ENSAYO
ENSAYO
ENSAYO
Introducción
Las venas cavas devuelven al corazón sangre pobre en oxígeno que será enviada a
los pulmones donde se eliminará el dióxido de carbono y se cargará de oxígeno.
Hipertensión arterial
¿Qué es?
Cuando la presión arterial es demasiado alta, ejerce tensión sobre las paredes
arteriales, lo que las hace más susceptibles a los depósitos de colesterol y al
desarrollo de placas ateroscleróticas (también llamado «endurecimiento de las
arterias»)
Factores de riesgo
Edad avanzada
Causas genéticas
Sobrepeso u obesidad
Falta de actividad física
Consumir grandes cantidades de sal
Beber demasiado alcohol
Hay cambios de hábitos, como tomar alimentos más saludables, dejar de fumar y
practicar más actividad física, que pueden ayudar a reducir la tensión arterial,
aunque algunas personas pueden necesitar medicamentos.
Síntomas
Tratamiento
Hay cambios de hábitos que ayudan a reducir la tensión arterial alta, entre ellos:
Usted puede ayudar a prevenir la presión arterial alta al llevar un estilo de vida sano.
Esto significa:
El hecho de tomar una pastilla para bajar la presión no es suficiente para resolver su
problema y, lo que es peor, que no es necesario adoptar ninguna medida más. Esta
creencia es falsa. En los pacientes que se hallan en fases iniciales de la enfermedad
el cambio del estilo de vida es tan importante, o más, que el mero hecho de tomar
medicación. Estas medidas que afectan al estilo de vida son las siguientes: reducir
el sobrepeso, reducir la ingesta de sal en la dieta, restringir el consumo de alcohol,
abandonar el tabaco y realizar ejercicio físico moderado de forma habitual, si es
posible cada día. Cuando estas medidas no son suficientes para conseguir la
normalización de las cifras de presión arterial, se inicia el tratamiento farmacológico
(medicamentos), sin abandonar nunca los cambios del estilo de vida.
Alimentación. con dieta mediterránea han demostrado sin ninguna duda que
esta reduce la mortalidad por enfermedad cardiovascular, particularmente el
ictus isquémico, porque reduce la presión arterial, la glucemia y los lípidos.
Esta dieta rica en verduras y frutas, frutos secos (nueces, avellanas y
almendras), pescado más frecuente que carne, carnes blancas (pollo, conejo)
más frecuentes que carnes rojas (ternera, vaca, buey), uso de aceite de oliva
extra virgen y pequeñas cantidades de vino tinto, junto a una ingesta pobre
en sal (eliminar embutidos, alimentos enlatados y precocinados) y sin bebidas
azucaradas, es la mejor que pueden seguir los pacientes hipertensos.
Ejercicio. Se recomienda la práctica regular de ejercicio físico aeróbico no
competitivo (caminar, ir en bicicleta, nadar, etc...). Mejor si es cada día que a
días alternos, y mejor si es una hora que 30 minutos. En cualquier caso, al
ejercicio pleno se debe llegar tras un periodo de entrenamiento.
El sueño. El sueño reparador aumenta la calidad de vida de cualquier
paciente y, normalmente, los hipertensos bien controlados no tienen
problemas de sueño. Es importante dormir bien, pues el insomnio aumenta
la presión arterial.
Sexualidad. Los hombres con hipertensión pueden presentar descensos de
la libido en las fases iniciales del proceso por problemas psicológicos. La
mayoría de los medicamentos antihipertensivos no presenta como efectos
secundarios disminución de la libido o disfunción eréctil, aunque las
combinaciones de los betabloqueadores antiguos con diuréticos a altas dosis,
sí pueden producirla, particularmente, en pacientes fumadores y en personas
con diabetes con arteriosclerosis avanzada o neuropatía. La disfunción
eréctil puede considerarse como una manifestación de la arteriosclerosis y
es un factor de riesgo vascular que empeora el pronóstico del hipertenso.
Viajar. La hipertensión no es ningún obstáculo para viajar, ni siquiera para
viajar en avión o realizar estancias en alta montaña. Aunque es sabido que
las personas que no viven habitualmente en altura sufren elevaciones de
presión si viajan a países con montes de gran altura, estas suelen ser
discretas, excepto si se sobrepasan los 5.000 metros.
Apoyo social y emocional. Las personas con hipertensión deben conocer
su enfermedad a pesar de no dar ningún síntoma, y tienen que saber que si
siguen un estilo de vida saludable y toman sus medicinas de manera regular
pueden vivir muchos años sin tener complicaciones en el cerebro, corazón o
riñón.
Efectos secundarios del tratamiento farmacológico de la Hipertensión Arterial
Los diuréticos no presentan efectos secundarios que producen síntomas, sino que
pueden afectar a las cifras de glucosa y colesterol en sangre. Es por esto, que a los
hipertensos hay que hacerles análisis de control cada cierto tiempo, al menos una
vez al año, para explorar si se han producido estos problemas.
Uno de los problemas de los diuréticos es la pérdida de potasio por la orina y su
descenso en la sangre. Además de algunas medidas que el médico puede tomar,
como por ejemplo asociar el diurético a otro medicamento antihipertensivo que
compense esta pérdida, el paciente tiene que saber que el consumo de sal también
afecta a la pérdida de potasio. Cuanta más sal se tome más pérdida de potasio se
producirá.