Sobre La Vivienda
Sobre La Vivienda
Sobre La Vivienda
SECCIÓN
3
4
SECCIÓN
se señala, este proceso de natura- naturales procesos de transfor- y captan a las familias que buscan
leza técnica descansa en la eva- mación- ya no cumplen con la fi- la oportunidad de tener la casa
luación y análisis sobre la capaci- nalidad para las que fueron habi- propia soñada, aunque aceptan-
dad de soporte de suelo, vialidad, litadas. En esa línea, por ejemplo, do el temor constante de perder-
servicios, tendencias y escenarios se tienen zonas de uso industrial lo todo. Esas mismas familias pu-
acorde con la visión de desarrollo. en los ejes viales metropolitanos dieron y/o debieron ser atendidas
Pero este proceso termina en ins- o en zonas de distritos que de la en un proyecto de Techo Propio
tancias de decisión política no ne- noche a la mañana pasaron de es- bajo la modalidad de adquisición
cesariamente sintonizadas con tar en los “extramuros” a quedar de vivienda nueva promovida por
las reales demandas de la ciudad dentro de la ciudad rodeados de el Estado, pero que, al no encon-
y termina cuando -por efectos de vivienda y comercio. La adminis- trar respuestas, sea por la falta de
la misma normativa- queda a cri- tración en ese sentido no camina mecanismos de financiamiento o
terio de quienes administran la a la misma velocidad. Mientras por la falta de decisión política,
ciudad al ser una petición de gra- los desarrolladores inmobiliarios terminan alimentando a las orga-
cia, lo que, en buen castellano, planifican e identifican integrar nizaciones criminales tras la fa-
significa que puede o no ser aten- ese suelo, la presión y expectati- chada de “asociaciones de vivien-
dido por los responsables de la ad- vas terminan por disparar el valor da”.
ministración de turno, llevando del suelo, limitando las posibili- La tarea es de largo aliento. No po-
consigo a plazos que nunca se dades de desarrollar vivienda so- demos perder la oportunidad de
cumplen, perdiendo tiempo va- cial. Si a eso sumamos las demo- transformar nuestras ciudades con
lioso y oportunidad de contar con ras en la aprobación de la zonifi- vivienda digna, servicios y espacios
suelo urbano disponible. Esa fal- cación, autorizaciones para habi- públicos de calidad, con transpor-
ta de predictibilidad hace que la litación urbana o licencia de obra, te público integrado y equipamien-
viabilidad de proyectos muchas entonces se restringe seriamente tos urbanos acorde a las necesida-
veces se vea seriamente afectada. contar con más y mejores proyec- des. Hace falta la activa participa-
Esto es importante decirlo, por- tos de vivienda. En paralelo, los ción de los Colegios de Arquitectos
que la generación de suelo urba- traficantes de terrenos, ampara- e Ingenieros que contribuya, junto
no no solo descansa en el modelo dos en la impunidad, ocupan te- con los gremios empresariales y
de expansión y ocupación de zo- rrenos, lotizan y venden sin nin- promotores, para que se tracen y
nas en la periferia, sino en aque- gún control a vista y paciencia de ejecuten las obras para beneficio
llas áreas de la ciudad que -por todos, ocupando zonas de riesgo de todos los peruanos.
Peruconstruye