Historia Del Nivel Inicial ...

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En 1799, el Virrey Vértiz creó la Casa de Niños Expósitos dedicada a albergar a huérfanos

abandonados y sacrilegos , mediante el sistema de torno, una puerta especial de madera permitía
recibir a los niños manteniendo el anonimato de quienes los dejaban.

La educación institucionalizada para los menores de 6 años surgió ligada a la caridad y


solidaridad con los más pobres

Durante la segunda mitad el S. XIX tuvieron lugar los primeros intentos por estructurar la
educación en la que el Nivel Inicial ocupaba un lugar menor.

Domingo Faustino Sarmiento, durante su presidencia, propuso un primer modelo de escuela para
la primera infancia, basado en las Cunas Públicas y Salas de Asilo que había conocido en
Francia, definió el rol central que tendría la mujer en estas instituciones y la importancia que estos
espacios podían cobrar como centros de inclusión social.

En 1870 la educadora Juana Manso y su hija Eulalia Noronha, fundaron el primer Jardín de
Infantes Público de la Ciudad de Buenos Aires, en el que introdujeron el Método Froebeliano.
Federico Froebel era un pedagogo alemán, pionero de la Educación Inicial y la organización de
Jardines de Infantes, su propuesta fomentaba en el niño el deseo de actividad y de creación,
mediante actividades y juegos que tenían en cuenta su desarrollo.

Dos leyes sancionadas entre 1875 y 1884 le dieron un marco legal a la Educación Inicial: la Ley
de Educación Común de la Provincia de Buenos Aires y la Ley Nacional 1.420 de Educación,
establecieron la creación de Jardines de Infantes en la ciudades donde fuera posible equiparlos
adecuadamente.

Uno de esos Jardines, fue el que se anexó a la Escuela Normal de Paraná en 1.884, su directora
era Sara Eccleston, una de las maestras que Sarmiento había traído Estados Unidos para
introducir cambios en el sistema educativo, con ella se inició en 1.886 la formación especializada
en Educación Inicial para maestras ya recibidas.

En las primeras décadas del S. XX, el Jardín de Infantes todavía era para pocos, a partir de 1920
la educación argentina, atravesó una etapa sin rumbo pedagógico definido en materia de
Educación inicial, la paulatina incorporación de las mujeres al trabajo fuera del hogar, hizo
necesaria la posibilidad de tener un espacio donde dejar a sus hijos más pequeños, aunque fuera
por algunas horas. Así a los Jardines de Infantes se sumaron Guarderías, Salas Cuna y Jardines
Maternales; la intención de estos nuevos tipos de jardines, era que estuvieran destinados a los
hijos de familias obreras, ya que la clase alta y media alta disponían de recursos educar a sus
hijos en casa hasta entrada la escuela primaria.

En la ciudad de Buenos Aires la primera de estas instituciones fue el Jardín Andrés Ferreira,
fundado en 1928.

Ana Malajovich, licenciada en educación y especialista en educación infantil, nos cuenta que el
Jardín de Infantes se crea esencialmente a partir de la Ley 1.420, la cual establece que se van a
crear Jardines de Infantes en las ciudades donde sea posible equiparlos adecuadamente y con
personal especializado, lo cual determina que desde el origen el Jardín de Infantes sea urbano y
sea además para los sectores más privilegiados porque se van a establecer centralmente como el
departamento de aplicación de las Escuelas Normales y van a ser muy pocas las provincias que
van a poder crear jardines en sus ciudades.
Esta situación marca el origen del Jardín para un grupo de niños que van a tener esa oportunidad
y para los niños pobres van a estar dispuestos los Hogares Maternales, las Casas Cuna, los que
después son llamadas guarderías. Esto determina que a principio del S. XX, Leopoldo Lugones,
inspector de enseñanza, escribiera un informe al Ministro de Educación, reclamando el cierre de
Jardín de Infantes de las Escuelas Normales, con la excusa de que en esas instituciones, no se
veían niños pobres.

En 1920 y 1930, durante las presidencias de Hipólito Irigoyen y de Marcelo Torcuato de Alvear,
llegaron al país las influencias de la corriente pedagógica llamada Escuela Nueva, que tuvo un
fuerte impacto en la Educación Inicial.

En 1935, se creó la Asociación Pro-difusión del kindergarten, en 1937, la Asociación inauguró el


Instituto Sara Eccleston, de formación para docentes de Jardín de Infantes, uno de los puntos que
se buscó estimular el aprovechamiento de espacios abiertos con presencias de plantas para darle
al espacio educativo un entorno más natural.

En 1938, se creó el primer Jardín de Infantes, en la Ciudad de Buenos Aires, llamado Jardín
Mitre.

A partir de 1946, durante los gobiernos peronistas, la Educación Inicial, recibe un fuerte impulso,
esta etapa escolar comenzó a ser considerada como un derecho de todos los niños y las niñas.

La educación pasó a verse desde un paradigma diferente en el que el estado debe intervenir
para equiparar derechos, de este modo, se comenzó a implementar políticas sociales y ofrecer la
educación pública y gratuita como un factor de igualdad y una oportunidad de ascenso social.

La fundación Eva Perón, creó los Hogares Escuelas, establecimientos modelo, que alojaron
niños y niñas de entre 4 y 16 años, huérfanos, abandonados, de familias de bajos recursos
económicos, de madres trabajadoras o solas y de familias numerosas.

En 1946, la sanción de la Ley Simini, en la provincia de Buenos Aires, estableció que la


Educación Pre-escolar, debía comenzar a los 3 años de edad y posteriormente se decidió que la
educación debe ser pública y obligatoria a partir de los 5 años.

El Jardín de Infantes, se expandió en las décadas de los 50 y 60, como lugar de exploración e
innovación educativa.

Así, comenzó un proceso basado en la psicología y en los estudios sobre la infancia y su


subjetividad, con la debida capacitación en institutos de formación, las maestras pasaron estar
tituladas en todas las salas.

En 1968, se publicó el libro “Fundamentos y estructuras del Jardín de Infantes” de Eve San Martin
de Duprat y Cristina Fritzsche, este libro consolidó un nuevo modelo pedagógico, vinculado al
juego y la expresión y dejó atrás las lógicas asistencialistas y sanitaristas que habían primado
hasta entonces.

En 1973, durante el tercer gobierno peronista, se sancionó la ley 20.582 sobre Jardines
Maternales, que resultó un primer intento en el paso de la Guardería al Jardín Maternal, pero no
fue reglamentada. En la norma se reconocía el Jardín Maternal como espacio de cuidado y
enseñanza para los niños y las niñas de sectores de menores recursos, según se establecía la
familia tenían participación en el directorio de los jardines y la responsabilidad de su coordinación
iba a quedar articulada entre los Ministerios de Educación y acción social.
Entre las década del 60 y el 70, se dio una gran renovación pedagógica en el Jardín de Infantes,
se empezó a dar a los niños mayor libertad, mayor autonomía, se empezó a reivindicar la
capacidad de creatividad . Esto, se corta a partir de la Dictadura, donde este movimiento queda
totalmente congelado a través de un proceso de gran control acerca de qué se enseñaba y cuál
era la forma de enseñanza en los Jardines.

En el año 1978, se hace la transferencia de los Jardines que dependían del Consejo Nacional de
Educación a las provincias, las provincias empiezan organizar Diseños Curriculares; en la
Dictadura el currículum se establece como una forma de control marcando cuáles eran los
objetivos que había que desarrollar en los niños en función de pautas de conducta , se estableció
claramente qué se podía cantar, qué se podía leer, libros que hablaban de la solidaridad, de paz,
de organización fueron prohibidos.

En este lapso, hubo un control ideológico fuerte acerca de cuáles eran los valores que se iban a
transmitir en el Jardín de infantes recuperación de la democracia.

En 1983, con la recuperación de la Democracia bajo el gobierno de Raúl Alfonsín, el Jardín de


Infantes, cobró un nuevo impulso; la mirada psicológica que se había impuesto en los años 60,
dio pasó a una concepción en la que prevalecía la mirada pedagógica; se cuestionaron categorías
como Guarderías y Pre-escolar y se avanzó en la consolidación de prácticas como parte de un
Nivel Educativo propio e integral, el Nivel Inicial.

En 1985, se crearon los Jardines Maternales en la ciudad de Buenos Aires, el estado puso así a
disposición de las madres trabajadoras un espacio formativo y no sólo asistencial.

A partir de 1985, las luchas docentes lograron incorporar esta figura a su estatuto, para regular
legalmente su tarea; otra novedad fue la aparición de los primeros maestros varones que de a
poco fueron incorporados en las escuelas de Nivel Inicial,

Si bien la función del Nivel Inicial se fue construyendo a lo largo del tiempo, la definición de
objetivos y contenidos comenzó a concretarse hacia mediados de la década de los 90, cuando se
establecieron los Contenidos Básicos Comunes, estos surgieron como consecuencia de la
sanción de la Ley Federal de Educación en 1993, que estableció la obligatoriedad de la Sala de 5
años.

En el año 2006 se sancionó la Ley de Educación nacional 26206 que garantiza la existencia de
instituciones para niños y niñas a partir de los 45 días de vida y la educación obligatoria y gratuita
a partir de los 5 años de edad.

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