Curatela
Curatela
Curatela
(Rospigliosi, 2012) Nada específico dice nuestro ordenamiento jurídico acerca de estos temas.
De esta forma las mismas circunstancias que incapacitan a alguien para el cargo y
desempeño de la tutela, así como las que facultan al llamado o designado para excusarse,
tienen vigencia tratándose de la curatela, de acuerdo con el artículo 568 del Código Civil.
- Declararse la interdicción del incapaz, de acuerdo con el artículo 566 del Código Civil.
(art. 566). En el caso del penado no es necesaria declaración expresa pues la interdicción va
anexa a la pena
1. Para (Sierra) En cuanto al inventario, el Código Civil declara exento de tal requisito al
curador de enfermos mentales, débiles mentales, débiles seniles y sordomudos
incapacitados para comunicarse cuando dicho curador sea el cónyuge del incapaz. Al
quedar incorporados posteriormente a la responsabilidad general de socorro que la ley
impone a ambos cónyuges, el tutor ejercerá sus funciones de acuerdo con los requisitos del
Título relativo a los Deberes y Derechos derivados del Matrimonio en una situación como
ésta. Asimismo cuando la curatela corresponde a los padres del incapaz, se regirá por las
reglas de la patria potestad, lo cual implica que sí estarían obligados a hacer inventario, al
menos de los bienes muebles ( y, de paso, parecerían tener el derecho al usufructo legal), lo
que consideramos sumamente controvertible, supone, más bien que sólo procede al
inventario cuando el padre o madre enviuda o se divorcia.
2. (Sierra) Los tutores legales del primer grupo de tutelados incapacitados (enfermos y débiles
mentales, débiles seniles y sordomudos) están exentos de la garantía, salvo que el juez
disponga lo contrario a petición del consejo de familia.. En lo que se refiere
específicamente a los padres – quienes figuran entre los curadores legítimos, la excepción
aparece reafirmada por lo dispuesto en el Código Civil.
3. Siempre que se trate de una tutela típica o propia, es decir, la tutela de los incapacitados de
los tres grupos varias veces mencionados, es necesario el cumplimiento de otros requisitos
previos que no concurren en la tutela ni en los otros tipos de tutelas, es decir, la tutela
patrimonial y las tutelas especiales.
(Sierra) Sí se trata del enfermo mental o débil mental, el trámite de la interdicción es la que
precisa el Código procesal Civil; el mismo procedimiento se seguirá cuando se trata del débil
senil y del sordomudo que no sabe expresarse indubitablemente.
El trámite es diferente si se trata del pródigo y debemos entender que también del mal
gestor, el ebrio habitual y el toxicómano; el trámite es entonces el del juicio sumarísimo,
según lo ordenado por el Código Procesal Civil
.Si en fin se trata del condenado a pena que lleve anexa la interdicción se declara en el
propio proceso penal, de modo que no se necesita de un trámite civil especial.
En todos aquellos casos en que la causa de la incapacidad existente desde antes que el
incapaz salga a la mayoridad – y por tanto de la patria potestad - o la tutela que venía
amparándola; esto es por ejemplo, cuando el sujeto, además de ser menor de edad, es
enfermo o débil mental, la ley permite que el procedimiento de interdicción se inicie antes
de que termine la minoría del incapaz. La previsión de la ley llena la finalidad de que el
incapaz entre a la curatela al mismo momento en que sale de la patria potestad o la tutela.
Término de la curatela
A Son aplicables a la curatela, las reglas de la tutela, por expreso mandato de los artículos
568 y 605 del código civil.
l. La curatela cesa por la declaración judicial, en tal sentido deberá decretarse cuando cesen
las causas que la hicieron necesaria.
d) Por la no ratificación.
e) Por la remoción.
Una cosa es el fin de la curatela y otra muy distinta la terminación del cargo de curador.
Puede terminar el cargo de curador sin que termine la curatela. Esta continuará surtiendo
efectos con el nuevo curador nombrado. A la terminación o extinguirse la curatela consigo
desaparece la necesidad del curador.
REHABILITACIÓN
La rehabilitación de una persona declarada incapaz por causa de prodigalidad, mala gestión,
ebriedad o toxicomanía (art. 44, incs. 4, 5, 6 y 7 del CC) solo puede ser demandada cuando
durante más de dos años no ha dado lugar el interdicto a ninguna queja por hechos análogos
a los que determinaron su curatela (art. 613 del CC).
CONCLUSION