Ensayo Exegético

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GRAN BENDICIÓN PARA LOS QUE AMAN A DIOS; ENSAYO EXEGÉTICO DE

ROMANOS 8:28

MICHAEL STEVEN RODRÍGUEZ

GRIEGO II

CRISTIAN CARDENAS

SEMINARIO REFORMADO LATINOAMERICANO

JULIO DE 2022, MEDELLÍN


TABLA DE CONTENIDO

1. Certeza e identidad de los benefactores de esta bendición

a. Una certeza; “y sabemos”

b. De quiénes: “los que aman a Dios”

2. La bendición; “todas las cosas les ayudan para bien”

a. Explicación de la bendición

b. Condicional de la bendición; “conforme a su propósito”


INTRODUCCIÓN

Romanos es una carta del apóstol Pablo, que fue escrita a la iglesia que estaba

ubicada en Roma. Al juzgar por su contenido, es posible percatarse de que estos

creyentes de la iglesia de Roma estaban conformados por judíos y gentiles. Su género

gramatical es epistolar, y, como epístola, tiene los rasgos que caracterizan a una, tales

como; identificación del autor, saludo a sus remitentes, parte doctrinal o teórica, parte

práctica o aplicativa, y, salutaciones finales.

El texto que se estudiará en el presente ensayo está en la parte final del contenido

doctrinal de esta epístola, y manifiesta una gran bendición con la que cuenta el creyente.

Esta bendición es la hermosa verdad de que; todo cuanto le acontece, al que ama al

Señor, está siendo encaminado por Dios, para su bien, conforme a los propósitos divinos.

Para profundizar en este hermoso pasaje, se tendrán en cuenta dos puntos

solamente. En el primero se considerará la certeza de recibirse tal bendición y la

identidad de quiénes está dirigida dicha bendición, a saberse a los que aman a Dios. El

segundo tópico, abordará la bendición como tal, con una explicación y una condicional.
“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que
conforme a su propósito son llamados.” (Rom. 8:28)

οιδαµεν δε οτι τοις αγαπωσιν τον θεον παντα συνεργει εις αγαθον παντα συνεργει εις αγαθον
τοις κατα προθεσιν κλητοις ουσιν.1

CERTEZA E IDENTIDAD DE LOS BENEFACTORES DE ESTA BENDICIÓN

UNA CERTEZA: “Y SABEMOS”.

El verbo “οιδαµεν” (oidamen) está en perfecto activo, lo cual es importante tener


presente, pues su traducción más puntual sería “hemos sabido”, sin embargo, para continuar la
coherencia del pasaje la traducción “y sabemos” está en lo correcto. Desde esta consideración
“hemos sabido”, el apóstol está queriendo decir que es algo seguro, una certeza indiscutible, por
ello, el apóstol lo considera como un hecho ya sabido por él y por sus remitentes. Este aliento
viene como respuesta a la consideración del sufrimiento que el apóstol hace en el versículo 18
del mismo capítulo.

Pues, luego de ya haberles dado esperanza para los sufrimientos presentes al mirar al
futuro, ahora en este, les da ánimo al recordarles [puesto que les dice: “y sabemos o hemos
sabido”] que estas aflicciones les están ayudando para bien. Ahora, este verbo, que como se
había indicado antes, está en perfecto activo, indica la seguridad que hay de lo que va a decir a
continuación. Así lo expresa el comentarista del texto griego Samuel Pérez Millos: “Las
situaciones adversas son fácilmente superables cuando se tiene la certeza de cuanto Dios está
haciendo a favor de los suyos y cuanto ha hecho ya por ellos”.2

DE QUIÉNES: “LOS QUE AMAN A DIOS”

Como se observó previamente, el verbo con el que inicia este apartado, indica la
seguridad y la certeza con la que deberían aceptar este consuelo. Ahora, en este apartado, con las
palabras “los que aman a Dios”, se indica quienes son los que deberían tener esta seguridad.
Aquí, se hace una distinción importante, y es que; todas las cosas no ayudan para el bien de todas

1
Iglesia en Salta – Argentina, Nuevo Testamento; Interlineal Griego-Español (Salta; Argentina: Apoyo Bíblico,
2011), 387.
2
Samuel Pérez Millos, Comentario Exegético al Texto Griego del Nuevo Testamento (Barcelona, España: Clie,
2011), 653.
las personas, intencionalmente el apóstol está diciendo que a “los que aman a Dios”, está
haciendo una evidente distinción. Para darle más fuerza a la idea, se pondrá en las meditaciones
de un gran comentarista:

Este versículo supone un gran consuelo, pero es solo para un grupo bien definido: “los que
aman a Dios”; es decir, para los cristianos: aquellos con nuevos corazones y, por tanto,
nuevas inclinaciones en su interior nacidas por la obra del Espíritu Santo.3

Es muy importante considerar el estado en el que se encuentra el verbo compuesto

“αγαπωσιν” (agaposin), el verbo está en; presente-activo-indicativo, y, su caso, está en dativo.

Lo anterior, con el fin de saber lo que el autor quiere comunicar; está comunicando una forma de

vivir, esto indica, el presente activo en el que se encuentra el verbo, una condición presente de a

quienes se les está aplicando esta enseñanza. Esto manifiesta integridad entre la profesión de fe y

la vida cotidiana del profesante.

Este verbo, como es bien sabido, proviene del “agape”, y, traduce al español como: amor.

Para profundizar un poco con este respecto, es importante considerar lo que dice el diccionario

teológico de Kittel, acerca del concepto de amor manifestado en la teología hallada en los

escritos del apóstol Pablo:

Este amor implica elección, lo cual incluye tanto una ordenación pre temporal como un
llamamiento temporal. La comunidad elegida está en comunión con Dios, y Él la dota del
poder activo y apremiante del amor (Rom. 5:5) en cumplimiento de su propio propósito
primordial del amor.4

Así que, como hace mención el diccionario, este amor implica la elección soberana que

Dios hace de entre los hombres, y, también, su llamamiento a su debido tiempo. Esto es lo que

dice 1 Juan 4:19 “Nosotros amamos porque Él nos amó primero”. Y, es una condición que va

más allá, incluso, del profesante. Sintetizando un poco, los que aman a Dios; a los que se dirige

3
Roy Davey Jenkins, Romanos (Edimburgo; Reino Unido: Estandarte de la Verdad, 2012), 455.
4
Gerhard KIttel Y Gerhard Friedrich, Compendio del Diccionario Teológico, trad. de Geoffrey W. Bromiley (Grand
Rapids, MI: Desafío, 1973), 17.
esta bendición, fueron amados por Él primero, para ser más específicos, desde antes de la

fundación del mundo, claramente expresado en Efesios 1:4 y en Romanos 8:29.

En conclusión de este primer punto; es una certeza, algo tan real y verdadero, que la

bendición que se mencionará en el siguiente capítulo sea aplicada a los que conforme al

propósito de Dios han sido llamados, esto es, a los que Dios, desde antes de la fundación del

mundo, predestino en Cristo para darles vida eterna, aquellos de los que se dice:

Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a
la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.  Y a los que
predestinó, a estos también llamó; y a los que llamó, a estos también justificó; y a los que
justificó, a estos también glorificó. Romanos 8:29.

LA BENDICIÓN; “TODAS LAS COSAS LES AYUDAN A BIEN”

En el apartado anterior se abordó la certeza de la bendición que en el presente tópico se

piensa analizar, al tiempo que, se hizo mención de los benefactores de dicha bendición. Se

seguirá este orden porque es el orden del pasaje, así es como el apóstol Pablo lo plasmo y es así

cómo se abordará.

EXPLICACIÓN DE LA BENDICIÓN; “TODAS LAS COSAS LES AYUDAN A BIEN”

El pasaje es claro, Dios utiliza todas las cosas para el bien de sus escogidos. El verbo que

se traduce como “ayudan” del griego “συνεργει” denota la idea de trabajo, de cooperar con algo,

“referido a una acción que expresa el apoyo, la ayuda o el interés hacia otro”. 5 Bien hace la

mención el comentarista, al mencionar estos dos pasajes en donde se usa “συνεργει” (1 Cor.

16:16; 2 Cor. 6:1).6 En los dos pasajes el verbo es usado para denotar un trabajo conjunto, una

5
Millos, Comentario Exegético, 655.
6
A. T. Robertson, Comentario al Texto Griego del Nuevo Testamento, trad. de Santiago Escuain (Barcelona;
España: Clie, 2003), 403.
cooperación para alguna labor. Así que, todos los acontecimientos están ayudando activamente,

están cooperando con Dios para el bien de sus elegidos, esto es lo que se infiere también de la

doctrina del decreto divino; por cuanto todo lo que acontece está dentro del decreto divino y Dios

ha querido el bien de sus elegidos, no se puede menos que llegar a la conclusión del apóstol, de

que, todas las cosas obran para el bien de los que aman a Dios.

El siguiente aspecto importante de recalcar es el adjetivo “παντα” (todas las cosas). “El

adjetivo está en acusativo neutro plural que indica totalidad, de allí que se traduzca como todas

las cosas, en el sentido, de todo cuanto ocurra”. 7 Tener en cuenta el estado de este adjetivo es de

vital importancia, ya que en sí mismo abarca Todo, no hay algo que obre fuera de ello. Y, es

menester resaltar este dato, debido a que hay quienes todavía se cuestionan si en verdad Dios

está obrando para bien en ciertos casos o circunstancias donde no lo pareciera. Pues contemplar

el sentido de este adjetivo aleja la duda en cualquier posibilidad. Así lo expresa un comentarista:

De cualquier forma, “todas las cosas” tiene que incluir los sufrimientos del versículo 17 y
los gemidos del versículo 23. Así, todo lo que es negativo en esta vida se entiende como
con propósito positivo dentro de la ejecución del plan de Dios. Nada hay que esté fuera del
alcance dominante y desmedido de su providencia.8

Así pues, se analizaron los verbos que traducen ayudar y todas las cosas (συνεργει -

παντα), con el fin de dar una explicación de esta gran bendición. Por lo cual, ya se puede

concluir este punto, afirmando que: Todas las cosas que ocurren; sean buenas, o malas,

favorables o no favorables, pronosticadas o inesperadas, todas las cosas están activamente y por

el poder soberano de Dios, trabajando, obrando juntamente y activamente con los propósitos

divinos para el bien del cristiano. Es grande esta bendición, y hasta este punto se espera haberla

7
Millos, Comentario Exegético, 655.
8
John Stott, El Mensaje de Romanos, trad. de David Powell (Buenos Aires; Argentina: Certeza Unida, 2007). 285.
explicado casi en su totalidad. Sin embargo, queda un tema por tratar, y este es la máxima: según

sus propósitos, esto nos comunica una verdad vital, la cual se considerará en el siguiente tópico.

CONDICIONAL DE LA BENDICIÓN; “CONFORME A SU PROPÓSITO”

En el punto anterior se dijo que; dentro del todo del que habla la bendición en esta

perícopa, está incluido específicamente todo lo que le ocurre al creyente, sin haber algo, por

pequeño que sea, que esté fuera de ese todo. Sin embargo, el título del presente punto;

condicional de la bendición, parecería comunicar que hay algo que no está entre ese todo. Lejos

de querer decir eso, el presente tópico, lo que quiere comunicar, es que; esta bendición, como

dice el versículo, es “conforme a su propósito”. En este sentido está la condicional, quiere decir

que la condición está en el hombre, quien no puede llegar a conocer en su totalidad los

propósitos de Dios.

La palabra que traduce propósito es del griego προθεσιν, su “caso es acusativo femenino

singular del sustantivo que denota preposición, fin, intensión, decisión, propósito”. 9 Esto, cuando

a Dios se refiere, habla acerca de su soberanía por encima de todo, y, cuando se sabe que se

habla con respecto a los cristianos, se deduce que habla acerca de su propósito en la salvación,

dejando ver su participación activa incluso en la salvación de los hombres.

El propósito del que se habla es lo que se dice en Efesios 1:4, que el creyente fue elegido

en Cristo desde antes de la fundación del mundo para que fuera santo y sin mancha delante de

Dios. Así lo expresa un experto exegeta: “la palabra clave es propósito, la salvación es el

resultado del propósito de Dios establecido antes de la creación y, por tanto, antes de la caída”.10

9
Millos, Comentario Exegético, 653.
10
Millos, Comentario Exegético, 656.
En conclusión del presente punto; el hombre está condicionado a conocer lo que Dios ha

querido revelarle mediante su Palabra, y como los pensamientos de Dios son más altos que los

del hombre, el cristiano hará bien en aceptar lo que Dios provisione para su vida, aunque al

presente, este no lo entienda o parezca contrario a sus promesas. Recordando siempre que; todo,

todo está trabajando para su bienestar, por la gracia de Dios.


CONCLUSIÓN

De la manera que se expuso en el presente ensayo, se llega a la conclusión de que; hay

una certeza firme y absoluta de que todas las cosas que le suceden a los creyentes verdaderos, en

sus vidas, sean favorables o no favorables según sus opiniones, están trabajando para su bien,

según el propósito o la determinación de Dios, que está en Él mismo, y que solamente Él mismo

entiende en su plenitud. Así que, bien hace el cristiano que acepta como enviado por Dios; las

pruebas, aflicciones, alegrías o tristezas. Como de parte de Dios y le da gracias al Altísimo y

alaba su nombre por todo esto lo ha coordinado para su bien.


BIBLIOGRAFÍA

Iglesia en Salta – Argentina, Nuevo Testamento; Interlineal Griego-Español. Salta; Argentina:

Apoyo Bíblico, 2011.

Jenkins, Roy Davey. Romanos. Edimburgo; Reino Unido: Estandarte de la Verdad, 2012.

KIttel, Gerhard Y Friedrich, Gerhard. Compendio del Diccionario Teológico, Trad. de Geoffrey

W. Bromiley. Grand Rapids, MI: Desafío, 1973.

Pérez Millos, Samuel. Comentario Exegético al Texto Griego del Nuevo Testamento. Barcelona,

España: Clie, 2011.

Robertson, A. T. Comentario al Texto Griego del Nuevo Testamento. Trad. de Santiago Escuain.

Barcelona; España: Clie, 2003.

Stott, John. El Mensaje de Romanos, trad. de David Powell. Buenos Aires; Argentina: Certeza

Unida, 2007.

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