Esi Resumen
Esi Resumen
En su artículo primero, establece: “A los efectos de esta ley, entiéndase como educación sexual integral la
que articula aspectos biológicos, psicológicos, sociales, afectivos y éticos”.
Sancionada en el año 2006 establece que todos los estudiantes tienen derecho a recibir educación sexual en los
establecimientos educativos, en todos los niveles y modalidades del país. Esto tiene como objetivos principales:
En primer lugar, la Asamblea de las Naciones Unidas estableció la Declaración Universal de los Derechos
Humanos en 1948. Las violaciones a los derechos o situaciones llevo a la aprobación de la Convención sobre la
Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, en 1979, que garantiza el derecho a las
mujeres mediante instrumentos políticos de igualdad; y la Convención sobre los Derechos del Niño, en 1989,
comprende los derechos humanos desde el momento del nacimiento hasta los 18 años. Posteriormente, surge la
Ley Nacional 23.592 de Derechos y garantías constitucionales sobre Actos Discriminatorios, que fija sanciones
a quienes actúen de forma desigualitaria en pro de la protección de los derechos anteriores. Más tarde, se
sanciona la Ley Nacional 23.798/90 de SIDA que declara interés nacional al diagnóstico, tratamiento y
prevención del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida. Seguidamente, la Ley Nacional 25.673/02 de
creación del Programa de Salud Sexual y Procreación Responsable tiene como objetivo que la población entera
alcance educación sexual y procreación responsable para la toma de decisiones. En el año 2005, la Ley
Nacional 26.061 de Protección Integral de los Derechos de niños, niñas y adolescentes que reconoce a los de
niños, niñas y adolescentes como sujetos de derechos y ciudadanía dándoles acceso a información y educación
de contenidos de calidad. Ley de Educación Nacional 26614 que obliga a los docentes a garantizar el respeto y
la protección de los derechos de niñas niños y adolescentes en el ámbito escolar
Ley 26.618/10 de matrimonio igualitario. ARTICULO 42. — Aplicación. Todas las referencias a la institución
del matrimonio que contiene nuestro ordenamiento jurídico se entenderán aplicables tanto al matrimonio
constituido por DOS (2) personas del mismo sexo como al constituido por DOS (2) personas de distinto sexo.
Los integrantes de las familias cuyo origen sea un matrimonio constituido por DOS (2) personas del mismo
sexo, así como un matrimonio constituido por personas de distinto sexo, tendrán los mismos derechos y
obligaciones. Ninguna norma del ordenamiento jurídico argentino podrá ser interpretada ni aplicada en el
sentido de limitar, restringir, excluir o suprimir el ejercicio o goce de los mismos derechos y obligaciones, tanto
al matrimonio constituido por personas del mismo sexo como al formado por DOS (2) personas de distinto
sexo. Ley 27.499/18, Ley Micaela. Establece la capacitación obligatoria en los temas de género y violencia
contra las mujeres para todas las personas que trabajan en la función pública.
Abordar ESI en todos los niveles educativos permite comprender el proceso de crecimiento y ayuda a los niños
y jóvenes a sentirse acompañados durante el desarrollo de la sexualidad y el cuidado de la salud. Al ser integral
brinda las herramientas necesarias para expresar emociones, sentimientos o incertidumbres.
Es importante la aplicación de la ESI en el ámbito educacional ya que nos permite, desde temprana edad, tener
conciencia de nuestros derechos y obligaciones como seres sociales así como comprender el respeto a la
diversidad, entendiendo que las diferencias nos enriquecen. Asi mismo, es primordial el desarrollo de
capacitaciones con perspectiva de género a quienes están al frente de los sectores públicos, entendiendo que
estos no recibieron ESI en su juventud y para que el aprendizaje de los más pequeños de nuestra sociedad
resulte significativo.
La Educación Sexual Integral BRINDA HERRAMIENTAS para que las y los adolescentes puedan:
En 2018, a través de la RESOLUCIÓN DEL CFE 340/18 las jurisdicciones se comprometieron a implementar
la obligatoriedad de la educación sexual integral en todos los niveles y modalidades educativas, abordando, sin
excepción, los cinco ejes conceptuales:
CUIDAR EL CUERPO Y LA SALUD. el conocimiento y el respeto del propio cuerpo y el respeto por
el cuerpo del/la otro/a; el reconocimiento de la propia intimidad y la de los/as otros/as; el ejercicio
placentero y responsable de la sexualidad, el modo en que las construcciones de género condicionan la
percepción y valoración del cuerpo de las mujeres y varones y sus vínculos; la expresión de las
emociones y la afectividad a través del cuerpo, la promoción de buenos tratos, la construcción de la
autonomía; la toma de decisiones conscientes y reflexivas sobre el propio cuerpo, el respeto por la
diversidad y la protección de salud, entre otras cuestiones
VALORAR LA AFECTIVIDAD. En toda dinámica grupal y en toda vida institucional se hacen
presentes manifestaciones de la afectividad. Nos ayuda a encontrar modos de expresar los sentimientos y
emociones, hacerse entender y poder también leer en el otro sus expresiones de afectividad, reflexionar
junto con otros sobre los vínculos humanos y su repercusión en la vida socio-emocional de cada ser
humano.
GARANTIZAR LA EQUIDAD DE GÉNERO / RECONOCER LA PERSPECTIVA DE GÉNERO.
Abarca a mujeres, varones y a las formas en que se relacionan; alude a una construcción social, cultural
que se da a partir de la diferencia sexual entre unos y otras. Permite analizar cómo operan las
representaciones sociales, los prejuicios y estereotipos en cada contexto social.
RESPETAR LA DIVERSIDAD. Implica rescatar el significado de convivir en una sociedad plural y
poner en valor la diversidad. Contribuye a pasar de la idea de que debemos “tolerar” lo diferente, a
valorar positivamente la multiplicidad de formas en las que las personas nos manifestamos, pensamos,
actuamos y amamos.
EJERCER NUESTROS DERECHOS. puede pensarse en dos dimensiones: la primera alude a lo
cognitivo y está vinculada al derecho a recibir información adecuada y científicamente validada. Con
respecto a la segunda dimensión, un enfoque basado en la consideración de las personas como sujetos de
derecho propenderá a fomentar la activa participación de los alumnos y alumnas y sus familias, en un
clima de diálogo permanente que garantice la búsqueda de consenso y el respeto por las creencias, sin
eludir el abordaje de las tensiones que puedan presentarse.
Los propósitos formativos y aprendizajes básicos que deben desarrollarse en los diferentes niveles y
modalidades están detallados en los Lineamientos Curriculares aprobados por el Consejo Federal de
Educación (RESOLUCIÓN Nº 45/08)
La OMS define a la sexualidad como “una dimensión fundamental del hecho de ser humano basada en el sexo,
incluyendo el género identidad de seo y género, orientación sexual, erotismo, vínculo emocional, amor y
reproducción. Se expresa en forma de pensamientos, fantasías, deseos, creencias, actitudes, valores, actividades,
practicas, roles y relaciones. La sexualidad es el resultado de la de la interacción de factores biológicos,
psicológicos, socioeconómicos, culturales, éticos y religiosos.”
Esta contiene múltiples dimensiones que son hilos que hacen nuestra vida en tanto humanos, son mucho más
que hechos o conjuntos de procesos biológicos que se van transformado a través de prácticas sociales, procesos
psicológicos, normas, etc. Estas están articuladas de manera que no es fácil desanudarlas o diferenciarlas con
claridad:
Esta forma de pensar comprende las realidades humanas en términos de procesos y no de estados fijos, es decir,
como relaciones que van determinando formas y espacios de desarrollo.
La educación sexual es una EDUCACIÓN “PARA SER” MÁS QUE “PARA HACER” ya que se relaciona
con la vida de las personas y con su forma de estar en el mundo, construyendo el respeto hacia los estudiantes,
concibiéndolos como seres humanos integrales, con necesidades diversas. Sabiendo que la escuela opera como
una institución que contribuye a equiparar las oportunidades de acceso a información y recursos a los
adolescentes y partiendo del reconocimiento del sujeto, de su cuerpo y de sus sentimientos como base del
trabajo pedagógico, tiene como objetivos ofrecer información adecuada y veraz sobre aspectos de la sexualidad
(forma de relación entre las personas) y orientar hacia el acceso a los recursos de salud pública que permitan
vivir la sexualidad de forma responsable, plena y segura. Sus principales características son:
Parte de la base de que los alumnos y alumnas son sujetos de derecho, que sus opiniones y necesidades
deben ser tenidos en cuenta.
Es un proceso de enseñanza/aprendizaje tanto del alumnos como de sus educadores, relacionado con las
dimensiones biológicas, emocionales y sociales dela sexualidad humana y su expresión.
Busca ofrecer conocimientos, habilidades y valores para promover la salud y el desarrollo personal.
Se desarrolla en contextos formales y no formales; a través de nuevos contenidos curriculares, así como
espacios para el desarrollo de talleres específicos.
Entre sus contenidos básicos deben incluirse: conocimiento y cuidado del cuerpo; embarazo y prevención;
transmisión, consecuencias y protección de las ETS; comportamiento sexual seguro y responsable;
planificación familiar; derechos sexuales y reproductivos; violencia sexual y consentimiento.
Subraya la importancia de la educación para la universalización del acceso a los servicios de salud
reproductiva y para el pleno ejercicio del derecho a la salud.
Los enfoques sobre la educación sexual son modelos teóricos qué se elaboraron a partir del análisis de distintas
situaciones pedagógicas y que en la práctica suelen superponerse. Estos son:
Enfoque moralista: se trata del enfoque tradicional y conservador, se marca dentro de la doctrina religiosa,
condenado no solo al coito en si, sino a todas las expresiones de la sexualidad. No contempla espacios de
diálogo dentro del aula y se aleja al enfoque qué propone la ESI actual.
Enfoque biomédico: se centra en lo reproductivo, la idea del encuentro heterosexual es la única válida ya
que la premisa es la procreación como resultado de la actividad sexual. Elimina toda idea de sexualidad y
disfrute del cuerpo; siendo el personal de salud los únicos autorizados para tratar estos temas,
desvalorizando el saber del docente.
La sexología: percibe a la sexualidad como una construcción personal y promueve las buenas prácticas
sexuales. Se diferencia de la ESI, que tiene un enfoque global, mientras que la sexología es individualista.
No se aborda en el ámbito educativo.
Enfoque judicializante: regula las sexualidades del derecho, enfatizando las situaciones de vulneración de
derechos de niños, niñas y adolescentes. Propone la inclusión de este enfoque en el ámbito familiar e
institucional.
Enfoque de género: este enfoque nos ayuda visibilizar que nuestro ser individual está condicionado por la
sociedad, tomando a los estereotipos como una forma de discriminación y desigualdad. Esto es lo que
permite a la educación sexual ser integral.
El pensamiento: no solo es el suministro de información si no tanto los prejuicios y las creencias como los
derechos y obligaciones.
Los sentimientos: la escuela trabaja para desarrollar capacidades emocionales basadas en el respeto.
Las prácticas concretas: relacionadas a la adquisición de competencias para la toma de decisiones
cotidianas.
Para que el APRENDIZAJE de nuestros alumnos y alumnas sea SIGNIFICATIVO es necesario desarrollar
un espacio de enseñanza y aprendizaje sistemático, con contenidos adecuados a su edad, teniendo en cuenta su
situación y su contexto sociocultural, y comprendiendo saberes y habilidades para la toma de decisiones
conscientes y críticas en su futuro.
Nos encontramos con DOS TIPOS DE OBSTÁCULOS PRINCIPALES A LA HORA DE ENSEÑAR ESI
EN LA ESCUELA. Por un lado, los obstáculos cognitivos que complejizan la apropiación de la información
científica y, por otro, los de orden sociocultural como los estereotipos de género, ideas, creencias, mitos y
representaciones de diverso orden que intervienen a la hora de la toma de decisiones de los sujetos.
Sexualidad como objeto de conocimiento vs. sexualidad como conocimientos, saberes, valores y forma de
hacer diversos: la solución sería buscar aquellas asignaturas que presenten mayor relación con la educación
sexual, y cuyos aportes sean significativos para entenderla en su totalidad.
Educación vs. prevención: la solución es concebir a la prevención como parte de la educación; la ESI no
solo es establecer lo que esta bien y mal en las relaciones sexuales, sino que también abarca temas como la
sexualidad como parte de nuestra vida, la afectividad, los vonculos familiares y amistosos, los cambios
propios de las etapas biológicas, la ideología de la generación, etc.
Educación sexual a cargo de los docentes vs. educacion sexual a cargo de profesionales de la salud: la ESI
debería estar a cargo de un profesional que sepa articular todo los espacios del eje, partiendo de la
genitalidad o la sexualidad propiamente dicha hasta las problematicas subjetivas que presenta cada alumno.
Entonces, podemos decir que, debería estar a cargo del docente ya que el profesional de la salud solo
imparte salud sexual.
Los alumnos lo saben todo sobre sexualidad vs. los alumnos no saben nada del tema: se debe asumir que los
alumnos no se encuentran aislados de la sociedad, de alguna forma u otra van a conocer estos temas en los
medios de comunicacion o en los grupos que frecuentan; entonces, la tarea de la educación es regular sus
conocimientos, informandolos acerca de como afrontar esas situaciones.
Familias vs. escuelas: en la Ley 26.150 se establece que las instituciones educativas tienen el deber de
abordar temas de sexualidad, informando y concientizando a los tutores acerca de su importancia y
trabajando en conjunto para el correcto desarrollo del joven en la sociedad
La SOLUCIÓN A ESTOS PROBLEMAS no son lineales, sino que estas dependen plenamente de las
características del grupo con el que se trabaja; abordando los lineamientos curriculares establecidos en la Ley de
26.150, ofreciendo la posibilidad de incluir las diversas perspectivas e inquietudes asi como las estrategias para
establecer consenso dentro de la comunidad educativa.
Los EDUCADORES que toman la responsabilidad de tratar estos temas en las escuelas pasan por un proceso
de reflexión tanto de su rol docente (incomodidades, temores, pudores y convicciones) como de la importancia
que tienen sus palabras en la mente de los alumnos.
Al abordar la ESI es necesario que, entre docentes y alumnos, existan vínculos donde prime LA CONFIANZA,
el dialogo, el respeto y los espacios de opinión. Esta relación de confianza se establece entre un sujeto que ya ha
vivido y está dispuesto a utilizar su experiencia para guiar al otro; y otro que comienza a transitar el camino y
requiere acompañamiento. Para recibir consejos válidos y objetivos, la sexualidad debe ir ligada a la
subjetividad, comprendiendo que es transitada de forma distinta en cada persona. Dentro del aula se propone
acciones como: pensar, concensuar, explorar y transitar
Generalmente en nuestra sociedad las relaciones están teñidas por el ADULTOCENTRISMO, es decir, poner
al adulto en una posición dominante. Esto lleva a la sociedad a generar una comparación donde el adulto es un
ser seguro de sí mismo y quienes no lo son son inseguros, planteando que la manera correcta de ser joven es
repetir los pasos de quienes hoy son adultos; generando así grandes dificultades al momento de dialogar y
generar condiciones para la enseñanza y el aprendizaje. Entonces, la educación debe reflexionar sobre la forma
de entender a los alumnos y alumnas pensando que la niñez y la adolescencia, hoy en día, asumen diferentes
formas; todos son sujetos de derecho y tienen el mismo valor social. Debemos partir de un concepto positivo de
niñez y adolescencia para conocer y fomentar posibilidades y potencialidades en nuestros alumnos y alumnas,
conociendolos cómo son y no como creemos que deben llegar a ser como adultos.
El TRABAJO EN ESI en el interior de la escuela presenta distintos niveles, que incluyen espacios
diferenciados. Podríamos ubicar entonces diferentes ámbitos de intervención:
El ámbito áulico. Contempla: Los aportes propios de cada disciplina o área curricular, los proyectos en el
interior de un área curricular y los proyectos entre asignaturas de distintas áreas.
El ámbito institucional. Contemplar el PEI (Proyecto Educativo Institucional) para introducir este tema de
manera sistemática, atravesando no solo lo curricular, sino también la vida cotidiana de la institución.