Agosto 2014
Agosto 2014
ÍNDICE GENERAL
CIVIL
PERSONAS
Doctrina práctica
Comentario de jurisprudencia
CONSULTA: En el Perú, ¿es imperativo que el apellido paterno vaya primero?... 124
Reseña de jurisprudencia
Cuando existan motivos justificados, es posible cambiar el nombre (Casación
N.º 592-2013-Ayacucho).................................................................................... 126
DERECHO REALES
Doctrina práctica
Inaplicación del artículo 927 del Código Civil (Acción reivindicatoria) (Casación
Nº 1618-2013 LIMA)........................................................................................... 150
SUCESIONES
Doctrina práctica
CONTRATOS
Doctrina práctica
Comentario de jurisprudencia
Juan Carlos Puertas Figallo: ¡Paga primero y reclama después! La falta de cumplimiento
en los contratos recíprocos (Comentario de la Casación N.°1913-2013-Lima)....... 192
Reseña de jurisprudencia
RESPONSABILIDAD CIVIL
Doctrina práctica
Comentario de jurisprudencia
Reseña de jurisprudencia
PROCESAL CIVIL
IMPUGNATORIO
Doctrina práctica
Comentario de jurisprudencia
Reseña de jurisprudencia
EJECUCIÓN
Doctrina práctica
Comentario de jurisprudencia
Reseña de jurisprudencia
PROCESOS
Doctrina práctica
Juan Bélfor Zárate Del Pino: Asuntos no contenciosos en la función notarial..... 322
Reseña de jurisprudencia
REGISTRAL Y NOTARIAL
Doctrina práctica
Reseña de jurisprudencia
REGISTRAL / INMOBILIARIA
ARBITRAJE
Doctrina práctica
Comentario de jurisprudencia
Julio Martín Wong Abad: Algunas notas sobre el estándar de recusación de los
árbitros en nuestra Ley de Arbitraje (Comentario a la Casación N.° 888-2013-Piura). 376
INMOBILIARIA
Comentario de jurisprudencia
JURISPRUDENCIA FUNDAMENTAL
Quinto Pleno Casatorio Civil de la
Corte Suprema de Justicia de la República
Agosto de 2014
Agosto / 2014
Año 1 Volumen 2
ACTUALIDAD LEGAL Y
JURISPRUDENCIAL
Actualidad
Área
Civil Actualidad legal
Actualidad legal y jurisprudencial
y jurisprudencial
Contenido
Reseña de las principales normas civiles, procesales civiles y registrales 16
I
publicadas en el último mes
II Resumen de la jurisprudencia civil, procesal civil y registral del mes 18
Resumen de modificaciones de las principales normas civiles, procesales 20
III
civiles y registrales producidas en el último mes
Resumen de las principales normas civiles, procesales civiles y registrales 20
IV
del mes
RESUMEN LEGISLATIVO Y
Actualidad Legal y jurisprudencial
1. Precisan artículo 234 del Código Procesal Civil: Jueces admitirán expedientes
administrativos en formato de disco compacto (Resolución Administrativa
N.° 229-2014-CE-PJ. El Peruano, 19 de julio de 2014)
Los Jueces de Paz Letrados, Especializados, Mixtos y Superiores de la República admitirán que
la información contenida en expedientes administrativos podrá ser presentada en formato
de disco compacto.
El artículo 234 del Código Procesal Civil considera como medio probatorio documental las
microformas, tanto en la modalidad de microfilm como en la modalidad de soportes infor-
máticos las cuales deberán ser validadas conforme a los artículos 6 y 9 del Decreto Legislativo
N° 681; por lo que, la información contenida en el expediente administrativo, también puede
ser presentada al órgano jurisdiccional en formato de disco compacto.
En ese sentido, a efectos de garantizar y asegurar el buen funcionamiento del sistema judicial, resulta
necesario que se adopten las medidas administrativas pertinentes dirigidas a ofrecer una mejor
administración de justicia, así como a la prestación de una tutela jurisdiccional efectiva de manera
oportuna; todo ello en aras de garantizar y asegurar el buen funcionamiento del sistema judicial.
La presente resolución entró en vigencia el 20 de julio de 2014.
* El presente resumen legislativo y jurisprudencial del mes comprende desde el 16 de julio al 15 de agosto del
presente año.
El cronograma de visitas judiciales ordinarias para los meses de agosto, setiembre y octubre
de 2014, a las diversas Cortes Superiores de Justicia de la República.
El anexo de resolución en comentario dispuso lo siguiente:
Fecha Corte Superior de Justicia
Mes Días Lugar
11, 12 Puno
Agosto
14, 15 Cusco
11, 12 San Martin
Setiembre
24, 25, 26 Lima Norte
6 Huaura
Octubre
13, 14, 15, 16, 17 Lima
Quedaron precisados los actos inscribibles en el Registro de Predios y en otros registros que
requerirán informe previo del área de catastro para acceder a su inscripción, así como los
requisitos que deben contener los planos y memorias descriptivas que se presenten al Registro
para sustentar la inscripción de tales actos.
Con dicha directiva, se establece los requisitos técnicos que deben contener los planos y
memorias descriptivas que se presenten al Registro para sustentar la inscripción de los actos
respectivos.
Así, se requerirá informe previo del área de catastro en los casos de inmatriculaciones; acu-
mulación e independización de predios que no provienen de lotizaciones o habilitaciones
urbanas inscritas; inscripción de perimétricos de posesiones informales por entidades con
facultades de saneamiento; lotización de posesiones informales por entidades con facultades
de saneamiento; y rectificación, modificación, delimitación o determinación de áreas, linderos
o medidas perimétricas de predios; las anotaciones preventivas contempladas en el artículo
138 del Reglamento de Inscripciones del Registro de Predios; entre otros supuestos.
Cabe señalar que se dispuso que los títulos que se presenten con documentación técnica y
elaborada bajo los requisitos establecidos en la Directiva N.º 008-2004-SUNARP/SN, solo será
admitida hasta el 31 de diciembre de 2015.
La presente resolución entró en vigencia el 9 de agosto de 2014.
La Corte Suprema considera que para determinar el pago de frutos, debe tomarse en cuenta la
relevancia que tiene la posesión de tales aires respecto del negocio de quien ha sido demandada.
En tal sentido, ha considerado que (i) no se puede arrendar más de lo que se tiene y (ii) los datos
registrales eliminan la buena fe.
Transcribimos el fundamento principal de esta sentencia:
“Decimos (…) cuando SALCANTANI S.A.C. arrienda el inmueble, conforme se advierte de la
cláusula primera del contrato de arrendamiento, habla de un área que comprende una mezza-
nine de sesenta y cinco metros cuadrados (65m2), lo que no consta en la información registral y
que además, dada la altura de dicha construcción, era pasible de suponer que pertenecía a los
aires que habían sido usufructuados. Undécimo.- Que, siendo ello así debe declararse fundada la
casación planteada, pues: (i) no se puede arrendar más de lo que se tiene; (ii) los datos registrales
eliminan la buena fe (…)” (f.j. 10 y 11)
Para la Corte Suprema, existe vocación hereditaria que justifica título para poseer, toda vez
que a quien se le demanda por desalojo por ocupación precaria es el hermano de la vende-
dora del inmueble que fue declarada heredera universal, existiendo título para poseer del
demandado que lo habilitaría a no ser precario. Dado que a la fecha de la presente causa se
le declaro heredero.
Transcribimos el fundamento de esta sentencia:
“Los hechos descritos impiden al órgano jurisdiccional considerar al demandado como poseedor
precario, pues cuenta con una circunstancia que justifica la posesión que ejerce sobre del bien,
pues, tiene vocación hereditaria respecto a los propietarios originarios del bien y, si bien fue
preterido por su hermana, esto no es óbice para que peticione los derechos sucesorios que le
corresponden como heredero legal, como efectivamente lo hizo, a través del proceso de petición
de herencia contenido en el expediente Nº 12358-2010-0-1801-JR-CI- 46, en el que, además ya
ha sido declarado como heredero, según fluye de la sentencia contenida en la resolución número
nueve (…). Además, su derecho hereditario ha sido debidamente inscrito en las partidas registrales
correspondientes, según fluye de los asientos registrales (...).” (f. j. 8)
Para la Corte Suprema, el derecho real de posesión contiene un ámbito fáctico o eminentemente
material. En una concepción más amplia, se entiende como interés jurídicamente protegido.
Transcribimos el fundamento de esta sentencia:
“El derecho real de posesión contiene, efectivamente, un ámbito fáctico o eminentemente material,
constituido por el denominado en doctrina como ‘ius possessionis’ que se trata del simple o mero
hecho posesorio que ejerce el poseedor sin la titularidad del derecho subjetivo real. Sin embargo,
la interpretación del derecho real de posesión no se agota en este simple sustrato material, pues
no es simplemente un hecho sino que, en su concepción más amplia se trata, además, de un
interés jurídicamente protegido que tiene por objeto a un determinado bien y que surge a partir
del ejercicio de diversos actos de posesión (no sólo físicos) del bien, sino más bien, actos que
demuestran un control efectivo de aquel, incluyéndolo dentro de la esfera jurídica y patrimonial
del posesionario”. (f. j. 5.)
Poder Judicial
Res. Adm. N.° Aprueban el “Manual de Seguridad Física del Poder Judicial”.
179-2014-CE-PJ
(El Peruano, 16/07/2014)
Res. Adm. N.° 210-2014-P- Reconforman diversas Salas (Segunda Sala Civil), designan y reasignan jueces
CSJLI/PJ provisionales y supernumerarios en la Corte Superior de Justicia de Lima.
(El Peruano, 16/07/2014)
Res. Adm. N.° 0728-2014-P- Aprueban propuesta de conformación de la Oficina Desconcentrada de Control
CSJLIMASUR/PJ de la Magistratura de la Corte Superior de Justicia de Lima Sur.
(El Peruano, 16/07/2014)
R.J. N.° 142-2014-J-OCMA/ Establecen cronograma de Visitas Judiciales Ordinarias para los meses de agosto,
PJ setiembre y octubre de 2014 a diversas Cortes Superiores de Justicia.
(El Peruano, 17/07/2014)
Res. Adm. N.° 362-2014-P- Revalidan nómina de Profesionales y Especialistas a ser inscritos en el Registro
CSJLN/PJ de Peritos Judiciales de la Corte Superior de Justicia de Lima Norte, y aprueban
(El Peruano, 17/07/2014) Nómina de Martilleros Públicos.
Res. Adm. N.° Circular referida a la admisión de expedientes administrativos en formato de
229-2014-CE-PJ disco compacto.
(El Peruano, 19/07/2014)
Res. Adm. N.° 213-2014-P- Establecen conformación de la Sexta Sala Civil y Tercera Sala Laboral de Lima
CSJLI/PJ Laboral y designan jueces provisionales y supernumerarios de la Corte Superior
(El Peruano, 19/07/2014) de Justicia Lima.
Res. Adm. N.° 217-2014-P- Establecen conformación de la Segunda Sala de Familia de la Corte Superior de
CSJLI/PJ Justicia de Lima.
(El Peruano, 24/07/2014)
Res. Adm. N.° Crean el Distrito Judicial de Lima Nor Oeste, provincia y departamento de Lima.
128-2014-CE-PJ
(El Peruano, 25/07/2014)
Res. Adm. N.° 215-2014-P- Autorizan publicación de la Res. Adm. N.° 038-2014-J-ODECMACSJLI/PJ, que mo-
CSJLI-PJ difica el Rol del Programa de Quejas Verbales Itinerantes de la ODECMA de Lima.
(El Peruano, 25/07/2014)
Res. Adm. N.° 219-2014-P- Disponen permanencia y designan jueces en diversas salas (Segunda Sala de
CSJLI/PJ Familia) y juzgados de la Corte Superior de Justicia de Lima.
(El Peruano, 31/07/2014)
Res. Adm. N.° 231-2014- Designan magistrados y funcionarios del Poder Judicial que conformarán la
P-PJ “Comisión de Organización, Implementación y Funcionamiento del Remate
(El Peruano, 01/08/2014) Electrónico Judicial - REM@JU”.
Res. Adm. N.° 222-2014-P- Establecen conformación de la Segunda Sala Civil con Subespecialidad Comercial
CSJLI/PJ de Lima y designan jueces supernumerarios en diversos órganos jurisdiccionales
(El Peruano, 02/08/2014) de la Corte Superior de Justicia de Lima.
Res. Adm. N.° Disponen medidas adicionales para la implementación de la Corte Superior de
227-2014-CE-PJ Justicia de Lima Este.
(El Peruano, 06/08/2014)
Contenido
COMENTARIO JUAN ESPINOZA ESPINOZA: La interpretación vinculante del artículo 92 CC. Una toma
1
24
de posición respecto del concepto de impugnación
juan morales godo: “No creo que la labor de la Corte Suprema se agote con este
ENTREVISTA 32
precedente”
COMENTARIO JAIRO CIEZA MORA: La impugnación judicial de acuerdos en la persona jurídica no
2
36
lucrativa y la invalidez del negocio jurídico
COMENTARIO RICARDO CALLE TAGUCHE: Algunas consideraciones sobre la aplicación de la doctrina
3
68
jurisprudencial vinculante contenida en el V Pleno Casatorio Civil.
COMENTARIO RENZO CAVANI: Interpretación, justificación judicial y racionalidad en el V Pleno
4
74
Casatorio de la Corte Suprema de Justicia peruana
COMENTARIO
Comentario
Comentario
del V Pleno
La interpretación vinculante del
Casatorio Civil artículo 92 del CC
Una toma de posición respecto del concepto de
impugnación
1. Introducción
2. Observación inicial
3. El comentario
* Profesor de Derecho Civil en las Facultades de Derecho de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y de la
Pontificia Universidad Católica del Perú. Codirector de Actualidad Civil.
1. Introducción
consejo directivo, facultándolo para actuar L’esecuzione delle deliberazioni contrarie all’ordine
judicialmente contra los acuerdos que sean pubblico o al buon costume può essere sospesa anche
dall’autorità gobernativa.”
contrarios a la ley o al estatuto”2, agregando
que “por razones de seguridad en las relacio- He mantenido el texto en la lengua origi-
nes jurídicas se ha considerado un plazo pru- nal para que quede claro que se refiere a
dencialmente breve”3. Siempre, a propósito aquellas deliberaciones que possono essere
del plazo, se aprecia que “la norma no señala annullate, (que pueden ser anuladas). Enton-
si se trata de un plazo de prescripción o de ces no se hace referencia a la impugnación,
caducidad; a diferencia de la Ley General de entendida como el derecho que se tiene
Sociedades, que expresamente establece que a cuestionar las decisiones de los órganos
los plazos para impugnar los acuerdos sociales de la asociación, sino a un típico supuesto
son de caducidad. Sin embargo, usualmente de invalidez. Otro aspecto que no puede
se considera que los plazos en el artículo bajo pasar desapercibido es que este artículo no
comentario son de caducidad, declarando los establece plazo alguno. Por tal motivo, es
jueces fundadas las excepciones de caducidad inadecuado pretender explicar los alcances
del art. 92 cc a partir de la doctrina italiana
que se deducen cuando los plazos señalados
que analiza el art 23 en el Codice Civile ita-
han vencido”4.
liano por el simple hecho que son supuestos
Si se quiere hacer un análisis comparado, se de un contenido diverso.
tiene que el art. 23 del Código Civil italiano La premisa teórica de la cual se debe partir
de 1942 regula lo siguiente: es que la impugnación es un medio de de-
”Art. 23 Annullamento e sospensione delle fensa de los derechos, en el caso particular,
deliberazioni de los asociados respecto de las decisiones de
Le deliberazioni dell’assemblea contrarie alla legge, los órganos de la asociación. Por ello, autori-
all’atto costitutivo o allo statuto possono essere an- zadamente se sostiene que “la impugnación
nullate su istanza degli organi dell’ente, di qualunque no es específica en sí y por sí, sino el medio
associato o del pubblico ministero. que recibe su individualidad del vicio que la
L’annullamento della deliberazione non pregiudica i ley ha previsto, o de la particular estructura
diritti acquistati dai terzi di buona fede in base ad atti del procedimiento, o de la posición del sujeto,
compiuti in esecuzione della deliberazione medesima entre otros”5. Cabe agregar que la discusión
(1445, 2377). es la interpretación de la causa de la
Il Presidente del tribunale o il giudice istruttore, sentiti impugnación, es decir, si por impugnación
gli amministratori dell’associazione, può sospendere, solo se hace referencia a la nulidad, a la anu-
su istanza di colui che l’ha proposto l’impugnazione, labilidad, a la ineficacia, a la inexistencia, sin
l’esecuzione della deliberazione impugnata, quando faltar quien ha sostenido que se trata de un
sussistono gravi motivi. Il decreto di sospensione deve recurso autónomo. De aquí las más variadas
essere motivato ed è notificato agli amministratori
posibilidades:
(att. 10).
a) La impugnación solo se refiere a la anula-
bilidad, o sea, que cabría pedir la nulidad,
ex art. 219 cc, con el plazo prescriptorio
2 FernÁndez Sessarego, Carlos, Derecho de las de 10 años (de acuerdo al art. 2001.1 cc.)
personas. Exposición de motivos y comentarios al Libro
Primero del Código Civil Peruano, Studium, Lima, 1986, b) La impugnación se refiere a la nulidad y a
p. 173. la anulabilidad; pero no cubre el supues-
3 FernÁndez Sessarego, Derecho de las personas, cit., to de inexistencia el cual no tiene plazo
p. 174. prescriptorio alguno.
4 ALDANA DURÁN, Mariella, “Comentario al artículo
92 CC. Impugnación judicial de los acuerdos”, en
AA.VV., Código Civil comentado, Gaceta Jurídica, Lima,
2003, t. I (Título Preliminar, Derecho de las Personas, 5 SATTA, Salvatore, voz “Impugnazione”, en Enciclope-
Acto Jurídico), pp. 451-452. dia del Diritto, Giuffrè, Milán, 1970, t. XX, p. 697.
a. Cuestiones que atentan contra la moral y La acción de nulidad prevista en este artículo caduca al
año de la adopción del acuerdo respectivo”.
las buenas costumbres.
b. Reclamaciones referidas a delitos o faltas. En atención al argumento a contrario, el plazo
del art. 92 del cc no es aplicable a los terceros
que invocan alguna causal de nulidad (ex art.
12 MONTEZUMA CHIRINOS, Alberto, “Comentario a la 219 del cc) por la decisión de un órgano de
Cuarta Disposición Complementaria del D. Leg. N.º
1071”, en SOTO COAGUILA, Carlos Alberto y Alfredo la asociación16. Entonces, en este supuesto, se
BULLARD GONZÁLEZ (coords.), Comentarios a la Ley deben tener en cuenta los plazos contenidos
Peruana de Arbitraje, Instituto Peruano de Arbitraje, en el art. 2001 del cc.
Lima, 2011, t. II, p. 75.
13 CANTUARIAS SALAVERRY, Fernando, “Comentario al Queda claro que la interpretación que se ha
artículo 2 del D. Leg. N.º 1071”, en SOTO COAGUI- hecho en el Quinto Pleno Casatorio Civil es
LA, Carlos Alberto y Alfredo BULLARD GONZÁLEZ una toma de posición, en la cual se ha fun-
(coords.), Comentarios a la Ley Peruana de Arbitraje,
Instituto Peruano de Arbitraje, Lima, 2011, T. II, p. 16. damentado jurídicamente la causa decidendi.
14 MONTEZUMA CHIRINOS, “Comentario a la Cuarta
Disposición Complementaria del D. Leg. N.º 1071”, 16 Como observa MORALES HERVIAS, Rómulo, “¿La
cit., p. 77. impugnación o la invalidez de los negocios jurídicos
15 CANTUARIAS SALAVERRY, “Comentario al artículo 2 unilaterales colegiales asociativos?”, en Diálogo con
del D. Leg. N.º 1071”, cit., pp. 9-14. la Jurisprudencia, N.º 190, Lima, 2014, p. 42.
ENTREVISTA
Entrevista
Comentario
del V Pleno
“No creo que la labor de la Corte
Casatorio Civil Suprema se agote con este prece-
dente”
Entrevista a
Juan Morales Godo*
Profesor de Derecho Civil y Derecho Procesal Civil en la Universidad
Nacional Mayor de San Marcos, en la Pontificia Universidad Católica
del Perú y en la Universidad de Lima,
Actualidad Civil (AC): Profesor Morales, observa el trabajo de las grandes cortes
¿era necesario que la Corte se extienda del mundo y aprecia que van más al punto
tanto para dar una solución clara a este álgido, se preocupan más por la justifica-
problema concreto? Se habla sobre la ción. ¿Cree Ud. que la Corte Suprema está
teoría de acto jurídico, inexistencia, ac- cumpliendo verdadero papel de corte de
ción, etc. precedentes? Han sido cinco plenos en
Juan Morales Godo (JMG): Efectivamente, 24 años.
y ni siquiera califica como un ensayo. No era JMG: Claro, es muy poco existiendo tantos
necesario ser tan explicativo en temas que son temas. En la práctica, existen muchas formas
muy elementales. Siempre se ha criticado a de interpretación de la norma y, por lo tanto,
la Corte Suprema por ser muy escueta, pero hay consecuencias distintas. Creo que el papel
creo que se han ido al otro extremo. Falta un fundamental de la Corte Suprema es ese. En
equilibrio saludable. primer lugar, debe ocuparse por fijar las líneas
AC: Si es que un Pleno Casatorio busca de interpretación y, en este caso, es evidente
ser un auténtico precedente judicial, uno que había necesidad de una definición, dado
que las cortes inferiores también venían acep-
tando las demandas de asociados planteando
* Entrevista realizada por Renzo Cavani y Chabeli la nulidad del acto jurídico que, en realidad,
Abenio. escondía una impugnación.
tado únicamente al caso donde existan criterios y supuestos que deben presentarse
falsificaciones y dar una solución puntual, para que se pueda, excepcionalmente, aplicar
dejando que los jueces resuelvan los casos las normas generales del acto jurídico.
diferentes. En otras palabras, promover un AC: La Corte Suprema no habló nada de los
distinguishing. terceros. ¿Debemos entender que no están
JMG: El precedente se convierte en una norma, comprendidos en lo que resolvió el Pleno?
es de cumplimiento obligatorio y, como toda JMG: Así es. Se trata solo del asociado.
norma, el precedente debe tener supuestos de
hecho. En el caso concreto del presidente que AC: Finalmente, ¿cree Ud. que el Pleno
no era asociado, debió haberse delimitado contribuye o no con la Administración de
porque, en la realidad, pueden replicarse, Justicia peruana?
así como también pueden existir situaciones JMG: Creo que sí contribuye porque, en la
distintas siendo el mismo tema. Siendo el práctica, se insinuaban una serie de preten-
mismo tema, sin embargo, son distintas las siones basadas en la nulidad del acto jurídico,
circunstancias y situaciones. Una próxima vez dejando de lado el artículo 92. A pesar de
no se le ocurrirá a un juez aplicar las reglas del ello, creo firmemente que la regla es la del
Pleno a todos los casos. No creo que la labor 92. Ahora, determinar qué circunstancia ha-
de la Corte Suprema sobre el tema se agote bilita a salir de la regla es un tema que falta
con este precedente: falta el desarrollo de los desarrollar.
COMENTARIO
Comentario
Comentario
del V Pleno
La impugnación judicial de acuerdos
Casatorio Civil en la persona jurídica no lucrativa
y la invalidez del negocio jurídico
Comentario del V Pleno Casatorio Civil
He sido César; soy Justiniano, que por voluntad del primer Amor
del cual estoy aquí gozando, suprimí lo vano y lo excesivo que
en las leyes había.
Dante ALIGHIERI, La Divina Comedia, Canto VI. El Paraíso.
tema central una pretendida defensa de los su naturaleza es la misma para ambos entes
“falsarios” está un tema mucho más pedestre regulados por normas diferentes.
y terrenal como es el de los plazos breves para
Por lo tanto es fundamental tener como re-
cuestionar los acuerdos de 60 o de 30 días en
ferente la LGS por la estructura y naturaleza
el caso de acuerdos no inscribibles o inscribi-
del ente colectivo asociación, máxime cuando
bles respectivamente. Esta es la discusión ver-
dadera: el plazo. Lo demás es una justificación aquella trata de la impugnación judicial de
para poder defender posiciones ideológicas o acuerdos de una manera mucho más amplia y
dogmáticas que son perfectamente atendibles moderna (aunque no por eso menos confusa)
y dignas de estudio permanente; pero que, en una serie de artículos que van del 139 al
considero, deben orientarse a situaciones de 150 de la LGS. ¿Qué nos impide comprender
mayor complejidad de la que una discusión mejor las ineficacias negociales incluyendo
sobre plazos supone. la impugnación judicial de acuerdos bajo las
perspectivas de la LGS aplicando lo pertinente
De la sentencia casatoria ha quedado abso-
a la comprensión de la operatividad y dinámi-
lutamente claro que, de forma ineludible,
ca del artículo 92 del CC? Considero que nada.
cualquier acuerdo de la Asamblea General,
El argumento de los fines de cada tipo de ente
por el motivo que fuera, debe cuestionarse a
colectivo no me parece suficiente ni acertado.
través del artículo 92 del CC y será declarada
improcedente la pretensión que plantee el En el Considerando 163 de la sentencia casa-
cuestionamiento de un acuerdo fuera de los toria, se señala:
plazos de caducidad (así los ha determinado
Se ha establecido por ello la tutela del derecho del
el Pleno) establecidos en la norma invocada.
asociado preocupado por la marcha de la Asocia-
Si la pretensión se basa en la nulidad del acto ción Civil a través del ejercicio diligente del derecho
Jurídico y esta se asimila a los presupuestos de impugnación; toda vez que este derecho no
señalados en el artículo 92 del cc. debe tiene como finalidad proteger al asociado que
tramitarse como “Impugnación judicial de pretende el entorpecimiento ni la inmovilidad de
acuerdos” por el Juzgador aplicando el artícu- la marcha de la citada persona jurídica no lucrativa,
ni tampoco protege a quien ha mostrado descuido
lo VII del Título Preliminar del CPC (Iura novit
y desinterés en la tutela de sus derechos.
curia) siempre y cuando el plazo de caducidad
establecido en esta norma no haya vencido. El párrafo glosado me parece interesante por-
De lo contrario, la demanda será rechazada que de alguna manera señala que los plazos
por improcedencia de manera liminar. breves establecidos en el artículo 92 del CC
Otro aspecto que debo mencionar es que incentivan a tener una conducta diligente y
considero un error señalar que no se puede supervisora por parte del asociado con res-
hacer un análisis comparativo en cuanto a la pecto a su asociación. Los plazos breves buscan
impugnación judicial de acuerdos del Código también que los asociados tengan interés en
Civil con la Ley General de Sociedades (LGS). el desarrollo o la marcha asociativa y en el
Esta tesis que considera no pertinente la in- cumplimiento de sus fines y objetivos. Si un
vocación de normas de la LGS como referente asociado está interesado por el desarrollo de
para tratar el presente tema es incorrecta. Si su asociación, si está preocupado por sus inte-
bien la LGS regula a las Personas Jurídicas reses y los de los demás socios, buscará estar
Lucrativas, el carácter y la sustancialidad de las informado de lo que sucede, y qué situación
personas jurídicas lucrativas y a las no lucrati- puede ser más trascendente que las decisiones
vas es el mismo. Respetando las autonomías y que tome el órgano más importante de la
las particulares características, que se reducen persona jurídica.
esencialmente al reparto del patrimonio neto El asociado que se desvincula del desenvol-
resultante, la Persona Jurídica es una sola y vimiento de la asociación por años, que no
Esta norma es la especial que debe imperar Estas excepciones al derecho de impugnar los
sobre la aplicación del artículo 219 del cc. acuerdos tienen que ver fundamentalmente
en cuanto a los plazos. No significa que no con el plazo para hacerlo que, reitero, es un
sea una norma que no regule la invalidez o plazo breve por la naturaleza de la persona
la ineficacia negocial. Nadie ha señalado tal jurídica y por la necesidad que los acuerdos
cosa. El hecho es que la pretensión impug- alcancen una rápida consolidación para ge-
nativa para determinar si el acuerdo es nulo nerar seguridad jurídica y predictibilidad con
o anulable se hará en un plazo breve; de lo las decisiones del ente colectivo, que las hace
contrario, el derecho para activar el proceso conocer a través de sus órganos. La persona
de impugnación de acuerdos caducará. Esta jurídica (ente) expresa su voluntad a través
norma tiene los siguientes aspectos que del órgano que está ensimismado en la misma
es necesario que se traten de una manera (teoría orgánica, promovida por el profesor
adecuada2: austriaco Otto Von Gierke).
El Considerando 174 de la sentencia señala:
2 CIEZA MORA, Jairo, Problemática de la nulidad y la
impugnación de los acuerdos de las sociedades y asocia-
ciones. Análisis doctrinario, legislativo y jurisprudencial, Gaceta Jurídica, Lima, 2012.
La norma incluso permite la legitimación pasiva del El Considerando 186 de la sentencia señala:
asociado que quiera defender la “validez del acuerdo”,
con lo cual se resalta nuevamente la trascendencia Son susceptibles de impugnación los acuerdos de la
de los acuerdos vulnerados y el vicio materia de Asamblea General, Consejo Directivo, así como de
impugnación, toda vez que un acuerdo inválido es todo órgano creado en la citada persona jurídica no
un acuerdo que no produce efectos en la realidad al lucrativa.
haberse estructurado indebidamente, y por tanto, de
estimarse la impugnación la resolución que declare la
invalidez del acuerdo no es otra cosa que la declaración
IMPORTANTE
de nulidad de este.
Con relación al objeto de la pretensión, cuya estructura La impugnación de acuerdos es la
tiene un pedido y una causa de pedir, corresponde vía en todos los casos, inclusive en el
señalar que a través de la pretensión impugnatoria se supuesto de la invocación de las fir-
realiza un pedido de ineficacia, esto es, de nulidad o mas falsas o en la formación de una
de anulabilidad, precisándose en la causa de pedir la voluntad imperfecta de la persona
fundamentación correspondiente a dichas ineficacias jurídica por la carencia de quórum
estructurales, las causales en que se sustenta que puede
ser de nulidad, anulabilidad, así como las normas que
o de mayorías en la construcción del
permitan establecer vicios estructurales en el acuerdo acuerdo asociativo.
impugnado.
La pretensión impugnatoria de asociación busca Tema interesante planteado en este conside-
finalmente la ineficacia del acuerdo adoptado, estable- rando es que se puede impugnar un acuerdo
ciéndose en el artículo 92 del Código Civil los acuerdos de Consejo Directivo, a pesar de no ser el
que pueden ser cuestionados a través de la misma, esto
órgano máximo de la persona jurídica e,
es “(...) Acuerdos que violen las disposiciones legales
o estatutarias (...)”, los cuales, como consecuencia de inclusive, se señala que se pueden impugnar
la impugnación serán declarados nulos, al contravenir acuerdos tomados por otros órganos de la
la normativa vigente y el estatuto de la Asociación persona jurídica.
Civil, vulnerando la voluntad de los que conforman la
persona jurídica en su acto originario. Esto da pie a interpretar que se podría cues-
Con respecto a ello, cabe precisar que constituyen por tionar acuerdos (vía judicial) tomados por una
tanto supuestos de suma gravedad, que en caso de Junta de Calificación de la Asociación o una
estimarse la impugnación del acuerdo, el efecto que Junta de Disciplina o una Junta de Economía
se producirá conforme al ordenamiento jurídico, lo
de la persona jurídica, situación que traería
reiteramos, será la declaración de nulidad del mismo.
(resaltado nuestro) no pocos problemas.
Con este argumento de la Corte Suprema, Considero que sí se pueden impugnar judi-
se desestima aquella posición que considera cialmente acuerdos del Consejo Directivo so-
que se estarían sometiendo o subsumiendo lamente cuando estos no sean y revisables por
las invalideces negociales a la impugnación la Asamblea General de Asociados. En caso
judicial de acuerdos5. No es así, como ya lo tenga la posibilidad de la revisión por parte
he señalado antes. Lo que sucede es que la del máximo órgano de la persona jurídica,
impugnación judicial de acuerdos es una ma- estos acuerdos no podrán ser impugnados ex
nera o modalidad de las ineficacias negociales artículo 92 del CC.
en las personas jurídicas, sometida a ciertas
particularidades como el plazo de caducidad Con respecto a la impugnación de acuerdos
(aplicación de la norma especial). de otros órganos no obligatorios de la persona
jurídica, no considero pertinente su impugna-
ción, pues estos acuerdos deben ser siempre
5 MORALES HERVIAS, Rómulo, “¿La impugnación o la
ratificados por la Asamblea General, cuyo
invalidez de los negocios jurídicos unilaterales cole- acuerdo sí podrá ser cuestionado a través de
giales asociativos?”, en Diálogo con la Jurisprudencia, la acción de impugnación de acuerdos.
T. 190, Lima, 2014, p. 23.
Como ya mencioné en otro trabajo, los pla- de consentimiento ni de la incapacidad, a menos que
zos breves tienen una racionalidad social y ésta afecte a todos los socios fundadores.
económica6. La nulidad de la sociedad tampoco podrá tener su
causa en las cláusulas prohibidas por el artículo 1844-1
Sin perjuicio del análisis que se hará de algu- del Código Civil.
nas legislaciones, veamos algunos referentes
La nulidad de actas o acuerdos que no sean los previs-
en materia comparada de plazos breves (de tos en el párrafo precedente sólo podrá ser motivada
caducidad) en impugnación judicial de acuer- por infracción de una norma imperativa del presente
dos. Para esto, hay que quitarse las anteojeras libro o de las leyes que regulen los contratos”.
de ver a las asociaciones desligadas de otras
En Argentina, caso que veremos en detalle
personas jurídicas.
posteriormente, la Ley 19.550 de Sociedades
Reitero que todas las personas jurídicas Comerciales establece:
tienen una naturaleza común y el destino
Artículo 251.- Toda resolución de la asamblea
del patrimonio neto resultante no es motivo adoptada en violación de la ley, el estatuto o el
suficiente para desconocer los aspectos que reglamento, puede ser impugnada de nulidad por
concurren o coinciden en estos entes colecti- los accionistas que no hubieren votado favorable-
vos, para mejorar su desarrollo, para propiciar mente en la respectiva decisión y por los ausentes
su dinamismo; en fin, para el logro de sus que acrediten la calidad de accionistas a la fecha de
la decisión impugnada. Los accionistas que votaron
objetivos. Es injusto que el dinamismo sea el
favorablemente pueden impugnarla si su voto es
monopolio de las sociedades lucrativas y el anulable por vicio de la voluntad.
burocratismo, la ineficiencia, la lentitud y la
También pueden impugnarla los directores, síndicos,
incertidumbre sea el carácter que queramos
miembros del consejo de vigilancia o la autoridad de
imprimir a las asociaciones u otras personas contralor.
jurídicas no lucrativas.
Promoción de la acción.
El Código de Comercio panameño esta- La acción se promoverá contra la sociedad, por ante
blece: el Juez de su domicilio, dentro de los tres (3) meses
de clausurada la asamblea”.
Artículo 418. Todo accionista tendrá derecho a
protestar contra los acuerdos de la Junta General de Sobre la responsabilidad civil de los accionis-
Accionistas tomados en oposición a la Ley, al Pacto tas que votaron lo acuerdos nulos se señala:
Social o los Estatutos, pidiendo, dentro del término
fatal de treinta (30) días, demandar la nulidad Artículo 254.- Los accionistas que votaran favorable-
ante el Juez competente, quien si lo considera de mente las resoluciones que se declaren nulas, respon-
urgencia, podrá suspender la ejecución de lo acorda- den ilimitada y solidariamente de las consecuencias
do hasta que quede resuelta la demanda. En ningún de las mismas, sin perjuicio de la responsabilidad que
caso se procederá a dicha suspensión si el accionista corresponda a los directores, síndicos e integrantes del
al demandar escoge la vía ordinaria. (el resaltado consejo de vigilancia.
es nuestro).
En el caso de Colombia, la Ley 1727 de 2014
El Código de Comercio de Francia prescribe: (Reforma del Código de Comercio) determina:
Artículo L. 235-1. -La nulidad de una sociedad o “Artículo 191.- Impugnación de las decisiones de la
de un acta que modifique los estatutos sólo podrá asamblea o junta de socios
provenir de una disposición expresa del presente libro
o de las leyes que regulen la nulidad de los contratos. Los administradores, los revisores fiscales y los socios
En lo referente a las sociedades de responsabilidad ausentes o disidentes podrán impugnar las decisiones
limitada y a las sociedades por acciones, la nulidad de la asamblea o de la junta de socios cuando no se
de la sociedad no podrá ser por causa ni de un vicio ajusten a las prescripciones legales o a los estatutos.
La impugnación sólo podrá ser intentada dentro, a
6 CIEZA MORA, Jairo, “La prescripción extintiva en menos que se trate de acuerdos o actos de la asamblea
materia alimentaria y la racionalidad del tiempo”, que deban ser inscritos en el registro mercantil, caso en
en AA.VV., Patria potestad, tenencia y alimentos, Gaceta el cual los dos meses se contarán a partir de la fecha de
Jurídica, Lima, 2014.
En la misma norma el Articulo 66 (“Impug- Para que los acuerdos se inscriban en los
nación de los acuerdos del Consejo Rector”), Registros Públicos, es necesario que pasen el
establece que: filtro del registrador que lo superen y recién se
podrán inscribir. Así que en los actos inscritos
4- Las acciones de impugnación de acuerdos nulos o como la elección de un Comité electoral y el
anulables, caducaran por el transcurso de dos me-
de un Consejo Directivo, como ese el caso
ses desde que tuvieren conocimiento del acuerdo
y siempre que no haya transcurrido un año desde de la presente casación, no se puede alegar
su adopción. desconocimiento. Esto si nos basamos en el
principio de publicidad del artículo 2012 del
En el caso de la Ley 4/1997, de 24 de marzo
CC7 que establece una presunción iure et de
de Sociedades Laborales, se señala:
iure: alegar una situación distinta es descono-
Artículo 13.- Impugnación de acuerdos sociales cer la relevancia de la publicidad registral y la
1. Podrán ser impugnados los acuerdos de las Juntas presunción otorgada, dada su importancia en
de socios que sean contrarios a la Ley, se opongan las relaciones sociales y económicas.
a los estatutos o lesionen, en beneficio de uno
o varios socios o de terceros, los intereses de la Ahora dirán que la inscripción en el Registro
sociedad. de los Acuerdos es un procedimiento muy
2. Si el acuerdo impugnado afectase a la composición sencillo porque se hace con declaraciones
del capital o al cambio de domicilio fuera del juradas basadas legalmente en el Reglamento
término municipal, el Juez que conozca del proce- de Personas Jurídicas no societarias, y que
dimiento pondrá en conocimiento del Registro de muchas veces se falsean estas declaraciones
Sociedades Laborales la existencia de la demanda juradas por los presidentes de los consejos
y las causas de impugnación, así como la sentencia directivos o quienes tengan interés en inscri-
que estime o que desestime la demanda.”
bir fraudulentamente actos relevantes. Debo
1. Finalmente el Real Decreto Legislativo 1/2010, de
recordar aquí el origen de estas declaracio-
2 de julio por el que se aprueba el Texto Refundido
de la Ley de Sociedades de Capital, establece: nes juradas para los actos inscribibles y que
dieron pie a la dación de dos resoluciones: la
Artículo 205.- Caducidad de la acción de impug- 202-2001-SUNARP/SN y 331-2001-SUNARP/
nación SN del año 20018.
1. La acción de impugnación de los acuerdos nulos
caducará en el plazo de un año. Quedan exceptua-
dos de esta regla los acuerdos que por su causa o 7 Artículo 2012 del CC: “Se presume, sin admitirse
contenido resultaren contrarios al orden público. prueba en contrario, que toda persona tiene conoci-
2. La acción de impugnación de los acuerdos anula- miento del contenido de las inscripciones.”
bles caducará a los cuarenta días. 8 Sobre la evolución de las Resoluciones 202-2001
-SUNARP/SN y 331-2001-SUNARP/SN del año
2001, El artículo 44 del Reglamento de Personas
Si bien la inexistencia, tal como se anotó, no forma contrato disconforme con sus prescripciones y que
parte del sistema de las ineficacias por pertenecer es, pues, el resultado de una valoración normativa
al juicio de irrelevancia, es importante conceptuar del acto, presupone siempre la existencia de éste
tal instituto, el mismo que “De acuerdo con la (si el contrato no existe, carecería por completo de
opinión tradicional, todavía predominante, en sentido indagar si es o no válido)”.
estricta lógica jurídica debe identificarse siempre
Así pues, consideramos que la invalidez y la in-
con la nulidad, derivada igualmente de ausencia
eficacia deben distinguirse de la inexistencia, “la
de algún elemento esencial del acto. En tanto que
cual está más allá de la nulidad: es inexistente el
siguiendo el criterio empírico y moviéndose en
contrato o el acto que no es identificable como
el terreno de los hechos, se abre la posibilidad
tal, pues carece del mínimo esencial que permite
de perfilar una noción de inexistencia (material)
hablar de un cierto evento como de contrato o acto
diferente de la inexistencia jurídica o nulidad.
unilateral. La importancia de la distinción entre nu-
Según esta teoría opuesta a aquella, la inexistencia
lidad e inexistencia se encuentra en lo siguiente: el
se distingue de la nulidad en el ámbito del derecho,
contrato o el acto inexistente no produce aquellos
porque constituye un vicio más grave y radical,
efectos limitados que (…), el contrato o el acto
que excluye la propia posibilidad de identificar el
nulo producen”12
contrato como tal (por lo cual tampoco necesita
expresa estatuición normativa)”10. Si bien, se equi- En el formante doctrinario nacional Rómulo Mo-
para la inexistencia con la nulidad, por parte de un rales Hervias, en un desarrollado y documentado
sector de la doctrina, SCOGNAMIGLIO11 considera trabajo13 justifica y argumenta la necesidad de
la necesidad de la distinción entre estos dos insti- contar con la figura de la inexistencia en nuestro
tutos, pues basta decir que “la nulidad, que obra ordenamiento jurídico para lo cual se provee de la
como mera sanción del ordenamiento frente al mejor doctrina y jurisprudencia comparada. Y nos
10 BETTI. Teoria generale del negozio giuridico, Torino, 12 GALGANO, Francesco, El negocio jurídico, traducido
1995, p. 473; SANTORO-PASSARELLI, Dottrine por BLASCO GASCO y PRATS ALBENTOSA, Tirant
generali del diritto civile, Napoli, 1959, pp. 236 y ss, y lo Blanch, Valencia 1992,261), citado por ESPINO-
ampliamente SCOGNAMIGLIO, Contributo all teoria ZA ESPINOZA, Juan, en el prólogo al trabajo de
del negozio giuridico, pp. 360 y ss.) p. 227, citado PALACIOS MARTÍNEZ, Eric. La nulidad del negocio
por SCOGNAMIGLIO, Op. Cit p.228. Al respecto el jurídico. Jurista Editores, Lima, 2002. p. 31. Así
propio SCOGNAMIGLIO (Op. cit., p. 228) refiere: el prestigioso autor italiano señala que, “Razones
“De donde se sigue que la inexistencia, por cuanto se técnicas justifican mantener la inexistencia como
refiere en últimas al no ser del contrato, y por tanto, figura autónoma: únicamente el negocio nulo puede
algo que esta fuera de toda calificación jurídica, tiene ser salvado mediante su conversión en otro negocio
siempre un significado para el derecho, toda vez que válido o mantenido como putativo, como es el valor
permite identificar una figura y una causa autónoma de la letra nula como reconocimiento de deuda en
de irrelevancia e ineficacia del contrato (...). “Claro el primer caso y la validez del matrimonio nulo del
está, y esto apenas hay para qué decirlo, que la noción cónyuge de mala fe, en el segundo caso. Se requiere
de inexistencia no tiene alcances en aquellos casos entonces de una figura extrema que impida toda
en los que no hay ni siquiera rastros de contrato: posibilidad de convalidación y esa figura es la de
El interés surge precisamente en las hipótesis de los inexistencia del negocio jurídico”. Así también es
confines, cuando el recurso a dicha noción se revela pertinente reseñar lo expuesto por SCOGNAMIGLIO
oportuno con el fin de una sistematización correcta (Op. cit. P. 228) quien dice: “Cualquier incertidumbre
de no pocas figuras controvertidas de anomalía del que subsistiere acerca de la distinción en su realidad
contrato. Así, yendo a ejemplos mencionados con jurídica, desaparecería delante del argumento que
anterioridad, debe hablarse de inexistencia, pues ofrece la relevancia y eficacia excepcionales que el
no sería apropiado pensar en invalidez, a propósito derecho concede al contrato nulo. Nos referimos a
del contrato que resulta estipulado en el curso de un los llamados efectos indirectos (del contrato nulo) a su
juego o chanza, o dentro de una exposición didáctica conversión y a su saneamiento excepcional, que son
o en el escenario en medio de una representación; otras tantas instituciones características de la figura de
también ha de considerarse inexistente el Contrato la nulidad (...). Por el momento nos contentamos con
cuando no se alcanzó a producir el encuentro de la destacar que estas soluciones normativas obedecen,
propuesta con la aceptación; cuando su función típica de modo más o menos inmediato, a la necesidad
es irrealizable (p.ej. la compra venta de cosa propia), o general de conservación del contrato nulo, que de
cuando el contrato típico no satisface intereses dignos por sí presupone la existencia; cosa que no podría
de tutela por parte del ordenamiento o se encamina a predicarse correctamente en las hipótesis de inexis-
una función no admitida por este p. ejm. Los pactos tencia del contrato”.
sucesorales”. 13 MORALES HERVIAS, Rómulo, Estudios sobre teoría
11 SCOGNAMIGLIO, “Contributto ...” Op. cit. p. 227. general del negocio jurídico, ARA, Lima, 2002, p. 250.
En un reciente trabajo Morales Hervías22 señala cualquier persona puede invocar en todo tiempo
que “Un negocio jurídico –y un contrato por la inexistencia jurídica, independientemente de la
antonomasia- es inexistente si no se hallan sus declaración judicial. Otra cuarta ventaja es para el
propios elementos de identificación productos del caso de la extinción del derecho de pedir judicial o
nombre que lo designa. Pensamos que el contrato arbitralmente la nulidad. (…) Este caso demuestra
tiene cinco elementos. Las partes, el acuerdo, la una vez más que la inexistencia puede invocarse
causa, el objeto y la formalidad obligatoria son cuando transcurra el plazo de diez años el cual
los elementos del contrato. Si falta alguno de es- produce inexorablemente la extinción del derecho
tos elementos, el contrato será nulo o inexistente de la nulidad pero el nacimiento del derecho de
según la normativa de cada código civil. En Italia, la inexistencia.”24
la ausencia del acuerdo, de la causa, del objeto o
Sobre la distinción entre invalidez e inexistencia
de la formalidad obligatoria produce la nulidad del
se establece que: “La invalidez se distingue de
contrato. (…) En cambio expresamente la ausencia
la inexistencia. En efecto, la invalidez supone la
de acuerdo produce la inexistencia (artículo 1359
presencia de un acto de autonomía privada al
del C.C.). El artículo 1325 del Código Civil italiano
cual puede dársele la calificación de “negocio”. La
señala como requisitos del contrato a los siguien-
inexistencia, en cambio, supone la ausencia de tal
tes: 1) El acuerdo de las partes; 2) La causa; 3) El
acto, de modo que resulta vano cualquier intento
objeto; y 4) La forma, cuando resulta prescrita por
por otorgar la referida calificación.25
la Ley bajo sanción de nulidad. El segundo párrafo
del artículo 1418 indica que producen la nulidad En contra de la inexistencia en el plano de la praxis
del contrato, la falta de alguno de los requisitos se ha pronunciado Fort Ninamancco Córdova26,
indicados por el artículo 1325”. Creemos que la quien no niega su valor teórico pero no encuentra
categoría de la inexistencia es no prescindible en relevancia en una incorporación en nuestro código,
el análisis de las patologías del negocio pues hay señalando que absorbiendo todo en la categoría de
supuestos de hecho en los cuales ni siquiera existe la nulidad se pueden acoplar aquellos supuestos
la apariencia del negocio que los vincule con su de hecho que para otros autores constituyen la
denominación y por lo tanto requiere un remedio inexistencia.
de mayor incidencia que la nulidad que permite
Comenta Ninamancco, tomando el matrimonio
el salvamento del negocio a través de figuras que
como institución histórica que “En conclusión,
como la conversión.
los exégetas, refiere Gabriel Baudry Lacantinerie,
El mismo Morales refiriéndose al Anteproyecto consideraban que la nulidad implicaba al menos
del Código Europeo de los Contratos señala que una existencia precaria del matrimonio que se
“(…), no cabe duda que la inexistencia puede encontraba acompañada de ciertos efectos legales,
servir de mucha utilidad en la praxis. De ahí más la inexistencia no implicaba siquiera el menor
que consideramos que la inexistencia es la primera vestigio de un matrimonio y, por ende, carecía por
forma patológica del contrato. Hay inexistencia de completo de efectos.”27
un negocio cuando sea irreconocible como figura
examinada o cuando no sea reconocida como
aquella hipotetizada.”23 (El resaltado es nuestro) 24 Ibídem, p.195-196. El autor concluye su adhesión a
la figura de la inexistencia señalando: Con las pre-
Para justificar la incidencia en la práctica de la cisiones indicadas, el contrato será inexistente si ha
inexistencia el autor señala: “Adicionalmente la sido previsto normativamente e inexistente si no se
importancia de la categoría de la inexistencia formó conforme a la normativa. La ausencia de los
puede apreciarse en cuatro ventajas. Por un lado elementos del contrato o su formación incompleta
ella desarrolla la función de delimitar en negativo son las causales de inexistencia. También se puede
el área de la nulidad en el sentido de excluir la utilizar indistintamente las expresiones “relevancia”
aplicación de la relativa regulación a las hipótesis o “irrelevancia” jurídica dependiendo si el contrato
de irreconocibilidad del acto concreto en el hecho es relevante o no para la normativa prevista hipoté-
jurídico [fattispecie] negocial de referencia, es decir, ticamente” p. 198.
la noción de contrato. De otro lado, ella se revela 25 ESCOBAR ROZAS, Freddy, “Comentario al artículo
útil para el intérprete ante las lagunas legislativas 219 del Código Civil”. En: Código Civil comentado, T.
en el tema de la invalidez de los actos. (…) Y la I, Gaceta Jurídica, Lima, 2003.p. 914
tercera ventaja –y quizá la más importante- es que 26 NINAMANCCO CÓRDOVA, Fort, ¿Realmente la inexis-
tencia del negocio jurídico es algo diferente a la nulidad
en el código civil peruano? Ser o no ser, esa es la cues-
22 MORALES HERVIAS, Rómulo. Patologías y remedios tión: el ser y el no ser del negocio jurídico”, Actualidad
del contrato, Jurista Editores, 2011, p. 193. Jurídica, T. 206, 2011.
23 Ibídem, p.195. 27 NINAMANCCO CÓRDOVA, Fort, Se ha señalado
corresponde señalar en primer término que la Nótese que la norma societaria utiliza normas
inexistencia en nuestro ordenamiento jurídico no del derecho civil para sustentar la legitimidad
se encuentra regulada, toda vez que “(...) el Código
de los que cuentan con interés legítimo al
Civil peruano solamente reconoce dos modalidades
de invalidez o ineficacia estructural: la nulidad y señalar: “Procede la acción de nulidad para
la anulabilidad, y en modo alguno se refiere a la invalidar los acuerdos de la junta contrarios a
inexistencia como categoría principal o accesoria normas imperativas o que incurran en causales
de ineficacia. Ello es así por cuanto la inexistencia de nulidad previstas en esta ley o en el Código
es una categoría de ineficacia que sólo se acepta
en los sistemas que no aceptan la nulidad virtual
Civil.” No abordar el estudio de la LGS para
(...)”, como es el caso del ordenamiento peruano; confrontar la dinámica del artículo 92 del cc.
no obstante, en el caso que se alegue la inexistencia es un error. La propia norma societaria habla
del acto jurídico, como en el presente proceso, se de “causales de nulidad previstas en esta ley”
reitera que deberá entenderse que se están alegan-
do los supuestos de ineficacia estructural regulados
(se refiere a la LGS) o en el Código Civil (se
en el Libro II del Código Civil, empero la pretensión refiere al art. 219 del cc.).
deberá formularse dentro de los plazos establecidos
El análisis de la impugnación de acuerdos y sus
por el artículo 92 del Código Civil.
consecuencias no puede ser parcelado como
Efectivamente el artículo 150 de la LGS señala si la persona jurídica no lucrativa y lucrativa
el plazo de caducidad para los acuerdos nulos fueran ínsulas sin conexión e interrelación. No
de la siguiente manera: son, pues, impertinentes, como se ha dicho,
Procede la acción de nulidad para invalidar los
las invocaciones a la legislación, la doctrina o
acuerdos de la junta contrarios a normas imperati- la jurisprudencia societaria. Es más, en este
vas o que incurran en causales de nulidad previstas punto, la norma societaria nos permite apre-
en esta ley o en el Código Civil. Cualquier persona ciar que en el caso de los terceros con legítimo
que tenga legítimo interés puede interponer acción interés debemos seguir el camino de la LGS
de nulidad contra los acuerdos mencionados en el
párrafo anterior, la que se sustanciará en el proceso
en nuestro c.c. pues tal como está redactado
de conocimiento. La acción de nulidad caduca al permite que un tercero con legítimo interés
año de la adopción del acuerdo respectivo. pueda invocar la nulidad de un acuerdo, uti-
lizando el plazo de prescripción de la nulidad
Esta norma societaria nos permite apreciar
de un acto jurídico ya que el artículo 92 del
que los plazos cortos o breves de caducidad
cc. solamente se refiere a los asociados. Esto
se dan también, sobre todo en la LGS tal como
debe servir para una modificación o adición
se aprecia en la norma glosada. Es un error
legislativa que será de provecho a los opera-
desligar el análisis conjunto de las personas
dores jurídicos.
jurídicas societarias y las no societarias pues se
pierde perspectiva y visión de conjunto para
afrontar la interpretación en casos como el de ¿SABÍA Usted QUE?
análisis. En esta norma societaria, se estable-
cen también quienes tienen legitimación para Si bien la Ley General de Sociedades
cuestionar el acuerdo en el plazo breve de regula a las personas jurídicas lucrati-
un año y se refiere a los que tengan legítimo vas, el carácter y la sustancialidad de
interés (situación jurídica de ventaja inactiva). estas y las no lucrativas es el mismo.
Mi interpretación es que solamente pueden
utilizar este plazo de caducidad aquellos suje-
tos distintos a los accionistas que se ven afec-
4. No se trata de una subsunción de
tados en sus intereses, pues para el caso de los
las invalideces en la impugnación
accionistas se ha previsto el artículo 139 de la judicial de acuerdos
LGS que regula la impugnación de acuerdos Ya en su oportunidad he señalado que las
propiamente dicha y también la anulabilidad ineficacias negociales son perfectamente apli-
de acuerdos bajo los criterios del código civil. cables a la impugnación judicial de acuerdos
Asimismo el autor citado desarrolla un acápite refe- 26887)35 establece que pueden ser impug-
rido a los denominados “negocios impugnables”33, nados judicialmente los acuerdos de la Junta
en el cual establece que “aunque de los actos sim-
General cuyo contenido contravenga la ley, el
plemente ineficaces no puede siquiera establecerse
una teoría general por ser muy diversas las causas estatuto o el pacto social, o que lesionen los
a que obedecen, sí pueden, en cambio, enunciarse intereses de la sociedad en beneficio directo
las normas comunes a los actos denominados im- o indirecto de uno o varios accionistas.
pugnables que se forman y hasta se perfeccionan
válidamente y producen sus efectos propios, pero Asimismo el artículo citado indica que los
que después quedan privados de efectos por causas acuerdos que incurran en causal de anulabi-
extrínsecas y de la más variada naturaleza34 lidad previstas en la ley o en el Código Civil
Como se puede apreciar, se hace referencia a también serán impugnables en las formas
los “negocios impugnables” y dentro de estos se y plazos que señalan la ley. Al respecto, la
ubican los acuerdos asociativos. Si bien el nomen doctrina nacional señala que esta norma
juris es el de “impugnación judicial de acuerdos”, no distingue entre actos o acuerdos nulos y
estos deben ser auscultados bajo la mirada de las anulables como sí lo hace la Nueva ley de
ya mencionadas ineficacias negociales. Sociedades Anónimas de España, aprobada
por Real Cédula N.° 1564 de 1989.
5. Los acuerdos nulos y anulables en El artículo 115 de dicho Cuerpo legal con-
nuestra legislación societaria, y en sidera como acuerdos nulos los acuerdos
la legislación española y argentina contrarios a la ley, señalando que los demás
están dentro de la categoría de las acuerdos (es decir, los contrarios al estatuto o
ineficacias negociales que lesionen los intereses de la sociedad) son
anulables, distinción que acarrea importantes
En materia societaria, el texto del artículo 139
diferencias respecto a la legitimación activa,
de la Ley General de Sociedades (Ley N.°
respecto a los plazos de caducidad y también
en lo concerniente a las vías procesales”36.
ción y notas del derecho español por Jaime Santos El profesor español en materia mercantil, Ra-
Briz, Editorial Revista de Derecho Privado, Madrid,
pp. 123 y ss.
fael Jiménez de Parga37, nos comenta que el
33 Ibídem, pp. 124-126.
34 Una de estas causas extrínsecas es “el fraude en 35 Artículo 139: Acuerdos Impugnables “Pueden ser
perjuicio de los acreedores, que produce la revoca- impugnados judicialmente los acuerdos de la Junta
ción del acto oneroso o gratuito, (artículo 2901 y ss. General cuyo contenido sea contrario a esta ley, se
oponga al Estatuto o al Pacto Social o lesione, en
del CC. Español) mediante el cual el deudor quedó
beneficio directo o indirecto de uno o varios accio-
insolvente”. Ibídem, p. 125. El autor repara en que nistas, los intereses de la sociedad. Los acuerdos que
los negocios impugnables tiene mucha semejanza incurran en causal de anulabilidad prevista en la Ley
con los anulables y al mismo tiempo se distinguen o el Código Civil, también serán impugnables en
de estos por diversas causas, de modo que no sería los plazos y formas que señala la ley. No procede la
exacto asimilarlos completamente. La semejanza impugnación cuando el acuerdo haya sido revocado,
radica en que los actos impugnables, al igual que o sustituido por otro adoptado conforme a ley, al
los anulables, producen sus efectos hasta que sean pacto social o al Estatuto. El juez mandará tener por
privados de eficacia. Esto se deduce del hecho de concluido el proceso y dispondrá el archivo de los
que ambos negocios se constituyen válidamente de autos, cualquiera que sea su estado, si la sociedad
manera que para pedir que tengan eficacia o para acredita que el acuerdo ha sido revocado o sustituido
producir los efectos ya producidos es preciso hacer conforme a lo prescrito en el párrafo precedente. En
valer- comúnmente en juicio- la causa específica de los casos previstos en los dos párrafos anteriores, no
impugnación establecida por el legislador (...). La se perjudica el derecho adquirido por el tercero de
ineficacia del negocio se produce generalmente por buena fe”.
sentencia judicial, salvo en caso de contrato bilateral 36 HUNDSKOPF EXEBIO, Oswaldo, El derecho de impug-
por incumplimiento, para el cual es suficiente, si la nación … op. cit, p. 21
parte así lo prefiere, la declaración del contratante 37 JIMÉNEZ DE PARGA, Rafael, “La impugnación de
fiel al negocio de que éste queda disuelto de derecho acuerdos sociales en la Ley Reguladora de la Sociedad
si el deudor persiste en el incumplimiento una vez Anónima”. En Estudios Jurídicos sobre la sociedad
terminado el plazo fijado en la intimación a pagar. anónima, Madrid, Editorial Civitas, 1995, p. 321,
Como indica Nissen42: la sociedad, para quienes las deficiencias que han
afectado a la constitución de la sociedad o el regu-
Cabe sostener que en ausencia de soluciones lar funcionamiento de sus órganos son cuestiones
específicas, en especial en cuanto a los efectos de que le resultan extrañas.
la nulidad del acuerdo asambleario, se debe recurrir
al ordenamiento civil, como consecuencia de lo Es, por tanto, impensable considerar, al menos
dispuesto por el artículo 384 de la ley 19550, que como principio general, que el acuerdo social
al incorporarse al Código de Comercio, hace proce- que ha sido ejecutado o ha tenido principio de
dente la remisión al Código Civil de conformidad ejecución, debe ser tenido, frente a una decisión
con las normas antes descritas. judicial invalidatoria, como si nunca hubiera sido
celebrado, pues ello no sería otra cosa que una
Sin embargo, una breve lectura de los artículos ficción jurídica incompatible con la verdad de lo
1037 a 1065 del Código Civil argentino43 nos de- acontecido y fuente de injusticias y perjuicios para
muestra la improcedencia de la aplicación in totum terceros de buena fe.
de esas disposiciones al tema que nos ocupa, sobre
todo por la naturaleza del contrato de sociedad, Basta imaginar los perjuicios que ocasionaría al
considerado por el propio legislador como un tráfico mercantil y la inseguridad que generaría la
contrato plurilateral de organización que no se aplicación del art. 1050 del CC frente al supuesto
agota con el cumplimiento de las prestaciones por de declararse la nulidad de la designación de un
parte de los socios, sino que supone una actividad determinado directorio, pues de ello debería de-
permanente dentro del tráfico mercantil. Ello des- rivarse la nulidad de toda contratación efectuada
carta muchas de las previsiones establecidas por el por ese órgano de administración con posterioridad
Código Civil en materia de nulidad, pensadas casi a su viciosa designación, lo cual es sencillamente
exclusivamente para los actos jurídicos bilaterales, impensable.
cuya consecuencia no es otra cosa que la vuelta
de las cosas a su estado originario, como si el acto
Esta argumentación tan claramente expresada
viciado nunca hubiera sido celebrado (artículo por Nissen puede aplicarse perfectamente a
1050 del CC argentino). nuestra realidad jurídica, no solamente en el
Ello, como fácil es imaginar, no es compatible con el caso de los efectos generados por las decisio-
derecho de las sociedades, pues la aplicación del nes de los órganos de sociedades anónimas;
artículo 1050 del Código Civil afectaría legítimos sino también en el caso de las asociaciones
intereses de los terceros que han contratado con o a las personas jurídicas sin fines de lucro
en general, en donde la invalidez declarada
judicialmente de los actos que hayan sido
de los socios , dirigiendo la voluntad social en una
dirección opuesta la interés común, que es la razón
expedidos por los órganos asociativos respecti-
de ser del contrato de sociedad. vos (Asamblea General, Consejo Directivo) no
42 NISSEN, Ricardo A. Impugnación judicial de actos y puede perjudicar los derechos adquiridos de
decisiones asamblearias. Ediciones De Palma, Buenos terceros de buena fe ni perjudicar el normal
Aires, 1989, p. 65. desenvolvimiento del ente44.
43 Art. 1037.- Los jueces no pueden declarar otras nulidades
de los actos jurídicos que las que en este Código se esta- Como lo comenta Joe Navarrete: solo deberá
blece. Art. 1038.- La nulidad de un acto es manifiesta, anularse el acuerdo cuando la participación
cuando la ley expresamente lo ha declarado nulo, o le ha
impuesto la pena de nulidad. Actos tales se reputan nulos
aunque su nulidad no haya sido juzgada. Art. 1045.- Son 44 Tal es el caso presentado por el cuestionamiento a la
anulables los actos jurídicos cuando sus agentes obrasen elección del Rector de la Universidad Nacional Mayor
con una capacidad accidental, cuando si por cualquier de San Marcos (Persona Jurídica de Derecho Público),
causa se hallasen privados de su razón, o cuando no fue en el cual se demandó judicialmente la nulidad del
conocida su incapacidad impuesta por la ley al tiempo acto asambleario que lo designaba, por no haberse
de formarse el acto, o cuando la prohibición del objeto tomado en cuenta los votos de los docentes que tenían
del acto no fuese conocida por la necesidad de alguna más de 65 años. Si bien es cierto el proceso está en
investigación de hecho, o cuando tuviera el vicio de curso, en el supuesto que se declarase la anulación
error, violencia fraude o simulación y si dependiese para del acto asambleario esta nueva situación no podría
su validez de su forma instrumental, y fuesen anulables acarrear la nulidad de todos los actos que en sus
los respectivos instrumentos, Art. 1046.- Los actos mas de dos años en el cargo ha suscrito el rector en
anulables se reputan válidos mientras no sean anulados, su calidad de presidente de la Asamblea y Consejo
y solo se tendrán por nulos desde el día de la sentencia Universitarios, pues generaría una total inestabilidad
que los anulase. y anarquía.
porque cada vez que el legislador impone una legislación argentina es, por la índole de los
norma con carácter obligatorio y veda a los intereses afectados, de carácter imprescripti-
interesados apartarse de sus prescripciones es ble y el acto viciado no puede ser objeto de
porque considera que hay un interés social confirmación por asamblea posterior”55.
comprometido en su cumplimiento; o, resu-
No concuerdo con esta posición asumida
miendo, porque se trata de una ley de orden
por tan respetada doctrina; puesto que en
público. En definitiva, concluye este autor que
las asociaciones o en las personas jurídicas
“leyes imperativas y leyes de orden público
no lucrativas no se puede mantener un plazo
son conceptos sinónimos”.52 53
imprescriptible sujeto a las normas del Có-
En la legislación especial argentina (Ley N° digo Civil en aquellos actos contrarios a la
19550), a diferencia de otros cuerpos lega- ley. Considero que, en este supuesto, si bien
les54, no se aprecia norma expresa sobre las deben analizarse los presupuestos, elementos
dos clases de acciones para atacar los acuerdos o requisitos del negocio jurídico para determi-
adoptados en asambleas de accionistas: una nar su eventual nulidad, el plazo en que debe
de ellas es la prevista por los arts. 251 al pretenderse la impugnación de acuerdos debe
254 de la Ley N° 19550, que se refiere a ser un plazo breve y no uno de diez años,
la impugnación de acuerdos asamblearios menos aún un plazo imprescriptible.
“nulos de nulidad relativa” los cuales sin la
A diferencia de la legislación argentina, la
declaración invalidatoria se estiman como
normativa societaria española de 1989 en su
válidos. Esta acción puede ser definida como
artículo 115 diferencia expresamente entre
la estricta acción de impugnación y solo puede
acuerdos nulos y anulables. Entre los prime-
ser iniciada por los sujetos legitimados que
ros, se encuentran aquellos contrarios a la ley
menciona el artículo 251 en el breve término
y entre los segundos aquellos contrarios a la
de prescripción que dicho artículo señala. En
Ley de sociedades anónimas, que se opongan
nuestra legislación, esta “estricta acción de
a los estatutos o lesionen, en beneficio de uno
impugnación” se encuentra prevista en el
o varios accionistas o de terceros, los intereses
artículo 139 de la Ley General de Sociedades.
de la sociedad.
La segunda de las acciones es la acción de
nulidad que no se encuentra prevista ex-
IMPORTANTE
presamente en la Ley N.° 19550, pero que
se evidencia en las normas del Código Civil.
Dicha acción tiende a obtener la declaración Sí se pueden impugnar judicialmen-
de nulidad absoluta del acto asambleario y te acuerdos del Consejo Directivo
puede ser iniciada por cualquier interesado,
solamente cuando estos no sean
revisables por la Asamblea General.
siempre que demuestre la existencia de un
Caso contrario, estos acuerdos no
interés en sentido jurídico. “Esta acción, en la
podrán ser impugnados ex artículo
92 del CC.
52 Ibídem, p. 55.
53 A propósito, La doctrina nacional propone una mo- Es interesante hacer mención a la doctrina
dificación al art. V del Título Preliminar del Código
Civil, en el sentido que basta hablar de Orden Público,
española56, la misma que en el caso de los
pues las buenas costumbres están subsumidas en “acuerdos contrarios a la ley” del artículo 115
este principio ESPINOZA ESPINOZA, Juan, “El orden
público y las buenas costumbres en la experiencia
jurídica nacional”, en Ius et Veritas Año XII Nº 24,p. 55 NISSEN, op. cit. p. 85.
312-313. 56 RODRÍGUEZ VILLA, Daniel, Impugnación de Acuerdos de
54 Ley española de sociedades anónimas, art. 115; ley las Juntas de Accionistas, Legislación, Doctrina y Jurispruden-
General de Sociedades Mercantiles Mejicana, arts. 19, cia, según el nuevo texto refundido de la Ley de Sociedades
21,102,156,188,196 y 201 Anónimas, 2.a ED. Ed. Aranzadi, pp. 37 y ss.
c. La falta de quorum o mayoría legal com- El primer punto nos lo explica Vanasco59,
putable a los efectos de la decisión de que para quien la nulidad de la asamblea, que es
se trata. contenido de la acción de impugnación, debe
d. La ilegitimidad de los contenidos de la vincularse con una resolución asamblearia,
decisión, en tanto esta contravenga dispo- como acto final declarativo de la voluntad
siciones obligatorias de la ley, los estatutos social. Sin embargo, la causa de invalidación
o reglamentos de origen asambleario no tiene por qué estar en la decisión misma,
vigentes al tiempo de la celebración. sino que, del mismo modo, puede encontrar-
se en la manera inidónea en que se ha llegado
e. La existencia de abusos de mayorías irrazo-
a tal resolución. La LGS peruana habla de
nablemente lesivos de derechos esenciales
acuerdos “cuyo contenido sea contrario a esta
de los socios o del interés social.
ley”, lo cual nos podría llevar a pensar que
Efectivamente, una asamblea puede gozar solamente serían impugnables aquellos actos
de validez o padecer de invalidez, de igual “cuyo contenido” contravenga la norma, mas
manera los acuerdos adoptados en ella. “Una no los vicios atinentes al procedimiento de
asamblea que ha sido deficientemente convo- la formación asamblearia. No consideramos
cada o que se haya celebrado sin el quórum que esa haya sido la intención del legislador.
previsto por la ley, o, finalmente, cuyas deci-
Queda sujeta a la acción de impugnación
siones hayan sido adoptadas sin respeto del
una resolución asamblearia, tanto si se llega
régimen previsto, es nula en su totalidad, y la a ella por vicios que afecten el procedimiento
declaración judicial de invalidez pronunciada reglado para su formación –aunque en sí la
en el juicio correspondiente, la tendrá por decisión no sea contraria a ley, estatuto o
no celebrada, sin subsistencia de ninguna de reglamento–, como en los casos en que se ha
las resoluciones en ella adoptadas, a salvo seguido un procedimiento inobjetable, pero
los derechos de terceros de buena fe que que constituya en su contenido una declara-
han contratado con la sociedad como conse- ción contraria a ley, al estatuto o reglamento.
cuencia del acuerdo asambleario, a quienes
Para Vásquez de Mercado60, sólo la falta de
la invalidez de este no puede serles opuesta,
requisitos formales para la formación del acto
por la apariencia de legalidad que emana de
determina su nulidad. Al contrario, si tales
la actuación de los órganos sociales”58.
requisitos se hallan viciados, estaremos en
Hecho importante es que la nulidad de acto presencia de un acto anulable.
asambleario, cuando se dan los requisitos
En segundo lugar, en lo que respecta a los vi-
previstos legalmente, debe ser declarada
cios en la celebración de la asamblea, tenemos
sin reparar en la incidencia del porcentaje
la necesidad de la presencia de un quorum
accionario que revisten los accionistas que
mínimo y la adopción de acuerdos por las
la promuevan, en vista que la decisión de
mayorías previstas en la ley o el estatuto.
invalidación debe agotarse en el análisis de lo
Asimismo también se encuentran dentro de
acontecido en ese acto asambleario.
estos vicios la violación del derecho de deli-
Nissen clasifica las causales de impugnación berar; en tanto es comprensivo del derecho
arriba detalladas de la siguiente manera: de información, siendo esta causa de nulidad
1) Vicios en la convocatoria de la asamblea
2) Vicios en la celebración de ella 59 VANASCO, Carlos. Contribución al estudio de las ac-
ciones de impugnación de asambleas y de decisiones
3) Vicios en el contenido de la resolución asamblearias en la Ley 19550, publicado en la Revista
adoptada Homenaje a la Inspección General de Justicia, con motivo
de su 90 º aniversario.
60 VASQUEZ DEL MERCADO, Oscar, Asambleas, fusión y
liquidación de sociedades mercantiles, Porrúa, 1987, p.
58 NISSEN, op. cit. p. 88 233.
COMENTARIO
Comentario
Comentario
del V Pleno
Algunas consideraciones sobre
Casatorio Civil la aplicación de la doctrina
jurisprudencial vinculante contenida
en el V Pleno Casatorio Civil
1. Introducción
SUMARIO
El Pleno Casatorio señala que la sola apli- “Asimismo, es partir de la justicia en el caso con-
creto que logramos seguridad jurídica en nuestra
cación del principio de especialidad no se
comunidad, valor supremo que no sólo es un
debe considerar suficiente para resolver el soporte de la convivencia pacífica de los sujetos
problema planteado. Ello implicaría asumir de derecho sino que es también el fundamento
una actitud meramente positivista. Por ello, de la existencia del ordenamiento jurídico. El ideal
analizan o sopesan también los valores enfren- de justicia tiene y debe expresarse en el máximo
tados: la justicia y la seguridad jurídica. Poder respeto a la dignidad humana y en la promoción
y desarrollo de los derechos fundamentales, que
impugnar un acuerdo de asamblea dentro de sirven de bases inquebrantables de todo el orde-
los diez años del plazo de prescripción podría namiento jurídico vigente, como es el caso del
entenderse como justo, ya que se impedirían derecho fundamental de asociación”8.
que acuerdos ilegales prosperen. Empero, si
hay un plazo tan extenso para cuestionar los 4. La legitimación para impugnar
acuerdos que se adopten, ello implicaría so- acuerdos de asamblea
meter a incertidumbre a la persona jurídica en
En lo que a la legitimación se refiere, el aporte
lo que se refiere a su normal funcionamiento
de esclarecimiento del Pleno Casatorio se
o marcha.
refiere al caso del asociado expulsado podía
Sobre este enfrentamiento, el Pleno Casato- prestarse a una serie de problemas inter-
rio señala que la justicia no es el único valor pretativos. Un asociado expulsado podría
máximo en el ordenamiento jurídico, sino que considerarse como un asociado que habien-
también la seguridad tiene un rol protagónico. do asistido, expresó su desacuerdo con su
Sobre este punto se dice, en el considerando expulsión, o también como un asociado que
229, que “dentro de los valores supremos de no asistió; por consiguiente, su legitimación
nuestro ordenamiento jurídico consideramos podría respaldarse en estas interpretaciones.
también a la seguridad jurídica, la cual debe
Sin embargo, también existe una lectura
ser aplicada conjuntamente con el valor justi-
opuesta: el asociado excluido ya no podría
cia, estableciéndose de esta manera un criterio
considerarse como asociado, justamente por-
hermenéutico no solo de resolución de los
que fue excluido, razón por la cual carece de
casos concretos a través de la judicatura nacio-
legitimidad. Empero, si el acuerdo de exclu-
nal, sino que a la vez también se constituyen
sión fue inválido, seguiría siendo asociado. Si
en líneas orientadoras del desenvolvimiento
el acuerdo de exclusión fue válido, la exclusión
del Estado Constitucional peruano a través de
sería eficaz. Esto se sabría solo al momento
todos sus órganos en las distintas funciones
que cumplen, sean legislativas, ejecutivas, ju-
7 Quinto Pleno Casatorio Civil. Sentencia en Casación
N° 3189-2012-LIMA NORTE. cit. p. 7145.
6 Quinto Pleno Casatorio Civil. Sentencia en Casación 8 Quinto Pleno Casatorio Civil. Sentencia en Casación
N° 3189-2012-LIMA NORTE. Cit. p. 7146. N° 3189-2012-LIMA NORTE. cit. p. 7145.
en que el Juez expide la decisión final. Esta se a los mismos breves plazos de caducidad
lectura implicaría un absurdo: solo se sabría para cuestionar el acuerdo que lo expulsa.
que tuvo legitimidad al terminarse el pro-
ceso; de modo que sería imposible declarar 5. La adecuación judicial
infundada la demanda, solo cabría declararla
La última regla jurisprudencial vinculante se
fundada o improcedente (porque planteó la
refiere a una adecuación que no sería del
demanda sin ser asociado). Es menester citar
todo usual. En efecto, si el actor se encuentra
el Considerando 268 del Pleno Casatorio:
dentro del plazo para cuestionar el acuerdo de
“Como consecuencia del debate en el presente la asociación, difícilmente dejará de invocar el
Pleno Casatorio Civil se presentó el tema de la artículo 92 del Código Civil como fundamento
calidad jurídica de los miembros de la Asociación de derecho de su demanda. En el plano de la
expulsados por el acuerdo de esta persona jurí- praxis, se deja de invocar esta norma porque
dica no lucrativa, y la factibilidad de estos para los breves plazos previstos en el artículo 92
impugnar el mismo. Luego del debate se llegó a la del Código Civil ya habían expirado. Pero de
conclusión que estos tienen interés para interponer
ser el caso, el Juez podrá adecuar la demanda
la pretensión regulada en el artículo 92 del Código
Civil, máxime cuando justamente el acuerdo los si es que, dentro de un proceso de conoci-
expulsa de la Asociación. De manera que si bien miento, se pretende cuestionar el acuerdo
la norma establece que están legitimados los de la asociación. El presupuesto central de tal
miembros de la asociación, no debe perderse de adecuación por tanto, es que la demanda se
vista que en el caso de los expulsados el agravio presente dentro de los mencionados plazos
se fundamentará en la irregularidad de su salida de caducidad.
en base al acuerdo adoptado9.
En mi concepto, lo que busca esta última regla
En adelante, por consiguiente, ya no será ne- es indicarle al Juez el modo de actuar frente
cesario entrar en disquisiciones interpretativas a una demanda que pretenda cuestionar los
en torno a la legitimidad del asociado excluido acuerdos de asamblea de asociación fuera
o expulsado de la asociación. No será posible, de los plazos del artículo 92 del Código Civil:
por ejemplo, plantear la posibilidad de que el debe declarar la improcedencia siempre. Las
asociado expulsado cuestione el acuerdo de cinco primeras reglas del plano no señalan
expulsión según a las reglas del libro II porque
esto directamente, así que la sexta regla quita
“su caso no está previsto en el artículo 92 del
toda duda que pudiera surgir al respecto.
Código Civil”. La base de la demanda, como
La improcedencia estaría justificada por la
dice el Pleno Casatorio, será la irregularidad
ausencia de interés para obrar. En este pun-
de su expulsión. De manera que el asociado
to, la lectura sería la siguiente: dado que el
excluido de la asociación tendrá que someter-
plazo caducó, no tiene mayor sentido iniciar
el proceso. No hay, pues, “necesidad jurídica”
9 Quinto Pleno Casatorio Civil. Sentencia en Casación del mismo, que es lo que configura el interés
N° 3189-2012-LIMA NORTE. Cit. pp. 7148 y 7149. para obrar.
COMENTARIO
Comentario
Comentario
del V Pleno
Interpretación, justificación judicial y
Casatorio Civil racionalidad en el V Pleno Casatorio
Civil
Renzo Cavani*
Profesor en la Maestría con mención en Derecho Procesal de la Pontificia
Universidad Católica del Perú y en la Universidad San Ignacio de Loyola
1. Premisa
2. Interpretación jurídica y justificación judicial
SUMARIO
respecto del método (deductivo, inductivo), por el sistema o el ámbito de aplicación de la nor-
del argumento (literal, finalístico, sistemático, ma debe contener casos soportados por el sistema
(p. ej., la regla que autoriza la desconsideración
etc.) y de doctrinas y teorías8.
de negocios jurídicos celebrados con la finalidad
El tema de los argumentos (que suelen ser de disimular la ocurrencia del hecho generador
entendidos bajo el nombre de métodos in- debe abarcar apenas negocios practicados con
abuso de forma, pero no aquellos practicados con
terpretativos) posee gran relevancia para el la finalidad de disminuir la carga tributaria, por el
próximo ítem. Aquí resulta interesante recurrir hecho de que la Constitución haya adoptado un
a la lección de Humberto Ávila: sistema de previsibilidad preservador de la libre
iniciativa)”.9
“La interpretación en el Derecho también implica
argumentación, así entendida como el conjunto de Pregunta: ¿de qué depende que se escoja uno
razones utilizado por el intérprete para soportar
u otro argumento? La respuesta es una sola:
una interpretación dada. Varios son los tipos de
argumentos empleados en la interpretación. del peso de las razones que orienten hacia la elec-
ción de uno en desmedro del otro. Determinar
En este punto, cabe mencionar apenas algunos:
qué argumento usar para interpretar el texto
argumento lingüístico, basado en el significado de
las palabras, de acuerdo con el cual el significado y producir la norma, y por qué se eligió es
a ser escogido debe ser aquel vinculado al sentido absolutamente central en la justificación de
de los términos utilizados en los dispositivos (p. la premisa normativa.
ej., el dispositivo referente a la responsabilidad
tributaria por sucesión debe ser interpretado en La aplicación o elección de la norma aplicable
tanto comprende solamente los tributos y no las al caso concreto es un posterius a la interpre-
multas porque el legislador apenas mencionó tación10. Este punto es de relevancia decisiva
aquellos sin hacer mención de estas); argumento en el análisis que se realizará más adelante.
histórico-evolutivo, fundado en la evaluación del
Aquí se entiende, en el contexto de la decisión
momento en que la fuente fue producida y en
la mutación de su sentido a lo largo del tiempo, judicial, que la «aplicación» solo corresponde
según el cual el significado a ser escogido debe a «consecuencias relevantes sobre situaciones
evolucionar conjuntamente con la evolución de jurídicas de otros sujetos, y la continuidad o
la sociedad (p. ej., el dispositivo según el cual las discontinuidad de cuyas operaciones tienen
mercadurías son bienes muebles debe ser inter-
consecuencias importantes para la estabilidad
pretado en el sentido de implicar cualquier bien,
inclusive intangible); argumento genético, basado o el cambio de un sistema jurídico»11. De allí
en los trabajos preparatorios, por medio del cual que después de la interpretación, corresponde
el significado a ser adscrito debe ser aquel que es la individualización de las alternativas finales,
soportado por el proyecto de ley y por las discu- entre las cuales el juez termina por decidir12.
siones parlamentarias (p. ej., el dispositivo que Es en el procedimiento de la formación de la
prevé la incidencia del impuesto sobre servicios
de comunicación debe ser interpretado de modo
decisión (giudizio) que se identifican, desde
a no abarcar la publicidad en Internet porque esa un punto de vista descriptivo, diversos enun-
hipótesis habría sido apartada por las discusiones ciados (normativos, factuales, calificativos y
parlamentarias); argumento finalístico, fundado en prescriptivos –que ya no son más hipótesis)
la finalidad normativa, según el cual la hipótesis y, desde un punto de vista estructural, nexos
normativa debe ser ampliada o restringida en ra-
de implicación, correspondencia semántica,
zón de la finalidad que le es subyacente (p. ej., la
regla de la inmunidad de los libros debería abarcar compatibilidad lógica y semántica, y prejudi-
también los libros electrónicos, ya que su finalidad cialidad lógica y jurídica13. Esos enunciados y
es la de favorecer la cultura y la información, y esos
objetivos también son promovidos por la publica-
ción de los referidos libros); argumento sistemático,
9 Ibídem, p. 193.
basado en el conjunto normativo, según el cual el
10 Ibídem, p. 231.
significado a ser escogido debe ser aquel amparado
11 Giovanni Tarello. L’interpretazione della legge, p. 45.
12 Michele Taruffo. La motivazione della sentenza civile,
8 Cfr. Humberto Ávila. «Função da ciência do direito p. 295.
tributário...». In Direito tributário atual, pp. 193 ss. 13 Todo conforme a Taruffo (ibídem, pp. 256-257).
es el análisis del derecho positivo, esto es, de Algunos párrafos antes, Kelsen plasma indu-
la norma general y del sistema jurídico en su bitablemente su convicción voluntarista en
complejo entramado de jerarquías y no cómo el trabajo del juez al momento de realizar la
es que el juez crea la norma particular (para interpretación:
Kelsen, el juez crea derecho, adoptando una
“(…) la vinculación del legislador bajo el aspecto
posición constitutiva de la decisión judicial). material es una vinculación mucho más reducida
El jurista vienés, por tanto, está completamente que la vinculación del juez, en donde aquel es,
despreocupado por la racionalidad de la interpre- relativamente, mucho más libre en la creación del
tación y justificación judicial; pero ello se explica Derecho que este. Pero también este último es un
perfectamente no solo porque fue una tarea creador de Derecho y también él, en esta función,
relativamente libre. Justamente por eso, la obtención
que la doctrina asumió y comenzó a desarro- de la norma individual en el proceso de aplicación
llar incesantemente a finales de la década de de la ley es, en la medida en que en ese proceso
1960 e inicios de la década de los setenta22 (la sea completada la moldura de la norma general,
segunda edición de la Teoría de Kelsen, citada una función voluntaria”24.
por la Corte, data de 1960), sino también
porque consiste en una necesidad que impone Pero la Corte Suprema peruana –no sin
el derecho fundamental a la motivación de las poca candidez– no tuvo reparos en citar una
decisiones judiciales cuyas implicancias fueron doctrina desfasada en lo que respecta a las
perfeccionándose progresivamente. exigencias de que el juez dé razones que
fundamenten la justificación de la premisa
Apenas para que no queden dudas del pen- normativa de la decisión judicial. Desde Kel-
samiento kelseniano: sen, mucha agua ha corrido bajo el puente y
“En la medida que, en la aplicación de la ley, más nuevos autores han asumido nuevos compro-
allá de la necesidad fijación de la moldura dentro de misos. No obstante, esto fue pasado por alto
la cual se debe mantener el acto a colocar, también por nuestros jueces supremos; ya que, a partir
pueda tener lugar una actividad cognoscitiva del
órgano aplicador del Derecho, no se tratará de un
de la cita de Kelsen, concluyeron que tenían
conocimiento positivo, sino de otras normas que, que decidir por «consideraciones externas al
aquí, en el proceso de la creación jurídica, pueden ordenamiento jurídico», estableciendo «los
tener su incidencia: normas de moral, normas de jus- valores que priman en un sistema jurídico
ticia, juicios de valor sociales que solemos designar determinado, valores supremos como son la
por expresiones corrientes como bien común, interés
del Estado, progreso, etc. Del punto de vista del De- justicia y la seguridad jurídica» (fundamento
recho positivo, nada puede decirse sobre su validez 224).25
y verificabilidad. Desde este punto de vista, todas las
determinaciones de esta especie apenas pueden ser
caracterizadas negativamente: son determinaciones
que no resalen del propio Derecho positivo. En lo
relativo a este, la producción del acto jurídico dentro
de la moldura de la norma jurídica bajo aplicación es 24 Ibídem, p. 393 (las cursivas son mías).
libre, esto es, se realiza según la libre apreciación del 25 Inclusive, algo por decir lo menos curioso es que ha-
órgano llamado a producir el acto. Solamente no sería yan citado a Guastini y a Tarello para concebir lo que
así si el Derecho positivo delegase en ciertas normas significa interpretación (fundamentos 202 y ss.) pero
metajuridícas como la moral, la justicia, etc. Pero, que luego recurran a Kelsen y acepten acríticamente
en este caso, estas se transformarían en normas de que la interpretación es un acto puramente volun-
Derecho positivo23. tarista (solo así se explica que recurran a valores).
Si los jueces supremos hubiesen profundizado en
las lecciones de los dos primeros autores, y no solo
22 Basta consultar la bibliografía empleada por el libro en buscar la primera definición que esté a la mano,
más importante escrito, hasta hoy, sobre motivación habrían advertido que ellos están en la línea opuesta
judicial (naturalmente, se trata de la obra de Michele del jurista vienés al entender la interpretación como
Taruffo. La motivazione de la sentenza civile, que data un acto de conocimiento y voluntad, lo cual permite,
de 1975). entre otras cosas, que pueda existir racionalidad y, en
23 Hans Kelsen. Teoria pura do Direito, 6ª ed., pp. 393- la medida de lo posible, objetividad en el procedi-
394 (las cursivas son mías). miento interpretativo.
El primero –dice la Corte– «se fundamenta cosa que la declaración de nulidad de éste»
en la existencia de una estructura orgánica (fundamento 180) y que «a través de la pre-
del ordenamiento jurídico (…) dado que tensión impugnatoria se realiza un pedido de
nuestro ordenamiento es un sistema de ineficacia, esto es de nulidad o de anulabili-
normas y principios que busca la coherencia, dad» (fundamento 181).
a fin de permitir dar respuestas armoniosas
Por lo tanto, habiendo empleado el argu-
(…)» (fundamento 271). El segundo, por
mento gramatical, fue la propia Corte quien
su parte, «resalta los valores que sustentan
nuestro ordenamiento jurídico, en especial generó la antinomia respecto de las normas del
la seguridad jurídica y la justicia, y con ello, Libro II del CC. Esto quiere decir, después de
la predictibilidad de los fallos judiciales se ve la interpretación, resultaron dos normas en
reforzada (…)» (fundamento 276). Dado que contradicción (de ahí que la antinomia siempre
recién en el fundamento 274 se admite que sea posterior a la interpretación). Después de
la sola aplicación del principio de la especia- allí, para seguir racionalmente con el procedi-
lidad «se encuentra inacabada», ya comienza miento interpretativo, correspondía pasar al
a aclararse, de alguna manera, el raciocinio contexto de la aplicación, determinando qué
efectuado por nuestros jueces supremos: el norma es la que debía prevaler, esto es: (i) si
método sistemático y el principio de especialidad la norma extraída del artículo 92°, CC, con sus
no bastan por sí solos para resolver el problema correspondientes reglas de los plazos de 30 y
que ofrece el artículo 92°, CC; es necesario 60 días o (ii) las respectivas normas del Libro
emplear el método teleológico porque sólo así II, que determinan las causales de nulidad y
se logra incorporar a la interpretación los valores anulabilidad, con sus respectivos plazos para
justicia y seguridad. hacerlas valer. Pero la Corte no hizo eso, sino
No obstante, podría pensarse que, siguiendo que entendió que había que usar, además,
un orden racional, la Corte interpretó el texto los «métodos» sistemático y teleológico, en
del artículo 92°, CC, a través del argumen- el sentido ya explicado antes.
to sistemático (a partir de ahora emplearé En mi opinión, específicamente en cuanto al
este término) y también del teleológico para uso de los métodos usados por la Corte, sur-
obtener la norma que, a su vez, resulta en la gen, cuando menos, tres serios problemas: (i)
antinomia a ser resuelta por la especialidad. no se conceptúa correctamente el argumento
No obstante, ello no ocurrió así: la Corte ya sistemático, (ii) no se conceptúa correctamen-
había interpretado dicho artículo empleando te el argumento teleológico y (iii) se coloca
un argumento gramatical, esto es, aquel que en el mismo plano, indebidamente, los argu-
determina la interpretación según el sentido mentos de interpretación y el «principio» de
literal del texto normativo. ¿Esto por qué? especialidad. Este último punto será analizado
Porque la disposición del artículo 92°, CC, en el próximo ítem. Veamos ahora los dos
en lo concerniente a la impugnación de primeros de forma muy breve, sin intención
acuerdos, dice: «Todo asociado tiene derecho de profundizar ni agotar la complejidad que
a impugnar judicialmente los acuerdos que pueden ofrecer.
violen las disposiciones legales o estatutarias
(…). Cualquier asociado puede intervenir en (i) Hablar de argumento sistemático hace
el juicio, a su costa, para defender la validez alusión, evidentemente, a sistema jurídico
del acuerdo» (cursivas agregadas). Hay, por y este, a su vez, está vinculado con orden.
tanto, una correlación entre «impugnar» y Más allá que se entienda o no el orde-
«validez» que la Corte advirtió sin dificultad, namiento jurídico como un sistema, por
concluyendo, de forma categórica, que «de tanto, un conjunto de normas ordenado,
estimarse la impugnación la resolución que axiológicamente cohesionado (coherence),
declare la invalidez del acuerdo no es otra lógicamente coherente (consistency) y
Respecto de (a), pienso que se trata de decirse que el argumento analógico se basa en
una frase desafortunada por dos razones: una analogía estructural y el teleológico en una
analogía funcional”31.
(α) no se busca una finalidad «prede-
terminada» porque en el contexto de la Un ejemplo muy lúcido de la aplicación
interpretación, es el intérprete quien, del argumento teleológico se encuentra en
argumentativamente, reconstruye la el caso del artículo 150, inciso VI, d), de la
finalidad, por tanto, ella no existe preci- Constitución Federal brasileña la cual prohíbe,
samente antes de su intervención; (β) la bajo cualquier circunstancia, que se grave con
finalidad no es de la «aplicación» de la tributos los libros, revistas y el papel que sirve
norma jurídica, puesto que el contexto para producirlos. La pregunta que se hace
de la aplicación es necesaria y lógicamente aquí es: ¿qué ocurre con el libro electrónico?
un paso posterior al de la producción de Muchos argumentos pueden ser utilizados
la norma. para interpretar el texto; sin embargo, si se usa
Es el punto (b) el que aquí interesa más, el argumento teleológico se podría identificar
pues se trata de la razón por la cual la como finalidad de la inmunidad tributaria
Corte acude al argumento teleológico para la garantía de libertad de información. Por
«completar» al argumento sistemático y ello, ante dicha finalidad, poco importa el
al «principio» de especialidad. Es preciso, material con que el libro está confeccionado:
entonces, preguntarnos si el argumento el libro electrónico no podrá ser gravado con
teleológico es realmente lo que la Corte tributos.32
dice que es. ¿Será que esa finalidad a ser Sigamos trabajando con el ejemplo anterior:
reconstruida requiere buscar los valores aquí hubo una clara reconstrucción del in-
supremos? Pienso que esto está lejos, muy térprete en el sentido de que la finalidad de
lejos de ser exacto. El argumento finalís- la prohibición de gravar tributos al libro es
tico o teleológico implica, en mi visión, la libertad de información. Se trata, eviden-
una operación mucho más detallada: la temente, de un ejercicio argumentativo que
fijación de una finalidad subyacente a uno está sustentado en razones (las cuales, como
de los significados que puede ser extraído es claro, se pueden discutir) lo más objetivas
del texto y, sobre dicha base, ampliar o posibles.
restringir una hipótesis normativa que
no aparece expresamente prevista en el Ahora vayamos al caso del Pleno: ¿cuál es la
texto (no, al menos, desde la óptica del finalidad de la impugnación de los acuerdos?
argumento gramatical). No es tan fácil, Esto es importante porque la respuesta a
por tanto, como recurrir a los valores esa pregunta determinará nada menos que
supremos. la propia norma a ser extraída del artículo
92°, CC, a partir del argumento teleológico.
Tarello grafica con excepcional claridad el ám- Podría establecerse, por ejemplo, que dicha
bito de incidencia del argumento teleológico: finalidad sería la de establecer un mecanismo
“(…) el argumento teleológico funciona como célere para que ciertos sujetos (los asociados)
opuesto al argumento a contrario y como concu- puedan impugnar determinadas cuestiones de
rrente con el argumento analógico. Es opuesto al validez que atañen a los acuerdos adoptados
argumento a contrario, y al igual que el analógico, por la persona jurídica. También podría ser,
sirve para motivar la extensión de significado, esto
es, para interpretar el enunciado normativo en el
sentido de expresar una norma que incluye en el
propio dispositivo la situación nueva y no prevista; 31 Giovanni Tarello. L’interpretazione della legge, p.
371.
a diferencia del analógico, que se basa en la se-
mejanza de la fattispecie, el argumento teleológico 32 El ejemplo y análisis pertenece a Humberto Ávila.
«Argumentação jurídica e a imunidade do livro ele-
se basa en la oportunidad de regular del mismo
trônico». In Revista de direito tributário, esp. pp. 169
modo las fattispecie aunque sean diversas: podría
ss.
cablo «principio». Muchas veces, no obstante, ante una regla y cuándo ante un principio,
no existe una verdadera consciencia de qué es dejando claro, con ello, qué teoría de las
lo que implica el uso de dicho término. Se ha- normas se está utilizando. Esto es impor-
bla del «principio» pro actione, del «principio» tante porque dependiendo de cómo se
de impulso oficioso del proceso o también del entienda una y otra categoría normativa,
«principio» de especialidad. Parece como si la aplicación y resolución del caso concre-
el hecho de emplear ese término le diese un to se verá alterada (no es lo mismo, por
peso argumentativo mayor a la postura (con ejemplo, entender que los principios se
miras a persuadir a otro) o que se asuma que aplican según las posibilidades fácticas y
se trata, en todo y cualquier caso, de normas jurídicas34 y, de otro lado, entender que
supremas del sistema. Sin embargo, en tales consagran un estado ideal de cosas a ser
contextos, no siempre existe una verdadera realizado35).
consciencia de cuál teoría de las normas se (ii) «Meta-regla» y «principio» son dos catego-
está usando, pues se pierde de vista un detalle rías que, de ninguna manera, pueden ser
esencial: entender qué es un principio deter- confundidas. Cuando se habla de «meta-
mina cómo y en qué circunstancias debe ser rregla» o, más técnicamente, meta-norma,
aplicado. El Pleno, cuando trata sobre el tema se hace alusión a una especie normativa
de la especialidad, no se preocupó por ello. que se encuentra en una dimensión di-
La sentencia comienza refiriéndose a la jerar- ferente a la de las reglas y principios. El
quía, la temporalidad y la especialidad como prefijo «meta», inclusive, indica «más allá».
«metareglas de la interpretación jurídica» Hace alusión a algo que se encuentra en
(ítem 6.1), luego habla del «principio de es- una dimensión diferente que suele ser más
pecialidad» (ítem 6.1.3) entendiéndolo como abstracta (por ejemplo, la metafísica).
un «principio de interpretación normativa» Para una doctrina bastante convincente,
(fundamento 221) para luego hablar de la
las metanormas se diferencian de las espe-
«metaregla de la norma especial» (ítem 6.3).
cies de normas (reglas y principios) porque
Muchas preguntas surgen a partir de los térmi-
aquellas orientan la aplicación de éstas. Las
nos usados. Aquí se buscará responder tres de
metanormas ofrecen criterios, parámetros
ellas: (i) ¿qué entiende la Corte Suprema por
de aplicación. Las reglas y principios,
«principio»?; (ii) ¿es lo mismo «meta-regla»
aunque poseen diferencias estructurales,
que «principio»?; (iii) de ser diferentes, ¿cuál
se encuentran en una dimensión aplicativa
es la importancia para la práctica y para la
porque los casos se resuelven con base
decisión en concreto?
en reglas y principios; estas normas son
(i) En ninguna parte de su sentencia la Corte objeto de aplicación. Las metanormas, por
Suprema explica qué es lo que entiende su parte, se sitúan en una dimensión metó-
por principio ni regla, o, lo que es lo dica; ellas actúan sobre las normas objeto de
mismo, no especifica qué teoría de las aplicación. Ejemplos de metanormas serían
normas adopta. No lo hace cuando habla la coherencia, ponderación, razonabilidad
de la especialidad ni tampoco cuando y proporcionalidad. Las metanormas, por
analiza el artículo 92°, CC. Esto, desde tanto, no son ni pueden ser principios.36
ya, resulta una fragilidad en la justifica-
De otro lado, a fin de precisar mejor el
ción de la decisión; puesto que resulta de
lenguaje científico, no resulta correcto ha-
vital relevancia, en un caso difícil (léase:
un caso en donde existe dificultad de en-
cuadrar el soporte fáctico en la hipótesis 34 Robert Alexy. Teoria dos direitos fundamentais, 2ª ed.,
normativa),33 especificar cuándo estamos pp. 90 ss.
35 Humberto Ávila. Teoria dos princípios, 13ª ed., p.
136.
33 Humberto Ávila. Teoria dos princípios, 13ª ed., p. 81. 36 Todo según Humberto Ávila (ibídem, pp. 198 ss.).
dirse con el criterio de la especialidad. La que vale menos».42 Como bien apunta el
diferencia radicaría en que el criterio de la autor, se trataría del criterio jerárquico,
excepcionalidad busca resolver antinomias sólo que no desde una perspectiva formal
relativas-bilaterales o parciales-parciales (dado que para determinar la jerarquía
(esto en la tipología propuesta por Alf entre normas no se requiere examinar su
Ross) y antinomias por exclusividad uni- contenido), sino teniendo en considera-
lateral (que resulta de una variación de la ción –aquí sí– su contenido. Esta operación
tipología de Ross propuesta por el propio dependerá mucho, por cierto, de la ideo-
Chiassoni). logía, filosofía y doctrinas del intérprete.43
Las antinomias relativas-bilaterales o incom- Estos criterios para resolver antinomias, en
patibilidades de tipo parcial-parcial implican la línea de lo expuesto hasta aquí, entran
«consecuencias jurídicas incompatibles a en el ámbito de las metanormas o normas de
dos fattispecie abstractas diversas, caracte- segundo grado; puesto que tienen por función
rizadas por la propiedad conceptualmente orientar la aplicación de las normas de primer
desconectadas mas no recíprocamente grado, esto es, las reglas y los principios.
exclusivas»,41 por lo que la aplicación de
una de las normas estaría parcialmente
incluido en la hipótesis fáctica de la otra HUMBERTO ÁVILA dice:
y viceversa. Un ejemplo sería: N1: «Está
prohibida la entrada de vehículos al
parque»; N2: «Está permitida la entrada
“la Lanorma
constitución de
(interpre-
de taxis al parque». Por su parte, las tación) se da me-
antinomias por exclusividad unilateral pre- diante argumenta-
suponen «la misma consecuencia jurídica ción, esto es, el uso
a fattispecie diversas (no importa, aquí, si de argumentos y
están conceptualmente correlacionadas o técnicas que de-
desconectadas), pero una de ellas a título muestren la correc-
exclusivo». Un ejemplo sería: N1: «Sola- ción o incorrección del procedimiento
mente personas humanas pueden entrar interpretativo. ”
al parque»; N2: «Los taxis autorizados
podrán entrar al parque». De esta manera, ¿Qué hay de los metacriterios? Se trata de
el criterio de excepcionalidad podría servir parámetros que orientan el empleo ya no
para concluir, respectivamente, teniendo de las normas de primer grado, sino de las
en cuenta los ejemplos dados, que: (α) propias normas de segundo grado o meta-
ningún vehículo puede entrar al parque; normas de resolución de antinomia. Más
(β) solamente las personas podrán entrar allá de que exista o no una denominación
al parque. para estos metacriterios, ellos ciertamente
(c) Finalmente, existe el criterio axiológico están presentes en la argumentación jurídica
que, para Chiassoni, es un criterio residual, cuando se dice, por ejemplo, que el criterio
que surge cuando ningún otro puede jerárquico prevalece sobre el temporal y
resolver la incompatibilidad, puede ser que este prevalece, a su vez, sobre el de la
enunciado de la siguiente manera: «La especialidad. La limitación de su aplicación
norma que, en virtud de su contenido, es una tarea muy importante en la doctrina,
vale más desde un punto de vista ético- pero también de los jueces al momento de
normativo, debe ser preferida a la norma resolver antinomias dado que, como fue visto,
Libro II del CC y el artículo 92°, CC, se aplica Finalmente, cabe resaltar que los argumentos
la especialidad; dado que las primeras esta- que acompañan a este razonamiento son
blecen una regulación general y la segunda claramente de relleno y no coadyuvan en lo
consiste en una norma de aplicación particular absoluto para el esclarecimiento del caso. En
al encontrarse en el Título II del Libro I del CC efecto, decir que se trata de un caso difícil
(fundamentos 242 y 245). (fundamento 243) y que hay que prestigiar
los valores de la seguridad jurídica y la justicia
En otras palabras, en la premisa (es aplicable (fundamentos 246 y ss.) no es más que pura
la especialidad), está la propia conclusión retórica al momento de tener que cumplir con
(generalidad de unas y especialidad de otra, o el deber de dar razones.
sea, relación de especialidad). Nótese, sin em-
bargo, que se trata de un argumento inválido
a pesar de que, bien vistas las cosas, la con- 4. Conclusiones
clusión se sigue de las premisas. El problema Después de lo expuesto a lo largo del artícu-
aquí es que es calificable como falacia porque lo, es posible concluir que si nuestra Corte
se trata de un razonamiento arbitrario, donde Suprema tiene por función principal interpre-
la premisa es idéntica a la conclusión, por lo tar y justificar, en el caso del reciente Pleno
que ésta nunca se llega a probar. Simplificado Casatorio, dicha función fue traicionada.
al máximo, la argumentación sería: se aplica la Hubo un uso incorrecto de los argumentos
especialidad porque hay especialidad. Este he- sistemático (por concluir que sería incomple-
cho, más allá de derruir la lógica del discurso, to sin percibir su complejidad) y teleológico
por el hecho de ser una falacia constituye «un (por entender que este autoriza a trabajar con
obstáculo o impedimento para la resolución valores supremos cuando la operación debe
de una diferencia de opinión según los mé- ser mucho más concreta y objetiva) así como
ritos», frustrando «los esfuerzos por resolver un deficiente empleo de la metanorma de la
una diferencia de opinión».44 especialidad, debido a que no demostró cómo
No obstante, como señalé, el punto aquí con- es que, de las normas en conflicto, una de ellas
sistía en fundamentar por qué las normas del era especial frente a la otra. De esta manera,
Libro II del CC, consagradas –en teoría– como existieron graves defectos en el procedimiento
parte general de nuestra legislación civil (y interpretativo y aplicativo, lo cual redundó en
más: del derecho privado en general), no se una justificación frágil e insatisfactoria.
aplican a la regulación de las personas jurídi-
cas por consistir ésta en un régimen especial. Bibliografía
El hecho de encontrarse en diferentes Libros
no dice absolutamente nada: los Libros de Aarnio, Aulis. The Rational as Reasonable – A
Familia, Sucesiones, Reales, Obligaciones y Treatise on Legal Justification. Dordrecht:
Fuentes de las Obligaciones son diferentes a Reidel, 1987.
los del Libro II y, como es claro, el régimen Alexy, Robert. Teoria dos direitos fundamentais
general de la invalidez se les aplica (salvo [1985], trad. Virgílio Afonso da Silva, 2ª
excepciones muy puntuales, establecidas ex- ed., 2ª tiragem. São Paulo: Malheiros,
presamente). Pero la Corte Suprema dio por 2012.
sentado, sin más, de que existía especialidad. Ávila, Humberto. Teoria dos princípios – Da
He ahí, en mi opinión, después de la falla en aplicação à definição dos princípios jurídicos
el uso de los argumentos, el segundo defecto [2003], 13ª ed. revisada y ampliada. São
decisivo en la argumentación y justificación de Paulo: Malheiros, 2012.
la sentencia casatoria. ____. Segurança jurídica – Entre permanência,
mudança e realização no Direito Tributário.
44 Franz H. van Eemeren. Maniobras estratégicas en el São Paulo: Malheiros, 2011.
discurso argumentativo, pp. 302-303.
DERECHOS
DE PERSONAS
Actualidad
Área
Civil Personas
Personas
Contenido
CARLOS HAKANSSON NIETO: El derecho a la imagen: Su protección y desarrollo
DOCTRINA 94
jurisprudencial
IVAR JESÚS CALIXTO PEÑAFIEL: ¿Puede inobservarse la prohibición de difundir
COMENTARIO DE
JURISPRUDENCIA
la imagen de niños, niñas y adolescentes? Apuntes a una sentencia que devela 104
los errores de la ponderación (Comentario a la STC, Exp. N.º 03459-2012-PA/TC)
NOS PREGUNTAN Y
CONTESTAMOS
CONSULTA: En el Perú, ¿es imperativo que el apellido paterno vaya primero? 124
DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina práctica
1. Un caso personal
SUMARIO
Civil Personas
que la libertad religiosa, se convirtió en la implícitos o innominados) responde más a
madre de todos los derechos fundamentales los modelos judicialistas que normativistas; en
la cual es conocida por la doctrina como efecto, el reconocimiento y la protección de
“la protección contra la detención y la otros derechos constitucionales requiere una
persecución penal arbitraria”4. En efecto, concepción del Derecho distinta a la ofrecida
como consecuencia del reconocimiento de la por el positivismo, que es la corriente jurídica
libertad individual, con el paso del tiempo, se dominante en las constituciones iberoameri-
fueron realizando nuevas conquistas judiciales canas7. En todo caso, esta cláusula será más
en torno al reconocimiento de todos los bienes o menos retórica en relación con el grado de
humanos que promueven la plena realización independencia e inamovilidad que posean
de la persona hasta nuestros días. los jueces.
Civil Personas
el desarrollo de la propia personalidad13. En 3. El contenido constitucional del
el derecho comparado, la Constitución del derecho a la imagen
Brasil contempla la indemnización por daño El concepto inicialmente conocido como el
material a la imagen14. En España, el artículo “contenido esencial de los derechos” nació
7.5 de la Ley Orgánica 1/1982 establece que en la Ley Fundamental de Bonn de 1949 y
la captación, reproducción o reproducción o la Constitución española de 1978 lo recogió
publicación de fotografías, filme, o cualquier en su artículo 53.1 cuando se afirma que las
otro procedimiento de la imagen de una leyes que regulan el ejercicio de los derechos
persona, en lugares o momentos de su vida “han de respetar en todo caso su contenido
privada o fuera de ellos, con excepción a los esencial”16. Una expresión que ha recibido
casos previstos en el artículo 8.2, constituye notables críticas y las más recientes consideran
una intrusión ilegítima; mientras que el que se trata de un concepto desafortunado;
artículo 7.6 establece que también lo sería pues, lo propio y más correcto es hacer
el empleo del nombre, de la voz o de la mención al contenido constitucional, o cons-
imagen para fines publicitarios, comerciales titucionalmente protegido si lo prefieren; ya
o de naturaleza similar15. que, si no tenemos cuidado, puede dar lugar
a dudosas interpretaciones en detrimento de
los derechos humanos.
ANTONIO PEREIRA MENAUT dice:
La determinación del contenido esencial de
los derechos humanos en la jurisprudencia ha
“
[El] Derecho es
plural, no monista.
dado nacimiento a la llamada teoría absoluta y
relativa, que, tanto una como la otra, contienen
La visión judicialis- serios cuestionamientos como tendremos opor-
ta ayuda a percibir tunidad de explicar a continuación. La teoría
esa pluralidad por- absoluta parte de la idea que todo derecho
que, si el Derecho humano posee un núcleo intangible para el
consiste en senten- legislador, dentro del cual no puede interferir,
cias que resuelven
es decir, es una zona vedada para la restricción
casos concretos, ex
definitione no formará un sistema del derecho que se intente a nivel legislativo.
completo, cerrado ni perfecto. Un En ese sentido, dado que nos encontramos
normativista extremo será, posible- ante un núcleo cuyo contenido puede deter-
mente, monista y sistemático y minarse y que llamamos “esencial”; a contrario
querrá convencernos de que el De- sensu, el contenido “no esencial” equivaldría
recho consiste solo en normas; en precisamente a aquella parte del derecho que
cambio, un judicialista extremo está fuera de ese contenido, o núcleo, y que en
siempre tendrá que admitir princi- consecuencia sí es posible la intervención del
pios y regulae iuris generales, aun-
que solo sean las producidas por la legislador para regular su ejercicio y restringirlo
si eventualmente le fuere preciso.
jurisprudencia y sus comentadores . ”
La segunda teoría es la relativa y consiste
en concebir que los derechos carecen de un
núcleo al cual el legislador no puede acceder;
13 Véase la Sentencia del Tribunal Constitucional español
STC 81/2001, fundamento jurídico 2. 16 En el Perú, este concepto no se ha recogido en la
14 Véase el artículo 5 de la Constitución de Brasil de Constitución de 1993; sino más bien gracias a la
1988. jurisprudencia del Tribunal Constitucional. Un intento
15 Martínez Álvarez, Eduardo, “El derecho a la imagen”, por introducirlo se dio gracias al proyecto de reforma
en Juris Doctor. Revista Jurídica On-Line. Versión en de la Constitución de 1993 preparado por el Congreso
línea: <www.jurisdoctor.adv.br/revista/rev-01/art13- el cual consistió en una trascripción literal del artículo
01.htm>. 53.1 de la Carta española de 1978.
Civil Personas
no se fija más límite que el respeto del núcleo normas, los derechos fundamentales; dado
esencial de la institución que la Constitución que, precisamente, son ellos los que de-
garantiza”21. ben estar limitados por la Constitución y
no realizar actos más allá de las funciones
expresamente atribuidas. En segundo lugar,
DATOS y atendiendo al principio de unidad que
debe informar a los operadores judiciales
Indecopi ha resaltado que las perso- al momento de interpretar la Constitución,
nas que reproduzcan o comercialicen tampoco es posible otorgar en los hechos
sin autorización cualquier creación una mayor importancia, o jerarquía, a unos
audiovisual, obra literaria, artística, derechos frente a otros en la misma constitu-
software, entre otros, tendrán una ción lo cual equivale a pensar que una carta
sanción con multas de hasta 180 magna admite la posibilidad de contener
UIT, (S/.684,000), y podrían recibir disposiciones contradictorias, imposibles de
una pena privativa de la libertad de armonizar, y que se encuentran en el texto
hasta ocho años. simplemente porque el papel “lo aguanta
todo”. Finalmente, en tercer lugar, debemos
Como mencionamos anteriormente, las tener en cuenta que el carácter normativo de
teorías absoluta y relativa han sufrido serios la constitución hace posible que sus disposi-
cuestionamientos en la doctrina contemporá- ciones no sean retóricas sino que vinculen a
nea pese a que las resoluciones de más de un sus destinatarios; por eso, no es posible que
tribunal constitucional han optado ya sea por unas partes de la Carta Magna se cumplan
una u otra, al momento de conocer y argu- en desmedro de las restantes que gozan
mentar una decisión en torno a la protección del mismo efecto jurídico y que, por tanto,
de un derecho fundamental; sin embargo, también deben de ser aplicadas22.
pese a su gran difusión, especialmente de la Por todo lo anterior, cometeríamos un error
teoría absoluta, compartimos los tres cues- si seguimos considerando que el contenido
tionamientos que se hacen en torno a ellas. constitucional de un derecho fundamental
En primer lugar, no es posible que se pre- tiene un carácter cerrado y que puede deter-
tenda atribuirle al Parlamento o Gobierno minarse a priori, de manera abstracta, pres-
la posibilidad de poder limitar, mediante cindiendo de las concretas circunstancias que
rodean a cada caso judicial. Todo lo contrario.
21 Véase el Exp. N.º 0004-1996-AI/TC. De acuerdo El contenido constitucional de los derechos
con el profesor Luis Castillo, la primera vez que el posee un carácter más bien abierto; es decir,
Tribunal Constitucional peruano se manifestó sobre que atendiendo a las circunstancias, el juez
el contenido de un derecho fue gracias a un voto
deberá, o no, enriquecer el contenido y alcan-
singular en la sentencia que resuelve la acción de
inconstitucionalidad interpuesta por 36 congresistas ces del derecho fundamental que está sujeto
contra la Ley N.º 26592; la cual reformaba la Ley a interpretación. En otras palabras, un Estado
N.º 26300 disponiendo que para la procedencia del no podría ofrecer una adecuada protección a
referéndum, “se requería se una iniciativa legislativa
popular que habiendo sido rechazada por el Con-
los derechos fundamentales a sus ciudadanos
greso, haya obtenido al menos 48 votos a favor. La si de manera abstracta el contenido de cada
cuestión a dilucidar consistió si la exigencia previa de derecho se encontrara ya definido en la ju-
intervención del Parlamento con 48 votos suponía o risprudencia de sus tribunales, con carácter
no la ‘la satisfacción de una condición tan despropor-
cionada, que la propia institución del referéndum se inmutable, pétreo, para la solución de todos
vea gravemente lesionada, al extremo de habérsele los casos por igual con idénticos resultados,
desnaturalizado, y en consecuencia –aunque no se
diga expresamente así– haberse afectado su contenido
esencial’”. Cfr. Castillo Córdova, Luis, Elementos de una 22 En ese sentido véase: Castillo Córdova, Luis, Los dere-
teoría general de los derechos constitucionales, ARA, chos constitucionales: elementos para una teoría general,
Lima, 2003, pp. 148-149. Palestra, Lima, 2005, pp. 246-249.
Civil Personas
lesionar el derecho al honor y no el derecho propiedad. Ya hemos precisado que el de-
a la imagen cuando se publica la imagen en recho a la imagen es un derecho autónomo
forma justificada en atención a otros bienes del derecho a la vida privada o a la honra.
constitucionales y no se afecta la integridad de Nos parece más correcta la vinculación con
la persona; se pueden afectar ambos derechos derecho a la privacidad, ya que forma parte
cuando no existe justificación por otros bienes de los derechos de la personalidad los cuales
constitucionales de la captación, reproducción tienen un carácter extrapatrimonial, siendo
o publicación de la imagen de la persona y al inherentes a la persona humana, indisponi-
mismo tiempo se afecta su integridad personal. ble, inalienable e imprescriptible.
En el caso de la demanda interpuesta por
una conocida animadora de televisión que
CONCLUSIÓN MÁS IMPORTANTE
reclamó una indemnización por utilizar su
imagen en una propaganda sin la debida
“[Si] bien la jurisprudencia de los autorización, la Corte Suprema resolvió
tribunales más reciente tiende a amparándola considerando que “(...) por su
identificar claramente el derecho a naturaleza los atributos de la personalidad
la propia imagen, existe disparidad son inalienables, figurando entre ellos, el
de criterios para integrarla o conec- derecho sobre la propia imagen, en virtud
tarla con el derecho a la privacidad del cual se tutela la intimidad y el decoro;
o con el derecho de propiedad. Nos que, consecuentemente, es derecho indis-
parece más correcta la vinculación del cutible de la persona el de decidir la opor-
derecho a la imagen con derecho a la tunidad y condiciones de representación
privacidad, ya que forma parte de los de su forma corporal, así como el prohibir
derechos de la personalidad, los cua- su desnaturalización que este derecho,
les tienen un carácter extrapatrimo- tendiente a la protección de la imagen, se
nial, siendo inherentes a la persona traduce en dos valores: uno moral y otro
humana, indisponible, inalienable e patrimonial; por el primero, nadie tiene
imprescriptible”. por qué invadir la esfera de la privacidad,
exhibiendo a los demás, sin consentimiento
No podemos dejar de comentar que si bien la del titular del derecho, a la efigie o imagen
jurisprudencia de los tribunales más reciente y, por el segundo, solo aquel le corresponde
tiende a identificar claramente el derecho determinar las exigencias que previamente
a la propia imagen, existe disparidad de deben satisfacerse para autorizar su difu-
criterios para integrarla o conectarla con el sión, coligiéndose –asimismo– que tampoco
derecho a la privacidad o con el derecho de está permitido procurarse un provecho
económico a expensas de la imagen de una
persona sin su consentimiento y, cuando así
lo ha postulado también el Código Procesal Constitu-
cional, que deja de mencionar la buena reputación. Y
hubiere ocurrido, la obligación de asumir
si bien tiene una base en la dignidad humana y, por lo el resarcimiento del daño arrogado es su
tanto, se cuestionaría su reconocimiento a favor de la consecuencia (...)”26. En resolución, resultó
persona jurídica, el honor se ha entendido como “(...) elocuente la efectiva protección extrapatri-
la capacidad de aparecer ante los demás en condiciones monial cuando la tendencia judicial suele
de semejanza, lo que permite la participación en los
sistemas sociales y corresponde ser establecido por la ser la contraria.
persona en su libre determinación (...)”. Protege a su
titular contra el escarnecimiento o la humillación, ante
sí o ante los demás, incluso frente al ejercicio arbitrario
de las libertades comunicativas, al significar un ataque 26 Cfr. Becerra Palomino, Enrique, “Derecho a la
injustificado a su contenido. Forma parte de la imagen intimidad”, en Libro homenaje a Carlos Rodríguez
humana (quizás por ello el equívoco de incluir en la Pastor, Cultural Cuzco, Lima, 1992, p. 133; citado
demanda el cuestionamiento a la imagen)”. Cfr. Exp. por Morales Godo, “Comentario al artículo 2, inciso
04611-2007-AA (fundamentos jurídicos 6 a 40). 7, de la Constitución de 1993”, cit., p. 121.
Civil Personas
COMENTARIO DE JURISPRUDENCIA
Comentario de jurisprudencia
Comentario a la
STC Exp. N.º 03459-
¿Puede inobservarse la prohibición
2012-PA/TC de difundir la imagen de niños,
niñas y adolescentes?
Apuntes a una sentencia que devela los errores de la
ponderación
1. Introducción
2. Los hechos del presente caso
3. El desarrollo jurisprudencial del Tribunal Constitucional en relación al derecho a la imagen
de niños, niñas y adolescentes.
SUMARIO
3.1. La interpretación de libertades informativas y derecho a la imagen por parte del Tribunal
Constitucional
3.2. Análisis a la protección del derecho a la imagen en la presente sentencia
3.3. La protección del derecho a la imagen de niños, niñas y adolescentes
4. La difusión de imágenes de los niños y adolescentes, y el derecho constitucional en periodos
de crisis
5. La limitación de la prohibición de difundir imágenes de niños, niñas y adolescentes, y los
riesgos de la ponderación
6. Conclusiones
Civil Personas
correcta?, ¿se debió difundir la imagen del ado- nuevamente trasmitidas en el programa noti-
lescente apodado “Gringasho” y los llamados cioso denominado “60 Minutos” conducido
“Los Pioneritos”?, ¿se debe mantener la prohi- por César Gonzáles Tuanama.
bición de difusión de imágenes de adolescentes
El demandante sustenta su posición en los
involucrados en infracciones a la ley penal?; o
siguientes argumentos:
¿Se debe flexibilizar dicha prohibición en aras
de reforzar la seguridad ciudadana? a) Se difundió una noticia que sin justifica-
ción ni autorización, mostró la imagen
de sus hijos sin distorsionar los rostros,
DATOS exponiéndolos a que sean víctimas de la
delincuencia.
Unicef se propone facilitar el ejerci-
b) Si bien se captaron las imágenes en un
cio del derecho al nombre, apoyando
lugar y evento público, el periodista César
intervenciones públicas que acercan
el registro de nacimientos a comuni- Gonzales Tunama y UTV debieron aplicar
dades rurales apartadas. La razón es la protección reforzada, valga decir, dis-
que una de las formas de proteger torsionado la imagen de los niños, a fin
a un niño es asegurarle la posesión de que no puedan ser reconocidos.
de un documento de identidad. Su c) Debido a que innecesariamente se difun-
carencia es frecuente entre la po- dió la imagen de sus hijos sin adoptar la
blación indígena, especialmente la protección reforzada, se han vulnerado
amazónica. los derechos fundamentales al honor, a
la intimidad, a la imagen y a la seguridad
2. Los hechos del presente caso personal de sus menores hijos.
Dado que se ha realizado una breve reflexión Por su parte, el señor César Gonzales Tuanama
en términos amplios acerca de las implicancias respondió la demanda de amparo señalando
de la difusión de imágenes de niños, niñas y que:
adolescentes, corresponde analizar los hechos a) Las imágenes difundidas son de fecha 3 de
del presente caso. octubre de 2010, por lo que la demanda
Jorge Velásquez Portocarrero, en representa- devendría en extemporánea.
ción de sus hijos O.R.V.A. y R.A.V.A., interpone b) Los delitos cometidos por medio del libro,
una demanda de amparo contra el periodista la prensa y demás medios de comunica-
César Gonzales Tuanama y Marcel Erick de ción social se tipifican en el Código Penal
Semedt Pajuelo conductor periodístico y di- y se juzgan en el fuero común, no en la
rectivo de Ucayalina de Televisión EIRL (UTV).
vía constitucional.
Ello, en vista de que el 2 de agosto de 2011,
el noticiero matutino de dicha televisora Por su parte, Ucayalina de Televisión respon-
propaló una noticia donde el señor Jorge dió la demanda señalando que:
Velásquez Portocarrero aparece en compañía a) No existe afectación alguna a los derechos
de sus hijos O.R.V.A y R.A.V.A. en un mitin de constitucionales de los demandantes,
campaña electoral. apreciándose que existe consentimiento
Dicha imagen fue difundida sin adoptar me- de los padres para que los menores par-
didas de protección de distorsión de rostros y ticipen en dichas manifestaciones.
b) La empresa televisora no tiene responsabi-
permita la difusión de imágenes de los adolescentes lidad sobre las acciones del comunicador
implicados en los delitos de asesinato o homicidio social y el codemandado; ya que antes
calificado. Véase “Reggiardo plantea difundir rostros de
menores acusados de asesinato”, en El Comercio, Lima, 17
de cada programa, se advierte que “El
de enero de 2013. Versión en línea: <goo.gl/1VnpHJ>. canal no se responsabiliza por opiniones
Civil Personas
faculta a “obtener su imagen, reproducirla y Para un sector de la doctrina, el Tribunal Cons-
publicarla” (Dimensión positiva)10. titucional no ha podido construir una línea
jurisprudencial clara respecto a la libertad de
Finalmente, el Tribunal Constitucional se ha
expresión. Así, se afirma que: “el análisis de
pronunciado específicamente sobre la distor-
Tribunal Constitucional peruano de los límites
sión de la imagen a fin de preservar el derecho
a la libertad de expresión presenta deficiencias
a imagen. Así, en el Caso Magaly Medina vs.
sustantivas, por lo que este derecho funda-
Mónica Adaro, el Tribunal Constitucional,
mental carece en el ordenamiento jurídico
ante la difusión de imágenes, señaló que:
nacional de una protección adecuada a nivel
“se debió evitar la difusión de imágenes que
puedan afectar algún derecho de las personas, jurisdiccional ante normas que restringe de
tal como ocurre cuando se cubre el rostro de forma ilegal o arbitraria su ejercicio, o respecto
alguien (el ejemplo más clásico de ello es a situaciones donde tales restricciones sean
cuando aparece un menor de edad, o también aplicadas de forma desproporcionada”.
cuando testifica alguien que no desea ser re- Por otra parte, en cuanto al derecho a la
conocido), ya sea tanto con su consentimiento libertad de expresión y el ejercicio periodís-
o sin él, cosa que tampoco ha ocurrido en el tico, el Tribunal Constitucional ha remarcado
caso de la querellante”11. la importancia que reviste el periodismo en
En cuanto a la libertad de expresión, el Tribu- el Estado Constitucional de Derecho, debido
nal Constitucional se ha pronunciado respecto a que al contribuir que los ciudadanos estén
a este derecho en diversas sentencias. Una de bien informados acerca de los temas de
la más importante es sin duda la recaída en interés público, se contribuye a fortalecer
la demanda de inconstitucionalidad presen- las instituciones democráticas, siempre y
tada por el Colegio de Periodistas. En dicha cuando dicho ejercicio se realice con res-
sentencia, el Tribunal Constitucional remarca ponsabilidad y con respeto a la dignidad
los límites a la libertad de información, se- de las personas12.
ñalando que el derecho a la información no
es irrestricto, dado que está condicionado a 3.2. Análisis a la protección del derecho a
ciertos derechos y principios que rigen un la imagen en la presente sentencia
Estado Constitucional de Derecho. El Tribunal Constitucional, atendiendo a que
el recurso de agravio constitucional solo se re-
En la referida sentencia, el Tribunal Constitu-
fiere a cuestionar la existencia de una cláusula
cional, siguiendo lo establecido en el Pacto
contractual que eximiría de responsabilidad a
de Derecho Civiles y Políticos, el Tribunal
Ucayalina de Televisión, debería pronunciarse
remarca que la libertad de expresión está
únicamente sobre este extremo, en virtud del
sujeta a la restricción de respetar la reputación
principio procesal tantum devolutum quantum
de las personas. Otro límite se encuentra en
apellatum. Sin embargo, el Tribunal Consti-
lo establecido en el artículo 2º inciso 4, que
tucional se decanta por pronunciar acerca
establece que los delitos cometidos a través de
de otros aspectos, a fin de “colaborar con la
medios de comunicación social se encuentran
interpretación que se realice de la Constitución
tipificados en el Código Penal y sancionados
respecto el derecho a la imagen propia de los
ex post la afectación al Derecho a la intimidad.
niños, niñas y adolescentes”13.
Finalmente, el derecho a la vida privada apa-
rece como un límite al derecho a la libertad Sin embargo, resulta contradictorio que el
de expresión. Tribunal Constitucional agrega que dichos
pronunciamientos se realizan “sin pre-
10 Sentencia del Tribunal Constitucional recaída en el
Expediente N.º 01970-2008-AA/TC, f.j. 11. 12 Sentencia del Tribunal Constitucional recaída en el
11 Sentencia del Tribunal Constitucional recaída en el Expediente N.º 0027-2005-AA/TC, f.j. 25.
Expediente N.º 06712-2005-HC/TC, f.j. 46. 13 Párrafo 2 de la sentencia bajo comentario.
Civil Personas
que si se toma en serio el párrafo anterior- reconocer un conjunto de Derechos en torno
mente mencionado, el Tribunal Constitucional a la infancia y adolescencia.
podría ser un foro adecuado respecto a decidir
La presente sentencia bajo comentario es el
si estos programas se encuentran protegidos
primer pronunciamiento del Tribunal Consti-
por la libertad de expresión.
tucional respecto al derecho a la imagen de
niños, niñas y adolescentes. Así, el Tribunal
MARTHA NUSSBAUM dice: Constitucional parte por considerar que exis-
ten dos criterios por los que niños, niñas y
adolescentes se encuentran protegidos y están
“matizar
El deseo de estig- exentos de ser difundidos, clasificándolos en
no es una los siguientes:
base racional para
el derecho… [En] a) La prohibición de difundir la imagen
una sociedad de- de niños, niñas y adolescentes en el
cente no se debe ámbito privado, sin el consentimiento
permitir que el de- de los padres o representantes.
seo de estigmati- b) La prohibición de difundir las imá-
zara un grupo impopular domine los genes de niños, niñas y adolescentes
procesos jurídicos. Por el contrario, involucrados como víctimas, autores,
se insistirá en dar la misma protec- partícipes o testigos de una infracción,
ción, sin importar lo impopulares que falta o delito
ellos y sus prácticas pueden ser . ” Con relación al primer punto, el Tribunal
Constitucional señala que no se puede retratar
3.3. La protección del derecho a la imagen la imagen de niños en el ámbito íntimo, sin
de niños, niñas y adolescentes el previo consentimiento de los padres. Ello
quiere decir que niños, niñas y adolescentes,
El Tribunal Constitucional ha desarrollado
por su especial situación de protección, me-
importantes criterios jurisprudenciales pro- recen una protección especial. Sin embargo,
nunciándose respecto a la pensión de alimen- el Tribunal Constitucional no toma en cuenta
tos15, la obligación de los gobiernos locales de el reconocimiento del principio de autonomía
proteger a los niños y adolescentes16. progresiva de niños, niñas y adolescentes; es
En líneas generales, el Tribunal Constitucional decir, en tener en cuenta la opinión de los
ha señalado que el principio de protección del propios niños y adolescentes con relación
interés superior del niño, niña y adolescente a la regulación de su propia imagen, sin la
constituye un contenido constitucional implí- intervención de sus padres o representantes
cito del artículo 4º de la Norma Fundamental legales.
en cuanto establece que: “La comunidad y Cabe recordar que con la Convención de
el Estado protegen especialmente al niño, al Derechos del Niño, representa el cambio de
adolescente, (...)”17. Asimismo, se atiende a paradigma de la protección integral de los de-
que el Estado, en virtud de la Convención de rechos de la niñez e implica que niños, niñas
derechos del Niño18, se ha comprometido a y adolescentes deben ser considerados sujetos
plenos de derecho y que son sus derechos
15 Sentencia del Tribunal Constitucional recaída en el los que merecen una protección especial. Es
Expediente N.º 02132-2008-AA/TC. decir, deben de ser protagonistas de sus pro-
16 Sentencia del Tribunal Constitucional recaída en el
Expediente N.º 00298-1996-AA/TC.
17 Sentencia del Tribunal Constitucional recaída en el Unidas el 20 de noviembre de 1989 y ratificada por
Expediente N.º 02132-2008-AA/TC, f.j. 5. el Estado Peruano mediante Resolución Legislativa
18 Convención sobre los Derechos del Niño de 1989, N.º 25278 del 3 de agosto de 1990, publicada en el
aprobada por la Asamblea General de las Naciones diario oficial El Peruano el 4 de agosto de 1990.
Civil Personas
zación de niños, niñas y adolescentes. Así, el 4. La difusión de imágenes de los
Tribunal Constitucional señala que: niños y adolescentes, y el derecho
“[La prohibición de la difusión de la imagen constitucional en periodos de crisis
de los niños, niñas y adolescente] no implica Conforme hemos señalado en líneas prece-
que no puedan existir casos excepcionales dentes, el Tribunal Constitucional ha estable-
en los que por la naturaleza de los hechos cido que la prohibición absoluta de difundir
(alta peligrosidad del menor, por ejemplo) las imágenes de niños y adolescentes puede
se justifique la difusión de ciertas imágenes. tener excepciones cuando la peligrosidad de
No obstante”. estos, justifique la difusión de sus imágenes.
Sin embargo, cabe contrastar lo señalado
Consideramos, siguiendo a Martha por el Tribunal con el pronunciamiento del
Nussbaum24, que “la Ley debe ofrecer fuertes Comité de Derechos del Niño, organismo
protecciones a los individuos contra las intru- internacional que entre sus facultades está la
siones arbitrarias, tanto del poder del Estado interpretación de la Convención de Derechos
como de las presiones sociales para adaptar- del Niño y de los protocolos adicionales.
se”. Como se demostrará en el siguiente acá- El Comité de Derechos del Niño ha esta-
pite, la relativización de la prohibición general blecido claramente que los periodistas que
de difundir las imágenes de niños, niñas y vulneran el derecho a la vida privada de
adolescentes, representa un serio retroceso en un niño que tenga conflictos con la justicia
la protección de los derechos fundamentales pueden ser pasibles de ser sancionados con
frente al fenómeno de la inseguridad ciuda- medidas disciplinarias y en ciertas situaciones,
dana que cada es más patente en el día a día por ejemplo, la reincidencia, ser pasible de
de la sociedad peruana. sanciones penales25.
Incluso, el Comité de Derechos de los Niños,
va más allá, e indica que se debe tomar medi-
MANUEL ATIENZA dice: das de protección para asegurar que los niños
involucrados con la infracción penal no sean
“
[La] tortura no expuestos durante las audiencias judiciales y,
por lo tanto, deben de desarrollarse a puerta
tiene un carácter
absoluto debido a cerrada. Asimismo, respecto a los expertos u
que teóricamente otros profesionales que participan en el juicio,
cabría traer a cola- estos deben de guardar la confidencialidad
ción los supuestos del caso26.
de estado de nece- Asimismo, recientemente el Comité ha seña-
sidad y legítima lado que el principio del interés superior se
defensa... [Por] razones utilitaristas aplica a los niños en conflicto con la ley, en
o de prevención está justificado que contacto con ella (como víctima o testigo) y
exista una regla pública que la pro- afectados por la situación de sus padres que
hibiera de manera absoluta, debido esté en conflicto con la ley. En atención a ello,
a que es conveniente que esas posi- la protección del interés superior del niño
bles excepciones no estuvieran ex- significa que los tradicionales objetivos de la
presamente señaladas . ” justicia penal, a saber, la represión o el castigo
más allá de su propia existencia, como si el futuro de 25 Comité de Derechos del Niño. Observación General
sus descendientes, paradójicamente la seguridad de N.º 10 (2007). Los derechos del niño en la justicia de
ellos, no le interesara en lo absoluto”. menores, Párr. 64.
24 Nussbaum, El ocultamiento de lo humano: repugnan- 26 Comité de Derechos del Niño. Observación General N.º
cia, vergüenza y ley, cit., p. 313. 10 (2007), cit., Párr. 66.
Civil Personas
la Universidad Hebrea, en un contexto social propia Constitución, sino en forma implícita
en el que Israel progresivamente endurecía sus por la citada norma, y también por Tratados
medidas de seguridad, en aras de proteger a Internacionales de los cuales el Perú también
sus ciudadanos de las amenazas de ataques es signatario”.
terroristas explosiones en cafés y autobuses.
No obstante lo señalado, el juez Brennan
El juez Brennan afirmaba que él se sentía muy acotaba que, a pesar de que era patente que
orgulloso de la protección a las libertades el aligeramiento en la protección de derechos
civiles durante el tiempo de paz, pero que se habían resultado innecesarios para los objeti-
fallaba en preservar dichas libertades cuando vos planteados, frente a una nueva situación
la administración consideraba que había de crisis, será incapaz de ser plenamente
una amenaza a la seguridad. Cuando estas consciente de no repetir el mismo error. Por
crisis concluían, Brennan afirma que existía el ello, Brennan afirmaba que la jurisprudencia
consenso de que la abrogación de libertades constitucional de las libertades civiles de los
civiles había sido innecesaria. tiempos de paz dejaba sin una tradición o
una base teórica para defender a las liberta-
Dicha afirmación resulta claramente cierta, si
des civiles frente a las preocupaciones de la
recordamos el marco legal que se creó durante
seguridad en tiempo de crisis.
la década de los noventa para combatir el
terrorismo, la llamada “legislación penal de Visto así, siguiendo al citado autor, consi-
emergencia”29. Cabe recordar que la legis- deramos que para enfrentar la inseguridad
lación penal de emergencia fue presentada ciudadana no puede ser exitosamente
como la forma más “eficaz” de luchar contra conducida por decisiones que se toman
el terrorismo, instituyéndose un proceso penal de forma particular, relativizando los dere-
distinto donde se desconocía diversos derechos chos de los niños y adolescentes. Por ello,
fundamentales. Una vez restituidas la demo- consideramos la apreciación del Tribunal
cracia y el marco constitucional, fueron objeto Constitucional, respecto a establecer una
de pronunciamientos por parte de la Corte excepción a la prohibición absoluta de di-
Interamericana y el Tribunal Constitucional. fundir las imágenes de niños y adolescentes
involucrados en infracciones a la ley penal
A manera de ejemplo, resulta pertinente citar
o en un delito resulta claramente errado.
lo señalado en el Informe final de la comisión
Corresponde al Tribunal Constitucional, en
de estudio y revisión de la legislación emitida
su función de garante de los derechos fun-
desde el 5 de abril de 199230. Así, se señala que:
damentales, no ceder frente a las situaciones
“Quizá uno de los temas más sensibles duran- crisis, en el presente caso, provocada por la
te el régimen precedente en la materia que inseguridad ciudadana.
venimos analizando, es el de la vulneración
Aunado a ello, incluso puede esgrimirse un
de principios constitucionales y Derechos Fun-
argumento utilitarista. Conforme lo muestra
damentales a través de la emisión de normas
un importante estudio, el etiquetamiento
legales de naturaleza penal y, en gran medida,
social de los adolescentes que se encuentran
en relación con la lucha antisubversiva. Como
resultado de ello, se han expedido ciertas inmersos en algún delito, solo incrementa
normas que colisionan en forma directa con las probabilidades de que permanezcan con
la Constitución de 1993, además (...) de vio- una conducta disocial y refuerzan sus lazos
lar derechos fundamentales de las personas, hacia grupos sociales desviados, tales como
consagrados no solo explícitamente por la pandillas o bandas criminales31.
Civil Personas
de que nada está libre la ponderación, que 4. Consecuencias, reales vs. simbólicas: El argu-
los límites que le hemos establecido al Estado mento de maximizar la seguridad en des-
frente a los individuos son todos relativos y medro de la libertad, generalmente resulta
que podemos flexibilizar el marco jurídico impreciso respecto de las consecuencias
existente. que realmente resultan de ellas. En otras
Frente a ello, cabe plantear lo sostenido palabras, las consecuencias resultan ser
por el Profesor Waldron. Para este autor, los más simbólicas que reales.
estados siempre buscan limitar la libertad de Teniendo presente lo argumentado por el
los ciudadanos, y una emergencia por una Profesor Waldron, resulta persuasivo conside-
situación de terrorismo ofrece una fina opor- rar que la decisión del Tribunal Constitucional
tunidad para limitar derechos. Generalmente, de dejar abierta la posibilidad de efectuar
los defensores de las Cortes como un poder excepciones a la prohibición absoluta de
contramayoritario creen que el Poder Judicial difundir las imágenes de niños, niñas y ado-
representa un foro que puede hacer frente lescentes, frente a los argumentos de peligro
a estas amenazas. Sin embargo, en tiempos motivados por la seguridad ciudadana resulta
de crisis y pánico por amenazas como el te- inadecuada.
rrorismo y la actual inseguridad ciudadana,
las Cortes suelen alinearse a las medidas de Si profundizamos en la objeción consecuen-
restricción de derechos. cialista y los problemas distributivos, podemos
constatar que siempre resultarán derrotables
Por ello, siguiendo al profesor Waldron33, cabe los derechos de niños, niñas y adolescentes
señalar algunas objeciones a la ponderación. frente a los argumentos de seguridad ciuda-
Así, tenemos: dana, debido a que bajo la aplicación de la
1. La objeción consecuencialista: Afirma el ponderación estaremos en realidad bajo un
citado autor que el balance puede resultar análisis que privilegiará la seguridad de la so-
inadecuado cuando se está frente a liber- ciedad en desmedro de un grupo vulnerable,
tades civiles o derechos fundamentales, como son niños, niñas y adolescentes.
dado que el cálculo costo beneficio debe Por otra parte, como señalamos en líneas
de quedar subordinado al respeto incon- precedentes, un efecto no deseado de difundir
dicional de ciertas libertades. El análisis las imágenes de los adolescentes infractores
costo-beneficio resulta adecuado cuando redundará en que se los acerque a permanecer
se está frente a situaciones que no afectan
en grupos disociales que reintegrarlos a la so-
los derechos de nadie.
ciedad. Finalmente, como consecuencia simbó-
2. Problemas distributivos: El citado autor se- lica de difundir las imágenes de adolescentes,
ñala que cuando se está frente a argumen- consideramos que no es una medida signifi-
tos pro seguridad, se oculta argumentos cativa para reducir la inseguridad ciudadana.
que tienen un impacto distributivo para Resultaría más adecuado aplicar medidas de
limitar la libertad de “algunas personas”. protección, y de control de jueces y fiscales que
3. Efectos no queridos: Dado que a fin de juzgan a las bandas delictivas. Quizás, mirar la
maximizar la seguridad se restringe la experiencia italiana frente a fenómenos como
libertad, ello implica que también dismi- la cosa nostra, nos pueden brindar unas buenas
nuye la protección que tiene la ciudadanía guía para realizar reformas a nivel judicial que
frente al poder del Estado. nos ayude a enfrentar este fenómeno.
6. Conclusiones
33 Waldron, Jeremy, “Security and Liberty: The Image
Si bien la sentencia bajo comentario resulta
of Balance”, en The Journal of Political Philosophy, vol.
11, N.º 2, 2003, pp. 191-210. adecuado, el razonamiento aplicado por el
TEXTO DE LA SENTENCIA
ASUNTO
Recurso de agravio constitucional interpuesto por don Jorge Velásquez Portocarrero en nombre
y representación legal de sus menores hijos de iniciales O.R.V.A y R.A.V.A., contra la resolución
expedida por la Sala Especializada en lo Civil y Afines de la Corte Superior de Justicia de Ucayali,
de fojas 299, declaró fundada en parte, la demanda de amparo de autos.
ANTECEDENTES
Con fecha 12 de octubre de 2011, el actor interpone demanda de amparo en nombre y repre-
sentación legal de sus menores hijos O.R.V.A y R.A.V.A. contra Ucayalina de Televisión EIRL (UTV),
Marcel Erick de Semedt Pajuelo y César Gonzales Tuanama. Solicita que los emplazados cesen
las agresiones y violaciones en contra de sus menores hijos de 14 y 10 años respectivamente,
mediante la exposición pública injustificada de imágenes de los rostros de los indicados meno-
res en los diversos espacios y programas que transmite. Asimismo, solicita que en el futuro los
demandantes se abstengan de mostrar, en todo tipo de programa que trasmitan, las imágenes
de los referidos menores.
Afirma que con fecha 2 de agosto de 2011, en un noticiero matutino del Canal América Noticias,
edición Pucallpa, a horas 06:30 hrs. se propaló una noticia referida al demandante, Presidente
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Regional de Ucayali, difundiendo su imagen, pero también las imágenes de sus menores hijos.
Dichas imágenes fueron nuevamente emitidas a las 19:00 [horas] el programa noticioso deno-
minado “60 Minutos” conducido por periodista César Gonzales Tuanama. Durante el desarrollo
de tal noticia, y sin justificación ni autorización alguna, se publicaron las imágenes sus menores
hijos, exponiéndolos, sin adoptar las medidas de protección de distorsión de sus rostros, a que
potenciales víctimas de la delincuencia, al presentarlos como la familia del Presidente Regional.
Argumenta que a pesar de la veracidad de la información emitida, por tratarse de imágenes de
menores de edad, se debe implementar una protección reforzada. Ejemplo de ello es la prohibi-
ción de emitir imágenes de menores que estén involucrados en casos judiciales. En tal sentido,
alega que se han vulnerado sus derechos fundamentales al honor, a la intimidad, a la imagen y
a la seguridad personal de sus menores hijos.
Con fecha 17 de noviembre de 2011, César Gonzales Tuanama contesta la demanda solicitando
que esta sea rechazada. Refiere que conduce el programa “60 Minutos Noticia” emitido por UTV.
Alega que las mencionadas agresiones y violaciones de derechos constitucionales no existen. Refiere
que el actor está amparando su demanda en la constatación de un video realizado por la notaria
Giovana Merino Reyna Campodónico, quien declaró que conoce e identifica a los menores de-
mandantes. Sin embargo, afirma que tal constatación se realizó de forma subjetiva y sin constatar
la fecha de realización de la supuesta agresión o violación de derecho de los demandantes. Así, las
imágenes muestran que se trata de un mitin de elecciones regionales del 3 de octubre de 2010,
“pudiendo ser imágenes transmitidas el año 2010”, por lo que la demanda sería extemporánea.
Alega también que se pretende afectar su derecho a la libertad de expresión, información, opinión
y difusión establecida en el artículo 2o, inciso 4 de la Constitución, ya que el trabajo periodístico
se debe realizar sin previa autorización o censura ni impedimento alguno. Además índica que en
el mismo cuerpo legal se prevé que los delitos cometidos por medio del libro, la prensa y demás
medios de comunicación social se tipifican en el Código Penal y se juzgan en el fuero común,
mas no en la vía constitucional. Refiere que lo que en realidad se pretende es una venganza del
accionante que con anterioridad interpuso una cantidad innumerable de querellas criminales con
la única finalidad callar y restringir su labor de periodista sobre los graves casos de corrupción que
denuncia públicamente. Alega que resulta condenable que ahora utilice a sus hijos como víctimas
para accionar constitucionalmente basado en supuestos hechos ocurridos al parecer en el año
2010, donde el propio accionante es quien expuso a la luz pública de manera irresponsable a sus
menores hijos. Alega que no existe ninguna prueba que acredite la fecha de la supuesta agresión
y violación de derechos constitucionales.
Marcel Erick de Smedt Pajuelo argumenta que no ejerce el cargo ni funciones en la empresa
televisora desde el 1 de abril de 2011, por lo que no le corresponde contestar la demanda, ya
que según el actor las imágenes habrían sido emitidas el 2 de agosto de 2011.
UTV contesta la demanda solicitando que se rechace la demanda, aduciendo que las imputaciones
no tienen sustento legal, y que están fundamentadas en una constatación notarial que realiza la
Notaria Pública, Giovanna Merino Reyna Campodónico, la que no tiene capacidad para suscribir
ninguna acta de constatación en los términos referidos en el acta de fecha 26 de setiembre de
2011. Agrega que en dicha acta no se hace descripción de la grabación del programa “60 minutos”
conducido por el periodista César Gonzales Tuanama, y tampoco detalla en dicha acta en qué
circunstancias aparecería la fecha 2 de agosto de 2011. Afirma también que en el acta no se refleja
de manera documentada agresión alguna a los derechos constitucionales de los demandantes,
apreciándose que existe consentimiento de los padres para que los menores participen en dichas
manifestaciones. Indica además que la empresa televisora no tiene responsabilidad sobre las
acciones del comunicador social y el codemandado, ya que antes de cada programa se advierte
que “El canal no se responsabiliza por opiniones vertidas en este programa”. Además, indica que
en los contratos entre la televisora y los co-demandados se establece una cláusula en las que se
establece que la empresa no se responsabiliza por las opiniones, contenidos, etc., siendo esta
responsabilidad única de la productora.
Con fecha 17 de febrero del 2012, el Juzgado Especializado en lo Civil de Emergencia de la Corte
Superior de Ucayali declara infundada la demanda de amparo. Estima que si bien es cierto que
las personas públicas soportan un mayor riesgo que las personas anónimas o privadas, en lo que
se refiere al derecho a la intimidad, ello solo debe considerarse para “aquellos aspectos de su vida
que tiene que ver con su proyección pública, en cuyo caso, su derecho es igual al de cualquier
persona anónima”. En tal sentido, tal como lo acredita el acta de constatación emitida por la
notaría pública, las imágenes fueron captadas al momento en que varios otros medios de prensa
cubrían el mitin político que venía realizando el padre de los menores, por lo que la exposición
al público de los menores no fue propiciada por las partes demandadas, sino por el propio padre,
que al momento de exponerlos a una actividad pública, sale de la esfera familiar y por ende de
la vida privada del recurrente. Por consiguiente, los emplazados no han vulnerado los derechos
constitucionales al honor, intimidad, identidad e imagen.
La Sala revoca la resolución apelada declarando fundada, en parte, la demanda estimando que
no se podía determinar si es que la información del programa es injuriosa o despectiva por lo
que no se acredita la afectación al derecho a la buena reputación y al honor de los menores. Por
el contrario, respecto al derecho a la imagen, la Sala entiende que la imagen ha sido utilizada
fuera de contexto, más aún si es que el propio periodista demandado acepta haber transmitido
la imagen de los menores sin autorización expresa, justificando ese actuar en el hecho de que
su padre, quien ese entonces era candidato a la Presidencia del Gobierno Regional, los expuso
públicamente. Así, el ad quem considera que el periodista no habría considerado la protección
superlativa de los derechos de los niños y adolescentes. Afirma que se vulnera también el derecho
a la intimidad puesto que se ha difundido una noticia no deseada por estos y que no realza su vida
privada sino que más bien innecesariamente se ha difundido su imagen en una nota televisiva,
sin que exista justificación social o pública; y es que el hecho de participar conjuntamente con
sus padres en un mitin de campaña política no significa que se pueda hacer pública su partici-
pación sin las medidas de seguridad que correspondan. Por último, considera que también se
ha vulnerado la seguridad personal de los adolescentes al ser expuestos a riesgos innecesarios al
no haberse protegido la identidad de los menores, exponiéndolos a que puedan ser reconocidos
por la población. Alega que si bien existe libertad de expresión y de información, esta debe
ponderarse con la protección especial de los niños, niñas y adolescentes. Por último, explica que
respecto la responsabilidad solidaria, solo alcanza al comunicador y no a UTV, ni a Marcel Erick
Smedt Pajuelo en virtud a los contratos firmados entre las partes. En tal sentido ordena que César
Gonzales Tuanama se abstenga en el futuro de mostrar en todo tipo de programas que transmita
las imágenes de los menores sin contar con la autorización de los padres.
En el recurso de agravio constitucional (RAC), el accionante cuestiona únicamente el extremo en
el que no se considera como responsables a UTV y a Marcel Erick Smedt Pajuelo, pues considera
que ningún contrato libera del deber de respetar los derechos constitucionales, más aún sí se ha
acreditado la vulneración.
FUNDAMENTOS
1. Tal como lo indica el artículo 202, inciso 3 de la Constitución, le corresponde al Tribunal
Constitucional “Conocer en última instancia, las resoluciones denegatorias de hábeas
corpus, amparo, hábeas data, y acción de cumplimiento.” De otro lado, el artículo 18º
del Código Procesal Constitucional establece que el recurso de agravio» constitucional
procede contra la resolución de segundo grado que declara infundada o improcedente
la demanda. Se observa pues que la demanda ha sido declarada fundada, en parte,
cuestionándose mediante el recurso de agravio constitucional únicamente lo referido
a la no inclusión de Ucayalina de Televisión EIRL y a Marcel Erick de Semedt Pajuelo
como responsables de la vulneración de los derechos fundamentales a la imagen, a la
intimidad y a la seguridad personal. En tal sentido, de acuerdo con la Constitución y el
Código Procesal Constitucional (CPCo), este Tribunal se ve impedido de analizar aspectos
diferentes a los cuestionados en el RAC. Por consiguiente, en virtud del principio procesal
tantum devolutum quantum apellatum este Tribunal solo puede pronunciarse sobre los
extremos peticionados por el recurrente.
2. No obstante, este Tribunal considera que debe expresar ciertos argumentos respecto de
las cuestiones discutidas en el presente caso. Con ello se espera colaborar con la inter-
pretación que se realice de la Constitución respecto el derecho a la imagen propia de los
niños, niñas y adolescentes y además, sin pretender agotar la materia, sentar criterios
orientadores para la resolución de futuras controversias similares.
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la población. Así por ejemplo, los criterios de razonabilidad no podrán ser los mismos
que aquellos utilizados para el del derecho a la imagen propia de los adultos, compra
continuación se pasará a explicar.
§ El principio de protección especial y “el interés superior de los niños, niñas y [ado-
lecentes]”
10. Este Tribunal ya ha establecido en la STC 02132-2008-PA/TC que el principio consti-
tucional de protección del interés superior de los niños y adolescentes constituye un
contenido constitucional implícito del artículo 4o de la Norma Fundamental, al establecer
que “La comunidad y el Estado protegen especialmente al niño, [y] al adolescente,
(...)”. Se ha explicado en dicha sentencia que debido a la situación especial en las que
se encuentran los niños y [adolescentes], estos son sujetos de derecho de protección
especial, requiriendo asistencia y cuidados adecuados, necesarios y especiales para su
desarrollo y bienestar.
11. De igual forma en el artículo 3o de la “Convención sobre los Derechos del Niño” (en ade-
lante CNYD) de 1989, ratificada por el Estado Peruano mediante Resolución Legislativa
N.º 25278, se especifica que todas las medidas concernientes a los niños y adolescentes,
todas las instituciones públicas o privadas, atenderán al interés superior del niño. De igual
modo en el artículo IX del Título Preliminar del Código de los Niños y Adolescentes (Ley
N.º 27337), se establece que en toda medida concerniente al niño y al adolescente que
adopte el Estado, así como en la acción de la sociedad, “se considerará el Principio del
Interés Superior del Niño y del Adolescente y el respeto a sus derechos.” Así, en la ya
citada STC 02132-2008-PA/TC, el interés superior de los niños y adolescentes impone que
la elaboración, interpretación y aplicación de las normas relacionadas con los niños, así
como las políticas públicas y programas sociales, deban estar dirigidas al pleno, armonioso
e integral desarrollo de su personalidad en condiciones de libertad, bienestar y dignidad
(fundamento 11).
12. Estos dos principios obligan a la sociedad y al Estado a desplegar su actividad tomando
en cuenta la especial situación de los niños y adolescentes. En efecto, la naturaleza
extra-protectora o de protección complementaria de la legislación sobre niños y ado-
lescentes, encuentra su razón de ser en la situación de formación y vulnerabilidad en
la que se encuentra este sector de la sociedad. En esta etapa de la los menores están
recién familiarizándose con los valores y patrones culturales que rigen cada sociedad.
Los niños y adolescentes desprotegidos contra los maltratos físicos y psicológicos, co-
metidos consciente o inconscientemente, tenderán a interiorizarlos como algo normal,
y reproducirlos más tarde cuando sean adultos o inclusive padres. La legislación desea
evitar tal situación por lo que imprime una obligación de protección especial a tal sector
de la población. Por dicha razón, este principio también impone que la elaboración,
interpretación y aplicación de las normas relacionadas con los niños, así como las polí-
ticas públicas y programas sociales, deban estar dirigidas al pleno, armonioso e integral
desarrollo de la personalidad de los niños y adolescentes, en condiciones de libertad,
bienestar y dignidad.
Civil Personas
tal sentido, el representante de los demandados había solicitado que cesen las agresiones
a los derechos de sus hijos y que en el futuro se abstengan de transmitir las imágenes de
sus menores sin contar con la autorización de los padres.
21. En este caso la Sala ha estimado que el periodista César Gonzales Tuanama debe abstenerse
de “mostrar en todo tipo de programas que transmita las imágenes de los menores de
edad de iniciales O.R.V.A. y R.A.V.A. sin contar con la autorización de los padres1. El ad
quem ha llegado a tal conclusión fundamentando que se había emitido una noticia no
deseada, y que se difundió la imagen de los menores “en una nota televisiva sin existir
justificación social o pública”. Es decir, la sala ha cumplido con delimitar, desde su pers-
pectiva, el derecho a la imagen propia de los menores demandantes. Por consiguiente,
no tendría sentido obligar al periodista a cumplir con no vulnerar el derecho a la imagen
y de otro lado, permitir que ello pueda realizarse en otros casos.
22. Una vez establecido el criterio por el cual se va a resolver la presente demanda, debe
indicarse que Marcel Erick de Semedt Pajuelo no se encontraba laborando como productor
en el tiempo en donde se emitieron las imágenes que ha cuestionado el actor. Ello de
acuerdo con el documento obrante a fojas 122. En tal sentido, dicha persona no habría
intervenido en el procedimiento dirigido a emitir las imágenes cuestionadas por el actor
y, por consiguiente, la demanda debe ser declarada infundada respecto de tal persona.
23. En lo que respecta a Ucayalina de Televisión EIRL, se ha presentado el contrato (fojas
18) entre el periodista demandando y la empresa televisora en donde se observa una
cláusula que establece que la empresa “no se responsabiliza por la opiniones, contenidos,
comentarios, ni publicidad vertidos dentro del programa televisivo, siendo responsabili-
dad única y exclusiva de La Productora.” La Sala Superior ha considerado que en virtud
a esta cláusula de exclusión de responsabilidad los efectos de la sentencia no deben
afectar a Ucayalina de Televisión EIRL. No obstante, de acuerdo con lo ya establecido
en el fundamento 21 supra, y en virtud a lo expuesto por la propia Sala, los efectos de
la sentencia deben recaer también sobre la empresa televisora. Y es que en virtud de un
contrato privado no es factible rehusarse a cumplir con los mandatos de la Constitución,
los que han sido materializados en el presente caso por la Sala.
Por estos fundamentos, el Tribunal Constitucional, con la autoridad que le confiere la
Constitución Política del Perú,
HA RESUELTO
a. Declarar FUNDADA la demanda respecto de Ucayalina Televisión EIRL.
b. Declarar INFUNDADA la demanda respecto de Marcel Erick de Semedt Pajuelo.
Publíquese y notifíquese
SS.
MESÍA RAMÍREZ / ETO CRUZ / ÁLVAREZ MIRANDA
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Contenido
CONSULTA n° 1 En el Perú, ¿es imperativo que el apellido paterno vaya primero?
CONSULTA N° 1
Ana María y Juan han leído en las noticias que en México la Comisión
de Justicia de la Cámara de Diputados aprobó reformas al Código Civil
Federal que permitiría que una pareja decida cuál será el orden de los
apellidos de sus hijos e hijas, en ese sentido, podrán poner primero el
apellido materno. Al respecto, ambos nos preguntan si en el Perú es
imperativo que el apellido paterno vaya primero o no.
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RESEÑA DE JURISPRUDENCIA
Reseña de jurisprudencia
Casación N.º
592-2013-Ayacucho
Cuando existan motivos justificados,
es posible cambiar el nombre
TEXTO DE LA CASACIÓN
autorice la adición de los apellidos paternos de su menor hijo Boris Rodrigo Paz Zumaeta a Boris
Rodrigo Paz De La Barra Zumaeta, en razón del prestigio nacional y regional que tiene el apellido
del padre; que, el A quo como la Sala no han tenido en cuenta la existencia de la excepción del
artículo 29 del Código Civil, para adicionar un nombre, declarando infundada la demanda inter-
puesta, pese a que han demostrado el motivo de su justificación; vulnerándose los derechos fun-
damentales a la identidad; más aún si este se identifica con los apellidos del padre. 3. ANTECE-
DENTES: Que, para efectos de determinar si en el caso concreto se han infringido los dispositivos
antes mencionados, es necesario realizar las precisiones que a continuación se detallan: 3.1 Que,
Boris Micheel Paz De La Barra y Libany Zumaeta Collantes, mediante escrito ingresado el seis
de julio de dos mil once (fojas 12), interponen demanda de adición de nombre, pretendiendo que
se adicione el apellido materno del padre en el apellido paterno de su hijo y como consecuencia
de dicha adición el apellido de su menor hijo sea Paz De La Barra Zumaeta; manifiesta que con
fecha doce de abril de dos mil once, inscribieron a su menor hijo en el Registro Civil de la Munici-
palidad de Huamanga, con el nombre de Boris Rodrigo Paz Zumaeta. Que el pedido de autoriza-
ción para que el menor lleve el apellido paterno compuesto se debe al prestigio con el que
cuenta el apellido Paz De La Barra a nivel nacional, además de ser Boris Micheel Paz De La Barra
-padre del menor- un abogado reconocido a nivel regional por analizar los problemas coyuntura-
les desde el punto de vista técnico jurídico, emitir pronunciamientos contra la violación de derechos
laborales y actos de corrupción, mediante conferencias y medios de comunicación. Agrega que en
su familia existen casos similares como el de sus sobrinos Álvaro Gonzalo y María Pía Paz De La
Barra Freigeiro, quienes llevan los apellidos de su padre Vladimir Paz De La Barra, obteniendo
Álvaro Gonzalo el apellido compuesto a través de la resolución judicial de fecha veinticinco de
octubre de mil novecientos ochenta y tres, por la cual se le adicionó el apellido materno del padre,
resultando en adelante como Álvaro Gonzalo Paz De La Barra Freigeiro; agrega que igual sucede
con la hija de su hermana Tania Ivanova Paz De La Barra, Nicolle Arriaran Paz De La Barra, a quien
se le adicionó al apellido materno el apellido materno de su progenitora. 3.2. Que, por resolución
número cuatro, del quince de noviembre de dos mil once (fojas 34), se excluye al Ministerio Públi-
co como parte del proceso. Mediante resolución número seis, del nueve de enero de dos mil doce
(fojas 57), se fijó como puntos controvertidos: 1. Determinar si existe motivos fundados para pre-
tender el cambio de nombre (adición de nombre) del titular registral del niño Boris Paz Zumaeta,
esto es adicionando al apellido paterno del menor el apellido materno de su progenitor Boris
Micheel Paz De la Barra; para que quede de la forma compuesta Paz-De La Barra; consecuente-
mente la identidad definitiva del menor sea la de Boris Rodrigo Paz De La Barra Zumaeta. 2. De-
terminar si la legislación nacional permite los apellidos compuestos. 3.3. Que, el Juez de primera
instancia, mediante sentencia contenida en la resolución número siete, del veinte de abril de dos
mil doce (fojas 59), declaró infundada la demanda, al considerar que el artículo 20 del Código
Civil, impide que el hijo tenga más de dos apellidos, evitando que se genere un apellido compues-
to, es decir que la norma no autoriza anexar el apellido materno en la línea paterna o materna al
nombre de una persona, además de que el reconocimiento o prestigio nacional que pueda tener
el apellido Paz De La Barra no es razón justificante para efectuar la adición de nombre, esto es,
anexar el apellido materno de la línea paterna al primer apellido del titular registral, menor Boris
Rodrigo Paz Zumaeta, conforme también lo establece el artículo 29 del Código Civil, toda vez que
la norma sustantiva no lo autoriza. 3.4. Que, contra la mencionada sentencia, los demandantes
interponen recurso de apelación, mediante escrito ingresado con fecha veintiocho de mayo de dos
mil doce (fojas 90); por lo que la Sala Civil de Huamanga de la Corte Superior de Justicia de
Ayacucho, absolviendo el grado (fojas 124), confirmó la sentencia de primera instancia que decla-
ró infundada la demanda, precisando sustancialmente que no se acreditó en autos que figure en
la partida de nacimiento y demás documentos de identidad del padre del menor el apellido pa-
terno compuesto que desea trasmitir a su hijo, lo que ocasionaría problemas de filiación y lazos de
parentesco entre el menor y su progenitor, toda vez el artículo 20 del Código Civil, modificado por
la Ley 28720, imperativamente dispone que al hijo le corresponde el primer apellido del padre y
el primero de la madre, por lo que en caso de efectuarse la rectificación en la forma solicitada, el
menor tendría como apellido paterno Paz De la Barra y como apellido materno Zumaeta, no
coincidiendo con el de su progenitor quien lleva como apellido paterno Paz y no así Paz De la
Barra, generándose de ese modo un problema de filiación con el padre quien tendría un apellido
paterno distinto al del menor. 3.5. Que, esta Sala Suprema, por resolución de fecha diecinueve
de abril de dos mil trece, declaró procedente el recursos de casación, por la causal de: Infracción
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normativa por inaplicación de los artículos 2, inciso 1, de la Constitución Política del Estado
y 29 del Código Civil, argumentando que el derecho a la identidad es el que individualiza a la
persona; que presentó una demanda de adición de nombre para que se autorice la adición de los
apellidos paternos de su menor hijo Boris Rodrigo Paz Zumaeta a Boris Rodrigo Paz De La Barra
Zumaeta, en razón del prestigio nacional y regional que tiene el apellido del padre; que, el A quo
como la Sala Superior no han tenido en cuenta la existencia de la excepción del artículo 29 del
Código Civil, para adicionar un nombre, declarando infundada la demanda interpuesta, pese a
que han demostrado el motivo de su justificación; vulnerándose los derechos fundamentales a la
identidad; más aún si este se identifica con los apellidos del padre. 4. CONSIDERANDO: Primero.
Que, el derecho a la identidad, comprendido en el artículo 2, inciso 1, de la Constitución Polí-
tica del Estado, es aquel que protege a la persona en lo que constituye su propio reconocimiento:
quién y cómo es. Comprende diversos aspectos de la persona que van desde los más estrictamen-
te físicos y biológicos (su herencia genética, sus características corporales, etcétera) hasta los de
mayor desarrollo espiritual (sus talentos, su ideología, su identidad cultural, sus valores, su honor,
reputación, entre otros)1. La Constitución de 1993 mejora el tratamiento de la persona al recono-
cerle su identidad y no solamente el nombre como lo hacía la Constitución de 1979, por el que se
establecía que: “Toda persona tiene derecho: A (...) un nombre propio (...)”, el que ahora queda
comprendido dentro del derecho a la identidad. Segundo. Que, la identidad tiene relación con
varios otros derechos, dentro de los cuales como ya se ha afirmado encontramos el derecho al
nombre, que es la designación con la cual se individualiza al sujeto y que le permite distinguirse
entre los demás, lo encontramos contenido en el artículo 19 del Código Civil, que señala: “Toda
persona tiene el derecho y el deber de llevar un nombre. Este incluye los apellidos.”, y reconocido
en el artículo 7 de la Convención sobre los Derechos del Niño, el cual indica: “1. El niño será inscri-
to inmediatamente después de su nacimiento y tendrá derecho desde que nace a un nombre, a adqui-
rir una nacionalidad y, en la medida de lo posible, a conocer a sus padres y a ser cuidado por ellos (...)”.
Asimismo, el artículo 18 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, establece: “Toda
persona tiene derecho a un nombre propio y a los apellidos de sus padres o al de uno de ellos.
La ley reglamentará la forma de asegurar este derecho para todos, mediante nombres supuestos, si
fuere necesario.”; el artículo 8, inciso 1, de la Convención sobre los Derechos del Niño; establece
que: “Los Estados Partes se comprometen a respetar el derecho del niño a preservar su identidad, inclui-
dos la nacionalidad, el nombre y las relaciones familiares (...)”; y el artículo 6 del Código de los
Niños y Adolescentes, aprobado por la Ley 27337, indica que: “El niño y el adolescente tienen de-
recho a la identidad, lo que constituye el derecho a tener un nombre (...)”. El derecho al nombre para
poder ser exigido debe contar con la garantía de la inscripción, existiendo en nuestro país el Re-
gistro Nacional de Identificación y Estado Civil -RENIEC-, en cuya Ley Orgánica se establece que
los actos concernientes al estado civil de las personas y en primer término el nacimiento se harán
constar en el registro civil. Tercero. Que, “(...) El nombre tiene dos componentes: el prenombre y los
apellidos. El nombre es el elemento característico individual del sujeto, libre de toda vinculación preesta-
blecida. Se refiere al nombre de pila, el cual es libre y es elegido por los padres o por el que hace la Ins-
cripción en el registro civil. La elección de un segundo nombre o más es facultativa. El nombre recoge
datos históricos de la persona que la singularizan de los demás y provee la información base para la
emisión del DNI. Es obligatorio tenerlo y usarlo; es inmutable, salvo casos especiales (...)”. Sentencia del
Tribunal Constitucional número 2273-2005/HC. Asimismo, existen tres principios básicos que rigen
la institución del nombre, inmutabilidad, restricción en su elección y dualidad del apellido. Cuar-
to. Que, en lo que respecta al apellido, este representa el nombre de la familia que sirve para
distinguir a las personas, establece la filiación, los lazos de parentesco y la paternidad, diferencia
a los grupos o personas no emparentadas entre sí. Es así que conforme al artículo 20 del Código
Civil, modificado por la Ley 28720, a toda persona le corresponde el primer apellido del padre y
el primero de la madre. Solo a falta de revelación de la identidad del progenitor, la madre inscri-
birá a la descendencia con sus apellidos conforme al artículo 21 de la norma antes indicada, no
existiendo diferencia en los apellidos de los hijos matrimoniales y extramatrimoniales. Por su
parte el artículo 23 de la normatividad sustantiva establece que el recién nacido cuyos progenito-
res son desconocidos debe ser inscritos con el nombre adecuado que le asigne el Registrador del
Estado Civil. Quinto. Que conforme a lo establecido en el artículo 29 del Código Civil, “Nadie
1 Rubio Correa, Marcial, Estudio de la Constitución Política de 1993, T. I, Fondo Editorial de la Pontificia Universidad
Católica del Perú, Lima, 1999.
puede cambiar su nombre ni hacerle adiciones, salvo por motivos justificados y mediante autorización
judicial, debidamente publicada e inscrita. El cambio o adición de nombre alcanza, si fuera el caso, al
cónyuge y a los hijos menores de edad.”; es decir, que por regla general se ha establecido que nadie
puede cambiar su nombre ni hacerle adiciones. Sin embargo, existe una excepción, la misma
que se presenta cuando existen motivos justificados y se haga mediante autorización judicial, pú-
blica e inscrita. Por ello, antes de analizar las infracciones por las cuales se ha amparado el presen-
te recurso de casación resulta necesario examinar la composición del apellido, por ser esta la ma-
teria controvertida en el caso de autos. Sexto. Que, para Enrique Varsi Rospigliosi2, los tres princi-
pios básicos que rigen la institución del nombre: inmutabilidad, restricción en su elección y duali-
dad del apellido, se encuentran sustentados por la naturaleza pública del nombre pero ceden
frente al interés privado, cuando el sujeto demuestra que su nombre merece un cambio. Indica
Varsi que respecto al apellido compuesto en sus inicios se daba por la unión de un patronímico y
toponímico, y servía para entrelazar el nombre de una persona con el lugar en el que vivía. Agre-
ga que actualmente el apellido compuesto se caracteriza por haberse juntado dos o más linajes, es
decir dos o más apellidos en uno. Así existen diversas causas para solicitar la composición del
apellido dentro de las cuales se encuentran: 1. Fama y notoriedad. Es la justificación más usada,
de antaño hasta hoy. Se aboga cuando el apellido adquiere una importancia (social, económica,
política, académica, deportiva). Fue una usanza de la nobleza que impedía la pérdida de apellidos
ilustres de abolengo. Este hábito pasó a los plebeyos quienes en nombre al menos consiguieron
un semblante distinguido. Aquellos que logran un éxito personal, trascendiendo en nombradía,
consideran que no es suficiente transmitir un solo apellido, optan por componer sus signos de
familia para trascender nomínicamente en otra persona, en su descendencia. Es una forma de
perpetuar la memoria de esa persona. 2. Popularidad del primer apellido. Cuando el primer
apellido es común o corriente el sujeto opta por identificarse con ambos apellidos, los que con el
tiempo pasan a ser una sola estructura. La composición evita que la descendencia adquiera ese
nombre de familia ordinario. 3. Pérdida o extinción de apellido. Dado que los apellidos se van
trasmitiendo de generación en generación pueden darse algunos supuestos: i) pérdida del apellido
por decurso del tiempo; ii) irrelevancia por desuso; iii) extinción de la estirpe (al no haber descen-
dientes masculinos que lo trasmitan, solo féminas, se extinguirá con ellas). La composición es una
forma de limitar la extinción de innumerables apellidos. 4. Inscripción de hijos en países con
normas de atribución de nombre diferentes. Imagínese que un hijo nazca en Arabia al que se
le inscribirá con los dos apellidos paternos, agregándoles el de la madre; el otro nace en Perú,
correspondiéndole el primero del padre y el de la madre. Mientras que uno goza de una compo-
sición legal, el otro no. No existirá coincidencia en el nombre de los hermanos. Esta discrepancia
en cuanto al signo de identidad no ha sido voluntaria, por el contrario, es producto de las propias
disposiciones legales aplicables a cada caso, lo que ha generado un conflicto que ameritaría que
el segundo hijo lleve el apellido compuesto del padre a fin de evitar exclusión referencial del hijo
menor. 5. Por características del segundo apellido. Cuando el segundo apellido: i) es más
fuerte que el primero, primando incluso de manera individual (a la persona se le conoce más por
su segundo apellido que por el primero); ii) es el usado por costumbre o ley (el haber vivido en
países de patronímicos maternos); o, iii) contiene partículas que le dan mejor posición. Las situa-
ciones planteadas quedan sin sentido cuando el primer apellido es más enérgico o fonético, no
siendo justificación la composición, salvo que se pruebe lo común o vulgar del primero. 6. Por
matrimonio. Es el caso de la mujer que usó el nombre del marido agregado al suyo. Esta acción
no es del todo justificada pues es un derecho de la mujer el llevarlo, incluso luego de la disolución
matrimonial, si se comprueba que su identidad se establece con el apellido del ex marido. 7.
Evitar homonimias. Cuando se trata de apellidos comunes y resulta difícil o no es de interés variar
de apellido, la composición resulta una salida de interés. La justificación sería perfecta, solo debe
comprobarse la existencia de nombres similares (en nuestro medio Juan Quispe Quispe o los Juanes
Quispe Mamanis no tendrían mayor inconveniente en solicitar la composición pues sustentarían
que tienen como nombres los homónimos más común en el Perú). 8. Recomposición. Con el
tiempo muchos apellidos compuestos perdieron dicha calidad, pasando a descomponerse en uno
solo. Se acortaron, simplificaron, por diversas razones: i) sea por lo complejo en su utilización; ii)
porque en los sistemas legales en los que coexistían resultaba engorroso llevarlos; iii) porque en el
trato cotidiano resulta más sencillo utilizar un solo apellido; o, iv) por cambio extralingüístico. Para
2 Varsi Rospigliosi. Diálogo con la Jurisprudencia, N.º 100, p. 121. Gaceta Jurídica [sic].
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rescatar el nombre extraviado debe acreditarse su uso ancestral o que su origen proviene de tiem-
po inmemorial, evidenciándose la exigencia en la nueva composición del apellido. Aquella parte
que perdió terminaría agregándose vía una recomposición. 9. Ocultamiento de identidad. Por
razones de seguridad, en lugar de cambiar todo el nombre, una solución más pacífica es la com-
posición de uno de los apellidos. La alteración total del nombre vía composición, con vestigios
curiosos, sucedió en otrora con la inquisición. En aquella época se formaban los apellidos com-
puestos con palabras iniciadas en San, Santa o Santo cuando los judíos, gitanos y otras etnias se
vieron en la necesidad de variar sus apellidos usando compuestos con notas celestiales (San Martín,
Santangel, Santo Domingo, Santa María, Santana). Tipos de composición. Los apellidos pueden
componerse de un sinnúmero de formas, sea por el modo cómo quede estructurado el nombre,
de quién lo solicite y del apellido se solicite componer. I. Por la estructura del apellido a. Real:
lo característico de la composición es que entre los apellidos figure un guión (-). Los apellidos
quedan separados y a la vez unidos. Este no traería mayores inconvenientes al identificarse las
estirpes de cada uno de los apellidos. Ejemplo. Miró - Quesada, se trata de un apellido doble. b.
Simple: se obvia el guión. Los apellidos se mantienen totalmente separados sin unión, pierden
todo vestigio de origen. La persona aparentará tener tres apellidos (dos paternos y uno materno).
Ejemplo Miró Quesada, es un apellido mixto. c. Sumatoria: no hay separación sino una comple-
ta unión. Dos linajes se fusionan. Miroquesada, es un apellido simple pero en el que puede iden-
tificarse su conformación. d. Con partícula: implica agregar una partícula en vez de guión (Miró
y Quesada). Hay casos en que el segundo apellido termina en una partícula. En ambos se trata de
un apellido estructurado, como se verá más adelante. La falta de uniformidad en los criterios para
componer el apellido deriva en la diversidad de estructuras de nombres de familia con un mismo
linaje. Conforme lo apreciamos en los ejemplos, el apellido Miro Quesada tiene una variedad de
presentaciones y en muchos casos es de una misma estirpe, vale decir sean parte de la misma fa-
milia. II. Por la formas de realizarlo a. Personal: cuando la propia persona solicita la composición
de sus apellidos, el paterno y materno, en uno solo. Es una acción directa. El solicitante es titular
de dos apellidos y pide unirlos, quedándose sin apellido materno. Lo que se busca es consolidar
su nombre y trasmitir un nuevo apellido a su descendencia o cónyuge. En nuestro medio puede
suceder que una persona con hijos componga sus apellidos lo que no afecta a su descendencia. En
todo caso, esta podrá optar por modificar su apellido a fin de tomar el recién compuesto del padre.
Se trataría de una acción de modificación declarativa. b. Por ascendencia: se da cuando es la
descendencia la que solicita la composición de uno de sus apellidos. Es una acción indirecta. Bus-
ca agregar a uno de sus apellidos uno nuevo que corresponda a su ascendiente directo. Si bien es
parte de su estirpe, el solicitante no es titular del apellido a incorporarse, debiendo justificar ade-
cuadamente dicha adición. Ambas son acciones de declaración específica de voluntad, son los
interesados o representantes quienes solicitan la modificación y asumen sus efectos. III. Por su
género. a. Primario: es el más usual. Se compone el apellido paterno con el que se identifica y
usará socialmente la persona. Es trascendental pues afecta el apellido en la línea paternal. b. Se-
cundario: es menos usual, pues el apellido materno no identifica directamente a la persona. La
adición será intrascendente, al componerse el apellido en la línea materna salvo que la persona
logre identificarse de forma nomínica integral, con su nombre completo. Sétimo. Que, en el pre-
sente caso los demandantes Boris Micheel Paz De La Barra y Libany Zumaeta Collantes, demandan
la adición de nombre (apellidos) en la partida de nacimiento de su menor hijo, reclamando que
se adicione el apellido materno del padre en el apellido paterno de su hijo y como consecuencia
de dicha adición el apellido del niño será Paz De La Barra Zumaeta, apellidos por el que es co-
nocido desde su nacimiento. Octavo. Que para lograr esta composición del apellido han argumen-
tado en su solicitud el prestigio, llámese también fama y notoriedad, del apellido Paz De La Barra
a nivel nacional, además que el padre del menor Boris Micheel Paz De La Barra, es un abogado
reconocido a nivel regional por analizar los problemas coyunturales desde el punto de vista técni-
co jurídico, emitir pronunciamientos contra la violación de derechos laborales, y actos de corrupción
mediante conferencias y medios de comunicación, existiendo como antecedentes de la composición
del apellido los consignados en las partidas de nacimiento de sus sobrinos Álvaro Gonzalo y María
Pía Paz De La Barra Freigeiro y Nicolle Arriaran Paz De La Barra, hijos de sus hermanos Vladimir
Paz De La Barra y Tania Ivanova Paz De La Barra, respectivamente. Noveno. Que, pasando a re-
solver las infracciones indicadas en los acápites a) y b), cabe precisar que en la presente causa
obran los documentos nacionales de identidad de Álvaro Gonzalo y María Pía Paz De La Barra
Freigeiro (fojas 07 y 08) y la partida de nacimiento de Nicolle Arriaran Paz De La Barra (fojas 10),
primos del menor del cual se pide la adición de nombre; asimismo se aprecia que Álvaro Gonzalo
Paz De La Barra Freigeiro cuenta con mandato judicial (fojas 11) a su favor para la rectificación de
su partida de nacimiento; no obstante, las instancias de mérito amparados en que el artículo 20
del Código Civil, sustentan la denegación del pedido en que solo se permite que el hijo lleve el
primer apellido del padre y el primero de la madre, no encontrándose su pedido incurso dentro
del supuesto de excepción que establece el artículo 29 de la indicada norma legal. Décimo. Que,
en el presente caso deberá tenerse presente la uniformidad en el nombre (apellido) respecto al
entorno familiar del niño, atendiendo que sus primos y por ende la descendencia de estos han
accedido al apellido compuesto Paz De La Barra, por lo que de no otorgarse el mismo derecho al
menor conllevaría a discrepancias entre los elementos que estructuran el nombre (apellidos) de los
familiares, lo que vulneraría la identidad del niño respecto a su entorno social y psicológico, co-
rrespondiendo a esta Sala Suprema buscar uniformizar el nombre de la familia y su patronímico,
pues dejar que unos tengan el apellido compuesto y otros no, puede generar conflictos no solo a
nivel personal sino también social, al verse identificados con apellidos que si bien corresponde a
su verdadera filiación no coinciden con el de sus demás familiares, lo cual puede conllevarlos a un
alejamiento. Décimo Primero. Que, siendo así, y contrario a lo afirmado por la Sala Superior quien
ha establecido que en caso de efectuarse la rectificación en la forma solicitada, el menor Boris
Rodrigo tendría como apellido paterno Paz De La Barra y como apellido materno Zumaeta, por lo
que el apellido paterno no coincidiría con el de su progenitor quien tiene como apellido paterno
Paz y no así Paz de la Barra lo cual generaría un problema de filiación del padre, quien tendría un
apellido paterno distinto del menor; este Supremo Tribunal considera que en aplicación al interés
superior del niño, preceptuado en el artículo IX del Título Preliminar del Código de los Niños y
Adolescentes, a su derecho constitucional respecto a su identidad y, a lo ordenado en el artículo
19 del Código Civil, respecto al nombre, que habiéndose identificado al menor desde su nacimien-
to con el apellido Paz De La Barra Zumaeta, conforme se sostiene en el escrito de apelación (fojas
90), el no otorgar el derecho de llevar el apellido paterno compuesto conllevaría a una confusión
en su desarrollo emocional, pues mientras sus primos llevan el apellido Paz De La Barra que iden-
tifica a la descendencia de los hermanos del padre, el infante llevaría el apellido Paz. No podemos
dejar de advertir además lo señalado por el padre del menor, respecto a que su apellido viene
siendo reconocido a nivel regional, lo que se consolida al tener un familiar directo cuya trayectoria
profesional es reconocida a nivel nacional, encontrándose por tanto el pedido de los demandantes
dentro de la excepción otorgada por el artículo 29 del Código Civil, por lo que su pretensión de-
berá ser amparada. 5. DECISION: Por tales consideraciones y en aplicación de lo dispuesto por el
artículo 396, inciso 1, del Código Procesal Civil. 5.1. Declararon FUNDADO el recurso de casación
interpuesto por Libany Zumaeta Collantes (fojas 138); CASARON la sentencia impugnada; en
consecuencia NULA la sentencia de vista, contenida en la resolución número doce (fojas 124), de
fecha veintiuno de noviembre de dos mil doce; emitida por la Sala Civil de Huamanga de la Corte
Superior de Justicia de Ayacucho; actuando en sede de instancia, REVOCARON la sentencia
apelada, de fecha veinte de abril de dos mil doce; y, REFORMANDOLA declararon FUNDADA la
demanda, en consecuencia, adiciónese en la partida de nacimiento del menor Boris Rodrigo Paz
Zumaeta, como apellido paterno el compuesto por: Paz De La Barra, seguido del apellido paterno
de la madre: Zumaeta, quedando en adelante el menor como Boris Rodrigo Paz De La Barra
Zumaeta, ordenándose que el Juez de la causa en ejecución de sentencia curse los partes corres-
pondientes. 5.2. ORDENARON la publicación de la presente resolución en el Diario Oficial El
Peruano, conforme a Ley, en los seguidos por Boris Micheel Paz De la Barra y Libany Zumaeta
Collantes, sobre adición de nombre; y los devolvieron. Interviene como ponente la señora Juez
Suprema Huamaní Llamas.
SS.
ALMENARA BRYSON / HUAMANI LLAMAS / CUNYA CELI / RODRIGUEZ CHAVEZ / CALDERON
PUERTAS.
DERECHOS REALES
Actualidad
Área
Civil Derechos
Derechos realesreales
Contenido
JIMMY J. RONQUILLO PASCUAL: Crítica a la nueva regulación de la autotutela
134
de la posesión
DOCTRINA
HÉCTOR E. LAMA MORE: El artículo 920 del Código Civil y los riesgos de la nueva
144
regulación en materia de la defensa posesoria extrajudicial
NOS PREGUNTAN Y CONSULTA: ¿El derecho de servidumbre queda constituido con la sola
CONTESTAMOS
149
declaración unilateral del propietario del predio sirviente?
RESEÑA DE Inaplicación del artículo 927 del Código Civil (Acción reivindicatoria)(Casa-
JURISPRUDENCIA
150
ción Nº 1618-2013 LIMA)
DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina práctica
DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina práctica
CONSULTA
La empresa Aceros Buenaventura SA, propietaria de un predio colindante
al de la empresa Oro Americano SA, decide otorgar un derecho real de
servidumbre en favor de esta última. Nos consultan si la sola declaración
de la primera empresa, será eficaz para constituir el referido derecho
real y, además, si es necesario que dicha declaración cumpla con algún
tipo de forma contractual.
Si bien el artículo 1035 del Código Civil no un vicio estructural. Así, el contrato debe reunir
menciona que el contrato sea un modo de todos los requisitos y presupuestos de validez.
constitución del derecho real de servidumbre,
Respecto de la forma, se debe tener en cuenta
se deduce que debe usarse dicho instrumento
que de acuerdo al artículo 1352 del Código
para la creación de aquel derecho.
Civil, los contratos se perfeccionan por el con-
En efecto, cuando el Código Civil establece que sentimiento de las partes excepto aquellos que
el propietario de un predio (llamado sirviente) deban, además, observar la forma señalada
puede imponer gravámenes a su predio en por la ley bajo sanción de nulidad. En tal
beneficio de otro, no está afirmando que el sentido, para que el contrato de constitución
propietario pueda constituir una servidumbre del derecho real de servidumbre sea eficaz,
de forma unilateral. Por el contrario, de acuer- es necesario que el consenso cumpla con las
do con los principios de la teoría general del formalidades prescritas por el Código Civil,
derecho, nadie puede efectuar algún tipo de bajo sanción de nulidad.
injerencia sobre la esfera jurídica de un tercero,
aun cuando sea en su beneficio, si éste último De acuerdo con el artículo 143° del Código
no ha aceptado dicha injerencia. Civil cuando la ley no designe una forma es-
pecífica para un acto jurídico, los interesados
En tal sentido, todo acto de disposición, cesión pueden usar la que juzguen conveniente. Al
u otorgamiento de derechos por parte de un respecto, debemos mencionar que el Código
sujeto no serán eficaces si el tercero benefi- Civil no prescribe alguna forma para la cele-
ciario no acepta de forma expresa o tácita la bración del contrato constitutivo de servidum-
injerencia sobre su esfera jurídica. Por tanto, bre; por lo que la forma que deberá recubrir
debe interpretarse que el artículo 1035 del dicho contrato será aquella que dispongan
Código Civil establece que el derecho real de las partes.
servidumbre surgirá solo cuando el benefi-
ciario acepte recibir el derecho real otorgado. Fundamento legal:
Por otro lado, debe considerarse que para que Artículos 143, 1035, 1352 y 1373 del Código
dicho contrato sea eficaz no debe incurrir en Civil
RESEÑA DE JURISPRUDENCIA
Reseña de jurisprudencia
Casación
N.º 1618-2013-Lima
Inaplicación del artículo 927 del
Código Civil (Acción reivindicatoria)
CASACIÓN Nº 1618-2013-LIMA
Publicado en Sentencias en Casación, Año XVIII, N.º 693
(El Peruano, 30 de junio de 2014, p. 52827).
Proceso Demanda de reivindicación
Sumilla Inaplicabilidad del artículo 927 del Código Civil
Decisión Infundado
Normas aplicables Código Civil: Artículo 927
Fundamentos jurídicos No es aplicable el artículo 927 del Código Civil en la parte que establece que no pro-
relevantes cede la reivindicación contra aquel que adquirió el bien inmueble por prescripción,
cuando exista una sentencia firme derivada de un proceso mejor derecho entre las
mismas partes, y donde se hayan confrontado los títulos de anotación preventiva del
proceso de prescripción y la inscripción registral de transferencia.
TEXTO DE LA CASACIÓN
CASación N° 1618-2013-LIMA
cializada en lo Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima, que confirma la sentencia apelada
(resolución número treinta y nueve) de fecha treinta y uno de mayo de dos mil once, de folios
trescientos ochenta y seis a trescientos noventa, la cual declara fundada la demanda de reivindi-
cación interpuesta por Servicios de Parques de Lima - SERPAR contra Cornelio Carrasco Ramos y
Héctor Cipriano Pinzas Tello, sobre Reivindicación.-
FUNDAMENTOS DEL RECURSO: Esta Sala Suprema ha declarado procedente el recurso de
casación propuesto, mediante resolución de fecha once de Julio de dos mil trece, de folios trein-
ta y cinco a treinta y siete del cuadernillo de casación, por las causales de: Infracción normativa
material del artículo 927 del Código Civil excepcionalmente por infracción normativa
procesal de los incisos 3 y 5 del artículo 139 de la Constitución Política del Estado y de
los artículos 50, 122 y 107 del Código Procesal Civil; y, CONSIDERANDOS: Primero.- Cuan-
do se invocan en forma simultánea agravios consistentes en la infracción normativa procesal e
infracción normativa sustantiva que inciden directamente sobre la decisión de la resolución im-
pugnada, resulta innecesario emitir pronunciamiento respecto del segundo agravio denunciado,
atendiendo a que, de ampararse el primero deberá declararse la nulidad de la resolución impug-
nada y ordenarse que se expida un nuevo fallo.- Segundo.- Sobre el caso que nos atañe corres-
ponde efectuar previamente un resumen de la controversia de su propósito. En ese sentido se
aprecia que mediante demanda de reivindicación incoada por Servicios de Parques de Lima -
SERPAR Lima contra Cornelio Carrasco Ramos y Héctor Cipriano Pinzas Tello, se pretende que los
demandados le restituyan la posesión de los inmuebles constituidos por los Lotes números 1 y 2
de la Manzana A Urbanización Salaverry (cuadra 10 de la Avenida del Ejército) Magdalena del
Mar, Provincia y Departamento de Lima, señalando que en el marco de aportes reglamentarios,
la Compañía Orrantia Sociedad Anónima en Liquidación procedió a transferirles la propiedad de
los Lotes materia de demanda mediante Escritura Pública de fecha trece de julio de mil novecien-
tos noventa y nueve, ambos con un área total de cuatrocientos noventa y uno punto cincuenta
metros cuadrados (491.50 m2), conforme aparece de las Partidas Electrónicas números 11124001
y 11124006 del Registro de Propiedad Inmueble de Lima, quedando acreditada la titularidad
del bien y por ende la calidad de propietaria de su representada, y que los demandados ejercen
la tenencia y posesión sin ser propietarios.- Tercero.- El codemandado Héctor Cipriano Pinzas
Tello contesta la demanda conforme se tiene de folios ochenta y nueve a noventa y cuatro seña-
la no tener la condición de mero poseedor, sino la de propietario como consecuencia de una
sentencia mediante la cual se declaró fundada la demanda de prescripción adquisitiva. En igual
forma el codemandado Cornelio Carrasco Ramos contesta la demanda de folios ciento dos a
ciento tres indicando que no es parte del juicio por cuanto tiene la calidad de cuidador.- Cuarto.-
El Juez de primera instancia expide la sentencia (resolución número treinta y nueve) de fecha
treinta y uno de mayo de dos mil once, de folios trescientos ochenta y seis a trescientos noventa
declarando fundada la demanda sobre reivindicación, ordenando a los demandados restituyan
la posesión de los inmuebles sub litis; considerando: i) La demandante previamente interpuso
demanda de mejor derecho de propiedad contra el demandado Héctor Cipriano Pinzas Tello
respecto de los inmuebles sub litis, la que mediante Sentencia Casatoria de fecha dos de setiem-
bre de dos mil ocho, declarando fundado el recurso de casación, confirmaron la sentencia ape-
lada de fecha uno de diciembre de dos mil seis que declara fundada la demanda interpuesta por
el Servicio de Parques de Lima, siendo el argumento central lo que es un hecho constatado que
el título de la accionante (SERPAC) se inscribió el veintidós de setiembre de mil novecientos no-
venta y nueve, mientras que el título del demandado se anotó preventivamente por adolecer
observaciones con fecha siete de marzo de dos mil, no advirtiéndose que en el proceso de pres-
cripción adquisitiva de dominio se haya emplazado al respectivo titular registral; y, ii) Si bien es
cierto que el demandado Héctor Cipriano Pinzas Tello cuenta con una sentencia judicial que lo
declara como propietario del inmueble sub litis, también lo es que el mejor derecho de propiedad
se ha definido (con calidad de cosa juzgada) a favor de la demandante Servicios de Parques de
Lima - SERPAR, por ende, si el demandado no tiene mejor derecho respecto al inmueble, existe
exigibilidad de la acción reivindicatoria.- Quinto.- Por su parte el Ad quem expide la sentencia
de vista (resolución número once) de fecha veinticinco de setiembre de dos mil doce, de folios
cuatrocientos sesenta y ocho a cuatrocientos setenta y tres, confirmando la apelada que declarar
fundada la demanda de reivindicación, sustentando que en el proceso de mejor derecho de
propiedad seguido por Servicios de Parques de Lima - SERPAR contra los mismos demandados,
sucesiones
Actualidad
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Civil Sucesiones
Sucesiones
Contenido
DOCTRINA Miguel Ángel Bolaños Rodríguez: El ocaso de la legítima hereditaria 156
CONSULTA: Si cuando se otorgó el testamento el cónyuge no tenía la cali-
NOS PREGUNTAN Y
CONTESTAMOS
dad de heredero, ¿el testamento es nulo? ¿Es válido un testamento anterior 171
al matrimonio?
RESEÑA DE
JURISPRUDENCIA
La vocación hereditaria justifica la posesión (Casación N.º 4-2013-Lima) 172
DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina práctica
1. Introducción
2. Análisis económico de la legítima
2.1. Derechos de propiedad
2.1.1. Definición
2.1.2. Teoría de las restricciones eficientes
SUMARIO
2.1.3. Clasificación
2.2. Reglas morales y reglas liberales
2.2.1. Eficiencia
2.2.2. Eficiencia limitada
2.3. Reglas de protección de titularidades
2.4. El sistema de trasferencia hereditario
2.4.1. Primera aproximación: Confusión de reglas
2.4.2. Segunda aproximación: Herencia vs. capital
2.4.3. Tercera aproximación: Las transferencias intergeneracionales
2.5. Breve historia económica de la legítima
2.5.1. Fuerzas exógenas y endógenas
2.5.2. Esbozos del desarrollo histórico
2.6. Legítima hereditaria vs. libertad testamentaria
2.6.1. Argumentos clásicos
2.6.2. Argumentos desde el análisis económico del Derecho
3. Conclusiones
* El autor quiere agradecer el invaluable y tenaz apoyo que recibió en la preparación de este artículo por parte de:
Gregorio, Luisa y Victoria Rodríguez.
Civil Sucesiones
viabilizar una adecuada asignación de recursos Los derechos de propiedad facultan al pro-
en un esquema de recursos escasos1. pietario para: (1) usar sin abuso su bien, (2)
internalizar las ganancias que le genera lo que
2. Análisis económico de la legítima es suyo, (3) excluir a otros del consumo y de
las ganancias de lo que es suyo, (4) vender lo
2.1. Derechos de propiedad que es suyo y (5) legarlo libremente a quien
2.1.1. Definición él crea por conveniente.4
Los derechos de propiedad son un conjunto
de facultades permitidas al propietario.2 ¿SABÍA USTED QUE?
Funcionan como sistema de asignación,
definición, establecimiento, distribución y El objetivo principal de todo sistema
determinación del acceso al uso, consumo, hereditario no consiste en lograr una
utilización, inversión, intercambio y ahorro distribución igualitaria de la riqueza
racional de los recursos escasos. Configuran entre distintas generaciones; sino de
la estructura de incentivos, positivos o nega- viabilizar una adecuada asignación
tivos, que facilitan el consumo racional de los de recursos en un esquema de re-
recursos a fin de evitar su trágico agotamiento cursos escasos.
por su sobreutilización común. Proporcionan
al propietario una estructura de protección de
sus expectativas que maximizan su decisión de 2.1.2. Teoría de las restricciones eficientes
consumo, presente o futuro. Asignan, en el Los derechos de propiedad no son absolutos,
ámbito procesal, los intereses legítimos para están sujetos a ciertas restricciones. En este
reclamar judicialmente.3 sentido, el trabajo desarrollado por Furu-
botn & Pejovich nos ayudan a determinar
1 En la teoría del análisis económico del Derecho, se cómo introducir restricciones eficientes sobre
entiende que los derechos de propiedad cumplen nuestros derechos de propiedad, basados
dos funciones principales: (1) por un lado, brindan en la relación directa entre la eficiencia y el
una asignación inicial de los recursos escasos y (2)
por el otro realizan una distribución de los mismos
teorema de Coase.5
recursos. Por supuesto en nuestro estudio, nos hemos
parcializado por la búsqueda de la asignación de los Yoram. Economic Analysis of Property Rights, 1st ed.,
recursos antes que por sus efectos en la distribución Cambridge University Press, 1989; Furubotn, Eirik
de la riqueza. & Pejovich, Svetozar, “Property Rights and Economic
2 Desde la perspectiva del Derecho comparado, exis- Theory: A Survey of Recent Literature”, en Journal of
ten al menos dos sistemas de familia jurídica: por Economic Literature, vol. 10, nº 4, 1972.
un lado, el Common Law y, por el otro, el derecho 4 “A full set of private rights consists of: (1) the rights
romano-germánico. Se dice, asimismo, que existe to use the land in any manner that one wishes, gene-
una diferencia en cuanto al derecho de propiedad rally with the caveat that such use does not interfere
en ambos sistemas: el derecho de propiedad en el with someone else’s property rights; (2) the right to
Common Law es un bundle of rights, en otras palabras, exclude others from the use of one’s land; (3) the
un paquete de derechos; mientras que en el derecho right to derive income from the land; (4) the right to
romano-germánico en donde se encuentra el Perú, el sell the asset; and (5) the right to bequeath the land
derecho de propiedad es uno solo, pero limitado por to someone of one’s choice”. Cfr. Alston, Lee J. &
el principio general del derecho de la prohibición del Bernardo Mueller, “Property Rights in Land”,
abuso del Derecho. en The Oxford Encyclopedia of Economic History, Joel
3 Véase: Alchian, Armen A., “Some Economics of Mokyr (Editor in Chief), vol. 4, New York, Oxford
Property Rights”, en Il Politico, vol. 30, nº 4, 1965; University Press, 2003, p. 274.
igualmente, Alchian, Armen A. & Demsetz, Harold, 5 Véase: Furubotn, Eirik & Pejovich, Svetozar, “Pro-
“The Property Right Paradigm”, en The Journal of perty Rights and Economic Theory: A Survey of Recent
Economic History, vol. 33, nº 1, The Task of Economic Literature”, Journal of Economic Literature, vol. 10, nº
History, 1973; Alston, Lee J. & Mueller, Bernardo, 4, 1972. El teorema de Coase tiene como punto de
“Property Rights in Land”, en The Oxford Encyclopedia partida la determinación de los Costos de transacción,
of Economic History, Joel Mokyr (Editor in Chief), vol. es decir, los costos que suponen un intercambio de
4, New York, Oxford University Press, 2003; Barzel, bienes o servicios desde el momento en que se siente
Civil Sucesiones
tivos comunes como la supervivencia. Si los 2.2.2. Eficiencia limitada
costos de colaboración son bajos, la sociedad La eficiencia es relativa. Solo en un mundo de
continúa. Si los costos de colaboración son cero costos de transacción y de información
altos, la sociedad perece o se subdivide a un completa, la eficiencia será absoluta. Herbert
nivel eficiente que asegure su subsistencia. La Simon logró establecer la diferencia entre
colectividad reduce sus costos de colaboración racionalidad limitada y docilidad, conceptos
mediante el uso de reglas morales, educa a muy útiles a nuestros fines en el presente
sus jóvenes generaciones en la bondad de la trabajo. Para el autor, la racionalidad limitada
cooperación en beneficio de la comunidad. se debe a una falla del mercado: información
En cambio, en esquemas de propiedad incompleta. La docilidad, por otra parte, es la
privada, no interesa si son bajos o altos los tendencia de los sujetos a ser receptivos a reglas
costos de colaboración. A los grupos sociales morales. Sobre estas bases, construye su con-
asentados en derechos de propiedad privada cepto de moralidad y ética. La moralidad sería
les corresponde determinar si los costos de toda influencia que recibe el individuo por el
transacción son altos o bajos. Si son altos, difi- grupo. La ética sería toda decisión que el grupo
cultan los intercambios dentro de la sociedad. considera buena y que impone al individuo8.
La manera de asegurar su supervivencia es En esquemas de competencia, la toma de
minimizar los costos de transacción por medio decisiones son cruciales. En contextos de
de normas que sean cumplidas por todos en ausencia o insuficiencia de información, las
forma obligatoria, es decir, reglas jurídicas. decisiones eficientes se toman con la mayor
información que podamos obtener en un mo-
mento dado. A la larga, esta decisión eficiente
PAUL L. MENCHIK dice: en su momento puede convertirse en inefi-
ciente cuando tengamos mayor información
disponible: todos podemos ser millonarios si
“ En sistemas de
conocemos los números de la lotería con an-
libertad heredita-
ticipación. Este hecho no significa que nunca
ria, la porción
alcancemos la eficiencia, sino que se trata de
otorgada para
cada hijo no varía una eficiencia limitada.
en gran medida, i. Los costos de colaboración están en relación
e. tienden a la pa- directa con la docilidad de los individuos e
ridad. ” inversamente proporcional con la libertad
del individuo. Los costos de colaboración son
2.2. Reglas morales y reglas liberales bajos cuanto más dócil es el individuo. Cuanto
más dócil, más fácil de ser influenciado por el
2.2.1. Eficiencia
La eficiencia es la maximización en el apro- menos una persona sin que se perjudique a ninguna
vechamiento de los recursos o, en sentido persona, de manera tal que se llegue al óptimo de
Pareto, que es aquella situación donde no se puede
contrario, la minimización del desperdicio mejorar a nadie sin empeorar la situación de otro; (3)
de los recursos.7 la eficiencia Kaldor-Hicks, una situación es eficiente
cuando la suma agregada de los que ganan compensan
la suma agregada de los que pierden.
7 La eficiencia se clasifica desde tres perspectivas: (1) la 8 SIMON, Herbert A. “Altruism and Economics”, The
eficiencia industrial es el aprovechamiento de toda la American Economic Review, vol. 83, nº 2, Papers and
capacidad de los factores de producción disponibles, al Proceedings of the Hundred and Fifth Annual Meeting
punto tal que no se puede producir más de lo que se of the American Economic Association, 1993. Los con-
produce dado los insumos, fuerza laboral y maquinaria; ceptos de Simon se contradicen con las concepciones
(2) la eficiencia Pareto, según Pareto, una situación clásicas que identifica a la moral con la costumbre y
es eficiente cuando se mejora la situación de por lo a la ética como la ciencia de la moral.
Civil Sucesiones
hereditario. Indudablemente, cuando las Si lo que deseamos es acelerar la marcha de
personas viven, los costos de conocer sus la economía, no es lo más eficiente pisar a
decisiones o sus necesidades son bajos. Es fondo el acelerador, cuando el freno de mano
decir, son entornos con costos de transacción está puesto; dado que desperdiciamos gas y
bajos. Si tomamos en cuenta que los acuer- quemamos goma. De igual manera, si lo que
dos voluntarios entre individuos promueve buscamos con los derechos de propiedad es la
la eficiencia, entonces toda decisión legal en eficiencia, entonces debemos protegerlo con
contrario que impida transferencias volunta- reglas de propiedad y de responsabilidad, y
rias es ineficiente. no con la legítima que es el freno de mano.
Al contrario, cuando las personas mueren sin
2.4.2. Segunda aproximación: Herencia
testamento, los costos de conocer su decisión vs. capital
se elevan abismalmente. Por lo tanto, para
Cuando revisamos el artículo 660 del Códi-
realizar una eficiente asignación de derechos
go Civil, observamos que la muerte de una
de propiedad, la mejor alternativa posible es
persona transmite los bienes, derechos y
presumir su voluntad a través de una ley o,
obligaciones del causante a sus herederos12.
denominada también, sistema de sucesión
Al respecto, nos preguntamos si ese conjunto
intestada.
de bienes, derechos y obligaciones forman
Aquí descubrimos problemas, pues toda el capital de la persona. Ante esta pregunta,
persona que quiere testar encuentra que su surge la cuestión: ¿qué es el capital? El capital
titularidad está protegida por una extraña es concebido comúnmente como el dinero o
regla de propiedad que le permite usar, in- bien susceptible de transformarse en dinero.
ternalizar las ganancias, vender (excepto si lo Conforma el capital: (a) los bienes muebles,
hace como mal gestor, pródigo o a través de como monedas y los billetes; (b) los inmue-
una donación inoficiosa), excluir (salvo a sus bles como las casas y terrenos, y además (c)
hijos y esposa, es decir, una exclusividad no derechos, como las patentes; (d) obligaciones,
tan exclusiva) y legar (sí y sólo sí no sobrepasa como los bonos. Muchos estarán de acuerdo
su porción de libre disposición). Como pode- que esta concepción de capital es cabal. Sin
mos observar, la regla de propiedad esgrimida embargo, esta definición es escaza, pues el
en nuestro Código Civil es ilusoria y convive al alcance del capital todavía es mayor. Cierta-
mismo tiempo con reglas de inalienabilidad. mente, la doctrina civilista ha pasado por alto
En efecto, la legítima precisa de una serie de el desarrollo que tuvo la definición de capital
figuras complementarias que aseguren a los en los últimos tiempos.
legitimarios su parte intangible y estos meca- El capital está conformado por tres aspectos:
nismos legales que le limitan al propietario (1) el aspecto financiero lo compone: (a) su
la disposición voluntaria inter vivos son tres: lado tangible, como los muebles y los in-
prodigalidad, mala gestión y donación inofi- muebles, y su (b) aspecto intangible, como
ciosa.11 No existe asignación plena, condición los derechos y las obligaciones; (2) el capital
esencial para los derechos de propiedad que humano está integrado por el conocimiento,
favorezca intercambios libres en el mercado. aprendizaje, profesión, los grados o títulos de
La legítima combina dos reglas de protección las persona; y (3) el capital social está formado
sobre una misma titularidad: (1) porción de por su círculo de amigos, su ambiente social,
libre disposición (reglas de propiedad, basado sus familiares. Entonces, nos preguntamos
en la libertad); y (2) legítima (reglas de inalie- si la idea dentro de la legítima es trasladar
nabilidad, reducción al mínimo de la libertad). capital de una generación a otra, entonces
¿en nuestro sistema legal se transfiere todo el
11 Artículos 584º, 585º y 1629º del Código Civil de
1984. 12 Siempre y cuando el heredero acepte.
Civil Sucesiones
al efecto sucesión hereditaria. Recordemos religiosa del pueblo. El derecho será influido
que las reglas que aparecen en el código exógenamente de acuerdo a si se trata de una
civil sobre contratos funcionan como reglas sociedad islamista, católica o protestante, o
subsidiarias a la voluntad de las partes. De la si en el Estado, se practica una democracia o
misma forma deberían elaborarse las reglas una dictadura19.
del derecho sucesorio, como normas subsidia-
rias para los negados casos que las personas 2.5.2. Esbozos del desarrollo histórico
mueran sin realizar testamento. En efecto, al Desde esta perspectiva, podemos hacer un
codificar de esta manera nos acercaríamos breve recuento histórico del nacimiento de la
a la eficiencia del sistema de transferencias legítima. Los vestigios jurídicos más antiguos
intergeneracionales. que tenemos conocimiento se encuentran
Un detalle final y relevante antes de ce- en Grecia.20 En las ciudades-Estado, solo
rrar este capítulo es que los contratos de los propietarios de tierras eran considerados
compraventa, donación, herencia y legado ciudadanos. En este contexto, apareció la filis
pertenecen a un concepto legal general: pietatis que era un deber moral del padre a
«transferencias de propiedad». Su tratamien- su muerte de hacer, ciudadanos a sus hijos,
to, entonces debe ser como «propiedad» y dejándoles sus tierras en herencia.
no como «familia»18. En Roma, el dominus era propiedad ganada
por el trabajo de ancestros. El dominus del
pater familias era absoluto y existía la libertad
¿SABÍA USTED QUE?
de dejar su herencia a quien desease. Poste-
riormente, tras la influencia griega se adoptó
Cada sistema de propiedad tiene su
la filis pietatis. Se entendió que los fili familias
propia forma de protección eficiente:
tenían el derecho a una parte de la herencia.
(1) las reglas morales o éticas son efi-
Ello debido a que cuando Roma comenzó a
cientes para facilitar la colaboración del
individuo a favor del grupo; y (2) las
reglas liberales reducen los costos de 19 Cfr. ALSTON, Lee J., & MUELLER, Bernardo, “Pro-
transacción. perty Rights in Land”, en The Oxford Encyclopedia of
Economic History, Joel Mokyr (Editor in Chief), vol. 4,
New York, Oxford University Press, 2003; PLATTEAU,
2.5. Breve historia económica de la legí- Jean-Philippe, “Land Inheritance Patterns”, en The
tima Oxford Encyclopedia of Economic History, Joel Mokyr
(Editor in Chief), vol. 3, New York: Oxford University
Press, 2003; COSGEL, Metin M. “Communal Control”,
2.5.1. Fuerzas exógenas y endógenas
en The Oxford Encyclopedia of Economic History, Joel
El derecho responde a una sociedad. En tal Mokyr (ed.), vol. 4, New York, Oxford University Press,
sentido, sobre el derecho, influyen dos fuerzas 2003; LA CROIX, Summer, “Land Tenure”, en The
Oxford Encyclopedia of Economic History, Joel Mokyr
que lo determinan: las fuerzas endógenas (Editor in Chief), vol. 3, New York, Oxford University
y las influencias exógenas. Las primeras se Press, 2003; LIBECAP, Gary. “Property Rights”, en The
componen de la economía y los modos de Oxford Encyclopedia of Economic History, Joel Mokyr
producción en los que se desenvuelve la (ed.), vol. 4, New York, Oxford University Press, 2003;
WEGGE, Simone A. “Inheritance Systems”, en The
sociedad y da lugar a la formación de una Oxford Encyclopedia of Economic History, Joel Mokyr
sociedad esclavista, feudal y capitalista. Por (Editor in Chief), vol. 3, New York, Oxford University
otro lado, las fuerzas exógenas se integran Press, 2003.
del ámbito político del Estado y la esfera 20 Encontramos la legítima en diferentes documentos
milenarios como el Código de Manú (India), el Código
de Hammurabi (Babilonia), la Constitución de Solón
(Grecia), el Antiguo Testamento (los hebreos). Véase:
18 Guardo absoluto respecto, aunque no comparto, la voz “legítima”, en Enciclopedia Jurídica OMEBA, tomo
por aquellos maestros que distinguen disposiciones XVIII, Lega-Mand. Buenos Aires, Bibliográfica OMEBA,
testamentarias de compraventas ordinarias. 1964, pp. 43 y ss.
Civil Sucesiones
Los que defienden a la legítima hereditaria finalidad que sus bienes caigan en un solo
apoyan que desde el ámbito moral solo Dios par de manos. La libertad testamentaria no
hace al heredero: la sangre obliga al padre promovería juicios por desheredación e in-
a proteger y cuidar a sus hijos, claman. Esta dignidad que atentan el honor de la familia.
obligación nace del derecho natural y no cesa En la esfera económica, afirmaron que la
por la muerte, sostienen. Asimismo, desde la libertad testamentaria impediría la subdivi-
perspectiva social, declaran que la familia es sión excesiva e ineficiente de la propiedad.
el elemento fundamental de la sociedad.25 Asimismo, sostiene que el, padre mediante
En el ámbito político, sostienen que la última un sistema de herencia libre escoge al más
voluntad del padre es siempre débil y como apto de sus hijos y nadie mejor que él, pues
política de bienestar público el Estado debe conoce a sus hijos y siendo él el propietario
proteger al indefenso padre y al desprotegido le corresponde distribuir sus bienes. En el
hijo. De igual manera, la legítima hereditaria plano jurídico, sostienen que el derecho de
aseguraría una justa distribución dentro de propiedad es absoluto.
la familia y sería propia de las democracias.
Desde la perspectiva económica, la legítima 2.6.2. Argumentos desde el análisis eco-
promovería la formación de un patrimonio nómico del Derecho
familiar; los hijos colaborarán gustosamente Frente a estas posturas clásicas, Steven N.
en consolidar un solo patrimonio con sus pa- S. Cheung sostiene que es caro proteger un
dres; y la distribución generada por la legítima derecho de propiedad mediante una regla
hereditaria ayudaría que las tierras ingresen moral.26 Refiere que, en la antigua China, los
al mercado. El patrimonio del padre debería padres tenían derechos de propiedad sobre los
dividirse entre sus hijos porque en muchas hijos. Se vendían y compraban hijos mediante
ocasiones ellos también trabajaron para cons- matrimonio. Sin embargo, los(as) hijos(as)
tituirlo. Desde la óptica jurídica, afirman los que no aceptaban el matrimonio podían huir.
derechos que de propiedad no son absolutos y Los padres no solo perdían a su vástago sino
toda que restricción legitimaria a los derechos también el ingreso que provenía del contrato
del padre beneficiaría con justicia a los hijos. matrimonial. Por eso, un chico(a) obediente
El derecho de sucesiones, agregan, lo forma al padre era un capital seguro, que le da la
el derecho de reales y el derecho de familia, certeza al padre de una ganancia cierta. Un
con marcada influencia del segundo. Existe, descendiente indisciplinado era una ganancia
precisan, una copropiedad familiar que debe incierta y no deseada. Lo importante era
transmitirse de padre a hijo debido a que el reducir el riesgo de que huyan.
padre solo mantiene un fideicomiso tácito a Los hijos usualmente eran destinados para las
favor de su familia. labores agrícolas y las hijas, a labores domés-
Los partidarios de la libertad testamentaria ticas. En ese sentido, los padres, mediante
respondieron a sus antagonistas en cada uno el uso de un zapato especial, impidieron el
de sus extremos. En el plano moral, contes- crecimiento normal de los pies de sus hijas,
taron que la libertad testamentaria refuerza hasta el punto de deformarles los pies. Así,
la autoridad paterna. En el enfoque social, al no poder caminar, las hijas no podían huir.
la libre disposición promovería la natalidad De esta manera, evitaron las novias fugitivas.
mientras que la legítima la reduciría con la A la par se las educó en la virtud de la belleza
de los pies en extremo pequeños. Idea que se
Civil Sucesiones
tendencia de procrear un único heredero de padres altruistas y padres egoístas. Los padres
todas las propiedades; mientras que familias altruistas son aquellos padres que al morir
de bajos ingresos procreaban mayor número dejan a todos sus hijos la misma cantidad de
de hijos a quienes se les dejaba de la manera herencia; mientras que los padres egoístas
más igualitaria posible lo poco que tenían.29 son aquellos que dejan en herencia a sus
Un sistema de herencia libre, según las in- hijos una ínfima cantidad. Los padres ricos
vestigaciones presentadas, permite que los son los que se pueden permitir ciertos de-
padres premien libremente a sus hijos, sea rroches y dejan una gran herencia; mientras
en su esfuerzo o simplemente por ser su hijo. que los padres pobres son los que tienen que
Con el trabajo del Modigliani, se deja de elegir con cuidado su consumo para evitar
lado la proposición quimérica de la legítima al mínimo el derroche y no transmiten nada
como causa fundamental para que los hijos por herencia. Al momento de su muerte,
trabajen con los padres y formen patrimonio los padres altruistas ricos dejan una buena
familiar. Según el Premio Nobel, la riqueza herencia a sus descendientes. En cambio, los
de cada una de las personas en un sistema padres altruistas y pobres no dejan herencia
de libertad testamentaria se conforma de dos a sus hijos. Por su parte, los padres egoístas,
partes: (1) transferencias intergeneracionales; tanto pobres como ricos, no dejan una gran
y (2) ahorros propios. El peso del segundo es herencia a sus hijos. El altruismo hace que
tres veces mayor que el primero. Los ahorros la capacidad económica de los padres lo
de la gente se deben a la programación de disfruten los hijos. En el egoísmo, no hay
sus gastos durante su jubilación. La gente no distinción entre padres ricos y pobres. En
ahorra para regalárselo a sus hijos, sino para ambos sistemas, tanto el egoísmo como en
asegurarse su propio bienestar en la edad el altruismo, promueven la igualdad.
de oro. La finalidad no es conseguir la eficiencia,
sino propender a su resultado y eso diferen-
IMPORTANTE cia una economía liberal de una economía
planificada. Cuando se piensa que el análisis
La legítima es la institución jurídica dog- económico del Derecho propugna la eficien-
máticamente aceptada pero socialmente cia, se piensa que se debe buscar a toda costa
no internalizada. la eficiencia, pero ese pensamiento es más
para un estado planificador o incluso tiráni-
En la apreciación de Gary S. Becker, afecta lo co antes que para un estado de Derecho. El
recibido por el hijo como herencia a lo que binomio es estado de Derecho y economía
gana el hijo durante su vida laboral. A mayor de mercado, la eficiencia se consigue con
herencia dejada por los padres menor esfuer- libertad. Este fue el caso del sistema alemán
zo del hijo; y a menor herencia de los padres, vigente entre las dos guerras mundiales que
mayor esfuerzo del hijo. El esfuerzo es para buscaba la eficiencia en el uso de las tierras
generarse su ingreso mensual. agrícolas, para dar mayor bienestar material
y seguridad al granjero, y con ello formar una
Por otro lado, Tsuneo Ishikawa forma un casta de poderosos terratenientes alemanes.
modelo en el que toma dos variables: ca- Del conocimiento de este sistema hereditario
pacidad económica y valores paternos. En alemán del Tercer Reich podemos concluir que
tal sentido, diferencia entre padres ricos y no hay eficiencia sin libertad.30
padres pobres. Asimismo, distingue entre
29 Vid. WEDGWOOD, J., “The Influence of Inheritance on 30 Véase: GALBRAITH, J. K. “Hereditary Land in the Third
the Distribution of Wealth”, en The Economic Journal, Reich”, en The Quarterly Journal of Economics, vol. 53,
vol. 38, nº 149, 1928, pp. 53-54. nº 3, 1939, p. 475.
Civil Sucesiones
legítima no genera eficiencia en los sistemas biliza una adecuada asignación de recursos,
de derechos de propiedad. en un esquema de recursos escasos; (6) en un
sistema de libertad para testar, no genera la
En este contexto, en sistemas de libertad tiranía paterna.
testamentaria: (1) los legados resultan ser
Finalmente, la sociedad podría vivir sin la
paritarios; (2) el legado responde al esfuerzo
institución de la legítima; puesto que, al
filial desplegado a lo largo de sus vidas; (3) final del día, quizás nos encontremos ante su
incentiva el trabajo en el posible heredero; ocaso o quizás frente a una banalidad, pero
(4) promueve voluntariamente la igualdad; eso sí, recordemos que no hay eficiencia sin
(5) el sistema de libertad testamentaria via- libertad.
CONSULTA
Mariana decidió dejar todos sus bienes a las monjas de su parroquia,
pues no tenía herederos forzosos. Después de unos meses, Mariana co-
noció a Roberto y decidieron casarse. Lamentablemente, debido a una
terrible enfermedad, Mariana falleció. ¿Sería nulo el testamento que
otorgó Mariana debido a que no incluyó a su marido?
De acuerdo con el Código Civil, un testamento rado nulo, consideramos que dicha caducidad
es nulo cuando: i) es otorgado por incapaces solo debe operar en parte. Esto es así, debido a
menores de edad o por los mayores enfermos que los legados deberían permanecer vigentes
mentales cuya interdicción ha sido declarada; siempre que no afecten a la legítima de los
ii) cuando ha sido otorgado expresando como herederos forzosos.
causa la muerte del heredero instituido en uno En ese sentido, se pronuncia el Dictamen Fiscal
anterior; iii) cuando presenta defecto de forma; N.° 418/52 que indica que si un testamento
iv) en los testamento especiales, cuando falta fue otorgado antes que contrajera matrimonio
la forma escrita, la firma del testador o de la el testador, dicho testamento no caduca íntegra-
personas autorizada para recibirla; y v) cuando mente, sino en la parte que daña los derechos
el testamento es otorgado en común por dos o hereditarios de la cónyuge, que fue preterida
más personas. por los mismo que todavía no era heredera al
Se desprende de lo anterior que el no incluir tiempo del otorgamiento del testamento. (Ci-
en el testamento a un heredero no es causal tado por Zárate del Pino, Juan. Curso de Derecho
de nulidad del testamento. En ese sentido, de Sucesiones, Palestra Editores, Lima, 1998,
consideramos que el remedio para el caso en p. 205).
concreto sería el de la caducidad establecida Por tanto, las monjas deberían ser herederas de
en el artículo 805 del Código Civil. En efecto, un tercio de los bienes de la señora Mariana y
en el inciso 1 de dicho artículo, se señala que el marido preterido será heredero de los otros
el testamento caduca si el testador deja here- dos tercios.
deros forzosos que no tenía cuando otorgó el
testamento y que vivan. Fundamento legal:
Si bien es cierto que según dicho artículo, el Código Civil: Artículos 805, 808, 810, 811,
testamento en su integridad debería ser decla- 813 y 814.
Civil Sucesiones
RESEÑA DE JURISPRUDENCIA
Reseña de jurisprudencia
Casación
N.º 4-2013-Lima
La vocación hereditaria justifica la
posesión
Casación Nº 4-2013-Lima
Publicado en Sentencias en Casación, Año XVIII, N.º 694
(El Peruano, 30 de julio de 2014, p. 54341).
Proceso Proceso de desalojo por posesión precaria
Sumilla La vocación hereditaria constituye título que justifica la posesión
Decisión INFUNDADO
Normas aplicables Código Civil: Artículo 911
Código Procesal Civil: Artículo 586
Fundamentos No es poseedor precario quien tiene vocación hereditaria respecto de los propietarios
jurídicos relevantes originarios del bien, aun cuando haya sido preterido de la sucesión intestada.
TEXTO DE LA CASACIÓN
demandado viene poseyendo el inmueble sin autorización alguna y pese a que le ha solicitado
vía notarial la desocupación del inmueble. CONTESTACIÓN DE LA DEMANDA: Según escrito
de fojas noventa y dos, el demandado Demetrio Rolando Luzquiño Brown contesta la demanda
sosteniendo que el inmueble litigioso fue adquirido inicialmente por sus señores padres, Julio
Luzquiño Ruiz e Isabel Brown Herrera el veinticuatro de febrero de mil novecientos sesenta y seis
a la Junta Nacional de la Vivienda mediante contrato de compraventa a plazos. Menciona que
su padre falleció el seis de noviembre de mil novecientos setenta y nueve y su madre el catorce
de noviembre de dos mil, por lo tanto, debieron ser declarados herederos sus tres hijos Augusto
Dante, Demetrio Rolando y Celia Luzquiño Brown, sin embargo, por errores materiales en las
inscripciones de los nacimientos de los primeros, la última de las nombradas procedió de mala
fe a declararse como única heredera de los progenitores, por acta notarial de fecha veintitrés de
octubre de dos mil seis y, posteriormente, transfirió el inmueble al demandante Carlos Alberto
Merino Polo. Refiere además el demandado que ha iniciado proceso de petición de herencia y
declaración de herederos respecto a sus padres, por lo que, no tiene la obligación de pagar ren-
ta alguna a favor del demandante, cuyo título de propiedad cuestiona, ni mucho menos tiene la
condición de precario. PUNTOS CONTROVERTIDOS: Según consta del acta de audiencia única
de fecha treinta y uno de agosto del año dos mil diez, obrante a fojas ciento nueve, se estable-
cieron los siguientes puntos controvertidos: Establecer si corresponde el desalojo por precario del
demandado del inmueble ubicado en la Unidad Vecinal N° 3 Block 48, D4, segundo piso, Cer-
cado de Lima, Provincia y Departamento de Lima. SENTENCIA DE PRIMERA INSTANCIA:
Luego del trámite procesal correspondiente, el señor Juez del Trigésimo Tercer Juzgado Civil de
Lima, mediante resolución de fecha dos de mayo de dos mil doce emitió sentencia declarando
infundada la demanda, argumentando que, con los documentos consistentes en cartas notariales
dirigidas a su hermana Celia Luzquiño de Castillo y con el pago de arbitrios, luz y agua se genera
convicción respecto a que el demandado ocupa el inmueble en su condición de heredero y que
no se trata de un ocupante precario, pues tiene los mismos causantes que su hermana que lo
pretirió en la sucesión, además la referida hermana se allanó en el proceso de petición de heren-
cia. SENTENCIA DE SEGUNDA INSTANCIA: La Quinta Sala Civil de la Corte Superior de Lima
mediante resolución de fecha diez de octubre del año dos mil doce, de fojas ciento sesenta y dos,
revoca la apelada, y reformándola, declara fundada la demanda, argumentando que el deman-
dante ha acreditado ser propietario del bien, por lo que, está legitimado para demandar el
desalojo, y que, el demandado no ha acreditado contar con título ni vínculo contractual existen-
te con el demandante para el uso del bien materia de litis ni tampoco acreditar pagar renta por
el uso del bien, por lo que, tiene la condición de precario, y el hecho de que existe una deman-
da de petición de herencia no constituye título para poseer el inmueble materia de litis, ya que
la sola vocación hereditaria no es oponible a la pretensión del demandante. RECURSO DE CA-
SACIÓN: Contra la mencionada sentencia de vista emitida por la Sala Superior, el demandado
interpone recurso de casación mediante escrito de fojas ciento ochenta y dos. Este Supremo Tri-
bunal, mediante resolución de fecha diecisiete de junio del año dos mil trece declaró la proce-
dencia del referido recurso por la causal de infracción normativa de orden material por interpre-
tación errónea del artículo 911 del Código Civil. III. MATERIA JURIDICA EN DEBATE: Es ne-
cesario establecer que la materia jurídica en discusión se centra en determinar si es que se
debe ordenar la restitución del inmueble litigioso a favor del demandante, en su condición
de propietario, y si el demandado posee el inmueble como precario. Asimismo, corresponde
analizar si es que la condición del demandado de heredero preterido enerva su condición de
precario. IV. FUNDAMENTOS DE ESTA SALA SUPREMA: 1. Corresponde mencionar, de ma-
nera preliminar, que la función nomofiláctica del recurso de casación garantiza que los Tribunales
Supremos sean los encargados de salvaguardar el respeto del órgano jurisdiccional al derecho
objetivo, evitando así cualquier tipo de afectación a normas jurídicas materiales y procesales,
procurando, conforme menciona el artículo 384 del Código Procesal Civil, la adecuada aplicación
del derecho objetivo al caso concreto. 2. Según se advierte del auto calificatorio de fecha dieci-
siete de junio de dos mil trece, este Supremo Tribunal ha declarado procedente el recurso por la
causal de infracción normativa de interpretación errónea del artículo 911 del Código Civil. Se denun-
cia, por tanto, la infracción normativa por interpretación errónea de una norma de orden mate-
rial, por lo que, sin desconocer los fines del recurso de casación, este Supremo Tribunal se en-
cuentra facultado para realizar un análisis respecto a la pretensión postulada, y al juicio de valor
Civil Sucesiones
emitido tanto por el A- Quo como por el Ad-Quem sobre si el demandado posee el inmueble li-
tigioso en condición de precario. 3. El artículo 911 del Código Civil, a la letra prescribe que: “La
posesión precaria es la que se ejerce sin título alguno o cuando el que se tenía ha fenecido.” Pese a lo
escueto y a la aparente claridad del dispositivo normativo glosado, sobre la naturaleza jurídica y
el tratamiento del poseedor precario se han librado encarnizados debates doctrinarios y jurispru-
denciales. 4. Sobre el poseedor precario se han esgrimido numerosos conceptos, cada uno de
ellos con diversos alcances, pero, debe ser el más amplio aquel que deba ser utilizado por el
órgano jurisdiccional al momento de resolver un conflicto, con la finalidad que se enmarque
dentro de dicho concepto las diversas situaciones que se presentan en nuestra realidad. Cabe
recordar que el proceso judicial de desalojo por ocupación precaria, constituye un medio judicial
de defensa del derecho de posesión y, por tanto, no se encuentra en discusión dentro de esta vía
procesal la propiedad del inmueble litigioso. La condición de “defensa posesoria” del proceso de
desalojo por ocupación precaria se encuentra reconocida en nuestro ordenamiento jurídico pro-
cesal, toda vez que, el artículo 586 del Código Procesal Civil prescribe expresamente que: “Pueden
demandar: el propietario, el arrendador, el administrador y todo aquel que, salvo lo dispuesto en el
artículo 598, considere tener derecho a la restitución de un predio. Pueden ser demandados: el arren-
datario, el subarrendatario, el precario o cualquier otra persona a quien le es exigible la restitución”. En
este orden de ideas, al tratarse de una acción posesoria, el demandante requiere únicamente de
un título que acredite que está facultado para poseer determinado bien y para solicitar la resti-
tución (del derecho de posesión). No se requiere, por tanto que el demandante sea necesaria-
mente el propietario del bien, porque el desalojo no defiende propiedad sino posesión. 5. En el
caso de autos, el demandante ha acreditado la propiedad del bien materia de litigio, máxime si
su derecho real se encuentra inscrito en el asiento C00003 de la Partida Registral N° 40186913,
obrante a fojas tres, tras haberlo adquirido de su anterior propietario Celia Luzquiño Brown de
Castillo mediante escritura pública de fecha treinta de setiembre de dos mil nueve. Por tanto, es
evidente que se encuentra facultado para ejercer la defensa de la posesión, como atributo de su
derecho de propiedad, y solicitar la restitución del bien. 6. Por otro lado, el demandante alega
la condición de precario del demandado Rolando Demetrio Luzquiño Brown, porque ocupa el
bien sin título alguno y sin el pago de renta por el uso del bien. Empero, se logra advertir que
dicho demandado es hermano de la anterior propietaria del bien, Celia Luzquiño Brown, quien,
a su vez, adquirió el bien por sucesión intestada de sus padres (y padres del demandado) Isabel
Brown Herrera y Julio Luzquiño Ruiz, según fluye del Asiento C00002 de la Partida Registral N°
40186913, obrante a fojas sesenta y cuatro. 7. Ahora bien, según se advierte de los Asientos
Registrales de foja cincuenta y seis y cincuenta y ocho, doña Celia Luzquiño Brown fue declarada
heredera universal de ambos padres, pretiriendo el derecho de sus hermanos Augusto Dante y
Rolando Demetrio Luzquiño Brown, cuyas partidas de nacimiento, debidamente rectificadas,
obran a fojas sesenta y sesenta y tres, respectivamente. En su condición de supuesta heredera
universal, Celia Luzquiño Brown vendió el inmueble a favor del ahora demandante. 8. Los hechos
descritos impiden al órgano jurisdiccional considerar al demandado como poseedor precario,
pues, cuenta con una circunstancia que justifica la posesión que ejerce sobre del bien, pues, tiene
vocación hereditaria respecto a los propietarios originarios del bien, y, si bien fue preterido por
su hermana, esto no es óbice para que peticione los derechos sucesorios que le corresponden
como heredero legal, como efectivamente lo hizo, a través del proceso de petición de herencia
contenido en el expediente N° 12358-2010-0-1801-JR-CI- 46, en el que, además ya ha sido
declarado como heredero, según fluye de la sentencia contenida en la resolución número nueve
de fecha veintitrés de marzo de dos mil doce, inserta a fojas ciento sesenta y seis, la que fue
declarada mediante resolución número diez de fecha treinta y uno de julio de dos mil doce,
obrante a fojas ciento setenta. Además, su derecho hereditario ha sido debidamente inscrito en
las partidas registrales correspondientes, según fluye de los asientos registrales de fojas ciento
setenta y dos y ciento setenta y tres, siendo que, ahora concurre con doña Celia Luzquiño Brown
de Castillo. 9. Como se ha mencionado anteriormente, el proceso de desalojo constituye un
medio de defensa procesal de la posesión, mas no un proceso en el que se discute a quien co-
rresponde la propiedad de determinado bien, por tanto, no resulta relevante, en el caso concre-
to, determinar si es que el demandado, en su condición de heredero ya declarado, ostenta o no,
actualmente, la propiedad del bien sub litis, lo que en todo caso será discutido en la vía procesal
pertinente. Sin embargo, sí resulta necesario concluir que no tiene la condición de poseedor
precario, por lo que, la demanda de desalojo interpuesta en su contra, es infundada. 10. Lo
expuesto nos permite concluir que el recurso extraordinario de casación planteado por el deman-
dado debe ser declarado fundado, y al tratarse la denuncia de una infracción de carácter material,
y, conforme a la facultad conferida por el artículo 396 del Código Procesal Civil, corresponde a
este Supremo Tribunal declarar la nulidad de la recurrida, y, excepcionalmente, actuar en sede
de instancia confirmando la apelada que, en primera instancia, declaró infundada la demanda.
V. DECISIÓN: Estando a las consideraciones expuestas, esta Sala Suprema, en aplicación de lo
señalado en el artículo 396 del Código Procesal Civil; declararon: a) FUNDADO el recurso de
casación de fojas ciento ochenta y dos, interpuesto por Demetrio Rolando Luzquiño Brown; en
consecuencia CASARON la sentencia de vista de fecha diez de octubre de dos mil doce, y, la
declararon NULA. b) Actuando en sede de instancia: CONFIRMARON la sentencia apelada
de fecha dos de mayo de dos mil doce que declara infundada la demanda de desalojo por ocu-
pación precaria. c) DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en el diario oficial El
Peruano, bajo responsabilidad y los devolvieron; en los seguidos por Alberto Merino Polo con
Demetrio Rolando Luzquiño Brown, sobre desalojo por ocupación precaria; intervino como po-
nente la Juez Supremo señora Rodríguez Chávez.-
SS.
Almenara Bryson / Huamaní Llamas/ Estrella Cama / Rodríguez Chávez / Calderón Puertas
contratos
Actualidad
Área
Civil Contratos
Contratos
Contenido
GUSTAVO CÉSAR SÁNCHEZ MORALES: El comitente y su derecho a desistirse por
DOCTRINA 178
justa causa del contrato de locación de servicios a tiempo determinado.
JUAN CARLOS PUERTAS FIGALLO: ¡Paga primero y reclama después! La falta
comentario de ju-
risprudencia
de cumplimiento en los contratos recíprocos (Comentario de la Casación 192
N.°1913-2013-Lima)
NOS PREGUNTAN Y Aplicación del principio de buena fe para determinar el contenido de una
CONTESTAMOS
203
garantía.
RESEÑA DE
JURISPRUDENCIA
Resolución de contrato de donación (Casación Nº 262-2012-Lima) 205
DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina práctica
1. Introducción
2. El modelo doctrinal alemán y la adscripción del sistema jurídico peruano
3. El contrato de locación de servicios en el Código Civil alemán y peruano: Deberes derivados
SUMARIO
Civil Contratos
Por tanto, el presuponer que la extinción de El derecho de desistimiento está previsto en
una relación obligatoria por la sola y libre de las normas legales de un gran número de con-
una de las partes es una “excepción”, es a su tratos típicos y en la normativa del contrato en
vez considerar que el dogma de la “irrevoca- general se presenta como la posibilidad gene-
bilidad del contrato” coincide con la prohi- ralmente ofrecida a la autonomía privada11.
bición de dejar la validez y el cumplimiento
Así, en la regulación del Código Civil peruano,
del contrato al arbitrio de una de las partes.
pueden encontrarse varios ejemplos del lla-
Bajo esta premisa, se entiende al desistimiento mado “desistimiento unilateral”. Por ejemplo,
unilateral como un apartamiento singular se regula el desistimiento de liberación para
que desliga a una de las partes de la relación todo contrato típico o atípico de duración
jurídica lo cual implica la inexistencia del indeterminada (artículo 1365). Puede obser-
vínculo, es decir, una suerte de condición varse, también, la facultad de desistirse del
meramente potestativa, la que debe ser usada contrato como mecanismo de autotutela en
forma restrictiva. los casos del depósito (artículo 1833), secues-
tro (artículo 1865) y en la locación de servicios
Sin embargo, a decir de Roppo, “es más rea-
(artículo 1769), supuestos en los cuales debe
lista ver en la separación [derecho de desisti-
existir una “justa causa” para ejercerlo.
miento] un instrumento normal y fisiológico
de ajuste de los intereses contractuales”6. Sin embargo, en los casos de la locación de
servicios, el depósito y el secuestro, solo está
En efecto, el derecho de desistimiento trata
regulado expresamente este derecho para el
propiamente de extinguir la relación con-
deudor del servicio (el locador y depositario);
tractual por decisión unilateral de cualquiera
por otro lado, en el mandato, pueden ejercer
de las partes7, es un medio de extinción del
este derecho ambas partes, y en el contrato de
contrato. Es, como dice, Miccio8, un poder
obra, solo puede ejercerlo el comitente. Como
frente a la relación jurídica, pero que deviene
se observa, la disparidad del tratamiento es
un derecho potestativo frente a la otra parte,
sorprendente.
cuyo efecto principal es poner fin a la rela-
ción; es el poder mediante acto de voluntad En esa línea, en el presente estudio, nos
unilateral extintivo de los efectos del contrato, avocaremos al derecho de desistimiento
de liberarse del vínculo que entre las partes en el “contrato de locación de servicios”,
tiene fuerza de ley9. el mismo que está regulado en el artículo
1769 del Código Civil, y que los faculta al
Con este marco, el derecho de desistimiento
ejercido de este derecho al locador y no al
debe considerarse entre las causales de ex-
comitente. La doctrina nacional establece que
tinción del contrato, o si se quiere, entre los
la autotutela es un derecho que solo tiene el
supuestos de ineficacia en sentido estricto10.
locador por “justo motivo”; ya que es el único
que compromete su actividad en beneficio
6 Ídem.
del comitente, a quien solo le corresponde
7 En ese sentido, De La Puente Y Lavalle, Manuel,
El contrato en general. Comentarios a la Sección Primera pagar la retribución. Desde nuestro punto de
del Libro VII del Código Civil, 3.a ed., Palestra, 2011, t. vista, ello no debería ser así. Considerando
I, p. 417. que en materia del “contrato de locación de
8 Miccio, Renato, I diritti di crédito - Il contrato, U.T.E.T., servicios”, la doctrina nacional se adscribe
Torino, 1977, p. 420.
al “modelo doctrinal alemán”12, para fun-
9 Ravera, Enrico, Il recesso, Giuffrè Editore, Milán,
2004, p. 8.
10 En ese sentido, Morales Hevias, Rómulo, Las 11 Morales Hervias, Las patologías y remedios del
patologías y remedios del contrato. Tesis para optar el contrato, cit. p. 239.
grado de Doctor en Derecho p. 160. Ver en línea: 12 Sanguineti Raymond, Wilfredo, El contrato de
<http://goo.gl/2HscI9>; Klein, El desistimiento unila- locación de servicios, 2.a ed., Gaceta Jurídica, Lima,
teral del contrato, cit., p. 24. 2000, p. 178.
Civil Contratos
de la docencia privada como un contrato de son ejemplos típicos del modelo doctrina
servicios; ya que el profesor no se obligará a la alemán.
producción de un resultado que no depende
De lo hasta aquí expuesto, se aprecia que es
solamente de él; incluye también dentro de
manifiesta la adscripción de nuestro sistema
la categoría de contrato de servicios, a aquel
jurídico al modelo doctrinal alemán, según
por el cual un abogado se obliga frente a un el cual el contrato de locación de servicios se
cliente a patrocinarlo en un litigio. caracteriza por la autonomía del prestador del
servicio frente al acreedor del mismo.
DIETER MEDICUS dice: Asimismo, de los ejemplos transcritos, tanto
por la doctrina alemana como por la nacional,
se colige que respecto de los prestadores de
“
El supuesto de servicios, sus cualidades personales cobran
aplicación más im- especial importancia porque todos ellos (el
portante de la de- médico, abogado, docente particular, etc.)
nuncia lo forma la son buscados por su experiencia, seriedad,
terminación en el capacidad de trabajo, sus conocimientos,
futuro de las obli- datos a tomar en cuenta conforme se vaya
gaciones de tracto desarrollando el presente estudio.
sucesivo [las cua-
les], pueden concertarse por tiempo 3. El contrato de locación de servicios
indeterminado. En este caso, es ne- en el Código Civil alemán y perua-
cesaria la denuncia, por lo general, no: Deberes derivados
para finalizar la relación obligacio- Habiendo determinado que nuestro sistema
nal. No requiere entonces como jurídico se ‘afilia’ al modelo doctrinal alemán,
denuncia ordinaria normalmente en materia del contrato de locación de servi-
fundamento alguno; por tanto, exis- cios, resulta relevante para el presente estudio
te en la voluntad del denunciante . ” determinar cuáles son los deberes que derivan
de este contrato. Aprovecharemos la compa-
ración jurídica de las soluciones brindadas
En nuestro país, León Barandiarán cita los si- por ambos sistemas peruano y alemán para
guientes ejemplos de prestación de servicios el ejercicio del derecho de desistimiento en
autónomos: absolver una consulta profesio- el contrato de locación de servicios, a fin de
nal, asistir a una enfermedad durante todo determinar los alcances del artículo 1769 del
el tiempo en que un individuo esté enfermo, Código Civil peruano.
defender una causa judicial por un abogado
Así, el Código Civil alemán de 1900 (en adelan-
y enseñar un idioma16; Rendón, refiriéndose
te BGB) regula la prestación de servicios a través
al contrato de locación de servicios, indica
del “contrato de servicios” el cual es definido
que: “es el caso de la actividad del médico
por el parágrafo 611 de la siguiente forma:
llamado por un paciente para una consulta o
para una operación quirúrgica, es el caso del “Mediante el contrato de servicios la persona
abogado contratado para el patrocinio de un que promete los servicios está obligada a la
pleito, el de un profesional convocado para prestación de los servicios prometidos, y la otra
una consultoría”17; como se aprecia, todos parte está obligada a satisfacer la remuneración
acordada. Pueden ser objeto del contrato de
servicios, los servicios de cualquier tipo.”
16 Citado por Sanguineti, El contrato de locación de
servicios, cit., p. 180.
Por su parte, el Código Civil peruano de 1984
17 Citado por Sanguineti, El contrato de locación de
servicios, cit., p. 183. regula como una modalidad de la prestación
Civil Contratos
En nuestro medio, también se cita esta cla- Por otro lado, se hace una distinción entre “de-
sificación25. sistimiento ejercitado libremente” (ad nutum)
o bien subordinado a la subsistencia de una
Sobre el particular, Medicus refiriéndose al
justa causa. “En el caso del receso ad nutum
“derecho de denuncia” –que se asemeja al
[como se conoce al desistimiento en Italia] la
derecho de desistimiento–, afirma que “el
parte en cuyo favor es atribuido el derecho de
supuesto de aplicación más importante de
receso, puede ejercerlo en cualquier momento
la denuncia lo forma la terminación en el
y sin necesidad de justificar el receso. El receso
futuro de las obligaciones de tracto sucesivo,
por justa causa, en cambio, solo se dará si se
[las cuales] pueden concertarse por tiempo
presentan determinadas circunstancias y jus-
indeterminado. En este caso es necesaria la
tificativas previstas específicamente en la ley
denuncia, por lo general, para finalizar la rela-
o cuando esta remita a la apreciación del juez
ción obligacional. No requiere entonces como
si el hecho alegado constituye justa causa”30.
denuncia ordinaria normalmente fundamento
alguno; por tanto, existe en la voluntad del Asimismo, se hace la distinción entre “desisti-
denunciante”26. miento convencional” y “desistimiento legislati-
vo”. Por el primero, aplicable a los contratos de
El desistimiento extraordinario, en cambio,
duración instantánea y duradera, “las partes,
se denomina así porque provoca la cesación
mediante el contrato, pueden reconocer a una
del contrato antes del momento en que por
de ellas, o también a ambas, el derecho po-
regla general tenía que haberse producido; ha
testativo de desistimiento, cuyo ejercicio oca-
de basarse en un motivo importante, en una
siona la extinción unilateral del contrato”31; el
“justa causa”, es decir, en una circunstancia
segundo, aplicable a los contratos de duración
sobrevenida que impide la continuación del
a tiempo indeterminado, “permite a las partes
contrato; por esa razón, el desistimiento se
de un contrato de duración estipulado a tiempo
ejercita aquí sin necesidad de preaviso y, por
indeterminado de liberarse de un compromiso
tanto, tiene eficacia inmediata27. También en
que se prolongaría indefinidamente, como el
nuestro medio, se utiliza esta clasificación28.
artículo 1365 del C.C.”32.
Al respecto, Medicus también afirma que:
En relación a esta último [desistimiento
“las obligaciones de tracto sucesivo pueden
legislativo], se habla de desistimiento de li-
convenirse también por tiempo determinado
beración, de autotutela y de arrepentimiento.
(…). En circunstancias determinadas, se puede
mostrar como necesario, que la relación obli- Interesa para el presente estudio referirnos
gacional termina ya antes de su ‘concertada’ al desistimiento de autotutela el cual se ma-
realización. Para ello contribuye, entonces, la nifiesta en una facultad otorgada por la ley
denuncia extraordinaria. Porque si contradice a para que una parte se defienda contra eventos
lo convenido por las partes, requiere de una sobrevenidos que amenazan sus intereses
motivación especial”29. contractuales; este remedio es ejercitable solo
en presencia de determinados presupuestos
25 En ese sentido, Merino Acuña, Roger, en Código y requisitos, fuera de los cuales sería injus-
Civil Comentado por los 100 mejores especialistas, Ga- tificado, estos presupuestos podrían ser “la
ceta Jurídica, t. IX, p. 175; Morales Hervias, Las justa causa”, “justificados motivos” o “graves
patologías y remedios del contrato, cit. 2010, p. 241.
26 Medicus, Tratado de las obligaciones, cit., p. 256.
27 Medicus, citado por Klein, El desistimiento unilateral
del contrato, cit., p. 28. 30 Barchi Velaochaga, “Algunas consideraciones
28 En ese sentido, Merino Acuña, en Código Civil sobre el receso en el Código Civil peruano: A propósito
Comentado por los 100 mejores especialistas, Gaceta del artículo 1786”, cit., p. 293.
Jurídica, cit. p. 175; Morales Hervias, Las patologías 31 Morales Hervias, Las patologías y remedios del
y remedios del contrato, cit. pp. 241-242. contrato, p. 243.
29 Medicus, Tratado de las obligaciones, cit. p. 257 32 Ídem, p. 245.
Civil Contratos
los casos de contratos de servicios a plazo y otra que es la que resulta en una “laguna
determinado cuando haya un “motivo justo”, legal” y cita el siguiente ejemplo de norma
teniendo este derecho ambas partes del contrato. e interpretación: “Si se es ciudadano tiene
En ese sentido, si se quería seguir el modelo derecho a voto”. A través de la interpretación
doctrinal alemán, se debió haber previsto este a contrario, se podría inferir que al no decirse
derecho para ambas partes y no solo para el nada de los extranjeros existe una “laguna
locador, y ello en atención a que ambas partes legal”; en consecuencia, el legislador podría
tendrían la misma posibilidad de tener “justos legislar sobre el voto de los extranjeros. La
motivos” para desistirse del contrato. otra posibilidad es la interpretación a con-
trario propiamente dicha indicando que la
IMPORTANTE Constitución ha negado el derecho de voto a
los extranjeros.37
El desistimiento extraordinario ha de Para determinar si nos encontramos frente
basarse en un motivo importante, en a una laguna o frente a una interpretación a
una “justa causa”, es decir, en una cir- contrario, debemos acudir a los métodos de
cunstancia sobrevenida que impide la interpretación, atendiendo en todo momento
continuación del contrato; por esa razón, a que toda norma debe interpretarse desde la
el desistimiento se ejercita sin necesidad Constitución Política del Estado, conforme al
de preaviso y, por tanto, tiene eficacia mandato establecido por el Tribunal Constitu-
inmediata. cional al indicar que la Constitución:
Civil Contratos
Así, es un hecho innegable que la ley presenta pendientes entre sí; sino que tienen relaciones
deficiencias en todo tiempo y lugar, dado que las unas con las otras.44
no puede abarcar en su supuesto de hecho ge- Adicionalmente, debemos tomar en cuenta el
neral y abstracto todos los posibles casos que concepto de “plenitud jurídica”, según el cual
nacen durante su vigencia y que no pudieron todo hecho de implicancia intersubjetiva se
ser previstos por el legislador; otras veces la ley encuentra sometido al ordenamiento jurídico,
ha sido redactada con un descuido apreciable aun cuando no haya alcanzado regulación
a medida que más se necesita. preceptiva.
En esa línea, jurídicamente, la expresión “lagu- Se trata de aquella capacidad definitiva para
na” se utiliza para referirse a aquellas situaciones encontrar respuesta a todas las controversias,
donde existe una deficiencia en la ley o cuando aunque no todas tengan la respuesta expre-
nos encontramos con una inexistencia de ley samente regulada por una norma jurídica. El
aplicable al punto controvertido. Ante estas ordenamiento es completo en el sentido de
situaciones, no se busca establecer el significado que el Estado garantiza que todo conflicto de
de la norma, sino encontrar el modo o procedi- intereses que se presente tendría una solu-
miento para suplir o llenar tales lagunas el cual ción, aunque para ello se tenga que razonar
se conoce como “integración”, la misma que sobre la base de elementos ajenos al derecho
puede dividirse en un sistema de heterointegra- positivo45.
ción y un sistema de autointegración.
Así, el orden jurídico se asienta en una plu-
ralidad de normas acopladas y empalmadas
DATOS
entre sí, que permiten regular creativamente,
por inducción o deducción, cualquier situa-
La facultad de desistirse del contrato ción, hecho o acontecimiento de relevancia
como mecanismo de autotutela con una jurídica46.
“justa causa” se presenta en los siguien-
tes casos: i) depósito (artículo 1833), En ese orden de ideas, existen normas expre-
ii) secuestro (artículo 1865) y iii) en la samente formuladas y normas implícitas no
prestación de servicios (artículo 1769). formuladas.
a. Son formuladas las normas que, precisa-
Hoy en día, la heterointegración no se admite mente, encuentran una expresa enuncia-
y se entiende que el sistema debe autointe- ción en alguna disposición normativa (en
grarse mediante la búsqueda y aplicación de un fragmento de disposición normativa).
Principios Generales del Derecho; con ello, se b. Son implícitas, por el contrario, las normas
llega a lo que se puede llamar una Integración extraídas de las normas formuladas (o de
Principal; puesto que, a falta de toda norma una combinación de normas formuladas,
o costumbre, siempre habrá un Principio o de una combinación de fragmentos de
General del Derecho que sea aplicable. Este normas formuladas) mediante procedi-
concepto de “integración” debe entenderse
mientos argumentativos lógicos (es decir,
dentro del contexto que un ordenamiento
deductivos) o pseudodeductivos (por
ya no es un conjunto de normas cualquie-
ejemplo, por vía de analogía, a contrario,
ra, sino más bien un conjunto de normas
etc.)47.
“estructurado”43. La estructura, a la que se
alude, consiste banalmente en esto: que las
normas que componen un ordenamiento no 44 Guastini, Interpretación, Estado y Constitución, cit.,
p. 62.
están recíprocamente desconectadas e inde- 45 Sentencia del Tribunal Constitucional N.° 00047-
2004-AI
43 Bobbio, Norberto, Teoría generale del diritto, Giappi- 46 Ibídem.
chelli, Torino, 1993, p. 12. 47 Guastini, Interpretación, Estado y Constitución, cit., p. 55
Civil Contratos
Código Civil para los Contratos de Locación locador y comitente, tendrían la facultad
de Servicios con la siguiente norma implícita: para desistirse del contrato de locación de
El comitente en los contratos de locación de servicios, por justo motivo, antes del plazo
servicios, puede finalizar el contrato por justo de vencimiento estipulado.
motivo, antes del vencimiento del plazo estipu-
lado. El locador tiene derecho al reembolso de 6. Conclusiones
los gastos efectuados y a la retribución de los a. Es manifiesta la adscripción de nuestro
servicios prestados. sistema jurídico al “modelo doctrinal
alemán”, según el cual el contrato de
CONCLUSIÓN MÁS IMPORTANTE locación de servicios se caracteriza por
la autonomía del prestador del servicio
Puede completarse la laguna del artículo frente al acreedor del mismo.
1769 del Código Civil para los contratos b. Los sistemas jurídicos (peruano y alemán)
de locación de servicios con la siguiente presentan semejanzas, el locador (en
norma implícita: el comitente en los Perú) y arrendador (en Alemania) deben
contratos de locación de servicios puede sus servicios, el comitente (en Perú) y
finalizar el contrato por justo motivo, an- arrendatario (en Alemania) deben la
tes del vencimiento del plazo estipulado. retribución; sin embargo, resulta rele-
El locador tiene derecho al reembolso de vante la diferencia que presentan ambos,
los gastos efectuados y a la retribución aquella referida a los deberes derivados
de los servicios prestados.
de la buena fe tanto para el acreedor
como para el deudor de la prestación de
Inclusive, desde un argumento histórico51, servicios, en Alemania.
podría afirmarse que el comitente tiene el c. Puede completarse la laguna del artículo
derecho a desistirse del contrato de locación 1769 del Código Civil para los Contratos
de servicios, por justo motivo, antes del ven- de Locación de Servicios con la siguiente
cimiento del plazo estipulado. norma implícita: el comitente en los
Así, el artículo 1150 del Código Civil de 1936, contratos de locación de servicios, puede
regulaba el Derecho de Desistimiento Ordina- finalizar el contrato por justo motivo, antes
rio en el Contrato de Locación de Servicios, del vencimiento del plazo estipulado. El
en los siguientes términos: locador tiene derecho al reembolso de los
gastos efectuados y a la retribución de los
“Cuando no hay plazo, o cuando no se puede servicios prestados.
inferir de la naturaleza del contrato, o de la
costumbre del lugar, cualquiera de las partes, d. Desde un argumento histórico, el locador
puede a su arbitrio, poner fin al contrato, dando y comitente tendrían la facultad para
a la otra el aviso correspondiente.” desistirse del contrato de locación de ser-
vicios, por justo motivo, antes del plazo
En virtud del mencionado argumento his- de vencimiento estipulado.
tórico, se podría atribuir al artículo 1769
del Código Civil de 1984, aquel significado 7. Bibliografía
derivado del artículo 1150 del Código Civil
de 1936, en el sentido que ambas partes, Arias Schreiber, Max, con la colaboración
de CÁrdenas Quiros, Carlos, “Comen-
tarios a la locación de servicios”, en Revo-
51 Este argumento propone atribuir como significado de redo De Mur, Delia (compiladora), Código
una determinada disposición jurídica aquel atribuido Civil. Exposición de motivos y comentarios, T.
a una disposición precedente y preexistente que re-
gulaba la misma materia en la misma organización III, Okura Editores, Lima, 1985.
jurídica.
Civil Contratos
COMENTARIO DE JURISPRUDENCIA
Comentario de jurisprudencia
Comentario a la
Casación
¡Paga primero y reclama después!
N.° 1913-2013-Lima La falta de cumplimiento en los contratos
recíprocos
1. Introducción
SUMARIO
2. El caso
3. Puntos relevantes
4. Las resoluciones emitidas
Civil Contratos
modo claro, práctico y contundente”1. Este
plazo mínimo fijado por el legislador peruano, ¿SABÍA USTED QUÉ?
a diferencia del sistema italiano y alemán, no
está al arbitrio de la parte fiel, quien no puede El principal efecto que se deriva del
otorgar un plazo menor al fijado por la norma. incumplimiento de una obligación es el
quebrantamiento de la relación jurídica
Finalmente, el pacto comisorio o cláusula por causa imputable al deudor.
resolutoria expresa es una cláusula del con-
trato con prestaciones recíprocas en virtud
de la cual se conviene que el contrato queda 3.2. La situación de incumplimiento del
resuelto cuando una o cualquiera de las partes demandante
no ejecuta determinada prestación a su cargo. Como se indicara en la introducción del pre-
Empero, la resolución es ineficaz en tanto la sente, el incumplimiento del demandante
parte fiel no pone en conocimiento de la infiel ha sido excusa constante para desestimar
que desea hacer efectiva la resolución, caso en demandas relacionadas al incumplimiento del
el cual esta opera de pleno derecho2. demandado en los contratos de prestaciones
Para que la cláusula resolutoria expresa pro- recíprocas.
duzca los efectos que persigue se requiere: El incumplimiento puede presentarse con
a. La condición previa, que está constituida mil caras diversas, puede ser incumplimiento
por el incumplimiento de la prestación radical y definitivo, cumplimiento parcial,
establecida con toda precisión, que pro- retardo en el incumplimiento, cumplimiento
vocará la resolución. cualitativamente defectuoso3; no obstante,
b. La comunicación cursada por la parte fiel a tanto el incumplimiento absoluto de una
la infiel de querer valerse de la resolución. obligación, como el cumplimiento parcial,
excesivo, anticipado, tardío, defectuoso o no
Se observa del caso en cuestión que no
adecuado a la misma, nos coloca en el campo
existía una cláusula resolutoria expresa ni
de la inejecución de obligaciones, más allá de
tampoco que se brindara a la parte de-
mandada un plazo no menor de quince los diversos aspectos que se pueden apreciar
días (tan solo se le otorgaron 5 días para en relación con las consecuencias prácticas
que cumpliera con reparar la embarcación) del tema4.
motivo por el cual, no existe una resolución En cada tipo de inejecución –parcial, total,
extrajudicial válida. tardía, defectuosa– hay consecuencias diver-
No obstante ello, los puntos controvertidos sas y, además, en función de las variables del
planteados incluyen como uno de ellos si factor de atribución correspondiente, también
“corresponde la resolución del contrato de variarán dichas consecuencias. En algunos
compraventa con reserva de propiedad”. casos, habrá responsabilidad y en otros no
la habrá (ausencia de culpa, caso fortuito o
Con ello, entendemos, que el demandante, fuerza mayor ante la ausencia de culpa, caso
consciente que se llevó a cabo un defectuoso fortuito o fuerza mayor). En ciertos casos, se
proceso de resolución extrajudicial optó por
solicitar la resolución de manera judicial, con-
3 Roppo, Vincenzo, El Contrato, Traducción a cura de
forme al derecho que se regula en el artículo Eugenia Ariano Deho, Gaceta Jurídica, Lima, 2009,
1428 del Código Civil. p. 875
4 Cumplimiento parcial: Si el deudor no ejecutase
íntegramente la prestación.
1 De La Puente Y Lavalle, Manuel, El contrato en Cumplimiento tardío: Si el deudor efectúa la presta-
general, Palestra, Lima, 2011, t. II, p. 428. ción, pero no en el plazo convenido en el contrato.
2 De La Puente Y Lavalle, Manuel, El contrato en Cumplimiento defectuoso: Cuando el deudor ejecuta
general, Fondo Editorial de la PUCP, Lima, 1993, la prestación no ciñéndose a lo pactado y con las
segunda parte, vol. XV, t. IV, p. 392. características convenidas.
Civil Contratos
obligación, conforme lo prescribe el artículo lo dispuesto por el artículo 1552 del Código
1333 del CC. Civil10, que sigue la regla general del artículo
1240 del mismo Código sobre la inmediatez
Como se aprecia, las consecuencias del in-
de la entrega. Es evidente que al haberse acor-
cumplimiento se encuentran expresamente
dado que la embarcación debía repararse, la
detalladas y reconocidas tanto por las normas
misma no podría entregarse inmediatamente,
legales como por la doctrina y ninguna de
con lo que nos encontramos ante los supues-
ellas exige que la parte que imputa la inejecu-
tos de “la demora resultante de la naturaleza
ción de la obligación, deba cumplir la propia
del bien” o de “pacto distinto”.
prestación, antes de acusar el incumplimiento
de la contraparte. Evidentemente, no hay pacto distinto, de he-
cho no hay plazo pactado, con lo que cabría
Ante la acusación de incumplimiento del
preguntarse si existe un plazo a ser determi-
contrato, la contraparte podrá poner en
nado atendiendo a “la demora resultante de
juego otras defensas, cuya carga probatoria
la naturaleza del bien”.
le incumbe a ella: por ejemplo, que el incum-
plimiento no le sea imputable, o esté asistido Sobre esta excepción a la regla general de la
por una causa de justificación, o no sea su- entrega inmediata, deben tenerse presente
ficientemente grave, u oponer la excepción los usos diversos, como por ejemplo, si al
de incumplimiento (artículo 1426º del CC) o comprar un vehículo se le exige al vendedor
la excepción de caducidad de plazo (artículo que se entregue con el color cambiado, o
1427 del CC). se está procediendo a la compra de un bien
ajeno. En estos casos, existe un plazo razona-
En consecuencia, la sola posición de incum-
ble para la entrega donde “deben tenerse en
plimiento no es una prohibición para accionar
cuenta los usos diversos, los mismos que aun
y menos aún un requisito de procedibilidad
cuando no han sido considerados dentro de
de la demanda.
las excepciones previstas en el artículo bajo
comentario (artículo 1552), sí se encuentran
RÓMULO MORALES HERVIAS dice: directamente relacionados con este”11
De hecho, por la naturaleza del pacto (realizar
“
La resolución del arreglos a la embarcación), cabe incluso la
aplicación supletoria del numeral 1 del artí-
contrato es el re-
medio que el orde- culo 1774 del Código Civil; puesto que parte
namiento jurídico de la prestación de entrega es una prestación
otorga para opo- de obra, de manera que el plazo estaría
dado por lo que la costumbre determine en
nerse a la continui-
relación a los trabajos requeridos para dejar
dad del vínculo
operativa la embarcación y en capacidad de
contractual por operar en altamar.
eventos sobrevinientes que alteran
el nexo de correspectividad entre las En consecuencia, tenemos un plazo determi-
prestaciones generadas de un con- nable el cual deberá ser apreciado conforme
trato con prestaciones correspectivas a los usos y costumbres correspondientes. Es
(o contrato sinalagmático). ” 10 Artículo 1551.- El bien debe ser entregado inme-
diatamente después de celebrado el contrato, salvo
la demora resultante de su naturaleza o de pacto
3.3. La falta de plazo pactado distinto.
En relación a la falta del plazo de entrega 11 Dávila Llerena, Bertha Fernández y Rodríguez
pactado en nuestro caso, sería de aplicación Inope, Bertha, en Código Civil comentado, Gaceta
Jurídica, Lima, 2010, t. VIII, p. 132.
Civil Contratos
TEXTO DE LA CASACIÓN
once obrante a fojas ciento treinta y siete, se establecieron los siguientes puntos controvertidos:
1.- Determinar si corresponde la devolución del importe pagado cuya suma es de quince mil
dólares americanos. 2.- Determinar si como consecuencia del punto anterior, corresponde la re-
solución del contrato de compraventa con reserva de propiedad de fecha seis de marzo de dos
mil nueve. 3.- Determinar si corresponde la entrega del título valor suscrito en calidad de garan-
tía de cumplimiento de la obligación. SENTENCIA DE PRIMERA INSTANCIA: El Juez mediante
resolución de fojas ciento sesenta y tres su fecha dos de mayo de dos mil doce, dicta sentencia
declarando infundada la demanda. Sustenta su decisión en que la presente litis se circunscribe a
determinar si el demandado en su calidad de vendedor no habría cumplido con su obligación
pactada en la cláusula octava del contrato de compraventa, esto es, de poner la embarcación en
altamar totalmente operativa; sin embargo, el contrato no señala fecha de cumplimiento de dicha
obligación. De los actuados se verifica que fue el mismo demandante quien no cumplió con sus
obligaciones pactadas, pues tal como se aprecia a fojas ocho, el demandante sólo efectuó el pago
de la suma de quince mil dólares americanos, pero no al tercer día de la firma del contrato de
fecha seis de marzo de dos mil nueve, sino al mes siguiente y de la siguiente manera, el dos de
abril, diez mil dólares americanos y el seis de abril cinco mil dólares americanos, incumpliendo
asimismo su obligación de pagar los quince mil dólares americanos que según el contrato debió
efectuarlo a los treinta días del contrato incumpliendo de esa manera con el pago. En consecuen-
cia, el accionante no puede válidamente en sede judicial, exigir el cumplimiento de contrapres-
taciones, sino ha cumplido con el pago de sus propias prestaciones conforme al pacto entre las
partes. Que, si bien el demandante viajó a Paita para verificar el estado de la embarcación y recién
allí pudo enterarse del estado de inoperatividad. también es cierto que firmó un pacto con su
contraparte correspondiendo a su diligencia el verificar dicho estado, más aun si en el contrato
de autos, en la cláusula sexta el demandante declaró conocer el estado de conservación de la
embarcación. APELACIÓN: A fojas ciento ochenta el demandante Jorge Luis Ramírez Pacheco
interpone recurso de apelación, alegando que el A quo olvida que la obligación del propietario
vendedor se encuentra contenida en el artículo 1141 del Código Civil, motivo por el cual ante
las irregularidades existentes respecto del mal estado de conservación de la embarcación que el
apelante quiso comprar, decidió resolver dicho contrato, hecho que ocurrió mediante carta no-
tarial de fecha quince de junio de dos mil nueve. La carta solicitando la resolución del contrato
fue remitida al vendedor ante el incumplimiento de conservar debidamente la embarcación. Así
el artículo 1371 del Código Sustantivo prescribe que la resolución deja sin efecto un contrato
válido por causal sobreviniente a su celebración. Que al haber resuelto el contrato, y no encon-
trarse en posesión de la embarcación ni ostentar la calidad de copropietario de la misma, cons-
tituye objeto de la demanda exigir la restitución de la prestación dineraria respecto a los quince
mil dólares americanos que pagó al demandado, hecho que ha sido ignorado por la judicatura;
olvidando que ese supuesto se encuentra regulado en el artículo 1372 del Código Civil. Además
el objeto del negocio jurídico deviene en inejecutable; pues el demandado transfirió en uso la
embarcación al tercero Jorge Gleni, lo que acredita con la denuncia policial de fecha trece de
octubre del año dos mil once. SENTENCIA DE SEGUNDA INSTANCIA: La Tercera Sala Civil de
la Corte Superior de Justicia de Lima mediante resolución de fecha diez de enero del dos mil
trece, obrante a fojas doscientos treinta y dos, confirma la apelada, sustentando dicha decisión
en que, con fecha seis de marzo de dos mil nueve se firmó el contrato de compraventa con re-
serva de propiedad respecto del cincuenta por ciento de derechos y acciones respecto de una
Bolichera pactando el precio en la suma de treinta mil dólares americanos. Así, en la cláusula
cuarta del citado contrato se estableció taxativamente: “El comprador cancelará íntegramente en
dinero y en la siguiente forma y oportunidad: 1.- Quince mil y 00/100 (US $15,000.00) dólares ame-
ricanos a los 3 días de firmado el contrato debiendo abonar el importe en la cuenta en dólares (...), en
caso contrario el contrato queda sin efecto. 2.- Quince mil y 00/100 (US $15,000.00) dólares america-
nos a los 30 días siguientes de suscrito el presente contrato”. En ese sentido, a fojas seis se aprecia la
copia de la transferencia bancaria del dos de abril de dos mil nueve, efectuada por el demandan-
te por la suma de diez mil dólares americanos; asimismo, a fojas ocho obra la copia de la trans-
ferencia bancaria de fecha seis de abril de dos mil nueve, por la cantidad de cinco mil dólares
americanos. Por lo que, habiéndose demostrado que el actor no cumplió con cancelar los pagos
de acuerdo a lo establecido en el contrato cuya resolución solicita, no le asiste el derecho que
alega, por cuanto no ha cumplido previamente con las prestaciones a las que se encontraba
obligado. RECURSO DE CASACIÓN: Por escrito de fojas doscientos sesenta y nueve el deman-
Civil Contratos
dante Jorge Luis Ramírez Pacheco interpone recurso de casación contra la resolución emitida por
la Sala Superior. Este Supremo Tribunal mediante resolución de fecha quince de julio de dos mil
trece, declaró la procedencia del referido recurso por las siguientes causales: 1.- Contravención
de las normas que garantizan el derecho a un debido proceso previsto en el artículo 139°,
inciso 3° de la Constitución Política del Perú; alega que, es obligación del juzgador, sea cual
fuere la instancia, sustentar jurídicamente toda resolución compulsando en conjunto y de mane-
ra razonada todas las pruebas actuadas valorándolas con criterio de conciencia, ello por manda-
to del artículo 197° del Código Procesal Civil, sin embargo ello no se ha dado en el presente
proceso como se puede apreciar de los considerandos de la recurrida. Así, se tiene que la Sala
Superior no ha motivado debidamente la resolución de vista ni ha valorado debidamente los
medios probatorios ofrecidos por el recurrente. La Sala de vista concluye que “habiéndose demos-
trado que la parte demandante no ha cumplido con cancelar los pagos de acuerdo a lo establecido en
el contrato cuya resolución solicita; en consecuencia, no le asiste el derecho que alega por cuanto no ha
cumplido previamente con las prestaciones a las que se encontraba obligado”. Al respecto, no se han
tenido en cuenta que el contrato señala dos obligaciones por parte del demandado, las cuales
incumplió: i) Sexta Cláusula, primer párrafo, establece que el demandado debía entregar com-
pletamente operativa la embarcación (cosa que no ocurrió); y la Octava Cláusula en su primer
párrafo establece que “el vendedor queda obligado a poner la embarcación en altamar total-
mente operativa”. El demandado vendedor debía entregar la embarcación en óptimas condicio-
nes a la firma de la escritura pública. ii) Segunda cláusula, segundo párrafo, el vendedor deja
constancia de que la embarcación se encuentra desocupada, en buen estado de conservación.
Sostiene el recurrente que si bien es cierto, cumplió con efectuar el primer depósito extemporá-
neamente, también lo es que el demandado no observó dicho acto, jamás le cursó carta notarial
exigiéndole el cumplimiento oportuno del primer pago o el cumplimiento del segundo pago, ni
ejecutó la letra de cambio que servia de garantía al cumplimiento de la obligación contraída, al
contrario, se apropió del dinero del recurrente. 2.- Infracción de los artículos 1371°, 1429°,
1426° y 1428° del Código Civil, normas que regulan la resolución del contrato, resolución de
puro derecho, incumplimiento y resolución por incumplimiento de los contratos con prestaciones
recíprocas, respectivamente; sostiene el recurrente que la judicatura olvida que el contrato fue
resuelto mediante carta notarial remitida por el accionante ante el incumplimiento del vendedor
demandado de conservar debidamente la embarcación. Al haber esta parte resuelto válidamen-
te el contrato suscrito con el demandado, constituye objeto de la presente litis exigir la restitución
de la prestación dineraria (los quince mil dólares americanos) que pagó al demandado, hecho
que ha sido ignorado por la judicatura, olvidando además que dicho hecho se encuentra regu-
lado por el segundo y tercer párrafo del artículo 1372° del Código Civil. Por otro lado, los artí-
culos 1426° y 1428° del Código Civil, habiendo el recurrente resuelto el contrato son perfecta-
mente aplicables, por cuanto cumplió con la prestación. Concluye afirmando que el incumpli-
miento de la obligación de poner operativa y mantener en buen estado de conservación la
embarcación por parte del demandado es la causal que genera la resolución del contrato. III.
MATERIA JURÍDICA EN DEBATE: Es necesario señalar que la cuestión jurídica materia de de-
bate por este Supremo Tribunal consiste en determinar si la decisión dictada por la Sala Superior
ha infringido el derecho al debido proceso y deber de motivación reconocidos en los artículos
139° incisos 3° y 5° de la Constitución Política del Estado, y de no ser el caso, determinar si
opera la resolución de contrato de compraventa con reserva de propiedad del seis de marzo de
dos mil nueve. IV. FUNDAMENTOS DE ESTA SALA SUPREMA: 1.- Que, estando a la calificación
de procedencia del recurso, en el que se comprende la infracción procesal y material, debe
analizarse previamente la causal adjetiva o de error in procedendo denunciada, pues debido a su
naturaleza y a los efectos que produce, de manera que, si mereciera ser amparada por infracción
al debido proceso, entonces carecería de objeto pronunciarse respecto a la causal sustantiva por
ser incompatibles con aquellas. 2.- Que, en tal sentido, la infracción normativa procesal es san-
cionada ordinariamente con nulidad procesal, la misma que se entiende como aquél estado de
anormalidad del acto procesal, originado en la carencia de algunos de sus elementos constitutivos
o en vicios existentes sobre ellos que potencialmente los coloca en la situación de ser declarados
judicialmente inválidos. El estado de nulidad potencial no puede afectar el debido proceso ya
sea por ser subsanable el vicio, por convalidación o porque el acto cumplió con su finalidad. La
garantía al debido proceso implica también el administrar justicia de acuerdo a las normas pro-
cesales, porqué en razón a su texto, son consideradas imperativas o de estricto cumplimiento,
Civil Contratos
clara FUNDADO el recurso de casación interpuesto a fojas doscientos sesenta y nueve por el
demandante Jorge Luis Ramírez Pacheco en consecuencia, NULA la sentencia de vista emitida
por la Tercera Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima, obrante a fojas doscientos trein-
ta y dos su fecha diez de enero de dos mil trece. b) DISPUSIERON que el Ad quem emita nueva
resolución teniendo en cuenta las precisiones expresadas en la presente ejecutoria suprema. c)
DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en el diario oficial El Peruano, bajo res-
ponsabilidad; en los seguidos por Jorge Luis Ramírez Pacheco con Carlos Miguel Méndez Mills
sobre resolución de contrato; y los devolvieron. Interviene como ponente la señora Jueza Supre-
ma Estrella Cama.
SS.
Almenara Bryson / Huamaní Llamas / Estrella Cama / Rodríguez Chavez / Calderón Puertas
CONSULTA
En el 2010, la empresa Cementos Sol SA, dedicada a la producción de
cemento, compró un camión a la empresa Motores SAC por un valor de
U$540,000.00. No obstante, un mes después de la entrega del bien,
este empezó a tener fallas mecánicas. Ante dicha situación, las partes
acordaron que Motores SAC entregaría un nuevo camión a Cementos
Sol SA. De forma inesperada, este nuevo bien también empezó a fallar
inmediatamente después de su entrega, por lo que Cementos Sol SA,
haciendo uso de la garantía del bien, solicitó nuevamente el cambio del
bien, pues consideró que no era posible que un camión nuevo tenga
fallas. Esta vez Motores SAC; no accedió, aduciendo que la garantía ya
había sido aplicada en el primer cambio de bien. Cementos Sol SA, objeta
que la garantía se haya hecho efectiva, pues en la orden de compra no
se señala cuál es el contenido de esta, sino solo el plazo de vigencia y,
alegando al principio de buena fe, solicita que le entreguen un nuevo
camión. ¿Podría el juez aplicar el principio de buena fe para determinar
el contenido de una garantía?
Dentro del tráfico mercantil, es razonable Cuando un bien no cumple con la finalidad
que cualquier acreedor tenga la expectativa de la adquisición, el acreedor tiene derecho a
de recibir un bien que reúna aquellas carac- solicitar el saneamiento por vicios ocultos. En
terísticas que le son inherentes a su natu- efecto, en nuestro Código Civil, se establece
raleza y, además, que dicho bien funcione que cuando un bien carece de las cualidades
de acuerdo con los parámetros normales de prometidas por el transferente es posible
uso. Por tanto, si convencionalmente no se solicitar el saneamiento, ya sea por evicción
ha pactado en contrario, entonces se infiere o por vicios ocultos. Así también, establece
que un acreedor razonable podría tener la que si el bien es fungible, el acreedor puede
expectativa de recibir un bien y/o servicio exigir en sustitución del saneamiento la en-
que cumpla con el estándar establecido en
trega de otro de igual naturaleza.
el tráfico comercial. De otro lado, en caso el
bien presentase alguna avería o desperfecto, En el presente caso, el acreedor al advertir
el acreedor, razonablemente, debe esperar el defecto del bien no solicitó una acción
que el deudor repare el bien o lo sustituya redhibitoria, sino la entrega de un nuevo bien
con otro que guarde las mismas caracterís- en sustitución del bien averiado. Luego, ante
ticas o, en todo caso, que lo indemnice por la avería del nuevo bien, exigió nuevamente
los daños irrogados. que se le entregue un bien que no presen-
Civil Contratos
te averías y que funcione de acuerdo a la doctrina que este principio también puede
cualidad que exige el tráfico mercantil. Esta actuar como un criterio de integración. En
exigencia tiene como base una garantía con- efecto, la buena fe influye en el contenido
tenida en una orden de compra. El problema del negocio ya que no siempre la voluntad
es que dicha garantía no establece cuál es la privada es capaz de prever todas las posi-
obligación concreta del transferente, esta- bilidades que se derivan del mismo y, por
bleciendo apenas su plazo de operatividad. ello, se hace inútil acudir a una voluntad
presunta. De esta manera, los efectos que
Al respecto, consideramos que si no se ha po-
de ella se producen no dependen de esa
dido determinar con certeza los alcances de la
voluntad privada, entendida en forma
garantía, entonces el juez para determinar su
presunta, sino de un criterio objetivo que
contenido y establecer cuál era el alcance de
se deduce de las exigencias de la buena fe,
la obligación de Motores SAC, podría utilizar
al igual que, en su caso, de los usos o de la
el principio de buena fe.
norma dispositiva.
Si bien primigeniamente el principio de
buena fe solo fue considerado como una Fundamento legal:
regla de conducta, se ha establecido en la Código Civil: Artículos 1362,1503 y 1508.
RESEÑA DE JURISPRUDENCIA
Reseña de jurisprudencia
Casación N.º 262-
2012-LIMA
Resolución de contrato de donación
CASACIÓN Nº 262-2012-LIMA
Publicado en Sentencias en Casación, Año XVIII, N.º 693
(El Peruano, 30 de junio de 2014, p. 53710).
Proceso Resolución de contrato
Sumilla Resolución de contrato de donación
Decisión FUNDADO
Normas aplicables Código Civil: Artículos 1371, 1432, 1631, 1637 y 1639
Fundamentos jurídicos No se puede amparar una demanda de resolución de contrato de donación debido
relevantes a que dicho remedio jurídico no se encuentra contemplado en el Código Civil para
este tipo de contratos.
TEXTO DE LA CASACIÓN
CASACIÓN N° 262-2012-LIMA
Civil Contratos
del distrito de Santiago de Surco que tiene un área de veintisiete mil setenta y seis metros cua-
drados (27,076 m2), con costas y costos; y reformándola declara infundada la citada demanda-
FUNDAMENTOS POR LOS CUALES SE HA DECLARADO PROCEDENTE EL RECURSO: La Sala
mediante resolución de fecha dos de agosto de dos mil doce, ha estimado procedente el recurso
por la causal de infracción normativa de derecho material y procesal, al amparo del cual la recu-
rrente sustenta: a) La infracción normativa procesal, toda vez que la sentencia de vista impugna-
da no solo entra en contradicción y conflicto con la resolución superior de fecha diez de octubre
de dos mil ocho, dictada en este proceso, en tanto que en ningún momento sostiene que el
contrato de donación no puede resolverse, limitándose a revocar la sentencia apelada y declarar
infundada la misma, citando disposiciones del Código Civil y de la doctrina que nada tiene que
ver con la materia controvertida, incurriendo en vicios de incongruencia, violentándose el prin-
cipio de logicidad previsto en el artículo 50 del Código Procesal Civil en abierta contraposición a
lo resuelto por la referida resolución de vista de fecha diez de octubre de dos mil ocho que sos-
tiene que sí se puede resolver el contrato de donación y a lo resuelto por la Sala Civil Suprema
en cuanto no prohíbe que por otras razones pueda solicitarse la resolución de un contrato de
donación; b) La infracción normativa material del artículo 1371 del Código Civil, toda vez que
la impugnada para incurrir en infracción de dicha norma establece que el contrato de donación
es un acto jurídico unilateral y que no es un contrato de contraprestaciones recíprocas, aplicando
lo que se llama la falsa aplicación de la ley, pues ninguno de los artículos del Código Civil que
cita, prohíben o impiden la resolución de contrato cuando se da la causal denunciada; c) La in-
fracción del principio de informalismo previsto en el inciso 1.6 del artículo 3 del Título Preliminar
de la Ley número 27444, toda vez que la resolución impugnada pretende desconocer que todas
las entidades públicas, privadas o eclesiásticas están impregnadas de informalidad, por cuanto
desde el inicio del trámite su solicitud estaba dirigida de manera general al titular de dicha enti-
dad sin necesidad de indicar su nombre como es el caso de su carta notarial de fecha veinticuatro
de junio de dos mil cinco, además, para formalizar cualquier acto deben previamente sostener
conversaciones preliminares a fin de que finalmente el titular otorgue los poderes y mandatos
correspondientes para formalizar el desistimiento para la culminación del proceso de subdivisión
e independización señalada en la carta de fecha veinte de junio de dos mil cinco.- CONSIDE-
RANDOS: Primero.- Que, existiendo denuncias por infracción material y procesal, corresponde
verificar primero si se ha configurado o no esta última causal, pues en caso de ser estimada, se
dispondría el reenvío de la causa al estadío procesal correspondiente, impidiendo que sea factible
el análisis de las normas materiales en las que se sustenta o debió sustentarse la resolución recu-
rrida.- Segundo.- Que, a fin de absolver la causal de infracción normativa de carácter procesal,
es necesario realizar un breve resumen de lo acontecido en el presente proceso, apreciándose
que Gloria Nora Navarro Ventura y Jesús Víctor Prado Navarro interponen demanda contra el
Arzobispado de Lima, sobre Resolución de Contrato a fin de que se declare la resolución del
contrato de donación contenido en la Escritura Pública de fecha treinta de julio de mil novecien-
tos noventa y tres, inscrita en el asiento C-11 de la ficha 100731 de los Registros Públicos de Lima
y se restituya a su favor el inmueble constituido por el lote de terreno equivalente al uno punto
setenta y nueve por ciento (1.79%) de acciones y derechos del área sobre el terreno denomina-
do Potrero Carrizal, distrito de Santiago de Surco que tiene un área de veintisiete mil setenta y
seis metros cuadrados (27,076 m2), alegando que con fecha treinta de julio de mil novecientos
noventa y tres suscribieron un contrato de donación a favor de la Parroquia Santiago Apóstol de
Surco, que en dicho contrato se estipuló que el terreno donado de cuatrocientos ochenta y cuatro
punto cincuenta metros cuadrados (484.50 m2) era para la construcción de una capilla en honor
a la Santísima Cruz de Motupe; sin embargo, la demandada se ha desistido en culminar con el
proceso de independización del terreno original y revertir el terreno a los propietarios de las
acciones y derechos que resulten ser los legítimos propietarios del bien, ante esta situación se han
visto en la necesidad de acudir al órgano jurisdiccional para que decrete la resolución del contra-
to.- Tercero.- Que, admitida la demanda a trámite, por resolución de fecha veintidós de noviem-
bre de dos mil seis que obra a fojas ochenta, se declaró rebelde a la Parroquia Santiago Apóstol,
asimismo, por resolución de fecha nueve de enero de dos mil siete que obra de fojas noventa y
cinco a noventa y ocho se declararon fundadas las excepciones de oscuridad o ambigüedad en
el modo de proponer la demanda, falta de legitimidad para obrar de los demandantes y cadu-
cidad; y por resolución de vista de fecha diez de octubre de dos mil ocho que obra de fojas
doscientos veintinueve a doscientos treinta y tres se revocó la resolución de fecha nueve de
enero de dos mil siete, reformándola declararon infundadas dichas excepciones, disponiéndose
que el Juez cumpla con sanear el proceso y prosiga la causa acorde a su estado.- Cuarto.- Que,
el Juez ha declarado fundada la demanda, y declara resuelto el contrato de donación contenido
en la escritura pública que corre inscrita en el Asiento C-11 de la ficha número 100731 del regis-
tro de la Propiedad Inmueble de Lima y en consecuencia se restituya a favor de los demandantes
el inmueble constituido por el lote de terreno equivalente al uno punto setenta y nueve por
ciento (1.79%) de acciones y derechos del área sobre el terreno denominado Potrero Carrizal del
distrito de Santiago de Surco que tiene un área de veintisiete mil setenta y seis metros cuadrados
(27,076 m2), con costas y costos, considerando que de la revisión de actuados fluye la carta
INMU-AL-0077/2005 de fojas veinticinco a veintiséis; la carta INMU-AL-0078/2005 a foja vein-
tinueve y el artículo 1432, 1631 del Código Civil, en donde se advierte que el demandado no
desea continuar con lo pactado en la donación y por ende ha decidido revertir la propiedad del
bien a favor de los propietarios legítimos del bien (demandante) y por ende suscribir los docu-
mentos necesarios en los términos y condiciones que no sean perjudiciales para el demandado,
por lo tanto siendo ello así y estando a que la contraprestación por parte de la demandada re-
sulta imposible de realizar, el contrato de donación queda resuelto de pleno derecho, conforme
a lo dispuesto por el artículo 1432 del Código Civil, y por ende se debe revertir la propiedad a
favor de los demandantes, en ese sentido al haberse amparado la pretensión principal, la acce-
soria debe ser amparada por ser consecuencia de esta.- Quinto.- Que, la Quinta Sala Civil de la
Corte Superior de Justicia de Lima mediante resolución de fecha ocho de junio de dos mil diez que obra
de fojas trescientos cuarenta y dos a trescientos cuarenta y cuatro revoca la apelada, y reformándola
declara improcedente la demanda; que al interponer recurso de casación la parte demandante, la Sala
Civil Transitoria de la Corte Suprema de Justicia de la República por ejecutoria de fecha veinte de junio
de dos mil once que obra de fojas trescientos ochenta a trescientos ochenta y seis declara nula dicha
resolución y ordena que el Colegiado Superior expida nueva resolución, considerando que: “Sétimo.-
Analizado lo expuesto precedentemente, debe señalarse que la resolución de vista impugnada
no se encuentra debidamente motivada, conforme se ha denunciado, puesto que no ha tenido
en cuenta la resolución número diecinueve de fecha diez de octubre de dos mil ocho que obra
de fojas doscientos veintinueve a doscientos treinta y tres que ha sido emitida por dicha instancia,
en donde se resuelve revocar la resolución de fecha nueve de enero de dos mil siete que declaró
fundadas las excepciones de oscuridad y ambigüedad en el modo de proponer la demanda,
falta de legitimidad para obrar pasiva y caducidad, y reformándola declararon infundadas dichas
excepciones, disponiéndose que el Juez cumpla con sanear el proceso y prosiga la causa acorde
a su estado; en donde se ha señalado que: “aunque el artículo 1639 del Código Civil, instituye
que la revocación de la donación está sujeta a un término de caducidad, debe advertirse que
aquel criterio no condiciona la acción de resolución de contrato de donación solamente a la
concurrencia de cualesquiera de las causales contempladas en el artículo 1637 del Código Civil,
esto es, las referidas a indignidad y desheredación. Esa regla no es limitativa para todo pues solo
restringe la revocación a los casos en los que el donatario sea indigno de la donación que lo ha
beneficiado, pero no prohíbe que por otras razones pueda solicitarse la resolución de un contra-
to con el que se quiere rebatir; por lo que mal hace el Juez en asimilar las causales de indignidad
y desheredación de dicho artículo como únicas a usar por el donante a fin de invalidar su propia
acción de liberalidad. “Que a mayor abundamiento, podemos establecer que la revocación y su
caducidad están vinculadas a la conducta que puede derivar de una persona natural, pero no y
para el caso concreto, de una persona jurídica como la demandada; siendo lógico que aquella
no pueda incurrir en las causales de revocación a que alude el Juez en la resolución apelada
debiendo posibilitarse entonces que, a través de la resolución de contrato de donación, el do-
nante pueda dejarlo sin efecto arguyendo motivos distintos, como el incumplimiento de lo
pactado, en atención al artículo 1371 del Código Civil”; y no obstante ello, la misma instancia
superior ha determinado en la impugnada que la pretensión demandada involucra a una dona-
ción que es un acto jurídico especial, generador de obligaciones y que no puede dársele un tra-
tamiento igual al de un contrato común y corriente, siendo que el Código Civil ha establecido
formalidades determinadas, tanto para su nacimiento como para su reversión, invalidez, revoca-
ción o caducidad, las que se encuentran detalladas a partir del artículo 1621 hasta el artículo
1647 del Código Civil, no encontrándose contemplada entre estas la figura de la resolución de
contrato tal como pretenden los demandantes, evidenciándose un pronunciamiento contradic-
Civil Contratos
torio por parte del Ad quem, lo que acarrea la nulidad de la impugnada conforme lo prevé el
artículo 171 del Código Procesal Civil. Octavo.- Por lo expuesto, y al haberse declarado proce-
dente el recurso de casación por causal de infracción normativa material y procesal, corresponde
señalar que se evidencia además una indebida valoración de los medios probatorios conforme
lo prevé el artículo 197 del Código Procesal Civil, al no advertirse valoración alguna de las cartas
que obran de fojas veinticinco a veintinueve del expediente principal”.- Sexto.- Que, sin embargo,
la Quinta Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima, revoca la sentencia apelada que declara
fundada la demanda y reformándola la declara infundada, concluyendo nuevamente que se advierte
que la pretensión incoada en esta acción es una de resolución de contrato de donación contenido en la
escritura pública de fecha treinta de julio de mil novecientos noventa y tres, sustentada en el artículo
1432 del Código Civil; sin embargo, habiéndose delimitado la naturaleza jurídica de dicha escritura, se
advierte que la misma es un contrato de donación con carga, sin plazo de cumplimiento, pero no se
trata de un contrato con prestaciones recíprocas, sino que dicha donación es un contrato con prestación
unilateral, caracterizado porque al momento de su celebración, solo se crea una obligación principal a
cargo de una de las partes (donante) no obstante ello, pueden surgir eventualmente obligaciones a
cargo de la otra parte, que en modo alguno puede tener el perfil de una contraprestación, pues el acto
jurídico perdería el carácter de gratuidad que es consustancial a la donación; más aun si el donatario
con las cartas de fechas veinte de junio y uno de julio de dos mil cinco que obran a fojas veinticinco y
veintinueve no se ha desistido expresamente de no realizar la carga asumida, a través de sus represen-
tantes debidamente autorizados.- Sétimo.-Que, lo expuesto evidencia que la resolución de vista impug-
nada no se encuentra debidamente motivada, conforme se ha denunciado, puesto que no ha tenido en
cuenta la ejecutoria suprema expedida por este Supremo Tribunal que se encuentra referida a la posi-
bilidad de invocar o demandar la resolución de un contrato de donación pese a que el Código Civil en
la parte respectiva a la donación no señala nada al respecto, por tanto al no haber sido dilucidado dicho
aspecto por la Sala de mérito pese a que este Supremo Tribunal lo había ordenado analizar, debe anu-
larse la impugnada.- Octavo.- Que, por las razones anotadas, corresponde amparar el presente
recurso de casación por la causal de infracción normativa de carácter procesal, por tanto, ya no
cabe pronunciamiento alguno respecto a la denuncia de infracción normativa de carácter mate-
rial.- Por las consideraciones precedentes, y de conformidad con lo dispuesto en el inciso 1 del
artículo 396 del Código Procesal Civil, declararon: FUNDADO el recurso de casación interpuesto
por Gloria Nora Navarro Ventura y Jesús Víctor Prado Navarro, mediante escrito de fojas cuatro-
cientos veinticuatro a cuatrocientos treinta y nueve; en consecuencia NULA la resolución de vista
de fecha diez de noviembre de dos mil once que obra de fojas trescientos noventa y tres a tres-
cientos noventa y ocho; ORDENARON que el Colegiado Superior expida nuevo fallo con arreglo
a ley; DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en el Diario Oficial El Peruano, bajo
responsabilidad; en los seguidos por Gloria Nora Navarro Ventura y otro contra el Arzobispado
de Lima y otro, sobre Resolución de Contrato; y los devolvieron. Ponente Señor Miranda Molina,
Juez Supremo.-
SS.
Ticona Postigo / Rodríguez Mendoza / Del Carpio Rodríguez / Miranda Molina
cuadrados (27,076 m2), con costas y costos; y reformándola declara infundada la citada deman-
da- FUNDAMENTOS POR LOS CUALES SE HA DECLARADO PROCEDENTE EL RECURSO: Por
resolución de folios sesenta y ocho a setenta del cuadernillo de casación, de fecha dos de agosto
de dos mil doce, se ha estimado procedente el recurso de casación por infracción normativa pro-
cesal y material, al amparo del cual los recurrentes sustentan: a) La infracción normativa proce-
sal, toda vez que la sentencia de vista impugnada no solo entra en contradicción y conflicto con
la resolución superior de fecha diez de octubre de dos mil ocho, dictada en este proceso, en
tanto que en ningún momento sostiene que el contrato de donación no puede resolverse, limi-
tándose a revocar la sentencia apelada y declarar infundada la misma, citando disposiciones del
Código Civil y de la doctrina que nada tienen que ver con la materia controvertida, incurriendo
en vicios de incongruencia, violentándose el principio de logicidad previsto en el artículo 50 del
Código Procesal Civil en abierta contraposición a lo resuelto por la referida resolución de vista de
fecha diez de octubre de dos mil ocho que sostiene que sí se puede resolver el contrato de do-
nación y a lo resuelto por la Sala Civil Suprema mediante las resoluciones de fechas seis de se-
tiembre de dos mil diez (folios trescientos setenta y siete a trescientos setenta y nueve) y veinte
de junio de dos mil once (folios trescientos ochenta a trescientos ochenta y seis) que constituyen
precedente judicial; en cuanto no prohíbe que por otras razones pueda solicitarse la resolución
de un contrato de donación; además de no haber fundamentado los motivos por los cuales re-
suelve apartarse de la referida resolución de vista de fecha diez de octubre de dos mil ocho; b)
La infracción normativa material del artículo 1371 del Código Civil, toda vez que la impug-
nada para incurrir en infracción de dicha norma establece que el Contrato de Donación es un
acto jurídico unilateral y que no es un contrato de contraprestaciones recíprocas, aplicando lo
que se llama la falsa aplicación de la ley, pues ninguno de los artículos del Código Civil que cita,
prohíben o impiden la resolución de contrato cuando se da la causal denunciada; c) La infracción
del principio de informalismo previsto en el inciso 1.6 del artículo III del Título preliminar
de la Ley número 27444, toda vez que la resolución impugnada pretende desconocer que
todas las entidades públicas, privadas o eclesiásticas están impregnadas de informalidad, por
cuanto desde el inicio del trámite su solicitud estaba dirigida de manera general al titular de dicha
entidad sin necesidad de indicar su nombre como es el caso de su Carta Notarial de fecha vein-
ticuatro de junio de dos mil cinco; además, para formalizar cualquier acto deben previamente
sostener conversaciones preliminares a fin de que finalmente el titular otorgue los poderes y
mandatos correspondientes para formalizar el desistimiento para la culminación del proceso de
subdivisión e independización señalada en la carta de fecha veinte de junio de dos mil cinco.-
CONSIDERANDOS: Primero.- El recurso de casación tiene como fines esenciales la correcta
aplicación e interpretación del derecho objetivo y la unificación de la jurisprudencia nacional de
la Corte Suprema de Justicia, conforme se señala en el artículo 384 del Código Procesal Civil.-
Segundo.- Respecto a la causal denunciada por infracción normativa, según Monroy Cabra, “Se
entiende por causal (de casación) el motivo que establece la ley para la procedencia del recurso...”1. A
decir de De Pina.- “El recurso de casación ha de fundarse en motivos previamente señalados en la ley.
Puede interponerse por infracción de ley o por quebrantamiento de forma. Los motivos de casación por
infracción de ley se refieren a la violación en el fallo de leyes que debieran aplicarse al caso, a la falta de
congruencia de la resolución judicial con las pretensiones deducidas por las partes, a la falta de compe-
tencia etc.; los motivos de la casación por quebrantamiento de forma afectan (... ) a infracciones en el
procedimiento2. En ese sentido Escobar Forno señala. “Es cierto que todas las causales supone una
violación de ley, pero esta violación puede darse en la forma o en el fondo”3, en el caso de autos se
ha denunciado infracción normativa procesal y material.- Tercero.- Se ha declarado procedente
el recurso de casación por las causales de infracción normativa procesal y material. Teniendo en
cuenta ello, es de advertirse que conforme lo dispone el artículo 396 del Código Procesal Civil,
cuando se declara fundado el recurso de casación por vulneraciones a las normas que garantizan
el debido proceso o las infracciones de las formas esenciales para la eficacia y validez de los actos
1 Monroy Cabra, Marco Gerardo, Principios de derecho procesal civil, 2.a ed., Editorial Temis Librería, Bogotá,
1979, p. 359.
2 De Pina, Rafael, Principios de derecho procesal civil, Ediciones Jurídicas Hispano Americanas, México D.F., 1940,
p. 222.
3 Escobar Fornos Iván, Introducción al proceso, Editorial Temis, Bogotá, 1990, p. 241.
Civil Contratos
procesales en todos los supuestos se debe devolver el proceso a la instancia inferior para que
emita un nuevo fallo, mientras que si se declara fundado el recurso por las otras causales con-
templadas en el artículo 386 del Código Procesal Civil, la Sala Suprema actuando en sede de
instancia deberá resolver el conflicto según su naturaleza. Es por ello que la revisión de las cau-
sales por las que ha sido declarado procedente el recurso de casación debe comenzar por el
análisis de la alegación de vulneración a las normas que garantizan el derecho a un debido
proceso.- Cuarto.- En esa medida, respecto a los errores in procedendo, Gloria Nora Navarro
Ventura y Jesús Víctor Prado Navarro alegan que la sentencia de vista incurre en contradicción
con la resolución de fecha diez de octubre de dos mil ocho incurriendo en vicios de incongruen-
cia infringiendo el artículo 50 del Código Procesal Civil, dado que entra en contradicción con la
resolución de diez de noviembre de dos mil once en la que sostiene que el contrato de donación
sí puede resolverse, citando doctrina que nada tiene que ver con la materia controvertida y ci-
tando el Código Civil, se pronuncia declarando infundada la demanda; hechos que incidirían en
una presunta contravención de las normas que garantizan el debido proceso.- Quinto.- A fin de
establecer si en el caso de autos, se ha incurrido en la infracción normativa del dispositivo antes
acotado, resulta conveniente hacer una síntesis de lo ocurrido en el presente proceso; aprecián-
dose que Gloria Nora Navarro Ventura y Jesús Víctor Prado Navarro interponen demanda de
folios treinta y ocho a cuarenta y dos, subsanado de folios cincuenta a cincuenta y dos contra el
Arzobispado de Lima, sobre Resolución de Contrato a fin de que se declare la resolución del
Contrato de Donación contenido en la Escritura Pública de fecha treinta de julio de mil novecien-
tos noventa y tres, inscrita en el asiento C-11 de la Ficha número 100731 de los Registros Públi-
cos de Lima y se restituya a su favor el inmueble constituido por el lote de terreno equivalente
al uno punto setenta y nueve por ciento (1.79%) de Acciones y Derechos del área sobre el terre-
no denominado Potrero Carrizal, distrito de Surco que tiene un área de veintisiete mil setenta y
seis metros cuadrados (27,076 m2), alegando que con fecha treinta de junio de mil novecientos
noventa y tres, suscribieron un Contrato de Donación a favor de la Parroquia Santiago Apóstol
de Surco, que en dicho contrato se estipuló que el terreno donado, cuatrocientos ochenta y
cuatro punto cincuenta metros cuadrados (484.50 m2) era para la construcción de una capilla en
honor a la Santísima Cruz de Motupe; sin embargo, la demandada se ha desistido en culminar
con el proceso de independización del terreno original y revertir el terreno a los propietarios de
las acciones y derechos que resulten ser los legítimos propietarios del bien, ante esta situación se
han visto en la necesidad de acudir al órgano jurisdiccional para que decrete la resolución del
contrato.- Sexto.- Admitida la demanda a trámite, por Resolución número siete de fecha veinti-
dós de noviembre de dos mil seis a folio ochenta se declaró rebelde a la Parroquia Santiago
Apóstol, asimismo, por Resolución número nueve de fecha nueve de enero de dos mil siete de
folios noventa y seis a noventa y siete se declararon fundadas las excepciones de oscuridad o
ambigüedad en el modo de proponer la demanda, de caducidad y de falta de legitimidad para
obrar- de los demandantes; y por Resolución de Vista número diecinueve de fecha diez de octu-
bre de dos mil ocho de folios doscientos veintinueve a doscientos treinta y tres se revocó la reso-
lución de fecha nueve de enero de dos mil siete, reformándola declararon infundadas dichas
excepciones, disponiéndose que el Juez cumpla con sanear el proceso y prosiga la causa acorde
a su estado.- Sétimo.- El Juez del Cuarto Juzgado Especializado en lo Civil de la Corte Superior
de Justicia de Lima, mediante Resolución número veintidós, de fecha treinta de octubre de dos
mil nueve, ha declarado Fundada la demanda de Resolución de Contrato, y declara resuelto el
Contrato de Donación contenido en la Escritura Pública inscrita en el Asiento C-11 de la Ficha
número 100731 del Registro de la Propiedad Inmueble de Lima y en consecuencia se restituya
a favor de los demandantes el inmueble constituido por el lote de terreno equivalente al uno
punto setenta y nueve por ciento (1.79%) de acciones y derechos del área sobre el terreno de-
nominado Potrero Carrizal del Distrito de Santiago de Surco que tiene un área de veintisiete mil
setenta y seis metros cuadrados (27,076 m2), con costas y costos, considerando que de la revisión
de actuados fluye la carta INMU-AL-0077/2005 de folios veinticinco a veintiséis; la carta INMU-
AL-0078/2005 a folio veintinueve y los artículos 1432, 1631 del Código Civil, en donde se ad-
vierte que el demandado no desea continuar con lo pactado en la donación y por ende ha deci-
dido revertir la propiedad del bien a favor de los propietarios legítimos del bien (demandante)
y por ende suscribir los documentos necesarios en los términos y condiciones que no sean per-
judiciales para el demandado, por lo tanto siendo ello así y estando a que la contraprestación
por parte de la demandada resulta imposible de realizar, el Contrato de Donación queda resuel-
to de pleno derecho, conforme a lo dispuesto por el artículo 1432 del Código Civil, y por ende
se debe revertir la propiedad a favor de los demandantes, en ese sentido al haberse amparado
la pretensión principal, la accesoria debe ser amparada por ser consecuencia de ésta.- Octavo.- La
Quinta Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima mediante Resolución número cinco, de
fecha ocho de junio de dos mil diez de folios trescientos cuarenta y dos a trescientos cuarenta y
cuatro, revoca la apelada, y reformándola declara improcedente la demanda; que al interponer
Recurso de Casación la parte demandante, la Sala Civil Transitoria de la Corte Suprema de Justicia
de la República por ejecutoria de fecha veinte de junio de dos mil once de folios trescientos
ochenta a trescientos ochenta y seis declara nula dicha resolución de vista y ordena que el Cole-
giado Superior expida nueva resolución con arreglo a ley.- Noveno.- La Quinta Sala Civil de la
Corte Superior de Justicia de Lima, mediante Resolución número nueve, de fecha diez de noviem-
bre de dos mil once de folios trescientos noventa y tres a trescientos noventa y ocho emite nueva
sentencia de vista, mediante la cual revoca la apelada, y reformándola declara infundada la de-
manda, al considerar que: i) La Escritura Pública de Donación sub litis de fecha treinta de julio
de mil novecientos noventa y tres no es, ni contiene, un contrato de prestaciones recíprocas, sino
que es un acto jurídico unilateral, que importa un acto de liberalidad, de espontánea voluntad
del donante y que su participación se agota en esa única intervención, en razón de que no exis-
te prestación mutua y/o bilateral a cargo del donatario que deba cumplir como consecuencia de
la aceptación de la donación; ii) Se trata por consiguiente de un contrato con prestación unilate-
ral a cargo del donante que se agotó y cumplió con el acto de la firma de la Escritura Pública y
no existe prestación a cargo del donatario, por tanto no se puede afirmar que la prestación a
cargo del donatario resulta imposible por su culpa, debido a que no tiene que realizar prestación
principal alguna para que se perfeccione ni ejecute la donación. En ese sentido no resulta apli-
cable al caso de autos el artículo 1432 del Código Civil por no tratarse de un contrato con pres-
taciones recíprocas; iii) El Arzobispado de Lima es un tercero ajeno a la relación jurídica material
que origina la Escritura Pública de Donación, materia de resolución contractual, su participación
es únicamente para autorizar la intervención del Reverendo Padre Jaime Juan Viso Toledo, en
calidad de representante de la Parroquia Santiago Apóstol, aceptando la donación del referido
terreno a favor de dicha Parroquia; iv) El hecho que exista una carga, que no tiene plazo de
ejecución, no significa que se trate de una prestación principal a cargo del deudor, toda vez que
a diferencia del contrato con prestaciones recíprocas, el contrato con prestación de una sola
parte pone a aquel que debe la prestación, en la posición exclusiva de deudor, por tanto el peso
del contrato está todo de un lado, mientras que del otro lado está toda la ventaja; v) En el con-
trato de donación no existe prestación a cargo del donatario que deba culminar con el proceso
de División e Independización de terreno para que la donación sea eficaz; vi) En cuanto a las
Cartas signadas de fechas veinte de junio y uno de julio de dos mil cinco de folios veinticinco a
veintiséis y veintinueve respectivamente, se advierte que: a) Ambas han sido dirigidas a la acto-
ra y copropietaria Gloria Nora Navarro Ventura por el Jefe de la Oficina de Inmuebles, comuni-
cando el Arzobispado de Lima, que luego de analizados los diversos criterios de sostenibilidad
en el tiempo de un proyecto que cumpliera con la carga impuesta en la donación, advierte que
no podrá ejecutar el mandato impuesto en la misma, razón por lo cual, ha decidido desistir de
culminar el proceso de división e independización del terreno original, revertir el dominio de los
derechos y acciones donados sobre el terreno mencionado y cederlos a las personas que resulten
ser los legítimos propietarios, autorizándose para tal efecto al Director de la Sindicatura Eclesiás-
tica a fin de que suscriba la Minuta y Escritura Pública de Reversión y Cesión de Derechos y Ac-
ciones que correspondan al inmueble denominado Fundo Potrero Carrizal; y, b) Sin embargo
dichas misivas carecen de validez y eficacia legal oponible al Arzobispado de Lima, en razón de
que no se ha acreditado, con medio probatorio idóneo alguno, que dichos funcionarios eclesiás-
ticos (tanto el Jefe de la Oficina de Inmuebles como el Director de la Sindicatura Eclesiástica)
estén autorizados mediante Decreto Arzobispal o a través de cualquier dispositivo legal, en forma
expresa, para actuar en representación del Arzobispado de Lima y así disponer del bien sub litis,
esto es, dejar sin efecto la donación y ceder los derechos y acciones del inmueble a las personas
que resulten ser sus legítimos propietarios; y vii) Por último, se aprecia que la pretensión incoada
en esta acción es una de resolución de Contrato de Donación contenido en la Escritura Pública
de fecha treinta de julio de mil novecientos noventa y tres sustentada en el artículo 1432 del
Código Civil; sin embargo, habiéndose delimitado la naturaleza jurídica de dicha escritura, se
Civil Contratos
advierte que la misma es un Contrato de Donación con carga, sin plazo de cumplimiento, pero
no se trata de un contrato con prestaciones recíprocas, sino que dicha donación es un contrato
con prestación unilateral, caracterizado porque al momento de su celebración, solo se crea una
obligación principal a cargo de una de las partes (donante), no obstante ello, pueden surgir
eventualmente obligaciones a cargo de la otra parte, que en modo alguno puede tener el perfil
de una contraprestación, pues el acto jurídico perdería el carácter de gratuidad que es consus-
tancial a la donación. Más aun si el donatario con las cartas citadas no se ha desistido expresa-
mente de no realizar la carga asumida, a través de sus representantes debidamente autorizados.-
Décimo.- Estando a las alegaciones de los recurrentes, es necesario destacar que, el debido
proceso es un derecho complejo, pues está conformado por un conjunto de derechos esenciales
que impiden que la libertad y los derechos de los individuos sucumban ante la ausencia o insu-
ficiencia de un proceso o procedimiento, o se vean afectados por cualquier sujeto de derecho
-incluyendo el Estado- que pretenda hacer uso abusivo de estos. Como señala la doctrina proce-
sal y constitucional, “por su naturaleza misma, se trata de un derecho muy complejamente estructu-
rado, que a la vez está conformado por un numeroso grupo de pequeños derechos que constituyen sus
componentes o elementos integradores, y que se refieren a las estructuras, características del tribunal o
instancias de decisión, al procedimiento que debe seguirse y a sus principios orientadores, y a las garan-
tías con que debe contar la defensa” (Faúndez Ledesma, Héctor. “El Derecho a un Juicio Justo”. En:
Las garantías del debido proceso (Materiales de Enseñanza). Lima: Instituto de Estudios Internacio-
nales de la Pontificia Universidad Católica del Perú y Embajada Real de los Países Bajos, página
diecisiete). Dicho de otro modo, el derecho al debido proceso constituye un conjunto de garantías
de las cuales goza el justiciable, que incluyen, la tutela procesal efectiva, la observancia de los
principios o reglas básicas y de la competencia predeterminada por Ley, así como la pluralidad
de instancia, la motivación, la logicidad y razonabilidad de las resoluciones, el respeto a los de-
rechos procesales de las partes (derecho de acción, de contradicción) entre otros.- Décimo Pri-
mero.- El principio denominado motivación de los fallos judiciales, constituye un valor jurídico
que rebasa el interés de los justiciables por cuanto se fundamenta en principios de orden jurídi-
co, pues la declaración del derecho en un caso concreto, es una facultad del Juzgador que por
imperio del artículo 138 de la Constitución Política del Estado, impone una exigencia social de
que la comunidad sienta como un valor jurídico, denominado, fundamentación o motivación de
la sentencia; el mismo que se encuentra consagrado en el inciso 5 del artículo 139 de la Consti-
tución Política del Estado concordante con el artículo 12 del Texto Único Ordenado de la Ley
Orgánica del Poder Judicial e incisos 3 y 4 del artículo 122 e inciso 6 del artículo 50 del Código
Procesal Civil.- Décimo Segundo.- Se debe precisar que “la motivación de una decisión no solo
consiste en expresar la norma legal en la que se ampara, sino fundamentalmente en exponer suficien-
temente las razones de hecho y el sustento jurídico que justifican la decisión tomada”4. En esa medida,
la debida motivación debe estar presente en toda resolución que se emita en un proceso, lo que
implica que cualquier decisión cuente con un razonamiento que no sea aparente o defectuoso,
sino que exponga de manera clara, lógica y jurídica los fundamentos de hecho y de derecho que
la justifican, de manera tal que los destinatarios, a partir de conocer las razones por las cuales se
decidió en un sentido o en otro, estén en la aptitud de realizar los actos necesarios para la defen-
sa de su derecho.- Décimo Tercero.- De otro lado, el “principio de congruencia procesal” se en-
cuentra íntimamente relacionado con el principio de motivación de las resoluciones judiciales y
se encuentra regulado por los artículos VII del Título Preliminar, inciso 6 del artículo 50 e inciso
4 del artículo 112 del Código Procesal Civil, alude a que en toda resolución judicial debe existir:
1) Coherencia entre lo solicitado por las partes y lo finalmente resuelto, sin omitirse, alterarse o
excederse dichas peticiones (congruencia externa); y, 2) Armonía entre la motivación y la parte
resolutiva (congruencia interna); en suma, la congruencia en sede procesal, es el “(... ) principio
normativo que delimita el contenido de las resoluciones Judiciales que deben proferirse de acuerdo con
el sentido y alcance de las peticiones formuladas por las partes (... ) para que exista Identidad Jurídica
entre lo resuelto y las pretensiones (...)”5; de donde los Jueces tienen el deber de motivar sus reso-
luciones, como garantía de un debido proceso; no están obligados a darle la razón a la parte
pretendiente, pero sí a indicarle las razones de su sin razón y a respetar todos los puntos de la
controversia fijados por las partes, respetando así el principio de congruencia.- Décimo Cuarto.-
En consonancia con lo expuesto, se aprecia que la sentencia venida no ha infringido el marco
jurídico aquí delimitado, por cuanto, la recurrida - tomando en cuenta la naturaleza del proceso
sobre resolución de un contrato de donación - contiene una motivación coherente, precisa y susten-
tada en base a los hechos invocados, absolviendo las posiciones y contraposiciones asumidas por
las partes del proceso durante el desarrollo del proceso, valorando en forma conjunta los medios
probatorios, utilizando su apreciación razonada, en observancia a la garantía constitucional con-
tenida en los incisos 3 y 5 del artículo 139 de la Constitución Política del Estado; llegando a la
conclusión que el contrato de donación no puede ser declarado resuelto por ser un acto jurídico
unilateral, en el cual no existe prestación a cargo del donatario que deba culminar con el proce-
so de división e independización de terreno para que la donación sea eficaz, y respecto del cual
no se pueden considerar como actos de disposición las comunicaciones cursadas por personas
que no contaban con las autorizaciones y disposiciones legales para ello. Adicionalmente corres-
ponde precisar que, si bien la Sala de Mérito mediante resolución de vista de folios doscientos
veintinueve a doscientos treinta y tres revocó el auto apelado y reformándolo declaró infundada
la excepción de caducidad; es de tener en cuenta que el Colegiado Superior que lo suscribe está
integrado por los Magistrados Soller Rodríguez, Salazar Ventura y Ruiz Torres, mientras que la
Sentencia de Mérito es suscrita por los Señores Magistrados Echevarría Gaviria, Céspedes Cabala
y Romero Roca, por lo que contrariamente a lo alegado por los recurrentes, dichos Magistrados
no tienen obligación de fundamentar el apartamiento de fundamentos al no haberlos emitidos,
y por otro lado ni el referido auto de vista ni las sentencias de la Corte Suprema que se citan
están acorde a lo establecido en el artículo 400 del Código Procesal Civil6; por lo que no se ha
violentado el Principio de Logicidad en los términos invocados por los casantes; por lo que la
infracción procesal denunciada debe ser desestimada.- Décimo Quinto.- Habiéndose desestima-
do la infracción normativa procesal, corresponde analizar la causal de infracción normativa sus-
tantiva del artículo 1371 del Código Civil y la Ley número 27444; así tenemos que respecto a la
infracción del artículo 1371 del Código Civil, los recurrentes alegan que la Sala de Mérito, ha
concluido que el Contrato de Donación es un acto jurídico unilateral y que no es un contrato de
prestaciones recíprocas, pese a que no existe norma en el Código Civil que prohíba o impida la
resolución de un Contrato de Donación.- Décimo Sexto.- Al respecto se debe destacar previa-
mente que, la Resolución del Contrato es el remedio que el ordenamiento jurídico otorga para
oponerse a la continuidad del vínculo contractual por eventos sobrevinientes que alteran el nexo
de reciprocidad entre las prestaciones generadas de un contrato con prestaciones recíprocas. El
contrato es válido y eficaz, pero en un momento sobreviniente se presenta una disfunción que
autoriza o legitima la extinción del contrato, lo que importa su ineficacia retroactiva entre las
partes, en ese sentido, la resolución por incumplimiento, es la extinción de un vínculo contractual
válido como consecuencia de la inejecución culpable a una de las partes, de la prestación que
contiene la obligación creada a su cargo por el contrato, siendo hechos jurídicos que autorizan
ejercer el derecho a la resolución del contrato el incumplimiento total, el cumplimiento tardío,
el cumplimiento defectuoso y el cumplimiento parcial.- Décimo Sétimo.- Estando a la pretensión
materia de autos, corresponde precisar que conforme a la definición establecida en el artículo
1621 del Código Civil, la donación es aquella por la cual el donante se obliga a transferir gratui-
tamente al donatario la propiedad de un bien; a decir de Albaladejo, es una “(...) liberalidad
contractual (...)”7; la definición realizada por el Código Civil, hace notar la existencia de tres
elementos: el empobrecimiento del donante, el enriquecimiento del donatario y la intención de
hacer la liberalidad también llamado animus donandi; así tenemos que el empobrecimiento está
referido a la disposición patrimonial que realiza el donante, que a su vez supone el enriqueci-
6 “Artículo 400.- Precedente judicial: La Sala Suprema Civil puede convocar al pleno de los magistrados supre-
mos civiles a efectos de emitir sentencia que constituya o varíe un precedente judicial. La decisión que se tome
en mayoría absoluta de los asistentes al pleno casatorio constituye precedente judicial y vincula a los órganos
jurisdiccionales de la República, hasta que sea modificada por otro precedente. Los abogados podrán informar
oralmente en la vista de la causa, ante el pleno casatorio. El texto íntegro de todas las sentencias casatorias y las
resoluciones que declaran improcedente el recurso se publican obligatoriamente en el Diario Oficial, aunque no
establezcan precedente. La publicación se hace dentro de los sesenta días de expedidas, bajo responsabilidad”.
7 ALBALADEJO, Manuel. Derecho Civil II Derecho de Obligaciones, Volumen Segundo, p. 106.
Civil Contratos
miento del donatario pues incorpora el bien donado a su patrimonio sin entregar nada a cambio;
bien que puede ser mueble o inmueble; y por otro lado el animus donandi es aquella intención
objetiva y subjetiva de enriquecer al donatario, objetiva al no existir un deber jurídico de trans-
misión y subjetiva la intención misma del donante al margen de las motivaciones del donante,
que pueden ser altruistas, de notoriedad, publicidad, vanidad, etcétera. Por otro lado, la donación
es de naturaleza contractual, de allí su ubicación en el Libro VII - Fuentes de las obligaciones. Son
características jurídicas de la donación, la de ser un contrato autónomo, a título gratuito, contie-
ne una sola prestación pues el único que se obliga a entregar el bien es el donante; y es formal
por cuanto en caso de inmuebles debe hacerse por Escritura Pública, en caso de bienes muebles
de mediano valor debe hacerse por escrito y excepcionalmente puede ser verbal en caso de
bienes muebles cuyo valor no exceda el veinticinco por ciento (25%) de la Unidad Impositiva
Tributaria vigente al momento de contratar. La Donación, según sus efectos, puede ser pura,
condicional y con cargo; será pura cuando se hace sin condición ni cargo para el donatario, con-
dicional cuando esté sujeta a una condición suspensiva y con cargo cuando el donatario está
obligado a determinado “cargo”.- Décimo Octavo.- Como se ha precisado la donación es un acto
unilateral, dado que en atención a los elementos que la conforman, y a su naturaleza de gratuidad,
la única obligación está dada para el donante de entregar el bien donado, y si bien la donación
puede contener algún cargo o condición para el donatario, ello no puede ser considerado como
una contraprestación pues ello sería interpretar dicho acto jurídico de manera contraria a su na-
turaleza gratuita, dado que la contraprestación implica onerosidad. Justamente de manera cohe-
rente a dicha naturaleza es que nuestra legislación únicamente contempla la revocación de la
donación para dejarla sin efecto, pues le da la facultad al donante a que sin la intervención del
donatario, revoque el acto que él mismo motivó de manera unilateral. Los actos unilaterales no
se resuelven sino se revocan.- Décimo Noveno.- Como corolario de lo anteriormente menciona-
do se concluye que la Instancia de Mérito acertadamente ha inaplicado correctamente el artículo
1371 del Código Civil, que regula la resolución contractual, por cuanto encontrándonos ante un
acto unilateral la única manera de dejarlo sin efecto es a través de la revocación, dado que no
existe nexo de reciprocidad entre las prestaciones generadas de un contrato con prestaciones
recíprocas; por lo que la infracción normativa material in comento debe ser desestimada.- Vigé-
simo.- Por otro lado Gloria Nora Navarro Ventura y Jesús Víctor Prado Navarro denuncian la in-
fracción del inciso 1.6 del artículo III del Título Preliminar de la Ley número 27444 alegando que
la sentencia de vista ha desconocido que las Entidades Públicas, Privadas o Eclesiásticas están
impregnadas de informalidad; corresponde precisar previamente que las alegaciones de los recu-
rrentes están referidas al numeral 1.6 del artículo IV de la mencionada Ley. Al respecto corres-
ponde precisar que dicha norma no es de aplicación en el caso de autos, por cuanto está referida
a la interpretación favorable a la admisión y decisión final de las pretensiones de los administra-
dos, a fin que sus intereses no sean afectados por la exigencia de aspectos formales; y en el caso
de autos la Instancia de Mérito ha concluido que las cartas de folios veinticinco a veintiséis y
veintinueve respectivamente, mediante las cuales el Arzobispado de Lima presuntamente deja sin
efecto la donación y cede los derechos a los que resulten propietarios, carecen de validez y efica-
cia legal al contener actos de disposición sin las formalidades de ley; es decir el razonamiento
invocado por la Sala no responde a la admisión o decisión de la pretensión de un administrado
sino a un presunto acto de disposición patrimonial por parte de la emplazada; por lo que el re-
curso debe ser declarado infundado en todos sus extremos.- Vigésimo Primero.- A mayor
abundamiento se debe precisar que el Contrato de Donación cuestionado cumple con las forma-
lidades establecidas en el artículo 1625 del Código Civil, y si bien contiene un “cargo” pues la
donación es para la construcción de una Capilla en honor a la Santísima Cruz de Motupe, dicho
cargo no está sujeto a plazo y las cartas notariales de folios veinticinco a veintiséis y veintinueve
respectivamente, por las cuales, a criterio de los actores, la emplazada revirtió la propiedad a su
favor, es de precisar que los actos de disposición de bienes de una persona jurídica como lo es el
Arzobispado de Lima, deben ser realizados con las formalidades previstas en la Ley, lo que no
concurre en el caso de autos, de todo lo cual se colige que el Contrato de Donación en cuestión
es plenamente válido y debe surtir todos sus efectos.- Por las consideraciones expuestas no se
configura la causal de infracción normativa denunciada, por lo que en aplicación del artículo 397
del Código Procesal Civil; NUESTRO VOTO es porque se declare INFUNDADO el recurso de
casación interpuesto por Gloria Nora Navarro Ventura y Jesús Víctor Prado Navarro; en conse-
cuencia NO SE CASE la sentencia de vista de fecha diez de noviembre de dos mil once, de folios
trescientos noventa y tres a trescientos noventa y ocho, expedida por la Quinta Sala Civil de la
Corte Superior de Justicia de Lima; SE DISPONGA la publicación de la presente resolución en el
Diario Oficial El Peruano, bajo responsabilidad; en los seguidos por Gloria Nora Navarro Ventura
y otro contra el Arzobispado de Lima y otro, sobre Resolución de Contrato; y se devuelvan.-
SS.
Valcárcel Saldaña / Cabello Matamala / Cunya Celi
responsabilidad civil
Actualidad
Área
Civil Responsabilidad
Responsabilidad Civil Civil
Contenido
DOCTRINA ANÍBAL TORRES VÁSQUEZ: Convenios de exclusión de la responsabilidad civil 218
HENRRY ALEXANDER PAREDES SÁNCHEZ: Pluralidad de intermediarios en la
COMENTARIO DE
JURISPRUDENCIA
responsabilidad civil del principal por actos del dependiente (Comentario a la Cas. 228
Nº 384-2013-Cajamarca)
NOS PREGUNTAN Y
CONTESTAMOS
CONSULTA: Responsabilidad por eñ daño causado por un animal 244
RESEÑA DE Reparación del daño: Fundamento de la unificación de la responsabilidad
JURISPRUDENCIA
246
civil (Casación N° 1544-2013-Pasco)
DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina práctica
Convenios de exclusión de la
responsabilidad civil
Aníbal Torres Vásquez*
Profesor de la Facultad de Derecho y Ciencia Política de la
Universidad Nacional Mayor de San Marcos
1. Introducción
SUMARIO
COMENTARIO DE JURISPRUDENCIA
Comentario de jurisprudencia
1. Antecedentes
SUMARIO
2. Análisis de la casación
3. Conclusión
TEXTO DE LA CASACIÓN
CASación Nº 384-2013-CAJAMARCA
Del mismo modo, la demandante Juana Martínez Oliva interpuso recurso de casación mediante
escrito de fojas tres mil ciento sesenta y seis.
II. ANTECEDENTES
1. Demanda: Por escrito de fojas doscientos veintidós Juan Herrera Asencio, Fausto García Ro-
dríguez, Pacífico Leiva Guarniz, Inés Saavedra Carbajal (estos dos últimos en nombre propio y en
representación de los menores José Alindor Leiva Saavedra, Yovana Estefani Leiva Saavedra, Ely
Merly Leiva Alvarado y César Ronal Leiva Alvarado), María Claudelina Leiva Saavedra (en nom-
bre propio y en representación del menor Jamil Frey Alvitres Leiva), Juana Martínez Oliva, Keli
Normita Leiva Miranda, Silveria Mendoza Alvarado, Vidal Herrera Asencio (estos dos últimos en
nombre propio y en representación de los menores Lucy Isamar Herrera Mendoza y Yeni Jacque-
line Herrera Mendoza) y Luis Alberto Martínez Mendoza interponen demanda de indemnización
por daños y perjuicios derivados de responsabilidad civil extracontractual (daño material, bioam-
biental y a la salud personal; daño moral y daño psicosocial) contra Minera Yanacocha S.R.L.,
solicitando el monto total de US$ 4’700,000.00 (cuatro millones setecientos mil con 00/100
Dólares Americanos), en las proporciones allí señaladas; asimismo como pretensiones accesorias
solicitan se les contrate y pague un seguro médico y un seguro de vida por la suma de US$
100,000.00 (cien mil con 00/100 Dólares Americanos) para cada uno de los recurrentes, por el
lapso de treinta años, se cumpla con descontaminar sus viviendas de los materiales químicos cuya
presencia ha generado los daños reclamados; más intereses legales; y las costas y costos. Los
demandantes manifiestan que con fecha dos de junio de dos mil, un camión de la empresa
Ransa S.A. procedente del campamento de la demandada, con destino a la ciudad de Lima que
transportaba mercurio derramó ciento cincuenta y dos kilogramos (152 kg) de dicha sustancia
en las localidades de Chotén, San Juan, La Calera, El Tingo, San Sebastián de Choropampa y
Magdalena; refieren que al ver la sustancia plateada los moradores de estos lugares que se ha-
llaban por las inmediaciones comenzaron a manipular y recoger dicha sustancia, sin que tuvieran
conocimiento del peligro al cual estaban expuestos, siendo que al día siguiente se presentó la
primera víctima de intoxicación aguda por exposición al mercurio, ante lo cual se puso esta si-
tuación en conocimiento de los funcionarios de la demandada, quienes hacia el mediodía arri-
baron conjuntamente con autoridades de entidades públicas, habiéndoseles señalado que el
mercurio derramado no era contaminante. Señalan que el día nueve de junio de dicho año el
representante de la minera demandada ofreció S/. 100.00 (cien con 00/100 Nuevos Soles) por
kilogramo de mercurio recuperado; que el día trece recién la demandada y las entidades públicas
tomaron cartas en el asunto y empezaron a realizar acciones de monitoreo, limpieza y proporción
de medicamentos a la población afectada que a tal fecha ya superaba las setecientas personas,
las que eran atendidas en el centro de salud de Choropampa (principal lugar del derrame y de
la contaminación) y en el Hospital Regional de Cajamarca; que todos los pobladores del lugar se
han encontrado en medio de un ambiente contaminado con niveles de mercurio que excedían
en muchas décimas los mínimos que se encuentran previstos por los organismos nacionales e
internacionales; que más de doscientos cincuenta casos se han tratado con el medicamento que-
lantes, el cual la sociedad médica de Estados Unidos ha dispuesto se saque del mercado por su
alto grado de complicaciones y sus riesgos en la aplicación a pacientes sometidos a intoxicaciones
agudas, sin que la demandada haya obedecido; que los exámenes realizados a la población
afectada en la totalidad de los casos tratados revelan que existió una intoxicación por mercurio
que se ha convertido en crónica; que se ha acreditado que el mercurio transportado no había
estado previsto que se lleve el día del accidente por lo que estuvo mal acomodado; además que
los balones de mercurio, algunos de ellos vetustos, no se encontraban sobre las estructuras espe-
ciales que dicha carga requería; que los recurrentes se encuentran en demasía intoxicados por
mercurio producto de su aspiración y manipulación; que las víctimas han sufrido un daño grave
e irreversible quedando expuestos a enfermedades degenerativas. 2. Contestación de la de-
manda: Mediante escrito de fojas novecientos veintiocho la empresa demandada Minera Yana-
cocha S.R.L. contesta la demanda, señalando que ella deviene en improcedente por existir una
indebida acumulación de pretensiones y porque la pretensión indemnizatoria sólo puede ser
pretendida en moneda nacional; que no tienen responsabilidad objetiva en los hechos reclama-
dos, en la medida que las actividades que realiza relativas a la producción y comercialización del
mercurio no generan ningún tipo de riesgo o peligro para los demandantes, pues la única activi-
dad riesgosa o peligrosa es el traslado o transporte de mercurio, la cual no ha sido realizada por
la recurrente, sino por la denunciada civilmente; que los pobladores han incurrido en grave im-
prudencia al negarse a devolver el mercurio que recogieron, pues el ocultamiento negligente de
dicha sustancia al interior de las viviendas fue la causa determinante de la exposición y elevación
de los niveles de mercurio en sus organismos que habrían tenido algunos de los pobladores; que
la demandada hizo trabajos de monitoreo, recolección y limpieza de mercurio en los lugares
donde se detectó la presencia de dicho elemento; que los demandantes no han demostrado la
existencia de un daño cierto y menos su cuantía; que según el estudio realizado por CICOTOX se
consideran valores normales de mercurio en el organismo humano cuando éstos no superan los
20 ug/L en la orina o 10 ug/L en la sangre; que los niveles de mercurio que los demandantes
presentaron inicialmente fueron rápidamente controlados mediante su reubicación y un adecua-
do tratamiento médico, habiendo recuperado prontamente los niveles normales de acuerdo con
las constancias de análisis toxicológicos acompañadas a la demanda. Mediante escrito de fojas
mil quince la denunciada civilmente Ransa Comercial S.A. por escrito de fojas mil quince a mil
sesenta y cuatro, contesta la demanda señalando que los nueve balones de mercurio metálico
fueron envasados y estibados por personal de la minera demandada; que para la fecha del acci-
dente no estaba previsto el transporte de mercurio, pero dicho personal instruyó a su chofer para
que continúe con el transporte, a pesar de haberse advertido un deficiente envasado y estiba de
la carga, por ende, como transportista no tiene responsabilidad por el derrame ocurrido, en razón
de que el envasado y estiba de los balones de mercurio fue obra de la demandada; que si bien
su chofer Esteban Blanco Bar presentaba leves malestares estomacales, ello no guarda ninguna
relación causal con el derrame ocasionado; puesto que al final éste se produjo por las deficientes
medidas de seguridad adoptadas por la demandada en la manipulación del mercurio de su
propiedad; asimismo refiere que los demandantes no han probado haber sufrido daños ciertos
y que se ha producido la ruptura del nexo causal porque los hechos no se han debido al derrame
y exposición al mercurio, sino a la negligencia de la población que los manipuló y recogió, ge-
nerando con ello un incremento en el riesgo de exposición al mercurio. Mediante resolución
número diecisiete, obrante a fojas mil cuatrocientos treinta y cuatro, se integró de ofi ció a la
relación jurídica procesal a Esteban Arturo Blanco Bar, como litisconsorte necesario pasivo, siendo
que por escrito de fojas mil cuatrocientos sesenta y siete éste propuso las excepciones de pres-
cripción extintiva de la acción, conclusión del proceso por transacción y de falta de legitimidad
para obrar del demandante respecto de la pretensión indemnizatoria por daño ambiental; y a su
vez contestó la demanda con similares fundamentos que los alegados por la denunciada civil-
mente.- 3. Puntos controvertidos: Se fijaron como puntos controvertidos los siguientes: 1)
Determinar la existencia de daño a la salud a la parte demandante como consecuencia del de-
rrame de mercurio ocurrido el dos de junio del año dos mil por un vehículo de propiedad de
Ransa Comercial Sociedad Anónima conducida por Arturo Blanco Bar transportando producto de
propiedad de Minera Yanacocha Sociedad de Responsabilidad Limitada. 2) La obligación de
indemnizar de la parte demandada por el daño ocasionado como consecuencia del hecho seña-
lado anteriormente en base a una responsabilidad individual o solidaria. 3) El establecimiento
de hechos propios de la demandante que resulten ser factores determinantes o coadyuvantes al
resultado dañoso. 4. Sentencia de primera instancia: Culminado el trámite correspondiente,
el Juez mediante sentencia de fojas dos mil ochocientos noventa y cuatro, su fecha veintiocho de
octubre del dos mil once, declaró parcialmente fundada la demanda y dispuso que los deman-
dados, en forma solidaria, paguen la suma de S/. 40,000.00 (cuarenta mil con 00/100 Nuevos
Soles) a favor de Luis Alberto Martínez Mendoza; S/. 40,000.00 (cuarenta mil con 00/100 Nue-
vos Soles) para Silveria Mendoza Alvarado; veinte mil nuevos soles para Juana Martínez Oliva;
S/. 30,000.00 (treinta mil con 00/100 Nuevos Soles) para Inés Saavedra Carbajal; y S/. 10,000.00
(diez mil con 00/100 Nuevos Soles) para Juan Herrera Asencio, por daño moral y daño a la salud
o a la persona más intereses legales que se liquidarán en ejecución de sentencia, a partir del dos
de junio de dos mil; infundadas las pretensiones accesorias sobre contratación y pago de un se-
guro médico y un seguro de vida, este último por la suma de US$ 100,000.00 (cien mil con
00/100 Dólares Americanos) para cada uno de los demandantes, por el lapso de treinta años, y
la descontaminación de sus viviendas de los materiales químicos cuya presencia ha generado los
daños reclamados. La sentencia señala que se aprecia que si bien ninguno de los demandantes
ha tenido niveles de mercurio en la orina que hayan llegado a ser tóxicos (superiores a los ciento
cincuenta ug/L), en el caso de Luis Alberto Martínez Mendoza, Silveria Mendoza Alvarado e Inés
Saavedra Carbajal sí han superado meridianamente los valores normales (más de 20 ug/L), con
lo cual se ha probado de modo indubitable que aquéllos sí han sufrido contaminación por mer-
curio, con evidentes repercusiones en su salud, encontrándose dentro de las cuatrocientos sesen-
ta y uno personas afectadas por dicha contaminación; doscientos cincuenta y uno atendidas en
la localidad de Choropampa y doscientos diez en el Hospital Regional de Cajamarca, de acuerdo
con lo que fluye en el informe de salud ambiental, elaborado por el Ministerio de Salud en
agosto de dos mil. La sentencia refiere que el bagaje probatorio analizado, bien explícita o im-
plícitamente citado, se estima suficiente para la acreditación de los daños padecidos por los de-
mandantes en su salud como consecuencia de la contaminación por mercurio, la cual desenca-
denó que en algunos casos por un año y en otros por tres, cuatro y más años tuvieran cada uno
de ellos continuas asistencias y atenciones médicas en el Puesto de Salud de Choropampa por
diversas dolencias y males que usualmente origina la referida contaminación por el aludido
metal. Sostiene que no sólo se ha demostrado convincentemente la existencia de daños en la
salud de los demandantes referidos, sino que palmariamente se desprende que también han
tenido que padecer daños morales, por cuanto el hecho de haber sido víctimas de enfermedades
producto de la contaminación por mercurio que padecieron, con las que han tenido que convivir
de alguna manera durante diversos lapsos, ha tenido que afectar apreciablemente su estabilidad
emocional y su vida social y laboral en general, a lo que debe añadirse que también deben va-
lorarse los dolores y fastidios que produce normalmente cualquier enfermedad en quien la pa-
dece y en los familiares que cuidan al enfermo, sin que importe que el tratamiento haya sido
ambulatorio, en tanto de todas maneras se genera aflicción y constante preocupación. En lo que
se refiere al nexo de causalidad, la sentencia de primera instancia expresa que la conducta anti-
jurídica de la parte demandada ha ocasionado daños a los demandantes, esto es, el vertimiento
de mercurio en la vía pública y en el medio ambiente, que determinó que dichos actores se
contaminen con la inhalación o absorción de este metal líquido, lo cual a su vez originó que
aquéllos presenten diversas enfermedades y dolencias que reflejan los niveles de contaminación
sufridos, los que han requerido en algunos casos varios años de controles y asistencias médicas.
Sostiene que inclusive la minera demandada contrató un seguro de salud especializado por ex-
posición a mercurio por el lapso de cinco años (a favor de todos o de muchos de los afectados),
tal como aparece en el documento de fojas ochocientos setenta y dos a novecientos nueve).
Respecto al factor de atribución objetivo de riesgo alegado, previsto en el artículo 1970 del Có-
digo Civil, el fallo señala que el derrame de mercurio ocurrido el dos de junio de dos mil, entre
los kilómetros ciento sesenta y uno y ciento catorce de la carretera de Penetración Pacasmayo –
Cajamarca, que acaeció en circunstancias que el metal era trasladado desde el campamento
minero de la demandada con destino a la provincia constitucional del Callao, en un vehículo de
transporte de carga de propiedad de la denunciada civilmente Ransa Comercial S.A., que era
conducido por el hoy litisconsorte necesario pasivo Esteban Arturo Blanco Bar; lo que denota que
dicho derrame ha sido un accidente de tránsito porque el metal líquido vertido a la vía pública
y al medio ambiente había estado siendo transportado en vehículo de carga en movimiento o
circulación. Sostiene que si bien no se ha podido determinar la causa especifica que originó que
la tapa de uno de los nueve balones que contenía mercurio liquido se haya abierto, también es
verdad que ello no exime de responsabilidad a los demandados, precisamente por tratarse de
una responsabilidad objetiva, donde no interesa el dolo o la culpa del sujeto que daña, sino
simplemente el resultado que se ocasione por el ejercicio de una actividad riesgosa o por el
empleo de bienes peligrosos. En síntesis al haberse acreditado la concurrencia de los cuatro ele-
mentos de la responsabilidad civil; antijuricidad, daño, nexo causal y factor de atribución, la
demanda debe ser estimada en parte. 5. Fundamentos de la apelación: Mediante escrito de
fojas dos mil novecientos veintiséis la entidad demandada Minera Yanacocha S.R.L. interpone
recurso de apelación contra la sentencia de primera instancia alegando que: (i) el A quo en la
recurrida no distingue o establece la supuesta conducta antijurídica de su parte, lo que justificaría
el sentido de la sentencia, pese a que la misma no hace mención a su parte, más aún se refiere
o determina la responsabilidad penal por un delito culposo, responsabilidad de matiz distinto a
la responsabilidad civil cuya atribución precisa de requisitos distintos a los de ésta; (ii) no es
aplicable al caso el artículo 29 de la Ley General de Transporte y Tránsito Terrestre número 27181;
(iii) para que se configure un supuesto de responsabilidad civil indirecta se requiere de la conjun-
ción de los elementos generales de la responsabilidad civil y de elementos particulares estableci-
dos por la misma norma, los mismos que en ningún caso comprenden a su empresa como res-
ponsable del accidente, toda vez que esta norma dispone que en caso de responsabilidad civil
derivada de accidentes de tránsito existe solidaridad, únicamente entre el conductor, el propie-
tario del vehículo y, de ser el caso, el prestador del servicio, responsabilidad que no alcanza a su
empresa, puesto que el conductor fue Arturo Blanco Bar, la propietaria del vehículo Ransa Co-
mercial Sociedad Anónima y la empresa prestadora del servicio de transporte la misma empresa;
(iv) no puede atribuírseles responsabilidad directa en virtud de lo establecido en el artículo 2º
del Reglamento aprobado por el Decreto Supremo número 016-93-EM pues de la lectura de
dicha norma se desprende que ella solamente define los conceptos de “contaminante ambiental”
y “protección ambiental”; en tal sentido, dicha norma no es aplicable al presente caso toda vez
que está referida a la responsabilidad administrativa del titular de la actividad minero metalúrgi-
ca frente a la autoridad minera, en cuanto lo que se discute en la presente litis es una indemni-
zación por responsabilidad civil a favor de la parte demandante, lo que es distinto; (v) es falso
que haya existido daño bioambiental como consecuencia del derrame de mercurio producido el
dos de junio de dos mil, como así lo acredita el informe de verificación de cumplimiento de re-
comendaciones sobre derrame de mercurio en el poblado de Choropampa y alrededores elabo-
rado por AUDITEC S.A.C., luego de las labores de remediación, monitoreos que han realizado
diferentes entidades respecto de las aguas, suelos y aire de la zona donde se produjo el derrame,
revelan que los niveles que se registran de dicho elemento en las zonas donde se derramó el
mercurio son absolutamente normales en todos los casos; (vi) cualquier pretensión indemnizato-
ria de la parte demandante sustentada en un supuesto daño ambiental no debe ser materia del
presente proceso, pues mediante resolución número tres de fecha quince de diciembre de dos
mil tres el juzgado amparó la excepción de falta de legitimidad para obrar de la demandante
respecto de la indemnización por daño ambiental, justamente porque la titularidad de estos in-
tereses no corresponde a los demandantes por tratarse de un interés colectivo, debiendo preci-
sarse que la referida resolución no fue impugnada por la parte demandante, por lo que dicho
extremo ha quedado consentido; (vii) no se ha acreditado el daño a la salud de la parte deman-
dante derivado del derrame de mercurio porque no se ha tenido en cuenta que existen valores
tóxicos en el organismo humano únicamente cuando se supera 150 ug/L en la orina (o 35 ug/L
en la sangre), criterio que ha sido igualmente reconocido por la Organización Mundial de la Salud,
cuyos estándares de límites máximos permisibles y otros han sido reconocidos como de uso re-
ferencial en nuestro país; (viii) no se ha acreditado la existencia del daño moral a la parte deman-
dante derivado del derrame de mercurio; (ix) no se han establecido los criterios objetivos en
virtud de los cuales se ha fijado el monto indemnizatorio; (x) tampoco se ha observado la incon-
currencia de los factores de atribución; (xi) hay error in procedendo al resolver las cuestiones
probatorias formuladas respecto al Informe Defensorial número 62 pues el juzgado equivoca su
criterio al establecer que no constituye un requisito de validez la firma del informe expedido por
la Defensoría del Pueblo y que la ausencia de dicha firma no acarrea su nulidad; y, (xii) el pago
de costos y costas es improcedente pues ha tenido motivos razonables y justificados para litigar
ya que ha quedado demostrado que el monto demandado es excesivo, por lo que corresponde
se le exonere de dicho pago y no condenarlos como se ha hecho en la impugnada. Mediante
escrito de fojas dos mil novecientos setenta y uno la demandante Juana Martínez Oliva apela la
sentencia, alegando: (i) que en la sentencia existe incongruencia entre lo resuelto y lo fundamen-
tado, razón por la que la venida en grado deviene en nula al afectar el derecho a una debida
motivación de las resoluciones; (ii) el monto indemnizatorio ordenado pagar resulta insignifican-
te e incluso injusto por la magnitud de los daños generados, conforme se aprecia de una de las
transacciones que se ofreció como medio probatorio extemporáneo, lo cual ha generado males-
tar en los demandantes; (iii) la contratación de un seguro de vida y de salud por el lapso de
treinta años debió ser amparada, por cuanto es indispensable para preservar la salud de los
afectados, pues durante todo este tiempo los demandantes periódicamente necesitaron de aten-
ciones médicas por enfermedades relacionadas a las secuelas que produjo la exposición al mer-
curio, atenciones médicas que deberán continuar efectuándose en lo sucesivo, como se acredita
con los tratamientos, diagnósticos y sucesivas consultas a que han sido sometidos los demandan-
tes Luis Alberto Martínez Mendoza, Silveria Mendoza Alvarado, Inés Saavedra Carbajal y Juana
Martínez Oliva; (iv) debe tenerse en cuenta que Minera Yanacocha contrató un seguro de salud
a favor de los afectados del derrame de mercurio por un tiempo de cinco años con la finalidad
de atender médicamente a los pobladores, habiendo previsto que los efectos en la salud se con-
tinuarán manifestando en el futuro; y, (v) el pedido de limpieza de las viviendas de los poblado-
res afectados, resulta justo debido a que el mercurio al ser una sustancia volátil aún se encuentra
en las viviendas de los demandantes, situación que los expone continuamente. Mediante escritos
de fojas dos mil novecientos setenta y siete y dos mil novecientos [noventa y tres], la denunciada
civilmente Ransa Comercial S.A. y el litisconsorte necesario Esteban Arturo Blanco Bar, respecti-
vamente, apelan la sentencia de primera instancia, además de alegar similares fundamentos a la
codemandada Minera Yanacocha S.R.L. Indican: a) que no son objetivamente responsables
porque el derrame de mercurio no fue consecuencia de un accidente de tránsito; b) la exposición
al referido metal es la causante del supuesto daño y no la actividad de transporte; c) la respon-
sabilidad solidaria no responde a ningún análisis, no se verifican los elementos de la responsabi-
lidad objetiva ya que no se ha establecido la antijuricidad, no existe relación de causalidad entre
los daños alegados y la conducta de Ransa Comercial Sociedad Anónima y el chofer, no se ha
acreditado el daño, ni se ha justificado el monto indemnizatorio, considerado como exorbitante.
6. Sentencia de vista: Elevados los autos a la Sala Superior en virtud de los recursos de apelación
interpuestos por la entidad demandada Minera Yanacocha S.R.L., por la demandante Juana
Martínez Oliva, por la denunciada civilmente Ransa Comercial S.A. y por el litisconsorte necesa-
rio Esteban Arturo Blanco Bar, la Sala Especializada Civil de la Corte Superior de Justicia de Caja-
marca, mediante sentencia de vista de fojas tres mil setenta y siete, del cinco de noviembre de
dos mil doce, confirma la sentencia apelada, considerando que en el presente caso resulta indis-
cutible que el derrame de mercurio expuso a los actores al nivel de contaminación descrito en la
resolución impugnada, de los que se han derivado problemas en su salud; agrega que la relación
de causalidad está dada no con el ejercicio de la actividad de transporte que en sí misma consti-
tuye una actividad riesgosa ejercida por los demandados, sino por la simple tenencia del mercu-
rio, cuyos efectos se han evidenciado en la parte demandante, como se ha detallado, sin que se
haya descartado que es consecuencia de la contaminación por mercurio. La Sala Superior sostie-
ne que en todos los demandados existe la causa adecuada por el bien riesgoso como para concluir
que existe responsabilidad de indemnizar a los accionantes, pues en este tipo de responsabilidad
basta acreditar el daño y que haya sido causado por la utilización de bien riesgoso o peligroso,
descartándose el factor de atribución subjetivo, es decir la culpabilidad o no del autor. En cuan-
to al quantum del monto indemnizatorio, en la demanda se solicita la indemnización del daño
a la salud, que implica una de las manifestaciones al daño a la persona, así como daño moral,
descartándose la indemnización de lucro cesante y daño emergente, pues éste debe ser, en prin-
cipio, solicitado, cuantificado y concreto, situación que en el presente caso no se presenta al no
haber sido solicitado, ni cuantificado, como tampoco existen medios probatorios que lo acrediten,
por lo tanto, únicamente ha sido acreditado el daño a la salud de los actores Luis Alberto Martí-
nez Mendoza, Silveria Mendoza Alvarado, Juana Martínez Oliva, Inés Saavedra Carbajal y Juan
Herrera Asencio, entendiéndose asimismo que tal daño dada su magnitud ha generado daño
moral según se ha descrito.
III. RECURSO DE CASACIÓN
Esta Sala Suprema, mediante resolución de fecha diez de abril de dos mil trece, obrante a fojas
ciento veinticinco del cuaderno formado ha declarado procedente el recurso de casación inter-
puesto por Minera Yanacocha por las causales de: a) infracción normativa de los artículos 139,
inciso 5º, de la Constitución Política del Perú, 50 del Código Procesal Civil y 12 de la Ley Orgánica
del Poder Judicial, b) infracción normativa del artículo 103 de la Constitución Política del Perú;
y, c) infracción normativa del artículo 1981 del Código Civil; así mismo a fojas ciento [treinta y
dos] del cuaderno de casación, declaró procedente el recurso de casación interpuesto por Ransa
Comercial Sociedad Anónima, por las causales de. a) infracción normativa del artículo 139,
inciso 5º, de la Constitución Política del Perú, b) infracción normativa del artículo 122, inciso
3º, del Código Procesal Civil, c) infracción normativa del artículo 196 del Código Procesal Civil,
y, d) infracción normativa del artículo 1972 del Código Civil; igualmente mediante resolución
de la misma fecha, obrante a fojas ciento cuarenta se declaró procedente el recurso de casación
interpuesto por Esteban Arturo Blanco Bar, por las causales de: a) infracción normativa del
artículo 139, inciso 5º, de la Constitución Política del Perú, b) infracción normativa del artículo
122, inciso 3, del Código Procesal Civil, c) infracción normativa del artículo 196 del Código Pro-
cesal Civil, y d) infracción normativa del artículo 1972 del Código Civil; por último, a fojas ciento
cuarenta y ocho se declaró procedente el recurso de casación interpuesto por la demandante
Juana Martínez Oliva, por las causales de: a) infracción normativa de los artículos 139, inciso 5º,
de la Constitución Política del Perú y 122, incisos 3º y 4º, del Código Procesal Civil, y b) infracción
normativa del artículo 1984 del Código Civil.
IV. FUNDAMENTOS DE ESTA SUPREMA SALA
Primero.- Que todas los recurrentes han interpuesto recurso de casación alegando que se ha
infringido el artículo 139 inciso 5º de la Constitución Política del Perú; por consiguiente, corres-
ponde a este Tribunal Supremo verificar si la resolución impugnada se encuentra indebidamente
motivada. Tal análisis se efectuará atendiendo a que en sociedades pluralistas como las actuales
la obligación de justificar las decisiones jurídicas logra que ellas sean aceptadas socialmente y que
el Derecho cumpla su función de guía1. Esta obligación de fundamentar las sentencias propias
del derecho moderno se ha elevado a categoría de deber constitucional. En el Perú el artículo
139, inciso 5º, de la Constitución Política del Estado señala que: “Son principios y derechos de la
función jurisdiccional (...) 5. La motivación escrita de las resoluciones judiciales en todas las instancias
excepto los decretos de mero trámite, con mención expresa de la ley aplicable y de los fundamentos de
hecho en que se sustentan”. Igualmente el artículo 12 de la Ley Orgánica del Poder Judicial pres-
cribe: “Todas las resoluciones, con exclusión de las de mero trámite, son motivadas bajo responsabilidad,
con expresión de los fundamentos en que se sustenta...”. En atención a ello, la Corte Suprema ha
señalado que: “La motivación de la decisión judicial es una exigencia constitucional; por consiguiente,
el Juzgador para motivar la decisión que toma debe justificarla, interna y externamente, expresando una
argumentación clara, precisa y convincente para mostrar que aquella decisión es objetiva y material-
mente justa, y por tanto, deseable social y moralmente2”. Segundo.- Que, debe indicarse, en cuan-
to a la justificación interna (que consiste en verificar que “el paso de las premisas a la conclusión
es lógicamente -deductivamente- válido” sin que interese la validez de las propias premisas), que
el orden lógico propuesto por la Sala Superior ha sido el siguiente: (i) Como premisa normativa,
entre otros, los artículos 1970, 1981 y 1984 del Código Civil referida a la responsabilidad obje-
tiva, la responsabilidad vicaria y la indemnización. (ii) Como premisa fáctica la existencia de un
bien riesgoso que originó daño a los demandados. (iii) Como conclusión se llega a determinar
que la demanda debe ser declarada fundada. Tal como se advierte, la deducción lógica de la Sala
es compatible formalmente con el silogismo que ha establecido, por lo que se puede concluir
que su resolución presenta una debida justificación interna. Tercero.- Que, en lo que concierne
a la justificación externa, ésta consiste en controlar la adecuación o solidez de las premisas3, lo
que supone que la(s) norma(s) contenida(s) en la premisa normativa sea(n) norma(s) aplicable(s)
en el ordenamiento jurídico y que la premisa fáctica sea la expresión de una proposición verda-
dera4. En esa perspectiva, este Tribunal Supremo estima que tal justificación externa es adecuada,
pues se han utilizado normas apropiadas para resolver el caso y se han acreditado los hechos
expuestos, referidos a la existencia de daño en contra de los demandantes y originados por la
conducta de los demandados. Cuarto.- Que, en lo que respecta a los problemas específicos de
motivación se tiene que, existe motivación aparente cuando en una determinada resolución judicial
parece que se justifica la decisión pero su contenido no explica las razones del fallo; que existe
motivación insuficiente cuando no hay un mínimo de motivación exigible y que existe motivación
incongruente cuando se dejan incontestadas las pretensiones o se desvía la decisión del marco del
debate judicial5. Tales incorrecciones no existen en la recurrida, desde que ésta detalla la norma
y los hechos que la llevan a declarar infundada la demanda (considerandos tercero a quinto); por
1 Atienza, Manuel. Las razones del Derecho. Centro de Estudios Constitucionales, Madrid, 1991, p. 24-25.
2 Primer Pleno Casatorio, Casación número 1965-207-Cajamarca. En: El Peruano, Separata Especial, 21 de abril de
2008, p. 22013.
3 ATIENZA, Manuel. Las Razones del Derecho. Sobre la justificación de las decisiones judiciales. En: http://razona-
mientojuridico.blogspot.com.
4 MORESO, Juan José y VILAJOSA, Josep María. Introducción a la teoría del Derecho. Madrid, Marcial Pons Editores,
p. 184.
5 Sentencia del Tribunal Constitucional. Expediente número 00037-2012-PA/TC.
consiguiente, hay una motivación adecuada, debiéndose agregar que el Tribunal Constitucional
ha señalado que “el derecho a la motivación de las resoluciones judiciales no garantiza una determi-
nada extensión de la motivación, por lo que su contenido constitucional se respeta, prima facie, siempre
que exista: a) fundamentación jurídica, que no implica la sola mención de las normas a aplicar al caso,
sino la explicación y justificación de por qué tal caso se encuentra o no dentro de los supuestos que
contemplan tales normas, b) congruencia entre lo pedido y lo resuelto, que implica la manifestación de
los argumentos que expresarán la conformidad entre los pronunciamientos del fallo y las pretensiones
formuladas por las partes; y, c) que por sí misma exprese una suficiente justificación de la decisión
adoptada, aun si esta es breve o concisa, o se presenta el supuesto de motivación por remisión6”. Eso
es precisamente lo que ha ocurrido aquí, pues existe congruencia entre lo pedido y lo resuelto,
hay fundamentación jurídica en los términos señalados en la sentencia del Tribunal Constitucional
y se ha expresado, como se ha indicado en los considerandos precedentes, las razones de la
decisión adoptada. Quinto.- Que, relacionado con el pedido casatorio de Minera Yanacocha
S.R.L., debe decirse que la sentencia recurrida contiene motivación suficiente respecto a los pun-
tos controvertidos de determinar la existencia del daño a la salud, habiéndose indicado a fojas
tres mil noventa que: “En el presente caso, resulta indiscutible que el derrame de mercurio expuso a
los actores en el nivel de contaminación descrito en el considerando anterior, ha causado contaminación
y problemas de salud”, lo que detalla en los considerandos décimo y décimo primero de la sen-
tencia. Asimismo, se tiene que los fallos mencionan los exámenes médicos referidos al aumento
de los índices de mercurio en la sangre de los demandantes, siendo que si bien en el caso de
Juana Martínez Oliva y Juana Herrera Asencio, ellos estaban dentro del límite de lo permisible,
no es menos cierto que su examen se realizó mucho después de los hechos, que en casos simila-
res los pobladores también mostraron baja del índice de mercurio y que a ello se une que los
referidos demandantes han presentado diversos malestares médicos que han sido evaluados en
la sentencia de primera instancia y confirmado en la recurrida. En este punto debe indicarse que
tratándose de responsabilidad extracontractual hay una inversión de la carga de la prueba, de
forma tal que los demandantes sólo tienen que acreditar el daño, siendo los demandados los que
deben probar que ese daño tuvo origen distinto al alegado por los peticionantes; tal situación no
ha ocurrido en el presente caso. Finalmente, debe indicarse que en lo que atañe al debate sobre
la obligación de indemnizar por parte de los demandados, la sentencia hace una valoración de
las pruebas encontradas en el expediente, tal como se advierte en los considerandos décimo
cuarto, décimo quinto y décimo sexto, por lo que puede darse por cumplido el deber constitu-
cional de motivar las sentencias. Sexto.- Que, estando a lo expuesto, no es posible aceptar en
ninguno de los casos infracción al artículo 139, numeral 5º, de la Constitución Política del Perú,
y, en su caso, respecto a Minera Yanacocha S.R.L., también debe descartarse la denuncia sobre
supuesta infracción normativa del artículo 12 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, el artículo 50
del Código Procesal Civil y el artículo 122, numeral 3º, del mismo Código. Sétimo.- Que, de otro
lado, Minera Yanacocha S.R.L. ha denunciado que se han aplicado normas que no estaban vi-
gentes al momento de los hechos. En estricto ha señalado que dichas normas son las siguientes:
artículos 74, 42 y 144 de la Ley número 28611, Ley General del Ambiente y el artículo 2 de la
Resolución Directoral número 134- 2000 EM-DGM. Sobre el particular debe señalarse que la
problemática de la aplicación de las normas en el tiempo es tratada principalmente por dos
teorías que intentan darle una solución. Nuestra legislación ha adoptado la teoría de los hechos
cumplidos por lo que se aplica de manera inmediata la ley. Así, el artículo 103 de la Constitución
Política de Estado dispone que los efectos provenientes de las leyes y demás normas se aplicarán
inmediatamente a las consecuencias derivadas de los distintos hechos o situaciones con relevan-
cia jurídica, prohibiendo tanto las figuras de la retroactividad y de la ultractividad, salvo contadas
excepciones. La primera de ellas, la retroactividad, es la aplicación de una norma a situaciones
jurídicas que ya han desarrollado sus consecuencias previamente a la entrada en vigencia de
dicha norma. Por el otro lado, la figura de la ultractividad es aquella en donde los efectos de las
normas siguen rigiendo para las consecuencias derivadas de los hechos o situaciones jurídicas
después de que dicha norma ya ha sido derogada por una más reciente. Octavo.- Que, como se
observa de lo afirmado y probado por las partes, los hechos generadores de las consecuencias
jurídicas ocurren antes de la entrada en aplicación de las disposiciones legales que se utilizaron
al momento de calificar dichos hechos jurídicos; sin embargo, las consecuencias de los mismos
se extienden en el tiempo desde el momento en que acontecieron hasta cuando son calificados.
Por ello, en concordancia con el artículo 103 de la Constitución Política del Estado la aplicación
de los artículos 74, 42 y 144 de la Ley número 28611, Ley General del Ambiente y el artículo 2
de la Resolución Directoral número 134-2000 EM-DGM, es un supuesto de aplicación directa de
la ley y no un supuesto de aplicación retroactiva de la misma, ya que se observa que estas dis-
posiciones se aplican a las consecuencias actuales al momento de la presentación de la demanda.
Siendo ello así la sentencia no ha infringido las normas antes referidas. Noveno.- Que, Minera
Yanacocha S.R.L. ha señalado que se habría infringido el artículo 1981 del Código Civil. Sobre el
tema debe indicarse que dicha norma señala que los dependientes que se encuentren en relación
de subordinación con otra persona comparten solidariamente la responsabilidad del daño que
produce con ésta. Para que ello ocurra deben concurrir tres requisitos: a) es indispensable una
relación de subordinación que faculte el accionar de quien está subordinado; b) el daño que
surge tiene que tener conexión con el cumplimiento de la actividad encomendada; y, c) el acto
generador de daño tiene que ser cometido por el subordinado. Décimo.- Que, se observa que
todos estos requisitos se cumplen entre el denunciado civilmente, Esteban Arturo Blanco Bar, y
la empresa Ransa Comercial S.A., dado que el primero tiene una relación de subordinación con
la segunda y en el ejercicio de sus funciones cometió el hecho generador de daño. Los problemas
surgen por la postura propuesta por la empresa Minera Yanacocha S.R.L., según ésta, no se veri-
fica el tercer elemento en el sentido de que no hay relación de subordinación ni dependencia
con el empleado de la empresa Ransa Comercial S.A., por lo que estaría liberada de cualquier
tipo de responsabilidad vicaria. Tal tesis debe descartarse, pues el alcance y sentido del artículo
en mención es corregir una situación perjudicial para quienes son afectados por el daño: así la
responsabilidad solidaria los faculta a exigir que no solo quien directamente ocasiona el daño
responda por las consecuencias, sino también quien le ordenó hacer la actividad riesgosa. En esa
perspectiva, los que tienen el poder de dirección no se ven liberados de la responsabilidad por
las consecuencias que sus decisiones pueden generar, por haberlas efectuado directamente. De
esta forma, podemos ver que, si bien entre la empresa Minera Yanacocha S.R.L. y el señor Esteban
Arturo Blanco Bar no existe una relación de dependencia y subordinación, ésta si existe entre la
primera empresa y la empresa de transporte Ransa Comercial S.A.; de esta forma, los comporta-
mientos que ésta última efectúe, aún así sea a través de sus subordinados o por medio de un
encargo, son parte de la expresión del poder de dirección de la empresa minera. Por ello, romper
el vínculo causal en esta circunstancia sería darle una incorrecta interpretación a la norma por dos
razones: (i) que cualquier tercerización de una actividad propia del ciclo productivo, siempre que
ésta sea con una empresa que sirva como intermediaria, terminaría significando que la respon-
sabilidad por los daños que puedan generarse quedarían excluidos de la esfera de responsabilidad
de la empresa que contrata la tercerización; (ii) por sentido de orden lógico, una persona jurídi-
ca necesariamente va a tener que ejercer su poder de dirección sobre una persona natural para
lograr alguno de sus objetivos debido a que no cuenta con presencia física; ya que es una ficción
siempre va a depender del accionar humano. Esto significa que el proceso lógico que sigue la
empresa Minera Yanacocha S.R.L. no toma en cuenta la necesaria situación de que Ransa Comer-
cial S.A. tenga que contratar a un tercero para llevar a cabo el encargo que la primera empresa
hace a la segunda bajo las directrices de su poder de dirección, de allí que la actividad desplega-
da por la empresa de transportes Ransa Comercial S.A. y, por tanto, la empresa Minera Yanacocha
S.R.L. tendrá una relación indirecta con el hecho generador de daño, configurándose el supuesto
de hecho y respondiendo esta última de forma solidaria junto con la empresa de transportes y la
persona natural contratada por ésta. Undécimo.- Que, de otro lado, la empresa Ransa Comercial
S.A. y el señor Esteban Arturo Blanco Bar han indicado que también habría defectos en la moti-
vación, siendo el primero de ellos el hecho que la Sala Superior haya indicado que debe probar-
se el daño para concluir que éste no se ha descartado. En efecto, tal frase aparece en el décimo
primer considerando de la sentencia, y aunque representa un desliz verbal no es suficiente para
sostener que el fallo infringe el principio lógico de no contradicción, pues antes la sentencia
había señalado los niveles de mercurio en la sangre de otros demandantes y después diversas
enfermedades sufridas por éstos, habiendo agregado que: “resulta indiscutible que el derrame de
mercurio expuso a los actores en el nivel de contaminación (y) ha causado contaminación y problemas
en su salud”. Se trata de una expresión compatible con los supuestos que menciona y que recha-
za cualquier contradicción sobre la certeza del daño. De igual modo, tampoco puede aceptarse
el argumento que existe grave defecto motivacional porque la Sala Superior refiere que la relación
de causalidad no está dada en la actividad de transporte, sino en la simple tenencia del mercurio;
se trata, a criterio de este Tribunal, de argumento equivocado, pues la causalidad deviene de
ambos comportamientos y no sólo de uno de ellos, pero dicho vicio en nada niega la decisión
judicial, pues en uno como en otro caso la conclusión es la misma: la responsabilidad de los re-
currentes; en tal virtud, conforme al artículo 397 del Código Procesal Civil, este hecho no puede
originar la fundabilidad de la casación. Lo mismo puede señalarse con respecto al tercer defecto
de motivación alegado, pues el daño ocurrió no sólo por el transporte del mineral, sino además
por el comportamiento anterior y posterior de los demandados, como además el propio fallo ha
referido en el décimo tercer considerando. Nuevamente, hay que decir aquí que la anomalía
presentada no origina la nulidad de la sentencia porque la decisión final es la correcta. Con res-
pecto al último defecto de motivación alegado, debe señalarse que ello ha sido fijado de mane-
ra prudencial por parte del juzgador y ha sido debidamente explicado en el fallo que fue confir-
mado. Siendo ello así debe descartarse la denuncia presentada por ambos recurrentes, así como
la infracción al artículo 122 inciso 3º del Código Procesal Civil por estar referido a los mismos
hechos y al 196 del Código Procesal Civil, pues el argumento de los recurrentes se sustenta en
que la Sala considera que no se ha acreditado el daño, cuando, como aquí se ha dicho, el ente
jurisdiccional es enfático en sostener que sí se ha producido. Duodécimo.- Que, por otra parte,
la empresa Ransa Comercial S.A. y el señor Esteban Arturo Blanco Bar sostienen que se habría
vulnerado el artículo 1972 del Código Civil, el cual prescribe que no existe responsabilidad ob-
jetiva si hay una ruptura del nexo causal por caso fortuito, fuerza mayor, hecho generado por
tercero o hecho generado por la propia víctima. Ambos recurrentes sostienen que: “(E)l mercurio
se derramó por estar mal embalado, en un recipiente inadecuado para su conservación e inse-
guro”, lo que representa hecho determinante de tercero que los eximiría de responsabilidad. Se
trata de afirmación que no se condice con la realidad, al extremo que el apartado del contrato
de servicios suscrito entre Minera Yanacocha S.R.L. y Ransa Comercial S.A., descrito en el consi-
derando noveno de la sentencia impugnada y obrante a fojas trescientos noventa y dos a cuatro-
cientos treinta y uno, expresa, con respecto a Ransa Comercial S.A. que se trata de “una empre-
sa especializada en el almacenamiento, embalaje y transporte de bienes”; existe, pues, respon-
sabilidad en su actuar, por lo que su aludida candidez en su conducta comercial se encuentra
lejana a la realidad, más aún cuando al transportar materiales altamente contaminantes realiza-
ba una actividad de carácter riesgosa, lo que incrementaba su deber de diligencia, exigiéndole
comportamientos necesarios para salvaguardar a quienes podrían verse involucrados en el desa-
rrollo de la actividad. Décimo Tercero.- Que, por último, la demandante ha expresado que se
ha vulnerado el artículo 1984 del Código Civil. Sobre tal punto debe mencionarse que dicho
dispositivo nos da los criterios a tomar en cuenta para el cálculo del daño moral. Estos son los
siguientes: a) la magnitud de daño; y, b) el menoscabo producido a la víctima y a su familia. El
recurso de casación es a su vez interpuesto porque ha existido una incorrecta interpretación y
motivación de estos dos puntos. Sin embargo, se observa en la argumentación proporcionada
por el juez que sí ha tomado ambos puntos señalando que: “teniendo que convivir durante más de
siete años con el hecho de acudir constantemente al centro de salud de Choropampa (...) pues por
cuanto se sufren algunos males y la preocupación es mucho mayor (...) en tal sentido el daño se evi-
dencia y es resarcible”. De esta forma se corrobora el segundo requisito del artículo. Respecto al
primero el juzgador expresa que la magnitud es incuantificable debido a sus características intrín-
secas. Por ello, bajo su criterio les asigna las sumas que aparecen señaladas en la sentencia. Sobre
este punto es importante que el recurso de casación tome en cuenta la correcta aplicación nor-
mativa y la observancia del precedente vinculante. El juzgador cumple con los requisitos de la
norma al fundamentar, según su criterio, ambos puntos que se exigen para asignar el monto de
indemnización por daño moral; por tanto, no se observa ninguna falta de corrección en la apli-
cación normativa del artículo 1984. Décimo Cuarto.- Que, en conclusión, deben descartarse
todas las infracciones señaladas por las partes, al haberse emitido sentencia adecuada a la correc-
ta interpretación de la ley.
V. DECISIÓN
Por estas consideraciones y de conformidad con el artículo 397 del Código Procesal Civil: Decla-
raron INFUNDADOS los recursos de casación de fojas tres mil ciento diecisiete, interpuesto por
la demandada Minera Yanacocha S.R.L., el de fojas tres mil ciento [cuarenta y dos], interpuesto
por el litis consorte Esteban Arturo Blanco Bar, el de fojas tres mil ciento cincuenta y cuatro in-
terpuesto por Ransa Comercial S.A. y el de fojas tres mil ciento sesenta y seis interpuesto por la
demandante Juana Martínez Oliva; DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en
el Diario Oficial El Peruano conforme a ley; en los seguidos por Juana Martínez Oliva y otros con
Minera Yanacocha S.R.L. y otros, sobre indemnización por daños y perjuicios; interviniendo como
ponente el señor Juez Supremo Calderón Puertas.-
SS.
Almenara Bryson / Huamani Llamas / Estrella Cama / Rodríguez Chavez / Calderón Puertas.
Contenido
CONSULTA Responsabilidad por el daño causado por un animal.
CONSULTA
Evelyn tiene como mascota a Bylli, un mono bebé. Un día, Bylli se escapó
de la casa de Evelyn y se fue a pasear por la ciudad. Los dueños de una
tienda de antigüedades al mono por las calles decidieron llevarlo a su
local para protegerlo de los peligros de la ciudad; sin embargo al ver
una vitrina con objetos brillantes, Bylli se lanzó contra de ella y rompió
un jarrón antiguo que costaba US5000 dólares americanos. Los dueños
de la tienda al enterarse que Evelyn era la dueña de Bylli, le intentaron
cobrar el valor del jarrón quebrado. En su defensa, Evelyn señaló que
los dueños no debieron llevar a Bylli a su tienda, pues dentro hay mu-
chos objetos muy delicados y que, por tanto, la culpa de que el jarrón
se rompiera era de ellos, pues se expusieron al peligro ¿Quién debe ser
considerado responsable por la ruptura del jarrón?
El artículo 1979 de nuestro Código Civil el simple hecho de que se produzca el daño.
establece que en los casos en los que se pro- En ese sentido, se entiende que la obligación
duzca un daño ocasionado por un animal, de vigilancia y cuidado que impone la norma
el responsable será el dueño del animal o se extiende inclusive a los casos en los que el
aquel que lo tiene a su cuidado aunque se dueño o cuidador no podría ejercer ningún
haya perdido o extraviado, a menos que se tipo de actividad para prevenir o impedir la
pruebe que el evento tuvo lugar por obra o producción del daño.
causa de un tercero. Esto quiere decir que el
ordenamiento impone al dueño o cuidador Por otro lado, se observa que la norma
del animal la responsabilidad de asumir el también señala como eximente de responsa-
peso económico del daño ocasionado a la bilidad civil, la prueba de que el daño se ha
víctima por considerar que el daño irrogado producido por culpa de un tercero. Entonces,
es injusto. solo cuando exista la prueba de que el daño
es causado por la intervención de un tercero,
De la citada norma se colige que el criterio de
se podrá establecer que el dueño o cuidador
imputación elegido por el legislador para este
no es responsable de los daños irrogados.
tipo de casos es el criterio objetivo. En efecto,
en el texto de la norma se establece que el En el caso en concreto, observamos que
dueño o cuidador del animal será responsable Evelyn al ser dueña del mono Bylli debería
de los daños aun cuando el animal se haya haber asumido la obligación de custodiar y
perdido o extraviado, no siendo objeto de vigilar a su mascota para que dicha mascota
análisis la culpa del dueño o cuidador sino no produzca daños a terceros; por tanto,
RESEÑA DE JURISPRUDENCIA
Reseña de jurisprudencia
Casación N.º
1544-2013-Pasco
Reparación del daño: Fundamento
de la unificación de la responsa-
bilidad civil
TEXTO DE LA CASACIÓN
CASACIÓN N° 1544-2013-PASCO
FUNDAMENTOS DEL RECURSO: Que, el recurso de casación fue declarado procedente por reso-
lución de fecha cuatro de julio de dos mil trece, que corre de fojas treinta y seis a treinta y ocho del
cuadernillo formado en este Supremo Tribunal, por la causal de infracción normativa material
y procesal: a) La infracción normativa procesal del artículo 121 del Código Procesal Civil;
y, b) La infracción normativa material de los artículos 61 y 1969 y siguientes del Código
Civil, alegando que al ser la demandante heredera del ex trabajador fallecido Jorge Dionisio Es-
pinoza Quispe, no es sino tercera en la relación contractual laboral, por lo que no resulta viable
que solicite una indemnización por daños y perjuicios por responsabilidad contractual, como si
ambas partes procesales hubiesen mantenido un vínculo obligacional. Sostiene además que, de
ser así, el juez competente sería el juez laboral, sin embargo, el artículo 61 del Código Civil, señala
que la muerte pone fin a la persona humana; por lo que la Sala Superior, al emitir una sentencia
inhibitoria señalando que se trata de una responsabilidad contractual, estaría vulnerando el de-
recho fundamental al debido proceso y a la tutela jurisdiccional efectiva, en aplicación supletoria
del artículo 121 del Código Procesal Civil, pues no tiene presente que la actora ha iniciado la
demanda en calidad de heredera, al ser perjudicada con la muerte de su cónyuge, siendo de
aplicación el artículo 1969 y siguientes del Código Civil, sobre responsabilidad extracontractual;
asimismo, esta Sala Suprema considero que en aplicación de lo dispuesto en el artículo 392 - A del
Código Procesal Civil, resulta pertinente para el caso particular, incorporar en forma excepcional
la causal de infracción normativa procesal del artículo 139 incisos 3 y 5 de la Constitución
Política del Estado, a efectos de evaluar si la diferenciación entre responsabilidad contractual y
extracontractual es determinante para otorgar la indemnización por daños y perjuicios.
CONSIDERANDO: Primero.- Que, del examen de los autos se advierte que de fojas ciento cua-
renta y tres a ciento cuarenta y ocho, Ana María Huamán Estrada interpone demanda sobre In-
demnización por Daños y Perjuicios por responsabilidad extracontractual, solicitando que la
demandada Compañía Minera Sol Sociedad Anónima, cumpla con pagar la suma de ciento
nueve mil cuatrocientos ochenta y ocho nuevos soles (S/.109,488.00), como consecuencia del
accidente que sufriera su cónyuge Jorge Dionisio Espinoza Quispe, quien perdiera la vida el tres
de marzo de dos mil cuatro, durante el cumplimiento de sus labores en la referida Compañía
Minera Sol Sociedad Anónima como encargado, labor que logró desempeñar durante diez años
y cinco meses. Agrega que con el causante han procreado tres hijos quienes a la fecha del falle-
cimiento de su cónyuge eran menores de edad, quedando en abandono moral y económico al
ser el único sustento del hogar.- Segundo.- Que, admitida a trámite la demanda, Compañía
Minera Sol Sociedad Anónima, se apersona al proceso y mediante escrito obrante de fojas cien-
to setenta y ocho a doscientos tres, contesta la demanda argumentando que: a) Conforme a las
declaraciones vertidas en la investigación policial y las conclusiones señaladas por el representan-
te del Ministerio Público, el ex trabajador habría fallecido básicamente por el hecho de su propia
negligencia al realizar una mala maniobra respecto de la maquinaria que operaba, lo que oca-
sionó subsecuentemente una serie de hechos que concluye en el fallecimiento del mismo; b) La
empresa demandada ha actuado con la debida responsabilidad, habiendo cumplido con todas
sus obligaciones, habiéndose producido la fractura del nexo causal que le exonera de toda res-
ponsabilidad.- Tercero.- Que, valoradas las pruebas y compulsados los hechos expuestos por las
partes, por sentencia de primera instancia de fecha veintinueve de marzo de dos mil diez, se
declara infundada la demanda. De los fundamentos de dicha sentencia se extrae básicamente
que: a) El deceso del trabajador Jorge Dionisio Espinoza Quispe se produjo a causa de su propia
negligencia, lo que se corrobora con las declaraciones policiales obrantes de fojas veinte a cua-
renta y dos en las que todos coinciden que el accidente fue ocasionado por el propio occiso. Es
más, en dichas declaraciones fluye que todas las mañanas, antes de iniciar las labores, el Inge-
niero de Guardia de Seguridad de la Compañía Minera Sol Sociedad Anónima, dictaba charlas
de seguridad, habiendo recibido Jorge Dionisio Espinoza Quispe dichas charlas el día del acciden-
te, según aparece del Atestado Policial, de lo que se deduce que la Empresa demandada no
contribuyó en la producción del hecho dañoso sino que el daño fue ocasionado por el propio
occiso, evidenciándose la inexistencia de una relación causal y consiguientemente la existencia
de una fractura causal provocada por el causante, por lo que la Compañía Minera Sol Sociedad
Anónima (demandada) no está obligada a la reparación del daño causado en virtud de lo esta-
blecido en el artículo 1972 del Código Civil; b) Que si bien el artículo 1973 del Código Civil,
señala que: “Si la imprudencia solo hubiere concurrido en la producción del daño, la indemnización
será reducida por el juez, según las circunstancias”; ello se refiere a la concurrencia de la impruden-
cia o negligencia en el daño causado, es decir, cuando concurren imprudentemente ambas partes
en la producción del daño, situación que no se encuentra acreditada en autos.- Cuarto.- Que,
apelada que fuera la sentencia de primera instancia, la Sala Superior mediante sentencia de
vista de fecha catorce de febrero de dos mil trece, revoca la apelada que declara infundada la
demanda y reformándola la declara improcedente, estableciéndose básicamente que: a) del
Atestado Policial número 007-04-RPNP-P-CCH, de fojas doce a diecinueve, del cual fluye que
con fecha tres de marzo de dos mil cuatro, en la Compañía Minera Atacocha, a horas once y
cuarenta y cinco (11:45) se produjo un accidente de trabajo con consecuencias fatales, en el
Crucero 032 Sur Nivel 3840 que colinda con el acceso ST 927 del interior de la mina, perdió la
vida Jorge Dionisio Espinoza Quispe, trabajador de la Empresa Especializada “Minera Sol” Socie-
dad Anónima Cerrada. Asimismo de fojas setecientos ochenta y ocho a ochocientos noventa, obra
el Informe número 040-2004-EM- DGM-FM/I de fecha cinco de julio de dos mil cuatro (investi-
gación del accidente fatal del ex trabajador Jorge Dionisio Espinoza Quispe) que, entre otras,
recomienda se sancione en forma solidaria a la Compañía Minera Atacocha Sociedad Anónima
y a la Empresa Especializada Compañía Minera Sol Sociedad Anónima, de acuerdo a la Escala de
Multas y Penalidades vigente; consecuentemente, de fojas setecientos noventa y uno a setecien-
tos noventa y dos, obra la Resolución Directoral número 453-2004-MEM/DG, de fecha dos de
agosto de dos mil cuatro, que resuelve sancionar en forma solidaria a la Compañía Minera Ata-
cocha Sociedad Anónima y a la Empresa Especializada Compañía Minera Sol Sociedad Anónima,
con una multa de treinta (30) Unidades Impositivas Tributarias (UIT) de cuyos fundamentos se
advierte que el accidente fatal ocurrido a Jorge Dionisio Espinoza Quispe es un accidente de
trabajo de conformidad al artículo 124 del Reglamento de Seguridad e Higiene Minera... la
responsabilidad del accidente recae en la Compañía Minera Atacocha Sociedad Anónima y Em-
presa Especializada Compañía Minera Sol Sociedad Anónima; b) por ello no corresponde que se
dé el trámite a la demanda en la vía de responsabilidad extracontractual, estando a que el daño
se habría producido consecuencia de la labor que realizaba diariamente el trabajador fallecido y
que la presencia de la víctima en la mina obedecía al vínculo laboral existente entre ambas par-
tes en el momento del fallecimiento; y, c) se puede establecer que los hechos expuestos en la
demanda no se encuadra en lo establecido en los artículos 1969 y 1970 del Código Civil, por
cuanto, en estos casos se da a consecuencia de la violación del deber genérico de no causar daño
a otro; asimismo, en la responsabilidad objetiva no se requiere que medie una conducta dolosa
o culposa por parte del emplazado, es suficiente que exista el nexo causal entre el desarrollo de
la actividad peligrosa con el daño causado al agraviado. En el caso demandado se da por el in-
cumplimiento de normas laborales (normas de seguridad); consiguientemente, corresponde se
aplique normas sobre responsabilidad contractual, al percibirse de los actuados que la deman-
dada presuntamente habría incumplido normas de seguridad durante la relación laboral existen-
te durante el accidente, en suma, la cuestión controvertida se referiría al incumplimiento de
obligaciones legales como consecuencia de una relación de trabajo.- Quinto.- Que, constituye
principio de la función jurisdiccional la observancia del debido proceso y la tutela jurisdiccional
que consagra el inciso 3 del artículo 139 de la Constitución Política del Estado; en igual sentido,
el artículo I del Título Preliminar del Código Procesal Civil, establece el derecho de toda persona
a la tutela jurisdiccional efectiva para el ejercicio o defensa de sus derechos o intereses con suje-
ción a un debido proceso.- Sexto.- Que, es principio de la función jurisdiccional la motivación
escrita de las resoluciones en todas las instancias, tal como dispone el inciso 5 del artículo 139
de la Constitución Política del Estado, concordante con el artículo 12 de la Ley Orgánica del Poder
Judicial, principio que además se encuentra contenido en el inciso 3 del artículo 122 del Código
Procesal Civil, según el cual, las resoluciones judiciales deben contener los fundamentos de hecho
que sustentan la decisión y los respectivos de derecho con la cita de la norma o normas aplicables
en cada punto según el mérito de lo actuado, motivación que de acuerdo al inciso 4 de la preci-
tada norma procesal, debe incidir respecto de todos los puntos controvertidos en el proceso, no
pudiendo el juzgador fundar su decisión en hechos diversos de los que han sido alegados por las
partes conforme prevé el artículo VII del Título Preliminar del Código Procesal Civil.- Sétimo.-
Que, conforme a lo anotado precedentemente corresponde desarrollar la causal incorporada en
forma excepcional por este Supremo Colegiado, esto es, evaluar si la diferenciación entre respon-
sabilidad contractual y extracontractual es determinante para otorgar indemnización por daños
y perjuicios.- Octavo.- Que, la finalidad de la responsabilidad civil es resolver conflictos entre
particulares como consecuencia de la producción de daños, por ello durante mucho tiempo se
ha debatido en la doctrina el problema referido a la unidad de la responsabilidad civil como
sistema normativo, que según el criterio tradicional debe mantenerse como ámbitos separados
la responsabilidad civil contractual de la responsabilidad extracontractual, en la medida que el
origen del daño causado difiere en un caso y en el otro, siendo ésta posición actual del Código
Civil peruano que ha regulado por separado ambos aspectos de la responsabilidad civil.- Nove-
no.- Que, sin embargo la doctrina moderna, aunque no en forma unánime considera que la
responsabilidad civil es única y que si bien existen solamente algunas diferencias de matiz entre
la responsabilidad contractual y la extracontractual, por lo que no obstante que aun cuando el
Código Civil se adhiere al sistema tradicional, ello no es impedimento para que se entienda que
la responsabilidad civil en el sistema jurídico es una sola y que es la reparación del daño el as-
pecto que debe orientar la actuación del órgano jurisdiccional, en consecuencia, la diferenciación
entre responsabilidad contractual y extracontractual no es determinante para otorgar indemni-
zación por daños y perjuicios, ya que conforme se señalo la responsabilidad civil es una sola, a
lo que se agrega que en la resolución casatoria de esta Sala Civil de fecha treinta de julio de dos
mil doce, que obra de fojas ochocientos sesenta y nueve a ochocientos setenta y cuatro, se dis-
puso que la Sala Civil de la Corte Superior realice un análisis exhaustivo de los medios probatorios
que se indican, lo que implícitamente constituye un mandato para que la Sala Civil se pronuncie
sobre el fondo del asunto.- Décimo.- Que, en consecuencia al advertirse que la impugnada no
se encuentra debidamente motivada conforme lo prevé las normas antes comentadas, se confi-
gura la causal de infracción normativa procesal concedida en forma excepcional - infracción
normativa procesal del artículo 139 incisos 3 y 5 de la Constitución Política del Estado -, motivo
por el cual no corresponderá emitir pronunciamiento alguno respecto a las demás denuncias
formuladas.- Estando a lo dispuesto en el inciso 1 del artículo 396 del Código Procesal Civil,
declararon: FUNDADO el recurso de casación interpuesto por Ana María Huamán Estrada, de
fojas novecientos catorce a novecientos veintitrés; en consecuencia, NULA la sentencia de vista
obrante de fojas novecientos seis a novecientos nueve, de fecha catorce de febrero de dos mil
trece, expedida por la Sala Mixta - Sala Penal de Apelaciones de la Corte Superior de Justicia de
Pasco, que revoca la sentencia apelada obrante de fojas setecientos treinta a setecientos treinta
y siete, de fecha veintinueve de marzo de dos mil diez, la cual declara infundada la demanda,
reformándola la declara improcedente; ORDENARON el reenvío de los autos a la Sala Superior
de origen a efectos de que expida una nueva sentencia con arreglo a ley; RECOMENDARON al
Ad quem que en los procesos de indemnización por daños y perjuicios, tenga mayor cuidado en
el estudio de los expedientes; DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en el
Diario Oficial El Peruano, bajo responsabilidad; en los seguidos por Ana María Huamán Estrada
contra la Compañía Minera Sol Sociedad Anónima y otro, sobre Indemnización por Daños y
Perjuicios; y los devolvieron. Ponente Señor Miranda Molina, Juez Supremo.-
SS.
Ticona Postigo / Valcárcel Saldaña / Del Carpio Rodríguez / Miranda Molina / Cunya Celi
IMPUGNATORIO
Actualidad
Área
Civil Impugnatorio
Impugnatorio
Contenido
DOCTRINA RENZO CAVANI: Tres fases para decretar la nulidad procesal 254
ROBERTO GONZÁLEZ ÁLVAREZ: ¿Puede interponer casación quien no es
COMENTARIO DE parte ni tercero legitimado? Supremos descuidos y mera funcionalidad del
JURISPRUDENCIA
262
vértice orgánico de justicia civil (Comentario a la Casación N.º 3976-2012
Lima. Prescripción adquisitiva)
CONSULTA: De revocarse la decisión de primera instancia que rechaza un
NOS PREGUNTAN Y
CONTESTAMOS
medio probatorio se debe realizar una audiencia de pruebas complementa- 284
ria para dicho medio probatorio, cuando no requiera actuación
RESEÑA DE La pretensión impugnatoria se encuentra limitada en la apelación (Casación
JURISPRUDENCIA
286
N.º 5099-2011-Callao)
DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina Práctica
1. Premisa
2. Vicio y nulidad: una necesaria precisión
3. El procedimiento lógico para decretar la nulidad procesal
SUMARIO
Civil Impugnatorio
muchos obstáculos en el camino del acto vi- alguna; no obstante, una serie de factores
ciado para que pueda desembocar en un acto intervienen para impedir el tránsito entre la
nulo: los principales son, sin duda alguna, los generación del vicio y la deconstitución de
llamados “principios de la nulidad” (rectius: los efectos del acto que lo padece, mediante
técnicas procesales destinadas a impedir la la decretación de nulidad. Por consiguiente,
decretación de nulidad), siendo que la gran el razonamiento judicial que se lleva a cabo
mayoría de ellos tiene por misión principal para decretar o no una nulidad es uno de los
impedir que el vicio genere una nulidad. Por puntos álgidos en el tema de la nulidad.
tanto, es posible sostener lo siguiente: toda El juez que tiene en sus manos la decisión
nulidad proviene de un vicio, pero no todo vicio de decretar o no la nulidad, antes de decidir,
produce una nulidad4. necesariamente debe atender a diversas
reglas y principios (que configuran técnicas
IMPORTANTE procesales), cuyo propósito es determinar si
debe o no producirse la nulidad. Unas y otras
El vicio es la imperfección estructural normas inciden sobre una gama bastante
del acto procesal, esto es, un defecto amplia de hipótesis, entre las que se encuen-
presente en la propia configuración tran conductas de las partes, el tipo de vicio,
del acto, concretamente, en uno de inclusive, las propias consecuencias (eficacia)
sus requisitos. de la decretación de nulidad.
Sin embargo, es necesario abstraerse un tanto
del plano de los hechos, tras lo cual se advierte
3. El procedimiento lógico para de- que la aplicación de aquellas técnicas tiene
cretar la nulidad procesal lugar en una compleja operación lógica que
Teniendo muy presente los momentos en que todo juez realiza para optar o no por la decre-
acontecen el vicio y la nulidad en el proceso tación de nulidad. Se trata, en otras palabras,
(uno, contemporáneamente con la realización de un procedimiento lógico-mental que lleva a
defectuosa del acto procesal; el otro, a través cabo el órgano jurisdiccional para decidir si anula
de la decretación del juez), corresponde o no. Dicho procedimiento podría ser dividido
ahora determinar qué es lo que hay entre en tres fases distintas, en tanto que cada una
ambos eventos a partir de la perspectiva de de ellas refleja el razonamiento empleado
la cognición judicial. por el juez5.
La nulidad no se produce por el solo hecho
5 Soy cercano a la propuesta de Antonio Cabral.
de la existencia de un acto viciado. No hay Nulidades do processo moderno. Ob. cit., p. 49,
duda de que este es su presupuesto, pues sin quien afirma que “el juez, primeramente, tiene que
vicio no puede haber decretación de nulidad ‘descubrir’ en el ordenamiento la fattispecie prevista
como formalidad del acto procesal. En seguida,
compara su concordancia con el acto efectivamente
un sistema que permitiese a cada una de las partes practicado (perfección-eficacia), y después procede
la apreciación de la validez de los actos, pudiendo a la verificación de los fines de la ley, para analizar
cada una de ellas negarse a reconocerlos mediante si la invalidez debe o no ser decretada (el análisis
la simple alegación de nulidad: se abrirá camino, de la instrumentalidad, que veremos adelante)”.
inclusive, al dolo procesal de las partes, diluyéndose Más adelante, el profesor carioca afirma lo siguien-
su sujeción a la autoridad del juez y pulverizándose te: “El juez moderno, entonces, realiza una doble
las garantías de todos en el proceso” (las cursivas son operación para concluir por la invalidación de un
del original). acto procesal. Primeramente, cumple el binomio
4 Esta es una de las notas características de la nulidad perfección-eficacia: compara las formas previstas en
en el marco de un procedimiento, a diferencia de lo la ley (el modelo normativo), con aquellas del acto
que ocurre en el campo del derecho material, donde practicado (el soporte fáctico). Si se concluye por la
no hay una clara diferenciación entre acto viciado y perfección formal, es garantizada la eficacia del acto
acto nulo. Cfr. De Giovanni. Biagio La nullità nella procesal. Considerando si hay atipicidad o incumpli-
logica del diritto. Nápoles: Morano, 1966, pp. 10 y ss. miento de la forma, no debe haber automáticamente
Civil Impugnatorio
Es claro que existen más técnicas o filtros de pueden converger en esta segunda fase de
la decretación de nulidad, que pueden dar cognición porque, al fin y al cabo, se aplica
origen a muchos otros supuestos. Lo que se ha una regla o un principio de la nulidad para
querido demostrar con estos ejemplos es que evitar decretarla.
el objetivo del juez, en esta segunda fase, es
interferir en la producción de la nulidad. 3.3. Tercera fase: La eficacia de la decre-
tación de nulidad
Asimismo, es correcto afirmar que el vicio,
Cuando las técnicas-filtro no pueden contener
cualquiera que este sea, siempre que sea
el tránsito del acto viciado a la nulidad, se ha-
detectado (primera fase), llegará, a nivel cog-
brá ingresado a la tercera fase, que es precisa-
noscitivo, a la segunda fase. Es aquí donde el
mente la decretación de nulidad. Sin embargo,
juez raciocina respecto de si el vicio quedará
no todo queda en la simple decretación de
subsanado o, de lo contrario, si debe pronun-
nulidad de un acto viciado. Ya sabemos que
ciar la nulidad (tercera fase).
la nulidad producirá la invalidación (rectius:
Ahora bien, es oportuno realizar una impor- una situación de ineficacia por defecto en la
tante consideración: el hecho que la cognición estructura) del acto viciado, pero, dado que la
del juez no supere esta fase puede reflejarse eficacia de la nulidad es retroactiva (ex tunc),
en dos pronunciamientos concretos, bien puede suprimir, además del acto viciado que
distintos entre sí: la improcedencia y la infunda- produjo la nulidad, los actos que le siguieron.
bilidad del pedido de nulidad (tomando como No se olvide que el procedimiento es una
premisa, claro está, que sea la parte quien sucesión dinámica de actos coligados entre sí
denuncie el vicio.) Así, el juez puede resolver por un vínculo de causalidad, en donde unos
diciendo que el vicio no puede generar una se producen por la realización de otros.
nulidad porque el acto no causó perjuicio, Podría afirmarse temerariamente que todos
hubo convalidación, etc. (juicio sobre el mérito los actos posteriores al vicio también son
de la cuestión)6, pero también puede evitar
alcanzados por los efectos de la nulidad; sin
pronunciarse sobre la nulidad porque no se
embargo, ello no es así ni tampoco puede
presentaron los elementos necesarios para
serlo. Hay actos que, sin duda alguna, son
decidir si debe decretarla o no, como en los
perjudicados por el acto defectuoso producto
casos en donde ya existe un pronunciamiento
de la irradiación del vicio, los cuales, por lógica
de fondo sobre el vicio denunciado, no hay elemental, son aquellos posteriores y nunca
interés para pedir la nulidad, la denuncia es los anteriores. Es absolutamente claro que el
realizada por quien propició o toleró el vicio, vicio, por ser originario y contemporáneo a la
etc. (juicio sobre los elementos necesarios para realización de un acto, no puede perjudicar a
un pronunciamiento sobre el mérito). los actos que se han realizado con anterioridad.
De esta manera, ambos pronunciamientos, No obstante, esta irradiación solo se da en los
a pesar de configurarse en forma distinta, supuestos de dependencia causal de un acto
respecto de otro. Tomemos como ejemplo el
caso de una arbitraria denegación de la actua-
6 Es por ello que es una omisión grave de nuestro
CPC no solo no haber regulado el incidente como ción de un medio probatorio en la audiencia
procedimiento general al cual se remitan situaciones de pruebas. Producida la sentencia y, luego,
específicas, sino, principalmente, no haber destinado impugnada, el juez revisor deberá decretar la
a la nulidad un procedimiento autónomo. Si bien el nulidad (parcial) del procedimiento hasta el
tratamiento de la nulidad, en la práctica, puede ser
tratado como incidente por un juez que busque una momento anterior a la comisión del vicio (que
conducción más ordenada del proceso, no queda nin- se dio en la audiencia de pruebas). En este
guna duda de que la legislación peca por “omisión”. caso hipotético, la audiencia debería volver
Se necesita, por tanto, a mi juicio, una regulación del
incidente, en cuyo marco se debe tramitar cualquier
a realizarse, por lo que esta, la resolución que
discusión sobre la nulidad. dispuso traer los autos para sentenciar y la
Civil Impugnatorio
en esta última hipótesis, cuáles son sus efectos Cintra, Antonio Carlos de Araújo; Dina-
frente al propio acto viciado y a los posteriores, marco, Cândido Rangel; Ada Pelle-
definiendo correctamente el impacto que la grini Grinover, Ada. Teoria geral do
nulidad debe tener en el proceso. processo, 22.ª ed. revisada y actualizada.
São Paulo: Malheiros, 2006.
Bibliografía Conso, Giovanni. I fatti giuridici processuali
Cabral, Antonio do Passo. Nulidades no penali. Perfezione ed efficacia. Milán: Giuf-
processo moderno. Contraditório, proteção frè, 1955.
da confiança e validade prima facie dos atos De Giovanni, Biagio. La nullità nella logica del
processuais. Río de Janeiro: Forense, 2009. diritto. Nápoles: Morano, 1966.
Civil Impugnatorio
COMENTARIO DE JURISPRUDENCIA
Comentario de jurisprudencia
Comentario a la
CAS. N.º 3976-2012
¿Puede interponer casación quien
Lima. Prescripción
adquisitiva
no es parte ni tercero legitimado?
Supremos descuidos y mera funcionalidad del vértice
orgánico de justicia civil
1. Introducción
SUMARIO
Civil Impugnatorio
tercero coadyuvante impugnante pide se de inclusión” con los demandantes para
revoque el fallo en la parte que señala acceder a la prescripción adquisitiva de
que los efectos que siguen al haberse dominio, sin tener en cuenta que con igual
declarado fundada la demanda no le derecho se admitió la intervención de otro
alcanzan. Ello queda desestimado porque tercero legitimado, existiendo, por tanto,
por su calidad de tercero no puede resultar desigualdad respecto al mismo derecho.
beneficiado con la sentencia. i) La ejecutoria suprema señala como ma-
teria jurídica en debate la determinación
¿SABÍA USTED QUE? de si la omisión de pronunciamiento en la
sentencia de vista respecto a la apelación
El juez de primera instancia para ad- de la Resolución N.° 33 y la decisión
mitir una intervención coadyuvante recaída en la Resolución N.° 89 infringen
se tiene que cumplir una exigencia las garantías mínimas que conforman
que solo recae en quien es parte el derecho al debido proceso y debida
principal o, en todo casos, atendien- motivación, reconocido en el artículo 139
do a las figuras más próxima al caso incisos 3 y 5 de la Constitución Política. Los
concreto, correspondería exigirse “fundamentos”, en tanto importan aquí,
a un litisconsorte activo o a un ter- son:
cero legitimado por intervención
litisconsorcial activa, pero no a un i.a) Sobre la Resolución N.° 33: El artículo
coadyuvante, pues este se caracte- 369 del CPC señala que si el pronun-
riza porque (i) defiende un interés ciamiento de una apelación queda
ajeno (ii) solo es parte procesal y no reservado, para que sea resuelta —la
material, (iii) la admisión de su in- apelación— por el Superior en la
tervención no retrocede el desarrollo sentencia de vista, la única condición
del procedimiento y (iv) su presencia de ello es que la sentencia de primer
no delimita ni influye en los alcances grado sea apelada sin importar si
subjetivos de la sentencia. quien impugna es o no quien quedó
a la espera de que se resuelva su
2.3. Casación incidencia. En autos, se desestimó el
pedido de intervención coadyuvante
h) El último tercero —aquel que en pri-
del último tercero, por lo que no sien-
mera instancia pidió intervenir como
do parte no podía apelar la sentencia
coadyuvante e impugnó la decisión que
de primera instancia, pero esta fue
le denegaba su pedido, concediéndose
apelada por los dos primeros terceros
la apelación sin efecto suspensivo y con
(legitimados) incorporados al proceso
calidad de diferida y que en segunda ins-
como intervinientes coadyuvantes; de
tancia pidió intervenir como litisconsorte,
siendo también desestimado dicho pedi- modo que el juez debió pronunciarse
do, es decir, quien no es parte ni tercero en sentencia sobre la apelación de
legitimado, sino simplemente tercero— la resolución N.° 33. Resulta claro
interpone recurso de casación, el que que se ha configurado la infracción
fue declarado procedente, con la causal al debido proceso por omisión de
de infracción normativa de los incisos 3 pronunciamiento.
y 5 del artículo 139 de la Constitución, i.b) Sobre la Resolución N.° 89: La Sala
alegando que en la sentencia de vista no Superior no se pronunció ni mucho
se ha sustentado debidamente por qué menos fundamentó la aceptación o
se le ha apartado del proceso como litis- rechazo del pedido de intervención
consorte “pasivo” afectando su “derecho litisconsorcial.
Civil Impugnatorio
siguiente: ¿puede quien no es parte im- inobservancia de lo dispuesto en el
pugnar una sentencia? De igual modo la segundo párrafo del artículo 97 del CPC
respuesta también debería ser una sola. Si que permite admitir la intervención soli-
esto es así, en el caso concreto, por qué en citada en segunda instancia. Aquí salta la
relación a la apelación de la sentencia de observación de la condición “pasiva” de
primera instancia la Sala Suprema anota la intervención litisconsorcial denegada.
que el tercero con pedido de intervención De no ser un error de transcripción en la
coadyuvante denegada, pero impugnada, ejecutoria suprema, la condición (pasiva)
no es parte y no podía apelar la sentencia de la intervención solicitada, el anatema
de primera instancia, y sobre la interpo- de una mala asesoría para ese tercero
sición de la casación no repara que fue estaría latente.
realizada únicamente por un tercero con
pedido de intervención litisconsorcial pa- 3.3. ¿La Sala Suprema puede acrecentar
la “materia jurídica” en debate más
siva denegada y no impugnada, es decir,
allá de los fundamentos de parte
por quien era tercero más nada. contenidos en la casación?
La ejecutoria suprema construye su pa- El tercero que interpone el recurso de casa-
radoja cuando afirma que un tercero no ción, según aparece de la propia ejecutoria
puede apelar la sentencia, pero declara
suprema, alega que en la sentencia de
procedente una casación interpuesta
vista no se ha sustentado debidamente por
por un tercero sin invocar, y sin poder
qué se le ha apartado del proceso como
invocar, la procedencia excepcional de la
casación (artículo 392-A del CPC)1. Con litisconsorte “pasivo” afectando su “de-
pocas palabras, la Sala Suprema hace lo recho de inclusión” con los demandantes
que al mismo tiempo establece que no para acceder a la prescripción adquisitiva
corresponde hacer: que quien es tercero de dominio, sin tener en cuenta que con
impugne una sentencia. igual derecho se admitió la intervención
de otro tercero legitimado, existiendo por
Impugnar requiere tener condición de
tanto desigualdad respecto al mismo de-
parte principal o secundaria, en esta última
recho. La causal invocada en la casación,
configuración —parte secundaria— encaja
y con la que fue declarada procedente, es
la figura del interviniente coadyuvante y
la infracción normativa del artículo 139,
en la primera —parte principal— la figura
incisos 3 y 5, de la Constitución, claro está,
del interviniente litisconsorcial. Quien so-
con la fundamentación partial referida.
licita intervención y esta es denegada, aun
cuando impugne esa denegación, no deja Por encima de esa fundamentación, la Sala
de ser tercero y, por tanto, no deja de estar Suprema señala como materia jurídica en
impedido normativamente de impugnar la debate la determinación de si la omisión
sentencia de la instancia que fuere. de pronunciamiento en la sentencia de
vista respecto a la apelación de la Reso-
Nota al margen: Cuando se emite la
lución N.° 33 y la decisión recaída en la
Resolución N.° 89 se faltó a la garantía
Resolución N.° 89 infringen las garantías
de motivación de la decisión y, sobre-
mínimas que conforman el derecho al
manera, a la de legalidad por la abierta
debido proceso y debida motivación
reconocido en el artículo 139, incisos 3 y
1 La deficiente redacción de esta disposición pone en 5 de la Constitución Política.
frente la paradoja de entender si la exigencia que
Asumiendo que el fundamento (de “parte”)
establece recae en la resolución impugnada o en el
recurso de casación. Dice: “Aun si la resolución impug- del recurso de casación recae en el cuestio-
nada no cumpliera con algún requisito previsto en el namiento a la Resolución N.° 89, queda
artículo 388…”. El artículo 388 no hace referencia a claro que la Sala Suprema configura una
los requisitos de la resolución impugnada, sino a los
de la casación.
“materia jurídica en debate” que no ha sido
Civil Impugnatorio
del juzgador superior. Corresponde ser en sus labores de justicia, pues solo logran
controlada, por el órgano pertinente, toda oír los susurrados dictados procedimentales
actividad de esta índole. del Código Civil que no diferencian entre
Nota al margen: Devuelto el expediente a acción y pretensión; todo esto muy a pe-
la Sala Superior de origen, ¿cómo se verifi- sar de que el procesalismo que anima al
caría si corresponde o no declarar propie- Código Procesal Civil diferencia claramente
tarios de todo el bien a los demandados?, el derecho fundamental de acción de la
¿qué pasaría si el juez superior verifica que expresión volitiva del actor o reconviniente
no corresponde tal declaración y los inte- dirigida a su contraparte, para supeditar su
resados (perjudicados) no se incorporan al interés al propio sobre un bien, a través de
proceso? Respondiendo a la primera pre- la funcionalidad del juez6.
gunta, el juzgador superior hará uso de la Hay, entonces, un disloque conceptual en-
presunción de fraude o colusión entre las tre los Códigos Civil y Procesal Civil sobre
partes para los fines del artículo 106 del la acción. El primero asume la acción y la
CPC, ordenando la citación respectiva y la pretensión como sinónimas y el último la
notificación de la misma en la forma más diferencia claramente. El Código Civil es
adecuada. Respondiendo a la segunda devoto de la acción del procedimentalis-
pregunta, basta verificar la regularidad de mo afianzado en el pensamiento romano
la notificación del llamamiento regulado que sobre la actio tuvo Celso7. En cambio,
por el numeral indicado y solo quedará el Código Procesal Civil es adepto del
declarar propietarios de todo el inmueble procesalismo y se ajusta a las exigencias
a los demandantes. del constitucionalismo actual que afirma la
acción como un derecho fundamental en
4. Apreciaciones conceptuales com- la idea del principialismo fundamental8,
prometidas en la resolución co- y deja claramente perfilada la pretensión
mentada procesal con una estructura de la que sus
4.1. Prescripción adquisitiva: ¿Pretensión elementos subjetivos, objetivos, de acti-
o acción? vidad y fácticos (causa petendi y petitum)
En los numerales 2 y 9 de los fundamentos dan cuenta de un manejo técnico procesal
de la ejecutoria suprema, se usa la expre- que nunca podrá ser el del derecho fun-
sión “acción de prescripción adquisitiva”, damental de acción9.
pervirtiendo la naturaleza procesal de la ¿Cómo superar el disloque conceptual
prescripción adquisitiva (que es la de ser entre los Códigos Civil y Procesal Civil
pretensión) y, claro está, la fundamenta- sobre la acción? Acudiendo a la distinción
lidad de la acción. entre entidades normativas, propiamente
La doctrina procesal de la segunda mitad entre disposición y norma; lo que pone
del siglo pasado, particularmente la lati- en medio del problema, y como solu-
noamericana, gritó5 tan fuerte la distinción ción determinante, a la interpretación
entre acción y pretensión que al parecer los
jueces quedaron ensordecidos para seguirla 6 Sobre la pretensión procesal, véase Guasp Delgado,
Jaime, La pretensión procesal, Civitas, Madrid, 1985.
5 Ramírez Arcila, Carlos, Teoría de la acción, Temis, 7 Sobre la dualidad de la acción que expone el error
Bogotá, pp. 62 y ss. 1978; Acción y acumulación de de Savigny al concebir la idea de derecho subjetivo
pretensiones, Temis, Bogotá, pp. 22 y ss; La pretensión en la acción. González Álvarez, Roberto, Neopro-
procesal, Temis, Bogotá, 1986, p. 26; Fundamentos cesalismo. Teoría del proceso civil eficaz, Ara editores,
procesales y pretensiones contencioso-administrativas, Lima, 2013, p. 698.
Temis, Bogotá, 1983, p. 23; Devis Echandía, Her- 8 Ibídem, p. 218.
nando, Nociones generales de derecho procesal civil, 9 Sobre el principio fundamental de acción, Ibídem, p.
Aguilar, Madrid, 1966, p. 186. 677.
Civil Impugnatorio
contractualista del proceso que trae14 de la importancia e influencia con la actividad
mano diferenciaciones tan nocivas como juzgadora del Tribunal Constitucional,
excepciones materiales y procesales, pre- pues los “fundamentos” jurídicos de sus
tensión material y procesal, legitimación sentencias son pieza clave para manejar
ad processum y ad causam, acción material su doctrina y su precedente.
y acción procesal, etc. Motivación y fundamentación suelen
La diferenciación privatista entre “fondo” transitar como sinónimos en la función
y “forma” es manante de muchos proble- jurisdiccional; de modo que los manuales
mas en el mundo procesal, de los que este de la Academia de la Magistratura ponen
solo se libra si supera la conceptuación más empeño en los criterios de claridad
contractualista del proceso y entiende lingüística orden estructural, diagramación
que en sus adentros le es tan propio lo amigable, fortaleza argumentativa, cohe-
subjetivo material y lo subjetivo procesal, rencia lógica, etc. y hasta un precedente
es más, la “relatividad contextual”15, entre del Consejo Nacional de la Magistratu-
normas formales y sustantivas, determina ra (Resolución N° 120-2014-PCNM)
que estas en el momento de la constata- establece los criterios de evaluación de
ción de su inobservancia operan como calidad de las decisiones jurisdiccionales,
sus opuestas; así, la norma de la forma no sin dejar en claro que el empeño de la
escrituraria pública de la donación es una Academia antes referida es importante, sin
norma formal de validez del contrato de que haya un espacio claro para diferenciar,
donación, pero cuando se constata su in- o establecer que conviene o no diferenciar,
observancia opera como norma sustantiva entre motivación y fundamentación.
sobre la producción de la sentencia que A esto se suma que no es de preocupación
la aplica; igualmente, la norma del pago central en la materia procesal referida a
del precio a favor del vendedor, cuando la motivación de la decisión jurisdiccional
se constata su inobservancia en el proceso, una diferenciación tan exquisita como la
es aplicada subsuntivamente por lo que que insinúo. Sin embargo, la Constitución,
opera como norma formal en el proce- los pronunciamientos del Tribunal Consti-
dimiento de subsunción. Esta relatividad tucional y las sentencias en casación po-
contextual no funciona solamente frente nen en quiebre esa indiferencia procesal.
a las normas formales y sustantivas, sino Veamos.
la metamorfosis que implica también se a) El artículo 139, inciso 5, de la Consti-
da frente a las normas téticas e hipotéticas tución establece la garantía de la “mo-
y a las normas primarias y secundarias16. tivación”, se entiende de resoluciones
judiciales, con mención expresa de la
4.3. La sentencia: ¿Se fundamenta o se
ley aplicable y de los fundamentos de
motiva?
hecho en que se sustentan. Es decir,
La ejecutoria suprema comentada enca- con otras palabras, se garantiza la
beza su parte de motivación con el rubro “motivación” con “fundamentos” de
“Fundamentos de esta Sala Suprema”. derecho y de hecho.
Al parecer el uso de los “fundamentos”
b) Es un lugar común en las sentencias
en una sentencia ha cobrado tamaña
del Tribunal Constitucional que el
derecho a la debida motivación exige
14 Nieva Fenoll, Jordi, Jurisdicción y proceso, Marcial fundamentación jurídica17.
Pons, Madrid, 2009, p. 16.
c) En la misma ejecutoria suprema que
15 Ferrajoli, Luigi, Principia iuris, Trotta, T. I, 2011, p.
835. se comenta, el colegiado anota (punto
16 González Álvarez, Roberto, Neoprocesalismo. Teoría
del proceso civil eficaz, Ara editores, Lima, 2013, p. 17 Tribunal Constitucional (Perú), Sentencia recaída en
699. el Expediente N.° 04228-2005-HC/TC, f.j. 1.
Civil Impugnatorio
sistema. No apareció ante nosotros como metaprincipio, un principio de principios;
una solución creada por nosotros frente por tanto, contiene todos los principios
a un problema nuestro21. Apareció ante procesales; (v) “que es un principio gene-
nosotros como una historia con muchas ral del derecho” porque así se confunde
premisas; de modo que esa historia se con un valor y encuentra resistencia en
cuenta de distintas maneras, la mayoría el derecho positivo; (vi) “es sustantivo y
de ellas mal contadas, pues se trata de obra como control de constitucionalidad”
una historia que nosotros, los del Civil Law, porque así sustituye o, peor, es lo mismo
leemos del Common Law para nuestros que la y proporcionalidad; (vii) “es un
problemas olvidando que esa historia se derecho que contiene un haz de derechos”
hizo como solución creada no por nosotros porque eso hace pensar que no tiene un
para problemas que no eran nuestros. Eso contenido propio; etc. Acaso no es muy
equivale a leer en español aquello que familiar el elenco de equivocadas conse-
está escrito en inglés. cuencias sobre el debido proceso, a partir
Si esto es así, ¿por qué la historia sobre el de sus premisas falaces, en el trabajo del
debido proceso legal nos llegó mal conta- Tribunal Constitucional. Claro que sí, son
da? Simplemente porque sus premisas, las los pronunciamientos del Alto Tribunal los
que le dan forma y tratamiento concep- que pervierten el tratamiento del debido
tual, son equivocadas; pues premisas mal proceso con una nefasta consecuencia en
construidas crean siempre historias mal la justicia civil. Por eso la Corte Suprema
contadas; así, son premisas equivocadas debe fijar con cabalidad la premisa que
sobre el debido proceso: (i) “que es un corresponde asumir en nuestro sistema
patrimonio del common law” porque nos sobre el particular; además ¿cuál es esa
lleva a pensar que en el Civil Law no existe premisa? La del fair trial. Explico.
la idea de proceso equitativo, proceso
justo o proceso con justicia; (ii) “que es un ¿SABÍA USTED QUE?
derecho a la tutela jurisdiccional” porque
nos lleva a la idea de que hay que sustituir
Para impugnar, se requiere tener
el derecho de acción por el derecho al
condición de parte principal o se-
debido proceso; (iii) “que es un conjunto cundaria: en esta última configura-
de garantías mínimas que obligan al Esta- ción —parte secundaria—, encaja la
do, por ejemplo, a motivar la sentencia” figura del interviniente coadyuvante
porque conduce a la idea de sustituir la y, en la primera —parte principal—,
tutela jurisdiccional efectiva por el debido la figura del interviniente litiscon-
proceso; (iv) “que es un conjunto de prin- sorcial. Quien solicita intervención
cipios procesales” porque nos presenta un y esta es denegada, aun cuando se
impugne esa denegación, no deja de
ser tercero y, por tanto, no deja de
21 Sobre la diferencia entre los procesos civiles norteame- estar impedido normativamente de
ricano y sudamericanos, cf. Silvestri, Elisabetta, “Il
profilo comparatístico”, en Denti, Vittorio, La giustizia
impugnar la sentencia de la instancia
civile. Lezioni introduttive, Bologna, Il Mulino, 1989, que fuere.
pp. 45 y ss; Cappalli, Richard B.,“Procedimiento
civil comprado: Estados Unidos, Chile y Sudame- Nadie duda que el origen del debido
rica”, en Revista Chilena de Derecho, vol. 19, N.º 2,
1992, p. 203; Taruffo, Michele, Sobre las fronteras.
proceso se dio en Inglaterra y luego en
Escritos sobre la justicia civil, trad. de Beatriz Quintero, Estados Unidos de Norteamérica; pues
Bogotá, Temis, 2006, p. 57; Garapon, Antoine y bien, ahí está la premisa que se necesita
Papadopoulos, Loannis, Juzgar en Estados Unidos esclarecer. El debido proceso proviene con
y en Francia. Cultura jurídica francesa y Common Law,
trad. de Viviana Díaz Perilla, Bogotá, Legis, 2008.
el Estado liberal que se erige en Inglaterra
Civil Impugnatorio
Se debe sustituir el debido proceso legal búsqueda de regularidad procesal; (v) el
por el “proceso justo” porque: (i) la regula- fair trial es germen de la igualdad de armas
ridad procesal tiene que ver con el fair trial procesales, es decir, del contradictorio ante
de la enmienda VI y no con el due process un juez imparcial28; y, (vi) el due process of
of law de las enmiendas V y XIV, aunque law en el civil law se engancha al Estado de
no se puede negar que mediante el judicial derecho y no al Estado constitucional. La
review y el contenido de la Enmienda XIV mención de la justicia en el proceso justo
se desarrolló el fair trial o proceso justo; es clave procesal del constitucionalismo
(ii) el due process of law tiene proyección último.
dominante constitucional penal y pro- Finalmente, si la disposición del artículo
cesal penal constitucional, generando 139, inciso 3, de la Constitución refiere
su aislamiento en la justicia civil; (iii) el al “debido proceso” es un problema
due process of law es, mediante el judicial ampliamente superable con la distinción
review y el stare decisis, herramienta de entre disposición y norma, pues será la
construcción de contenidos fundamentales interpretación la que se asegure de mane-
propia del juez del common law, en cambio jar la consolidación del “proceso justo” en
en el civil law ese rol se consigue con la sustitución del “debido proceso”. Aquí hay
razonabilidad27 y la proporcionalidad; (iv) que reconocer que en esa ruta el intérprete
el faires Verfahren (juicio justo) construido supremo del orden jurídico, el Tribunal
por los alemanes, tomando el fair trial an- Constitucional, solo ha puesto el mayor
glosajón y el giusto processo italiano, tiene empeño en hipertrofiar su confusión al
compatibilidad plena con el civil law en la manejar el “debido proceso”. Entonces,
corresponde a la justicia civil, desde su
resultado del Rechtsstaatsprinzip (Estado de derecho) vértice orgánico, manejar las garantías
distinto al principio de proporcionalidad. En Italia
la Constitución de 1948 (artículo 24 y 111); con la
del proceso justo y tutela jurisdiccional
modificación constitucional de 1999 (artículo 111) con corrección.
consagra el giusto processo, que se diferencia de la ra-
ggionevolezza, esta última es el equivalente al debido 4.5. Omisión de pronunciamiento res-
processo legal (due proces of law) norteamericano en pecto a una apelación: ¿Configura la
su faz sustantiva; en el ámbito doctrinal se estudia el infracción al “debido proceso” o a la
processo équo como la expresión normativo-regional tutela jurisdiccional efectiva?
del giusto processo. En Francia, la Constitución de
1958 sigue la Convención Europea de Derechos En la ejecutoria suprema comentada la
Humanos que consagra el derecho a un proceso Sala Suprema expresa que “resulta claro
equitativo (procés èquitable). En España la Constitu- que se ha configurado la infracción al
ción de 1978 (artículo 24) refiere a la tutela judicial
efectiva. En Portugal, la Constitución de 1976 (artículo debido proceso por omisión de pronuncia-
20) también refiere a la tutela jurisdiccional efectiva. miento respecto a la apelación”. Esto sig-
En Brasil, la Constitución Federal de 1988 (artículo 5, nifica que la omisión de pronunciamiento
inciso 54) si bien refiere a que nadie será privado de
sobre una apelación genera la infracción
libertad o de sus bienes sin el devido processo legal
ha dado lugar a su mejor doctrina en el tratamiento de la garantía del debido proceso (rectius,
del proceso justo. En Argentina, la Constitución de del proceso justo). ¿Cómo se determina
1853, 7 veces reformada (artículo 18), consagra la cuando una irregularidad afecta el con-
inviolabilidad de la defensa en juicio. En Colombia,
la Constitución Política de 1999 (art. 29) habla de
tenido del proceso justo o de la tutela
debido proceso al igual que la Constitución peruana
de 1993 (artículo 139, inc. 3) con todos los problemas 28 Sobre debido proceso e imparcialidad del juez Guar-
que ello significa en una jurisprudencia desinformada nieri, Carlo, “Divisione del potere, giusto processo e
y, por tanto, equivocada. separazione delle carriere”, en Giusto processo? Intro-
27 Siqueira Castro, Carlos Roberto, ob. cit., pp. 141; duzione di diritto fondamentali dei cittadini o creazione di
Tucci, Rogério Lauria y Tucci, José Rogério Cruz, canoni processuali di rango costituzionale? Scritti in onore
Devido processo legal e tutela jurisdicional, São Paulo, di Giuseppe Di Federico, al ciudado de Carlo Guarnieri y
RT, 1993, pp. 18 s. Francesca Zannotti, Padua, Cedam, 2006, pp. 86 y ss.
Civil Impugnatorio
de un acto procesal –a él le corresponden pretación a contrario”33; y, b) la perversión
controles de admisión o procedencia, por que la confusión entre “interpretación” y
eso se declara (im)procedente la demanda “argumento a contrario” y el mal uso de
y no la pretensión– sino de lo que se ha este último generan en el desarrollo del
pedido y fijado como objeto de tutela sentido técnico de la sumilla en el manejo
con la demanda y de controversia con la del precedente y en la interpretación del
contestación, es decir, de la pretensión. derecho en general.
Además esto se ajusta a un orden técnico
En la teoría de la interpretación y apli-
en el manejo de la pluralidad objetiva
cación del derecho, se emplean diversas
(acumulación objetiva subjetiva simple)
herramientas que dan cuerpo a las deci-
en que haya que estimar una pretensión
y desestimar otra, lo que sería imposible siones, y a las razones de estas, bajo la
si la fundabilidad recayera en la demanda. idea de una normatividad a priori que
La fundabilidad nunca es de la demanda permite reconocer, en la labor del juez,
sino de la pretensión. parámetros de corrección y, por tanto,
de control de la misma. Así, se habla de
una (robustamente teorizada y confusa)
IMPORTANTE metodología de interpretación y aplica-
ción del derecho que carga de prestigio
El tercero que interpone el recurso a sus múltiples herramientas, una de
de casación, según aparece de la ellas, la interpretación o argumento a
propia ejecutoria suprema, alega contrario. ¿En realidad puede haber
que en la sentencia de vista no se una “interpretación” a contrario?, ¿hay
ha sustentado debidamente porqué diferencia entre interpretación y argu-
se le ha apartado del proceso como mento a contrario?, ¿cuándo corresponde
litisconsorte “pasivo”, afectando emplear el argumento a contrario?, etc.
su “derecho de inclusión” con los Estos cuestionamientos y las respuestas
demandantes para acceder a la a las que permiten llegar, como las que
prescripción adquisitiva de dominio, más adelante indicaré, son de difícil
sin tener en cuenta que con igual de- administración, pues hallan en primer
recho se admitió la intervención de orden la dificultad de atentar contra el
otro tercero legitimado, existiendo gran prestigio del argumento a contrario
por tanto desigualdad respecto al en la interpretación jurídica asignado por
mismo derecho. autores muy relevantes34. En todo caso, es
un asunto que debe considerar que en la
4.7. ¿“Interpretación” a contrario?: La posición contraria, que es la que ve en el
calamidad de un mal hábito que argumento a contrario una dependencia
pervierte el uso técnico de la sumilla
de una sentencia
La sumilla de la ejecutoria suprema co- 33 Corte Suprema de Justicia (Sala Civil Transitoria), “La
interpretación contrario sensu no está prohibida por el
mentada señala textualmente: “El artículo artículo cuarto del Título Preliminar del Código Civil y
369 del Código Procesal Civil no exige además es una herramienta de hermenéutica jurídica”
que el recurso de apelación de sentencia (Casación: 461-97, resolución de 03.06.98). Si bien la
de primer grado deba ser interpuesto sumilla no indica expresamente ser consecuencia de
una interpretación a contrario, queda claro que ello
por quien tiene reservado un pronuncia- se infiere abiertamente por la negación que contiene.
miento en segunda instancia respecto a 34 Tarello, Giovanni, L’interpretazione della legge, Giuffrè,
una incidencia en el proceso”. Aquí hay Milán, 1980, pp. 346 y ss; id. La interpretación de la
dos aspectos que quiero observar: a) el ley, trad. de Diego Dei Vecchi, Palestra, Lima, 2013, p.
313; Guastini, Riccardo, Estudios sobre la interpretación
empleo de la (mal denominada) “inter-
jurídica, Porrúa, México D. F., 2003, p. 28.
35 Camato, Nicolò, 1969. Lógica simbólica e diritto, 39 García Amado, Juan Antonio, ob. cit., p. 111.
Milán, Giuffè, pp. 399; Kalinowski, Georges, 1973, Sobre el problema lógico de la inferencia a contrario
Introducción a la lógica jurídica, EUDEBA, Bs. As., pp. Rentería Díaz, Adrián, “Argumento a contrario y reglas
176; García Amado, Juan Antonio, 2001, “Sobre el constitutivas”, en Doxa – Cuadernos de filosofía, N.°
argumento a contrario en la aplicación del derecho”, 20, Alicante, 1997, pp. 317 y ss.
en Doxa – Cuadernos de filosofía del derecho, Alicante, 40 Sobre los planos ontológicos del derecho (eficacia,
N.° 24, p. 111. efectividad y eficiencia) y su vinculación con las viejas
36 Kalinowski, Georges, ob. cit., pp. 176 y ss. tradiciones jurídicas (iusnaturalismo, iuspositivismo
37 Ibídem, p. 179. y iusrealismo). González Álvarez, Roberto, Neo-
38 Lifante, Isabel, “Interpretación y modelos de dere- procesalismo… cit., 2013, p. 84; “Objeto y estructura
cho. Sobre el papel de la intención en la interpretación del derecho procesal”, en Revista de Derecho Procesal,
jurídica”, en Doxa – Cuadernos de filosofía, N.° 22, Madrid, 2009, p. 539.
Alicante, 1999, p. 171. 41 García Amado, Juan Antonio, ob. cit., pp. 112 y ss.
Civil Impugnatorio
legislador no dijo o no contempló en 5. Bibliografía
su disposición es voluntad suya. Alchourrón, Carlos y Bulygin, Eugenio,
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derecho se entiende como orden de dés, E. y Laporta, F. (eds.), El derecho y
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la ley queda sujeta a lo que permiten Alvazzi del Frate, Paolo, “Garantismo e
entender los valores sobre la dispo- giusto proceso”, en Giustizia e garanzie
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Amato, Nicolò, Logica simbolica e diritto,
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Milán, Giuffè, 1969.
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del intérprete que no comparte su Amodio, Ennio, Processo penale, diritto eu-
genética extralógica con el argumento ropeo e common law. Dal rito inquisitorio
a contrario que tiene una condición al giusto processo, Giuffrè, Milán, 2003.
residual de la aplicación de una regla Cappalli, Richard B., “Procedimiento civil
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Vol. 19, N.º 2, 1992.
¿SABÍA USTED QUE?
Castro, Carlos Roberto Siqueira, O devido
processo legal e os princípios da razoabilida-
Cualquier irregularidad frente al de e da proporcionalidade, Rio de Janeiro,
contenido de libertad de la acción en Forense, 2005.
proceso, que implica un obrar negati-
vo de la función jurisdiccional (v. gr., De Bernardis, Luis Marcelo, La garantía
frente a la alegación, ofrecimiento procesal del debido proceso, Lima, Cultural
de pruebas, impugnación, participa- Cuzco, 1995.
ción en actuación de pruebas, etc.) se Devis Echandía, Hernando, Nociones ge-
remite a la infracción normativa del
proceso justo; y cualquier irregulari- nerales de derecho procesal civil, Aguilar,
dad frente al contenido de dignidad, Madrid, 1966.
que implica un obrar positivo de la Ferrajoli, Luigi, Principia iuris, Trotta, T. I,
función jurisdiccional (v. gr., emitir 2011.
proveídos, motivar decisiones, im-
Ferrua, Paolo, Il “giusto proceso”, 2.ª ed.,
pulsar el proceso, etc.) se remite a
la infracción normativa de la tutela Zanichelli, Bolonia, 2007.
jurisdiccional (efectiva). Entonces, la Gama, Lidia Elizabeth Peñaloza Jaramillo, O
respuesta a la pregunta del rubro es devido processo legal, Editora de Direito,
que la omisión de pronunciamiento Campina, 2005.
respecto a una apelación configura
la infracción a la tutela jurisdiccional Garapon, Antoine y Papadopoulos,
y no al proceso justo. Loannis, Juzgar en Estados Unidos y en
Francia. Cultura jurídica francesa y common
law, trad. de Viviana Díaz Perilla, Bogotá,
Consecuentemente, cuando la sumilla de Legis, 2008.
una sentencia embandera un argumento García Amado, Juan Antonio, “Sobre el
a contrario no hace sino exhibir aquella argumento a contrario en la aplicación del
regla que no se aplica al caso concreto, derecho”, en Doxa – Cuadernos de filosofía
que no es parte de la interpretación de los del derecho, Alicante, N.° 24, 2001.
fundamentos que nutren la motivación, González Álvarez, Roberto, “Objeto y es-
en fin, que refleja legalidad pero que no tructura del derecho procesal”, en Revista
indica la ruta del sentido interpretativo de de Derecho Procesal, Madrid. 2009. / “El
los fundamentos legales del caso concreto. principio fundamental de acción - Nue-
Civil Impugnatorio
TEXTO DE LA CASACIÓN
1 Publicado en Sentencias en Casación, Año XVIII, Nº 694 (El Peruano, miércoles 30 de julio de 2014, p. 54314).
sesenta y cinco concede apelación sin efecto suspensivo y con la calidad de diferida. PUNTOS
CONTROVERTIDOS: Según consta de la Resolución número cincuenta y cuatro de fecha siete de
octubre de dos mil diez obrante a fojas setecientos cuatro, se establecieron los siguientes puntos
controvertidos: 1.- Determinar si los demandantes se encuentran ocupando el bien materia de
prescripción de manera permanente y exclusiva. 2.- Determinar si como consecuencia de lo citado
en el punto anterior deben ser declarados propietarios del bien mediante la presente acción de
prescripción adquisitiva. SENTENCIA DE PRIMERA INSTANCIA: El A quo, mediante resolución
de fojas ochocientos ochenta y cuatro su fecha veinte de octubre de dos mil once, dicta sentencia
declarando fundada la demanda, declarando a los nueve demandantes propietarios por prescrip-
ción adquisitiva respecto del bien sub litis de un área de seiscientos siete punto sesenta metros
cuadrados, y establece que los efectos de la sentencia no alcanzan a los terceros coadyuvantes,
considera que los demandantes cumplen con los requisitos que exige el artículo 950 del Código
Civil, en cuanto a los terceros coadyuvantes admitidos refiere que hubo incongruencia al pedir su
intervención, pues si pretendían que la declaración judicial de propiedad sea extendida a ellos,
debieron plantear una intervención litisconsorcial. APELACIÓN: Interponen recurso de apelación:
i) los terceros coadyuvantes Juan José Gonzáles Rodríguez y Mario Bailón Pinedo, mediante
escritos de fojas novecientos treinta y cinco y novecientos cuarenta y cinco respectivamente,
alegando que debe revocarse el extremo de la sentencia que declara que los efectos de aquella
no les alcanza; y, ii) el curador procesal de la sociedad demandada a fojas novecientos cincuenta
y dos, apela señalando que existe incongruencia en la sentencia puesto que no se sabe cuántos
son los demandados. INCIDENCIA EN SEGUNDA INSTANCIA: Que, es menester señalar que
el recurrente Demetrio Roa Quispe, mediante escrito presentado ante la Sala Superior obrante
a fojas novecientos noventa y siete solicita se le incorpore como litisconsorte al amparo de lo
previsto en el artículo 98 del Código Procesal Civil pedido que es desestimado por resolución de
fojas mil uno, señalando: “... pídase oportunamente en la instancia correspondiente”. SENTENCIA
DE SEGUNDA INSTANCIA: La Cuarta Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima mediante
resolución de fecha tres de agosto del año dos mil doce, obrante a fojas mil ciento sesenta y seis,
confirma la apelada, sustentando dicha decisión en “ Sexto.- (...) que es un tercero coadyuvante el
que sin que la parte a la que coadyuva, haya apelado, presenta su apelación a fin de que se revoque el
fallo en la parte en la que señala que los efectos que siguen al haberse declarado fundada la demanda
no le alcanzan. Como es obvio por su calidad de tercero no puede resultar beneficazo –entiéndase
beneficiado– con la sentencia tal como fluye de los artículos 90, 93 y 97 del Código Procesal Civil”. Por
otro lado, agrega que los accionantes han poseído el predio en forma pacífica, con calidad de
propietarios por más de diez años continuos y de forma pública, por lo que corresponde aplicar
el artículo 950 del Código Civil. RECURSO DE CASACIÓN: Por escrito de fojas mil ciento noventa
y cuatro Demetrio Roa Quispe interpone recurso de casación contra la resolución emitida por la
Sala Superior. Este Supremo Tribunal mediante resolución de fecha diez de octubre de dos mil
doce, declaró la procedencia del referido recurso por la siguiente causal: 1.- Infracción normativa
de los incisos 3º y 5º del artículo 139 de la Constitución; alega que la Sala de mérito no ha
sustentado debidamente la sentencia recurrida al apartarlo del proceso como litisconsorte pasi-
vo, sin tener en consideración que la indicada resolución afecta su derecho de inclusión con los
miembros de la Asociación de Conductores Comerciantes del Mercado número tres de Surquillo,
Mercado Morococha, para acceder a la prescripción adquisitiva de dominio; sin tener en cuenta
que con igual derecho se admitió la intervención de Mariano Bailón Pineda, existiendo por tanto
desigualdad respecto al mismo derecho, más aun si acredita su posesión con documentos públicos
como la licencia de funcionamiento otorgada por la Municipalidad de Surquillo, Resolución de
Alcaldía número 115 del año mil novecientos ochenta y cinco, convalidada con la Resolución de
Alcaldía de mil novecientos noventa y cinco, documentos con los que acredita la posesión por
más de diez años como propietarios.
III. MATERIA JURÍDICA EN DEBATE: Es necesario señalar que la cuestión jurídica materia de
debate por este Supremo Tribunal consiste en determinar si la omisión de pronunciamiento en la
sentencia de vista respecto a la apelación de la resolución número treinta y tres que declaró im-
procedente la intervención coadyuvante del recurrente Demetrio Roa Quispe, concedida sin efecto
suspensivo y con la calidad de diferida; y, la decisión recaída en la resolución número ochenta y
nueve de fojas mil uno que no admite la intervención del recurrente en calidad de litisconsorte,
infringen las garantías mínimas que conforman el derecho al debido proceso y debida motivación
reconocido en el artículo 139º incisos 3º y 5º de la Constitución Política.
Civil Impugnatorio
IV. FUNDAMENTOS DE ESTA SALA SUPREMA: 1.- Que, habiéndose declarado procedente el
recurso de casación por la causal referida a la infracción normativa procesal, cabe señalar que, la
citada infracción es sancionada ordinariamente con nulidad procesal, la misma que se entiende
como aquel estado de anormalidad del acto procesal, originado en la carencia de algunos de sus
elementos constitutivos o en vicios existentes sobre ellos que potencialmente los coloca en la si-
tuación de ser declarados judicialmente inválidos. El estado de nulidad potencial no puede
afectar el debido proceso ya sea por ser subsanable el vicio, por convalidación o porque el acto
cumplió con su finalidad. La garantía al debido proceso implica también el administrar justicia
de acuerdo a las normas procesales, porque en razón a su texto, son consideradas imperativas o
de estricto cumplimiento, consecuentemente, está sancionada su omisión o cumplimiento defi-
ciente con la respectiva declaración de nulidad, siendo ello así, es tarea de esta Suprema Sala
revisar si se vulneraron o no las normas que establecen expresamente un determinado compor-
tamiento procesal con carácter de obligatoriedad, en cuyo caso debe disponerse la anulación del
acto procesal viciado. 2.- Que, en primer orden se debe precisar que aparece del recuso de ca-
sación corriente a folios mil ciento noventa y cuatro, que el recurrente es don Demetrio Roa
Quispe a quien se le ha denegado su intervención coadyuvante como es de verse de la resolución
número treinta y tres de fojas cuatrocientos treinta y dos, contra esta resolución ha interpuesto
recurso de apelación como es de verse a fojas novecientos noventa y siete, acto impugnatorio
que ha de verse a fojas novecientos noventa y con la calidad de diferida. 3.- Que, en principio
corresponde precisar que respecto al derecho al debido proceso previsto en el artículo139 inciso
3º de la Carta Magna, se debe tener en cuenta lo señalado por el Tribunal Constitucional: “(...)
31. De conformidad con el artículo 139.3º de la Constitución, toda persona tiene derecho a la obser-
vancia del debido proceso en cualquier tipo de procedimiento en el que se diluciden sus derechos, se
solucione un conflicto jurídico o se aclare una incertidumbre jurídica. Como lo ha enfatizado este Tribu-
nal, el debido proceso, tanto en su dimensión formal como sustantiva, garantiza el respeto de los dere-
chos y garantías mínimas con que debe contar todo justiciable para que una causa pueda tramitarse y
resolverse en justicia [Cfr. por todas, Sentencia recaída en el Expediente N.º 07289-2005-AA/TC, fun-
damento 3].1 4.- Que, en cuanto al principio del deber de motivación previsto en el artículo 139
inciso 5º de la Constitución del Estado, el órgano Constitucional ha precisado: “La jurisprudencia
de este Tribunal ha sido constante al establecer que la exigencia de que las decisiones judiciales sean
motivadas “garantiza que los jueces, cualquiera sea la instancia a la que pertenezcan, expresen el pro-
ceso mental que los ha llevado a decidir una controversia, asegurando que el ejercicio de la potestad de
administrar justicia se haga con sujeción a la Constitución y a la ley; pero también con la finalidad de
facilitar un adecuado ejercicio del derecho de defensa de los justiciables” [Cfr. Sentencia recaída en el
Expediente N.º 01230-2002-HC/TC, fundamento 11]. De este modo, la motivación de las resoluciones
judiciales se revela tanto como un principio que informa el ejercicio de la función jurisdiccional, así como
un derecho constitucional que asiste a todos los justiciables [Cfr. Sentencia recaída en el Expediente N.º
08125-2005-HC/TC, fundamento 10].2 En esa medida, la debida motivación debe estar presente
en toda resolución que se emita en un proceso, lo que implica que cualquier decisión cuente con
un razonamiento que no sea aparente o defectuoso, sino que exponga de manera clara, lógica y
jurídica los fundamentos de hecho y de derecho que la justifican, de manera tal que los destina-
tarios a partir de conocer las razones por las cuales se decidió en un sentido o en otro, estén en
la aptitud de realizar los actos necesarios para la defensa de su derecho. 5.- Que, bajo ese marco
normativo corresponde evaluar si la sentencia de vista vulnera los principios de orden procesal
referidos al debido proceso y debida motivación, siendo así, este Supremo Tribunal verifica en
primer orden que el recurrente Demetrio Roa Quispe solicitó su intervención como tercero
coadyuvante, pedido que al ser desestimado por el Juez fue impugnado por el solicitante, lo que
dio lugar a que se emitiera la resolución número treinta y seis mediante la cual se concedió la
apelación sin efecto suspensivo y con la calidad de diferida, no obstante la Sala Superior no ha
emitido pronunciamiento al respecto, pese a que la sentencia de primer grado fue materia de
apelación. 6.- Que, al respecto, conviene precisar que el artículo 369 del Código Procesal Civil
señala: “Además de los casos en que este Código lo disponga, de oficio o a pedido de parte, el Juez
puede ordenar que se reserve el trámite de una apelación sin efecto suspensivo, a fin de que sea resuel-
ta por el superior conjuntamente con la sentencia u otra resolución que el Juez señale. La decisión
motivada del Juez es inimpugnable. La falta de apelación de la sentencia o de la resolución señalada por
el Juez determina la ineficacia de la apelación diferida”. En ese sentido, se advierte que la norma es
clara al señalar que el pronunciamiento de una apelación queda reservado para que sea resuelta
por el Superior en la sentencia de vista, precisando como única condición que la sentencia de
primer grado sea apelada, lo cual resulta lógico, por dos supuestos: i) de no ser apelada la sen-
tencia de primer grado, se produciría la cosa juzgada respecto a lo decidido, por lo que carecería
de objeto emitir pronunciamiento en cuanto a las incidencias pendientes de apelación; y, ii) no
sería posible que se eleve solo la apelación de una incidencia, en el caso que ya se haya emitido
pronunciamiento sobre el fondo de la controversia. No obstante debe precisarse que dicha dis-
posición no exige como condición que el recurso de apelación de la sentencia de primer grado
deba ser interpuesto por quien quedó a la espera de que se resuelva su incidencia. 7.- Que, lo
expuesto precedentemente resulta acorde con los hechos acaecidos en el presente caso, pues, al
recurrente Demetrio Roa Quispe se le desestimó su intervención coadyuvante al proceso, por lo
que no se le puede considerar como un sujeto parte del proceso, en ese sentido, no era posible
que impugnara el fallo emitido en primera instancia, debiendo entenderse que el recurrente
estaba a la espera de que su denegada intervención sea revisada y resuelta por el órgano superior
en la sentencia de vista, lo cual no sucedió. En ese sentido, resulta claro que se ha configurado la
infracción al debido proceso por omisión de pronunciamiento respecto a la apelación de la reso-
lución número treinta y tres que declaró improcedente la intervención en calidad de tercero
coadyuvante del recurrente Demetrio Roa Quispe. 8.- Que, por otro lado, mediante escrito de
fojas novecientos noventa y siete el recurrente Roa Quispe solicitó ante la Sala Superior su incor-
poración como litisconsorte al amparo de lo previsto en el artículo 98 del Código Procesal Civil
pedido que fue desestimado por la Sala Superior señalando: “(...) pídase oportunamente en la
instancia correspondiente.”, en ese sentido, este Supremo Tribunal considera pertinente señalar
que el artículo 98 del Código Procesal Civil respecto a la intervención litisconsorcial, señala: “Quien
se considere titular de una relación jurídica sustancial a la que presumiblemente deban extenderse los
efectos de una sentencia, y que por tal razón estuviera legitimado para demandar o haber sido deman-
dado en el proceso, puede intervenir como litisconsorte de una parte, con las mismas facultades de esta.
Esta intervención puede ocurrir incluso durante el trámite en segunda instancia”. Sin embargo, la Sala
Superior sin tener en cuenta la norma soslayada no se pronunció ni mucho menos fundamentó
la aceptación o rechazo de tal pedido, de acuerdo a los lineamientos vertidos por el Tribunal
Constitucional expuestos en el numeral 3) del acápite IV de la presente sentencia. 9.- Que, si bien
no corresponde a este Supremo Tribunal emitir pronunciamiento sobre el fondo de la cuestión
controvertida, sin embargo, debe precisarse que el segundo punto controvertido señala que se
debe determinar si los demandantes deben ser declarados propietarios del bien mediante acción
de prescripción adquisitiva. En ese sentido se verifica de la demanda que son nueve accionantes,
quienes han señalado en los fundamentos de hecho que el bien materia de prescripción cuenta
con un área de setecientos diecinueve punto cero cinco metros cuadrados (719.05 m2) constitui-
do por seis tiendas, veinticinco puestos perimetrales interiores y doce puestos centrales, aprecián-
dose que en el transcurso del proceso se han apersonado diversas personas aduciendo estar en
posesión de uno de los puestos del bien sub litis, tal es el caso del recurrente, Demetrio Roa
Quispe, sin embargo al ampararse la demanda, se ha declarado a los nueve accionantes como
propietarios por prescripción, esto es, de los setecientos diecinueve punto cero cinco metros
cuadrados (719.05 m2) que incluye cuarenta y tres divisiones; en ese sentido, el Ad quem debe-
rá verificar si en efecto corresponde declarar propietarios de todo el bien a los demandantes.
Que, por lo expuesto en los considerandos precedentes la sentencia de mérito contraviene el
derecho a un debido proceso y la tutela jurisdiccional efectiva, pues no existe una adecuada y
suficiente motivación, lo cual conlleva una clara infracción a los incisos 3º y 5º del artículo 139
de la Constitución Política del Estado.
V.- DECISIÓN: Estas consideraciones y en aplicación de lo señalado por el artículo 396 del Códi-
go Procesal Civil: a) Declararon FUNDADO el recurso de casación interpuesto a fojas mil ciento
noventa y cuatro por Demetrio Roa Quispe en consecuencia, NULA la sentencia de vista emitida
por la Cuarta Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima, obrante a fojas mil ciento sesenta
y seis su fecha tres de agosto de dos mil doce. b) ORDENARON a la Sala Superior de origen emitir
una nueva resolución atendiendo las precisiones expresadas en la presente ejecutoria suprema.
c) DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en el diario oficial El Peruano, bajo
responsabilidad; en los seguidos por Hilda Acuña Morales y otros con la Sociedad Progreso de la
Pequeña Minería, sobre prescripción adquisitiva de dominio; y los devolvieron. Interviene como
ponente la señora Jueza Suprema Estrella Cama.
SS.
Almenara Bryson / Huamaní Llamas / Estrella Cama / Calderón Castillo / Calderón Puertas
Civil Impugnatorio
Contenido
De revocarse la decisión de primera instancia que rechaza un medio probatorio se debe realizar una audiencia
CONSULTA
de pruebas complementaria para dicho medio probatorio, cuando no requiera actuación
CONSULTA
El abogado de Juan Pérez nos comenta que, en la etapa de saneamiento
probatorio el juez de primer grado rechazó la pericia que había solicitado
y que, cuando formuló apelación, fue concedida sin efecto suspensivo. El
proceso continuó su trámite, llegándose inclusive a realizar la audiencia
de pruebas; no obstante, antes de sentenciar, el juez superior revocó la
decisión de rechazo del medio probatorio y ordenó que sea valorado
conjuntamente con los demás. La consulta consiste en determinar qué
debe hacer el juez de primer grado ante esta decisión.
Un punto que, desde ya, debe ser esclarecido, Nótese que, en este caso, será necesario
es que la hipótesis de anular el procedimiento cumplir con aquellos parámetros porque la
por parte del juez de primer grado está com- pericia es un medio probatorio que requiere
pletamente vedada. Las razones, básicamente, actuación. Si el medio rechazado hubiese
son dos: (i) no hubo pronunciamiento expreso sido, por ejemplo, un documento, enton-
del superior (él podría haber anulado, pero ces no habría necesidad de actuar, pues el
decidió revocar), (ii) ante la falta de pronun- medio ya fue producido (a diferencia, por
ciamiento expreso, el juez no puede anular ejemplo, de una declaración de parte o una
pues ya precluyó la oportunidad para que lo testimonial).
haga él mismo, sea o no de oficio. Por lo tanto, si el superior optó por la revo-
Siendo ello así, ante la orden del superior de cación pero sin indicar qué es exactamente lo
que el juez valore la pericia rechazada conjun- que el juez de primer grado debe hacer, este
tamente con los demás medios probatorios, deberá tener en cuenta qué tipo de medio
se impone que dicha pericia sea actuada. La probatorio fue rechazado para determinar si
actuación de la pericia, evidentemente, impli- debe ser actuado –todo con miras a tutelar
ca realizar el procedimiento de nombramiento de la forma más idónea posible– el derecho
de peritos, aceptación del cargo, fijación y fundamental a la prueba (que exige actua-
pago de honorarios, cumplimiento del encar- ción y valoración racional de los medios
go, elaboración del dictamen, la explicación probatorios).
del dictamen, observaciones de las partes Finalmente, es necesario recalcar que no
contra el dictamen y fundamentación de sus resulta ilegal la realización de una audiencia
observaciones posteriormente a la audiencia complementaria de pruebas para actuar la
(artículos 264 y ss., del CPC). Todos esos pasos pericia, dado que el artículo 265 del CPC,
son necesarios para la correcta actuación de establece que: “por excepción, cuando la
una pericia ofrecida por una parte. complejidad del caso lo justifique [el dictamen
Civil Impugnatorio
RESEÑA DE JURISPRUDENCIA
Reseña de jurisprudencia
Casación N.º
5099-2011-Callao
La pretensión impugnatoria se
encuentra limitada en la apelación
TEXTO DE LA CASACIÓN
CASación Nº 5099-201-Callao
SUMILLA: El recurso de apelación queda delimitado
con la pretensión impugnatoria de las partes, que
son las que determinan qué es lo que se somete a
la decisión judicial.
por Gaspar Reforme Rojas, a favor de su nieto Roy Ricardo Salinas Giraldo, respecto al inmueble
ubicado en avenida Guardia Chalaca números mil cuatrocientos sesenta y tres y mil cuatrocientos
sesenta y siete, Callao; asimismo la nulidad de la Escritura Pública y de la inscripción en Registros
de dicho acto; 2. La nulidad de la venta celebrada el catorce de diciembre de mil novecientos
noventa y seis por Roy Ricardo Salinas Giraldo a favor de su señora madre Hilda Filomena Infan-
te por la suma de S/. 50,000.00 (cincuenta mil con 00/100 Nuevos Soles); asimismo la nulidad
de la Escritura Pública y de la inscripción en Registros de dicho acto. Además la demandante
solicita la inmediata entrega del bien inmueble sub litis y la indemnización por los daños y per-
juicios ocasionados. La demandante sostiene que el día doce de marzo de mil novecientos no-
venta y seis, conjuntamente con Gaspar Reforme Rojas, suscribieron un contrato de promesa de
compraventa del bien sub litis, teniendo como garantes a Manuel Jaime Talledo Ramos y Gerar-
do Orellana Abriojo, determinándose como precio de la venta la de US$ 51,500.00 (cincuenta
y un mil quinientos con 00/100 Dólares Americanos), siendo que se dispuso que a la firma del
contrato se tenía que abonar la suma de US$ 31,500.00 (treinta y un mil quinientos con 00/100
Dólares Americanos) como cuota inicial y la diferencia se cancelaría el veintiocho de diciembre
de mil novecientos noventa y seis o hasta el doce de marzo de mil novecientos noventa y siete;
habiendo realizado la recurrente cuatro pagos posteriores, dos por la suma de US$ 6,000.00 (seis
mil con 00/100 Dólares Americanos), uno por US$ 24,000.00 (veinticuatro mil con 00/100
Dólares Americanos) y otro por la suma de US$ 600.00 (seiscientos con 00/100 Dólares Ameri-
canos); sin embargo pese a requerir al vendedor cumplir con firmar la Escritura Pública de la
venta realizada éste se negó, tomando conocimiento el demandante a través de Registros Públi-
cos que el vendedor había celebrado el contrato de donación a favor de su nieto Roy Ricardo
Salinas Giraldo y éste a su vez había vendido el inmueble a su madre Hilda Filomena Giraldo
Infante por un precio diminuto. 2. CONTESTACIÓN DE LA DEMANDA: Mediante escrito de
fojas ciento cincuenta y dos, la demandada Hilda Filomena Giraldo Infante, contesta la demanda
alegando que en cuanto al proceso penal que iniciara la demandante en su contra por esteliona-
to, fue absuelta; respecto a los fundamentos de la demanda, alude que los hechos acontecidos
antes de su adquisición no son de su incumbencia, amparándose en el principio de buena fe
pública registral al momento de adquirir el predio de litis de su anterior propietario mediante la
escritura pública correspondiente, no existiendo gravamen, carga, o anotación que impidiera la
adquisición o limitara la libre disponibilidad del inmueble; además señala que la venta su favor
no se efectuó por un precio irrisorio, puesto que se pagó conforme las condiciones deficientes
del predio y mejoras en las que se ha tenido que invertir una suma importante de dinero; asimis-
mo señala que el dinero con el que compró el inmueble fue producto de las utilidades recibidas
desde el año mil novecientos ochenta y siete del capital social del Hostal Milagritos Sociedad
Anónima. Por su parte mediante escrito de fojas doscientos veinte, el demandado Roy Ricardo
Salinas Giraldo contestó la demanda, contradiciéndola, al alegar que en principio fue absuelto
del proceso penal incoado por la demandante por estelionato; refiere que en cuanto a la adqui-
sición del bien inmueble lo hizo bajo el principio de buena fe pública registral de su anterior
propietario mediante la escritura pública correspondiente, no existiendo ningún gravamen, carga
o anotación que impidiera su adquisición o limitado su libre disponibilidad. Agrega que es falso
que la venta se haya efectuado en forma simulada o con precio irrisorio, dado que se tuvo que
hacer reparaciones al bien. Por otro lado, ante el fallecimiento del demandado Gaspar Reforme
Rojas, y ante la disposición de notificarse por edicto a la sucesión de dicho demandado, se nom-
bró como curador procesal al abogado Henry Wilmer Calderón Castillo, el mismo que por escri-
to de fojas cuatrocientos sesenta y cuatro, se apersonó al proceso y absolvió el traslado de la
demanda, negando la misma y solicitando se declare infundada. Es de advertirse que mediante
resolución de fojas cuatrocientos ochenta y tres se integra a la relación procesal como litisconsor-
te necesario pasivo a Mario Gaspar Daniel Reforme Ríos, hijo del demandado fallecido. 3. PUN-
TOS CONTROVERTIDOS: Conforme aparece a fojas quinientos veintinueve se fijaron como
puntos controvertidos los siguientes: • Determinar si procede la nulidad del acto de donación del
inmueble ubicado en la avenida Guardia Chalaca números mil cuatrocientos sesenta y tres y mil
cuatrocientos sesenta y siete, Callao, que traería como consecuencia accesoria: 1) la nulidad de
la escritura pública y de su inscripción de la referida donación; 2) la nulidad de la venta de fecha
catorce de diciembre de mil novecientos noventa y seis, su escritura pública y su inscripción en
registros; y, 3) la entrega del inmueble. • Determinar si corresponde accesoriamente una indem-
nización que deberían pagar en forma solidaria los demandados, ascendente a la suma de US$
Civil Impugnatorio
20,000.00 (veinte mil con 00/100 Dólares Americanos), más pagos de intereses. 4. RESOLUCIÓN
DE PRIMERA INSTANCIA: Culminado el trámite correspondiente, el Juez mediante resolución
de fojas setecientos cincuenta y tres declaró fundada la demanda; sin embargo, dicho fallo fue
declarado nulo por resolución de vista de fojas novecientos ochenta y cinco, por lo que se pro-
cedió a emitir nueva sentencia, tal como se advierte a fojas mil ciento veintidós, su fecha catorce
de noviembre de dos mil ocho, declarando fundada la demanda e improcedente en el extremo
que se pretende la entrega del predio de litis y la indemnización por daños y perjuicios, deján-
dose a salvo el derecho de la demandante de hacer valer su derecho en la vía correspondiente.
La sentencia indica que se encuentra probado que la demandante canceló todo el precio del
inmueble sub litis, teniendo para ello en cuenta el contrato de promesa de compraventa con arras
de fecha doce de marzo de mil novecientos noventa y seis (fojas tres), así como los documentos
de fojas seis, siete y ocho. Asimismo se señala que la escritura pública de donación, efectuada a
favor del demandado Roy Ricardo Salinas Giraldo (fojas nueve), celebrada con fecha diez de
octubre de mil novecientos noventa y seis, es de fecha posterior a la transferencia a favor de la
demandante, es decir, cuando Gaspar Reforme Rojas ya no era propietario del bien. De otro lado,
el A quo señala que se verifica que el demandado Gaspar Reforme compró el predio por la suma
de US$ 210,000.00 (doscientos diez mil con 00/100 Dólares Americanos) y luego se lo cedió a
título gratuito al demandado Roy Salinas y éste lo vendió a US$ 50,000.00 (cincuenta mil con
00/100 Dólares Americanos) a Hilda Filomena Giraldo, quien no se encuentra inscrita como
contribuyente y no ha declarado ingresos en la SUNAT, no acreditando los ingresos económicos
con los cuales adquirió el inmueble sub litis. Asimismo, la sentencia tiene en cuenta el proceso
penal de estafa y apropiación ilícita (Expediente número 380-2001) en la que el testigo Gerardo
Orellana Arrojo señala que fue testigo de la firma y recepción de dinero de parte de Ruiz Valen-
zuela a Gaspar Reforme Rojas, y la entrega de la suma de US$ 31,500.00 (treinta y un mil qui-
nientos con 00/100 Dólares Americanos), concluyendo que a los demandados Salinas Giraldo y
Giraldo Infantes no les resulta de aplicación del principio de buena fe registral. Finalmente, la
sentencia señala que la demanda no ha fundamentado el daño ocasionado, ni señala los montos
del perjuicio irrogado, y lo mismo sucede en el extremo de la entrega del inmueble. 5. FUNDA-
MENTOS DE LA APELACIÓN: Mediante escrito de fojas mil ciento cincuenta y cinco la deman-
dante Neomisa Ruiz Valenzuela apela la sentencia, en los extremos que se declara improcedente
la demanda; argumentando que se considera erróneamente que se debe peticionar como pre-
tensión autónoma la entrega del bien cuando ésta es accesoria de la planteada como pretensión
principal; en cuanto a la indemnización por daños y perjuicios, indica que el daño se encuentra
acreditado por el incumplimiento de los demandados al no haber hecho entrega a la recurrente
del bien inmueble materia del presente litigio, y, peor, al haber transferido dolosamente el mismo,
no pudiendo la apelante ejercer su derecho de propiedad desde la fecha en que la adquirió. Por
su parte, por escrito de fojas mil ciento noventa y dos la demandada Hilda Filomena Giraldo
Infante, fundamenta su apelación señalando que al momento de adquirir el predio sub litis, quien
figuraba en el registro como propietario era el demandado Ricardo Roy Salinas Giraldo, por
tanto es un tercer adquiriente de buena fe; en cuanto al precio pactado, refiere que ello es de
autonomía privada de las partes, siendo que el pago se realizó con el producto de la venta del
Hostal Milagritos Sociedad Anónima por la suma de US$ 450,000.00 (cuatrocientos cincuenta
mil con 00/100 Dólares Americanos), correspondiéndole la suma inicial de US$ 70,000.00 (se-
tenta mil con 00/100 Dólares Americanos), por lo que contaba con capacidad económica. Igual-
mente el demandado Roy Ricardo Salinas Giraldo, apela la sentencia de primera instancia me-
diante escrito de fojas mil trescientos uno, señalando que a la fecha de celebración de la escritu-
ra pública de donación del inmueble sub litis, el bien se encontraba inscrito en los Registros de
Propiedad Inmueble del Callao a nombre del donante en condición de único propietario del
inmueble, desconociendo la transferencia a favor de la demandante; asimismo alega que fue
absuelto en el proceso penal iniciado por la demandante, en la que se estableció que adquirió el
bien sub litis por donación de la persona que aparecía inscrita en los Registros de Propiedad In-
mueble, por lo que tanto la Escritura Pública de Donación de inmueble a su favor; así como la
Escritura Pública de compraventa celebrada a favor de Hilda Filomena Giraldo Infante no adole-
cen de ineficacia estructural o validez, toda vez, que los actos jurídicos celebrados cumplen es-
crupulosamente con los requisitos legales. 6. RESOLUCIÓN DE SEGUNDA INSTANCIA: Elevados
los autos a la Sala Superior en virtud del recurso de apelación interpuesto, mediante resolución
de fojas mil cuatrocientos setenta y cuatro, se confirmó la resolución de primera instancia, fun-
damentándose la misma en que al haber el demandado Gaspar Reforme realizado la donación
del inmueble cuando ya no era propietario, puesto que con fecha doce de marzo de mil nove-
cientos noventa y seis lo había transferido a la demandante, se incurre en la causal de nulidad,
por ser el objeto física y jurídicamente imposible, por tanto los actos celebrados con posterioridad
también se encuentran viciados de nulidad absoluta; por otro lado desestima la apelación pre-
sentada por la demandante, al señalarse que se encuentran conformes los fundamentos de la
sentencia de primera instancia. III. RECURSO DE CASACIÓN: La Suprema Sala mediante la re-
solución de fecha dieciséis de marzo de dos mil doce ha declarado procedente el recurso de ca-
sación interpuesto por la demandada Hilda Filomena Giraldo Infante, por la infracción normati-
va de los artículos 50, inciso 6º, 86, 122 y 427, inciso 7º, del Código Procesal Civil, así como el
artículo 12 de la Ley Orgánica del Poder Judicial; al haber sido expuestas las referidas infracciones
con claridad y precisión señalándose además la incidencia de ellas en la decisión impugnada. IV.
CUESTIÓN JURIDICA A DEBATIR: En el presente caso, la cuestión jurídica en debate radica en
determinar si se han infringido las reglas de la debida motivación de las resoluciones judiciales.
V. FUNDAMENTOS DE ESTA SALA SUPREMA: Primero.- El inciso 3º del artículo 139 de la
Constitución Política del Estado recoge los principios del debido proceso y de la tutela jurisdic-
cional efectiva como instrumentos de tutela de los derechos subjetivos que involucra dos expre-
siones: una sustantiva y otra formal; la primera se relaciona con los estándares de justicia como
son la razonabilidad y proporcionalidad que toda decisión judicial debe suponer; y la segunda
en cambio relaciona los principios y las reglas que lo integran, es decir, tiene que ver con las
formalidades estatuidas, tales como el Juez natural, el derecho de defensa, el derecho a probar,
el procedimiento preestablecido por Ley y el derecho a la motivación de las resoluciones judicia-
les, éste último derecho, dada su preponderancia dentro del Estado Constitucional de Derecho,
ha sido reconocida a su vez en forma independiente también como principio y derecho de la
función jurisdiccional por el inciso 5º del artículo 139 de la Carta Magna. Segundo: En esa línea,
el Tribunal Constitucional, precisando el contenido del derecho constitucional a la debida moti-
vación de las resoluciones judiciales como una de las manifestaciones del derecho a un debido
proceso, ha establecido que éste “(...) obliga a los órganos judiciales a resolver las pretensiones de las
partes de manera congruente con los términos en que vengan planteadas, sin cometer, por lo tanto,
desviaciones que supongan modificación o alteración del debate procesal (incongruencia activa). (...) El
incumplimiento total de dicha obligación, es decir, el dejar incontestadas las pretensiones, o el desviar
la decisión del marco del debate judicial generando indefensión, constituye vulneración del derecho a
la tutela judicial y también del derecho a la motivación de la sentencia (incongruencia omisiva)” (Sen-
tencia del Tribunal Constitucional número 04295-2007-PHC/TC, fundamento cinco e). Tercero.-
Que, se advierte de los actuados que en el presente proceso se plantearon tres apelaciones: la de
la demandante, y la de los demandados Roy Ricardo Salinas Giraldo (fojas mil trescientos uno),
Neomisa Ruiz Valenzuela (fojas mil ciento cincuenta y cinco) e Hilda Filomena Giraldo Infantes
(fojas mil ciento noventa y dos). Siendo ello así correspondía emitir resolución resolviendo cada
uno de los recursos impugnatorios presentados. Cuarto.- Que, sin embargo, se advierte en los
vistos de la sentencia recurrida que no se hace mención a la apelación presentada por Hilda Fi-
lomena Giraldo Infantes y que lo mismo ocurre en la parte considerativa, donde se puede apre-
ciar que los puntos octavo a décimo primero hacen mención al recurso impugnatorio presentado
por Roy Ricardo Salinas Giraldo y los considerandos décimo segundo y décimo tercero contestan
la apelación de la demandante; sin hacer, en ningún momento, alusión a la apelación de Hilda
Filomena Giraldo Infantes. Quinto.- Que, la sentencia debe corresponder a los hechos que se
alegan. En efecto, la sentencia emitida en el proceso consiste en verificar la correspondencia que
existe entre las pretensiones de las partes y lo resuelto por el Juez. Este, por consiguiente, no
puede resolver más de lo pedido, ni tampoco menos de lo solicitado, pues en ese caso se vulne-
raría el principio de congruencia procesal, amparado en el artículo VII del Título Preliminar del
Código Procesal Civil. Dichas pretensiones, en el caso del recurso de apelación, quedan delimita-
das con la pretensión impugnatoria de las partes, que son las que determinan qué es lo que se
somete a la decisión judicial, esperando que la decisión corresponda a su pedido. Cuando ello
no acontece existe motivación incongruente porque se dejan incontestadas las pretensiones o se
desvía la decisión del marco del debate judicial1. Sexto.- Que, los vicios expuestos generan la
Civil Impugnatorio
nulidad de la sentencia, pues ella infringe lo dispuesto en el artículo VII del Título Preliminar del
Código Procesal Civil y origina la nulidad de los actuados por contravención de lo preceptuado
en el artículo 122 incisos 3º y 4º del Código Procesal Civil. VI. DECISIÓN: Por tales fundamentos,
de conformidad con lo prescrito en el artículo 397 del Código Procesal Civil: Declararon FUNDA-
DO el recurso de casación interpuesto por Hilda Filomena Giraldo Infante a fojas mil cuatrocien-
tos ochenta y nueve, y en consecuencia NULA la sentencia de vista contenida en la resolución
número ciento trece de fecha veintisiete de mayo de dos mil once, obrante a fojas mil cuatro-
cientos setenta y cuatro; DISPUSIERON el reenvío del proceso a la Segunda Sala Civil de la
Corte Superior de Justicia del Callao, a fin de que emita nuevo pronunciamiento, conforme a las
directivas de la presente ejecutoria; DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en el
Diario Oficial El Peruano conforme a Ley; en los seguidos por Neomisa Ruiz Valenzuela contra
Roy Ricardo Salinas Giraldo y otros, sobre nulidad de acto jurídico; y los devolvieron; intervinien-
do como ponente el Señor Juez Supremo Calderón Puertas.-
SS.
Almenara Bryson / Huamaní Llamas / Calderón Castillo / Cunya Celi / Calderón Puertas
EJECUCIÓN
Actualidad
Área
Civil Ejecución
Ejecución
Contenido
Roberto Obando Blanco: La actuación de la sentencia civil y las garan-
DOCTRINA PRÁCTICA 292
tías constitucionales
Christian Delgado Suárez: La motivación de las sentencias como medio
COMENTARIO DE
JURISPRUDENCIA
legitimador del decisorio (A propósito de las funciones endoprocesal y 304
extraprocesal de las sentencias)
CONSULTA: En casos en que el ejecutado se defienda de forma inconsisten-
NOS PREGUNTAN Y
CONTESTAMOS
te, el juez podrá otorgar una medida anticipada y ordenar la ejecución a 313
pesar de que el auto que resuelve la contradicción sea apelado
RESEÑA DE La devolución de frutos se determina en la ejecución de sentencia (Casación
JURISPRUDENCIA
315
N.º 4754-2012-Lima)
DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina Práctica
1. Introducción
2. Cultura constitucional de la jurisdicción
3. Derecho a la efectividad de las resoluciones judiciales como contenido básico del derecho a
SUMARIO
Civil Ejecución
refiere el artículo 139.3 de la Constitución1. regir todo el quehacer, a fin de que este sea
El juez de ejecución con su actuación en cada racional, es decir, que las decisiones judiciales
caso garantiza al mismo tiempo la vigencia del deben estar racionalmente fundamentadas.
principio de independencia judicial. Como dato histórico, señalaremos que el
La autonomía científica lograda con el proce- constitucionalismo de la segunda postguerra
so, trajo consigo, de manera poco perceptible encarna un modelo alternativo de Estado y,
al principio, una separación tan radical entre en consecuencia, también de ordenamiento
el derecho material y el proceso que llevó jurídico. El Estado constitucional de derecho
a perder de vista su finalidad principal: la impone también un verdadero cambio de
instrumentalidad respecto a la realización de paradigma en el orden jurídico-cultural. Se
los derechos materiales. La ruptura del proce- asumen los derechos humanos, ahora, como
salismo actual, respecto a la postura científica derechos fundamentales dotados de fuerza
de la primera mitad del siglo XX, comienza a normativa. Debemos superar el paradigma
verificarse en los años posteriores a la Segunda legalista donde el juez se considera “boca
Guerra Mundial, con el efectivo reconocimien- de la ley”.
to de los derechos fundamentales, entre los La consecuencia es que de tales innovacio-
cuales es pieza importante el llamado derecho nes, como señala el Magistrado del Tribunal
a la tutela jurisdiccional efectiva. Supremo Español doctor Perfecto Andrés
El proceso comienza a adquirir una nueva Ibáñez, se sigue la demanda de otro modelo
dimensión –la constitucional– en el entendi- de juez. Así tenemos el asunto del bagaje del
miento de que la función pública del Estado a juez en sus dos dimensiones: la de naturaleza
través del proceso, asume la responsabilidad técnico-jurídica (formación universitaria de
de dotar a los ciudadanos de un medio eficaz acuerdo al plan de estudios) y la cultura del
y oportuno que permita la convivencia pacífica juez (componentes de diversidad, por el cual
y justa. se debe administrar legítimas diversidades,
así tenemos la garantía del juez imparcial).
IMPORTANTE Se reclama una “revolución cultural”, la tarea
del juez es a más independencia y factor de
La tutela jurisdiccional no será efec- discrecionalidad, mayor respeto de garantías
tiva hasta que realice el mandato constitucionales, mayor carga de justificación.
judicial. En virtud de la garantía La actividad jurisdiccional es una actividad de
constitucional de la cosa juzgada, riesgo y no se puede convertir en un ejercicio
existe el derecho a que se respeten ilegítimo. Es un poder que importa riesgos.
y ejecuten las resoluciones judiciales Constatamos que nos falta formación en la
firmes en sus propios términos. La epistemología (estudio de los problemas del
hipotética posibilidad de alterar conocimiento de los hechos), específicamente
los términos de las resoluciones a la valoración de la prueba, los estándares de
ejecutar ocasionaría una gravísima prueba, que importa el nivel de suficiencia
inseguridad jurídica. que debe alcanzar la prueba para considerarse
probada (prueba suficiente), que requieren
criterios de razonabilidad. El maestro Michele
2. Cultura constitucional de la juris- Taruffo no habla de derecho sino de prueba
dicción en su obra La prueba de los hechos, seguido
La cultura constitucional de la jurisdicción por Jordi Ferrer Beltrán en su obra Valoración
implica autoconciencia de la complejidad racional de la prueba.
y creatividad de la labor judicial que debe El motivar adecuadamente las resoluciones
judiciales es la esencia de un Estado consti-
1 Ver STC 4119-2005-AA/TC, fundamento 64. tucional de derecho, después de la II Guerra
Civil Ejecución
de la Constitución cuando se menciona que: mayo de 2013 expedida por la Sala Civil
“Ninguna autoridad puede (...) dejar sin efec- Transitoria de la Corte Suprema de Justicia
to resoluciones que han pasado en autoridad de la República (la valoración de la prueba
de cosa juzgada (...) ni retardar su ejecución”. trasladada): “(…). Si la Segunda Sala Mixta
La cosa juzgada guarda íntima relación con de Huancayo, al emitir la resolución de vista
la actuación o ejecución de las resoluciones ha considerado no estar de acuerdo con lo
judiciales firmes. La cosa juzgada es un ele- resuelto en la sentencia recaída en el proceso
mento distintivo de la actividad jurisdiccional, de nulidad de acto jurídico, la que constituye
es decir, que no puede hallarse este concepto cosa juzgada, e interpretando sus alcances
en otro ámbito del poder político que no sea ha procedido a resolver el presente proceso
el judicial. El fundamento de la cosa juzgada judicial, la causal de infracción normativa pro-
es la seguridad jurídica y evitar procesos cesal se ha configurado, situación que justifica
contradictorios o repetitivos. Para reconocerle nulificar la sentencia de vista con el fin de que
fuerza de resolución inmutable, debe haber la Sala Superior de origen renovando el acto
sido precedida de un proceso contradictorio, procesal dicte nueva resolución con arreglo a
en que el vencido haya tenido adecuada y Derecho” (Fundamento jurídico undécimo,
substancial oportunidad de audiencia y de última parte)4.
prueba. Se conjuga con la garantía de la Añade el Tribunal Constitucional Español que
defensa en proceso. ese derecho a la ejecución de la sentencia
La cosa juzgada surge como fruto de una en sus propios términos no impide que en
necesidad social de seguridad jurídica. El determinados supuestos esta devenga legal
pronunciamiento sobre la causa petendi (tam- o materialmente imposible lo cual habrá de
bién sobre la excepción) es razón del fallo apreciarse por el órgano judicial en resolución
(determina su sentido), de acuerdo con el motivada, pues el cumplimiento o ejecución
hecho probado (fundamento determinante). de las sentencias depende de las características
de cada proceso y del contenido del fallo5.
En las líneas jurisprudenciales del Tribunal
Supremo, se ha precisado, tomando la juris- El derecho a la ejecución de las resoluciones
prudencia del Tribunal Constitucional, que judiciales exige una ausencia de condiciona-
la cosa juzgada se concreta en el derecho mientos que dificulten o entorpezcan que lo
que corresponde a todo ciudadano de que resuelto por los órganos judiciales sea cumplido
las resoluciones judiciales sean ejecutadas en sus propios términos, de manera que los
o alcancen su plena eficacia en los propios requisitos o limitaciones legales impuestas al
términos en que fueron dictadas; esto es, ejercicio de este derecho deberán responder
respetando la firmeza e intangibilidad de las a razonables finalidades de protección de va-
situaciones jurídicas allí declaradas. lores, bienes o intereses constitucionalmente
protegidos y guardar debida proporcionalidad
La resolución que adquiere la autoridad de con dichas finalidades6.
cosa juzgada es inmutable, sin perjuicio de
lo dispuesto en los artículos 178 y 407 del
Código Procesal Civil, norma sustantiva que
debe entenderse a la luz de lo dispuesto en el 4 Ver Página web del Poder Judicial, Jurisprudencia
artículo 4 de la Ley Orgánica del Poder Judicial Nacional Sistematizada 2013.
5 Ver STC 153/92, citada por CIMENT DURÁN, Carlos,
antes acotado. Tribunal Constitucional. Doctrina en materia civil y penal.
Por consiguiente, se ha motivado en la Ca- Valencia, Editorial General de Derecho, 1994, T. I,
p. 529.
sación procesal N.° 1262-2012-Junin sobre
6 STC español 73/2000, de 14 de marzo, citada por
mejor derecho a la propiedad (entiéndase José Garberí Llobregat, Constitución y Derecho Procesal.
declaración de propiedad) de fecha 17 de Los fundamentos constitucionales del Derecho Procesal,
Navarra, Civitas, 2009, p. 203.
Civil Ejecución
una actuación administrativa del Juzgado, como En las líneas jurisprudenciales del Tribunal
ocurre cuando se remiten partes a los Registros Supremo, se ha precisado que deben distin-
Públicos para la inscripción de la sentencia de guirse las sentencias ejecutables de las que no
nulidad de acto jurídico, prescripción adqui- lo son, ello a efecto de determinar ante cuál
sitiva de dominio, título supletorio. de los supuestos previstos en el artículo 178
del Código Procesal Civil nos encontramos;
así tenemos que la sentencia recaída en el
PERFECTO ANDRÉS IBÁÑEZ dice: proceso de división y partición es una ejecuta-
ble; en tal virtud, corresponde situarnos en el
“ciaLatiene
independen-
por obje-
primer supuesto de la norma procesal, antes,
la misma prevé que tratándose de este tipo
to evitar que el de sentencias, la demanda de nulidad cosa
juez, por razón de juzgada fraudulenta (revisión civil por fraude
su modo de encaje procesal) se interpondrá dentro de los seis
en el marco esta- meses de ejecutada la sentencia10.
tal, por su estatu-
Para el cómputo del plazo de las sentencias
to, se vea constre-
ñido o inducido a operar como actor declarativas y constitutivas en materia de
político, es decir, como parte política nulidad de cosa juzgada fraudulenta, se efec-
en el proceso, en perjuicio de la ex- túa desde que la sentencia se encuentra
clusiva sujeción a la ley . ” firme; pues ellas no ameritan propiamente
ejecución, no ocurre así en las sentencias de
condena, donde la existencia del proceso
Resulta pertinente hacer referencia a la cla- fraudulento va paralelo a su ejecución, por lo
sificación de sentencias de procesos de que el plazo de caducidad corre simultánea-
cognición, estas se dividen en sentencias de- mente, según se desprende del artículo 715
clarativas, sentencias constitutivas y sentencias del Código Procesal Civil, donde la ejecución
de condena. Establecemos sus alcances: empieza con la exigencia del ejecutado para
- Sentencias meramente declarativas: que cumpla con su obligación11.
Tienen por objeto ratificar una situación
dada en la demanda; la declaración de la 5. Medida cautelar de anotación de
existencia o inexistencia de un derecho o la demanda y la ejecución de la
de una determinada relación jurídica, esto sentencia
es, dar claridad a una situación incierta o
La medida cautelar es un contenido básico o
dudosa.
componente esencial del derecho fundamen-
- Sentencias constitutivas: Tienen por tal a la tutela jurisdiccional efectiva. No hay
objeto crear una nueva situación jurídica, sector que no esté cubierto con la tutela caute-
modificar o extinguir una relación jurídica lar. El objeto de la medida cautelar es asegurar
preexistente.
- Sentencias de condena: Tienen por ob-
Base para un modelo, Lima, Ara Editores, 2011,
jeto ordenar al demandado a cumplir con pp. 214-215.
una prestación debida (un dar, un hacer) 10 Casación N.° 3346–Callao publicada en el diario
o abstenerse de realizar una conducta (un oficial El Peruano con fecha 30 de agosto de 2000,
no hacer); lo que se busca es que declare página 6148; citada en la Casación N.° 2437-2012-
Lima de fecha 3 de julio del 2013, expedida por la
e imponga el deber de prestación9. Sala Civil Transitoria de la Corte Suprema de Justicia
de la República, fundamento jurídico 6.
11 Casación N° 1360-2000- La Libertad, publicada en
9 OBANDO BLANCO, Víctor Roberto, Proceso civil y el el diario oficial El Peruano con fecha 30 de octubre
Derecho fundamental a la tutela jurisdiccional efectiva, de 2000.
Civil Ejecución
lo resuelto en el proceso de nulidad de acto te sentencia recaída en el Expediente N.°
jurídico de mutuos hipotecarios. Además, se 00978-2012-PA/TC, por la cual se declara
deben tener en cuenta que en el supuesto infundada la demanda de amparo contra
que las posteriores adquisiciones se vean resolución judicial.
afectadas por la declaración de nulidad de
Explica el maestro Juan Monroy Gálvez17, la
los contratos de mutuo, el inmueble materia
medida cautelar en amparo judicial importa
de litis tampoco volvería a ser de propiedad
una hipótesis absolutamente excepcional
del demandante; ya que volvería a ser del
(1 x 1000). Tienen conceptos jurídicos inde-
adjudicatario (Casación N.° 1156-2012-Lima
terminados, el arte de juzgar tiene que ver,
de fecha 10 de mayo de 2013, expedida por
contemporáneamente, con saber usarlos.
la Sala Civil Transitoria, fundamento jurídico
7 y 9)16. Los criterios son: a) El daño marginal debe ser
evidente e inminente, no solo posible; per-
juicio que la parte sufre por el tiempo que va
IMPORTANTE desde el inicio del proceso hasta la ejecución
de lo decidido; b) La discusión suele ser de puro
La cosa juzgada guarda íntima re- derecho (garantía o principio constitucional).
lación con la actuación o ejecución La verosimilitud adecuadamente sustentada
de las resoluciones judiciales firmes, (exigencia mayor de fundamentar su decisión
al ser un elemento distintivo de la sobre el caso concreto). No cualquier vicio
actividad jurisdiccional, es decir, que procesal, vale decir, que incida en el resultado
no puede hallarse este concepto en del proceso y pueda producir un daño no
otro ámbito del poder político. El susceptible de reparación. Por último, que se
fundamento de la cosa juzgada es la
haya alegado vicio en proceso anterior y se
seguridad jurídica y evitar procesos
agotaron las impugnaciones sobre la infracción.
contradictorios o repetitivos. Para
reconocerle fuerza de resolución in-
mutable, debe haber sido precedida 7. Proceso de amparo contra resolu-
de un proceso contradictorio, en que ciones judiciales
el vencido haya tenido adecuada y El derecho fundamental a la tutela jurisdic-
substancial oportunidad de audien- cional efectiva permite que lo que ha sido
cia y de prueba. Se conjuga con la decidido judicialmente mediante una sentencia
garantía de la defensa en proceso. firme, resulte eficazmente cumplido. Como
lo ha establecido reiterada jurisprudencia del
Tribunal Constitucional peruano, el amparo
6. Improcedencia de la medida cau- contra resoluciones judiciales no puede servir
telar para impedir ejecución de para replantear una controversia resuelta por
una sentencia o de resistirse a su los órganos jurisdiccionales ordinarios, pues no
efectivo cumplimiento constituye un medio impugnatorio que conti-
Las medidas cautelares en proceso constitucio- núe revisando una decisión que sea de exclu-
nal de amparo no pueden ser utilizadas con siva competencia de la jurisdicción ordinaria.
la simple intención de prolongar en el tiempo Asimismo, se ha dejado establecido que los
la ejecución de una sentencia ordinaria o de procesos constitucionales no pueden articular-
resistirse a su efectivo cumplimiento. Así lo ha se para examinar los hechos o la valoración
establecido el Tribunal Constitucional como de medios probatorios ofrecidos y que ya han
doctrina constitucional vinculante median-
Civil Ejecución
humanos. El concepto jurídico de seguridad Como lo señalan los analistas políticos, hay
jurídica es complejo y multidimensional. que ser muy ingenuo para creer que el Perú
La seguridad jurídica depende en buena puede dar el salto a las grandes ligas con
medida de la formación de los legisladores, la institucionalidad política que tiene. O se
los jueces, los abogados y otros operadores reforma el sistema político o el país se irá
del derecho, pero ellos no son los únicos tornando cada vez más ingobernable. El mo-
encargados de su fortalecimiento. Las em- delo peruano –crecimiento económico con
presas y los ciudadanos también tienen la ineficacia política– no puede ser visto como
oportunidad para aportar en la construcción un éxito20. Observa el jurista Luigi Ferrajoli,
de la seguridad jurídica. La seguridad jurídica al hablar del peligro de la democracia, que
no se ventila únicamente en sede judicial, aparece cuando el Estado moderno entra en
sino que están involucrados en ella los tres crisis, subordinado por la economía, que es
poderes. En definitiva, una contribución al el lugar del verdadero poder. La política es
Estado Constitucional de Derecho. subalterna a la economía.
Debemos ser conscientes de la crisis de ins-
titucionalidad que existe en nuestro país, 10. Conclusiones
siendo la reforma del Estado una agenda aún a) La palabra clave en la definición del dere-
pendiente, de la cual el tema de justicia no es cho a la tutela jurisdiccional efectiva es la
ajeno. El sistema de justicia sigue a la espera de “técnicas procesales idóneas” para la
de una reforma integral, donde la voluntad efectiva tutela de los derechos materiales,
política es parte del liderazgo necesario. La siguiendo la doctrina italiana, española y
justicia tiene que legitimarse y la manera brasileña. Importa desarrollar las manifes-
de legitimarse es la eficacia, en armonía taciones concretas de este derecho funda-
con los derechos de los ciudadanos, esto es, mental, como ocurre con el derecho a la
asegurar una justicia efectiva. Estas son efectividad de las resoluciones judiciales.
las nuevas aventuras que a los procesalistas b) La tutela, llamada jurisdiccional porque
les toca enfrentar, sentando las bases de un expresa una función exclusiva del Estado,
movimiento renovador del derecho procesal se concreta teóricamente cuando se expi-
partiendo de la dimensión constitucional del de una sentencia que una vez firme recibe
proceso. la autoridad de la cosa juzgada. Esto se
llama satisfacción procesal. El derecho
¿SABÍA USTED QUE? a la ejecución de resoluciones judiciales
como manifestación del derecho a la
El Tribunal Constitucional peruano, tutela jurisdiccional efectiva ha recibido
siguiendo la doctrina y jurispruden- constante atención en el desarrollo de
cia constitucional española, señala nuestra jurisprudencia constitucional. Esto
que el derecho a la ejecución de las se llama eficacia procesal.
resoluciones judiciales –entendido c) La cosa juzgada guarda íntima relación
como una de las dimensiones del con la actuación o ejecución de las reso-
derecho a la tutela jurisdiccional luciones judiciales firmes. La cosa juzgada
efectiva–, garantiza que lo decidido es un elemento distintivo de la actividad
en una sentencia se cumpla y que jurisdiccional, es decir, que no puede
la parte que obtuvo un pronuncia- hallarse este concepto en otro ámbito del
miento de tutela, a través de una poder político que no sea el judicial.
sentencia favorable, sea repuesta en
su derecho y compensada, si hubiere 20 ZEGARRA MULANOVICH, Gonzalo, “Y después del
lugar a ello, por el daño sufrido. BCR… ¿Qué?”, En: Semana Económica, N.° 1402,
Lima, 2013, p. 8.
Civil Ejecución
COMENTARIO DE JURISPRUDENCIA
Comentario de jurisprudencia
Comentario a la
Casación N° 1944-
La motivación de las sentencias
2009-Piura como medio legitimador del deci-
sorio
A propósito de las funciones endoprocesal y
extraprocesal de las sentencias
1. Introducción
SUMARIO
Más allá del derecho procesal no hay derecho civil o derecho penal,
sino pura y simple sociología.
Jaime GUASP
Civil Ejecución
Por cierto, en el Common Law, el juez tiene se aprecia de la sentencia de vista que esta
enorme atribución y responsabilidad que este, declaró improcedente la demanda, a raíz de
no puede estar sometido a la ley, menos al que el presente proceso, previamente, para
texto normativo; dado que en caso de inexis- determinar si procedía la restitución del bien
tencia, este crea remedios antes de derechos: inmueble, debería de haber sido materia de
remedies precedes rights. decisión de otro proceso en el que se deter-
minará a quién le correspondía la posesión.
Pues bien, adentrándonos al tema que nos
importa, a efectos de tener un panorama Esto es, dilucidar o hacer un análisis y estu-
más claro respecto del tema de la motivación dio de los hechos a efectos de determinar a
de las resoluciones, Picó i Junoy, citando una quién le corresponde la restitución. Debemos
Sentencia del Tribunal Constitucional Espa- recordar que esta pretensión no importa la
ñol, señala que la motivación comprende las discusión de titularidad de propiedad; dado
siguientes finalidades: “i) Permite el control que esto exigiría una vía procedimental de co-
de la actividad jurisdiccional por parte de nocimiento plena, procedimiento con tiempos
la opinión pública, cumpliendo así con el más reposados lo cual es incompatible con
requisito de la publicidad, ii) Hace patente el la pretensión restitutoria de bien inmueble
sometimiento del Juez al imperio de la ley, iii) por la misma urgencia del derecho, lo que
Logra el convencimiento de las partes sobre trae consigo menor conocimiento y actividad
la justicia y corrección de la decisión judicial, probatoria.
eliminando la sensación de arbitrariedad (…);
Lo más saltante es cómo la Segunda Sala
y iv) Garantiza la posibilidad de control de la
Especializada en lo Civil de la Corte Superior
resolución judicial por los Tribunales Supe-
de Justicia de Piura determinó por la impro-
riores que conozcan de los correspondientes
cedencia de la demanda, tornándose en una
recursos”3.
sentencia procesal o inhibitoria según doctrina
brasilera4. Así y todo, motivación que se ofre-
¿SABÍA USTED QUE? ció al justiciable fue la siguiente: dilucidar el
mejor derecho a la posesión en el presente caso
La sentencia, al aplicar la legalidad sería ir más allá del petitorio.
o juricidad al caso concreto puesto Tal ‘motivación’ llevó al Colegiado de Segun-
en el proceso, no debe ser arbitra- do Grado a optar y decidir por la revocatoria
ria, manifiestamente irrazonable ni de la sentencia venida en grado y declararla
incongruente; dado que no podría improcedente lo cual, a nuestro parecer, es
considerarse fundada en Derecho. más un intento de otorgamiento de justi-
cia en lugar de una función jurisdiccional
En los de la materia que fueron discutidos en comprometida no solo con la exigencia de
sede casatoria –Cas. N° 1944-2009 PIURA–, fundamentar la decisión, sino con la urgen-
cia del Órgano Jurisdiccional fungir de ente
3 Picó i Junoy, Joan, Las garantías constitucionales del didáctico a los justiciables. Estas considera-
proceso, J.M. Bosch, Barcelona, 1997. p. 64. Debemos ciones serán brevemente pinceladas en el
advertir al lector que las consideraciones expuestas
por el excelente Tribunal Constitucional Español siguiente ítem.
deben ser leídas con pormenorizada atención en el
sentido de que una motivación adecuada no siempre
Aprehendemos la tesis expuesta por la Sala
es a raíz del sometimiento del juez a la ley. En otras Civil Transitoria de la Corte Suprema en el
palabras, la lectura de esta finalidad debe ser leída sentido que operó en tal sentencia elevada
como que el juez SÍ está sometido por mandato en casación, una motivación sustancialmente
Constitucional a motivar sus decisiones y no, a que la
motivación es un sometimiento del intelecto del Juez
a la voluntad del legislador plasmada en el derecho 4 Cfr. Alvim Wambier, Teresa Arruda, Nulidades do
codificado. processo e da sentença, São Paulo, RT, 2007.
Civil Ejecución
a. La función extraprocesal y endoproce- etapa de transición de la etapa científica
sal de la motivación de las sentencias a la instrumental. De ahí que los autores
En 1975, en Pavía, Italia, se venía gestan- de larga data hayan optado por obviar el
do un estudio que, para su época, creemos impacto de la motivación en la ciudadanía.
que estuvo por demás adelantado. Si bien i. La dimensión endoprocesal
el estudio de la motivación de la sentencia La proyección endoprocesal de la
puede resultar en exceso técnico, neta- sentencia implica el impacto en la
mente procesal o ritual, a partir de este totalidad de funciones que son desa-
libro, La motivazione della sentenza civile, rrolladas al interior del procedimiento.
Michele Taruffo emprendió la toma de Es así que el juez, como funcionario
consciencia en la doble función que podría público, al emitir una sentencia, en
significar decidir motivadamente no solo realidad, realiza una actividad jurisdic-
para los justiciables inmersos en el proce-
cional que surte efectos para la posible
so, sino, para la sociedad en general5.
denuncia o cuestionamiento de las
Con esto, se prestigiaba el inicio del partes. En un modelo institucional,
proceso en la perspectiva constitucional, tal cual afirma Colomer, el juez sen-
movimiento conocido como la instru- tencia –y, por lo tanto, motiva–, para
mentalidad del proceso que tuvo como propiciar el control jurídico-técnico
referente necesario –si no es germen– los de la decisión por las partes (control
estudios de Mauro Cappelletti y Bryant
privado) y también por los órganos
Garth en su voluminosa Access to Justice.
jurisdiccionales (control institucional)6.
La necesidad de concentrar estudios de
Inextricablemente ligada al ejercicio
motivación de las sentencias en terrenos
de impugnación, la motivación en
procesales (léase, endoprocesales) fue
producto del mismo devenir histórico y una visión endoprocesal se destina a
un auditorio técnico, ejercicio que será
útil para trazar los límites de la deci-
5 Advertimos, no obstante, que estudios previos al
de Taruffo significaron el germen del desarrollo de
sión y también para controlarla. Este
esta perspectiva en lo que respecta al tema de la auditorio técnico, al estar únicamente
motivación de las sentencias. Así, para Calamandrei, conformado por las partes en litigio y
la motivación contiene una doble motivación: una los Órganos de grado superior, limita
exhortativo-pedagógica que se concreta en el hecho
de que el juez no se limite a la norma; sino que al el campo de proyección de la senten-
tiempo que ordena cualquier actuación trate de ex- cia únicamente a quienes pueden inte-
plicar la razonabilidad de dicha orden. Una función resarles, de manera directa, la decisión
justificativa la que implicaba la explicación de la y a quienes, en su debido momento,
bondad de la sentencia. Con claros trazos garantistas,
Punzi era de la idea que la motivación se configura his- pueden conocer de las impugnaciones
tóricamente como una garantía contra las decisiones dirigidas contra tal sentencia.
arbitrarias del juez; por tanto, es un instrumento para
el control y la crítica de la decisión del magistrado.
Con acierto, doctrina española ha
Colomer Hernández, Ignacio, La motivación de indicado que también a esta función
las sentencias: Sus exigencias constitucionales y legales, endoprocesal, ciertas funciones son
Valencia, Tirant lo Blanch, 2003, p. 119. Al respecto, ofrecidas a las partes para conformar
creemos que el matiz garantista que Punzi ofrece a la
conceptualización de la motivación de las sentencias, una proyección endoprocesal comple-
difumina significativamente el poder sostener que la ta. A saber, las partes: i) actúan como
motivación sirve como instrumento de legitimidad garantía de impugnación; ii) ejercen
del juez hecha para la sociedad. Mientras su preocu- además una función interpretativa del
pación es la motivación como herramienta para que,
en buena cuenta, el litigante pueda cuestionarla, es contenido de la sentencia; y iii) cons-
necesario que, ante esto, se alce la mirada a efectos
de contribuir a un estudio sociológico dentro de lo
que incumbe a la motivación de las sentencias. 6 Ibidem, p. 124.
Civil Ejecución
derechos y principios los cuales prestigien no ciertas esferas que designan a personas que
solo al juez y su función, sino, al igual que favorecerán los intereses ajenos a las partes.
estos, prestigien al procedimiento en sí. Esto de por sí coloca a los Jueces en una posi-
Hablar ahora de un debido proceso no estaría ción de ‘legitimidad ficticia’ en el sentido que
completo sin evidenciar que por la legitima- no hubo un consenso popular para poder de-
ción del procedimiento se inmuniza el con- signarlos –además, imagínense las elecciones
tenido de la decisión, que deja de importar populares por distritos judiciales de los jueces,
para la valoración de la legitimidad; dado sería algo realmente catastrófico por ser caldo
que la ‘aceptación’ no deriva del contenido de cultivo para otro proceso electoral, con
de la decisión, sino de la estricta observancia todas las desgracias que el mismo supone–.
del procedimiento. Hablar de debida obser-
vancia del procedimiento implica por tanto Por lo tanto, el juez, como impartidor de
no únicamente motivar la sentencia; sino, lo justicia y como agente político a veces, al no
que es, motivar cada acto del Juez en el cual estar legitimado por el voto, no puede dejar
decida alguna cuestión procesal o de fondo, de justificar las decisiones que este emite y
bajo perjuicio de tornarse en un juez propio que mal que bien, impactan en la vida del
de un autoritarismo fiel a la voluntad paternal ciudadano. El arte de motivar e interpretar
del Estado. implica tomar hechos, reconstruirlos, crear
una tutela atípica y una norma general para
Creemos que la motivación no solo es exigi-
el caso en concreto, implica valoración de
da para satisfacer al auditorio técnico, sino
medios probatorios, trabajo intelectual de
también al auditorio general por una sencilla
aprehensión de hipótesis para convertirlas
razón política. El juez no es elegido por el
en tesis, implica inmediación, conflicto en el
voto popular10. En nuestro sistema, es elegido
mismo sentir del Juez.
por el Consejo Nacional de la Magistratura y,
muchas veces, por el mismo titular de la Corte Todo eso, y quizás mucho más, no puede pa-
Superior de cada distrito, nombrando así a sar sin una exposición al ciudadano (sea parte
jueces ‘supernumerarios’ o ‘provisionales’ los o no) justamente porque esto prestigia al juez.
cuales generalmente responden a la falta de La interpretación, específicamente la judicial,
jueces11 y, por qué no, a intereses propios de al ser un arte halográfico, no puede implicar la
satisfacción por la simple observación –como
10 Con acierto, Marinoni indica que la fundamentación sería un cuadro de algún artista renombrado–.
de lo decidido responde a una suerte de legitimación Este arte halográfico implica que nos tomen
externa que la ciudadanía controla toda vez que los de la mano y enseñen el cómo se valoró, el
jueces no son escogidos por voto popular, inexistiendo
representación alguna de los jueces hacia la pobla-
porqué de la decisión y, sobre todo, la razón
ción. Esto pues, a nuestra sazón, indica que lo menos de ser de la motivación: el convencimiento de lo
posible a hacerse para legitimar esta decisión – y en que se decidió es justo por ser la tutela prometida
realidad, el procedimiento – es justificar el porqué por el Estado para la satisfacción del bien de la
de lo decidido a la vez que esto se erige como gran
proyección social del mismo proceso a la sociedad. vida reclamado por el sujeto.
V. Marinoni, Luiz Guilherme, Curso de Processo Civil,
Vol. I, Teoria Geral do Processo, 3° ed. São Paulo, RT, que antes del hacinamiento de jueces en las diferentes
2008, p. 108. cortes, es mucho más efectivo controlar esta carga
11 Falta de jueces; falsa panacea a los altos niveles de procesal con técnicas adecuadas, como técnicas de
litigiosidad y por tanto sobrecarga procesal. Ha que- aceleración del proceso o controles estrictos en la
dado demostrado incluso en la experiencia brasilera etapa postulatoria.
TEXTO DE LA CASACIÓN
* Publicado en Sentencias en Casación, Año XIV, Nº 630 (El Peruano, Viernes 1 de octubre de 2010, p. 28475).
Civil Ejecución
dicha obligación, es decir el dejar incontestadas las pretensiones, o el desviar la decisión del
marco del debate judicial generando indefensión, constituye vulneración del derecho a la tutela
judicial y también del derecho a la motivación de la sentencia (Incongruencia omisiva). Y es que,
partiendo de una concepción democratizadora del proceso como la que se expresa en nuestro
texto fundamental (artículo 139 incisos 3 y 5), resulta un imperativo constitucional que los justi-
ciables obtengan de los órganos judiciales una respuesta razonada, motivada y congruente de las
pretensiones efectuadas; pues precisamente el principio de congruencia procesal exige que el juez,
al momento de pronunciarse sobre una causa determinada, no omita, altere o se exceda en las
peticiones ante él formuladas. [Resaltado Agregado]; Segundo.- Examinado el presente proceso
para determinar si se ha infringido el debido proceso en los términos denunciados. es del caso
efectuar las siguientes precisiones: I.- Los demandantes Néstor Alberto Fernández Risco y Elena
Fernández Santos, postulan la presente demanda de restitución de bien inmueble, a fin de que
se les restituya en la posesión del bien inmueble ubicado en la calle principal sin del Barrio Ri-
cardo Palma, Centro Poblado de Casagrande, Distrito de La Arena, Piura; así como se les indem-
nice con la suma de diez mil nuevos soles derivada de la responsabilidad extracontractual en que
incurrieron los demandados, II.- El Juzgado Mixto de Catacaos, mediante resolución número
veintisiete, su fecha cuatro de setiembre del año dos mil ocho declara infundada la demanda en
todos sus extremos; III.- La resolución de vista al absolver el grado ha revocado la resolución de
primera instancia que declara infundada la demanda y reformándola la declara improcedente,
Tercero.- El sustento de la Sala Civil Superior para declarar la improcedencia de la demanda
radica en el hecho de considerar que no se puede dilucidar el mejor derecho de posesión por no
estar expuesto ni en el petitorio de la demanda ni planteado como pretensión vía reconvención,
ni fijada como punto materia de controversia; no obstante ello. conforme fluye de autos las
partes procesales discuten la titularidad del derecho de posesión lo cual debe ser dilucidado a
efecto de determinar precisamente cuál de las partes justiciables tiene el mejor derecho de pose-
sión respecto del bien sub litis y como consecuencia de ello, establecer si corresponde acceder a
la restitución de dicho bien exigido por la parte demandante; Cuarto.- En ese sentido, es menes-
ter precisar que el aforismo iura novit curia reconoce la necesaria libertad del juez para subsumir
los hechos alegados y probados por las partes dentro del tipo legal, libertad que subsiste aún en
el supuesto de que los litigantes hubieran invocado la aplicabilidad de otras disposiciones como
señala Peyrano, al juez le está vedado, dentro de un esquema procesal crudamente dispositivista,
ser curioso respecto del material fáctico, pero puede y debe, emprender una búsqueda sin fron-
teras, tendiente a subsumir rectamente aquel dentro del ordenamiento normativo”’(…); Sexto.-
De lo expuesto, la resolución impugnada infringe por contravención las normas que regulan el
debido proceso, sustentadas en la falta de valoración de los medios probatorios, incurriéndose
en causal de nulidad prevista en el inciso 6 del artículo 50 del Código Procesal Civil, por lo que
el presente medio impugnatorio propuesto, debe declararse fundado. Por tales consideraciones
declararon: FUNDADO el recurso de casación interpuesto por Néstor Alberto Fernández Risco y
otra mediante escrito obrante a folios quinientos sesenta; CASARON la resolución impugnada:
en consecuencia; NULA la sentencia de vista de folios quinientos cuarenta y siete, su fecha vein-
tinueve de enero del año dos mil nueve; ORDENARON que la Sala de mérito, expida nueva
resolución en atención a los fundamentos que anteceden; DISPUSIERON la publicación de la
presente resolución en el Diario Oficial El Peruano: bajo responsabilidad; en los seguidos por
Néstor Alberto Fernández Risco y otra contra José Guillermo Masías Vílchez y otra sobre Restitu-
ción de Bien Inmueble; y los devolvieron; Ponente Señora Aranda Rodríguez, Juez Supremo.-
SS.
Ticona Postigo / Palomino Garcia / Miranda Molina / Salas Villalobos / Aranda Rodríguez.
CONSULTA
El abogado de Augusto Ramos nos comenta que en el proceso único
de ejecución de obligación de dar seguido contra Rafael Gómez, este
se defendió de forma inconsistente, alegando la falsedad del título y
ofreciendo como medio probatorio una declaración de testigos. La con-
tradicción fue declarada infundada pero el ejecutado no tuvo mayores
reparos en apelar. Nos consulta si existe alguna posibilidad –aunque
sea mínima– de continuar con la ejecución forzada, esto es, que el juez
conceda la apelación sin efecto suspensivo.
Civil Ejecución
que en doctrina, a fin de contraponerlo con- probar la falsedad de un título valor mediante
ceptualmente a la urgencia, se le denominó testigos) con la posesión del bien de la vida
“tutela de evidencia”. Lo que Augusto Ramos por todo el tiempo que dure el proceso. Se
desea, por tanto, es una anticipación de tutela trata de una hipótesis que vulnera abierta-
satisfactiva por evidencia. ¿Es ello posible? mente el derecho fundamental a la tutela
efectiva del ejecutante.
En nuestra opinión, sí lo es. La anticipación
de tutela es una técnica procesal destinada a No obstante, aún no llegamos al final del
distribuir igualitariamente la carga del tiem- túnel: ¿cómo es posible superar o derrotar la
po en el proceso, según la probabilidad del regla del artículo 691, CPC? Esto es, ¿cómo
derecho del demandante o del demandante. continuar con la ejecución a pesar de que
Ello quiere decir que si el demandante de- se ordena la concesión de la apelación con
muestra que su derecho es más probable, efecto suspensivo? Creemos que es necesa-
entonces no existe ninguna justificación, a rio argumentar a partir de la Constitución y
nivel de derechos fundamentales, para que el determinar que el juez tiene el poder-deber
demandado/ejecutado siga teniendo el bien de densificar el derecho fundamental a la
de la vida disputado. En el caso materia de tutela adecuada, que exige al legislador y al
consulta, dicho bien no es otro que el dinero. juez otorgar la técnica procesal más idónea
al caso concreto, inclusive superando la
La fundamentación de la anticipación de
legislación infraconstitucional. Ello, eviden-
tutela puede ser por la urgencia o por la evi-
temente, exige una argumentación adecuada
dencia, tal como fue señalado, cada una con
y un riguroso ofrecimiento de criterios. Por
sus respectivos requisitos. Queda claro que
ejemplo, siguiendo a Humberto Ávila (Teoria
únicamente la primera ha sido regulada en el
dos princípios, 12.ª ed., pp. 121 y ss.), habrá
CPC peruano, como es el caso de las medidas
más posibilidad de superar una regla cuando
temporales sobre el fondo (artículos 674 y
dicha superación provoque una baja impre-
ss.). Las preguntas que surgen son:
visibilidad, ineficiencia y desigualdad, que
(i) ¿Está completamente vedada la posibili- no traiga arbitrariedad, que se busque una
dad de otorgar una medida anticipada sin solución pensando en la justicia general, que
urgencia? la decisión sea capaz de ser universalizada y
(ii) ¿Es posible que la necesidad de otorgar que sea controlable intersubjetivamente.
una medida anticipada sin urgencia pueda De esta manera, la argumentación se debe
derrotar a la regla del artículo 691, CPC? dirigir a demostrar la necesidad de superar la
Ambas preguntas pueden ser respondidas regla que, para este caso concreto, genera la
simultáneamente: es la Constitución la que concesión de la apelación con efecto suspen-
exige que en hipótesis ajenas a la urgencia se sivo, a fin de que pueda tutelarse el derecho
puede otorgar tutela satisfactiva anticipada. del ejecutado, que comprobadamente es más
Es cierto que ello dependerá en gran medida probable que el del demandado.
del caso concreto, pero el proceso no puede
premiar a aquel que se defiende de forma Fundamento legal:
manifiestamente inconsistente (como querer Código Procesal Civil: Artículos 615, 618, 691.
RESEÑA DE JURISPRUDENCIA
Reseña de jurisprudencia
Casación N.º
4754-2012-Lima
La devolución de frutos se determina
en la ejecución de sentencia
TEXTO DE LA CASACIÓN
CASACIÓN Nº 4754-2012-LIMA
Sumilla: La resolución cuestionada incurre en
error al concluir que la demandada acredita tener
título oponible frente a la demandante inaplicando
lo establecido por los artículos 923 y 927 del Código
Civil e inobservando la concurrencia de los efectos
constitutivos de la reivindicación desarrollados en la
presente resolución los mismos que fueron tomados
en cuenta por el Juez de la causa quien si concluyó
que de la copia literal se acredita que la Municipali-
dad actora adquirió el inmueble por compraventa y
a mérito de la declaración de fábrica la demandada
Civil Ejecución
1 Monroy Cabra, Marco Gerardo, Principios de Derecho procesal civil, 2.a edición, Editorial Temis Librería, Bogotá
Colombia, 1979, p. 359.
2 De Pina Rafael, Principios de Derecho procesal civil, Ediciones Jurídicas Hispano Americanas, México D. F., 1940,
p. 222.
Civil Ejecución
por la Sala de mérito fue expedida respetando lo dispuesto por el artículo 50 inciso 6 del Código
Procesal Civil concordante con lo preceptuado por el artículo 12 del Texto Único Ordenado de la
Ley Orgánica del Poder Judicial los cuales estatuyen que “los magistrados tienen la obligación de
fundamentar los autos y las sentencias bajo sanción de nulidad respetando los principios de jerarquía
de las normas y el de congruencia.”- Cuarto.- Que, absolviendo la denuncia antes glosada es del
caso señalar que del análisis de autos se tiene que dicha pretensión casatoria está dirigida a
cuestionar una resolución que no pone fin al proceso por cuanto esta declaró improcedente el
pedido de nulidad formulado por la Municipalidad Distrital de Miraflores respecto a la resolución
número cuatro que dispuso tener por resuelto el pedido solicitado mediante auto número tres
que declaró improcedente el recurso de reposición interpuesto y atendiendo a que la infracción
invocada incumple los fines para su propósito debe ser desestimada.- Quinto.- Que, habiéndose
desestimado la infracción normativa procesal debe analizarse la vulneración de los preceptos
legales de orden material invocados a efectos de determinar si debe o no ampararse el recurso
formulado por la Municipalidad recurrente.- Sexto.- Que, como argumentos de su denuncia
material la entidad edil recurrente sostiene que la Sala Superior ha recogido indebidamente los
fundamentos vertidos por el Tribunal Constitucional en la resolución número 0003-2007- PC/TC
respecto a una demanda sobre conflicto de competencia y atendiendo a que en el decurso del
proceso se acreditó que la Municipalidad Distrital de Surquillo no adquirió la propiedad materia
de litis queda claro que no procede atribuir el cambio de titularidad del bien sub litis ni mucho
menos basarse en la teoría de mutaciones demaniales que en nada se relacionan con la extinción
de la propiedad la cual versa sobre reivindicación que viene a ser la solicitud o petición de una
cosa que no se tiene y a la que se tiene derecho.- Sétimo.- Que, son elementos constitutivos de
la reivindicación los siguientes: a) Que la ejercite el propietario que no tiene la posesión del
bien.- La acción de reivindicación corresponde exclusivamente al propietario exclusivo como al
copropietario de bienes muebles como de inmuebles de conformidad a lo preceptuado por el
artículo 979 del Código Civil pues nace del derecho de propiedad aunque sus efectos recaen en
la posesión del bien; b) Que esté destinada a recuperar el bien no el derecho de propiedad.-
Se funda en el derecho de propiedad que concede el ius possidendi es decir el derecho a la pose-
sión regulado por el artículo 923 del citado cuerpo legal siendo este derecho a la posesión el que
se reclama en la acción reivindicatoria en la que el propietario podrá ejercer la acción en cualquier
momento conforme a las reglas establecidas por el artículo 927 del Código Civil; c) Que el bien
esté poseído por otro que no sea el dueño.- Debe estar bajo la posesión de otra persona
ajena al propietario ni de quien tenga título legítimo para la posesión si el poseedor fuese el
dueño la acción será improcedente y el actor condenado a pagar las costas del juicio puesto que
tiene título legítimo a la posesión como el arrendatario, usufructuario, el que usa, quien tiene
derecho de habitación etcétera no siendo tampoco procedente la reivindicación cuando el pro-
pietario ha cedido su derecho de posesión en favor del poseedor quien presentaría así un título
legítimo de posesión oponible a la pretensión de reivindicación puesto que se trataría de un
poseedor inmediato que recibió la posesión del propietario; y d) Que el bien sea una cosa
determinada.-el bien objeto de la reivindicación será necesariamente una cosa mueble o inmue-
ble y habrá de ser determinada para que pueda ser identificada.- Octavo.- Que, asimismo son
efectos de la reivindicación a) Restituir la posesión del bien reclamado.- El objeto es que el
propietario recupere la posesión del bien de su propiedad; b) Restituir los frutos a su valor si
el poseedor fue de mala fe.- Al respecto el artículo 910 del Código Civil establece que el po-
seedor de mala fe está obligado a entregar los frutos percibidos y si no existen a pagar su valor
estimado al tiempo que los percibió o debió percibir; c) Restitución de todos los incrementos.-
Que haya recibido el bien durante la posesión del demandado si se trata de incrementos natura-
les; d) La indemnización de los perjuicios ocasionados con la posesión o detención indebida
del bien; y e) Las costas del juicio de reivindicación3.- Noveno.- Que, respecto a las partes in-
tegrantes de un bien el artículo 887 del Código Civil señala que es aquello que no puede ser
separado sin destruir, deteriorar o alterar el bien no pudiendo ser objeto de derechos singu-
lares y se caracterizan por lo siguiente: a) Unión física.- La idea de separación de las partes in-
3 Cuadros Villena, Carlos Ferdinand. Derechos reales. Tomo II. 1.a edición. Año 1995. Editorial Cultural Cuzco;
VÁSQUEZ RÍOS, Alberto. Derechos reales. Propiedad. Tomo II. 2.a edición. 1996. Editorial San Marcos; y Vásquez
Ríos, Alberto. Derechos reales. 4.a edición. Tomo I. Bienes, posesión, propiedad y copropiedad, usufructo, uso y
habitación. Editorial San Marcos.
Civil Ejecución
tegrantes de un bien con la consiguiente destrucción, deterioro o alteración nos conduce a concluir
que la unión de los distintos elementos para constituir una entidad distinta será siempre unión
física de bienes lo que implica que la configuración de partes integrantes solamente será
factible en el caso de los bienes materiales respecto a los cuales es susceptible la integra-
ción física y la configuración de nuevos bienes y por tanto su segregación o separación con
la consiguiente destrucción, deterioro o alteración4; b) Conformación de un nuevo bien.- La
simple unión física de bienes no configura necesariamente un bien distinto requiriéndose además
que dichas partes integrantes formen una unidad funcional que sea apreciada como un objeto
con identidad distinta de la de sus partes integrantes, que tenga utilidad o interés económico y
por lo tanto que sea susceptible de incorporarse como unidad en el tráfico comercial5; c) Protec-
ción de la unidad.- La prohibición de que los bienes integrantes puedan ser objeto de derechos
singulares se sustenta en que una vez unidos los distintos bienes para formar una entidad distin-
ta, la segregación conlleva a la destrucción, alteración o deterioro no solamente del nuevo bien
sino de los bienes que concurrieron en su conformación.- Décimo.- Que, en cuanto al Principio
de Publicidad regulado por el artículo 2012 del Código Civil corresponde señalar que por el
mismo se presume sin admitirse prueba en contrario que todos están enterados del conteni-
do de las inscripciones siendo presunción “iuris et de iure” porque no se admite prueba en
contrario y nadie podrá alegar desconocimiento o ignorancia de lo que aparece inscrito en las
formas y/o fichas de inscripción que constan en los Registros Públicos ni de los títulos que dieran
mérito para su respectiva inscripción los que se encuentran archivados.- Décimo Primero.- Que,
de otro lado el numeral VII del Título Preliminar del Reglamento General de los Registros Públicos
así como el artículo 2013 del Código Civil consagran el principio de legitimación por el que los
asientos registrales se presumen exactos y válidos y producen todos sus efectos y legitiman al
tilular registral para actuar conforme a ellos mientras no se rectifiquen en los términos estableci-
dos en el Reglamento referido o se declare judicialmente su invalidez.- Décimo Segundo.- Que,
de lo actuado en el decurso del proceso se tiene que la Municipalidad Distrital de Miraflores por
Escritura Pública de compraventa adquirió el inmueble ubicado en la intersección de la Avenida
Paseo de la República – antes Calle Ferrocarril- y la Calle Narciso de Colina – antes Calle Barcelo-
na- Distrito de Surquillo inscribiéndolo ante los Registros Públicos el veinticuatro de abril de mil
novecientos setenta apreciándose además que mediante Decreto Ley número 11058 se creó el
quince de julio de mil novecientos cuarenta y nueve el Distrito de Surquillo encargando la Mu-
nicipalidad Metropolitana de Lima por Resolución de Alcaldía número 1103 de fecha dieciséis
de noviembre de mil novecientos ochenta a Invermet la ejecución del sistema de administración
de los trabajos de construcción y rehabilitación del Mercado de Abastos de Surquillo otorgándo-
se la supervisión y control de los mismos al Ministerio de Vivienda y Construcción habiendo este
hecho entrega del trabajo a la Municipalidad demandada procediendo a inscribir la declaratoria
de fábrica el tres de mayo de dos mil cinco aprobándose su privatización el nueve de mayo de
dos mil siete; en la misma medida es de verse que la Municipalidad actora cursó una carta nota-
rial el once de setiembre de dos mil siete a la Asociación de Comerciantes del Mercado de Abas-
tos antes citado a fin de ofertarle al mismo instaurándose también un proceso de declaración
judicial de compra de dicha propiedad emitiendo sin embargo el Tribunal Constitucional con
fecha veintiuno de noviembre de dos mil siete la sentencia signada con el número 00003-2007-
TC por la que se declaró fundada la demanda interpuesta por la parte actora disponiéndose en
la misma que se conforme la Comisión Mixta de Trabajo para determinar los asuntos concernien-
tes al funcionamiento, administración y mantenimiento del Mercado en referencia por la Muni-
cipalidad Distrital de Surquillo y por la Asociación de Comerciantes corriendo a fojas ochocientos
sesenta y tres la ocurrencia policial solicitada por la demandada a fin de dejar constancia que se
estaban realizando trabajos de albañilería.- Décimo Tercero.- Que, en ese contexto y atendien-
4 Carlos Ferdinand Cuadros Villena. (Derechos reales) señala que el bien integrante es aquel que forma parte de
otro bien, o se une físicamente a él, tales como los ladrillos con que se construye un edificio, las vigas, columnas,
puertas, ventanas, porque su unión conforma una cosa nueva, perdiendo su individualidad.
5 En opinión de José Luis La Cruz Berdejo, las partes integrantes forman parte de la cosa misma: le dan el ser; de
modo que, sin ellas, la cosa no se considera completa según la opinión vulgar (las puertas de una casa, la pieza de
un automóvil); que, sin embargo, podrían ser objeto de derechos separados. Así, no serán partes integrantes los
materiales de embalaje de objetos que para permitir su traslado sin deterioro o destrucción, lo adhieren fijamente
o las construcciones temporales sobre predios que permiten la realización de un solo espectáculo.
do a las alegaciones expuestas por la Municipalidad recurrente se colige que la resolución cues-
tionada incurre en error al revocar la decisión de primera instancia y desestimar la demanda al
concluir que al haberse producido la mutación dominial subjetiva respecto al Mercado de Abas-
tos número 1 la demandada acredita tener título oponible frente al de la demandante inaplican-
do lo establecido por los artículos 923 y 927 del Código Civil inobservando la concurrencia de
los efectos constitutivos de la reivindicación desarrollados en la presente resolución los mismos
que fueron tomados en cuenta por el Juez de la causa al colegir que de la copia literal que corre
a fojas doscientos veintitrés se acredita que la Municipalidad actora adquirió el inmueble por
compraventa hecho que también fue admitido por la demandada al reconocer la propiedad del
terreno a favor de la demandante consignado que a mérito de la declaración de fábrica inscrita
a nombre de la accionante la cual no ha sido cuestionada se advierte que la demandada es pro-
pietaria de la edificación a partir de su inscripción en los Registros Públicos desvirtuándose lo
alegado al no haber demostrado ser dueña del inmueble ya que sólo se limita a señalar que las
edificaciones las hizo Invermet Institución Pública que en todo caso beneficia a los Gobiernos
Locales situación que modifica lo decidido por el Tribunal Constitucional refiriéndose en cuanto
a la pretensión accesoria referida a que desde el quince de julio de mil novecientos cuarenta y
nueve es poseedora del inmueble a mérito al Decreto Ley número 11058 por el que se creó el
Distrito de Surquillo siendo esto así se concluye que la posesión es de buena fe hasta la fecha de
la inscripción de la edificación a favor de la demandante y al tiempo transcurrido es decir al
cuatro de enero de dos mil seis dicha posesión no ha sido de buena fe por lo que corresponde
amparar la devolución de los frutos los mismos que se determinarán en ejecución de sentencia
y si bien la demandada teniendo en cuenta su posesión de buena fe inició un proceso de pres-
cripción adquisitiva de dominio el cual se tramitó en el expediente número 4310-1998 este fue
declarado en abandono y atendiendo a que para alegar derecho de propiedad éste debe ser
declarado por el órgano jurisdiccional lo que no se da en el caso de autos decisión con la que
esta Sala concuerda es evidente que con la decisión adoptada se ha transgredido el derecho de
la recurrente al no sustanciarse la presente causa en mérito al pedido del actor por la cual debe
casarse la recurrida y confirmar en sede de instancia la apelada que ampara la demanda.- Por
estos fundamentos y de conformidad a lo dispuesto por el artículo 396 primer párrafo del Códi-
go Procesal Civil declararon: FUNDADO el recurso de casación interpuesto por la Municipalidad
Distrital de Miraflores obrante a fojas mil ciento sesenta y siete; CASARON la sentencia de vista
dictada por la Quinta Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Lima el diez de setiembre de
dos mil doce; y actuando en sede de instancia CONFIRMARON la sentencia de primera instancia
que declaró fundada la demanda de reivindicación y fundada en parte la entrega de frutos de-
mandada a fojas veintidós; DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en el Diario
Oficial El Peruano bajo responsabilidad; en los seguidos por la Municipalidad Distrital de Mira-
flores con la Municipalidad Distrital de Surquillo y otro sobre Reivindicación; y los devolvieron.
Ponente Señora Valcárcel Saldaña, Jueza Suprema.-
SS.
Ticona Postigo / Valcárcel Saldaña / Cabello Matamala / Cunya Celi
EL VOTO EN MINORÍA DEL SEÑOR JUEZ SUPREMO MIRANDA MOLINA ES COMO SIGUE:
CONSIDERANDO: Primero.- Que, con relación al agravio de vulneración al derecho de tutela
procesal efectiva consistente en la omisión de pronunciarse sobre la nulidad de las resoluciones
números setenta y cuatro (74) y setenta y siete (77), que se refieren a la prohibición en que estaría
incurso el abogado de la parte contraria por haber sido asesor y procurador de la recurrente, tal
agravio no puede ser materia de examen Casatorio porque no va a tener incidencia en el resultado
del proceso y por no estar referido a una resolución final.- Segundo.- Que, la sentencia de vista
que revoca la resolución de primera instancia que declaró fundada la demanda y reformándola
la misma la declaró infundada en todos sus extremos, se sustenta de modo primordial en normas
de derecho público, motivación que está justificada por cuanto el bien materia de reivindicación
es un mercado, es decir un bien de dominio público, tal como lo ha establecido la indicada
resolución.- Tercero.- Que, no obstante ello, los agravios de orden material de la casación se
sustentan en la infracción de los artículos 887, 923, 927, 2012, 2013 y 2019 del Código Civil, es
decir en normas propias del ordenamiento privado.- Cuarto.- Que, aun cuando el proceso se ha
Civil Ejecución
tramitado conforme a las reglas del Código Procesal Civil, es indudable que por la naturaleza del
bien inmueble las normas que son aplicables a conflicto de intereses son las que corresponden
al derecho público.- Quinto.- Que, sin embargo, al afirmar la entidad demandante (Municipa-
lidad Distrital de Miraflores) que es propietaria del bien, y a efecto de dar solución adecuada al
conflicto, es necesario a la luz del derecho público analizar si puede o no ser considerado el bien
como propiedad de la actora o si, como se consigna en la resolución de la Quinta Sala Civil de la
Corte Superior de Justicia de Lima, ha operado la mutación demanial que constituye un supuesto
en el que un bien de dominio público cambia de titular o de destino, o se le impone un destino
diferente (Juan Alfonso Santamaría Pastor y Luciano Pareja Alfonso. Derecho Administrativo. La
jurisprudencia del Tribunal Supremo. Madrid 1989).- Sexto.- Que, al efecto es necesario tener en
consideración la realidad objetiva que se relaciona con la organización política de un país y sobre
todo la naturaleza del bien que en el caso materia de juzgamiento está vinculado a la prestación
de un servicio público.- Sétimo.- Que, según la Ley Orgánica de Municipalidades, de fecha catorce
de octubre de mil ochocientos noventa y dos, correspondía a las municipalidades reglamentar,
administrar e inspeccionar los mercados, atribución que tiene vieja raigambre colonial mediante
la alhóndiga, todo lo que está explicado por Juan José Calle en su Diccionario de Legislación
Municipal del Perú.- Octavo.- Que, con la creación del Distrito de Surquillo mediante Decreto
Ley número 11058, conforma también lo que ha establecido la recurrida ha operado la mutación
demanial, lo que está corroborado con lo prescrito por el artículo 56.1 de la Ley Orgánica de
Municipalidades 27972, que considera como bienes municipales los de uso público destinados
a servicios públicos locales.- Por las consideraciones expuestas y de conformidad a lo establecido
por el artículo 397 del Código Procesal Civil, modificado por la Ley número 29364, MI VOTO es
porque se declare: INFUNDADO el recurso de casación interpuesto por la Municipalidad Distrital
de Miraflores, de fojas mil ciento sesenta y siete a mil ciento ochenta y cuatro; NO SE CASE la
resolución de vista; SE DISPONGA la publicación de la presente resolución en el Diario Oficial El
Peruano, bajo responsabilidad; en los seguidos por la Municipalidad Distrital de Miraflores contra
la Municipalidad Distrital de Surquillo y otro, sobre Reivindicación; y se devuelva.-
S.
Miranda Molina
procesoS
Actualidad
Área
Civil Procesos
Procesos
Contenido
DOCTRINA Juan Bélfor Zárate Del Pino: Asuntos no contenciosos en la función notarial 322
NOS PREGUNTAN Y CONSULTA: ¿Si se vence el plazo para incluir bienes en un procedimiento no
CONTESTAMOS
333
contencioso de inventario podría iniciarse uno nuevo?
RESEÑA DE El proceso no contencioso de adopción no determina la paternidad del
JURISPRUDENCIA
334
menor (Casación N° 563-2011-Lima)
DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina práctica
Asuntos no contenciosos en
la función notarial
Juan Bélfor Zárate Del Pino*
Notario Público de Lima
1. Introducción
2. Sucesiones intestadas
3. Adopción
SUMARIO
4. Rectificación de partidas
5. Prescripción adquisitiva de dominio
6. Celebración de matrimonio civil
7. Declaratoria de interdicción de incapaces
8. Posibilidades
Civil Procesos
lo que no ocurre en nuestros países donde la es en el de las sucesiones intestadas, en el cual
credibilidad de los órganos jurisdiccionales tenemos competencia compartida para todos
está venida a menos. Ello que no es una crí- los supuestos que dan lugar a esta clase de
tica, sino la mención de un hecho objetivo: sucesión. Ello no ocurre en España, en donde
hay un evidente déficit de justicia, elevados notarios y jueces intervienen en supuestos
índices de insatisfacción en los servicios de distintos: los notarios cuando los herederos
la Administración de Justicia, que soportan son descendientes, ascendientes y cónyuge,
una sobrecarga de materias que les impiden es decir, parientes directos; y la judicial cuan-
atender las que típicamente corresponden a do los llamados a la sucesión son parientes
la función jurisdiccional.
colaterales que supone un mayor grado de
Además, no hemos reclamado ni reclamamos complejidad.
competencia exclusiva para el conocimiento
de asuntos no contenciosos. Considero que la La preferencia por la intervención notarial
competencia compartida y a la vez alternativa es definitiva. De la información desagregada
ha sido una solución práctica; de modo que referida a las provincias de Huaral y Cañete
son los usuarios en ejercicio de la opción que que nos han proporcionado los Registros
tienen de acudir a la vía judicial o a sede Públicos, nos refiere que sobre un total de
notarial, quienes deciden finalmente en cuál 1114 sucesiones definitivas inscritas durante
de las competencias obtienen una respuesta el ejercicio 2011 en dichas provincias: 968
más satisfactoria a su petición; nos sentimos lo han sido por acta notarial y 146 por
particularmente halagados cuando jueces resolución judicial. En porcentajes, puede
de las diversas jerarquías acuden a nuestros redondearse a 93% por acta notarial y 7%
oficios a encargarnos el trámite de asuntos por resolución judicial. Pero no solamente se
no contenciosos; y si bien en muchos de ellos trata del registro estadístico que expresa una
nos hemos consolidado definitivamente como señal clara de confianza en la intervención
en la separación convencional y el divorcio
notarial, sino que el trámite de las sucesiones
ulterior, en otros advertimos que se tiende a
intestadas en la competencia notarial ha
limitar o recortar nuestra competencia. Sin
embargo, en general, hay una evaluación po- tenido desarrollos interesantes.
sitiva y perspectivas viables para la ampliación Uno de ellos es lo que se denomina la acu-
de este ámbito de la función notarial. Ese será mulación objetiva de peticiones, es decir, la
el eje de esta exposición. solicitud de declaratoria de herederos de más
de un causante en un mismo procedimiento,
respecto del cual la tendencia uniforme en
DATOS
sede judicial (salvo naturalmente excepcio-
nes) es la de considerar improcedentes esas
La preferencia por la intervención acumulaciones, así se trate de causantes
notarial es definitiva en los casos de
vinculados por matrimonio o por parentesco
las provincias de Huaral y Cañete. De
consanguíneo en línea recta, bajo el criterio
un total de 1114 sucesiones inscritas
de que no puede existir unidad de sucesio-
durante el ejercicio 2011 en dichas
nes respecto de causantes que han tenido su
provincias: 968 lo fueron por acta
notarial y 146 por resolución judicial propia individualidad y sus propios herederos
(93% y 7%, respectivamente). que no siempre serán coincidentes.
Por el pragmatismo de la actividad notarial y
la receptividad que han tenido las instancias
2. Sucesiones intestadas registrales, ya se efectúa la acumulación de su-
Uno de los asuntos no contenciosos donde el cesiones dentro de un mismo procedimiento,
Notariado se ha consolidado definitivamente la Resolución del Tribunal Registral Nº.421-
Civil Procesos
de su sucesión ha quedado modificado por anterior Registro de Testamentos aprobado
un hecho sobreviniente como es la presencia por la Sala Plena de la Corte Suprema hace
de su segunda esposa que es heredera forzosa más de 42 años. En la norma citada, se
no comprendida en el testamento por una consigna que la declaratoria de caducidad
cuestión de contexto temporal. se efectúa en mérito de sentencia judicial;
Por una interpretación teleológica, el proceso no obstante, sin perjuicio de esa modalidad,
judicial sirve para resolver un conflicto de cabe la inscripción directa en tres casos: la
intereses o para eliminar una situación de premoriencia del heredero instituido, la pre-
incertidumbre jurídica y en el caso propuesto sencia de herederos forzosos no considerados
no existen intereses contrapuestos ni tampoco en el testamento y la desheredación.
incertidumbre jurídica. La razón de ello es que
la partida de defunción de la primera esposa y 3. Adopción
la propia inscripción de su testamento otorgan
En el tema de la adopción de mayores de
plena certeza de haberse configurado la causal
edad y capaces de ejercicio (a la que se lla-
de premoriencia que da lugar a la caducidad
del testamento. Además, la partida del se- ma también adopción convencional por la
gundo matrimonio, posterior al otorgamiento relevancia que tiene el consentimiento de los
del testamento, da igualmente plena certeza sujetos que intervienen en la constitución de
a la presencia de nuevos herederos forzosos este vínculo familiar), hubo un retroceso que,
que el testador no tenía cuando declaró su felizmente, se ha corregido. Esta adopción no
última voluntad. En estos casos, a petición del es pacíficamente aceptada en doctrina, pues la
notario debidamente sustentada en causales adopción de mayores de edad no se ajusta a
inequívocas, permite registrar la declaratoria la idea básica de dar un padre o una madre a
de caducidad que habilita seguir el trámite de huérfanos que carecen de ese vínculo o de un
sucesión intestada. hogar a desvalidos que no pueden defenderse
por sí mismos. No obstante, en ciertos casos,
¿SABÍA USTED QUE? responden a motivaciones plausibles, como
cuando el esposo desea tomar como hijo
suyo al hijo extramatrimonial de su esposa,
Los notarios no tienen competencia ex-
clusiva para el conocimiento de asuntos
favoreciendo la integración del núcleo familiar
no contenciosos. La competencia com- lo cual convierte el parentesco por afinidad o
partida y alternativa ha sido una solución político en filiación, eliminándose la expresión
práctica, de modo que son los usuarios peyorativa de entenado por la de hijo con
quienes pueden optar por acudir a la vía todos sus derechos y efectos.
judicial o notarial. Para esos casos como el propuesto, pese a
que se trataba de una adopción individual o
Este tema, en la actualidad, no está expues- unipersonal (acogiendo la salvedad expresa
to al conocimiento o desconocimiento que que hacían los intervinientes, entre ellos la
tenga el Registrador de los precedentes esposa del adoptante que era madre bioló-
registrales mencionados, pues ya ha sido gica del adoptado de conservar esa filiación
expresamente considerado en el artículo natural y, por ende, seguir conservando como
18 del novísimo Registros de Testamentos segundo apellido el materno) los notarios
y de Sucesiones Intestadas que ha aproba- consignábamos como primer apellido del
do la SUNARP mediante Resolución N.° adoptado el apellido paterno del adoptante
156-2012-SUNARP/SN4 en reemplazo del y, como su segundo apellido, el primero de
su madre biológica. Sin embargo, el Reniec,
con el advenimiento de una nueva gestión,
4 Publicado en el diario oficial El Peruano el 20 de junio
de 2012. emitió la Resolución Jefatural Nº 1011-2005-
Civil Procesos
familiar por efectos del ulterior reconocimien- de saneamiento del derecho de propiedad
to, no siendo algo que el Juez pueda denegar de adquirientes con títulos privados, imper-
dado que no está sujeto a una apreciación dis- fectos o irregulares; pues tiende a subsanar
crecional. Es, pues, un derecho no discutible cualquier defecto formal o material en los
del titular de la partida que se deriva de un títulos transmisibles de dominio o cuando la
imperativo contenido en el artículo 20° del posesión prolongada en concepto de dueño
Código Civil, por el cual al hijo le corresponde es indiscutida y no es posible identificar a
el primer apellido del padre y el primero de nadie interesado en perturbar ese trámite de
la madre que los ha reconocido. saneamiento.
Lo que se pide a través de la integración del En este procedimiento –acaso es el más com-
nombre familiar vía rectificación es corregir plejo y delicado de los asuntos no contencio-
una inexactitud registral que ya consta en la sos confiados a la intervención del notario–,
propia partida en la que ya se encuentra ins- se ha tratado de limitar nuestra competencia
crito el reconocimiento paterno. Se trata sim- cuando el titular registral es el Estado o al-
plemente de la adecuación de los apellidos del guno de sus organismos o dependencias. En
titular de la partida con los del padre que lo ha efecto, por Ley Nº 296188, se establece la
reconocido, la legítima inclusión del apellido presunción de posesión por el Estado respecto
paterno del titular de la partida, resultando de los inmuebles de su propiedad y declara,
ocioso que para algo tan evidente se obligue por consiguiente, la imprescriptibilidad de
a los interesados a seguir un proceso judicial. los bienes inmuebles de dominio privado
Con ello, se afecta de modo indirecto a los estatal. Se temió, a raíz de su promulgación,
notarios al desconocerse nuestra competencia; que se estaba eliminando el mecanismo de
pero de manera directa a los propios menores saneamiento del derecho de propiedad por
reconocidos y a sus padres, obligándolos a particulares respecto de bienes que inicial-
seguir un proceso judicial con las molestias mente pertenecieron al Estado.
y gastos innecesarios. Se da la paradoja de Es que dicha ley no distingue entre bienes
que el legislador busca la descarga de asuntos del gobierno central, gobiernos regionales,
que carecen de contenido litigioso y algunos municipalidades o de las empresas públicas
funcionarios administrativos como los del del Estado, y afectaba a cientos –y acaso
Reniec promueven judicializar materias que miles– de adquirientes o subadquirientes de
no requieren de arbitrio judicial. bienes que diversas empresas promotoras de
vivienda del Estado efectuaron transferencias
5. Prescripción adquisitiva de domi- de dominio, tales como la ex Junta Nacional
nio de Vivienda, EMADI Perú, ENACE, Banco de la
Una de las apuestas más audaces del legisla- Vivienda, Banco de Materiales, Banco Central
dor en materia de asuntos no contenciosos ha Hipotecario, Mutuales, etc., que desarrollaron
sido, sin duda, la prescripción adquisitiva de programas de vivienda de interés social y que
dominio. Este trámite está considerado en la adjudicaron y transfirieron mediante docu-
normativa procesal como un proceso conten- mentos privados bienes destinados a ese fin a
cioso de carácter abreviado; pero, al margen una serie de personas naturales y sociedades
de las situaciones litigiosas que pueden darse conyugales.
entre el usucapiente y el titular registral o con El Estado o sus empresas subsidiarias ya no
terceros, el legislador tuvo el tino de reconocer son en rigor propietarias de esos bienes que
que en muchas de esas peticiones hay ausen- ya salieron de su esfera de dominio, sino
cia de conflicto, confiriéndose competencia
alternativa al notario para conocer ese proce-
8 Publicada en el diario oficial El Peruano el 24 de
dimiento. Este básicamente es un mecanismo noviembre de 2010.
Civil Procesos
de que la derivación al juez de turno que au- dencias municipales para integrarse orgánica
toriza dicha norma sea para que se resuelva y funcionalmente al Reniec.
el mérito de la oposición. El objetivo es que
Ya no se justifica, por tanto, que los alcaldes
se examine en vía incidental si la oposición es
tengan competencia exclusiva para interve-
legítima o no; y si la declara fundada, radique
nir en la celebración de matrimonios. De
competencia sobre el trámite de saneamiento
aprobarse un proyecto que se consolide con
hasta su terminación; y si se declara infun-
los varios presentados todavía en el anterior
dada la oposición, devuelva lo actuado al
Congreso de la República, debería autorizarse
Notario para que continúe con el trámite de
a los notarios a celebrar matrimonios civiles
saneamiento.
de manera alternativa a los alcaldes, frente a
quienes podemos mostrar algunas ventajas
6. Celebración de matrimonio civil comparativas y, por ende, conferir mayores
El matrimonio es, sin duda alguna, uno de garantías y solemnidad a la celebración de
los actos jurídicos más importantes que una matrimonios.
persona puede celebrar, tanto para el indi- En principio, conforme al artículo 3° del
viduo como para la sociedad: lo es para los Decreto Legislativo del Notariado, ejercemos
contrayentes pues esa unión asociada a su la función notarial “en forma personal”;
proyecto de vida condicionará muchas veces mientras que los Alcaldes, por sus recargadas
su felicidad o su infortunio; y lo es para la labores y por estar así autorizados por el artí-
sociedad porque el matrimonio es base o culo 260° del Código Civil, pueden delegar y
modelo de organización familiar sobre el delegan esta función a regidores, funcionarios
que se estructura la sociedad. La celebración municipales, directores, jefes de hospitales,
del matrimonio o matrimonio fuente es un párrocos, etc. De ese modo, en la práctica,
acto jurídico complejo en el que pueden los alcaldes provinciales casi no intervienen
distinguirse el consentimiento voluntario de en la celebración de matrimonios, salvo que
los contrayentes y otro complementario la se trate del matrimonio de personalidades
intervención del funcionario en su celebración tales como nuestro gran tenor Diego Flores,
encargado de efectuar un control de legalidad o matrimonios masivos, por la posibilidad de
del de los requisitos exigidos. hacer clientelismo vecinal.
Para que sea eficaz la declaración de los En segundo lugar, la formación del notario
contrayentes, es necesario que sea recogida y lo hace más idóneo para cumplir con esa
testimoniada por el alcalde u oficial del Regis- función, pues por naturaleza y definición
tro Civil que debe declarar a los contrayentes contenidas en el artículo 2 del Decreto Legis-
unidos en matrimonio, suscribiendo el acta lativo del Notariado, Decreto Legislativo N°
conjuntamente con estos. Esta declaración es 1049, el notario es un profesional del derecho
constitutiva de modo que es nulo el matrimo- investido de función pública, por ende, más
nio si no se celebra ante funcionario compe- calificado que el alcalde, que usualmente no
tente. Se asignó esa atribución a los alcaldes lo es, para efectuar un control de legalidad
provinciales y distritales, principalmente por del cumplimiento de requisitos para el ma-
una cuestión de dependencia funcional; ya trimonio y la vigencia efectiva de las normas
que los Registros de Estado Civil estuvieron a sobre impedimentos matrimoniales, pues no
cargo de las Municipalidades, esto es, fueron se trata solamente de la ceremonia de casa-
dependencias municipales, pero ahora que miento, sino de una serie de etapas previas
se ha creado un nuevo organismo público tales como la declaración del proyecto, su
que es el Registro Nacional de Identificación publicidad, la declaratoria de capacidad. Solo
y Estado Civil (Reniec), los Registros Civiles la final es la ceremonia del casamiento, que
están paulatinamente dejando de ser depen- deberá concluir con la firma del instrumento
Civil Procesos
debe prestarles tutela especial por el estado carácter objetivo en situaciones donde existe
de indefensión en el que se encuentran; pese a ausencia de conflicto). De esa manera, el No-
que, en muchos de esos casos, la incapacidad tariado contribuiría a dar una salida razonable
es inequívoca, irreversible y objetivamente a los dramas familiares que se presentan en
constatable, no existiendo controversia entre la realidad cotidiana, incorporando al sistema
los parientes directos, que están más bien legal de protección a incapaces y sus familias
interesados en que se defina la representación que actualmente se hallan marginados por la
legal del incapaz, entre otros aspectos para diversidad de exigencias formalistas a los que
el cobro de sus pensiones con el que podrán deben ser sometidos, designación de curador
atender su subsistencia. que no tendrá carácter definitivo ni autoridad
Es obvio que la competencia a ser atribuida de cosa juzgada; dado que siempre estará
al notario no sería para todos los casos de expedita su revisión judicial o la remoción del
interdicción que dan lugar a una curatela tí- curador nombrado.
pica, tales como los pródigos, malos gestores,
Con la incorporación de estos y otros proce-
ebrios habituales, toxicómanos, dado que
dimientos no contenciosos, que sean social-
suponen una mayor dificultad probatoria,
mente sensibles, permitirá hacer realidad la
sino únicamente para los privados de discer-
proyección social del notariado peruano en
nimiento, los discapacitados que no puedan
expresar su voluntad de manera indubitable el presente siglo.
y para aquellos que padecen retardo mental
y deterioro mental que les impide expresar su 8. Posibilidades
libre voluntad. En este caso, se trata de que El futuro de los asuntos no contenciosos en
la incapacidad esté sustentada en certificado la función notarial es promisorio y esperamos
médico oficial de la entidad dependiente del todavía desarrollos importantes, pero el cre-
Ministerio de Salud o de ESSALUD y que sea cimiento en este ámbito no debe darse ya en
constatable de manera inequívoca, en cuyo forma cuantitativa sino cualitativamente. Esto
caso se declararía la interdicción, designando significa que no deben incorporarse muchos
curador legal y teniendo en cuenta el orden
procedimientos sin mayor trascendencia,
de prelación que establece el artículo 569°
como el reconocimiento de las uniones de
del Código Civil que enumera en forma exclu-
hecho, sino nuevos asuntos que sean so-
yente al cónyuge no separado, a los padres,
cialmente sensibles que nos vincule con las
descendientes, abuelos y otros ascendientes,
necesidades de la población, que nos permita
y hermanos, designación a efectuarse con el
prestar un servicio público de manera efectiva.
consentimiento de los parientes llamados a No olvidemos que, como lo señala el gran
la curatela típica. notarialista español Rodríguez Adrado, la fi-
Esta declaración de interdicción y nombra- gura del Notario no ha sido concebida por un
miento de curador legal se realizaría mediante trazo geométrico cartesiano, sino que es fruto
un procedimiento ágil y con las garantías del espontáneo de la convivencia civil, ha nacido
caso. Para evitar suspicacias, podría limitarse de la realidad social y de sus necesidades; por
incluso al cobro de pensiones y al cuidado de tanto, debe nutrirse de ella.
la persona del incapaz lo cual permitirá pro- En esa dirección, consideramos que ya es
veer de manera oportuna a la representación oportuno que se amplíe nuestra competencia
legal del incapaz otorgada por un profesional respecto de dos temas altamente sensibles a
del derecho como es el notario y depositario cuya solución podemos contribuir, esto es, la
de la fe pública (y que, entre otras atribucio- celebración de matrimonios y la declaración
nes, tiene la función de constatar hechos de de interdicción.
CONSULTA
La señora María presenta una solicitud de inventario de bienes que su
difunto esposo dejó para ella y sus hijos; sin embargo, no incluyó en
dicha solicitud todos los bienes y el juzgado ha emitido la declaración
del inventario, por lo que nos pregunta qué puede hacer ante ello.
En este caso, nos encontramos ante un proce- viado; y con ello, la pretensión del solicitante
so no contencioso de inventario en el que el de la exclusión sí se satisface.
supuesto de inclusión de bienes, que se realiza En cambio, en el caso propuesto considera-
de manera posterior a la audiencia y que ha mos que no se puede aplicar lo regulado para
sido resuelta, no ha sido regulado de manera la exclusión, dado que no son instituciones
expresa en el Título II de la Sección Sexta del jurídicas equiparables; y en ese entendido, la
Código Procesal Civil. inclusión de un bien luego de declarar el inven-
Inicialmente, señalaremos que los procesos no tario no requeriría el inicio de un proceso de
contenciosos se caracterizan por no dirimir una conocimiento o abreviado que tiene un objeto
controversia sino que la actividad que realiza distinto al de los procesos no contenciosos.
el juez es de declarar el derecho que peticiona De esa manera, el solicitante de la inclusión de
el demandante, sea estimando el pedido o un bien efectuada la declaración del inventario,
desestimándolo. podría presentar las copias certificadas de la
solicitud de inventario en un nuevo pedido
De lo regulado en la normativa procesal, se
de solicitud de inventario, donde el trámite
aprecia que para los casos de exclusión de del procedimiento sería dentro del proceso
bienes sí se señala cuál sería la forma de ex- no contencioso y no en un proceso conten-
cluir el bien, vencido el plazo para solicitar la cioso; procesos que difieren en trámite y en
exclusión conforme lo regulado en el artículo regulación.
766 del Código Procesal Civil.
Para ello, el solicitante de la exclusión tendría Fundamento legal
que demandar la exclusión del bien, en un Código Procesal Civil: Artículos 766 y siguien-
nuevo proceso, sea de conocimiento o abre- tes.
Civil Procesos
RESEÑA DE JURISPRUDENCIA
Reseña de jurisprudencia
Casación N°
563-2011-Lima
El proceso no contencioso de adop-
ción no determina la paternidad del
menor
CASACIÓN N.º 563-2011-LIMA
Publicado en Sentencias en Casación, Año XVI, Nº 667
(El Peruano, 3 de julio de 2012, p. 35267)
Proceso Proceso no contencioso: adopción
Sumilla La adopción entre padres e hijos no corresponde, en el caso de autos se debe con-
siderar que si bien existe una prueba de ADN, el demandante es padre biológico
de la menor, se toma en cuenta que la prueba legal de paternidad es el acta de
nacimiento, la cual constituye documento público que mantiene su eficacia jurídica
al no haberse presentado en autos sentencia judicial firme que declare su nulidad;
no correspondiendo al proceso de adopción determinar la paternidad de la menor.
Decisión INFUNDADO el recurso de casación en consecuencia NO CASARON la sentencia
de vista
Normas aplicables Código Procesal Civil: artículo 378
Código Civil: artículos 248 numeral 8 y 378 numeral 1 y 5
Código de los Niños y Adolescentes: artículo 115
Fundamentos jurídicos La menor se encuentra viviendo con los demandantes desde que contaba con nueve
relevantes días de vida en un ambiente adecuado recibiendo cuidados y amor por parte de
estos, debe primar que los identifica como sus padres y arrancarla de su seno fa-
miliar a su corta edad resultaría gravemente perjudicial para su vida, además de la
descalificación de los padres para ejercer su patria potestad sobre la misma, siendo
además la adopción una medida de protección a la luz de los hechos detallados, en
atención al Interés Superior del Niño y el Adolescente.
TEXTO DE LA CASACIÓN
CASACIÓN Nº 563-2011-LIMA
Dina Felicitas Palomino Quicaño, nacida el veintiséis de diciembre de dos mil seis en el Distrito
de San Borja, en los seguidos por Dina Felicitas Palomino Quicaño y Giovanni Sansone con Isabel
Zenaida Castro Muñoz sobre adopción de menor. 2. FUNDAMENTOS DEL RECURSO: Esta Sala
mediante resolución de fecha seis de julio del año dos mil once, declaró procedente el recurso de
casación, por causal de infracción normativa sustantiva de los artículos 115 y 128 inciso b) del
Código de los Niños y Adolescentes; 378 inciso 1) y 5) y 381 del Código Civil. 3. CONSIDERAN-
DO: Primero.- Que, la adopción es aquella institución por la cual el adoptado adquiere la calidad
de hijo del adoptante y deja de pertenecer a su familia consanguínea, siendo requisito que el
adoptante goce de solvencia moral, que la edad del adoptante sea por lo menos igual a la suma
de la mayoridad y la del hijo por adoptar, que concurra el asentimiento de su cónyuge, que
asientan los padres del adoptado si estuviese bajo su patria potestad o bajo su curatela; y encon-
trándonos ante un proceso de adopción por excepción se requiere adicionalmente que el adop-
tante posea vínculo de parentesco hasta el cuarto grado de consanguinidad o segundo de afinidad
con el niño o adolescente pasible de adopción, conforme a lo establecido en el inciso “b” del
artículo 128 del Código de los Niños y Adolescentes, sin que medie declaración de estado de
abandono del niño o del adolescente (como si ocurre en los otros casos regulados en el mismo
Código).- Segundo.- Que, la adopción por excepción es una institución que lleva este nombre
por cuanto, dentro del sistema de adopciones que contiene el Código del Niño y el Adolescente,
en el Libro III, Título II, Capítulo I se establece un proceso administrativo de adopción, donde
previamente se declara el estado de abandono (artículo 248 del Código del Niño y el Adolescen-
te); este proceso se desarrolla para todos los niños que no cuentan con parientes que se hagan
cargo de ellos o se impone como medida de protección para los Niños (as) y Adolescentes que
cometan infracción a la ley penal; sin embargo existen otros niños (as), y adolescentes que no
obstante tenerlos por circunstancia excepcionales, pueden ser adoptados por otras personas pero
manteniendo un enlace familiar, ante lo cual el proceso será judicial. Institución que se encuentra
plagada por la protección dada al niño (a) o adolescente, pues con ella se busca proteger su
derecho a la identidad (artículo 6 del Código del Niño y el Adolescente) y a vivir en una familia
(artículo 8 del Código del Niño y el Adolescente).- Tercero.- Que a fin de establecer si en el caso
de autos, se ha incurrido en la infracción normativa, es necesario efectuar un análisis de lo acon-
tecido en el proceso: i) Por demanda de fojas noventa subsanada a fojas ciento seis, doña Dina
Felicitas Palomino Quicaño y don Giovanni Sansone, interponen demanda de adopción civil por
excepción de la niña Vittoria Palomino Castro, nacida el veintiséis de diciembre de dos mil seis,
arguyendo como fundamentos de hecho de la demanda que la niña cuya adopción solicitan, es
hija de don Paúl Frank Palomino Cordero, quien a su vez es hijo de José Palomino Quicaño,
hermano de la co demandante Dina Felicita Palomino Quicaño, por lo que invocan el supuesto
normativo a que se contrae el inciso “b)” del artículo 128 del Código de los Niños y Adolescen-
tes. Agregan, que a la niña la tienen en su poder desde el dos de enero de dos mil siete, fecha
en que los padres biológicos la entregaron provisionalmente. ii) los demandados contestan la
demanda a fojas ciento veintidós y ciento treinta y dos, precisando que se allanan y reconocen
la demanda en lo términos que allí constan; iii) tramitado el proceso conforme a su naturaleza,
el juez expidió sentencia declarando fundada la demanda, sustentada en los siguientes argu-
mentos: a) con el acta de nacimiento de fojas veintiuno se encontraba acreditado el nacimiento
de la niña Vittoria Palomino Castro, siendo su madre biológica doña Isabel Zenaida Castro Munoz,
figurando como padre biológico don Paúl Frank Palomino Cordero, habiendo sido reconocida
por ambos emplazados, motivo por el cual dicha partida es medio probatorio de la filiación
conforme al artículo 387 del Código Civil; b) que, si bien es cierto, de los resultados de la prue-
ba de ADN de fojas mil treinta seis se desprende que el demandado Paúl Frank Palomino Corde-
ro no es padre biológico de la menor, sino el propio demandante Giovanni Sansone, lo es también
que el acta de nacimiento de la menor que obra a fojas veintiuno, constituye documento públi-
co que mantiene su eficacia jurídica al no haberse presentado en autos sentencia judicial firme
que declare su nulidad, en virtud de lo dispuesto por el artículo 58 de la Ley Orgánica del Regis-
tro Nacional de Identificación y Estado Civil – Ley 26497, que establece que “las constancias de
inscripción emitidas por el Registro Nacional de Identificación y estado civil, serán consideradas instru-
mentos públicos y probarán fehacientemente los hechos a que se refieran, salvo que se declare judicial-
mente su nulidad de dicho documento”; c) que, mediante escritos de fojas doscientos veintiuno,
doscientos cincuenta y cuatro, doscientos setenta y uno y trescientos catorce la codemandada
Civil Procesos
Isabel Zenaida Castro Muñoz se desiste del proceso de adopción, sin embargo este se tuvo por
no presentado pues luego que fue requerida por el Juzgado a fin que precise el acto procesal
materia de desistimiento, realizó subsanación defectuosa, resolución que no fue impugnada
oportunamente; e) no obstante ante la duda del asentimiento o no de la madre biológica, se
tuvo en cuenta el principio del Interés Superior del Niño y el respeto de sus derechos, por tanto,
al encontrarse en oposición el derecho de la madre de prestar su asentimiento en un proceso de
adopción y el derecho de la niña a tener una familia, y, por ende, continuar siendo parte de la
que conforma desde su nacimiento con los demandantes, consideró que debía preferirse el de-
recho de esta última a tener una familia, cuya salud física, solvencia moral de los preadoptantes,
estaba acreditada; iv) la Sala Superior confirmó la sentencia que declaró fundada la demanda,
mediante sentencia de fecha treinta de noviembre del año dos mil diez, sustentándola en los
siguientes argumentos: a) que, los demandados Paúl Frank Palomino Cordero e Isabel Zenaida
Castro Muñoz figuran formal y legalmente como progenitores de la niña Vittoria Palomino Castro
y ellos voluntariamente la entregaron a los pre-adoptantes a los días de nacida, renunciando y
desentendiéndose de este modo y por completo de las responsabilidades que como madre y
padre tenían con su hija; b) ha quedado demostrado con los informes sociales y psicológicos que
la niña se encuentra plenamente identificada con el entorno familiar constituido por los pre -
adoptantes, al vivir con ellos desde los primeros días de su existencia; c) que, si bien mediante
la prueba de ADN se ha establecido que el progenitor de la niña es el demandante Giovanni
Sansone, confluyendo en su persona una doble calidad como padre biológico y como pre -adop-
tante, no es menos cierto que por esta vía o por acción posterior el reconocimiento de su situación
legal de padre será resuelta a su favor, por lo que no existe razón alguna para mantener en la
incertidumbre la existencia de dicha relación paterno filial, y, por ende, impedir que la niña goce
de la filiación paterna a que tiene derecho y cuya naturaleza u origen no podrá ser mencionada
en documento alguno; d) se señala que la madre biológica en total acuerdo con su conviviente,
procreó a la niña, aceptando ser inseminada artificialmente por persona distinta a su pareja por
el vínculo que existía y con la intención de mejorar su situación para viajar a Italia con su familia,
lo que dista de la lógica de una maternidad responsable respecto del hijo que iba a engendrar,
lo que revela en los demandados su intencionalidad en la concepción de un ser humano con fines
distintos a la maternidad o paternidad, razón por la cual el Colegiado se aparta del previsión
legal contenida en el artículo 378 inciso 5) del Código Civil referente al asentimiento de los padres
para la adopción, privilegiándose el derecho fundamental de la niña a permanecer con la familia
que le ha brindado protección, atención y cariño frente al derecho de la patria potestad de un
padre y una madre que desde su concepción y posterior nacimiento actuaron desvalorizando la
condición humana de la niña.- Cuarto.- Que, la recurrente en su agravio denuncia: i) la infracción
normativa sustantiva del artículo 115 del Código de los Niños y Adolescentes1; precisando que
no procede la adopción, ya que el padre biológico de la menor, Giovanni Sansone, sabe que
solicitó la reproducción asistida en la Clínica Miraflores, que la niña Vittoria Palomino Castro es
su hija biológica y legal, por tanto no procede esta figura de la adopción entre padres biológicos;
ii) la infracción normativa sustantiva del artículo 128 inciso b del Código de los Niños y Adoles-
centes2; sosteniendo que se afirma que la accionante, es tía del padre demandado, y por ende,
también pariente de la niña a ser adoptada, sin embargo la presunta tía demandante Dina Feli-
citas Palomino Quicaño, no guarda ningún parentesco consanguíneo o de afinidad con Vittoria
Palomino Castro, al no ser Paúl Frank Palomino Cordero su verdadero padre, esto es, no ser su
padre biológico; por lo que, al no tener Dina Felicitas Palomino Quicaño, ningún parentesco con
la menor, no puede darse la demanda de adopción por excepción; iii) la infracción normativa
sustantiva del artículo 378 inciso 1) y 5) del Código Civil3; arguye que para que proceda la adop-
ción se requiere que los adoptantes gocen de solvencia moral y que asientan los padres del
adoptado si estuviese bajo su patria potestad; sin embargo los pre- adoptantes no gozan de
solvencia moral para adoptar a su menor hija, pues a lo largo del proceso han mentido no solo
al juzgador sino a los recurrentes, a fin de engañarlos y quedarse con su hija. Hechos que no han
sido tomados en cuenta al momento de sentenciar; y iv) la infracción normativa sustantiva del
artículo 381 del Código Civil4; sustentan que si no fuera porque los recurrentes en las audiencias
de autos, manifestaron que Giovanni Sansone era el padre biológico de la menor Vittoria Palo-
mino Castro, nunca se hubiera sabido la verdad, por tanto, siempre se han conducido con la
verdad al contrario de los demandantes quienes los engañaron y estafaron a los jueces a fin de
tener un derecho que no les corresponde.- Quinto.- Que, al respecto se debe precisar previamen-
te que, encontrándonos ante un proceso en el que se encuentran involucrados derechos funda-
mentales de una niña, corresponde aplicar el derecho bajo estricta sujeción del Interés Superior
del Niño y el Adolescente, consagrado en el artículo IX del Título Preliminar del Código de los
Niños y Adolescentes, según el cual “En toda medida concerniente al niño y al adolescente que
adopte el Estado a través de los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, del Ministerio Público, los
Gobiernos Regionales, Gobiernos Locales y sus demás instituciones, así como en la acción de la sociedad,
se considerará el Principio del Interés Superior del Niño y del Adolescente y el respeto a sus derechos”,
principio que guarda relación con la Constitución Política del Perú que asumiendo el principio
protector del niño y del adolescente ha señalado en su artículo 4 que la comunidad y el estado
protegen especialmente al niño y al adolescente; asimismo se encuentra consagrado en la Declaración
de los Derechos del Niño y en la Convención sobre los Derechos de las que somos Estado parte;
y cuenta con legislación supranacional que regula los derechos del niño en el mismo sentido
otorgándole un tratamiento especial, las que también constituyen fuente de regulación en el
tratamiento de protección a los niños y adolescentes; tales como la Declaración Universal de Dere-
chos Humanos que en su artículo 25 reconoce el principio de protección especial al señalar que
la infancia tiene derecho a cuidados especiales; asimismo la Declaración Americana sobre Derechos
Humanos que ha reconocido en su artículo 19 que todo niño tiene derecho a las medidas de
protección que su condición de menor requieren por parte de su familia, la sociedad y el Estado.-
Sexto.- Que, debe entenderse por Interés Superior del Niño como la plena satisfacción de sus
derechos, la protección integral y simultánea de su desarrollo integral y la calidad o nivel de vida
adecuado (artículo 27.1 de la Convención Internacional sobre los Derechos de los Niños) el cual
nos trae como consecuencia que, en virtud del mismo, los derechos del niño y la niña deban ser
interpretados sistemáticamente ya que en su conjunto aseguran la debida protección de los
mismos; pues el mismo permite resolver “conflicto de derechos” recurriendo a la ponderación
de los derechos en conflicto, luego de haberse establecido la imposibilidad de satisfacción con-
junta; siendo los dos parámetros que enmarcarán el presente pronunciamiento.- Sétimo.- Que,
asimismo el Tribunal Constitucional mediante la sentencia expedida en el expediente 02079-
2009-PHC/TC, al interpretar los alcances del principio del interés superior del niño y del adoles-
cente, así como el presupuesto de interpretación constitucional; en su fundamento trece ha in-
terpretado: “(...) el deber especial de protección sobre los Derechos del Niño vincula no solo a las en-
tidades estatales y públicas sino también a las entidades privadas e inclusive a la comunidad toda, a fin
de que en cualquier medida que adopten o acto que los comprometa velen por el interés superior del
niño, el cual debe anteponerse a cualquier otro interés. Por tanto, constituye un deber el velar por la
vigencia de los derechos del niño y la preferencia de sus intereses, resultando que ante cualquier situa-
ción en la que colisione o se vea en riesgo el interés superior del niño, indudablemente, éste debe ser
preferido antes que cualquier otro interés. Y es que la niñez constituye un grupo de personas de interés
y de protección prioritaria del Estado y de toda la comunidad, por lo que las políticas estatales le deben
dispensar una atención preferente. En consecuencia, en la eventualidad de un conflicto frente al presun-
to interés del adulto sobre el del niño, prevalece el de este último; y es que parte de su esencia radica
en la necesidad de defensa de los derechos de quien no puede ejercerlos a plenitud por sí mismo y de
quien, por la etapa de desarrollo en que se encuentra, no puede oponer resistencia o responder ante
Civil Procesos
un agravio a sus derechos…”.- Octavo.- Que, bajo estas premisas y atendiendo el Interés Superior
del Niño y Adolescente se encuentra acreditado que: i) los demandantes y los demandados,
acordaron que Isabel Zenaida Castro Muñoz y Giovanni Sansone se sometan a un proceso de
fecundación asistida a fin de procrear a la menor Vittoria Palomino Castro, para que luego ésta
sea entregada a los demandantes, lo que se concretó; ii) la menor Vittoria Palomino Castro nació
el veintiséis de diciembre de dos mil seis según consta en el acta de nacimiento de fojas veintiu-
no, donde los demandados Paúl Frank Palomino Cordero e Isabel Zenaida Castro Muñoz constan
como padres y declarantes; iii) la menor Vittoria Palomino Castro fue entregada por sus padres
a los pre adoptantes demandantes el cuatro de enero del año dos mil siete, cuando contaba con
nueve días de vida, según consta en el acta de entrega de fojas veintidós, iv) la menor se encuen-
tra bajo el cuidado de los demandantes desde el cuatro de enero de dos mil siete ininterrumpi-
damente; v) los demandados luego de haber entregado a su menor hija, manifiestan su discon-
formidad con el proceso de adopción iniciado, por lo que no se cumpliría con el requisito esti-
pulado por el inciso 5) del artículo 378 del Código Civil; vi) el demandante Giovanni Sansone,
según la prueba de ADN de fojas mil treinta y seis, es el padre biológico de la niña Vittoria Pa-
lomino Castro; vii) al no ser padre de la menor, el demandado don Paúl Frank Palomino Corde-
ro, no existiría vínculo de parentesco consanguíneo entre la niña y la demandante Dina Felicitas
Palomino Quicaño; viii) los demandados no cuentan con informes del equipo multidisciplinario
que le sean favorables, por el contrario, tenemos que: a) el informe social Nº 016-2008- EM-SS-
AT que en sus conclusiones señala: “los demandados integran un hogar convivencial, procrearon tres
hijos, una hija cursa la educación primaria, un hijo la educación inicial y la última hija es la menor pre
adoptada. Los Sres. Palomino Castro entregaron de propia voluntad a los demandantes a fin de asumir
su crianza, al parecer por no contar con los recursos económicos suficientes”; b) el informe psicológi-
co Nº 1567- 2008-MCF-PSI practicado a la demandada Isabel Zenaida Castro Muñoz que en sus
resultados – último párrafo – señala: “se aprecia que la señora accedió a dar a su hija en adopción
motivada en la situación crítica en que estaba atravesando, reconoce que en determinados momentos
siente remordimiento porque su hija mayor se afectó por entregar a su bebe en adopción. Asimismo se
aprecia que la relación afectiva que le une a su menor hija no es sólida, dado que no tiene recuerdos
compartidos con ella para que la añore; por eso cuando habla de brindar a sus hijos lo mejor, sólo se
refiere a sus dos hijos mayores; y c) El contenido del Informe Psicológico Nº 1568- 2008-MCF-EM-
PSI practicado al demandado Paúl Frank Palomino Cordero que en sus resultados – en el último
párrafo – señala “se aprecia que el señor se encuentra resignado a ceder a su hija en adopción, porque
considera que no tiene otra alternativa, se reconforta al saber que la persona que la criará es su tía; vi)
Los demandantes cuentan con informes psicológico y social favorables, los mismos que fueron
realizados con visitas inopinadas, según consta a fojas mil veintinueve y quinientos setenta cinco
respectivamente.- Noveno.- Que, corresponde analizar las infracciones denunciadas, así tenemos
que la primera y segunda causal denunciadas carecen de sustento, dado que si bien es cierto,
la adopción entre padres e hijos no corresponde, en el caso de autos se debe considerar que si
bien existe una prueba de ADN que acredita que el demandante Giovanni Sansone es padre
biológico de la menor, es de tener en cuenta que la prueba legal de paternidad es el acta de
nacimiento, en la cual el demandado Paúl Frank Palomino Cordero declara a la menor como su
hija, por lo que el acta de nacimiento constituye documento público que mantiene su eficacia
jurídica al no haberse presentado en autos sentencia judicial firme que declare su nulidad; no
correspondiendo a este proceso de adopción determinar la paternidad de la menor. En conse-
cuencia la menor legalmente es hija Paúl Frank Palomino Cordero y en consecuencia sí resulta
ser sobrina de la demandante Dina Felicita Palomino Quicaño, reiterándose debiéndose precisar
que nos es materia de pronunciamiento la paternidad de la menor.- Décimo.- Que, la tercera y
cuarta causal denunciadas no pueden ser amparadas, dado que, si bien es requisito que los
padres del adoptado asientan y la adopción no puede hacerse bajo modalidad alguna, se debe
resaltar que la sentencia de vista ha resuelto bajo estricta observancia del Interés Superior del
Niño y del Adolescente (aludido en el cuarto y quinto considerando de la presente), dado que
nos encontramos ante un “conflicto de derechos” de una parte el de los padres de la menor a
ejercer su patria potestad y de la otra, el derecho de la menor a tener una familia idónea que le
proporcione todo lo necesario para su desarrollo integral y a no alterar su desarrollo integral;
derechos que no pueden coexistir en el caso de autos, a la luz de los hechos detallados en el
octavo considerando, pues nos encontramos ante padres que premeditadamente han acordado
procrear un ser humano con la finalidad de entregarlo a otras personas, para a cambio recibir
beneficios, que si bien los demandados niegan que hayan sido económicos, de sus propias de-
claraciones se advierte que su proceder tenía por finalidad mejorar su situación y viajar a Italia
con su familia, además de haber aceptado recibir dinero mensualmente durante el tiempo de
gestación de la demandada y en otros casos como una “ayuda económica” quedando evidencia-
do que el actuar de los demandados ha estado plagado en todo momento por un interés econó-
mico lo que dista totalmente de los sentimientos de padres que aluden tener.- Undécimo.- Que,
aunado a lo antes precisado se debe considerar el deplorable accionar de los demandados, pues
luego de haber suscrito la demandada de adopción conjuntamente con los demandantes, preci-
sando “DEMANDADOS: Solo por razones formales deben ser considerados como demandados los
padres biológicos Paúl Frank Palomino Cordero e Isabel Zenaida Castro Muñoz…” adjuntando, entre
otros documentos, el acta de entrega provisional de menor con firma legalizada ante Notario (ver
folios veintidós) donde consta que los demandados entregan a la menor a los demandantes
precisándose “con el fin que a partir de la fecha la señora Dina Felicitas Palomino Quicaño y su esposo
Giovanni Sansone se constituyan en los padres adoptivos de la menor Vittoria Palomino Castro”; y
luego de haber reiterado su consentimiento de dar en adopción a su menor hija, en la audiencia
única de fecha veintidós de agosto del año dos mil siete (ver folios ciento cuarenta y siete) la
demandada Isabel Zenaida Castro Muñoz, mediante escrito de fecha diecinueve de junio de dos
mil ocho (ver folios doscientos veintiuno) reiterado a fojas doscientos cincuenta y cuatro, tres-
cientos cuarenta y nueve y quinientos sesenta y dos respectivamente, precisa que hasta antes de
mostrar su desacuerdo con el presente proceso, tuvo en todo momento la voluntad de dar a su
hija Vittoria en adopción al ser este el “acuerdo” asumido con los accionantes; refiriendo: “(…)
todos los actores en la acción de adopción habíamos efectuado hechos fraudulentos con el fin de
obtener provecho en perjuicio de mi menor hija…” (fojas doscientos cincuenta y cinco), “me
desisto de todos los actos procesales en los que en forma personal he manifestado mi voluntad
de dar en adopción a mi menor hija Vittoria Palomino Castro a favor de los esposos Giovanni
Sanssone y Dina Felicitas Palomino Quincano (…) en contubernio con ellos cometí una serie de
actos ilegales, sorprendiendo al Juzgado en agravio de mi menor hija” (fojas trescientos cuarenta
y nueve); “ (…) he manifestado, manifiesto y reitero que la presente acción de adopción-caso de
excepción (…) es una acción fraudulenta, originada desde antes de la misma, en un contrato
verbal e irregular y manipulado por los demandantes (…) con el fin de procrear mediante inse-
minación asistida en mi vientre un hijo con el semen de don Giovanni Sansone (…)” (fojas qui-
nientos sesenta y dos). Aunado a ello se tiene de las copias certificadas del proceso penal Nº
42961- 2009 que obra de fojas mil setecientos cincuenta y dos a fojas mil ochocientos ochenta
y ocho, se advierte que paralelamente al proceso que nos ocupa, el veintiocho de setiem-
bre del año dos mil nueve, el Ministerio Público formalizó denuncia penal contra los deman-
dados, por los delitos de Extorsión y Alteración del Estado Civil de un menor, habiéndose inicia-
do proceso penal mediante auto de apertura de instrucción de fecha veintiuno de octubre del
dos mil nueve (ver folios mil setecientos noventa y tres), proceso en el que el hecho incriminado
consiste en que, los demandados habrían planeado desde un inicio ofrecer su “vientre en alqui-
ler” y practicarse una inseminación artificial con el semen del esposo de la denunciante Dina
Felicitas Palomino Quicaño y a partir de ello habrían extorsionado a los ahora demandantes con
cuantiosas sumas de dinero a fin de que la Demandada Isabel Zenaida no aborte el producto,
extorsión que incluso se habría prolongado después del nacimiento de la menor que responde
al nombre de Vittoria con la amenaza de frustrar la demanda de adopción que interpuso la
parte agraviada (los demandantes) teniéndose que los denunciados habría recibido un total de
diecinueve mil ochocientos dólares americanos; asimismo se advierte de dichas copias, que con
fecha quince de abril de dos mil diez se realizó la diligencia de confrontación entre Isabel Zenai-
da Castro Muñoz y Dina Felicitas Palomino Quicaño de la cual trasciende que la segunda de las
nombradas, entregó diversas sumas de dinero a la primera, manifestando cada una diferentes
montos y motivos respecto de dichas entregas. Así, mientras la pre adoptante señaló que lo hizo
por cuanto la demandada la amenazó con abortar, esta última indica que recibió el dinero como
ayuda económica. Igualmente, al ser preguntada Isabel Castro sobre los motivos de la insemina-
ción, respondió: “debo manifestar que fueron por dos motivos, uno por el vínculo familiar que existía,
así también acepté con la intención de mejorar mi situación y viajar a Italia con mi familia”.- Duodéci-
mo.- Que, en suma, la materia de litis ha sido correctamente resuelta no habiéndose infringido
norma alguna, pues debe primar el Interés Superior de la Niña, quien se encuentra viviendo con
los pre adoptantes desde que contaba con nueve días de nacida, habiéndose acreditado con los
Civil Procesos
REGISTRAL Y NOTARIAL
Actualidad
Área
Civil Registral
Registral y Notarial
y Notarial
Contenido
Daniel E. Tarrillo Monteza: Publicidad registral: El interés debidamente
DOCTRINA 346
fundamentado
NOS PREGUNTAN Y CONSULTA: ¿Como iniciar un procedimiento disciplinario contra un notario
CONTESTAMOS
358
que ha autorizado la compraventa irregular de un inmueble?
RESEÑA DE
JURISPRUDENCIA
Transformación de asociación (Resolución N.° 1317-2013 – SUNARP-TR-L) 360
DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina práctica
Una primera lectura nos haría considerar a (…) 6. Datos sensibles: Es aquella información relativa
a datos personales referidos a las características físicas,
los ingresos económicos relacionados a la
morales o emocionales, hechos o circunstancias de su
información del acervo patrimonial (llámese vida afectiva o familiar, los hábitos personales que
bienes muebles e inmuebles) contenida en el corresponden a la esfera más íntima, la información
Registro como dato sensible. Percepción que relativa a la salud física o mental u otras análogas
fuimos tentados a adoptar; sin embargo, está que afecten su intimidad”.
claro que para analizar una norma debemos Como vemos, el Reglamento nos indica un
atender a la ratio legis de la misma. nuevo supuesto de información que obra
Entendemos, entonces, que esta incursión de dentro del archivo registral, regulada como
los ingresos económicos como dato sensible “dato sensible”. En los casos de interdicción,
se refiere al contenido del ascenso de sus muchas veces el sujeto es declarado interdicto
activos, mas no en el sentido del patrimonio a causa de una tara o enfermedad de la salud
contenido en el Registro. física o mental.
El verdadero inconveniente, en consecuencia, Tenemos que mencionar que si bien es cierto,
no se presenta en el Registro de Bienes, sino en esta norma es de ayuda al momento de la
el Registro de Personas Jurídicas. Esta norma calificación de la información, bajo ningu-
nos hace mención a la afiliación sindical como na óptica puede ser tomada como una de
Contenido
¿Como iniciar un procedimiento disciplinario contra un notario que ha autorizado la
CONSULTA
compraventa irregular de un inmueble?
CONSULTA
El señor Julio Torres Ramírez nos comenta que a través del sistema de
Alerta Registral se enteró de que su inmueble fue vendido sin su con-
sentimiento a terceros. Frente a tales hechos, decidió denunciar penal-
mente a las personas que suplantaron su firma y al notario que autorizó
el otorgamiento de la escritura pública de compraventa. Teniendo en
cuenta lo señalado, el interesado nos consulta si a nivel administrativo
se puede seguir un procedimiento disciplinario contra un notario.
El régimen disciplinario del notariado tiene en dos o más infracciones. Asimismo, dicho
como finalidad que la función notarial se procedimiento tiene como primera instancia
ejerza sobre base de los principios de defensa a un Tribunal de Honor (compuesto por tres
del bienestar común, seguridad jurídica en la miembros que deben ser notarios que no
contratación y en el tráfico jurídico, veracidad integren simultáneamente la junta directiva,
de los hechos, eficiencia del servicio y respeto y/o abogados de reconocido prestigio moral
por la legalidad. y profesional), de conformidad con el artícu-
lo 133 del Decreto Legislativo N° 1049. En
De ahí que de acuerdo con el artículo 144 del segunda instancia, funciona el Consejo de
Decreto Legislativo del Notariado (Decreto Notariado del Ministerio de Justicia y Dere-
Legislativo N° 1049), el notario tiene respon- chos Humanos.
sabilidad administrativa disciplinaria por el
incumplimiento de esta ley, normas conexas Cabe anotar que de conformidad con la Pri-
y reglamentarias, estatuto y decisiones dicta- mera Disposición Complementaria, Transitoria
das por el Consejo del Notariado y colegio y Final del D.L. N. º 1049, en tanto no se
elijan tribunales de honor en los colegios de
de notarios respectivo; todo ello sin perjuicio
notarios, las juntas directivas tendrán com-
de ser responsable, civil y penalmente, de
petencia para conocer y resolver en primera
los daños y perjuicios que, por dolo o culpa,
instancia todas las denuncias y los procedi-
ocasione a las partes o terceros en el ejercicio
mientos disciplinarios, con las atribuciones y
de la función. responsabilidades correspondientes, hasta la
En este procedimiento, se establece la res- culminación de los mismos.
ponsabilidad administrativa disciplinaria En cuanto las etapas del procedimiento dis-
del notario por la comisión de infracciones ciplinario notarial, se advierte que el Decreto
administrativas disciplinarias. Cada infracción Legislativo del Notariado ha contemplado
da lugar a un expediente, salvo que sean las siguientes fases: inicio, investigación, au-
detectadas en la misma acta de visita nota- diencia, resolución e impugnación. Veamos
rial o cuando en un mismo hecho se incurra brevemente cada una de ellas.
RESEÑA DE JURISPRUDENCIA
Reseña de jurisprudencia
Resolución
N.º 1317-2013 -
Transformación de asociación
SUNARP-TR-L
Sumilla En tanto no existe impedimento legal para la transformación de una asociación civil
en sociedad anónima, ello tendrá acogida registral, siempre que los bienes que con-
forman el patrimonio de la asociación sean destinados al fin contemplado en el estatuto,
en aplicación analógica de lo previsto en el artículo 98 del Código Civil, salvo no
exista haber neto remanente.
Decisión REVOCAR el punto 1 y 3 de la observación formulada por el registrador público del
Registro de Personas Jurídicas de Lima, DEJAR SIN EFECTO el punto 2 y DISPONER
su inscripción.
Normas aplicables Ley General de Sociedades: Artículos 333 y 339
Código Civil: Artículos 98 y 97
Fundamentos jurídicos La asociación durante su existencia no tuvo patrimonio y los nuevos socios de la
relevantes sociedad realizaron aportes en efectivo.
El balance refleja únicamente el estado del patrimonio, es decir, el haber neto en un
momento dado. Este patrimonio neto puede estar formado por bienes muebles e
inmuebles los cuales deben ser entregados a las personas designadas en el estatuto
de la persona jurídica en proceso de trasformación.
De acuerdo al artículo 97° del Código Civil, el patrimonio neto debe pasar a las per-
sonas o instituciones con fines análogos a la asociación. En consecuencia, cuando se
trata de una asociación, en la escritura pública de trasformación tendrá que precisarse
el destino final dado a los mismos, según como se haya estipulado en el estatuto.
Resolución N° 1317-2013-SUNARP-TR-L
El Registrador Público del Registro de Personas Jurídicas de Lima, César Antonio Perfecto Alba,
formuló observación en los términos siguientes:
“1. En el acta de la asamblea general del 9/12/20012 no consta el nombre de la persona que
actuó como presidente de la asamblea. Ampara la presente observación, el Artículo 13
literal d) del Reglamento de Inscripciones del Registro de Personas Jurídicas No Societarias.
2. El parte notarial de la escritura pública del 10 de diciembre del 2012, presentada en
el reingreso del 2 de abril del 2013, fue expedido el 21 de febrero del 2012, lo cual es
incongruente con la fecha de otorgamiento del instrumento público antes citado y con la
fecha de conclusión del proceso de firmas.
3. Respecto a la transformación de una asociación, en el art. 76 del Reglamento de Inscrip-
ciones del Registro de Personas Jurídicas No Societarias se establecía que es inscribible en
el Registro el acuerdo de reorganización de una persona jurídica, siempre que la ley o su
naturaleza lo permitan; siendo aplicables en este caso, las normas relativas a la reorgani-
zación de sociedades en lo que fueran aplicables. De acuerdo con la naturaleza jurídica de
una asociación, no puede transformarse en una persona jurídica societaria, no solo por el
carácter no lucrativo, sino por los beneficios tributarios de los que gozan; sin embargo, el
Tribunal Registral, a través de las Resoluciones Nº 633-2004-SUNARP- TR-L del 25/10/2004
y 196-2005-SUNARP-TR-T del 9/12/2005, estableció que es factible la transformación de
una asociación (persona jurídica no lucrativa) en una sociedad (de carácter lucrativo),
pues ambas personas jurídicas comparten diversos elementos que permiten llegar a esta
conclusión (se trata de entes abstractos, responden a la necesidad del hombre de actuar
en conjunto con otros congéneres, pueden realizar actividades lucrativas. etc.). Añadiendo
a esto, que no existe impedimento legal para la transformación de este tipo de personas
jurídicas, siempre que los bienes, que conforman el patrimonio de la asociación sean
destinados al fin contemplado en el estatuto, en aplicación analógica de lo previsto en el
artículo 98 del Código Civil.
En ese sentido y teniendo en cuenta lo señalado en el artículo 33.a.3) del Reglamento
General de los Registros Públicos, para calificar de manera positiva el acuerdo de transfor-
mación que (se) pretende inscribir y verificar el cumplimiento de lo dispuesto en el art.
28 del estatuto, así como lo señalado por el Tribunal Registral (el haber neto resultante
debe ser destinado a una asociación con fines similares a la asociación transformada), en
el acta de la asamblea general debe constar como acuerdo, la aprobación del balance de
transformación, lo que no consta en el acta de la asamblea general del 9 de diciembre del
2011; siendo insuficiente lo señalado en el acta, en el sentido de que la asociación no ha
adquirido ningún bien inmueble desde su constitución, por lo que a esa fecha no tenía
patrimonio alguno; sin embargo jurídicamente no existe persona alguna sin patrimonio, mas
aún de acuerdo con lo señalado en el articulo 27 del estatuto anterior, el patrimonio de la
asociación no sólo está constituido por bienes inmuebles, sino también por las cotizaciones
ordinarias y extraordinarias de los asociados, los recursos que generan sus actividades,
arrendamientos y los bienes que adquiera por compraventa y por cualquier modalidad,
así como las donaciones de personas naturales y jurídicas, públicas y privadas, nacionales
y extranjeras. En atención a ello, se solicita la presentación de las copias certificadas por
notario público del libro de inventarios y balances de la asociación”.
En la partida electrónica Nº 11115074 del Registro de Personas Jurídicas de Lima, corre registrada
la “Asociación de Transporte Motorizado Menor San José de Puente Piedra”.
En el asiento A00007 consta inscrito el nombramiento del consejo directivo para el periodo
comprendido del 1/5/2011 al 30/4/2013, presidido por Divino Toribio Salinas Gamarra.
VI. Análisis
1. Con el presente título se solicita inscribir la transformación de la “Asociación de Transpor-
te Motorizado Menor San José de Puente Piedra” (inscrita en la partida electrónica Nº
11115074 del Registro de Personas Jurídicas de Lima) a sociedad anónima, denominada
“Empresa de Transporte Multiservicio San José de Puente Piedra S.A”.
El Registrador Público ha denegado su inscripción señalando que, para calificar de manera
positiva el acuerdo de transformación y verificar el cumplimiento de lo dispuesto en el
artículo 28 del estatuto, así como lo señalado por el Tribunal Registral (el haber neto resul-
tante debe ser destinado a una asociación con fines similares a la asociación transformada),
debe constar como acuerdo en el acta de la asamblea general la aprobación del balance de
transformación, lo que no consta en el acta de la asamblea general del 9 de diciembre del
2011; considerando insuficiente lo señalado en el acta, en el sentido de que la asociación
no ha adquirido ningún bien inmueble desde su constitución.
La recurrente por su parte sostiene que la sola precisión en el acta de asamblea universal
del 9/12/2012, de declarar y aprobar como acuerdo que no se ha constituido patrimonio
alguno hace inexigible la presentación del libro de inventarios y balances.
2. El artículo 333 de la Ley General de Sociedades establece lo siguiente:
“Las sociedades reguladas por esta ley pueden transformarse en cualquier otra clase de
sociedad o persona jurídica contemplada en las leyes del Perú.
Cuando la ley no lo impida, cualquier persona jurídica constituida en el Perú puede trans-
formarse en alguna de las sociedades reguladas por esta ley.
La transformación no entraña cambio de la personalidad jurídica”.
Este segundo párrafo de la norma abre el camino de la transformación de una asociación
a sociedad; la única condición impuesta es que la ley no impida la transformación, lo que
supone mandato expreso de la norma en ese sentido (o, en todo caso, implícito, pero
indubitable).
Con relación a ello, esta instancia ha señalado que es factible la transformación de una
asociación (persona jurídica no lucrativa) en una sociedad (persona jurídica lucrativa) pues
no existe impedimento legal para dicha transformación.1
3. A su vez, es menester señalar que el Código Civil no contiene reglamentación alguna acerca
de la trasformación de una asociación a sociedad.
Al respecto, Espinoza Espinoza advierte que “nuestro Código Civil adolece de una regulación
especial de estos supuestos en el caso de las personas jurídicas no lucrativas. En atención
a ello resulta conveniente que el operador jurídico aplique, en la medida que ello sea
posible, la normatividad establecida en la Ley General de Sociedades, Ley N. º 26887,
del 9/12/1997. Esto en virtud de que si bien la finalidad (lucrativa o no lucrativa) difiere
entre la asociación, la fundación y el comité frente a las sociedades, todos estos sujetos de
derecho participan de la misma esencia de ser personas jurídicas”.2
4. Asimismo, debe indicarse que no existe regulación expresa sobre el destino del patrimonio
de la asociación en los casos en que ésta decida su transformación en sociedad, ante lo
cual, mediante la Resolución N° 633-2004-SUNARP-TR-L del 25/10/2004, esta instancia
ha admitido las siguientes posibilidades:
“a) Considerar que el cambio en la finalidad de la persona jurídica decidido por sus inte-
grantes, supone igualmente la modificación de la voluntad sobre el destino del patri-
monio, y que por lo tanto, al optar por una forma jurídica regida por la Ley General
1 Resolución N.º 147-2004-SUNARP-TR-T del 6/8/2004, N.° 633-2004-SUNARP-TR-L del 25/10/2004 y N.°
196-2005-SUNARP-TR-T del 9/12/2005.
2 ESPINOZA ESPINOZA, Juan, Derecho de las personas, T. II, Editorial Rodhas. 2001, p. 437. Es importante advertir
que para este autor, no es posible la trasformación de una persona jurídica no lucrativa a sociedad mercantil,
quien sostiene que el impedimento legal se encuentra en la propia naturaleza no lucrativa de aquellas; y por el
hecho de que transformadas en lucrativas, haría que los integrantes se beneficien directamente con el patrimonio,
posibilidad que entiende prohibida por la ley durante su vigencia e incluso después de su extinción.
3 La ley no obliga a insertar el balance de transformación en la escritura pública, solo dispone que debe estar a
disposición de los socios y de terceros interesados en el domicilio social, en un plazo no mayor de treinta días,
contados a partir de la fecha de la referida escritura pública.
que no existe haber neto remanente, con lo cual no le resultaría exigible lo establecido
por el artículo 28 del estatuto de la asociación.4
En consecuencia, debe revocarse el punto 3 de la observación formulada por el Registrador
Público.
7. Ahora bien, en el punto 1 de la observación formulada, el Registrador Público advierte
que en el acta de asamblea general del 9/12/2012 no consta el nombre de la persona que
actuó como presidente de la asamblea, formalidad que debe contener el acta, de acuerdo
a lo dispuesto por el artículo 13 del Reglamento de Inscripciones del Registro de Personas
Jurídicas No Societarias.
De la revisión de la escritura pública del 10/12/2012, consta inserta el acta de asamblea
general del 9/12/2012, en la que se indica lo siguiente: “(…) se reunieron en primera
convocatoria, en una asamblea universal convocada por el presidente del consejo directivo,
señor Divino Toribio Salinas Gamarra, (…)”.
Asimismo, en la referida acta se agrega, en el tema “2. Acuerdo sobre patrimonio de la
Institución”, que “El presidente de la Asociación manifiesta que la institución…”.
Por lo que, siendo el actual presidente de la Asociación para el periodo comprendido del
1/5/2011 al 30/4/2013, conforme al asiento A00007 de la partida electrónica Nº 11115074,
Divino Toribio Salinas Gamarra, se colige que quien presidió la referida asamblea es dicha
persona.
Por lo tanto, corresponde revocar el punto 1 de la observación.
8. Finalmente, tenemos que al reingreso mediante escrito del 15/5/2013 se adjunta el parte
notarial de la escritura pública del 10/12/2012, en la que se subsana la incongruencia in-
currida en presentaciones anteriores, consignándose que la fecha correcta de su expedición
fue el 21/2/2013.
En ese orden de ideas, corresponde dejar sin efecto el punto 2 de la observación formulada.
Estando a lo acordado por unanimidad;
VII. Resolución
Regístrese y comuníquese.
Mirtha Rivera Bedregal
Presidenta de la Segunda Sala del Tribunal Registral
Arbitraje
Actualidad
Área
Civil Arbitraje
Arbitraje
Contenido
DOCTRINA Rita Sabroso Minaya: Impugnación de laudo por un tercero 368
COMENTARIO DE Julio Martín Wong Abad: Algunas notas sobre el estándar de recusación de los
JURISPRUDENCIA
376
árbitros en nuestra Ley de Arbitraje (Comentario a la Casación N.° 888-2013-Piura)
CONSULTA : No viola el deber de motivar si es que los árbitros no se reúnen,
NOS PREGUNTAN Y
CONTESTAMOS
física o virtualmente, para debatir sobre la decisión que será tomada en el 387
laudo
RESEÑA DE Las cláusulas arbitrales pueden estar contenidas en contratos de adhesión
JURISPRUDENCIA
389
(Casación N.º 4736-2012-Callao)
DOCTRINA PRÁCTICA
Doctrina práctica
1. Introducción
SUMARIO
Civil Arbitraje
bitral; mientras que el segundo alcance hace 3. ¿Se puede ejecutar un laudo arbi-
referencia a las partes que estarían obligadas tral afectando a terceros que no
por el pacto arbitral. intervinieron en el arbitraje?
En tal sentido, un tercero —al no ser parte del La posibilidad de que el tercero pueda acudir
convenio arbitral— no participa del arbitraje y a la vía constitucional no implicaría —de
tampoco puede interponer recurso de anula- modo alguno— que los jueces no puedan
ción alguno en contra del laudo que se emita, limitar la ejecución de un laudo si es que con
en el supuesto de que dicho laudo afectase de este se pretende afectar a terceros.
forma directa sus derechos constitucionales.
Sobre el particular, debemos remitirnos
En efecto, recordemos que el artículo 63 del al Pleno Jurisdiccional Distrital en materia
Decreto Legislativo N.° 1071 parte de la Comercial, de fecha 7 de junio de 2010, en
premisa de que el recurso de anulación es pro- donde se establecieron pautas importantes
cedente solo si la causal invocada fue objeto con relación a la oposición de los terceros a
de reclamo expreso en su momento ante el la ejecución de laudos arbitrales.
tribunal arbitral y el mismo fue desestimado.
En dicho Pleno Jurisdiccional, se acordó que
“en los casos de restitución o entrega de
¿SABÍA USTED QUE? bienes inmuebles, si el tercero se opusiera
a la ejecución (o alegara contradicción) del
(…) laudo arbitral, sustentando y acreditando
El laudo, al momento de su emisión,
aunque sea ineficaz respecto del que se encontraba en posesión del bien
tercero, sí es válido y eficaz respecto submateria, incluso con anterioridad a la fecha
de las partes que participaron en el de celebración (…) del proceso arbitral, el cual
arbitraje. Recién con la sentencia resolvió la desocupación del mismo —sin que
que declara su nulidad es inválido él haya intervenido en dichos procesos—;
para todos y deja de tener calidad la oposición (o contradicción) interpuesta
de cosa juzgada. judicialmente deberá ser amparada, pues
de no ser así se estaría no solo violentando
normas procesales sino también normas que
Por ello, con acertado criterio, el Tribunal constituyen garantías constitucionales como
Constitucional —en la Sentencia recaída en la tutela jurisdiccional efectiva y el derecho
el Expediente N.° 0142-2011-AA/TC, que al debido proceso en su vertiente: derecho
constituye precedente de observancia obli- de defensa, toda vez que el tercero quedaría
gatoria— estableció5 expresamente que el en total indefensión”.
tercero puede impugnar un laudo arbitral, a
través de una demanda de amparo, cuando Como se puede apreciar, lo acordado en el
no formó parte del convenio arbitral y en tan- referido Pleno Jurisdiccional, establece dos
to exista una afectación directa y manifiesta de requisitos básicos para que se pueda amparar
sus derechos constitucionales a consecuencia la oposición de un tercero a la ejecución de
del laudo pronunciado en dicho arbitraje, un laudo arbitral; a saber:
salvo que dicho tercero esté comprendido (i) El tercero debe sustentar y acreditar la
en el supuesto del artículo 14 del Decreto posesión del inmueble que se ordena en-
Legislativo N.º 10716.
Civil Arbitraje
el mismo no tenga calidad de cosa juzgada. anterior o a la parte anulada, bajos los crite-
El demandante no está solicitando que sim- rios o parámetros señalados en la respectiva
plemente se declare ineficaz dicho laudo, ya sentencia”. (El subrayado es nuestro).
que, en los hechos, es ineficaz al haber sido
Dentro de tal orden de ideas, consideramos
declarado inejecutable por el juez que conoció
que, en el presente caso, se debió declarar
el proceso de ejecución de laudo.
expresamente la nulidad del laudo arbitral.
Por ello, lo más acertado hubiera sido que en
la Sentencia se declare la nulidad11 del laudo, 5. ¿Se puede incorporar al tercero al
así como sucede en los procesos de anulación arbitraje?
del laudo (al que no puede acudir el terce-
El tercero, al momento de interponer la
ro) o, en todo caso, debió precisarse que se
demanda de amparo, solicitó que “se repon-
estaba haciendo referencia a una ineficacia
gan las cosas al estado anterior al inicio del
estructural.
arbitraje”. No obstante, no queda claro del
El laudo al momento de su emisión, si bien caso, si es que el tercero quisiera intervenir
es ineficaz respecto del tercero, sí es válido y en un nuevo proceso arbitral seguido entre las
eficaz respecto de las partes que participaron partes que iniciaron el arbitraje impugnado, a
en el arbitraje. Recién con la sentencia que efectos de poder hacer ejercicio de su derecho
declara su nulidad es inválido para todos y de defensa.
deja de tener calidad de cosa juzgada.
Nos referimos a este tema porque resulta de
Al respecto, cabe hacer referencia a otro de extrema importancia. Nos explicamos. Como
los votos singulares,12 en donde se señala que bien señala Santistevan,13 el convenio arbitral
“(…) una consecuencia de haber acreditado la vinculará solo a las partes, cumpliéndose el
vulneración de un derecho fundamental por principio res inter alios acta en toda su mag-
parte de un órgano arbitral no es, necesaria- nitud, debido a que no puede incluirse en el
mente, la inejecutabilidad del laudo —que no arbitraje a aquellos que no formaron parte
está prohibido por el TC—, sino que también de él.
se “puede” declarar la “nulidad del laudo”
En esa línea de pensamiento, encontramos a
y la orden de emitir uno nuevo (…)”. (El
Caivano,14 quien manifiesta que en los tribu-
subrayado es nuestro).
nales judiciales es generalmente posible incor-
Dicho voto se sustenta en lo ya expresado porar al proceso, múltiples partes y acumular
por el Tribunal Arbitral (en el precedente o consolidar varios procedimientos entre las
de observancia obligatoria contenido en la mismas partes. En el arbitraje, en cambio, la
Sentencia recaída en el Expediente N.° 0142- multiplicidad de partes en una o varias rela-
2011-AA/TC), cuando en el fundamento 21 ciones jurídicas vinculadas o la multiplicidad
se estableció que “la sentencia que declare de relaciones jurídicas, aun entre dos únicas
fundada la demanda de amparo por alguno partes, plantean importantes dificultades. En
de los supuestos indicados en el presente buena medida, esas dificultades se presentan
fundamento, puede llegar a declarar la nu- porque, a diferencia de la jurisdicción estatal,
lidad del laudo o parte de él, ordenándose de fuente legal y obligatoria, la arbitral es de
la emisión de uno nuevo que reemplace al
13 Santistevan de Noriega, Jorge. “Extensión del
convenio arbitral a partes no signatarias: Expresión
11 Como sabemos, un acto jurídico válido puede ser de la inevitabilidad del arbitraje”. En: Revista Peruana
eficaz o ineficaz, mientras que un acto jurídico invá- de Arbitraje, N.º 8, Lima, Grijley, 2009, pp. 29-30.
lido (nulo) necesariamente es ineficaz; dado que el 14 Caivano, Roque. “Algunos problemas derivados de
presupuesto de la eficacia de un acto jurídico es la los arbitrajes con partes o relaciones jurídicas múl-
validez de este. tiples”. En: Revista Peruana de Arbitraje, N.º 4, Lima,
12 Emitido por el Magistrado Urviola Hani. Grijley, 2007, p. 67.
Civil Arbitraje
las propias partes en una transacción; a través 7. Comentarios finales
de dichos acuerdos, no se pueden disponer Los alcances del laudo deben circunscribirse a
sobre bienes y/o derechos de los cuales las las partes que celebraron el convenio arbitral
partes no son titulares. y que participaron en el proceso arbitral. Un
En efecto, el inciso 1 del artículo 50 del De- laudo no surte efectos sobre terceros que no
creto Legislativo N.º 1071 establece que: “si pudieron ejercer su derecho defensa dentro
durante las actuaciones arbitrales las partes del proceso arbitral mismo.
llegan a un acuerdo que resuelva la contro- Cuando los efectos del laudo se pretenden
versia en forma total o parcial, el tribunal ar- extender a terceros que no participaron en el
bitral dará por terminadas las actuaciones con arbitraje, deberán impugnar el laudo a través
respecto a los extremos acordados y, si ambas de la vía constitucional, en tanto exista una
partes lo solicitan y el tribunal arbitral no aprecia afectación directa y manifiesta de sus derechos
motivo para oponerse, hará constar ese acuerdo constitucionales.
en forma de laudo en los términos convenidos
por las partes sin necesidad de motivación, La función del Poder Judicial en la ejecución
teniendo dicho laudo la misma eficacia que de un laudo arbitral, no es la de emitir una
cualquier otro laudo dictado sobre el fondo sentencia ni la de revisar la actividad realizada
de la controversia”. (El subrayado es nuestro). en el proceso arbitral, se trata simplemente de
cumplir un rol complementario que consiste
Como se aprecia, el árbitro único podía opo-
en proveer al laudo de la fuerza coercitiva de
nerse a hacer constar los acuerdos (en torno al
la que carece, en tanto esta ha sido reservada
inmueble) en forma de laudo; en tanto dicho
el Estado.
pronunciamiento implicaba resolver acerca de
materias, de las cuales las partes no tenían Sin embargo, este rol complementario no
libre disposición. implica que los jueces no puedan limitar la
ejecución de un laudo si es que con este se
En torno a la materia arbitrable, el inciso
1 del artículo 2 del Decreto Legislativo pretende afectar a terceros, siguiendo las
N.° 1071, establece que: “pueden someterse pautas establecidas en el Pleno Jurisdiccional
a arbitraje las controversias sobre materias de Distrital en materia Comercial de fecha 7 de
libre disposición conforme a derecho, así como junio de 2010.
aquellas que la ley o los tratados o acuerdos En los procesos de amparo iniciados por el
internacionales autoricen”. (El subrayado es tercero que ha visto afectado sus derechos
nuestro). por el laudo arbitral, se debe declarar la
Como se aprecia, el criterio de “libre disponi- nulidad del mismo y no limitarse a una
bilidad” es el que prima en lo relativo a qué simple declaración de ineficacia e ineje-
controversias pueden ser sometidas a arbitraje cutabilidad.
y como bien se señala en la sentencia “en Los árbitros pueden y deben declararse in-
el proceso arbitral se dispuso aspectos que competentes cuando las materias sometidas
forman parte del derecho de propiedad del a su conocimiento no son de libre disponi-
demandante, por cuanto ya no va poder usar bilidad de las partes (afectando derecho de
ni gozar del inmueble (…), ya que SACIP le terceros que no han intervino en el proceso).
entregó la posesión de este a Flotal (…), a Asimismo, los árbitros deben oponerse a emi-
pesar de que ella no es la propietaria”17. tir un laudo conteniendo acuerdos arribados
por las partes en una transacción cuando
adviertan que se están disponiendo de bienes
17 Considerando 8 de la Sentencia. y/o derechos de terceros.
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COMENTARIO DE JURISPRUDENCIA
Comentario de jurisprudencia
Comentario a la
Casación N.° 888-
Algunas notas sobre el estándar
2013-Piura de recusación de los árbitros en
nuestra Ley de Arbitraje
1. Introducción
2. Nuestro estándar de recusación de los árbitros
3. La evidente parcialidad
4. Los temas que nos trae la Casación
5. Conclusiones
Civil Arbitraje
la razonabilidad conlleva un consenso inter- Por ese motivo, considerar como aplicables
subjetivo5, pero señalar esto no nos permite a los árbitros, el listado de impedimentos o
todavía discernir en qué casos específicos nos motivos de recusación que las leyes procesales
encontramos frente a una recusación debida- prevén para los jueces, resulta en muchos
mente sustentada. casos inadecuado, tanto por exceso como
por defecto8.
Algunas Cortes, de países que como el nuestro
han utilizado la Ley Modelo Uncitral como re- Aquí, como casi siempre en el arbitraje, más
ferencia para sus leyes nacionales, han llegado que a los listados legales, deberíamos estar al
a afirmar que este requisito “correspondería libre acuerdo de las partes; pues, por ejemplo,
generalmente al test de descalificación de los nada debería impedir que en un arbitraje
jueces según las normas del derecho local”6, 7. testamentario, las partes pudieran nombrar
a un familiar para que dirima la controversia
Esta posición, sin embargo, no nos parece
que las enfrenta9.
adecuada pues si bien el estándar es procesal
no tenemos porqué convertirlo en uno de tipo En efecto, si bien la cláusula general es nomi-
judicial; en este, como en muchos otros casos, nalmente idéntica, su aplicación no puede ser
el proceso arbitral no puede ser equiparado al la misma en el proceso judicial y en el proceso
proceso judicial debido a la distinta realidad arbitral. La situación profesional del juez es,
sobre la que actúa y también a los distintos en nuestras sociedades, la de un personaje
intereses que está destinado a tutelar. aislado que no tiene, en general, una activa
participación en la vida social, académica y
mucho menos económica de nuestras comu-
se trata de elementos indiferentes al curso de nuestro nidades; el árbitro, por el contrario, puede
proceso arbitral. Es por ello que la ley ha agregado encontrarse en medio de un haz de relaciones
a la palabra ‘dudas’, el adjetivo ‘justificadas’. Esto que hacen más fácil la presencia de posibles
equivale a decir que las dudas sean razonables. Sin
embargo, todavía no hemos avanzado mucho porque conflictos de intereses10.
¿cuáles son los criterios prácticos que permiten saber
cuándo una duda es razonable y cuándo no lo es? (DE
TRAZEGNIES, Fernando. “Conflictuando el conflicto:
Los conflictos de interés en el arbitraje”, en Thémis
Revista de Derecho, N.°53, Lima, 2011, p. 61). 8 GONZALEZ SORIA, Julio. Comentarios a la nueva Ley
5 ATIENZA considera que de acuerdo a uno de los de Arbitraje 60/2003, de 23 de diciembre, Editorial
requisitos de una decisión razonable: “…habría que Aranzadi, Navarra, 2004; p. 176-177
decir que, de las dos soluciones en presencia, la más 9 Ibídem.
razonable, la que mejor logra un equilibrio, es la que 10 LA CHINA lo explica así: “No deberíamos en verdad
pueda verse como aceptable por la comunidad o, adentrarnos en los problemas teóricos sobre la natu-
si ambas pudieran serlo en principio, la que suscite raleza y esencia del arbitraje sin primero tener clara
un mayor consenso”. (ATIENZA, Manuel. Para una percepción y sensibilidad de las premisas no jurídicas
razonable definición de” razonable” En: <http://goo.gl/ de este tan importante sector de la vida jurídica: la
vZSXno> normal ósmosis y a menudo homogeneidad entre
6 Uncitral 2012 Digest of Case Law on the Model Law los actores de la escena arbitral –partes, defensores,
on International Commercial Arbitration, p. 65. árbitro–; homogeneidad profesional cuando árbitros y
7 Recuérdese que nuestra propia ley podría prestarse defensores son igualmente abogados, o profesionales,
a este equívoco cuando en su Cuarta Disposición o comerciantes; ósmosis, por los frecuentes contactos
Complementaria equipara las figuras del juez y del y las acostumbradas relaciones que pueden darse
árbitro: entre los abogados y sus clientes en el mundo del
“CUARTA. Juez y tribunal arbitral comercio, de la industria, de las burocracias societa-
A partir de la entrada en vigencia de este Decreto rias, de las actividades productivas y de los servicios
Legislativo, todas las referencias legales a los jueces en general, aquí el árbitro de hoy es el defensor de
a efectos de resolver una controversia o tomar una mañana, y hoy el administrador delegado de la socie-
decisión, podrán también entenderse referidas a un dad X la cual es, ocasionalmente, el cliente, mañana
tribunal arbitral, siempre que se trate de una materia será el litigante, en tanto particular, del profesional”
susceptible de arbitraje y que exista de por medio un (LA CHINA, Sergio. L’arbitrato Il sistema e l’esperienza,
convenio arbitral celebrado entre las partes”. 2.a edición, Giuffrè Editore, Milano, 2004; p. XVII).
Civil Arbitraje
Ley Modelo, pues aquí no basta la existencia Como hemos visto, la circunstancia en sí
de dudas justificadas sino que debe probarse misma no tenía porqué conducir a la desca-
la “evidente parcialidad”. lificación del presidente del colegio arbitral;
pero sí, como parece evidente, ambos árbitros
Como ha señalado una Corte del Tercer
se encontraban en la obligación de comunicar
Circuito:
la relación familiar que existía entre ellos para
“(…) la palabra evidente sugiere que el esta- que las partes decidieran si la dispensaban,
tuto requiere más que una vaga apariencia de por tal motivo, el mayor reproche que pue-
favoritismo. Más aún, la parcialidad del árbitro de hacerse, a los árbitros involucrados, es la
debe ser lo suficientemente obvia para que una infracción al llamado deber de revelación15.
persona razonable pueda fácilmente reconocer-
la. En cambio, el estándar judicial requiere para, La Corte Suprema a este respecto expresa que:
recusar a un juez, que su imparcialidad pueda
razonablemente ser cuestionada. Este lenguaje “(…) es evidente que el parentesco entre dos
sugiere que la investigación judicial se enfoca árbitros y la acreditada relación familiar implica
sobre apariencias y no sobre si el juez realmente la posibilidad de generar suspicacias respecto
ha albergado un subjetivo prejuicio”14. a la independencia de ambos, máxime si uno
representa a una de las partes que interviene
Si revisamos nuestro propio derecho, el es- en el proceso arbitral y el otro es el Presidente
tándar americano se asemeja al que utiliza del Tribunal Arbitral, lo que, podría generar la
nuestra ley civil para impugnar el denomi- emisión de una decisión arbitral sin la imparcia-
lidad requerida en los procesos arbitrales. Sobre
nado arbitramento de tercero. Así, el artículo
el particular, es evidente que en el caso de autos,
1408 del Código Civil establece lo siguiente: los árbitros han faltado a su deber de informar de
las causales de recusación debido al parentesco
“La determinación librada al mero arbitrio de un por afinidad existente entre ambos, no siendo
tercero no puede impugnarse si no se prueba posible que aleguen desconocimiento de la
su mala fe.” causal, porque es evidente que el parentesco
es anterior a la designación de ambos como
Se puede comprobar, por consiguiente, la árbitros del presente caso.”
diferente aproximación que justifica cada una
de las soluciones adoptadas. Mientras la solu- Un segundo tema tratado por la casación
ción procesal tiene un estándar nominalmente resulta más interesante, en nuestra opinión;
idéntico al utilizado para la descalificación pues resuelve un tema procedimental que, si
de los jueces, el estándar contractual ve en bien ya había sido abordado por la doctrina,
el árbitro a un agente de las partes, a un ter- no había obtenido todavía una solución ju-
cero que completa e integra la voluntad de dicial. La parte que obtiene información que
estas y cuya decisión, por consiguiente, solo genera fundadas dudas sobre la independen-
puede ser atacada por la prueba efectiva de cia e imparcialidad de un árbitro luego de
su parcialidad o mala fe. vencido el plazo para recusarlo, ¿ha perdido
su derecho a cuestionar el comportamiento
4. Los temas que nos trae la casación
La casación, materia de nuestro comentario, 15 “Artículo 28.- Motivos de abstención y de recusación
nos muestra un caso muy grueso de incon- 1. Todo árbitro debe ser y permanecer durante el
arbitraje independiente e imparcial. La persona
ducta arbitral: el presidente de un tribunal
propuesta para ser árbitro deberá revelar todas
no consideró como una circunstancia que las circunstancias que puedan dar lugar a dudas
merecía ser revelada los lazos de parentesco justificadas sobre su imparcialidad e independencia.
que lo unían a uno de sus coárbitros. 2. El árbitro, a partir de su nombramiento, revelará
a las partes, sin demora cualquier nueva circuns-
tancia. En cualquier momento del arbitraje, las
partes podrán pedir a los árbitros la aclaración
14 Federal Arbitration Act: Contemporary Decisions, Kindle de sus relaciones con alguna de las otras partes o
edition by Land Mark Publications, posición 962. con sus abogados. (…)”.
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ción del tribunal no se ha ajustado al acuerdo vertiría en una formalidad sin substancia, en
entre las partes. un trámite vacío.
El problema con las dos causales mencionadas
es, por supuesto, si debe cumplirse (y en qué 5. Conclusiones
forma) con el oportuno reclamo expreso que 1. El estándar de recusación de los árbitros
debe realizar la parte afectada según lo esta- es un estándar procesal.
blecido en el inciso 2 del artículo 63. Al res- 2. Las previsiones legales sobre la recusación
pecto, consideramos que la buena fe procesal de los jueces resultan inadecuadas para
obliga a la parte a comunicar las circunstancias juzgar sobre la recusación de los árbitros.
que considera sustentan las dudas justificadas
3. La relación de parentesco entre uno de
para que el árbitro involucrado pueda evaluar
los árbitros nombrados por las partes y
su renuncia, de acuerdo con lo previsto en el
el presidente del tribunal arbitral es una
artículo 29.3 de la Ley17.
circunstancia que debe ser revelada por
Sin embargo, nos parece evidente, asimismo, los árbitros involucrados.
que este deber de colaboración solo puede 4. Luego de vencido el plazo para recusar
ser exigido hasta antes de que el laudo haya a un árbitro, las partes deben comunicar
sido emitido pues, expedida la decisión final, la existencia de las dudas justificadas que
no existe recurso alguno que pueda reparar hubieran podido surgir, con el fin de que
la afectación producida. Exigir que, una vez el árbitro cuestionado pueda decidir si
emitido el laudo, se cumpla obligatoriamente renuncia a integrar el tribunal arbitral.
con reclamar ante el Tribunal Arbitral se con-
5. Si el árbitro no renunciara o si el conoci-
miento de la existencia de las dudas jus-
17 “Artículo 29.- Procedimiento de recusación (…) tificadas se produjera después de emitido
3. Salvo pacto en contrario, una vez que se inicie el el laudo y antes de que venza el plazo
plazo para la emisión de un laudo, es improce- para impugnarlo, se deberá demandar la
dente cualquier recusación. Sin embargo, el árbitro nulidad de esta decisión por las causales
debe considerar su renuncia, bajo responsabilidad,
si se encuentra en una circunstancia que afecte su contenidas en los incisos b) o c) del artí-
imparcialidad e independencia (…)”. culo 63.1 de la Ley.
TEXTO DE LA CASACIÓN
* Publicado en Sentencias en Casación, Año XVIII, Nº 692, (El Peruano, viernes 30 de mayo de 2014, p. 51624).
Civil Arbitraje
el Directorio del Centro de Conciliación y Arbitraje del Colegio de Ingenieros del Perú – Consejo
Departamental Piura, resuelve declarar fundada la recusación formulada por el Gobierno Regio-
nal de Piura, sin embargo, al haberse expedido el laudo arbitral este sólo puede Ser invalidado
en la vía judicial. Absoluciones al Recurso de Anulación: Mediante escrito de fojas noventa y
siete, el Abogado Mario Elías Rentaría Sánchez absuelve el recurso de anulación solicitando
que se declare que no hay lugar a emitir pronunciamiento debido a que en el proceso arbitral se
declaró fundada la recusación y por tanto, el laudo arbitral emitido carece de valor. Menciona
que ambos árbitros actuaron dolosamente al no declarar el parentesco existente y que pese al
impedimento continuaron interviniendo en el proceso arbitral. Mediante escrito de fojas ciento
cuarenta y dos, el Directorio del Centro de Arbitraje del Colegio de Ingenieros del Perú –
Consejo Departamental de Piura, absuelve el recurso de anulación argumentando que el Go-
bierno Regional de Piura solicitó ante el Centro de Arbitraje la recusación de los árbitros, lo cual
fue puesto en conocimiento de todos los intervinientes, por tanto, los mencionados árbitros
debieron esperar lo que resuelva el Directorio del Centro de Arbitraje, sin embargo, ambos
recusados procedieron a emitir y notificar el laudo, usurpando la función que tenía el Centro de
Arbitraje como administrador del proceso y limitando el derecho del tercer árbitro, por tanto,
existe un probado actuar doloso de los árbitros, siendo nulo el laudo emitido. A través de su
escrito de fojas ciento sesenta y tres, el Consorcio Arenales absuelve el recurso alegando que
según el artículo 31 de Ley General de Arbitraje, el momento para la interposición del recurso ya
había transcurrido, pues la recusación procede siempre que no haya vencido el plazo probatorio,
por tanto, la recusación planteada debió ser declarada improcedente, y por tanto, el laudo emi-
tido es perfectamente válido. Mediante escrito de fojas ciento noventa y cuatro, el árbitro Abo-
gado Edgardo Bagate Quispe Villanueva absuelve el recurso bajo el argumento que la resolución
mediante la cual se declara fundada la recusación deviene en manifiestamente improcedente
debido a que fue emitida luego de la emisión del laudo arbitral, por lo que, se reafirma la validez
del laudo. Menciona además que el artículo 28 de la Ley Nº 26572 no reconoce como causal de
recusación la existencia de parentesco entre los árbitros. Improcedencia del Recurso y Proceso
de Amparo: Según fluye de la resolución número veintidós de fojas trescientos veinticinco, una
primera sentencia declaró improcedente el recurso de anulación de laudo arbitral y se dispuso
archivar definitivamente los actuados, bajo el argumento que al declarar fundada la recusación
contra los árbitros Quispe Villanueva y Machado Frías no se tuvieron en cuenta las disposiciones
del Reglamento del Centro de Arbitraje del CIP – Piura respecto a la preclusión para recusar,
siendo que en el presente caso el pedido de recusación es extemporáneo porque el proceso ar-
bitral se encontraba en etapa de laudar. Empero, el Gobierno Regional de Piura interpuso deman-
da constitucional de amparo contra la mencionada sentencia, la que fue declarada fundada, según
se advierte de la sentencia recaída en el Proceso de Amparo Nº 2481-2010, emitida por la Sala
Constitucional Permanente de Corte Suprema que declaró fundada la mencionada demanda
constitucional y nulas las resoluciones expedidas en el proceso de anulación de laudo por afec-
tación al debido proceso en sede judicial y en sede arbitral, porque únicamente se ha analizado
el plazo según Reglamento del Centro de Arbitraje pero no se analizó la garantía de independen-
cia e imparcialidad de los árbitros. Nueva sentencia: Como consecuencia de lo ordenado por la
Sala Constitucional Permanente de la Corte Suprema en el proceso de amparo Nº 2481-2010, la
Primera Sala Civil de la Corte Superior de Justicia de Pira emitió nueva sentencia, recaída en la
resolución número treinta y cuatro de fojas cuatrocientos cincuenta y nueve, mediante la cual se
declara fundado en parte el recurso de anulación, en consecuencia, se declara nulo el laudo ar-
bitral de fecha veintiocho de setiembre de dos mil siete emitido en el Expediente Arbitral Nº
005-2007-CCACIP- CDP, seguido por Consorcio Arenales contra el Gobierno Regional de Piura,
correspondiendo a las partes proceder a una nueva designación de árbitros. En dicha sentencia
se argumenta que los árbitros no cumplieron con lo prescrito en el artículo 29 de la Ley Nº 26572
esto es, informar o declarar si existen impedimentos para la aceptación del cargo. Se menciona
también que si bien, según el Reglamento del Centro, las partes tendrán un plazo de tres días
para presentar su recusación, ello no impide dar a conocer situaciones sobrevinientes en función
a los datos que se puedan ir obteniendo respecto a acreditar la situación que genere recusación
de los árbitros, sin embargo, con los árbitros los que tienen la obligación de informar la causal
de recusación porque conocen el parentesco y no esperar a que las partes conozcan dicha causal.
Recurso de Casación: Contra la mencionada sentencia emitida por la Sala Superior, el Consorcio
Arenales interpone recurso de casación mediante escrito de fojas cuatrocientos noventa y ocho,
bajo el argumento que la vinculación familiar por afinidad no resulta una situación recusable y
porque según el artículo 31 numeral 2) del Reglamento del Centro de Arbitraje del Colegio de
Ingenieros de Piura, la recusación de los árbitros sólo puede plantearse hasta antes que se esta-
blezca el plazo para laudar. Este Supremo Tribunal, mediante resolución de fecha ocho de mayo
del año dos mil trece declaró la procedencia del referido recurso por las causales de: i) infracción
normativa de los artículos 29, 31 y 73 inciso 3 de la Ley Nº 26572, ii) infracción normativa del artículo
31 del Reglamento de Arbitraje del Colegio de Ingenieros del Perú – Consejo Departamental Piura. III.
MATERIA JURÍDICA EN DEBATE: La materia jurídica en discusión se centra en determinar si es
que corresponde anular el laudo arbitral emitido por los árbitros Fidel Antonio Machado Frías y
Edgardo Bagate Quispe Villanueva debido a que el Directorio del Centro de Arbitraje que pro-
movía el proceso arbitral declaró fundada la recusación formulada en su contra por el Gobierno
Regional de Piura. IV. FUNDAMENTOS DE ESTA SALA SUPREMA: 1. Corresponde mencionar,
de manera preliminar, que la función nomofiláctica del recurso de casación garantiza que los
Tribunales Supremos sean los encargados de salvaguardar el respeto del órgano jurisdiccional al
derecho objetivo, evitando así cualquier tipo de afectación a normas jurídicas materiales y pro-
cesales, procurando, conforme menciona el artículo 384 del Código Procesal Civil, la adecuada
aplicación del derecho objetivo al caso concreto. 2. Según se advierte del auto calificatorio de
fecha ocho de mayo de dos mil trece, este Supremo Tribunal ha declarado procedente el recurso
por diversas causales, las cuales deben ser analizadas de manera independiente. Cabe precisar
que se denuncian infracciones netamente de orden material, por lo que, sin desconocer los fines
del recurso de casación, este Supremo Tribunal se encuentra legalmente facultado para realizar
un análisis respecto a la pretensión postulada, y respecto a los juicios de valor emitidos tanto por
el A-Quo como por el Ad-Quem respecto a la anulación de laudo arbitral solicitada por el Go-
bierno Regional de Piura. 3. En primer término, el Consorcio Arenales denuncia infracción nor-
mativa de los artículos 29, 31 y 73 inciso 3 de la Ley Nº 26572. Cabe precisar que dicha Ley
constituye la antigua “Ley General de Arbitraje”, que fuera derogada por el Decreto Ley Nº 1071
del veintiocho de junio de dos mil ocho, sin embargo, sus disposiciones son aplicables al presen-
te caso por temporalidad de la norma, toda vez que el laudo arbitral cuya nulidad se pretende
fue emitido el día veintiocho de setiembre del año dos mil siete, esto es, cuando aún se encon-
traba vigente la norma anterior. 4. El artículo 29 de la Ley Nº 26572 prescribe expresamente
que: “La persona a quien se comunique su posible nombramiento como árbitro deberá revelar
todas las circunstancias que puedan dar lugar a una posible recusación, y el árbitro, desde el
momento de su nombramiento y durante todas las actuaciones arbitrales, revelará sin demora
tales circunstancias a las partes, a menos que ya les haya informado de ellas, bajo pena de res-
ponder por los daños y perjuicios que ocasionen por su omisión”. El Consorcio Arenales mencio-
na en su recurso que no se ha vulnerado este deber de informar por la vinculación familiar por
afinidad entre los árbitros no se encuentra reconocido legalmente como una situación recusable.
Sin embargo, dicho argumento se desvirtúa porque si bien en el artículo 28 de la Ley Nº 265721
no se encuentra expresamente recogido como causal de recusación los vínculos familiares por
consanguinidad o afinidad, lo cierto es que, el parentesco puede ser perfectamente enmarcado
dentro del tercer inciso de dicho artículo, que prescribe que procede recusación cuando existan
circunstancias que den lugar a dudas justificadas respecto de la imparcialidad o independencia
de los árbitros, pues, es evidente que el parentesco entre dos árbitros y la acreditada relación
familiar implica la posibilidad de generar suspicacias respecto a la independencia de ambos,
máxime si uno representa a una de las partes que interviene en el proceso arbitral y el otro es el
Presidente del Tribunal Arbitral, lo que, podría generar la emisión de una decisión arbitral sin la
imparcialidad requerida en los procesos arbitrales. Sobre el particular, es evidente que en el caso
de autos, los árbitros han faltado a su deber de informar de las causales de recusación debido al
parentesco por afinidad existente entre ambos, no siendo posible que aleguen desconocimiento
1 Artículo 28 de la Ley Nº 26572.- Los árbitros podrán ser recusados solo por las causas siguientes:
1. Cuando no reúnan las condiciones previstas en el Artículo 25 o en el convenio arbitral o estén incursos en algún
supuesto de incompatibilidad conforme al Artículo 26.
2. Cuando estén incursos en alguna causa de recusación prevista en el reglamento arbitral al que se hayan sometido
las partes.
3. Cuando existan circunstancias que den lugar a dudas justificadas respecto de su imparcialidad o independencia.
Civil Arbitraje
CONSULTA N° 1
El marco de un proceso arbitral en donde se discute la resolución de un
contrato minero, nos consultan si es posible pedir la anulación del lau-
do por el hecho de que los miembros del tribunal arbitral, al momento
de emitir el laudo, no se llegaron a reunir física ni virtualmente. Por lo
que, no habría existido debate para adoptar la decisión, y así habría un
defecto en la motivación.
Entendemos que, en el presente caso, el Así, el caso que se nos presenta debe res-
motivo legal para solicitar la anulación del ponder, básicamente, a dos preguntas: (i)
laudo arbitral es que las actuaciones arbitra- ¿tienen los árbitros el deber de debatir, física
les no se han ajustado a lo dispuesto por el o virtualmente, al momento de laudar?; (ii)
Decreto Legislativo n.° 1071 (ley que regula ¿es parte del deber de motivar el debatir?
el arbitraje –DLA); dado que, al momento
Respecto de la primera pregunta, creemos que
de la decisión del laudo, existiría el deber de
la respuesta es negativa; ya que, simplemente,
que los árbitros debatan para que el laudo
el DLA no lo regula de manera expresa, y si
se considere lo suficientemente motivado
ello es así, entonces no habría razón para que
(artículo 56, DLA).
dicha hipótesis pueda autorizar la anulación
Téngase en cuenta que los motivos para impug- del laudo.
nar el laudo son taxativos (artículo 62, inciso 1)
Así, si es que el DLA no lo regula de forma
y que el motivo alegado por la parte se encuen-
expresa, entonces sería necesario realizar un
tra contemplado en el artículo 63, inciso 1, c,
ejercicio interpretativo para concluir que lo
que permite formular el recurso de anulación
hace de forma implícita. Eso es exactamente
cuando: “(…) las actuaciones arbitrales no se
lo que trató de hacer la parte que nos formula
han ajustado al acuerdo entre las partes o al
la consulta. Su interpretación es que el deber
reglamento arbitral aplicable, salvo que dicho
de motivación presupone un deber de debatir.
acuerdo o disposición estuvieran en conflicto
He aquí el meollo del asunto.
con una disposición de este Decreto Legislativo
de la que las partes no pudieran apartarse, o No obstante, creemos que el debate poco
en defecto de dicho acuerdo o reglamento, tiene que ver con el deber de motivación.
que no se han ajustado a lo establecido en este Motivar o justificar es dar razones de por
Decreto Legislativo”. En este caso, las partes qué se decidió de una manera y no de otra.
no pactaron que se elimine la motivación y, Se trata de determinar cómo fueron cons-
por tanto, dado que, en su defecto, el DLA truidas las premisas normativa y fáctica de la
lo exige, resultaría una norma de observancia decisión, esto es, justificar cómo se realizó la
obligatoria (artículo 56, inciso 1). interpretación del texto o elemento no textual
Civil Arbitraje
y la aplicación de la norma al caso concreto que firmar). Allí no habría precisamente un
y cómo se desarrollaron los complejos pasos intercambio de ideas o críticas, pero sí habría
de la valoración racional de la prueba. Solo ocurrido lo suficiente para que el tribunal
así se tendrán argumentos que justifiquen arbitral emita un laudo válido.
las premisas y, además, se podrá controlar la
Por tanto, creemos que para tener una moti-
lógica entre ellas.
vación válida en el laudo no es necesario que
Como puede intuirse, ello ocurre con haya existido debate, bastando un intercam-
prescindencia de que exista o no un efectivo bio de opiniones o, inclusive, una aceptación
debate. Es perfectamente posible que el del proyecto de laudo de algún miembro del
encargado de redactar el laudo realice una tribunal arbitral.
justificación impecable y que los otros dos
árbitros se adhieran pacíficamente (es más, Fundamento legal:
según la DLA, a diferencia de lo que indica la Ley Decreto Legislativo N.° 1071: Artículos 56,
Orgánica del Poder Judicial ni siquiera tendrían 62.1 y 63.1, c.
RESEÑA DE JURISPRUDENCIA
Reseña de jurisprudencia
Casación N.º
4736-2012-Callao
Las cláusulas arbitrales pueden
estar contenidas en contratos de
adhesión
TEXTO DE LA CASACIÓN
CASACIÓN N.°4736-2012-CALLAO
Civil Arbitraje
declara infundada la excepción de convenio arbitral interpuesta por Agencia Marítima Tridentum
S.A.C., reformándola, la declara fundada, en consecuencia, nula la sentencia de fecha dieciocho
de noviembre de dos mil diez. II. ANTECEDENTES: 1. Demanda: Por escrito de fojas noventa
y cuatro, San Fernando S.A., interpone demanda de obligación de dar suma de dinero a fin de
que los demandados cumplan con pagarle solidariamente la suma de US$ 68,975.00 (sesenta y
ocho mil novecientos setenta y cinco con 00/100 Dólares Americanos), argumentando: (i) que la
demandante adquirió de Bunge Latín American, un cargamento de cinco mil toneladas métricas
(5000.00 TM) de frijol de soya a granel por un valor costo y flete de US$ 503.14 (quinientos tres
con 14/100 Dólares Americanos) por tonelada métrica, el mismo que fue embarcado en el Puer-
to de San Lorenzo - Argentina, a bordo de la M/N Bossclip Trader con destino al Puerto del Callao,
emitiéndose un conocimiento de embarque limpio a bordo sin que el agente a nombre del ca-
pitán efectúe ninguna observación sobre el estado, peso y condición de la carga. Refiere que al
llegar al Puerto del Callao se verificó un faltante de treinta y nueve con doscientas milésimas de
toneladas métricas (39.200 TM) según consta en el certificado de peso expedido por el Terminal
Portuario del Callao que corresponde al expediente 14460, toda vez que sólo se descargó cuatro
mil novecientos sesenta con ochocientas milésimas de toneladas métricas (4,960.800 TM) en
lugar de cinco mil toneladas métricas (5,000.00 TM) de fríjol de soya, del cual se hacia respon-
sable a la nave, sus armadores, su capitán, la tripulación y su agente marítimo. (ii) Asimismo
señala que adquirió de Bunge Latin American un cargamento de cinco mil ochocientos cuarenta y
nueve toneladas métricas (5,849.00 TM) de torta de soya a granel con un valor costo y flete de
cuatrocientos treinta y nueve con treinta y siete dólares por tonelada métrica y al llegar al Puerto
del Callao se verificó un faltante de treinta y dos con cuatrocientos cuarenta milésimas de tone-
ladas métricas (32.440 TM) según consta en el certificado de peso expedido por el terminal
portuario del Callao que corresponde al expediente 14462, toda vez que se descargó cinco mil
ochocientos dieciséis con quinientos sesenta milésimas de toneladas métricas (5,816.560 TM) en
lugar de cinco mil ochocientos cuarenta y nueve toneladas métricas (5,849.00 TM) de torta de
soya. (iii) Por último, señala que adquirió de Bunge Latín American un cargamento de diecisiete
mil quinientos noventa y uno toneladas métricas (17,591.00 TM) de maíz amarillo duro a granel
por un valor costo y flete de doscientos setenta y seis con veintiocho dólares por tonelada métri-
ca y al llegar al Puerto del Callao, se verifico un faltante de ciento veintiséis con sesenta y ocho
centésimas de toneladas métricas (126.68 TM) según consta en los certificados de peso expedidos
por el terminal portuario del Callao y que corresponden a los expedientes 14461 y 14906, toda
vez que se descargó diecisiete mil cuatrocientos sesenta y cuatro con treinta y dos centésimas de
toneladas métricas (17,464.32 TM) en lugar de diecisiete mil quinientos noventa y uno toneladas
métricas (17,591.00 TM) de maíz. Solicita por los faltantes anotados la suma dineraria objeto de
la demanda. 2. Contestación de la demanda: Mediante escrito de fojas doscientos Agencia
Marítima Tridentum S.A.C. contesta la demanda señalando que es falso lo expresado por la ac-
cionante en el sentido que se haya embarcado exactamente la cantidad de cinco mil toneladas
métricas (5,000.00 TM) de frijol de soya a granel y cinco mil ochocientos cuarenta y nueve to-
neladas métricas (5,849.00 TM) de torta de soya a granel, pues de la simple lectura de los cono-
cimientos de embarque números 3, 2 y 1, pruebas presentadas por la demandante se señala que:
“se desconoce el peso, dimensiones, calidad, condición, contenido y valor de la mercancías” por lo que
no se puede llegar a la conclusión que efectivamente se embarcó exactamente dicha cantidad;
agrega que de la lectura de los conocimientos de embarque se desprende que el que estuvo a
cargo de dichas labores fue Bunge Latín American LLC, por lo que en caso de haber un faltante de
mercadería tal hecho seria de plena responsabilidad del embarcador de la mercadería. Además
indica que en lo que se refiere a las reclamaciones que no superan el uno por ciento (1%) del
interés que el demandante tenia en el cargamento, se debió aplicar la disposición del articulo
861 del Código de Comercio, consecuentemente si las diecisiete mil quinientos noventa y uno
toneladas métricas (17,591.00 TM) de maíz amarillo duro a granel equivalen al cien por ciento
(100%) del cargamento, las ciento veintiséis con sesenta y ocho centésimas (126.68 TM) presun-
tamente faltantes equivalen al cero punto setenta y dos por ciento (0.72%), este porcentaje es
menor al uno por ciento (1%) del interés que el demandante tiene en el cargamento. 3. Puntos
controvertidos: Conforme aparece a fojas doscientos cuarenta y siete, se fijaron los puntos con-
trovertidos siguientes: - Determinar si las demandadas Cotrader One LTD, Dockendale Shipping Co
Ltd y Clipper Group Management LTD le adeudan a la demandante la suma de US$ 78,975.00
(setenta y ocho mil novecientos setenta y cinco con 00/100 Dólares Americanos), a consecuencia
del faltante en los cargamentos de frijol de soya, torta de soya y maíz amarillo duro a granel que
fueron transportados por la nave Bossclip Trader al puerto del Callao. - Determinar si, de ampa-
rarse la pretensión principal, las demandadas se encuentran obligadas al pago de los intereses
que se generen a la fecha del pago efectivo, así como al pago de cotas y costos del proceso. 4.
Resolución de primera instancia: Culminado el trámite correspondiente, el Juez mediante
Resolución número trece de fojas cuatrocientos nueve, su fecha dieciocho de noviembre de dos
mil diez, declaró fundada la demanda señalando: - De las constancias certificadas de peso expe-
didas por la Empresa Nacional de Puertos ENAPU antes referidas, se acreditan los faltantes de
frijol de soya, de torta de soya y de maíz amarillo duro a granel, demostrándose que el naviero
entregó la carga con desfalco, incumpliendo con lo dispuesto por el artículo 638 del Código de
Comercio. - Es obligación principal en el contrato de transporte, la entrega de las mercaderías en
las mismas condiciones en que son recibidas al momento del embarque en el puerto de origen.
Así se debe precisar que los faltantes a la descarga no son avería simple por no estar comprendi-
dos en los artículos 819 y 822 del Código de Comercio. De aceptarse la tesis esgrimida por la
demandada, se corre el riesgo de un supuesto abuso de derecho puesto que de considerarse el
faltante de mercadería como avería simple se aplicaría el supuesto del artículo 861 del Código
de Comercio con lo cual libremente se podría disponer del uno por ciento (1%) de las mercade-
rías en perjuicios de los compradores. - Los faltantes a la descarga es producto del cumplimiento
parcial o defectuoso por parte del capitán del buque de la obligación de entrega de la mercade-
ría transportada sin desfalco a los consignatarios de la carga, prevista en el artículo 638 del Có-
digo de Comercio. 5. Fundamentos de la apelación: Mediante escrito de fojas cuatrocientos
veinticuatro la demandada Agencia Marítima Tridentum S.A.C. interpone recurso de apelación
contra la sentencia de primera instancia, señalando que: - El juzgado erróneamente ha conside-
rado a los certificados de peso emitidos por ENAPU como medios probatorios que sirven para
afirmar, acreditar e imputar directamente su responsabilidad sobre los alegados faltantes, soste-
niendo indirectamente que los mismos habrían ocurrido durante el transporte marítimo, cuando
no resultan ser documentos idóneos a efectos de acreditar responsabilidad en los alegados fal-
tantes, porque no se ha tomado en consideración que las balanzas en las cuales se pesan los
camiones no se encuentran en el muelle del puerto de descarga, el cual es el lugar donde termi-
na la responsabilidad del transportista marítimo conforme lo dispone el artículo 632 del Código
de Comercio y los Convenios Internacionales. - No se ha tomado en consideración que la custo-
dia del cargamento, después de que es descargado, es asumida por el transportista terrestre. Es
durante el periodo de custodia que la carga es trasladada desde el muelle de descarga hasta el
lugar donde es pesada y dicho pesaje es realizado mientras la carga se encuentra bajo la custodia
del transportista terrestre. - Los certificados de peso emitidos por ENAPU no pueden acreditar
que el menor peso registrado haya sido de responsabilidad del transportista marítimo, pues el
faltante puede haber ocurrido durante la custodia del transportista terrestre o que se haya em-
barcado menor carga que la declarada al transportista. - Se ha interpretado erróneamente el
artículo 822 del Código de Comercio, el cual contiene el concepto de avería simple o particular,
pues en el presente caso el juzgado no ha considerado que los alegados faltantes de carga se
encuentran regulados en el mencionado artículo y que, en consecuencia, aplicando el artículo
861 del Código de Comercio, la presente demanda debió ser declarada improcedente. - Se en-
cuentra expresamente normado por el artículo 822 del Código de Comercio, que constituyen
averías simples o particulares, por regla general, todos los gastos y perjuicios causados en el
buque o en su cargamento que no hayan redundado en beneficio y utilidad común de todos los
interesados. Las pérdidas o mermas de mercaderías constituyen daños o perjuicios sufridos por
el cargamento; por lo que se encuentran dentro del concepto de averías simples o particulares
establecidos en el artículo 822 del Código de Comercio. - Se ha inaplicado el artículo 861 del
Código de Comercio, pues conforme este artículo, las demandas sobre averías no serán admitidas
si no excedieran del uno por ciento (1%) del afecto averiado si fueran simples. 6. Sobre la ex-
cepción de convenio arbitral: A fojas ciento catorce del cuaderno de excepción, la demandada
Agencia Marítima Tridentum S.A.C., formuló excepción de convenio arbitral señalando que los
conocimientos de embarque, en los anexos 1-B y anexo 1-L, aparecen incompletos, pues clara-
mente se señalan que: “las condiciones de transporte se consignan al reverso” y el demandante no
las ha adjuntado, siendo que en dicho conocimiento de embarque aparece una cláusula que
señala: “todos los términos, condiciones, excepciones, libertades incluyendo la cláusula de arbitraje del
contrato de fletamento de fecha diecinueve de marzo de dos mil ocho y cualquier adenda de dicho
Civil Arbitraje
documento se consideran como parte integrante del presente”, por lo que el demandante debe
respetar dicha cláusula contractual y someter la presente reclamación a arbitraje de acuerdo a lo
pactado. Mediante escrito de fojas ciento treinta y siete la demandante absuelve la excepción
formulada, señalando que la demandada ha propuesto excepción de convenio arbitral porque
en los conocimientos de embarque emitidos en el puerto Rosario - Argentina por un agente bajo
autorización del capitán de la M/N BOSSCLIP TRADER, sin intervención de la empresa, se remite
a un contrato de flotamiento de fecha diecinueve de marzo de dos mil ocho que el excepcionan-
te no ha presentado, no pudiendo determinarse si en verdad este existe y de existir quien ha sido
parte del mismo. Mediante resolución número tres su fecha veintiséis de enero de dos mil diez
de fojas ciento sesenta, se declaró infundada la excepción formulada al señalarse que no hay
documento que pruebe la existencia de un convenio arbitral debidamente suscrito por las partes.
Dicha resolución fue apelada por la demandada a fojas ciento setenta y dos, habiéndosele con-
cedido la apelación sin efecto suspensivo y con la calidad de diferida. 7. Resolución de segun-
da instancia: Elevados los autos en virtud del recurso de apelación interpuesto, la Sala Superior
revocó la resolución de primera instancia y, reformándola, declaró fundada la excepción de
convenio arbitral formulada por Agencia Marítima Tridentum S. A.C.; en consecuencia nula la
sentencia y nulo todo lo actuado. La Sala Superior expresa: (i) que el conocimiento de embarque
o Bill of Lading es un documento propio del transporte marítimo que se utiliza como contrato de
transporte de las mercancías en un buque cuya finalidad es proteger al cargador y al consignata-
rio de la carga frente al naviero, dando confianza a cada parte respecto al comportamiento de la
otra. (ii) Por su parte, el contrato de fletamento se encuentra referido al transporte marítimo de
mercancías ajenas efectuado en interés de terceros, por tanto, es esencial el contrato de transpor-
te marítimo. (iii) La norma legal sobre la materia establece que tanto el propietario del buque
como el naviero, responden frente a los actos del transportista, conforme es de verse de los artí-
culos 599 y 600 del Código de Comercio, por tanto, se encuentran vinculados por los Conoci-
mientos de Embarque números 01, 02 y 03, que tienen incluida la cláusula arbitral y en donde
se señala: “todos los términos, condiciones, libertades incluyendo la cláusula de arbitraje del contrato
de Fletamento de fecha diecinueve de marzo de dos mil ocho (...)”, se extiende también a quienes
pretendan derivar derechos o beneficios del contrato, como es el consignatario de la carga que
para el caso resulta ser San Fernando S.A., ello por disposición del artículo 14 de la Ley de Arbi-
traje, Decreto Legislativo número 1071, aún cuando no sea signatario, sino que resulta suficien-
te haber consentido con el arbitraje al ser parte de los acuerdos del transporte de la mercancía.
III. RECURSO DE CASACIÓN: La Suprema Sala mediante la resolución de fecha veintiuno de
enero de dos mil trece ha declarado procedente el recurso de casación interpuesto por la deman-
dante San Fernando S.A., por la infracción normativa por inaplicación del artículo 1390 del
Código Civil, incorrecta interpretación del artículo 14 de la Ley de Arbitraje, e inaplicación del
inciso 2° del artículo 15 de la Ley de Arbitraje; al haber sido expuestas las referidas infracciones
con claridad y precisión señalándose además la incidencia de ellas en la decisión impugnada. IV.
CUESTIÓN JURÍDICA A DEBATIR: En el presente caso, la cuestión jurídica en debate radica,
sustancialmente, en determinar si el caso debe ser conocido en sede arbitral. V. FUNDAMENTOS
DE ESTA SALA SUPREMA: Primero.- Que, el arbitraje es un mecanismo extrajudicial de solución
de conflictos, mediante el cual las partes se someten a la decisión de un tercero, llamado árbitro,
a fin de que solucione controversias de libre disposición, conforme a derecho. Tal instituto ha sido
admitido en el país, de allí que el artículo 139 inciso 1° de la Constitución Política del Estado
refiera: “Son principios y derechos de la función jurisdiccional: 1. La unidad y exclusividad de la función
jurisdiccional. No existe ni puede establecerse jurisdicción alguna independiente, con excepción de la
militar y la arbitral”. Segundo.- Que, sin embargo, el arbitraje no prospera per se, pues lo general
es que las controversias existentes sean resueltas por la autoridad judicial; por consiguiente, sólo
la existencia de un Convenio Arbitral permite que el asunto sea conocido por el Tribunal Arbitral.
Tercero.- Que es, por ello, que el artículo 13 de la Ley de Arbitraje (Decreto Legislativo número
1071) indica el contenido y la forma que debe tener el Convenio Arbitral, el artículo 14 prescri-
be la extensión del Convenio Arbitral y el artículo 15 las presunciones referidas a relaciones jurí-
dicas estándar. Cuarto.- Que, en el presente caso, queda claro al Tribunal Supremo que no ha
existido un acuerdo expreso suscrito por San Fernando sobre Convenio Arbitral. Aunque prima
facie ello supondría descartar la sede arbitral para el conocimiento del conflicto, ello no es así,
porque como se ha señalado en el considerando anterior, siendo práctica común en el derecho
comercial la referencia otro tipo de documentos, el artículo 13.2 y 13.6 de la Ley de Arbitraje
señalan: 13.2. “El convenio arbitral deberá constar por escrito. Podrá adoptar la forma de una
cláusula incluida en un contrato o la forma de un acuerdo independiente”. Y el 13.6: “La refe-
rencia hecha en un contrato a un documento que contenga una cláusula de arbitraje constituye un
convenio arbitral por escrito, siempre que dicha referencia implique que esa cláusula forma parte del
contrato”. Quinto.- Que, por consiguiente, como ha señalado Fernando Mantilla Serrano: “la Ley
de Arbitraje se muestra flexible con respecto al requisito de que el convenio arbitral conste “por escrito”.
Este requisito queda cumplido a través de una comunicación electrónica que las partes hagan por medio
de “mensaje de datos”, de un intercambio de escritos de demanda y contestación o, incluso, mediante
una referencia en un contrato a un documento que contenga una cláusula compromisoria1”, de lo que
se colige que el acuerdo arbitral ya no tiene que constar en un documento ni tiene que estar
firmado por las partes. Sexto.- Que, es esta última forma, la que se ha aplicado en el presente
caso. En efecto, todos los conocimientos de embarque (fojas siete, diecisiete y veintisiete), es
decir, los mismos documentos con los que se acredita el cargamento y que debían utilizarse con
los contratos de fletamento, tal como se expresa en la parte superior central de los referidos
instrumentos, señalan: “Todos los términos, condiciones, excepciones, libertades, incluyendo la cláu-
sula de arbitraje del Contrato de Fletamento de fecha 19 de marzo del 2008 y cualquier Adenda de
dicho documento se considerarán como parte integrante del presente”. Hay, por lo tanto, una cláu-
sula remisoria arbitral que conforma el contrato de transporte marítimo en total y cuyo conoci-
miento era posible a las partes. Sétimo.- Que, en esa perspectiva, la recurrente menciona que
como los conocimientos de embarque son contratos de adhesión no ha habido un real consen-
timiento de parte de los consignatarios de la carga para someterse al arbitraje, pues fue incorpo-
rada por el naviero para oponerla a dichos consignatarios quienes no prestan, celebran, ejecutan
ni participan activamente en el contrato de fletamento. Sin embargo, tales expresiones no se
condicen con las prácticas comerciales ni con lo dispuesto en el artículo 15 de la Ley de Arbitra-
je, norma que los convenios pueden estar: “en cláusulas generales de contratación o contratos por
adhesión” sino además establece dos requisitos para su exigibilidad: (i) que hayan sido conocidos,
o hayan podido ser conocidos por quien no los redactó; y, (ii) que para tal efecto se tenga en
cuenta una diligencia ordinaria. Siendo así las cosas nada hay que evite que las cláusulas arbitra-
les estén contenidas en contratos de adhesión, a lo que debe agregarse que precisamente por
constituir estos contratos-tipo (como además lo reconoce la propia impugnante en su recurso de
casación) la posibilidad que tenga conocimiento de la cláusula arbitral es plena, bastando para
ello la diligencia común del comerciante marítimo. Por lo demás, ninguna prueba se ha aportado
del referido desconocimiento. Octavo.- Que, por último, la recurrente indica que el artículo 14
de la Ley de Arbitraje señala que en éste prima la libre voluntad y el consentimiento de las par-
tes. Tal afirmación es cierta y la Sala Superior no la ha puesto en duda; sólo se ha limitado a se-
ñalar que conforme a la referida norma el convenio arbitral: “se extiende también a quienes pre-
tendan derivar derechos o beneficios del contrato”. No hay, por tanto, vulneración del referido
dispositivo, más aún, si como se ha dicho en considerandos precedentes, el conocimiento de
embarque y el contrato de fletamento forman un todo que establece las obligaciones a las que
libremente se sometieron las partes. Noveno.- Que, por tanto, no se advierte infracción norma-
tiva alguna referida a las causales denunciadas. VI. DECISIÓN: Por estos fundamentos y de
conformidad con el artículo 397 del Código Procesal Civil: Declararon INFUNDADO el recurso
de casación de fojas quinientos treinta y tres, interpuesto por San Fernando S.A.; en consecuencia
NO CASARON la sentencia de vista de fecha diecisiete de agosto de dos mil doce, obrante a
fojas quinientos veinticuatro; DISPUSIERON la publicación de la presente resolución en el Diario
Oficial El Peruano conforme a ley; en los seguidos por San Fernando S.A. contra Cotrader One
LTD. y otros, sobre obligación de dar suma de dinero. Interviniendo como ponente el Señor Juez
Supremo Calderón Puertas.-
SS.
Almenara Bryson / Huamaní Llamas / Estrella Cama / Rodríguez Chavez / Calderón Puertas
INMOBILIARIA
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COMENTARIO DE JAVIER ANAYA CASTILLO: Alcances y efectos de la licencia de edificación
JURISPRUDENCIA
396
(Comentario a la Resolución N° 2093 - 2011 – SUNARP-TR-L)
NOS PREGUNTAN Y CONSULTA: Alcances de la intervención de copropietarios en la declaratoria
CONTESTAMOS
420
de fábrica y en la independización
¿Se puede trasladar las externalidades negativas derivadas de problemas no
RESEÑA DE
JURISPRUDENCIA
previstas por la inmobiliaria a los consumidores? (Resolución N.° 191-2012/ 422
SC2-INDECOPI)
COMENTARIO DE JURISPRUDENCIA
Doctrina práctica
Comentario a la
Resolución N° 2093-
Alcances y efectos de la licencia de
2011–SUNARP-TR-L edificación
I. Introducción
II. Materia controvertida
SUMARIO
CONTEXTO NORMATIVO
1 GARCÍA DE ENTERRÍA, Eduardo y PAREJO ALFONSO,
Luciano. Lecciones de Derecho urbanístico, Ed. Civitas, Ley de regulación de Habilitaciones Urbanas y
Madrid, 1981, p. 429. de Edificaciones, Ley N.° 29090: Artículo 29.1
2 En torno a la regulación existente en nuestro ordena- Reglamento de Verificación Administrativa y
miento sobre Derecho urbanístico, resulta pertinente Técnica, aprobado por Decreto Supremo N.º
lo señalado por Gonzales Barrón: “Es de lamentar, 026-2008-VIVIENDA.
por tanto, que en nuestro país no exista una Ley
General sobre Suelo Urbano, en la cual se examinen
los distintos problemas jurídicos vinculados con la PALABRAS CLAVE
ordenación del territorio, y más bien las normas exis-
tentes se limiten a regular los distintos procedimientos Certificado de parámetros urbanísticos /
administrativos. Es decir tenemos leyes con estricto Licencia de edificación / Procedimiento de
contenido adjetivo, pero sin que en ellas se tome en verificación técnica.
cuenta los principios sustantivos del fenómeno del
urbanismo.” GONZÁLES BARRÓN, Gunther. Derecho
urbanístico. Jurista Editores: Lima, 2011. p. 298.
3 El Derecho Urbanístico puede definirse como el dentro de los cuales el ejercicio de facultades
“conjunto de normas reguladoras de los procesos de or- y atribuciones de los municipios no pueden
denación del territorio y su transformación física a través
de la urbanización y la edificación. Son, por tanto, objeto de ninguna manera extralimitarse en perjuicio
de su regulación potestades públicas muy claras, como de los administrados.
la de ordenar el conjunto del territorio, la urbanización
y la intervención administrativa en el ius aedificandi, es En atención a ello y a propósito de una reso-
decir, en el derecho del propietario de transformar el lución del Tribunal Registral, cuyo título ape-
propio fundo mediante la construcción de edificaciones.” lado está referido a la solicitud de inscripción
PARADA, Ramón. Derecho administrativo III. Bienes
Públicos. Derecho Urbanístico, Madrid, Marcial Pons
de una resolución municipal que declara la
Ediciones Jurídicas, SA, 1991. De otro lado, Castro nulidad de una licencia de edificación, anali-
Pozo resalta que “para la mayoría de autores cualquier zaremos tres temas puntuales vinculados con
concepto que se ofrezca de Derecho Urbanístico ha de este tipo de licencias.
sustentarse en la idea de plan urbanístico como elemento
esencial de esta rama del derecho, sin cuya existencia el En primer lugar, evaluaremos cuáles serían los
Derecho Urbanístico ofrecería irregularidades e injusticias efectos que tendría la modificación de una
en su aplicación” CASTRO POZO, Hildebrando. Derecho
urbanístico, Editorial Jurídica Grijley, Lima, 2007, p. ordenanza municipal que sirvió de sustento
59. para la expedición de un certificado de pará-
Civil Inmobiliaria
metros urbanísticos y la posterior obtención dilucidar la segunda sala de dicho cuerpo co-
de una licencia de edificación. Es decir, se legiado es si constituye acto previo necesario
podría extinguir la licencia en la medida que o adecuado para la inscripción de la nulidad
sea disconforme con la nueva ordenación de una licencia de edificación, la anotación de
urbanística prevista en la nueva ordenanza dicha licencia cumpliéndose con los requisitos
municipal. elegidos para la declaratoria de fábrica.
En segundo lugar, si bien la paralización tempo- Cabe señalar que con el título venido en grado
ral de las obras no ha sido un aspecto abordado de apelación se solicita la inscripción de la Re-
en la resolución del Tribunal Registral que es solución de la Gerencia de Desarrollo Urbano
objeto de comentario, pero atendiendo a la N.º 49 emitida el 05/04/2011 por la Munici-
trascendencia y recurrencia de este tema, palidad Metropolitana de Lima, que declara
formularemos un breve comentario de los la nulidad de la Licencia de Construcción N.º
casos en que las municipalidades vienen dis- 209-10-GDU/MDU emitida el 26/10/2010
poniendo en forma indebida la paralización por la Municipalidad Distrital de Surquillo,
temporal de las obras de edificación. De respecto del predio constituido por el lote
antemano, nos inclinamos por señalar que acumulado 7 y 8 de la Manzana B, ubicado
el exceso cometido por las municipalidades frente a la Avenida Uno de la Urbanización
se puede deber a la transgresión del procedi- Jorge Chávez del distrito de Surquillo.
miento de Verificación Técnica previsto en el
Decreto Supremo N.º 026-2008-VIVIENDA 3. Posición del registrador
que aprueba el Reglamento de Verificación
Administrativa y Técnica. Luego de efectuar la calificación correspon-
diente, la Registradora Pública del Registro
Finalmente, y ya desde una mirada del Dere- de Predios de la Zona Registral N.° IX – Sede
cho registral, examinaremos si la inscripción Lima, Mariella Aracelly Uribe García, denegó
de una licencia de edificación constituye un la inscripción por las siguientes razones:
acto previo necesario para la inscripción de
la resolución que declara su nulidad. Es decir, 1. La resolución de Gerencia de Desarrollo
si bien el artículo 29.1 de la Ley N.° 29090, Urbano N.° 49-2011 que se adjunta
Ley de regulación de Habilitaciones Urbanas declara la nulidad de la Resolución de Li-
y de Edificaciones, establece que la licencia cencia de Construcción N.° 209-10-GDU/
de edificación constituye un acto registrable MDS de fecha 20.10.2010, a favor de la
bajo la forma de predeclaratoria de fábrica, empresa C&V Inversiones Inmobiliaria
la cuestión por dilucidar sería determinar S.A., para la construcción de un edificio
si resulta procedente la inscripción de una multifamiliar.
resolución municipal que dispone la nulidad 2. Sin embargo, en la partida 12623508
de una licencia de edificación que no está del Registro de Predios materia de su
previamente inscrita. rogatoria, se advierte que el propietario
C&V Inversiones Inmobiliaria SA no ha
2. Materia controvertida registrado ninguna construcción de un
Como ya se ha señalado, en la resolución edificio multifamiliar en virtud a la Re-
N.° 2093-2011-SUNARP-TR-L del Tribunal solución de Licencia de Construcción N°
Registral4, la cuestión principal que intenta 209-10-GDU/MDS de fecha 26.10.2010
cuya nulidad ha sido declarada.
4 El Tribunal Registral es el órgano de la Sunarp con 3. En tal sentido, considera que la solicitud
competencia nacional que conoce y resuelve en se- formulada no constituye acto inscribible
gunda y última instancia administrativa los recursos en el Registro de Predios; por lo que se
de apelación interpuestos contra las observaciones,
tachas y otras decisiones emitidas por los Registrado- procede a formular la tacha sustantiva del
res y Abogados Certificadores. presente título.
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en el caso de las edificaciones superpuestas en la zonificación, a los procesos de habilitación y
el plano vertical es la declaratoria de fábrica; subdivisión y a los requisitos y limitaciones que
o, el caso de la inscripción de la transferencia establecen las disposiciones respectivas. En tal
de lotes que forman parte de una habilitación sentido, la zonificación y los parámetros urba-
urbana cuyo acto previo es la recepción de nísticos y edificatorios constituyen restricciones
obras de habilitación urbana. a la propiedad predial que no son impuestas
3. Sobre la base de dicho principio registral es que de manera convencional o voluntaria, sino que
se impone como obligación de las instancias vienen impuestas por ordenanzas municipales,
registrales “Confrontar la adecuación de los razón por la que constituyen restricciones
títulos con los asientos de inscripción de la legales que para ser oponibles a terceros no
partida registral en la que se habrá de practicar requieren de inscripción registral conforme se
la inscripción, y, complementariamente, con los ha indicado en el punto 4 precedente.
antecedentes registrales referidos a la misma, Si bien conforme a la Ley 29090 y su regla-
sin perjuicio de la legitimación de aquéllos. mento, determinadas restricciones legales a la
(...)”. Literal a) del artículo 32 del Reglamento propiedad predial pueden acceder a la partida
General de los Registros Públicos. Es decir, en el del predio, tal como ocurre con los documentos
marco de la calificación registral de los títulos, previos6 constituidos por el certificado de zo-
las instancias registrales deberán exigir que nificación y vías o el certificado de parámetros
se cumpla con el principio registral de tracto urbanísticos y edificatorios, estamos ante una
sucesivo, tanto en la estricta concatenación de excepción pues como queda indicado, las res-
derechos como en su versión del acto previo tricciones legales a la propiedad no requieren
necesario o adecuado. de inscripción registral para ser oponibles a
Como ha quedado establecido, en el presente terceros.
caso se solicita la inscripción de la declaración 6. Respecto al argumento de apelante en el
de nulidad de una licencia de construcción; sin sentido que si no se inscribe la nulidad de la
embargo, no consta registrado el acto previo resolución de licencia de edificación, el propie-
necesario o adecuado para la inscripción de la tario del predio podrá inscribir la declaratoria
nulidad, esto es, la licencia de edificación que es de fábrica, supuesto en el cual se tornaría
declarada nula, tal como lo exige el numeral VI innecesaria la inscripción a la restricción de la
del título Preliminar del Reglamento General de propiedad predial, debe reiterarse que las res-
los Registros Públicos. Cabe precisar que confor- tricciones legales para ser oponibles a terceros
me al artículo 29.1 de la Ley 290905 la licencia no requieren de inscripción.
de edificación constituye un acto registrable
bajo la forma de predeclaratoria de fábrica, A ello debe agregarse que la inscripción en
habiéndose precisado en el artículo 50C del el registro de la declaratoria de fábrica de
Reglamento de Inscripciones del Registros de edificaciones nuevas no se realiza por la sola
Predios los requisitos para el acceso al registro declaración del propietario o del ingeniero
de este acto. civil o arquitecto responsable de la edificación,
sino que se requiere de la aprobación del ente
4. El apelante argumenta que la inscripción se competente para otorgar los licencias y la
sustenta en que la declaración de nulidad conformidad de obra de las edificaciones, esto
de la licencia de edificación constituye una es, la municipalidad distrital respectiva en cuya
restricción al derecho de propiedad y que por jurisdicción se encuentra el predio. En efecto, el
ello, se encuentra perfectamente habilitada la primer párrafo del artículo 6 de la Ley 29090
inscripción de dicho acto. establece que “Ninguna obra de habilitación
5. Conforme a lo previsto por el artículo 957 del urbana o de edificación podrá construirse sin
Código Civil, la propiedad predial está sujeta a sujetarse a las normas urbanísticas establecidas
Civil Inmobiliaria
de ordenación urbana, de modo tal que se 2. El orden jurídico superior, dentro del cual se
determina en cada zona del territorio el uso haya inmerso el Municipio porque forma y actúa
del suelo, la intensidad de uso de ese suelo y dentro del Estado, no tienen una vida separada e
la tipología de construcción9. independiente del Estado, por lo cual tiene que
ajustarse a ese orden jurídico superior.”
Conforme a ello, si bien el derecho a edificar
(ius aedificandi) es una potestad inherente al Por su parte, el Tribunal Constitucional ha
dominio del suelo, ello no constituye impedi- señalado que los Gobiernos Locales no son au-
mento para la imposición de límites o deberes tárquicos y que sus potestades se encuentran
urbanísticos sustanciales, con la finalidad de sometidas a la Ley. Así en la sentencia de 21 de
ordenar racionalmente el espacio físico. En mayo de 2010, Exp. N.° 0003-2009-PCCTC-
ese escenario, como describe Carceller Fer- Lima, ha señalado en el fundamento 7 que:
nández10, para hacer efectiva la facultad edi- “(…) No obstante, si bien los gobiernos locales
ficatoria se necesita recabar una autorización tienen la capacidad de autogobierno para des-
otorgada por la municipalidad en el ámbito envolverse con libertad y discrecionalidad en
de su competencia, con el objeto de realizar los asuntos de su competencia, queda claro que
cualquier obra de edificación. esta debe desarrollarse de conformidad con la
estructura general de la cual en todo momento
Sin embargo, debe tenerse presente que la
se forma parte, y que está representada no solo
autonomía municipal no es ilimitada11, pues
por el Estado sino por el ordenamiento jurídico
existe un marco al cual circunscribirse, es
que rige a este. En ese sentido, debe entenderse
decir, límites dentro de los cuales el ejercicio
que dicha autonomía debe ser ejercida dentro
de facultades y atribuciones de los municipios
del marco constitucional y legal.”
no pueden de ninguna manera extralimitarse
en perjuicio o desmedro de los administrados. En el caso particular de los procedimientos ad-
ministrativos de otorgamiento de licencia de
Como señala Godos Rázuri12, existen dos as- habilitación urbana y de edificación, resulta
pectos sustanciales que delimitan la autonomía oportuno lo señalado por Gonzales Barrón13 al
municipal: “1. El marco legal, conformado por la comentar el artículo 6 de la Ley N.º 2909014:
Constitución y las leyes; los poderes, atribuciones “Esta norma establece de manera expresa el
y competencias de los municipios se ejercen carácter reglado de esta autorización aun cuando
dentro de la Ley, esto es dentro del marco legal. en forma excepcional la administración municipal
podrá gozar de relativa discrecionalidad para
9 A esta técnica urbanística se la denomina “zonifica- resolver la autorización del proyecto edificatorio
ción” y delimita con precisión cada “zona de califi- en los casos en que no se hayan aprobado pre-
cación”. viamente los planes urbanos; sin embargo, esa
10 CARCELLER FERNÁNDEZ, Antonio. El derecho y la discrecionalidad no autoriza en ningún caso que
obligación de Edificar, Montecorvo, Madrid 1965, p.
163. se actúe en forma irracional o arbitraria, pues
11 En cuanto a los límites de la competencia municipal en un Estado Constitucional de Derecho rige el
se ha señalado que: “(…) la referida autonomía política principio general de interdicción de la arbitrarie-
que ostenta cada gobierno local no debe ser entendida ni dad y, en consecuencia, todas las decisiones son
interpretada como superioridad política, es decir, el hecho
de que las ordenanzas municipales gocen de rango de ley
motivadas, razonadas y razonables.”
no legitima a los gobiernos locales para que impongan, a
sus realidades particulares, criterios distintos y contradic-
torios a las normas técnicas generales y cuya aplicación y
cumplimiento debe ser homogéneo e igual para todo el
territorio nacional (…)” CÉSPEDES ZAVALETA, Adolfo. 13 GONZÁLES BARRÓN, Gunther. Ob. cit. p. 298.
“Alcances de las funciones municipales exclusivas y 14 Artículo 6.- “Ninguna obra de habilitación urbana
compartidas en materia urbanística”. En: Actualidad o de edificación podrá construirse sin sujetarse a las
Jurídica, Gaceta Jurídica, T. 152, Lima, 2006, p. 156. normas urbanísticas establecidas en los planes de
12 GODOS RÁZURI, Víctor. Derecho Municipal, Idemsa, desarrollo urbano y/o acondicionamiento territorial
Lima, 2002, pp. 345 y 346. y/o planeamiento integral.”
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corresponda, se encuentran obligadas a poner a tanto para los administrados como para las
disposición, de manera gratuita y de libre o fácil entidades otorgantes, quienes están obli-
acceso o en el portal web de la municipalidad, gados a cumplir con lo dispuesto en dichos
toda información referida a la normativa urbanís- documentos.
tica, en particular los parámetros urbanísticos y Por otro lado, con relación a la procedencia
edificatorios, quedando a opción del interesado o no de un control posterior a un Certificado
tramitar el respectivo certificado. (…)”. Sin em- de Parámetros Urbanísticos otorgado con
bargo, si bien la información referida a la nor- control previo por la municipalidad, corres-
mativa urbanística se encuentra a disposición ponde señalar que si bien dicho certificado
gratuita del administrado, consideramos que constituye un documento previo emitido por
si se sería necesario tramitar la expedición de la Municipalidad en el cual se lleva a cabo
dicho certificado para su inscripción registral una evaluación previa, lo cierto es que ello no
o para solicitar la obtención de la licencia de impide a que la misma Municipalidad pueda
edificación correspondiente. posteriormente revisar la legalidad del mismo
El Certificado de Parámetros Urbanísticos en un control posterior.
y Edificatorios constituye un documento Ello se debe a que en virtud de lo dispuesto
emitido por las municipalidades donde se en el numeral 5 del artículo 1020 de la Ley
especifican los parámetros de diseño que Nº 29090, la verificación administrativa del
regulan el proceso de edificación sobre un expediente, posterior al otorgamiento de la
predio urbano, el cual contiene –entre otros- licencia se realiza para la modalidad B, C y D
la especificación de las alturas máximas de de acuerdo con lo previsto en el artículo 3221
un inmueble18.
Conforme a ello, dado que las municipalida- 20 5. Verificación administrativa:
des son quienes los emiten, debe entenderse La Verificación Administrativa del expediente, pos-
que se trata de plenos actos administrativos terior al otorgamiento de la licencia se realiza en los
siguientes supuestos:
cuyo contenido obliga a la misma Adminis- a. En el caso del numeral 1, la Verificación Adminis-
tración a respetar su contenido. De ahí que trativa, a cargo de la municipalidad respectiva,
se establezca expresamente en el artículo 14 se realiza sobre el cien por ciento (100%) de los
de la Ley Nº 2909019 que el contenido de expedientes presentados.
b. Para los numerales 2, 3 y 4, la Verificación Ad-
los referidos documentos previos (tales como ministrativa se realiza de acuerdo a lo previsto
el Certificado de Parámetros Urbanísticos y en el artículo 32 de la Ley núm. 27444, Ley del
Edificatorios), genera derechos y deberes Procedimiento Administrativo General.
21 Artículo 32.- Fiscalización posterior
32.1 Por la fiscalización posterior, la entidad ante
18 Artículo 14.- Información o documentos previos la que es realizado un procedimiento de apro-
“(...) 2. Certificado de Parámetros Urbanísticos y Edifica- bación automática o evaluación previa, queda
torios obligada a verificar de oficio mediante el sistema
El Certificado de Parámetros Urbanísticos y Edificatorios es del muestreo, la autenticidad de las declaracio-
el documento emitido por las municipalidades distritales nes, de los documentos, de las informaciones
y provinciales o por la Municipalidad Metropolitana de y de las traducciones proporcionadas por el
Lima en el ámbito del Cercado, de sus respectivas juris- administrado.
dicciones, donde se especifican los parámetros de diseño 32.2 La fiscalización comprende no menos del diez
que regulan el proceso de edificación sobre un predio por ciento de todos los expedientes sujetos a
urbano, y deberá contener los siguientes aspectos: (...) f. la modalidad de aprobación automática, con
Altura máxima y mínima de edificación expresada un máximo de 50 expedientes por semestre,
en metros. (...)” (El subrayado es nuestro). pudiendo incrementarse teniendo en cuenta
19 Artículo 14.- Información o documentos previos el impacto que en el interés general, en la
“(...) El contenido de la información o documentos economía, en la seguridad o en la salud ciuda-
previos, señalados en el presente artículo, implica su dana pueda conllevar la ocurrencia de fraude
cumplimiento obligatorio por parte de las entidades o falsedad en la información, documentación
otorgantes y de los solicitantes, por cuanto genera o declaración presentadas. Dicha fiscalización
deberes y derechos (...)” (El subrayado es nuestro). deberá efectuarse semestralmente de acuerdo
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sados en la propia licencia. Conforme a ello, la Conforme a ello, con la finalidad de no afectar
Licencia de Edificación aprobada mediante re- otros derechos fundamentales, el principio de
solución municipal, otorga al administrado el Seguridad Jurídica debe garantizar el mante-
derecho a edificar o construir y desarrollar, nimiento del statu quo, de forma tal que al
en el predio sobre el cual recae el proyecto. individuo se le asegure el mantenimiento de
su situación jurídica en la medida en que no
De otro lado, deberá emitirse en un plazo
concurran las condiciones que la norma haya
máximo de cinco (5) días útiles en cuanto su
previsto para la variación de la misma.
vigencia temporal la licencia de edificación
tiene una vigencia de 36 meses, prorrogable Dicho esto, la seguridad jurídica24 debe per-
por 12 meses adicionales por única vez. La mitir a las personas tener certidumbre, sobre
prórroga se solicita treinta días antes del las reglas que una autoridad administrativa
vencimiento de la licencia, sin ningún costo aplica para tomar una decisión, que afecta
adicional. El inicio de la licencia se computa, o en la que está interesado un administrado.
en todas las modalidades, incluso las de eva- Esas reglas no pueden ser modificadas a
luación previa, con el ingreso del expediente voluntad de quien conduce el respectivo
a la municipalidad respectiva. trámite, pues al hacerlo sorprendería a las
partes y a terceros, desatendiendo ostensible-
6.4. Efectos del certificado de parámetros mente la garantía del debido procedimiento
urbanísticos y de la licencia de edifi- administrativo25, reconocido a su vez en el
cación numeral 1.2 del artículo IV del Título Prelimi-
La Constitución no reconoce de modo expreso nar de la LPAG.
a la seguridad jurídica como un principio
Debe tenerse presente que en nuestro ordena-
constitucional, pero el Tribunal Constitucional
miento, el principio de Seguridad Jurídica está
Peruano, en el Exp. Nº 0016-2002-AI (FJ.3)
directamente relacionado con el principio de
ha precisado sobre el particular lo siguiente23:
“El principio de la seguridad jurídica forma parte con-
substancial del Estado Constitucional de Derecho. La 24 Cabe anotar que la doctrina ha reconocido como
predictibilidad de las conductas (en especial, las de los condiciones o componentes que deben configurarse
poderes públicos) frente a los supuestos previamente para garantizar la Seguridad Jurídica, las siguientes:
determinados por el Derecho, es la garantía que infor- certeza, publicidad, estabilidad, independencia, razo-
nabilidad, racionalización, igualdad real, regulación,
ma a todo el ordenamiento jurídico y que consolida la
prestación y fiscalización. DROMI, Roberto. Derecho
interdicción de la arbitrariedad. Tal como estableciera administrativo. Gaceta Jurídica: Lima, 2005. T. I. pp.
el Tribunal Constitucional español, la seguridad jurídica 71-80.
supone «la expectativa razonablemente fundada del Cabe anotar que la doctrina ha reconocido como
ciudadano en cuál ha de ser la actuación del poder en condiciones o componentes que deben configurarse
aplicación del Derecho» (STCE 36/1991, FJ 5). El prin- para garantizar la Seguridad Jurídica, las siguientes:
cipio in comento no sólo supone la absoluta pasividad certeza, publicidad, estabilidad, independencia, razo-
de los poderes públicos, en tanto no se presenten los nabilidad, racionalización, igualdad real, regulación,
supuestos legales que les permitan incidir en la realidad prestación y fiscalización. En lo que específicamente
jurídica de los ciudadanos, sino que exige de ellos la se refiere a la certeza, Roberto Dromi señala que:
inmediata intervención ante las ilegales perturbaciones “a) Certeza. La seguridad primero es “certeza”, derecho
de las situaciones jurídicas, mediante la «predecible» cierto, derecho conocido, derecho no ignorado, derecho
reacción, sea para garantizar la permanencia del statu publicado, derecho no secreto, derecho verdadero, no
quo, porque así el Derecho lo tenía preestablecido, o, derecho valso, la verdad del derecho, no el revés del
en su caso, para dar lugar a las debidas modificaciones, derecho. En este primer componente, la seguridad es
presupuesto y función del derecho contra los riesgos de
si tal fue el sentido de la previsión legal.” (el subrayado
la incertidumbre, la imprevisibilidad, la improvisación,
y resaltado es nuestro). el derecho de ocasión, el derecho para un caso, no para
todos los casos”. DROMI, Roberto. Derecho adminis-
trativo. Gaceta Jurídica: Lima, 2005. T. I. p. 71-80.
23 De la misma forma, el Tribunal Constitucional se ha 25 SANTOFIMIO GAMBOA, Jaime Orlando. Tratado de
pronunciado en el Expediente 0290-2002- H C -T C , Derecho Administrativo. Universidad Externado de
entre otros. Colombia: Bogotá, 2004. T. II. p.71.
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Por todo lo antes expuesto, coincidimos con de la misma es otorgar seguridad jurídica
Chehade Herrera28 cuando sostiene que los al titular de la licencia, respecto a que los
Certificados de Parámetros Urbanísticos y cambios normativos o de zonificación no le
Edificatorios cumplen una doble función, afectarán. Es decir, aun cuando se produzca
pues “por un lado constituyen restricciones al modificaciones, el titular de la licencia puede
derecho a edificar convirtiéndose así en una ga- ampararse en ella para iniciar o proseguir
rantía de respeto a la zonificación, contribuyendo la ejecución de las obras tal como estaban
al ordenamiento territorial y resguardando el delineadas en el proyecto.”
interés público, y por otro lado, desarrollan los
verdaderos alcances del derecho de propiedad Conforme a ello, la licencia de edificación
en materia edificatoria al señalar los reales con- aprobada mediante resolución municipal
tenidos y potencialidades del derecho a edificar, otorga seguridad jurídica al administrado,
circunstancias que deben ser respetadas por las seguridad que se materializa a través del
autoridades municipales amen de las modifica- mantenimiento del statu quo respecto de
ciones legislativas que puedan producirse durante cambios normativos o de zonificación que
la vigencia de los Certificados de Parámetros ya puedan producirse con posterioridad a su ex-
emitidos.” pedición, no pudiendo en esa medida afectar
la ejecución de la obra bajo los términos y
• Licencia de Edificación condiciones expresados en el referido título
Se entiende por licencia de edificación a la habilitante, hasta la fecha de su vencimiento,
autorización municipal para desarrollar sobre o hasta su prórroga de ser el caso.
un inmueble construcciones, cualquiera que Por ello, resulta acertado lo señalado por
ellas sean, acordes con el plan de ordena- Tomás Fernández30 quien entiende que: “en
miento territorial y las normas urbanísticas cuanto actos favorables que son las licencias
del municipio o distrito. están amparadas por el principio general de
Con relación a los efectos de esta au- irrevocabilidad de los actos declarativos de
torización municipal como bien indica derechos, por lo que la administración que las
Gonzales Barrón 29 : “El principal efecto otorga no tiene posibilidad de volver sobre ellas
sino en los casos y por los procedimientos que
urbanístico antes de que el propietario haya adquirido
el otorgamiento establece específicamente a
el aprovechamiento urbanístico correspondiente, estos efectos.”
entonces no hay derecho a indemnización por el apro-
vechamiento no patrimonializado, pues las facultades Atendiendo a ello, de conformidad con el ar-
conferidas por el plan al derecho de dominio son, si tículo 11 de la Ley N.º 29090, sólo en el caso
no se ejercitan, simples expectativas no indemniza- que se incumplan las normas urbanísticas y/o
bles (SSTS cont. 22.5.1995, RA 3807; 3.7.1995, RA normas técnicas de edificación con la que fue
5848; 5.10.1998, RA 7983; 8.2.1999, RA 1701). El
TS ha entendido que ni siquiera es indemnizable la otorgada la licencia, o se produzca un riesgo
reducción del aprovechamiento urbanístico resultante inminente contra la seguridad e integridad de
del nuevo plan cuando aquel no pudo adquirirse personas y/o edificaciones, podrá suspenderse
por un retraso injustificado de la Administración en
la vigencia de una licencia de edificación,
urbanizar, como le correspondía, la zona en cuestión
(STS cont. 30.6.1998, RA 5621, donde solo se deter- circunstancias que no se han constatado en el
minó la indemnización de las inversiones realizadas presente caso objeto de consulta; por lo que
por los propietarios que resultaron frustradas por el no corresponde interrumpir la vigencia de la
cambio de plan). La revisión del plan sólo conlleva
indemnización cuando es anticipada, esto es, cuando
Licencia de Edificación aprobada mediante la
se realiza antes del plazo (expreso o implícito) para su resolución municipal.
ejecución (STS cont. 5.10.1998, RA 7983).
28 CHEHADE HERRERA, Ramón. Certificados de Paráme-
tros urbanísticos: Acerca de los derechos contenidos en
dicho documento. En: <http://goo.gl/f5nJxo> 30 FERNÁNDEZ, Tomás Ramón. Manual de Derecho
29 GONZÁLES BARRÓN, Gunther. Ob. Cit. Pág. 310. Urbanístico, Madrid, 1986, pág. 209.
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de la licencia de edificación aprobada median- Consideramos que el literal a) del numeral 6
te resolución municipal ni el certificado de de la Ley Nº 29090, debe concordarse con
parámetros urbanísticos y edificatorios, pues el artículo 8° del Reglamento de Verificación
estos fueron emitidos mientras se encontraba Administrativa y Técnica, aprobado por el
vigente la referida norma municipal. En ese Decreto Supremo N.º 026-2008-VIVIENDA
sentido, no se podría extinguir la licencia pese el cual establece que la verificación técnica es
a que esta pueda ser disconforme con la nueva aquella actividad, que consiste en compro-
ordenación urbanística prevista en la nueva bar que las obras sean ejecutadas de con-
ordenanza municipal. formidad con el proyecto y especificaciones
técnicas aprobados, así como los parámetros
¿SABÍA USTED QUE? urbanísticos y edificatorios, los planes urbanos
y demás normas aplicables.
Conforme a ello, tenemos que los Así, en el caso de constatarse que las obras
certificados de parámetros urba- se ejecutan sin respetar el proyecto, espe-
nísticos y edificatorios, además de cificaciones técnicas o no cumplen con los
constituir actos administrativos que planes urbanos, los parámetros urbanísticos
poseen efectos directos sobre un y edificatorios y/o demás normas aplicables,
determinado inmueble, generan las municipalidades podrán disponer la adop-
derechos y obligaciones destinados ción de medidas provisionales de inmediata
a otorgar seguridad jurídica sobre ejecución de acuerdo con el numeral 6 del
las disposiciones urbanísticas y de artículo 10 de la Ley.
zonificación de dicho inmueble.
En ese orden de ideas, para efectos de dispo-
ner en forma provisional la suspensión de la
6.6. Indebida medida provisional de pa- acción constructiva, el supervisor de obra en
ralización de obra un procedimiento de verificación técnica
En algunos casos, se ha comprobado que debería constatar que la ejecución de la obra
mediante resolución municipal se dispone se realiza infringiendo las normas urbanísti-
imponer la medida de paralización tempo- cas antes aludidas. Es decir, la paralización
ral de las obras que venían siendo ejecutadas temporal a la que hace alusión el numeral 6
en el inmueble. La imposición de tal medida del artículo 10 de la Ley N.º 29090, se con-
se sustenta por lo general en el literal a) del figura como una medida provisional que se
numeral 6 de la Ley N.º 29090, el cual esta- dispone a consecuencia de un procedimiento
blece que: “Mediante la Verificación Técnica la de verificación técnica que es llevado a cabo
municipalidad respectiva, a cargo de los super- por un supervisor de obra y, como es natural,
visores de obra, supervisa que la ejecución de las cuando precisamente se vienen ejecutando
obras estén en correspondencia con las normas obras de edificación.
y el proyecto aprobado. La Verificación Técnica
es obligatoria en el cien por ciento (100%) de De esta manera, tenemos que la municipali-
las licencias otorgadas. Si a consecuencia de la dad deberá disponer la paralización temporal
Verificación Técnica se constata que la ejecución de las obras, en virtud a una norma cuya
de las obras se realiza infringiendo las normas, aplicación se enmarca dentro de un procedi-
la municipalidad puede disponer la adopción de miento de verificación técnica a cargo de un
medidas provisionales de inmediata ejecución supervisor de obra y, a su vez, se prevé úni-
que pueden consistir en lo siguiente: a. Suspender camente para aquellos casos en que las obras
o cesar en forma provisional la acción constructi- de edificación ya vengan siendo ejecutadas.
va. (...)” (subrayado es nuestro). Así, de acuerdo con el literal a) del numeral
12.7 del reglamento, la municipalidad infor-
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dependiente de que varíen las circunstancias cautelar de un procedimiento de nulidad de
o hechos que en su momento coadyuvaron a un certificado de parámetros urbanísticos, a
la expedición de dicho documento. un procedimiento de edificación de licencia
de edificación. Como ya se ha indicado, la
medida de paralización de una obra solo
¿SABÍA USTED QUE?
operaría si luego de la Verificación Técnica
respectiva, en el marco de un debido pro-
Solo en el caso que se verifique cedimiento, se constata que la ejecución de
plenamente que la licencia de edifi- las obras se realiza infringiendo las normas
cación fue concedida contraviniendo técnicas correspondientes.
disposiciones vigentes, la autoridad
municipal podría suspender (medi- Además, tal como se ha indicado, de
da provisional de paralización) la conformidad con el artículo 14 de la Ley
autorización para la ejecución de Nº 29090, el certificado de parámetros
las obras de edificación. Conforme urbanísticos constituye un requisito cuya
a ello, la aplicación dicha medida es exigencia no es obligatoria sino facultativa,
excepcional y de uso restrictivo en es decir, el administrado tiene la posibilidad
tanto dicho dispositivo normativo de presentarlo o no para solicitar la licen-
usa el vocablo, “únicamente” y solo cia de edificación. En esa línea, el artículo
en el supuesto de que se constante 5 de la Ley N.º 29566, Ley que modifica
“plenamente” la vulneración de diversas disposiciones con el objeto de
normas vigentes. Cabe resaltar que mejorar el clima de inversión y facilitar el
la autorización para la ejecución cumplimiento de obligaciones tributarias,
de obras de edificación, que es la establece expresamente que:
potestad de hacer que se está sus-
pendiendo, alude directamente a Artículo 5.- Eliminación de requisitos para solicitar
la licencia de edificación, en tanto licencias de edificación y de funcionamiento
que la facultad de ejecutar o realizar En la tramitación de cualquiera de las modalidades
obras constituye el principal efecto de licencias de edificación, contempladas en el artí-
del otorgamiento de dicha licencia. culo 25 de la Ley núm. 29090, Ley de Regulación
de Habilitaciones Urbanas y de Edificaciones, y de
funcionamiento, no será exigible la presentación de
Ello es así, por cuanto justamente uno de los los siguientes documentos:
efectos importantes que brinda la licencia de
a) Copia literal de dominio, correspondiendo a la
edificación a su titular es la seguridad jurídica
municipalidad respectiva efectuar la verificación
respecto a que los cambios normativos o a través del portal web de la Superintendencia
de zonificación no le afectarán. Es decir, aun Nacional de los Registros Públicos (Sunarp).
cuando se produzca modificaciones, el titular b) Certificado de parámetros urbanísticos y edifica-
de la licencia puede ampararse en ella para torios. (…)
iniciar o proseguir la ejecución de las obras En ese sentido, no se entiende porqué una
tal como estaban delineadas en el proyecto. municipalidad considera que la paralización
En esa medida, si un cambio normativo o de de la obra deviene del inicio del procedimiento
la zonificación no puede enervar los efectos de nulidad del certificado de parámetros urba-
de la licencia concedida, con mayor razón nísticos y Edificatorios, cuando de conformidad
las posibles afectaciones a los documentos con el artículo 5 de la Ley Nº 29566, para la
previos (eventuales nulidades) tampoco po- tramitación de cualquiera de las modalidades
drían menoscabar los efectos de la licencia de licencias de edificación, no se requiere la
de edificación. presentación del certificado de parámetros
En esa línea, no se justifica por ejemplo por urbanísticos. Parecería más bien de lo allí
qué se quiere hacer extensivo una medida expuesto, que lo principal (licencia de edi-
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de transmisiones de carácter real que sería lo control para la verificación de los mis-
propio en el tracto sucesivo. mos, que los allí indicados en dicha
norma, sin perjuicio de la aplicación de
Para efecto del caso concreto, compartimos la
los principios y procedimientos contenidos
opinión del Tribunal en el sentido de conside-
en la Ley Nº 27444, Ley del Procedimien-
rar que la nulidad de la licencia de edificación
to Administrativo General, a los que en
no constituye acto inscribible si previamente forma remisiva haga mención la Ley Nº
no se registra el acto previo constituido por 29090 y su reglamento.
la licencia de edificación (predeclaratoria de
fábrica). Por esta razón, dado que no se ha - Si bien el certificado de parámetros
urbanísticos constituye un documento
cumplido con inscribir en forma previa la
previo emitido por la Municipalidad en
licencia de edificación que ha sido declarada
el cual se lleva a cabo una evaluación
nula por la municipalidad, más que disponer
previa, lo cierto es que ello no impide a
la tacha sustantiva del título debió formularse
que la misma Municipalidad pueda pos-
observación conforme a lo previsto por el teriormente revisar la legalidad del mismo
segundo párrafo del artículo 40 del Regla- en un control posterior. En ese sentido, si
mento General de los Registros Públicos41, que resultaría procedente un control posterior
permite ampliar la rogatoria para solicitar la de dicho certificado.
inscripción del acto previo.
- El certificado de parámetros urbanísticos
y edificatorios otorga seguridad jurídica
IV. CONCLUSIONES al titular del mismo. Por lo que a partir
- De acuerdo con el artículo 2 del Decreto de la entrada en vigencia de dicho cer-
Supremo Nº 008-2013-VIVIENDA, la tificado, los trabajos de edificación que
actuación de las municipalidades en el sean realizados respetando su contenido,
procedimiento de licencia de edificación se entenderán ejecutados conforme a
se encuentra limitada a lo previsto en la derecho.
propia ley Nº 29090 y su reglamento, - La licencia de edificación de edificación
en tanto norma especial que regula di- aprobada mediante resolución municipal,
cho procedimiento, razón por la cual la otorga seguridad jurídica al titular del
autoridad municipal no podrá exigir mismo, la cual se materializa a través del
mayores requisitos o mecanismo de mantenimiento del statu quo respecto de
cambios normativos o de zonificación que
41 Artículo 40.- Observación del título puedan producirse con posterioridad a su
“Si el título presentado adoleciera de defecto subsanable expedición, no pudiendo en esa medida
o su inscripción no pudiera realizarse por existir un obs- afectar la ejecución de la obra bajo los
táculo que emane de la partida registral, el Registrador términos y condiciones expresados en el
formulará la observación respectiva indicando, simultá-
neamente, bajo responsabilidad, el monto del mayor referido título habilitante, hasta la fecha
derecho por concepto de inscripción de los actos materia de su expiración, o hasta el vencimiento
de rogatoria, salvo que este no pueda determinarse por de su prórroga de ser el caso.
deficiencia del título.
Si el obstáculo consiste en la falta de inscripción de acto - La imposición de una medida provisional
previo, la subsanación se efectuará ampliando la rogatoria transgrediendo el procedimiento de Ve-
del título presentado a fin de adjuntar los documentos rificación Técnica previsto en el Decreto
que contienen el acto previo. Cuando exista título
incompatible presentado antes de la ampliación de la Supremo Nº 026-2008-VIVIENDA, estaría
rogatoria, la ampliación solo procederá si el instrumento incurriendo en un grave vicio que afecta
inscribible que contiene el acto previo ha sido otorgado el principio de legalidad y el debido pro-
con anterioridad a la rogatoria inicial. Si no existiese título
cedimiento, razón por la cual deberían
incompatible antes de la ampliación de la rogatoria, esta
procederá aun cuando el instrumento que da mérito a la enervarse los efectos de dicha medida
inscripción no preexista a la fecha de la rogatoria inicial.” de paralización. En ese sentido, resulta
TRIBUNAL REGISTRAL
RESOLUCIÓN N° 2093-2011-SUNARP-TR-L
SUMILLA
ACTO PREVIO PARA LA INSCRIPCIÓN DE LA
NULIDAD DE LICENCIA DE CONSTRUCCIÓN
“Constituye acto previo necesario o adecuado para la
inscripción de la nulidad de una licencia de edificación,
la anotación de dicha licencia cumpliéndose con los
requisitos exigidos para la predeclaratoria de fábrica.”
Civil Inmobiliaria
“La Resolución de Gerencia de Desarrollo Urbano Nº 49-2011 que se adjunta declara la nulidad de la
Resolución de Licencia de Construcción Nº 209-10-GDU/MDS de fecha 26/10/2010, a favor de la empresa
C&V Inversiones Inmobiliarias S.A., para la construcción de un edificio multifamiliar.
Sin embargo, en la partida 12623508 del Registro de Predios materia de su rogatoria, se advierte que
el propietario C&V Inversiones Inmobiliarias S.A. no ha registrado ninguna construcción de un edificio
multifamiliar en virtud a la Resolución de Licencia de Construcción Nº 209-10-GDU/MDS de fecha
26/10/2010 cuya nulidad ha sido declarada.
En tal sentido, lo solicitado no constituye acto inscribible en éste registro, por lo que se procede a
formular la tacha del presente título, dejando a salvo el derecho del interesado para accionar en la vía
correspondiente mediante las medidas cautelares que correspondan.”
VI. ANÁLISIS
1. Con el título venido en grado de apelación se solicita la inscripción de la Resolución de la
Gerencia de Desarrollo Urbano Nº 49 emitida el 5/4/2011 por la Municipalidad Metro-
politana de Lima, que declara la nulidad de la Licencia de Construcción Nº 209-10-GDU/
MDU emitida 26/10/2010 por la Municipalidad Distrital de Surquillo, respecto del predio
constituido por el lote acumulado 7 y 8 de la Manzana B ubicado frente a la Avenida Uno
de la Urbanización Jorge Chávez del distrito de Surquillo.
1 Ley N.° 29090, artículo 29°.- Del registro (…) 29.1 De la inscripción preventiva - predeclaratoria de fábrica
Los propietarios pueden solicitar al registro correspondiente la anotación preventiva de la predeclaratoria de
fábrica, la misma que tendrá vigencia por un (1) año. Cuando se solicita la predeclaratoria de fábrica de una
unidad inmobiliaria, con secciones de propiedad exclusiva y bienes comunes, debe inscribirse necesariamente,
en el mismo acto, la respectiva preindependización y prerreglamento interno.
Civil Inmobiliaria
VII. RESOLUCIÓN
REVOCAR la tacha sustantiva formulada por la Registradora Pública del Registro de Predios de
Lima y SEÑALAR que el defecto advertido que se confirma por la presente resolución es de ca-
rácter subsanable conforme a los fundamentos expuestos en el análisis de la presente resolución.
Regístrese y comuníquese.
E:\Resoluciones2011/678872-2011
Pg
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Contenido
CONSULTA Alcances de la intervención de copropietarios en la declaratoria de fábrica y en la independización
CONSULTA
Se solicitó ante los Registros Públicos la inscripción de la regularización de
fábrica e independización del predio inscrito en la partida electrónica N.°
11185425 del Registro de Predios de Lima. El registrador público que tuvo
a su cargo la calificación formuló observación aduciendo que la copro-
pietaria Carmen Melisa Torres Garrido no interviene ni en la declaratoria
de fábrica ni en la independización materia de solicitud en este sentido,
considerando que este último acto contiene derechos y obligaciones que
vinculan a la citada, es necesaria su intervención por su propio derecho o
representada por terceros. En ese sentido, nos consultan si es necesario
la intervención de todos los copropietarios del predio para la inscripción
de la declaratoria de fábrica y la independización del predio.
“La declaratoria de fábrica no constituye un de construir una obra cuyo destino es albergar
acto de disposición, por lo que no resulta al hombre en el desarrollo de sus actividades.
exigible que los documentos de la declaratoria Comprende las instalaciones fijas y comple-
de fábrica en vía de regularización sea suscrito mentarias adscritas a ella.
por todos los copropietarios; en aplicación del Por su parte, de acuerdo con el artículo 58
inciso 1 del artículo 971 del Código Civil”. Sin del Reglamento de Inscripciones del Registro
embargo, la independización importa una de Predios, la independización consiste en
modificación del bien, por lo que si existiera abrir una partida registral para cada unidad
copropiedad y los copropietarios no han efec- inmobiliaria resultante de una desmembra-
tuado la partición material del predio, deben ción de terreno, con edificación o sin ella, o
intervenir todos y adoptar el acuerdo por como consecuencia de la inscripción de una
unanimidad al amparo del aludido artículo del edificación sujeta al régimen de propiedad ex-
Código Civil y el artículo 63 del Reglamento de clusiva y propiedad común o independización
Inscripciones del Registro de Predios. y copropiedad.
De conformidad con el artículo 2 del Regla- Con relación a la intervención de los copropie-
mento de la Ley N° 27157, la declaratoria tarios en un procedimiento de regularización
de fábrica es el reconocimiento legal de la de fábrica, en el Décimo Pleno del Tribunal
existencia de cualquier tipo de obra, que se Registral publicado en el diario oficial El
realiza mediante declaración del propietario Peruano el 9/6/2005, se aprobó el siguiente
con las formalidades y trámites previstos en la precedente de observancia obligatoria: “En el
ley. Por su parte, la edificación es el resultado formulario sobre regularización de declaratoria
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RESEÑA DE JURISPRUDENCIA
Reseña de jurisprudencia
Resolución N.°
191-2012/SC2- ¿Se puede trasladar las externalida-
INDECOPI
des negativas derivadas de proble-
mas no previstas por la inmobiliaria
a los consumidores?
RESOLUCIÓN 191-2012/SC2-INDECOPI*
(24 de enero del 2012)
TEXTO DE LA RESOLUCIÓN
* Resolución emitida por el Tribunal de Defensa de la Competencia y de la Propiedad Intelectual - Sala de Defensa
de la Competencia N.º 2.
ANTECEDENTES
1. El 6 de abril de 2010, la señora Marina Luz Masgo Torres(en adelante, la señora Masgo)
denunció a Constructora e Inmobiliaria San Luis S.A.1 (en adelante, la Constructora) y a
Grupo De Plano S.A.C.2 (en adelante, De Plano) ante la Comisión de Protección al Consu-
midor - Sede Lima Sur (en adelante, la Comisión) por infracción del Decreto Legislativo
716, Ley de Protección al Consumidor3.
2. En su denuncia, la señora Masgo señaló que en agosto de 2009 celebró con la Construc-
tora un contrato de separación para la adquisición de un departamento en el Condominio
Residencial ubicado en Avenida Bolívar 1331, distrito de Pueblo Libre, provincia y de-
partamento de Lima, para lo cual depositó en la cuenta de ahorros de la Constructora la
suma de US$ 1000,004. Pese a que a la fecha de interposición de la denuncia no se había
iniciado la obra y a que se le informó que no se ejecutaría la misma, las denunciadas se
negaron a devolver la suma pagada por concepto de separación. Por tanto, solicitó como
medida correctiva la devolución de la suma cancelada por concepto de separación.
3. En sus descargos, la Constructora señaló que no pudo concretarse el inicio de la construcción
conforme a lo pactado, ya que se redujo el número de inversionistas interesados. Refirió
que, pese a que recibió los US$ 1 000,00 de la denunciante como separación, debía tenerse
en cuenta que su obligación únicamente se circunscribía a la construcción del inmueble
4. Por su parte, De Plano refirió que su responsabilidad se limitó a la elaboración del antepro-
yecto y a realizar las gestiones necesarias para obtener la aprobación municipal y que, por
tanto, no estableció ninguna relación de consumo con la denunciante. Asimismo, señaló
que la Constructora era la única responsable de efectuar el reembolso de la suma entregada
por concepto de separación, debido a que fue a quien se le depositó dicho monto en su
cuenta de ahorros.
5. Mediante Resolución 464-2011/CPC del 23 de marzo de 2011, la Comisión declaró
fundada la denuncia interpuesta por la señora Masgo contra la Constructora y De Plano
por infracción del artículo 8º de la Ley de Protección al Consumidor, debido a que no
cumplieron con iniciar las obras de construcción conforme a lo pactado. Por tanto, ordenó
a las denunciadas, en calidad de medida correctiva, que reembolsen a la denunciante la
suma pagada por concepto de separación del inmueble, más los intereses devengados
1 Identificado con RUC 20101164650 y con domicilio en Calle Murcia Manzana B, Lote 15, Urbanización La Estancia
Oeste, distrito de La Molina, provincia y departamento de Lima.
2 Identificado con RUC 20521770067 y con domicilio en Avenida Los Próceres Manzana E6, Lote 20, Urbanización
Túpac Amaru de Villa, distrito de Chorrillos, provincia y departamento de Lima.
3 Cuyo texto y sus modificatorias hasta el 30 de enero de 2009 se encuentran comprendidos en el Decreto Supremo
006-2009-PCM, Texto Único Ordenado de la Ley del Sistema de Protección al Consumidor
4 Al respecto, presentó como medios probatorios copias de 2 vouchers de depósitos bancarios efectuados el 12 y
22 de agosto de 2009 en la cuenta de ahorros en Scotiabank Perú SAA de titularidad de la Constructora, cada
uno por la suma de US$ 500,00.
Civil Inmobiliaria
5 LEY 27444. LEY DEL PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO GENERAL. Artículo 230°.- Principios de la potestad
sancionadora administrativa. La potestad sancionadora de todas las entidades está regida adicionalmente por los
siguientes principios especiales:
(...)
8. C ausalidad.- La responsabilidad debe recaer en quien realiza la conducta omisiva o activa constitutiva de
infracción sancionable
6 En el expediente a fojas 6 y de fojas 9 a 12.
7 DECRETO LEGISLATIVO 716. LEY DE PROTECCIÓN AL CONSUMIDOR.
Artículo 8º.- Los proveedores son responsables, además, por la idoneidad y calidad de los productos y servicios; por
la autenticidad de las marcas y leyendas que exhiben los productos; por la veracidad de la propaganda comercial
de los productos; y por el contenido y la vida útil del producto indicados en el envase, en lo que corresponde.
8 En el expediente a fojas 110.
9 CÓDIGO CIVIL. Artículo 1315º.- Caso fortuito o fuerza mayor es la causa no imputable, consistente en un evento
extraordinario, imprevisible e irresistible, que impide la ejecución de la obligación o determina su cumplimiento
parcial, tardío o defectuoso.
Civil Inmobiliaria
JURISPRUDENCIA FUNDAMENTAL
QUINTO PLENO CASATORIO CIVIL DE LA
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA DE LA REPÚBLICA
SENTENCIA DEL PLENO CASATORIO
CASACIÓN Nº 3189-2012-LIMA NORTE
Actualidad
Sentencia del V Pleno Casatorio / Casación N°3189-
Área
Civil Jurisprudencia
2012-Lima Nortefundamental
Contenido
SENTENCIA Sentencia del V Pleno Casatorio / Casación N°3189-2012-Lima Norte 428
Sumario:
I. Introducción.
II. Resumen del Proceso.
III. Materia del recurso.
IV. Fundamentación del recurso.
V. De la convocatoria al Pleno Casatorio.
VI. Consideraciones.
1. Con relación a la causal de contravención al derecho a la tutela jurisdiccional y la
motivación de resoluciones judiciales.
2. Los derechos fundamentales a la Asociación y a la Libertad de Contratación.
2.1. El derecho fundamental a la Asociación.
2.1.1. Desarrollo Jurisprudencial del Tribunal Constitucional.
2.2. El derecho fundamental a Contratar.
I. Introducción.
1. Es importante destacar que “(...) los fines tradicionales y hasta históricos de la casación se han
centrado siempre en el llamado fin nomofiláctico, el cual busca la correcta aplicación del derecho y la
de uniformizar la jurisprudencia, es decir, el dictado de sentencias que establezcan criterios jurispruden-
ciales que den cumplimiento al principio de predictibilidad (...) no hay una única interpretación de una
norma, lo que debe primar en materia de interpretación, es elegir a la mejor interpretación (...)”1, por
ello es que el Pleno Casatorio Civil busca a través del presente pronunciamiento la uniformidad
de la jurisprudencia analizando el tema que nos convoca, cual es la interposición de demandas
de nulidad de acto jurídico de acuerdos asociativos, acudiendo a los órganos jurisdiccionales
luego de vencido el plazo regulado taxativamente en el artículo 92 del Código Civil, referido a
la pretensión impugnatoria asociativa de ineficacia de acuerdos, lo cual ha producido disimiles
pronunciamientos. Se establecerá por ello una interpretación normativa a partir de la disposi-
ción antes señalada, en salvaguarda del derecho fundamental de asociación, en atención a la
predictibilidad de los fallos emitidos por nuestra institución así como a la seguridad jurídica de
todo nuestro sistema.
2. La interposición de las demandas antes precisadas, aparentemente consignan un conflicto
de dos valores muy acendrados en nosotros, cuales son la seguridad y la justicia y es por ello
que “(...) el juez, el hombre de derecho, no puede evitar un estremecimiento al encontrarse en la
difícil disyuntiva de tener que optar, en el caso concreto, por uno de esos valores. Los dos interpelan
profundas convicciones y sentimientos en el ser humano y los dos podrían motivar, sino son utilizados
adecuadamente, consecuencias lamentables para la vida en sociedad (...)”2 . Por ello es absolutamente
indispensable, para la judicatura analizar y meditar concienzudamente las implicancias de toda
decisión emitida, independientemente del presente caso; toda vez que el impacto de nuestras
1 HURTADO REYES, Martín. La Casación Civil. Una aproximación al control de hechos. Lima: Idemsa. 2012. pp. 112 a
114.
2 BENAVIDES TORRES, Eduardo. La Excesiva Onerosidad de la Prestación. Lima: Cultural Cuzco. 1990. pp. 39 a 40.
VI. Consideraciones
1. Habiéndose invocado infracciones normativas procesales y materiales conforme se aprecia
de la fundamentación del recurso interpuesto, corresponde realizar el análisis de la primera
infracción, dado que de ampararse la misma no tendría objeto pronunciarse por las infracciones
materiales denunciadas. 2. En el caso de la infracción normativa procesal alegada, ésta se ampara
en la vulneración del artículo I del Título Preliminar del Código Procesal Civil, argumentando
para ello el derecho de acceso de todo sujeto de derecho a la tutela jurisdiccional efectiva;
adicionalmente, se invoca la afectación del numeral 06 del artículo 50 de la norma anotada,
referido al deber del magistrado de fundamentar los autos y sentencias que emita bajo sanción
de nulidad, lo cual incide en la motivación de las resoluciones judiciales, que constituye uno de
los contenidos del debido proceso.
1. Con relación a la causal de contravención al derecho a la tutela jurisdiccional y la
motivación de resoluciones judiciales.
1. Respecto de la tutela jurisdiccional, corresponde señalar que es un derecho fundamental,
conforme lo establece el numeral 03 del artículo 139 de la Constitución que precisa “(...) Son
principios y derechos de la función jurisdiccional: (...) 3. La observancia del debido proceso y la tutela
jurisdiccional. Ninguna persona puede ser desviada de la jurisdicción predeterminada por ley, ni sometida
a procedimiento distinto de los previamente establecidos, ni juzgada por órganos jurisdiccionales de
excepción ni por comisiones especiales creadas al efecto, cualquiera sea su denominación.
2. Reiterada jurisprudencia del Tribunal Constitucional, como la consignada en el fundamento
jurídico 08 de la STC 763-2005-AA/TC ha precisado que “(...) cuando el ordenamiento reconoce
el derecho de todo justiciable de poder acceder a la jurisdicción, como manifestación de la tutela ju-
dicial efectiva, no quiere decir ello que la judicatura prima facie, se sienta en la obligación de estimar
favorablemente toda pretensión formulada, sino que simplemente sienta la obligación de acogerla y
brindarle una sensata como razonada ponderación en torno a su procedencia o legitimidad. No es
pues que el resultado favorable esté asegurado con solo tentarse un petitorio a través de la demanda,
sino tan solo la posibilidad de que el órgano encargado de la administración de justicia pueda hacer
del mismo un elemento de análisis con miras a la expedición de un pronunciamiento cualquiera que
sea su resultado (...)”.
3. Sobre el particular, cabe precisar que uno de los contenidos del derecho a la tutela jurisdiccional
es el derecho de acceso a los órganos jurisdiccionales, al tratarse de “(...) un derecho fundamental
del ciudadano, inviolable por parte de los poderes estatales. Y realmente constituiría una incongruencia
insuperable si, asegurado el acceso a la jurisdicción, frente a la lesión o amenaza de lesión a un derecho
(aunque sea meramente afirmada), no se previera el ejercicio del derecho de invocar y obtener tutela
jurisdiccional adecuada y efectiva (...)”5 . Este es el correlato al ejercicio del derecho de acción, toda
vez que sería ilusorio contar con este derecho fundamental si es que los órganos jurisdiccionales
no garantizaran el acceso a recibir tutela, y con ello nos referimos a la respuesta de éstos a partir
de las demandas interpuestas, estimándolas o no, dado que el acceso no es garantía de que la
parte que interpone la demanda reciba un fallo estimatorio necesariamente, estadio de la his-
toria del derecho procesal, referido a la acción concreta, largamente superado en nuestros días.
5 ALVARO DE OLIVEIRA, Carlos Alberto. Teoría y Práctica de la Tutela Jurisdiccional. Lima: Communitas. 2008. p. 142.
4. En cuanto a las alegaciones relativas a la denuncia casatoria por la causal de infracción nor-
mativa procesal, es del caso destacar que el artículo I del Título Preliminar del Código Procesal
Civil establece que “Toda persona tiene derecho a la tutela jurisdiccional efectiva para el ejercicio o
defensa de sus derechos o intereses con sujeción al debido proceso; adicionalmente el numeral 06
del artículo 50 de la norma anotada precisa que Son deberes de los jueces en el proceso: (...) 6.
Fundamentar los autos y las sentencias, bajo sanción de nulidad, respetado los principios de jerarquía
de las normas y el de congruencia (...)”.
5. Reiteramos que uno de los contenidos del derecho fundamental a la tutela jurisdiccional es el
de acceso a los órganos jurisdiccionales, derecho que no ha sido vulnerado en autos, conforme
puede apreciarse de los presentes actuados, toda vez que el recurrente transitó por dos instancias
y ha recibido la respuesta de los órganos jurisdiccionales a la pretensión interpuesta, más aún
cuando el contenido de acceso a la tutela jurisdiccional no implica que la pretensión incoada
sea declarada fundada, por lo que este extremo de la infracción normativa procesal denunciada
debe desestimarse.
6. El principio de motivación de las resoluciones judiciales constituye una de las garantías de
la impartición de Justicia incorporada en el numeral 05 del artículo 139 de la Constitución, el
mismo que establece la exigencia de “la motivación escrita de las resoluciones judiciales en todas
las instancias, excepto los decretos de mero trámite, con mención expresa de la ley aplicable y de
los fundamentos de hecho en que se sustentan”. En ese sentido, el numeral 03 del artículo 122
del Código Procesal Civil prevé la exigencia que en las resoluciones judiciales se expresen los
fundamentos de hecho y derecho que la sustentan según el mérito de lo actuado en el proceso,
destacándose que la motivación no es solo un deber de orden constitucional sino que es además
un derecho del justiciable quien a través del discurso argumentativo que el Juez emita podrá
conocer las razones de su decisión a efecto que si no las encuentra conforme a derecho las pueda
impugnar por ante el órgano Superior, para que este último proceda a efectuar el debido control
del razonamiento judicial.
7. En el caso de autos examinada la resolución de vista se aprecia que la Sala Superior al revocar
la resolución de primer grado y declarar la improcedencia de la demanda ha precisado que “(...)
Este derecho esencial está regulado por el artículo 92 del Código Civil, que incorpora el derecho de los
asociados a impugnar judicialmente los acuerdos contrarios a las disposiciones estatutarias o legales;
esto quiere decir que, dentro de las causales de impugnación, se incluyen los supuestos previstos
en el artículo 219 de la citada norma. Asimismo, se establece que la vía procedimental para dicha
impugnación, es el proceso abreviado, (...) Al existir una acción específica y una vía procedimental
determinadas de manera expresa por la ley y de carácter imperativo por ser de orden público, para
discutir la validez de los acuerdos de una asociación; no procede su tramitación en una vía distinta a la
establecida, pese a la voluntad en contrario del accionante. El incumplimiento afecta gravemente de
nulidad todo el proceso (...)”.
8. De lo expuesto, se determina que la Sala Superior de acuerdo a su criterio, ha motivado las
razones fácticas y jurídicas por las cuales considera que debe desestimarse por improcedente la
presente demanda, por lo que el recurso de casación en cuanto a la infracción normativa procesal
denunciada no ha prosperado de acuerdo a las razones precedentemente señaladas, desestimán-
dose ésta; debiéndose analizar ahora la infracción normativa material, para lo cual realizaremos
un estudio de todas las instituciones que consideramos pertinentes para la resolución del caso y
la emisión de la doctrina jurisprudencial aplicable a todas las instancias.
9. Con relación a la infracción normativa material alegada, el asunto a dilucidarse con la inter-
posición del presente medio impugnatorio tiene como objeto esclarecer, en primer término si
se han inaplicado los numerales 01 y 05 del artículo 219 del Código Civil, así como en haber
incurrido en errónea interpretación del artículo 92 de la norma anotada.
10. Para tal efecto se hace necesario tener como puntos de debate y análisis las instituciones
jurídicas de Sujeto de Derecho, Negocio Jurídico, Ineficacia del Negocio Jurídico, Impugnación
de Acuerdos de Asociaciones Civiles, Interpretación Normativa, entre otros temas. Sin embar-
go, previamente a analizar instituciones jurídicas, apreciaremos el desarrollo constitucional del
derecho fundamental a la Asociación y a la Libertad de Contratación, así como sus contenidos
constitucionalmente protegidos conforme a nuestra Constitución y al desarrollo de la jurispru-
6 AGUILERA PORTALES, Rafael Enrique. Constitución y Democracia: Fundamentos Políticos del Estado de Derecho.
Lima: Editora Jurídica Grijley. 2011. p. 34.
7 AGUILERA PORTALES, Rafael Enrique. Op. cit., p. 38.
a constituir organizaciones jurídicas sin fines de lucro(...)”8 . De esta manera, por previsión cons-
titucional se encuentra tutelado el derecho de constituir estructuras organizacionales sin fines
de lucro, para el desarrollo de la libre iniciativa privada en atención a los altos valores de la
dignidad del ser humano.
19. Corresponde destacar que “(...) el derecho de asociación, como ha dicho el Tribunal, comprende
no sólo el derecho de asociarse, sino también el de establecer la propia organización del ente creado por
el acto asociativo, dentro del marco de la Constitución y de las leyes (...)”9. Al establecerse el derecho
de la libre iniciativa de los sujetos de derecho para agruparse por fines altruistas, como es el caso
de una Asociación, también es importante señalar que éstos son libres para adoptar la forma
asociativa que elijan, y es a partir de esta concepción que podemos afirmar la autonomía de la
voluntad de quienes han decidido conformar una persona jurídica no lucrativa para coordinar sus
esfuerzos, en pos de un interés no lucrativo, que puede ser de índole social, cultural, deportivo, etc.
20. La existencia de una persona jurídica, como lo veremos más adelante, importa la reducción
de la pluralidad de sujetos de derecho, personas naturales o incluso personas jurídicas, a un su-
jeto de derecho diferente de sus integrantes, de conformidad con el artículo 78 del Código Civil.
21. De esta manera el derecho de asociación es un derecho fundamental y se encuentra recono-
cido en una serie de instrumentos internacionales de los cuales es signatario el Estado peruano,
tal como es el caso de la Convención Americana de Derechos Humanos10, a tal punto que goza
de reconocimiento constitucional conforme se ha precisado precedentemente.
22. El derecho de asociación sustentado en la dignidad humana tiene múltiples expresiones, entre
ellas religiosas, culturales, sociales, históricas, deportivas, o de otra índole, con los cuales abarca
los más variados ámbitos de la iniciativa privada a efectos de satisfacer los diversos intereses de
quienes las conforman.
23. Siendo ello así, presentamos a continuación jurisprudencia que nos permite apreciar la
manera de tutelar este derecho en la vía constitucional por parte del Tribunal Constitucional.
2.1.1. Desarrollo Jurisprudencial del Tribunal Constitucional.
24. Diversos pronunciamientos del Tribunal Constitucional se han producido con relación al
derecho de asociación y temas conexos, razón por la cual consideramos pertinente destacar:
a) Los fundamentos jurídicos 03 y 04 de la STC 3978- 2007-AA/TC, en la que se ha establecido:
“Alcances y Características del Derecho de Asociación
3. (...) este Colegiado anota que el citado atributo puede ser concebido como aquel derecho
por el cual toda persona puede integrarse con finalidades, los mismos que aunque pueden
ser de diversa orientación tienen como necesario correlato su conformidad con la ley (...)”
(...)
“Libertad de asociarse, de no asociarse y de desvincularse asociativamente
4. (...) Se trata de un derecho que no sólo implica la libertad de integración (libertad de aso-
ciarse en sentido estricto) sino que por correlato también supone la facultad de no aceptar
compulsivamente dicha situación (libertad de no asociarse) o, simplemente, de renunciar
8 VEGA MERE, Yuri. “Numeral 13 del artículo 02 de la Constitución”. En: La Constitución Comentada. Análisis artículo
por artículo. Lima: Gaceta Jurídica. 2ª ed. aumentada, actualizada y revisada. Tomo I. Enero 2013. p. 248.
9 RUBIO CORREA, Marcial. “El Derecho Constitucional de Asociación”. En: El Notario Peruano. Lima: Colegio de
Notarios del Perú. 1998. p. 20. La cita corresponde a Francisco Fernández Segado comentando una jurisprudencia
del Tribunal Constitucional español.
10 Artículo 16.- Libertad de Asociación
1. Todas las personas tienen derecho de asociarse libremente con fines ideológicos, religiosos, políticos, econó-
micos, laborales, sociales, culturales, deportivos o de cualquiera otra índole.
2. El ejercicio de tal derecho sólo puede estar sujeto a las restricciones previstas por la ley que sean necesarias
en una sociedad democrática, en interés de la seguridad nacional, de la seguridad o del orden público, o para
proteger la salud o la moral públicas o los derechos y libertades de los demás.
3. Lo dispuesto en este artículo no impide la imposición de restricciones legales, y aún la privación del ejercicio
del derecho de asociación, a los miembros de las fuerzas armadas y de la policía.
11 GUTIERREZ CAMACHO, Walter. Numeral 14 del artículo 02 de la Constitución. En: La Constitución Comentada.
Análisis artículo por artículo. Lima: Gaceta Jurídica. Segunda Edición aumentada, actualizada y revisada. Tomo I.
Enero 2013. p. 255.
12 KRESALJA, Baldo y César OCHOA. Derecho Constitucional Económico. Lima: Fondo Editorial de la Pontificia Univer-
sidad Católica del Perú. 2009. pp. 277 a 278.
13 BRECIA, Humberto, Lina BIGLIAZZI GERI, Ugo NATOLI, Francesco D. BUSNELLI. Traducción de Fernando Hinestrosa.
Derecho Civil. Tomo I, Volumen 1. Bogotá, Universidad Externado de Colombia, 1992. p. 96.
14 FERNÁNDEZ SESSAREGO, Carlos. Derecho de las Personas. Exposición de motivos y comentarios al Libro Primero del
Código Civil peruano. Lima: Grijley. 11ª ed. 2009. p. 03.
15 BRECIA, Humberto y otros. Op. cit., p 107.
16 FERNÁNDEZ SESSAREGO, Carlos. Op. cit., p 03.
17 ESPINOZA ESPINOZA, Juan. Derecho de las Personas. Lima: Grijley. Tomo I. 6ª ed. Mayo 2012. p. 172.
18 ARANDA RODRÍGUEZ, Ana María. Responsabilidad Civil de las Personas Jurídicas. El caso de los daños producidos a
través de los órganos constitutivos de las Sociedades Anónimas: Aportes para la modificación del artículo 78 del Código
Civil de 1984. Tesis con la que se optó el Grado de Maestra en Derecho Civil y Comercial. 2006. p. 11.
19 DÍEZ-PICAZO, Luis y Antonio GULLÓN. Sistema de Derecho Civil. Introducción, Derecho de la Persona, Autonomía
Privada, Persona Jurídica. Madrid: Tecnos. Vol. I. 10ma ed. 2ª reimp. 2002. p. 575.
20 ELÍAS LAROZA, Enrique. Ley General de Sociedades comentada. Fascículo Primero (artículos Nº 01 al Nº 49). Lima:
Editora Normas Legales. 1998. p. 10.
21 HUNDSKOPF EXCEBIO, Oswaldo. Manual de Derecho Societario. Lima: Gaceta Jurídica. Segunda edición actualizada,
revisada y aumentada. Febrero 2012. p. 25.
22 DE BELAUNDE LÓPEZ DE ROMAÑA, Javier. Invirtiendo en el Perú. Lima: Apoyo. 1994. pp. 363 a 364.
3.2.2.1. Fundación.
59. Este sujeto de derecho parte del supuesto de hecho de la existencia de “(...) un patrimonio
afectado a un fin, al cual se dota de una organización cuyo rol es administrar dicho patrimonio para
los propósitos fijados por los fundadores (...)”23. La constitución de este sujeto de derecho busca
la consecución de un fin altruista fijado de antemano por quien es el fundador que justamente
constituye a la fundación.
60. Por tanto, es “(...) una organización creada para la gestión de un patrimonio autónomo destinado
y vinculado de manera tendencialmente perpetua a la obtención de un fin socialmente relevante prees-
tablecido por el fundador (...)”24, en ello estriba el carácter no lucrativo de este sujeto de derecho;
toda vez que la afectación del patrimonio está destinado a la consecución de un fin valioso
fijado de antemano por el titular o fundador, el cual es ineludible para el logro de su finalidad.
61. La fundación se constituye en “(...) un sujeto de derecho que administra uno o más bienes que
dejaron de pertenecer al patrimonio del fundador o de los fundadores y que, por tanto, responde por
las obligaciones contraídas por dicho sujeto en el curso de sus actividades (...)”25; teniendo en cuenta
que las obligaciones existentes deben ser cumplidas en los términos pactados, a lo cual no puede
sustraerse el patrimonio afectado por el fundador.
3.2.2.2. Comité.
62. Con relación a este sujeto de derecho se puede afirmar que “(...) se constituye por la libre
iniciativa de una pluralidad de personas que se organizan para recaudar aportes del público destinados
a la realización de una finalidad altruista (...)”26.
63. Este aparato organizativo cobra titularidad para el derecho, a efectos de canalizar los aportes
de quienes buscan un fin altruista, y su finalidad es justamente constituirse como un ente que
brinde la seguridad que otorga el ordenamiento jurídico para la aportación de fondos para
estos fines.
3.2.2.3. Asociación.
64. Es “(...) una organización de personas que es el único modo en que los hombres actúan cuando
se reúnen para cumplir determinados fines valiosos (...)”27. Constituye una agrupación de personas
naturales y/o jurídicas agrupadas en torno a un fin no lucrativo, a efectos de canalizar un esfuerzo
altruista común a todos sus integrantes.
65. Sin embargo, debemos tener presente que una persona jurídica no lucrativa también realiza
actividades económicas a propósito del fin que persigue, lo cual es diferente al típico reparto de
utilidades propio de las personas jurídicas lucrativas, porque en este caso constituye su finalidad
ineludible, lo cual no se produce en este sujeto de derecho, máxime cuando de requerirles cuo-
tas a sus asociados, ello se debe al mantenimiento propio de la Asociación, a efectos de darle
continuidad en el tiempo a ésta y a sus actividades; asimismo, de producirse un excedente, éste
se dedicará al logro del fin altruista fijado en sus estatutos.
66. Uno de los puntos que debemos destacar respecto de esta persona jurídica no lucrativa es
que “(...) la organización es nota esencial de toda asociación, distinguiéndola de un mero conglome-
rado de personas, y es el entramado normativo por el que se va a regir la actividad de los asociados en
cuanto tales, entramado en el que se contienen las prescripciones correspondientes a los órganos que
van a dirigir y representar al ente jurídico creado (...)”28. No solamente los agrupa un fin altruista,
los agrupa este tipo especial de organización para el logro de este fin.
32 BETTI, Emilio. “Reflexiones Sobre la Noción de Negocio Jurídico”. Traducción de Leysser L. León. En: Teoría General
del Negocio Jurídico. Cuatro Estudios Fundamentales. Lima: Ara. 2001. p. 47.
33 Ibid.
34 SALAZAR GALLEGOS, Max. “Artículo 87.- Quórum y Representación de Asociados”. En: Código Civil comentado.
Comentan 209 especialistas en las diversas materias del derecho civil. Lima: Gaceta Jurídica. Tomo I. Segunda Edición.
Primera reimpresión. Agosto de 2007. p. 331.
mitad de los miembros concurrentes, con lo cual no nos encontramos frente a una mayoría cali-
ficada, de más de la mitad de los asociados inscritos; toda vez que ello implicaría la inmovilidad
de la asociación, y su total obsolescencia, cuando no su inutilidad.
91. Con relación “(...) al número de asistentes, debe tomarse en cuenta que se trata de un quórum
mínimo y nada obsta para que el estatuto solicite mayorías más altas para la toma de acuerdos, inclu-
so, podría llegar a requerir la presencia del total de asociados para tal efecto (...)”35. La paralización
de las actividades de la asociación o de cualquier otra persona jurídica, no es el objetivo de la
normativa vigente, todo lo contrario, se busca que su actuación sea dinámica dentro del marco
del orden jurídico, y lo que se ha establecido es un mínimo para que desarrollen sus actividades,
pudiéndose fijar en el estatuto números mayores en cuanto a la adopción de acuerdos, teniendo
al principio de autonomía de la voluntad en resguardo de tal objetivo. Siendo ello así, la previsión
normativa establece un mínimo legal para efectos de la marcha de la asociación dentro de los
cánones regulatorios actuales.
92. Lo que debemos tener presente en una persona jurídica, lo reiteramos, es que la formación
de su voluntad es muy especial, no es una persona natural la que va a señalarnos a través de
un proceso volitivo y comunicacional su decisión, no, lo que tenemos son márgenes legales
previamente establecidos, con los cuales se precisa mínimamente la formación de esta voluntad
de la entelequia jurídica, a efectos de expresar esta decisión a través de la adopción del acuer-
do, primero verificando el quórum, y luego con la votación correspondiente; requisitos que son
copulativos en la formación de la voluntad de la Asociación Civil.
93. Asimismo, “(...) el método asambleario opera como instrumento de protección de las minorías:
les permite ser previamente informadas del objeto de los acuerdos, de participar en una discusión que
preceda a la votación y en el curso de la cual defender, en contradicción con la mayoría, su propio
punto de vista. Pero el acuerdo, en cuanto tomado en una asamblea regularmente convocada y fruto
de la discusión entre mayoría y minoría, es siempre voluntad de la mayoría, y vinculante también para
la minoría (...)”36. En efecto, la adopción del acuerdo por la mayoría expresa finalmente la vo-
luntad de la Asociación, pero ésta tiene que ser regularmente decidido a través de los quórums
y mayorías establecidas en la normativa vigente, así como con el total respeto a las posiciones
de la minoría contrarias al acuerdo. Sin embargo, una vez que se ha tomado el acuerdo que
regula el desenvolvimiento de la Asociación Civil, éste somete a la minoría quedando a salvo el
derecho de ésta para impugnarlo dentro de los plazos preestablecidos en la norma sustancial, si
es que vulnera la ley o el estatuto, en el ejercicio diligente de su derecho conforme lo veremos
más adelante.
94. Corresponde destacar también, que por previsión normativa se ha establecido la reserva
de un quórum calificado para “(...) dos temas o decisiones de particular importancia: la modifica-
ción del estatuto y la disolución de la asociación (...)”37. Los asuntos precedentemente señalados
son absolutamente trascendentes en la marcha de la Asociación Civil, y constituyen hitos en la
continuación o no de esta persona jurídica no lucrativa, por ello la preocupación del legislador
en establecer un número mínimo de votación, en la primera convocatoria de más de la mitad
de los miembros concurrentes, y en la segunda convocatoria de asociados que representen no
menos de la décima parte.
3.3. Situaciones Jurídicas Subjetivas
95. Todo sujeto de derecho, sea una persona natural o jurídica, despliega sus actividades de
acuerdo a “(...) ‘situaciones’ o ‘posiciones’ en las cuales las reglas del derecho ‘colocan’ a una persona
(...)”38, es decir, se produce un determinado modo o manera de estar de los sujetos de derecho
en la vida social que el ordenamiento jurídico valora y tutela a través de la juridicidad.
96. Es importante destacar que las situaciones jurídicas subjetivas abarcan incluso a las relacio-
nes jurídicas; toda vez que pueden existir situaciones jurídicas subjetivas en donde el sujeto de
39 ZATTI, Paolo. Op. cit., p. 365. El derecho subjetivo es la situación jurídica de una persona a la cual una norma
asegura la posibilidad de satisfacer un cierto interés económico o moral.
40 ZATTI, Paolo. Op. cit., p. 362. El poder es la situación del sujeto que puede eficazmente realizar un acto.
41 ZATTI, Paolo. Op. cit., p. 361. La facultad es la situación del sujeto que puede lícitamente realizar un acto.
42 ZATTI, Paolo. Op. cit., p. 376. En el derecho potestativo el titular del derecho, en estos casos, tiene el poder de
determinar un cambio de la situación jurídica, que la otra parte sufre.
43 ZATTI, Paolo. Op. cit., p. 359. El deber implica la situación de la persona que debe tener un cierto comportamiento.
44 ZATTI, Paolo. Op. cit., p. 363. La sujeción implica la situación de un sujeto que, sin estar obligado a un determinado
comportamiento, sufre la consecuencia del ejercicio de un poder ajeno.
45 ZATTI, Paolo. Op. cit., p. 364. La carga se refiere a que un cierto resultado puede serobtenido sólo por quien
realice (sin estar obligado) un determinado comportamiento.
46 ZATTI, Paolo. Op. cit., p. 366.
47 ZATTI, Paolo. Op. cit., p. 359.
48 ZATTI, Paolo. Op. cit., p. 377.
Gesetzbuch) que se lo regula como resultado del desarrollo doctrinario del Foro Alemán, por
lo tanto corresponde acudir a este ordenamiento a fin de establecer la compatibilidad de esta
institución con nuestra normativa vigente y los principios que la inspiran.
4.1. Origen y evolución del negocio jurídico.
104. Conforme lo hemos anotado precedentemente, la “(...) doctrina alemana del siglo XIX
construyó las bases de la doctrina moderna del Negocio Jurídico (Rechtsgeschaft). La categoría del
negotium iuridicum había hallado su primera formulación doctrinal en el Systema Elementare Universae
Jurisprudentiae Positivae publicado por Nettelbladt (1719-1791), en 1749 (...)”49.
105. La categoría del negocio jurídico, tiene su origen en la evolución del pensamiento germa-
no, y es la regulación de éste la que nos debe proporcionar los enfoques necesarios para una
adecuada interpretación del negocio jurídico aplicable a nuestra cultura jurídica, máxime cuando
éste es ajeno a nuestra evolución cultural y normativa, por lo que sólo es posible una adecuada
integración a nuestro sistema si la interpretación que se realiza se sustenta en los principios que
fundamentan la normativa vigente, toda vez que “(...) en ocasiones el legislador toma prestada
una regla o una institución esperando que luego pueda aprender cómo aplicarlas apropiadamente
(...)”50, con lo cual se desnaturaliza el negocio jurídico, tal cual se entiende en el ordenamiento
del que es originario, y que se pretende regular entre nosotros, peor aún, se importan problemas
que nos son desconocidos.
106. Es por ello que los conceptos de hecho jurídico, acto jurídico en sentido estricto y negocio
jurídico, que cotidianamente tratamos y desarrollamos, tanto en las aulas de clase como en el Foro
Nacional, así como en la judicatura, deben ser apreciados con actitud crítica respecto del origen
y fundamento de éstas en el ordenamiento del cual provienen, a fin de compatibilizarlo con el
nuestro, de lo contrario corremos el riesgo de haber realizado una “importación normativa fallida”.
107. Teniendo en cuenta lo antes precisado, el negocio jurídico es definido en el Código Civil
alemán de 1900, y para ello debe puntualizarse que éste “(...) consolidó legislativamente la teoría
sobre el negocio jurídico al regularla en la Sección Tercera del Libro II (Parte General). Así, en la Exposición
de Motivos se definió al negocio jurídico como la declaración de voluntad privada, dirigida a un resul-
tado jurídico, que de acuerdo con el orden jurídico se realiza por ser querido (...)”51. Lo característico,
desde el origen de este cuerpo normativo, con relación al negocio jurídico, de donde lo hemos
importado, ha sido la gran importancia que se asigna a la voluntad privada a fin de obtener un
resultado jurídico, ello es lo propio del negocio jurídico en los términos de Savigny, para quien
“(...) el negocio jurídico es la manifestación de voluntad destinada a crear, regular, modificar o extinguir
las relaciones jurídicas (...)”52. Pero ello se produjo en los orígenes del negocio jurídico, y debemos
tener en cuenta que el ordenamiento jurídico es dinámico así como también lo es la sociedad
a la que se pretende regular.
4.1.1 Tesis Voluntarista.
108. La tesis voluntarista del negocio jurídico, fue la tesis primigenia de éste, estableciéndose
como premisa el dogma de la voluntad; toda vez que “(...) se exige para el negocio jurídico una
manifestación cuyo efecto corresponda al contenido de la voluntad (...)”53, por ello es que no puede
soslayarse que desde un comienzo se ha precisado que “(...) el negocio jurídico es el instrumento
que utilizan las partes para reglamentar sus relaciones jurídicas dentro del límite que la ley les permite.
La modificación del estado jurídico es siempre el objeto del negocio y también su efecto, si lo realiza
49 MORALES HERVIAS, “Rómulo. Código Civil de 1936 y Doctrina Peruana: Recepción de la Teoría General del
Negocio Jurídico”. En: Proceso & Justicia, Revista de Derecho Procesal, Nº 05. editada por alumnos de la Facultad
de Derecho de la Pontificia Universidad Católica del Perú. 2005. p. 134.
50 SAAVEDRA VELAZCO, Renzo E. El Negocio Jurídico Testamentario. Contribución al Estudio del Negocio de Última
Voluntad. Lima: Jurista Editores. 2013. p. 50. Cita que corresponde a Rodolfo Sacco.
51 MORALES HERVIAS, Rómulo. Op. cit., p. 135.
52 Ibid.
53 VON THUR, A. Derecho Civil. Teoría General del Derecho Civil Alemán. Los Hechos Jurídicos. Traducción directa del
alemán por Tito Ravá. Madrid: Marcial Pons Ediciones Jurídicas. Volumen II. 2005. p. 98.
contemplado en el supuesto de hecho de la norma jurídica para la calificación jurídica por parte del
Derecho positivo. Es decir, el negocio jurídico definido como supuesto de hecho y por consiguiente
como elemento de la norma jurídica, adquiere una dimensión diferente de las definiciones savignianas
y francesas (...)”58; de esta manera el establecimiento de la normativa declaracionista negocial,
responde a la necesidad de intercambios civiles patrimoniales, a fin que los mismos se realicen
de manera ágil y segura en base a lo expresado por los sujetos de derecho, toda vez que “(...)
con la teoría de la declaración comienza un proceso de objetivación del intercambio, el cual tiende a
perder parte de sus caracteres originarios de voluntariedad (...)”59. Buscándose con ello la seguridad
en la objetividad que brindan las declaraciones de los sujetos de derecho.
4.1.3. Desarrollos posteriores.
115. Las teorías precedentemente señaladas son las iniciales del desarrollo del negocio jurídico;
sin embargo, su evolución y estudio, tanto doctrinario como legislativo, han continuado en
diferentes ordenamientos extranjeros.
116. Si bien excede al presente Pleno Casatorio Civil desarrollar en extenso las diversas teorías
posteriores a las antes reseñadas, es pertinente señalarlas y tenerlas en cuenta, sí y sólo sí la
interpretación de las mismas es compatible con nuestro ordenamiento jurídico.
117. Frente a las irreconciliables posiciones voluntaristas y declaracionistas surgieron “(...) las
teorías de la confianza y de la responsabilidad, buscando aminorar las consecuencias extremas de la
aplicación de la teoría voluntarista, que admite ilimitadamente cualquier supuesto de discrepancia, y
de la teoría declaracionista, que no acepta ninguno de esos supuestos de conflicto (...)”60, estas nuevas
posiciones pretenden acercar las teorías iniciales radicalmente opuestas, y establecer puntos más
ponderados al momento de evaluar al negocio jurídico.
118. La teoría de la responsabilidad “(...) busca suavizar los efectos de la teoría voluntarista, en casos
de discrepancia prevalecerá la voluntad declarada si dicha discrepancia ha sido querida por el autor de
la declaración de voluntad, pues si la misma ha sido involuntaria deberá prevalecer la voluntad interna
(...)61, razón por la cual en esta teoría los sujetos de derecho deben respetar lo que declaran,
toda vez que son responsables de lo que expresan; en cambio, en el caso de la teoría de la
confianza, “(...) debe prevalecer la voluntad interna si el destinatario de la declaración de voluntad,
en caso de haber discrepancia, no confió porque se percató de la falta de coincidencia, pues de haber
confiado por no haber podido advertir discrepancia prevalecerá la voluntad declarada (...)62, como
regla general privilegia la seguridad jurídica, es decir, lo que está recogido en el negocio jurídico
es lo que se tiene en cuenta.
119. Otro de los enfoques del negocio jurídico ha permitido el desarrollo de la teoría preceptiva
del mismo, por medio del cual “(...) el negocio se desenvuelve a través de una declaración o de un
comportamiento de naturaleza preceptiva, que no son simples relaciones de la voluntad interna, sino
disposiciones ‘con las cuales el particular dicta reglas a sus propias relaciones con otros’ (...)”63 y ha
señalado que el negocio jurídico es “(...) el acto con el cual el individuo regula por sí los intereses
propios en las relaciones con otros (acto de autonomía privada), y al que el Derecho enlaza los efectos
más conformes a la función económico-social que caracteriza su tipo (típica en este sentido) (...)64, el
negocio jurídico se presenta en esta teoría como un precepto o mandato interprivado.
120. La teoría axiológica del negocio jurídico es la que propone que “(...) en relación con el negocio
jurídico, la dificultad surge del hecho de que este es un valor (...) cuyo destino es ser confrontado con
65 BATTISTA FERRI, Giovanni. El Negocio Jurídico. Traducción y notas de Leysser L. León. Lima: Ara Editores. 2002.
p. 135.
66 BATTISTA FERRI, Giovanni. Op. cit., p. 143.
67 MORALES HERVIAS, Rómulo. Estudios sobre la Teoría General del Negocio Jurídico. Lima: Ara Editores. 2002. p. 138.
68 MORALES HERVIAS, Rómulo. Op. cit., pp. 139 a 140.
69 FERRI, Luigi. Lecciones sobre el Contrato. Curso de Derecho Civil. Presentación notas y edición al cuidado de Rómulo
Morales Hervias y Leysser L. León. Traducción de Nelvar Carreteros Torres. Lima: Editorial Jurídica Grijley. 2004.
Pp. lvi a lvii.
70 La Exposición de Motivos del Código Civil de 1936, concretamente la que se refiere al Libro Quinto, en donde se
regula el artículo 1075 del Código Civil.
de los actos jurídicos desde el punto de vista de su aptitud para afectar de alguna manera las relaciones
de derecho. (...) Los hechos humanos que no engendran, modifican o extinguen derechos no interesan
realmente al legislador, y se consideran como manifestaciones necesarias del ser racional que los ejecuta
en cumplimiento de su destino para satisfacer las aspiraciones inconexas con el derecho (...) si el vínculo
jurídico reposa de modo eminente sobre una relación de naturaleza personal, es necesario examinar, en
primer término, la capacidad de las personas entre las que se crea el vínculo de derecho. Es igualmente
necesario que la cosa esté en el comercio y sea, por lo tanto susceptible de adquirirse o de transmitirse.
Y, finalmente, que la forma externa en que la voluntad debe manifestarse sea conforme a ley. (Actas,
Fasc. IV, pág. 206. Ponencia del Dr. M. A. Olaechea)”71.
126. La disposición normativa antes señalada y la respectiva exposición de motivos nos presentan
los requisitos de validez del negocio jurídico, más no la concepción dogmática del mismo, la cual
será consignada en el artículo 140 del Código Civil de 1984 como lo veremos más adelante.
127. Los estudios doctrinarios con relación al Código Civil de 1936, en especial respecto del
artículo 1075 de la norma anotada, establecieron que “(...) los hechos voluntarios cuyo efecto es
querido por el agente, trátase entonces de lo que se denomina acto jurídico. Este es pues un hecho
voluntario, cuyo efecto es querido por el agente (...)”72.
128. Al respecto, cabe precisar que es a partir de los conceptos esbozados que incluso puede
establecerse que para cierto sector de la doctrina de aquel momento, el acto jurídico, que debe-
mos entender como negocio jurídico, se caracterizaba, por lo que décadas después se estatuyó
como la voluntad de los efectos queridos en la realización del mismo, concepción inicial del
negocio jurídico en su ordenamiento de origen, de acuerdo a la tesis voluntarista antes precisada.
129. Adicionalmente, la doctrina señaló que “(...) es propio de todo acto jurídico que se produzca
una manifestación consciente de la voluntad del agente (...)”73, siendo ello así, nunca fue desconocido
para el Foro Nacional la existencia de una manifestación de voluntad, la cual justamente no se
encuentra taxativamente regulada en la norma en comento, y en razón de ello se precisó que
“(...) el artículo 1075 es en cierta forma diminuto. No basta la capacidad del agente, la licitud del objeto
y la observancia -en su caso- de la forma, para que surja un acto jurídico válido. Se requiere también
que la declaración de voluntad, en que se manifiesta el negocio, responda a una determinación seria,
destinada a crear un resultado jurídico (...)”74.
130. Por ello es que el artículo 1075 del Código Civil de 1936 se encontraba incompleto; toda vez
que consignaba a los elementos de validez del acto jurídico, pero no se refería a la manifestación
de voluntad que justamente es la que debe reunir a éstos, calificados como “(...) los elementos
esenciales del acto (...)”75. Siendo ello así, éstos se enmarcan en lo que es “(...) propio de todo
acto jurídico que se produzca una manifestación consciente de la voluntad del agente (...)”76, soslayar
ello, implica desconocer al negocio jurídico mismo como expresión de la autonomía privada.
131. Es pertinente referir que “(...) la Exposición de Motivos del Código Civil alemán define así al
negocio jurídico: una declaración privada de voluntad dirigida a la producción de un resultado jurídico,
el cual llega a ser tal conforme al orden jurídico, porque él es querido’ (...)”77. En ese sentido, era de
conocimiento de la doctrina nacional la noción voluntarista del negocio jurídico, sin embargo,
se han producido una serie de confusiones lamentables en sus conceptos que no han permitido
su desarrollo adecuado.
132. Corresponde señalar que “(...) en general, la doctrina nacional del Código Civil de 1936 no
recepcionó adecuadamente las premisas de las doctrinas francesas y alemanas. Esta inadecuación se
la institución del negocio jurídico en nuestra normativa vigente, razón por la cual incluso cierto
sector de la doctrina ha señalado “(...) que debe eliminarse la definición de acto jurídico contenida
en el artículo 140, debiendo mantenerse únicamente la segunda parte referida a los requisitos de
validez (...)81, premisa con la que estamos en desacuerdo, requiriéndose en cambio la correcta
interpretación de la citada disposición normativa de manera que sea compatible con nuestro
ordenamiento y los principios que lo sustentan.
137. A propósito de lo antes señalado, debe tenerse en cuenta que en el negocio jurídico “(...)
no es el sujeto el que decide cuándo un hecho es o no un acto jurídico, o cuándo es un acto jurídico
en sentido estricto o un negocio jurídico, sino que ello depende exclusivamente de la valoración del
ordenamiento jurídico. Los efectos jurídicos son siempre atribuidos o concedidos por el derecho, no
son nunca creación de la voluntad del sujeto o de las partes (...)82, por consiguiente, los sujetos de
derecho son los que establecen el propósito o finalidad que quieren alcanzar pero finalmente
será el ordenamiento jurídico quien acogerá éstos o no. Este es el negocio jurídico que tenemos
regulado, no la anarquía del individualismo que pretende convertir todo lo que se acuerda en un
estatuto negocial sin tomar en cuenta lo que establece el ordenamiento, cual si éste sólo tuviera
un papel meramente referencial, lo cual es falso.
138. Lo que ocurre finalmente con el negocio jurídico es la autorregulación de intereses privados
de los sujetos de derecho, y con ello no nos estamos refiriendo a una regulación del sistema de
fuentes legales de nuestro ordenamiento, sino que se establece este estatuto negocial a partir
del ejercicio de la autonomía privada de los sujetos de derecho, a efectos de obtener una fina-
lidad práctica que éstos buscan en base a la normativa vigente a fin de satisfacer sus intereses y
será en último término el ordenamiento jurídico el que establecerá si este propósito o finalidad
perseguida se adecua o no a éste.
139. Sin perjuicio de lo antes señalado, tal cual se encuentra nuestro Código Civil “(...) la orientación
adoptada es claramente declaracionista sobre la base del artículo 168, que señala que para interpretar
el acto jurídico se debe tomar en cuenta únicamente la voluntad manifestada, debidamente concordado
con los artículos 201 y 194, que al haber optado por la teoría de la confianza, están admitiendo de
manera implícita el sistema declaracionista, no existiendo ningún artículo dentro de este libro que nos
permita sugerir que la orientación es voluntarista (...)”83.
140. Siendo ello así, de conformidad con la normativa vigente, una de las interpretaciones
posibles nos muestra que tanto el artículo 140 como lo regulado en el Libro II del Código Civil
de 1984, responden a la teoría declaracionista del negocio jurídico.
4.4. La Ineficacia en los negocios jurídicos.
141. Las categorías jurídicas muchas veces son áridas en su explicación y desarrollo dogmático
pero “(...) la relevancia particular del negocio jurídico no constituye una mera abstracción conceptual;
ella repercute, por el contrario, en la producción de sus efectos (...)”84, que constituyen el propósito
de la celebración del negocio jurídico, y justifican plenamente tanto su regulación como su tutela
a través de los mecanismos previstos en la normativa vigente, en aras de la autonomía negocial
de las partes; sin embargo, la aparición de negocios que contienen vicios también es objeto de
un tratamiento específico por parte del ordenamiento.
142. Por ello es que la validez de todo negocio jurídico implica el cumplimiento de los elementos,
presupuestos y requisitos propios de la estructura negocial, los cuales de no producirse implican
la ineficacia del negocio jurídico que “(...) es ante todo, unas sanción, si por sanción entendemos la
reacción del ordenamiento jurídico ante una infracción (...)85, esta infracción ocasiona que el sistema
jurídico, a efectos de corregir el surgimiento de negocios con vicios, sean originarios o sobreveni-
81 TABOADA CÓRDOVA, Lizardo. Acto Jurídico, Negocio Jurídico y Contrato. Lima: Grijley. 2002. p. 33.
82 TABOADA CÓRDOVA, Lizardo. Op. cit., p. 36.
83 TABOADA CÓRDOVA, Lizardo. Op. cit., p 229.
84 SCOGNAMIGLIO, Renato. “El Negocio Jurídico: Aspectos Generales”. En: Teoría General del Negocio Jurídico. 04
Estudios Fundamentales. Lima: Ara Editores. 2001. p. 177.
85 DÍEZ-PICAZO, Luis y otro. Op. cit., p. 533.
149. Esta causal se encuentra regulada en el numeral 01 del artículo 219 del Código Civil, en
la cual se establece que El acto jurídico es nulo: 1.- Cuando falta la manifestación de voluntad del
agente (...).
150. Este vicio estructural originario comprende “(...) todas aquellas declaraciones que no tienen
efectos vinculantes (...) declaraciones hechas en broma, escénicas, realizadas con fines didácticos o por
cortesía (...) la denominada incapacidad natural (...)”92, y todos aquellos supuestos en los cuales
se presentan vicios en la manifestación de voluntad, que impiden la producción de los efectos
jurídicos fijados como propósito por las partes; sin embargo, debemos tener en cuenta que “(...)
el enunciado del inciso es ancho porque hay casos de verdadera falta de declaración de voluntad, pero
por propio mandato de otros artículos no acarrean nulidad (...)93, estos serían supuestos en que si
bien el ordenamiento señala vicios en la voluntad del agente, esta voluntad declarada no se
encuentra afecta a nulidad sino de anulabilidad, como es el caso de los supuestos de error, dolo,
violencia o intimidación previstos en el numeral 02 del artículo 221 del Código Civil.
b) Simulación Absoluta.
151. La citada causal se encuentra regulada en el numeral 05 del artículo 219 del Código Civil, en
la cual se establece que “El acto jurídico es nulo: (...) 5.- Cuando adolezca de simulación absoluta (...)”.
152. Es pertinente referir que “(...) la simulación no consiste sino en un caso de discrepancia entre
la voluntad declarada y la voluntad interna, realizada de común acuerdo entre las partes contratantes,
a través del acuerdo simulatorio, con el fin de engañar a los terceros (...)”94. De esta manera lo que
se produce en el caso de la simulación absoluta es la proscripción con relación a que las partes
utilicen el ordenamiento jurídico para afectar los intereses de terceros; toda vez que no tienen la
menor intención de celebrar ningún negocio jurídico, porque nunca quisieron celebrar ningún
estatuto negocial para buscar los efectos del ordenamiento jurídico.
153. Por ello fue que “(...) León Barandiarán consideró siempre a la simulación absoluta como causal
de nulidad absoluta. Si se simula un acto -escribió-, sin que tras él se encubra ninguno real, no hay acto
alguno, nada es querido, nada es verdadero, el consentimiento no existe (...)”95, no existe entonces
ningún propósito para lograr los efectos previstos en el ordenamiento jurídico con la celebración
de un negocio jurídico simulado.
4.4.1.2. Anulabilidad.
154. Con relación al acto anulable, “(...) se verifica ésta cuando el negocio, que ha producido sus
efectos desde el principio, puede posteriormente ser declarado inválido (nulo) a consecuencia de la
impugnación propuesta por el sujeto legitimado para ello. Esto nos refleja el carácter incompleto de la
anulabilidad como forma de ineficacia estructural, que, incluso, se revela en la existencia de un sistema
taxativo de anulabilidades (...)”96. A diferencia de la nulidad que por la calidad del vicio estructural
del negocio interesa al orden público, pudiendo ser solicitada su declaración por cualquiera que
tenga interés, en el caso de la anulabilidad el pedido es de parte, dado que existe una gradación
de menor gravedad por la comisión de este vicio estructural, el cual debe estar taxativamente
regulado.
155. En el caso del negocio anulable, éste “(...) produce los efectos que persiguen las partes, pero
de tal suerte que éstos pueden ser extinguidos (...)”97, en efecto “(...) el negocio anulable, en cambio
produce sus efectos, así éstos puedan ser removidos con eficacia retroactiva (...) cuando media un pro-
nunciamiento de anulación por tanto, los efectos se dicen provisionales o inestables o interinos (...)98,
esto quiere decir que estos efectos del negocio jurídico son precarios en tanto que la parte que
se considere afectada no solicite la anulabilidad del negocio celebrado, que de producirse ello,
92 ESPINOZA ESPINOZA, Juan. Acto Jurídico Negocial, Análisis doctrinario, legislativo y jurisprudencial. Lima: Gaceta
Jurídica. 2a ed. 2010. p. 500.
93 LOHMANN LUCA DE TENA, Juan Guillermo. El Negocio Jurídico. Lima: Studium. 2a ed Junio 1987. P. 393.
94 TABOADA CORDOVA, Lizardo. Op. cit., p. 118.
95 VIDAL RAMÍREZ, Fernando. El Acto Jurídico en el Código Civil Peruano. Lima: Cultural Cuzco. 1989. p. 416.
96 PALACIOS MARTÍNEZ, Eric. Op. cit., p. 167.
97 VON THUR, A. Op. cit., p. 269.
98 BRECIA, Humberto y otros. Op. cit., pp. 1046 a 1047.
consejo directivo, facultándolo para actuar judicialmente contra los acuerdos que sean contrarios a la
ley y el estatuto (...)”103.
163. Se ha establecido por ello la tutela del derecho del asociado preocupado por la marcha
de la Asociación Civil a través del ejercicio diligente del derecho de impugnación; toda vez que
este derecho no tiene como finalidad proteger al asociado que pretende el entorpecimiento ni
la inmovilidad de la marcha de la citada persona jurídica no lucrativa, ni tampoco protege a
quien ha mostrado descuido y desinterés en la tutela de sus derechos.
5.1. La pretensión impugnatoria asociativa prevista en el artículo 92 del Código Civil.
164. La impugnación de acuerdos de Asociaciones Civiles, personas jurídicas no lucrativas, se
produce de conformidad con el artículo 92 del Código Civil de 1984, el cual precisa que:
Todo asociado tiene derecho a impugnar judicialmente los acuerdos que violen las disposiciones
legales o estatutarias. Las acciones impugnatorias deben ejercitarse en un plazo no mayor de
sesenta días contados a partir de la fecha del acuerdo. Pueden ser interpuestas por los asistentes, si
hubieran dejado constancia en acta de su oposición al acuerdo, por los asociados no concurrentes
y por los que hayan sido privados ilegítimamente de emitir su voto. Si el acuerdo es inscribible
en el registro, la impugnación puede formularse dentro de los treinta días siguientes a la fecha
en que la inscripción tuvo lugar.
Cualquier asociado puede intervenir en el juicio, a su costa, para defender la validez del acuerdo.
La impugnación se demanda ante el Juez Civil del domicilio de la asociación y se tramita como
proceso abreviado.
165. Por ende, “(...) el derecho de impugnación es un derecho complementario al derecho de voto
que sirve para cautelar la correcta formación de la voluntad social que, como se sabe, es distinta e in-
dependiente de la voluntad de los accionistas que forman la junta general, derecho que le es conferido
al accionista que no contribuyó a su formación ya sea porque votó en contra del acuerdo, dejando
constancia en acta de su oposición, porque no estuvo presente en la junta en la que se aprobó el acuerdo,
o porque fue privado ilegítimamente de su derecho de voto (...)”104.
166. Al respecto, cabe precisar que si bien la cita textual, precedentemente consignada se
refiere a una persona jurídica lucrativa, el derecho a impugnar el acuerdo comparte la misma
naturaleza que en el caso de la persona jurídica no lucrativa, Asociación Civil. En realidad, la
tutela de los socios, y en nuestro caso de los asociados, se condice con el derecho a la revisión
de los acuerdos adoptados, razón por la cual se promueve la pretensión señalada en la norma
anotada. Ello se debe a la especial naturaleza de la persona jurídica; toda vez que la formación
de su voluntad se produce en la asamblea general, con los quórums y mayorías preestablecidas
para ello, conforme lo hemos apreciado precedentemente; sin embargo, lo reiteramos, los sujetos
de derecho, que forman la voluntad de la persona jurídica, tienen la prerrogativa, conforme a
ley para impugnar los acuerdos adoptados en supuestos taxativamente establecidos, como los
regulados en el artículo 92 del Código Civil.
167. Siendo ello así, debemos recordar que el fundamento constitucional del derecho de acción,
que sirve de fundamento a la pretensión impugnatoria asociativa de ineficacia, se encuentra en
el numeral 20 del artículo 02 de la Constitución de 1993, el cual establece que Toda persona
tiene derecho: (...) 20. A formular peticiones, individual o colectivamente, por escrito ante la autoridad
competente, la que está obligada a dar al interesado una respuesta también por escrito dentro del plazo
legal, bajo responsabilidad (...). De esta manera, el derecho de acción, conforme a la evolución
propia de los Estados Constitucionales de Derecho, se integra al elenco de los derechos funda-
mentales, cuya lista no es cerrada, de conformidad con el artículo 03 de la norma fundamental.
168. Por ello es que, “(...) La garantía de acceso al judicial -poder, al entender de algunos; derecho,
para otros - está prevista en sede constitucional (...) y se denomina acción. Vista desde ese ángulo,
constituye la garantía de acceso al mecanismo estatal de solución de controversias, denominado “pro-
ceso”. A todos se les asegura la posibilidad de ser oídos en juicio, situación que no puede ser negada
aunque al pedido le falten condiciones mínimas para ser examinado (...)”105.
a 327.
106 DEVIS ECHANDÍA, Hernando. Derecho y Deber de Jurisdicción, y la Igualdad de las Personas ante Aquélla y en
el Proceso. En: Ius Et Veritas. Nº 10. Revista editada por los alumnos de la Facultad de Derecho de la Pontificia
Universidad Católica del Perú. 1995. pp. 15 a 16.
107 DEVIS ECHANDÍA, Hernando. Op., cit. p. 16.
108 Ibid.
109 HUNDSKOPF EXEBIO, Oswaldo. “El Derecho de Impugnación de Acuerdos de Juntas Generales de Accionistas en
la Ley General de Sociedades y su Ejercicio a través de Acciones Judiciales”. En: Manual de Derecho Societario. Lima:
Gaceta Jurídica. 2a ed.. Febrero 2012. p. 399.
caso, con el derecho a impugnar los acuerdos adoptados por los miembros de las Asociaciones
Civiles, siendo este un derecho personal, de conformidad con el artículo 89 del Código Civil, en
donde cada asociado tiene un voto, no siendo transmisible por regla general, y ciertamente, es
un derecho potestativo por parte de quien no está conforme con el acuerdo adoptado, dado
que puede interponer la pretensión de impugnación de acuerdos o no, pero teniendo en cuenta
siempre el ejercicio diligente del derecho.
176. Siendo el objeto del proceso la pretensión, como es el caso de la pretensión impugnatoria
de acuerdos, conforme al artículo 92 del Código Civil, ésta tiene elementos que son identificables
tanto respecto de los sujetos como del objeto de la misma. Con relación a los sujetos nos esta-
mos refiriendo a la parte demandante, la cual está constituida únicamente por los legitimados
ordinarios referidos en la citada norma, esto es “(...) Pueden ser interpuestas por los asistentes, si
hubieran dejado constancia en acta de su oposición al acuerdo, por los asociados no concurrentes y
por lo que hayan sido privados ilegítimamente de emitir su voto (...)”, “(...) Cualquier asociado puede
intervenir en el juicio, a su costa, para defender la validez del acuerdo (...)”.
177. Conforme puede apreciarse, no cualquiera puede interponer la pretensión de impugna-
ción de acuerdos regulada en el artículo 92 del Código Civil, sólo son aquellos asociados que
mostraron su disconformidad, no asistieron o quienes han sido privados del derecho a participar
de manera ilegítima.
178. El derecho de impugnación de acuerdos se produce por una razón, es la contrapartida del
derecho al voto del asociado, y por ende de la toma de los acuerdos en la persona jurídica no
lucrativa, Asociación Civil, dado que la participación del asociado no puede ser soslayada de
manera ilegítima al privarse del derecho de participar en la adopción de acuerdos a quien se
encuentra apto para hacerlo o cuando no participó e incluso cuando participó y señaló su nega-
tiva; no en el caso del asociado que votó a favor del acuerdo y no dijo nada contra la adopción
del mismo, porque se entiende que dicho acuerdo ha sido plasmado en observancia de lo que
establece el estatuto y la normativa vigente.
179. En el Pleno Casatorio Civil se ha llegado a determinar que el asociado expulsado, y que
justamente impugna el acuerdo que decidió su expulsión, también se encuentra legitimado
para impugnarlo.
180. La norma incluso permite la legitimación pasiva del asociado que quiera defender la
“validez del acuerdo”, con lo cual se resalta nuevamente la trascendencia de los acuerdos vul-
nerados y el vicio materia de impugnación, toda vez que un acuerdo invalido es un acuerdo
que no produce efectos en la realidad al haberse estructurado indebidamente, y por tanto, de
estimarse la impugnación la resolución que declare la invalidez del acuerdo no es otra cosa que
la declaración de nulidad de éste.
181. Con relación al objeto de la pretensión, cuya estructura tiene un pedido y una causa de
pedir, corresponde señalar que a través de la pretensión impugnatoria se realiza un pedido de
ineficacia, esto es de nulidad o de anulabilidad, precisándose en la causa de pedir la fundamenta-
ción correspondiente a dichas ineficacias estructurales, las causales en que se sustenta que puede
ser de nulidad, anulabilidad, así como las normas que permitan establecer vicios estructurales
en el acuerdo impugnado.
182. La pretensión impugnatoria de asociación busca finalmente la ineficacia del acuerdo adop-
tado, estableciéndose en el artículo 92 del Código Civil los acuerdos que pueden ser cuestionados
a través de la misma, esto es “(...) Acuerdos que violen las disposiciones legales o estatutarias (...)”,
los cuales, como consecuencia de la impugnación serán declarados nulos, al contravenir la nor-
mativa vigente y el estatuto de la Asociación Civil, vulnerando la voluntad de los que conforman
la persona jurídica en su acto originario.
183. Con respecto a ello, cabe precisar que constituyen por tanto supuestos de suma gravedad,
que en caso de estimarse la impugnación del acuerdo, el efecto que se producirá conforme al
ordenamiento jurídico, lo reiteramos, será la declaración de nulidad del mismo.
184. En cuanto a la vulneración del estatuto, éste refleja las actividades altruistas que realiza,
que pueden ser finalidades culturales, deportivas, sociales, etc., estableciéndose por tanto un
texto ordenado de cláusulas que sirven de sustento a las actividades que se llevan a cabo, y es en
razón de ello que los acuerdos adoptados no pueden ser contrarios a lo expresado en el negocio
jurídico originario de constitución de la asociación.
110 CHIOVENDA, Giuseppe. Instituciones de Derecho Procesal Civil. Madrid: Editorial Revista de Derecho Privado. Tra-
ducción de Gómez Obraneja. Vol. I. p. 41.
111 DOS SANTOS BEDAQUE, José Roberto. Op. cit., p. 49.
112 DOS SANTOS BEDAQUE, José Roberto. Op. cit., p. 51.
113 CHIOVENDA, Giuseppe. Op. cit., p. 59.
114 MARINONI, Luis Guilherme. El Derecho Fundamental a la Tutela Jurisdiccional Efectiva. Lima: Communitas. 2007. p.
236.
115 VIDAL RAMÍREZ, Fernando. La Prescripción y la Caducidad en el Código Civil peruano. Lima: Cultural Cuzco. 1985.
p. 202.
116 ARIANO DEHO, Eugenia. “Prescripción y Código Procesal Constitucional (Los mecanismos constitucionales de
protección entre las garras del tiempo)”. En: Proceso & Justicia. Revista de Derecho Procesal. Nº 5. Editada por la
Asociación Civil Proceso & Justicia. 2005. p. 38.
117 GUASTINI, Riccardo. “Disposición Vs. Norma”. En: Disposición Vs. Norma. Lima: Palestra. 2011. pp. 133 a 134.
118 GUASTINI, Riccardo. Op. cit., p. 136.
119 TARELLO, Giovanni. El “Problema de la Interpretación: Una Formulación Ambigua”. En: Disposición Vs. Norma.
Lima: Palestra. 2011. p. 120.
120 RUBIO CORREA, Marcial. El Sistema Jurídico. Introducción al Derecho. Lima: Fondo Editorial de la Pontificia Uni-
versidad Católica del Perú. 6a reimp. Febrero de 2006. p. 251.
121 BRECCIA, Umberto y otros. Op. cit., p. 20.
y contenidos que sirve de ‘medio ambiente’ a la norma dentro de su grupo o conjunto normativo. El
método reposa en la concepción del Derecho como un sistema estructural y discrimina la interpretación
en función a ello y no del ‘cuerpo legislativo’ en el que se halla la norma jurídica (...)”122. De esta
manera es necesario reiterar que nuestro ordenamiento jurídico ha sido y es una unidad, y así
ha sido interpretado por el Foro y la judicatura nacional, desde sus diversos ámbitos; negar ello
implica negarnos a nosotros mismos, y deslegitimar a nuestro propio ordenamiento desde sus
propios operadores jurídicos.
208. Es pertinente referir que “(...) un sistema legal es coherente cuando no es posible encontrar
en él normas que se contradigan, es decir, que no tiene antinomias; o para decirlo en otros términos,
que el ordenamiento es un verdadero sistema y que por lo tanto sus elementos guardan una relación
coherente (...)”123. La exigencia misma de establecer un ordenamiento jurídico, como expresión
de la convivencia pacífica de los sujetos de derecho, nos lleva a señalar su extensión y com-
plejidad, lo cual permite la construcción y destrucción continua del mismo; toda vez que nos
encontramos ante una sociedad dinámica a la par de un sistema jurídico inacabado que debe
encontrarse a la altura de ésta. Por tanto no es propio del ordenamiento jurídico la existencia
de incoherencias y contradicciones.
209. Adicionalmente, “(...) el derecho debe ser predictible a fin que no origine opacidades en la
actividad racional de los individuos; por eso debe tener un carácter genérico y sistemático, es decir,
constituir un orden cerrado, sin lagunas, de aplicación uniforme (...)”124, lo contrario implicaría que
no tendríamos un sistema sino un conjunto de normas inconexas que entre otras consecuencias,
no permiten la predictibilidad en los fallos judiciales, soslayando la seguridad jurídica, como lo
veremos más adelante, y afectando con ello la legitimidad del Estado Constitucional de Derecho.
210. Sin perjuicio de lo antes señalado, pueden presentarse situaciones en las que “(...) estamos
frente a una antinomia no cuando hay ausencia de una norma sino presencia de dos o más normas cuyos
contenidos colisionan. Tal situación, como hemos adelantado, no es un vacío legal, pero igualmente no
es posible admitir su permanencia en el ordenamiento, pues sería absurdo que el sistema legal conten-
ga al mismo tiempo una norma que prohíba una conducta y otra que la permita. Tal incoherencia es
intolerable (...)”125. De manera que la existencia de estas incoherencias socaban el ordenamiento
jurídico y tienen que ser extirpadas a efectos de evitar contradicciones sistémicas que ocasionan
no sólo el colapso del ordenamiento jurídico y por tanto una respuesta inadecuada, sino, sobre
todo, la falta de seguridad jurídica y de predictibilidad en los fallos emitidos por el Poder Judicial.
211. La necesidad de encontrar una interpretación adecuada permite a la Corte Suprema de
Justicia de la República, a través del Presente Pleno Casatorio Civil dar una respuesta contun-
dente al apreciar distintos pronunciamientos que expresan de manera disímil el artículo 92 del
Código Civil en los casos que se vienen presentando apropósito de lo que es objeto del presente
proceso, conforme lo veremos en los siguientes puntos, y la razón de ello es la proscripción de
la contradicción en el sistema mismo, más aún cuando las normas alegadas aparentemente
regulan el mismo supuesto.
6.1. Las metareglas de la interpretación jurídica: jerarquía, temporalidad y especialidad.
212. A efectos de resolver los conflictos normativos puede señalarse el “(...) Criterio jerárquico,
consistente en que la norma de mayor jerarquía deroga a la de menor nivel en el sistema, criterio de
la especialidad, consistente en que la norma especial deberá derogar a la general; criterio cronológico,
tratándose de normas de igual jerarquía, la norma más contemporánea deroga a la más remota (...)”126.
Como se puede apreciar la respuesta del ordenamiento jurídico es coherente con su estructura
así como los valores que defiende, más aún cuando no nos encontramos frente a conflictos que
136 KELSEN, Hans. Teoría Pura del Derecho. Lima: Ediciones Wisla. 1987. p. 123
137 KELSEN, Hans. Op. cit., p. 124.
138 RUBIO CORREA, Marcial. Op. cit., p. 261.
139 ESPINOZA ESPINOZA, Juan. Los Principios Contenidos en el Título Preliminar del Código Civil de 1984. (Análisis). Lima:
Grijley. 2011. p. 563.
Constitucional peruano a través de todos sus órganos en las distintas funciones que cumplen,
sean legislativas, ejecutivas, judiciales, así como en el caso de los organismos constitucionales
autónomos.
230. Esta manera no sólo de aplicar la normativa vigente a los casos concretos, sino de ver el
derecho en su conjunto no ha sido ajena al Foro nacional, más aún cuando desde hace un buen
tiempo a través de la Teoría Tridimensional del Derecho se propone “(...) una relación dinámica entre
tres objetos heterogéneos pero que cobran unidad conceptual a raíz de dicha interrelación. De ahí que
en la estructura del derecho se hallen presentes, ineludiblemente y al lado de la vida coexistencial, los
valores y las normas jurídicas (...)”140. La virtud de este planteamiento es, en primer lugar, reconocer
que los valores no pueden ser ajenos a la norma jurídica, y en segundo lugar, precisar que “(...)
los valores resultan ser, dentro del planteamiento kelseniano, elementos de naturaleza meta-jurídica
(...)”141, conforme lo señalamos precedentemente en el caso especial del positivismo jurídico; toda
vez que no forman parte del entramado normativo y constituyen injerencias externas al mismo.
6.2.1. Justicia.
231. Si bien excede al Pleno Casatorio Civil establecer una definición de lo que es el valor
supremo de la justicia, su presencia es innegable a lo largo de distintas épocas y lugares en la
historia de la humanidad; asimismo, resulta ser trascendental que desde siempre su definición
ha estado unida indesligablemente al quehacer jurídico, para ello nos basta recordar que desde
un inicio el derecho siempre ha sido “(...) vivir honestamente, no dañar a nadie, y dar a cada uno lo
que es suyo (...)”142. Esto ha sido el derecho hace más de dos mil años y aún tiene vigencia entre
nosotros, y podemos apreciar en estas viejas máximas las nociones de justicia que tienen que
ver con el discurrir de toda persona en sus relaciones con los demás.
232. No nos vamos a detener en la diferentes nociones que desde la antigüedad han definido
a la justicia, pero si vamos a puntualizar que “(...) en su sentido propio la idea de justicia es un
valor absoluto, un principio que pretende ser válido siempre y en todas partes, independiente del
espacio y el tiempo: es eterna e inmutable (...)”143. Siendo un valor absoluto, para el positivismo
la justicia se convierte en un valor ajeno al ordenamiento jurídico pero que sin embargo ejerce
una influencia externa. Es entonces que podemos afirmar que ni siquiera el positivismo más
clásico ha podido negar a la justicia como un valor que ejerce una influencia pero desde fuera
del ordenamiento jurídico.
233. Los desarrollos posteriores que han tratado sobre el valor de la justicia nos señalan incluso
que “(...) la conducta justa es una conducta que, generalmente beneficia a los demás y a la sociedad
(según se define en el principio de utilidad) y para su realización carecemos comúnmente, de un estímulo
eficaz (...)”144. Constituye entonces una conducta relacional y coexistencial de los sujetos de dere-
cho, no es una conducta en solitario, pero su realización no se produce de manera automática.
234. Por ello es que en el desarrollo de lo que es el valor supremo de la justicia, en esta teoría
en particular se ha señalado que “(...) el objetivo de la teoría de la justicia no es dar con la ‘verdad
moral’, entendida como la correspondencia de un sistema de enunciados con algún orden moral
independiente (cualquiera que sea lo que esto signifique), sino construir las bases de un acuerdo ope-
rativo entre ciudadanos libres por medio del ejercicio público de la razón (...)”145. Pues bien, en esta
concepción del valor supremo de la justicia se debe construir a partir del acuerdo o consenso de
los sujetos de derecho, dado que finalmente a través de éste se produce la legitimidad de este
valor, alejándose con ello de concepciones morales del mismo.
235. En suma, es indudable que la justicia irradia a todo nuestro ordenamiento jurídico, más allá
de los desarrollos teóricos; podemos apreciar que nuestra norma fundamental se pronuncia una y
otra vez sobre este valor supremo, como es el caso del artículo del artículo 44 de la Constitución
140 FERNÁNDEZ SESSAREGO, Carlos. Derecho y Persona. Introducción a la Teoría del Derecho. Lima: Grijley. 4a ed. 2001.
p. 39.
141 FERNÁNDEZ SESSAREGO, Carlos. Op. cit., p. 59.
142 Traducción de Francisco Pérez de Anaya y Melquiades Pérez Rivas. Lima: Cultural Cuzco. 1995. p 11
143 KELSEN, Hans. Op. cit., p. 45.
144 RAWLS, John. Teoría de la Justicia. Madrid: Fondo de Cultura Económica. 1a Reimp. 1997. p. 414.
145 RAWLS, John. Justicia como Equidad. Madrid: Tecnos. 2002. p. 24.
146 JIMÉNEZ VARGAS MACHUCA, Roxana. “La Seguridad Jurídica”. En: Revista del Magíster en Derecho Civil. Lima:
Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica. Vol. 2-3. 2002. p. 255.
147 JIMÉNEZ VARGAS MACHUCA, Roxana. Op. cit., p. 257.
148 FERNÁNDEZ SESSAREGO, Carlos. Op. cit., p. 96.
149 JIMÉNEZ VARGAS MACHUCA, Roxana. Op. cit., p. 273.
estricto respeto de la Constitución, la normativa vigente así como de los valores supremos de
nuestro ordenamiento jurídico, como es el caso de la seguridad jurídica.
240. El valor supremo de la seguridad jurídica al igual que la justicia también tiene fundamento
constitucional, como lo podemos apreciar en el artículo 62 de la Constitución que establece
“(...) La libertad de contratar garantiza que las partes pueden pactar válidamente según las normas
vigentes al tiempo del contrato. Los términos contractuales no pueden ser modificados por leyes u otras
disposiciones de cualquier clase (...); también se denota en el numeral 01 del artículo 118 de la
norma fundamental que establece “(...) Corresponde al Presidente de la República: 1. Cumplir y hacer
cumplir la Constitución y los tratados, leyes y demás disposiciones legales (...), así como el numeral
09 de la norma anotada que precisa “(...) cumplir y hacer cumplir las sentencias y resoluciones
de los órganos jurisdiccionales (...), se encuentra inserto en el artículo 139 en los principios y
derechos de la función jurisdiccional.
6.3. Los métodos sistemático y teleológico a partir de la metaregla de la norma especial
con referencia a la pretensión de impugnación de los acuerdos de Asociaciones.
241. Es importante destacar que “(...) cuando entran en juego relaciones teleológicas estamos ante
un argumento sistemático-teleológico (...)”150, que justamente es lo que se produce en el caso de
autos así como en una serie de casos similares puestos a consideración de los órganos jurisdiccio-
nales; por ello la impartición de justicia no se puede realizar de manera discrecional y arbitraria,
todo lo contrario, debe partir de la existencia de disposiciones normativas a través de las cuales
la judicatura fundamente sus decisiones, las cuales no están exentas de valores que inspiran al
ordenamiento jurídico en su conjunto; sin embargo, éstos deben ser aplicados de manera razo-
nable y en atención al impacto socio económico de la decisión que se emitirá por nuestros jueces.
242. Un caso de aplicación conjunta de los métodos sistemático por ubicación y teleológico se
produce en la resolución de este caso, para lo cual también será de aplicación el principio de
especialidad; toda vez que, en primer lugar, existe una contraposición de las normas generales
relativas a las causales de ineficacia del negocio jurídico reguladas en el Libro II del Código Civil,
frente a lo establecido en el artículo 92 de la norma anotada, referida a la pretensión de impug-
nación de acuerdos de asociación, que constituye una norma especial. Sin embargo, más allá de
este argumento estrictamente kelseniano según las reglas que establecen la validez parcial de una
norma en la relación general a particular, es de suma importancia referirnos a los valores que se
encuentran insertos en dichas normas, que son la justicia y la seguridad jurídica que irradian a
todo el ordenamiento jurídico.
243. Debemos partir por señalar que nos encontramos frente a un caso difícil desde que se
produce “(...) la existencia de una discrepancia en cuanto cuáles sean las normas aplicables al caso
(...)”151. Esta situación en cuanto a la decisión de aplicar una u otra disposición normativa para
resolver el caso concreto, sea a partir de lo regulado en el Libro II del Código Civil o sea a través
del artículo 92 de la citada norma, que estatuye la impugnación del acuerdo de la Asociación,
nos permite señalar la presencia de un caso difícil, por cuanto, aparentemente existirían dos
normas aplicables a este caso.
244. A propósito de ello, es pertinente referir que los sujetos de derecho integrantes de una
Asociación Civil así como se han constituido en titulares de derechos, también son titulares de
deberes, uno de ellos es la diligencia en ejercer sus derechos dentro de los plazos establecidos en
la normativa vigente, que en el caso que nos convoca se han regulado en el artículo 92 del Código
Civil, consignándose el plazo de 30 días de inscrito el acuerdo o de 60 días de adoptado el mismo,
para efectos de la impugnación de acuerdos, que ha sido tratada en los puntos precedentes.
245. Es sobre la base del método sistemático teleológico de ubicación de la norma, que po-
demos aplicar el principio de especialidad, por cuanto “(...) el método reposa (...) en la idea de
que el Derecho es un sistema que responde a un proyecto racional del legislador, donde las normas y
decisiones están dotadas de congruencia y unidas entre sí por unos valores o fines comunes (...)”152;
150 ALEXY, Robert. Teoría de la Argumentación Jurídica. La teoría del discurso racional como teoría de la fundamentación
jurídica. Lima: Palestra. 2010. p. 331.
151 ATIENZA, Manuel. Tras la justicia. Barcelona: Ariel. 2003. p. 24.
152 PRIETO SANCHÍS, Luis. Sobre Principios y Normas. Problemas del Razonamiento Jurídico. Lima: Palestra. 2013. p.
210.
92 del Código Civil en observancia de los métodos sistemático y teleológico, aplicando para ello
principio de especialidad de la norma.
7. Respecto de la infracción normativa material alegada.
251. A efectos de absolver la infracción normativa material denunciada, tendremos en cuenta
las instituciones analizadas en extenso en los puntos precedentes al caso concreto objeto de este
Pleno Casatorio Civil, a fin de establecer la interpretación normativa correspondiente.
7.1. Inaplicación de los numerales 01 y 05 del artículo 219 del Código Civil.
252. Con relación a la denuncia casatoria relativa a la infracción normativa material referida a la
inaplicación de los numerales 01 y 05 del artículo 219 del Código Civil, debemos precisar que
por previsión constitucional se tutela el derecho a constituir estructuras organizativas sin fines de
lucro, con el fin de alentar con ello la promoción de los más altos valores que se fundamentan en
la dignidad del ser humano, sin soslayar con ello que estas organizaciones actúen de conformidad
con la normativa vigente y en el ejercicio diligente de sus derechos; asimismo, el desarrollo de
sus actividades no lucrativas se encuentran amparadas en otro derecho con previsión constitu-
cional, la libertad de contratar, a efectos de que con ello puedan lograr los fines altruistas que
se proponen, este es el caso de la Asociación de Vivienda Chillón.
253. Conforme a los presentes actuados y al desarrollo precedente podemos establecer que la
Asociación de Vivienda Chillón, fundada el 02 de diciembre de 1984, inscrita en el Asiento 01
de la Ficha 6691 del Registro de Asociaciones de Lima, es un sujeto de derecho, específicamente
una persona jurídica no lucrativa, distinta de sus miembros, cuyo objeto de conformidad con el
artículo segundo de su estatuto es promover la adquisición de vivienda propia para sus asociados,
para lo cual, de acuerdo al artículo 55 del referido estatuto, las cotizaciones mensuales de los
miembros de la asociación serán destinadas tanto para la administración de la Asociación Civil
como para la adquisición de terrenos en donde se construirán las viviendas de sus asociados.
254. Se establece en el artículo décimo noveno del estatuto que los órganos de dirección, adminis-
tración y control de la Asociación de Vivienda Chillón están constituidos por la Asamblea General
y el Consejo Directivo, consignándose en su artículo 20 que la Asamblea General es la autoridad
máxima y sus acuerdos obligan a todos los asociados presentes o ausentes, si es que el acuerdo
fue tomado de conformidad con la ley y el estatuto de la Asociación, precisándose en el artículo
23, que el quórum de las asambleas ordinarias o extraordinarias estará legalmente constituido
por la mitad más uno de los socios y si una hora después de la señalada en la convocatoria no
existiera quórum, la asamblea quedará constituida por los asociados presentes, a efectos de que
no se vea entorpecida la marcha de esta persona jurídica no lucrativa.
255. El estatuto también ha previsto en el artículo 24 referido a las atribuciones de la asam-
blea general ordinaria, entre otros, autorizar los contratos de cualquier índole que celebre el
Consejo Directivo y elegir a los miembros de éste, y en el artículo 26 señala que a la Asamblea
Extraordinaria le corresponde tratar la reforma de los estatutos, la modificación de los fines de
la institución, la resolución de reclamaciones contra los miembros del Consejo Directivo y el es-
tablecimiento de cuotas extraordinarias, y para la adopción de los acuerdos respecto de los dos
primeros temas, conforme al artículo 26 del citado documento, se requiere del voto favorable
de las dos terceras partes de los socios hábiles; en el caso de las asambleas generales ordinarias,
para adoptar el acuerdo se requiere de la votación de una mayoría simple.
256. En ese sentido, la adopción del acuerdo en la Asociación de Vivienda Chillón debe realizarse
de conformidad con la ley y el estatuto antes precisado, a través de los quórums y mayorías
establecidas precedentemente, con lo cual se expresa la voluntad de esta persona jurídica no
lucrativa, a través del método colegial o asambleario, lo que se produce siempre y cuando se
hubieran respetado los derechos de las minorías en la adopción del acuerdo, quedando a salvo
su derecho de impugnar el mismo conforme a los plazos establecidos en la normativa vigente,
para lo cual debe tenerse en cuenta que los acuerdos consignados en las actas de Asambleas
Extraordinarias de Asociados de fecha 10 de octubre de 2004, fue inscrito en el Asiento A00004,
y el del 02 de octubre de 2005, fue inscrito en el Asiento A00005, de la Partida 01975773 del
Registro de Personas Jurídicas de la Zona Registral IX, Sede Lima.
257. De haberse adoptado el acuerdo en base a la normativa antes precisada, la Asociación de
Vivienda Chillón puede encontrarse en una situación jurídica de ventaja o de desventaja, a efectos
VIII. FALLO.
Por tales razones, el Pleno Casatorio Civil de la Corte Suprema de Justicia de la República, de confor-
midad con lo normado por el artículo 400 del Código Procesal Civil:
a) Declara INFUNDADO el recurso de casación interpuesto por Rodrigo Sánchez de la Cruz;
en consecuencia NO CASARON la resolución de vista, obrante a folios 452, su fecha 22
de junio de 2012, expedida por la Sala Civil Transitoria de la Corte Superior de Justicia de
Lima Norte.
b) ESTABLECE como doctrina jurisprudencial vinculante lo siguiente:
1. La impugnación de todo acuerdo emitido por una Asociación Civil, persona jurídica no
lucrativa, se fundamenta de manera obligatoria e insoslayable en base a lo dispuesto
por el artículo 92 del Código Civil, conforme a los métodos sistemático y teleológico
que permiten observar adecuadamente el principio de especialidad de la norma.
2. El procedimiento predeterminado por ley para la tramitación de la pretensión de
impugnación de acuerdos de Asociación Civil, regulado en el artículo 92 del Código
Civil de 1984 es en la vía abreviada y de competencia de un Juez Civil.
3. Se encuentran legitimados para impugnar el acuerdo asociativo, tal como señala el
artículo 92 del Código Civil, el Asociado que asistió a la toma del acuerdo si dejó
constancia de su oposición en el acta respectiva, los Asociados no concurrentes, los
Asociados que fueron privados ilegítimamente de emitir su voto, así como el Asociado
expulsado por el acuerdo impugnado.
4. Los legitimados antes precisados no pueden interponer indistintamente pretensiones
que cuestionen los acuerdos asociativos, sustentados en el Libro II del Código Civil u
otras normas, fuera del plazo previsto en el artículo 92 del citado cuerpo normativo;
sólo y únicamente pueden impugnar los acuerdos de la Asociación Civil en base al
citado artículo 92 que regula la pretensión de impugnación de acuerdos de asociación.
5. Toda pretensión impugnatoria de acuerdos de Asociación Civil debe realizarse dentro
de los plazos de caducidad regulados en el artículo 92 del Código Civil, esto es:
5.1. Hasta 60 días a partir de la fecha del acuerdo.
5.2. Hasta 30 días a partir de la fecha de inscripción del acuerdo.
6. El Juez que califica una demanda de impugnación de acuerdos asociativos, fundamen-
tados en el Libro II del Código Civil u otra norma que pretenda cuestionar la validez del
acuerdo, puede adecuar ésta, de conformidad con el artículo VII del Título Preliminar
del Código Procesal Civil, siempre y cuando, conforme al petitorio y fundamentos
de hecho, se cumplan los requisitos previstos en el artículo 92 del Código Civil; sin
embargo si los plazos previstos en la norma acotada se encuentran vencidos ello no