Técnicas de Auditoría
Técnicas de Auditoría
Técnicas de Auditoría
Las técnicas de auditoría son los métodos prácticos de investigación y prueba que el
contador público utiliza para comprobar la razonabilidad de la información financiera que
le permita emitir su opinión profesional.
Las técnicas de auditoría son las siguientes:
1.- ESTUDIO GENERAL
Apreciación sobre la fisonomía o características generales de la empresa, de sus estados
financieros de los rubros y partidas importantes, significativas o extraordinaria. Esta
apreciación se hace aplicando el juicio profesional del Contador Público, que basado en
su preparación y experiencia, podrá obtener de los datos e información de la empresa que
va a examinar, situaciones importantes o extraordinarias que pudieran requerir atención
especial. Por ejemplo, el auditor puede darse cuenta de las características fundamentales
de un saldo, por la simple lectura de la redacción de los asientos contables, evaluando la
importancia relativa de los cargos y abonos anotados. En esta forma semejante, el auditor
podrá observar la existencia de operaciones extraordinarias, mediante la comparación de
los estados de resultados del ejercicio anterior y del actual. Esta técnica sirve de
orientación para la aplicación antes de cualquier otra.
El estudio general, deberá aplicarse con cuidado y diligencia, por lo que es recomendable
que su aplicación la lleve a cabo un auditor con preparación, experiencia y madurez, para
asegurar un juicio profesional sólido y amplio.
2.- ANÁLISIS
Clasificación y agrupación de los distintos elementos individuales que forman una cuenta
o una partida determinada, de tal manera que los grupos constituyan unidades
homogéneas y significativas.
El análisis generalmente se aplica a cuentas o rubros de los estados financieros para
conocer cómo se encuentran integrados y son los siguientes:
a) Análisis de saldos
Existen cuentas en las que los distintos movimientos que se registran en ellas son
compensaciones unos de otros, por ejemplo, en una cuenta de clientes, los abonos por
pagos, devoluciones, bonificaciones, etc., son compensaciones totales o parciales de los
cargos por ventas. En este caso, el saldo de la cuenta está formado por un neto que
representa la diferencia entre las distintas partidas que se registraron en la cuenta. En
este caso, se pueden analizar solamente aquellas partidas que forman parte del saldo de
la cuenta. El detalle de las partidas residuales y su clasificación en grupos homogéneos y
significativos, es lo que constituye el análisis de saldo.
b) Análisis de movimiento
En otras ocasiones, los saldos de las cuentas se forman no por compensación de
partidas, sino por acumulación de ellas, por ejemplo, en las cuentas de resultados; y en
algunas cuentas de movimientos compensados, puede suceder que no sea factible
relacionar los movimientos acreedores contra los movimientos deudores, o bien. Por
razones particulares no convenga hacerlo. En este caso, el análisis de la cuenta debe
hacerse por agrupación, conforme a conceptos homogéneos y significativos de los
distintos movimientos deudores y acreedores que constituyen el saldo de la cuenta.
3.- INSPECCION
Examen físico de los bienes materiales o de los documentos, con el objeto de cerciorarse
de la existencia de un activo o de una operación registrada o presentada en los estados
financieros.
En diversas ocasiones, especialmente por lo que hace a los saldos del activo, los datos
de la contabilidad están representados por bienes materiales, títulos de crédito u otra
clase de documentos que constituyen la materialización del dato registrado en la
contabilidad.
En igual forma, algunas de las operaciones de la empresa o sus condiciones de trabajo,
pueden estar amparadas por títulos, documentos o libros especiales, en los cuales, de
una manera fehaciente quede la constancia de la operación realizada. En todos estos
casos, puede comprobarse la autenticidad del saldo de la cuenta, de la operación
realizada o de la circunstancia que se trata de comprobar, mediante el examen físico de
los bienes o documentos que amparan el activo o la operación.
4.- CONFIRMACIÓN
Obtención de una comunicación escrita de una persona independiente de la empresa
examinada y que se encuentre en posibilidad de conocer la naturaleza y condiciones de la
operación y, por lo tanto, confirmar de una manera válida.
Esta técnica se aplica solicitando a la empresa auditada que se dirija a la persona a quien
se pide la confirmación, para que conteste por escrito al auditor, dándole la información
que se solicita y puede ser aplicada de diferentes formas:
Positiva. - Se envían datos y se pide que contesten, tanto si están conformes como si no
lo están. Se utiliza este tipo de confirmación, preferentemente para el activo.
Negativa. - Se envían datos y se pide contestación, sólo si están inconformes.
Generalmente se utiliza para confirmar pasivo o a instituciones de crédito.
5.- INVESTIGACIÓN
Obtención de información, datos y comentarios de los funcionarios y empleados de la
propia empresa.
Con esta técnica, el auditor puede obtener conocimiento y formarse un juicio sobre
algunos saldos u operaciones realizadas por la empresa. Por ejemplo, el auditor puede
formarse su opinión sobre la contabilidad de los saldos de deudores, mediante
informaciones y comentarios que obtenga de los jefes de los departamentos de crédito y
cobranzas de la empresa.
6.- DECLARACIÓN
Manifestación por escrito con la firma de los interesados, del resultado de las
investigaciones realizadas con los funcionarios y empleados de la empresa.
Esta técnica, se aplica cuando la importancia de los datos o el resultado de las
investigaciones realizadas lo ameritan.
Aun cuando la declaración es una técnica de auditoría conveniente y necesaria, su validez
está limitada por el hecho de ser datos suministrados por personas que participarlo en las
operaciones realizadas o bien, tuvieron injerencia en la formulación de los estados
financieros que se está examinando.
7.- CERTIFICACIÓN
Obtención de un documento en el que se asegure la verdad de un hecho, legalizado por
lo general, con la firma de una autoridad.
8.- OBSERVACIÓN
Presencia física de cómo se realizan ciertas operaciones o hechos.
El auditor se cerciora de la forma como se realizan ciertas operaciones, dándose cuenta
ocularmente de la forma como el personal de la empresa las realiza. Por ejemplo, el
auditor puede obtener la convicción de que los inventarios físicos fueron practicados de
manera satisfactoria, observando cómo se desarrolla la labor de preparación y realización
de los mismos.
9.- CALCULO
Verificación matemática de alguna partida.
Hay partidas en la contabilidad que son resultado de cómputos realizados sobre bases
predeterminadas. El auditor puede cerciorarse de la corrección matemática de estas
partidas mediante el cálculo independiente de las mismas.
En la aplicación de la técnica del cálculo, es conveniente seguir un procedimiento
diferente al ampliado originalmente en la determinación de las partidas. Por ejemplo, el
importe de los intereses ganados originalmente calculados sobre la base de cómputos
mensuales sobre operaciones individuales, se puede comprobar por un cálculo global
aplicando la tasa de interés anual al promedio de las inversiones del periodo.
PROCEDIMIENTOS DE AUDITORÍA
Los procedimientos de auditoría consisten en la ejecución de evaluaciones de la
información financiera. También incluyen la investigación de la existencia de coherencia
entre las variaciones presentadas y otra información relevante, o si dichas variaciones
difieren de los valores esperados en un importe significativo.
Procedimientos analíticos
Los procedimientos analíticos consisten en la realización de evaluaciones de la
información financiera mediante el análisis de las relaciones que deben existir entre los
datos financieros y los no financieros.
Las pruebas sustantivas se usan para determinar si existen errores en el registro de los
hechos económicos que puedan afectar los saldos reflejados en los estados financieros y,
por ende, la opinión por parte del auditor.
Procedimientos sustantivos de acuerdo con las NIAs
Procedimientos sustantivos, significa pruebas realizadas para obtener evidencia de
auditoría para detectar representaciones erróneas de importancia en los estados
financieros, y son de dos tipos:
Riesgos de auditoría
Riesgos inherentes
Los riesgos inherentes son aquellos propios de la naturaleza de la entidad y que son
independientes de su sistema de control interno. En otras palabras, son los riesgos que se
encuentran presentes en la entidad antes de considerar las actividades de control
establecidas por la gerencia para mitigarlos.
En la medida en que el auditor conozca cuáles son los riesgos inherentes de la entidad,
tendrá mayor facilidad para planear la auditoría y decidir dónde concentrará sus
esfuerzos.
Cuando el auditor conoce qué áreas de los estados financieros presentan un mayor riesgo
inherente, se puede concentrar en efectuar una mayor cantidad de procedimientos de
auditoría que le permitan mitigar dichos riesgos.
Para evaluar cuáles son los riesgos inherentes de la auditoría, es necesario que el auditor
obtenga un conocimiento de la entidad que le permita analizar, de acuerdo con el sector al
que esta pertenece y las operaciones que realiza, cuáles son las áreas que podrían tener
mayor riesgo de incorrecciones.
Riesgo de control
Las entidades deben establecer actividades de control que les permitan prevenir, detectar
y corregir las desviaciones que se presentan en sus procedimientos. Dichas actividades
de control deben apuntar a mitigar los principales riesgos a los que se expone la entidad.
Pues bien, el riesgo de control hace referencia a la probabilidad que existe de que esos
controles no permitan detectar y corregir los errores a tiempo.
Dicho de otra manera, el riesgo de control es la probabilidad de que los controles de la
entidad fallen.
Entre más eficaces sean los controles de la entidad, menor será el riesgo de control y, por
tanto, el auditor podrá establecer una menor cantidad de procedimientos de auditoría.
Por el contrario, cuando el riesgo de control sea alto, el auditor deberá programar
mayores procedimientos de auditoría que le permitan mitigar esos riesgos.
Al desarrollar procedimientos de auditoría, el auditor disminuye el riesgo de control de la
entidad, lo que le permite ganar más confianza sobre la evidencia obtenida.
Riesgo de detección
El riesgo de detección está relacionado con la posibilidad de que los procedimientos de
auditoría no detecten los errores.
Siempre hay posibilidades de que el auditor no detecte el 100 % de los errores, y por eso
siempre existirá riesgo de detección, aunque sea mínimo.
Por lo anterior, el auditor debe establecer cuál es el riesgo mínimo de detección que
aceptará, el cual debe ser aquel que le permita asegurar que los estados financieros no
contienen errores importantes.
Materialidad o importancia relativa en la auditoría: conozca las claves de la NIA 320
La NIA 320 brinda algunas herramientas para determinar si una partida de los estados financieros
tiene importancia relativa para efectos de la ejecución del encargo de auditoría. En este editorial
mencionamos las claves que le permitirán comprender este estándar y desarrollar una auditoría
efectiva.
La NIA 320 explica la materialidad en términos generales, como errores u omisiones importantes
en la estructura financiera de la compañía, los cuales, de forma individual o acumulada, podrían
influir razonablemente en la toma de decisiones de los usuarios de la información.
Evaluando las necesidades comunes de información de los usuarios generales de los estados
financieros, puesto que los impactos derivados de las decisiones que se toman con base en dichos
informes pueden variar considerablemente si se estudian desde la perspectiva de los usuarios
individuales o específicos, cuyos intereses o requerimientos presentan grandes diferencias.
Requerimientos para el auditor
“El auditor de la información financiera bajo las nuevas Normas Internacionales está en la
obligación de evaluar el cumplimiento de la materialidad de los estados financieros vistos como un
todo”
Un auditor considerará que existe poca importancia relativa en los casos en los que un hecho
sujeto a reconocimiento sea trivial. Esta condición es ambivalente y, por lo mismo, está sujeta al
criterio profesional del auditor.
El auditor de la información financiera bajo las nuevas Normas Internacionales está en la obligación
de evaluar el cumplimiento de la materialidad de los estados financieros vistos como un todo, es
decir, analizados en su conjunto; pero también deberá hacerlo al nivel o niveles de clases
particulares de transacciones.
En ese mismo sentido, el auditor deberá confirmar la materialidad de los saldos o las revelaciones,
y uno o varios montos inferiores al nivel de materialidad previamente establecido en el manual de
políticas contables de la compañía, para poder evaluar los efectos de los riesgos a los que se
sujeta la empresa, y diseñar los procedimientos idóneos para responder a los riesgos evaluados.
Intereses de los usuarios: evaluar las percepciones o necesidades informativas que requieren los
usuarios de la información.
Información histórica: antes de la elaboración del manual de políticas contables (para empresas
previamente en marcha: “principio de negocio en marcha”), ¿cuáles eran los picos inferiores y
superiores de movimientos en cierta operación específica a la cual se le desea asignar un valor
mínimo para equiparla de importancia relativa?
Concepto de materialidad de la entidad: este es el foco de análisis de más fácil acceso y el más
recomendado para las organizaciones, puesto que depende del punto de vista de la administración
de la entidad, de la cual se espera una visión amplia y general, pero a la vez particular y
articuladora de toda la compañía y su funcionamiento, por lo cual sus opiniones pueden aportar
información substancial para la efectiva determinación de la materialidad.
En conclusión, un buen auditor deberá tener claro el foco de análisis desde el cual se determinaron
los límites de materialidad o importancia relativa, y un amplio conocimiento no unidireccionado a la
entidad, sino expandido a su entorno, para así poder evaluar y exponer su postura sobre la
viabilidad o potencial riesgo en la omisión de una operación, a su juicio, material.
Fuente: actualícese.com
INFORME DE AUDITORÍA
El informe de auditoría es un informe realizado por un auditor externo donde expresa una opinión
no vinculante sobre las cuentas anuales o estados financieros que presenta una empresa.orme de
auditoría.
Por tanto, es el informe resultante de una auditoría contable, que es el proceso sistemático de
revisión de las cuentas anuales de una empresa, con el fin de comprobar que estas reflejen la
imagen fiel de la misma.
Hay varios factores a tener en cuenta para entender cómo funcionan los informes de auditoría:
El auditor puede ser tanto una persona física como jurídica. En este último caso, es una empresa
dedicada a la auditoría.
El auditor debe ser externo. Un auditor puede ser externo (si no pertenece a la empresa) o interno
(si pertenece a la misma). Ambos pueden realizar informes de auditoría, pero los realmente válidos
son los realizados por las auditorías externas. Los internos son un mero mecanismo de control
dentro de la propia organización.
El informe de auditoría expresa una opinión no vinculante del auditor. Es decir, el auditor expresa
su opinión acerca de las cuentas anuales de la empresa. Este informe, por tanto, expresa la
percepción del auditor; no es ninguna verdad absoluta, y por tanto no es vinculante. Sin embargo,
como veremos en el último apartado, en muchas ocasiones estos informes se tienen en cuenta
como algo más que una opinión.
Versan sobre las cuentas anuales o estados financieros. Los estados que se auditan son el
balance, la cuenta de resultados, el estado de cambios en el patrimonio neto y el estado de flujos
de efectivo.
El objetivo del informe de auditoría es emitir una opinión sobre los estados financieros. Hay
diversos tipos de opinión, en función de si los estados financieros reflejan la imagen fiel de la
empresa o no:
Opinión limpia o sin salvedades: Las cuentas anuales auditadas reflejan la imagen fiel de la
empresa de acuerdo al marco normativo de referencia.
Opinión con salvedades. El auditor ha encontrado ciertas desviaciones en las cuentas anuales con
respecto al marco normativo de referencia y estas, salvo por esa salvedad, reflejan la imagen fiel
da empresa.
Abstención u opinión denegada. Esta opinión se da cuando existe una limitación al alcance del
trabajo del auditor y esto no le ha permitido obtener evidencia suficiente para emitir un juicio sobre
si las cuentas anuales reflejan la imagen fiel de la empresa. Esta es la peor solución para la
empresa, ya que el auditor no puede emitir una opinión sobre las cuentas anuales.
Importancia de los informes auditorías
A pesar de que hemos comentado que el informe de auditoría es una simple opinión no vinculante
lo cierto es que su importancia en el marco empresarial es muy elevada. Esta importancia se refleja
en función de su obligatoriedad: