Una Familia Firme
Una Familia Firme
Una Familia Firme
INTRODUCCIÓN
Deuteronomio 6:3-9
3 Oye, pues, oh Israel, y cuida de ponerlos por obra, para que te
vaya bien en la tierra que fluye leche y miel, y os multipliquéis,
como te ha dicho Jehová el Dios de tus padres. 4 Oye, Israel:
Jehová nuestro Dios, Jehová uno es. 5 Y amarás a Jehová tu Dios
de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. 6 Y
estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; 7 y
las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y
andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. 8 Y
las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales
entre tus ojos; 9 y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus
puertas.
Deuteronomio 6.3-9 es la prescripción de Dios para tener una
familia firme. En primer lugar, debemos amar al Señor con todo
nuestro corazón, alma y fuerzas. Y en segundo lugar, tenemos que
enseñar su Palabra a nuestros hijos. Estos dos requisitos son la
base de una familia firme. Pareciera algo sencillo, pero conlleva
esfuerzo.
REFLEXIÓN