Leyes de Pureza Familiar

LEYES DE PUREZA FAMILIAR
Las relaciones íntimas en el matrimonio según la Torá y la tradición judía

Rabbí Dr. Williams Pitter
www.luz.academia.edu/Williams Pitter
[email protected]
Todo tiene su tiempo… y todo tiene su hora… tiempo de

abrazar, tiempo de abstenerse de abrazar
(Eclesiastés 3:1-8)
Un hombre desposa a una mujer. Ella le dice: He visto

algo que parece una rosa roja; y él se aparta de ella.
¿Qué muro existe entre ellos? ¿Qué clase de serpiente lo
ha picado? ¿Qué es lo que los refrena? ¡Las palabras de
la Torá!”
(Midrash de los Salmos, II-15).
Maridos, amad a vuestras mujeres, así como el Mesías amó a la

congregación, y se entregó a si misma por ella, para santificarla,
habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra..
(Ef 5:25,26)
Maracaibo, Venezuela
Febrero 2022/Adar I 5782
Introducción
El hogar judío y la familia como su núcleo central constituyen la base de la

existencia del pueblo judío. Es por esto que deseamos contribuir con las familias de
nuestra comunidad a crear una mayor conciencia de la importancia de lo que
deberían ser la conducta de la pareja matrimonial en sus relaciones sexuales
basadas en las leyes de “Pureza Familiar” (Tahará haMishpajá) de la tradición judía.
Las Escrituras dictaminam que todo tiempo su tiempo y su hora (Ec 3:1). Y como
ejemplo, la Torá revela las leyes regulan la vida íntima de la pareja, pues estipula
dos períodos de tiempo bien diferenciados: (1) el período cuando la Torá prohíbe
todo tipo de acercamiento íntimo por motivos de la menstruación de la mujer y la
observación de siete de días de purificación, a este período se le llama nidá
(aislamiento o distanciamiento)(Lv 15:19-24); y (2) el período cuando se reanudan
las relaciones sexuales de la pareja judía, después que la mujer haya realizado
tevilá o baño ritual en una mikve. A esto se refiere Pablo en Ef 5:21-28.
Estas regulaciones y orientaciones de la Torá y de la tradición judía tienen el interés

de que la pareja judía tenga la oportunidad de disfrutar la vida en su máxima
expresión, tanto como en la dimensión privada como en la comunitaria. En este
sentido, la Torá convierte nuestro hogar en un Templo y nuestro cuerpo en un
Templo de la Ruaj haKodesh (1 Co 3:16). Al referirse a las Escrituras hebreas, la
Torá y los profetas, Rav Shaul nos enseña que es una revelación del Eterno y por
ello es “útil para enseñar, para exhortar, para corregir, para instruir en justicia a
fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda
buena obra” (2 Tm 3:16,17). Desgraciadamente, el pueblo judío no fue consistente
en su fe a lo largo de su historia, y esto que recién leímos en el párrafo anterior no
pudo llevarse a cabo a plenitud ni tampoco pudo mantenerse en el tiempo. La
propia tradición judía, con honestidad declara que la caída de Jerusalén, la
dispersión de los judíos y la destrucción del Primer Templo, o Templo del rey
Salomón, tuvo su origen en tres causas principales: la idolatría, la inmoralidad
sexual y el derramamiento de sangre (Talmud Bavlí Yoma 9b). La segunda causa, la
inmoralidad sexual, es una referencia a la violación de las leyes de pureza familiar.
Hemos de comprender entonces, que las leyes de la pureza familiar son parte
importante de las raíces vitales que posibilitan la existencia del pueblo judío debido
a que ellas, contribuyen al fortalecimiento de la pareja judía, y si la pareja está
comprometida con la Torá y con el Eterno, tendremos familias sólidas que nos
asegurarán la transmisión a las próximas generaciones de nuestras leyes,
costumbres, y sobre todo, nuestra esperanza de redención. Más allá de lo halájico
y sus repercusiones espirituales, hoy día la ciencia ha suministrado reportes que
justifican la importancia de estas leyes.
Rabbí Dr. W. Pitter
2
PRIMERA PARTE. El origen de las leyes de impureza y purificación en la Torá y el
concepto rabínico de cercas en la intimidad (las leyes de Nidá).
Las instrucciones y leyes básicas sobre las impurezas físicas, como se contraen y
reglas de purificación están en Lv 15:1-33:
1. Flujo de semen del hombre (3-18)

2. Flujo de sangre de la mujer (19-30) Nidá de separación: 19-24:
3. Enfermedad de flujo de sangre (Zabá): 25-33. El ejemplo de este caso lo
encontramos en el episodio del encuentro entre el Mesías y la mujer con el flujo de
sangre (Mt 9:18-26).
Con respecto al segundo punto, nótese un par de asuntos, que la Torá define dos
períodos consecutivos de abstinencia sexual (Nidá, separación) con sus respectivas
razones y, que la abstinencia y la reanudación de las relación sexuales están
organizadas en torno al ciclo menstrual de la mujer.
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El primer período por causa del flujo menstrual, Lv 15:19-30: “ Cuando una
mujer tenga flujo de sangre, durante un período de 7 días estará en su estado de
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separación, y cualquiera… Si un hombre se acuesta con ella, entonces el estado
de separación de ella estará sobre él y se volverá impuro por un período de 7 días”.
En Lv 18:19 encontramos una declaración más explícita acerca de la prohibición de
relaciones sexuales durante ese primer período: “No te aproximarás a una mujer
durante los días de impureza menstrual”. Mejor traducción: “A ninguna mujer en
nidá tumá (en separación inmunda) no te acercarás para descubrir (galá) su
desnudez (edvá)”. (Leer también Lv 20:18). No tiene determinado tiempo alguno,
pues va a depender de las condiciones fisiológicas de la mujer. En el caso que ella
tenga un período regular, por lo general es de tres a cinco días. El segundo
período, es una revelación divina, una instrucción de la Torá (Lv 15:19-24) que
también prohíbe las relaciones sexuales en el matrimonio por 7 días, aunque haya
cesado el flujo menstrual. Esto implica, que al cesar este período de 7 días, la Torá
habilita a la pareja, luego de un baño ritual, para que reanude sus relaciones
íntimas hasta la llegada de la próxima menstruación. El siguiente gráfico ilustra la
ley judía para el caso de una mujer con un período regular de 5 días
NIDÁ MENSTRUACIÓN NIDÁ, DÍAS DE PURIFICACIÓN BAÑO MIKVE
5 días 7 días
12 DÍAS DE ABSTINENCIA SEXUAL REANUDACIÓN

CONDUCTAS SEXUALES PROHIBIDA
3
SEGUNDA PARTE LA CONCEPCIÓN JUDÍA DE LA VIDA Y EL HOMBRE JUSTO
La masturbación, homosexualidad, bestialismo, etc. La Torá condena como

abominación las prácticas sexuales de los cuales cananeos, lo cual fue parte
importancia de su expulsión de sus tierras, y le advirtió a Israel que si actuaba de
manera similar serían expulsados (Lv 18:1-30).
El Talmud en el tratado de Nidá 13ª dice: Que cualquiera que haya derramado
semen en vano es comparado como si hubiese traído el diluvio al mundo.
Podemos comprenderlo mejor cuando vemos que una sola descarga de semen
contiene varios cientos de millones de células espermáticas, cada una de las cuales
tiene el potencial de fertilizar el óvulo femenino. Esta simiente está "viva" con el
poder de dar vida, de modo que toda emisión en vano es una pérdida de vida - tal
como una inundación apareja pérdida de vidas. En el Shuljan Aruj Even Ha´Ezer
dice Los Jajamin dicen que aquellos que practican la masturbación causando la
emisión de semen en vano son culpables de homicidio, así lo dice Isaias 1:15b “tus
manos están llenas de sangre”. El derramamiento de semen sólo está permitido
hacerlo dentro de la vagina, cualquier otro escenario está prohibido y condenado
por la Torá, por lo queda prohibido la masturbación y derramar sexo anal y el
derramar semen en el canal bucal de la mujer.
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Coitus interruptus. Vemos el caso en Gn 38:9-10: “ Y sabiendo Onán que la
descendencia no había de ser suya, sucedía que cuando se llegaba a la mujer de su
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hermano, vertía en tierra, por no dar descendencia a su hermano. Y desagradó
en ojos de HaShem lo que hacía, y a él también le quitó la vida”. Esto es un coitus
interruptus, pues Onán tenía una conducta sexual errónea, se satisfacía con su
mujer pero derramaba su semen intencionalmente para no levantar descendencia
a su hermano fallecido. Si no deseaba cumplir con la ley del levirato, no se hubiese
casado con la viuda de su hermano para usarla como lo hizo.
Conductas sexuales prohibidas: (1) Tener intimidad durante los días de nidá
(tiempo de menstruación más los 7 días de purificación). (2) masturbación, (3)
sodomía o penetración anal, (4) Uso de aparatos sexuales para, (5) Uso de material
pornográfico, ya sean revistas o películas, (6) Uso de lenguaje grosero tanto previo
como durante el coito a fin de excitar más a la pareja (Ef 4:29). (7) Las fantasías
sexuales, imaginarse tener sexo con alguien, aunque sea su esposa o esposo está
prohibido (Mt 5:28). Se prohíbe el uso de anticonceptivos abortivos, aquellos que
destruyen el óvulo ya fecundado, se le sugiere consultar a su médico.
Características de un tzaddik. Eñ profeta Ezequiel, cuando amonesta a los judíos

de su tiempo por impiedad, nos da una revelación indirecta de parte del Eterno
que muestras cuales son las características de un hombre justo, y entre otras cosas
menciona: actúa según el derecho y la justicia, no comete actos de idolatría, ni
violare la mujer de su prójimo, ni se acerca a una mujer en nidá, etc. (Ez 18:1-9).
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Todo tiene su tiempo… y todo tiene su hora… tiempo de

Un hombre desposa a una mujer. Ella le dice: He visto

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