Tarea 4 Elementos Constitutivos Del Acto Moral
Tarea 4 Elementos Constitutivos Del Acto Moral
Tarea 4 Elementos Constitutivos Del Acto Moral
Especialidad:
Espacio Curricular:
Alumnas/os:
Actividades: leer el texto y responder a las consignas (Consigna 1 a Consigna 6). Es primordial
que debajo de cada pregunta, escriban sus respuestas.
EL ACTO MORAL
No tiene sentido aplicar normas morales a las cosas que sólo pueden suceder de una manera. No
podemos decir que el fuego es malo, sino que quema; que el agua es buena cuando riega y mala
cuando inunda, sino que nos beneficia o nos perjudica; que el hongo productor de la penicilina es
buena y el virus del SIDA es moralmente malo, sino que sus estructuras y funcionamiento
biológicos tienen consecuencias buenas o malas para nosotros. Es cierto que usamos estas
expresiones habitualmente, pero lo hacemos en un sentido figurado. Ni el fuego, ni el agua, ni la
penicilina, ni el virus del SIDA pueden actuar de un modo diferente al modo en que lo hacen en
cada caso concreto. La imposibilidad de elegir modos de actuación diferentes hace imposible valorar
estos objetos desde el punto de vista moral. Sin embargo, sabemos que los seres humanos somos
capaces de actuar de muchas formas ante cada situación y que, por eso, nuestros actos son
valorables moralmente. ¿Es todo lo humano valorable moralmente? Algunos autores han
distinguido, intentando ser coherentes con lo dicho en el párrafo anterior, entre actos humanos y
actos del hombre. Los actos del hombre son aquellos que no tienen significado moral, los que no
podemos elegir -respirar, hacer la digestión y cosas por el estilo-. Los actos humanos son aquellos
que podemos o no escoger. Pues bien, actos propiamente morales son sólo estos últimos.
Consigna 1: Comparen las acciones de un ladrón de joyas y una urraca (un pájaro de la
familia de los cuervos que tiene la costumbre de llevar a su nido todos los objetos brillantes
que encuentra). ¿Podemos valorarlas de la misma manera? ¿Por qué?
Los actos morales son actos humanos, voluntarios, que podemos elegir realizar o no, y que
podemos valorar según las normas y criterios morales que hayamos asumido previamente. Ante la
posibilidad de elegir, el primer elemento de estos actos que se nos muestra es la existencia de un
motivo para los mismos. El motivo es la causa directa de la realización del acto, la respuesta a la
pregunta '¿por qué?'. Además, este tipo de actos tiene un fin, esto es, la representación o anticipación
mental del resultado que se pretende alcanzar con la acción. El fin se hallaría respondiendo a la
pregunta '¿para qué?' Pero la finalidad que se pretende conseguir con cualquiera de estos actos ha de
conseguirse de algún modo. Cuando hablamos de los pasos que hay que seguir necesariamente para
completar el acto moral, para conseguir el fin propuesto, estamos hablando de los medios. Estos se
hallan respondiendo a la pregunta '¿cómo?' El elemento que completa la estructura de los actos
morales es el resultado efectivo de los mismos, sus consecuencias.
Podemos distinguir entre motivos conscientes y motivos inconscientes. Los primeros los pensamos
antes de que nos hagan actuar. De los segundos no tenemos esta representación previa a la
actuación: pueden ser derivados del hábito, del capricho o de la misma biología del ser humano,
pero también pueden ser aquellos que no nos atrevemos a reconocer ni ante nosotros mismos, y que
ocultamos tras de otros más dignos que los justifican -a veces, por envidia o celos, atacamos a otras
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personas, y lo hacemos convencidos de que éstas actúan mal y deben ser reprendidas-.
Contrariamente a lo que pudiera parecer, la inconsciencia de los motivos no anula totalmente el
carácter moral de un acto humano.
Aunque a veces puedan confundirse, los motivos y los fines no son lo mismo. El fin de una acción
es la representación anticipada de sus consecuencias, lo que se pretende conseguir con dicha acción.
En este sentido, es un elemento fundamental para la valoración moral de la misma. Dependiendo de
que la finalidad de nuestros actos, nuestra intención, sea buena o mala, así serán también los
mismos.
Consigna 2: Intenten establecer los motivos (por qué) y los fines (para qué) por los que
pudieron manifestarse miles de estudiantes en Chile. (noticia completa en:
https://www.20minutos.es/noticia/1524953/0/250-detenidos/chile-manifestacion/educacion/ ,
también disponible en ENLACES/INTRODUCCIÓN A LA ÉTICA
Por otra parte, no basta con la intención. Nuestras acciones se desarrollan en la realidad y, por tanto,
dependen de la utilización de unos medios y producen unas consecuencias. La elección de los
medios adecuados para la consecución de nuestros fines es fundamental para la valoración moral de
nuestras acciones. Podemos afirmar que el fin no justifica los medios y, en este sentido valorar
negativamente toda acción que utilice malos medios.
Consigna 3:
a) Realicen un breve informe para iniciar un debate con los argumentos que usarían para
justificar tu respuesta a la siguiente cuestión: "¿es justificable utilizar la violencia como
medio para obtener algo?"
Las consecuencias reales de nuestras acciones son también muy importantes para valorarlas
moralmente. Como seres con conciencia podemos prever en gran medida estas consecuencias y, al
menos, estamos obligados a intentarlo. Por ejemplo: cuando nos excusamos por alguna acción
culpando a otra persona esto influye sobre su reputación, cuando dejamos el grifo abierto mientras
nos cepillamos los dientes estamos tirando unos cuantos litros de agua potable a las alcantarillas,
cuando recogemos el agua del suelo del cuarto de baño después de ducharnos evitamos que otra
persona tenga que hacerlo...
La conciencia de las posibles consecuencias de nuestros actos es importante para la valoración
moral de los mismos, pero la ignorancia de éstas no siempre nos exime de toda responsabilidad. A
veces es imposible prever determinadas consecuencias de algunas acciones, pero, en general, no
sólo es posible sino que estamos obligados a conocerlas. Por ejemplo, si una persona está tomando
medicamentos, debe informarse sobre los efectos de los mismos y sobre los alimentos y bebidas que
no puede consumir mientras los toma. La ignorancia de esos efectos e incompatibilidades no hace
que la persona sea menos responsable de las consecuencias de ignorarlos. Sin embargo, el camarero
de un restaurante no es responsable del daño que pueda sufrir esa misma persona por tomar algunos
de esos alimentos y bebidas incompatibles con su medicación.
Consigna 4:
a) Confeccionen una lista de situaciones en las que estamos obligados a conocer las
posibles consecuencias de nuestros actos, (por ejemplo: beber alcohol cuando se va a
conducir).
ACCIONES MORALES
Los seres humanos siempre estamos haciendo algo, somos animales que estamos en acción. Yo, al
escribir estas palabras, estoy llevando a cabo una serie de acciones. Y después de que yo las he es-
crito, tú ahora las estás leyendo, lo cual también es una acción. Decir algo, como por ejemplo “bue-
nos días” también es hacer algo y, por tanto, es otra acción humana más. Dentro de este amplísimo
grupo de las acciones humanas, podemos definir un subconjunto: el de las acciones morales. Son un
tipo de acciones que tienen sus propias características y que las hacen, según algunos filósofos, dis-
tintas de todas las demás acciones humanas. A los filósofos les interesan las acciones morales.
Imagen 1
Una acción moral, para ser tal, debe ser consciente, es decir, el agente ha de saber lo que está ha-
ciendo. Alguien que salve la vida a otra persona sin saber que estaba haciendo tal cosa, no estará ac-
tuando moralmente. Además, de consciente, debe ser libre. Una acción es moral porque, además de
consciente, la hacemos libremente, nadie nos obliga a ello, salvo nosotros mismos. Además, las ac-
ciones morales son acciones que tienen efectos prácticos sobre las personas. Por ejemplo, si arre-
glo un enchufe de mi casa, tiene un efecto práctico pero es sobre las cosas y por tanto, arreglar el en-
chufe no es, por sí misma, una acción moral. Y, finalmente, una acción moral debe basarse en al-
guna norma o principio moral. Si una acción no tiene estas cuatro características: es voluntaria,
consciente, tiene efectos prácticos sobre las personas y es guiada por principios morales, entonces
no es una acción moral.
Vamos a comenzar con un ejemplo de acción moral. Por ejemplo, una anciana que al salir del su-
permercado le da una moneda a un pobre. Suponemos que la anciana no estaba drogada ni hipnoti-
zada ni padecía demencia senil alguna, de modo que sabía lo que hacía. Era consciente de ello. Por
otra parte, podemos suponer que esta anciana tampoco estaba bajo una presión externa. Nadie le
obligó a dar limosna. Lo hizo ella por una decisión libre. Por otra parte, la moneda pudo ayudar al
pobre a comprar una barra de pan, de modo que la acción de la anciana tuvo una consecuencia prác -
tica sobre otra persona. Finalmente, podemos suponer que la mujer lleva a cabo su acción porque
cree firmemente que nadie debe pasar hambre y que todo el que tiene una moneda de más, debe con-
tribuir, dentro de su capacidad, a evitar que cualquier persona pase hambre, sobre todo cuando tiene
conocimiento de manera fehaciente de que alguien pasa hambre (sabe qué cosa pasa hambre y no
meramente que alguna cosa pasa hambre). Bien, este es un ejemplo de acción moral.
Ahora, vamos a hablar de un ejemplo real, de una acción que parece moral pero que, en reali-
dad, no lo es. Las compañías de seguros dedican grandes cantidades de dinero a evitar y disminuir
tanto los accidentes de tráfico como las lesiones. ¿Es esta una acción moral? La respuesta es que no.
Veámoslo.
En primer lugar, la acción es consciente, pues hay agentes en esas empresas que llevan a cabo tales
acciones y que saben lo que hacen. Y también tiene efectos prácticos sobre las personas, pues de he-
cho contribuye a disminuir los accidentes de tráfico y la gravedad de las lesiones. Con respecto a si
las acciones son libres o no, es algo más dudoso, pues los brazos ejecutores, los empleados de las
empresas que llevan a cabo tales acciones es dudoso que lo hagan libremente, lo hacen porque es lo
que tienen que hacer para ganarse el sueldo. Ahora bien, uno podría asumir cierta posición metafísi-
ca según la cual la empresa es un individuo que realiza acciones a través de las personas que traba-
jan en ella. Y, desde esta perspectiva, es una acción libre de la compañía aseguradora, en tanto que
entidad independiente que bla, bla, bla. Bien, todo esto sería muy pintoresco y hay quien está dis-
puesto a recorrer esta ciénaga tan oscura. Nosotros, sin embargo no tenemos ganas de adentrarnos en
estos sórdidos parajes, de modo que podemos asumir esta metafísica sin problemas. De modo que sí,
vamos a suponer que es una acción libre de la compañía aseguradora. Pero, ¿sigue algún principio
moral? La respuesta es no. La aseguradora sigue la ley del máximo beneficio, que nada tiene
que ver con los principios morales. De modo que ayuda a evitar accidentes de tráfico y a minimi-
zar las lesiones porque eso le supone más beneficios. Así que las aseguradoras no llevan a cabo una
acción moralmente enjuiciable desde este punto de vista.
Consigna 6:
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a) Confeccionen, junto con tu grupo de trabajo, una lista de situaciones en las que puedan
distinguir acciones morales de acciones no morales.
b) Fundamenten una de cada una. (por ejemplo: expliquen por qué determinada acción la
consideran “moral” o “No moral”).
Recomendaciones extras:
Una vez que miran los videos disponibles en aula virtual, leen la presente guía.
Escriban su respuesta debajo de cada pregunta. NO ENVIAR RESPUESTAS
SOLAMENTE, sino toda la guía.
Verificar todos los datos de la carátula y completarlos correctamente; Especialidad (Equipos
e Instalaciones Electromecánicas o Construcciones civiles, según corresponda); nombre y
apellido de los estudiantes que compartieron la actividad (aunque si te es más fácil pueden
resolverla de manera individual), curso; división; nombre de la materia (En 4to A: Ética y
Deontología; en 4tos. B y C; Formación Ética y Ciudadana).
Guardar el archivo en Word o pdf, de la siguiente manera:
o T2-mferreira-4toA o 4toB o 4toC)
o En el caso de ustedes sería: La Letra T (tarea), número de la Tarea; nombre de
usuario del alumno/a que envía el trabajo; curso y división.
Solamente un alumno/a del grupo envía la tarea por eso es importante que verifiques si
tienen todos los nombres de los compañeros agregados en la carátula (Recuerden que no
pueden ser más de 5 (CINCO) alumnos por grupo)
Entran al aula virtual; a TAREAS y envían su trabajo.