/// la ciudad de Buenos Aires, a los 8 dias del mes de noviembre del afio dos
mil veintitrés, se reine el XXXIII Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados
de la Nacién, integrado por los jueces de camara Javier Esteban de la Fuente
-en su cardcter de Presidente- y Javier Maria Leal de Ibarra, los senadores
Nacionales José Maria Torello y Daniel Pablo Bensusdn, las diputadas
Nacionales Ana Clara Romero y Anahi Costa, y el representante de los
abogados de la matricula federal, doctor Alfredo Enrique Barrau, a los
efectos de dictar el fallo definitive en este expediente N° 37 caratulado
“Doctor Walter Ricardo Bento s/ pedido de enjuiciamiento”.
Intervienen en el proceso, por la Acusacién, los representantes
del Consejo de la Magistratura del Poder Judicial de la Nacién doctora
Roxana Reyes, doctor Miguel A. Piedecasas y doctor Eduardo Vischi, y por la
defensa del magistrado enjuiciado, los defensores particulares doctor
Mariano Fragueiro Frias y doctor Felipe Salvarezza y el defensor publico
oficial designado en los términos del articulo 17 del Reglamento Procesal del
Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados de la Nacién, doctor Santiago
Garcia Berro.
RESULTA:
I.- Que por resolucién N° 135/2023, dictada en el expediente n°
79/2021, el plenario del Consejo de la Magistratura del Poder Judicial de la
Naci6n decidié abrir el procedimiento de remocién del doctor Walter Ricardo
Bento, titular del Juzgado Federal N° 1 de Mendoza, acusarlo por la causal
de mal desempefio y suspenderlo en el ejercicio de sus funciones (articulos
16, 53, 110, 114 inciso 5° y 115 de la Constitucién Nacional y articulos 7, 25
y concordantes de la ley 24.937 y sus modificatorias).
En concreto, en dicha resolucién se considera que el magistrado
enjuiciado ha incurrido en actos que perjudican el servicio publico y
1deshonran al pais y la investidura publica, y que su conducta resulta
inadmisible para un juez de la Nacién, tanto por su intrinseca ilegitimidad
como por colocarlo en una situacién tal que hace imposible el ejercicio
adecuado de la funcién. En definitiva, se le formula al doctor Bento los
siguientes cargos:
1- Haber incurrido en causal de mal desempefio en relacién a los
hechos ventilados y acreditados en la causa FMZ 13.854/2020, caratulada
“Ortego, Luciano Edgardo y otros s/ asociacidn ilicita, cohecho con conductas
art. 256 bis 2° y 257, cohecho activo y falso testimonio”, que derivaron en el
multiple procesamiento del magistrado por la presunta comisién de
conductas delictivas relacionadas con: a) haber recibido dinero u otros
bienes a cambio del dictado de resoluciones judiciales favorables a quienes
han realizado dichos pagos, en su rol de jefe u organizador de una
asociacién ilicita; b) haber experimentado un enriquecimiento patrimonial
apreciable e injustificado y haber desplegado maniobras destinadas a dar
apariencia de licitos a fondos de origen ilicito; ¢) haber cometido actos de
falsedad ideolégica; y d) haber cometido actos de infraccién al deber de un
magistrado.
2- Haber falseado y omitido insertar datos en sus declaraciones
juradas integrales presentadas ante el Cansejo de la Magistratura de la
Nacién, en violacién a lo establecido en la normativa aplicable.
3- Haber incurrido en graves desérdenes de conducta personal al
intentar obstruir o impedir el desarrollo de la causa FMZ 13.854/2020 ut
supra mencionada.
4- Haber contravenido la normativa aplicable a la inscripcién para los
concursos ante el Consejo de la Magistratura de la Nacién.
5- Haber tenido comportamientos contrarios al decoro y a la dignidad
con la que debe obrar un juez de la Nacién.
IL. En la audiencia de debate lz Acusacién expuso oralmente los
hechos imputados al magistrado y la Defensa explicé su posicién al respecto
2_furade de Enjuiciamionte de Magistrados,
‘a saciom
(articulo 28 del Reglamento Procesal). El magistrado enjuiciado presté
declaracién sin juramento, se recibieron las declaraciones de los testigos
ofrecidos por las partes y se tuvo por incorporada la prueba documental e
informativa aceptada por el Jurado. La Acusacién y la Defensa informaron
oralmente y a continuacién se expresé el doctor Walter Ricardo Bento
(articulo 30 del Reglamento Procesal). Con ello, se cerré definitivamente el
debate y el proceso pasé a la etapa de deliberacién y sentencia.
Y CONSIDERANDO:
1°) Que para dar inicio a este desarrollo, y en razén de la
naturaleza de este proceso y de los distintos planteos que deberdn ser
abordados, se estima necesario formular ciertas precisiones previo a la
valoracién de los cargos formulados por la Acusacién.
EI proceso de remocién o juicio politico instaurado por los
articulos 114 y 115 de la Constitucién Nacional, si bien procesalmente se
enmarca en las normas que rigen los juicios orales y publicos del fuero penal
Previstos en el Cédigo Procesal Penal de la Nacién (cuerpo normativo
supletorio del Reglamento Procesal), difiere sustancialmente en su objetivo,
toda vez que la finalidad de este proceso no es Ia de castigar 0 imponer una
pena, sino el apartamiento de la funcién publica del magistrado considerado
responsable de los cargos que se le hubiesen endilgado en la acusacién
formal emanada del Consejo de la Magistratura.
Al respecto, tiene dicho este Jurado que "en e/ régimen
constitucional argentino el propdsito del juicio politico no es el castigo del
funcionario, sino la mera separacién del magistrado para la proteccién de los
intereses publicos contra el riesgo u ofensa, derivados del abuso del poder
oficial, descuido del deber o conducta incompatible con la dignidad del cargo.
3De tal manera que se lo denomina juicio ‘politico’ porque no es un juicio
penal sino de responsabilidad, dirigido a aquellos ciudadanos investidos con
la alta misién del gobierno, en su més cabal expresién” EMN, causa n* 2 “Brusa,
‘Victor Hermes s/ pedido de enjuiciamiento”, sentencia del 30 de marzo de 2000, considerando
52],
Ese es el criterio seguido por la 'Corte Suprema de Justicia de la
Nacién en su reiterada doctrina que establece que “por ser el objetivo del
Instituto del juicio politico, antes que sancionar al magistrado, el de
determinar si éste ha perdido los requisitos que la ley y la Constitucién
exigen para el desempefio de una funcién de tan alta responsabilidad, el
sentido de un proceso de esta naturaleza es muy diverso al de las causas de
naturaleza judicial, por lo que sus exigencias revisten una mayor laxitud”
[Fallos: 331:1784, 330:452 y 329:3027, entre muchos otros}
Resulta oportuno recalcar algunos rasgos del proceso de
remocién vinculados con el derecho de defensa perfilados por el Alto
Tribunal en el fallo “Nicosia”: “...Ja ConstituciSn ha conferido al procedimiento
del juicio politico una naturaleza que no debe, necesariamente, guardar
apego estricto a las formas que rodean al trémite y decisién de las
controversias ante el Poder Judicial, pero que, igualmente, debe observar
requisitos que hacen a la esencia y validez de todo ‘juicio’, en el caso: ef de
‘defensa’, inexcusablemente ‘inviolable’. En segundo lugar, cuadra también
reconocer que la Ley Fundamental ha dado.a quienes conocen en ese juicio,
facultades suficientes para reglarlo y conducirlo en forma acorde con su
especificidad, aunque en concierto con la esencia del derecho y garantia
aludidos...” (Fallos: 316:2971, considerando 20°)}
2°) Que no obstante dicha diferenciacién, el juez acusado tiene
en esta instancia la oportunidad efectiva de ejercer plenamente el derecho
de defensa en juicio reconocido a todo ciudadano en la Constitucién
Nacional. Asi lo ha sostenido el Jurado desde sus primeros
pronunciamientos, cuando expresé que la "garantia de la defensa en juicio y
del debido proceso debe ser respetada en los procesos de remocién de
4magistrados con el mismo rigor y con las mismas pautas elaboradas por la
Corte en numerosas decisiones (...). Dicha garantia requiere que el acusado
sea oldo y que se le dé ocasién de hacer valer sus medios de defensa en la
oportunidad y forma previstas por las leyes de procedimiento (Fallos:
310:2845), principios que han sido recogidos en el Reglamento Procesal de
este Jurado” [causa “Brusa” citada, considerando 3°) y, mas recientemente, causa n? 36
“Doctor Eduardo Rodolfo Freiler s/ pedido de enjuiciamiento”, sentencia del 17 de noviembre
de 2017].
3°) Que la causal de mal desempefio por la que se acusa al
doctor Walter Ricardo Bento presupone que el enjuiciamiento se lleve a cabo
sobre la base de la imputacion y demostracién de hechos 0 sucesos
concretos y no de apreciaciones difusas, pareceres u opiniones subjetivas,
sean éstas personales 0 colectivas. El texto del articulo 53 de la Constitucion
Nacional exige esta interpretacion, pues de otro modo se llegaria a una
conclusién que significaria prescindir de los origenes de esta norma
constitucional, asi como de su letra [conf. doctrina del JEMN en causa n® 2 “Brusa”
citada y en causa n° 3 “Doctor Ricardo Bustos Fierro s/ pedido de enjui
miento”, sentencia
del 26 de abril de 2000, entre muchos otros}.
En este contexto, la causal constitucional de “mal desempefio” se
configura cuando un magistrado ha perdido las condiciones necesarias para
.una falta de
continuar en el ejercicio de su funcién. Es decir, conlleva
idoneidad, no sdélo profesional o técnica, sino también moral, como la
ineptitud, la insolvencia moral, todo lo que determina un dafio a la funcién, 0
sea a la gestién de los intereses generales de la Nacién. La funcién publica,
su eficacia, su decoro, su autoridad integral es lo esencial; ante ella cede
toda consideracién personal...” (Rafael Bielsa, Derecho Constitucional, Depalma, Buenos
Aires, 1954, pags. 483/4].
Sostiene Quiroga Lavié que “...e/ esténdar constitucional del “mal
desempefio” es un concepto juridico indeterminado que debe ser
5determinado, caso por caso, a partir del juicio de responsabilidad que sobre
el desempefio de vida, dentro y fuera del tritunal, haga el Jurado... Llenar un
concepto juridico indeterminado es una funcién donde el Jurado actuard con
amplia discrecionalidad, por tratarse el mal desempeffo de una cuestién no
sujeta a reglas tipicas ni precisas” ["Naturaleza constitucional del Jurado de
Enjuiciamiento”, en La Ley, 2000-B, pag. 1008).
4°) Que se ha de tomar en cuenta que la Acusacién (tanto en su
libelo inicial como durante la audiencia de: debate) ha enfatizado que el
objeto por ella perseguido en este proceso no ha sido otro que el de
demostrar la mala conducta del magistrado en juicio, y que si bien los ocho
procesamientos en conjunto dictados en su contra en la causa FMZ
13.854/2020 han conformado -a su entender- un cargo independiente, no
habria de ingresar en la posible comisién de delitos en los que hubiera
incurrido en particular, pues ello es competencia del tribunal actuante en la
provincia de Mendoza.
5°) Que el Jurado de Enjuiciamiento ya ha determinado que la
“posible comisién de delito” no configura nila causal constitucional de delito
en el ejercicio de sus funciones ni la de crimenes comunes, y es por ello que
esta imputacién no adquiere el sustento suficiente como para avalar por si
sola su destitucién [causa n° 8, “Doctor Roberto Enrique Murature s/ pedido de
enjuiciamiento”, resolucién del 21 de mayo de 2003].
Asimismo, este Jurado ya ha dejado clara “Ya diferenciacién entre
el juicio politico y el de cardcter penal, lo que conileva a la conclusién de que
los mismos hechos deben ser consideradys en vista a la disparidad de
efectos y finalidades de cada uno de esos procesos. Asi, el juicio penal, como
ya se ha dicho reiteradamente, apuntaré a dilucidar la comisién de actos que
se encuentran tipificados en la normativa vigente en vista de aplicar la pena
correspondiente de ser corroborados en esa sede, mientras que en el
proceso de remocién tales conductas, aun no conteniendo los elementos
exigidos por la ley penal, podrian configurar la causal de mal desempefio o
mala conducta que lleva a la destitucién del magistrado acusado. Ello en
6Jurado de Enjuiciamiente de Magistrades de
razon de que los hechos que han recaido paralela o sucesivamente en ambas
Jurisdicciones tendrén una distinta significacién juridica y por ende su
juzgamiento se desarrollaré bajo diversos sustentos de andlisis e
(EI
sustrato factico que haya podido ventilarse en sede penal que guarde alguna
interpretaci6n aunque coincidan en las pruebas y sus circunstancias.
coincidencia con la base de las imputaciones que ha sostenido la acusacién,
importa un diferente objeto del proceso, el cual se halla dirigido a una
diversa y exclusiva finalidad, como lo es la expresada en el art 115, 2do.
parrafo, de nuestra Constitucién Nacional” (JEMN, causa n° 36 “Freiler” citada].
6°) Que en funcidn de ello, no sélo no puede soslayarse la grave
situacién procesal decidida contra el juez Bento, sino que, por el contrario,
debe de tenerse en cuenta, aunque no desde una perspectiva intrinseca
sobre los hechos ilicitos por los que ahora se encuentra sometido a un juicio
penal, sino como una circunstancia por demas significativa que constituye un
marco para fijar el pardmetro desde donde ha de evaluarse su conducta
como magistrado a sabiendas de que se encontraba en pleno desarrollo una
investigacién de tal cardcter en su contra.
7°) Que cabe consignar que algunas de las acciones del juez a
las que en el fuero penal federal de Mendoza se les ha dado una significacion
juridica delictiva, también coinciden con actitudes que, independientemente
de ello, fueron descriptas por la Acusacién como imputaciones que
efectivamente pueden representar conjuntamente causal de mal
desempefio.
Precisamente este es el t6pico en torno al cual se ha desarrollado
el proceso sobre el que ha de expedirse este Jurado, pues de lo que aqui se
trata, en definitiva, es de comprobar si el juez Bento ha honrado su
investidura en todo momento, incluso frente a la existencia de una causa
penal en su contra, 0 por el contrario se ha comportado de manera impropia
-auin bajo el pretexto de mejorar su situacién procesal-, pues en este
7juzgamiento debe responder por su calidad de magistrado y no como un
individuo comin sometido a un proceso penal.
8°) Que en tal sentido han de analizarse cada uno de los hechos
que la parte acusadora le ha incoado, pero no como causales
independientes, sino como el delineamiento, en su conjunto, de la conducta
del magistrado a fin de decidir en definitiva si sigue siendo merecedor de la
confianza depositada por la sociedad o si, por el contrario, la ha defraudado
y por ello no es digno de continuar ocupanda su cargo en la magistratura.
Sin perjuicio de ello, no se puede dejar de mencionar que al
inicio de la audiencia de debate la Defensa articuld como cuestién preliminar
la inconstitucionalidad de la integracién de este Cuerpo, objetando la ley
26.080 en cuanto prevé su actual conformacién con un solo abogado de la
matricula. Afirmé en ese sentido que no se encuentra bien representado el
estamento que corresponde a los abogados.
Este planteo fue rechazado por unanimidad. Se lo considerd
improcedente en razén de su extemporaneiiad en funcién de lo establecido
en el articulo 26 de la ley 24.937 (texto seguin ley 26.080) y el articulo 11
del Reglamento Procesal, ya que cuando fue debidamente notificada la
Defensa de la constitucién del Tribunal ningin planteo vinculado a su
integracién fue deducido en tiempo y forma.
Aun cuando corresponde ratificar el criterio empleado en aquella
oportunidad preliminar, se entiende pertinente en esta instancia final
efectuar una breve reflexién respecto de la integracién de este Jurado. Ello
con el fin de despejar toda duda vinculada a la posible violacién al debido
proceso y al principio de juez natural extrapolable a este ambito de
responsabilidad politica. Dichas garantias importan que el Tribunal se
encuentre institucionalizado en forma prewia al hecho que se juzga, a la
designacién constitucional y legal de quienes lo integran y a la
indudable competencia para intervenir en el proceso segtin la ley anterior a
los sucesos sometidos a decisién (articulo 18 de la Constitucién Nacional y
articulo 8 del Pacto de San José de Costa Rica).
8De tal forma, y més alld del mérito o acierto que el legislador
hubiere empleado al momento de modificar por ley 26.080 la integracién de
este Tribunal -contro! constitucional que no se encuentra conferido a este
Cuerpo-, no es posible soslayar en esta instancia que la respuesta a la
impugnacién formulada por la Defensa se encuentra en la misma doctrina
que ha sentado la Corte Suprema de Justicia de la Nacién al examinar la
constitucionalidad de la integracién del Consejo de la Magistratura in re
“Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires” [Fallos: 344:3636]
En esa oportunidad el Maximo Tribunal distinguié entre Ia falta
de equilibrio entre los distintos estamentos que constitucionalmente lo
componen de la simple diferencia numérica entre ellos, tal y como lo
reprochan los aqui impugnantes. Asi, la condicién vinculada al numero de
integrantes de cada estamento representativo no constituye requisito
constitucional en tanto no importe la posibilidad de que tal conformacion
neutralice la decisién de las restantes formando un quérum independiente y
propio, ya que, segun las palabras empleadas por la Corte Suprema: “E/
legislador no se encuentra habilitado para consagrar un desbalanceo
entre las distintas fuerzas que termine por desnaturalizar el mandato
constitucional de equilibrio. El limite en este sentido es claro: si bien
pueden existir diferencias en el numero de representantes de los
distintos estamentos -en tanto no se exige una igualdad aritmética-, esas
diferencias no pueden permitir que ninguno de ellos tenga predominio
0 se imponga sobre los demés pues, en tal caso, se consagraria una
composicién desequilibrada en favor de ese estamento” (considerando 92) del
fallo citado}.
Expuesta de esta forma la diferencia entre “equilibrio” y “numero
de integrantes” entre las distintas representaciones, ningun agravio
constitucional se desprende del planteo defensista, en tanto no se alcanza a
divisar la posibilidad de que alguno de los distintos estamentos que
9integran este Tribunal pueda llevar adelante acciones hegeménicas o
controlar al Jurado por si y sin necesidad cle consensos con los restantes,
razén por la que -como ya ha sido adelantado- se ratifica el rechazo de la
impugnacién preliminar deducida.
A partir de estos lineamientos rectores se han de examinar los
cargos vertidos en la acusacién, respetando los limites y plataforma factica
que ella misma ha construido, a los fines de precisar si el magistrado Walter
Ricardo Bento, actuando por comisién u omisién, ha dejado de lado las
pautas concernientes a su deber ético y legal y ha incurtido en la causal de
mal desempefio.
Hechos imputados en Ia acusacion
9°) Que en el caso traido a conocimiento, la primera conducta
atribuida al doctor Bento como constitutiva de la causal de mal desempefio
se habria materializado con relacién a los hethos ventilados y acreditados en
la causa FMZ 13.853/2020 caratulada “Ortego, Luciano Edgardo y otros s/
asociacién ilicita, cohecho con conductas art 256 bis 2° y 257, cohecho
activo y falso testimonio” que derivaron en multiples procesamientos del
magistrado (ocho en total) por la presunta comisién de conductas delictivas
relacionadas con haber recibido dinero u otros bienes a cambio del dictado
de resoluciones favorables a quienes han realizado dichos pagos -en su rol
de jefe u organizador de una asociacién ilicita-, haber experimentado un
enriquecimiento patrimonial apreciable e injustificado, haber desplegado
maniobras destinadas a dar apariencia de licitos a fondos de origen delictivo
y haber cometido actos de falsedad ideolégica y en infraccién al deber de un
magistrado.
10°) Que resulta de especial relevancia sefialar que
paralelamente a la realizacién de este proceso se encuentra en pleno
desarrollo el debate oral y publico en la causa penal antes referida. Asi como
todos los planteos formulados por la defensa y por el propio magistrado
resultan completamente ajenos al dmbito de conocimiento de este Jurado -
10furado de Enjuiciamiente de Magistrades ziesse
vinculados a irregulares designaciones de jueces subrogantes y del
Ministerio Publico Fiscal, procedimientos espurios para la colecta probatoria,
coacciones a testigos, persecuciones politicas, campafias de difamacién y, en
sintesis, supuestas violaciones a garantias constitucionales en diversas
formas-, se entiende que no es posible valorar lo actuado en aquella sede
para considerarlo como “prueba de tales comportamientos” -tal y como lo
propone la acusacién en este primer cargo-. Ello en virtud del estado
procesal de la causa penal, que no cuenta todavia con una sentencia
definitiva pasada en autoridad de cosa juzgada que permita aseverar que
tales delitos han sido cometidos por el acusado.
Aun reconociendo que la naturaleza de este proceso politico-
disciplinario respecto del expediente penal resulta ser diametralmente
distinta pues no resulta ser el dmbito de este Cuerpo la instancia idénea
para dilucidar o investigar la eventual comisién de delitos, la presuncién de
inocencia constituye la maxima garantia constitucional de un imputado. Es la
garantia que le permite conservar el estado de “no autor de un delito” en
tanto no se expida una resolucion judicial firme que declare lo contrario y
que deriva del principio segun el cual nadie puede ser penado sin juicio
previo (articulo 18 de la Constitucién Nacional).
Por lo tanto, toda persona es inocente, y asi debe ser tratada
mientras no se declare en juicio su culpabilidad. La formulacién de este
principio implica que sélo una sentencia tiene la virtualidad -a partir de la
adquisicién de un estado de certeza-~ de hacer cesar esta presuncién,
garantia de maxima jerarquia reconocida en el articulo 9 de la Declaracién
de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, en el articulo 11 de la
Declaracién Universal de los Derechos Humanos y en la Convencion
Americana sobre Derechos Humanos, que en su articulo 8, segunda parte, la
resume del siguiente modo: "Toda persona inculpada de delito tiene derecho
11@ que-se presuma su inocencia mientras no se establezca legalmente su
culpabilidad”.
Esta garantia debe proyectarse en todos los 4mbitos del derecho,
teniendo el Estado Argentino la obligacién de garantizarla a la luz de los
tratados internacionales que ha suscripto y que podrian comprometer su
responsabilidad internacional; por lo que, aun cuando se ha dicho que el
“beneficio de la duda” del Derecho Procesal Penal rige a la inversa en el
juicio politico, Ambito en el que no puede ser invocado [JEMN, causa nro. 2
“Brusa”], las hipotesis delictivas endilgadas no han pasado de ser eso:
hipétesis, por lo que tales conductas -en cuanto han sido aqui imputadas
como constitutivas de delitos penales- quedaran excluidas de valoracion y
razonamiento.
Si bien no se puede dejar de compartir que un magistrado
suficientemente “sospechado” de la comisién de tal cantidad de delitos
dolosos -con procesamientos firmes- afecta la base misma de la autoridad
judicial y la confianza y credibilidad que deben inspirar los magistrados y el
mismo Poder Judicial hacia la sociedad y a los otros érganos de gobierno,
resulta preferible conducir este razonamiento sobre hechos cuya existencia
no pueda ser discutida ni que sea posible valorarlos y calificarlos de manera
distinta en otras instancias judiciales -para el caso- durante el debate oral
actualmente en curso. Ello obedece a un estricto respeto a las garantias
constitucionales que hacen al debido proceso y a propender que este jury
avance sobre bases facticas incontrastables: aquéllas que permitan poner
razonablemente en duda la rectitud de la conducta del magistrado o su
capacidad ética para el desempefio de sus funciones.
11°) Que la misma linea cornesponde seguir en cuanto a la
imputacién de falta de imparcialidad del doctor Bento por no haberse
excusado en la causa FMZ 2941/2014, caratulada “Imputado: Masi,
Montagnoli Carlos y otros s/evasién simple tributaria”. Se entiende que el
vinculo de amistad que se pretende acreditar a través de las conversaciones
telefénicas de la cényuge del magistrado, sefiora Marta Isabel Boiza, con el
12>
g
Jurado de Erjuiciamiente de Magistrades tet oXn
imputado Roberto Massi y su esposa -de las que surgirian encuentros
familiares y viajes en comun- integra el objeto del debate penal, esta
sometido a prueba y eventualmente podria merecer valoracién diferente en
ambas instancias.
En verdad, el incumplimiento de la obligacién legal de inhibirse,
en tanto compromete irremediablemente el deber de imparcialidad como
atributo inabdicable de la funcién judicial para preservar sin alteraciones la
confianza publica, constituye uno de los primeros deberes del juez. Lo que
ocurre en el sub examine es que el interés en el pleito o Ia relacién de
amistad que sustenta las causales previstas en el articulo 55, incisos 4 y 11,
del Cédigo Procesal Penal de la Nacién es lo que atin permanece en duda y
constituye materia sometida a conocimiento del tribunal oral interviniente,
circunstancia que lleva a la necesidad de mantener la pureza de este
Proceso, evitando contaminarlo con valoraciones y conclusiones que
pudieran ser en algin punto contradictorias con las que se arriben en la
causa penal, con el consecuente escandalo juridico que de ello derivaris
12°) Que en idéntico sentido, corresponde destacar que las
cuestiones dudosas de derecho, las opinables, los criterios y las
interpretaciones posibles dentro de un conjunto de opciones racionales,
integran el margen de libertad y discrecionalidad propias de la funcién de
juzgar. Por el contrario, si la sola voluntad del juez aparece como Unica
motivacin del acto, éste seria arbitrario y surgiria un desempefio deficiente
que justificaria la separacién del magistrado por existir un apartamiento de
la misién que le ha sido conferida. Con este alcance, las faltas de mérito,
excarcelaciones 0 prisiones domiciliarias que refiere la acusacién en los
distintos expedientes que el doctor Bento tenia a su cargo, e incluso la
invocada “desnaturalizacién de testimonios” que integra el primer cargo
~y sin perjuicio de advertir la falta de fundamentos concretos en la acusacion
que sustenten dicha imputacién- por ser conexas y encontrarse unidas
13intrinsecamente con la imputacién penal -puntualmente en lo que hace a las.
acciones de cohecho activo y enriquecimiento ilicito- quedard excluida de la
causal de mal desempefio que aqui se examina por las mismas razones ya
expuestas con anterioridad.
13°) Que se adoptard como dirextriz al momento de examinar la
causal de remocién por la que ha sido intimado el doctor Bento que lo
relativo a la interpretacién y aplicacién de normas juridicas en un caso
concreto es resorte exclusivo del juez de la causa sin perjuicio de los
recursos que la ley procesal concede a las partes para subsanar los errores 0
vicios en el procedimiento o para obtener la reparacién de los agravios que
los pronunciamientos del magistrado pudiera ocasionarles. No cabe, pues,
por la via del enjuiciamiento, intentar un cexcenamiento de la plena libertad
de deliberacién y decisién de la que gozan las jueces en los casos sometidos
@ su conocimiento toda vez que admitir tal proceder significaria atentar
contra el principio de independencia del Poder Judicial que es uno de los
pilares basicos de nuestra organizaci6n institucional” (Fallos 303:741 y 305:113}.
Debe afiadirse en esta misma linea de interpretacién que “(s)in
embargo -como ya se ha explicado- si bien el juicio politico se trata de un
proceso diferente al penal, se encuentra eninarcado por todas las garantias
de la defensa en juicio y el debido proceso, y desde tal aspecto, seria
controvertido arribar a un fallo de rempcién respecto del magistrado
acusado, sin la firme conviccién fundada en los hechos comprobados
mediante la prueba rendida durante el juicia” JEMN, causa n® 2 “Brusa”, Boletin de
Jurisprudencia, con cita de Armagnague, “Juicio politico y Jurado de Enjuiciamiento en la nueva
Constitucién Nacional”, pags. 150 y 151].
Como consecuencia de estos principios, se rechazan las
imputaciones sustentadas en la existencia de conductas tipificadas como
cohecho activo, enriquecimiento ilicito, falsedad ideolégica y asociacién ilicita
que se ventilan en la causa penal ya referida, correspondiendo analizar los
restantes hechos que integran la acusaciéni formulada en contra del doctor
Bento con el estricto objetivo de verificar si el acusado ha incurrido 0 no en
14A
Jurado de Enjuiciamiente de Magistra MB
la causal de mal desempefio, por traducir su accionar un designio ajeno al
recto ejercicio de la funcién jurisdiccional. Esto es, con la finalidad de
corroborar si el juez ha utilizado el poder que la Constitucién y las leyes le
han confiado con un propésito o intencién distinta de la de administrar
justicia. Sélo en ese marco y con ese alcance se recurrira a las
circunstancias acreditadas en los expedientes penales ofrecidos como prueba
por ambas partes, independientemente de la responsabilidad penal que
pudiera o no atribuirsele, como ya se ha explicado.
La causal de mal desempefio
14°) Que el enfoque conglobante del material probatorio que se
propone para esta tarea comprende el reproche de varias conductas
impropias para un juez federal, especialmente aquellas que evidencian el
intento de impedir u obstaculizar el desarrollo de la causa penal FMZ
13854/2020 en la que se encuentra imputado.
Corresponde formular una aclaracién previa con relacién a lo
aducido por la Defensa y el magistrado al declarar ante este Jurado en
cuanto a que sélo dos hechos objeto de reproche serian ajenos a la causa
penal que se le instruye e independientes de aquélla: el vinculado con las
fotografias en la ciudad de Las Vegas extraidas del celular de su cényuge y
la inscripcién frustrada en el Concurso n° 475 destinado a cubrir un cargo de
vocal en la Sala III de la Camara Federal de Casacién Penal.
Esto no es asi. La comprobacién del mal desempefio de un
magistrado, a la luz de los principios antes enunciados, exige en términos
constitucionales verificar su “mala conducta” en la medida en que el articulo
53 de la Constitucién Nacional debe ser armonizado con Io dispuesto por el
articulo 110 para la permanencia en el cargo. Por lo tanto, deriva de un
conjunto de circunstancias, detalles, antecedentes, esto es, de hechos que
15rodean. al. funcionario, los que deben ser analizados de manera sistémica,
integrada y armoniosa para formar conviccién.
No es posible obviar que el principio de congruencia exige que
entre la acusacién y la sentencia exista identidad en el hecho que se juzga,
es decir, que el sustrato factico sobre el cual los actores procesales
despliegan su necesaria actividad acusatoria o defensiva se mantengan
incélumes. Sin embargo, no se ve esta garantia conmovida por una
modificacién en el orden expositivo en que los hechos han sido planteados
por la Acusacién, esto es, el orden o metodologia empleados para su
explicacién, en tanto no se altere la imputacién factica sobre la cual ha
desplegado el acusado su estrategia defensista.
Por el contrario, a los fines de dotar a esta explicacién de mayor
claridad y considerando que la conducta del juez no puede ser apreciada de
manera fragmentada o aislada -lo que en definitiva conllevaria a prescindir
de una visién de conjunto de su modo de actuar- es que debe ser ponderada
a lo largo del tiempo y en una necesaria correlacién con todo el material
probatorio incorporado y conocido por las partes, con el objeto de verificar,
en el marco de las imputaciones descriptas, si incurrié 0 no en la causal de
mal desempefio por la que se solicita su destitucién.
15°) Que formulada esta aclaracién, "resulta evidente que la
actividad de los jueces no corresponde sea examinada y conmensurada con
la misma vara que la del ciudadano comun, toda vez que su funcién hace
que les sea exigido un comportamiento distinto -cuando no, superior- af
resto de la comunidad y ello, no solo en los aspectos concernientes al
desempefio de sus especificas y tutelares misiones, sino abarcativa de las
restantes facetas de la vida” (JEMN, causa n° 2 “Brusa”, ampliacién de fundamentos del
doctor Ameal).
En este orden de ideas, debe puntualizarse la notoria
contradiccién que se advierte por parte del magistrado en lo concerniente a
la manifestada voluntad de colaborar con la investigacién penal y la
conducta asumida y demostrada en sentido inverso. Ello en modo alguno
16puede ser confundido con las prerrogativas que a todo ciudadano le asisten
durante el tramite de una causa penal instada en su contra y que en aquella
sede también le asisten al acusado.
En efecto, de los propios dichos del doctor Bento ante este
Cuerpo surgiria que no ha reparado en esta distincién al momento de
cuestionar que “no sdlo tiene obligaciones sino también derechos” para
negarse a aportar un elemento probatorio, sin que hubiera demostrado -con
hechos materiales y objetivos- una actitud participativa para dilucidar las
circunstancias investigadas en la causa penal, a la que de manera constante
atribuye un propésito de venganza o desvio de poder.
Partiendo entonces de que como magistrado debe exigirsele
amplia colaboracién y, por supuesto, ausencia de entorpecimiento de la
investigacién penal en busqueda de la verdad objetiva, con total
independencia de que el doctor Bento resultare absuelto o condenado en el
proceso penal, lo cierto es que la conducta observada desde que tomé
conocimiento de la existencia de una investigacién penal instada en su
contra fue impropia e incompatible con el comportamiento que corresponde
desplegar a un juez de la Nacién en esas circunstancias.
16°) Que de manera preliminar y para evitar que se entienda
que la causal de mal desempefio es una figura tan abierta y vaga que impide
el ejercicio efectivo del derecho de defensa, corresponde aclarar que, por el
contrario, son normas especificas las que fijan su alcance y este Jurado debe
aplicarlas al caso concreto.
El marco normativo al que se hace referencia comienza con la
letra del articulo 16 de la Constitucién Nacional, en cuanto consagra el
Principio de igualdad ante la ley de todos los ciudadanos y que son
“admisibles en los empleos sin otra condicién que la idoneidad”, traténdose
ésta de las aptitudes que se deben poseer para acceder a un cargo y
conservarlo. En la misma linea, el articulo 110 supedita la garantia de
17“inamovilidad” de los magistrados de la Nacién a que ellos mantengan su
“buena conducta”.
Estos conceptos deben integrarse con el conjunto de deberes,
prohibiciones e incompatibilidades aplicables sin excepcién “a todas las
personas que se desempefien en la funcién publica en todos sus niveles y
Jerarquias.. extendiéndose su aplicacién a todos los magistrados,
funcionarios y empleados del Estado” que prevé la ley 25.188 de Etica
Publica.
En concreto, en su articulo 2 la norma obliga a cumplir con los
siguientes deberes y pautas de comportamiento ético: a) Cumplir y hacer
cumplir estrictamente la Constitucién Nacional, las leyes y los reglamentos
que en su consecuencia se dicten y defender el sistema republicano y
democratico de gobierno; b) Desempefiarse con la observancia y respeto de
los principios y pautas éticas establecidas en la presente ley: honestidad,
probidad, rectitud, buena fe y austeridad republicana;... €) Fundar sus actos
y mostrar la mayor transparencia en las dexisiones adoptadas sin restringir
informacién, @ menos que una norma o el interés publico claramente lo
exijan; f) Proteger y conservar la propiedad del Estado y sélo emplear sus
bienes con los fines autorizados. Abstenerse de utilizar informacién adquirida
en el cumplimiento de sus funciones para realizar actividades no
relacionadas con sus tareas oficiales 0 de permitir su uso en beneficio de
intereses privados...”.
Asimismo, el articulo siguiente dispone que "(todos /os sujetos
comprendidos en el articulo 1° deberdn observar como requisito de
permanencia en el cargo, una conducta acorde con la ética publica en el
ejercicio de sus funciones. Si asi no lo hicieren serén sancionados o
removidos por los procedimientos establecidos en el régimen propio de su
funcién”, fijandose asi la pauta legal para habilitar el proceso de remoci6n.
En el plano internacional, por ser la Republica Argentina estado
miembro de las Naciones Unidas, no puede dejarse de lado conceptos
fundamentales como los que se han cimentado en los Principios de
18furade de Enjuiciamiento de
Bangalore sobre la Conducta Judicial, aprobados por el Consejo Econémico y
Social de las Naciones Unidas en el afio 2006. Alli se establecen como
valores exigibles a los magistrados la independencia, la imparcialidad, la
integridad, la correcci6n, la igualdad, la competencia y la diligencia. Define
al valor “integridad” como esencial para el desempefio correcto de las
funciones jurisdiccionales: "Un juez deberé asegurarse de que su conducta
esté por encima de cualquier reproche a los ojos de un observador
razonable. El comportamiento y la conducta de un juez deberdn reafirmar la
confianza del ptiblico en la integridad de la judicatura. No solo debe
impartirse justicia; también ha de verse como se imparte” (apartados 3.1. y
3.2.)
En cuanto al valor “correccién”, se impone que “(c)omo objeto
de un constante escrutinio publico, un juez deberé aceptar restricciones
personales que puedan ser consideradas una carga para los ciudadanos
ordinarios y lo deberé hacer libremente y de forma voluntaria.
Particularmente un juez se comportaré de forma consecuente con la
dignidad de las funciones jurisdiccionales” (apartado 4.2).
17°) Que precisado el marco normativo a la luz del cual debe
abordarse la conducta esperable de un magistrado, hay que destacar que
tanto ante el Consejo de la Magistratura como ante este Jurado, el doctor
Bento declaré que desde el 1° de noviembre de 2020 empezaron a salir en
los medios de Mendoza notas vinculadas a una causa secreta que tramitaba
ante la Justicia federal, asegurando que "era contra mi” porque “buscaron ef
cargo electoral”. Afirmé que a partir de entonces, y concretamente desde
enero de 2021, efectué varias presentaciones en el expediente para estar a
derecho y poder ejercer su derecho de defensa en juicio, las que habrian
sido sistematicamente rechazadas, producto -a su entender- de la
“confabulacién” que integrarian sus propios colegas y de la que resultarian
victimas él y su familia.
19Sin perjuicio de lo manifestado por el magistrado, se reitera que
su accionar desde el momento en que tomd conocimiento de la apuntada
investigacién penal, muy por el contrario al propésito colaboracionista
alegado, se concreté en concurtir a diversos organismos oficiales en procura
de informacién sobre lo que era objeto de pesquisa (Registro de la Propiedad
Inmueble y delegacién local de la Direccién Nacional de Migraciones).
nes
18°) Que por razones de orden metodolégico, en primer término
se trataré lo ocurrido ante la Direccién Nacional de Migraciones.
Enmarcada en la hipdtesis de canducta orientada a interferir en
la investigacién penal, resulta evidente que la iniciativa de fecha 16 de
marzo de 2021 de obtener informacién acerca de los requerimientos sobre
sus movimientos migratorios no es propia cle las exigencias que hacen a la
investidura judicial. En esa oportunidad el doctor Bento solicité se le
informara “si ha sido requerido y por quién, mediante comunicacién verbal,
escrita y/o electrénica a suministrar informe y/o detalle de salidas del pais
sobre mi persona o sobre cualquier integrante de su grupo familiar...” (ver
nota obrante a fs. 143 (150) del Legajo 31 de la causa penal].
Del testimonio que presté en la causa penal el funcionario de esa
dependencia, Maximiliano Pérez, y que el acusado ha ofrecido también como
prueba, se desprende que en principio, otra persona, enviada por el mismo
juez, habia intentado se le diera curso a la solicitud suscripta por el
magistrado y que, ante el fracaso de esa gestidn, el doctor Bento efectud la
presentacién del escrito personalmente.
En su descargo el doctor Bento se amparé en la ley 27.275,
norma que tiene por objeto garantizar el efectivo ejercicio del derecho de
acceso a la informacion publica y “..comprende la posibilidad de buscar,
acceder, solicitar, recibir, copiar, analizar, reprocesar, reutilizar y redistribuir
libremente la informacién bajo custodia de los sujetos obligados enumerados
20ofurado de Enjuiciamiento de ) BS
YO
en el articulo 7° de la presente ley, con las Unicas limitaciones y excepciones
que establece esta norma” (articulo 2).
Pero justamente entre dichas excepciones se enumera los
siguientes supuestos: ”..k) Informacién de cardcter judicial cuya divulgacién
estuviera vedada por otras leyes 0 por compromisos contraidos por la
Reptblica Argentina en tratados internacionales; |) Informacién obtenida en
investigaciones realizadas por los sujetos obligados que tuviera el cardcter
de reservada y cuya divulgacién pudiera frustrar el éxito de una
.” (articulo 8).
El conocimiento de los alcances del derecho de acceso a la
investigaci6
informacién publica que la norma reconoce debe suponerse por parte del
magistrado, y por ende también, que intentar solicitar, primero por
interpésita persona y luego personalmente, si se habian pedido informes
“por cualquier medio” sobre su persona y familia, excede ampliamente los
datos que el organismo debe guardar y los derechos que la norma ampara.
19°) Que no se puede dejar de valorar que una de las
imputaciones formuladas en su contra -en esta sede y en la penal- se
relaciona con la gran cantidad de viajes al exterior que habria emprendido el
grupo familiar y cuyos gastos no habrian podido ser justificados, por lo que
la informacién que procuré guarda intima relacién con el objeto de la
pesquisa penal.
Tan es asi que tampoco puede dejar de tenerse en cuenta -
siguiendo el mismo método conglobante de ponderacién ya propuesto-, que
cuando en la causa penal se le ordend al magistrado Bento y su cényuge que
entregaran los pasaportes en razén de la prohibicién de salida del pais
dispuesta, el magistrado se opuso a través de sendas presentaciones de su
defensa, en las que en primer término se adujo que esa documentacién no
estaba en su poder y posteriormente deliberadamente se negé amparandose
en que “segula ejerciendo la magistratura” y en el articulo 18 de la
21Constitucién’ Nacional, desconociendo asi iabiertamente la orden judicial
impartida que lo urgia a proceder en sentido contrario.
Esta desobediencia no puede ser amparada ni justificada a partir
de las descalificaciones dirigidas contra la artuacién judicial en la que se lo
investigaba, sino que demuestra un obrar contrario a su investidura y a la
responsabilidad que le es inherente como magistrado de cara a una
investigacién penal como las tantas que halbré ordenado en el ejercicio de
sus funciones.
Se ha configurado entonces la causal de mal desempefio en
tanto se encuentra debidamente acreditada no sélo una conducta ajena al
deber de colaboracién con la administracién de justicia que como magistrado
le era exigible, sino también una maniobra de interferencia y
entorpecimiento del accionar judicial, inadmisible en cabeza de un juez
federal de la Naci6n.
Registro de la Propiedad Inmueble
20°) Que del mismo modo dette interpretarse su accionar -
desplegado en la misma semana que el anterior- cuando acudié a la
Direccién de Registros Publicos y Archivo Judicial de Mendoza y sol un
“informe de estado juridico de inmuebles del Sr. Walter Ricardo Bento y/o
Marta Isabel Boiza..., como asi también informe si han realizado pedidos u
oficios de cualquier tipo sobre el firmante o de su grupo familiar (Nahuel
Agustin Bento DNI n° 36720851 y Luciano Ezequiel Bento DNI n°
38.416.361)”. Dicho requerimiento fue evacuado por la mencionada
Direccién en fecha 10 de marzo de 2021, oportunidad en la que se informé
que “...se ha contestado un informe de titularidad histérica y de estado
juridico de inmuebles...solicitado por la Fiscalia General ante la Camara
Federal de Apelaciones de Mendoza”.
Si bien no se advierte invocacién expresa de su calidad de juez
federal ante esa reparticién -aun cuando pudiera ser publicamente conocida
en la ciudad y especialmente en el Registro de la Propiedad Inmueble-,
ves \resulta sin lugar a dudas reprobable que pocos meses después de conocer
que estaba siendo investigado penalmente requiriera informacién para
conocer “si se han realizado pedido u oficios de cualquier tipo” sobre su
familia, pues se atribuye a ello el propésito de conocer y avanzar sobre el
contenido de la instruccién fiscal que se encontraba en curso a esa fecha.
Ello indudablemente debe ser contextualizado para precisar la
existencia 0 no de las maniobras obstructivas que se examina, en tanto
pocos dias después -el 8 de abril de 2021- el matrimonio Bento procedié a la
venta de uno de los inmuebles -sito en calle Espafia 948 del departamento
Capital de Mendoza, identificado como unidad n° 18, piso 3°- por la suma de
U$S 140.000, conforme se desprende de la escritura publica n° 28 agregada
al Legajo Patrimonial de la causa FMZ 13.854/2020, incorporada aqui como
Prueba documental.
En consecuencia, también se encuentra configurada la causal de
mal desempefio en relacién a esta imputacin.
Persona Politicamente Expuesta
21°) Que independientemente del delito de falsedad ideolégica
que le ha sido atribuido penalmente, en el presente enjuiciamiento se
imputa a Walter Ricardo Bento que en la escritura publica de venta a la que
se ha hecho mencién, autorizada por la escribana Maria Lucila Crivelli,
ambos comparecientes (el magistrado a los fines de otorgar el
consentimiento matrimonial) no declararon encontrarse dentro del catdlogo
de personas politicamente expuestas, aprobado por Resolucién 134/18 de la
Unidad de Informacién Financiera, dictada en el marco de la ley 25.246.
Corresponde valorar el descargo que al respecto formuldé el
doctor Bento, y en especial el testimonio de la notaria que reconocié haber
incurrido en error al momento de introducir dicha previsién en el cuerpo de
la escritura, el que atribuyé a una costumbre derivada de la prdctica y a la
‘ 23inobservancia de requerir puntualmente a los comparecientes sobre dicha
previsién normativa, previo a la confeccién del instrumento publico.
La ligereza con que la notaria habria obrado, pese a la expresa
disposicién contenida en el articulo 20, inciso 12, de la ley 25.246 -que
incluye expresamente a los escribanos putlicos como sujetos obligados a
informar en los términos del articulo 21- no puede excusar la conducta de un
magistrado federal con més de 17 afios de: experiencia en el cargo, en la
aplicacién concreta y personal de una norma dirigida a prevenir e impedir los
delitos de lavado de activos y de financiacién del terrorismo, por lo que
deberia suponerse un particular conocimiento de la exigencia que frente a tal
operacién inmobiliaria debia asumir.
Si a dicha obligacién se afiade Ia valoracién del momento en el
que se produjo -esto es, conocida la existencia de una investigacién penal
sobre el matrimonio-, no es posible obviat que el resultado final de esa
maniobra generé que a través de dicha venta fuera posible eludir el embargo
sobre el inmueble, frustrando parte de la medida cautelar preventiva que
recay6 sobre el patrimonio del magistrado al ser procesado en fecha 26 de
julio de 2021.
Se debe enfatizar -previo a continuar con la resefia factica que
acredita las maniobras obstructivas a las: que se hace referencia- que
tampoco es posible admitir tal accionar frente a la invocada “ilegalidad” que
imperaba a criterio del magistrado en la instruccién penal por no ser
admitido como “parte” y en consecuencia no permitirle el acceso a la
instruccion que se encontraba en esa época en pleno avance, habiéndose
invocado para su rechazo la prescripcién normativa del articulo 204 del
Codigo Procesal Penal de la Nacién.
En este orden de cosas, cabe poner de resalto que si bien la
finalidad del articulo 73 del mencionado cédigo no es otra que la de autorizar
que el imputado pueda presentarse esponténeamente ante el Tribunal en
forma personal o con su abogado con el objeto de formular las aclaraciones
y ofrecer las pruebas que estime conducentes, del juego arménico de esta
24ANGEL MARCELO Baya,
eoratario
oe
tenga
ado de Enjuiciamiento de Magistrados de be
Ge
norma con la del articulo 204 del ritual se desprende que, en tanto la
Publicidad ponga en peligro el descubrimiento de la verdad, los magistrados
pueden imponer el secreto del sumario debidamente implantado -aun
cuando no medie llamado a indagatoria~ y que tales previsiones legales
debieron ser particularmente conocidas y respetadas por el titular de un
juzgado federal con competencia penal.
El control de legalidad de la investigacién penal llevada en su
contra excede las atribuciones de este Jurado y corresponde -como ya se
dijo- al debate que se cumple en sede criminal. Sin perjuicio de ello, y desde
la perspectiva que corresponde adoptar para este juicio destitutorio, basta
con la comprobacién de que los hechos han ocurrido de la manera en que lo
ha formulado la acusacién para que este Jurado les otorgue su significacién
juridica.
En raz6n de lo sefialado, la omisién de declaracién de su calidad
de persona politicamente expuesta por parte del juez Walter Ricardo Bento
configura la causal de mal desempefio.
Crédito hipotecario
22°) Que también debe ser analizada la conducta del doctor
Bento al celebrar un contrato de crédito con garantia hipotecaria con el
Banco de la Nacién Argentina por la suma de $350.000, a pagar en 120
meses.
De las constancias de la causa surge que en 2011 el matrimonio
Bento se presenté ante la entidad mencionada a los fines de solicitar un
crédito hipotecario. En el formulario de solicitud -exhibido por el magistrado
en la audiencia del 25 de septiembre de 2023- se hacia la siguiente
distincién: "Destino del Préstamo” y “Destino de la Propiedad”. En el primer
caso, las opciones a marcar eran: a) adquisicién; b) refaccién; c)
ampliacién; d) terminacién. En el segundo caso, las opciones eran: a)
25vivienda unica familiar y permanente; b) mo permanente. Al momento de
completar el formulario, Bento y Boiza marcaron la opcién “adquisicion” y
dejaron vacio el casillero respecto del destino del inmueble. Al final del
formulario habia un recuadro que decia: “Declaro bajo juramento que el
préstamo Solicitado, serd afectado a la compra o mejora de una vivienda que
constituye o constituiré mi Unica casa habitacion...” [cfr. Anexo 20 - Carpeta 8
Bancos / Banco Nacién / Primer informe / Legajo Walter Bento fs. 57/58).
La solicitud del matrimonio Bento se encuadré dentro del crédito
“Nacién Casa Propia” (Reglamentacién N® 418). En la “Resolucién de
Solicitudes de Préstamo” se aclaré “DESTINO: ADQUISICION de Ia vivienda
tipo familiar, Unica, de uso propio y permanente” (9 de noviembre de 2011).
Al momento de analizar la solicitud se advirtid que, toda vez que
los peticionantes tenian otras propiedades, no cumplian con la condicién de
“vivienda Unica”. Se elevé el caso a la Gerencia General, que finalmente el
16 de septiembre de 2011 resolvid: "AUTORIZAR la excepci6n (...)
relacionada con el destino de la linea (adquisicién de vivienda propia, nica
familiar y de ocupacién permanente), aun auando el solicitante es titular de
otros inmuebles” y ordenar a la Gerencia Zonal Mendoza Oeste observar el
correcto cumplimiento de los restantes requisitos establecidos [cfr. Anexo 20 -
Carpeta 8 Bancos / Banco Nacién / Primer informe / Legajo Walter Bento fs. 49). ).
El 7 de octubre de 2011 se instrument la operacién por medio
de la escritura piblica extendida por la escribana Miriam Bragazzi (escritura
n° 29), En la segunda cldusula de dicho instrumento publico, titulada
“Declaraci6n jurada del tomador”, consigma que: "LA PARTE DEUDORA
declara bajo juramento: a) que no daré a los fondos otro destino que el
expresado en la cldusula Primera precedente, como asi también que no
modificara el destino de vivienda familiar, tinica y de ocupacién permanente
expresado en dicha clausula”. Al final de ese punto se indica que “en caso de
comprobarse la falta de veracidad, falseamiento u ocultamiento total o
parcial de la informacién suministrada, ello originaré la caducidad de plazos
a més de las sanciones civiles y penales qué correspondan”.
26Jurado de Enjuiciamiento de Magistrade
Con el dinero del crédito el matrimonio Bento compré un
departamento con baulera en la Torre Eugenia de Villa Palmares (matriculas
nuimeros 363504/5 y 363505/5, escritura N° 28), por un precio total de USS
156.000 -valor inconsistente respecto del declarado ante el Consejo de la
Magistratura, omitiéndose también en dicha sede declarar la baulera-. El
inmueble fue donado tiempo después a su hijo Facundo Bento (escritura N°
109 del 30 de diciembre de 2018), de quien el juez es curador.
En la audiencia de debate el doctor Bento dijo que él nunca
escondié tener otros inmuebles -no podria haberlo hecho, habida cuenta del
sistema de controles cruzados existentes en el sistema financiero argentino-
Y que no habia solicitado un préstamo para una vivienda Unica. Para fundar
sus dichos, exhibi6 el formulario de solicitud del crédito antes mencionado e
hizo hincapié en el modo en que lo habia completado.
23°) Que ms alld de que pueda atribuirsele 0 no al magistrado
la falta de veracidad u ocultamiento de la existencia de otros inmuebles de
su propiedad al momento de solicitar el préstamo, es dable resaltar que en
el formulario en cuestion estaba el recuadro en el que se declaraba bajo
juramento que el préstamo seria afectado a la compra o mejora de una
vivienda que constituird Unica casa habitacién. No obstante su alegacién de
buena fe, no es razonable la actitud del magistrado de tomar un crédito
dirigido para adquirir la vivienda unica, siendo que su evidente situacién
patrimonial lo excluia del sector de la poblacién al que el crédito del banco
publico estaba destinado a beneficiar.
Es ademas menos comprensible que el tramite haya prosperado
mediando una excepcién de la Gerencia superior del banco fundada en la
calidad de juez federal del doctor Bento. No es cierta la afirmacién vertida en
la audiencia del 26 de septiembre de 2023 respecto de que su condicién sélo
se mencion6 para establecer la actividad del peticionante. Tan es asi, que en
los considerandos de la resolucién dictada por la Gerencia General de la
27entidad, como Unico fundamento para conceder la excepcién se sostiene "..
teniendo en cuenta que se trata de un Juez Federal que actualmente se
encuentra en funciones”. Tampoco puede ignorar el magistrado el caracter
pUblico que envuelve a su persona y la envergadura del cargo que ostenta,
lo que, tal como se desprende de la resolucién, habria influido en las
autoridades del banco al momento de ponderar el otorgamiento de la
excepcién crediticia.
Por otra parte, debe afirmarse que no es propio del
comportamiento de un juez suscribir un contrato, instrumentado por
escritura publica, cuyas clausulas, a sabiemdas, faltarian a la verdad. Ese
documento notarial formalizé el mutuo acordado mediante el acto
administrativo de la Gerencia General que autoriz6 el crédito hipotecario en
las condiciones descriptas. En virtud de ello, las obligaciones declaradas en
dicho instrumento vinculadas con el destino del inmueble a adquirir :
vivienda Unica de uso propio y permanente, comprometiéndose el deudor a
no cambiar tal destino y sometiéndose a sanciones para el caso de hacerlo-
ciertamente carecerian de efectos practicos frente a la exencién previamente
otorgada. De ese modo el magistrado se comprometié por instrumento
pUiblico a algo que sabia no iba a cumplir. No alcanza, tal como manifest6 en
su defensa, que se trate de un contrato modelo confeccionado por el Banco
de la Nacién Argentina, que no era susceptitle de modificaciones.
Tal proceder inescrupuloso, en lo que respecta a la conducta del
magistrado que ha de evaluarse en este juicio, resulta a todas luces
intolerable, toda vez que, mas alla de sus justificaciones, lo cierto es que,
un documento pUblico con
nuevamente, el doctor Bento suscribi
inexactitudes por causas que, a su criterio, no le serian imputables, como si
ninguna responsabilidad tuviere al respecto.
Finalmente, ha de tenerse en consideracién que el juez Bento,
asi como también la sefiora Boiza, nunca deslararon ante la entidad bancaria
el destino que darian a la propiedad adquirida a través del crédito. Es decir,
habiendo podido dejar asentado en el formulario al que ya hemos hecho
28cfurado de Enjuiciamiente de Mag
referencia que el destino de la vivienda era el de “no permanente”, no lo
hicieron. Tampoco se desprende de la lectura de la resolucién excepcional de
la Gerencia General que la exencién otorgada se extendiese al destino
establecido por la Reglamentacién n° 418.
Contrario al destino de vivienda permanente, de las constancias
de la causa surge que los adquirientes jamés habitaron el inmueble y, por el
contrario, lo dieron en alquiler (ver Declaraciones Juradas Patrimoniales
Integrales, anexos pUiblico y reservado). En efecto, en la declaracién jurada
2012, entre otras, figura entre los ingresos derivados de relaciones
contractuales, como ganancial, la renta por la locacién de! inmueble de la
Torre Eugenia. Se traté, en definitiva, de una de las tantas inversiones
inmobiliarias que llevé a cabo el grupo familiar en los ultimos afios.
En este contexto, resulta reprochable Ia actitud del magistrado,
dejando en evidencia, una vez més, un obrar que no se condice con la
investidura de su cargo y configura la causal de mal desempefio. El doctor
Bento y su cényuge solicitaron y lograron que se otorgara una excepcién
Para un crédito destinado para vivienda Unica a pesar de tener otros
inmuebles; suscribieron la escritura publica, que contenia datos falsos e
Inexactos y; peor atin, conociendo el destino del crédito, desde un primero
momento dieron la propiedad en alquiler, obteniendo un rédito econémico,
que lejos estaba de ser el objetivo de la linea aprobada por la banca publica
para satisfacer las necesidades de vivienda de millones de ciudadanos.
Omisiones y falsedades en las declaraciones juradas
24°) Que la Acusacién le enrostra al magistrado enjuiciado el
haber falseado y omitido insertar datos en sus declaraciones juradas
integrales presentadas ante el Consejo de la Magistratura de la Nacién, en
violacién a lo establecido en la normativa aplicable (ley 25.188 de Etica en el
29Ejercicio de la Funcién Publica, modificada por la ley 26.857, y las
Resoluciones 734/07 y 237/2014 del Conseja de la Magistratura).
25°) Que en relacién a este cargo, como cuestion liminar, ha de
recordarse que este Jurado ya ha sefialado en el expediente n° 36 “Freiler”
ya citado que los magistrados del Poder Judicial de la Nacién se encuentran
obligados a presentar declaraciones juradas patrimoniales integrales que
reflejen el flujo de sus ingresos y egresos en forma anual, conforme lo
establecido por la Ley de Etica en el Ejercicio de la Funcién Publica -Ley
25.188, articulos 4 y 5-. Estas presentaciomes deben contener una némina
precisa y detallada de todos los bienes que integran el patrimonio del
declarante -propios y gananciales-, aquellos que integran el patrimonio de
su cényuge, conviviente, hijos menores, personas juridicas y sociedades de
hecho de las que forme parte, dentro del pais o en el extranjero -articulos 6
y 12-.
La normativa aplicable a los jueces de la Nacién —Resolucién
734/2007, articulo 1, modificada por Resolucién 237/2014, ambas del
Consejo de la Magistratura de la Nacién- establece cual es la informacion
que los jueces deben incluir en relacién a sus ingresos, incorpora un item
relativo a aquellos que tengan un origen distinto a su remuneracién salarial
e impone la obligacién de individualizar a la persona (fisica o juridica) de la
que proviene el ingreso, asi como también setalla el tipo (bienes o dinero),
origen (oneroso, gratuito, etc.) y monto o valor.
La finalidad de tales imposiciones es clara y evidente, consiste en
la creacién de un requisito formal y objetivo que permita el control
institucional y social sobre el flujo del patrimonio de los funcionarios
pUblicos, en lo que aqui interesa de los jueoes. Por supuesto que no se trata
de un control ocioso, esta intimamente vinculado con dotar de transparencia
al ejercicio de la funcién publica en general y con el interés puiblico de
prevenir hechos de corrupcién, pues la incongruencia o una variacién
desproporcionada 0 inconsistente del patrimonio de un funcionario publico a
30furado de Enjuiciamiente de Magistrag
partir de su ingreso a la funcién, resulta llamativa y alarmante y debe estar
sometida al escrutinio publico y de las autoridades correspondiente.
26°) Que bien se ha dicho que “/a lectura de la informacién
brindada por un magistrado de la Nacién, bajo juramento, no sélo tiene que
resultar verdadera, también debe ser clara para quien la deba analizar, pues
ello también hace al estdndar de transparencia que su investidura exige"
(Freiler” cit.).
En el caso, por el contrario, es tal la confusién de datos que no
es posible establecer a ciencia cierta cémo se integra el patrimonio del
doctor Bento ni el de su cényuge e hijos ni cual es el verdadero origen de
sus fondos. EI esfuerzo que ha tenido que realizarse para comprender -aun
adoptando la postura defensista- la composicién de su patrimonio ha
resultado ser una ardua tarea.
Las irregularidades detectadas cobran relevancia tanto si se las
examina a la luz de la finalidad de la obligacién legal puesta en cabeza del
magistrado, como en funcién del efecto que esa informacién tuvo cuando -
precisamente- en el marco de la causa penal debid investigarse la
composicién de su patrimonio. Y es esta finalidad legal exigible a los
Magistrados, intimamente vinculada a la transparencia, la que claramente
en el caso no ha sido lograda, y que convence de que la conducta
evidenciada a partir de las apuntadas declaraciones juradas presentadas
ante el Consejo de la Magistratura integra la maniobra obstructiva que se
entiende acreditada.
Asi, se advierte que incluso en el informe _pericial
complementario de la pericia contable practicada, los peritos de parte
Alberto Alonso y Andrea Carolina Calello (si bien el documento no cuenta con
su firma) no pudieron obviar las irregularidades que las declaraciones
juradas presentan: “Surge de las declaraciones juradas ante el CM que en
algunas de ellas, se consigna como afio el de presentacién, si bien se
31refieren a informaci6n del afio anterior... En algunos casos, la informacién se
consigna en la declaracién ptiblica y no en Ja reservada, y viceversa. Existe
una diferencia temporal en la informacién del lote de terreno G. Cruz,
Mendoza. 50% Mildn s/n, del 10/08/2015, que fue informado en 2016. No se
ha visualizado la constancia de presentacién de las declaraciones juradas del
impuesto sobre los bienes personales, si bien el informe de la AFIP, da
cuenta de la inscripcién de Walter Bento en dicho impuesto a partir del afio
2005...” (escrito del 16 de agosto de 2022 em causa FMZ 13852/20).
Las derivaciones de incluir datos inconsistentes u omitir otros en
su declaracién patrimonial de bienes son diversas, pues impide o cuanto
menos obstaculiza el control relativo a las cargas impositivas del actor, el
flujo de bienes de su patrimonio y fundamentalmente el origen de esos
bienes y los medios que le permitieron solventar su modo de vida.
Ahora bien, no basta con que en la pieza acusatoria se
mencionen irregularidades, falsedades u omisiones contenidas en dichos
instrumentos, sino que es necesario que se describan con precisién las
conductas que las configuran. Esa carga no ha sido cabalmente cumplida por
la Acusacién mas alld de las imputaciones que giran sobre el ocultamiento de
la verdadera situacién patrimonial del magistrado en relacién a los viajes al
exterior (primer hecho del segundo cargo), a las dos bicicletas y un reloj
Rolex (tercer hecho del segundo cargo) y a los omitidos tres mil seiscientos
cinco euros (€3.605) (cuarto hecho del segundo cargo).
Limitada entonces la acusacién en cuanto a la confeccién de sus
declaraciones juradas a estos tres tdpicos, las imputaciones efectuadas al
doctor Walter Bento serdn desarrolladas a rontinuacién. Para ello se tendra
especialmente en cuenta las declaraciones juradas presentadas por el
acusado desde el afio 2005 hasta el 2020; el estudio pericial contable sobre
su patrimonio realizado en el ambito del Cuerpo de Peritos del Poder Judicial
de la Nacién Especializados en Causas de Corrupcién y Delitos contra la
Administracién Publica [obrante en el Anexo 26]; y los informes de la Direccién
Nacional de Migraciones, de la Embajada de Estados Unidos y de la Policia
32de Seguridad Aeroportuaria [obrantes a fs. 31 (39) y 49 (57), 488; (495), 631, 431 (438) y
526 (533) del legajo patrimonial -anexos 19, 20 y 43+]
a) Cuestién gastos en viajes al exterior:
27°) Que la Acusacién sostiene que el doctor Bento en forma
deliberada omitid los datos requeridos sobre titularidad de tarjetas de
crédito y oculté su verdadera situacién patrimonial en sus declaraciones
juradas patrimoniales presentadas ante la oficina del Consejo de la
Magistratura.
Sefiala que dicha cuestién debe analizarse en un contexto que
incluye una abundante cantidad de viajes fuera del pais, pero como
contrapartida es practicamente nulo el registro de consumos con tarjetas de
crédito, asumiendo en consecuencia que los gastos realizados en esos viajes
se realizaron con fondos o tarjetas de crédito no declarados. Ello por cuanto,
a su entender en el estudio pericial contable no se pudieron determinar
gastos realizados en el exterior, a pesar de que uno de los puntos de pericia
fijado fue el anélisis sobre la existencia de fondos destinados al pago y
consumo en viajes en el exterior del pais. A eso le suma el informe remitido
por LATAM correspondiente a los afios 2019, 2020 y 2021 [obrante a fs. 3131/2
del principal], del cual surge que para la compra de pasajes al exterior se
utilizé dinero en efectivo y tarjetas de crédito no declaradas. También se
refirié al informe remitido por American Express -que hace saber que las
tarjetas de crédito que comienzan con el numero 3717 estan emitidas en
Estados Unidos- y al informe remitido por Prisma Medios de Pago SA -que
hace saber cuales serian los bancos emisores de determinadas tarjetas- [cfr.
paginas 16 y 17 del informe de tarjetas de crédito obrante en el Legajo Patrimonial, Anexo 20].
28°) Que en sus varios descargos el doctor Bento afirmé que
jamés omitié denunciar la existencia de ninguna tarjeta de crédito de su
propiedad y que ha declarado todas sus cuentas bancarias, siendo que
33justamente dichos plasticos se debitan del activo de tales cuentas,
independientemente del numero impreso en ellos, dado que éste puede
variar por diferentes circunstancias tales como pérdida, robo, vencimiento,
etc. Agregd que las no identificadas podrian corresponder a tarjetas de
agencias de viajes, y que no las habia declarado por el simple hecho de que
no le pertenecian.
Expreso que un primer viaje lo realizé utilizando pasajes
canjeados por millas y que en los ultimos afios los adquirié a través de
agencias de viajes; y que habia comenzado ia vincularse con una agencia en
los Estados Unidos y que su operatoria era clejarle el dinero en efectivo cada
vez que viajaba a ese destino. Incluso agregé que en alguna oportunidad
habria dejado unos 1500 délares para cuando se produjere alguna oferta.
Refirio que durante practicamente 10 afos subrogd otros
juzgados, y que el desgaste en la salud que ello provocaba, sumado al
beneficio econdmico que implicaba, motivaran que viajara bastante.
Durante la audiencia de debate, la defensa manifestd que
aquellas tarjetas que se le endilgan al doctor Bento como propias son de las
agencias de viaje y no tienen nada que ver zon él toda vez que no tiene una
cuenta en el exterior, reafirmando asi que silo le pertenecian las declaradas
y que por ello habian solicitado informes -a quien corresponda- para
demostrar que con esas tarjetas se pagarori miles de pasajes de los clientes
de las compafiias de turismo, de los agentes de viaje y que por ello todo se
trata de una confusién (v. vers. est. pags. 45/49).
29°) Que sin pasar por alto la escueta explicacién brindada por
la esforzada defensa, limitandose a la gereralizacién del método de pago
utilizado por muchas compafiias de turismo extranjeras, es aun mas notable
la inconsistencia que al respecto ha demostrado el propio juez acusado,
quien en lugar de intentar brindar mayores precisiones orientadas a justificar
tal cantidad de omisiones, mantuvo aquella débil explicacién, pero sin
asumir ninguna responsabilidad propia ni brindar una aclaracién concreta.
34NGEL Man. cic By
Jurado de Enjuiciamiente de Magisradeéde la Navin
Ello por cuanto en el informe pericial contable se destacé que
entre los afios 2010 al 2020 -periodo dentro del cual el doctor Bento y su
familia realizaron una gran cantidad de viajes- "no se cuenta con
informacion de erogaciones por pago de hoteles u hospedajes, traslados,
alimentos, seguros, recreacién, alquiler de autos u otros gastos que pueda
demandar una salida del pais”.
30°) Que sin adentrarnos en especulaciones referidas al origen y
evolucién del patrimonio del doctor Bento, pues ello no le compete a este
Tribunal, lo cierto es que las erogaciones a las que especificamente hizo
referencia la Acusacién, es decir la financiacién de una llamativa cantidad de
viajes al exterior del juez y los integrantes de su familia, alojandose en
lujosos hoteles 0 dentro de parques de diversién reconocidos como
significativamente costosos, no se ven reflejados de ningun modo en sus
declaraciones juradas, no obstante tener por descontado que han debido
significar importantes desembolsos monetarios.
Para mayor precisién, del cotejo del informe remitido por el
Department of Homeland Security/Homeland Security Investigations -con
sede en la Embajada de los Estados Unidos de América en Buenos Aires-
(incorporado el 8 de junio de 2021 a la causa 13854/20 ~Anexo 20-) con los
presentados por la Direccién Nacional de Migraciones, la Policia de Seguridad
Portuaria y LATAM, surge que en el periodo de seis afios -de enero de 2015
a enero de 2021- el doctor Bento realiz6 la cantidad aproximada de treinta y
seis viajes, generalmente a los Estados Unidos de América (Orlando, Miami,
Washington DC, Las Vegas), y también a otros destinos turisticos tales como
Aruba, Canciin, Dubai, Atenas y Barcelona. La mayor parte de los viajes los
realizé en compafiia de su esposa e hijos. Estos gastos debieron ser lo
suficientemente abultados como para impactar financieramente en el
patrimonio que debe declararse anualmente.
3531°) Que por lo detallado, no se logra concebir una explicacién
aceptable en cuanto a la inexistencia de imformacién en las declaraciones
juradas patrimoniales del magistrado sobre el movimiento de importantes
sumas de dinero en moneda extranjera, ya sea en efectivo o mediante el
uso de tarjetas de crédito, para hacer frente a los emolumentos realizados
ante las susodichas agencias de viajes para que éstas a su vez adquirieran
los paquetes turisticos (aéreos, estadias, transporte, etc.), asi como para los
demés gastos en el exterior.
Notese, como ejemplo, que en el afio 2015 efectué nueve viajes
a los Estados Unidos, en su mayoria con su familia, por un plazo aproximado
de sesenta y tres dias (con hospedajes en Orlando, Miami y Las Vegas,
alguno de ellos de renombre y fama), lo cual va de suyo que -no obstante
las provechosas oportunidades a las que ha aludido el magistrado- le habria
demandado un considerable desembolso de dinero en moneda extranjera.
Sin embargo, en sus declaraciones juradas publicas ello no se vio reflejado,
dado que en la del afio 2016 (correspondiente al afio posterior en que realiz6
aquellos viajes) habia duplicado la cantidadi de délares que habia declarado
en su informaci6n publica respecto del afio 2014, sin ofrecer una explicacién
contable sobre tal incremento (cfr. anexo 13). Similar situacién en mayor o
menor medida se suscita respecto de la declaracién del afio 2018, referida al
ejercicio 2017, donde realizé cinco viajes a los Estados Unidos (con su
esposa e hijos) por una estadia aproximada de cuarenta y dos dias.
La situacién més llamativa se puede observar respecto a su
declaracién jurada del afio 2020, ya que en el 2019 realiz6 siete viajes al
exterior, permaneciendo por un lapso de ochenta dias, de los cuales en cinco
oportunidades lo hizo con su esposa e hijos en suelo norteamericano y las
restantes, en forma individual, a Barcelona y Atenas. Sin perjuicio de ello,
en aquella declaracién obligatoria consign6 una cifra en moneda extranjera
que quintuplicaba la tenencia declarada, justamente respecto del periodo en
que efectué dichos viajes (afio 2019), incremento que tampoco se vio
aclarado suficientemente en sus informaciones publicas o privadas.
36La explicacién intentada por el magistrado en cuanto a que sélo el
primer viaje lo realiz6 mediante el canje de millas y que para el resto su
metodologia era abonar con dinero en efectivo directamente a las agencias
de viaje radicadas en EEUU no logra esclarecer tales omisiones sobre
significativos desplazamientos pecuniarios que importaban la adquisicién,
tenencia y transporte de divisas al exterior -sin contar por supuesto los
desembolsos en alimentacién, esparcimiento y otros inherentes a ese estilo
de vacaciones- ya sea para depositar en agencias o pagos a empresas de
viaje y/o hoteleria etc., que representaban, a no dudarlo, desembolsos muy
superiores a los que podrian denominarse gastos comunes y
por ello relevantes para reflejar de algun modo su real situacién patrimonial.
32°) Que la finalidad esencial perseguida por la legislacién
vigente en cuanto a que, como bien ha expresado la parte acusadora, de lo
que se trata es de tutelar “.../a transparencia en la funcién publica", asi
como "... e/ interés social de que /a situacién patrimonial de los funcionarios
publicos sea clara..." (con cita de Andrés José D’ Alessio; Cédigo Penal de
la Nacién, La Ley, 2011, pag. 1345), no fue observada por el magistrado en
juicio, toda vez que podria haberlo aclarado en algun item de los anexos
reservados de la Declaracién Jurada Patrimonial Integral, como por ejemplo
el referido a “Dinero en efectivo, depésitos en banco y otras entidades
financieras, en el pais o en el extranjero", o bien en el apartado
"Observaciones" que también prevé la planilla.
33°) Que una de las condiciones esenciales de los magistrados
reside en la transparencia de sus actos, ya sean jurisdiccionales 0 no -salvo
en el ambito exclusivo de su intimidad- y en este caso los esparcimientos,
viajes o cualquier actividad que impliquen movimientos financieros
significativos en el modo de vida o acervo personal del juez debieron ser por
élaclarados con la mayor justificacién y precision posible en las
declaraciones juradas patrimoniales obligatorias para los magistrados y
37funcionarios del Poder Judicial de la Nacién. Cuestién que el doctor Bento no
ha cumplido al actuar con tanta desprolijidad y negligencia, dejando asi un
tendal de interrogantes sin respuestas sobnz confusas operaciones que ha
conducido a un estado de sospecha inadmisittle para un juez.
Sumado a ello, debe advertirse que los argumentos defensivos
en este aspecto no se encuentran avalados por ninguna documentacién 0 al
menos referencia de las supuestas agencias de viaje a las cuales les
entregaba en persona y en efectivo activos suficientes como para
que solventaran en su nombre los gastos de pasajes y hospedajes en los
Estados Unidos.
34°) Que no obstante la vacuidad de la declaracion testifical
realizada por el denominado experto en turismo, contador Juan José
Dominicz -quien trabajé en una compafiia local entre los meses de agosto y
diciembre de! afio 2019-, en la audiencia del dia 27 de septiembre del
corriente pudo obtenerse cierta informacién relevante para el caso.
En primer lugar, ratificando lo detallado en su informe, manifesto
que, segun su experiencia, en la practica -sobre todo en servicios al
exterior- el cliente puede operar con un medio de pago y la compafiia con
otro, 0 sea, un cliente puede comprar o adquirir su servicio con un medio de
pago y ello no significa que la compafiia cancele hacia el proveedor con el
mismo medio. Al ser interrogado, explicé que “lo que se factura son los
servicios. El movimiento de fondos se recepciona y se emite un recibo, no
una factura. Son dos cuestiones distintas. La que se factura es el servicio. El
medio de pago son los fondos y eso se cancela con un recibo.” (cfr. version
estenogréfica de la audiencia sefialada). Aclaré que el recibo que se extiende
por el pago del cliente se encuentra numerado y se registra en la
contabilidad de la compafia.
Agregé que al adquirente se le extiende una factura dependiendo
de los servicios que contrate, dado que a veces no es sdlo el aéreo, sino
también el hospedaje y el terrestre, todo lo cual se incluye en la misma
factura.
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