Estructuras Metalograficas
Estructuras Metalograficas
Estructuras Metalograficas
Estructuras Metalográfica
Es complejo establecer las propiedades físicas y mecánicas del acero, ya que éstas varían
mucho, dependiendo del tipo de acero, pero para ejemplificar como se pueden aprovechar
sus propiedades en ciertos casos prácticos, podemos citar que la tenacidad es una propiedad
esencial para fabricar herramientas; la ductilidad es ideal para obtener alambres o la
maleabilidad, necesaria para fabricar láminas delgadas del metal.
Es importante definir qué entendemos por ciertas propiedades del acero, al menos, las más
importantes. La resistencia al desgaste, es la resistencia que ofrece un material a dejarse
erosionar cuando está en fricción con otro material; la tenacidad es la capacidad que tiene
un material de absorber energía sin producir fisuras; la maquinabilidad es la facilidad que
posee un material de permitir el proceso de mecanizado por arranque de viruta; mientras
que la dureza es la resistencia que ofrece el material a la penetración, la abrasión, el
rayado, la cortadura o las deformaciones permanentes, entre otras.
Las propiedades del acero se dan en función de la composición química, y al tipo de
tratamiento al que sean sometidos los diferentes tipos de aceros. Este tratamiento puede
ser…
SU MECANISMO DE FORMACION:
SU MECANISMO DE FORMACION:
Si pulimos una superficie metálica y la atacamos con un reactivo acido, los bordes de
granos se atacaran más rápidamente que el resto del material. P.ej. Nital en aceros. Se
origina una estructura llamada metalográfica. Cuando existen varios constituyentes, los
granos de uno de ellos se atacan más que otros, destacándose así la estructura metalográfica
de donde se puede deducir el comportamiento del material. La técnica metalográfica
consiste en poner en evidencia los distintos tipos de granos, llamados constituyentes
metalográficos, su tamaño, forma, distribución, característica, etc. define la estructura del
material.
Casos en los que se presenta: Metal puro Soluciones sólidas Estructuras de colada
Estructuras producidas por deformación plástica Estructuras producidas por recristalización
y crecimiento Estructuras producidas por recristalización alotrópica.
ESTRUCTURAS DE NUCLEACION Y CRECIMIENTO
Se trata del proceso en el que se forma una fase sólida en el seno de un líquido. Para que se
forme esta fase sólida se necesita que la partículas varíen su energía La energía de volumen
ΔFv, depende del cubo del radio del grano que se está gestando, es exotérmica, la energía
de superficie del mismo grano, es función del cuadrado del radio y es endotérmica, la
diferencia entre ambas energías, es lo que hace crecer o no al grano. Existe un radio crítico
r*, a valores menores de r*el grano queda líquido, con valores mayores de r* el grano
crece. ΔFv + ΔFs = ΔFt
En el caso de solución sólida, aleación formada por la unión de dos metales, o un metal y
un no metal, tendremos un intervalo de solidificación, quiere decir que uno comenzara a
solidificar antes que el otro, tendremos dos estructuras una formada por el componente α y
el otro por el componente β, el tamaño de grano estará dado por la cantidad de impurezas
que haya en el seno del líquido.α β
Estructuras de colada Las estructuras de colada son aquellas que se forman al enfriarse el
metal en forma arborescente, formando dendritas. Se enfrían preferentemente en los bordes
de los moldes, o en moldes finos. El enfriamiento se produce muy rápidamente
Fotomicrografía Dibujo Dendritas de solución sólida. Latón α colado
En el calentamiento de una aleación como en el caso del acero que a 910º pasa de Fe α
(cubico a cuerpo centrado) a Fe Υ (gamma) (cúbico a cara centrada), la recristalización se
produce sin deformación plástica previa, esta se llama recristalización alotrópica.
Simplemente se calienta hasta que la estructura α se transforme en la estructura Υ, luego se
enfría lentamente y nuevamente pasa a la estructura α
El tratamiento térmico en el material es uno de los pasos fundamentales para que pueda
alcanzar las propiedades mecánicas para las cuales está creado. Este tipo de procesos
consisten en el calentamiento y enfriamiento de un metal en su estado sólido para cambiar
sus propiedades físicas. Con el tratamiento térmico adecuado se pueden reducir los
esfuerzos internos, el tamaño del grano, incrementar la tenacidad o producir una superficie
dura con un interior dúctil. La clave de los tratamientos térmicos consiste en las reacciones
que se producen en el material, tanto en los aceros como en las aleaciones no férreas, y
ocurren durante el proceso de calentamiento y enfriamiento de las piezas, con unas pautas o
tiempos establecidos.
Para conocer a qué temperatura debe elevarse el metal para que se reciba un tratamiento
térmico es recomendable contar con los diagramas de cambio de fases como el del hierro-
carbono. En este tipo de diagramas se especifican las temperaturas en las que suceden los
cambios de fase (cambios de estructura cristalina), dependiendo de los materiales diluidos.
Los tratamientos térmicos han adquirido gran importancia en la industria en general, ya que
con las constantes innovaciones se van requiriendo metales con mayores resistencias tanto
al desgaste como a la tensión. Los principales tratamientos térmicos son:
Temple: Su finalidad es aumentar la dureza y la resistencia del acero. Para ello, se
calienta el acero a una temperatura ligeramente más elevada que la crítica superior Ac
(entre 900-950 °C) y se enfría luego más o menos rápidamente (según características de
la pieza) en un medio como agua, aceite, etc.
Revenido: Solo se aplica a aceros posterior de templados, para disminuir ligeramente
los efectos del temple, conservando parte de la dureza y aumentar la tenacidad. El
revenido consigue disminuir la dureza y resistencia de los aceros templados, se
eliminan las tensiones creadas en el temple y se mejora la tenacidad, dejando al acero
con la dureza o resistencia deseada. Se distingue básicamente del temple en cuanto a
temperatura máxima y velocidad de enfriamiento.
Recocido: Consiste básicamente en un calentamiento hasta la temperatura de
autenticación (800-925 °C) seguido de un enfriamiento lento. Con este tratamiento se
logra aumentar la elasticidad, mientras que disminuye la dureza. También facilita el
mecanizado de las piezas al homogeneizar la estructura, afinar el grano y ablandar el
material, eliminando la acritud que produce el trabajo en frío y las tensiones internas.
Normalizado: Tiene por objetivo dejar un material en estado normal, es decir, ausencia
de tensiones internas y con una distribución uniforme del carbono. Se suele emplear
como tratamiento previo al temple y al revenido.