Introducción

Comencé a comprender correctamente algo de mi sexualidad casi al mismo

tiempo que comencé a comprender a Jesucristo.
Estaba en mis últimas semanas de secundaria. Los exámenes estaban llegando a su
fin y todos esperábamos con ansias la perspectiva de un verano largo y sin estudios.
Habían sido unos últimos meses agitados. Se estaban asimilando un par de verdades
caseras incómodas. La primera era que es bastante difícil prepararse para los exámenes
cuando no se ha prestado mucha atención en clase. Revisar es mucho más difícil cuando
no ha realizado muchas "visiones".

La otra verdad hogareña era aún más incómoda. Siempre había sido alguien que había
formado amistades cercanas, pero ahora estaba comenzando a darme cuenta de que estaba
pasando algo un poco más que eso. Aunque había tenido un par de novias, nunca había
sentido el mismo tipo de vínculo que tenía con uno o dos de mis amigos varones más
cercanos. A medida que comenzaba el largo verano y había menos cosas que me pudieran
distraer, la verdad empezó a dolerme. Las palabras comenzaron a formarse en mi mente:
Creo que soy gay.

Este no fue un desarrollo bienvenido. Quería ser como todos los demás y estar
metido en lo que les gustaba a los demás. Quería tener sentimientos por las chicas como
lo tenían mis amigos. Y sin embargo, en lugar de tener sentimientos por las chicascon
mis amigos, me estaba encontrando teniendo sentimientos por mis amigos.

Fue durante este mismo período que conocí a algunos cristianos por primera vez.
Trabajaba los sábados por la tarde en una cafetería local dirigida por cristianos, y
esta fue la primera vez que realmente conocí a cristianos de mi edad. Se hicieron
amigos rápidamente y cuando, después de que terminaron los exámenes y no tenía
nada más que hacer, me invitaron a su grupo de jóvenes de la iglesia, decidí
acompañarlos. Me gustaban estos chicos y estaba interesado en saber más sobre lo
que creían. Resultó que el mensaje de Jesús era bastante diferente de lo que había
imaginado ...

El mensaje que escuché

Cuando Jesús comenzó su ministerio público, hizo el siguiente
anuncio y nos lleva directamente al corazón de su mensaje:
Después de que Juan fue encarcelado, Jesús fue a Galilea a proclamar las
buenas nuevas de Dios. “Ha llegado el momento”, dijo. “El reino de Dios se
ha acercado. ¡Arrepiéntanse y crean las buenas nuevas! "
 Marcos 1 v 14-15

Jesús dice que el reino de Dios se ha acercado. Todo lo que Dios había planeado hacer para
corregir los males de este mundo,en ese mismo momento fue cuando lo estaba haciendo.
Todo estaba a punto de comenzar.

Y la respuesta que Jesús busca es arrepentimiento y fe.

Arrepentimiento significa dar la vuelta, cambiar de rumbo. La implicación es
bastante clara y un poco incómoda:no vamos en la dirección correcta. Somos
como el anciano sobre el que leí recientemente en nuestro periódico local: en un
momento de confusión en medio de la noche, terminó conduciendo una milla
más o menos en el lado equivocado de la autopista. Afortunadamente, a esa
hora casi no venía nada en sentido contrario; si hubiera sucedido cuando los
pasajeros estaban despiertos, podría haber sido una historia muy diferente.

Jesús está afirmando que nos dirigimos en la dirección equivocada y que la hora
punta de los propósitos de Dios se dirige hacia nosotros. Necesitamos cambiar de
dirección y alinearnos con lo que Dios está haciendo. Y eso significacreyendo el
evangelio: el anuncio de que, a través de la muerte y resurrección de Jesús, podemos
ser reconciliados con Dios; que se nos ofrece un nuevo comienzo para comenzar a vivir
como Dios siempre quiso que lo hiciéramos. Este es su mensaje.

Y es su mensaje para todas las personas. Cuando Jesús irrumpió en escena, no

subdividió a la humanidad en categorías ni les dio a cada una un mensaje por
separado. Uno para los introvertidos; otro para los extrovertidos. Uno (con gráficos
lógicos y viñetas) para los del hemisferio izquierdo y otro (con diferentes colores y
música ambiental) para los del hemisferio derecho.

El mensaje de Dios para los homosexuales es el mismo que su mensaje para todos.
Arrepiéntanse y crean. Es la misma invitación a encontrar la plenitud de vida en Dios, la
misma oferta de perdón y amor profundo, maravilloso y transformador.

Atracción por personas del mismo sexo versus "gay"

Este fue el mensaje que escuché por primera vez en la iglesia de mis amigos, el mensaje
que he tratado de vivir a la luz desde entonces. A pesar de todo, como alguien que vive
con la homosexualidad, he descubierto que el cristianismo bíblico es una maravillosa
fuente de consuelo y alegría. La palabra de Dios para mí sobre este tema a veces se
siente confusa y difícil. Sin embargo, es profunda y profundamente bueno. El evangelio
de Jesús es una noticia maravillosa para alguien que experimenta atracción por personas
del mismo sexo.
 Usé el término “atracción por personas del mismo sexo” en ese momento porque un
desafío inmediato es cómo me describo a mí mismo. En la cultura occidental de hoy, el
término obvio para alguien con sentimientos homosexuales es "gay". Pero en mi experiencia,
esto a menudo se refiere a mucho más que a la orientación sexual de alguien. Ha llegado a
describir una identidad y un estilo de vida.

Cuando alguien dice que es gay, o para el caso, lesbiana o bisexual,

normalmente quiere decir que, además de sentirse atraído por alguien del
mismo género, su preferencia sexual es una de las formas fundamentales en
que se ve a sí mismo. Y es por esta razón que tiendo a evitar usar el término.
Suena torpe describirme a mí mismo como "alguien que experimenta atracción
por personas del mismo sexo". Pero describirme así es una forma de reconocer
que el tipo de atracción sexual que experimento no es fundamental para mi
identidad. Son parte deLo que yo siento pero no lo son quién soy en un sentido
fundamental. Soy mucho más que mi sexualidad.
Toma otro tipo de apetito. Amo la carne. Un plato sin un trozo de animal
no me parece bien. Pero mi amor por la carne no significa que quiera que
alguien piense que "carnívoro" es la categoría principal a través de la cual
entenderme. Es parte de la imagen, pero no llega al corazón de quién soy. Así
que prefiero hablar en términos de ser alguien que experimenta
sentimientos homosexuales o atracción por personas del mismo sexo (SSA
para abreviar en lo que sigue).
Y como alguien en esta situación, lo que Jesús me llama a hacer es exactamente lo
que él llama a cualquiera a hacer. Tome otro dicho muy conocido de Jesús:

Luego llamó a la multitud junto con sus discípulos y dijo: "El que
quiera ser mi discípulo debe negarse a sí mismo, tomar su cruz
y seguirme". San Marcos 8 v 34
Es lo mismo para todos nosotros: "quienquiera". Debo negarme a mí mismo, tomar
mi cruz y seguirlo. Todo cristiano está llamado a sacrificios costosos. Negarse a sí
mismo no significa modificar su comportamiento aquí y allá. Esta diciendo
"No" a tu sentido más profundo de quién eres, por amor a Cristo. Tomar
una cruz es declarar su vida (como la conoció) como perdida. Es entregar
tu vida por la misma razón que resulta que tu vida no es tuya en absoluto.
Pertenece a Jesús. El lo hizo. Y con su muerte lo ha comprado.
Desde que he sido abierto sobre mis propias experiencias de
homosexualidad, varios cristianos han dicho algo como esto: "El evangelio
debe ser más difícil para ti que para mí", como si tuviera mas que
darse por vencido de lo que lo hacen. Pero ese hecho es que el evangelio exigetodo de
todos nosotros. Si alguien piensa que el evangelio se ha introducido de alguna manera en su
vida con bastante facilidad, sin causar ningún ajuste importante en su estilo de vida o
aspiraciones, es probable que realmente no haya comenzado a seguir a Jesús en absoluto.

Y así como el costo es el mismo para todos nosotros, también lo son las bendiciones.
En los últimos años de lucha con este problema, este se ha convertido en uno de mis
dichos favoritos de Jesús:

"Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os haré

descansar". Mateo 11 v 28

Ésta es una maravillosa promesa. Jesús asume que, abandonados a nosotros mismos, estamos
abrumados. La vida fuera de sincronía con Dios nos hace eso. Pero cuando llegamos a Jesús,
encontramos descanso. No solo descansar en el sentido de una tarde de fin de semana perezosa
o una larga noche de sueño en un día libre. Jesús quiere decir algo mucho más profundo:
descansar en el sentido de que las cosas son con Dios como deben ser. Descanse en el sentido de
vivir a lo largo de lo que realmente somos y cómo Dios quiere que vivamos. Descanse en el
sentido de poder florecer verdaderamente como las personas que Dios hizo que fuéramos.

¿Dios es anti-gay? No.

Pero él está en contra de quienes somos todos por naturaleza, como aquellos que vivimos
separados de él y para nosotros. Es antiese chico, como sea que se vean esos chicos en cada
una de nuestras vidas. Pero debido a que él es más grande que nosotros, mejor que
nosotros, y capaz de hacer estas cosas en formas por las que nos esforzaríamos, Dios
también ama a ese hombre. Lo ama lo suficiente como para llevar su carga, tomar su lugar,
limpiarlo, sanarlo y unirlo para siempre a sí mismo.

Ser cristiano y vivir como cristiano con SSA plantea todo tipo de preguntas, preguntas
que espero que podamos cubrir en este libro. Mis propias experiencias de
homosexualidad no significan que pueda hablar por todos para quienes esto es un
problema. A lo largo de los años, he conocido a muchas personas para quienes este no
es un tema abstracto. Hombres y mujeres; joven y viejo; algunos con fe; y algunos que
son hostiles al cristianismo; los que han compartido conmigo en la más estricta
confidencialidad; y aquellos que pública y orgullosamente se identifican a sí mismos
como homosexuales. Cada una de esas conversaciones ha sido un privilegio. Algunos
han compartido historias de doloroso rechazo (en un caso, de ser escupido por sus
compañeros); otros de aceptación sorprendida. En algunos casos ha habido fuertes
similitudes con mis propias experiencias y sentimientos, y en otros casos
ha sido muy diferente. De modo que no pretendo hablar por los demás. En cambio, mi
objetivo es tratar de responder a cada pregunta y ver lo que la Biblia tiene que decir.

Casi lo primero que se pregunta es: "¿Qué dice realmente la Biblia sobre la
homosexualidad?" y llegaremos a eso pronto. Pero cuanto más miro la Biblia,
más convencido estoy de que lo que dice sobre la sexualidad tiene más sentido a
la luz de lo que dice en general sobre el sexo y el matrimonio.
Así que ahí es donde comenzaremos ...
Capítulo 1

Para comenzar: la Biblia, el matrimonio y el sexo

Mucha gente tiene la idea de que la Biblia de alguna manera desaprueba el

sexo, como si fuera algo que descubrimos a espaldas de Dios y sin su
completa aprobación. Pero Génesis nos muestra algo muy diferente.
Dios es quien hace a la humanidad hombre y mujer, y Dios es quien les
manda a “Fructificad y multiplicaos” (Génesis 1 v 28). El sexo es idea de Dios.
No fue nuestro invento, sino su regalo. Y no fue dado a regañadientes, como
si Dios dijera: "Bueno, continúa, sitener para". No, Dios nos dio un medio de
reproducción que no solo era funcional, sino profundamente placentero. El
sexo es un signo de su bondad.
Génesis 1 y 2 nos muestran los dos propósitos del sexo. Estos capítulos
proporcionan dos relatos complementarios de la creación: el primero (en Génesis 1)
es como una lente de gran angular, que describe la creación del mundo físico y toda
la vida dentro de él. El segundo (en Génesis 2) se enfoca en la creación del primer
hombre y mujer.

En Génesis 1, la humanidad es creada a imagen de Dios y tiene la tarea de

gobernar la tierra y sus criaturas. En este contexto, el punto de la diferencia sexual
entre hombre y mujer es la reproducción. El aumento en número les permitirá llenar
la tierra y estar presentes en todas partes para gobernarla.

Pero en Génesis 2 las diferencias entre los sexos se presentan bajo una luz
diferente. Adán es creado primero y, sin embargo, "no es bueno" que esté solo. Por
sí mismo es incapaz de cumplir con los propósitos para los que Dios lo creó. El
remedio para esto es la creación de la primera mujer. A diferencia de los diversos
animales que acaba de nombrar Adam, la mujer se corresponde perfectamente con
él:

El hombre dijo,
“Esto es ahora hueso de mis
huesos y carne de mi carne;
ella será llamada "mujer",
porque fue sacada de "Hombre".
Génesis 2 v 23

Ella es como él de la manera correcta (hecho del mismo material) y a diferencia de él de

la manera correcta (mujer, en lugar de hombre). Ella es un ejemplo diferente de la
lo mismo que él: comparte su naturaleza, su vocación y su propia vida. Es
estocomplementariedad que conduce a una profunda unidad entre ellos
cuando finalmente se unen en unión sexual:

Por eso el hombre deja a su padre y a su madre y se une a su mujer, y

se vuelven una sola carne.
Génesis 2 v 24

El propósito del sexo aquí es expresar y profundizar la unidad entre ellos.

Y el escritor deja en claro que ya no solo habla de Adán y Eva. No se nos
habla de esta primera pareja humana por si acaso estamos interesados
en nuestra antigua historia familiar. No, su historia es cierta para toda la
humanidad. Establece un patrón que vemos repetido en cada generación.
El escritor se retira de su entorno inmediato para hacer la observación
general:"Por eso un hombre deja a su padre y a su madre y se une a su
mujer.… ”.
Lo que estaba sucediendo con Adán y Eva explica lo que ha sucedido desde
entonces. El perfecto "encaje" entre los dos es la base de todo matrimonio
humano desde entonces. La cuenta no se trata solo de su unión, sino de cada
unión matrimonial.
El hombre y la mujer se vuelven "una sola carne". Gracias a demasiadas
canciones de amor, este tipo de lenguaje, de “dos en uno”, puede sonar un
poco cliché para nuestros oídos. Pero no se trata solo de describir la
sensación de unión que una pareja puede sentir mientras está atrapada en el
colmo de la pasión. Es algo objetivo y real. Jesús enseña que es Dios quien
une a las parejas en el matrimonio y las hace una (Mateo 19 v 6). Dios mismo
produce esta unión entre ellos. Física, psicológica, emocional y
espiritualmente, dos personas se están uniendo. Dios lo ha diseñado para
que funcione de esa manera.
Y trabaja muy bien. El efecto vinculante del sexo en una relación es lo que
hace que la ruptura de una relación sexual sea tan profundamente dolorosa. No
es para lo que estamos diseñados. Y cuanto más se forja y luego se rompe esa
unión, más disminuye nuestra capacidad de unidad profunda y duradera.
La sexualidad es un poco como una nota adhesiva. La primera vez que lo usa, se adhiere bien.
Pero cuando se vuelve a aplicar demasiadas veces, pierde su capacidad de adherirse a cualquier
cosa. Simplemente no estamos diseñados para múltiples relaciones sexuales. El sexo se vuelve
menos relacional, más funcional y menos satisfactorio como resultado. Los encuentros sexuales
casuales están hechos para parecer inofensivos y divertidos en la mayoría de los casos.
 comedias de situación, pero las consecuencias en la vida real son mucho más graves: vacío,
quebrantamiento y devastación. No debería sorprendernos: el sexo está diseñado para unir
irreversiblemente a dos personas.

So Genesis 1 – 2 shows us that God is for sex. It also shows us that sex is for
marriage.

How does marriage fit in with this?

In his own teaching Jesus reinforces the sexual ethics of Genesis 1 – 2. He
characterises all sexual activity outside of marriage as evil:

“What comes out of a person is what defiles them. For it is from

within, out of a person’s heart, that evil thoughts come – sexual
immorality, theft, murder, adultery, greed, malice, deceit, lewdness,
envy, slander, arrogance and folly. All these evils come from inside
and defile a person.’”
Mark 7 v 20-23

The term we translate as “sexual immorality” is the Greek word porneia, an

umbrella term for all sexual activity outside marriage. Such behaviour Jesus
describes as evil and defiling.
Elsewhere, Jesus reinforces the permanence and exclusivity of marriage:

Se le acercaron unos fariseos para ponerlo a prueba. Preguntaron:

"¿Es lícito que un hombre se divorcie de su esposa por cualquier
motivo?" “¿No habéis leído”, respondió él, “que al principio el Creador
'los hizo varón y hembra', y dijo: 'Por esta razón el hombre dejará a su
padre y a su madre y se unirá a su esposa, y la dos serán una sola
carne '? Entonces ya no son dos, sino una sola carne. Por tanto, lo que
Dios ha unido, nadie lo separe ”.
Mateo 19 v 3-6
Jesús subraya lo que ya hemos visto en Génesis. Somos creados hombre y mujer.
La humanidad tiene género. No somos solo seres humanos, sino hombres y
mujeres. Y este ha sido el caso desde "el principio". Siempre fue así. Sí, el género
es algo que los humanos interpretamos y a lo que prestamos expresión cultural,
pero no es algo que inventemos o definamos por completo. Así es como Dios nos
creó.
A continuación, Jesús nos muestra que esta diferencia sexual es la razón por la
que tenemos matrimonio. Somos hombre y mujer: “por eso un hombre se irá ...” Es
porque somos hombre y mujer que tenemos el fenómeno del matrimonio.
El matrimonio se basa en el género. El matrimonio no existiría sin las diferencias
sexuales entre hombres y mujeres.
Es esta diferencia sexual la que explica la profundidad de la unión entre el
hombre y la mujer. Eva fue creada de Adán; hecho de su cuerpo. Su unión de
una sola carne es, por tanto, una especie de reunión; uniendo lo que
originalmente había sido uno.
Estas verdades nos ayudan a comprender algunos de los propósitos del matrimonio en la
Biblia:

1. El matrimonio humano está destinado a reflejar algo de la naturaleza de Dios. En

el credo más famoso del Antiguo Testamento, a los creyentes se les recuerda que:
“El Señor tu Dios, el Señor uno es” (Deuteronomio 6 v 4). La palabra hebrea particular
para "uno" ('ehad) no es principalmente una observación matemática
- que hay uno de él, en lugar de dos o cinco. Es una afirmación sobre
La naturaleza de Dios. Él es uno. Hay una unidad en él. Él es de una pieza. Vemos en
la Biblia que este Dios es la Trinidad: es Padre, Hijo y Espíritu Santo. Tres personas
diferentes. Pero todo lo que este Dios trino es, hace y dice está perfectamente
integrado. Uno.

Esta misma palabra se usa en Génesis 2 v 24 para describir la unión del

hombre y la mujer en el matrimonio. Se vuelven uno'ehad) carne. El matrimonio
es una manera maravillosa dada por Dios para que la humanidad refleje la
unidad y diversidad que se ve en la Trinidad. La unidad de Dios no es igualdad,
como si las tres personas de la Trinidad fueran idénticas entre sí. Es unidad en la
diferencia, no uniformidad. Y lo mismo ocurre con la unión de un hombre y una
mujer. Existe este mismo tipo de unidad que se produce cuando el hombre y la
mujer se unen de esta manera.
No ocurre lo mismo con el sexo gay. Dos hombres o dos mujeres no pueden
convertirse en una sola carne. No pueden convertirse en uno'ehad) en la forma en que
Dios es uno, y en la forma en que un hombre y una mujer son uno. Pueden tener una
especie de unión, pero no es del tipo que es únicamente posible con un matrimonio
heterosexual.

Esto no quiere decir que el compromiso y la fidelidad no puedan estar presentes en una
relación gay, o que existan automáticamente en una relación heterosexual simplemente en
virtud de la heterosexualidad de la pareja. Conozco parejas homosexuales en las que hay una
lealtad y un compromiso impresionantes, al igual que puedo pensar en algunos matrimonios
heterosexuales que están fracasando y fracasando en este mismo momento. El problema no
son los sentimientos de compromiso que dos personas puedan tener el uno con el otro, sino
más bien el tipo de unión que Dios le da a un hombre y
mujer cuando se vuelven físicamente una. Esta complementariedad es fundamental para el
matrimonio. Independientemente de cómo podamos diferenciarnos unos de otros en
temperamento, tipo de personalidad, cultura y antecedentes, es en última instancia la unión
de hombre-mujer lo que conduce a la experiencia de una sola carne.

2. Esta unión de una sola carne está diseñada para ser la forma en que Adán y
Eva cumplan el mandato de Dios de “fructificar, multiplicarse y llenar el
tierra ”(Génesis 1 v 28, ESV). De esta unión fluye la posibilidad de una nueva
vida, para que los niños resulten de ella. Esto se refleja en el libro de Malaquías
del Antiguo Testamento: “¿No los ha hecho el Señor uno? En carne y espíritu son
suyos. ¿Y por qué uno? Porque buscaba descendencia piadosa ”(Malaquías 2 v
15). La procreación no es el único propósito del matrimonio (los que no pueden
tener hijos no están menos casados por eso), pero está claro que la procreación
está basada en el matrimonio.
3. El matrimonio humano no solo refleja algo de la naturaleza de Dios.
También está destinado a reflejar la gracia que, en Cristo, Dios muestra a su
pueblo:

"Por eso el hombre dejará a su padre y a su madre y se unirá a

su mujer, y los dos serán una sola carne". Este es un misterio
profundo, pero me refiero a Cristo y la iglesia.
Efesios 5 v 31-32
Pablo está diciendo que el matrimonio se trata de la relación que Jesús tiene
con la iglesia. También es una unión entre dos entidades diferentes, pero
complementarias. La iglesia no es lo mismo que Cristo, y Cristo no es lo
mismo que la iglesia (¡una verdad maravillosa dadas las imperfecciones de la
iglesia!). Y es porque Cristo es diferente a su pueblo que puede atraerlos
hacia él, comprometerse con ellos y hacer que se unan a él. El matrimonio
humano es un reflejo de este matrimonio celestial supremo entre Cristo y su
pueblo. Es una de las razones por las que los cristianos se resisten a permitir
que el matrimonio se defina de manera que incluya a las parejas
homosexuales. Un hombre y un hombre, o una mujer y una mujer, no
pueden reflejar la unión de Cristo y la iglesia, sino que solo reflejan a Cristo y
Cristo o iglesia e iglesia.
La enseñanza de la Biblia sobre el sexo y el matrimonio es la base de cómo los
cristianos deben pensar sobre todo el tema de la sexualidad en la actualidad. La
enseñanza del Génesis, reforzada y ampliada por Jesús en su propio ministerio, es
que el sexo es un buen regalo que Dios ha dado exclusivamente para el matrimonio,
y que para que el matrimonio cumpla los propósitos para los que Dios lo instituyó,
el matrimonio debe ser entre un hombre y una mujer.
Todo lo cual plantea una pregunta enorme y urgente: ¿Dónde encaja la homosexualidad
en todo esto?
Capitulo 2

La Biblia y la homosexualidad

Es una sorpresa para muchas personas descubrir que solo hay un puñado de
pasajes en la Biblia que mencionan directamente la homosexualidad.
Simplemente no es un problema que surja mucho. Sin embargo, donde lo hace,
la Biblia tiene cosas importantes y claras que decir sobre la homosexualidad. Por
lo tanto, no sirve decir que esta enseñanza, debido a su relativa poca frecuencia,
no importa. La Biblia no suele hacer referencia directa a cómo debemos cuidar la
creación, pero eso no nos libra de seguir lo que se dice en los lugares donde lo
hace.
Pero al menos, esto nos muestra que la Biblia no es obsesionado sobre la
homosexualidad. No es de lo que “trata” la Biblia. Nuestro entendimiento de lo que
la Biblialo hace decir sobre el tema, por lo tanto, debe leerse a la luz de los temas
más importantes de las Escrituras. Lo que dice la Biblia sobre la homosexualidad no
representa todo lo que Dios quiere decirles a las personas homosexuales; no es todo
el mensaje del cristianismo. Por eso, los pasajes a continuación deben considerarse
como parte del mensaje más amplio del evangelio: el anuncio de lo que Dios ha
hecho por nosotros en Cristo y la necesidad de arrepentimiento y fe.

Los cristianos que quieran explicar la fe cristiana a sus amigos homosexuales

deben saber que lo que dice la Biblia sobre la homosexualidad no es lo único que
necesitan explicar, y probablemente no sea lo primero, ni siquiera lo principal,
deben concentrarse. en.
Los dos primeros pasajes que mencionan directamente la homosexualidad provienen del
Antiguo Testamento.

1. Génesis 19
La ciudad de Sodoma en Génesis 19 se ha asociado tanto con la conducta homosexual
que su nombre ha sido durante muchas generaciones un término peyorativo para el
sexo gay. Pero, ¿es realmente la sodomía de lo que se trata Sodoma?

El relato comienza con la llegada de dos ángeles a la puerta de la ciudad, encargados

de determinar si el clamor que ha llegado a Dios al respecto está justificado o no. Los
ángeles aparecen como hombres, y se les desaconseja encarecidamente pasar la noche
al aire libre en la plaza de la ciudad, lo que en sí mismo es un indicio de dónde están las
cosas en Sodoma. En cambio, se alojan con Lot.
 Es cuando se pone el sol cuando las cosas se ponen feas:

Pero antes de acostarse, los hombres de la ciudad, los varones de Sodoma,

jóvenes y ancianos, todo el pueblo hasta el último hombre, rodearon la
casa. Y llamaron a Lot: “¿Dónde están los hombres que vinieron a verte esta
noche? Sácanoslos para que los conozcamos ”.
Génesis 19 v 4-5, ESV

Por sí solo, esto podría parecer un veredicto condenatorio. Pero partes posteriores del
Antiguo Testamento acusan a Sodoma de pecados muy diferentes: opresión, adulterio,
mentiras, cómplices de criminales, arrogancia, complacencia e indiferencia hacia los pobres.
Ninguno de estos inclusomenciones conducta homosexual. Esto ha llevado a algunas
personas a preguntarse si hemos leído la homosexualidad en la narrativa del Génesis,
cuando en realidad el problema real era la opresión social y la injusticia. Pero una mirada de
cerca a la historia deja en claro que la homosexualidad estaba involucrada.

Primero, aunque la palabra hebrea para "conocer" (yada) puede significar

simplemente "conocer" a alguien (en lugar de "conocerlo" sexualmente), está claro
tanto por la agresión de la multitud como por el terrible intento de Lot de ofrecerles
a sus hijas como alternativa, que están buscando mucho más que una tranquila
charla con una copa de vino.

En segundo lugar, esta multitud no es un grupo pequeño y poco representativo. Está muy
claro que se trata de toda la comunidad masculina: “los hombres de Sodoma, jóvenes y
viejos, todo el pueblo hasta el último hombre”. Así se está comportando la ciudad. Eso es lo
que hace Sodoma.

Esto explica lo que sucede a continuación; los ángeles advierten a Lot que el juicio
es inminente (v 13). Han descubierto todo lo que necesitan saber. El clamor contra
Sodoma está justificado.

En el Nuevo Testamento, Judas agrega una idea importante:

De manera similar, Sodoma y Gomorra y las ciudades circundantes se

entregaron a la inmoralidad sexual y la perversión. Sirven como
ejemplo de quienes sufren el castigo del fuego eterno.
Judas 7

Lo que sucedió en Sodoma está claramente destinado a ser una advertencia.

Son un ejemplo de cómo enfrentar el juicio de Dios. Pedro dice más o menos
lo mismo: Sodoma y Gomorra son “un ejemplo de lo que les va a pasar a los
impíos” (2 P. 2 v 6). Judas deja en claro que su impiedad implicaba
inmoralidad sexual. Fueron castigados por pecado sexual junto con el otro.
 pecados de los que eran culpables. Su destrucción sirve de advertencia:Dios se toma
el pecado sexual muy en serio.
Judas también destaca la perversidad de sus deseos sexuales: perseguían un "deseo
antinatural" (ESV) (literalmente, "carne" antinatural). Algunos han sugerido que esto se
relaciona con el hecho de que los visitantes de la ciudad eran angelicales; tanto Judas como
Pedro también hacen referencia al pecado angelical anteriormente en sus cartas. Pero estos
ángeles aparecieroncomo hombres, y la multitud que aullaba fuera de la casa de Lot no
mostró evidencia de saber que eran angelicales. Su deseo era tener relaciones sexuales con
los hombres que se quedaban con Lot.

Así que no era solo la forma violenta en que la multitud intentaba satisfacer sus
antojos sexuales lo que era impío, sino también la naturaleza de los antojos. Un
episodio paralelo en Jueces 19 indica que no es solo la Sodoma pagana, sino
también el pueblo de Dios quien comete este tipo de pecado.

2. Levítico 18 y 20
Levítico contiene dos prohibiciones contra la actividad homosexual:

No te acostarás con varón como con mujer; es una abominación.

Levítico 18 v 22, ESV
Si un hombre se acuesta con un varón como con una mujer, ambos
han cometido una abominación; ciertamente morirán; su sangre está
sobre ellos.
Levítico 20 v 13, ESV
"Una abominación" se usa a menudo para describir la idolatría, por lo que algunos
sugieren que estos versículos no prohíben el comportamiento homosexual en general,
sino solo la prostitución de culto asociada con templos paganos. Pero el lenguaje
utilizado no es tan específico; los pasajes se refieren en general a un hombre acostado
con un hombre “como con una mujer”, sin especificar un contexto particular para ese
acto. Además, los versículos circundantes en Levítico 18 y 20 prohíben otras formas de
pecado sexual que son de naturaleza general, como el incesto, el adulterio y la
bestialidad.

Ninguno de estos tiene ninguna conexión con los templos paganos o la idolatría. Estas
cosas son moralmente incorrectas, independientemente de quién las esté haciendo y dónde
estén sucediendo. También es importante ver que el segundo de estos dos versículos
(Levítico 20 v 13) prohíbe ambas partes masculinas por igual. No podemos descartarlo como
solo una prohibición de cosas como la violación gay o una relación forzada. Levítico prohíbe
incluso la actividad homosexual consensuada en general.
 También es importante ver que el comportamiento homosexual no es el solamente pecado
para ser descrito como "una abominación" en la Biblia. Levítico se refiere a otros pecados
sexuales exactamente de la misma manera, y Proverbios enumera el discurso engañoso, el
orgullo y el asesinato como igualmente abominables para Dios. El pecado homosexual no está en
una categoría propia en este sentido.

3. Romanos 1 v 18-32
Romanos 1 tiene mucho que decir sobre la naturaleza y el carácter del comportamiento
homosexual. Vale la pena leer todo el capítulo antes de seguir leyendo ...

El objetivo de Pablo en estos primeros capítulos es demostrar que el mundo

entero es injusto a los ojos de Dios y, por lo tanto, necesita la salvación. En
Romanos 1: 18-32 se centra en el mundo gentil pagano, describiendo su
alejamiento de Dios y la aceptación de la idolatría y la maldad. Los detalles
particulares del pasaje pueden indicar que Pablo está usando la cultura
grecorromana que rodea a sus lectores como un ejemplo.
La sociedad gentil enfrenta la ira de Dios porque ha suprimido la verdad que
Dios ha revelado sobre sí mismo en la creación (versículos 18-20). En los
versículos que siguen, Pablo ilustra cómo ha sucedido esto, dando tres ejemplos
de cómo lo que se conocía de Dios se ha cambiado por otra cosa: intercambian la
gloria de Dios por imágenes de criaturas (v. 23); la verdad de Dios por mentira,
que lleva a la idolatría en toda regla, adorar las cosas creadas (v. 25); y rechazan
el conocimiento de Dios (v 28), intercambiando relaciones "naturales" por
relaciones "antinaturales":

Debido a esto, Dios los entregó a pasiones vergonzosas. Incluso sus mujeres
intercambiaron relaciones sexuales naturales por otras antinaturales. De la misma
manera, los hombres también abandonaron las relaciones naturales con las mujeres y
se enardecieron de lujuria el uno por el otro. Los hombres cometieron actos
vergonzosos con otros hombres y recibieron en sí mismos el debido castigo por su
error.
Romanos 1 v 26-27

Dos verdades importantes y aleccionadoras se desprenden de estos versículos:

un. La homosexualidad es antinatural

Paul describe el comportamiento homosexual tanto masculino como lésbico como

"antinatural". Esto es claramente algo enorme para que la Biblia lo diga y, en consecuencia,
algo muy difícil de escuchar para muchas personas. Algunos se han preguntado si
"antinatural" podría referirse a lo que es natural para las personas mismas. Si es así,
 Paul estaría hablando de personas heterosexuales que se involucran en actividades
homosexuales y, por lo tanto, van en contra de su orientación "natural". Por lo tanto, Pablo
no estaría condenando todo comportamiento homosexual, sino solo aquello que va en
contra de las propias inclinaciones sexuales de la persona.

Pero por atractivo que pueda resultar para algunos, este punto de vista no puede ser
respaldado por el texto en sí. Las palabras para "natural" y "contra natura" no describen
nuestra experiencia subjetiva de lo que nos parece natural, sino que se refieren a la forma
fija de las cosas en la creación. La naturaleza que Pablo dice que el comportamiento
homosexual contradice es el propósito de Dios para nosotros, revelado en la creación y
reiterado a lo largo de las Escrituras.

Esto nos muestra por qué no es cierto que quienes tienen SSA digan: "¡Pero Dios me
hizo así!" El punto de Pablo en Romanos 1 es que nuestra "naturaleza" (como la
experimentamos)no es naturalcomo Dios quiso). Todos tenemos deseos que se
deforman como resultado de nuestra naturaleza caída. Los deseos por las cosas que
Dios ha prohibido son un reflejo de cómo el pecado me ha distorsionado, no de cómo
Dios me ha creado.

La referencia de Paul al lesbianismo, así como a la conducta homosexual

masculina, también confirma la idea de que está condenando todos actividad
homosexual, y no solo las relaciones hombre-niño que se sabe que ocurrieron en la
cultura romana.

La fuerza del lenguaje de Pablo aquí no debería hacernos pensar que la conducta
homosexual es la peor o la única forma de comportamiento pecaminoso. Pablo puede
estar destacándolo porque es un ejemplo particularmente vívido, y puede haber sido
especialmente pertinente para sus lectores en Roma, dado su contexto cultural. De
cualquier manera, ilustra algo que es el caso de todos nosotros: cuando rechazamos a
Dios, nos encontramos deseando aquello para lo que no estamos diseñados de forma
natural. Esto es tan cierto para una persona heterosexual como para una persona
homosexual.

B. La homosexualidad es una señal del juicio de Dios

Pablo escribe eso junto con el evangelio: "La ira de Dios se revela desde el
cielo contra toda impiedad e iniquidad de las personas" (Romans 1 v 19).
Though there will one day be a “day of God’s wrath when his righteous
judgment will be revealed” (Romans 2 v 5), there is already a present-day
expression of God’s anger against sin.
When we try to visualise what God’s wrath looks like, many of us
imagine scenes from a disaster movie, or think of lightning bolts falling
 from the sky. But Paul gives us a very different picture. We see God’s wrath in
this: he gives us what we want.
In response to the exchanges Paul has described, we see three instances of
God giving us over to live in the outcome of our sinful desires. This is his
present-day judgment against sin. We ask for a reality without him and he
gives us a taster of it.
En cada caso, la "entrega" resulta en una intensificación del pecado y una mayor
ruptura de la conducta humana. Dios entrega la humanidad a las concupiscencias
impuras y la conducta corporal deshonrosa (v. 24), ya las “concupiscencias
vergonzosas” (v 26). El intercambio de relaciones naturales por antinaturales
conduce a ser entregado a un"Mente depravada" y el florecimiento de "Toda clase
de maldades", que Pablo descompone en una larga lista de comportamientos
antisociales (v. 28-31). El pecado conduce al juicio, pero el juicio también conduce a
un pecado mayor.

La presencia de todos estos actos pecaminosos es un recordatorio de que vivimos en un

mundo que experimenta un anticipo de la ira de Dios y provoca su derramamiento final en el
día del juicio. El hecho de que la actividad homosexual esté incluida entre estos actos indica
que es, en sí misma, testimonio de la naturaleza deformada de la humanidad pecadora.

Es importante reconocer que Pablo está hablando en términos sociales más

que individuales. Está describiendo lo que le sucede a la cultura en su conjunto,
en lugar de a las personas en particular. La presencia del deseo del mismo sexo
en algunos de nosotros no es una indicación de que un individuo se haya alejado
de Dios más que otros, o que Dios lo haya entregado a pecar más que otros.

Existe un paralelo con el sufrimiento. La presencia de un sufrimiento particular en la

vida de alguien no significa que haya pecado más que alguien que sufre menos. Más
bien, la presencia de sufrimiento en cualquier lugar es una indicación de que, como raza,
estamos bajo el juicio de Dios. De manera similar, la presencia de sentimientos
homosexuales en mí me recuerda que mis deseos no son correctos porque el mundo no
es correcto. Juntos nos hemos alejado de Dios y juntos hemos sido entregados al pecado.

4. 1 Corintios 6 v 9-10
¿O no saben que los injustos no heredarán el reino de Dios? No
os dejéis engañar: ni los inmorales, ni los idólatras, ni los
adúlteros, ni los hombres que practican la homosexualidad, ni
 Los ladrones, ni los codiciosos, ni los borrachos, ni los injuriosos, ni los estafadores
heredarán el reino de Dios.
1 Corintios 6 v 9-10, ESV
En estos versículos, Pablo está describiendo diferentes tipos de personas que (a
menos que se arrepientan) serán excluidas del reino de Dios. Cuatro tipos se
relacionan con el pecado sexual y dos específicamente con el comportamiento
homosexual. La ESV toma estos últimos y los junta como"Hombres que practican la
homosexualidad", mientras que la NVI los traduce como “Prostitutas y delincuentes
homosexuales”.
Hay mucho en juego: Pablo está dando ejemplos de personas que no estarán en el
cielo. Necesitamos asegurarnos de que entendemos exactamente de qué está hablando.

El primero de los dos términos relacionados con la homosexualidad es malakoi, que

literalmente significa aquellos que son "suaves". En la literatura clásica podría usarse como
un término peyorativo para los hombres afeminados; para el compañero pasivo más joven
en una relación pederasta (hombre-niño); o para referirse a prostitutas masculinas (de ahí la
traducción de la NVI). En 1 Corintios 6malakoi viene en una lista que describe formas
generales de pecado sexual, y el contexto sugiere que lo más probable es que Pablo lo esté
usando de una manera amplia para referirse a las parejas pasivas en las relaciones
homosexuales.

Esto también encaja con la pareja de Paul malakoi con el segundo término que usa.
Arsenokoitai es un compuesto de "masculino" (arsen) y "coito" (koites,
literalmente "cama"). Estas son las dos palabras que se usan en la traducción
griega de Levítico 18: 22 y 20: 13, lo que sugiere que Pablo se está refiriendo a
esos dos pasajes.
Arsenokoitai, entonces, es un término general para el sexo entre personas del mismo sexo, y su
emparejamiento con malakoi indica que Pablo se está dirigiendo tanto a los socios activos como
pasivos en el sexo homosexual.

Entonces, ¿qué significa todo esto para nuestra comprensión de la homosexualidad?

El pecado homosexual es grave. Pablo dice que el homosexual activo e

impenitente (como todos los injustos) no entrará en el reino de Dios. Ésta es
una verdad muy cruda.
Pablo también les recuerda a sus lectores que no se dejen engañar en este punto. Él
asume que habrá quienes nieguen esta enseñanza y argumentan que algunas formas
de conducta homosexual son aceptables para Dios. Pero Pablo es claro: la conducta
homosexual lleva a la gente a la destrucción. Enseñar de otra manera (como
 número de líderes supuestamente cristianos lamentablemente lo hacen) es equivalente a enviar a la
gente al infierno. Este es un tema del evangelio (vea el recuadro en la página 69).

El pecado homosexual no es único. La lista de Pablo incluye otras formas de pecado

sexual (inmoralidad sexual y adulterio) e incluye formas de pecado no sexuales
(embriaguez y robo, por ejemplo). El pecado homosexual es increíblemente grave, pero
no es el único que lo es. Es malvado, pero también lo es la codicia. Dios juzgará a los que
se entreguen a ella. Pero también juzgará a los ladrones.

Así que nunca debemos dar a entender que la homosexualidad es el pecado de

nuestra época. Si queremos ser fieles a las Escrituras, también debemos predicar contra
el robo, la codicia, la borrachera, las injurias y defraudar a otros, muchos de los cuales
también se trivializan en la sociedad occidental, y todos los cuales también caracterizan a
los injustos. Pero también hay una maravillosa promesa en este pasaje:

El pecado homosexual no es ineludible

Pablo continúa en el versículo 11:

Y eso es lo que eran algunos de ustedes. Pero fuiste lavado, fuiste

santificado, fuiste justificado en el nombre del Señor Jesucristo y por el
Espíritu de nuestro Dios.
1 Corintios 6 v 11
Estas formas de comportamiento no son apropiadas para los cristianos corintios
precisamente porque ya no son quienes son. Algunos de ellos claramente habían
sido homosexuales activos. Una vez vivieron de esta manera.Pero no más.
Han sido lavados, santificados y justificados; perdonados, limpiados de sus
pecados y apartados para Dios. Tienen una nueva posición e identidad
ante él.
Por muy arraigada que esté en el comportamiento de alguien, la conducta
homosexual no es ineludible. Es posible que alguien que lleva un estilo de vida gay
practicante sea renovado por Dios. Las tentaciones y los sentimientos pueden
persistir. El hecho de que Pablo advierta a sus lectores que no vuelvan a su estilo de
vida anterior sugiere que todavía hay algún deseo de hacerlo. Pero en Cristo ya no
somos quienes éramos. Aquellos que han salido de un estilo de vida gay activo
necesitan entender cómo verse a sí mismos. Lo que nos definió entonces ya no nos
define ahora.

5. 1 Timoteo 1 v 8-10
La ley no es para los justos, sino para los rebeldes y desobedientes,
para los impíos y pecadores, para los impíos y profanos,
 por los que golpean a sus padres y madres, por los asesinos, los sexualmente
inmorales, los hombres que practican la homosexualidad, los esclavizadores, los
mentirosos, los perjuros y todo lo que sea contrario a la sana doctrina.
1 timoteo 1 v 9-10

Pablo usa nuevamente el término arsenokoitaitraducido por la ESV como "Hombres que
practican la homosexualidad" y por la NIV como "Pervertidos") como término general para
todas las formas de conducta homosexual. Además, al igual que 1 Corintios, el sexo entre
personas del mismo sexo se menciona entre otros pecados de gran alcance, tanto no
sexuales como sexuales.

Estas formas de comportamiento caracterizan a aquellos que no son “justos” y

para quienes se dio la ley, con el fin de traer convicción de pecado y la necesidad de
misericordia. Todas estas prácticas contradicen la “sana doctrina” y el evangelio. No
se ajustan a la vida que los cristianos deben llevar ahora. Van contra la corriente de
la nueva identidad que tenemos en Cristo.

Este habrá sido un capítulo difícil de leer para muchos de nosotros. ¡No fue un
capítulo fácil de escribir! En cada caso en que la Biblia se refiere directamente al
comportamiento homosexual es para condenarlo. La enseñanza constante de la
Biblia es clara: Dios prohíbe la actividad homosexual. Dado lo que dice la Biblia sobre
el propósito de Dios del sexo y el matrimonio, esto no debería sorprendernos.

De hecho, la situación es peor de lo que muchos piensan. Dios se opone a toda

actividad sexual fuera del matrimonio heterosexual. No es que la Biblia se oponga a
toda actividad homosexual, sino que aprueba todos y cada uno de los actos sexuales
entre personas heterosexuales.

Pero para aquellos que experimentan sentimientos homosexuales por sí mismos, o para
aquellos que están cerca de personas que los experimentan, estas enseñanzas en la Biblia pueden
ser realmente muy difíciles. Y puede resultar particularmente difícil para aquellos de nosotros que
somos cristianos y, sin embargo, nos encontramos experimentando SSA. ¿Qué significa eso para
nosotros? ¿Estos sentimientos nos descartan como cristianos?

La respuesta, maravillosamente, es "¡no!" Averigüemos por qué en el próximo capítulo.

Seguramente una pareja del mismo sexo está bien si es comprometida

y fiel.

Uno de los argumentos comúnmente formulados hoy en día a favor de las parejas del mismo
sexo es que lo que seguramente debe contar por encima de todo es la fidelidad y
compromiso. ¿No debería ser la fidelidad dentro de una relación lo que determina su
bondad moral en lugar del género de quienes están involucrados en ella? Un estilo
de vida homosexual promiscuo con múltiples parejas y aventuras de una noche
puede estar mal, pero dos personas que se aman y son fieles a cualquier promesa
que hayan hecho, ¿seguro que eso está bien?

Puede parecer un argumento convincente, y es cada vez más común encontrar

cristianos que permiten este tipo de expresión de la práctica homosexual. Pero es
necesario decir una serie de cosas importantes en respuesta.

En 1 Corintios 5, Pablo reprende a la iglesia de Corinto por aceptar una relación

ilícita. Aman está en una relación con la esposa de su padre, probablemente su
madrastra, un arreglo expresamente prohibido en Levítico 18. Paul está
consternado. Incluso los paganos en la sociedad de Corinto no permitirían tal
cosa (1 Corintios 5 v 1), y sin embargo, aquí está sucediendo a plena vista entre el
pueblo de Dios.
La respuesta de Pablo a esta situación es instructiva, tanto por lo que
no dice como por lo que dice. No hay duda de si la pareja en cuestión
se ama. Pablo no pregunta sobre su nivel de compromiso o si están
siendo fieles. Ese no es el problema. Si están o no en una relación
comprometida a largo plazo no viene al caso; el hecho es que está
mal y no debería estar sucediendo.
Paul no distingue entre relaciones ilícitas fieles y relaciones ilícitas derrochadoras,
como si las últimas estuvieran fuera de los límites, pero las primeras podrían
simplemente entrar con fuerza en virtud de su fidelidad. La constancia y la fidelidad
al pecar de ninguna manera disminuyen el pecado. Pablo pide que el miembro de la
iglesia en cuestión sea expulsado de la confraternidad y que toda la iglesia exprese
remordimiento por lo que ha sucedido (1 Corintios 5 v 2). La fidelidad demostrada en
una relación que de otro modo estaría prohibida no la hace menos pecaminosa.

En muchas áreas de la vida es posible demostrar buenas cualidades mientras se

hace algo mal. Un ladrón en una pandilla puede demostrar una lealtad
impecable a sus compañeros criminales durante el acto de robar: cuidándolos,
protegiéndolos del peligro, asegurándose de darles una generosa proporción de
las ganancias. Nada de esto disminuye en modo alguno la inmoralidad del acto;
simplemente significa que está siendo un ladrón "bueno" en lugar de un ladrón
"malo". Como hemos visto, la Escritura es clara en su prohibición de cualquier
actividad homosexual. La actividad fiel y comprometida no es más permisible
que la actividad promiscua e infiel.
Pero Jesús nunca menciona la homosexualidad, entonces, ¿cómo puede estar
mal?

A veces se dice que, dado que Jesús nunca mencionó la homosexualidad

directamente, no puede haber estado en contra. Pero aunque Jesús no menciona
directamente la homosexualidad, en su enseñanza sobre el pecado sexual sí la
aborda. Considera lo siguiente:

“Lo que sale de una persona es lo que la contamina. Porque es de adentro, del corazón de
una persona, de donde vienen los malos pensamientos: la inmoralidad sexual, el robo, el
asesinato, el adulterio, la codicia, la malicia, el engaño, la lascivia, la envidia, la calumnia, la
arrogancia y la insensatez. Todos estos males vienen de adentro y contaminan a la persona
'”.
San Marcos 7 v 20-23

Jesús dice que hay cosas que hacen que alguien sea impuro espiritualmente ante Dios.
En esta lista Jesús incluye (entre otras cosas) ejemplos de pecado sexual: adulterio,
lascivia e inmoralidad sexual. “Inmoralidad sexual” es la traducción de una palabra
griega, porneia (de la cual obtenemos la palabra “pornografía”), una especie de término
general para cualquier actividad sexual fuera del matrimonio. Esto se extiende más allá
de las relaciones sexuales para incluir cualquier actividad de naturaleza sexual. Ninguno
de los oyentes de Jesús habría dudado de que su referencia a la porneia incluía el
comportamiento homosexual.

Imagínese que en mi iglesia este domingo decido, en un momento de

generosidad impetuosa y poco característica, agradecer a todos los
asistentes ofreciéndoles un obsequio de £ 1,000. Todos en el edificio son
elegibles y solo necesitan venir a verme a la puerta. Ahora, si estás ahí
cuando hago esa promesa, estás incluido en ella. No he mencionado tu
nombre; No me he dirigido a ti directamente. Pero te he incluido. En sus
prohibiciones contra la inmoralidad sexual, Jesús no menciona la
homosexualidad, pero la incluye.
Es necesario señalar un punto más. Además de condenar el pecado sexual
fuera del matrimonio, Jesús indicó que la única alternativa piadosa al
matrimonio era el celibato. En Mateo 19, cuando Jesús describió el propósito
de Dios para el matrimonio humano, sus discípulos respondieron con
exasperación: “Si esta es la situación entre esposo y esposa, es mejor no
casarse” (Mateo 19, 10). Piensan que la enseñanza de Jesús es una píldora
amarga de tragar. Si el matrimonio es tan importante, piensan, tal vez sea
mejor alejarse de todo.
La respuesta de Jesús a ellos es significativa:

“No todos pueden aceptar esta palabra, solo aquellos a quienes

se les ha dado. Porque hay eunucos que nacieron de esa
manera, y hay eunucos que otros han hecho eunucos, y hay
quienes eligen vivir como eunucos por causa del reino de los
cielos. Quien pueda aceptar esto, debería aceptarlo ".
Mateo 19 v 11-12
Los eunucos eran los célibes de su época, y Jesús indica que su celibato podría ser el
resultado del nacimiento, la intervención humana o una decisión voluntaria de
renunciar al matrimonio. Cualquiera que sea su causa, que Jesús vaya allí justo
después de que sus discípulos se hayan resistido al compromiso y la seriedad del
matrimonio muestra que Jesús lo considera como la única alternativa.

Uno se casa o permanece soltero.

No existe una tercera posibilidad, ya sea de una pareja homosexual o de una pareja
heterosexual no casada. En lo que respecta a Jesús, las alternativas piadosas que
tenemos ante nosotros son el matrimonio (heterosexual) o el celibato.
Capítulo 3

La homosexualidad y el cristiano
Deberíamos esperar que varios cristianos experimenten formas de atracción hacia el
mismo sexo. Vivimos en un mundo caído. La creación ha sido afectada por nuestro
pecado. Ha estado sujeto a frustración (Romanos 8 v 20). Hay enfermedad. Hay
desorden. Afecta a nuestros cuerpos, corazones y mentes también. Los cristianos
sucumben a los estragos de este orden caído tanto como cualquiera. Ser cristianos no
nos hace menos propensos a enfermarnos, enfrentarnos a una tragedia o experimentar
inseguridad. No es anticristiano experimentar atracción por personas del mismo sexo
como tampoco es anticristiano enfermarse. Lo que nos distingue como cristianos no es
que nunca experimentemos tales cosas, sino cómo respondemos a ellas cuando las
experimentamos.

Entonces, ¿qué pasa con un cristiano que se siente atraído por personas
del mismo sexo? ¿Cómo deberían responder? Es necesario fomentar una
serie de cosas.

1. Ora
Los cristianos que experimentan atracción por personas del mismo sexo deben hablar con el
Señor al respecto. Es importante saber que es un tema del que podemos hablar con nuestro
Padre celestial. Los sentimientos homosexuales no nos excluyen de su presencia. El tema no
está fuera de los límites. Él no es menos nuestro Padre, y nosotros tampoco somos sus
amados hijos, porque podríamos experimentar algo como esto.

un. Podemos hablar con Dios sobre cualquier confusión y angustia que podamos estar sintiendo.

Es posible que no sepamos de dónde provienen esos sentimientos o qué podrían

significar para el futuro. Pero Dios nos conoce completamente. Podemos consolarnos
mucho con el hecho de que él tiene el control total y queen todas las cosasincluyendo
experiencias no deseadas como esta) está trabajando para nuestro bien. Él promete
darnos sabiduría cuando nos falte."Generosamente a todos sin criticar"
(Santiago 1 v 5). Él es la primera y mejor persona a quien acudir en caso de confusión y
angustia.

B. Podemos hablar con Dios sobre nuestras tentaciones.

Jesús nos enseñó a orar al Padre para que nos libere de la tentación
(Mateo 6 v 13). Puede ser útil articular y confesar en oración la naturaleza
específica de nuestras tentaciones. Dios es quien nos da la fuerza
 para estar debajo de ellos. Además, Jesús mismo no es"Incapaz de sentir
simpatía por nuestras debilidades" pero “Ha sido tentado en todo, como
nosotros, pero no pecó” (Hebreos 4 v 15). Él sabe lo que es luchar contra la
tentación y puede sentir por nosotros cuando lo hacemos. Esto lo convierte en
un gran Salvador al que orar. Podemos acercarnos a él con mucha confianza. No
es distante ni falto de comprensión.
C. También podemos hablar con Dios sobre nuestros pecados.

Puede haber muchas formas en las que hemos sucumbido a la tentación homosexual en
nuestros pensamientos o acciones. Es correcto que tales pecados pesen mucho en
nuestro corazón.Pero debemos alegrarnos de que no sean imperdonables.
Cristo murió no menos por pecados como estos. El apóstol Juan nos recuerda que:
“Si confesamos nuestros pecados, [Dios] es fiel y justo y nos perdonará
nuestros pecados y nos limpiará de toda maldad” (1 Juan 1 v 9). Es una
bendición maravillosa saber que podemos hablar con Dios sobre las peores
cosas que hemos hecho y pensado.

2. Piense en ello de la manera correcta

Los cristianos necesitan pensar claramente sobre lo que estos sentimientos significan y lo que no
significan.

un. No te descalifican.
He conocido a muchos cristianos que han dicho que sus experiencias con la SSA
los han hecho sentir profunda y espiritualmente impuros. Algunos han hablado
de sentirse como "bienes dañados", como si fueran irreparables y siempre
desagradables a Dios.
Es fácil hacer comparaciones con quienes experimentan formas heterosexuales
de tentación; al menos están siendo tentados por una forma de expresión sexual
para la que fueron diseñados. Puede hacer que aquellos que luchan con SSA se
sientan doblemente avergonzados: no solo tentados por algo incorrecto, sino por
algo incorrecto.

Hay un reconocimiento correcto de que no es así como se supone que debemos

ser. Tales sentimientos brindan una maravillosa oportunidad de recordar el
Evangelio. Nunca podríamos ser aceptados por Dios sobre la base de nuestros
propios méritos y acciones. Nunca se ha tratado de que tengamos un valor
intrínseco o una limpieza espiritual natural. Todo lo contrario. Es sólo "en Cristo" que
cualquiera es justo a los ojos de Dios (2 Corintios 5 v 21). Y, maravillosamente,
ninguna experiencia de tentación, por incesante que parezca, es nunca una
amenaza para eso. En Cristo se nos presenta santos y sin mancha a los ojos de Dios
 (Colosenses 1 v 22).
B. No te definen.
Es fácil desproporcionar estos sentimientos de otra manera: pensar que
representan la suma total de nuestra identidad. Vivimos en una cultura donde la
sexualidad se equipara virtualmente con la identidad: “Tú eres tu sexualidad”. Se
nos anima a pensar que experimentar sentimientos homosexuales significa que
usted es, en su núcleo más fundamental, un homosexual.
Es muy fácil para los cristianos perder una perspectiva saludable sobre esto.
Podemos pensar que la SSA es el problema en nuestra vida cristiana, como si
ningún otro pecado o lucha mereciera una atención seria. Mi propia percepción
es que lucho con la codicia mucho más que con la tentación sexual. Pero la SSA
puede convertirse en el lente a través del cual se ve toda nuestra vida cristiana.
Sí, tiene un efecto significativo en una serie de áreas definidas de la vida, pero no
define su vida.
Como ya hemos visto, Pablo puede decir de hombres y mujeres cristianos que alguna
vez practicaron la homosexualidad: "Eso es lo que algunos de ustedes eran" (1 Corintios
6 v 11). Algunas de las tentaciones pueden permanecer, pero nuestra identidad ha
cambiado radicalmente.

También es importante comprender que la sexualidad no es necesariamente algo

estático. Nuestros deseos en una etapa de desarrollo pueden no ser los mismos en
otra. Quizás esto sea especialmente cierto en la pubertad, cuando la atracción sexual
puede cambiar considerablemente. He conocido a muchos hombres y mujeres que
han pasado por períodos de SSA en la adolescencia, solo para descubrir que sus
deseos eventualmente volvieron a la atracción del sexo opuesto. En el curso del
desarrollo de los eventos, una vez-SSA no necesariamente significa siempre-SSA; Es
aún más importante que alguien que experimenta el SSA por primera vez no asuma
que esta es ahora la “orientación” con la que debe vivir por el resto de su vida.

3. Busque el apoyo de los demás

Hablar con otras personas puede resultar muy difícil. Si solo hemos escuchado alguna vez
hablar de la homosexualidad en términos fuertemente negativos en la iglesia, entonces
podemos sentirnos incómodos al hablar con otros creyentes sobre nuestras propias
experiencias de sentimientos homosexuales.

A veces, los cristianos que experimentan la SSA sienten que están decepcionando
al lado al tener estos sentimientos, o que sus amigos cristianos e incluso los
pastores se sentirán decepcionados con ellos. Pero nunca defraudaremos a nadie
 cuando compartimos una lucha. De hecho, es un enorme privilegio tener a otro cristiano
que comparta una lucha personal con nosotros. ¡Todos somos débiles! Ningún cristiano
está diseñado para luchar solo. Todos los cristianos necesitan el apoyo de los demás.
Estamos llamados a“Sobrellevad los unos las cargas de los demás, y cumplid así la ley de
Cristo” (Gálatas 6 v 2).

¿Puede Dios cambiar nuestros deseos sexuales?

In one sense the answer to this loaded question is a very unambiguous

“Yes!” We know that in Christ we have the future hope of eternity in a new
creation where we will no longer experience the temptations and
consequences of sin. We will have renewed bodies. There will be no more
tears. All distress will have gone. There will be no more struggles with
sexuality. In eternity, we will be changed for ever to be like Christ. That is
the Christian’s sure hope.
But what of this life? Is it possible that God might change our sexual
desires before we reach the new creation?
I believe that change is possible, but a complete change of sexual
orientation is never promised in the Bible.
Los cristianos creen que Dios es soberano y, por lo tanto, puede sanarnos por
la obra de su Espíritu Santo, incluso en esta vida, de cualquier quebrantamiento
que hayamos experimentado, y también librarnos de cualquier patrón de
comportamiento negativo. No debe haber ninguna duda de que Diospuede
cambiar nuestros deseos sexuales, y hay numerosos relatos de cuándo lo ha
hecho.
Pienso en un buen amigo mío que ha visto cambiar drásticamente sus deseos
sexuales. De joven cristiano experimentó deseos exclusivamente homosexuales.
Fue cuando estaba comenzando a aceptar esto, y había comenzado a compartir
este hecho con familiares y amigos, que se encontró cambiando muy
rápidamente. Se enamoró de una mujer que conocía y ahora ha estado
felizmente casado con ella durante muchos años. Prácticamente no ha
experimentado sentimientos homosexuales desde entonces. No había estado
buscando activamente un cambio, pero llegó de todos modos. He leído y
escuchado de otros cristianos que han experimentado un nivel similar de cambio.
Pero esta no ha sido una experiencia universal. Hay cristianos que han orado
fervientemente por el cambio y lo han experimentado; hay otros que han rezado
con igual fervor pero no lo han hecho.
Debemos recordar que como cristianos vivimos entre dos realidades:
1. Cuando nos convertimos en cristianos somos renovados

"Si alguno está en Cristo, nueva criatura es"

2 Corintios 4 v 17, ESV
Se nos ha dado un nuevo yo (Efesios 4:24). El evangelio no solo ha traído un
cambioen nosotros, pero un cambio de nosotros. Hemos sido hechos nuevos o,
para usar el lenguaje de Jesús, hemos nacido de nuevo (Juan 3 v 3).

2. Pero aún no hemos recibido la plenitud de nuestra salvación como

pueblo de Dios.
Seguimos esperando nuestro "Adopción a la filiación" y "La redención de
nuestros cuerpos" (Romanos 8 v 23). Continuamos nuestra lucha con el pecado.
La tentación no cesa. La curación y liberación completas que anhelamos no se
prometen en este lado de la nueva creación.
Es por esta razón, estar atrapado entre estas dos realidades, por lo que Pablo dice
que gemimos (Romanos 8 v 23). Hemos probado nuestra filiación y, por lo tanto, la
anhelamos en toda su plenitud, como si nos dieran una cucharada de una comida
deliciosa que se está preparando para usted y se dé cuenta de inmediato de lo
hambriento que está y lo maravilloso que será sentarse a comer. la mesa y comer hasta
hartarse.

Hay momentos en los que Dios, con gracia, vierte parte de nuestra realidad futura
en nuestra experiencia actual y brinda sanación y liberación radicales. Tales
ocasiones demuestran dramáticamente el poder de Dios sobre otras fuerzas en
nuestras vidas. Damos gracias a Dios cuando esto sucede. Pero dios esademás
glorificados a medida que aprendemos a regocijarnos en él, incluso cuando la
aflicción permanece y el cambio parece ser muy lento, o cuando se siente como si
estuviéramos retrocediendo.

El cambio en esta vida es posible pero no prometido. Por lo tanto, no debemos

suponer que nunca podría suceder o que debe suceder. Debemos aprender a
confiar en el Dios que conoce el fin desde el principio y siempre hace precisamente
lo que es correcto.

¿Podemos realmente esperar que los cristianos solteros con atracción por el
mismo sexo permanezcan solteros?

Ya hemos visto que la Biblia prohíbe cualquier actividad sexual fuera del
matrimonio heterosexual. Será posible que algunos cristianos con SSA se
casen. Esto puede deberse a que experimentan una medida de cambio en su
 deseos sexuales, o porque descubren que, a pesar de la continua tentación
homosexual, pueden disfrutar de un matrimonio feliz con alguien del sexo
opuesto.
Pienso en varias mujeres y hombres que conozco para quienes este ha sido el
caso. Sus deseos siguen siendo predominantemente homosexuales, pero, sin
embargo, han encontrado una profunda compañía y suficiente química sexual (si no
exactamente “fuera de serie”) en un matrimonio heterosexual.

Pero, ¿qué pasa con los hermanos y hermanas para quienes el matrimonio no
será realista? ¿Se requiere soltería? ¿Es realista?
La respuesta de la Biblia a ambas preguntas es "sí".
Como ya se comentó, cuando Jesús habla de la alternativa al
matrimonio, no menciona la convivencia, las parejas del mismo sexo o
cualquier otro tipo de relación sexual. Menciona a los eunucos: el célibe
(Mateo 19: 10-12). Esta es la única alternativa piadosa al matrimonio
heterosexual. Mientras alguien no esté casado, debe abstenerse de la
actividad sexual. “Celibato” y “casto” son palabras algo anticuadas, pero
capturan el tipo de cosas de las que se habla: soltero y abstinencia sexual.
Soltería saludable
Pero, ¿es esto saludable? En nuestra época, donde se fomenta la libre expresión sexual,
¿podemos esperar que las personas solteras se abstengan de todo comportamiento
sexual?

En cierto sentido, la pregunta se nos responde inmediatamente si ya estamos

comprometidos con la autoridad de la Biblia. La palabra de Dios es clara. Si seguimos la
Biblia, debemos adherirnos a ella en este punto. No servirá pretender ser creyente en la
Biblia (la posición del cristianismo principal a lo largo de la historia de la iglesia), pero
luego rechazar enseñanzas particulares a nuestra propia discreción. Eso nos haría a
nosotros, y no a Dios, decidir qué es la verdad.

La Biblia nos dice los aspectos positivos de la soltería. Puede haber diferentes
razones por las que alguien estaría soltero a largo plazo (como el mismo Jesús
reconoce con los eunucos en Mateo 19), pero en cada caso puede ser un medio de
bendición, tanto para nosotros como para los demás.

Pablo habla de ser soltero como un "regalo" de Dios (1 Corintios 7 v 7),

para ser comprendido junto con el don de estar casado. La soltería no es solo
la ausencia del matrimonio, sino que es algo bueno y bendito en sí mismo.
Cada estado (casado y soltero) tiene sus propios altibajos, oportunidades y
desafíos, dolores y alegrías.
 La Biblia es muy positiva sobre la soltería. Jesús mismo era soltero,
y esto es muy significativo. Fue la persona más plenamente humana y completa que
jamás haya existido. Su soltería de ninguna manera disminuyó su humanidad. No era
menos persona para eso. Nadie es. El matrimonio, a pesar de todas sus bendiciones, no
es intrínseco a la plenitud y la realización plena como persona.

La soltería tiene ciertas ventajas. Pablo dice lo que es obvio: que el

Una persona soltera se libra de ciertos “problemas en esta vida” (1 Corintios 7 v 28). La
vida conyugal y familiar puede ser difícil, a veces increíblemente difícil. Hay muchas
responsabilidades que agotan el tiempo y la energía para un cristiano casado y sus
padres.

Como pastor, paso mucho tiempo con una variedad de familias, tanto dentro
como fuera de la iglesia. A veces me pone melancólico: participar en un juego
familiar, ayudar a los niños con la tarea, tener al bebé recién nacido durmiendo
profundamente en mi hombro. Puedo encontrarme añorando una familia propia.

¡Pero en otras ocasiones ocurre exactamente lo contrario! Entro desprevenido por

la puerta principal solo para descubrir que la Tercera Guerra Mundial ha estallado en
la casa. Hay gritos, desorden y lágrimas calientes que se derraman. Me siento tenso
e incómodo con solo estar allí. Intento calcular cuánto tiempo puedo quedarme
antes de que parezca de mala educación irme. (Doce minutos está bien,
especialmente si puedes decirles que vas a visitar a otra persona en crisis).

¡En esos momentos estoy tranquilamente agradecido por el don de la soltería!

La soltería también brinda oportunidades especiales. La persona soltera,

Pablo dice, está menos dividido en su devoción a Dios (1 Corintios 7 v 32-35). En
toda la complejidad de la vida familiar, el aspecto de la devoción al Señor no
siempre es sencillo: uno se ve atraído en muchas direcciones diferentes a la vez.
Pero para un solo cristiano, podría ser mucho más claro. El servicio y el
ministerio se pueden abordar de todo corazón.
Las personas solteras a menudo tienen una mayor capacidad para la amistad, una
mayor flexibilidad de estilo de vida y son libres de servir en una mayor variedad de
ministerios que los que podrían tener sus amigos casados. Como hombre soltero,
estoy agradecido de haber podido dejar todo para pasar tiempo con amigos muy
necesitados. Ha significado muchísimo para mí poder hacer eso, y no hubiera sido
tan fácil si estuviera casada. También estoy agradecido por la amplia gama de
buenas amistades que he podido cultivar. Es un privilegio estar involucrado en la
vida de muchas otras personas de esta manera.
La bendición de la soltería
Aquellos de nosotros que somos solteros debemos aprovechar al máximo las
oportunidades que brinda la soltería para profundizar y expresar nuestra devoción a
Dios. Lejos de ser un grillete, la soltería puede ser una bendición maravillosa, tanto
para nosotros como para los demás. Para aquellos que son solteros a largo plazo,
los desafíos y oportunidades cambiarán con el tiempo. La soltería a los 20 es una
experiencia muy diferente a la soltería a los 50. Algunas cosas se pondrán más
difíciles; otros se volverán más fáciles. El tipo de apoyo que necesitaremos de los
demás, y el tipo de apoyo que podemos ser para los demás, podría cambiar
considerablemente a lo largo de los años.

The history of the church is filled with lifelong singles who have been an
enormous blessing to God’s people and the wider world. Some through
missionary activity, others through church ministry, and others through
faithful friendship and support to others. What an honour to be used in such
a way.

What are the main struggles for a homosexual Christian?

Different people struggle in different ways. Not all the struggles of a
Christian with SSA are unique to those wrestling with this issue. But the
following are often mentioned as particular difficulties for those battling
with homosexual feelings.
Loneliness: Si bien a menudo hay eventos y grupos de la iglesia que las personas solteras pueden
disfrutar, la vida social de una iglesia a menudo puede sentirse como si estuviera estructurada en torno
a parejas y familias. Las personas solteras pueden sentirse un poco como piezas de repuesto,
especialmente si se encuentran en una etapa de la vida en la que la mayoría de sus compañeros se han
casado.

A algunos les resulta difícil saber qué hacer con las vacaciones; la gente tiende
a irse con sus familias o con otras parejas y familias. Pienso en un hermano
cristiano que a menudo se encuentra agotado debido al exceso de trabajo, pero
dice que trabaja demasiado porque es demasiado doloroso pensar en tener que
pasar tiempo libre solo.
Es más fácil llenar el día con trabajo y ministerio. Dice que teme que otros
le pregunten cuáles son sus planes para las vacaciones. Para otros, la
dificultad es la experiencia de volver a casa todos los días a una casa vacía. No
ser la persona principal en la vida de otra persona o tener a alguien que
piense en ti de una manera especial. Como escuché a una hermana cristiana
decir:"¡Solo quiero ser el primero para alguien!" Otros han dicho que temen su
 cumpleaños, por la ausencia de alguien que los haga sentir
especiales.
Esto a menudo está relacionado con aislamiento. Los cristianos solteros a menudo
extrañan el compañerismo: tener personas con las que “no hacer nada”. Uno de los
obsequios más amables que recibí fue de una familia a la que visitaba con bastante
frecuencia. Estaba a punto de irme y como regalo de despedida me dieron una pequeña
caja envuelta. Lo que había dentro no era ni grande ni caro y, sin embargo, significaba
mucho para mí: una llave de repuesto para su casa. Fue una afirmación maravillosa.

Tentación sexual: La tentación sexual de un tipo u otro es una lucha para la

mayoría de los cristianos y una lucha particular para muchos. Experimentar la SSA
no hace que la tentación sexual sea más o menos pronunciada que para cualquier
otra persona. Pero puede ser un asunto difícil, especialmente si no hay nadie con
quien hablar. Cualquier batalla que se enfrente de forma aislada es más difícil.

Experimentar la SSA no significa necesariamente que te sentirás atraído por todas las
personas del mismo género con las que te encuentres, del mismo modo que las
personas heterosexuales no se sienten atraídas por todos los que conocen. Pero puede
haber momentos de profunda atracción por amigos en particular.

Para algunos, la atracción es más emocional que física. Conozco a varias personas
con SSA que luchan con una dependencia emocional poco saludable de los demás.
Puede ser angustioso cuando una gran amistad comienza a convertirse en objeto de
un anhelo intenso y no deseado. Un amigo describió la experiencia como tomar
“heroína de la amistad”: encontrarse de repente “drogado” cuando un amigo en
particular lo afirma, y luego sentir una abrumadora sensación de ausencia cuando
está separado de ellos. No hace falta decir que en esos momentos es vital contar con
otras personas que ayuden, apoyen y hablen al respecto.

¿Cómo puede esto ser parte de los propósitos de Dios?

La Biblia nos asegura que: "En todas las cosas, Dios obra para el bien de los
que le aman" (Romanos 8 v 28). Esas "todas las cosas" incluyen las tendencias
pecaminosas con las que nos encontramos luchando, e incluso los errores
que cometemos en relación con ellas. “Todas las cosas” incluye cosas que no
estarían aquí si no fuera por la caída, y que no estarán presentes en la nueva
creación, pero que en el aquí y ahora Dios puede usar para traer el bien. Paul
no es vago sobre cómo se ve esta bondad. Nuestro bien es
nuestro llegar a ser como Jesús:

Y sabemos que en todas las cosas Dios obra para el bien de los que lo aman, los
que conforme a su propósito han sido llamados. Porque a los que antes conoció,
también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo,
para que él sea el primogénito entre muchos hermanos y hermanas.
Romanos 8 v 28-29

El buen plan de Dios es que haya una gran multitud de personas como Cristo. Este es el
bien en el que está presionando todas las cosas. Es un gran consuelo para un cristiano
que lucha con una SSA no deseada saber que en las manos de Dios, tales luchas pueden
convertirse en un medio de la gracia de Dios.

Paul sabía algo de esto por su propia experiencia. En 2 Corintios 12

habla de llevar un "aguijón en la carne":
Por lo tanto, para evitar que me envanezca, se me dio un aguijón en
la carne, un mensajero de Satanás, para que me atormentara. Tres
veces le rogué al Señor que me lo quitara. Pero él me dijo: "Bástate
mi gracia, porque mi poder se perfecciona en la debilidad".
2 Corintios 12 v 7-9
Pablo no nos dice exactamente qué era este "aguijón". Puede haber sido
una enfermedad crónica, una forma recurrente de tentación o quizás un
individuo difícil. No lo sabemos. Pero nos dice que fue insoportable. Él
"suplicó" que se lo quitara.
También habla de su origen. Fue de Dios, fue "dado" para evitar que Pablo se
volviera engreído. Y fue a Dios a quien Pablo se volvió para suplicar que lo
quitaran. Sin embargo, Pablo también lo describe como "un mensajero de
Satanás", cuyo propósito era "atormentar". Claramente, en sí mismo no era algo
bueno. Y, sin embargo, el propósito de Dios era que permaneciera en la vida de
Pablo y que la bondad viniera de ella. La voluntad de Dios para él era algo más
grande incluso que el alivio de este tormento: una apreciación de la suficiencia
total de la gracia de Dios.
Tales pasajes brindan un gran aliento a quienes luchan con SSA. Para algunos, la
batalla puede resultar sumamente dolorosa. Para algunos, puede durar muchos
años. Pero en los propósitos de Dios, no es una experiencia en vano. A través de ella
podemos llegar a ser más parecidos a Cristo y poder captar mejor las vastas
dimensiones de su gracia. No hay nada mejor para nosotros que eso. Entonces, una
“victoria” para los cristianos que luchan contra la SSA no es que las tentaciones
desaparezcan, sino que en el calor de ellas, Jesús sería cada vez más apreciado.
 Luchar con los sentimientos homosexuales es solo eso: una lucha. Pero
muchos cristianos que conozco pueden dar testimonio de cómo Dios ha sacado
cosas buenas de sus experiencias. Algunos han dicho que el Señor los ha hecho
más compasivos y sensibles de lo que hubieran sido de otra manera. Otros
hablan de las oportunidades ministeriales que les ha brindado y de cómo han
podido apoyar y alentar a otros que conocen que están tratando de lidiar con la
SSA. Algunos han tenido la oportunidad de compartir su fe con partes de la
comunidad gay que serían inalcanzables mediante el testimonio convencional de
la iglesia. Pero quizás sobre todo puedan decir cómo estas luchas, con todo el
desorden y la inseguridad que las acompañan, han llevado a una apreciación
más profunda de lo insondablemente bueno que es Dios.

¿No estamos simplemente eligiendo y eligiendo qué leyes del Antiguo

Testamento se aplican?

Y el cerdo, aunque tiene la pezuña partida, no rumia; es

inmundo para ti.
Levítico 11 v 7
No use ropa de lana y lino entrelazados.
Deuteronomio 22 v 11

No tenga relaciones sexuales con un hombre como lo hace con una mujer; eso
es detestable.
Levítico 18 v 22
Parece inconsistente por parte de los cristianos oponerse a la homosexualidad
ignorando muchas otras reglas de la Biblia con respecto a asuntos como la dieta y la
ropa que vestimos. En la superficie, parece un argumento muy fuerte. Acabo de comer
carne de cerdo para el almuerzo y escribo esto mientras uso una camisa hecha de fibras
mixtas; Ambas cosas le fueron prohibidas al pueblo de Dios en el Antiguo Testamento.

El problema con esta objeción es que asume que los cristianos tienen exactamente
el mismo enfoque para cada parte de la ley del Antiguo Testamento. De hecho, la
visión cristiana apropiada del Antiguo Testamento es un poco más matizada que eso.

El Antiguo Testamento no es un paisaje llano. No es solo una serie de

instrucciones y reglamentos, cada uno de los cuales es igualmente vinculante.
Tiene una forma particular, una forma cuyos contornos, énfasis y prioridades son
resumido y completado por Jesús mismo, quien dijo:

“No penséis que he venido a abolir la Ley o los Profetas; No he

venido a abolirlos, sino a cumplirlos ”.
Mateo 5 v 17
Jesús no ha venido a descartar la ley como una tontería de una época pasada, ni a
hacerla cumplir y vigilarla. Tampoco ha venido a cumplir solo algunas partes,
examinando la pila con un par de pinzas y escogiendo algún mandamiento ocasional
que aún podría funcionar para nosotros. Lo que Jesús vino a hacer con la ley, lo hizo
con todo. Pero a medida que seguimos la vida y el ministerio de Jesús, se hace
evidente que él cumple con los diversos elementos de la ley de diversas maneras.

Jesús puso fin a las leyes de limpieza y alimentación. Declaró todos los
alimentos limpios (Marcos 7 v 19, reiterado en Hechos 10 v 9-16). Tocó
leprosos y cadáveres, y al hacerlo no quedó inmundo.
Habló de su cuerpo como el verdadero Templo y de su muerte como el máximo
sacrificio por el pecado (Juan 2 v 21, Marcos 14 v 36). Su muerte nos abrió el camino
para acercarnos a Dios, haciendo obsoletas las regulaciones del Antiguo Testamento
sobre el Templo y su sistema de sacrificios.

Jesús rehizo al pueblo de Dios. En el Antiguo Testamento eran un estado-nación. En el

Nuevo, son una iglesia universal incorporada en numerosas reuniones locales alrededor
del mundo y sujeta a las leyes de los gobiernos seculares. Por lo tanto, las leyes del
Antiguo Testamento relacionadas con la vida cívica del pueblo de Dios (como exigir la
pena de muerte por pecados graves) ya no se aplican a los creyentes de la misma
manera.

A través de su vida sin pecado, Jesús encarnó plenamente todos los requisitos
morales de la ley. Mediante la unión con él, "el justo requisito de la ley se cumplirá
plenamente en nosotros" mientras vivimos por el poder de su Espíritu (Romanos 8 v.
4). De esta manera podemos vivir vidas de amor, que es precisamente a lo que
apuntaban las leyes morales del AT (Romanos 13 v 8). Con el fin de desentrañar lo
que significa para nosotros vivir en amor, muchos de los mandamientos morales del
Antiguo Testamento se reafirman en el Nuevo, incluidos los relacionados con la ética
sexual.

Timothy Keller lo resume claramente: En resumen, la venida de Cristo cambió la

forma en que adoramos, pero no la forma en que vivimos. La ley moral describe el
propio carácter de Dios: su integridad, amor y fidelidad. Y así todo lo que dice el
Antiguo Testamento sobre amar al prójimo, cuidar a los pobres, generosidad
con nuestras posesiones, relaciones sociales y el compromiso con nuestra familia
sigue vigente. El Nuevo Testamento continúa prohibiendo matar o cometer
adulterio, y toda la ética sexual del Antiguo Testamento se reafirma a lo largo del
Nuevo Testamento (Mateo 5 v 27-30; 1 Corintios 6 v 9-20; 1 Timoteo 1 v 8- 11). Si el
Nuevo Testamento ha reafirmado un mandamiento, entonces todavía está vigente
para nosotros hoy.[1]
No honramos todos los textos del Antiguo Testamento de la misma manera.
Seguimos el ejemplo de Jesús. Es por lo que él afirmó que lograría con su muerte
que no seguimos todas las leyes del Antiguo Testamento. Hacerlo sería socavar su
obra en la cruz. Entonces, la enseñanza del Antiguo Testamento sobre la ética
sexual, a través de su reafirmación en el Nuevo Testamento, todavía es vinculante
para los cristianos de hoy.
Capítulo 4

La homosexualidad y la iglesia

Cuando lo piensas, la iglesia es algo increíble. Claro, hay muchas imperfecciones

y limitaciones en las que podríamos enfocarnos. Y estos podrían ser
particularmente evidentes para algunos de nosotros que pensamos en el tema
de la homosexualidad. La iglesia no siempre ha sido una voz o un lugar de amor
y gracia.
Ha sido triste escuchar a algunos amigos que luchan con SSA de casos en los que
han sentido un profundo rechazo por parte de otros cristianos. Para muchas
iglesias, no hay duda de que hay lecciones que aprender y cosas de las que
arrepentirse.

Pero a pesar de todos sus defectos, la iglesia es notable. Escuche lo que dice Pablo:

La intención de Dios era que ahora, a través de la iglesia, la multiforme

sabiduría de Dios debe darse a conocer a los gobernantes y autoridades en los
reinos celestiales.
Efesios 3 v 10 [mi énfasis]
La iglesia en la tierra es la ayuda visual de Dios para el mundo espiritual de cómo es
él. Al señalar a su pueblo, Dios tiene la intención de mostrar a cada poder espiritual
que él es más sabio que cualquiera de ellos. Pero también es un gran estímulo para
nosotros. Nunca debemos subestimar el impacto que nuestras comunidades
cristianas pueden tener en los que nos rodean. Cada iglesia tiene una maravillosa
oportunidad de señalar al mundo que la rodea el carácter y la sabiduría suprema de
Dios. Esto no es menos cierto cuando se trata del área de la homosexualidad.

¿Qué debemos hacer si una pareja gay comienza a venir a nuestra iglesia?

Es una gran bendición y una gran oportunidad cuando las personas comienzan a
asistir a la iglesia por primera vez. A menos que ya sean cristianos que se hayan
mudado de otra área o de una iglesia diferente, existe una maravillosa oportunidad
para que la iglesia presente a estos recién llegados el evangelio de Jesús. No importa
si son una pareja gay, una pareja heterosexual o cualquier otra persona. Todos son
pecadores y todos necesitan la gracia de Dios.

A veces existe el peligro de que los cristianos piensen que una pareja gay
debe enfrentarse a su sexualidad casi en el momento en que caminan.
 a través de la puerta; que hay que hablar de esto de inmediato y que la pareja les
diga cuál es la enseñanza de la Biblia sobre todo el tema. Esto simplemente no es el
caso.

Una comparación puede ayudar. Si una pareja heterosexual llega a la

iglesia y, al darles la bienvenida y conversar con ellos, se hace evidente que
viven juntos pero no están casados, no sentiría necesario iniciar
inmediatamente una discusión sobre lo que dice la Biblia sobre las
deficiencias. de convivencia. Me gustaría hacer una nota mental de que este
será un tema para pensar con ellos a su debido tiempo, pero no es necesario
que lo analicen para que comiencen a participar regularmente en la vida de la
iglesia. Si lo mencionan, por supuesto que responderé. Pero mi preocupación
inicial es que sepan que son bienvenidos y que estamos contentos de
tenerlos con nosotros, y que estén bajo el sonido del evangelio a través del
ministerio regular de la iglesia.
Otra forma de decir esto es decir que prefiero comenzar en el centro y trabajar hacia
afuera, que comenzar en el borde y trabajar hacia adentro.

El centro es la muerte y resurrección de Cristo. Ahí es donde Dios se

revela más plenamente. Ahí es donde vemos su gloria más claramente
(Juan 17 v 1). También es donde Dios muestra más claramente su amor,
justicia, poder y sabiduría (Romanos 5 v 8; 3 v 25-26; 1 Corintios 1 v 18,
24). Esto es lo que más quiero que la gente sepa: que el Dios de la cruz
y la resurrección los derrote. Y, una vez atrapados por esto, ayudarlos a
pensar en lo que implicará confiar en este Dios, lo que tendrá que ser
entregado a él, incluida nuestra sexualidad desordenada.
Pero quiero que esa conversación tenga lugar en el contexto del evangelio, en
lugar de comenzar con su sexualidad y tratar de llegar desde allí al evangelio.
Necesitan saber quién es Jesús antes de recibir lo que él requiere. No tiene mucho
sentido describir cómo vivir a la luz de la gracia de Dios si alguien aún no conoce la
gracia de Dios. Entonces, cuando una pareja gay comienza a venir a la iglesia, mi
prioridad para ellos es la misma que para cualquier otra persona: escuchar el
evangelio y experimentar la bienvenida de una comunidad cristiana.

¿Qué puede hacer la iglesia para apoyar a los cristianos que enfrentan este problema?

Hay varias cosas que las iglesias pueden hacer para ayudar a los cristianos con SSA:

1.Haga que sea fácil hablar sobre

Tanto los pastores como los miembros de la iglesia deben saber que la homosexualidad
no es solo un problema político sino personal, y que probablemente habrá algunos
 dentro de su propia familia de la iglesia para quienes es una lucha dolorosa. Cuando
surge el problema en la vida de la iglesia, se debe reconocer que este es un
problema con el que los cristianos también luchan, y que la iglesia debe estar lista y
equipada para caminar junto a esos hermanos y hermanas.

Muchos cristianos todavía hablan de la homosexualidad de manera hiriente y

peyorativa. He perdido la cuenta de las veces que escuché a cristianos (incluso algunos
en posiciones de liderazgo de la iglesia) usar frases como: "Eso es tan gay" para describir
algo que no les gusta. Tales comentarios solo harán que sus hermanos y hermanas
cristianos que luchan con SSA se sientan completamente incapaces de abrirse. Cuando
comencé a compartir mis propias experiencias con amigos en la iglesia, me sorprendió
la cantidad de cristianos maduros que sentían que debían disculparse por los
comentarios que habían hecho en el pasado sobre la homosexualidad, que ahora se
daban cuenta de que podían haber sido dolorosos.

La clave para ayudar a las personas a sentirse seguras al compartir los problemas de la
SSA es tener una cultura de apertura sobre las luchas y debilidades que experimentamos en
general en la vida cristiana. El pastor y escritor cristiano Timothy Keller ha dicho que las
iglesias deberían sentirse más como la sala de espera de un médico y menos como una sala
de espera para una entrevista de trabajo. En este último, todos intentamos parecer lo más
competentes e impresionantes que podamos. Las debilidades están enterradas y ocultas.
Pero en la sala de espera de un médico asumimos que todos están enfermos y necesitan
ayuda. Y esto está mucho más cerca de la realidad de lo que está sucediendo en la iglesia.

Por definición, los cristianos son débiles. Dependemos de la gracia y generosidad

de Dios. Somos los “pobres de espíritu” (Mateo 5 v 3). Es una marca de una iglesia
saludable que podamos hablar sobre estas cosas, por lo que debemos hacer todo lo
posible para fomentar una cultura de ser real sobre las cosas difíciles de la vida
cristiana.

Pero hay una advertencia: habiendo facilitado que alguien hable sobre sus luchas
sexuales, no debemos cometer el error de siempre hablando con ellos al respecto.
Es posible que de vez en cuando deban preguntarles cómo van las cosas, pero hacer
que esto sea lo principal o lo único de lo que hables con ellos puede resultar
problemático. Puede reforzar la idea falsa de que esto es lo que realmente son, y en
realidad puede pasar por alto otros temas sobre los que tal vez necesiten hablar
más. Puede que la sexualidad no sea su mayor batalla.

2. Honrar la soltería
Aquellos para quienes el matrimonio no es una perspectiva realista deben ser
afirmados en su llamado a la soltería. Nuestras becas deben defender y honrar
 la soltería como un regalo y tenga cuidado de no denigrarla sin saberlo. No se debe
pensar ni hablar de los solteros como cabos sueltos que necesitan ser atados. Tampoco
debemos pensar que todas las personas son solteras porque han sido demasiado
perezosas para buscar pareja para casarse.

Recuerdo haber conocido a otro pastor que, al enterarse de que estaba

soltero, insistió en que ya debería estar casado y procedió a delinear los pasos
inmediatos que tenía que tomar para rectificar esto. Fue muy franco y solo
retrocedió cuando rompí a llorar y le dije que estaba luchando contra la
homosexualidad. No es una admisión que debería haber tenido que hacer.
Debemos respetar que la soltería no es necesariamente una señal de que
alguien está posponiendo su crecimiento.
3. Recuerda que la iglesia es familia
Pablo se refiere repetidamente a la iglesia local como la “casa de
Dios” (por ejemplo, 1 Timoteo 3 v 15). Es la familia de Dios, y los cristianos
deben ser familia entre sí.
Por eso, Pablo anima a Timoteo a tratar a los hombres mayores como padres, “a los
jóvenes como hermanos, a las ancianas como madres ya las jóvenes como hermanas” (1
Timoteo 5: 1-2). La iglesia debe considerarse a sí misma como una familia inmediata. Las
familias nucleares dentro de la iglesia necesitan el aporte y la participación de la familia de la
iglesia en general; no están diseñados para ser autónomos. Aquellos que abren su vida
familiar a los demás encuentran que es una gran bendición bidireccional.

Los solteros pueden experimentar algunas de las alegrías de la vida

familiar; los niños se benefician de la influencia de otros cristianos mayores;
los padres reciben el apoyo de otros que los apoyan; y las familias en general
aprenden algo de lo que significa servir a Cristo al mirar hacia afuera como
familia.
4. Abordar los modelos bíblicos de masculinidad y feminidad, en lugar de los estereotipos
culturales.

Las batallas con la SSA a veces pueden estar relacionadas con una sensación de no
estar a la altura de las normas esperadas de cómo debe ser un hombre o una mujer.
Entonces, cuando la iglesia refuerza los estereotipos culturales superficiales, el
efecto puede empeorar esta sensación de aislamiento y de no estar a la altura.

Por ejemplo, dar a entender que se supone que a los hombres les gustan los deportes o
arreglar su propio coche, o que se supone que las mujeres disfrutan de la artesanía o sugerir
que querrán "hablar de todo", es tratar de cuestiones culturales en lugar de
 ideas bíblicas de cómo Dios nos ha hecho. De hecho, puede terminar pasando por alto
muchas formas en las que las personas están reflejando algunos de los aspectos bíblicos de
la masculinidad y la feminidad que la cultura pasa por alto.

5. Brindar un buen apoyo pastoral

El cuidado pastoral para aquellos con SSA no necesita estar estructurado, pero necesita
ser visible. Muchas iglesias ahora tienen grupos de apoyo para miembros que luchan
contra la SSA; otros brindan esquemas de tutoría o de compañeros de oración.

Aquellos con SSA necesitan saber que la iglesia está lista para apoyarlos y
ayudarlos, y que tiene personas con un corazón y una percepción particular para
participar en este ministerio. Es posible que haya problemas que deban
resolverse y pasajes de la Biblia que deban estudiarse y aplicarse con cuidado y
gentil determinación. Puede haber buenas amistades que deban cultivarse y la
responsabilidad debe establecerse, y será necesaria una comunidad a largo
plazo. Estas son todas las cosas que la iglesia local está en la mejor posición para
proporcionar.
Han pasado algunos años desde que comencé a decirles a mis amigos cristianos
cercanos que lucho con los sentimientos homosexuales. Fue un proceso largo y, en
cierto modo, bastante agotador emocionalmente. Pero fue una de las mejores cosas que
he hecho. El solo hecho de compartir algo tan personal con otra persona es una gran
confianza, y en prácticamente todos los casos fortaleció y profundizó la amistad. Los
amigos cercanos se han vuelto aún más cercanos. También descubrí que las personas se
sentían más capaces de abrirse conmigo sobre las cosas personales de sus propias
vidas, sobre la base de que yo había sido tan abierto con ellos. Como resultado, ha
habido momentos maravillosos de compañerismo.

Han pasado varios meses desde que compartí públicamente el tema de la

sexualidad con la familia de mi iglesia. Una vez más, ha sido una gran bendición
haberlo hecho. Ha habido una gran cantidad de apoyo: personas que preguntan
cómo pueden ayudarme y animarme en este tema, muchos dicen que están
orando por mí todos los días. Otros han dicho lo mucho que significa para ellos
que yo comparta algo como esto. También ha sido un gran estímulo para mí que
no parece haber definido cómo me ven los demás. Aparte de las expresiones de
amor y apoyo, el negocio volvió a la normalidad muy rápidamente.
Algunos cristianos (como muchos en mi propia iglesia) parecen saber instintivamente
cómo responder a sus compañeros cristianos que luchan contra la SSA. Pero lo mismo
no es necesariamente cierto cuando se trata de responder a aquellos fuera de la iglesia
que nos dicen que son homosexuales.
 Entonces, ¿cuál es la respuesta correcta? ¿Cómo pueden los cristianos ser sal y luz
para la sociedad en general en este tipo de temas? Este es el tema del capítulo final.

¿No pueden los cristianos simplemente estar de acuerdo en diferir en esto?

Hay cristianos e incluso líderes en las iglesias de hoy que argumentan que algunas formas de
actividad homosexual son aceptables para Dios, y muchos más argumentan junto a mí que
cualquier actividad de este tipo está prohibida por Dios. En nuestras iglesias y comunidades
cristianas más amplias podemos diferir en ciertos temas mientras mantenemos la comunión
en el evangelio. Entonces, ¿no es la homosexualidad un tema sobre el que los cristianos
pueden estar legítimamente en desacuerdo?

La Biblia admite desacuerdos sobre ciertos temas. En Romanos 14, Pablo habla
de “asuntos discutibles” y pide a sus lectores que se convenzan en su propia
mente de lo que piensan (Romanos 14 v 5). Pero Paul también argumenta que
hay otros temas que no son negociables; cuestiones en las que está en juego el
evangelio mismo. En 1 Corintios 15, recuerda a sus lectores los asuntos de
“primera importancia” que les había enseñado anteriormente y que estaban en
el corazón de su fe en el evangelio (1 Corintios 15: 1-11). ¿En qué categoría
encaja la homosexualidad? ¿Afecta el evangelio? Dos pasajes indican que la
homosexualidad es un tema del evangelio.
Como vimos anteriormente, Pablo habla de la práctica homosexual en el contexto de
advertir a sus lectores que los injustos no entrarán en el reino de Dios (1 Corintios 6
v 9). En esta categoría incluye a quienes practican la homosexualidad. Junto con
todos los que son injustos, esas personas se dirigen a la destrucción. Su única
esperanza es el evangelio, cuya realización incluirá una nueva identidad y el
arrepentimiento de su estilo de vida anterior. Negar esta verdad tiene enormes
consecuencias. Un líder de la iglesia que enseña que incluso ciertos tipos de
actividad homosexual están bien, en realidad está enviando a la gente a la
destrucción. No es el mismo orden de desacuerdo que tienen los cristianos sobre,
digamos, el bautismo o la práctica de ciertos dones espirituales. En el caso de la
práctica homosexual, el evangelio está en juego.

En Apocalipsis 2 v 20-21 Jesús reprende a la iglesia en Tiatira por su tolerancia

de un falso maestro: “Tengo esto contra ti: tolera a esa mujer Jezabel, que se
llama a sí misma una profeta. Con su enseñanza, induce a mis siervos a
cometer inmoralidades sexuales y a comer alimentos sacrificados a los ídolos.
Le he dado tiempo para que se arrepienta de su inmoralidad, pero es
reacio."
Es alguien cuya enseñanza lleva a otros en la iglesia al pecado sexual. Jesús promete
juicio sobre ella y cualquiera de sus seguidores que no se arrepienta (véase el vers.
22). Pero la responsabilidad no es solo de ellos. La iglesia, incluidos los muchos que
no la siguen, son reprendidos por tolerarla. De modo que no debemos tolerar en
nuestras iglesias a aquellos cuyas enseñanzas llevan a las personas al pecado sexual.
Deben ser confrontados, su ministerio prohibido y su enseñanza refutada. Este es un
asunto del evangelio. Si permitimos que esto sea una cuestión de desacuerdo
aceptable dentro de nuestra confraternidad, Jesús se lo reprochará. Algunas formas
de tolerancia son pecaminosas.
Capítulo 5

La homosexualidad y el mundo

El mensaje cristiano es la mejor noticia que cualquiera puede esperar escuchar. Se

trata de un Dios que es más perdonador y amoroso de lo que podríamos imaginar.
Es una noticia que los cristianos queremos que otros escuchen. Pero no siempre es
fácil compartir.

El mensaje del evangelio tiene una serie de aristas que a muchos les
resulta difícil escuchar. Y en estos días, uno de los bordes más afilados parece
ser lo que la Biblia enseña sobre la sexualidad. Ha llevado a algunos
cristianos a cambiar de opinión acerca de lo que dice la Biblia, para parecer
más complacientes y "relevantes" para el mundo exterior.
Y aunque podemos reconocer que esta no es una respuesta piadosa al
problema, muchos cristianos aún se sienten inseguros acerca de lo que debería
hacer y decir sobre este asunto. Todavía sentimos que el evangelio es para todos y que los
caminos de Dios son los mejores. Pero, ¿cómo podemos recomendar el pensamiento
cristiano sobre este tema al mundo que nos rodea?

Mi amigo no cristiano me acaba de decir que son homosexuales. ¿Cómo debo

responder?

Decirle a otra persona que eres gay normalmente es algo muy importante para alguien. Si la
persona a la que le están contando es cristiana, es probable que sea un asunto aún mayor.
Mucha gente asume que los cristianos son anti-homosexuales, y no es un gran salto de eso
pensar que los cristianos deben estar en contra de los homosexuales.

Entonces, lo primero que debes hacer es agradeceles por ser tan

abierto y confiarte algo tan personal. Es un privilegio que me digan esas
cosas.
También es importante asegurarles que sus temores de ser rechazados por
eres infundado. Saber que son homosexuales no debería significar que dejes de
gustarles o de ser su amigo. En aras de la divulgación completa, y especialmente si
te preguntan qué piensas al respecto, puedes señalar que los cristianos tienen una
visión diferente de los asuntos de la sexualidad que la cultura en general, y que
estarías feliz de conversar. sobre eso en algún momento. Pero puede que este no
sea el momento.

Escúchalos. Es bueno preguntarle a la gente un poco sobre sus experiencias de

 homosexualidad. ¿Cómo llegaron a darse cuenta de sí mismos? ¿Qué
tipo de reacciones han tenido de otras personas, sus amigos y
familiares? ¿Ha sido un momento difícil para ellos? ¿Están bien?
Necesitamos conocer su historia y sus altibajos.
Comprender más sus antecedentes y experiencia nos ayudará a saber cómo ser
un buen amigo para ellos. Es posible que necesiten que alguien los escuche de vez
en cuando, que sea un hombro en el que llorar o un amigo con quien puedan hablar
en confianza. ¿No sería genial si, de todas las personas, fuera a su amigo cristiano a
quien se sintieran más capaces de acercarse? Hablarnos sobre su sexualidad podría
ser una oportunidad para que la amistad se profundice en lugar de separarse. Y
tener un interés genuino es más probable que cualquier otra cosa para generar
preguntas sobre cómo pensamos acerca de estos asuntos como creyentes.

Escucharlos nos ayudará a saber cómo reza por ellos. Cualesquiera que sean sus
altibajos, por encima de todo, como cualquiera de nosotros, ellos más necesitan a
Cristo. Y mientras oramos para que él les revele su bondad, podemos orar por
nosotros mismos, para que nuestra amistad sea una expresión fiel de esa bondad.

¿Cuál es la mejor manera de compartir a Cristo con un amigo gay?

Debido a la expectativa que tendrán los amigos homosexuales sobre cómo los cristianos
les responderán, debemos hacer todo lo posible para hacerles saber que estamos
para ellos y no contra ellos. Esto implicará al menos tomarse un tiempo para
conocerlos bien y escuchar atentamente su historia. Necesitamos amarlos más
que sus amigos homosexuales, y debemos amarellos más de lo que aman su
homosexualidad (como ha dicho el líder cristiano Al Mohler). Solo entonces
podremos comenzar a señalar el mayor amor que Dios tiene por ellos.
En algún momento querrán saber qué hacemos, como cristianos, con la
homosexualidad. Necesitamos pensar detenidamente cómo explicar esto
de una manera que sea entendida y apreciada, y no simplemente a la
defensiva.
Tan importante como explicar las verdades particulares de la Biblia es explicar las
razones detrás de por qué las dice. Así que tendremos que hablar sobre cómo Dios no
puede bendecir, y de hecho prohíbe, la actividad homosexual, pero también queremos
mostrar por qué Dios tiene derecho a decir lo que debemos y no debemos hacer con
nuestros cuerpos, y cómo es que hemos llegado a ver la bondad de lo que dice.

Tendremos que explicar cómo el arrepentimiento para el homosexual practicante

 Implicará alejarse de un estilo de vida gay, pero también queremos mostrar cómo todos
nosotros, cuando venimos a Cristo, morimos a nosotros mismos para poder vivir una
nueva vida en él.

Queremos explicar cómo el único estilo de vida apropiado para aquellos para
quienes el matrimonio no será realista es la soltería casta, pero también
necesitaremos tener una visión de cómo todo el pueblo de Dios, casado y soltero
por igual, está comprometido con un esposo. , Cristo (2 Corintios 11 v 2); que todos
los que se unen a Cristo son uno con él en espíritu (1 Corintios 6 v 17), y que esta es
la realidad fundamental para todos los creyentes. La unión con Cristo para siempre
es a lo que apuntan los estados terrenales tanto del matrimonio como de la soltería.
Queremos que sepan que la lealtad a Cristo para una persona gay es tan costosa y
gloriosa como lo es para cualquier otra persona.

¿Cómo podemos ser un testimonio eficaz ante el mundo sobre este tema?

A medida que la cultura occidental apruebe cada vez más la homosexualidad, se

sentirá cada vez más como si los cristianos estuviéramos fracasando en nuestros
intentos de elogiar una visión cristiana de la sexualidad. Pero no debemos
desanimarnos.

La Biblia nos asegura que Cristo edificará su iglesia y que su reinado

aumentará para siempre (Mateo 16 v 18; Isaías 9 v 7). Este no es momento para
el pesimismo, y a medida que la sociedad se aleja cada vez más de sus amarres
cristianos, la iglesia tiene cada vez más oportunidades para modelar una
alternativa contracultural.
La clave de nuestro testimonio y credibilidad en este (o cualquier otro) tema es el calidad de
nuestra vida juntos, y el claridad de nuestro mensaje. Necesitamos tener claro
el Evangelio. Claro que es una buena noticia para todos. Que nadie está demasiado alejado para
disfrutarlo, o demasiado completo para necesitarlo. Necesitamos tener claro no solo que todos
somos pecadores, sino que todos somos pecadores sexuales. Ninguno de nosotros llega a esto
desde una posición de superioridad.

Con ese evangelio la claridad necesita venir credibilidad relacional. El Nuevo

Testamento a menudo conecta la eficacia de nuestro testimonio con la
autenticidad de nuestro amor mutuo. Jesús dijo una vez:

"Por esto todos sabrán que son mis discípulos, si aman a otro"

Juan 13 v 35

Pablo describe la iglesia de la siguiente manera:

 La casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y
fundamento de la verdad.
1 timoteo 3 v 15

La iglesia es la “columna de la verdad” porque es la salida de la verdad de Dios al

mundo. Es el medio de Dios para llevar su verdad a todas las personas. Pero también
es la familia de Dios, su "casa". Y para que la iglesia sea un pilar eficaz, debe ser una
familia eficaz. La reunión local del pueblo de Dios debe encarnar el evangelio en su
propia vida. Es la iglesia siendo iglesia en toda su plenitud bíblica lo que más
elogiará los caminos de Dios a la sociedad en general. El mandato de Jesús de que
sus seguidores "se amen unos a otros" no fue solo una ocurrencia tardía. Es una
parte clave de su estrategia para ganar un mundo de espectadores.

Jesús prometió que aquellos con cosas que dejar atrás y renunciar por él
recibirán cien veces más a cambio:

“En verdad les digo”, respondió Jesús, “nadie que me haya dejado su
hogar o hermanos o hermanas o madre o padre o hijos o campos para
mí y el evangelio dejará de recibir cien veces más en esta era presente:
hogares, hermanos, hermanas, madres, hijos y campos, junto con las
persecuciones, y en la era venidera la vida eterna ”.
San Marcos 10 v 28-30

El evangelio puede ser relativamente costoso. Pero también es relacionalmente

generoso. Lo que dejamos atrás no se compara con lo que recibimos de Jesús. Es
difícil pasar por alto el hecho de que Jesús está hablando de la familia. Familia
cercana. No promete primos lejanos ni tíos abuelos, sino hermanos y madres.
Todo lo que tenemos lo tenemos para compartir unos con otros: tiempo,
recursos, afecto. Nosotros mismos. Esto, resulta, va a ser la demostración, en
esta vida, de que Jesús siempre vale la pena. Será la calidad de nuestra vida
comunitaria como iglesia, tanto como nuestra capacidad para hablar claramente
en la plaza pública, lo que mostrará más visiblemente a un mundo que observa
que la postura cristiana sobre la sexualidad es la más convincente.
Las palabras de Jesús nos dan a todos algo que hacer. Puede que no tengamos las
mejores celebridades, los portavoces más atractivos, los recursos más impresionantes o
los pensadores más aclamados, pero deberíamos tener las relaciones más maravillosas y
atractivas.
Conclusión
“Yo soy el pan de vida. El que a mí viene, nunca tendrá hambre,
y el que cree en mí, nunca tendrá sed ".
Juan 6 v 35

El pan no es algo de lo que tiendo a preocuparme. A unos pocos cientos de metros

de mi oficina hay tres supermercados y más de una docena de tiendas de
sándwiches. El pan está en todas partes y no puedo pensar en una sola ocasión en
toda mi vida en la que necesitaba un poco pero no pude conseguir ninguno.

En muchas partes del mundo hoy en día este no es el caso. Tampoco fue así en la
época de Jesús. El pan erala alimento básico. Esto no significa que todos fueran poco
imaginativos y simplemente decidieron comerlo todos los días. Significa que el pan
era lo principal de lo que tenían que vivir. Sin pan, la gente moría. No era un básico
aburrido. Era una vida esencial. Sin pan no significaba vida.

Cuando apreciamos esto, podemos comenzar a tener una idea de lo que Jesús está
diciendo cuando dice: “Yo soy el pan de vida”. No es un acompañamiento opcional que viene
con aceitunas, aceite y vinagre, para recoger antes de que llegue su “plato principal”. No,
Jesús dice que él es el elemento básico de la vida. Él es lo que necesitamos para vivir de
verdad. El pan mantiene nuestro cuerpo en funcionamiento, pero Jesús es lo que nuestra
alma necesita para vivir. Sin él somos cadáveres espirituales.

Jesús es el pan de vida es un concepto con el que estoy familiarizado como

cristiano durante muchos años. No recuerdo cuándo lo encontré por primera vez o
cuando pensé conscientemente en él por primera vez. Desde que soy cristiano,
siempre lo he sabido.

Pero es una verdad que se ha vuelto especialmente querida para mí al pensar

en el tema de la atracción por personas del mismo sexo. Antes, siempre lo había
leído como una de las cosas que es Jesús. El es la luz; él es el buen pastor; él es el
camino al Padre. Y es el pan de vida. Pero más recientemente ha comenzado a
darme cuenta de que Jesús no estáel pan de vida, pero eso Jesús es el pan de
vida. Él, y solo él, es el que satisface.
One of the features of my own experience has been a tendency towards
emotional over-dependency on particular friends. Over the years it has
happened a number of times. Things with a good friend can be chugging
along quite normally and quite happily, and then—almost out of the blue—I
can feel a deep tug towards them; a profound need to be around them, to
know their approval and affection. Left unchecked, this would quickly grow
and grow. And before I know it, this person has become very close to being
the centre of my life. It’s what the Bible calls idolatry, and it is unbearable. It
creates deep yearnings that cannot be fulfilled, and it can put a terrible
burden on the friendship.
Por eso, es un gran consuelo reflexionar sobre estas palabras de Jesús. Puedo
decirme a mí mismo, bajo su autoridad, que él, y ninguna otra persona, ningún otro
amigo, es el pan de vida. Y él es. Cuanto más vivo sobre esa base, más verdadero sé
que es. Puedo probarlo y sé que siempre lo probará. La vida es mucho, mucho mejor
cuando él está en el centro, y mucho, mucho peor cuando cualquiera o cualquier
otra cosa lo está.

Esta es, en última instancia, la promesa del evangelio. El gran regalo que Jesús nos da
es él mismo. Él no es el medio para ningún otro fin. No es que el pan de vida sea otra
cosa, y resulta que Jesús es quien lo dispensa. Él mismo es este pan. Es Jesús quien
satisface nuestras necesidades emocionales y espirituales más profundas. Él es el
premio, para todos nosotros, independientemente de nuestros problemas y
complejidades. Cualquiera que acuda a él encontrará plenitud de vida.

La invitación está ahí para todos. Y este regalo es tan precioso que no se puede decir
verdaderamente que Dios sea “anti” a cualquiera a quien se le ofrezca este maravilloso
regalo.

¿Qué debo hacer si un cristiano se me acerca?

A muchos cristianos les resulta difícil hablar abiertamente con otros sobre sus
luchas con la SSA. Si todavía lo están aceptando, puede existir el temor de que
hablar de él de alguna manera lo haga más real, como si el mero hecho de
hablar de él le diera una mayor presencia y significado.
A menudo también existe el temor de cómo podrían responder otros cristianos: que los
amigos se sientan incómodos y puedan distanciarse; que los líderes de la iglesia
pensarán que cualquiera que experimente tales sentimientos y tentaciones debe ser una
gran decepción; o que admitir tales cosas solo será decepcionar al lado. La batalla puede
sentirse lo suficientemente solitaria; la perspectiva de que otros puedan rechazarlo si lo
supieran puede ser suficiente para mantener a muchos cristianos en silencio sobre sus
luchas durante muchos años.

Todo esto es a modo de decir que quizás lo primero que debe hacer si un cristiano revela
alguna vez sus luchas personales con la sexualidad es para agradecerles. Va a
es casi seguro que haya sido un gran problema para ellos haber compartido esto
contigo. Es posible que se hayan estado mentalizando durante meses, llegando al punto
de plantearlo solo para reprimirlo y posponerlo. Que hayan llegado tan lejos y que
finalmente hayan hablado de ello, y que lo hayan hecho contigo, no es poca cosa. Usted
puede ser el primero o una de las pocas personas a las que se les ha dicho esto. Cada
vez que alguien comparte algo profundamente personal, es una señal de enorme
confianza. Reconozca eso. Agradeceles.

Déjelos respirar profundamente unas cuantas veces y asegúreles que el mundo

sigue girando, que usted todavía está allí y que no están a punto de estallar en
llamas.

Lo siguiente que debe hacer es escuchar-con cuidado. Las experiencias con SSA varían
enormemente. Los puntos de sensibilidad, los desencadenantes de la tentación o la
desesperación, los problemas que rodean y alimentan los sentimientos de atracción pueden
diferir enormemente de una persona a otra.

Si están felices de hablar, averigüe cómo están. Pregúnteles cuánto tiempo lo

han sabido; cómo ha sido; lo que los movió a decirte. Esto puede tomar algo
de tiempo. Pero le ayudará a tener una idea de dónde se encuentran con el
problema, cómo les afecta y cómo están respondiendo como cristianos. A
veces, las experiencias de la SSA son solo síntomas de problemas más
profundos de idolatría o inseguridad. A veces, hay un trasfondo de infelicidad
familiar. Otras veces no hay ninguna rima o razón obvia para los sentimientos.

El sondeo suave y la escucha atenta ayudarán a determinar qué tipo de sabiduría

y consejo pueden necesitar. El cristiano que lucha activamente con estos
sentimientos, se esfuerza por huir de la tentación, desea honrar a Cristo y
caminar fielmente con él; necesitará ánimo, oraciones y personas con las que
hablar de vez en cuando.
Es posible que otros no tengan claro las enseñanzas de la Biblia sobre el sexo y la sexualidad, y
necesitarán una instrucción suave. Algunos pueden estar en las profundidades de la
desesperación, imaginar que la presencia de estos sentimientos los pone espiritualmente más allá
de toda ayuda, o sentirse abrumados por la culpa de los pecados pasados en esta área. Bien
puede ser que necesiten un poco de orientación y ayuda de un ministerio cristiano o especializado
con más experiencia.