Sinopsis Libro Evaluacion Psicologica Cap 3-5

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Sinopsis capítulos 3, 4 y 5

Felipe Gamaliel Mercado López

Universidad Autónoma de Durango

Teoría y aplicación de test II

Lic. Patricia Espino Heredia

21 de Junio de 2023
Conceptos Fundamentales En La Evaluación Psicológica

La evaluación psicológica es un proceso complejo que tiene como objetivo

principal describir, explicar y predecir los fenómenos que se estudian en psicología.

Para lograr esto, es necesario recopilar y comparar datos que permitan fundamentar las

teorías en esta disciplina.

La medición es un componente esencial en la evaluación psicológica, ya que es

lo que ha permitido a la psicología convertirse en una ciencia. A través de la medición,

se pueden obtener datos objetivos y cuantificables que ayudan a comprender y analizar

el funcionamiento psicológico de las personas.

Las pruebas psicológicas son herramientas muy importantes en la evaluación

psicológica. Estas pruebas son instrumentos estandarizados que permiten medir y

evaluar diferentes aspectos del funcionamiento psicológico, como la inteligencia, la

personalidad, las habilidades cognitivas, entre otros. Estas pruebas se basan en

principios científicos y se administran de manera estandarizada para garantizar la

objetividad y la fiabilidad de los resultados.

La medida objetiva Implica la utilización de técnicas y herramientas que permiten

obtener datos precisos y confiables, de manera que dos evaluadores independientes

puedan obtener los mismos resultados al seguir las instrucciones de la prueba. Esto

garantiza que la aplicación, puntuación e interpretación de las puntuaciones sean

objetivas y no dependan del juicio subjetivo de un examinador en particular.

Las pruebas psicológicas no pueden medir de manera absoluta un atributo, sino

que ofrecen una muestra limitada de las conductas que representan el dominio

conductual del atributo que se está midiendo. Es decir, las pruebas son una selección

de reactivos que permiten realizar inferencias acerca del dominio total de conductas
relacionadas con el atributo de interés. Es importante que esta muestra de conductas

sea representativa y permita obtener conclusiones válidas sobre el funcionamiento

psicológico.

El procedimiento sistemático consiste en seguir una serie de pasos y etapas

establecidas para llevar a cabo la evaluación de manera rigurosa y organizada. Estos

pasos incluyen la identificación del objetivo de la evaluación, la selección de las técnicas

y herramientas adecuadas, la recopilación de datos, el análisis e interpretación de los

resultados, y la elaboración de un informe final. El procedimiento sistemático garantiza

la validez y confiabilidad de los resultados obtenidos, así como la consistencia en la

aplicación de la evaluación.

El psicodiagnóstico, por otro lado, es una concepción original de la evaluación

psicológica que se enfoca en la detección de aspectos psicopatológicos o deficiencias

en el funcionamiento psicológico. Esta concepción tiene claras connotaciones médico-

psiquiátricas y busca identificar y diagnosticar trastornos mentales o problemas

psicológicos específicos.

La evaluación psicológica es un proceso sistemático y objetivo que tiene como

objetivo principal describir, explicar y predecir los fenómenos que se estudian en

psicología. Este proceso implica la recopilación y análisis de información sobre el

comportamiento, pensamiento y emociones de una persona, con el fin de comprender

su funcionamiento psicológico y detectar posibles problemas o trastornos.

La evaluación psicológica se lleva a cabo a través de diferentes técnicas y

herramientas, como las pruebas psicológicas, entrevistas, observaciones, registros y

análisis de documentos. Estas técnicas se utilizan para recopilar información sobre


diferentes aspectos del funcionamiento psicológico, como la inteligencia, la

personalidad, las habilidades cognitivas, las emociones.

Una vez que se ha recopilado la información necesaria, se procede a analizarla y

a interpretarla. Este análisis permite identificar patrones y tendencias en el

comportamiento y pensamiento de la persona evaluada, así como detectar posibles

problemas o trastornos.

Finalmente, la evaluación psicológica implica la toma de decisiones y la

elaboración de un informe que resume los resultados obtenidos. Este informe puede ser

utilizado para diferentes fines, como la planificación de tratamientos, la selección de

personal, la orientación vocacional, entre otros.

La evaluación conductual es otra concepción que ha sido dejada de lado en la

evaluación psicológica actual. Esta concepción se centraba en identificar y estudiar

conductas motoras, fisiológicas y cognitivas, así como las variables ambientales y

personales que las influencian. Sin embargo, en ocasiones, esta concepción radical

pretendía tener la exclusividad en la evaluación y rechazar otras formas de evaluación.

Fundamentos Psicométricos En La Evaluación Psicológica

Los fundamentos psicométricos proporcionan las bases científicas y

metodológicas necesarias para garantizar la validez y confiabilidad de los resultados

obtenidos. Estos fundamentos se centran en la medición psicológica, la teoría clásica de

las pruebas, la confiabilidad, la validez, la clasificación de las pruebas y la interpretación

de las puntuaciones.

La medición se refiere al proceso de asignar números o categorías a

características o atributos psicológicos con el fin de obtener datos cuantitativos y


objetivos. La medición psicológica busca capturar y representar de manera precisa y

confiable los fenómenos psicológicos que se están evaluando.

La teoría clásica de las pruebas es un marco conceptual que proporciona los

fundamentos para el diseño, desarrollo y aplicación de las pruebas psicológicas. Esta

teoría se basa en la idea de que las puntuaciones obtenidas en una prueba son el

resultado de la combinación de la verdadera puntuación de una persona y el error de

medición. La teoría clásica de las pruebas permite estimar la confiabilidad y la validez

de una prueba, así como realizar ajustes y mejoras en su diseño.

La confiabilidad es un aspecto fundamental en la evaluación psicológica. Se

refiere a la consistencia y estabilidad de los resultados obtenidos a través de una

prueba. Una prueba es confiable cuando produce resultados consistentes y

reproducibles en diferentes momentos y con diferentes evaluadores. La confiabilidad se

puede estimar mediante diferentes métodos, como el coeficiente de confiabilidad y el

análisis de consistencia interna.

La validez es la capacidad de una prueba para medir de manera precisa y

adecuada el atributo o constructo que se pretende evaluar. La validez se evalúa

mediante diferentes tipos de evidencia, como la validez de contenido, la validez de

criterio y la validez de constructo. La validez es fundamental para asegurar que las

conclusiones y decisiones basadas en los resultados de la evaluación sean precisas y

confiables.

La clasificación de las pruebas se refiere a la categorización de las pruebas

psicológicas en diferentes tipos o grupos en función de sus características y objetivos.

Existen diferentes criterios para clasificar las pruebas, como el tipo de respuesta que se

espera, el tipo de estímulo que se presenta, el área de funcionamiento psicológico que


se evalúa, entre otros. La clasificación de las pruebas permite seleccionar la prueba

más adecuada para evaluar un atributo o constructo específico.

La interpretación de las puntuaciones es el último paso en la evaluación

psicológica. Se refiere al proceso de analizar y comprender los resultados obtenidos a

través de una prueba. La interpretación de las puntuaciones implica comparar las

puntuaciones obtenidas con las normas establecidas, identificar patrones y tendencias

en los resultados, y elaborar conclusiones y recomendaciones en función de los

objetivos de la evaluación. La interpretación de las puntuaciones es un proceso

complejo que requiere de un conocimiento profundo de las pruebas psicológicas y de

las características del sujeto evaluado.

Consideraciones Éticas En La Evaluación Psicológica

Las consideraciones éticas garantizan que el proceso de evaluación se lleve a

cabo de manera justa, respetuosa y responsable. Estas consideraciones se centran en

la protección de los derechos y la dignidad de las personas evaluadas, así como en la

responsabilidad social y profesional del evaluador.

La confidencialidad se refiere a la obligación del evaluador de proteger la

privacidad y la confidencialidad de la información obtenida durante el proceso de

evaluación. El evaluador debe asegurarse de que la información obtenida se mantenga

en secreto y solo se comparta con las personas autorizadas, como el sujeto evaluado o

los profesionales de la salud que lo atienden.

El consentimiento es la obligación del evaluador de obtener el consentimiento

informado del sujeto evaluado antes de iniciar el proceso de evaluación. El

consentimiento informado implica que el sujeto evaluado debe estar informado sobre los
objetivos, procedimientos y riesgos de la evaluación, y debe dar su consentimiento de

manera libre y voluntaria.

La competencia es la obligación del evaluador de tener la formación, habilidades

y conocimientos necesarios para llevar a cabo la evaluación de manera adecuada y

responsable. El evaluador debe estar actualizado en las últimas técnicas y herramientas

de evaluación, y debe seguir los estándares éticos y profesionales establecidos por las

organizaciones pertinentes.

La responsabilidad social es la obligación del evaluador de considerar el impacto

social y comunitario de la evaluación, y de actuar de manera responsable y justa en

relación con los intereses de la sociedad en general. El evaluador debe considerar las

implicaciones sociales y culturales de la evaluación, y debe actuar de manera sensible y

respetuosa en relación con las diferencias culturales, étnicas y de género.

La honestidad e integridad quieren decir en este caso que el evaluador debe ser

honesto y transparente en relación con los objetivos, procedimientos y resultados de la

evaluación. Debe evitar cualquier tipo de engaño o manipulación, y debe actuar de

manera ética y responsable en todo momento.

La responsabilidad legal trata de que el evaluador debe cumplir con las leyes y

regulaciones pertinentes en relación con la evaluación psicológica, y debe actuar de

manera responsable y ética en relación con los derechos y la dignidad de las personas

evaluadas. El evaluador debe estar al tanto de las leyes y regulaciones locales y

nacionales en relación con la evaluación psicológica, y debe actuar de manera

responsable y ética en todo momento.


Conclusión

Concluyo que la evaluación psicológica es muy compleja y necesita de la mayor

recolección de datos posible, así como el análisis y la interpretación realizados por un

experto en cada test y con el apoyo de su respectivo manual.

Los fundamentos psicométricos son clave a la hora de evaluar psicológicamente

a alguien ya que nos dan las bases científicas y las metodologías que garantizan la

validez y confiabilidad de los resultados.

Las consideraciones éticas me parecen muy importantes ya que evitan que se

caigan en sesgos y todo se haga de forma responsable como profesionales, esto

porque son a tener en cuenta para los derechos y dignidad de los evaluados.
Referencias

Aragón Borja, L.Evaluación psicológica, Historia, fundamentos teórico

conceptuales y psicometria.2 edicion, 41-95.

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