Tema 8 El Registro Civil
Tema 8 El Registro Civil
Tema 8 El Registro Civil
1. EL ESTADO CIVIL
Directamente relacionado con la capacidad de obrar se encuentra el estado civil, entendido éste
como conjunto de situaciones, de especial carácter, permanencia y relevancia o de cualidades
por estar en cada una de estas situaciones, que tiene cada persona.
El estado civil podrá tanto determinar la capacidad de obrar de la persona, así en los casos de la
mayoría de edad o la incapacitación, como también un conjunto de derechos y deberes, como es
el caso de la nacionalidad.
En esta tarea, suelen fijar su atención desde diversas perspectivas: para algunos, el estado civil
se refiere a dos situaciones: una de pertenencia a una comunidad, sea familiar (matrimonio y
filiación), local (vecindad civil) o estatal (nacionalidad), y otra, el conjunto de situaciones de las
que depende la capacidad de obrar (edad, incapacitaciones). Otros autores entienden que la
expresión “estado civil” tiene dos sentidos. Conforme al primero, se llamarían “estados civiles”
a ciertas situaciones de Derecho, de especial carácter, permanencia y relevancia, en las que
puede encontrarse la persona (casado o soltero, menor o mayor de edad). El estar en cada una de
ellas imprime una determinada cualidad o condición que determina una determinada “posición”
ante el Derecho y que –en un segundo sentido- también llamamos “estado civil”.
Podríamos así definir el estado civil como una situación de derechos de especial carácter,
relevancia y permanencia que imprime a una persona una determinada cualidad o condición
jurídica.
¿Cuáles son estas situaciones o cualidades de estado civil? Lo que la legislación registral
menciona como “hechos relativos al estado civil” o “hechos inscribibles”. De todos ellos
pueden predicarse unas características comunes:
- la personalidad: toda persona tiene un estado civil. Lo habitual es que, además, en una
persona confluyan varios estados civiles, esto es, varias situaciones que respectivamente
determinan unas consecuencias jurídicas;
- ser de interés público, por lo que suele requerirse la intervención del Ministerio Fiscal, en
defensa y representación de los intereses de la comunidad;
Son hechos o circunstancias que dan lugar a la constitución de un determinado estado civil:
a) La edad y la incapacitación que determina los grados de la capacidad de obrar.
b) El matrimonio, cuyo estado de soltero, casado, divorciado o viudo determinan derechos y
deberes especiales.
c) La filiación, en este caso con derechos especiales, pero sin que quepa hacer diferencias entre
la matrimonial, extramatrimonial y adoptiva.
d) La nacionalidad y vecindad civil, estados civiles que determinarán la legislación aplicable,
vía artículo 9.1 y 14.1 del Código Civil.
En último lugar, y en relación con la prueba de estado civil, debe reseñarse que ésta se
encuentra en las inscripciones y anotaciones efectuadas en el Registro Civil, y atinentes al
estado civil. A falta de dicho medio, se acudirá a la denominada "posesión de estado", entendida
ésta como el reconocimiento del estado civil a quien de modo habitual, notorio y público lo
viene empleando.
En la doctrina no existe unificación respecto al contenido del estado civil, si bien la mayoritaria
admite los siguientes:
-Edad
La edad, entendida como período de tiempo transcurrido desde el nacimiento de una persona
hasta un momento concreto de su vida (O'Callaghan).
Determina la capacidad de obrar en función de que estemos ante la mayoría de edad, menor
emancipado y menor de edad.
El artículo 315 del Código Civil establece que la mayoría de edad empieza a los dieciocho años
cumplidos. En este artículo se refleja el contenido del artículo 12 de la Constitución Española.
Para el cómputo de los años de la mayoría de edad se incluirá completo el día del nacimiento.
El mayor de edad es capaz para todos los actos de la vida civil, salvo las excepciones
establecidas en casos especiales por este Código, conforme establece el artículo 322 del Código
Civil.
El menor emancipado cuenta con una capacidad de obrar restringida, actúa por sí mismo y
realiza actos jurídicos, pero necesita un complemento de capacidad, a través de la curatela,
según establece el artículo 293 del Código Civil.
a) La emancipación por concesión de los titulares de la patria potestad. Para que tenga lugar se
requiere que el menor tenga dieciséis años cumplidos y que la consienta. Esta emancipación se
otorgará por escritura pública o por comparecencia ante el Juez encargado del Registro, según
establece el artículo 317 del Código Civil.
b) La emancipación por concesión judicial es la establecida por el Juez, que podrá concederla a
los hijos mayores de dieciséis años, si éstos la pidieren y previa audiencia de los padres, en los
siguientes casos:
a. Cuando quien ejerce la patria potestad contrajere nupcias o conviviere maritalmente con
persona distinta del otro progenitor.
b. Cuando los padres vivieren separados.
c. Cuando concurra cualquier causa que entorpezca gravemente el ejercicio de la patria potestad,
según establece el artículo 320 del Código Civil.
Dentro de esta concesión judicial, se encuentra el conocido como "beneficio de mayor edad".
Podrá el Juez concederlo, previo informe del Ministerio Fiscal, al sujeto a tutela mayor de
dieciséis años que lo solicitare, según establece el artículo 321 del Código Civil.
c) La emancipación tácita. Se reputa a todos los efectos como emancipado al hijo mayor de
dieciséis años que con el consentimiento de los padres viviere independientemente de éstos. Los
padres podrán revocar este consentimiento, según establece el artículo 319 del Código Civil.
El menor de edad, en esta etapa, depende personal y patrimonialmente de los padres o en su
caso del tutor. Tiene la capacidad de obrar limitada, pero se debe de interpretar de forma
restrictiva. El menor de edad puede aceptar donaciones, conforme establece el artículo 625 del
Código Civil. Puede hacer testamentos, excepto el ológrafo, a partir de los 14 años, según
establece el artículo 663 del Código Civil. Puede realizar distintos actos, para lo cual precisa el
complemento de la capacidad de los titulares de la patria potestad o del tutor, así como otorgar
capitulaciones matrimoniales.
-Incapacitación
-Matrimonio y filiación
Los estados familiares determinados por matrimonio y filiación también forman parte del estado
civil.
-Nacionalidad
-Vecindad
La vecindad, entendida como sujeción al Derecho civil común o derecho civil especial de las
regiones forales.
Los Estados civiles mencionados se pueden ver ampliados próximamente con las distintas
situaciones que en este momento tienen una incidencia importante en sociedad civil, como son:
--Uniones de hecho
Las uniones de hecho o more uxorio siempre han existido. Algunos autores consideran que son
el precedente inmediato de la Ley 13/2005, de 1 de julio. Es la unión de dos personas de modo
establece con intención de permanencia para realizar un proyecto en común (Serrano Alonso).
--Transexualidad (Tema 5)
Por título se entiende, para nuestro particular estudio, el fundamento legal, la razón o motivo
suficiente para que exista o se cree una situación jurídica. De “título de estado civil” se puede
hablar en dos diversos sentidos:
- como título de atribución o de adquisición, indica la causa por la que se adquiere o tiene un
determinado estado civil; esto es, el título por el cual a una persona le pertenece un determinado
estado
EL título de atribución del estado civil es la causa o fundamento por el cual una persona tiene
un determinado estado civil. Fijadas las relaciones jurídicas típicas, el Derecho se encarga de
otorgar (o atribuir) a cada persona el estado civil que le corresponde con arreglo a unas
condiciones previamente establecidas.
Dada la variedad de estas situaciones, el supuesto del que depende el nacimiento de un estado
civil puede ser muy variado. Así, por ejemplo, puede tener su origen:
- En un simple hecho. Como la edad (se es mayor o menor según se haya cumplido o no 18
años), la filiación materna (cuando se pruebe cumplidamente el hecho del parto y la identidad
del hijo).
- En una sentencia judicial. Como ocurre en los casos de incapacitación, y en los limitados casos
de emancipación. Cuando ha existido contienda judicial sobre la realidad de un estado civil, la
sentencia que la resuelve adquiere también la condición de título de atribución para ese caso
concreto.
El título de legitimación es la causa o fundamento por el cual una persona puede actuar como
titular de un estado civil determinado. El título de legitimación no puede nunca sustituir al título
de atribución, pero presume su existencia sin tener que demostrar su realidad.
A) La inscripción en el Registro
La inscripción alcanza la categoría de título de legitimación del estado civil por excelencia.
Aunque la ley afirme que las actas del estado civil serán la prueba del estado que dicen existe; el
acta no se limita a ser un medio de prueba más, sino que tiene una naturaleza superior, ya que
autoriza, por sí sola, para que una persona pueda actuar como titular del estado civil que refleja,
en tanto no sea impugnado el contenido del asiento y se demuestre su inexactitud.
La inscripción en el Registro Civil sólo tendrá eficacia constitutiva en los casos previstos por la
Ley.
Como ya se ha advertido, salvo casos excepcionales, los actos del estado civil no constituyen
parte del título de atribución del estado civil, que existe y tiene valor sin ella pero una vez
efectuada hace fe del hecho inscrito. Cuando se impugnen en juicio los hechos inscritos, ha de
instarse, a la vez, la rectificación del asiento correspondiente, sea por la inscripción en falsedad
o por la prueba en contrario.
B) La posesión de estado
Con carácter general, sólo podrán ser suplidos los actos del estado civil, como prueba, por otros
medios, cuando no hayan existido, o hubiesen desaparecido los libros del Registro, o a falta del
título de acta de nacimiento, o cuando ante los tribunales se suscite un litigio. En estos casos, no
se trata de que cuando falte el acta del estado civil se pueda sustituir por otros medios el título
de legitimación, sino que lo que se quiere significar es que existen otros caminos para demostrar
la existencia de un determinado estado civil, que no será atribuido legalmente hasta que quede
absolutamente acreditado (y se consiga su inscripción), entre las que destaca la llamada
posesión de estado, que supone la apariencia de un estado, el ejercicio de hecho de un estado
civil de forma constante y pública.
La integran tres elementos, designados por las tres palabras latinas siguientes:
Hay posesión de estado cuando alguien disfruta de determinado estado de familia, con
independencia del título sobre el mismo estado. Esta noción ha sido obtenida por analogía con
la posesión de las cosas, pues así como hay posesión cuando alguien ostenta una cosa en su
poder con la intención de comportarse como dueño de ella, y por tanto aprovechar los
beneficios que rinde según su naturaleza, en el orden de la familia hay posesión de estado
cuando alguien ocupa una determinada situación familiar -de hijo, padre, esposo, etcétera- y
goza de hecho de las ventajas anexas a la misma soportando igualmente los deberes inherentes a
esa situación.
Así, por ejemplo, según el art. 18 CC, “la posesión y utilización continuada de la nacionalidad
española durante diez años, con buena fe y basada en un título inscrito en el Registro Civil, es
causa de consolidación de la nacionalidad, aunque se anule el título que la originó”. Y
conforme al artículo 131 CC, “cualquier persona con interés legítimo tiene acción para que se
declare la filiación manifestada por la constante posesión de estado. Se exceptúa el supuesto en
que la filiación que se reclame contradiga otra legalmente determinada”.
Además de influir el estado civil (cada estado civil) sobre la capacidad de obrar de la persona,
de manera variable, según su especialidad, la relación jurídica de estado (en general) se
manifiesta en un conjunto de facultades y acciones que gozan de las mismos caracteres de la
relación jurídica base
- Las facultades procedentes del estado civil tienen un valor estrictamente personal y permiten
que cada sujeto pueda actuar, sin ninguna restricción o condicionamiento, dentro del marco que
le es propio, sin más limitaciones que la prohibición de transmitirlas, por estar excluidas del
comercio de los seres humanos. Incluso, dentro de su ámbito, el Derecho permite la posibilidad
de poder modificar el estado civil a través de declaraciones de voluntad (por ejemplo, el
matrimonio del soltero o divorciado, la adopción, el cambio de nacionalidad).
a) La eficacia general del estado civil atribuye a cada persona la facultad de exigir de cualquiera
el respeto de la situación en que se encuentra.
- Las acciones de estado, además de tener la nota común de la eficacia frente a todos de la
sentencia que atribuya o declare una situación determinada (obligando, incluso, a terceros que
no hayan sido parte en el litigio), exigen ser tramitadas por un procedimiento judicial y la
intervención, en muchas de ellas, del Ministerio Público.
a) Las acciones de estado como principio general son imprescriptibles, y sólo en casos
especiales la ley les impone un plazo de caducidad.
b) Las acciones de estado pueden ir dirigidas a reclamar o constituir un estado civil (acción en
reclamación de estado), o a impugnarlo o hacerlo variar (acción en impugnación). Las
inscripciones en el Registro, solo pueden rectificarse por sentencia de un tribunal. (Tribunal
civil).
2. EL REGISTRO CIVIL
El estado y la capacidad civil de las personas, sujeto a cambios, deben ser hechos públicos para
la tutela de derechos de terceros. Para ello surge el instituto del Registro Civil. Es la institución
o servicio público que tiene por objeto la ordenación y publicidad de las actas de estado civil,
entendiendo éstas como aquellas actas auténticas destinadas a proporcionar una prueba cierta de
los hechos relativos al estado civil de las personas. PERE RALUY lo define como “la
institución o servicio administrativo a cuyo cargo se halla la publicidad de los hechos que
afectan al estado civil de las personas, contribuyendo, en ciertos casos, a la constitución de los
dichos actos y proporcionando títulos de legitimación de estado”.
Pero también llamamos “Registro Civil” tanto al propio conjunto de Libros en que se
materializa, como a la propia oficina que tiene a su cargo el servicio registral.
En virtud de lo expuesto, podemos afirmar que las funciones del Registro Civil son:
El antecedente próximo de los Registros Civiles son los Registros Parroquiales, donde se
registran los hechos más salientes de la vida de los fieles (bautizo, matrimonio,
fallecimientos…), y cuya custodia estaba a cargo de cada Párroco y de los Prelados del Reino.
Los Registros Civiles se organizan, al margen de la Iglesia, por primera vez en Francia, en la
Ordenanza de Bois (1579).
- Ley 20/2011 de 21 de julio del Registro Civil, que es la que reúne el contenido esencial de
la reforma. Deroga la Ley de 1957, y entrará en vigor a los tres años de su publicación en el
BOE, es decir, el 22 de julio de 2014. Objeto de la Ley (art.1 LRC) es la ordenación jurídica del
Registro Civil, tanto en cuanto a su organización, dirección y funcionamiento, como al acceso
de los hechos y actos que se hacen constar en él y a la publicidad y los efectos que se otorgan a
su contenido.
- Ley Orgánica 8/2011, de 21 de julio, complementaria de la Ley del Registro Civil, por la
que se modifica la Ley Orgánica del Poder Judicial, necesaria por la desjudicialización de la
institución y sus efectos en cuanto al personal judicial que presta hoy sus servicios en los
Registros Civiles.
En cuanto al desarrollo normativo ulterior, la Ley autoriza al Gobierno a dictar las normas de
desarrollo y ejecución de la misma El 27 de octubre de 2011, se ha dictado una Instrucción
conjunta de la Dirección General de los Registros y del Notariado y la Dirección General de
Modernización de la Administración de Justicia, sobre el nuevo modelo organizativo del
Registro Civil Central.
2.3.1. Características
2.- La Ley diseña un Registro Civil único para toda España, informatizado y accesible
electrónicamente, es decir, como una base de datos única que permite compaginar la unidad e la
información con la gestión territorizada y la universalidad en el acceso, lo que comporta la
superación del Registro físicamente articulado en libros custodiados en oficinas distribuidas por
toda España y obliga a un replanteamiento de toda su estructura organizativa. Además, la Ley
incorpora el uso de la firma electrónica. El régimen de publicidad del Registro Civil se
articulará a partir de dos instrumentos: la certificación electrónica y el acceso de la
Administración, en el ejercicio de sus funciones públicas, a la información registral.
El nombre y los apellidos se configuran como un elemento de identidad del nacido derivado del
derecho de la personalidad y como tal se incorpora a la inscripción de nacimiento. Se permite a
los progenitores decidir el orden de los apellidos. Se sistematiza el procedimiento de cambio de
nombres y apellidos y se somete a la competencia del Encargado del Registro Civil. En cuanto a
la filiación, se elimina toda referencia a la no matrimonial, con plena equiparación a la
matrimonial.
Los Encargados del Registro Civil comprobarán de oficio la realidad y legalidad de los hechos y
actos cuya inscripción se pretende, según resulte de los documentos que los acrediten y
certifiquen, examinando en todo caso la legalidad y exactitud de dichos documentos.
Los Encargados del Registro Civil deberán practicar la inscripción oportuna cuando tengan en
su poder los títulos necesarios.
Se presume que los hechos inscritos existen y los actos son válidos y exactos mientras el asiento
correspondiente no sea rectificado o cancelado en la forma prevista por la ley. Cuando se
impugnen judicialmente los actos y hechos inscritos en el Registro Civil, deberá instarse la
rectificación del asiento correspondiente.
e) Eficacia de la inscripción
-Eficacia constitutiva de la inscripción. Sólo la tendrá en los casos previstos por la Ley (art. 18)
El contenido del Registro Civil se presume íntegro respecto de los hechos y actos inscritos. En
los casos legalmente previstos, los hechos y actos inscribibles conforme a las prescripciones de
esta Ley serán oponibles a terceros desde que accedan al Registro Civil.
Son los que se refieren a la identidad, estado civil y demás circunstancias de la persona. Son,
por tanto, inscribibles (art. 4 LRC):
1.º El nacimiento.
2.º La filiación.
3.º El nombre y los apellidos y sus cambios.
4.ª El sexo y el cambio de sexo.
5.º La nacionalidad y la vecindad civil.
6.º La emancipación y el beneficio de la mayor edad.
7.º El matrimonio. La separación, nulidad y divorcio.
8.º El régimen económico matrimonial legal o pactado.
9.º Las relaciones paterno-filiales y sus modificaciones.
10.º La modificación judicial de la capacidad de las personas, así como la que derive de la
declaración de concurso de las personas físicas.
11.º La tutela, la curatela y demás representaciones legales y sus modificaciones.
12.º Los actos sobre constitución y régimen del patrimonio protegido para personas con
discapacidad.
13.º La autotutela y los apoderamientos preventivos.
14.º Las declaraciones de ausencia y fallecimiento.
15.º La defunción.
Cada persona física tendrá un registro individual y cronológico en el que constarán los hechos y
actos relativos a la identidad, estado civil y demás circunstancias previstas en esta Ley. A cada
registro individual abierto con la primera inscripción, se le asignará un código personal
constituido por la secuencia alfanumérica que atribuya el sistema informático vigente para el
documento nacional de identidad.
El Título VI de la Ley contiene las concretas reglas aplicables a cada uno de los actos
inscribibles (nacimiento, defunción, matrimonio….)
2º Principio de calificación (legalidad): (art. 30): El Encargado de la Oficina del Registro Civil
ante el que se solicita la inscripción deberá controlar la legalidad de las formas extrínsecas del
documento, la validez de los actos y la realidad de los hechos contenidos en éste. La calificación
de las sentencias y resoluciones judiciales recaerá sobre la competencia y clase del
procedimiento seguido, formalidades extrínsecas de los documentos presentados y asientos del
propio Registro.
En caso de tener dudas sobre la legalidad de los documentos, sobre la veracidad de los hechos o
sobre la exactitud de las declaraciones, en el plazo de diez días realizará las comprobaciones
oportunas. Si observa una contradicción esencial entre el Registro y la realidad, lo pondrá en
conocimiento del Ministerio Fiscal y lo advertirá a los interesados.
a) Administrativo. Contra las decisiones adoptadas por los Encargados de las Oficinas
Central, Generales y Consulares, los interesados sólo podrán interponer recurso ante la DGRN
en el plazo de un mes. La DG resolverá en el plazo de seis meses siguientes a la recepción del
escrito de interposición. El régimen del silencio es negativo: transcurrido este plazo sin
notificar resolución expresa, queda expedita la vía jurisdiccional correspondiente.
a) Inscripciones. A través de ellas, acceden al Registro Civil los hechos y actos relativos al
estado civil de las personas y aquellos otros determinados por esta Ley.
b) Anotaciones. Son la modalidad de asiento que en ningún caso tendrá el valor probatorio de
la inscripción, sino meramente informativo, salvo los casos en que la Ley les atribuya valor de
presunción. Se hace una enumeración ejemplificativa y se extenderán a petición del Ministerio
Fiscal o de cualquier interesado.
c) Cancelaciones. Privan de eficacia, total o parcial, al asiento registral de cualquier clase por
nulidad del propio asiento, por ineficacia o inexistencia del hecho o del acto o por cualquier otra
causa establecida por la ley. La cancelación se practicará en virtud de título adecuado, ya sea de
oficio o a solicitud del interesado.
La LRC 1957 determinaba una organización territorial, existiendo una oficina en cada
municipio, más los Registros Consulares y el Registro Civil Central, así como una llevanza por
Secciones: nacimientos, matrimonio, defunciones y tutelas y representaciones legales.
Con la Reforma de 2011, como se ha visto, el Registro es único, y se organiza tomando como
base la inscripción del nacimiento del individuo (registro personal). El artículo 3.1 LRC dispone
que la solicitud de inscripción y la práctica de la misma se podrán efectuar en cualquiera de las
Oficinas Generales del Registro Civil con independencia del lugar en el que se produzcan los
hechos o actos inscribibles. Si se producen en el extranjero, también se podrá solicitar y
practicar en la Oficina Consular de la circunscripción correspondiente.
La organización del servicio registral está formada por una Oficina Central, Oficinas Generales
y Oficinas Consulares (art. 20).
A sus Encargados los designará el Ministerio de Justicia y tendrá, entre otras funciones, las de
practicar las inscripciones derivadas de resoluciones dictadas por la DGRN, de documentos
auténticos extranjeros o aquéllas que las leyes le atribuyan. Es la autoridad encargada en materia
de cooperación internacional sobre Registro Civil.
En cada Comunidad o Ciudad Autónoma se ubicará al menos una. Se podrán crear otras por
cada 500.000 habitantes. Habrá una en cada isla canaria o balear. A su frente estará un
Encargado del Registro Civil, que será designado por el Ministerio de Justicia o por las
Comunidades Autónomas con competencias ejecutivas.
Los asientos están bajo la salvaguarda de los Tribunales y su rectificación se efectuará, como
regla general, en virtud de resolución judicial firme de conformidad con lo previsto en el
artículo 781 bis LEC (nuevo).
Excepciones: se permiten la rectificación por un mero procedimiento registral, como los errores
que proceden de documento público ulteriormente rectificado o las divergencias que se aprecien
entre la inscripción y los documentos en cuya virtud se haya practicado.
Ya hemos dicho que una de las funciones del Registro Civil es la de dar publicidad a los hechos
concernientes al estado civil de las personas. Esta publicidad, en sentido material, consiste en la
posibilidad que otorga, tanto al interesado como a los terceros, de “aprovecharse” de sus
efectos, de apoyarse en lo que el Registro refleja, para ejercitar los derechos que se derivan de
cada uno de esos estados civiles.
Pero también puede hablarse de una publicidad formal, en el sentido de que el Registro es
público y accesible para cualquiera que esté interesado, determinando los medios para conocer
su contenido.
El carácter electrónico del Registro Civil no significa alterar la garantía de privacidad de los
datos contenidos en el mismo. Aunque el Registro Civil está excluido del ámbito de aplicación
de la Ley de Protección de Datos de Carácter Personal, se presta una especial protección a los
datos que proporciona, en tanto contengan información que afecta a la esfera de la intimidad de
la persona. Los datos protegidos sólo pertenecen a su titular y a él corresponde autorizar que
sean facilitados a terceros.
Efectos: Las certificaciones se presumen exactas y constituyen prueba plena de los hechos y
actos inscritos en el Registro Civil. De todos modos, prevalecen los datos que consten en el
Registro Civil, sin perjuicio de la responsabilidad que proceda.
Datos con publicidad restringida (art. 83 y ss.) Son datos especialmente protegidos:
a) La filiación adoptiva y la desconocida.
b) Los cambios de apellido o de identidad autorizados por violencia de género.
c) La rectificación del sexo.
d) Las causas de privación o suspensión de la patria potestad.
e) El matrimonio secreto.
Sólo el inscrito o sus representantes legales podrán acceder o autorizar a terceras personas la
publicidad de los asientos que contengan estos datos.