Derecho Penal II
Derecho Penal II
Derecho Penal II
DESARROLLO PRÁCTICO DE
ANÁLISIS SISTEMÁTICO DEL DELITO DE
ROBO AGRAVADO EN DEPENDENCIA DE LUGAR
HABITADO
PRESENTAN:
RIVERA LEYVA ANDREA
ROSAS RUÍZ REYNA ISABEL
ALUMNAS DE SEGUNDO GRADO
De la carrerea de licenciado en derecho
GRUPO: 2-1
1
mismos que aparecen protegidos, en los términos de contenido preceptivo, o
prohibitivo contenido en la misma ley. El tipo penal es el instrumento legal
lógicamente necesario y de naturaleza predominante descriptiva, que sirve para
individualizar conductas humanas, que recogidas en la ley se les conoce como
delitos.
El tipo es el contenido medular de la norma; es la descripción de la conducta
prohibida u ordenada, prevista en todo su ámbito situacional por el legislador; en la
previsión legal que individualiza la conducta humana penalmente relevante; es, en
síntesis, la fórmula legal que individualiza las conductas prohibidas por la ley penal
para la protección de bienes jurídicos y que aparecen recogidas en todos y cada
uno de los artículos del Libro Segundo del código penal mexicano”.1
1
Malo Camacho, Gustavo, Derecho penal mexicano, México, editorial Porrúa, séptima edición 2013,
p. 295
2
II. Delito (nombre específico)
Robo agravado por la circunstancia de lugar habitado (Robo en lugar habitado).
III. Elementos esenciales del tipo (elementos positivos y negativos del tipo).
3.1 Conducta.
Pealísticamente por CONDUCTA se entiende, el comportamiento positivo o negativo
del ser humano. Para el derecho penal solamente el ser humano puede tener
atribuciones y obligaciones de carácter legal, por lo tanto su comportamiento será
regulado por el derecho penal cuando ese comportamiento lesione bienes jurídicos,
cuya función la protección de los mismos.
Griselda Amuchategui define a la conducta como “el primer elemento que el delito
requiere para existir, también es conocido como acción, hecho, acto o actividad. La
2
Carrara, Francesco, Programa de derecho criminal, Colombia, editorial Temis, segunda edición
1996, p.13
3
conducta es un comportamiento humano voluntario activo o negativo, que produce
un resultado. Ante el derecho penal la conducta puede manifestarse de dos formas,
de acción y omisión. La conducta puede realizarse mediante un comportamiento o
varios”.3
En este sentido la conducta constituye el elemento base en la estructura del tipo
penal y se traduce en aquel comportamiento que el ser humano exterioriza, no
puede haber delito sin la existencia de una conducta en cualquiera de sus formas.
Raúl Zaffaroni define a la conducta como un “hecho humano voluntario, por
voluntario se entiende, el querer activar, el querer que cambia algo”.4
Pavón Vasconcelos define a la acción como “el movimiento corporal realizado por el
sujeto en forma voluntaria para la consecución de un fin”5
3
Amuchategui Requena, Griselda, Derecho penal, México, editorial Oxford, edición tercera 2005,
p.53
4
Zaffaroni, Eugenio Raúl, Manual de derecho penal, México, editorial Cárdenas editor y distribuidor,
edición segunda 1994, p.360
5
Pavón Vasconcelos, Francisco, Manual de derecho penal mexicano, México, editorial Porrúa,
décima sexta edición 2002, p.226
6
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P. 55
4
En base en lo anterior podemos identificar que el delito de robo con circunstancias
de lugar habitado presenta conducta de ACCIÓN, puesto que “el robo se realiza a
través de movimientos corporales y materiales, es decir, el ladrón ocupa conductas
positivas para la perpetración del hecho delictivo”.7 Requiere de una actividad, de un
necesario hacer, requiere un movimiento corporal dirigido por la voluntad para
producir el resultado.
7
Lopez Betancourt, Eduardo, Delitos en particular I, México, editorial Porrúa, décima edición 2004,
p.260
5
Según Pavón el delito unisubsistente es “cuando la acción se agota en un solo acto
y plurisubsistente cuando la acción requiere para su agotamiento de varios actos”.8
Amuchategui dice que “es unisubsistente cuando requiere para su integración, de un
solo acto; y es plurisubsistente cuando el delito se integra por la concurrencia de
varios actos”9
Encontramos que el delito analizado es PLURISUBSISTENTE ya que en los tipos
penales que se refieren al robo agravado se establece o exige la comisión de dos o
más actos para la configuración del delito.
En este delito es necesario que además del apoderamiento de la cosa, se realice el
acto de introducirse al lugar habitado.
8
Pavón Vasconcelos, Francisco, Op. Cit. P.267
9
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.65
10
Ibídem.
6
hasta que la realización de una nueva conducta da por terminado ese estado de
antijuridicidad generando la terminación del delito.
Continuados. Se trata, aquí, de una ficción jurídica, en donde diversas conductas,
cometidas en tiempos diversos. Cada una de las cuales lesiva de un específico bien
jurídico protegido, aparecen reguladas por el derecho como una sola conducta, por
razón de la unidad en la intención criminosa del autor”.11
11
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit. P. 314, 315.
12
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P. 64.
7
del hecho típico, quiere realizarlo o acepte la aparición del resultado previsto por la
descripción legal.
El robo es doloso según López Betancourt “Cuando el agente tiene toda la intención
de robar algún bien y lo realiza deseando apropiarse de este”13
13
Lopez Betancourt, Eduardo, Op. Cit. P. 261
14
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.57.
15
Zaffaroni, Eugenio Raúl, Op. Cit. P. Anexos
8
El estado sonambúlico es similar al sueño, distinguiéndose de éste en que el sujeto
deambula dormido. Hay movimientos corporales inconscientes y por ello
involuntarios.
El hipnotismo consiste esencialmente en una serie de manifestaciones del sistema
nervioso producidas por una causa artificial. Tales manifestaciones pueden ir, desde
un simple estado de somnolencia, hasta uno sonambúlico, pasando por diversas
fases en las cuales se acentúa, en sus características externas, el grado de
hipnotismo.
El estado sonambúlico del hipnotizado se identifica por la ausencia del dolor y el
olvido de lo sucedido durante el sueño hípnico, cuando se despierta de él.
Alteración morbosa de la conducta, Pavón los menciona como los actos reflejos y
los define como: los movimientos corporales en los que la excitación de los nervios
motores no están bajo el influjo anímico, sino que es desatada inmediatamente por
un estímulo fisiológico corporal, esto es, en los que un estímulo, subcorticalmente y
sin intervención de la conciencia pasa de un centro sensorio a un centro motor y
produce movimiento. En los actos reflejos hay, como en las demás situaciones
examinadas movimientos corporales mas no la voluntad necesaria para integrar una
conducta”.16
16
Pavón Vasconcelos Op. Cit. P.295 299
17
Lopez Betancourt, Eduardo, Op. Cit.P. 265
9
Artículo 26. Se excluye el delito cuando:
I. La actividad o inactividad del agente que produjo el resultado son
involuntarios.
4. TIPICIDAD
Es un elemento positivo en la estructura del tipo penal, la cual significa adecuar la
conducta al tipo, es decir, el comportamiento exteriorizado por una persona debe
encuadrar exactamente con una descripción legal.
18
Pavón Vasconcelos, Francisco, Op. Cit. P.301
19
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.61
20
Ibídem.
10
Clasificación
4.1 En función de su estructura
El delito puede ser simple, “cuando el delito cometido solo consta de una lesión. Es
complejo cuando el delito en su estructura consta de más de una afectación y da
lugar al surgimiento de un ilícito distinto y de mayor gravedad”21, normalmente a
esto se le conoce como agravantes.
El delito que analizamos es COMPLEJO, puesto que, como su nombre nos lo
indica, es robo AGRAVADO en dependencia de lugar habitado. Como mencionamos
al iniciar este análisis, el delito es completado a raíz de dos preceptos (Art. 201 y
205 II del Código Penal del Estado de Sinaloa). Su formación o estructura está
formado por un tipo básico con características diferentes de un tipo circunstanciado.
21
Amuchategui Requena, Griselda, Derecho penal, Op. Cit. P. 64.
22
Pavón Vasconcelos, Francisco, Op. Cit. P.236
23
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P. 63
11
Así, tenemos que en el delito analizado es MATERIAL, porque se percibe la
afectación del cambio físico del bien jurídico, hay una transformación en el mundo
material que se produce como consecuencia de la conducta del hombre.
24
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit. P.317
25
Lopez Betancourt, Eduardo, Op. Cit. P. 267
12
4.4 En razón a los sujetos
a). Por el número de sujetos:
Los tipos penales pueden ser clasificados por el número como tipos unisubjetivos y
plurisubjetivos.
Los tipos unisubjetivos son aquellos en cuya descripción al momento de
individualizar la conducta esta se relaciona con un probable autor, para lo cual utiliza
al principio el pronombre personal, el pronombre ÉL, es el que se utiliza en la
descripción y resulta unisubjetivo porque lo hace de manera singular utilizando el
término “el que” aunque también puede utilizar la palabra “quien”.
Los tipos plurisubjetivos son aquellos en los que se exige la participación de más de
un sujeto, para que pueda realizarse el tipo penal.
26
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.65
13
Según Malo Camacho los delitos pueden ser:
“Delicta propia. Requieren de una calidad específica en la persona del sujeto activo,
que lo coloca en una determinada especial relación con el bien jurídico protegido.
Delicta comunia. Son aquellos en donde la ley no exige una determinada calidad en
el sujeto activo, por lo que se les refiere como delitos de sujeto activo innominado, y
en donde el texto legal frecuentemente los refiere como “el que”, “quien”, etc.”27
Para Zaffaroni, “Los tipos que necesitan acudir a una norma de carácter general se
llaman tipos abiertos, por oposición a los tipos cerrados, en que sin salirse de los
elementos de la propia ley penal en el tipo, puede individualizarse perfectamente la
conducta prohibida”.28
De lo anterior concluimos que, el delito de robo agravado en dependencia de lugar
habitado es CERRADO, ya que en el Art. 205 II del Código penal de Sinaloa existe
la individualización de la conducta y sanción sin necesidad de recurrir a otra.
27
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit. P.317
28
Zaffaroni, Eugenio Raúl, Op. Cit. P. 395
14
b) Según contenga referencias o circunstancias.
En la estructura del tipo las circunstancias son aquellos elementos no esenciales en
el delito, pero que cuando concurren sirven para agravar o atenuar la pena.
Amuchategui dice que, “Se entiende por tipos circunstanciados el tipo básico
adicionado de otros aspectos o circunstancias que modifican su punibilidad, de
manera que lo agravan o atenúan; además, por ejemplo, robo en casa habitación,
con una pena agravada, según el lugar donde se cometa”.29
ARTÍCULO 205. A las penas previstas en los dos artículos anteriores, se aumentará
de dos a diez años de prisión, si el robo se realiza:
II. En lugar cerrado, habitado o destinado para habitación o sus dependencias,
comprendiendo no sólo los que están fijos en la tierra, sino también los móviles
Malo Camacho describe a los tipos de formulación libre como “los tipos en que la
conducta típica que causa el resultado no aparece descrita de manera específica en
el precepto legal, es decir, que el resultado típico puede ser cometido por cualquier
conducta que sea idónea al efecto desde el punto de vista causal.
29
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.67
15
Los de formulación casuística a diferencia de los anteriores, son aquellos en donde
la ley penal describe de manera precisa y detallada la conducta y la caución del
resultado, en su caso”.30
Con esto concluimos que el delito analizado, al no contener elementos comisivos es
DE FORMULACIÓN LIBRE, ya que la descripción legal no nos indica los medios a
través de los cuales se puede realizar la conducta.
Para Zaffaroni, “Hay tipos penales que no solo contienen elementos descriptivos,
sino también elementos normativos, es decir, elementos para cuya precisión se
hace necesario acudir a una valoración ética o jurídica.”31
Por otro lado, Malo Camacho dice que, “Los elementos normativos sólo pueden ser
comprendidos a través de un cierto proceso de valoración socio-cultural, o bien de
carácter estrictamente jurídico, y de su reconocimiento depende la existencia del
tipo delictivo de que se trate.”32
De acuerdo a sus elementos normativos, los tipos penales pueden ser normales o
anormales.
Son normales cuando no contengan elementos normativos, y anormales cuando sí
contengan.
El delito de robo es un delito ANORMAL ya que contiene elementos que necesitan
una valoración, como “cosa ajena mueble”, “sin derecho”, “sin consentimiento”,
“arreglo a la ley”, “lugar habitado”, “dependencias”, “móviles”, etc.
4.7 Tipicidad legal (Parte objetiva)
4.7.1 Referencias o circunstancias
Malo Camacho nos dice que “los tipos penales establecen en su texto la conducta
social deseada, dentro del ámbito situacional en que la propia voluntad social lo
determina. Así, se manifiestan las circunstancias de lugar, tiempo, modo y ocasión,
30
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit. P.318
31
Zaffaroni, Eugenio Raúl, Op. Cit. P.422
32
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit. P.327
16
como también las referencias a los medios a que aluden algunos tipos penales y
que, en su caso, tendrá que reunir la conducta para ser típica las siguientes
circunstancias:
Circunstancias de espacio o lugar. Son las referencias de lugar o espacio vinculadas
con la realización de la conducta típica, a que hacen referencia algunos tipos de la
ley penal.
Circunstancias de tiempo. Son las referencias de tiempo vinculadas con la
realización de la conducta típica a que se contraen algunos tipos de la ley penal.
Circunstancias de modo. Son los aspectos referidos al modo de ejecución de la
conducta, previstos por algunos tipos de la ley penal.
Circunstancias de ocasión. Son referencias que marcan situaciones de ocasión,
vinculadas con la realización de la conducta, exigidos por algunos tipos de la ley
penal.”33
33
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit. P.353
34
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.68
17
El delito desarrollado SÍ TIENE ELEMENTOS DESCRIPTIVOS, y se señalan en la
fracción II del artículo 205.
Amuchategui lo menciona como objeto jurídico y nos dice que “es el interés
jurídicamente tutelado por la ley. El Derecho penal, en cada figura típica (delito),
tutela determinados bienes que considera dignos de ser protegidos.
Todo delito tiene un bien jurídicamente protegido. Recuérdese que justamente en
razón de este criterio, los códigos penales clasifican los delitos en orden al objeto
35
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit. P.340
36
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.39
18
jurídico. Cada título de los códigos agrupa los delitos, atendiendo al bien jurídico
tutelado.”37
4.7.7 Resultado
Para Amuchategui el resultado “es la consecuencia de la conducta; el fin deseado
por el agente y previsto en la ley penal.”38
Para Pavón el resultado “es un efecto de la conducta pero no todo efecto es
relevante para el Derecho, sino los que recoge dentro del tipo penal.”39
Atendiendo al delito de robo y basándonos en lo anterior encontramos que, como
resultado de la conducta en este caso el apoderamiento sin derecho y sin
37
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit., P.40
Tabla 1. Fuente ídem
38
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. p.54
39
Pavón Vasconcelos, Francisco, Op. Cit. P.236
19
consentimiento trae como resultado una AFECTACIÓN, MERMA O MENOSCABO
AL PATRIMONIO.
4.7.8 Sujetos
En derecho penal, se habla constantemente de dos sujetos que son los
protagonistas del mismo: el sujeto activo, que és a quien se le atribuye la ejecución
de la conducta (victimario, imputado, criminal, delincuente); y, el sujeto pasivo, es
aquel que resiente o recibe directamente la conducta ejecutada por el victimario,
extendiéndose este concepto a una tercera persona vinculada a la víctima y a la
cual se le conoce como ofendido, víctima y ofendido son personas diferentes, el
ofendido no recibe directamente la conducta sino que solamente resiente los efectos
nocivos de la conducta.
Zaffaroni nos dice que “El sujeto activo es al autor de la conducta típica,
generalmente puede ser cualquiera, pero en ciertos tipos se requieren caracteres
especiales.”40
Amuchategui señala que, “El sujeto activo es siempre una persona física,
independientemente del sexo, edad, nacionalidad y otras características. Cada tipo
señala las calidades o caracteres especiales que se requieren para ser sujeto activo
(según sea el caso). Nunca una persona moral o jurídica podrá ser sujeto activo de
un delito; cabe mencionar que, en ocasiones, aparentemente es la institución la que
comete un ilícito, pero siempre habrá sido una persona física la que ideó, actuó y,
en todo caso, ejecutó el delito. Solo la persona física puede ser imputable y
capaz.”41
Atendiendo también a Amuchategui “El sujeto pasivo es la persona física o moral
sobre quien recae el daño o peligro causado por la conducta del delincuente. Por lo
general, se le denomina también víctima u ofendido. Estrictamente, el ofendido es
quien indirectamente reciente el delito, por ejemplo los familiares del occiso.
En principio, cualquier persona puede ser sujeto pasivo; sin embargo, dadas las
características de cado delito en algunos caso el propio tipo señala quién puede
serlo y en qué circunstancias.”42
40
Zaffaroni, Eugenio Raúl, Op. Cit. P. 421
41
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.37
42
Ibídem P.38
20
Tomando en cuenta lo anterior y basándonos en el tipo de robo, tipificado en el
Código penal de Sinaloa los sujetos serán SIN CARACTERÍSTICAS ESPECIALES.
43
Ranieri, Silvio, Manual de Derecho penal I, Colombia, editorial Témis, cuarta edición 1975, p. 329.
44
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P. 144
45
Ibídem. P. 54
Cuadro 1. Fuente Amuchategui Requena, Griselda.
21
Causa Efecto
Nexo de causalidad
Conducta Resultado
22
Complicidad. La producen las personas que de manera indirecta ayudan a otras a
cometer un delito.
Instigación. Consiste en incitar a otra persona a cometer el delito.
Consejo. Se instiga a alguien para cometer un delito en beneficio del instigador.
Asociación. Es un convenio que celebran varios sujetos para cometer un delito en
beneficio de todos.”46
En base a la ley penal, en el Código penal del Estado de Sinaloa, artículo 18 se
menciona que:
Son responsables del delito cometido:
I. Los que acuerden o preparen su realización (autoría material);
II. Los que lo realicen por sí (autoría directa);
III. Los que lo realicen conjuntamente (coautoría);
IV. Los que lo lleven a cabo sirviéndose de otro como instrumento (autor
determinador);
V. Los que induzcan dolosamente a cometerlo (instigador);
VI. Los que dolosamente presten ayuda o auxilio a otro para su comisión
(cómplice);
VII. Los que por acuerdo previo auxilien al delincuente con posterioridad a la
ejecución del delito (partícipes); y
VIII. Los que intervengan con otros en su comisión, aunque no conste quién de
ellos produjo el resultado (autoría indeterminada).
46
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P. 115, 116
47
Zaffaroni, Eugenio Raúl, Op. Cit.P. 668
23
Por otro lado, Pavón menciona que “se afirma la existencia de un concurso aparente
de normas penales cuando la solución de un caso concreto parecen concurrir dos o
más normas de uno o varios ordenamientos vigentes en un mismo lugar y tiempo.
el problema consiste en dilucidar cuál norma debe aplicarse con exclusión de las
demás”.48
Con relación al concepto, Cuello Calón se refiere a concurso de leyes afirmando
“existe cuando a una y misma acción son aplicables dos o más preceptos penales
que se excluyen entre si recíprocamente”.49
4.9 Tentativa
La tentativa es la figura típica que aparece cuando en la resolución de cometer un
delito se exteriorizan los actos u omisiones que deberían de producir el resultado,
pero este no aparece por causas ajenas a la voluntad del agente.
Zaffaroni dice que “en el delito doloso no se pena solo la conducta que llega a
realizarse totalmente o que produce el resultado típico, sino que la ley prevé la
punición de la conducta que no llega a llenar todos los elementos típicos, por
quedarse en una etapa anterior de realización. Esta etapa anterior debe haber
alcanzado cierto grado de desarrollo para que pueda considerársela típica, pues de
lo contrario se perdería toda seguridad jurídica. El proceso o camino que va desde
la concepción hasta el agotamiento del delito se llama Iter Criminis.”50
Por otro lado Griselda Amuchategui nos dice que “la tentativa se constituye por los
actos materiales tendientes a ejecutar el delito de modo que este no se produzca
por causas ajenas a la voluntad del agente. Puede ocurrir mediante actos positivos
(hacer) o negativos (abstenciones u omisiones). Es un grado de ejecución que
48
Pavón Vasconcelos, Francisco, Op. Cit. P.175
49
Cuello Calón, Eugenio, Derecho penal I, España, editorial Bosch, edición novena 1963, p.576
50
Zaffaroni, Eugenio Raúl, Op. Cit. P.639
24
queda incompleta por causas no propias del agente y puesto que denota la
intención delictuosa, se castiga.
51
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit, P.44, 45
25
Al respecto López Betancourt, dice que “en el delito de robo se puede presentar la
tentativa acabada e inacabada. Acabada por ejemplo, en el robo de automóvil,
cuando el agente ha preparado todos los medios necesarios para robarlo, pero al
tratar de encenderlo, este no prende por estar descompuesto.
Inacabada, por ejemplo cuando el agente decide robar las joyas que se encuentran
en la caja fuerte de la casa del ofendido; logra entrar a la casa y al momento de
intentar abrir dicha caja, se da cuenta que ha olvidado el instrumento indispensable
para abrirla.”52
52
Lopez Betancourt, Eduardo, Op. Cit. P. 274
53
Zaffaroni, Eugenio Raúl, Op. CIt. P.428, 429
26
Dolo genérico. Es la intención de causar un daño o afectación, o sea, la voluntad
consciente encaminada a producir el delito.”54
Dolo específico. Es la intención de causar un daño con una especial voluntad que la
propia norma exige en cada caso, de modo que deberá ser objeto de prueba.
Dolo indeterminado. Consiste en la intención de delinquir de manera imprecisa, sin
que la gente desee causar un delito determinado; por ejemplo, colocar una bomba
para protestar por alguna situación de índole política: el sujeto sabe que causara
uno o más daños, pero no intención de infligir alguno en particular.
Como ya mencionamos el delito de robo SÍ ADMITE DOLO porque hay una voluntad
dirigida en producir un resultado conociendo las circunstancias objetivas del delito y
queriendo realizarlo.
Zaffaroni nos dice que “todos los tipos dolosos exigen que haya una cierta
congruencia entre sus aspectos subjetivos y objetivos. Esta congruencia no siempre
es de la misma entidad: hay tipos dolosos que requieren únicamente que su aspecto
subjetivo contenga el querer la realización del tipo objetivo, que es el dolo.
54
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit, P.92
55
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit. P.368
27
Por ejemplo, “a la madre que, para ocultar su deshonra, matare a su hijo…”. Aquí, la
voluntad de matar es el dolo pero el tipo subjetivo exige -para que haya infanticidio,
que es como se le denomina a ese delito-, que además del dolo (del querer la
muerte, que es el querer la realización del tipo objetivo), se tenga el propósito de
evitar la deshonra.
En resumen, los tipos subjetivos distintos al dolo son “el algo más” que el dolo.”56
Cuando los tipos penales contienen únicamente el dolo reciben el nombre de tipos
simétricos, y cuando contienen además del dolo, ultra intenciones, reciben el
nombre de tipos asimétricos. Ya que en el delito de robo solo existe el dolo y el
agente no busca con la realización de su conducta obtener ultra intenciones, este
delito NO CONTIENE ELEMENTOS SUBJETIVOS DISTINTOS AL DOLO, y, por lo
tanto, se considera un tipo SIMÉTRICO
5. ATIPICIDAD
Constituye dentro de la teoría del delito la posibilidad de negar la existencia del
delito.
Pavón Vasconcelos define a la atipicidad como, “el aspecto negativo de la tipicidad,
impedimento de la integración del delito, más no equivale a la ausencia del tipo.
Esta supone la falta de previsión en la ley de una conducta o hecho. Hay atipicidad,
en cambio, cuando el comportamiento humano concreto, previsto legalmente en
forma abstracta, no encuentra perfecta adecuación en el precepto por estar ausente
algunos de los requisitos constitutivos del tipo. Atipicidad es, pues, ausencia de
adecuación típica.”57
56
Zaffaroni, Eugenio Raúl, Op. Cit. P.427
57
Pavón Vasconcelos, Francisco, Op. Cit. P.326
58
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.69
28
La atipicidad parte objetiva, cuando falte alguno de los elementos de la descripción
legal.
Malo Camacho nos dice que, “la falta en la conducta típica de cualquiera de los
elementos del tipo será una causa de atipicidad. Así, la falta inicial e indiciaria, de
lesión al bien jurídico típica e indiciaria de violación al deber previsto en la ley penal;
la ausencia del sujeto activo o pasivo del delito; la falta de la conducta y/o en su
caso, del resultado material o del dolo o la culpa, en los términos del ámbito
situacional previsto en la norma, las referencias de tiempo, espacio, ocasión, modo
en relación con los medios; en los tipos que así lo previenen, serán a su vez origen
de atipicidad.”59
La atipicidad parte objetiva la encontramos tipificada en el Código penal del estado
de Sinaloa de la siguiente manera:
59
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit, P.375
60
Ibídem P.391
29
6. ANTIJURIDICIDAD
Significa la contradicción que existe entre la conducta con el orden jurídico, es decir,
una conducta típica se dice que es antijurídica porque choca con el orden jurídico
penal, es decir también que cuando resulta la afectación de un bien jurídico,
producto de un comportamiento no está permitido por alguna causa de justificación.
Hay conductas típicas que se justifican y dejan de ser delito.
Según Amuchategui “la antijuridicidad es lo contrario a derecho. El ámbito penal
precisamente radica en contrariar lo establecido en la norma jurídica”.61
Carnelutti señala: “antijurídico es el adjetivo, en tanto que antijuridicidad es el
sustantivo”, y agrega: “Jurídico es lo que está conforme a derecho”.62
Con esto tenemos que, si la ley penal tutela la vida humana mediante un tipo que
consagra el delito de homicidio, quien comete éste realiza una conducta típica
antijurídica.
El aspecto negativo de la antijuridicidad lo constituyen las causas de justificación,
que son las razones o circunstancias que el legislador consideró para anular la
antijuridicidad de la conducta típica realizada, al estimarla lícita, jurídica o
justificativa. Con esto debe entenderse que la antijuridicidad es lo contrario a
derecho, mientras que lo contrario a la antijuridicidad son las causas de justificación.
61
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.73
62
Carnelutti, Francesco, Teoría general del delito, Madrid ,editorial Reus,1941, págs, 18 y 19
63
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.74
30
legislador que permiten realizar el hecho típico, por razones políticas, sociales y
jurídicas”.64 La doctrina nos menciona algunas causas de justificación:
Legítima defensa. “Un comportamiento adecuado al supuesto de hecho típico no
es antijurídico cuando es necesario para repeler una agresión actual y antijurídica
dirigida contra el autor o contra un tercero”.65
Cumplimiento de un deber. “El cumplimiento de un deber consiste en causar un
daño obrando en forma legítima en cumplimiento de un deber jurídico, siempre que
exista necesidad racional del medio empleado. Deriva del ejercicio de ciertas
profesiones o actividades”.66
Estado de necesidad. “Es una situación de peligro cierto y grave, cuya superación
para el amenazado, hace imprescindible el sacrificio del interés ajeno como único
medio para salvaguardar el propio”67
Consentimiento válido. “Se establece que opera como causa de exclusión del
delito, siempre que concurran diferentes requisitos, como son: que el bien jurídico
sea disponible; que el titular del bien tenga la capacidad jurídica para disponer del
mismo y, además, que el consentimiento sea expreso o tácito y no medir algún
vicio”68
Mandato superior. “La obediencia debida sólo puede ser la obediencia jerárquica,
pues la obediencia reverencial no puede relevarse penalmente a los efectos de
excluir el delito (la obediencia que se le debe al padre por el hijo, al marido por la
mujer, al maestro por el alumno, etc.)”69
Ejercicio de un derecho. “El ejercicio de un derecho, una más de las causas de
justificación previstas en la ley penal es, en verdad, el fundamento general de todas
las legitimantes. Significa, en resumen, el ejercicio de un derecho que se encuentra
fundado y recogido sea en la ley penal o en cualquier otra ley extra penal, o incluso,
en pautas culturales, apoyadas en la costumbre o en expresiones y circunstancias
que pueden originar en un cierto momento tal fundamento”70
64
Muñoz Conde, Francisco, Derecho penal, parte general, España, editorial Bosch 1993, p. 125
65
Daza Gómez, Carlos, Teoría general del delito, México, editorial Flores editor y distribuidor, edición
quinta 2006, p. 118
66
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.83
67
Pavón Vasconcelos, Op. Cit. P. 367
68
González Quintanilla, José Arturo, Derecho penal mexicano, editorial Porrúa, edición quinta 1999,
p.342
69
Zaffaroni, Eugenio Raúl, Op. Cit. P. 596
70
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit. P.426
31
Impedimento legítimo. “Se presentará el impedimento legítimo, cuando no se
pueda cumplir con un deber legal, por cumplir con otro deber de la misma
naturaleza y de mayor entidad. Por esta razón, regularmente se le reconocía como
derivada de la colisión de deberes y así lo entendió la Suprema Corte, cuando
expresó que para que opere el impedimento legítimo, era necesario que aquel que
no ejecutaba lo que la ley ordenaba, obedeciendo la presencia de otra disposición
superior, o más apremiante de la misma ley”.71
71
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit. P.427
32
Cumplimiento de un deber. Se puede presentar cuando una persona ejerce una
función de su cargo, como por ejemplo, cuando la autoridad competente confisca
narcóticos o armas de fuego y las ganancias de la venta de este tipo de mercancías.
7. Culpabilidad
La teoría finalista la define como el juicio de reproche que se le formula al autor del
injusto penal, por no verse motivado en la norma cuando le era exigible hacerla
teniendo en cuenta las concretas circunstancias en las que actuó.
En amplio sentido la culpabilidad ha sido estimada por Jiménez de Asúa como, “el
conjunto de presupuestos que fundamentan la reprochabilidad personal de la
conducta antijurídica”72, comprendiendo por ellos a la imputabilidad, como lo
observa Welzel, “culpabilidad es reprochabilidad, calidad específica de desvalor que
convierte el acto de voluntad en un acto culpable”.73
Amuchategui define a la culpabilidad como, “la relación directa que existe entre la
voluntad y el conocimiento del hecho con la conducta realizada”.74
Para Vela Treviño, “la culpabilidad es el elemento subjetivo del delito y el eslabón
que asocia lo material del acontecimiento típico y antijurídico con la subjetividad del
autor de la conducta”.75
7.1 Elementos
Elementos de la culpabilidad
Según la teoría finalista, la culpabilidad esta embestida de ciertos elementos:
72
Jiménez de Asúa, Luis, Principios de derecho penal: la ley y el delito, Buenos Aires, editorial
Hermes, segunda edición 1954, p.379
73
Welzel, Hans, Derecho penal, Buenos Aires, Depalma editor, 1956, p.149
74
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.91
75
Vela Treviño, Sergio, Culpabilidad e inculpabilidad, México, editorial Trillas, 1985, p.337
33
Es imputable quien goza de salud mental, no se encuentra afectado por sustancias
que alteren su comprensión y tiene la edad que la ley señala para considerar a las
personas con capacidad mental para ser responsables del delito; en la mayoría de
los estados de la República Mexicana és a partir de los 18 años”.76
“La imputabilidad penal significa capacidad para conocer y valorar el deber de
respetar la norma y la capacidad de actuar o de determinarse conforme a dicha
comprensión”.77
“Para la teoría finalista, imputabilidad es capacidad de culpabilidad, entendida como
capacidad del autor:
1. Para comprender lo injusto del hecho, y
2. Para determinar su voluntad conforme a esa comprensión.”78
Para Bustos Ramírez la imputabilidad “es un juicio de incompatibilidad de la
conciencia social de un sujeto en su actuar frente al ordenamiento jurídico”79
76
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit., P.87
77
Gómez Benítez, José Manuel, Derecho penal parte general, España, editorial Civitas S.A, 1987,
P.456
78
Daza Gómez, Carlos, Op. Cit. P.187
79
Bustos Ramírez, Juan, Manual de derecho penal, España, Ariel,tercera edición,1989, p.381
80
Tozzini, Carlos A.. Dolo, error y eximentes putativos, Argentina, editorial Depalma, edición cuarta,
1964, p.146
81
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit. P.545
34
Reunidos estos elementos entonces será posible realizar la reprochabilidad,
resultando culpable y por lo tanto responsable por el resultado producido.
7.2 Inculpabilidad
Amuchategui menciona que, “la inculpabilidad es la ausencia de culpabilidad;
significa la falta de reprochabilidad ante el derecho penal, por faltar la voluntad o el
conocimiento del hecho. Esto tiene una relación estrecha con la imputabilidad; así,
no puede ser culpable de un delito quien no es imputable.”82
Betancourt señala que, “la culpabilidad es el aspecto negativo de la culpabilidad.
Esta se va a dar cuando concurren determinadas causas o circunstancias extrañas
a la capacidad de conocer y querer, en ejecución de un hecho realiza por un sujeto
imputable. La inculpabilidad operará cuando falte alguno de los elementos
esenciales de la culpabilidad, ya sea el conocimiento o la voluntad.”83
82
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.96
83
Lopez Betancourt, Eduardo, Op, Cit. P.234
84
Reynoso Dávila, Roberto, Teoría general del delito, México, editorial Porrúa, 1995, p.177, 178
35
trastornos pasajeros de las facultades mentales que privan o perturban en el sujeto
la facultad de conocer el deber; esto es, aquellas causas en las que si bien el hecho
es tipico y antijuridico, no se encuentre el agente en condiciones de que se pueda
atribuir el acto que perpétuo.”85
Cuello Calón nos dice al respecto que “una conducta no puede considerarse
culpable, cuando al agente, dada las circunstancias de su situación, no puede
exigírsele una conducta distinta de la observada.”88
El artículo 26 del Código penal del estado de Sinaloa recoge los elementos de la
culpabilidad, en las siguientes fracciones:
85
Jiménez de Asúa,Luis, Op. Cit. P.339
86
Malo Camacho, Gustavo, Op. Cit. P.391
87
Daza Gómez, Carlos, Op. Cit. P.227,228
88
Cuello Calon, Eugenio, Op. Cit. P.468
36
mismos efectos, excepto en los casos en que el propio agente haya provocado esa
incapacidad.
X. Se realice el hecho bajo un error invencible respecto a alguno de los elementos
esenciales que integran la descripción legal o que por el mismo error estime el
sujeto activo que su conducta está amparada por una causa de licitud.
XI. Atendiendo a las circunstancias que concurren en la realización de una conducta
antijurídica, no sea racionalmente posible exigir al agente una conducta diversa a la
que realizó.
Punibilidad
Algunos autores consideran la punibilidad como elemento del delito, “en virtud de
que en las leyes el delito se define como el acto u omisión que sanciona la ley
penal. Por tanto, lo determinante para que una conducta sea o no delito, es que sea
punible. Otros autores consideran la punibilidad como consecuencia de que surja el
delito una vez integrado.”89
Ignacio Villalobos excluye la punibilidad como elemento del delito, “es la reacción de
la sociedad o el medio de que esta se vale para tratar de reprimir el delito; es algo
externo al mismo, es su consecuencia ordinaria, “como no es parte de la
enfermedad el uso de una determinada medicina””.90
Para Amuchategui “la punibilidad es la amenaza de una pena que establece la ley,
para, en su caso, ser impuesta por el órgano jurisdiccional, de acreditarse la
comisión de un delito. Cuando se habla de punibilidad, se está dentro de la función
legislativa. Por ejemplo: se está ante la noción de punibilidad cuando el Código
Penal establece la pena para determinado delito”.91
Zaffaroni afirma que “la punibilidad no es un carácter del delito, sino un resultado de
su existencia. Resulta así tautológico definir al delito como “punible”, porque que sea
“punible” es cosa que depende de que sea típico, antijurídico y culpable y de que,
por supuesto, antes que nada, sea conducta.
El problema surge cuando se comprueba que hay casos en que pese a la existencia
de una conducta típica, antijurídica y culpable, no se aplica pena.
89
Reynoso Dávila, Roberto, Op. Cit. P.273
90
Villalobos, Ignacio, Derecho penal mexicano, México, editorial Porrúa, S.A. 1975, p.212
91
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.101
37
Para quienes sostienen que el delito requiere como elemento a la “punibilidad”, no
ofrece dificultades, porque en estos supuestos afirman que existe un elemento de
carácter negativo del delito que llaman “excusas absolutorias” “causas de
justificación”, pero para quienes no es un elemento es un tanto incoherente, porque
estaríamos diciendo que el delito tiene consecuencia la punibilidad, pero que hay
delitos que no son punibles. De aquí que, la voz “punibilidad” tiene dos sentidos que
debemos distinguir claramente:
a) punibilidad puede significar merecimiento de pena, ser digno de pena; en
este sentido todo delito, por el hecho de serlo, es punible;
b) punibilidad puede significar posibilidad de aplicar pena; en este sentido no a
cualquier delito se le puede aplicar pena, es decir, no a todo delito se le
puede dar lo que tiene merecido.”92
38
cuarenta a cien días multa. La pena prevista en esta fracción se aplicará aun
cuando el valor de lo robado no sea mayor de veinte salarios mínimos si el robo se
realiza en alguno de los supuestos previstos en los artículos 204 y 205.
En los casos de las fracciones I y II, si fuere la primera vez que delinque el
inculpado, la autoridad judicial podrá discrecionalmente imponer cualquiera de esas
sanciones o ambas.
93
Reynoso Dávila, Roberto, Op. Cit. P.283
94
Von Liszt, Franz, Tratado de derecho penal, España, Instituto editorial Reus, tercera edición p.
95
Jiménez de Asúa, Luis, Op. Cit. P.11
39
Amuchategui dice que, “la ausencia de condicionalidad objetiva es el aspecto
negativo de las condiciones objetivas de punibilidad. La carencia de ellas hace que
el delito no se castigue.”96
De lo anterior concluimos que en el delito de robo en dependencia de lugar
habitado, pueden o no existir condiciones objetivas de punibilidad, en el caso de no
existir se aplicará lo dispuesto por el Código penal en Título décimo, Delitos contra
el patrimonio, capítulo XII, Disposiciones comunes, artículo 236.
ARTÍCULO 236. En los casos de los delitos previstos por este título, no se aplicará
pena alguna si el sujeto activo espontáneamente restituye el objeto del delito y paga
los daños y perjuicios, o no siendo posible la restitución cubre su valor y los daños y
perjuicios, antes de que la autoridad investigadora tome conocimiento del ilícito,
siempre y cuando sea la primera vez que delinque y el delito no se hubiere cometido
con violencia. Si antes de dictarse sentencia en primera instancia y con los mismos
requisitos del párrafo anterior, el inculpado hace la restitución o cubre el valor, o en
su caso, el producto de los daños y perjuicios correspondientes a ellos, se reducirán
las penas a la mitad de las que corresponderían por el delito cometido. 62 Lo
dispuesto en este artículo, no será aplicable tratándose de delitos en que el agente
sea un servidor público, si se aprovecha del cargo para cometerlo.
Como comentario final a este gran tema de los elementos del delito, sólo restaría
destacar la importancia del adecuado manejo de los mismos. Conocer, identificar y
distinguir cada uno de los elementos del delito y sus correspondientes aspectos
negativos harán posible no solo el conocimiento teórico que servirá para reconocer
cuando estemos en presencia de un delito y no confundirlo con otro, sino también,
en la práctica y desde el punto de vista del Derecho procesal penal, nos será útil
para saber si se presentan los elementos del tipo penal o cuerpo del delito.
96
Amuchategui Requena, Griselda, Op. Cit. P.105, 106.
40
BIBLIOGRAFÍA
Malo Camacho, Gustavo, Derecho penal mexicano, México, editorial Porrúa, séptima
edición 2013
Carrara, Francesco, Programa de derecho criminal, Colombia, editorial Temis, segunda
edición 1996
Amuchategui Requena, Griselda, Derecho penal, México, editorial Oxford, edición tercera
2005,
Zaffaroni, Eugenio Raúl, Manual de derecho penal, México, editorial Cárdenas editor y
distribuidor, edición segunda 1994
Pavón Vasconcelos, Francisco, Manual de derecho penal mexicano, México, editorial
Porrúa, décima sexta edición 2002
López Betancourt, Eduardo, Delitos en particular I, México, editorial Porrúa, décima
edición 2004
Ranieri, Silvio, Manual de Derecho penal I, Colombia, editorial Témis, cuarta edición 1975
Código Penal Para el Estado de Sinaloa.
Cuello Calón, Eugenio, Derecho penal I, España, editorial Bosch, edición novena 1963
Carnelutti, Francesco, Teoría general del delito, Madrid, editorial Reus, 1941
Muñoz Conde, Francisco, Derecho penal, parte general, España, editorial Bosch 1993
Daza Gómez, Carlos, Teoría general del delito, México, editorial Flores editor y
distribuidor, edición quinta 2006
González Quintanilla, José Arturo, Derecho penal mexicano, editorial Porrúa, edición
quinta 1999
Jiménez de Asúa, Luis, Principios de derecho penal: la ley y el delito, Buenos Aires,
editorial Hermes, segunda edición 1954,
Welzel, Hans, Derecho penal, Buenos Aires, Depalma editor, 1956
Vela Treviño, Sergio, Culpabilidad e inculpabilidad, México, editorial Trillas, 1985
Gómez Benítez, José Manuel, Derecho penal parte general, España, editorial Civitas S.A,
1987
Bustos Ramírez, Juan, Manual de derecho penal, España, Ariel, tercera edición, 1989
Tozzini, Carlos A.. Dolo, error y eximentes putativos, Argentina, editorial Depalma, edición
cuarta, 1964
Reynoso Dávila, Roberto, Teoría general del delito, México, editorial Porrúa, 1995
Villalobos, Ignacio, Derecho penal mexicano, México, editorial Porrúa, S.A. 1975
Von Liszt, Franz, Tratado de derecho penal, España, Instituto editorial Reus, tercera
edición
Legislaciones.
41