Lectura Control 2 Cap4.2

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 39

“NA SINTESIS TENTATIVA

Por tiltimo, cabe consignar que cuando los países establecen


en su Constituci6n los derechos civiles y políticos de las perso-
nas, no incluyen consideraciones referentes a la eficiencia econó-
mica en la consagración de esLos derechos. Okun afirma que
cada individuo adquiere y ejerce estos derechos sin pagar nada.
con lo cual no hay incentivos para economizar alguno de ellos;
como hay una distribución universal de estos derechos, no fun-
ciona el principio de las ventajas comparativas, esto cs, no tiene
sentido especializarse en un derecho específico; finalmente, no
hay un mercado, o más bien esdn prohibidos los mercados para
la transacción de derechos civiles y políticos -como el voto-; si
existiera este tipo de mercados podría demosLrarse que habría
un incremento de bienestar de vendedores y compradoresXs.
En síntesis, los derechos civiles y políticos consagrados en la
Constitución violan el cálculo optimizador de la eficiencia eco-
nómica. iPor qué entonces la sociedad establece estos derechos
“ineficientes”? Porque “constituyen el pegamento que mantiene
unida a la sociedad”3g.

DERECHOS HUM4NOS Y MEMORIA HISTORICA

La vida humana es sagrada; el asesinato de una persona es un


delito contra toda la Humanidad. La Comisión Nacional de Ver-
dad y Reconciliación comprobó la muerte de 2.2’19 personas
víctimas de violaciones de los derechos humanos durante la dic-
tadura militar; 318 tenían menos de 20 años4”.
Durante el gobierno de la Unidad Popular también hubo
víctimas fatales por hechos violentos. Entonces, <por qué sólo
destacar las muertes violentas acaecidas durante la dicLadura mi-
litar? El ex Presidente Jimmy Carter proporciona la respuesta:
“De todos los derechos humanos, el más elemental consiste en
no estar expuesLo a la violencia arbitraria, violencia generada
por gobiernos, por terroristas, por criminales, por mesías auto-
proclamados que utilizan estandartes políticos o religiosos. Pero
los gobiernos, debido a que poseen un poder muy superior al de
los individuos, tienen una responsabilidad especial. El primer
deber del gobierno es la protección de sus ciudadanos. Cuando

339
UN SIGLO UI: ECONOMIA POLITKX CHILENA (X390-1990)

es el gobierno el que se transforma en cl perpetrador de la


violencia, pierde su legitimidad (...) 1.0s asesinatos políticos, la
tortura, las detenciones arbitrarias y prolongadas sin cargo o jui-
cio son las violaciones de derechos humanos más crueles y horri-
bles”4’. Todos los crímenes deben ser condenados, pero hay que
“enfatizar el carácter especial de los crímenes cometidos por el
Estado, que hace uso de su monopolio de la fuerza legítinra para
violar la ley, en vez de respetarla y hacerla cun~plir”42.
Las violaciones de los derechos humanos ocurridas durante
la dictadura militar no son si>10 un problema de dicho período,
sino que constituyen una cuestión fundamental para la genera-
ción presente y para varias generaciones futuras. En este sentido,
se han planteado diversos objetivos al término del rkgimen mili-
tar: verdad, justicia, reparación de daños, reconciliación nacio-
nal, prevenir la recurrencia de violaciones futuras43. Este simple
enunciado permite intuir distintos problemas. Tratar de hacer
justicia pone en riesgo la estabilidad de la deInOCrdCbd; asignar la
misma prioridad a la verdad y a la justicia puede conducir a que
no se logre ninguna de ellas. iPuede haber reconciliación nacio-
nal y perdón si no hay justicia?; y si no la hay, {qué nos asegura
que no se producirán en el futuro nuevas violaciones a los dere-
chos humanos?
La importancia del conocimiento público de la verdad está
asociada al objetivo de unidad nacional, que precisa de “un senti-
do de identidad cornú~~ y, por tanto, de una historia y de una
memoria compartidas”: la verdad afecta a la sociedad como un
todo. “Esconder la verdad permite a los responsables institucio-
nalizar sus propias versiones exculpatorias de lo que sucedió y
eludir su responsabilidad hist&ica (...) Lo más importante es
que la verdad sea establecida de modo oficial, para que forme
parte dc los registros históricos de la nación, como una versión
de los eventos que goce de autoridad y que esté más al15 de las
consideraciones partidistas”44. Esta es la función del Informe Ket-
tig. Pero... <cuántos chilenos han leído el Informe Rcttig?
Las leyes de amnistía constituyen en la práctica instrumentos
legales creados por regímenes represivos para “blanquear” cl pa-
sado, para que la sociedad olvide por ley lo que pasó, haciendo
borrón y cuenta nueva. Pero “las leyes de amnistía no deben, de
ninguna manera, impedir que se descubra y difunda la verdad

340
UNA SINTESIS TENTATIVA

con respecto a las violaciones de Derechos IHumanos ocurridas


cn el pasado”45. En el caso argentino, la aplicación de la justicia a
pesar de la existencia de leyes de amnistía reforzó el conocimien-
to de la verdad y ayudó al ordenamiento histórico. “La lógica
jurídica, expuesta públicamente, tuvo la capacidad de ordenar el
pasado (...) constituyéndose en un efectivo mecanismo para el
juicio histórico y político del régimen dictatorial. El producto del
juicio no fue sólo ka sentencia a los Comandantes de las tres
primeras juntas; como consecuencia del mismo quedó compro-
bado cl carácter sistemático de la represión desatada por el go-
bierno militar”46. Esto ilustra cómo la aplicación de justicia es
funcional al conocimiento de la verdad y de la historia.
ZDebe un gobierno tratar de hacer justicia, “aún a riesgo de
ser derrocado por aquellos cuya responsabilidad está siendo in-
vestigada, con consecuencias graves para los mismos objetivos
que se busca alcanzar”? En Chile, el pragnratismo político ha
prevalecido por sobre la búsqueda de justicia; se ha considerado
que “una política de enjuiciamiento y castigo sin restricciones no
favorecía la pacificación nacional ni era posible dc implementar
sin que la inquietud militar se convirtiera en abierta rebelión”47.
Pero, “dar impunidad a los torturadores, fno es acaso trivializar
la tortura?“48. Además, para q ue prevalezcan la democracia y la
libertad, <no debería la política estar subordinada a los valores y
a la moral?
?Qué hacer con las víctimas y sus familiares? Después de la
Primera Guerra Mundial, varios países erigieron una tumba al
Soldado Desconocido para fortalecer la cohesión de la nación
con un símbolo que apelara a una memoria común. Podría ha-
cerse algo similar con un monumento a las víctimas de la repre-
sión en Chile. Sería conveniente además crear la cátedra de
Derechos Humanos en la enseñanza básica, media, técnica, uni-
versitaria y en las academias militares. Unido a lo anterior, ha-
bría que crear un museo de la Memoria Reciente; utilizando
toda la tecnología moderna, este Museo debiera constituirse en
un hito de Santiago, visitado por todos, chilenos y cxtranjcros,
para aprender, reflexionar y pensar respecto a la experiencia del
período 1970-90. Chile ha tenido la capacidad para transformar-
se en el segundo exportador mundial de salmón en un período
relativamente breve. Habría que hacer algo equivalente a nivel

341
IJN SIGI.0 DE ECO~~MUPOLITIWCH,l.bNh (1890.,990)

cultural, donde este Museo de la Memoria Reciente fuera un


modelo para la región.
En la formación profesional de los economistas se crea un
sesgo contra el pasado, contra la memoria y contra la historia.
Un concepto básico en cl análisis microeconómico es el de que
“los costos fijos, fijos son”, esto es, que los costos fijos de un
período anterior son irrecuperables, son “costos hundidos”. Para
las decisiones actuales lo que interesa son los costos variables
presentes y fLlturos; luego miremos hacia adelante puesto que
mirar atrás es irrclcvante desde el punto de vista de la toma de
decisiones. Las ideas de progreso técnico y modernización re-
fuerzan esta postura.
Exactamente lo opuesto ocurre en la formacibn de historia-
dores y psicoanalistas; particularmente para estos últimos el pasa-
do determina el comportamiento del presente: la memoria actual
y relacionada a este presente constituye el mecanismo para re-
constituir el pasado. En consecuencia, somos tambikn lo que
recordamos.
La memoria histórica desempeña un papel social fundamen-
tal: nos explica quiénes somos como país, rekdcionando cl pre-
sente con el pasado y conformando así nuestra manera de ser. El
pasado le da al presente sentido y significado; la incomprensión
del presente está asociada a ka ignorancia del pasado4”. Se ha
sugerido que la memoria histórica pareciera estar sujeta a la ley
de oferta y demanda. “IIay que generar memoria (histórica);
ésta es producida en períodos específicos. Pero, para que perdu-
re más allá del presente inmediato, (...) tiene que haber una
demanda”“O.
Los veinte años transcurridos entre 1970 y 1990 han sido
traumáticos para todos y a todo nivel. Tratar de olvidar o ignorar
dicho momento histórico es una invitación a que los hechos se
repitan. La revisión y la discusión exhaustivas de este período
nos ayudarán en cambio a superar los traumas, y contribuirán a
acelerar la madurez nacional.
UNA SINTESIS TF,NTATIVA

NOTAS

1. Ver nota del cuadro 4.1 para el cálculo de estas tasas de crecimiento.
2. Idem.
.3 Una economía que crtw al 2,29% rxprrimenu cn uu dkada un incre-
mento total de 25,4%; cuando crece al 3,867 0 nnual
r el incremento Total cn
la década es de 46%.
4. El ingreso per cú~&z crece 1,9% durante la estrategia ISI (1940-73) y 2,1%
durante el período 1973-90. Si durante la estrategia ISI hubiera habido la
misma tasa de crecimiento demográko que durante el período 1973-90, el
ingreso pw c+i/n habría crrrido al 23%. Por otra parte, si durante el
período 1973-90 x hubiera rrrarrtrrrido cl crccirrrirrrto demográfico de la
estrategia ISI, el ingreso per cú@ta habría crecido sólo al 1,7%.
5. Para una excelente revisión y una profunda discusión de los distintos enfo-
ques, ver Marglin (1984).
6. Esto es lo que en términos técnicos se denomina una baja preferencia
intertemporal; se requieren tasas de interés relativamente reducidas para
inducir a los consumidores asiáticos a que incrementen su nivel de ahorro.
Al contrario, los tatinoamcricanos tienen una alta pvzfèrencia intertempo-
rat: requieren tasa de interbs relativamente elevadas pwa cstimrrtar su
nivel de ahorro en el presente.
7. Por otra parte, es obvio que si no hubiera inversión extranjera probable-
mente no habría ninguna generación de utilidades en la actividad en
cuestión. Generalmente, sólo una parte del total de esas utilidades es remi-
tida al exterior.
8. Ver estudio de Montero (1990) sobre et surgimiento de un nuevo empre-
sariado chileno.
9. Vrr Ratrs (1981) y Haggard (1990).
10 Esta cifra ha sido obtenida utilizando la participaci¿in relativa de la GMC
(en toneladas de cobre exportado) en el total del incremento de monto
exportado de cobre (US$ ) entre los años 1970 y 1990; luego, esta cifra de
exportaciones de la GMC se relaciona con el aumento de las exportaciones
totales del mismo período.
ll Una regresión semilogarítmica de la produccik (física) de cobre (tonela-
das) de ka GMC, con variables ficticias (dummy) para un quiebre estructural
para los prríodos 1940-70 y 1971-90. estimada por Cochranr-Orcutt. pro-
porciona los siguientes resultados:
tnQ= 5,95 - 0,47d + 0,008t + 0,0232dt R”=0,78
OU (L27) (2,02) (2,4W F = 57,5
en que 4 es la producción de cobre (toneladas) anual, d es una variable
dummy para el período 1971-90 y t cs ura variable de tendencia. El coefi-
ciente de ta variabtc dc tendencia en el período 1940-70 es 0,008, esto es,
la produccií>n dr la GMC crecía al 0.8% anual. Hay un cambio estructural
en la tendencia de los dos períodos en el que la variable dummy para et
período 1971-90 tiene el valor 0,0232. Luego, la producción física de la
GMC crece 3,l%/año en el período 1971-90. Los valores entre paréntesis
corresponden al estadígralo t.
12. Ver Romaguera, 1991.
13. Para una excelente y profunda discusión conceptual sobre el consenso, ver
Lechner (1986).
14. Cainzos, 1991.
15. Barr, 1987; A. Rodríguez, 1991; Wilson y Wilson, 1982.
16. Cainzos, 1991.
17. Wilson y Wilson, 1982; Shonfield, lY84; Barr, 1987.
18. Para una revisión dr~allada dc las políticas socialcs chilcrras, ver Arrllano
(1986) y Rxzynski (1992).
19. Blinder, 1987.
20. Desde este enfoque paretiano, no es obvio cuil es el principio de bienestar
utilizado en los programas de ajuste macroeconómicos que generan des-
empleo y caída de salarios reales; lo mismo es válido para los programas de
ajuste estructural.
21. Ver Wilson y Wilson, 1982.
22. Este argumento îs toralmrrrtr válido cuando las transfcrrnrias son volunta-
rias. y se debilita cuando son obligatorias.
23. Por ejemplo, en sólo 3 meses, el gobierno de Patricio Aylwin logró la
aprobación de un incremento de impuestos equivalente al 2,5% del PGB,
para financiar un aumento del gasto social; la reforma tributaria contó con
el respaldo de todo el espectro político. La situación fue totalmente opues-
ta durante el régimen militar, en el que se redujeron tanto el gato social
como la rrrandnción tributaria; dwarrtc cl gobierno de la U.P. hubo pri-
mero urra expansión d&tira del gasto social y sí>10después su+ la pre-
ocupación por el desequilibrio resultante.
24. Wilson y Wilson, 1992.
25. Ver Raczynski, 1992.
26. Klein, 1988.
27. Johnson, 1988.
28. La maximización de la equidad en el bienestar implica la aplicación del
principio de igual acceso para lodos aquellos que &nen la misma necesi-
dad. 1.a presencia del sector privado en la producción de ciertos biencs
sociales, aun cuando viola el principio anterior. libera recursos del Estado
de Bienestar y en consecuencia permite maximizar el nivel total de bienes-
tar social (Klein, lY88).
29. Shonfield, lY84.
30. Wolf, 1989.
31. Ver De la Cuadra y Valdés, 1992.
32. <Cuál habría sido la reacción de los economistas ortodoxos si durante un
gobierno post 1989 se hubieran incrementado las tarifas desde un 10% a
un 20%? Se habría dicho que eso era un cambio profundo en las reglas del
juego, que destruía la esencia del modelo económico y que provocaba un
datio irreversible al crecimiento futuro de la economía chilena.
33. Ver en Ward (1979 a,b) las diferencias entre las visiones económicas globa-
les del conscrvantismo y del liberalismo. Los párrafos siguientes utilizan
elrmentos dr SIISobras.
34. Sen, 1986.
35. Ver Stiglitz, 1990, y cualquier texto de microeconomía moderna.
36. Okun, 1975, p. 20.
37. Okun, 1975, p. YO.
38. J. Tobin, citado rn Okrrn, 1975.
39. Okun, 1975, pp. 10, 14.
40. Informe Rettig, 1991. Hay 641 casos adicionales en los que la Comisión no
pudo formarse convicción.

344
UNA SINTESIS TENTATIVA

41. J. Carter, lY78, p. 326.


42. Zalaquett, 1991, p. 156.
43. Sobre FSL<>S ternas, v<‘r cl rxîrlrntr artículo de Zalaquett en el que sc hasa
principalmente esta sección.
44. Zaiaquett, 1991, p. 153.
45. Zalaquett, 1991, p. 163.
46. Acuñay Smulovitz, IYYl, p. 16.
47. Zalaquett, 19Y1, pp. 150 y i75.
48. Jacques, 1992, p. 32.
49. Lc Goff, 1992.
50. Fentress y Wickham, 1992, pp. 201-202.

345
ANEXO
ESTADISTICO
ANEXOESTADISTICO

CUADROA.1. CRECIMIENTOANUALDELASEXPORTACIONES,
1850-1920. (PORCENTAJES)

Bdmnan * Cmth Pt al.

1850 13,8 1886 04


1851 -2,2 1887 16,2
1852 15,l 1888 22,7
1853 -ll,1 1889 -9,7
1854 16,8 1890 4,5 3,7
1855 8,l 31,l 1891 -4,0
1856 -5,9 1892 -2,3
1857 %7 1893 12,6
1858 -8,5 1894 -0,3
1859 7,1 1895 -5,3 1,2
1860 426 25,2 1896 2,0
1861 -19,0 1897 -12,9
1862 10,2 1898 22,9
1863 -10,2 1899 -3,0
1864 35,4 1900 16,2 523
1865 10,o -2,6 1901 2.5
1866 19,4 1902 891
1867 -3,3 1903 5,5
1868 -9,0 1904 ll,0
1869 -1,5 1905 10,8 22,6
1870 -7,7 209 1906 3,l
1871 RO 1907 13
1872 27,3 1908 13,9
1873 -8,3 1909 -4,0
1874 -5,2 1910 23 7,3
1875 4,5 -3,5 1911 0,5
1876 -2,5 1912 14,l
1877 -18,l 1913 3,7
1878 -0,l 1914 -24,s
1879 ll,5 1915 60 93
1880 24 13,5 1916 59,4
1881 17,2 1917 38,7
1882 35,8 1918 72
’ Q83 5,8 1919 -60,5
1884 -18,7 1920 13,8 158,4
1885 -4,4 -10,3

349
ANEXO ESl’AUlSl’ICO

CUADRO 12.2. INFOIWACIÓN ECONÓMICA BÁSICA DEL SALITRE,


CHILE 1880-1925

Empleo
(m&s de
personas)

1880 12,4 93 2,3 0.8 23


1881 ll,0 15,4 3,6 3-z 24,2 4.9
1882 93 21,2 43 5,9 29,4 7,1
1883 8x4 25,3 58 31,4 7,O
1884 75 24,2 5,5 $0 24,7 5,5
1885 7,l 14,2 4,3 5:2 18,5 4,6
1886 7.7 14,s 4,~ 17,s
1887 7,O 23,4 2 65 22,G t%
1888 6.3 25,9 718 95 26,6 912
1889 6,9 26,4 92 ll,5 29,2 ll,4
1890 6,J 29,0 10.3 12,6 26,2 13,0
1891 25,3 8.9 5,3 21,O ll,7
1892 ?8 22,s 8.0 9,3 23,4 13,5
1893 6:s 29,8 9,5 ll,ö 23,2 14.8
1894 65 34,3 10,9 13,7 23,4 1x,1
1895 37,o 12,4 16,l 28,6 22,s
1896 z 33,3 ll,0 ll,4 28,7 19,3
1897 Ii5 29,7 11,s 13,2 28,0 16,7
1898 4,5 31,5 12,9 lG,l 27,s lG,O
1899 3,5 34,4 14,0 17,l 33,9 18,9
1900 5,3 39,l 14,5 18,l 37,0 19,7
1901 5,R 39,5 12,6 lG,l 33,8 20.3
1902 53 45,3 13,s 16,s 33,l 24,5
1903 6,3 50,5 14.6 17,9 40,4 24,4
1904 58,8 15,o 18,6 39,4
1905 K 65,9 17,O 20,7 43,2 30,ti
1906 7:2 75,s 17,3 21,6 48,6
1907 8,4 74,4 16,5 20,3 51,7 39,7
1908 7,s 81,2 20,5 25,2 46,l 40,s
1909 7,3 76,9 21,3 26,3 49,8 37,s
1910 ti,3 84,O 23,3 29,3 57,0 43,5
1911 6,4 94,7 24,5 30,3 60,6 43,9
1912 6.ö 103,4 24,9 30,7 64,l 47,8
1913 7,2 113.6 27,4 32,9 67,4 53,2
1914 626 78,4 17,5 23,l 43,8 44,0
1915 5,s 82.9 PO,2 24,7 41,0 45,5
1916 120,9 29.8 36.4 60,5 53,5
1917 $2 16X,6 27,7 37,5 74.3 56.4
1918 910 182,4 29,8 39,9 89,0 57,o
1919 10,4 38,s 10,o 41,0 44,s
1920 144,s 27.:: 22,s 55,7 46,2
1921 79,0 1113 ll,8 35,l 33,9
1922 56,8 13,0 13,0 41,4 25,5
1923 1062 22,8 26,0 64,l 41,0
1924 106.6 24,2 27.2 68,3 60,8
1925 124,3 60,s

Fwntur: 1925-50: Mamalakis y Reynolds (1965).


1951.70: Ffrench-Davis (1974).
Tipos de cambio: Cariola y Sunkel (1982).
ANEXO ESTAUISTICO

CUADRO A.3. INFORMACIÓN ECONÓMICA BÁSICA DE LA MINElúA


DEL COBRE, CHILE 1925-70

Precio V01ume71 de
del Exportaciones
cobre cobre TL&
(lib./Tl.) (MM de US$ ) (MM dc US$ )
(51
lYP5 1x4 ll3,G 1,9
1926 13,2 108,Y 25
1927 12.3 116.0 215:9
192R 13,9 137,4 266,7 iti 78,5
1929 17,5 IG3,G 287,6 816 87,0
1930 12,9 107,l 190,l 7,3 80,6
1931 '78 76,4 196,9 3,5 71,3
1932 5,G 27,G 129,3 0,7 33,O
1933 62 32,7 153,8 0,3 3x.5
1934 43,5 205,5 1,4 37,l
1935 E 43,8 273,l 2,o 49.7
1936 8:9 453 213,6 2.7 51,2
lY37 14,5 105.0 362.0 3,2 41,5
1938 9,7 69.1 346,G ll,1 48,3
lY39 103 71,lJ 313,O %l 54,4
1940 ll,2 R2,l 3443 93 67,G
1941 10,O 973 460,O 12,2 82,3
1942 ll,0 112,G 483,l 18,8 69,6
1943 ll,1 llG,3 475,4 24,8 82.6
1944 ll,4 198,5 486,3 22,3 92 2
1945 ll,5 212,G 422,8 25,7 127:2
1946 13,2 198,s 376,5 21,l 15x,4
1947 20,l 2Y2,8 35Y,3 50,o I x9,9
1948 21,9 344,6 445.Y 56,4 232,7
1949 20,l 27G,5 350,2 .3x,1 229.8
lY5O 21,O 308,3 3G4,7 33,0 292;4
1951 26,Y 3X3,X 354,7 59,7 288,9
1952 342 469,3 406,4 127,0 3OG,8
1953 34,7 36X,9 359,4 81,3 265,7
1954 29,9 383,4 353,2 89,3 290,Y
1955 38,s 489,4 432,O 190,5 395.2
1956 40,3 497,9 489,6 151,0 437.7
1957 ‘27,2 39G,8 479,5 83,8 4X4.4
1958 24,4 354,0 465,4 61,O 476,6
1959 29,7 457,8 544,'; YYJ 5243
1960 30,4 464,2 531,Y 98,3 599,4
19Gl 28,7 465,4 546,0 X3.1 664,8
1962 29,7 500.7 585.7 93,2 716,9
lYG3 29.3 504,o 5YY,Y 95,2 638,9
1964 31,5 594,0 G22,l 111,6 578,2
19G5 371 6X4,2 583,s 132,2 801,2
19GG 47,R X66,3 624,7 227,4 1.043,l
1967 48,9 874,3 GGO,2 213,2 1.140.1
1968 51,7 911,l 658,3 202,7 1.206.5
1969 65,4 1.173,3 687,9 353,o 1.322 1
1970 60,3 1.111,9 G87,9 P78,6 1.4x8:8

I~unt~s: 1925.50: Mamalakis y Keynolds (1965)


1951.70: Ffiench-Davis (1974).
‘Tiposdc cambio: cariola y Sunkrl (1982).

351
CUADRO A.4. DESCOMPOSICIÓN DE IA ESTRUCTURA TRIBUTARIA,
1880-1930

Impuesto a
Importaciones
(MM $lJS$ )
, ,
5,5 ll,7
1880
1881
1882
2:
2:7
23,0
29,3
1883 2,s 31,4
1884 2,3 ‘L4.6
I X85 1,7 75 4,6 i8;5
1886 L’7 17,9
1X87 123 22,6
1888 1,4 26,6
1889 1,3 29,2
1890 LO 7.3 11 25,6
1891 21,0
1892 8 23,4
1893 012 23,2
1894 02 23.3
1895 0,2 7,5 14,9 2X,6
1896 28,6
1897 i:P 27,9
1898 27.8
1899 ::: 33;9
1900 102 18 37,0
1901 g 33,7
1902 33,2
1903 0:6 39,O
1904 03 40.0
1905 1,O 21,l ll,6 43;2
1906 56,4
1907 ::i 51 ,R
1908 46,l
1909 l% 55,2
1910 2:s 17,6 29,2 _. ,~
63 1
1911 60,6
1912 3:;
1913 39
1914 311 53,6
1915 78 73 24,s 63,5
1916 5,ö 85,l
1917 112.6
1918 l?ii 153,7
1919 816 7x.7
1920 8,6 ll,3 27.7 96,4
1921 51.0
1922 2: 64;3
1923 7:5 90,o
1924 12,2 90,9
1925 19,9 22,7 31,4 112,7
1926 265 122,o
1927 :41,7 138,2
1928 36,3 156,5
1929 45,9 182,2
1930 46,9 44,l 21 157,6

Fwntm:18X0-1920: Mamalakir (1971). 1921-1930: Carda y Sunkel (1982)

352
ANEXO ESTADISTICO

CUADRO A.5. PARTICIPACIÓN CHILENA E IMPolYTANCIA KEIATIVA


DE LA GkuN MINERÍA DEI. COBRE EN LA woNoMíA
CHILENA, 1925-70

Particip de la Gran Minmá del Cobreen


t%pmfnnón TOfd

1925 so,0 20,o 20,5 113,6


1926 71.4 28,6 25,0 108,9
1927 657 34,3 25,2 116.0
1928 55,7 44,3 4.0 28,0 137,4
1929 69,9 30,l 5,0 38,l 163,6
1930 83,1 16,9 4,O 31,o 107.1
1931 93,4 66 2,O 32,8 76,4
1932 x7,7 12,3 LO 22,7 27,6
1933 80,O 20,o (40 20,.5 32,:
1934 81,O 19,0 2,O 19,4 435
1935 64,K 352 2s 23,3 43,s
1936 67,6 32,4 KO 22,0 45,3
1937 49,4 50,6 3.0 37,O 105,o
1938 6.5,O 35,0 10,o 31,0 69,l
1939 65,l 34,9 7,o 33,o 71.0
1940 52,5 47,5 7.0 37,0 82,1
1941 48,O 52,0 KO 36,0 97,3
1942 45,6 54,4 15,o 36,O 112,ti
lY43 53,9 46,l 17,O 34.0 116,3
1944 56,4 43,6 14,o 54,8 198,5
1945 59,3 40,7 13,0 49,R 2I2,6
1946 63,0 37,o II.0 43,3 19x,5
1947 53,7 46,3 23,o 53,l 292,8
1948 51,l 48,9 ?O,O 58,O 344,6
1949 62,l 37,9 14,o 48,4 276.5
1950 52,8 472 ll,0 505 308,3
1951 51,o 49,0 19,o 45,l 383,R
1952 4,3 19,3 80,7 41,4 53.0 469,3
1953 4.2 27,4 72.6 30,6 47,3 368,9
1954 4,5 26,6 73,4 30,7 5.5 3 383.4
1955 3.0 19.0 81,0 48,2 6415 489,4
1956 3.9 29.5 70,5 34,5 64,3 497.9
1957 6;8 4x:7 51,3 17,3 59,6 396,X
195X 10,5 53,7 46,3 12,x 522 354,0
1959 7,7 49,7 503 18,9 58,4 457,8
1960 7,l 53,Y 46.1 16,4 62,5 464,2
1961 7,6 57,7 42,3 I2,5 57,5 465,4
1962 66 57,2 42,8 13,o 56,6 500,7
1963 66 51.7 48,3 14,9 56,5 504,o
1964 4,5 47,0 53,0 193 47,Y 594,0
1965 4,4 49,4 50,6 16,s 44,9 684,2
1966 4,l 40,l 59,9 21,8 55.2 X66,3

353
ANEXO ESTADISTICO

1967 4,8 44,l 55,9 IR,7 59,6 874,3


1968 621 49,0 51,0 16,s 58,Y 911,l
1969 4,9 39,5 60,5 26,7 61,3 1.173,3
1970 0,o 46,9 53,l 1x,7 59,5 1.111,9

Fumtex1925-1951: Mamalakis y Reynolds (1965).


1952-1970: Ffrench-Davis.
(5) y (6): 1925.35: Palma (1979).
193643: Manralakis y Reynolds (1965).
1944-60: 1Jnivrrsidad dr Chile.
1961-70: Indicadores Económicos, Banco Central.

354
CUADROA.6. EVOLUCIÓNEFECTIVAYESTIMADADE TÉRMINOS
DEINTERCAMBIOYPRECIO DELSALITR!Z.~HILE
1885-1915

Precio
Ténni7ZOS del
de Salitre Tendencia
Inlercwnbio (lib/Tl.) WI)

1885
1886
1887
112,0
117,4
123,4
101,8
101,6
102,o
Zr;
710
6,l
6,l
61
1888 120,o 102,2 6,3 6,1
1889 115,7 102,4 6,9 61
1890 113,3 102,6 6,l 671
1891 112,7 102,8 631 61
1892 111,6 103,o 5,8 691
1893 121,2 103,2 68 62
1894 127,l 103,4 6,5 62’
1895 120,l 103,6 63 62
1896 103,9 103,8 62’ ‘52
1897 88,7 104,o 6,5 62
1898 80,5 104,2 475 62
1899 78,l 104,4 375 62
1900 78,3 104,6 5,3 63
1901 89,0 104,8 578 63
1902 87,2 105,o 59 6,3
1903 88,6 105,3 63 6,3
6,3
1905
1904 110,5
92,4 105,7
105,5 7f 6,3
1906 133,3 105,9 712 6,3
1907 127,Y 106,l 894 6,4
1908 117,l 106,3 7,8 6,4
1909 99,8 106,5 793 6,4
1910 93,0 106,7 623 6,4
1911 100,8 106,9 6,4 694
1912 114,2 107,l 66 6,4
1913 111,5 107,3 72 694
1914 107,a 107,6 633 675
1915 114,0 107.8 5,8 695
Fuentes Palma (1979); Mamalakis (1971); Carda y Sunkel (1982).

355
CUADRO A.7. F.VOI.LJCI~N EFECTIVA Y ESTIMA DE TÉRMINOS
DE INTERCAMBIO Y PRECIO DEL COBRE. C;IIILE 1940-1970

Frf?cio
Tf?77lli?lOS del
de Tmdmrin Cobre
Intercambzo (AR11 (lih/Tl.)

1940 52,0 46,2 ll,2 ll,6


1941 52,0 47,0 10,o 12,2
1942 56,0 47,8 ll,0 12,9
1943 48,O 48,6 ll,1 13,6
1944 50,o 49,4 ll,4 14,4
1945 45,0 50,2 ll,5 15,2
1946 50,o 51,l 13,2 16,0
1947 46,0 51,9 20,l 16,9
1948 57,0 52,8 21,9 17,8
1949 59,0 53,7 20,l 18,8
1950 54,0 54,6 21,0 19,8
1951 60,O 55,5 26,9 20,9
1952 62,0 56,4 34,2 22,l
3953 68,O 57,4 34,7 23,3
1954 58,0 58,3 29,9 24,6
1955 65,0 59,3 38,8 26,0
1956 71,0 60,3 40,3 27,4
1957 58,0 61,3 27,2 28,9
1958 51,O 62,4 24,4 30,5
1959 52,9 63,4 29,7 32,2
1960 60,l 64,5 30,4 34,0
1961 60,2 65,5 28,7 35,9
1962 58,4 66,6 29,7 37,9
1963 54,9 67,8 29,3 40,o
1964 56,7 68,9 31,5 42,2
1965 64,5 70,l 37,5 44,5
1966 78,4 71,2 47,s 47,0
1967 74,l 72,4 48,9 49,6
1968 79,4 73,6 51,7 52,3
1969 93,9 74,9 65,4 55,2
1970 82,5 76,l 60,3 58,3

Fuent~.PaIma (1979); Mamalakis (1971); Cariola y Sunkel (1982).

356
ANFXO ESTADISTICO

CU~~DR~ ~.8. INDICES DE mo~uccn5iv DE LA INDUST~Y ~4


ECONOMíA (PGB), 1908-70

Indices Crecimiento anual


(1929=1 OO) (%i
Industria PGB Industria PGB

1908 49,5 43,l


1909 52,5 43,s 61 1,‘3
1910 55,7 47,4 61 8,2
1911 56,9 47,0 ;fi -0,8
1912 61,l 52,2 ll,1
1913 60,7 52,8 -017 l,l
1914 60,7 49,2 RO -6,8
1915 60,7 45,7 w -7,l
1916 60,7 54,2 w 18,6
1917 61,7 58,6 1,6 831
1918 65,l 58,7 5,5 02
1919 65,7 46,4 w -21,0
1920 63,Y 53,0 -2,7 14,2
1921 74,5 45,6 16,6 -14,o
1922 73,7 48,8 -1,l 770
1923 88,4 60,7 19,9 24,4
1924 98,I 66,2 ll,0 9,l
1925 88,4 67,0 -9,9 12
Fuente: Ballcste~os y Davis (1965).

357
ANEXO bSU.DISTICO

CUADRO R. 1. TIPO DI! CAMBIO. PERÍODO: 1969-74

MPS Tipo de Cambio (escudos/dólar) Brecha Tipo de Cambio


qicinl Pa?&10
(1) ei
1969 E 7,73 10,7 1,38 381
F 7,97 lo,8 1,35 35,5
M 8,16 10,9 1,34 33,6
A 8,39 13,0 1,55 55,0
M 8,70 I4,O 1,61 60,9
8,95 14,3 1,60 59,8
9,22 14,3 1,55 55,0
!4 9,43 14,2 1,51 50,5
s 9,62 14,2 1,48 47,6
0 9,77 14,3 1,46 46,4
N 9,82 14,6 1,49 48,6
9,92 14,Y 1,50 50,2
1970 E 10,lZ 15,s 1,56 56,2
F 10,39 15,6 1,50 50,2
10,77 16,4 152 52.2
A ll,12 19,3 1,74 73,6
M ll,43 21,5 1,88 88,l
ll,73 22,6 1,93 92,6
12,Ol 23,0 1,92 91,5
i 12,21 22,s 1,87 86,7
s 12,21 35,0 2,87 186,7
0 12 21 36,0 2,95 194,s
N 12121 26,0 2,13 112,9
D 12,21 28,0 2,ZY 129,3
1971 E 12,21 34,5 2,83 182,6
F 12,21 35,5 2,91 190,7
M 12,21 45,0 3,69 268,6
A 12,21 44,3 3,63 262,8
M 12,21 48,5 3,97 297,2
12 21 54,7 4,48 348,0
12121 62,0 5,08 407,8
A 12,21 68,O 5,57 456,9
s 12,21 70,5 5,77 477,4
0 12,Pl 66,O 5,41 440,5
N 12,21 72,l 5,90 490,5
D 14,03 74,7 5,32 432,4
1972 E 15,lS 825 5,43 443,5
F 15,18 85,5 5,63 463,2
M 15,18 YO,0 5,93 492,9
A 15,18 108,O 7,ll 611,5
15,18 147,o 9,68 868,4
15,18 180,O ll,86 1.085,8
1 15,18 210,o 13,83 1.283,4
A 26,12 320,O 12,25 1.124,9
s 26,12 299,0 ll,45 1.044,6
0 26,12 295.0 ll,29 1.029,2
ANLXO ESI-WISTICO

lipo de Cambio (escudos/dólar) Brecha Tipo de Cambio


Oficial PO&10
(1) (2)

N 26,12 290,o ll,10 l.OlO,l


D 26,12 340.0 13.02 1.201,5
1973 E 27,62 410,o 14,84 1.384,4
F 27,62 425,0 15,SY 1.438,7
M 27,62 700,o 25,34 2.434,4
A 27,62 800,O 28.96 2.796,5
M 27,62 1.350,o 48,88 4.787,8
36,98 1.400,o 37,86 3.685,8
36,98 1.800,O 48,67 4.767,5
d 43.53 2.050,O 47,09 4.609,4
S 47,16 1.250,O 26,51 2.550,6
0 280,OO 950,o 3,39 239,3
N 290,oo 800,O 2,76 1759
D 343,23 700,o 2.04 103,9
1974 E 371,2<J 780,O 2;10 110,l
F 416,25 800,O 1,92 92,2
M 483,00 835,0 1,73 72,9
A 545,00 840,O 154 54,l
611,00 815,0 1,33 33,4
J” 725,oo 925,o 1,28 27,6
790,oo 1 .135,0 1,44 43,7
L 889,00 1.285,O 1,45 44,5
s 1.091,oo 1.550,o 1,52 51,8
0 1.173,oo 1.545,o 1,32 31,7
N 1.340,oo 1.670,O 1,25 24,B
ll 1.61'3,OO 2.010,o 1,24 242

hmte: Boletín Mensual, Banco Central.


Nola: Para los meses de diciembre 1971 a septiembre 1973, el tipo de cambio se obtiene
ponderando el tipo de cambio para cada uno de los siguicntcs gtupoh de productos: A:
Productos alimenticios y combustibles: C: Maquinarias y repuestos; D: Rirneî srmruarios;
y B: Resto de productos.
Las ponderaciones SC obtienen de acuerdo al monto importado para cada grupo de
productos, con el siguiente resultado:
A B C D
13/12/71a6/8/72 43.8% 338% 1X,5% 3,Y%
7/X/72a31/12/72 W,6% 43,0% 21, I á 33%
1/1/73 a 28/5/73 36,9%> 40,8%> 19,5% 23%
29/5/73 a 2/8/73 36,9% 40,8% 19,5% 2,8%
3/8/73 a 31/8/73 43.3% 2G,l% 29,3% 1,4%
l/Y/73 a xJ/Y/73 43,3% 26.1% 29,3% I ,4%

Cabe señhr que para los meses de agosto y septiembre de 1973, se utiliza la pondera-
ción dr julio del mismo año.

359
FUZFERENCLASBIBLIOGRAFICAS

ACUÑA, C. y C. SMUl.OVITZ (1991) , “?Ni olvido ni perd¿n? Derechos


humanos y tensiones cívicumilitares en la transición argentirra”,
Documento CKDK,SN’ 69, Buenos Aires, julio.
AGARWALA, A. N. y S. P. SINGH, eds. (1963)) Thr! Economim of lJnderde-
ueZapment,Oxford University Press, Nueva York.
AHUMADA, J. (1958), En Vezde ZaMiseria, Editorial del Pacífico, Santia-
go; reeditada por Ediciones BAT, Santiago, 1991.
~ (1966), “La crisis integral de Chile”, en II. Godoy, ed., Op. cit.,
(514521).
ALALUF, D. (1972), “La coyuntura económica y las transformaciones
estructurales en 1971”, en Instituto de Economía, op. cit. (1-22).
ALALUF, D., M. T. MONTECINOS, P. TOMIC y R. TRUMPER (1972),
“El sector agrario en el Gobierno de la Unidad Popular”, en Institu-
to de Economía, oi>. cil. (479-536).
ALBA, V. (1961), “The Latin Ameritan style and the new social forces”,
en A. Hirschman, ed., sp. cit. (43-52).
ALCHIAN, A. y H. DEMSETZ (1973), “The property right paradigm”,
Jnvrnal oflbnwnic Histoly, V. XxX111, N” 1, marzo (1&27).
ALDUNATE, A., A. FLISFICH y T. MOULIAN (1985), Estudios sobre
sistemasdepartidos a Chile, FLACSO, Santiago.
ARANDA, S. y A. MARTINEZ (1970), “Estructura econbmica: algunas
características fundamentales”, en A. Pinto et al., G$J.cit., (55-172).
ARCOS, S. (1852), “Carta a Francisco Bilbao”, en H. Godoy, ed., op. cit.
(200-214).
ARELLANO, J. P. (1983), “De la liheralizaciún a la intervención: el
mercado de capitales en Chile”, ColecciónEstudios CIEPLAN 11, San-
tiago, diciembre (5-50).

361
REFERENLIAS BIBLIOGRAFKAS

~ (1984), “La difícil salida al problema del endeudamiento interno”,


ColecciónEstudiosCIlFLANI3, Santiago, junio (5-26).
~ (1986), Políticas Socialesy Desarrollo. Cl& 1924-84, Ediciones CIE-
PLAN, Santiago.
~ (1988), “Crisis y recuperación económica en Chile en los años 80”,
ColecciónEstudiosCIEPL,AN24,Santiago,,junio (63-89).
ARELLANO, J. P. y R. CORTAZAR (1982), “Del milagro a la crisis:
algunas reflexiones sobre el momento económico”, ColecciónEstu-
diosCZEPLANR,Santiago, julio (43-60).
ARELLANO, J. P., R. CORTAZAR y A. SOLIMANO (1987), “Stabiliza-
tion and Adjustment Policies and Programmes, Chile”, Countly Stu-
dy N” 10, WIDER, Helsinki.
ARELLANO, J. P. y M. MAKFAN (lY86), “Ahorro-inversión y relaciones
financieras en la actual crisis económica chilena”, ColecciónEstudios
ClEPL,ANSO, Santiago, dicicmbrc (61-93).
~ (1987), “25 años de política fiscal en Chile”, ColecciónEstudios CIE-
PLAN21, Santiago,junio (129-162).
ARRAU, P. (1986), “Series trimestrales del Producto Geográfico Bruto
revisado, 19748.5”, Notas Tknicm N” 89, CIEPLAN, Santiago, di-
ciembre.
ARRAU, P., J. QUIROZ y R. CHUMACERO (1992), “Ahorro fiscal y
tipo de cambio real”, Documentode Investigación,ILADES-George-
town, Santiago, abril.
ARRIAGADA, G. (1986), “De la República dc 1925 a la Constitución de
lY80: el sistema político chileno”, cn CIEPLAN, q. cit. (143-172).
ATRIA, R. y M. TAGIX, cds. (1991), Estadoy @liticn en Chib, CPU,
Santiago.
AYLWIN, M., C. BASCIJÑAN, S. CORREA, c;. GAZMURI, S. SERRANO
y M. TAGLE (1986), Chile 811PZSigZoXX, Editorial Emisión, Santia-
go.
BAER, W. (1972), “Import substitution and industrialization in Latin
America: Experiences and interpretations”, Latin Amtican R~eurch
Review, Vol. 7, N” 1, Primavera (95-122).
BALASSA, B. (1985), “Policy experiments in Chile, 1973-83”, Discussion
Pqtm, Banco Mundial, Washington, D.C., noviembre.
~ (1989), “A conceptual framework for adjustment policies”, Working
Pupm lK”S 13% Banco Mundial, Washington, D.C., enero.
BALLESTEROS, M. y T. DAVIS (1965), “El crecimiento de la produc-
ción y el empleo en sectores básicos de la economía chilena,
1908-57”, CuadernosdeEconomia,Vol. 7 (5-29).
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

BANCO CENTRAL (1986), Zn d’ocad ores Económicos y Sociales 1860-1985,


Santiago.
~ (1988), BoZetinMensual, Santiago, varios números.
BANCO MUNDIAL (1979), Chile: An Economy in Transition, Report
N” 2390, Washington, D.C.
~ (1986), “Poverty in Latin America. The impact depression”, Summa-
q Ktfiort. Washington, D.C.
- (1988), World Development Report 1988, Washington, D.C.
BARANDIARAN, E. (1983), “La crisis financiera chilerm”, reproducido
en F. Morandé y K. Schmidt-Hebbel, eds., qt~.cit.
- (1988), “The adjustmenr proress in Latin America’s highly indeb-
ted countries”, mimeo, Gabinete del Vice Presidente para I.atino-
américa y el Caribe, Banco Mundial, Washington, Ll.C., marzw.
BARR, N. (1987), The Eronomics of the Welfare State, Stanford University
Press, California.
BARZEL, Y. (1989), Economic Analysis ofPropertr Rights, Cambridge Uni-
versity Press, Cambridge.
BATES, R. (1981), Markets and States in Tropical Africa: The Political Bases
of Agriculturul Policies, University of California Press, Berkeley.
BECKER, L. (1977), F’roperty Kights. Philosophic Foundations, Routledge &
Kegan, Londres.
BEHRMAN, .J. (1976), Fore-ign Trade Regimes and Economic Ihelopment:
Chile, NBER, Columbia University Press, Nueva York.
BIANCHI, A. (1973), “Notes on the theory of Latin Ameritan develop-
ment”, Social and Economic Studies, University of West Indias, .Jamai-
ca, Vol. 22, N” 1, marzo.
~~ (1975), “La política económica de corto plazo de la Unidad Popu-
lar, 1970-1973”, mimeo, Universidad de Princeton, mayo.
BIANCHI, A. y J. RAMOS (1972), “C reación de empleo y absorción del
desempleo en Chile. La experiencia de 1971”, OIT, Ginebra.
BIANCHI, A., E. LAHERA y 0. MUÑOZ (1989), “The role of the state
in the economic development uf Latin America, Argentina and
Chile”, Joint Rps~wc/~Programme, Series N” 77, Institute of Develo-
ping Economies, Tokio.
BLINDER, A. (1987)) Hard Hea& Soft Hearts, Addison-Weslry, Massachu-
setts.
BLOMSTROM, M. y B. HETTNE (1990), IXI teotia del de.raroZln en tran,si-
ción, Fondo de Cultura Económica, México, DF.
BLOMSTROM, M. y P. MELLER (1990), “Algunas lecciones del desa-

363
rrollo comparado de Escandinavia y América Latina”, en M. Bloms-
tröm y P. Meller, eds., Trayectorias Diwrg&es Com@rarión de un
Siglo de Da.7nrrollo Económico I,ntirroarrrer%cQrlo y Escnndi?7mo,
CIEPLAN-Hachctte, Santiago (13-28).
BORON, A. (1971), “La evolución del régimen electoral y sus efectos
en la representación de los intereses populares: el caso de Chile”,
ESlUdiOS ECMNJ 24, Santiago, abril.

BOSWORTH, B., R. DORNBUSCH y R. LABAN, eds. (1994), The Chi-


lean Economy. l’oliq Lessons and Chullages, Brookings Institution,
Washington, D.C.
BOURGUIGNON, F., M. BRANSON y J. DE MELO (1989), Macroecono
mic Adjustment and Income Distribution: A Marro-micro Simulation Mo
del, Technical Papers N” 1, Development Centre, OCDE, París,
marzo.
BROCB P., ed. (1992), If Texac Were Chib. A Primer on Rnnking Reform,
Institute for Contemporary Studies, San Francisco.
BUITER, W. (1988), “Some thoughts on the role of fiscal policy in
stahilization and structural adjustment in developing countries”,
Wwkingf’apprs N” 2603, NBER, Cambridge, mayo.
BUTELMANN, A. y P. MELLER (lYYl), “Apertura comercial chilena:
I,ecciones de política”, mimeo, CIEPLAN, Santiago, septiembre.
CABEZAS, M. (1988), “Revisión metodológica y estadística del gasto
socizal en Chile: 1970-86”, Notas Técnicas N” 114, CIEPM, Santia-
go, mayo.
CAINZOS, J. (1991), “Los componentes público y privado del Estado
de Bienestar: una perspectiva constitucional”, en G. Rodríguez,
comp., op. cit. (4749).
CARDOSO, F. H. (1979), “On the characterization of authoritarian
regimen in Latin America”, en D. Collier, ed., The New Authoritaria-
nism in Latin Am&ca, Princeton University Press, Princeton.
CARIOLA, c. y 0. SUNKEL (1982), 1x1 historia eco&mica de Ch&,
18301930, Instituto de Cooperación Theroamericana, Madrid.
CARTER, J. (1978), “Speech on the Thirtieth Annivcrsary of the Uni-
versal Declaration of Human Rights”, en W. Laqueur y B. B. Ruhin,
eds., The Human Rights Reuder, Meridian Book, Nueva York, 1979
(325329).

CEPAL (1987a), Balance preliminar de la economíalatinoamericana, Santiago.


~ (1987b), Anuario Estadtitico de América Latina y cl Caribe, 1987, San-
liago.

364
REFERENCIAS BIBLIOC.RAFICXS

CHACRA, V. y C. JORQUERA (1991), “Bandas de precios de productos


agrícolas básicos: la experiencia de Chile durante el período 198%Yl”,
Serie de Estudios Económicos N” 36, Banco Central, Santiago, marzo.
CIEPLAN (1986), Democracia en Chile. Doce conferencias, CIEPLAN, San-
tiago.
COLANDER, D., ed. (1984), Neoclassical Political Economy, Ballingcr, Cam-
bridge.
COMISION NACIONAL DE VERDAD Y RECONCILIACION (1991),
Znfome Rettig, 2 val., Ed. Ornikmrinco, Santiago.
CONCHA, J. E. (1918), “Características sociales de Chile”, en H. Go-
doy, rd., U/I. cit., (307-315).
CONGRESO NACIONAL (1972), EI Parlamento y PI hecho mundial de la
Gran Minerí’a del Co[rre chileno, Andres Bello, Santiago.
CORBO, V. (1982), “Inflación en una economía abierta”, Cuadernos &
IZconomZa, Año 19, N” 56, abril.
~ (1985a), “Reforms and macroeconomic adjustment in Chile during
197484”, World Development, Vol. 13, N” 8, agosto (893-916).
- (1985b), “The use of the exchange rate for stabilization purposes:
The case of Chile”, Discussion Paper, Banco Mundial, Washington,
D.C., agosto.
CORBO, V. y J. DE MELO (1987), “Externa1 shocks and policy reforms
in the Southern Cone: A reasscssment”, Discussion Papw, Banco
Mundial, Washington, D.C., fcbrcro.
CORBO, V., J. DE MEI. yJ. TYBOIJT (1986), “What went wrong with
the recent reforms in the Southern Cone?“, Economic Developmat
and Cultural Chmge, Vol. 34, N” 3, abril (607-640).
CORBO, V., M. GOLDSTEIN y M. KHAIV, eds. (1987), Growth-oriented
Adjustment Programs, IMF-Banco Mundial, Washington, D.C.
CORBO, V. y A. SOLIMANO (1991), “Chile’s experience with stabiliza-
tion, revisited”, Working Paper WPS 579, Banco Mundial, Washing-
ton, D.C., enero.
CORBO, V. y S. FISCHER (1993), “Lessons from the Chilean stabiliza-
tion and recovery”, mimeo, Brookings Institution, Washington, D.C.,
julio.
CORDEN, M. W. (1988), “Macroeconomic adjustment in developing
countrics”, IM WorkingPapm, Washington, D.C., febrero.
COR’I’AZAR, R. (1980), “Distribución del ingreso, empleo y remunera-
ciones reales en Chile, 1970.78”, Colección Evtudio.c CZEPLAN 3, San-
tiago, junio (5-24).

365
REFERENCIAS BIBLIOCRNICAS

~ (1985), “Distributive Results in Chile”, en Walton, 1985, op. cit. (79-


106).
~ (1986), “Employment real wages and externa1 constraint: The case
of Brazil and Chile”, WorkingPapers N” 8, WEP, ILO, Ginebra.
~ (1989), “Austerity under authoritarianism: The neoconservative re-
volution in Chile”, en H. Handelman y W. Baer, Pqing th~ Costs of
Austerity in Latin Ameka, Westview Press, Boulder, USA (43-63).
CORTAZAR, R. y J. MARSHAI.1, (1980), “Indice de precios al consumi-
dor en Chile: 197%1978”, Colecci& Estudios CLEPLAN 4, Santiago,
noviembre (159.201) .
CORTAZAR, R. y P. MELLER (lQ87), “Los dos Chiles. 0 la importan-
cia de revisar las estadísticas oficiales”, Colección Estudios CZEPLAN
21, Santiago,junio (5-22).
CORTES, H., A. BUTELMANN y P. VIDELA (1981), “Proteccionismo
en Chile: Una visión retrospectiva”, Cuadernos de Economh N” 5455,
diciembre (141-194).
COX, A. (1986), “Economic reform, externa1 shocks and the labor
market: Chile 197183”, presentado en el Banco Mundial en confe-
rencia sobre Mercados del trabajo en países en desarrollo, Banco
Mundial, Washington, D.C., junio.
CRONER, C. y 0. LAZO (1972), “El área de propiedad social en la
industria”, en La Economia Chikna m 1971, Instituto de Economía,
Universidad de Chile, Publicación NP 141 (355-463).
CHAKVIN, S. (1982), Stwm Over Ch&. Tke Junto Under Siege,Lawrence
Hill & Co., Westport.
CHONCHOL, J. (1970), “Poder y reforma agraria en la experiencia
chilena”, en A. Pinto et aZ., op. cit. (255-321).
DE CASTRO, S., ed. (1973), EZ ladrillo. B asesde la polz’tica económica del
Gobierno Militar Chileno, CEP, Santiago, publicado en 1992.
DE GREGORIO, J. (1986), “Principales aspectos de la política cambiatia
en Chile: 197485”, Notar T&OC~FN” 81, CIEPIAN, Santiago, mayo.
DE JANVRY, A. (1981), The Agravian Question and Refmism in Latin
America, Johns Hopkins, Baltimore.
DE LA CUADRA, S. y D. HACIIETTE (1988), “The timing and sequen-
cing of a trade liberalization policy: the case of Chile”, Documentos
de Trabajo N” 113, Instituto de Economía, Universidad Católica, San-
tiago, agosto.
DE LA CUADRA, S. y S. VALDES (lQQ2), “Myths and facts about finan-
cial liberalization in Chile: lQ74-83”, en P. Brock, ed., 01. cit. (11-101).

366
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

DE VYLDER, S. (1974), Chile 1970-73: The Political Economy of the rise and
,fall qfthe Unidad Popular, Unga Filosofers Forlag, Estocolmo.
DEMERY, L. y T. ADDISON (1987), “Stabilization policy and income
distribution in developing countries”, World Development, Vol. 15,
N” 12, diciembre (1483-1498).
DIAMOND, P. y S. VALDES (1993), “Social security reforms”, mimco,
Brookings Institution, Washington, D.C., abril.
DIAZ-ALEJANDRO, C. (1982), “Latin America in the 193Os”, Uiscussion
PaperN” 404, Yale Economic Growth Center, New Haven, mayo.
DORNBUSCH, R. (1980), 0@ E.~onorny Macroeconomic.~,Basic Books,
Nueva York.
DORNBUSCH, R. y S. EDWARDS, eds. (1991), Macroeconomic of Popu-
lism in Latis America, NBER, University of Chicago Press, Chicago.
EDWARDS, E. (1986), “Monetarism in Chile, 1973.1983: Some econo-
mic puzzles”, Economic Developmentand Cultural Change,Vol. 34, N” 3,
abril (535-560).
EDWARDS, S. (1988), Exchange Rate Misalignment in Developing Countries,
Occasional Paper N” 2, Banco Mundial, Washington, D.C.
~ (1989), Reul Exchonge Ka&, Dez~oluation, and Adjustment, MIT Press,
Cambridge.
EDWARDS, S. y A. CIOX (1987), Monetatitm an,d Liheralization, Ballinger,
Cambridge, Mass.
ENCINA, F. A. (1986), Nuestra inferioridad económica,Editorial Universi-
taria, 6a. edición, (la primera edición es de 1911), Santiago.
ENGEL, E. y P. MELLER, eds. (1992), Shocks externos y mecanismos de
estabilización, BID-CIEPLAN, Santiago.
EYZAGUIRRE, J. (1965), “Ser o no ser”, en H. Godoy, ed., $I. cit.
(386394).
FELIU, G. (1942), “Un esquenra de la evolución social de Chile en el
siglo XIX”, en H. Godoy, ed., op. cit. (215-222).
FENTRESS, J. y A. C. WICRHAM (1992), Social Memo-q, Blackwell,
Oxford.
FERNANDEZ, M. (1981), “El enclave salitrero y la economía chilena
1880-1914”, Nueva Historia, Año 1, N” 3, Londres (l-42).
FFRENCH-DAVIS, R. (197,3), Politicas económicas m Chile, 1952-1970,
Editorial Nueva Universidad, Santiago.
- (1974), “La importancia del cobre en la economía chilena”, en R.
Ffrench-Davis y E. Tironi, eds., op. cit.

367
REFER!ZNCIAS BIBLIOGRAFICA!i

- (1980), “LiberaliLacion de importaciones: la experiencia chilena en


1973-79”, C:&cciúr~ &udios CIEKAN4, Santiago, noviembre (39-78).
- (1982), “El experimento monetarista en Chile: una síntesis crítica”,
C,¿&wicín &tudios CIWLAN Y, Santiago, diciembre (5-40).
- (1988), “Adjustmcnt and conditionality in Chile, 1982-W’, mimeo,
presentado en la conferencia Cross Conditionality and Bank Credi-
tors, CIEPLAN, Santiago, octubre.
- (1989), “El conflicto entre la deuda y el crecimiento en Chile:
tendencias y perspectivas”, Colección Estudios C%!QKAN 26, Santiago,
junio (61-90).
FFRENCH-DAVIS, R. y J. DE GREGORIO (1987), “Orígenes y efectos
del endeudamiento externo en Chile: antes y despues de la crisis”,
El TtimestreEconómico, Mexico, N” 213, marzo.
FFRENCH-DAVIS, R. y R. FEINBERG (1986), eds., M&.r al& dti Za c7ltZ~ &
la deuda: Basespara un nutro enfoque,
CIEPLAN, Santiago.
FFRENCH-DAVIS, R. y D. RACZYNSKI (1988), “The impact of global
recession and national policies on living standards: Chile, 1973-87”,
Notas T&xicrfi N” 97, CIEPLAN, Santiago, febrero.
FFRENCH-DAVIS, R. y E. TIRONI (1974), EZ cobre en el desarrollo nacio-
nal, Ediciones Nueva Universidad, CIEPLAN, Santiago.

FILGUEIRA, C. (1981), “Acerca del consumo en los nuevos modelos


latinoamericanos”, Rtoista de Za COPAL N” 15, Santiago, diciembre.
FITOUSSI, J. y J. LE CACHEUX (1988), “On thcorics of unemploy-
ment persistence: A quick look at recent developments”, Labour,
Vol. 2, NP 2, Otoño, Roma (3-20).
FLISFICH, A. (1985), “N’ rve 1es d e consenso y estabilidad democrática”,
en A. Aldurrdte, A. Flisfich, T. Moulián, op. cit. (173-210).

FONTAINE, A. (1988), Los economistasy el Presidente Pinochet, Zig-Zag,


Santiago.
FONTAINE, J. A. (1980), “Más allá del LWidtiIl”, Estudios Públicos N” 1,
diciembre (121-146).
~ (198’7), “The Chilran economy in the eighties: Adjustment and
recovery”, documento para el simposio del Banco Central, Vitia del
Mar, diciembre.
~ (1991), “La administración de la política monetaria en Chile,
19%89”, Cw,rlerr~os de economía N” 83, Santiago, abril (109-130).
~ (1993), “Transición económica y política en Chile (1970-1990)“,
Z3tudio.r P~~bZiro.rNQ 50, Otoño (229-280).
FORTIN, C. (1979), “Nationalization of copper in Chile and its interna-
tional repercussions”, en S. Sideri, ed., op. cit. (183220).
FOXLEY, A. (1980), “Hacia una cconornía de libre mercado: Chile,
197479”, ColecciónEstudios ClEPLAN4, Santiago, noviembre (5-38).
(1982), Latin Ameritan Eqfwrime~t~ in Neoconsclvative Economics, Uni-
versity of California Press, Berkeley.
(1985), Para una democraciaestable,CIEPLAN, Santiago.
FREI, E. (1970 j, “Perspectivas y riesgos en la construcción de una nue-
va sociedad”, en H. Godoy, ed., op. cit. (547-561).
FRIEDMAN, M. y R. FRIEDMAN (1980), Libertad de Elefiz, Hacia un
Nuevo Liberalismo Económico, Ediciones Grijalbo, Barcelona.
GARRETON, M. A. (1983), Elproceso político chileno, FLACSO, Santiago.
GATICA, J., P. ROMACUERA y L. ROMERO (1986), “Un índice de
remuneraciones para el sector público chileno: 197486”, mimco,
Santiago, diciembre.
GELLER, L. y J. ESTEVEZ (1972), “La nacionalización del cobre”, en
Instituto de Economía, sp, cit. (557-578).
GERSCHENKRON, A. (1962), Economir bnckroordnessin hislon’cd pmf~ec-
tive, Praeger, Nueva York.
GODOY, H., ed. (1971), Estructura Socinl dP C:hlilq Editotial Universita-
ria, Santiago.
GODOY, 0. (1993), “Hayek: libertad y naturaleza”, Estudios Públicos
N” 50, Otofío (23-44).
GOMEZ-LOBO, A. y S. LEHMANN (1991), “Sobretasas arancelarias en
Chile: 1982-91”, Notas T&cnicasN” 144, CIEPLAN, Santiago, noviem-
bre.
GONGORA, M. (1981), Ensayo histótico sobre la noción de Estado en Chile
en los siglos XIXy G Ediciones La Ciudad, Santiago.
GORDON, S. (1980), W.qc we,J ust’zce, and Freedom, Columbia University
Press, Nueva York.
GROUND, R. y A. BlANCHI (1988), “The economic development of
Latin America. Towards a contribution to a new synthesis of develo-
pment theory”, mimeo, CEPAL, Santiago.
GRIJNWALD, J. y P. MUSGROVE (1970), Natural resource.sin Lntin Ame
ticn,,Johns Hopkins, Baltimore.
HACHETTE, D. y R. LÜDERS (1987), “El proceso de privarización de
empresas en Chile, 19741982”, Boletín EconómicoN” 22, Instituto de
Economía, Universidad Católica, Santiago.
~ (1992), La privatización en Chile, Centro Internacional para el Desa-
rrollo, San Francisco.

369
REFERENCIAS BIBLIOG~ICAS

HAGGAKD, S. (1990), Pathways from the Pc+hq. The Polil%cî of Growth


in th,eN&y Industrializing Countries, Cornell University Press, Ithaca.
HAMUY, E. (1967), “El proceso de democratización fundamental”, en
H. Godoy, ed., op. cit. (489-501).
HARBERGER, A. (1982), “The Chilean economy in 1970s: Crisis, stabi-
lization, liberalization, reform”, Cmwgk-Rochestw Cmfwences Series
on Public Policy, Vol. 17, Otoño (115-152).
- (1984), “La crisis cambiaria chilena de 1982”, &nbos de Econo
mía, Santiago, agosto (123-136).
- (1985), “Observations on the Chilran cronomy, 1973-1983”, Econo-
mic Deuelopmentand Cultural Change,Vol. 18, agosto.
HAYEK, F. (1980), “El idcal democrático y la contención del poder”,
Estudios Públicos N” 1, Santiago, diciembre (1 l-76).
HEL.D, G. y R. SZAIACHMAN (1989), “Regulación y supervisión de la
banca en la experiencia de liberalización financiera en Chile
(197488)“, Documento LC/R.758, CEPAL, Santiago, mayo.
HESKIA, 1. (1979), “La distribución del ingreso en el Gran Santiago,
1957.1979”, Documento Serie Znvcstigacicín N” 54, Departamento de
Economía, Universidad de Chile, Santiago.
HIRSCIIMAN, A., ed. (1961), Lulirr. Americnn Issues, Twentieth Century
Fund, Nueva York.
- (1968), “The political economy of importsubstituting industrializa-
tion in Lalin America”, Qf~arterly Journal qf Economics 82, febrero
(2-32).
HURTADO, C. (1984), “La economía chilena entre 1830 y 1930: sus
limitaciones y sus herencias”, ColecciónEstudios CZEPLAN 12, Santia-
go, marzo (37-60).
IMF (1988), “The implications of fund supported adjustment programs
for poverty”, Occasional PuperN” 58, Washington, D.C., mayo.
INSTITUTO DE ECONOMIA (1963), L a econnmío de Chile en el periodo
1950-63, Universidad de Chile, Santiago.
- (1972), La economia de Chile en 1971, Universidad de Chile, Publica-
ción N” 141, Santiago.
JACQUES, A. (1992), “lmpunité et fausses paix”, Le Monde Diplomatique,
París, septiembre (32).
JADRESIC, E. (1985)) “Formación de precios agregados en Chile: 1974
83”, ColecciónRstudio.s CllQ’L,AN 16, Santiago, junio (75-100).
- (1986), “Evolución del empleo y desempleo en Chile, 1970-85. Sc-
rics anuales y trimestrales”. Colección Estudios CZEPLANSO, Santiago,
diciembre ( 147-l 94).

370
JARVIS, L. (1991), “Cambios en los roles de los sectores público y
privado en el desarrollo tecnológico: lecciones a partir del sector
frutícola chileno”, ColecciónEstudios CZEPLAN 36, Santiago, diciem-
brc (5-40).
JOBET, J. (1951), Ensayo Critico del Desarrollo Económic&Tocial de Chile,
Edilorial Universitaria, Santiago.
.JOHNSON, C., ed. (1988), Privatization and Ownership, Printer Publi-
shers, Londres.
,JOHNSON, J. (1961), “Atrincheramiento político de los sectores me-
dios en Chile”, en H. Godoy, ed., op. cit. (359-371).
JOLLY, R. (1986), “El ajuste con rostro humano”, f)~~z~ollo N” 2-3, Ma-
drid (57-61).
RAY, C. y P. SILVA, eds. (1992)) Development and Social Chan,ge in the
Chilean Countvyside, CEDLA, Amsterdam.
REYNES, J. (1926), “The end of laissez-faire”; reproducido en The Co-
llected Writings ofJohn Maynard Kynes. Vol. IX - Essays in persuasion,
MacMillan, Cambridge, 1972 (272-294).
IULBY, P. (1988), “Breaking the eutrepr-eneurial bottleneck in
late-developing countries: is therc a useful role for Government?“,
Journnl ofDpoelopment PlanningN” 18 (221-250).
KLEIN, R. (1988), “Privatization and the welfare state”, en C. Johnson,
ed., op. cit. (30-46).
KRUEGER, A. (1974), “The political economy of the rent seeking socie-
ty”, Ameritan Economic Rewiew,V. 64,junio (291-303).
LARRAIN, E. (1986), “Impacto de la crisis sobre el nivel y estructura
del empleo público”, PET, Academia de Humanismo Cristiano, San-
tiago, agosto.
IARRAIN, F. (1991), “Public sector behavior in a highly indebted coun-
try: The contrasting Chilean experience 1970-85”, en F. Larraín y
M. Selowsky (eds.), ï‘he PutA Sector and the Latin Amen’can Ctisis,
International Center for Economic Growth, Institute for Contem-
porary Studies Press, San Francisco.
LARRAIN, F. y P. MELLER (1990), “La experiencia socialista-populista
chilena: la Unidad Popular, 1970-l 973”, ColecciónEstudios CZflZAN
30, Santiago, diciembre (151-196); tambien publicado en Cuadernos
de Economía.
LARRAIN, F. y A. VELASCO (1989), “Can swaps solve the debt crisis?
Lessons from the Chilean experience”, Princeton Studies in Znternatio
nal Financc 69, Princeton, noviembre.

371
REFERENCIAS BIBLIOGR4FICAS

LAF&4ÑAGA, 0. y J. h4ARSHALL (1990), “Ajuste macroeconómico y


finanzas públicas. Chile: 198%88”, S&e Pol&u fiscal N” 6, CEPAL,
Santiago.
LASTARRIA, J, V. (1850), “El manuscrito del diablo”, cn H. Godoy, ed.,
op. cit. (193.199).
LAYARD, P. y S. NICKELL (1986), “Unemployment in Britain”, Econo
mica, Val. 53, supp. (121-170).
LE FORT, G. (1986), “Trimestraliración de series de Balanza de Pagos.
Métodos de series relacionadas con información completa”, Estu-
dios de EconomM, Vol. 13, NP 11, Santiago, abril (167.189).
LE FORT, G. y GUILLET (1986), “Indices de precios de bienes no
transables: Chile 197484”, Esludios de Economiu, Vol. 13, N” 11, San-
tiago, abril (73-92).
LECHNER, N. (1984), La conflictiva y nunca acabada construcción del
orden deseado,FLACSO, Santiago.
- (1985), “El sistema de partidos en Chile”, Documento de Trabajo
N” 249, FLACSO, Santiago, junio.
LE GOFF, J. (1992), Histoly and Memoly, Columbia University Press,
Nueva York.
LEHMANN, D. (1992), “Political incorporation versus political instabi-
lity”, en Kay y Silva, eds., op. cit. (111.128).
LENIZ, S. y P. ROZAS (1974), “Compatibilización de las Cuentas Nacio-
nales ODEPLANCOWO: 1940.1962, 1960-1967”, Documento de Tra-
bajo N” 21, Instituto de Economía, Universidad Católica de Chile,
Santiago.
LETELIER, V. (1896), “Los pobres”, en H. Godoy, ed., op. cil. (272-282).
LIM, D. (1988), “Tax effort and expenditure policy in resource-rich
countries”, en M. Urrutia y S. Yukawa, eds., Economic Deoelopnent
Policies in Resource-VichCountries, United Nations University, Tokio.
MALINVAUD, E. (1977), The Theory of 1Jnwm~loymentReconsidewd, Black-
well, Oxford.
MAMAWUS, M. (1971), “The role of Government in the resource
rransfer and resource allocation processes: the Chilean nitrate case”,
en G. Ranis, ed., Government and Economic Deuelqbment,Yale Univer-
sity Press, New Haven.
~ (1976), The Growth and Structure qfthe Chilcan Economy: From Indepen-
danceto Allende, Yale University Press, New Haven.
MARCEL, M. (1986), “Diez años del IVA en Chile”, Cokcción Estudios
CIEPLAN19, Santiago,,junio (83-134).

372
- (1989), “Privatizacibn y finanzas públicas: el caso de Chile, 1985-W’,
ColecciónEstudios CIEPLAN%, Santiago, junio.
MARCEL, M. y P. MELLER (1986), “E m p a1me de las cuentas naciorrcl-
les de Chile 1960-1985. Métodos alternativos y resultados”, Colección
Estudios CIEFKANPO, Santiago, diciembre (121-146).
MAlWAN, M. (1984a), “P ol’ti
1 us
.’ reactivadoras y recesiún externa: Chile
1929-1938”, ColecciónEstudios CIWLAN 12, Santiago, marzo (89-120).
~ (1984b), “Una evdhdción de la nueva reforma WibLItdIid”, Cokcciún
Estudios CZZQ’L.AN13, Santiago, junio (27-52).
~ (1985), “El conflicto entre la recaudacion de impuestos y la inver-
sión privada: elemenlos leoricos para una refirma tributaria”, Cok
caónEstudios (XU’JAN 18, Santiago, diciembre (63-94).
MARGLIN, S. (1984), C;row& ZklriDulior~, ond Z%cices,
Harvard University
Press, Cambridge.
MARGLIN, S. y J. SCHOR, eds. (1990), The Golden Age OJ Capitalism.
Rkntqbpretin~gthe PoostumExperienre, Clarendon Press, Oxford.
MARSHALL, J. R. (1984), “Economics of stagnation. Analysis of the
Chilean experience 19141970”, tesis dc doctorado, no publicada,
Harvard KJniversity, mayo.
MARTNER, G. (1988), Z?l Gobierno del Presiden& Salvador Allmde, 197@
1973, Ediciones LAR, Concepción.
McBRIDE, J. (1938), “La influencia de la hacienda”, en H. Godoy, ed.,
op. cit. (372.385).
McNELIS, P. (1991), “Flujos de capital y política monetaria: ?Se com-
pensan en Chile y Venezuela?“, en F. Morande, ed., Movimiento de
capitales y crisis económica,ILADES, Santiago.
MELLER, P. (1983). “Una reflexión crítica en torno al modelo econó-
mico chileno”, ColecciónEstudios CZEPLAN 10, Santiago, junio (125
136).
- (1984a), “Los Chicago boys y el modelo economice chileno 1973.
1983”, Apuntes CZEPLANN” 43, Santiago, enero.
- (1984b), “Análisis del problema de la elevada tasa de desocupación
chilena”, ColecciónEstudios CIEPZ,AN 14, Santiago, septiembre (9-41).
~ (1986), “Un enfoque analítico-empírico de las causas del actual
endeudamiento externo”, Colección Estudios CZEPLAN 20, Santiago,
diciembre (19-60).
~ (1990), “110 años de desarrollo económico chileno (1880-1990)“,
mimeo, CIEPLAN, Santiago.
~ (I990), “Una perspectiva de largo plazo del desarrollo económico
chileno”, en M. Blomström y P. Meller, eds., Trayectorias Divergentes.
Comparación de un Siglo de Desatollo Económico Latinoamericano y Es-
candinavo, CIEPLAN-Hachette, Santiago (53-82).

373
RmERENCL4S RIRI.IOmAFTC*S

~ (1990), “Resultados económicos de cuatro gobiernos chilenos: 195%


1989”, Afmtes CIEPLANN” 89, Santiago, octubre.
~ (1990), “Chile”, en J. Williamson, ed., Latin Amwican Adjustment.
How Much Has Happened?, Institute of International Economics,
Washington, D.C. (5485).
~ (1991), “Adjustment and social costs in Chile during the SOS”, World
Dewlopment, noviembre (1545-1562).
- ed. (1991), The Latin Ame-kan Develofment Debate. Neostructuralism,
Neomonetarism, and Adjustment Processes, Westview Press, Boulder.
~ (1992), Adjustment and Equity in Chile, OCDE, París; también en
francés.
- (1993), “Economía política de la apertura comercial chilena”, Serie
Reformas de Politica t>úblicu ND 5, CEPAL, Santiago.

- (1993), “A review of Chilean privatization experience”, QuurterZy


Reuiew ofEconom& and Finance, Vol. 33, Número Especial (91-112).
MELLER, P. y C. RAHILLY (1974), “Características de la mano de obra
chilena, período 194C-1970”, Documento de Trabajo N” 26, Instituto
de Economía, Universidad Católica de Chile, julio.
MELLER, P., E. LIVACIC y P. ARRAU (1984), “Una revisión del mila-
gro económico chileno (19761981)“, CoZecció~Estudios CIEPI.AN
15, diciembre (5-111).
MELLER, P. y P. ARRAU (1985), “Revisión metodológica y cuantifica-
ción de las Cuentas Nacionales chilenas”, Colección Estudios
CZDiXN 18, Santiago, diciembre (95-183).
MELLER, P. y A. SOLIMANO (1984), “El mercado de capitales chile-
no: Laissez-faire, inestabilidad financiera y burbujas especulativas”,
mirneo, CIEPLAN, Santiago.
MENDEZ, J. C., ed. (1979), Chikun &momy Policy, Banco Central, San-
tiago.
MODIGLIANI, F., F. PADOA-SCHIOPPA y N. ROSSI (1986), “Aggrega-
te unemployment in Italy: 1960-83”, Economicu, Vol. 53, Supp. (245-
274).
MONTECINOS, V. (1988), “Economics and power: Chilean economists
in Government 195%1985”, disertación para doctorado, Universi-
dad de Pittsburgh.

MONTERO, C. (1990), “La evolucibn del empresariado chileno: $ur-


ge un nuevo actor?“, ColecciónEstudios CIEltLAN 30, diciembre (Yl-
122).
MORAN, C. (19X8), “Chile in the 1980s: Crisis and recovery”, mimeo,
Banco Mundial, Washington, D.C., abril.

374
RFFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

MORAN, T. (1974), Multinational Cmporations and the Politics of Depn-


dente. Copper in Chile, Princeton University Press, New Jersey.
MORANDE, F. y K SCHMIDT-HEBBEL, eds. (1988), Del auge a la crisis
de 1982, ILADES, Santiago.
MORRIS, J. (1967), “La cuestión social”, en H. Godoy, ed., q+~.cil.
(251-265).
MOULIAN, T. (1982), “Desarrollo político chileno entre 1938-1973”,
Revista APSI, julio-octubre.
~~ (1986), “Estabilidad democrática en Chile: una mirada histórica”,
en CIEPLAN, Democracia en Chile: Doce Conferencias, Santiago
(117-142).
MOULIAN, T. y P. VERGARA (1980), “Estado, ideología y políticas
económicas en Chile: 1973.78”, Colección Estudios CLEPLAN 3, San-
tiago, junio (65-120).
MUCHNIK, E. et al. (1992), “Efectos esperados de un acuerdo de libre
comercio entre Chile y los Estados Unidos en los sectores agrope-
cuario y agroindustrial chilenos”, Estudio N” 2, PEPALC, Confedera-
ción de la Producción y del Comercio, Santiago.
MUÑOZ, 0. (1968), Crecimiento indu&aZ de Ch&, 1914- 1965, Instituto
de Economía, Santiago.
~ (1986), Chile y su in~dus~tialización. /‘asado, crisis y [email protected],Ediciones
CTEPIAN, Santiago.
- (1988), “El Estado y los empresarios: experiencias comparadas y sus
implicaciones para Chile”, Colección Estudios CIEPLAN 25, Santiago,
diciembre (5-54).
- ed. (1993), De.$&r de las Priuntizncione.~. Hacia el Estado Fkguladm,
Ediciones CIEPLAN, Santiago.
MUÑOZ, 0. y A. M. ARRIAGADA (1977), “Orígenes políticos y econó-
micos del Estado empresarial en Chile”, l&~ludios CfkXAN N” 16,
Santiago, septiembre.
NICKELL, S. (1985), “The Government’s policy for jobs: An analysis”,
Oxford Rariew of Economic Policy, Vol. 1, N” 2, Verano (98115).
O’DONNELL, G. (1972), Modekzación y autoritarismo, Paidós, Buenos
Aires.
OCDE, CENTRO PARA EL DESARROLLO (1987), Adjustment and equi-
lable pwth: Document 1, París, octubre.
OKUN, A. (1975), Equality and Efficiency. The Big Trade of$ Brookings
Institution, Washington, D.C.
ORREGO, A. (1884), “La cuestión social en Chile”, en H. Godoy, ed.,
op. cii. (223-231).

375
KEFERENCIAS BIBLIOGRZFICAS

PALMA, G. (1979), “Growth and structure of Chilean Inanufacturing”,


tesis de doctorado, no publicada, University of Oxford.
- (1984), “Chile 19141935: De econwnía exportadora a sustitutiva
dc importaciones”, CoLuiún. &udios CIIQ’&lN 12, Santiago, margo.
PEDERSON, L. (1966), The Mining fndmy of the Norte Chico, Chile,
North-Western University, Illinois.
PINTO, A. (1962), Chile, un uuo de d~.~sarrollof~~strndo, Editorial Univer-
sitaria, Santiago.
- (1985), “Estado y gran empresa: De la pre-crisis hasta el Gobierno
de Jorge Alessandri”, Colección l3tudios CIEPLAN 16, Santiago, junio
(540).
~ (1987), “La ofensiva contra el Estado-económico”, ColecciónEstudios
CZEPLAN 21, Santiago, junio (117-128).
PINTO, A. et (11.(1970), Chile Hoy, Siglo XXI, Edito+1 Universitaria,
Santiago.
POLLACB M. y A. UTHOFF (198(ì), “Pobreza y mercado de trabajo.
Gran Santiago, 1969.84”, PREALC, Santiago.
PREBISCH, R. (1950), “The economic development of Latin America
and its principal problems”, Naciones Unidas, Nueva York; reim-
preso en Economic Bu&& for Lntin America, Vol. VII, N- 1, 1962.

PUSEY, M. (1991), &wzomir RntionnZZm in Cnnh~rrn, Cambridge Univer-


sity Press, Cambridge.
RACZYNSKI, D. (1986), “<Disminuyó la extrema pobreza entre 1970 y
1982?“, Notas TécnicasN” 90, CIEPLAN, Santiago, diciembre.
(1992), “Políticas sociales en Chile: origen, transformaciones y pers-
pectivas”, mimeo, CIEPLAN, Santiago.
RACZYNSKI, D. Y C. SERRANO (1985), Vivi7 la l>obrna. Testimonio de
mu+r~,~,CIEPLAN, Santiago.
RAMIREZ, G. y F. ROSENDE (1992), “Responding to collapse: Chilean
banking legislation after 1983”, en P. Brock, ed., op. cit. (193-216).
RAMOS, J. (1984), “Estabilización y liberalización económica en el Cono
Sur”, Estudio de la CEPAL N” 38, Naciones Unidas, Santiago.
RAMOS, S. (1972), Ch& ~unm economEa e-n tnmtición?, CESO, Universi-
dad de Chile, Santiago.
RAWLS, J. (1978), Teoria de la justicia, Fondo de Cultura Económica,
México D.F.
RAY, D. (1988), “The role of entrepreneurship in cconomic dcvelop-
ment”, Joumal oJDeuelopment Plunning N” 18.

376
RECABARREN, L. (1910), “El balance del siglo: Ricos y pobres a través
de un siglo de vida republicana”, en H. Godoy, ed., @. cit. (299-306).
REYNOLDS, C. (1965), “Devclopment problems of an export economy.
The case of Chile and copper”, en M. Mamalakis y C. Reynolds,
Essayson the Chilean Ec:onorny,Irwin, Illinois.
REPETTO, A. (1992), “Determinantes de largo plaLo del tipo de cam-
bio real: aplicación al caso chileno (1960-YO)“, Colección Estudios
CZEPLAN36, Santiago, diciembre (67-98).
RIVEROS, L. (1984), “Distribución del ingreso, empleo y política social
en Chile”, Documento de Trabajo N” 25, Centro de Estudios Públicos,
Santiago, mayo.
RODRIGUEZ, G., comp. (1991), Estado, Privatización y Biewctar, Fuhem,
Madrid.
RODRIGUEZ, .J. (1985), 1.a distribución del ingresoy el gasto social en Chile,
1983, ILADES, Santiago.
ROMAGUERA, P. (1989), “Wage differentials and theories of wage de-
termination: Evidente from the Chilean economy, 1937.1987”, por
aparecer, disertación para doctorado, Boston University.
- (1991), “Las fluctuaciones del precio del cobre y su impacto en la
economía chilena”, Notas Técnicas NP 143, CIEPLAN, Santiago, sep-
tiembre.
ROSENDE, F. (1987), “Ajuste con crecimiento: el caso chileno”, Serie de
Estudios &oncímicos N” 32, Banco Central, diciembre.
SACHS, J. (1990), “Social conflict and populist policies in Latin Ameti-
ca”, Occasional Paper N” 9, International Center for Economic
Growth, San Francisco.
SAEZ, S. (1989), “La economía política dc una crisis: Chile, 1929.1939”,
Notas TécnicasN” 130, CIEPLAN, Santiago, mayo.
SAEZ, R. (1992), “An overview of privatization in Chile: The episodes,
the results, and the lessons”, mimeo, CIEPLAN, Santiago.
SANFUENTES, A. (1988), “IIipótesis acerca de las causas del creci-
miento del empleo”, Documento de Trabajo NQI-l, ILADES, Santiago,
junio.
- (1989), “Antecedentes sobre la distribución del ingreso y gastos
gubernamentales para atenuar la extrema pobreza”, Documento de
Trabajo N” I-12, ILADES, Santiago, marzo.
SCULLY, T. R. (1992), Lo;, Pwtidos del Centro y la Evolución Política Chile-
na, CIEPLAN-Notre Dame, Santiago.
SCHKOLNIK, M. (1987), “Algunas consideraciones metodológicas acerca

377
de la medicion de condiciones de vida, extrema pobreza y sub-
empleo”, mimeo, PET, Santiago, mayo.
~ (1989), “Realidad y perspectivas del sector informal en Chile”, De
cumento de Trabajo N” 64, PET, Santiago, mayo.
SCHMIDT-HEBBEL, K. (1988), “Consumo e inversión en Chile
(197482): Una interpretación ‘real’ del boom”, en F. Morandé y K
Schmiclt-Hcbbel, eds., 0~. cit. (147-190).
SCHMITZ, C. (1986), “The rise of big business in the world copper
industry 1870.193O”, Economic Histq Reviev, XXXIX (392410).
SCHWARTZ, P. (1986), “The market and the metamarket”, en S. Pejo-
vich, ed., Socialism: Institutional, Philosophical and Economic Issues,
Kluwer Academic Publishers.
SELOWSKY, M. (1989), “Preconditions neccssary for the recovery of
Latin America’s growth”, documento presentado en el Encuentro
sobre Latinoamérica del Foro Económico Mundial, Ginebra, junio.
SEN, A. (1986), On Ethics and Economics,Blackwell, Oxford.
SHONFIELD, A. (1984), In D@nce ofthe Mixed Economy, Oxford Univcr-
sity Prcss, Oxford.
SIDERI, S., ed. (1979), Chile 1970.7?: E conomic Development and its Inter-
national Setting, Martinus Nijhoff, La Haya.
SIGMUND, P. (1977), The Owrth row of Allende nnd the Politics of Chile,
1964-1976, University of Pittsburgh Press, Pittsburgh.
~ (1980), Multinationak in Latin America. The Politics qfNationalization,
University of Wisconsin Press, Wisconsin.
SJAASTAD, L. (1981), “La protección y el volumen del comercio en
Chile: La evidencia”, Cuadernos de Economía N” 5455, Santiago, di-
ciembre (263-292).
~ (1983), “The failure of economic liberalism in the Southern Cone”,
World Economy NP 6, marzo (5-26).
SOLIMANO, A. (1987), “Desempleo estructural en Chile: Un análisis
macroeconómico”, Documento de Trabajo N” 302, PREALC, julio.
- (1988), “Política de remuneraciones en Chile: Exprr-iencia pasada,
instrumentos y opciones a futuro”, Colección Estudios CIEPLAN 2.5,
Santiago, diciembre (159-190).
SOLIMANO, A. y A. ZUCKER (1988), “El comportamiento de la inver-
sión en Chile: Aspectos conceptuales, evidencia empírica y perspec-
tivas”, mimeo, PREALC, Santiago, agosto.
SOLOW, R. (1986), “Unemployment: Getting the questions right”, Eco
nomica, Vol. 53, Supp. (23-34).

378
REFERENCIA5 BIBLIOGRAFICX

STIGLITZ, J. (1990), La Economia deelSectorPúblico, Antonio Bosch ed.,


Madrid.
SUNKEL, 0. (1965), “Cambio social y frustración en Chile”, en H.
Godoy, ed., op. cit. (522-536).
SIJTUl.OV, A., L. BLANCO y M. WEISSER (1978), Del cobre y nuestro
d?.@o, CIMM, Santiago.
TAGLE, M., ed. (1992), La tiis de la Democracia en Chile. Antecedentesy
causas,Andrés Bello, Santiago.
TAPIA, D. (1991), “Dos pruebas para la política monetaria”, Cuadernos
de Economía N” 83, Santiago, abril (131-140).
THORP, R. Y 1.. WHITEHEAD, eds. (1987), Latin Ameritan Debt and the
Adjustment Ctiti, University of Pittsburgh Press, Pittsburgh.
TORCHE, A. (1987), “Distribuir el ingreso para satisfacer las nrcesida-
des básicas”, en F. Larraín, ed., Desarrollo Económico en Demowacia,
Ediciones Universidad Católica, Santiago (167.214).
VALDES, J. G. (1986), “Cultura y democracia: una mirada desde la
clase política”, en CIEPLAN, op. cit. (173-196).
- (1989)) La e.scuelade Chicago: ojwración Chile, Zeta, Buenos Aires.
VALDES, S. (1992), “Financia1 liberalization and the capital account:
Chile, 197484”, mimeo, Banco Mundial, marzo.
VALENZUELA, A. (1978), The B reakdown oj Democratic Xegimes. Chile,
John Hopkins. Baltimore.
VALENZUELA, A. y S. VALENZUELA (1986), “Party oppositions under
the Chilean authoritarian regime”, en S. Valenzuela y A. Valenzue-
la, eds., Militaly R& in Chi& John Hopkins, Baltimore (184229).
VARA$ A. (1982) < “Fuerzas Armadas y Gobierno Militar: corporativiza-
ción y politización castrense”, Rxvista Mexicana de Sociologia V. XLIV,
N” 2, abril (397-412).
VARGAS, E. (1974), “La nacionalización del cobre y el derecho inter-
nacional”, en Ffrench-Davis y Tironi, eds., op. cit. (159-192).
VELASCO, A. (1988), “Liberalization, crisis, intervention: The Chilean
financia1 system, 1975-1985”, IMF Working Paper, Washington, D.C.,
julio.
VF.lJZ, C. (1963), “La mesa de tres patas”, Desarrollo Económico, Vol. 3,
abril-septiembre; reproducido en H. Godoy, ed., op. cit. (232-250).
VERA, M. (1961), La polz’tica económica del cobreen Chile, Editorial Univer-
sidad de Chile, Santiago.

379
REFERENCIAS 1IIBLIOGWIcrw:

VIAL, G. (1981), Historia de Chile (1891-197?), Vol. 1, Editorial Santilla-


na, Santiago.
- (1986), “Algunas condiciones para una democracia estable en Chi-
le”, en CIEPLAN, op. cit. (93.116).

VIERAGALLO, J. A. (1982), “Crisis y reafirmación del ideario dcmo-


crático: trayectotia de una generación”, en CIEPLAN, q. cil. (4156).
VILLALOBOS, S. (1984), “Sugerencias para un enfoque del siglo XIX”,
ColecciónEstudios CIEPLAN 12, Santiago, marzo (9-36).
VINER, J. (1953), “The economics of dcvelopment”, Conferencia en la
Universidad Nacional de Brasil; reproducida en Agarwala y Singh,
eds., op. cit. (9-31).
VUSKOVIC, P. (1975), “Dos años de política económica del Gobierno
popular”, cn P. Vuskovic (ecl.), El golpe de Estado en Ch&, Fondo de
Cultura Económica, Mexico, DF.
WAI,TON, G. M., ed. (1985), The Nutional Economic Policies of Chile, JAI
Press, Londres.
WARD, B. (7 979a), The Conservative Economic World Viuw, Basic Books,
Nueva York.
~ (1979b), The Liberal Economic World Vicw, Basic Books, NuevaYork.
WILLIAMSON, 0. (1985), The E cono& Institutions of Capitalism, Free
Press, Nueva York.
WILSON, T. y D. WILSON (1982), The Political Economy of thc WeZj¿ure
State, Allen 8c Unwin, l.ondres.
WISECARVER, D. (1985)) “Economic regulation and deregulation in
Chile, 1973-1983”, en Walton, ~p. cit.
~ ed. (1992)) EZ mod& económico chileno, Instituto de Economía, Uni-
versidad Católica de Chile, Santiago.
WOLF, CH. (1989), Mark& of Govenzments. Choosing between Imperfect
Altenatives, MIT, Cambridge.
ZAI ILER, R. (1983), “Recent Southern Cone liberalization reforms and
stabilization policies. The Chilean case, 1974-1982”,Journal qf Intera-
merican Studies and World Affairs, Vol. 25, N” 4, noviembre (509.
562).
ZALAQUETT, J. (1991), “Derechos humanos y limitaciones políticas en
las transiciones democráticas del Cono Sur”, ColecciónEstudios CZE-
PLAN33, Santiago, diciembre (147-186).
ZAMMIT, J. A., ed. (1973), Th,? Chiban Road to Socialism, Institute of
Devclopment Studies, Sussex.

También podría gustarte