar las deficiencias y lagunas
normativas existentes en el ordenamiento, siendo ello así, cuando el juez advierte la
existencia de vacíos, de manera supletoria debe aplicar los principios procesales.
El Principio de Legalidad. Al respecto Ortiz (2014) afirma que se trata de un principio
definitorio del proceso penal, el cual refiere que los delitos y las penas deben estar
debidamente establecidos por la ley, dado a que solo la ley determina las conductas
delictivas y sus sanciones. “Nullum crimen, nulla poene sine lege”, pues no existe
delito ni pena sin ley que lo haya establecido previamente. De ello deriva, que, en
nuestras sociedades, la ley debe ser escrita (Lex scripta) no determinada por los usos ni
la costumbre, anterior a los hechos (Lex praevia), estricta (lex stricta) no aplicable por
analogía en modo alguno y cierta (lex certa) de aplicación taxativa y plenamente
determinada. En efecto, Ortiz (2014) destaca que el principio de legalidad es en realidad
el principio de los principios y a la vez una garantía y un derecho fundamental de cada
uno. En tal sentido, se encuentra expresamente establecido por nuestra Constitución
Política del Estado en su Artículo 2 numeral 24 literal D, que dice: “Nadie será
procesado ni condenado por acto u omisión que al tiempo de cometerse no esté
previamente calificado en la ley, de manera expresa e inequívoca, como infracción
punible; ni sancionado con pena no prevista en la ley.”
Cabe señalar que en el Nuevo Código Procesal Penal, el Principio de Legalidad, se
encuentra enunciado entre otros, en el Artículo I numeral 2 del Título Preliminar del
CPP, que establece: “Toda persona tiene derecho a un juicio previo, oral, público y
contradictorio, desarrollado conforme a las normas de este código.” Ello nos recuerda
que el proceso penal se encuentra plenamente determinado, en forma previa, estricta y
cierta por la ley.
En efecto, este principio está presente en las diversas etapas del proceso consideradas
por el CPP. Así y para citar solo unos ejemplos: el Artículo 61 del CPP si bien establece
la independencia de criterio del Fiscal, señala que este criterio objetivo se rige por la
Constitución y la Ley. El art. 155 referido a la Prueba, igualmente consagra que la
actividad probatoria se rige por la Constitución y la ley, que determinan la admisión,
exclusión o reexamen de las pruebas; lo cual se encuentra concordado con el Artículo

41
157 del mismo.
El Principio de Lesividad. Al respecto Roxin, citado por (Villa, 2014) desde una
perspectiva constitucionalista, postula que el bien jurídico es una finalidad útil para el
individuo y su libre desarrollo, siendo ello así, el bien jurídico como objeto de
protección por el derecho penal, debe ser íntegramente lesionado o puesto en peligro
para que el derecho penal intervenga.
El Principio de la Proporcionalidad de la Pena. Para Villa (2014) se trata de una
prohibición legal cuando existe exceso en la punición de comportamientos, cuya base
esencial se encuentra derivada del principio de intervención mínima. En efecto, el autor
destaca que la proporcionalidad debe fijar un punto entre la pena que sea suficiente y
necesaria a la magnitud del daño realizado por el agente infractor, careciendo de
sentidos cualquier criterio de venganza o retribución taliional.
El Principio Acusatorio. Tal como señala (Espinoza, 2016), el Tribunal Constitucional
ya se ha pronunciado en relación a este principio, indicando en sus líneas rectoras que
no puede haber juicio sin acusación, debiendo ser formulada por persona ajena al
órgano jurisdiccional, de manera que, si ni el fiscal ni ninguna de las otras partes
posibles formulan acusación contra el imputado, el proceso necesariamente deber ser
sobreseído; más aún no puede condenarse por hechos distintos de los acusados ni a
persona distinta de la acusada, concluyendo que no pueden atribuirse al juzgador,
poderes de dirección material del proceso que cuestione su imparcialidad.
Por su parte Neyra (2015) opina que la función de acusación es privativa del Ministerio
Público (en acción privada es el querellante) y por ende el juzgador no puede sostener la
acusación, más allá de la posibilidad de incoar el control jerárquico, le está vedado al
órgano jurisdiccional ordenarle que acuse y menos asumir un rol activo, y de oficio,
definir los ámbitos sobre los que discurrirá la selección de los hechos, que solo compete
a la fiscalía.
En ese sentido, se establece el expediente Nº 2005-2006+-HC/TC-Lima. Caso: Manuel
Enrique Unmebrt Sandoval. Fundamento 6 prescribe: “La primera de las características
del principio acusatorio mencionadas anteriormente, guarda directa relación con la
atribución del Ministerio Público, reconocida en el artículo 159º de la Constitución,
entre otras, de ejercitar la acción penal. Siendo exclusiva la potestad del Ministerio
Público de incoar la acción penal y de acusar, a falta de esta, el proceso debe llegar a su
fin”.
El Principio de Correlación entre Acusación y Sentencia. Al respecto Neyra Flores

42
(2015) señala: El derecho a ser informado de la acusación no tendría razón de ser si el
tribunal decisor se pronunciara sobre hechos que no han sido contemplados en el
requerimiento fiscal, por ende, alegaciones sobre las cuales el imputado no ha tenido
oportunidad de contravenir ni preparar su defensa. En conclusión, el respeto del
principio acusatorio en su manifestación de correlación entre acusación y sentencia
garantiza el debido proceso al derecho de defensa en miras de su propia eficiencia. (p.
258)
De modo similar (Castillo (2016) sostiene que para que exista correlación entre
acusación y sentencia, se exige que el Tribunal se pronuncie enfáticamente sobre la
conducta punible descrita en la acusación fiscal, de modo que lo que se busca es una
congruencia procesal entre la acusación y la sentencia, la cual contendrá los hechos que
se declaren probados y la calificación jurídica a fin de imponer la sanción penal
correspondiente.
Sobre el particular, cabe señalar que, en virtud al principio acusatorio, al momento de
expedirse una sentencia condenatoria, se debe tener en cuenta las siguientes reglas:
1. Solo podrá tenerse por acreditados hechos u otras circunstancias descritos en la
acusación y en su caso en la acusación complementaria, salvo cuando favorezca al
imputado. 2. En la condena no se podrá modificar la calificación jurídica del hecho
objeto de la acusación o su ampliatoria, salvo que el juez penal haya planteado la
desvinculación conforme al artículo 374. Y 3. El juez no puede aplicar una pena más
grave que la requerida por el Fiscal, salvo que se suscite una por debajo del mínimo
legal sin causa justificada de atenuación. (Cubas, 2017, p.317)

3.1.1.6.3. Finalidad del proceso penal


Al respecto San Martín, citado por (Reyna, 2015), afirma: El proceso busca, pues,
proteger la integridad del ordenamiento jurídico penal, que, en nuestro país, no solo
importa imponer, siempre que dicho ordenamiento punitivo haya sido vulnerado, la
pena o medida de seguridad respectiva, sino también determinar conjuntamente las
consecuencias civiles de los mismos hechos. (p. 38)
En palabras del autor en referencia, el proceso penal tiene como fin principal de carácter
mediato, la realización del derecho penal material, en tanto manifestación de la Política
Criminal del Estado y como fin secundario de carácter inmediato la obtención de la
verdad procesal en el caso concreto.

43
2.2.1.6.5. Clases de Proceso Penal
2.2.1.6.5.1. Proceso Penal Común
Al respecto (Reyna, 2015) señala que el proceso penal común se encuentra regulado en
el Libro III del nuevo estatuto procesal penal, encontrándose dividido en tres fases o
etapas procesales: la investigación preparatoria, la etapa intermedia y el juzgamiento.
De modo similar, Salas (2012) señala que el Código Procesal Penal ha establecido un
proceso común, el cual comprende una estructura integrada por una etapa de
investigación preparatoria, etapa intermedia y etapa de juzgamiento, etapas durante las
que transita la noticia de la presunta comisión de un hecho delictivo, por el grado de
probabilidad o suposición de la acusación fiscal resultante de los elementos de
convicción recabados durante la investigación preparatoria, hasta llegar a la generación
de certeza o convicción en el juzgador.
Cabe indicar que, Rosas (2009) señala que el proceso penal común descansa sobre la
base de un modelo procesal acusatorio cuyas sub etapas y finalidades se distinguen,
dado que donde las funciones de investigación y de decisión están claramente definidas,
llevadas a cabo por diferentes órganos, cumpliendo cada uno su rol correspondiente.
Por su parte Cubas (2017) nos enseña que el Código Procesal Penal establece un trámite
común para todos los delitos contenidos en el Código Penal, asimismo dicho proceso
común cuenta con tres etapas, tales como la investigación preparatoria, la etapa
intermedia y la etapa de juzgamiento; en esa línea de ideas, se postula que el nuevo
proceso penal tiene carácter acusatorio, cuyas funciones de investigación y decisión
están delimitadas por órganos diferentes, sobre la base de los principios de inmediación,
publicidad , contradicción e igualdad de armas.

2.2.1.6.5.1.2. Etapas del proceso penal común


2.2.1.6.5.1.2.1. Etapa de investigación preparatoria
En efecto Reyna (2015) nos dice que esta etapa inicial, está regulada por la Sección I
del CPP, cuya finalidad genérica: reunir los elementos de convicción de cargo y de
descargo que permitan al Fiscal decidir si formula o no acusación. Asimismo, afirma
que esta etapa funge como un instrumento que permitirá al Ministerio Público establecer
si existe una causa probable de responsabilidad penal que le permita emitir acusación o
si, por el contrario, solicitar el archivamiento de la causa.
Esta etapa, según el doctor Neyra (2015) presenta dos sub etapas: las diligencias
preliminares y la investigación preparatoria propiamente dicha. En ese orden de ideas el

44
autor en mención haciendo un retrospectivo análisis en cuanto los plazos, indicó que si
bien, primigeniamente la casación 02-2008-La Libertad, estableció que la investigación
preparatoria tiene un plazo de 120 días, naturales prorrogables por única vez hasta un
máximo de 60 días simples, mientras que las diligencias preliminares, con un plazo
distinto, esto es de 20 días; sin embargo en la sentencia casatoria Nº 66-2010-Puno,
señala que tratándose de investigaciones complejas se establece un plazo de ocho meses
y la prórroga del plazo es por igual tiempo; posteriormente la Ley Nº 30076, modificó el
apartado 2 del artículo 334 y prescribió que el plazo de las diligencias preliminares es
de 60 días, salvo que se produzca la detención de una persona. No obstante ello el Fiscal
podrá fijar un plazo distinto según las características, complejidad y circunstancias de
los hechos objeto de investigación.
Sub etapa de Investigación preliminar. Para (Espinoza, 2016) esta sub etapa se
encuentra compuesta por los primeros actos de investigación desarrollados por la policía
nacional del Perú, direccionada bajo el Ministerio Público o ejecutados por el propio
fiscal que requiere realizar diversas diligencias de averiguación e indagación de los
hechos, en ese contexto, concluye que se tratan de actos urgentes e inaplazables que
constituyen presupuesto necesario para decidir la formalización o no de la investigación
preparatoria.
Formalización de la investigación preparatoria. Al respecto (Reyna, 2015) expresa:
Si de la denuncia de parte, del informe policial o las diligencias preparatorias, se
observan indicios reveladores de la comisión de un delito, que la acción penal no ha
prescrito, que se ha individualizado al imputado y se han satisfecho los requisitos de
procedibilidad, en el caso de existir los mismos, el Fiscal dispondrá la formalización y
continuación de la Investigación Preparatoria. Para la formalización de la investigación
preparatoria, el fiscal emitirá una disposición que contendrá: el nombre completo del
imputado, los hechos y la tipificación específica correspondiente, la cual puede ser
alternativa; el nombre del agraviado, y, de ser posible, las diligencias que de
inmediato deben actuarse. Para preservar el derecho de defensa del imputado, el
artículo 336.3 del CPP, impone la notificación del imputado, así como al Juez de la
Investigación Preparatoria. (p.73) Según lo señalado por el inciso 1° del Art. 321 del
Nuevo Código Procesal Penal 2004, DL 957, la investigación preparatoria persigue
reunir los elementos de convicción de cargo y de descargo, que permitan al Fiscal
decidir si formula o no acusación, y en su caso al imputado preparar su defensa.
Al respecto (Neyra, 2015) Citando a Montero Montero Aroca, la finalidad de la

45
investigación preparatoria no es preparar solo la acusación, sino que la actividad
preliminar debe servir tanto para lo que determina la inculpación como para la que la
excluye, es decir, debe servir para preparar tanto la acusación como la defensa.

2.2.1.6.5.1.2.2. La etapa Intermedia


Según Ore (2013) la fase intermedia es aquel conjunto de actuaciones orientadas a
verificar si la investigación preparatoria es completa y suficiente, y si se dan los
presupuestos necesarios para pasar a la fase de juicio oral, o por el contrario, para
proceder al sobreseimiento de la causa. En ese sentido, el autor destaca que esta fase
constituye una suerte de filtro que permite depurar el proceso de todo vicio, defecto o
irregularidad que impida tomar una decisión definitiva sobre su destino o pueda afectar
posteriormente una decisión sobre el fondo.
Por su parte Reyna (2015) sostiene que esta etapa tiene por finalidad determinar la
razonabilidad del inicio de un juicio oral y, en caso de decantarse por el mismo, allanar
el camino para la realización del juicio oral que en el nuevo modelo procesal es la parte
esencial del proceso penal.
De otro lado (Espinoza, 2016) afirma que solo en este escenario se podrá examinar el
material de forma y fondo que posee el Ministerio Público con la finalidad de dilucidar
si cuenta o no con la plena suficiencia para arribar o no a la postulación y desarrollo de
un posible juicio oral.
En ese orden de idas, Sánchez (2009) enseña que esta fase, empieza desde el momento
que se dispone la conclusión de la investigación preparatoria, hasta que se dicta el auto
de enjuiciamiento, o cuando el juez resuelve el sobreseimiento del proceso.
Actuaciones procesales en etapa intermedia
El sobreseimiento. Tal como señala Frisancho (2012) el sobreseimiento es la
resolución judicial decretada mediante auto motivado y a solicitud del representante del
Ministerio Público en virtud del cual se decide el archivo definitivo de lo actuado
debido a la inexistencia de los presupuestos necesarios para la apertura del juicio oral.
Por su parte, el autor Gimeno Sendra citado por (Espinoza, 2016), expresa que el
Sobreseimiento es la resolución judicial expedida por el órgano jurisdiccional
competente en la fase intermedia del proceso,” mediante el cual se pone fin a un
procedimiento penal incoado, con una decisión que, sin actuar el ius punendi, goza de la
totalidad o mayoría de los efectos de la cosa juzgada” (p. 202).
En efecto, Para (Cubas, 2017) el sobreseimiento es la negación anticipada del derecho a

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penar del Estado, y en todo caso es una declaración judicial del Estado la cual prescribe
que no es posible abrir el juicio oral, mostrándose inútil la continuación del proceso.
La acusación. Al respecto Flores, citado por (Espinoza, 2016) nos dice que “a través de
dicho documento, el imputado, ahora acusado, conocerá de los cargos concretos que
existen en su contra, la tipificación del delito, los elementos de prueba que lo sustentan
y las consecuencias jurídicas que se proponen (p. 213)”. Concluyendo así que la
acusación fiscal escrita constituye, un acto de postulación de la pretensión punitiva que
tiene el titular de la acción penal, que busca obtener luego del debate probatorio, una
sentencia de condena.
De otro lado Palacios (2011) manifiesta que la acusación fiscal tiene por contenido la
valoración de toda la etapa de investigación preliminar y concreta la pretensión
represiva reclamando al órgano jurisdiccional la aplicación de una norma penal
determinada.
Por su parte Cáceres (2009) enseña que la acusación fiscal o el requerimiento acusatorio
constituyen uno de los actos procesales propios del Ministerio Público, dado a que es
donde ejerce a plenitud su función acusadora, formulando ante el órgano jurisdiccional
los cargos de incriminación contra una persona determinada.
En líneas generales (Cubas, 2017) siguiendo los lineamientos de Colomer, afirma que la
acusación fiscal es el acto procesal mediante el cual se interpone la pretensión penal, la
misma que consiste en peticionar al órgano jurisdiccional que imponga una pena y una
reparación civil

2.2.1.6.5.1.2.3. Etapa de Juicio oral


Tal como afirma Espinoza (2016) El juicio oral, se compone por un conjunto de actos
formales ordenados conforme a un sentido lógico, es decir, la presentación de una tesis
incriminatoria, luego una antítesis, posteriormente la producción de pruebas y
finalmente la decisión, síntesis que manifestará el contenido de una conclusión
jurisdiccional. En esa línea de ideas, destaca que esta fase procesal es el escenario donde
se practicaran las pruebas de a cargo y descargo, espacio donde tienen lugar los
planteamientos de acusación y defensa basados en debates probatorios sobre
afirmaciones de hechos de relevancia penal.
En líneas generales Cubas (2017) enseña que el juzgamiento es la etapa plena y
principal del proceso penal, porque es la etapa que resuelve de modo definitivo el
conflicto social que subyace y da origen al proceso penal. Por su parte, para Palacios

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(2011), el juicio oral es la etapa principal del proceso, el cual se realiza sobre la base de
la acusación. Sin perjuicio de las garantías procesales reconocidas por la constitución y
los tratados de derecho Internacional de Derechos Humanos aprobados y ratificados por
el Perú.

2.2.1.6.5.2. Procesos especiales


Para (Neyra, 2015) son aquellos procesos que se efectúan en base a la materia a la que
están referidas, estos procesos están previstos para circunstancias o delitos específicos,
o en razón de las personas, o en los que se discute una concreta pretensión punitiva.

2.2.1.6.5.2.1 El proceso inmediato


El proceso inmediato se encuentra regulado en la sección primera del Libro Quinto del
Código Procesal Penal. Tal como expone Neyra Flores (2015) es aquel proceso especial
que, en aras de la celeridad de los procesos penales, pasa directamente de la fase
diligencias preliminares a la fase de juicio oral, obviando llevar a cabo diligencias de
investigación preparatoria y etapa intermedia del proceso común.
Por su parte, Sánchez, citado por (Meneses & Meneses, 2015) señala que es un proceso
que atiende al criterio de simplificación procesal, pues busca abreviar al máximo el
procedimiento. Agrega además el citado autor que la finalidad de este proceso especial
es evitar que la etapa de la investigación preparatoria sea innecesaria, otorgándole la
oportunidad al Ministerio Público de incoar directamente la acusación y que esta sea
admitida sin la necesidad de realizar la audiencia preliminar de la etapa intermedia.
En ese sentido Mendoza (2016), afirma: El proceso inmediato constituye uno de los
principales mecanismos de simplificación procesal, que se lleva a cabo cuando ocurre
una circunstancia extraordinaria (tasada) que permite abreviar el proceso penal,
prescindiendo de la etapa de investigación preparatoria y etapa intermedia y en el que la
causa queda expedita para el juicio oral. Tal como lo señala el profesor San Martin
Castro, su configuración legal no está en función de la entidad del delito ni de la idea
del consenso, sino de la presencia desde un primer momento de una circunstancia
objetiva referida a la notoriedad y evidencia de elementos de cargos, que permiten
advertir con visos de verosimilitud la realidad del delito objeto de persecución procesal
y la intervención del imputado. (p. 222)

48
2.2.1.6.5.2.2. Proceso de terminación anticipada
Al respecto Ore (2013) dice que la terminación anticipada es un proceso especial a
través del cual se promueve o facilita el acuerdo entre la parte acusadora y la defensa
sobre el hecho, la pena, la reparación civil y además consecuencias accesorias, a fin de
que el imputado admita su responsabilidad y negocie una posible rebaja de la pena que
le correspondería cumplir, destacando el autor en mención que el juez, luego de evaluar
el acuerdo entablado entre el fiscal y el imputado, se encuentra facultado para emitir una
sentencia sobre la base de los hechos admitidos, aceptando o rechazando el contenido.
Por su parte Rosas Yataco (2009) define a este proceso como el juicio que se le hace al
imputado en donde se le impone una pena, reparación civil y demás consecuencias
accesorias, por la comisión de un hecho de relevancia penal, prescindiendo del juicio
oral donde están presentes, la contradicción, la publicidad, la oralidad y la producción
de pruebas, previo a la conformidad entre el imputado, su defensor y el fiscal.
Cabe destacar lo afirmando por Neyra Flores, citado por Meneses (2016), quien indica
que el proceso de terminación anticipada consiste en el acuerdo entre el procesado y la
fiscalía, respecto, respecto de los cargos de la pena y reparación civil y, además,
consecuencias accesorias de ser el caso.

2.2.1.6.5.2.3. Proceso por faltas


En efecto Palacios (2011) enseña que las faltas serán aquellos actos ilícitos penales que
lesionan los derechos personales, patrimoniales y sociales, pero que, en su intensidad,
no constituyen delitos si bien es cierto existe gran cantidad entre delitos y faltas, la
diferencia se da en la menor intensidad criminosa de las faltas, en el caso de las faltas,
se ha determinado que serán competentes el Juez de Paz Letrado, y excepcionalmente
los Jueces de Paz.

2.2.1.6.5.2.4. Proceso de Seguridad


Al respecto Cáceres (2009) enseña que estamos ante un proceso, que se sigue contra
aquella persona sobre la cual ha recaído una resolución de incoación, debido a que,
previo examen pericial, se ha llegado determinar que se trata de un inimputable o sobre
aquella persona que ha consideración del fiscal, amerita imponer una medida de
seguridad.
De otro lado, (Reyna, 2015) manifiesta: Si a lo largo de la investigación o del
juzgamiento, el juez encargado de la misma advierte la posibilidad de que exista un

49
estado de inimputabilidad que genere ausencia de culpabilidad y como consecuencia de
ello la imposibilidad de imposición de pena, deberá solicitar la actuación de un examen
pericial que le permitirá verificar la efectiva concurrencia del estado de inimputabilidad.
(p. 112)

2.2.1.6.5.2.5. Proceso por delito de ejercicio privado de la acción penal.


Tal como considera Sánchez (2009), en este tipo de proceso, la persecución del delito le
compete exclusivamente a la víctima, pues solo a su petición se puede iniciar este
procedimiento, así lo establecido el artículo 1.2 del Código Procesal Penal, el cual
prescribe que, en los delitos de persecución privada, corresponde ejercerla al ofendido
directamente por el delito ante el órgano jurisdiccional competente.
La sección Cuarta del Libro quinto del CPP, está dedicada a regular el proceso por
delito de ejercicio privado por acción privada
2.2.1.6.5.2.6. Proceso por colaboración eficaz
Al respecto (Reyna, 2015) sostiene que “esta especialidad procedimental es aplicable
para todo aquel investigado, procesado o sentenciado que desee colaborar con el sistema
de administración de justicia penal y que para tal propósito se presente ante el fiscal
manifestando su disposición de proporcionar información eficaz”. (p. 169)

2.2.1.6.5.2.7. Proceso por razón de la función pública


Tal como manifiesta (Cáceres, 2009), el nuevo CPP ha diseñado un procedimiento
especial para juzgar a los más altos dignatarios y funcionarios de la Nación que cometan
delito en el ejercicio de sus funciones. Estos altos funcionarios conforme al artículo 99
de la carta fundamental son: el presidente de la Republica, los representantes del
Congreso, los Ministros de Estado, los miembros del Tribunal constitucional, los
Miembros del Consejo Nacional de la Magistratura, los Vocales de la Corte Suprema,
los Fiscales Supremos, el Defensor del Pueblo y el Controlador General, los cuales
serán procesados no por la persona de ellos, sino por la función púbica que cumplen.

2.2.1.6.5.4. Identificación del proceso penal de donde surgen las sentencias en


estudio.
Las sentencias de primera y segunda instancia, sobre delito de violación sexual de
menor de edad, se emitieron dentro de un proceso penal común, sobre la base de los
principios de oralidad, inmediación, contradicción y concentración.

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3.1.1.7.Los medios técnicos de defensa
Tal como manifiesta Ore (2013) son institutos de naturaleza procesal que forman parte
de la denominada defensa técnica y permiten oponerse a la prosecución del proceso
penal cuando no se ha cumplido con alguna condición de validez del proceso.

3.1.1.7.1. La cuestión previa


Esta cuestión tiene por finalidad sanear los defectos que podrían viciar la acción penal,
en virtud de ello Neyra (2015) siguiendo a Sánchez Velarde, afirma que “es una
institución eminentemente procesal, no solo porque se interpone dentro de un proceso
penal, sino que advierte la omisión de un requisito de procedibilidad previsto en la ley”
(p. 269). En esa línea, Oré Guardia, citado por Neyra, ha referido que esta tiene dos
fines de vital importancia: “i) Ofrecer resistencia a la iniciación de un proceso o de
impedir su continuación. ii) Actuar como remedio procesal al poner en evidencia que el
proceso se ha iniciado sin haberse cumplido con los requisitos exigidos por la ley” (p.
269).
3.1.1.7.2. La cuestión prejudicial
Tal como sostiene Ore Guardia, citado por Neyra (2015): La prejudicialidad es una
circunstancia que se produce por la relación de conexión entre las diversas ramas del
derecho y la especialización de los órganos de jurisdicción, que se impone por razones
de seguridad jurídica para que sea un solo órgano el que decida sobre el tema de su
especialidad y no órganos distintos que puedan llegar a conclusiones contradictorias
(p.274). En ese sentido Neyra (2015) siguiendo a Mixan Mass, señala que la cuestión
prejudicial es aquel hecho jurídico preexistente, autónomo, eventual que resulta
vinculado en situación antecedente a la conducta imputada, objeto del proceso penal,
vinculación que genera una duda sobre el carácter delictuoso del hecho que se imputa
como tal, en consecuencia se plantea la necesidad de suspender el proceso para remitir
aquel tema de naturaleza extrapenal a la correspondiente vía jurisdiccional para su
dilucidación y resolución definitiva.

3.1.1.7.3. Las excepciones


Cancho Alarcón, (2015) señala que si bien en todo proceso penal es indispensable la
existencia de condiciones que hagan posible el ejercicio del derecho de defensa,
consagrado en el art. 139. 14 de la Constitución y en diversos Instrumentos

51
internacionales de Derechos Humanos, estas condiciones deben incluir recursos que
permitan a las personas imputadas a ejercer su propia defensa desde el mismo instante
en que conocen la pretensión punitiva o la atribución de la comisión de determinado
hecho delictuoso, en ese contexto, nuestra legislación adjetiva incorpora las excepciones
como remedios tendientes a impugnar provisionalmente o definitivamente la
constitución.
a). Excepción de naturaleza de juicio. Neyra (2015) afirma que el Código Procesal
Penal del 2004 en su artículo 6 señala que “la excepción de naturaleza de juicio, se
interpone cuando se ha dado al proceso una sustanciación distinta a la prevista por la
ley” (p. 276). Es decir, cuando la vía procedimental para tratar el hecho punible
especifico, no es el adecuado.
b). Excepción de improcedencia de acción. En efecto Neyra (2015) siguiendo a
Palacios, menciona que es un medio de defensa técnico que tiene por función atacar el
ejercicio de la acción penal para extinguirlo o anularlo mediante su archivo definitivo.
Por ser una excepción de carácter perentorio, se conduce a extinguir la relación jurídica
procesal por carecer de fundamento jurídico válido de la acción ya promovida. En virtud
de su interposición el órgano decisor se encuentra ineludible a pronunciarse sobre el
fondo del proceso y no sobre cuestiones solamente formales.
b) Excepción de cosa juzgada. Al respecto, Nerya (2015) siguiendo los lineamientos
de Montero Aroca, señala: La cosa juzgada aparece como la institución que se utiliza
para que la resolución y sobre todo el proceso como un todo alcancen el grado de
certeza necesario, primero haciéndola irrevocable en el proceso en que se ha dictado;
segundo dotándole de una impronta especial frente a cualquier otro proceso presente o
futuro. En este sentido, la cosa juzgada se constituye en el valor que el ordenamiento
jurídico da al resultado de la actividad jurisdiccional, consistente en la subordinación a
los resultados del proceso, por convertirse en irrevocable la decisión del órgano
jurisdiccional (p. 282). c). Excepción de amnistía: Es todo aquel medio técnico de
defensa de carácter perentorio que busca oponerse al poder punitivo del Estado, dado a
que este se ha desistido de su persecución y castigo de un determinado delito a través de
una ley de amnistía promulgada por el congreso. Esta le quita el carácter delictuoso.
Tiene como efecto la cosa juzgada, sin embargo, no extingue los efectos civiles o
administrativos que pueda derivarse del acto punible. (Neyra, 2015, p. 287)
d). Excepción de prescripción. A propósito, Oré Guardia, citado por Neyra (2015),
señala que la Excepción de prescripción se constituye como aquel medio de defensa a

52
través del cual el sujeto pasible de la relación jurídico penal, esto es el imputado, se
opone a la percusión penal o a la ejecución de la pena por haber trascurrido el tiempo.

3.1.1.8.Los sujetos procesales


Neyra (2015) enseña que la denominación sujetos procesales es la más adecuada en
materia procesal penal para denominar a los intervinientes en él, pues incluye a todos
los sujetos que tienen relación directa con el proceso incluido el Juez, cuestión distinta
es denominar a aquellos intervinientes en el proceso como partes procesales, pues se
entendería que aludimos al solo al Ministerio Público como parte acusadora, imputado y
a su abogado defensor como parte acusada. Asimismo, Oré Guardia (2016) define a los
sujetos procesales: como toda persona pública o privada que interviene necesaria o
eventualmente en el proceso penal, bien por ser el titular del ejercicio de los poderes de
jurisdicción, acusación o defensa. Desde luego, ello implica que los sujetos procesales
intervienen y actúan conforme a las atribuciones o sujeciones que les asigna la ley.

3.1.1.8.1. El Ministerio Público


2.2.1.8.1. Definiciones
Tal como sostiene Oré (2016): El Ministerio Público es una institución autónoma y
jerárquica, representante de la sociedad y defensor de la legalidad, que promueve y
ejerce, de oficio o a petición de los interesados, la acción penal (y eventualmente la
acción civil) conforme lo establece el art. 159.5 de la Constitución, los artículos 1.1 y
60.1 del Código Procesal Penal de 2004, y el art. 11 de la Ley Orgánica del Ministerio
Público. (p. 271) Por su parte, Salas citado por Espinoza (2016) afirma que el
Fiscal es el titular del ejercicio de la acción penal y a quien se le confiere también la
carga de la prueba, quien mejor que él para plantear la estrategia de investigación y
desarrollarla conjuntamente con la policía, formulando sus hipótesis y conclusiones
cuando tenga conocimiento de una noticia criminal.
De otro lado Vincenzo (citado por Peña Cabrera, 2016) indica que en el ámbito de sus
funciones este órgano reviste el carácter de acusador, lo cual le da potestad para
intervenir en la relación jurídico procesal penal, invocando la pretensión punitiva
derivada del delito, a nombre y por cuenta del Estado.

2.2.1.8.2. Atribuciones del Ministerio Público


Constitucionalmente las facultades del ministerio público se encuentran reguladas en la
53
Constitución Política de 1993 artículo 159, las cuales son las siguientes:
a) Promover de oficio, o a petición de parte, la acción judicial en defensa de la legalidad
y de los intereses públicos tutelados por el derecho.
b) Velar por la independencia de los órganos jurisdiccionales y por la recta
administración de justicia.
c) Representar en los procesos judiciales a la sociedad.
d) Conducir desde su inicio la investigación del delito, con tal propósito, la Policía
Nacional está obligada a cumplir los mandatos del Ministerio Público en el ámbito de su
función.
e) Ejercitar la acción penal de oficio o a petición de parte.
f) Emitir dictamen previo a las resoluciones judiciales en los casos que la ley contempla.
g) Ejercer iniciativa en la formación de las leyes; y dar cuenta al Congreso, o al
presidente de la República, de los vacíos o defectos de la legislación.
En virtud de ello, Peña Cabrera (2016) manifiesta que conforme lo establece el art. 65
del Código Procesal Penal y el art. 1 de la Ley orgánica del Ministerio Público, este
tiene como función principal la de dirigir la investigación del delito con la finalidad de
lograr los elementos de convicción, asimismo tiene la función de acusación, de
impugnación y otros procedimientos complementarios. En consecuencia, el Ministerio
Público en su calidad de denunciante no se confronta con el imputado, sino que está
interesado en la correcta realización de la ley penal, es un vigilante y celoso guardián
del principio de legalidad.
De otro lado Arbulú (2014) expresa que la investigación es dirigida por el Ministerio
Público, institución que elabora la estrategia jurídica a seguir con el auxilio de la
policía.
En su intervención, se expresa el principio de oficialidad, esto es que la persecución
penal del delito se encuentra en la potestad de la Fiscalía. El Ministerio Público está
obligado a actuar con objetividad e indagar los hechos constitutivos del delito, esto es,
los que determinen y acrediten la responsabilidad o inocencia del imputado. Con esta
finalidad, conduce y controla jurídicamente los actos de investigación que realiza la
Policía Nacional. Este deber de objetividad del fiscal le impone, considerando entonces
como “sujeto” o “interviniente” del proceso, antes que como una “parte” en sentido
estricto, la obligación jurídica de proceder tanto en contra como a favor del imputado,
extendiendo así su investigación a las circunstancias tanto de cargo como de descargo.
Principios del Ministerio Público.

54
a) Principio de legalidad procesal. Este principio siempre ha sido identificado con la
obligatoriedad del ejercicio de la acción penal, es decir el órgano estatal de persecución
que representa el Ministerio Público debe efectuar la investigación en todos los hechos
que revistan caracteres del delito “sin poder suspender, revocar o terminar
anticipadamente la persecución penal (Oré, 2016).
b) Principio de objetividad: Por este principio los fiscales tienen la obligación de
investigar y agotar el examen de todas las hipótesis penales, tanto para la persecución
como para la defensa. Es decir, sin perjudicar ni favorecer a ninguno de los que
interviene en el proceso, dado que su actuación debe ser desinteresada o desapasionada,
debiendo atenerse únicamente a la realidad objetiva, que le permita, en ciertos casos,
incluso no acusar. En tal sentido el acusador público tiene el deber de ser objetivo, lo
que significa que sus requerimientos y conclusiones deben ajustarse a las pruebas y
derecho vigente, resulte contrario o favorable al imputado. No es un acusador a
outrance, sus requerimientos estarán orientados por lo que en derecho corresponda,
pues solo así cumplirá con el imperativo de ejercer sus funciones de defensa de
legalidad (Ore 2016. p. 274)
c) Principio de autonomía. Se entiende a la capacidad de autogobierno que tiene el
Ministerio Público para definir su actuación, como institución, dentro de sus funciones,
que dicho de otro modo, se puede entender como la prerrogativa de no ser influenciado
por otros poderes formales o materiales (grupos de poder político, económico, sociales)
al momento de planificar y ejecutar su programa político criminal. Tal autonomía no
implica que constituya un poder autárquico y que, por lo tanto, sea ajeno a los demás,
pues en todo momento este tendrá que respetar los límites que fija el congreso de la
réplica a través de la promulgación de leyes penales y procesales penales (Ore 2016. p.
274).
2.2.1.8.2. El Juez penal
Tal como lo sostiene Oré (2016) es la persona física que ejerce la potestad jurisdiccional
y que tiene la misión de resolver el conflicto generado por el delito, aplicando para ello
la ley penal. Además, tiene el deber de actuar durante el proceso en resguardo de las
garantías básicas consagradas en la constitución y los pactos internacionales de
derechos humanos.
Para Reyna (2015) el juez penal es un tercero independiente e imparcial,
predeterminado por ley, investido de potestad jurisdiccional en virtud de la cual
interviene y soluciona el conflicto. Esta condición de tercero imparcial es consecuencia

55
de la configuración político criminal del proceso penal en el Estado de Derecho, pero a
pesar de la aludida condición de tercero, no puede negarse que el Juez es el órgano
central del proceso penal al ejercer una función controladora de la legalidad de los actos
procesales de las partes y en la medida que es él quien finalmente determina la situación
jurídica de la persona imputada. Asimismo, enfatiza que el juez da inicio, controla,
juzga y resuelve las controversias mediante sus resoluciones, teniendo como ideales
irrenunciables, entre otros, la verdad y la justicia, actuando con estricta sujeción a la
Constitución.

2.2.1.8.1.2. Órganos jurisdiccionales en materia penal


a) Juez de investigación preparatoria: Esencialmente en la etapa de investigación
preparatoria e intermedia, el juez es uno de garantías y de legalidad de actuaciones, así
lo sostiene San Martín Castro (citado por Neyra, 2015, p. 322) quien a su vez señala las
funciones que detenta este órgano jurisdiccional:
Función de coerción: tiene por función la decisión sobre medidas provisionales: con la
finalidad cautelar de aseguramiento de las fuentes de prueba y de adquisición de la
prueba, y tuitiva y coercitiva; además de decidir en casos de medidas instrumentales
restrictivas de derechos fundamentales (allanamientos etc.)
Función de garantía: se presenta en el estricto ámbito de la investigación preparatoria y
se expresa en cuatro tipos de actuaciones: Tutela de derechos de los sujetos procesales,
a propósito de la actuación del Ministerio Público. Incorporación de los sujetos
procesales en la investigación, consolidando su intervención en las actuaciones.
Decisión acerca de las medidas de protección. Pronunciamiento sobre la culminación de
la investigación, en los casos donde es necesario el control de plazos.
Función de instrumentación o documentación: radicada en la actuación de la
denominada prueba anticipada, como excepción a la prueba plenaria, ha de observar
una serie de requisitos, que, a efectos metodológicos, estos se encuentran consagrados
en los artículos 242° - 246° del NCPP 2004.
Función ordenadora: que tiene lugar en la etapa intermedia, en cuya virtud el juez dirige
y dicta las decisiones relativas al sobreseimiento y enjuiciamiento del imputado,
decidiendo sobre la procedencia del juicio oral.
Función de decisión: es decir se pronuncia sobre el fondo de la pretensión penal, que se
limita en algunos casos a procedimientos simplificados, en el caso del CPP 2004,
tenemos a la terminación anticipada.

56
b) Juez de Juzgamiento: Tal como la doctrina mayoritaria lo ha señalado, la fase
principal de un sistema acusatorio en el proceso penal es el juicio oral, en virtud de ello,
el doctor Neyra (2015) señala que el CPP le confiere la conducción de tal trascendental
etapa al Juzgado penal, órgano carente de intervención en las fases precedentes, para de
esta manera mantener incólume su imparcialidad y dejar que sean las partes procesales
quienes mediante la prueba, le lleven información de calidad y con ello el juzgador
pueda tomar una decisión sobre la base de la sana critica racional. Por su parte Oré
Guardia (2016) opina que, en el proceso penal, el juez desempeña funciones de suma
trascendencia, como emitir una decisión sobre la situación del imputado dentro del
proceso penal, pronunciar un fallo definitivo sobre su responsabilidad o
irresponsabilidad, velar por la ejecución de la sentencia, así como resguardar que se
respeten las garantías del debido proceso.
A propósito, Cubas (2017) menciona que el artículo 28 del CPP ha establecido que los
juzgados penales estarán encargados de dirigir la etapa de juicio oral, los cuales se
dividen en Jueces penales unipersonales o Colegiados, estos últimos, están integrados
por tres jueces, los cuales tendrán por función conocer materialmente de los delitos que
tengan señalados en la ley, en su extremo mínimo una pena privativa de la libertad
mayor de seis años, mientas que los Juzgados penales unipersonales conocerán
materialmente de los delitos cuyo conocimiento no se atribuye a los juzgados penales
colegiados.

2.2.1.8.3. El imputado
“Es la persona a quien se le atribuye participación en el hecho punible, por lo común,
también es el sujeto pasivo de la acción penal”. (Peña Cabrera, 2016, pág. 602)
Por su parte Espinoza, 2016, expresa que “El imputado es la persona sobre quien recae
la incriminación de un hecho punible y la investigación del aparato estatal” (p. 131). De
modo similar Arbulú (2014) señala que imputado es aquel sujeto contra la que se tienen
elementos de convicción, de haber intervenido ya sea en calidad de autor o participe en
un hecho calificado como delito.
En esa línea de ideas, Oré (2016) define al imputado como aquel sujeto, persona física
contra quien se dirige la acción penal por ser presunto autor o partícipe de la comisión
de un hecho criminal. En virtud de ello, el autor en mención enfatiza sobre el papel
protagónico que recae en el proceso y es indispensable, como ocurre con el juez y fiscal,
para el desarrollo del mismo.

57
2.2.1.8.3.1. Derechos del imputado
El artículo IX del Título Preliminar del Código Procesal Penal del 2004, se consagra el
carácter inviolable e irrestricto de estos derechos, continente de otros, que son
enumerados de forma taxativa:
a) El conocimiento de la imputación o intimación como se conoce técnicamente.
b) El derecho de ser oído.
c) El derecho a que se le conceda un tiempo razonable para preparar su defensa.
d) El derecho a expresarse en todos los extremos.
e) La prohibición de obligar al imputado a declarar contra sí mismo y el derecho que
tiene el procesado a no declarar.
f) El derecho a ofrecer medios de prueba de acuerdo con su estrategia.
e) El imputado tiene derecho de ser asistido por un defensor desde el inicio de la
investigación, aún en el ámbito policial.

2.2.1.8.4. El abogado defensor


Según Arbulú (2014) la palabra abogado proviene de la voz latina advocatus, esta
palabra está formada por la partícula ad o “para” y el participio vocatus o “llamado”. Es
decir, llamado para la defensa.
Por su parte, Oré (2016) manifiesta que “es un sujeto profesional del derecho que brinda
asesoría jurídica a todo sujeto que lo requiera, y cuyo papel fundamental es garantizar el
respeto de los derechos de su defendido, y, sobre todo, garantizar la realización de un
debido proceso”. (p. 263)
Al respecto Peña Cabrera (2016) define al abogado defensor como la persona que asiste
jurídicamente al procesado, cuya presencia de este es para salvaguardar los derechos de
su defendido. Si bien el abogado defensor es sujeto interviniente en la relación procesal,
no tiene calidad de parte. Citando a Manzini “el defensor al no tener un interés personal
que hacer valer en el procedimiento, no puede al igual que el Ministerio Público, ser
considerado como parte” es decir el defensor es un mero representante de los intereses
de su patrocinado en juicio y como tal asume sus funciones dirigidas a hacer prevalecer
los derechos subjetivos inherentes al mismo.
De otro lado San Martín citado por (Espinoza, 2016) señala que “la defensa técnica
constituye un servicio público imprescindible que se presta aun contra la voluntad del
imputado, pues complementa su capacidad para enfrentar el proceso penal en igualdad

58
de armas y de forma eficaz” (p. 133). En esa línea de ideas, Carocca Pérez, citado por
Espinoza, nos dice que la presencia defensa técnica hace efectiva la garantía de la
defensa en el proceso penal, porque mediante la asistencia letrada se realizan los
principios de igualdad de armas y de contradicción, al establecerse equilibrio con el
Ministerio Público. En el modelo procesal penal, caracterizado por el derecho de
defensa, el abogado desempeña un papel de gran trascendencia, pues justamente el
litigio como medio o instrumento destinado a garantizar la protección del imputado, es
uno de los aspectos definidores del proceso adversarial. El carácter instrumental de la
función del abogado con relación al derecho de defensa técnica puede ser deducido con
claridad del contenido del artículo 84° del NCPP 2004.

2.2.1.8.4.1. Requisitos, impedimentos, deberes y derechos


Los derechos que ostenta el abogado defensor de vital importancia, pues de tales
derechos, dependerá su participación en el proceso y el ejercicio eficaz de sus
funciones, conforme a ello el artículo 84 del Código Procesal Penal establece que el
abogado defensor goza de los siguientes derechos:
Prestar asesoramiento desde que su patrocinado fuere citado o detenido por la autoridad
policial, Interrogar directamente a su defendido, así como a los demás procesados,
testigos y peritos, recurrir a la asistencia reservada de un experto en ciencia, técnica o
arte durante el desarrollo de una diligencia, siempre que sus conocimientos sean
requeridos para una mejor defensa, participar en todas las diligencias, excepto en la
declaración prestada durante la etapa de investigación por el imputado que no defienda,
aportar los medios de investigación y de prueba que estime pertinentes, presentar
peticiones orales o escritas para asuntos de simple trámite, tener acceso al expediente
fiscal y judicial para informarse del proceso, sin más limitación que la prevista en la
Ley, así como a obtener copia simple de las actuaciones en cualquier estado o grado del
procedimiento, Ingresar a los establecimientos penales y dependencias policiales,
previa identificación, para entrevistarse con su patrocinado, expresarse con amplia
libertad en el curso de la defensa, oralmente y por escrito, siempre que no se ofenda el
honor de las personas, ya sean naturales o jurídicas, Interponer cuestiones previas,
cuestiones prejudiciales, excepciones, recursos impugnatorios y los demás medios de
defensa permitidos por la Ley. (Oré, 2016, pág. 266)
Del mismo modo, el artículo 289º de la Ley Orgánica del Poder judicial prescribe que
los derechos principales del abogador defensor son los siguientes:

59
Defender con independencia a quienes se lo soliciten en cualquier etapa del proceso;
renunciar o negarse a prestar defensa por criterio de conciencia; informar verbalmente o
por escrito en todo proceso judicial, antes que se ponga fin a la instancia y a ser
atendido personalmente por los jueces cuando así lo requiera el ejercicio de su
patrocinio. (Oré, 2016, pág. 266)
Deberes y funciones del abogado defensor
El abogado defensor cumple funciones fundamentales en el proceso penal, pues tiene la
obligación de asistir a todas las diligencias que se practiquen, a fin de obtener la mayor
cantidad de información que le permita preparar su estrategia de defensa de manera
adecuada. Del mismo modo, el abogador defensor tiene el deber y derecho de guardar el
secreto profesional, es decir, bajo ningún motivo puede ser obligado a revelar lo que su
cliente le ha confesado; así lo establecen el Código de Ética de los Colegios de
Abogados del Perú (art. 10) y la Constitución (art. 2.18.) De este modo, el deber de
guardar el secreto profesional no se puede vulnerar a pesar que el cliente le haya
confesado ser autor o participe del hecho que se le está imputando.
Al respecto (Oré, 2016) enseña: El deber de defensa no se agota, naturalmente, en el
mero hecho de estar presente en las audiencias a las que es citado, sino en la realización
de una actividad profesional diligente y eficaz que colabore de manera efectiva con el
imputado, esto es, que cumpla cabalmente con la función encomendada.

2.2.1.8.4.2. La defensa particular


La defensa particular se refiere a la posibilidad que tiene el imputado de elegir
libremente al defensor que lo representará en el proceso, en atención a lo estipulado
en el artículo
139. 14 de la Constitución. Así lo establecen también el Pacto Internacional de
Derechos Civiles y Políticos (art. 14.3.d) y la Convención Americana sobre derechos
humanos. Los tratados internacionales y la Constitución garantizan que el imputado
cuente con una defensa técnica designada libremente por él.
2.2.1.8.4.3. El defensor de Público
En vista de que todos los que se encuentran inmersos en el proceso penal, bien en
calidad de autor o participe de un hecho delictivo, no tienen la posibilidad de nombrar
abogados particulares, principalmente por no contar con recursos económicos para ello,
cobran gran relevancia el rol que cumplen los defensores públicos. (Oré, 2016, p. 265),
De otro lado, para Arbulú (2014) es la defensa que se otorga para todos aquellos

60
imputados que, dentro de un proceso penal, por sus escasos recursos, no puedan
disponer de los servicios a un abogado defensor de su elección

2.2.1.8.5. El agraviado.
Según (Arbulú V., 2014) la víctima es el sujeto que se postula, o aparece como puntual
y concretamente ofendido por los hechos delictivos, es decir quien alega ser el sujeto
pasivo del hecho punible.
Siendo que para Sánchez (2009) victima puede ser una persona, grupo, entidad o
comunidad afectada por la comisión del delito; es decir, comúnmente es la persona que
sufre la acción delictiva y aparece en el proceso como agraviado.
En ese sentido Rosas Yataco (2009) considera que víctima es la persona ya sea
individual o jurídica que ha sufrido el daño o ha sido lesionada, pues esta lesión afecta
lógicamente al bien jurídicamente protegido.
Cabe señalar que el Código Penal regula en el capítulo 1 del Título IV la institución del
agraviado, diferenciándolo del actor civil propiamente dicho como parte procesal. En
los artículos 94 a 97 se precisa legalmente el concepto de agraviado y se regulan en
forma específica sus derechos y deberes procesales.

2.2.1.8.5.1. Intervención del agraviado en el proceso


Según Cáceres e Iparraguirre N (2009) la tendencia actual en el proceso penal moderno,
sugiere la incorporación de la víctima al sistema penal, como uno de los elementos
importantes a tener en cuenta, es por ello que ahora el agraviado puede intervenir en el
proceso y ejercer en él los derechos que el código adjetivo le confiere
Al respecto, en el art 95 del CPP, se consagran una serie de derechos: a) A ser
informado de los resultados de la actuación en que haya intervenido, así como del
resultado del procedimiento, aun cuando no haya intervenido en él, siempre que lo
solicite; b) A ser escuchado antes de cada decisión que implique la extinción o
suspensión de la acción penal, siempre que lo solicite; c) A recibir un trato digno y
respetuoso por parte de las autoridades competentes, y a la protección de su integridad,
incluyendo la de su familia. En los procesos por delitos contra la libertad sexual se
preservará su identidad, bajo responsabilidad de quien conduzca la investigación o el
proceso. d) A impugnar el sobreseimiento y la sentencia absolutoria.

61
3.1.1.9.La prueba.
La imposición de una sanción penal requiere de un juicio previo en el que se declare la
culpabilidad de un procesado por hecho penalmente relevante. En este juicio previo se
discute fundamentalmente dos cuestiones. En primer lugar, si el hecho factico en el que
se sustenta la imputación penal está debidamente probado y en segundo lugar, si ese
hecho puede subsumirse en el supuesto de hecho de la ley penal que legitima la
imposición de la sanción prevista como consecuencia jurídica. A la actividad procesal
dirigida a formar la convicción del juez sobre la realidad de los hechos penalmente
relevantes se le conoce como prueba. (García 2015, p. 19)

3.1.1.9.1. Definiciones
Al respecto, Hernandez (2012) sostiene que la raíz etimológica de la palabra prueba se
remonta al término latino “probo”, bueno, honesto, y a “probandum”, aprobar,
experimentar y patentizar, por lo que citando a Caroca, probar significa básicamente
convencer sobre la efectividad de una afirmación. En virtud de ello la autora en mención
expone: La prueba constituye una herramienta procesal, un instrumento técnico
empleado en el sistema de administración de justicia cuya utilidad consiste en producir
un estado de certidumbre (objetiva y subjetiva) en el juzgador respecto a la verdad o
falsedad de un determinado hecho, así como de la existencia o inexistencia de
responsabilidad de los sujetos involucrados en el mismo. (p. 10) Por su parte Maier,
citado por Arbulú (2012) considera que la prueba es todo aquello que, en el
procedimiento, representa el esfuerzo por incorporar los rastros o señales que conducen
al conocimiento cierto o probable de su objeto. Estos rastros o señales son los hechos
del proceso que permitirán probar o no responsabilidad penal. De otro lado Levene,
citado por Arbulú (2012) define a la prueba como el conjunto de actividades destinadas
a obtener el cercioramiento judicial acerca de los elementos indispensables para la
decisión del litigio sometido a proceso.
De acuerdo con (Neyra, 2015): Es la verdad a la que arriba cognitivamente el juez de
conocimiento sobre los hechos que las partes procesales han alegado y controvertido
mediante un proceso valido de contrastación de hipótesis en el juicio oral utilizando los
respectivos medios de prueba (…) en ese sentido, prueba es aquello que confirma o
desvirtúa una hipótesis o afirmación precedente en el proceso. Asimismo, constituye
una de las más altas garantías contra la arbitrariedad de las decisiones judiciales. (p.

62
220) Para Sánchez (2009), la prueba constituye una de las instituciones más
trascendentales en el proceso judicial, ya que como bien refiere este autor, a través
de ella se busca, demostrar la verdad y naturalmente significa un requisito
fundamental para la decisión final del juzgador. A su turno, Peña Cabrera (2009)
afirma que los actos de prueba son aquellos que se actúan en juicio oral, por tanto, en la
etapa de investigación preparatoria se realiza todo un recojo de objetos calificados
como medios de prueba y en otras circunstancias como objeto de prueba. Sin
embargo, para el tratadita Echandía, citado por Mamani (2015) la prueba es el medio
utilizado para llevarle al juez el conocimiento de los hechos.

3.1.1.9.2. El objeto de la prueba


Según el art. 156 del CPP, establece que: “son objeto de prueba los hechos que se
refieren a la imputación, la punibilidad y la determinación de la pena o medida de
seguridad, así como los referidos a la responsabilidad civil derivada del delito”
Sobre el texto acotado, Clariá Olmedo (citada por Hernandez,2012) manifiesta que, el
objeto de prueba es la materialidad sobre la cual recae la actividad, lo que se puede o
debe probar, no se trata propiamente del objeto procesal sino de los datos materiales
que, introducidos como elementos de convicción en el proceso, tienen capacidad de
producir un conocimiento relacionado con la conducta incriminada.
Habiendo definido los alcances del objeto de prueba, resulta importante hacer referencia
que el artículo 156.2 del CPP determina qué elementos no pueden ser considerados
objetos de prueba, precisando los siguientes:
a) Las máximas de la experiencia: Para Hernandez (2012), estás, están referidas a
normas de valor general y por ellas se entiende el conjunto de juicios fundados sobre la
observación de lo que ocurra comúnmente y pueden formularse en abstracto por toda
persona en el nivel medio mental. En otras palabras, las máximas de la experiencia son
reglas generales, extraídas de la experiencia cotidiana como producto de la observación
continua de la conducta humana y de los fenómenos naturales, que permiten predecir
que determinados estados de hechos conocidos y comprobados, pueden ser la causa o la
consecuencia de otros desconocidos pero que pudieran ser sus antecedentes lógicos y
probabilísticos.
b) Las leyes naturales. Al propósito, Neyra (2015) señala que “son manifestaciones
propias de la naturaleza, susceptibles de ser aplicadas al hombre y a la sociedad y que
por estar regidas de manera general no necesitan probarse” (p. 230).

63
c) La norma jurídica vigente: Al respecto Hernández (2012) manifiesta que se
entiende que la autoridad judicial conoce la normativa vigente, y por tanto, está
obligado a su cumplimiento y aplicación. A criterio del TC, para que una norma jurídica
se encuentre vigente, solo es necesario que haya sido producida siguiendo los
procedimientos mínimos y necesarios previstos en el ordenamiento jurídico, y que haya
sido aprobada por el órgano competente, en tanto que su validez depende de su
coherencia y conformidad con las normas que regulan el proceso (formal y material) de
su producción jurídica.
d) Aquello que es objeto de cosa juzgada: Hernández (2012) precisa que el TC se ha
pronunciado señalando que dentro nuestro ordenamiento jurídico, una garantía esencial
que informa el sistema de justicia y que encuentra expreso reconocimiento por la
Constitución, es el principio de cosa juzgada. Así, el inciso 2) del artículo 139 establece
que: “Ninguna autoridad (...) puede dejar sin efecto resoluciones que han pasado en
autoridad de cosa juzgada.
e) Lo imposible y lo notorio: Hernández (2012) menciona que en cuanto a lo imposible
debe entenderse como aquello que no es posible realizar o ejecutar, por lo tanto
irrealizable; y en cuanto a lo notorio, esto alcanza a lo evidente, visible, claro, obvio o
probado lo cual no merece un mayor análisis o discusión.

3.1.1.9.3. La valoración probatoria


Para Talavera (2017) la valoración probatoria es la operación intelectual destinada a
establecer la eficacia conviccional de los elementos de prueba ofrecidos, asimismo
tiende a determinar cuál es su real utilidad a los fines de la formación de la convicción
en el Juez sobre las afirmaciones que sobre los hechos dio origen al proceso.
En ese sentido Para Gascon, citado por Talavera (2017), la valoración de las pruebas es
el juicio de aceptabilidad de las afirmaciones aportadas al proceso a través de los
medios de prueba, en virtud de ello, valorar consiste en evaluar si esas afirmaciones
pueden aceptarse como verdaderas.
En esa línea de ideas (Hernandez, 2012) expone: Las valoraciones de la prueba solo
pueden ser, pues, valoración del rendimiento de cada medio de prueba en particular y
del conjunto de estos. Así, ese momento de valoración conjunta debe serlo del conjunto
de los elementos de prueba previamente adquiridos de forma regular y antes ya
efectivamente evaluados en su rendimiento específico. Es decir, el momento es de
síntesis de lo aportado por una serie articulada de actos individuales de prueba. Al final,

64
el juez deberá entender que existe prueba de cargo si y solo si la acusación tiene apoyo
en todas las pruebas producidas y soporta ser confrontada con todas las contrapruebas
practicadas a instancia de la defensa. Si la hipótesis acusatoria tomada como criterio
ordenador y clave de lectura de todos los datos probatorios obtenidos no los integra
armónicamente y los dota de sentido, existirá una duda relevante, con todas sus
obligadas consecuencias. (pàg. 27)
A su turno, Cáceres (2009) expone que la valoración de la prueba es el proceso
intelectual, que consiste en una interpretación por parte del magistrado, quien toma en
consideración la viabilidad probatoria asignada y el análisis en conjunto de los medios
probatorios consignados.

3.1.1.9.4. El sistema de sana crítica o de la apreciación razonada


A su turno, Veles citado por (Mamani, 2015) señala que este sistema establece plena
libertad en la apreciación de la prueba por parte de los jueces pero exige que las
conclusiones a que se llegue sean fruto razonado de las pruebas.
Sobre las características, de este sistema, al respecto (Neyra, 2015) señala: Las
características fundamentales de este sistema son: la inexistencia absoluta de dogmas
legales sobre la forma en que se deben probar los hechos y sobre el valor acreditante
que debe otorgársele a cada prueba, de modo que el juez pueda admitir cualquier medio
de prueba que estime útil y pertinente para comprobar el objeto de conocimiento, lo que
se traduce en una amplitud referida al principio de libertad probatoria. En tal sentido
este sistema presupone la libre valoración de los elementos producidos, en tanto la ley
no le preestablece valor alguno, y a su vez, la libertad de escoger los medios probatorios
para verificar la verdad de los enunciados sobre los hechos (p. 224).
En ese sentido, por disposición del artículo 393° del nuevo Código Procesal Penal, la
valoración probatoria debe especialmente respetar las reglas de la sana crítica conforme
a los principios de la lógica, las máximas de la experiencia y los conocimientos
científicos.
A) Reglas de la lógica: Talavera (2009) afirma esta reglas están conformados por las
leyes o principios lógicos que informan la validez del juicio de valor finalmente
expuesto en los autos, pues permite evaluar si el razonamiento en tanto estructura
discursiva, es formalmente correcto.
B) Las máximas de la experiencia: Tal como manifiesta Talavera (2009) estas están
conformadas por un conjunto de conclusiones extraídas de una serie de percepciones

65
singulares, pertenecientes a los más variados campos del conocimiento humano,
considerados por el Juez como suficientes para asignar un cierto valor a los medios
probatorios; señalando a su vez el citado autor, que estas máximas o reglas constan de
tres partes:
i) La percepción: es una fase de valoración, porque que sin antes haberse observado o
percibido, es imposible apreciar el valor probatorio de un medio de prueba.
ii) Representación de los hechos: el cual no debe omitirse ninguno, debiendo
coordinar con todos y colocarse en el sitio adecuado, para luego clasificarlos con
arreglo a su naturaleza, al tiempo y a las circunstancias de la realidad histórica que se
trate de construir.
iii) El razonamiento: sirve para realizar un análisis crítico, a fin de sacar conclusiones
respecto de cada uno de ellos y de todos en conjunto.
C) Los conocimientos científicos. Tal como señala Talavera (2009) estos
conocimientos se basan en las exigencias de racionalidad, de controlidad y de
justificación del razonamiento probatorio del juez, los cuales establecen que este deba
acudir a la ciencia, o a conocimientos que se forman por fuera del Derecho y que se
caracterizan por su aceptabilidad porque tienen su génesis en las primeras
investigaciones.

3.1.1.9.5. Principios de la valoración probatoria


Principio de pertinencia de la prueba. Por este principio (Neyra, 2015) afirma que la
pertinencia se exige sobre los hechos y los medios probatorios, en cuanto a la
pertinencia de los primeros, se exige que estos que configuran una pretensión o una
defensa, al haber sido afirmados por las partes o terceros legitimados, guarden una
relación lógica con el petitorio y guarde relación jurídico lógico con el supuesto de
factico de las normas cuya aplicación se solicita o se discute.
Principio de la comunidad de la prueba. Según lo afirmado por Barragan Salvatierra,
(citado por Neyra, 2015) por este principio, los medios probatorios que hayan sido
incorporados al proceso ya sea oficio o a pedido de parte, dejan de pertenecer a quien
los presentó, asimismo enfatiza que a consecuencia de ello, no resulta idóneo sostener
que los medios de prueba solo beneficien a quien los aportó, pues una vez que hayan
sido introducidos en el proceso, pueden ser tomados en cuenta para determinar la
ocurrencia o inexistencia del hecho a probar. Sánchez (2009) afirma que el
esclarecimiento de la verdad en el proceso, exige que todos los elementos de prueba

66
existentes en la causa penal, sin atender a que sujeto procesal los propuso u ofreció,
debe ser de conocimiento común de todos los sujetos procesales.
Principio de utilidad de la prueba. Para (Neyra, 2015) implica que solo serán
admitidos, incorporados en el proceso y actuados en el juicio oral, aquellos medios
probatorios que sirvan para el proceso de convicción del Juzgador, es decir aquellos que
sean necesarios para que el juzgador alcance la convicción sobre la existencia de hechos
que se quiere probar.
Principio de inmediación. Este principio, tal como lo expone Neyra Flores (2015) se
sustenta como una garantía para el imputado, pues el juez al tener un contacto directo
con las partes y con el material probatorio, está en mejores condiciones de emitir una
sentencia.

3.1.1.9.6. Etapas de la valoración de la prueba


Valoración individual de la prueba. Talavera (2009) señala que si bien es cierto es, es
preciso distinguir dos grandes fases en la valoración de la prueba, esta distinción no se
trata de una cuestión metodológica, sino que es el Código Procesal Penal, el ente
normativo que emite ese mandato, cuando señala que para la apreciación de las pruebas,
el Juez penal procederá examinarlas individualmente y luego conjuntamente con las
demás (art 393°, 2, CPP).

La apreciación de la prueba. La observación es un elemento esencial para la


adquisición del conocimiento, tanto más si en la ciencia del derecho, la producción de la
prueba está sujeta a reglas jurídicas y también a exigencias éticas, en la medida que la
única forma de alcanzar tal nivel de conocimiento es viendo y oyendo las fuentes de
información, controladas por las partes bajo la dirección del juzgador. (Talavera, 2009)
Juicio de incorporación legal. Talavera (2009) expone que es la fase de juzgamiento,
la etapa donde se produce, la formación y producción de la prueba, por tal motivo el art.
393 del CPP establece que para la deliberación, solo se podrán utilizar aquellas pruebas
que se hubieran incorporado legítimamente al juicio.
Juicio de fiabilidad probatoria (valoración intrínseca). Talavera (2009) afirma que el
juicio de fiabilidad de la prueba, tiene su fundamento en las características que debe
reunir un medio de prueba para cumplir su función y también busca que el mismo
medio pueda suministrar una representación del hecho que sea atendible sin errores y sin
vicios; citando un ejemplo sería que la fiabilidad de una prueba documental exigirá
67
un control de su autenticidad, mientras que una prueba testifical exigirá comprobar que
la misma cumpla todos los requisitos previstos en la ley.
Interpretación de la prueba. Luego de realizar la verificación de la fiabilidad del
medio de prueba, es necesario proceder a la interpretación de la prueba, es por ello que
Talavera (2009) afirma que con esta labor, el juez ha de tratar de determinar y fijar el
contenido que se ha querido trasmitir, mediante el empleo del medio de prueba por la
parte que la propuso, asimismo refiere el citado autor que mediante esta interpretación,
se busca extraer la información relevante, el elemento de prueba, por ejemplo, lo que el
testigo proporcionó como información acerca de algún hecho, lo que el documento
representa o las conclusiones del perito en su caso, en tal sentido la interpretación solo
se dirige a determinar el hecho que constituye el objeto de la prueba practicada, pues
con tal finalidad, el juez usa máximas de la experiencia que le orientan y le permiten
determinar el contenido fático que subyace a la prueba.
Juicio de verosimilitud (valoración extrínseca). En este juicio, Talavera (2009),
menciona que la apreciación de la verosimilitud de un resultado probatorio va a
coadyuvar en el Juez, la posibilidad y aceptabilidad del contenido que se obtiene de una
prueba esto, a través de su correspondiente interpretación; de tal forma que el órgano
jurisdiccional, en el ámbito de sus funciones, verifica la posibilidad abstracta de que el
hecho que ha sido obtenido de la interpretación del medio probatorio pueda responder a
la realidad.
Comprobación entre los hechos probados y los hechos alegados (Talavera, 2009)
nos enseña que el Juez, después de haber determinado qué hechos reputa verosímiles o
creíbles entre los expuestos a través de los medios probatorios y desechando todo
aquello que se le presenta como increíble o inverosímil, el juez se encuentra frente a dos
clases de hechos, de un lado, los hechos inicialmente alegados por las partes y de otro
lado, los hechos considerados verosímiles que han sido aportados a través de los
diversos medios de prueba practicados; es en ese momento que el juez ha de confrontar
ambas clases de hechos para determinar.
Valoración conjunta de las pruebas individuales. Un segundo momento en la
valoración de las pruebas viene constituido por el examen global de todos los resultados
probatorios obtenidos en la causa, por tales razones Talavera (2009) considera que la
importancia de una valoración completa, radica en que mediante esta, se garantiza que
el órgano jurisdiccional examine y tenga en cuenta todos los posibles resultados
probatorios, aunque posteriormente no sean utilizados en la justificación de la decisión

68
del thema decidendi.
La reconstrucción del hecho probado. Para considerar probado un hecho, el juez debe
utilizar un criterio de convencimiento, bien sea la verosimilitud, la atendibilidad o
cualquier otro, pero además debe cumplir con la obligación de indicar en la motivación
el criterio empleado, puesto que, si no da a conocer el criterio usado para elegir una
concreta versión del hecho a probar, la elección del juez se torna incontrolable o
irracional (Talavera, 2009, p. 122).
Razonamiento conjunto. La valoración completa de todas las pruebas practicadas
constituye un presupuesto útil necesario para lograr una valoración de las pruebas que
tenga en cuenta todos los elementos precisos para una adecuada redacción del relato de
hechos probados. En ese sentido no se debe perder de vista que la complitud en la
valoración evita que el juzgador pueda incurrir en algún vicio como la valoración
unilateral de las pruebas. (Talavera, 2009, pág. 121)

3.1.1.9.7. Las pruebas actuadas en el proceso judicial en


estudio 2.2.1.9.7.1. La denuncia
2.2.1.9.7.1.2. Definición
Neyra (2015) define la denuncia como el acto formal, mediante el cual la autoridad
policial o el Ministerio Público, acceden a conocer la existencia de un hecho que reviste
las características materiales de delito, asimismo, el citado autor afirma este acto formal
constituye una declaración de conocimientos acerca de la noticia de hechos que podrían
ser constitutivos de delito y que se realiza ante la autoridad competente.
A su turno Benavente (2012) conceptúa a la denuncia como “aquella declaración de
conocimiento acerca de la noticia de hechos que podrían ser constitutivo de un ilícito
penal perseguible de oficio que se hace ante el Ministerio Público o ante la autoridad
policial” (p. 101).

2.2.1.9.7.1.3. Regulación de la denuncia en el Código Procesal Penal


El artículo 326 del Nuevo Código Procesal penal indica que “cualquier persona tiene la
facultad de denunciar los hechos delictuosos ante la autoridad respectiva, siempre y
cuando el ejercicio de la acción penal para perseguirlos sea público.
Asimismo (Benavente, 2012) señala que con respecto a los legitimados en el deber de
formular denuncia son:
a) Quienes están obligados a hacerlo por expreso mandato de la Ley. En especial lo

69
están los profesionales de la salud por los delitos que conozcan en el desempeño de su
actividad,
así como los educadores por los delitos que hubieren tenido lugar en el centro educativo.
b) Los funcionarios que en el ejercicio de sus atribuciones, o por razón del cargo, tomen
conocimiento de la realización de algún hecho punible. (p. 100)

2.2.1.9.7.1.4. La Denuncia en el proceso judicial en estudio


Se observó en el expediente materia de análisis, objeto de acusación se remontan al 18
de diciembre de 2015, cuando la menor agraviada A.B.C.A le manifestó a su madre
L.A.A, los hechos de violación que realizaba su padre, por lo que ésta acudió a la
Comisaria de Las Lomas, denunciando a su conviviente J.C.L, que la había violado en
reiteradas ocasiones, mientras que la menor agraviada no le ha contado, ya que el
agresor su padre, la amenazó si decía lo sucedido, le pisaría el pescuezo y pegaría. La
madre de la menor, enterada del hecho, acudió en compañía de su vecina, R.S, donde
una obstetra, la que examinó a la menor y dijo que tenía sus partes íntimas lastimadas
que serían producto de violación, recomendando denunciar, motivo por el cual pasó
reconocimiento médico ginecológico, en tanto que la menor de 10 años de edad,
manifestó que cuando su madre se iba a trabajar al cultivo de uva en las madrugadas, su
papá aprovechaba para pasarse a su cama bajarse su short y decirle que jugarían al papá
y a la mamá luego de quitarle la ropa intentar besarla, mamarle los senos, de abrirle las
piernas e introducir su pene y tapar su boca para que no grite, la primera vez fue un mes
antes de la denuncia ya mencionada, agregando que cuando su padre terminaba de
violarla, botaba un líquido blanco en sus piernas y cuando iba al baño veía ese líquido
en sus partes, hechos que se subsumirían en el delito de Violación Sexual de menor de
edad. (Expediente Nº 05374- 2016-2-2001-JR-PE-01, del Distrito Judicial de Piura -
Piura, 2020.)
2.2.1.9.7.2. La testimonial
2.2.1.9.7.2.1. Concepto
En efecto Neyra (2015) enseña que el testimonio “es la declaración prestada ante un
órgano judicial por personas físicas acerca de sus percepciones de hechos pasados en
relación con los hechos objeto de prueba, con el propósito de contribuir a la
reconstrucción conceptual de estos”. (p. 270)
Por su parte Sánchez (2009) manifiesta que el testimonio judicial es la declaración que
una persona denominada testigo realiza ante la autoridad judicial en base a un hecho que

70
ha tenido conocimiento, pues según como señala el referido autor, el testimonio permite
informar al juez sobre determinados hechos que desconoce.
En ese sentido, Angulo (2009) afirma que la prueba testimonial es considerada como el
aporte procesal de las partes, que reviste mayor importancia en el vigente sistema
procesal penal, el cual le otorga a los sujetos procesales el pleno e irrestricto derecho de
contradicción, de confrontación y de defensa.
A propósito, Rosas (2009) expresa un concepto sobre el testimonio, entendido como la
narración que realiza una persona física, quien es llamada al proceso penal, para que
declare sobre lo que ha percibido de sus sentidos, respecto de los hechos que son
materia de juzgamiento, con la finalidad de contribuir a la reconstrucción conceptual de
estos.
La palabra testigo proviene del latin “Tetis” que alude al individuo que se encuentra
directamente a la vista de un objeto y conserva su imagen, de esta forma el testigo, el
cual constituye órgano de prueba, está llamado a dar a conocer sobre hechos que han
caído sobre el dominio de sus sentidos de forma directa. Sobre ese particular, Neyra
(2015) citando a Carneluti señala que “no es narrador de un hecho sino narrador de una
experiencia, al cual constituye además del presupuesto, el contenido mismo de la
narración” (p. 270).
Clases de testigos: Al respecto Neyra (2015) señala:
a) Testigo directo o presencial: este testigo es aquel que ha percibido sensorialmente en
forma directa los hechos sobre los que se declara.
b) Testigo de referencia. La figura del testigo de referencia o testigo indirecto es
acogida también por el CPP, cuando en el inciso 2 del artículo 166, se establece que “si
el conocimiento del testigo es indirecto o se trata de un testigo de referencia, debe
señalar el momento, lugar, las personas y los medios por los cuales los obtuvo”. Ello en
razón a que si el testigo de referencia ha tomado conocimiento de los hechos que son
objeto de prueba de forma indirecta, a través de lo referido por otras personas. En este
caso, el juez no logra la representación de los hechos valiéndose directamente del
testigo que los presenció, sino de otros que oyeron a aquel referirlos (p. 273).

2.2.1.9.7.2.2. Regulación
Las cualidades están señaladas en el Artículo 162º del Nuevo Código Procesal Penal
2004 que en principio establece que toda persona es, en principio, hábil para prestar
testimonio, excepto el inhábil por razones naturales o por impedido por la Ley. El

71
testigo tiene obligaciones entre las cuales están la de concurrir a las citaciones y de
responder a la verdad a las preguntas que se le hagan: Si el testigo no se presenta a la
primera citación se le hará comparecer compulsivamente por la fuerza pública.
El artículo 166º del Nuevo Código Procesal Penal establece las características de la
declaración de los testigos tiene que versar sobre lo percibido en relación con los hechos
objeto de prueba; si es un testigo indirecto debe señalar el momento, lugar, las personas
y medios por los cuales lo obtuvo. No se admite al testigo expresar los conceptos u
opiniones que personalmente tenga sobre los hechos.

2.2.1.9.7.2.3. Valor probatorio


Cuando no encontramos ante un caso en el que el agraviado, tiene la calidad de único
testigo de la proposición fáctica materia de análisis, resulta de aplicación lo previsto en
el fundamento 10 del Acuerdo Plenario N° 2-2005/CJ-116, el mismo que señala que:
“Tratándose de las declaraciones de un agraviado, aun cuando sea el único testigo de los
hechos, al no regir el antiguo principio jurídico testis unus testis nullus, tiene entidad
para ser considerada prueba válida de cargo y, por ende, virtualidad procesal para
enervar la presunción de inocencia del imputado, siempre y cuando no se adviertan
razones objetivas que invaliden sus afirmaciones. Las garantías de certeza serían las
siguientes: a) Ausencia de incredibilidad subjetiva. Es decir, que no existan relaciones
entre agraviado e imputado basadas en el odio, resentimientos, enemistad u otras que
puedan incidir en la parcialidad de la deposición, que por ende le nieguen aptitud para
generar certeza. b) Verosimilitud, que no sólo incide en la coherencia y solidez de la
propia declaración, sino que debe estar rodeada de ciertas corroboraciones periféricas, de
carácter objetivo que le doten de aptitud probatoria. c) Persistencia en la incriminación.
(p.3)
Asimismo, cabe destacar que no es posible establecer exigencias rigurosas en los
testimonios inculpatorios en los delitos sexuales, conforme lo ha dejado establecido el
Acuerdo Plenario No 001-2011/CJ-116, por lo cual, debemos señalar que la
uniformidad y firmeza del testimonio inculpatorio en los delitos sexuales ha de
flexibilizarse razonablemente, sobre todo cuando se presentan una excesiva extensión
temporal de las investigaciones. (Diario el Peruano, 2012)

2.2.1.9.7.2.4. La testimonial en el caso concreto en


estudio Testimoniales

72
A.B.C.A.- Manifestó que tiene 11 años de edad, la relación con su padre era tranquila,
sólo la castigaba cuando se portaba mal, su casa tenía un sólo ambiente, dividido con un
plástico, ella dormía con su mamá y su hermano con su papá, habían dos camas, su
madre trabajaba en la uva y se iba a las 4 de la mañana, regresando en la tarde, ella se
quedaba con su padre desde las 4 a.m hasta las 7.45 cuando se iba al colegio, sus padres
tenían peleas con la señora R, su mamá y la señora R la llevaron a revisar, porque
andaba con fatiga y vomitaba, allí le vieron algo mal en su calzón, algo blanco, después
de la posta a llevaron a la comisaria porque le contó a su mamá que su papá abusó una
sola vez de ella y la señora R. escuchó y su madre le tuvo que contar, la llevaron al
médico con la señora R, pues su papá le hizo algo y botó un líquido blanco afuera,
afirmando que sólo su padre le ha hecho esto, le sobaba su pene en su partes íntimas.
L.E.A.A. Adujo ser esposa del procesado, con 11 años de casada, 2 hijos, llevando una
buena relación con ellos y su esposo, quien además se llevaba bien con sus hijos, ella
trabajaba de 4 de la madrugada hasta las 5 de la tarde, dejando a sus hijos con su
esposo; dormía con su esposo, y sus hijos en otra cama juntos, otras veces su esposo
dormía con su hija, la menor le contó que como estaba oscuro, se fue a la cama de su
esposo, que éste se subió encima y le pasó el pene por afuera, él dijo que no le había
introducido, sólo le rozó, le contó a su amiga R la que llamó a su hermana, quien le
aconsejó que la lleve a un centro de salud, la obstetra la revisó y notó que le había
pasado algo, no acompaño a su hija al médico legista, ella inicialmente no le creyó a la
menor, porque R. decía que ella mentía y la llevó por eso, no ha tenido peleas con R, el
sustento de su hogar se le llevaba su esposo.
R.N.C.S.- sostuvo que un día la mamá de la menor la llamó y le dijo que su hija le
contó que su papá abusó de ella, que le había sobado, besado e incluso penetrado,
cuando la mamá se iba a trabajar, por lo que decidieron ambas espiar a la menor y a su
padre, lo que hicieron de 4 a 6.30 de la mañana, se escondieron ambas, pero no
escucharon nada, ella incluso llegó a la casa con el pretexto de pedir prestado una
coladera a eso de las seis de la mañana y no notó nada raro, le preguntaron a la menor y
ésta les dijo que su papá la había tocado, aunque ellas no escucharon nada, por eso la
llevaron a la posta y la obstetra la examinó, dijo que su calzón olía como a lejía, les
aconsejó que denunciara, pues dicha obstetra notó la presencia de semen, fueron a la
comisaria, al médico legista se fue con ella, la niña estaba mal, no le contó nada, ella les
manifestó que no avisó porque su padre le dijo que si contaba le aplastaría el pescuezo,
no ha tildado de mentirosa a la menor, salvo en discusiones entre niños, la menor

73
tampoco refirió que otra persona la haya abusado, solo se refirió a su padre.
M.C.M.N.- Manifestó que es obstetra, labora en un centro de salud de las Lomas, el 18
de diciembre del 2015 le requirieron una consulta obstétrica, evaluó a la menor porque
la madre lo sugirió y dijo que se trataba de un caso urgente, le comento que la niña
había sido abusada sexualmente por su padre, del mismo modo la menor le comentó que
había sido violada por su papá que este había introducido su pene en su vagina, sin
embargo no hizo la denuncia antes porque su papá la tenía amenazada, la menor
siempre refirió que fue su papá, les recomendó que vayan a la comisaria y pase por el
médico legista. Al examen le encontró secreción vaginal en la ropa interior de la menor
y percibió olor a lejía, viendo en los genitales externos de ésta una sustancia que podía
ser semen, motivo por el cual les dijo que vayan a la comisaría de las Lomas y emitió un
documento, donde puso lo que encontró, que había laceraciones en los genitales
externos y olor de lejía en el calzón de la menor, así como en sus genitales.
C.N.CH.C. Manifestó que hace siete años es perito, ha elaborado y firmado la pericia
N° 5083-2016, con una evaluación a la menor en tres sesiones: el 29 de abril, 5 mayo y
12 de marzo del 2016 en la División Médico Legal, donde concluyó que la menor
clínicamente tiene nivel de conciencia acorde a su edad cronológica, denota entender su
realidad, indicadores de episodios depresivos graves relacionados con experiencia
negativa de tipo sexual requiriendo tratamiento psicoterapéutico continuo y
especializado, aplicó el test de Anamnesis, entrevista psicológica, test de la familia, el
test de la figura humana, la persona bajo la lluvia y del árbol. La peritada tenía 11 años
al momento de la evaluación y evidenciaba angustia manifestada en su expresión facial,
con demostración de tristeza, se tomaba de las manos, estaba cabizbaja, así como
cuando narraba los hechos lloraba, no denotaba motivación secundaria, en cuanto al
relato la menor indicó que le contó a su mama y a ella le dolía lo que su papa le hacía, lo
de la violación, cuando tuvo 10 años su papá se levantó de noche y ella también a tomar,
agua se fue a la cama de su papá pensando que era su cama, su papá se bajó su short de
jugadores y su calzoncillo también, e introdujo su pene en su vagina y sintió correr
agua, luego se fue a su cama y ella no podía dormir, vio su trusa con algo blanco como
agua, se sacó la trusa y le dio a su mamá para que la lave, su hermano Sebastián le
preguntó porque había dormido con su papá, y muestra llanto al momento de narrar los
hechos.
El diagnóstico presenta episodio depresivo grave, tiene 44 en la escala de ansiedad que
es grave en cuanto a depresión, presenta pesadillas, alteraciones de sueño, acompañadas

74
de síntomas psicosomáticos, tiene sentimiento de culpa, provocado por la injerencia
materna, desesperanza y frustración, presenta temor al sexo masculino.
Las respuestas de la menor fueron espontaneas y coherentes, detalló elementos, forma y
circunstancias que no evidenciaban contradicciones.
R.V.E.O.G: Refirió que evaluó a C.L, en el protocolo de pericia N° 1919-2016 el peritado
C.L tiene una personalidad con rasgos disociales y sugiere una evaluación por médico
psiquiatra. El método que utilizó fue la entrevista y la observación de conducta, en un
inicio el peritado se mostró callado y evasivo, posteriormente narró los hechos sin
sentimiento de culpa y de manera continua, mostrando poca seguridad ante situaciones
de conflicto, muestra poca tolerancia a la frustración. El peritado dijo: “que no había
penetrado a, dijo que él dormía solo y su hija dice que se pasaba a su cama y la
penetraba, dijo que el solo se bajaba el cierre y dormía con short y nunca se lo sacó, se
subía encima de ella y eyaculaba fuera de ella, una vez le cayó en su pierna derecha,
intentó besarla pero A no se dejaba, no recuerda haberla besado en los senos”. El
peritado refirió que ha mantenido relaciones con una “burra” 2 ó 3 meses al mes cuando
ya tenía mayoría de edad, nunca ha ido a un prostíbulo presentando un conflicto en el
área sexual. No tiene sentimientos de pena a los tocamientos para con su menor hija.
H.G.N. Perito biólogo ha realzado el examen pericial practicado a la ropa interior de la
menor agraviada, encontrándose la presencia espermatozoides, se utilizó el método de
observación mediante luces alternas. La muestra se analizó con lámparas forenses y al
microscopio, concluyendo que observó la presencia de espermatozoides en la prenda
examinada.
S.I.P.S. Manifestó que es bióloga realiza diversas pericias molecular y genética entre
ellas examen de ADN, hizo la pericia N° 284-2016 del 31 de mayo del 2016
perteneciente a la sangre del acusado C.L, igualmente la comparó con el ADN
encontrado en trusa de mujer que pertenece a la agraviada, encontrando el mismo ADN
con un índice de verosimilitud del 99.999999%.
T.H.P.V. Médico legista hizo el examen a la menor A.B.C.A, y emitió el examen
médico legal N° 15092-EIS elaborado el 18 de diciembre del 2015, donde concluyó que
la menor de 10 años, tenía himen con desfloración antigua, con desgarro completo a
horas IV, ano sin signos de coito contra natura, con dos equimosis en el muslo
izquierdo; en la data la menor refirió que su madre trabajaba y su papá abusó de ella, le
bajó la ropa y se subió encima de ella arrojando algo blanquito, fue penetrada en dos
fechas no sangró y que eyaculó fuera de su vagina, la última vez fue el día del peritaje,

75
la menor no menstruaba y le refirió que el mismo día fue examinada por una obstetra la
que le introdujo el dedo porque tenía bastante descenso y encontró además dentro del
examen hizo el hisopado de una trusa desteñida de dicha menor, indicando que el
examen que le realizó la obstetra fue el mismo día que concurrió a medicina legal.
(Expediente Nº 05374-2016-2-2001-JR-PE-01, del Distrito Judicial de Piura - Piura,
2022.)

2.2.1.9.7.3. Documentos
Sobre la etimología de la palabra documento, para el autor Barragán Salvatierra, citado
por Neyra (2015) “proviene de la voz latina docere, que significa enseñar, de donde
derivó documtum que significa título o prueba escrita” (p. 333). En virtud de ello, al
entenderse en un sentido gramatical, se considera documento a la escritura o medio
autorizado con que se prueba, confirma o corrobora una cosa.

2.2.1.9.7.3.1. Concepto
Tal como lo indica Espinoza (2016) documento es todo elemento que representa un
hecho o situación, es preexistente al proceso penal, es decir se crea u origina con
independencia de las investigaciones o pesquisas.
Según (Neyra, 2015) “se debe entender al documento como todo soporte material capaz
de representar un hecho o un acto humano atestado por el documentador en el mismo,
con prescindencia de la forma en que esa representación se exteriorice” (p. 333).
En palabras de Angulo (2009) la prueba documental es el instrumento probatorio que se
compone por la representación de un acto humano configurado en un documento; por su
parte Mixan citado por (Cáceres e Iparraguirre, 2009) sostiene que documentos es todo
medio que contiene con carácter permanente, la representación actual, técnico,
científico, empírico o la aptitud artística de un acto cuya significación es entendible de
inmediato y de manera inequívoca por el sujeto cognoscente.

2.2.1.9.7.3.2. Clases de documentos


Al respecto, Neyra (2015) señala que los manuscritos, los impresos, fotocopias, fax,
disquetes, películas, fotografías, radiografías, representaciones gráficas, dibujos,
grabaciones magnetofónicas y medios que contienen registro de sucesos, imágenes,
voces y otros similares, tienen calidad de documentos

2.2.1.9.7.3.3. Regulación
76
Al respecto, Neyra (2015), señala: En ese sentido el CPP, en el art. 184, inciso 1,
reconoce que tienen calidad de documentos: los manuscritos, los impresos, fotocopias,
fax, disquetes, películas, fotografías, radiografías, representaciones gráficas, dibujos,
grabaciones magnetofónicas y medios que contienen registro de sucesos, imágenes,
voces y otros similares, señala, además que se podrá incorporar al proceso todo
documento que pueda servir como medio de prueba. (p. 333)

2.2.1.9.7.3.4 Valor probatorio


En palabras de Angulo (2009) una documental, para ser considerada medio de prueba,
se exige que en el proceso sea útil, pertinente y mediante el principio de inmediación, le
permita al juez tener convicción sobre un hecho controvertido; aunado a ello, puede ser
considerado como medio de prueba, cuando lo que se busca es que dicho documento sea
autentico, recayéndole esta actividad de probanza.

2.2.1.9.7.3.5 Documentos existentes en el caso concreto en estudio


 Acta de denuncia verbal N° 229-2015-Las Lomas, efectuado por la madre de la menor.
 Acta de intervención policial del 18 de diciembre del 2015, realizado por la denuncia de
la madre de la menor.
 Certificado médico legal N° 015092 del 18.12.2015 que se actuó con la declaración del
médico legista.
 Acta de constancia domiciliaria del 19 de diciembre del 2015, donde constan los
ambientes de la vivienda donde se produjeron los hechos.
 Paneux fotográfico de 12 fotografías tomadas en el exterior e interior del domicilio del
acusado y menor agraviada.
 Copia de DNI de la menor agraviada de iniciales A.B.C.A. consta que nació el 7 de
marzo del 2005.
 Original de la partida de nacimiento de la menor de iniciales A.B.C.A. donde consta
nació en Las Lomas y su padre es W.J.C.L.
 Protocolo de pericia psicológica N° 005083-2016 practicada a la menor de iniciales
A.B.C.A. actuado con el perito
 Protocolo de pericia psicológica N° 000192016 practicado al acusado W.J.C.L, Actuado
con el perito.
 Prescripción emitida por la obstetra de la licenciada M.C.M.N.
 Dictamen pericial N° 201600010006 de fecha 04.01.2016 actuado con el perito.

77
 Prueba de ADN practicado y homologado con las muestras de sangre del acusado,
actuado con perito.
 Prueba pericial N° 201600010006 que advierte presencia de esperma en el calzón
incautado perteneciente a la menor agraviada, actuado con el perito.
2.2.1.9.7.4. Reconocimiento
2.2.1.9.7.4.1. Concepto
Para el Doctor Neyra (2015) el reconocimiento de persona “es la diligencia que se
realiza ante los órganos de persecución, dirigido a reconocer mediante las facultades
visuales a quien se supone está involucrado en la participación de un hecho punible” (p.
337).
De modo similar, Peña Cabrera (2012) enfatiza que el reconocimiento de personas, es la
diligencia que efectúa, dirigida a reconocer mediante facultades visuales a quien se
supone está involucrado en la participación de un hecho punible, sin interesar el grado
de participación delictiva. En efecto al establecer el precepto que el imputado no puede
ser traído apara su plena identificación, quiere decir dos cosas: que este aún no ha sido
aprehendido, o en su defecto, que no puede ser conducido de forma coactiva, pues
estaría afectando un derecho fundamental, situación esta última que debe ser valorada y
apreciada según las características del caso en concreto. Sin embargo, el imputado no
tiene porqué aportar prueba en su contra, en tal sentido no puede ser coaccionado para la
comprobación de su propia culpabilidad. En consecuencia, cuando aún el sospechoso no
es detenido o este se niega a ser conducido a la diligencia de reconocimiento, procederá
su reconocimiento a través de fotografías u otros registros.
Por su parte su parte Rosas Yataco (2009) haciendo mención al art.189.3, señala que
cuando el imputado no pudiera ser traído, a la entidad persecutora, ésta para su
identificación podrá utilizar su fotografía, u otros registros tales como las Fichas del
RENIEC observando las mismas reglas análogamente del reconocimiento en rueda de
persona, estableciendo dicho autor que durante la investigación preparatoria deberá
presenciar el acto el defensor del imputado o, en su defecto, el Juez de la investigación
preparatoria, en cuyo caso se considerará la diligencia un acto de prueba anticipada.

2.2.1.9.7.4.2. Regulación
Tal como lo ha dispuesto el CPP, en el inciso 1 del Art. 189º, se ordenará el
reconocimiento cuando fuese necesario individualizar a una persona, “es así que este

78
medio de prueba se utiliza para la individualización o identificar personas o cosas
relacionadas con el delito objeto de investigación” (Neyra, 2015, pág. 340).
El CPP ha establecido un procedimiento a seguir para llevar a cabo esta diligencia, el
mismo que a desarrollarse como sigue:
Quien lo realizará previamente, describirá a la persona aludida, es decir, sus
características que lo individualizan, por ejemplo: sexo, estatura, color de piel,
contextura,
etc. Acto seguido, se le pondrá a la vista junto con otras de aspecto exterior semejantes
(en rueda). En presencia de todas ellas, y/o desde un punto de donde no pueda ser visto,
se le preguntará si se encuentra entre las personas que observa aquella a quien se
hubiere referido en sus declaraciones y, en caso afirmativo, cuál de ellas es. (Art. 189,
inciso 1 del CPP).
En ese orden de ideas, según Neyra (2015) se trata de garantizar la libre determinación
del reconocerte, evitando el contacto con la persona quien está reconociendo en aras
evitar cualquier tipo de presión.
De otro lado, la misma norma señala que cuando el imputado no pudiere ser traído se
podrá utilizar su fotografía u otros registros, observando las mismas reglas
analógicamente. En efecto, Neyra (2015) opina que el reconocimiento por fotografía no
solo procede cuando la persona a reconocer no esté presente, sino que además se
requiere que sea imposible conseguir la presencia de la persona, constituyendo así de
forma subsidiaria, esta diligencia una garantía.

2.2.1.9.7.4.3. Valor probatorio


Al respecto Castillo (2009) enseña el reconocimiento como acto definitivo e
irreproducible, dada su naturaleza psicológica, en etapas preliminares, no es posible
garantizar el principio de contradicción o de control de la prueba por la defensa del
detenido, sin cuya verificación a nivel judicial la prueba es fácilmente cuestionable,
perdiéndose una brillante oportunidad de alcanzar la verdad; motivo por el cual indica
que el trabajo policial debe limitarse a reconocimientos fotográficos, postergándose el
reconocimiento de persona para el nivel judicial, a fin de que con una forma de
actuación adecuada, sea este importante acto probatorio inatacable.

2.2.1.9.7.4.4. Reconocimiento en el caso concreto en estudio


El reconocimiento Manifestó que tiene 11 años de edad, la relación con su padre era

79
tranquila, sólo la castigaba cuando se portaba mal, su casa tenía un sólo ambiente,
dividido con un plástico, ella dormía con su mamá y su hermano con su papá, habían
dos camas, su madre trabajaba en la uva y se iba a las 4 de la mañana, regresando en la
tarde, ella se quedaba con su padre desde las 4 a.m hasta las 7.45 cuando se iba al
colegio, sus padres tenían peleas con la señora R, su mamá y la señora R la llevaron a
revisar, porque andaba con fatiga y vomitaba, allí le vieron algo mal en su calzón, algo
blanco, después de la posta a llevaron a la comisaria porque le contó a su mamá que su
papá abusó una sola vez de ella y la señora R. escuchó y su madre le tuvo que contar, la
llevaron al médico con la señora R, pues su papá le hizo algo y botó un líquido blanco
afuera, afirmando que sólo su padre le ha hecho esto, le sobaba su pene en su partes
íntimas.

2.2.1.9.7.5. La pericia
2.2.1.9.7.5.1. Concepto
Al respecto, Cáceres, citado por (Espinoza, 2016), sostiene que “la prueba pericial es
una actividad procesal, decretada judicialmente y realizada por sujetos diferentes a las
partes del proceso, quienes ostentan una calificación especial en razón de los
conocimientos, científicos, técnicos, artísticos o especializados que poseen.
De otro lado, San Martín (2015) enseña que la pericia constituye un medio de prueba de
carácter complementario, en mérito del cual obtienen diversas actividades de
observación, recojo de vestigios materiales y análisis de sus diversos componentes, el
cual da lugar a un informe o dictamen, cuya base de conocimientos son de vital
importancia para poder conocer o apreciar los hechos relevantes materia de
juzgamiento. Por su parte Cafferata Nores, citado (Neyra, 2015) señala que “es el medio
probatorio por el cual se intenta obtener, para el proceso, un dictamen fundado en
especiales conocimientos científicos, técnicos o artísticos, útil para el descubrimiento o
valoración de un elemento de prueba” (p. 289).
De otro lado, (Peña Cabrera (2012) nos enseña que la pericia procederá siempre que
para la explicación y mejor comprensión de algún hecho, se requiera conocimiento
especializado de naturaleza científica, técnica, artísticas, o de experiencia calificada,
haciendo mención del art 172.1 del CPP; de modo accesorio señala que la necesidad de
la prueba pericial se sustenta en la necesidad de esclarecer, ciertas materias del
conocimiento que por su complejidad necesitan ser explicadas por un experto, esto es,
por un perito.
2.2.1.9.7.5.2. Regulación
80
El Artículo N° 178 del CPP, regula el contenido del informe pericial oficial en los
siguientes términos:
a) El nombre, apellido, domicilio y Documento Nacional de Identidad del perito, así
como el número de su registro profesional en caso de colegiación obligatoria. b) La
descripción de la situación o estado de hechos, sea persona o cosa, sobre los que se
hizo el peritaje.
c) La exposición detallada de lo que se ha comprobado con relación al cargo d) La
motivación o fundamentación del examen técnico. e) La indicación de los criterios
científicos o técnicos, médicos y reglas de los que se sirvieron para hacer el examen. f)
Las conclusiones. g) La fecha, sello y firma. Asimismo, menciona que el informe
pericial no puede contener juicios respecto a la responsabilidad o no responsabilidad
penal del imputado en relación con el hecho delictuoso materia del proceso ya que no es
función del perito dicha determinación, sino ilustrar al juzgador respecto de un tema en
particular por el cual ha sido nombrado.

2.2.1.9.7.5.3. Valor probatorio


Es importante enfatizar lo mencionado por Neyra (2015) quien destaca que la fuerza
probatoria del dictamen pericial será valorada conforme a los principios de la sana
crítica y la libre convicción. El CPP prevé pautas ejemplificativas que deberá
especialmente tener en consideración la competencia de los peritos, la uniformidad y
disconformidad de sus opiniones, los principios científicos, criterios técnicos, medios y
reglas de los que se sirvieron para hacer el examen en que se fundan, su concordancia
con las leyes de la sana crítica y las demás pruebas y elementos de convicción que el
proceso ofrezca.
Asimismo (Neyra, 2015) menciona que será a la luz de la experiencia, la lógica y el
recto entendimiento humano, que ameritará el dictamen del perito, debiendo agudizarse
la tensión en ese particular elemento pues será menester añadir a aquella, reglas
orientadoras y en especial detenimiento por tratarse de cuestiones técnicas o científicas
que requieren una singular apreciación.
De otro lado, Darío Palacios (2011) manifiesta que la eficacia probatoria de la pericia
debe ser valorada por el Juez teniendo en cuenta la competencia del perito, la
uniformidad o disconformidad de sus opiniones, los principios científicos en que se
funda, a la concordancia de su aplicación con las leyes de lógica y los demás elementos
de convicción.

81
2.2.1.9.7.5.3. La pericia en el caso concreto en estudio
Que evaluó a C.L, en el protocolo de pericia N° 1919-2016 el peritado C.L tiene una
personalidad con rasgos disociales y sugiere una evaluación por médico psiquiatra. El
método que utilizó fue la entrevista y la observación de conducta, en un inicio el
peritado se mostró callado y evasivo, posteriormente narró los hechos sin sentimiento de
culpa y de manera continua, mostrando poca seguridad ante situaciones de conflicto,
muestra poca tolerancia a la frustración. El peritado dijo: “que no había penetrado a A,
dijo que él dormía solo y su hija dice que se pasaba a su cama y la penetraba, dijo que
el solo se bajaba el cierre y dormía con short y nunca se lo sacó, se subía encima de ella
y eyaculaba fuera de ella, una vez le cayó en su pierna derecha, intentó besarla pero A
no se dejaba, no recuerda haberla besado en los senos”. El peritado refirió que ha
mantenido relaciones con una “burra” 2 ó 3 meses al mes cuando ya tenía mayoría de
edad, nunca ha ido a un prostíbulo presentando un conflicto en el área sexual. No tiene
sentimientos de pena a los tocamientos para con su menor hija.

3.1.1.10. La sentencia
2.2.1.10.1. Etimología
El termino Sentencia, el cual proviene del latín Sententĭa contrae una serie de
significados que le dan una esencia particular al concepto de Sentencia. Sententĭa
proviene de “sentiens, sentientis” participio activo de “sentiré” que significa sentir. Al
estudiar la etimología de la palabra nos damos cuenta que una sentencia es más que la
decisión de un órgano competente (Juez) hacia una persona que cometió algún fallo por
el que debe ser sancionado. Una sentencia implica los sentimientos que el juzgador
pueda tener frente a la controversia. Luego de esto, se aplicarían las normas
correspondientes a la decisión tomada, es lo que se llama en el ámbito jurídico “Luz”.
(Concepto definición, s.f.)

2.2.1.10.2. Definición
Es la resolución judicial que decide definitivamente un proceso o una causa o recurso o
cuando la legislación procesal lo establezca. Las sentencias, después de un
encabezamiento, deben expresar en párrafos separados los antecedentes de hecho, los
hechos que han sido probados, los fundamentos de Derecho y el fallo. Deben ir
firmadas por el Juez, Magistrado o Magistrados. Asimismo, pueden ser dictadas de viva
voz cuando lo prevea expresamente la legislación procesal aplicable. (Enciclopedia
82
juridica, s.f.)

2.2.1.10.3. La sentencia penal


En palabras de Manuel Frisancho (2012) la sentencia penal es aquella resolución
emanada del órgano jurisdiccional con la que finaliza un proceso penal, teniendo como
fundamento la decisión sobre la absolución o condena del acusado, así como
resolviendo todos los extremos que se vinculan a la responsabilidad civil, derivados del
hecho punible.
Por su parte Vadillo, (s.f) sostiene que “la sentencia penal es el acto jurisdiccional que
definitivamente pone la última piedra al proceso en la instancia, en la apelación o en la
casación, resolviendo así la cuestión criminal sometida al juzgador” (p. 500).
2.2.1.10.4. La motivación de la sentencia
Motivar una sentencia es justificarla o fundamentarla, es un procedimiento discursivo o
justificatorio, como afirma Taruffo. La motivación implica siempre dar razones o
argumentos a favor de una decisión. Los jueces tienen la obligación de justificar pero no
de explicar sus decisiones. Motivar las sentencias significa, pues, justificarlas, y para
lograrlo no cabe limitarse a mostrar cómo se ha producido una determinada decisión, es
decir, no basta con indicar el proceso psicológico, sociológico, etcétera que lleva a la
decisión, al producto. (Talavera, Pablo, 2010, pág. 12)

2.2.1.10.4.1. La motivación como justificación de la decisión


Tal como sostiene (Angel & Vallejo, 2013): Esta teoría se refiere a la finalidad
perseguida con la motivación, entendiendo así, que motivar es una justificación de la
decisión adoptada en la sentencia. En la estructura de la decisión del juez (la sentencia),
habrá siempre una parte en la que éste se dedique a justificar que la decisión que ha
tomado es jurídicamente valida, y esta parte de la sentencia, es la que se conoce como la
motivación. Se ha señalado así, que “la resolución ha de estar motivada, es decir,
contener los elementos y razones de juicio que permitan conocer cuáles han sido los
criterios jurídicos que fundamentan la decisión (p. 9).
En esa línea argumental, el autor Aliste Santos, (citado por (Angel & Vallejo) establece
que motivar una resolución judicial implica: Justificar la decisión haciendo explicitas las
diversas inferencias lógicas, es decir, el cuerpo argumentativo, compuesto por un
razonamiento de tipo deductivo, inductivo o hipotético que conduce a la decisión
judicial. Así pues, motivar una decisión judicial no implica describir el proceso de toma

83
de decisión sino su justificación, la correcta inferencia que conduce el razonamiento de
las premisas a la conclusión;” 13 y así mismo, con este razonamiento que el juez debe
realizar se logre “acreditar o mostrar las concurrencias de unas razones que hagan
aceptable desde el punto de vista jurídico una decisión tomada para resolver un
determinado conflicto. (p. 10)

2.2.1.10.4.2. La motivación como actividad


Cabe destacar lo afirmado por (Angel & Vallejo, 2013) cuando señalan: Otra dimensión
en la que puede ser entendida la motivación, es como una actividad del juez, en la que
se hacen razonamientos de naturaleza justificativa, entendidos como controles
realizados antes de concretar la decisión. Es decir, el juez limita sus razonamientos
únicamente a lo que efectivamente puede argumentar, esta perspectiva se refiere a que
la esencia de la motivación es servir como autocontrol del propio juez. En ese sentido,
Colomer, citado por Angel y Vallejo, afirma que la motivación “como actividad debe
ser entendida como los razonamientos justificativos que hace el juez con anterioridad a
la redacción de la decisión, es decir, previos a la construcción del discurso concreto de
justificación” (s.f).

2.2.1.10.4.3. La motivación como discurso


En efecto, las autoras, (Angel & Vallejo, 2013) siguiendo los postulados de Colomer
Hernández, manifiestan que la “motivación como discurso se ve realizada en la
decisión, ya que está es el discurso justificativo plasmado en la sentencia, mediante la
cual el juez dará a conocer el razonamiento de naturaleza justificativa que lo llevo a
dictaminar tal resolución” (p. 15). Asimismo, Colomer (citado por Angel & Vallejo)
propone que la motivación debe reunir ciertas exigencias, tales como:
1. La motivación no es un discurso libre, puesto que se exige como límite interno ciertos
elementos tendientes a respetar las reglas jurídicas existentes dentro del ordenamiento.
Y como límite externo, estará el ámbito de aplicación, esto es, las cuestiones que
pueden ser tratadas o no. 2. La motivación es un discurso finito, en cuanto existe una
imposibilidad para el juez de pronunciarse superando el objeto debatido, no puede
excederse. 3. La motivación es un discurso cerrado y atemporal, puesto que una vez
realizada la motivación se desprende de su autor, haciendo que una vez efectuada deba
estar completa y cumplir con todos los requisitos de justificación, y además deberá
incluir requisitos como los hechos presentados por las partes y las normas aplicables al

84
caso. (p. 15)

2.2.1.10.5. La función de la motivación en la sentencia


El Tribunal Constitucional ha conferido a la motivación las siguientes funciones:
a. Ser garantía de un ejercicio legítimo de la función jurisdiccional.
b. Ser expresión del principio de legalidad en sentido amplio, sumisión del juez a la
Constitución y la ley.
c. Ser una forma de manifestación de la racionalidad en el ejercicio del poder.
d. Ser expresión de los fines que justifican la restricción de un derecho fundamental.
e. Facilitar el control de las decisiones judiciales por parte de los litigantes: ejercicio del
derecho de defensa y control mediante los recursos.
f. Hacer posible el control de las decisiones judiciales por los órganos jurisdiccionales
superiores. (Talavera, Pablo, 2010, pág. 18)
2.2.1.10.6. La motivación como justificación interna y externa de la decisión
Al respecto Talavera (2010) opina: La justificación interna está relacionada con la
racionalidad interna de la decisión jurídica. Una decisión está justificada si se infiere de
sus premisas según las reglas de inferencia aceptadas. La condición de justificación es la
existencia de una regla con la cual poder verificar la racionalidad interna de la decisión.
(p. 14). En esa línea de ideas, el autor en mención, señala: La justificación externa se
relaciona con la racionalidad externa de la decisión jurídica. Una decisión está
justificada cuando sus premisas pueden ser calificadas como buenas según los
estándares utilizados por quienes llevan a cabo la calificación. Es evidente que la
decisión jurídica podría estar justificada internamente, sin por ello tener justificación
externa. (p. 15)

2.2.1.10.7. La construcción probatoria en la sentencia


Al respecto, Ticona Postigo (s.f) afirma: El derecho a la prueba a su vez, está
considerado y reconocido como un derecho fundamental, y se halla integrado por cuatro
derechos específicos: a) a ofrecer oportunamente pruebas, b) a que se admitan las
pruebas pertinentes, c) a que se actúen las mismas en forma regular y controlada, d)” a
que se valoren las pruebas en forma motivada, conjunta y razonada”. Por otro lado, el
Juez como director y conductor del proceso tiene “el deber de verificar la certeza,
positiva o negativa, de los hechos alegados por las partes y relevantes en la resolución
del litigio”. El derecho a la prueba de las partes confluye con el deber de verificación

85
del Juez en la obtención y establecimiento de la verdad jurídica objetiva. (s.n)

2.2.1.10.8. La construcción jurídica en la sentencia


La motivación tiene dos expresiones para los efectos de la decisión jurisdiccional: a)
motivación psicológica, en el marco de las causas explicativas de la decisión y en el
contexto de descubrimiento; y b) la motivación jurídica, como razones justificativas de
la decisión del Juez. Dentro de la motivación jurídica debe comprenderse como dos
componentes principales a la motivación sobre los hechos, en donde el Juez establece la
verdad jurídica objetiva; y la motivación sobre el derecho, en cuyo ámbito el Juez
establece la voluntad objetiva de la norma (Ticona, s.f, p. 24).

2.2.1.10.9. La motivación del razonamiento judicial


En efecto, (Angel & Vallejo, 2013) proponen que la racionalidad desempeña un rol
preponderante al hablar de motivación, más aún cuando se manifiesta como un requisito
y límite de la actividad del juzgador, tal es así que todo órgano jurisdiccional, al tener
cierto grado de libertad para la toma de decisiones, tiene por deber justificar la decisión
en términos jurídicos, exigiéndosele justificar la racionalidad y la razonabilidad de su
decisión. En ese orden de ideas, las autoras en mención destacan que toda motivación
judicial deberá justificar la racionalidad jurídica de la decisión, esta racionalidad tiene
relación con que la decisión adoptada pueda identificarse con la legitimidad de la
opción, dicho de otro modo, exige una solución jurídicamente aceptable.

2.2.1.10.10. Estructura y contenido de la sentencia


Tal como lo ha establecido, el CPP, en el art. 394° el contenido de la sentencia deberá
tener los siguientes requisitos: 1. La mención del Juzgado Penal, el lugar y fecha en la
que se ha dictado, el nombre de los jueces y las partes, y los datos personales del
acusado;
2. La enunciación de los hechos y circunstancias objeto de la acusación, las pretensiones
penales y civiles introducidas en el juicio, y la pretensión de la defensa del acusado; 3.
La motivación clara, lógica y completa de cada uno de los hechos y circunstancias que
se dan por probadas o improbadas, y la valoración de la prueba que la sustenta, con
indicación del razonamiento que la justifique; 4. Los fundamentos de derecho, con
precisión de las razones legales, jurisprudenciales o doctrinales que sirvan para calificar
jurídicamente los hechos y sus circunstancias, y para fundar el fallo; 5. La parte

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resolutiva, con mención expresa y clara de la condena o absolución de cada uno de los
acusados por cada uno de los delitos que la acusación les haya atribuido. Contendrá,
además, cuando corresponda el pronunciamiento relativo a las costas y a lo que proceda
acerca del destino de las piezas de convicción, instrumentos o efectos del delito. 6. La
firma del Juez o jueces.

2.2.1.10.11. Parámetros de la sentencia de primera


instancia 2.2.1.10.11.1. De la parte expositiva
Es la parte introductoria de la sentencia penal. Contiene el encabezamiento, el asunto,
los antecedentes procesales y aspectos procedimentales (San Martin Castro, 2006); los
cuales, se detallan de la forma siguiente:
a) Encabezamiento. Es la parte introductoria de la sentencia que contiene los datos
básicos formales de ubicación del expediente y la resolución, así como del procesado,
en la cual se detalla: a) Lugar y fecha del fallo; b) el número de orden de la resolución;
c) Indicación del delito y del agraviado, así como las generales de ley del acusado,
vale
decir, sus nombres y apellidos completos, apodo, sobrenombre y sus datos personales,
tales como su edad, estado civil, profesión, etc.; d) la mención del órgano jurisdiccional
que expide la sentencia; e) el nombre del magistrado ponente o Director de Debates y de
los demás jueces (San Martin, 2006); (Talavera, 2011).
b) Asunto. Es el planteamiento del problema a resolver con toda la claridad que sea
posible, siendo que, si el problema tiene varias aristas, aspectos, componentes o
imputaciones, se formularan tantos planteamientos como decisiones vayan a formularse
(San Martin Castro, 2006).
c) Objeto del proceso. Es el conjunto de presupuestos sobre los cuales el juez va a
decidir, los que son vinculantes para el mismo, puesto que, suponen la aplicación del
principio acusatorio como garantía la inmutabilidad de la acusación fiscal y su
titularidad de la acción y pretensión penal (San Martin, 2006). Asimismo, el objeto del
proceso lo conforman:
i) Hechos acusados. Son los hechos que fija el Ministerio Público en la acusación, los
que son vinculantes para el juzgador e impiden que este juzgue por hechos no
contenidos en la acusación, que incluya nuevos hechos, ello como garantía de la
aplicación del principio acusatorio (San Martin, 2006).

87
ii) Calificación jurídica. Es la tipificación legal de los hechos realizada por el
representante del Ministerio Público, la cual es vinculante para el juzgador (San Martin,
2006).
iii) Pretensión penal. Es el pedido que realiza el Ministerio Público respecto de la
aplicación de la pena para el acusado, su ejercicio supone la petición del ejercicio del
Ius Puniendi del Estado (Vásquez Rossi, 2000).
iv) Pretensión civil. Es el pedido que realiza el Ministerio Público o la parte civil
debidamente constituida sobre la aplicación de la reparación civil que debería pagar el
imputado, la cual no forma parte del principio acusatorio, pero dada su naturaleza civil,
su cumplimiento implica el respeto del principio de congruencia civil, que es el
equivalente al principio de correlación, por cuanto el juzgador está vinculado por el tope
máximo fijado por el Ministerio Público o el actor civil (Vásquez Rossi, 2000).

2.2.1.10.11.2. De la parte considerativa


Es la parte que contiene el análisis del asunto, importando la valoración de los medios
probatorios para el establecimiento de la ocurrencia o no de los hechos materia de
imputación y las razones jurídicas aplicables a dichos hechos establecidos (León, 2008).
Su estructura básica, sigue el siguiente orden de elementos:
a) Valoración probatoria. Es la operación mental que realiza el juzgador con el
propósito de determinar la fuerza o valor probatorio del contenido o resultado de la
actuación de los medios de prueba que han sido incorporados (sea de oficio o a petición
de parte) al proceso o procedimiento, no recayendo solo en los elementos de prueba,
sino en los hechos que pretende ser acreditaros o verificados con ellos (Bustamante,
2001). Para tal efecto, se tiene que una adecuada valoración probatoria, debe darse
con las siguientes valoraciones:
i) Valoración de acuerdo a la sana crítica. Apreciar de acuerdo a la sana crítica
significa establecer “cuánto vale la prueba”, es decir, qué grado de verosimilitud
presenta la prueba en concordancia con los hechos del proceso (De Santo, 1992);
(Falcón, 1990).
ii) Valoración de acuerdo a la lógica. La valoración lógica presupone un marco
regulativo de la sana crítica al cual corresponde proponerle las reglas de
correspondencia adecuadas con la realidad, por un lado, y por otro como articulación
genérica en el desenvolvimiento de los juicios conforme al razonamiento formalmente
correcto (Falcón, 1990).

88
iii) Valoración de acuerdo a los conocimientos científicos. Esta valoración es
aplicable a la denominada “prueba científica”, la cual es por lo general por vía pericial,
aparece en virtud de la labor de profesionales (médicos, contadores, psicólogos,
matemáticos, especialistas en diversas ramas, como mercados, estadísticas, etc.) (De
Santo, 1992).
iv) Valoración de acuerdo a las máximas de la experiencia. La valoración de acuerdo
a las máximas de la experiencia supone el uso de la experiencia para determinar la
valides y existencia de los hechos, siendo que, esta experiencia se refiere la apreciación
como objetivación social de ciertos conocimientos comunes dentro de un ámbito
determinado, en un tiempo específico, pero también, a la resultante de la tarea específica
realizada, así el juez puede apreciar claramente la peligrosidad de un vehículo que se
desplaza a una velocidad incorrecta hacia el lugar donde está transitando; incluso puede
usar al respecto reglas jurídicas que la experiencia ha volcado en el Código de tránsito
(Devis Echandia, 2000).
b) Juicio jurídico. El juicio jurídico es el análisis de las cuestiones jurídicas, posterior
al juicio histórico o la valoración probatoria sea positiva, consiste en la subsunción del
hecho en un tipo penal concreto, debiendo enfocarse la culpabilidad o imputación
personal y analizar si se presenta una causal de exclusión de culpabilidad o de
exculpación, determinar la existencia de atenuantes especiales y genéricas, así como de
agravantes genéricas, para luego ingresar al punto de la individualización de la pena (San
Martin, 2006). Así, tenemos:
i) Aplicación de la tipicidad. Para establecer la tipicidad, debe establecerse:
Determinación del tipo penal aplicable. Según Nieto García (2000), consiste es
encontrar la norma o bloque normativo determinado (específico) del caso concreto, sin
embargo, teniendo en cuenta el principio de correlación entre acusación y sentencia, el
órgano jurisdiccional podrá desvincularse de los términos de la acusación fiscal, en
tanto respete los hechos ciertos que son objeto de acusación fiscal, sin que cambie
el bien jurídico protegido por el delito acusado y siempre que respete el derecho de
defensa y el principio contradictorio (San Martin, 2006).
Determinación de la tipicidad objetiva. Según la teoría revisada, para determinar la
tipicidad objetiva del tipo pena aplicable, se sugiere la comprobación de los siguientes
elementos, estos son: i) El verbo rector; ii) Los sujetos; iii) Bien jurídico; iv) Elementos
normativos; v) Elementos descriptivos (Plascencia, 2004).
Determinación de la tipicidad subjetiva. Mir Puig (1990), considera que la tipicidad

89
subjetiva, la conforman los elementos subjetivos del tipo que se haya constituida
siempre por la voluntad, dirigida al resultado (en los delitos dolosos de resultado), o
bien, a una sola conducta (en los delitos imprudentes y en los de mera actividad), y a
veces por elementos subjetivos específicos (Plascencia, 2004).
Determinación de la Imputación objetiva. Esta teoría implica que, para determinar la
vinculación entre la acción y el resultado; ii) Realización del riesgo en el resultado. Se
debe verificar si en efecto, este riesgo no permitido creado, se ha producido
efectivamente en el resultado, es decir, el resultado debe ser la proyección misma del
riesgo no permitido realizado; iii) Ámbito de protección de la norma, por la que una
conducta imprudente no es imputable objetivamente si el resultado de esta conducta no
es el resultado que la norma infringida (expresada en el deber objetivo de cuidado)
busca proteger ; iv) El principio de confianza, por la que la acción imprudente no puede
imputarse a una persona cuando esta imprudencia ha sido determinada por el actuar
imprudente de un tercero; v) Imputación a la víctima, por lo que, al igual que el
principio de confianza niega la imputación de la conducta si es que la víctima con su
comportamiento, contribuye de manera decisiva a la realización del riesgo no permitido,
y este no se realiza en el resultado (Villavicencio, 2010).
ii) Determinación de la antijuricidad. Este juicio es el siguiente paso después de
comprobada la tipicidad con el juicio de tipicidad, y consiste en indagar si concurre
alguna
norma permisiva, alguno causa de justificación, es decir, la comprobación de sus
elementos objetivos y además, la comprobación del conocimiento de los elementos
objetivos de la causa de justificación (Bacigalupo, 1999). Para determinarla, se requiere:
Determinación de la lesividad. Al respecto, el Tribunal Constitucional ha señalado
que, si bien es cierto, la contradicción del comportamiento del agente con la norma
preceptiva, y cumpliendo la norma penal prohibitiva, presupone la antijuricidad formal,
sin embargo, es necesario establecerse la antijuricidad material (Perú. Corte Suprema,
exp.15/22 – 2003).
La legítima defensa. Es un caso especial de estado de necesidad, que tiene se
justificación en la protección del bien del agredido respecto del interés por la protección
del bien del agresor, fundamentándose en la injusticia de la agresión, lesionado por
aquel o por un tercero que lo defiende (Zaffaroni, 2002).
Estado de necesidad. Es la causa de justificación que consiste en la preponderancia del
bien jurídicamente más valioso que, en el caso, representa el mal menor, determinando

90
la exclusión de la antijuricidad por la necesidad de la lesión, unida a la menor
significación del bien sacrificado respecto del salvado, dada la colisión de bienes
jurídicos protegidos (Zaffaroni, 2002).
Ejercicio legítimo de un deber, cargo o autoridad. Implica el ejercicio del propio
poder de decisión o ejecución correspondiente a un cargo público, debiendo ser: a)
legítimo; b) dado por una autoridad designada legalmente, y; b) actuando dentro de la
esfera de sus atribuciones; e) sin excesos (Zaffaroni, 2002).
Ejercicio legítimo de un derecho. Esta causa de justificación supone que quien cumple
la ley puede imponer a otro su derecho o exigirle su deber, cosa que no ocurrirá siempre
en el ejercicio de un derecho, pues el límite de los derechos propios está fijado por los
derechos de los demás (Zaffaroni, 2002).
La obediencia debida. Consiste en el cumplimiento de una orden dada de acuerdo a
derecho dentro de una relación de servicio, significando ello que no habrá defensa
legítima contra el cumplimiento de una orden que no es antijurídica (Zaffaroni, 2002).
iii) Determinación de la culpabilidad. Zaffaroni (2002) considera que es el juicio que
permite vincular en forma personalizada el injusto a su autor, pudiendo establecerse esta
vinculación a decir de Plascencia Villanueva (2004), en la comprobación de los
siguientes elementos: a) la comprobación de la imputabilidad; b) la comprobación de la
posibilidad de conocimiento de la antijuridicidad (error de tipo); c) el miedo
insuperable; d) la imposibilidad de poder actuar de otra manera (exigibilidad).
a) La comprobación de la imputabilidad. La determinación de la imputabilidad se
realiza con un juicio de imputabilidad, un la cual es necesario evaluar si concurren: a)
facultad de apreciar el carácter delictuoso de su acto, siendo relativo a la inteligencian
(elemento intelectual); b) facultad de determinarse según esta apreciación (elemento
volitivo), es decir que el autor tuvo por lo menos control de su comportamiento (Peña
Cabrera, 1983).
b) La comprobación de la posibilidad de conocimiento de la antijuridicidad. Este
presupuesto supone, que será culpable quien ha tenido la capacidad para poder conocer
la magnitud antijurídica de su acto, teniendo que, este conocimiento se presupone para
las personas con coeficiente normal, dentro de esta categoría puede negarse en virtud
del “error”, como hecho excluyente del dolo dado que eliminan su comprensión de la
criminalidad del acto, estructurando una situación de justificación o de inculpabilidad
(Zaffaroni, 2002).
c) La comprobación de la ausencia de miedo insuperable. La justificación de esta

91
causa de inculpabilidad se trata también en la no exigibilidad, por la existencia de un
terror que prive de lucidez o fuerza de voluntad al sujeto, basta con el temor, que, para
ser relevante ha de ser insuperable, es decir, el que no hubiera podido resistir el hombre
medio, el común de los hombres, ahora bien, ese hombre medio debe ser situado en la
posición del autor, con sus conocimientos y facultades (Plascencia, 2004).
d) La comprobación de la no exigibilidad de otra conducta. La no exigibilidad no
significa ausencia de una prohibición; al contrario, la cuestión de la inexigibilidad sólo
se plantea en el ámbito de la culpabilidad y después, por tanto, de que se haya
comprobado la antijuridicidad del hecho (Plascencia, 2004).
iv) Determinación de la pena. La Corte Suprema ha establecido que la determinación e
individualización de la pena debe hacerse en coherencia con los principios de legalidad,
lesividad, culpabilidad y proporcionalidad –artículos II, IV, V, VII y VIII del Título
Preliminar del Código Penal– y bajo la estricta observancia del deber constitucional de
fundamentación de las resoluciones judiciales (Perú.
Corte Suprema, Acuerdo Plenario 1-2008/CJ-116), así según:
La naturaleza de la acción. La Corte Suprema, siguiendo a Peña (1980), señala que
esta circunstancia, puede atenuar o agravar la pena, permite dimensionar la magnitud
del injusto realizado. Para ello se debe apreciar “la potencialidad lesiva de la acción”, es
decir, será del caso apreciar varios aspectos como son el tipo de delito cometido o el
modus operandi empleado por el agente, esto es, la “forma cómo se ha manifestado el
hecho”, además, se tomará en cuenta el efecto psicosocial que aquél produce (Perú.
Corte Suprema, A.V. 19 – 2001).
Los medios empleados. La realización del delito se puede ver favorecida con el empleo
de medios idóneos, la naturaleza y efectividad dañosa de su uso pueden comprometer en
mayor o menor medida la seguridad de la víctima o provocar graves estragos. De allí
que Villavicencio (1992) estime que esta circunstancia se refiere igualmente a la
magnitud del injusto, sin embargo, para otros autores, que como Peña Cabrera (1980)
señalan que ella posibilitaba reconocer la peligrosidad del agente (Perú. Corte Suprema,
A.V. 19 – 2001).
La importancia de los deberes infringidos. Es una circunstancia relacionada con la
magnitud del injusto, pero que toma en cuenta también la condición personal y social
del agente, resultando coherente que la realización del delito con infracción de deberes
especiales propicie un efecto agravante, en la medida que el desvalor del injusto es
mayor, pues trasciende a la mera afectación o puesta en peligro del bien jurídico, esto

92
es, el agente compromete, también, obligaciones especiales de orden funcional,
profesional o familiar que tiene que observar (Perú. Corte Suprema, A.V. 19 – 2001).
La extensión de daño o peligro causado. Esta circunstancia indica la cuantía del
injusto en su proyección material sobre el bien jurídico tutelado, así García Cavero
(1992) precisa que tal circunstancia toma como criterio de medición el resultado
delictivo (Perú. Corte Suprema, A.V. 19 – 2001).
Las circunstancias de tiempo, lugar, modo y ocasión. Se refieren a condiciones
tempo– espaciales que reflejan, principalmente, una dimensión mayor en el injusto, ya
que el agente suele aprovecharlas para facilitar la ejecución del delito (Perú. Corte
Suprema, A.V. 19 – 2001).
Los móviles y fines. Según este criterio, la motivación y los fines que determinan,
inducen o guían la acción delictiva del agente, influyen, de modo determinante, en la
mayor o menor intensidad de su culpabilidad, esto es, tales circunstancias coadyuvan a
medir el grado de reproche que cabe formular al autor del delito (Perú. Corte Suprema,
A.V. 19 – 2001).
La unidad o pluralidad de agentes. La pluralidad de agentes indica un mayor grado de
peligrosidad y de inseguridad para la víctima. La concurrencia de agentes expresa
necesariamente un acuerdo de voluntades que se integran para lo ilícito, siendo que, al
respecto advierte García Cavero (1992)
La edad, educación, costumbres, situación económica y medio social. Se trata de
circunstancias vinculadas a la capacidad penal del agente y a su mayor o menor
posibilidad para internalizar el mandato normativo, así como para motivarse en él y en
sus exigencias sociales, operando sobre el grado de culpabilidad del agente (Perú.
Corte Suprema, A.V. 19 – 2001).
La reparación espontánea que hubiera hecho del daño. Esta circunstancia toma en
cuenta la conducta posterior al delito que exteriorizó el agente, consistente en que el
delincuente repare en lo posible el daño ocasionado por su accionar ilícito, revela una
actitud positiva que debe valorarse favorablemente con un efecto atenuante (Perú. Corte
Suprema, A.V. 19 – 2001).
La confesión sincera antes de haber sido descubierto. Esta circunstancia valora un
acto de arrepentimiento posterior al delito, que expresa la voluntad del agente de
hacerse responsable por el ilícito cometido y de asumir plenamente las consecuencias
jurídicas que de ello derivan, lo que resulta en favor del agente, pues, con ella, se
rechaza la frecuente conducta posterior al hecho punible y que se suele orientar hacia el

93
aseguramiento y la impunidad del infractor (Perú. Corte Suprema, A.V. 19 – 2001).
Los demás antecedentes, condiciones personales y circunstancias que conduzcan al
conocimiento de la personalidad del infractor. Bajo este criterio, el art. 46 considera
una opción innominada y abierta para interpretar y apreciar otras circunstancias,
distintas de las expresamente identificadas por cada inciso precedente de dicho artículo,
sin embargo, para evitar contradecir el principio de legalidad y riesgos de arbitrariedad,
la circunstancia que invoca debe ser equivalente con las reguladas legalmente (Perú.
Corte Suprema, A.V. 19 – 2001).
v) Determinación de la reparación civil. Según jurisprudencia de la Corte Suprema, la
reparación civil se determina en atención al principio del daño causado
(Perú: Corte Suprema, 7/2004/Lima Norte, 3755–99/Lima), de lo que García Cavero
(2009) señala, la reparación civil debe ceñirse al daño, con independencia del agente o
sujeto activo de dicho daño.
La proporcionalidad de la afectación al bien vulnerado. La Corte Suprema ha
afirmado que la reparación civil derivada del delito debe guardar proporción con los
bienes jurídicos que se afectan, por lo que su monto, debe guardar relación con el bien
jurídico abstractamente considerado, en una primera valoración, y en una segunda, con
la afectación concreta sobre dicho bien jurídico (Perú. Corte Suprema, R.N. 948-2005
Junín).
La proporcionalidad con el daño causado. La determinación del monto de la
reparación civil debe corresponderse al daño producido, así, si el delito ha significado la
pérdida de un bien, entonces la reparación civil deberá apuntar a la restitución del bien
y, de no ser esto posible, al pago de su valor. En el caso de otro tipo de daños de
carácter patrimonial (daño emergente o lucro cesante) o no patrimonial (daño moral o
daño a la persona), la reparación civil se traducirá en una indemnización que se
corresponda con la entidad de los daños y perjuicios provocados (Perú. Corte Suprema,
R.N. 948-2005 Junín).
Proporcionalidad con situación del sentenciado. Respecto de este criterio, el juez, al
fijar la indemnización por daños podrá considerar la situación patrimonial del deudor,
atenuándola si fuera equitativo, siempre que el daño no sea imputable a título de dolo,
se trata, sin lugar a dudas, por un lado, de una desviación del principio de la reparación
plena pues la entidad pecuniaria del daño sufrido por la víctima, puede ceder ante la
capacidad patrimonial del deudor paja afrontar ese valor, por otro lado, implica,
igualmente, un apartamiento del principio de que la responsabilidad civil por los daños

94
causados no varía con arreglo a la culpabilidad del autor (Núñez, 1981).
vi) Aplicación del principio de motivación. Una adecuada motivación de las
sentencias judiciales debe cumplir los siguientes criterios:
Orden. El orden racional supone: a) La presentación del problema, b) el análisis del
mismo, y c) el arribo a una conclusión o decisión adecuada (León, 2008).
Fortaleza. Consiste en que la decisión debe estar basadas de acuerdo a los cánones
constitucionales y de la teoría estándar de la argumentación jurídica, en buenas razones
que las fundamenten jurídicamente (León, 2008).
Razonabilidad. Requiere que tanto la justificación de la sentencia, los fundamentos de
derecho y los fundamentos de hecho de la decisión sean fruto de una aplicación racional
del sistema de fuentes del ordenamiento jurídico; es decir, que, en lo jurídico, que la
norma seleccionada sea vigente, válida y adecuada a las circunstancias del caso
(Colomer Hernández, 2000).
Herencia. Es un presupuesto de la motivación que va de la mano y en conexión
inescindible con la racionalidad, es decir, se refiere a la necesaria coherencia en sentido
interno que debe existir en los fundamentos de la parte considerativa del fallo, y en un
sentido externo, la coherencia debe entenderse como la logicidad entre motivación y
fallo, y entre la motivación y otras resoluciones ajenas a la propia sentencia (Colomer,
2000). Motivación expresa. Consiste en que cuando se emite una sentencia, el
juzgador debe hacer expresas las razones que respaldan el fallo al que se ha llegado,
siendo este requisito indispensable para poder apelar, en el sentido de tener las razones
del sentido del fallo y poder controlar las decisiones del Juez (Colomer Hernández,
2000).
Motivación clara. Consiste en que cuando se emite una sentencia, el juzgador no solo
debe expresas todas las razones que respaldan el fallo al que se ha llegado, sino que,
además, estas razones deben ser claras, en el sentido de poder entender el sentido del
fallo, así las partes puedan conozcan que es lo que se va a impugnar pues de otra forma
el derecho a la defensa (Colomer, 2000).
Motivación lógica. Consiste en que la motivación desarrollada no debe contradecirse
entre sí, y con la realidad conocida, debiendo respetarse el principio de “no
contradicción” por el cual se encuentra prohibida la afirmación y negación, a la vez, de
un hecho, de un fundamento jurídico, etc. (Colomer, 2000).

2.2.1.10.11.3. De la parte resolutiva

95
Esta parte contiene el pronunciamiento sobre el objeto del proceso y sobre todos los
puntos que hayan sido objeto de la acusación y de la defensa (principio de exhaustividad
de la sentencia), así como de los incidentes que quedaron pendientes en el curso del
juicio oral. La parte del fallo debe ser congruente con la parte considerativa bajo
sanción de nulidad (San Martin, 2006).
a) Aplicación del principio de correlación. Se cumple si la decisión judicial:
Resuelve sobre la calificación jurídica propuesta en la acusación. Por el principio de
correlación, el juzgador está obligado a resolver sobre la calificación jurídica acusada
(San Martin, 2006).
Resuelve en correlación con la parte considerativa. La segunda de las dimensiones
del principio de correlación especifica no sólo que el juzgador resuelva sobre la
acusación y los hechos propuestos por el fiscal, sino que, la correlación de la decisión
debe serlo también con la parte considerativa, a efectos de garantizar la correlación
interna de la decisión (San Martin, 2006).
Resuelve sobre la pretensión punitiva. La pretensión punitiva constituye otro
elemento vinculante para al juzgador, no pudiendo resolver aplicando una pena por
encima de la pedida por el Ministerio Público (San Martin, 2006).
Resolución sobre la pretensión civil. Si bien la pretensión civil no se encuentra
avalada por el principio de correlación, ni por el principio acusatorio, dado que la acción
civil es una acción acumulada a la acción penal, dada su naturaleza individual, la
resolución sobre este punto presupone el respeto del principio de congruencia civil
(Barreto, 2006).
b) Presentación de la decisión. La decisión judicial, debe presentarse de la siguiente
manera:
Principio de legalidad de la pena. Este aspecto implica que la decisión adoptada, tanto
la pena, o alternativas a estas, así como las reglas de conducta y demás consecuencias
jurídicas deben estar tipificadas en la ley, no pudiendo presentarse la pena de una forma
diferente a la legal (San Martin, 2006).
Presentación individualizada de decisión. Este aspecto implica que el juzgador ha de
presentar las consecuencias de manera individualizada a su autor, tanto la pena
principal, las consecuencias accesorias, así como la reparación civil, indicando quien es
el obligado a cumplirla, y en caso de múltiples procesados, individualizar su
cumplimiento y su monto (Montero, 2001).
Exhaustividad de la decisión. Según San Martin (2006), este criterio implica que la

96
pena debe estar perfectamente delimitada, debe indicarse la fecha en que debe iniciarse
y el día de su vencimiento, así como su modalidad si es del caso, si se trata de la
imposición de una pena privativa de libertad, indicarse el monto de la reparación civil,
la persona que debe percibirla y los obligados a satisfacerla.
Claridad de la decisión. Significa que la decisión debe ser entendible, a efectos de que
pueda ser ejecutada en sus propios términos, ya su ejecución debe ser en sus propios
términos (Montero, 2001).

2.2.1.10.12. Parámetros de la sentencia de segunda


instancia 2.2.1.10.12.1. De la parte expositiva
a) Encabezamiento. Esta parte, al igual que en la sentencia de primera instancia, dado
que presupone la parte introductoria de la resolución.
b) Objeto de la apelación. Son los presupuestos sobre los cuales el juzgador resolverá,
importa los extremos impugnatorios, el fundamento de la apelación, la pretensión
impugnatoria y los agravios (Vescovi, 1988).
Extremos impugnatorios. El extremo impugnatorio es una de las aristas de la sentencia
de primera instancia que son objeto de impugnación (Vescovi, 1988).
Fundamentos de la apelación. Son las razones de hecho y de derecho que tiene en
consideración el impugnante que sustentan su cuestionamiento de los extremos
impugnatorios (Vescovi, 1988).
Pretensión impugnatoria. La pretensión impugnatoria es el pedido de las
consecuencias jurídicas que se buscan alcanzar con la apelación, en materia penal,
esta puede ser la absolución, la condena, una condena mínima, un monto mayor de la
reparación civil, etc. (Vescovi, 1988).
Agravios. Son la manifestación concreta de los motivos de inconformidad, es decir que
son los razonamientos que relacionados con los hechos debatidos demuestran una
violación legal al procedimiento o bien una inexacta interpretación de la ley o de los
propios hechos materia de la litis (Vescovi, 1988).
Absolución de la apelación. La Absolución de la apelación es una manifestación del
principio de contradicción, que si bien es cierto, el recurso de apelación es una relación
entre el órgano jurisdiccional que expidió la sentencia agraviosa, y el apelante (Vescovi,
1988).
Problemas jurídicos. Es la delimitación de las cuestiones a tratar en la parte
considerativa y en la decisión de la sentencia de segunda instancia, las que resultan de la

97
pretensión impugnatoria, los fundamentos de la apelación respecto de los extremos
planteados, y la sentencia de primera instancia, puesto que no todas los fundamentos ni
pretensiones de la apelación son atendibles, solo las que resultan relevantes (Vescovi,
1988).

2.2.1.10.12.2. De la parte considerativa


a) Valoración probatoria. Respecto de esta parte, se evalúa la valoración probatoria
conforme a los mismos criterios de la valoración probatoria de la sentencia de primera
instancia, a los que me remito.
b) Juicio jurídico. Respecto de esta parte, se evalúa el juicio jurídico conforme a los
mismos criterios del juicio jurídico de la sentencia de primera instancia, a los que me
remito.
c) Motivación de la decisión. Respecto de esta parte, se aplica la motivación de la
decisión conforme a los mismos criterios de motivación de la sentencia de primera
instancia, a los que me remito.

2.2.1.10.12.3. De la parte resolutiva


En esta parte, debe evaluarse si la decisión resuelve los puntos de la apelación
planteados inicialmente, así como si la decisión es clara y entendible; para tal efecto, se
evalúa:
a) Decisión sobre la apelación. Para asegurar una adecuada decisión sobre el sustento
impugnatorio planteado, debe evaluarse: Resolución sobre el objeto de la apelación.
Implica que la decisión del juzgador de segunda instancia debe guardar correlación con
los fundamentos de la apelación, los extremos impugnados y la pretensión de la
apelación, es lo que la doctrina denomina como el principio de correlación externa de la
decisión de segunda instancia (Vescovi, 1988).
Prohibición de la reforma peyorativa. Es un principio de la impugnación penal, la que
supone que el juzgador de segunda instancia, a pesar de que pude evaluar la decisión del
juez de primera instancia y reformarla conforme a la pretensión impugnatoria, no puede
reformar la decisión del juzgador por dejado de lo pretendido por el apelante (Vescovi,
1988).
Resolución correlativamente con la parte considerativa. Esta parte expresa el
principio de correlación interna de la sentencia de segunda instancia, por la cual, la
decisión de segunda instancia debe guardar correlación con la parte considerativa

98
(Vescovi, 1988).
Resolución sobre los problemas jurídicos. Respecto de esta parte, es una
manifestación del principio de instancia de la apelación, es decir que, cuando el
expediente es elevado a la segunda instancia, este no puede hacer una evaluación de
toda la sentencia de primera instancia, sino, solamente por los problemas jurídicos
surgidos del objeto de la impugnación, limitando su pronunciamiento sobre estos
problemas jurídicos, sin embargo, el juzgador puede advertir errores de forma causantes
de nulidad, y declarar la nulidad del fallo de primera instancia (Vescovi, 1988).
b) Presentación de la decisión. Respecto de esta parte, la presentación de la sentencia
se hace con los mismos criterios que la sentencia de primera instancia, a los que se
remito el presente contenido.
c) Determinación judicial de la pena. Oré (S/f) señala que El proceso de
determinación de la pena es, ciertamente, complejo. Bien se sabe que ella admite dos
instancias: La legal y la judicial. La determinación legal se realiza aunque huelgue
decirlo en abstracto, e inciden el tipo de Pena y en el marco previsto (mínimo y
máximo) en el Código Penal para cada delito.
La Ley también establece circunstancias modificativas de la responsabilidad penal, esto
es, aquellas que tienen por virtud atenuar o agravar las penas fijadas en abstracto para
cada hecho punible. La instancia de determinación judicial o de individualización de la
pena, por el contrario, no se realiza en abstracto, sino que atiende a las especificidades
del caso concreto: mira tanto al delito cometido (injusto) Como a la culpabilidad del
autor. Para ello, debe atender a una serie de criterios que el mismo legislador establece,
sobre todo, en el artículo 46 Del Código Penal
2.2.1.10.13. La sentencia con pena efectiva y pena condicional
Al respecto Lopez (2013) enseña que cuando existe una pena condicional para el
sentenciado, este debe estar obligado a cumplir con las reglas de conducta que le
impone el órgano jurisdiccional, con un límite de tiempo señalado en la resolución que
emite en el ámbito de sus funciones. De otro lado, Matías (2013) postula que quien es
pasible de una sentencia condenatoria con calidad de efectiva, debe estar obligado a
permanecer encerrado en un centro penitenciario.

2.2.1.10.14. La sentencia en el caso concreto en estudio


Del expediente judicial, cuyas sentencias han sido materia de análisis, se encuentran las
sentencias de primera y segunda instancia, de las que se advierte que el Juzgado Penal

99
Colegiado del Distrito Judicial de Piura impuso 35 años de pena privativa de libertad
efectiva al acusado. Asimismo, la Sala Penal de Apelaciones del mismo Distrito Judicial
confirmó por unanimidad, la pena impuesta al hoy sentenciado.

3.1.1.11. Impugnación de
resoluciones 2.2.1.11.1. Definición
Sánchez citado por (Ibérico, 2016) sostiene: Los medios de impugnación son actos
procesales de los que pueden hacer uso las partes cuando consideran que una resolución
del Juez o tribunal perjudica su interés en el proceso y espera que el superior jerárquico
la revoque o anule, siguiendo las pautas procedimentales establecidas. (p. 57)
Al respecto, el profesor Ibérico, (2016) nos expresa: Los medios impugnatorios son
mecanismos procesales establecidos legalmente que permiten a los sujetos legitimados
en el proceso, pedir a un juez o a su superior que reexamine un acto procesal o todo un
proceso que le ha causado un perjuicio, a fin de lograr que la materia cuestionada sea
parcial o totalmente anulada o revocada. Revisión que puede realizarse o dentro del
mismo proceso en donde se emitió el acto procesal cuestionado, o en un proceso
autónomo, lo que dependerá de la calidad de firmeza o de cosa juzgada de dicho acto
manifestado a través de una decisión jurisdiccional. (p. 58)
Por su parte, para (Ore, 2013) son instrumentos o mecanismos legales puestos a
disposición de las partes procesales para que expresen su disconformidad con una
resolución que interpretan como errónea o injusta. Dicho de otro modo, son medios
procesales mediante los cuales las partes legitimadas cuestionan una resolución judicial
que les causa perjuicio, en tanto que es contraria a sus pretensiones.
De otro lado Neyra (2015) señala que en el proceso penal tenemos una lucha de
intereses contrapuestos, el amparar uno u otro interés va a ocasionar la disconformidad
de aquel que no se vio favorecido con la resolución emitida. En ese sentido el sujeto
perjudicado va a buscar la forma de oponerse a que dicha resolución adquiera la calidad
de cosa juzgada. Dicha disposición se materializa a través de los medios impugnatorios,
como instrumento jurídico que busca cambiar una decisión judicial por una nueva.

2.2.1.11.2. Fundamentos normativos del derecho a impugnar


Hinojosa Segovia citado por Cáceres (2009) señala que el fundamento de los medios
impugnatorios no es otro que la falibilidad humana. Esto es que como se considera que
los jueces pueden errar al aplicar o interpretar la ley procesal o material, es conveniente

100
que las partes puedan solicitar en propio proceso, que la resolución dictada sea
modificada, bien por el mismo órgano jurisdiccional que la dictó para las resoluciones
más simples o bien por un órgano superior para los supuestos de las resoluciones más
complejas. De modo similar (Ibérico, 2016) sostiene: El fundamento de la impugnación
es pues, la falibilidad, que no es otra cosa que la capacidad natural de equivocarse o
fallar, y que es característica propia de todo ser humano en general, y por ende también,
de los jueces en particular, cuyos yerros, en el ejercicio de su función jurisdiccional,
tienen mucha mayor trascendencia e implicancia, porque deciden respecto de
pretensiones ajenas a las propias, es decir (p.47)

2.2.1.11.3. Finalidad de los medios impugnatorios


A este respecto (Neyra, 2015) expone: La primera finalidad consiste en impedir que la
resolución impugnada adquiera la calidad de cosa juzgada y de esta manera,
imposibilitar el cumplimiento del fallo, porque la falta de interposición de algún recurso
que la ley faculta para mostrar nuestra inconformidad con la resolución emitida, importa
la conformidad con la mencionada resolución y le otorga la calidad de cosa juzgada, por
ello al recurrir un fallo adverso impedimos la inmutabilidad de la resolución. (p. 564)

2.2.1.11.4. Los medios impugnatorios según el Nuevo Código Procesal Penal.


El recurso de apelación. Tal como manifiesta (Espinoza, 2016) constituye un recurso
ordinario cuyo objeto consiste en lograr que un tribunal superior en grado al que dictó la
resolución impugnada, tras un nuevo examen, tanto de las cuestiones de hecho y de
derechos, disponga la revocación nulidad de aquella, así como en su caso, la de los
actos que la procedieron. Aunado a ello, menciona que este recurso tiene efecto
devolutivo, por cuanto el reexamen de la resolución impugnada le corresponde al
órgano jurisdiccional superior de aquel que la emitió, teniendo como finalidad revisar lo
resuelto por la instancia judicial inferior.
En palabras de Iberíco (2016), “la apelación constituye un recurso con efecto
devolutivo, por cuanto el reexamen de la resolución materia de impugnación, será de
competencia del órgano jurisdiccional superior al de aquel que lo expidió” (p. 196).
De otro lado, Sánchez (2009) afirma que la apelación constituye uno de los recursos
impugnatorios de mayor frecuencia en el proceso pena, sostiene además que se trata del
recurso ordinario por antonomasia y que a través de aquel un órgano jurisdiccional de
grado superior puede juzgar y resolver de nuevo cuestiones fácticas y jurídicas ya

101
resueltas. En ese contexto, tal como establece. 416° del CPP el recurso de apelación
procederá contra:
a) Las sentencias: b) Autos de sobreseimiento y los que resuelvan cuestiones previas,
cuestiones prejudiciales y excepciones o que declaren extinguida la acción penal o
pongan fin al procedimiento o la instancia; c) Los autos que revoquen la condena
condicional, la reserva del fallo condenatorio o la conversión de la pena; d) Los autos
que se pronuncien sobre la constitución de las partes y sobre aplicación de medidas
coercitivas o de cesación de la prisión preventiva; e) Los autos expresamente declarados
apelables o que causen gravamen irreparable. 2. Cuando la Sala Penal Superior tenga su
sede en un lugar distinto del Juzgado, el recurrente deberá fijar domicilio procesal en la
sede de Corte dentro del quinto día de notificado el concesorio del recurso de apelación.
En caso contrario, se le tendrá por notificado en la misma fecha de la expedición de las
resoluciones dictadas por la Sala Penal Superior.
El recurso de reposición. Según Espinoza (2016) se trata de un medio impugnatorio
ordinario, el cual carece de efecto devolutivo, pues su aplicación se ampara en criterios
de economía procesal y flexibilización de la pluralidad de instancias, aunado a ello, este
autor destaca que su pretensión se dirige a contradecir decretos que hayan causado
agravio o prejuicio al sujeto impugnante durante la tramitación del proceso.
A propósito, Palacio citado por Ibérico (2016) señala que este recurso constituye el
remedio procesal tendiente a obtener que, en la misma instancia en la que fue dictada
una resolución, se subsanen por el órgano jurisdiccional al que este pertenece, los
agravios que aquella pudo haber inferido.
De otro lado, San Martín Castro, citado por Ibérico enseña que “lo que fundamenta la
existencia de este recurso es el principio de economía procesal, que busca evitar una
doble instancia.” (p. 188)
Reyna (2011) opina que la existencia de este tipo de recurso se justifica en razones de
estricta economía procesal, ya que es lógico, que cuando existen supuestos en los que el
recurso a la doble instancia resulta absolutamente innecesario, en virtud de ello es que
se permite al propio órgano jurisdiccional corregir el decreto expedido.
En ese sentido Cáceres (2010) citando a San Martin Castro, señala que este recurso
tiene su fundamento en la economía procesal representada por la conveniencia de evitar
una doble instancia, otorgándole al tribunal, autor de la resolución, la oportunidad de
corregirla luego de un nuevo estudio de la cuestión.
El recurso de casación. Al respecto, San Martín Castro, citado por Ibérico (2016),

102
define: Es el medio de impugnación, de competencia del Supremo Tribunal, en virtud
del cual, se pide la anulación de las resoluciones definitivas de los tribunales inferiores,
no sujetas por sí o no sujetas ya a otra impugnación, por error de derecho sustantivo o
procesal. La casación se limita, partiendo de los mismos hechos fijados en la instancia, a
examinar la concepción jurídica causal del fallo, o bien, desentendiéndose del sentido de
este, la irregularidad del proceder que haya conducido a él. (p. 224)
Por su parte, Espinoza, (2016) afirma, que se trata de un medio impugnativo
extraordinario, cuyo ámbito de aplicación se circunscribe al cumplimiento de un mayor
número de requisitos, además de ello, tiene efecto devolutivo, dado que la revisión de la
resolución cuestionada, de forma funcional, es de competencia de las salas penales de la
Corte Suprema, tal como lo establece el artículo 141 de nuestra carta política. En virtud
de los antes expuesto, el autor en mención concluye diciendo que este recurso “tiene por
fin promover y procurar el nuevo examen de las sentencias exclusivamente desde el
punto de vista jurídico” (p. 371).
Por su parte, Neyra (2015) afirma que “es aquel medio impugnatorio devolutivo de
competencia exclusiva de la Corte Suprema y de naturaleza extraordinaria por la
existencia de limitaciones en las causas o motivos suscepibles de fundamentar la
pretensión impugnatoria dirigida a una función espefica” (s.n).
Frisancho (2012) afirma que es un medio de impugnación extraordinario en virtud del
cual se pide la anulación de las resoluciones definitivas de los tribunales inferiores, no
sujetas por sí o no sujetas ya a otra impugnación, por error de derecho sustantivo o
procesal.
El recurso de queja. Al respecto Cáceres (2009) menciona que es un recurso ordinario
y devolutivo, por el cual se pide al tribunal superior, de aquel que dictó la resolución,
que la revoque sustituyéndola por otra que favorezca al recurrente. Tal es así que en
general procede contra las resoluciones en las que el tribunal inferior no admite la
interposición de un recurso devolutivo (apelación, casación) frente a sus propias
resoluciones. A si pues, el recurso de queja viene a ser un recurso instrumental de los
demás a efectos de que el tribunal inferior no elimine indebidamente la posibilidad de
que sus resoluciones sean impugnadas ante tribunales superiores.
Por su parte el Ibérico (2016) citando a San Martin, quien siguiendo a Juan Pedro
Colerio, plantea una diferenciación en cuanto al fundamento de este recurso frente a los
demás medios impugnatorios, ya que el recurso de queja no busca directamente la
revocación de la resolución impugnada, sino que el superior pueda controlar si la

103
resolución de inadmisibilidad del inferior se ha ajustado o no a derecho.

2.2.1.11.5. Formalidades para la presentación de los recursos


Para la interposición de los recursos, se establecen los siguientes plazos: a) Diez días
para el recurso de casación b) Cinco días para el recurso de apelación contra sentencias
c) Tres días para el recurso de apelación contra autos interlocutorios y el recurso de
queja. d) Dos días para el recurso de reposición. El plazo se computará desde el día
siguiente a la notificación de la resolución (art 414 CPP).

2.2.1.11.6. De la formulación del recurso en el proceso judicial en estudio


En el proceso judicial en estudio, el medio impugnatorio formulado por el abogado de la
defensa técnica del acusado, fue el recurso de apelación, por cuanto la defensa alegaba
que no se encontraba conforme con lo resuelto por el Juzgado Penal Colegiado,
peticionando con el recurso impugnatorio planteado, la revocatoria en todos sus
extremos de la sentencia apelada y en consecuencia a la absolución del sentenciado.
Cabe mencionar que la sentencia de primera instancia se trata de una sentencia expedida
en un proceso común, en la cual, por la competencia territorial y funcional, dicha
sentencia fue expedida por un órgano jurisdiccional denominado Juzgado Colegiado
Penal de Piura.
Siendo, por ello el órgano jurisdiccional competente en segunda instancia, la Sala Penal
de Apelaciones de Piura quien confirmó el fallo dictado de la primera instancia.
(Expediente N° 01630-2014- 35-2001-JR-PE-04).

2.2.2. Desarrollo de Instituciones Jurídicas Sustantivas relacionadas con las


sentencias en estudio
2.2.2.1. Instituciones jurídicas previas, para abordar el delito investigado en el
proceso judicial en estudio.
2.2.2.1.1. La teoría del delito
Al respecto Javier Villa (2014) señala: La teoría del delito comprende un conjunto de
proposiciones sistemáticas organizadas que pretenden explicar la naturaleza jurídica del
hecho punible. La teoría del delito es entonces un constructo epistémico que facilita la
definición conceptual y el análisis secuente del delito como conducta humana compleja
e inaceptablemente transgresora de la norma estatal prohibitiva o imperativa. (..) En este
orden de ideas la teoría del delito se ocupa de las características comunes que debe tener

104
cualquier hecho para ser considerado delito (p. 241). Por su parte Villavicencio (2009)
enseña: La teoría del delito o la teoría de la imputación penal se encarga de definir las
características generales que debe tener una conducta para ser imputada como un hecho
punible, esta es producto una larga evolución de la dogmática penal. Tiene su campo de
estudio en la parte general del derecho penal. La teoría del delito no se ocupa de los
elementos de los tipos delictivos concretos sino de aquellos aspectos de concepto de
delitos que son comunes a todos los hechos punibles (p. 223).

2.2.2.1.2. Componentes de la Teoría del Delito


La Teoría de la acción. Al respecto (Villavicencio, 2009) señala que el concepto de
acción, es un concepto jurídico normativo, pues el Derecho Penal lo obtiene a través de
un procedimiento constructivo donde se realiza una abstracción de lo que existe en la
realidad, lo que si podemos tener en cuenta es que la valoración de este elemento puede
variar según los criterios adoptados por las diferentes legislaciones.
La teoría de la tipicidad. Tal como afirma el profesor García (2012) para considerar
una conducta como delictiva, ésta debe estar contemplada en una disposición penal,
llamado tipo penal que establezca sus elementos constitutivos. La falta de tipicidad de
una conducta implicaría que no se le pueda imponer las consecuencias jurídicas
previstas en la ley penal. En esa línea argumental, el autor en mención, siguiendo al
ilustre tratadista Roxin, enseña que la categoría de la tipicidad no solo delimita la
conducta permitida de la prohibida, sino que también diferencia las distintas formas de
conducta prohibida en orden a sus consecuencias jurídicas. Según (Villavicencio, 2009)
tipicidad es el resultado de la verificación si la conducta y lo descrito en el tipo,
coinciden. A veste respecto, el autor señala que el juicio de tipicidad es un proceso
imputación mediante el cual el intérprete va a establecer si un determinado hecho puede
ser subsumido en lo contenido por un tipo penal. Si luego de haber realizado dicho
proceso se determina que el hecho encaja en los caracteres del tipo, entonces habrá
adecuación típica.
La teoría de la antijuricidad. Para Villa (2014), al configurarse un delito, se establece
la necesidad de que la conducta humana se adecue al tipo penal, dando origen con ello a
la tipicidad, sin embargo además, si se trata de una conducta típica, al no estar está
autorizada por el orden jurídico., estamos entonces frente a la antijuricidad; en ese
sentido refiere el citado autor que es antijurídica una conducta típica cuando carece de
justificación por el ordenamiento jurídico; aunado a ello, Bacigalupo: citado por Villa,

105
señala que una acción típica, tendrá el carácter jurídico sino interviene en favor del
autor una determinada causa de justificación. En esa línea de ideas, Reyes Echandía
(citado por Villa) afirma que la “antijuricidad es el juicio negativo de valor que el Juez
emite sobre una conducta típica, e la medida que lesione o ponga en peligro sin derecho
alguno, el interés jurídicamente tutelado por el tipo penal” (p. 405).
La teoría de la culpabilidad. Según García (2012) la doctrina penal mayoritaria señala
que la culpabilidad debe considerarse como última categoría dogmática de la teoría del
delito, es decir cuando se haya establecido o determinado la existencia de un injusto
penal; asimismo el autor menciona que actualmente, la teoría del finalismo, reconoce
tres elementos constitutivos que abarcan la configuración de la culpabilidad, tales como
la imputabilidad, el conocimiento del carácter antijurídico del hecho y la exigibilidad de
otra conducta. De modo similar, Villa (2012) afirma que el estudio de la culpabilidad,
abarca tres presupuestos de hecho los cuales son los siguientes: a) Que el autor del
injusto se encontraba en capacidad psicológica suficiente (media) de comportarse y
motivarse por la norma. b) Que el autor conocía la Antijuricidad del acto por él
protagonizado, y c) Que el autor se encuentra en condiciones psicofísicas morales y
circunstanciales de actuar de manera diferente a como lo hizo por ser exigible (p. 437).

2.2.2.1.3. Consecuencias jurídicas del delito


Villa (2014) enseña que el comportamiento típico, antijurídico y culpable que
protagoniza un ciudadano activa el sistema penal oponiendo al autor una determinada
consecuencia jurídica, en virtud del cual se admite que las consecuencias jurídicas son
las penas, las medidas de seguridad, las medidas accesorias y las responsabilidades
civiles que derivan del delito.
La teoría de la pena. La pena es la característica más tradicional e importante del
Derecho Penal, Su origen se encuentra vinculado con la del propio ordenamiento
jurídico punitivo y constituye, por la gravedad de su contenido, el medio de mayor
severidad que puede utilizar el Estado para asegurar la convivencia en la sociedad. La
forma de control social formal, hasta su actual desarrollo, supone la aplicación de una
pena. (Villavicencio, 2009, pág. 45)
La teoría de la reparación civil. Villa (2014) establece que la perpetración de un
hecho delictuoso acompaña la pena o la medida de seguridad y además, la reparación
civil del daño. El artículo 92 del CP prescribe que conjuntamente con la pena se
determinará la reparación civil correspondiente y que no puede ser otra que la prevista

106
por el art. 93 del CP, en efecto Villa enseña: a. Restitución del bien: se trata en suma de
restaurar o reponer la situación jurídica quebrantada por la omisión de un delito o falta.
b. La indemnización de daños y perjuicios: Lo regula el inciso 2 del art. 93 del CP y
comprende el resarcimiento del daño moral y material que adiciona a la restitución del
bien. (p. 631).

2.2.2.2. Del delito investigado en el proceso penal en estudio


De acuerdo a la denuncia fiscal, los hechos evidenciados en el proceso en estudio, y las
sentencias materia de análisis, el delito investigado fue: Violación sexual de menor de
catorce años, en el expediente N° 01630-2014- 35-2001-JR-PE-04, perteneciente al
Distrito Judicial de Piura – Piura. 2020.

2.2.2.2.2. Ubicación del delito de violación sexual de menor de edad en el Código


Penal
El delito de violación sexual de menor de edad se encuentra comprendido en el Código
Penal, regulada en el libro segundo parte especial Título IV. Delitos Contra La Libertad,
Capitulo IX: Violación De La Libertad Sexual. Artículo 173. Inciso 2, Violación sexual
de menor de edad.

2.2.2.2.3. El delito de violación sexual de menor de edad


El delito de violación sexual de menores consiste en que una persona hombre o mujer
mayor de edad, tenga acceso carnal con un menor de 14 años de edad por la vía vaginal,
anal o bucal, o realice otros actos análogos, introduciendo objetos o partes del cuerpo ya
sea por la vía anal o vaginal. Cabe destacar, lo afirmando por Noguera (2016) cuando
afirma que el consentimiento del menor es invalido, dado que se presume la violencia
por la incapacidad de la víctima, en virtud del cual, el desconocer los actos carnales y la
el carecer de madurez mental para entender el significad del hecho punible, se basa en
la presunción iure et de iure.
En líneas generales, Noguera (2016) destaca que el delito de violación de menores, es el
que tiene mayor gravedad en las penas, por lo que se busca un respeto irrestricto a la
inmadurez psicológica y biológica del menor de 14 años, pues como se sabe, los
menores de edad son proclives a ser convencidos y estar indefensos ante una eventual
agresión sexual, fundamentos por cuales, es sensato afirmar que el sujeto agente denota
mayor peligrosidad.

107
Regulación. El artículo 173º del Código Penal prescribe: El que tiene acceso carnal,
vía vaginal, anal o bucal o realiza otros actos análogos introduciendo objetos o partes
del cuerpo por alguna de las dos primeras vías, con un menor de edad será reprimido
con las siguientes penas privativas de la libertad:
1. Si la victima tiene menos de diez años de edad, la pena será de cadena perpetua.
2. Si la victima tiene entre diez años de edad y menos de catorce, la pena será no menor
de treinta años, ni mayor de treinta y cinco. Circunstancia agravante: “En el caso del
numeral 2, la pena será de cadena perpetua si el agente tiene cualquier posición, cargo o
vínculo familiar que le dé particular autoridad sobre la víctima o le impulse a depositar
en él su confianza”.

2.2.2.2.3.1. Tipicidad
Elementos de la tipicidad objetiva
Bien jurídico protegido. Peña Cabrea (2017) sostiene que en esta figura delictiva se
tutela el bien jurídico denominado indemnidad o intangibilidad sexual de los menores,
cuya edad sea menor de 14 años, ya que en principio este bien jurídico se trata del
normal desarrollo de la sexualidad, en cuanta esfera, que se pueda ver gravemente
comprometida, como consecuencia de contactos sexuales prematuros; razones por las
cuales mientras la edad del sujeto pasivo valla en descenso, las consecuencias
perjudiciales serán mayores. Poe su parte, (Reátegui, 2015) afirma: La protección del
bien jurídico “indemnidad sexual” se predica respecto de aquellas personas que aún
carecen o que no han logrado un desarrollo de su madurez lo suficientemente necesario
como para poder desplegarse de una manera consciente y libre en el ámbito de su
realidad sexual. La ley penal no permite los actos sexuales con menores en base a la
indemnidad sexual, ello se sustenta en que las relaciones sexuales a temprana edad
condenan a una vida infeliz, destruye la personalidad y genera desequilibrio bio
psíquico. (p. 182)
A su turno (Galvez & Delgado, 2012) expresan que tanto las normas penales y la
doctrina nacional y comparada, consideran la indemnidad sexual como objeto de tutela
penal con respecto a menores de edad, dado que el ordenamiento jurídico, al proteger la
indemnidad sexual, trata que las personas indicadas, consideradas especialmente
vulnerables por sus condiciones personales o situacionales, queden exentas de sufrir
cualquier daño que pueda derivar de una injerencia sexual que conlleve lesiones
traumáticas, en consecuencia lo que se busca es mantenerlas, al margen del ejercicio de

108
la sexualidad.
De otro lado, Noguera (2016) siguiendo a Castillo Alva, señala: La indemnidad sexual
creemos debe entenderse como una manifestación de la dignidad de la persona humana
y el derecho que todo ser humano tiene, a un libre desarrollo de su personalidad sin
intervenciones traumáticas en su esfera íntima por parte de terceros, los cuales pueden
generar huellas endebles en el psiquismo de la persona para toda la vida (p. 53).
Mientras tanto, para María del Carmen García Cantizano, citada por Noguera (2016)
afirma: La indemnidad sexual se relaciona directamente con la necesidad de proteger y
garantizar el desarrollo normal en el ámbito sexual de quienes aún no han alcanzado el
grado de madurez suficiente para ello, como sucede en el caso de los menores, así como
con la protección de quienes debido a anomalías psíquicas, carecen a priori, de plena
capacidad para llegar a tomar conciencia del alcance del significado de una relación
sexual. (p. 56)
En efecto, Noguera (2016) afirma que la indemnidad sexual significa la manutención
incólume del normal desarrollo de la sexualidad de los menores de catorce años,
manteniéndola libre de terceros. Al ser un interés protegido, el cual resultaría dañado
por la comisión de determinadas infracciones. En ese orden de ideas, Salinas (2016),
expone que el bien jurídico protegido en el delito de acceso carnal sexual sobre un
menor es la indemnidad o intangibilidad sexual de los menores de catorce años. Esta
indemnidad sexual es entendida como “la protección del desarrollo normal de la
sexualidad de los menores, quienes todavía no han alcanzado el grado de madurez
suficiente para determinarse sexualmente en forma libre y espontánea”. (p. 209)
Asimismo, Muños (citado por Salinas, 2016) menciona que “en el caso de los menores,
el ejercicio de la sexualidad con ellos se prohíbe en la medida que puede afectar al
desarrollo de su personalidad y producir en ellos alteraciones importantes que incidan
en su vida o equilibrio psíquico en el futuro”. (p. 209)
Sujeto activo. Agente activo de este delito puede ser cualquier persona, sea varón o
mujer. Cuando la conducta ilícita sea realizada por un menor de edad, éste no será
sometido a proceso penal, sino que se le impondrán las medidas socio educativas
establecidas pertinentes, tal como se ha previsto en el Código de los Niños y
adolescentes (Galvez & Delgado, Derecho Penal Parte Especial, 2012).
Salinas (2016) afirma que sujeto activo de la conducta ilícita puede ser varón o mujer,
ya que el tipo penal no exige la concurrencia de alguna cualidad, salvo que esta sea para
agravar la conducta, incluso nos dice el citado autor que el sujeto activo de este tipo,

109
puede tener la condición de enamorado, novio o conviviente de la víctima, aunado a ello
destaca que para efectos de dilucidar cualquier duda acerca del estado civil de casado
aparente, es imposible que un menor de catorce años contraiga matrimonio, ya que
según nuestro ordenamiento jurídico civil, el matrimonio sería nulo.
Al respecto Peña Cabrera (2017) sostiene que si bien, agente de este delito,
comúnmente lo es un hombre, no es menos cierto que lo sea también una mujer; en ese
contexto si una mujer tiene práctica sexual con un muchacho menor de 14 años, su
conducta es punible con el mismo título del hombre que abusa de una menor de la
misma edad: Aunado a ello, cabe precisar que para efectos de que configure este delito,
la opción sexual (homosexual o heterosexual) no tiene mayor arraigo de controversia, lo
que se incrimina es el abuso sexual que tiene como aspecto subjetivo el
aprovechamiento de la minoría de edad del sujeto pasivo.
Sujeto pasivo. Al respecto (Galvez & Delgado, Derecho Penal Parte Especial, 2012)
nos refieren que sujeto pasivo es el menor de 14 años de edad, sea varón o mujer. En
este tipo penal se incluyen tanto las relaciones heterosexuales, así como las
homosexuales. Respecto al cómputo de la edad habrá que atender al criterio cronológico
– biológico, siendo irrelevante la mayor o menor madurez psicológica de la víctima.
De modo Similar Salinas (2016) establece que sujeto pasivo del supuesto delictivo
descrito, puede ser un hombre o mujer que no supere los catorce años de edad
cronológica, no importando si la victima tiene alguna relación sentimental con el agresor
o si la víctima se dedica a la prostitución. Es preciso destacar lo dicho por el autor en
cuanto manifiesta que de acuerdo a nuestro ordenamiento jurídico, no se toma en cuenta
el grado de evolución psicofísica que haya alcanzado el menor de 14 años o si
anteriormente al hecho punible haya tenido experiencia de tipo sexual.
Comportamiento típico. En efecto, Peña Cabrera (2015) nos dice que el artículo 173°
exige el acto sexual o un acto análogo, es decir que para que realice típicamente esta
figura le ley prescribe la realización del yacimiento o de un acto parecido. Subrayando
lo antes dicho, según esta descripción típica, normativamente se ha definido que el
acceso carnal puede ser vía anal, vaginal y bucal tratándose del miembro viril,
pudiéndose producir una violación a la inversa. Aunado a ello, Peña Cabrera (2015)
señala que es indiferente los medios utilizados por el autor para la realización del delito:
violencia física, amenaza, engaño, etc. La Ley solo pone como exigencia típica, que el
sujeto activo dirija su conducta hacia la perpetración del acceso carnal sexual, esto es, el
acceso del miembro viril a las cavidades vaginal, anal y bucal, y/o introduciendo partes

110
del cuerpo u objetos sustitutos del pene en las dos primeras vías, prescindiendo de todo
elemento típico complementario. Tampoco interesa el hecho que el menor sea
corrompido e inclusive, ejerza la prostitución, o que sea virgen. Empero, si se produjo
violencia y/o grave amenaza, el desvalor de la acción podrá significar una mayor dureza
en la reacción punitiva, en cuanto un mayor grado de afectación también en la
antijuridicidad material. Por su parte, para Galvez & Delgado (2012) a diferencia del
delito de violación sexual, previsto en el artículo 170, lo que se castiga es solo la
realización del acceso carnal u otro análogo, sin ser necesario el uso de la violencia
física o grave amenaza contra la víctima. Incluso nos dice el mencionado autor que se
reprimen aquellas conductas en las que el menor consienta la conducta sexual o sea
quien las propicie, pues en este caso dicho consentimiento resulta inválido; al ser la
indemnidad sexual del menor el objeto de protección, se busca evitar las repercusiones
negativas que tales contactos sexuales puedan tener el normal proceso de socialización
del menor.

2.2.2.2.2.2.1. Elementos de la tipicidad subjetiva


El dolo. Noguera (2016) menciona que el sujeto actúa con conciencia y voluntad,
teniendo acceso carnal por vía vaginal, anal o bucal, o realiza otros actos análogos
introduciendo objetos o partes del cuerpo por la vía vaginal o anal. Aunado a ello, para
que se configure el dolo, es necesaria la concurrencia de estos elementos, decir la
conciencia y la voluntad que equivale a la intencionalidad.

A su turno (Vasquez & Delgado, 2011) señalan que se requiere necesariamente el dolo,
es decir el agente actúa con conocimiento y voluntad de tener acceso carnal con un
menor de catorce años de edad o realizar otros actos análogos introduciendo objetos o
partes del cuerpo por vía vaginal o anal. No requiere ningún otro elemento subjetivo
distinto al dolo (por ejemplo, animo lascivo) desacertándose la comisión imprudente,
pues en este caso se ha establecido el sistema números clausus, conforme al art. 12 ° del
Código Penal.
Asimismo, Salinas (2016) nos dice que se trata de un delito de comisión dolosa y que no
cabe la comisión imprudente. La jurisprudencia nacional es unánime respecto que el
delito de acceso carnal sobre menores es netamente doloso. El precedente
jurisprudencial del 2 de octubre de 1998, de la Sala Mixta Descentralizada de la Corte
Superior de Arequipa, indica:
111
“Tratándose de afirmaciones que el propio acusado formula, fluyen de las mismas que
él era consciente tanto de la conducta que realizaba como de la minoría de la
agraviada y de su posición respecto de ella, sirviendo de sustento probatorio del
momento subjetivo lo que se tiene referido para el objetivo” (p.2013)
Antijuricidad. Salinas (2016) afirma que la misma naturaleza del delito de acceso
sexual sobre un menor hace imposible que, en la realidad práctica, se presenten casos
donde funcione de manera positiva alguna causa justificante cuando la víctima tenga
una edad menor a 14 años.
Culpabilidad. Salinas (2016) nos enseña que luego de verificar que en la conducta
típica de acceso sexual sobre un menor no existe alguna causa de justificación, el
operador jurídico tendrá que determinar si el injusto penal, esto es la conducta típica y
antijurídica puede ser atribuida a su autor. Tal es así que en esta atapa tendrá que
verificarse, si al momento de desplegar su conducta, el agente era imputable, es decir
mayor de 18 años y no sufría de alguna anomalía psíquica que lo coloque en estado de
inimputable; así como que el agente infractor al momento de exteriorizar su conducta de
acceso carnal sexual sobre menor, poseía pleno conocimiento de la antijuricidad de esta,
es decir si sabía que dicho acto estaba vedado por ser contrario al Derecho.

2.2.2.2.3.5. Grados de desarrollo del delito


Tentativa. Para Salinas (2016), al constituir un delito de resultado, puede ser posible
que el injusto penal se quede en grado de tentativa, es decir, el agente inicia la comisión
del acto carnal sexual o análogo, que ha decidido voluntariamente realizar; sin embargo,
por causas extrañas a su primigenia intención no logra su finalidad de acceder
sexualmente a su víctima o voluntariamente decide no consumar el hecho punible. Esto
es, el agente por causas extrañas a su querer no logra penetrar a su víctima o en su caso,
voluntariamente decide no penetrarla o introducirle objetos de apariencia sexual o partes
de cuerpo.
Cabe considerar por otra parte, lo mencionado por Noguera (2016) cuando afirma que
será factible la tentativa siempre que se inicien los actos de ejecución del delito, por
ejemplo que un sátiro (a) pretenda practicar el acceso carnal sexual a una niña o niño
menor de catorce años y sea sorprendido por los progenitores del menor, en
circunstancias en que le estuviese quitando sus prendas íntimas y tratando de
compenetrarse con los genitales del aludido menor, No obstante, el autor en mención
agrega que para que haya tentativa, el agente debe orientar su conducta y voluntad al

112
acceso carnal, utilizando medios que acrediten su verdadera intención de realizarlo.
Por su parte San Martín (s.f) menciona que el delito sí permite la tentativa,
argumentando que: Desde una perspectiva general, tiene expuesto la Corte Suprema que
la tentativa no solo comprende los actos propiamente ejecutivos, es decir, la
exteriorización de los actos tendientes a producir el resultado típico, sino también
requiere que el agente quiera los actos que objetivamente despliega con conocimiento
de su peligrosidad y, además, con la intención de proseguir en la ejecución de los actos
necesarios para la consumación del delito. En esa línea, consideró como tentativa de
delito de violación sexual cuando el agente no pudo terminar el acto sexual por falta de
erección del miembro viril (Ejecución Suprema del 4.12.2000, R.N. número 3877–
2000/Lima). (p. 220)
Consumación. Al respecto, Salinas (2016) menciona que el delito de acceso carnal de
menor se perfecciona o consuma con la penetración total o parcial de la víctima menor,
ya sea vaginal, anal (contra natura) o bucal. O en su caso, cuando comienza la
introducción de objetos o partes del cuerpo en la cavidad vaginal o anal del sujeto
pasivo. Esto es, habrá penetración cuando el miembro viril del varón se introduce en
algunas de las cavidades ya indicadas del sujeto pasivo – menor o cuando en alguna de
esas cavidades del sujeto activo venga a introducirse el pene del varón menor agredido
sexualmente. En caso del uso de objetos o partes del cuerpo, se perfecciona cuando, por
ejemplo, una prótesis sexual o algún objeto parecido al pene son introducidos por vía
vaginal o anal del menor, o en su caso, cuando, por ejemplo, el agente introduce algún o
la mano por el conducto vaginal o rectal de su víctima menor.
De modo similar, Noguera (2016) enseña que el hecho punible queda consumado en el
momento en el que el agente tiene acceso carnal con la victima menor de catorce años
de edad por la vía vaginal, anal, o bucal, al haber introducido total o parcialmente
su miembro viril. Asimismo queda consumando, si el agente realiza otros actos
análogos introduciendo total o parcialmente objetos o partes del cuerpo por la vía
vaginal o anal. Del mismo modo Peña Cabrera (2015), refiere que el delito de
violación sexual de menores se consuma con el acceso carnal, en cualquiera de las
vías descritas en el tipo base: Pues basta para la perfección delictiva que el miembro
viril ingrese de forma parcial, así como otra parte del cuerpo y/o objetos sustitutos del
pene. No se requiere el yacimiento completo, ni siquiera un comienzo de aquel; así
como tampoco la fecundación; menos la desfloración, este será a lo más un dato
objetivo para acreditar la relación delictiva, entre la conducta generadora de la conducta

113
y la acusación del resultado lesivo. (p.129)

2.2.2.2.6. La pena en el delito de violación sexual


En palabras de Salinas (2016) el agente del delito de acceso carnal sexual sobre un
menor será sancionado según corresponda la edad de la víctima del siguiente modo: si
la victima cuenta con una edad menor a diez años, la pena será de cadena perpetua. Si la
victima tiene una edad mayor de 10 y menos de 14 años, la pena privativa de libertad
será no menor de 30 ni mayor de 35 años.
En caso de concurrir alguna circunstancia agravante prevista en el último párrafo del
artículo 173, la pena será de cadena perpetua. Es decir, cuando se trata de menores con
una edad no menor de diez ni mayor de catorce años, si el agente tiene cualquier
posición, cargo o vínculo familiar que le dé particular autoridad sobre la víctima o le
impulse a depositar en él su confianza.
2.3. MARCO CONCEPTUAL
Acceso carnal: Consiste, “en yacer”, según la doctrina mayoritaria, esto es, la
penetración del miembro viril en orificio natural de la víctima, en forma de representar
la cópula (o un equivalente de la misma). (Fernandez, 2015)
Calidad. La calidad puede definirse como la conformidad relativa con las
especificaciones, a lo que el grado en que un producto cumple las especificaciones del
diseño, entro otras cosas, mayor es su calidad o también como comúnmente es encontrar
la satisfacción en un producto cumpliendo todas las expectativas que busca algún
cliente, siendo así controlado por reglas las cuales deben salir al mercado para ser
inspeccionado y tenga los requerimientos estipulados (Wikipedia, 2012).

Coito contra natura: Cuando ingrese el miembro viril, hace contacto con la línea
perinea y causa una equimosis perianal, comprometiendo la mucosa anal y produciendo
lesiones que da lugar a la laceración.
Corte Superior de Justicia. Es aquel órgano que ejerce las funciones de un tribunal de
última instancia (Lex Jurídica, 2012).
Distrito Judicial. Es la subdivisión territorial del Perú, para efectos de la organización
del Poder Judicial, Cada distrito judicial es encabezado por una Sala Superior de
Justicia. Wikipedia (s.f.)
Delito: (Derecho Penal) Acción típica, antijurídica y culpable. Acto tipificado como tal
en la ley, contrario al derecho y en el que el agente ha tenido dominio sobre las

114
circunstancias, es decir, que por voluntad no ha desarrollado una conducta diferente
(Judicial, s.f.)
Expediente. Es la carpeta material en la que se recopilan todos las actuaciones
judiciales y recaudos que se establecen en un proceso judicial de un caso concreto (Lex
Jurídica, 2012).
Juzgado Penal. Es aquel órgano envestido de poder jurisdiccional con competencia
establecida para resolver casos penales (Lex Jurídica, 2012).
Medios probatorios. Son las actuaciones que, dentro de un proceso judicial, cualquiera
que sea su índole, se encaminan a confirmar la verdad o a demostrar la falsedad de los
hechos aducidos en el juicio (Lex Jurídica, 2012).
Parámetro(s). Elemento constante en el planeamiento de una cuestión. (Larousse,
2004).
Primera instancia. Es la primera jerarquía competencial en que inicia un proceso
judicial (Lex Jurídica, 2012).
Sala Penal. Es aquel órgano que ejerce las funciones de juzgamiento de los procesos
ordinarios y de apelación en los procesos sumarios (Lex Jurídica, 2012).
Segunda instancia. Es la segunda jerarquía competencial en que inicia un proceso
judicial (Lex Jurídica, 2012).
Testigo: (Derecho Procesal) Persona que de manera directa presencia y puede de
manera consciente dar testimonio de los hechos acaecidos. También se designa a las
personas que garantizan o comprometen su palabra, asegurando la autenticidad de un
documento o de la condición de una persona. (Judicial, s.f.)

115
IV. METODOLOGÍA
3.1. Tipo y nivel de investigación
3.1.1. Tipo de investigación: cuantitativo - cualitativo
Cuantitativo: la investigación, se inicia con el planteamiento de un problema delimitado
y concreto; se ocupará de aspectos específicos externos del objeto de estudio, y el marco
teórico que guiará el estudio será elaborado sobre la base de la revisión de la literatura,
que a su vez, facilitará la operacionalización de la variable (Hernández, Fernández &
Batista, 2010).
Cualitativo: las actividades de recolección, análisis y organización de los datos se
realizarán simultáneamente (Hernández, Fernández & Batista, 2010).
3.1.2. Nivel de investigación: exploratorio - descriptivo
Exploratorio: porque la formulación del objetivo, evidencia que el propósito será
examinar una variable poco estudiada; además, hasta el momento de la planificación de
investigación, no se han encontrado estudios similares; mucho menos, con una
propuesta metodológica similar. Por ello, se orientará a familiarizarse con la variable en
estudio, teniendo como base la revisión de la literatura que contribuirá a resolver el
problema (Hernández, Fernández & Batista, 2010).
Descriptivo: porque el procedimiento de recolección de datos, permitirá recoger
información de manera independiente y conjunta, su propósito será identificar las
propiedades o características de la variable (Hernández, Fernández & Batista, 2010).
Será un examen intenso del fenómeno, bajo la permanente luz de la revisión de la
literatura, orientada a identificar, si la variable en estudio evidencia, un conjunto de
características que definen su perfil (Mejía, 2004).

3.2. Diseño de investigación: no experimental, transversal, retrospectivo


No experimental: porque no habrá manipulación de la variable; sino observación y
análisis del contenido. El fenómeno será estudiado conforme se manifestó en su
contexto natural, en consecuencia, los datos reflejarán la evolución natural de los
eventos, ajeno a la voluntad del investigador (Hernández, Fernández & Batista, 2010).
Retrospectivo: porque la planificación y recolección de datos se realizará de registros,
de documentos (sentencias), en consecuencia, no habrá participación del investigador
(Hernández, Fernández & Batista, 2010). En el texto de los documentos se evidenciará
el fenómeno perteneciente a una realidad pasada.

116
Transversal o transeccional: porque los datos pertenecerán a un fenómeno que ocurrió
por única vez en el transcurso del tiempo (Supo, 2012; Hernández, Fernández & Batista,
2010). Este fenómeno, quedó plasmado en registros o documentos, que viene a ser las
sentencias; por esta razón, aunque los datos se recolecten por etapas, siempre será de un
mismo texto.

3.3. Objeto de estudio y variable en estudio


Objeto de estudio: estará conformado por las sentencias de primera y segunda instancia,
sobre delitos contra la libertad sexual en la modalidad de violación sexual de menor de
edad existentes en el expediente N° 01630-2014- 35-2001-JR-PE-04, perteneciente al
Juzgado Penal Colegiado de la ciudad de Piura, del Distrito Judicial de Piura.
Variable: la variable en estudio es, la calidad de las sentencias de primera y segunda
instancia sobre delitos contra la libertad sexual en la modalidad de violación sexual de
menor de edad. La operacionalización de la variable se evidencia como Anexo 1.

3.4. Fuente de recolección de datos. Será, el expediente judicial el N° 01630-2014- 35-


2001-JR-PE-04, perteneciente al Juzgado Penal Colegiado de la ciudad de Piura, del
Distrito Judicial de Piura; seleccionado, utilizando el muestreo no probabilístico por
conveniencia, por cuestiones de accesibilidad (Casal, y Mateu; 2003).

3.5. Procedimiento de recolección, y plan de análisis de datos. Se ejecutará por


etapas o fases, conforme sostienen Lenise Do Prado; Quelopana Del Valle; Compean
Ortiz, y Reséndiz Gonzáles (2008). Estas etapas serán:
3.5.1. La primera etapa: abierta y exploratoria. Será una actividad que consistirá en
aproximarse gradual y reflexivamente al fenómeno, estará guiado por los objetivos de la
investigación; donde cada momento de revisión y comprensión será una conquista; es
decir, será un logro basado en la observación y el análisis.
3.5.2. La segunda etapa: más sistematizada, en términos de recolección de datos.
También, será una actividad orientada por los objetivos, y la revisión permanente de la
literatura, porque facilitará la identificación e interpretación de los datos. Se aplicará las
técnicas de la observación y el análisis de contenido, y los hallazgos serán trasladados
literalmente, a un registro (hojas digitales) para asegurar la coincidencia; con excepción
de los datos de identidad de las partes y toda persona particular, citados en el proceso
judicial serán reemplazados por sus iniciales.

117
3.5.3. La tercera etapa: consistente en un análisis sistemático. Será una actividad
observacional, analítica, de nivel profundo orientada por los objetivos, articulando los
datos con la revisión de la literatura.
El instrumento para la recolección de datos, será una lista de cotejo validado, mediante
juicio de expertos (Valderrama, s.f), estará compuesto de parámetros, normativos,
doctrinarios y jurisprudenciales pertinentes, extraídos de la revisión de la literatura, que
se constituirán en indicadores de la variable. Los procedimientos de recolección,
organización, calificación de los datos y determinación de la variable, se evidencia
como Anexo 2.

3.6. Consideraciones éticas


La realización del análisis crítico del objeto de estudio, estará sujeta a lineamientos
éticos básicos de: objetividad, honestidad, respeto de los derechos de terceros, y
relaciones de igualdad (Universidad de Celaya, 2011). El investigador asume estos
principios, desde el inicio, durante y después del proceso de investigación; a efectos de
cumplir el principio de reserva, el respeto a la dignidad humana y el derecho a la
intimidad (Abad y Morales, 2005). Se suscribirá una Declaración de Compromiso Ético,
que se evidenciará como Anexo 3.

3.7. Rigor científico. Para asegurar la confirmabilidad y credibilidad; minimizar los


sesgos y tendencias, y rastrear los datos en su fuente empírica (Hernández, Fernández &
Batista, 2010), se ha insertará el objeto de estudio: sentencias de primera y segunda
instancia, que se evidenciará como Anexo 4.
Finalmente se precisa, que la elaboración y validación del instrumento; la
operacionalización de la variable (Anexo 1); Los procedimientos para la recolección,
organización y calificación de los datos (Anexo 2); el contenido de la Declaración de
Compromiso Ético (Anexo 3); el diseño de los cuadros para presentar los resultados, y
el procedimiento aplicado para la determinación de las sub dimensiones, las
dimensiones y la variable en estudio, fue realizado por la Abog. Dionee L. Muñoz
Rosas (Docente en investigación – ULADECH Católica – Sede central: Chimbote -
Perú).

118
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124
A
N
E
X
O
S
125
ANEXO 1
Cuadro de Operacionalización de la Variable (Imp. Rep. Civil)
OBJET VARIAB DIMENSIONE SUB PARÁMETROS
O DE LE S DIMENSION (INDICADORES)
ESTUD ES
IO
1. El encabezamiento evidencia: la individualización de la sentencia, indica el número de
expediente, el numero de resolución que le corresponde a la sentencia, lugar, fecha de
expedición, menciona al juez, jueces/la identidad de las partes. En los casos que
correspondiera la reserva de la identidad por tratarse de menores de edad. etc. Si
Introducción cumple/No cumple
2. Evidencia el asunto: ¿Qué plantea? Qué imputación? ¿Cuál es el problema sobre lo que
S se decidirá?. Si cumple/No cumple
3. Evidencia la individualización del acusado: Evidencia datos personales del acusado:
PARTE nombres, apellidos, edad/ en algunos casos sobrenombre o apodo. Si cumple/No cumple
EXPOSITI 4. Evidencia los aspectos del proceso: el contenido explicita que se tiene a la vista un
E CALIDA VA proceso regular, sin vicios procesales, sin nulidades, que se ha agotado los plazos, las
D
etapas, advierte constatación, aseguramiento de las formalidades del proceso, que ha llegado
el momento de sentenciar/ En los casos que correspondiera: aclaraciones modificaciones o
aclaraciones de nombres y otras; medidas provisionales adoptadas durante el proceso,
cuestiones de competencia o nulidades resueltas, otros. Si cumple/No cumple
N
DE 5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple
T LA
1. Evidencia descripción de los hechos y circunstancias objeto de la acusación. Si
Postura de cumple/No cumple
las partes 2. Evidencia la calificación jurídica del fiscal. Si cumple/No cumple
3. Evidencia la formulación de las pretensiones penales y civiles del fiscal /y de la parte
E civil.
SENTENC
IA
Este último, en los casos que se hubieran constituido en parte civil. Si cumple/No
cumple
4. Evidencia la pretensión de la defensa del acusado. Si cumple/No cumple

126
N 5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de
tecnicismos, tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se
asegura de no anular,

127
o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones ofrecidas.
Si cumple/No cumple
1. Las razones evidencian la selección de los hechos probados o improbadas. (Elemento
imprescindible, expuestos en forma coherente, sin contradicciones, congruentes y
concordantes con los alegados por las partes, en función de los hechos relevantes que
sustentan la pretensión(es).Si cumple/No cumple
Motivación de 2. Las razones evidencian la fiabilidad de las pruebas. (Se realizó el análisis individual de
PARTE los hechos la fiabilidad y validez de los medios probatorios; si la prueba practicada puede considerarse
fuente de conocimiento de los hechos, se verificó los requisitos requeridos para su validez).Si
CONSIDERATI cumple/No cumple
VA 3. Las razones evidencian aplicación de la valoración conjunta. (El contenido evidencia
completitud en la valoración, y no valoración unilateral de las pruebas, el órgano
jurisdiccional examina todos los posibles resultados probatorios, interpreta la prueba, para
saber su significado). Si cumple/No cumple
4. Las razones evidencia aplicación de las reglas de la sana crítica y las máximas de la
experiencia. (Con lo cual el juez forma convicción respecto del valor del medio probatorio
para dar a conocer de un hecho concreto).Si cumple/No cumple
5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple
1. Las razones evidencian la determinación de la tipicidad. (Adecuación del
Motivación comportamiento al tipo penal) (Con razones normativas, jurisprudenciales o doctrinarias
lógicas y completas). Si cumple/No cumple
del derecho 2. Las razones evidencian la determinación de la antijuricidad (positiva y negativa) (Con
razones normativas, jurisprudenciales o doctrinarias, lógicas y completas). Si cumple/No
cumple
3. Las razones evidencian la determinación de la culpabilidad. (Que se trata de un sujeto
imputable, con conocimiento de la antijuricidad, no exigibilidad de otra conducta, o en su caso
cómo se ha determinado lo contrario. (Con razones normativas, jurisprudenciales o
doctrinarias lógicas y completas). Si cumple/No cumple
4. Las razones evidencian el nexo (enlace) entre los hechos y el derecho aplicado que
justifican la decisión. (Evidencia precisión de las razones normativas, jurisprudenciales
y
128
doctrinas, lógicas y completas, que sirven para calificar jurídicamente los hechos y sus
circunstancias, y para fundar el fallo). Si cumple/No cumple
5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple
1. Las razones evidencian la individualización de la pena de acuerdo con los parámetros
Motivaci legales previstos en el artículo 45 (Carencias sociales, cultura, costumbres, intereses de la
ón de víctima, de su familia o de las personas que de ella dependen) y 46 del Código Penal
la (Naturaleza de la acción, medios empleados, importancia de los deberes infringidos,
pe extensión del daño o peligro causados, circunstancias de tiempo, lugar, modo y ocasión;
na móviles y fines; la unidad o pluralidad de agentes; edad, educación, situación económica y
medio social; reparación espontánea que hubiere hecho del daño; la confesión sincera antes
de haber sido descubierto; y las condiciones personales y circunstancias que lleven al
conocimiento del agente; la habitualidad del agente al delito; reincidencia) . (Con razones,
normativas, jurisprudenciales y doctrinarias, lógicas y completa). Si cumple/No cumple
2. Las razones evidencian proporcionalidad con la lesividad. (Con razones, normativas,
jurisprudenciales y doctrinarias, lógicas y completas, cómo y cuál es el daño o la amenaza
que ha sufrido el bien jurídico protegido). Si cumple/No cumple
3. Las razones evidencian proporcionalidad con la culpabilidad. (Con razones,
normativas, jurisprudenciales y doctrinarias, lógicas y completas). Si cumple/No cumple
4. Las razones evidencian apreciación de las declaraciones del acusado. (Las razones
evidencian cómo, con qué prueba se ha destruido los argumentos del acusado). Si cumple/No
cumple
5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple
1. Las razones evidencian apreciación del valor y la naturaleza del bien jurídico
Motivaci protegido. (Con razones normativas, jurisprudenciales y doctrinarias, lógicas y completas).
ón de la Si cumple/No cumple
reparación 2. Las razones evidencian apreciación del daño o afectación causado en el bien jurídico
civil protegido. (Con razones normativas, jurisprudenciales y doctrinas lógicas y completas). Si
cumple/No cumple

129
3. Las razones evidencian apreciación de los actos realizados por el autor y la víctima en
las circunstancias específicas de la ocurrencia del hecho punible. (En los delitos culposos
la imprudencia/ en los delitos dolosos la intención). Si cumple/No cumple
4. Las razones evidencian que el monto se fijó prudencialmente apreciándose las
posibilidades económicas del obligado, en la perspectiva cierta de cubrir los fines
reparadores. Si cumple/No cumple
5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple
1. El pronunciamiento evidencia correspondencia (relación recíproca) con los
hechos expuestos y la calificación jurídica prevista en la acusación del fiscal. Si
Aplicación cumple/No cumple
del 2. El pronunciamiento evidencia correspondencia (relación recíproca) con las
Principio de pretensiones penales y civiles formuladas por el fiscal y la parte civil (éste último,
correlación en los casos que se hubiera constituido como parte civil). Si cumple/No cumple
3. El pronunciamiento evidencia correspondencia (relación recíproca) con las
PARTE pretensiones de la defensa del acusado. Si cumple/No cumple
RESOLUTI
4. El pronunciamiento evidencia correspondencia (relación recíproca) con la
parte expositiva y considerativa respectivamente. (El pronunciamiento es
VA
consecuente con las posiciones expuestas anteriormente en el cuerpo del documento
- sentencia). Si cumple/No cumple
5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple
1. El pronunciamiento evidencia mención expresa y clara de la identidad del(os)
Descripción de sentenciado(s). Si cumple/No cumple
la decisión 2. El pronunciamiento evidencia mención expresa y clara del(os) delito(s)
atribuido(s) al sentenciado. Si cumple/No cumple
3. El pronunciamiento evidencia mención expresa y clara de la pena (principal y
accesoria, éste último en los casos que correspondiera) y la reparación civil. Si
cumple/No cumple
4. El pronunciamiento evidencia mención expresa y clara de la(s) identidad(es)
del(os) agraviado(s). Si cumple/No cumple

130
5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple

131
CUADRO DE OPERACIONALIZACIÓN DE LA VARIABLE: SENTENCIA PENAL CONDENATORIA - CALIDAD DE LA
SENTENCIA (2DA.INSTANCIA)

OBJET VARIABLE DIMENSIONES SUB PARÁMETROS


O DE DIMENSION (INDICADORES)
ESTUD ES
IO
1. El encabezamiento evidencia: la individualización de la sentencia, indica el número de
expediente, el número de resolución que le corresponde a la sentencia, lugar, fecha de
Introducción expedición, menciona al juez, jueces/la identidad de las partes. En los casos que
correspondiera la reserva de la identidad por tratarse de menores de edad. Si cumple/No
cumple
PARTE 2. Evidencia el asunto: ¿Cuál es el problema sobre lo que se decidirá? el objeto de la
EXPOSITI impugnación. Si cumple/No cumple
VA 3. Evidencia la individualización del acusado: Evidencia individualización del acusado
S CALIDAD con sus datos personales: nombres, apellidos, edad/ en algunos casos sobrenombre o
apodo. Si cumple/No cumple
4. Evidencia los aspectos del proceso: el contenido explicita que se tiene a la vista un
proceso regular, sin vicios procesales, sin nulidades, que se ha agotado los plazos en
E segunda instancia, se advierte constatación, aseguramiento de las formalidades del
DE
proceso, que ha llegado el momento de sentenciar. Si cumple/No cumple
5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
N LA anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple
1. Evidencia el objeto de la impugnación: El contenido explicita los extremos
Postura de impugnados. Si cumple/No cumple
T las partes 2. Evidencia congruencia con los fundamentos fácticos y jurídicos que sustentan la
impugnación. (Precisa en qué se ha basado el impugnante). Si cumple/No cumple.
3. Evidencia la formulación de las pretensiones(es) del impugnante(s). Si cumple/No
SENTENCI
cumple.
E A
4. Evidencia la formulación de las pretensiones penales y civiles de la parte contraria
(Dependiendo de quién apele, si fue el sentenciado quien apeló, lo que se debe buscar es la
pretensión del fiscal y de la parte civil, de este último en los casos que se hubieran
constituido en parte civil). Si cumple/No cumple
N
5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple.
132
C

133
1. Las razones evidencian la selección de los hechos probados o improbadas. (Elemento
Motivación de imprescindible, expuestos en forma coherente, sin contradicciones, congruentes y
los hechos concordantes con los alegados por las partes, en función de los hechos relevantes que
sustentan la pretensión(es).Si cumple/No cumple
2. Las razones evidencian la fiabilidad de las pruebas. (Se realizó el análisis individual
de la fiabilidad y validez de los medios probatorios; si la prueba practicada se puede
considerar fuente de conocimiento de los hechos; se verificó los requisitos requeridos para
PARTE su validez).Si cumple/No cumple
CONSIDERATI 3. Las razones evidencian aplicación de la valoración conjunta. (El contenido evidencia
VA completitud en la valoración, y no valoración unilateral de las pruebas, el órgano
jurisdiccional examina todos los posibles resultados probatorios, interpreta la prueba, para
saber su significado). Si cumple/No cumple
4. Las razones evidencia aplicación de las reglas de la sana crítica y las máximas de la
experiencia. (Con lo cual el juez forma convicción respecto del valor del medio probatorio
para dar a conocer de un hecho concreto).Si cumple/No cumple
5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple
1. Las razones evidencian apreciación del valor y la naturaleza del bien jurídico
Motivación de protegido. (Con razones normativas, jurisprudenciales y doctrinarias, lógicas y completas).
la reparación Si cumple/No cumple
civil 2. Las razones evidencian apreciación del daño o afectación causado en el bien jurídico
protegido. (Con razones normativas, jurisprudenciales y doctrinas lógicas y completas). Si
cumple/No cumple
3. Las razones evidencian los actos realizados por el autor y la víctima en las
circunstancias específicas de la ocurrencia del hecho punible. (En los delitos culposos la
imprudencia/ en los delitos dolosos la intención). Si cumple/No cumple
4. Las razones evidencian que el monto se ha fijó prudencialmente apreciándose las
posibilidades económicas del obligado, en la perspectiva cierta de cubrir los fines
reparadores. Si cumple/No cumple
5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple
1. El pronunciamiento evidencia resolución de todas las pretensiones
formuladas en el recurso impugnatorio (Evidencia completitud). Si cumple/No
cumple

134
Aplicación 2. El pronunciamiento evidencia resolución nada más, que de las pretensiones
formuladas en el recurso impugnatorio. (No se extralimita, excepto en los casos
PARTE del igual derecho a iguales hechos, motivadas en la parte considerativa). Si cumple/No
RESOLUTI Principio cumple
VA 3. El contenido del pronunciamiento evidencia aplicación de las dos reglas
de correlación
precedentes a las cuestiones introducidas y sometidas al debate, en segunda
instancia (Es decir, todas y únicamente las pretensiones indicadas en el recurso
impugnatorio/o las excepciones indicadas de igual derecho a iguales hechos,
motivadas en la parte considerativa). Si cumple/No cumple
4. El pronunciamiento evidencia correspondencia (relación recíproca) con la
parte expositiva y considerativa respectivamente. (El pronunciamiento es
consecuente con las posiciones expuestas anteriormente en el cuerpo del
documento - sentencia). Si cumple/No cumple
5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple.
1. El pronunciamiento evidencia mención expresa y clara de la identidad
Descripción de del(os) sentenciado(s). Si cumple/No cumple
la decisión 2. El pronunciamiento evidencia mención expresa y clara del(os) delito(s)
atribuido(s) al sentenciado. Si cumple/No cumple
3. El pronunciamiento evidencia mención expresa y clara de la pena (principal
y accesoria, este último en los casos que correspondiera) y la reparación civil. Si
cumple/No cumple
4. El pronunciamiento evidencia mención expresa y clara de la(s) identidad(es)
del(os) agraviado(s). Si cumple/No cumple
5. Evidencia claridad: el contenido del lenguaje no excede ni abusa del uso de tecnicismos,
tampoco de lenguas extranjeras, ni viejos tópicos, argumentos retóricos. Se asegura de no
anular, o perder de vista que su objetivo es, que el receptor decodifique las expresiones
ofrecidas. Si cumple/No cumple

135
ANEXO 2

CUADROS DESCRIPTIVOS DEL PROCEDIMIENTO DE RECOLECCIÓN,


ORGANIZACIÓN, CALIFICACIÓN DE LOS DATOS Y DETERMINACIÓN DE LA
VARIABLE
1. CUESTIONES PREVIAS
1. De acuerdo al Cuadro de Operacionalización de la Variable (Anexo 1), se denomina
objeto de estudio a las sentencias de primera y segunda instancia.
2. La variable de estudio viene a ser la calidad de las sentencias de primera y segunda
instancia según los parámetros doctrinarios, normativos y jurisprudenciales pertinentes.
3. La variable tiene dimensiones, los cuales son tres por cada sentencia, estos son: la
parte expositiva, considerativa y resolutiva, respectivamente.
4. Cada dimensión de la variable tiene sus respectivas sub dimensiones.
4.1. En relación a la sentencia de primera instancia:
4.1.1. Las sub dimensiones de la dimensión parte expositiva son 2: Introducción y la
postura de las partes.
4.1.2. Las sub dimensiones de la dimensión parte considerativa son 4: Motivación de los
hechos, motivación del derecho, motivación de la pena y motivación de la reparación
civil.
4.1.3. Las sub dimensiones de la dimensión parte resolutiva son 2: Aplicación del
principio de correlación y descripción de la decisión.
4.2. En relación a la sentencia de segunda instancia:
4.2.1. Las sub dimensiones de la dimensión parte expositiva son 2: Introducción y
postura de las partes.
4.2.2. Las sub dimensiones de la dimensión parte considerativa son 2: Motivación de los
hechos y motivación de la reparación civil.
4.2.3. Las sub dimensiones de la dimensión parte resolutiva son 2: Aplicación del
principio de correlación y descripción de la decisión.
5. Cada sub dimensión presenta 5 parámetros, los cuales se registran en el instrumento
para recoger los datos que se llama lista de cotejo.
6. Para asegurar la objetividad de la medición, en cada sub dimensión se ha previsto 5
parámetros, que son criterios o indicadores de calidad, extraídos indistintamente de la
normatividad, la doctrina y la jurisprudencia que se registran en la lista de cotejo.
7. De los niveles de calificación: se ha previstos 5 niveles de calidad, los cuales son:
muy baja, baja, mediana, alta y muy alta. Aplicable para determinar la calidad de las

136
sub

137
dimensiones, las dimensiones y la variable en estudio.
8. Calificación:
8.1. De los parámetros: el hallazgo o inexistencia de un parámetro, en el texto de la
sentencia en estudio, se califica con las expresiones: si cumple y no cumple
8.2. De las sub dimensiones: se determina en función al número de parámetros
cumplidos.
8.3. De las dimensiones: se determina en función a la calidad de las sub dimensiones,
que presenta.
8.4. De la variable: se determina en función a la calidad de las dimensiones
9. Recomendaciones:
9.1. Examinar con exhaustividad: el Cuadro de Operacionalización de la Variable que
se identifica como Anexo 1.
9.2. Examinar con exhaustividad: el proceso judicial existente en el expediente.
9.3. Identificar las instituciones procesales y sustantivas existentes en el proceso judicial
existente en el expediente, incorporarlos en el desarrollo de las bases teóricas del trabajo
de investigación, utilizando fuentes doctrinarias, normativas y jurisprudenciales.
9.4. Empoderarse, sistemáticamente, de los conocimientos y las estrategias previstas
facilitará el análisis de la sentencia, desde el recojo de los datos, hasta la defensa de la
tesis.
10. El presente anexo solo describe el procedimiento de recojo y organización de los
datos.
11. Los cuadros de presentación de los resultados evidencian su aplicación.

2. PROCEDIMIENTOS PARA RECOGER LOS DATOS DE LOS


PARÁMETROS DOCTRINARIOS, NORMATIVOS Y JURISPRUDENCIALES
PREVISTOS EN EL PRESENTE ESTUDIO.
Para recoger los datos se contrasta la lista de cotejo con el texto de la sentencia; el
propósito es identificar cada parámetro en el texto respectivo de la sentencia. La
calificación se realiza conforme al cuadro siguiente:
Cuadro 1
Calificación aplicable a los parámetros

Texto respectivo de Lista Calificaci


la sentencia de ón
parámetr
os
138
Si cumple (cuando en el texto
se cumple)
No cumple (cuando en el texto no
se cumple)
Fundamentos:
🟃 El hallazgo de un parámetro se califica con la expresión : Si cumple
🟃 La ausencia de un parámetro se califica con la expresión : No cumple

3. PROCEDIMIENTO BÁSICO PARA DETERMINAR LA CALIDAD DE UNA


SUB DIMENSIÓN
(Aplicable cuando se trata de la sentencia de primera y de segunda instancia)

Cuadro 2
Calificación aplicable a cada sub dimensión de la parte expositiva y resolutiva
Cumplimiento de los Valor Calificación de
parámetros en una (referencial) calidad
sub dimensión
Si se cumple 5 de 5 Muy alta
los 5 parámetros
previstos
Si se cumple 4 de 4 Alta
los 5 parámetros
previstos
Si se cumple 3 de 3 Mediana
los 5 parámetros
previstos
Si se cumple 2 de 2 Baja
los 5 parámetros
previstos
Si sólo se cumple 1 Muy baja
1 parámetro
previsto o
ninguno
Fundamentos:
🟃 Se procede luego de haber aplicado las pautas establecidas en el Cuadro 1, del presente
documento.
🟃 Consiste en agrupar los parámetros cumplidos.
🟃 La calidad de la sub dimensión se determina en función al número de parámetros
cumplidos.
🟃 Para todos los casos el hallazgo de uno, o ninguno de los 5 parámetros previstos, se
califica con el nivel de: muy baja.

139
4. PROCEDIMIENTO PARA DETERMINAR LA CALIDAD DE LAS
DIMENSIONES PARTE EXPOSITIVA Y RESOLUTIVA.
(Aplicable cuando se trata de la sentencia de primera y de segunda instancia).
Cuadro 3
Calificación aplicable a las dimensiones: parte expositiva y parte resolutiva
Calificación
Rangos de Calificación
De las D
calificación de la calidad
sub e
Dimensió Sub de la de la
dimensio
n dimensio dimensión dimensión
nes l
nes
a
dimensi
Muy baja

ón

1 2 3 4 5
Nombre de la X [ 9 - 10 ] Muy
sub dimensión Alta
Nombre de 7 [7 -8] Alta
la
dimensión: Nombre de la X [5 -6] Median
… sub dimensión a
[3 -4] Baja
[1- 2] Muy
baja
Ejemplo: 7, está indicando que la calidad de la dimensión, … es alta, se deriva de la calidad de
las dos sub dimensiones,….. y ……, que son baja y muy alta, respectivamente.

Fundamentos:
🟃 De acuerdo al Cuadro de Operacionalización de la Variable (Anexo 1), las
dimensiones identificadas como: parte expositiva y parte resolutiva, cada una, presenta
dos sub dimensiones.
🟃 Asimismo, el valor máximo que le corresponde a una sub dimensión es 5 (Cuadro 2).
Por esta razón, el valor máximo que le corresponde a una dimensión que tiene 2 sub
dimensiones es 10.
🟃 Por esta razón el valor máximo que le corresponde a la parte expositiva y parte
resolutiva, es 10.
🟃 Asimismo, para los efectos de establecer los 5 niveles de calidad, se divide 10 (valor
máximo) entre 5 (número de niveles), y el resultado es 2.
🟃 El número 2, indica que cada nivel de calidad presenta 2 niveles de calidad
🟃 Asimismo, para comprender todos los valores probables que surjan al organizar los
datos, se establece rangos; éstos a su vez orientan la determinación de la calidad.
Ejemplo: observar el contenido y la lectura ubicada en la parte inferior del Cuadro 3.

140
🟃 La determinación de los valores y niveles de calidad, se evidencian en el siguiente
texto:
Valores y nivel de calidad:
[ 9 - 10] = Los valores pueden ser 9 o 10 = Muy alta
[ 7 - 8] = Los valores pueden ser 7 u 8 = Alta [ 5 - 6] = Los valores pueden ser 5 o 6 = Mediana
[ 3 - 4] = Los valores pueden ser 3 o 4 = Baja
[ 1 - 2] = Los valores pueden ser 1 o 2 = Muy baja
Nota: Esta información se evidencia en las dos últimas columnas del Cuadro 3.

5. PROCEDIMIENTO BÁSICO PARA DETERMINAR LA CALIDAD DE LA


DIMENSIÓN PARTE CONSIDERATIVA
Se realiza por etapas.
5.1. Primera etapa: determinación de la calidad de las sub dimensiones de la parte
considerativa
(Aplicable cuando se trata de la sentencia de primera y de segunda instancia).
Cuadro 4
Calificación aplicable a las sub dimensiones de la parte considerativa
Cumplimiento de Valor Calificación
criterios de Ponderaci numérico de
evaluación ón (referencial) calidad
Si se cumple 5 de 2x 5 10 Muy
los 5 parámetros alta
previstos
Si se cumple 4 de 2x 4 8 Alta
los 5 parámetros
previstos
Si se cumple 3 de 2x 3 6 Median
los 5 parámetros a
previstos
Si se cumple 2 de 2x2 4 Baja
los 5 parámetros
previstos
Si sólo se cumple 1 2x 1 2 Muy
parámetro previsto o baja
ninguno
Nota: el número 2, está indicando que la ponderación o peso asignado para los parámetros está
duplicado; porque pertenecen a la parte considerativa, lo cual permite hallar los valores que orientan el
nivel de calidad.

Fundamentos:
🟃 Aplicar el procedimiento previsto en el Cuadro 1. Es decir; luego de haber identificado
uno por uno, si los parámetros se cumplen o no.

141
🟃 El procedimiento para determinar la calidad de las dimensiones identificadas como
parte EXPOSITIVA Y RESOLUTIVA, difiere del procedimiento empleado para
determinar la calidad la dimensión identificada como parte CONSIDERATIVA. En éste
último la ponderación del cumplimiento de los parámetros se duplican.
🟃 La calidad de la parte expositiva y resolutiva emerge de la calidad de sus respectivas
sub dimensiones, los cuales a su vez se determinan agrupando los parámetros
cumplidos conforme al Cuadro 2.
🟃 La calidad de la parte considerativa; también, emerge de la calidad de sus respectivas sub
dimensiones; cuya calidad, a diferencia de las anteriores, se determina luego de multiplicar
por 2, el número de parámetros cumplidos conforme al Cuadro 4. Porque la ponderación no es
simple; sino doble.
🟃 Por esta razón los valores que orientan la determinación de los cinco niveles de calidad
que son: muy baja, baja, mediana, alta y muy alta; no son, 1, 2, 3, 4 y 5; sino: 2, 4, 6, 8
y 10; respectivamente; cuando se trata de la parte considerativa.
🟃 Fundamentos que sustentan la doble ponderación:

5.2. Segunda etapa: determinación de la calidad de la dimensión: parte


considerativa.
(Aplicable para la sentencia de primera instancia - tiene 4 sub dimensiones – ver
Anexo 1)
Cuadro 5
Calificación aplicable a la dimensión: parte considerativa (primera instancia)
Calificaci
Dimensió ón Rangos Calificaci
n Sub De las sub dimensiones D de ón de la
dimensio e calificaci calidad
nes ón de la de la
Muy baja

Muy alta
Mediana

l dimensi dimensió
Alta
Baja

a ón n
dimensi
ón
2 2x 2=4 2 2 2x
x x x 5=10

1 3 4
= = =
2 6 8

[33 - 40] Muy alta


Nom d
bre e X
la s
u
b
dimensión [25 - 32] Alta
Parte

3 [17 - 24]
considerati Nom d X 2 Mediana

142
va bre la e
s
u
b
dimensión

Nom d [9 - 16] Baja


bre e
la s X
u
b
dimensión
Nom d Muy baja
bre e
la s X [1 - 8]
u
b
dimensión

Ejemplo: 32, está indicando que la calidad de la dimensión parte considerativa es de calidad
alta, se deriva de los resultados de la calidad de las 4 sub dimensiones que son de calidad
mediana, alta, alta y muy alta, respectivamente.

Fundamentos:
🟃 De acuerdo al Cuadro de Operacionalización de la Variable (Anexo 1), la parte considerativa
presenta 4 sub dimensiones que son motivación de los hechos, motivación del derecho,
motivación de la pena y motivación de la reparación civil.
🟃 De acuerdo al Cuadro 4, el valor máximo que le corresponde a cada sub dimensión es 10;
asimismo, de acuerdo a la lista de especificaciones (punto 8.3), la calidad de una dimensión se
determina en función a la calidad de las sub dimensiones que lo componen.
🟃 Por esta razón si una dimensión tiene 4 sub dimensiones, cuyo valor máximo de cada uno, es
10; el valor máximo que le corresponde a la dimensión es 40.
🟃 El número 40, es referente para determinar los niveles de calidad. Consiste en dividir 40 (valor
máximo) entre 5 (número de niveles), y el resultado es 8.
🟃 El número 8 indica, que en cada nivel de calidad hay 8 valores.
🟃 Asimismo, para comprender todos los valores probables que surjan al organizar los datos, se
establece rangos; para orientar la determinación de los 5 niveles de calidad. Ejemplo: observar
el contenido y la lectura ubicada en la parte inferior del Cuadro 5.
🟃 La determinación de los valores y niveles de calidad, se evidencian en el siguiente texto:
Valores y nivel de calidad:
[ 33 - 40] = Los valores pueden ser 33,34,35,36,37, 38, 39 o 40 = Muy alta
[ 25 - 32] = Los valores pueden ser 25,26,27,28,29,30,31 o 32 = Alta
[ 17 - 24] = Los valores pueden ser 17,18,19,20,21,22,23 o 24 = Mediana
[ 9 - 16] = Los valores pueden ser 9,10,11,12,13,14,15, o 16 = Baja

143
[ 1 - 8] = Los valores pueden ser 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7 u 8 = Muy baja

5.2. Tercera etapa: determinación de la calidad de la dimensión: parte considerativa


(Aplicable para la sentencia de segunda instancia - tiene 2 sub dimensiones – ver Anexo 1)
Cuadro 6
Calificación aplicable a la dimensión: parte considerativa (segunda instancia)
Calificaci
Dimensió ón Rangos Calificaci
n Sub de ón de la
dimensio calificaci calidad de
nes ón de la la
De las sub dimensiones D
dimensi dimensió
e
ón n
Muy baja

Mediana

Muy alta
Baja

Alta l
a
dimensi
2x 2x 2=4 2x 2x 2x
ón
1= 3= 4= 5=10
2 6 8

Nombre
Parte [17 - Muy alta
de la X 20]
considerat 1
sub 4
iva dimensión
X [13 - Alta
Nombre 16]
[9 - Mediana
de la 12]
sub [5 - 8] Baja
dimensión [1 - 4] Muy baja

Ejemplo: 14, está indicando que la calidad de la dimensión parte considerativa es de calidad alta, se
deriva de los resultados de la calidad de las dos sub dimensiones que son de calidad mediana y alta,
respectivamente.
Fundamentos:
🟃 De acuerdo al Cuadro de Operacionalización de la Variable (Anexo 1), la parte considerativa
presenta 2 sub dimensiones que son motivación de los hechos y motivación de la reparación
civil.
🟃 De acuerdo al Cuadro 4, el valor máximo que le corresponde a cada sub dimensión es 10;
asimismo, de acuerdo a la lista de especificaciones (punto 8.3), la calidad de una dimensión se
determina en función a la calidad de las sub dimensiones que lo componen.
🟃 Por esta razón si una dimensión tiene 2 sub dimensiones, cuyo valor máximo de cada uno, es
10; el valor máximo que le corresponde a la dimensión es 20.
🟃 El número 20, es referente para determinar los niveles de calidad. Consiste en dividir 20 (valor
máximo) entre 5 (número de niveles), y el resultado es 4.
144
🟃 El número 4 indica, que en cada nivel de calidad hay 4 valores.
🟃 Asimismo, para comprender todos los valores probables que surjan al organizar los datos, se
establece rangos; para orientar la determinación de los 5 niveles de calidad. Ejemplo: observar
el contenido y la lectura ubicada en la parte inferior del Cuadro 6.
🟃 La determinación de los valores y niveles de calidad, se evidencian en el siguiente texto:
Valores y nivel de calidad:
[ 17 - 20] = Los valores pueden ser 17, 18, 19 o 20 = Muy alta
[ 13 - 16] = Los valores pueden ser 13, 14, 15 o 16 = Alta
[ 9 - 12] = Los valores pueden ser 9, 10, 11 o 12 = Mediana
[ 5 - 8] = Los valores pueden ser 5, 6, 7 u 8 = Baja
[ 1 - 4] = Los valores pueden ser 1, 2, 3 o 4 = Muy baja

6. PROCEDIMIENTO PARA DETERMINAR LA CALIDAD DE LA VARIABLE:


CALIDAD DE LA SENTENCIAS
Se realiza por etapas:
6.1. Primera etapa: con respecto a la sentencia de primera instancia
Cuadro 7
Calificación aplicable a la sentencia de primera instancia…

Calificación de las Determinación de la variable:


sub Calificac calidad de la sentencia
dimensiones ión de
las
dimensio
Muy baja

Muy alta
Mediana
Sub dimensiones

nes
Muy baja

Muy alta
Mediana

Baja

Alta
Baja

Alta
Variable

Dimensión

1 2 3 4 5 [1 [1 [2 [3 [4
- 3- 5- 7- 9-
1 24 36 48 60
2] ] ] ] ]
Introducción [9- Muy
X 10] alta
7 [7 - Alta
Parte expositiva

Postura de 8]
las partes [5 - 6] Median
X a
[3- 4] Baja
[1- 2] Muy
baja
2 4 6 8 1 [33- Muy
0 40] alta
Motivación 3 [25- Alta 5
de los X 4 32] 0
hechos
[17- Median
Motivación 24] a
del derecho X

Motivación [9- Baja


de la pena X 16]
Motivación [1- Muy
de la X 8] baja
reparación
civil
145
1 2 3 4 5
[9- Muy
9 10] alta
Aplicación X [7 - Alta
del principio 8]
Parteresolutiva de [5- Median
correlación 6] a
Descripción X [3 - Baja
de la 4]
decisión [1 - Muy
2] baja
Ejemplo: 50, está indicando que la calidad de la sentencia en estudio es de rango muy alta, se deriva de
los resultados de la calidad de su parte expositiva, considerativa y resolutiva que son de rango: alta, muy
alta y muy alta, respectivamente.

Fundamentos:
🟃 De acuerdo a la Lista de Especificaciones (ver al inicio de éste documento), la calidad de cada
sentencia se determina en función a la calidad de sus partes.
🟃 Para determinar la calidad de la sentencia de primera instancia, se aplica todos los
procedimientos especificados, de la forma siguiente:
1) Recoger los datos de los parámetros.
2) Determinar la calidad de las sub dimensiones; y
3) Determinar la calidad de las dimensiones.
4) Ingresar la información a cuadro similar al que se presenta en el Cuadro 7. Se realiza al
concluir el trabajo de investigación.
Determinación de los niveles de calidad.
1) Se determina el valor máximo, en función al valor máximo de la parte expositiva,
considerativa y resolutiva, que son 10, 40 y 10, respectivamente, (Cuadro 3 y 5), el resultado es:
60.

2) Para determinar los niveles de calidad se divide 60 (valor máximo) entre 5 (número de
niveles) el resultado es: 12.
3) El número 12, indica que en cada nivel habrá 12 valores.
4) Para asegurar que todos los valores que surjan al organizar los datos, se establece rangos,
para orientar los 5 niveles de calidad. Ejemplo: observar el contenido y la lectura ubicada en la
parte inferior del Cuadro 6.
5) Observar los niveles y valores de cada nivel en el siguiente texto:
Valores y nivel de calidad:
[ 49 - 60] = Los valores pueden ser 49,50,51,52,53,54,55,56,57,58,59 o 60 = Muy alta
[ 37 - 48] = Los valores pueden ser 37,38,39,40,41,42,43,44,45,46,47 o 48 = Alta
[ 25 - 36] = Los valores pueden ser 25,26,27,28,29,30,31,32,33,34,35 o 36 = Mediana
[13 - 24] = Los valores pueden ser 13,14,15,16,17,18,19,20,21,22,23 o 24 = Baja
[ 1 - 12] = Los valores pueden ser 1,2,3,4,5,6,7,8,9,10,11 o 12 = Muy baja

146
6.2. Segunda etapa: con respecto a la sentencia a la segunda instancia
Cuadro 7

Calificación aplicable a la sentencia de segunda instancia…


Calificación de las Determinación de la
sub Calificac variable: calidad de la
dimensiones ión de las sentencia
dimensio

Muy baja
nes

Muy alta
Mediana
Muy baja

Muy alta
Mediana

Baja

Alta
Baja

Alta
Sub dimensiones

1 2 3 4 5 [ [ [ [2 [
Variable

Dimensión

1 9 1 5- 3
- - 7 3 3
8 1 - 2] -
] 6 2 4
] 4 0
] ]
Introducció X [9 - 10] Muy
n alta
X 7 [7 - 8] Alta
Postura [5 - 6] Media
na
de las [3 - 4] Baja
Parte expositiva

partes [1 - 2] M
u
y
b
aj 3
a
0
2 4 6 8 1 [17 -20] Muy
0 alta
Motivació X 1 [13-16] Alta
n de los 4
Calidad de la sentencia…

hechos
[9- 12] Media
Motivació na
Parte considerativa

n de X [5 -8] Baja
[1 - 4] M
la u
reparac y
ión b
civil aj
a
1 2 3 4 5
[9 -10] Muy
9 alta
Aplicació X [7 - 8] Alta
n del
principio [5 - 6] Media
de na
resolutiva
Parte

correlac
ión
X [3 - 4] Baja

147
Descripci [1 - 2] M
ón de u
y
la b
decisión aj
a
Ejemplo: 30, está indicando que la calidad de la sentencia en estudio es de rango alta, se deriva de los
resultados de la calidad de su parte expositiva, considerativa y resolutiva que fueron de rango: alta, alta y
muy alta, respectivamente.

Fundamentos:
🟃 De acuerdo a las Lista de Especificaciones la calidad de cada sentencia se determina
en función a la calidad de sus partes
🟃 Para determinar la calidad de la sentencia de primera instancia, se aplica todos los
procedimientos especificados, de la forma siguiente:
1. Recoger los datos de los parámetros.
2. Determinar la calidad de las sub dimensiones; y
3. Determinar la calidad de las dimensiones.
4. Ingresar la información a cuadro similar al que se presenta en el Cuadro 7. Se realiza
al concluir el trabajo de investigación.
Determinación de los niveles de calidad.
1. Se determina el valor máximo, en función al valor máximo de la parte expositiva,
considerativa y resolutiva, que son 10, 20 y 10, respectivamente, (Cuadro 3 y 6), el
resultado es: 40.
2. Para determinar los niveles de calidad se divide 40 (valor máximo) entre 5 (número
de niveles) el resultado es: 10.
3. El número 10, indica que en cada nivel habrá 10 valores.
4. Para asegurar que todos los valores que surjan al organizar los datos, se establece
rangos, para orientar los 5 niveles de calidad. Ejemplo: observar el contenido y la
lectura ubicada en la parte inferior del Cuadro 8.
5. Observar los niveles y valores de cada nivel en el siguiente texto:
Valores y nivel de calidad:
[ 33 - 40] = Los valores pueden ser 33,34,35,36,37, 38, 39 o 40 = Muy alta
[ 25 - 32] = Los valores pueden ser 25,26,27,28,29,30,31 o 32 = Alta
[ 17 - 24] = Los valores pueden ser 17,18,19,20,21,22,23, o 24 = Mediana
[9 - 16] = Los valores pueden ser 9,10,11,12,13,14,15 o 16 = Baja
[ 1 - 8] = Los valores pueden ser 1,2,3,4,5,6,7 u 8 = Muy baja

148
ANEXO 3
JUZGADO PENAL COLEGIADO – SEDE CENTRAL

EXPEDIENTE : 01630-2014-35-2001-JR-PE-04
JUECES : MENDEZ CASTAÑEDA, ASDRUBAL
(*) ATARAMA ROJAS JENNIFER E.
SICHA NAVARRO ROLANDO ERNESTO
ESPECIALISTA : TIMANA VILLEGAS EDWIN JAVIER – F I
MPUTADO : E.T.J.E.
DELITO : VIOLACIÓN SEXUAL DE MENOR DE EDAD (MAYOR DE 10 Y MENOR
DE 14 AÑOS DE EDAD)
AGRAVIADO : MENOR DE INICIALES L.E.S.M
SOLICITANTE : PRIMERA FISCALIA PENAL CORPORATIVA PENAL DE PIURA-
MINSTERIO PÚBLICO
Directora de debates: Dra. Jenniffer Elizabeth Atarama Rojas

SENTENCIA CONDENATORIA
Resolución N° DOS (02)
Piura, trece de enero
Del Año Dos Mil Quince.-

VISTOS Y OIDOS, en audiencia privada de juicio oral los integrantes del juzgado penal colegiado
permanente de la Corte Superior de Justicia de Piura conformado por los Jueces A. M. C. J. y E. A. R.
(directora de debates) y R. S. N. en el proceso seguido contra: J. E. E T. identificado con DNI N°
46243952, nacido el 18 de marzo de 1990 en el distrito de Cura Mori – Piura, de 24 años de edad, estado
civil: soltero
– conviviente y una hija, con grado de instrucción secundaria completa, nombre de sus padres J. A. y G.
A. domiciliaba en calle Atahualpa Barrio La Victoria N° 301 – Cura Mori; trabajaba como conductor de
taxi o mototaxi percibiendo veinte nuevos soles diarios (s/ 20.00), sin antecedentes penales, cuenta con una
moto inscrita su nombre. Siendo que el acusado estuvo acompañado en el presente en el juicio oral en la
primera audiencia por su Abogada Defensora particular Dra. P. C. I. C. con registro ICAL 17752, presente
así también la Dra. G. D. C. C. Fiscal provincial de la Primera Fiscalía Provincial de Penal Corporativa de
Piura; instalada la audiencia, e iniciado el debate con el alegato de apertura de la representante del
Ministerio Público, el alegato de apertura de la defensa técnica del acusado, realizada la actividad
probatoria y alegatos de clausura de la fiscalía y del abogado de la defensa así como la autodefensa del
acusado, es el estado del proceso el de emitir sentencia.

CONSIDERANDO:
ATECENDAENTES:
I.- IMPUTACIÓN FISCAL
1.1 La representante del Ministerio Público precisa que en este caso la menor de iniciales L.E.S.M de trece
años de edad conjuntamente con su hermanita Maryuri (10años), pernotaban en casa de su abuelita María
Juana Vílchez de Maza, quién era conviviente del acusado J.E.E.T por lo cual llegan el día de los hechos a
cuidar a las menores de edad quedándose a pernotar en dicha vivienda. Siendo que el día 16 de Abril de
2014 la menor agraviada L.E.S.M en circunstancia que se encontraba durmiendo en su cuarto en compañía
de su hermanita Maryuri a horas 00.58, siente que su tío J.E.E.T llega a su cuarto, lo ve en su cuarto
desnudo, el mismo que sin decirle palabra alguna se acuesta a su lado, para luego comenzar a sacarle su
short de tela color roja, conjuntamente con su ropa interior, pero como estaba e costado siente que en sus
partes íntimas ingresa algo a su vagina sintiendo un fuerte dolor, por lo que recién en ese momento habló y
149
le dijo que le iba a decir a su papá, levantando entonces a su hermanita, y este le indico a su hermanita que
se vaya a ver a su tía, por lo que se levantó apurado, se va al baño, luego escucha a la menor que se bañaba
su tío, una vez que terminó se retiró a su cuarto, para luego de diez minutos levantarse nuevamente y
decirle que no le diga nada a sus padres porque no iba a ocurrir nuevamente. Así mismo la menor indicó
que al momento que tuvo relaciones sexuales el sujeto se desnudó la cogió de sus manos sujetándolas
hacia atrás fuertemente y
colocándola de costado para luego abuzar sexualmente de ella, indicando que sangro en sus partes íntimas
manchando sábanas y frazadas. Luego por la mañana la menor fue a su institución educativa en donde le
conto a una amiga la misma que le aconsejó que le contará estos hechos a su madre, al llegar le cuenta a su
madre quién conjuntamente con su padre proceden a efectuar la denuncia correspondiente.

1.2 La representante del Ministerio Público ha subsumido estos hechos en el delito contra la libertad sexual
en la modalidad de Violación Sexual de menor de edad tipificando en el artículo 173 inciso 2 del Código
Penal; teniendo como grado de participación AUTOR, que si bien el acusado era conviviente de la tía de la
menor agraviada no se ha considerado dicha agravante, precisó la representante del ministerio público que
llegaron únicamente ese día a cuidar a las menores pero no vivían ahí. Por lo cual está solicitando la
imposición de TREINTA AÑOS DE PENA PRIVATIVA DE LIBERTAD EFECTIVA así como una
REPATACIÓN CIVIL ascendente a la suma de DIEZ MIL NUEVOS SOLES.

II.- PRETENCIÓN DE LA DEFENSA


La defensa técnica del acusado Dra. Patricia Cristina Iriarte Cornejo, indicó que rechaza los cargos
imputados a su patrocinado, precisando que este ente acusador sea el encargado de enervar el estado de
inocencia que su patrocinado reclama por el delito de violación sexual; refiriéndose así que la tesis de la
defensa es absolutoria.

III.- TRÁMITE DEL PROCESO


Conforme al estadio procesal y en virtud del artículo 371° del Código Procesal Penal salvaguardando el
derecho de defensa del acusado, haciéndole conocer de los derechos fundamentales que le asisten, se le
pregunto si se consideraba autor de los hechos materia de acusación sustentados por la representante
del Ministerio Público, por lo que previa consulta con su abogada el acusado JEET indicó ser inocente
de los hechos atribuidos, además indicó que va a declarar, por ello se continuó con el interrogatorio y
contra interrogatorio del acusador.

IV.- POSICIÓN DEL ACUSADO


4.1 Declaración del acusado JEET; indicó que su conviviente se llama CEMV de diecisiete años de edad,
a la fecha de los hechos su conviviente contaba con 16 años, conviven desde abril de 2002, tiene con ella
una hija de un año y siete meses, su conviviente salió embarazada a la edad de 15 años. Él trabajaba en otro
sitio, él regresó a su sitio (a su distrito) por ver a su mamá que estaba enferma y allí conoció a su mujer, se
enamoraron cuando ella tenía 14 años, su domicilio conyugal era en casa de sus padres Calle Atahualpa
301 Barrio Cura Mori. Su suegra padece de cáncer ella sigue su tratamiento en Lima, él estaba por irse a su
trabajo al Cuzco y su suegro le pide que se quede una semana en la casa de ellos y el aceptó cuidarle la
casa, la adolescente con su hermanita no vivían allí. No recuerda la fecha en la él llega con su esposa e hija
a la casa de sus suegros, pero eran tres días antes del 16 de Abril. Refirió que se lleva bien con los padres
de la menor agraviada nunca ha tenido incidente alguno con ella, él tenía una confianza de tío a sobrina,
cuando recién llego no tenía la confianza de decirle tío, pero fue pasando y le pedía que le ayudara a hacer
las tareas. En ningún momento él se le ha declarado a la menor agraviada. El 15 de abril de 2014 desde las
ocho de la noche, como tenía pocos meses en su sitio comenzó a trabajar como conductor, él ese día guardo
el carro a las 6:00 PM. Su mamá le invitó la cena, después se fue a la casa de sus suegros estuvo allí
jugando con su hija, su esposa viendo televisión, a las siete llega su hermano para que le hiciera una carrera
150
a una señora que estba enferma, llegaron los familiares de la señora para llevarla al hospital, él ha estado en
catacaos hasta las 12:00, a las 12:30 ha guardado el carro, dio las llaves a su papá y se ha ido a la casa de
sus suegros, ha estado tocando la puerta pero su esposa no se le hacía caso y como estaba abierta la
ventana, por temor que se metieran a robar, insistió en tocar y su esposa le abrió luego le invito la cena su
esposa y se puso a cenar, después fueron a acostarse, como él había estado mal del estómago, con infección
él se levantó tres veces al baño y a la tercera vez él se fue a bañar, como vio a la menor destapada, él le
hablo en la puerta de su cuarto diciéndole “Liseth tápate” le habló dos veces y a la tercera vez entró y
sacudió la sábana y la tapa, es allí donde ella se despierta y se arrima más allá, lo agarra de las manos, lo
sienta y ella lo empieza a besar, él no hizo nada, que si la toco porque le agarraba las manos y las puso en
la cintura pero no la penetro, él le pregunto “¿Qué hacía?” y ella sólo se rio entonces él se aparta, ella se
queda en la cama y se ha ido el a su cuarto, ella lo besó, no le tocó las partes íntimas, ni introdujo su
miembro viril. Su relación con la menor agraviada era normal de bromearse, la menor le sacaba las
espinillas de la cara, tenían confianza, en una oportunidad se sentó en sus piernas para sacarle las espinillas,
su mujer le reclamó la confianza que tenía son su sobrina, siendo que le respondió que no piense mal que
no tenía nada más con su sobrina. Refirió que en ningún momento le propuso tener relaciones sexuales con
la menor, al ponerse al lado de la menor se encontraba con Short y con polo, la menor no puso resistencia
al estar allí a su lado, la menor lo beso y él respondió a sus besos, él solo se sentó no se acostó, no
conversaron nada. Así también indicó que mide 1.59cm, la menor agraviada le da por el hombro, es flaca.
Cuando él llegaba a ver a su esposa, ella llegaba lo abrazaba y le reventaba los granitos de la cara, ello
desde octubre o noviembre de 2012.

V.- ACTIVIDAD PROBATORIA

ÓRGANOS DE PRUEBA DEL MINISTERIO PÚBLICO

5.1. Examen del testigo JASV, identificado con DNI N° 02864596.-


Indicó que tiene 5 hijos JC de dieciocho, Y de diecisiete, L de catorce, M de diez y RB de cinco años de
edad. Que conoce al acusado desde hace cinco años, éste se comprometió con su cuñada hace año y medio
más o dos años; cuando su cuñada se comprometió tenía 15 años, él imputado con su esposa vivía con el
padre del acusado, pero cuando su suegra tuvo cita médica en Lima porque tenía cáncer, es que el acusado
se quedó en casa de sus suegros; él no ha tenido ningún problema con su cuñado (acusado) todo era como
una familia normal. Él se enteró que su menor hija había sido víctima de violación sexual, cuando ella se
fue al colegio él se había ido a Catacaos a arreglar una moto que tiene, y se da con la sorpresa que su hija
había salido del colegio, primero le dijeron a sus esposa luego su esposa le contó a él, entonces le preguntó
a su hija quien le dijo que era cierto, pero él no le creía porque ellos eran familia, compadres; la llevo a su
hija a la posta y allí le dijeron que tenía que poner una denuncia y eso fue lo que hizo. Su hija no le dijo
directamente de él, su esposa le conto que el acusado se había metido a su cama y la había violado a su hija
de catorce años. Posterior a ello no le pidió mayor explicación a su hija. Él con sus hijos tiene buena
comunicación.

5.2. Examen de la testigo CNMV, identificada con DNI N° 40215733.-


Refirió que conoce al acusado desde hace cuatro años, es su cuñado. Cuando su hermana se comprometió
con el acusado, su hermana tenía quine años. Su hermana con su esposo vivían donde sus suegra, no ha
tenido problemas con su cuñado ni con su hermana. Su hija le contó que el señor se había levantado y había
llegado a su cama, la había cogido de costado y que le había sentido y dolido algo entre sus partes. Le
preguntaron al acusado quien negaba los hachos.

151
5.3 Declaración de la menor agraviada de iniciales L.E.S.M (14); Quién se encontró acompañada de
su madre C.N.M.V. identificada con DNI 40215733.-
Indicó que nació el 26 de noviembre de 2000, estudia primero de secundaria en el colegio Federico
Villareal, que sus notas son más o menos siendo que el año pasado han sido igual. Sus padres le tratan bien.
Antes de los hechos se llevaba bien con el imputado J.E.
5.4 Examen del testigo E.E.S.N. identificado con DNI N° 46320767
Refirió que él ha realizado el Informe Psicológico practicado a la menor agraviada donde se concluyó que
la evaluada estaba orientada en 3 esferas, resultando poco expresiva, callada y con vergüenza. Además a
nivel emocional se evidenció tristeza, temor, angustia y extrema confianza de sí misma posiblemente
asociada a una violación sexual. Se evaluó a la menor
L.E.S.M. de trece años de edad, en las fechas 21/04/2014 y 23/04/2014.

5.5 Examen del perito médico legal J.C.G.C. identificado con DNI N° 41051602.-
Indicó que cuenta con 5 años como perito y nunca ha sido denunciado ni sancionado. Que el Certificado
Médico Legal N° 005619-EIS ha sido suscrito por su persona y que fue practicado a la menor de iniciales
L.E.S.M. con fecha 16 de abril de 2014, fue un examen de integridad sexual. En la data la menor relata que
el día 16 de abril de 2014 las 00:58 horas cuando dormía en su cama su tío llego le saco la ropa y se saca la
ropa el pene lo coloca en su vagina.

5.6.- Examen del perito biológico H.G.N. identificado con DNI N° 40291725

Refirió que es perito biólogo desde el 13 de julio de 2006 que no tiene ningún tipo de sanción por su
trabajo, se ratificó en los peritajes biólogos 2014-00100132, 2014-00100131 y 2014- 00100130. El primero
de ellos número 2014-00100132 es un examen de tipo espermatológico tomado de la ropa interior de la
agraviada donde se solicitaba la búsqueda de espermatozoides, la técnica empleada es la microscopía, en
este examen se encontraron dos cabezas de espermatozoides por 200 campos microscópicos.

5.7.- Examen del perito médico legal W.F.S.P. identificado con DNI N° 02853657.-
Refirió que es médico cirujano que ejerce la medicina legal hace 5 años, no habiendo tenido sanción
alguna. Afirmó haber suscrito el Certificado Médico Legal N° 005634-OL-D, ratificándose en su firma,
practicado el día 16 de abril de 2014 a las 14:30 minutos de la tarde a la persona de
E.T. J.E. (acusado), quién su data refirió que estaba detenido por la policía por presunta violación sexual,
negando relaciones sexuales en las últimas 48 horas.

ORGANOS DE PRUEBA DE LA DEFENZA

5.8.- Examen de la testigo menor de edad D.P.S.L. la misma que se encuentra acompañada de su
madre la Sra. R.H.L.R.-
Preciso que estudia en la I.E. Federico Villareal primero de secundaria. La menor agraviada ha estudiado
con ella, es su mejor amiga, ella le confía todo lo que pasa en su casa y le cuenta sus problemas. En abril
ella le contó que ella estaba en su casa, su tío cuando regreso ella estaba dormida, su tío entro a su cuarto

152
para taparla y ella le jaló la mano, le pidió que se sentara en su cama, la menor agraviada dice que le
gustaba su tío (el causado).

DOCUMENTALES DEL MINSTERIO PÚBLICO


5.9.- Se oralizó el acta de recepción de prenda íntima de la menor agraviada y su cadena de custodia.
5.10.- Se oralizó el acta de inspección técnico policial
5.11.- Se oralizó la copia certificada del DNI de la menor agraviada de iniciales L.E.S.M. Quién cuenta
con DNI N° 74314264, que su fecha de nacimiento es el 26 de noviembre del año 2000.
5.12. Se oralizó el acta de intervención policial

VI ALEGATOS FINALES
6.1. La representante del Ministerio Público, refirió que se ha demostrado que la persona del acusado es
autor del delito de violación sexual de la menor de edad de iniciales L.E.S.M. (13), quien en fecha del 16
de abril de 2014 en horas de la madrugada cuando la menor dormía en su cuarto, se acostó el imputado al
lado de la menor y la logro penetrar, conforme al Certificado Médico Legal N° 005619-EIS que se le
practicó a la agraviada donde el médico legista expreso que encontró una desfloración reciente con signo
de desgarro, que cuando la menor dijo que había menstruado dos días atrás (no estaba menstruando) se
trataba de desagarro y sangrado no de menstruación.

6.2. La Defensa Del Acusado: Postula por la absolución de su patrocinado porque al principio de
presunción de inocencia no se ha quebrantado. La menor agraviada es escasa en sus declaraciones, no
quería hablar siquiera del tema. Si bien los padres han señalado que tomaron conocimiento el día de los
hechos pero no han dado detalles; la declaración de la amiga agraviada quien no ha declarado de manera
normal sino que se ha visto incómoda, precisando que la menor agraviada tenía una relación sentimental
con un menor de la I.E. Donde estudia. Solicita su absolución de los cargos que se le imputan.

6.3. Autodefensa del acusado J.E.E.T; indicó que no tiene nada que ver con esa adolescente, no la forzó a
nada.

VII FUNDAMENTACIÓN JURIDICA


7.1. Delito de violación sexual de menor.
Tipificado en Art. 173 del Código Penal, se configura cuando el sujeto agente tiene acceso carnal por la
vagina, anal o bucal o realiza otros actos análogos introduciendo objetos o partes del cuerpo por la vagina o
ano. La pena que le corresponde imponer al agente está en función a la edad del menor.

VIII VALORACIÓN PROBATORIA


8.1 Corresponde al colegiado al momento de la deliberación de la sentencia analizar y valorar los medios
probatorios actuados en el juicio oral, valoración que se hace teniendo en cuenta el sistema de la sana
crítica racional adoptado por el legislador peruano en el nuevo código penal, basado en los principios de la
lógica, las máximas de la experiencia y los conocimientos científicos.

8.2 Este sistema exige al juez explicar fundadamente su decisión y, en observancia de lo establecido en el
Art. 393 inciso 2 del código antes citado, se realiza primero de manera individual y luego en forma

153
conjunta a fin de garantizar un elevado estándar de insuficiencia probatoria compatible con el derecho
fundamental de presunción de inocencia que la Constitución Política del Perú y los Tratado Internacionales
sobre Derechos –humanos suscritos por el gobierno peruano le reconocen a toda persona humana.

8.3 Que en el caso materia de autos se le imputa al acusado J.E.E.T. El haber ultrajado sexualmente a la
menor de iniciales L.E.S.M cuando esta contaba con trece años de edad, conducta tipificada en el Art. 173
numeral 2 del Código Penal.

8.4 De la declaración de la menor agraviada de iniciales L.E.S.M:


Que en el caso de autos se tiene que la víctima de abuso sexual en juicio oral acompañada de su madre
C.N.M.V. Relato los hechos.

8.5 En tal sentido este juzgado colegiado advierte que el relato de la menor agraviada en el sentido que el
acusado le metió el pene en la vagina, es el que habría mantenido primigeniamente pues ello ha sido
recogido en los alegatos de apertura de la representante del ministerio público.

8.6 Por lo tanto si bien la menor en sede policial fiscal e investigación preparatoria ha señalado que la
persona del acusado le introdujo el pene es su vagina en consecuencia fue víctima de violación sexual.

8.7 Respecto a la retractación de la víctima el psiquiatra Estadounidense Roland Summit, postula cinco
reacciones típicas en niños abusados sexualmente estas son: i) el secreto ii) La desprotección, iii) La
acomodación o adaptación, iv) La retractación.

8.8 De las causas de la retractación de las víctimas de abuso sexual. Cabe mencionar: i) el vínculo de la
víctima con el agresor ii) Dependencia económica iii) Actitud de la madre iv) Victimización secundaria.

8.9 De las causas de la retractación en el caso en concreto. Que en el presente caso existen circunstancias
que hacen viable la retractación de la declaración de la menor como víctima de abuso sexual por parte del
acusado.

8.10 En el Acuerdo Plenario I-2011 sobre apreciación de la prueba en los delitos contra la libertad sexual.

8.11 En tal sentido este colegiado advierte que este caso se cumple con i) la ausencia de incredibilidad
subjetiva, ii) se presentan datos objetivos que permitan una mínima corroboración periférica es este caso se
cuenta con: 1) la declaración en juicio del padre de la menor agraviada, el sr. J.A.S.V 2) la declaración e
juicio de la madre de la menor agraviada, la Sra. C.N.M. 3)la declaración en juicio del psicólogo E.E.S.N
4) la declaración en juicio del perito legal C.G.C. 5) la declaración en juicio del médico legal W.F.S.P 6) la
declaración en juicio del biólogo H.G.N. 7) Acta de recepción de prenda íntima de la menor agraviada y su
cadena de custodia. 8) Acta de inspección técnico policial 9) Acta de intervención policial. 10) La
oralización de la copia certificada del DNI de la menor agraviada de iniciales L.E.S.M.

8.12 Siendo en este caso si bien el acusado niega relaciones sexuales con la menor agraviada, e incluso al
momento de la evaluación por el médico legista niego haber mantenido relaciones sexuales dentro de las
últimas 48 horas. Pero el biólogo afirma lo contrario.

8.13 Por otro lado se tiene que si bien se actuado como medio probatorio de descargo la declaración de la
menor D.H.L.S
154
8.14 Con relación al argumento de la abogada defensora en el sentido que se debe considerar que la menor
agraviada no ritmo, no pidió auxilio, pese que al costado estaba la habitación de su tía.

8.15 Del valor de la pericia psicología.- que como yo lo eh señalado al u

8.16 De la acreditación a la violación con el Certificado Médico Legal

IX De la determinación judicial de la paz y circunstancia agravantes

9.1 LA declaración de la pena tiene como bases normativas de los artículos VII, VIII y IX del título
preliminar del Código Penal, así como los artículos cuarenta y cinco y cuarenta y seis del mismo cuerpo
penal.

9.2 Para efectos de establecer el quantum de la pena a imponer s de considerarse que la conducta atribuida
al acusado se encuentra tipificada en el artículo 173 numeral 2 del Código Penal.

9.3 Este juzgado tiene en cuenta además los fines que informan la pena y tal como ha quedado establecido
por la jurisprudencia.

9.4 Así mismo que el acusado no cuenta con antecedentes penales con forme lo indicó al momento de
acreditarse y no ha sido rebatido por la representante del Ministerio Público.

X Del examen terapéutico al acusado


10.1 Con forme a lo previsto en el Art. 178-A del mismo, se debe ordenar que sea sometido a Tratamiento
terapéutico, para lo cual se remitirá oficio al Director de instituto Penitenciario para su cumplimiento, así
como indicar la remisión semestral del informe terapéutico.

XI De la determinación de la reparación civil.


11.1 Esta se fija en relación al daño causado, para ello deberá observar los criterios contenidos en el art. 93
del Código Penal, siendo la Indemnidad sexual, un bien jurídico indispensable, que no se puede restituir
una vez vulnerada, sin embargo la reparación debe contener una indemnización por los daños y perjuicios
irrogados a la menor.

XII De la determinación de las costas:


12.1 Respecto al pago de las costas en conformidad con lo previsto en el art. 497 inciso 2° y 3° y
analizando los autos es de verse que el acusado ha sido vencido en juicio, no existiendo causal para que sea
eximido total o parcialmente de los mismos, y en aplicación en aplicación de la norma precitada deberá
hacerse cargo de su totalidad, las misma que se liquidará en ejecución de sentencia.

XIII FALLO:
Habiéndose acreditado la comisión del delito denunciado y la responsabilidad de procesado, en aplicación
de los artículos VII, VIII y IX del Título Preliminar 12, 13, 45, 46, 93, 173.2 del código
penal; además con los artículos 392 al 397 y 399, 497, 498, 500 del Código Procesal Penal con el criterio
de la sana crítica que la ley concede e impartiendo justicia a nombre del pueblo, el colegiado permanente
de la Corte Superior de Justica de Piura decidieron:

155
13.1 CONDENAR a J.E.E.T como Autor del delito de Violación de libertad sexual en la modalidad de
Violación Sexual de menor de edad, previsto y sancionado en el artículo 173° numeral 2 del Código Penal,
en agravio de la menor de iniciales L.E.S.M. de trece años de edad al momento de ocurridos los hechos y le
IMPONEN TREINTA AÑOS DE PENA PRIVATIVA DE LA LIBERTAD, que se inicia desde el
momento en que fue intervenido 16 de abril de 2014, la misma que vencerá con fecha 15 de abril del 2044,
fecha en la cual se le dará libertad siempre y cuando no tenga mandato de detención, prisión preventiva o
sentencia condenatoria emanada de autoridad competente.
13.2 DISPONER que el sentenciado de conformidad al Art. 178-A, reciba el tratamiento terapéutico,
oficiándose al Director del Instituto Nacional Penitenciario quien deberá remitir semestralmente el informe.
13.3 ORDENAR que el amparo de lo previsto en el artículo 402° del código adjetivo en su inciso 1°, se
ordena el cumplimiento provisional de la condena, por lo que se dispone se curse el oficio respectivo al
Director del Establecimiento Penitenciario.

13.4 FIJAR como REPARACIÓN CIVIL la suma de s/10.000 nuevos soles a favor de la agraviada.

13.5 IMPONER el pago de la totalidad de las COSTAS al sentenciado, que serán establecidas en ejecución
de sentencia, por el especialista de la investigación preparatoria.

13.6 MANDAR que firme que sea la presente sentencia se inscriba en el Registro de Condenas,
remitiéndose los testimonios y boletines correspondientes y cumplido dicho mandato se devuelva el
presente al juzgado de investigación preparatoria para la ejecución de sentencia.

156
ANEXO 4
DECLARACIÓN DE COMPROMISO ÉTICO
De acuerdo al contenido y suscripción del presente documento denominado:
Declaración de Compromiso ético, manifiesto que: al elaborar el presente trabajo de
investigación ha permitido tener conocimiento sobre la identidad de los operadores de
justicia, personal jurisdiccional, las partes del proceso y demás personas citadas, los
cuales se hallan en el texto del proceso judicial sobre delitos contra libertad sexual en
la modalidad de violación sexual de menor de edad, contenido en el expediente N°
01630-2014-35-2001-JR-PE-04, en el cual han intervenido el Juzgado Penal
Colegiado de la ciudad de Piura y la Primera Sala Penal de Apelaciones de la
Corte Superior del Distrito Judicial de Piura.
Por estas razones, como autor, tengo conocimiento de los alcances del Principio de
Reserva y respeto de la Dignidad Humana, expuesto en la metodología del presente
trabajo; así como de las consecuencias legales que se puede generar al vulnerar estos
principios.
Por esta razón declaro bajo juramento, honor a la verdad y libremente que: me abstendré
de utilizar términos agraviantes para referirme a la identidad y los hechos conocidos,
difundir información orientada a vulnerar los derechos de las personas protagonistas de
los hechos y de las decisiones adoptadas, más por el contrario guardaré la reserva del
caso y al referirme por alguna razón sobre los mismos, mi compromiso ético es
expresarme con respeto y con fines netamente académicos y de estudio, caso contrario
asumiré exclusivamente mi responsabilidad.

Chimbote, 17 de enero del 2022

SAENZ MIO, NELLY PAOLA


DNI N° 46845769

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