LFLACSO 01 Vidal
LFLACSO 01 Vidal
LFLACSO 01 Vidal
Francisco Vidal
Carla Donoso
Editores
Marco Becerra
Claudia Dides
Caria Donoso
Eduardo Goldstein
Paulina Gonzalez
Gabriel Guajardo
Loreto Hernandez
]osefina Hurtado
Enrique Moletto
Ana Cristina Nogueira
HugoOcampo
Gladys Orellana
Irma Palma
Silvia Parada
Pia Rajevic
Alfredo Rojas
Marco Ruiz
Carlos Sanchez
Lucia Sante/ices
Teresa Valdes
Francisco Vidal
Sergio Zorrilla
Cuerpo y Sexualidad
Las opiniones que se presentan en este trabajo, asf como los
analisis e interpretaciones que en ct se contienen, son de res
ponsabilidad exclusive de sus autores y no reflejan ncccsaria
mente los puntas de vista de FLACSO nl de las instituciones a
las cuales se encuemra vinculado.
Presentaci6n
Teresa Valdes 9
Presentaci6n
Rodrigo Pascal 11
Introducci6n 13
I. SEXUALIDAD EN CHILE
Mujer y VIHISIDA
Gladys Orellana 145
Sexualidad y VIHlSIDA
Ana Cristina Nogueira 157
"SEXUALIDAD EN CHILE"
SEXUALIDAD Y MODERNIDAD EN CHILE:
UNA RELAC/ON ESPUREA
Francisco Vidal
El termino sexualidad aparece por primera vez en el siglo XIX con un significado
mas 0 menos parccido al que tiene hoy para nosotros, ya que hasta el 1800, la
palabra s610 era utilizada dentro de los lfmites de la jerga tecnica de la biologfa y
la zoologfa '. Sin embargo, las primeras referencias a la sexualidad se remontan
mucho tiempo arras, encontrandose los primeros antecedentes en la tradici6n
judeocristiana, que Ie imprime connotaciones que la restringen al ambito de la
procreaci6n. Es asf como los cinco primeros libros de El Antigua Testamento con
tienen normas relativas a la conducta sexual; en Los Die: Mandamientos se prohi
be el adulterio (Exodo, 20,13) y en el Levitico (18,22 y 21, 14) se prohibe catego
ricamente la homosexualidad. Ademas, en El Cantar de los Cantares se alude al
sexo como un impulso creativo y placentero, pero restringido iinicamente al am
bito de la procreacion-. Durante, los siglos XII Y XIII, a medida que la Iglesia
Katchadurian. 199.1.
Masters, Jonson y Kolodny. 1995.
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Sexualidad y modemidad en Chile: una ... Francisco Javier Vidal
Durante el siglo XIX, la Iglesia establece una alianza con la ciencia, especfficamente
con la medicina, en la adopcion de actitudes negativas hacia la sexualidad; la
masturbacion se considera lesiva para el cerebro y para el sistema nervioso cen
tral, la homosexualidad se entiende como patologla y a la mujer no se la concibe
como capaz de respuesta sexual. Lopez y Fuertes afmnan que "la ciencia se limi
taba a legitimar 10 que afirmaban los moralistas. (...) Estaban convencidos que
existia una perfecta coincidencia entre la moral y los criterios educativos y clini
cos. Si algo era considerado por la moral como inadecuado, los profesionales 10
catalogaban como desviado 0 patologico'": El ultimo cuarto del siglo XIX estuvo
marcado por la ideas del psiquiatra Richard von Krafft-Ebing, quien -adhiriendo
a los principios de la moral victoriana- establece una pormenorizada clasificacion
de las disfunciones y perversiones sexuales, dentro de las que destacan el
sadomasoquismo, la homosexualidad y la masturbacion. De este modo, la sexua
lidad entra al campo de estudio de la medicina, pero 10 hace a traves de la puerta
de la patologia.
Salvo excepciones como la Refonna Protestante que se mostraba mas tolerante que la IglesiaCat6li
ca en materias de sexualidad.
Lopez y Fucrtes, 1991: 21.
Vcr Marcuse. 1984; Reich, 1986.
28
Francisco Javier Vidal Sexualidad y modemidad en Chile: una ...
Una nueva manera de abordar el estudio de la sexualidad humana se inicia con los
trabajos de Alfred Kinsey, quien provoc6 una enorme conmoci6n en la sociedad
norte americana al publicar sus informes sobre Sexualidad Masculina y Sexuali
dad Femenina''. De acuerdo a los resultados obtenidos por Kinsey al entrevistar a
mas de 12.000 estadounidenses, el 37% de los hombres encuestados habfa tenido
al rnenos una experiencia homosexual en su vida; el 40% habra sido infiel a su
esposa y el 62% de las mujeres se habfan masturbado. La publicacion de sus infor
mcs le valio la crftica de la jerarqufa eclesiastica por considerarseles amorales,
contrarios a la familia y con un trasfondo comunista. Sin embargo, las publicacio
nes de Kinsey tambien hicieron que muchas personas se sintieran liberadas al
saber que sus conductas y fantasfas sexuales eran tambien compartidas por otros
individuos.
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Sexualidad y modemidad en Chile: Wla ... Francisco Javier Vidal
Sin embargo, las dimensiones sefialadas por estos autores no consideran dos ele
mentos de imponancia central en la "regulacion social de la sexualidad", parti
cularmente en el caso de nuestro pais". Un primer elemento tiene que ver con los
cambios que ha experimentado la sexualidad en la epoca modema y con el rol que
determinados grupos y movimientos sociales han jugado en la produccion de es
tos cambios. Un segundo elemento que proponemos relevar al hablar de sexuali
dad dice relacion con las presiones y con las restricciones que ciertos sectares
politicos y eclesiasticos han ejercido sobre el aparataje gubemamental con el ob
jeto de obstaculizar la implementaci6n de polfticas piiblicas vinculadas con la
sexualidad. Estos dos elementos, a los cuales nos referiremos como "dimension
sociologica" y "dimension politica" de la sexualidad, seran tratados de manera
mas amplia en el siguiente punto, que versara en tomo a estas "dimensiones olvi
dadas de la sexualidad".
30
Francisco Javier Vidal Sexualidad y modernidad en Chile: una ...
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Sexualidad y modemidad en Chile: una ... Francisco Javier Vidal
Por otro lado, a rafz del enfrentamiento entre policfas y homosexuales en el bar
Stonewall en Nueva York en 1969, surge un fuerte movimiento politico en defen
sa a los derechos de las minorfas sexuales. La fuerza que alcanza este movimiento
incide en que, en 1973, la Asociacion Psiquiatrica Estadounidense quite la homo
sexualidad del diccionario de trastomos mentales. Las reivindicaciones homo
sexuales han seguido adquiriendo fuerza con los afios, centrandose actualmente el
debate en tome al reconocimiento legal de las relaciones entre personas del mis
mo sexo y en la posibilidad de adoptar hijos.
Otra caracteristica de la sociedad modema que sefiala Giddens, tiene relacion con
el papel que han desempefiado las mujeres en la produccion de una "igualdad
sexual" entre los sexos, que a su vez, habrfa conducido al establecimiento de 10
que llama "relaciones puras", Una relacion pura se entiende como "una relaci6n
de igualdad sexual y emocional con connotaciones explosivas respecto de otras
formas preexistentes de poder entre los diversos papeles sexuales':", Esta rela
cion pura tambien implica un tipo de sexualidad propio de la sociedad moderna
que Giddens denomina "sexualidad plastica", que serfa una sexualidad descentrada,
liberada de las necesidades de reproduccion, La sexualidad plastica tambien con
llevarfa un proceso inedito de negociacion sexual entre los sexos de manera que
ambos encuentren placer y gratificacicn en la relacion sexual.
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Francisco Javier Vidal Sexualidad y modernidad en Chile: una ...
Otro hallazgo importante que se desprende del estudio de Rubin citado, tiene que
ver con un cambio en el tipo de practicas sexuales en que se involucran las perso
nas. Asf, este estudio revel6 que, entre mujeres y hombres de mas de cuarenta
afios, solo un poco mas de un 10% habfa practicado sexo oral. A diferencia de
ello, entre los adolescentes, el sexo oral frecuentemente fonnaba parte de la acti
vidad sexual. En cuanto a la masturbaci6n, uno de los primeros infonnes sobre
sexualidad --el infonne Kinsey- mostr6 que el 90% de los hombres y el 40% de
las mujeres se habian masturbado alguna vez". Sin embargo, estudios mas recien
tes han elevado estas proporciones a casi el 100% en los hombres y a cerca del
70% en las mujercs".
Probablemente el autor que mas ha analizado la relacion que existe entre sexuali
dad y poder sea Michel Foucault, quien entiende la sexualidad como "un constructo
social, que opera en campos de poder, y no meramente un abanico de impulsos
biol6gicos que se liberan 0 no se liberan "20. De acuerdo a este autor, los benefi
cios de la modemidad tendrfan un costa: la producci6n de cuerpos dociles y disci
plinados, incapaces de responder espontancamcnte a los influjos del deseo. Desde
una perspectiva similar, Weeks plantea que el poder disciplinario en materias de
sexualidad en la epoca modema es ejercido por quienes promueven la libertad
individual, pero circunscrita solo al ambito economico. De este modo, en la socie
dad inglesa, Weeks observa una oposicion entre la derecha polftica radical y la
"mayor revoluci6n en las costumbres sexuales de este siglo "21. Segun este autor,
este antagonismo se habrfa originado en el intento de la derecha politica de redu
cir la libertad individual a los margenes establecidos por el mercado, donde se
tiene libertad para comprar y vender pero no para elegir el compafiero 0 compafie
ra sexual, el estilo de vida sexual y la identidad 0 las fantasfas sexuales, De este
Rubin, 1990.
Pollak, 1992.
Kinsey, 1953.
Masters. y Johnson, 1993.
Foucault, 1993.
2. Weeks, 1995: 171.
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Sexuolidad )' modemidad en Chile: una... Francisco Javier Vidal
En el caso de nuestro pais, larealidad no parece ser tan distinta a las descripciones
que hace Weeks sobre la sociedad norteamericana 0 inglesa. Asi al menos 10 de
muestran los resultados de una investigaci6n periodfstica acerca del tema de la
sexualidad en nuestro pais, donde se destacan las restricciones y limitaciones que
la Iglesia Cat6lica y los sectares de derecha --es decir, el poder econ6mico- han
impuesto a los medios de comunicaci6n social para hablar del tema de la sexuali
dad. Al respecto, Rajevic sefiala: "En Chile hay una minoria muy poderosa que
impone su punto de vista mas alld de 10 visiblemente politico 0 econ6mico y uno
de sus intereses mas profundos es la mantenci6n de los valores morales a
ultranza '~5.
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Francisco Javier Vidal Sexuolidod y modernidad en Chile: una ..
Las campaiias de prevencion del SIDA dejaron de ser emitidas a traves de los
medios de comunicacion masivos en 1997, con la subsecuente invisibilizacion
del tema dentro de la opinion publica. Los personeros gubemamentales han sefia
lado que la estrategia que han adoptado es la realizacion de campaiias focalizadas
de prevencion dentro de grupos especificos. Frente a esto uno puede preguntarse
si la epidernia afecta solo a grupos especificos focalizados 0 a la poblacion en
general. Como tambien, en que medida habrii influido la negativa de la Corpora
cion de Television de la Universidad Catolica y de Megavision a transmitir los
spots preventivos impulsados por el Ministerio de Salud, en la decision de esa
cartcra de no continuar con esta linea de prevencion. Resulta sintomiitico que ese
afio fuese el ultimo afio que pudimos ver campafias telcvisivas de prcvencion del
SIDA.
Par otra parte, cuando el Senado rechaza el Proyecto de Ley de divorcio vincular
presentado por los democratacristianos Mariana Aylwin y Patricio Walker, Jarge
Medina recibe un importante espaldarazo de Roma, que se traduce en que el cle
rigo pas a a ocupar un importante cargo en el Vaticano. Respecto de la necesidad
de legislar sobre este tema, Pia Guzman sefialaba "l Par que vamos a legislar par
la excepci6n, par dramdtica que ella sea, si dejamos al resto en la incertidumbre
y debilitamos a lafamilia "26.
Finalmente, con la ferrea defensa de abogados del Opus dei, el Gobiemo se via en
La Tercero, 10 de Septiembre de 1996: 3-4.
Kleincsek, 2000. Lna reflexion sabre la situacion de la educacion sexual en Chile se encuentra en
Vidal, 2002.
Revista Elle, 1999.
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Sexualidad y modernidod en Chile: una ... Francisco Javier Vidal
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Francisco Javier Vidal Sexualidad y modemidad en Chile: una ...
social--como destaca Luco- se inscribe dentro del gui6n establecido por la sexua
lidad hegcm6nica, segun la cual "los hombres deben estar siempre dispuestos,
siempre activos para iniciar un encuentro sexual, aunque muchas veces los de
seos y las necesidades digan 10 contrario" 3D.
Respecto a la primera experiencia sexual, los estudios muestran que las mujeres
se inician con parejas estables de edades similares, mientras que los hombres 10
haccn con mujeres mayores que "los inician"". De este modo, tambien observa
mos la existencia de diferencias de genero en relaci6n a la figura del iniciador/a.
En cuanto ala valoraci6n que los sexos hacen de la experiencia sexual previa de
su pareja, tarnbien se observan diferencias, encontrandose que, para ambos sexos,
es importante que el hombre tenga mayor experiencia sexual. Asf, aiin cuando las
mujcres valoran ser las primeras en la vida sexual de su pareja, tarnbicn conside
ran que esta inexperiencia masculina dificulta su propia satisfacci6n y aprendiza
je sexual". A diferencia de ello, para los hombres, la virginidad se conceptualiza
como algo valioso que se entrega, que se da, motivo por el cual tienden a valorarla
como algo hermoso. Sin embargo, esta valoraci6n s610 se circunscribe al ambito
de las relaciones estables y no a otro tipo de encuentros sexuales.
Resulta curioso que aun cuando para ambos sexos la virginidad femenina conti
nue siendo algo valioso, tanto hombres como mujeres Ie asignan un significado
subjetivo que se acomoda con la particular situaci6n en que se encuentran. De
este modo, cuando los hombres se relacionan afectivamente con mujeres que no
son vfrgenes, tienden a restarle importancia a la virginidad, considerando que 10
realmente importante es que 5610 con ellos alcanzaron la satisfacci6n sexual. Como
podemos observar, desde la perspectiva masculina, sigue presente la idea de ini
ciar a la pareja, si bien no en la sexualidad, sf en el placer". Esta resignificaci6n de
la virginidad tarnbien opera en el caso de las mujeres. Un estudio cualitativo rea
lizado con 48 mujeres de distintos estratos socioecon6micos, mostr6 que aun cuan
do las mujeres no parecfan asignarle demasiada importancia a lIegar virgenes al
matrimonio, sf consideraban que era muy relevante no tener sexo con cualquiera
y/o haber tenido relaciones sexuales con un solo hombre. Esta resignificaci6n que
las mujeres hacen de la virginidad pasarfa necesariamente por las percepciones
que las mujeres tienen respecto de su importancia para los hombres". Estudios en
varones muestran que, para estes, "las mujeres cuyo deseo no nace del amor; son
," Luco,2001.
Gysling, Benavente y Olavarrfa, 1997.
Idem.
Idem.
Valdes, Benavente y Gysling, 1999.
37
Sexuolidod y modemidad en Chile: una ... Francisco Javier Vidal
enfermas, tienen alma de puta 0 son putas. Tienen relaciones sexuales con cual
quier hombre">.
En general, los estudios de sexualidad muestran que para la mujer es mas impor
tante satisfacer a su pareja que obtener placer sexual ella misma. As! se evidencia
en un estudio cualitativo realizado con mujeres de trabajadores portuarios, el cual
concluye que "en la vision de las mujeres 10 mas importante es que el hombre
tenga 10 que quiere en el plano sexual para que el se sienta bien, independiente
mente de 10 que las mujeres mismas puedan sentir" 40. Este interes en lograr el
placer sexual del var6n lIeva a las mujeres al extreme de fingir el orgasmo, el cual
es visto como secundario en relaci6n al orgasmo del var6n. Esta necesidad de
fingir el orgasmo se explica en la falta de simultaneidad con el del var6n, quien
una vez que 10 alcanza da por terrninada la relaci6n sexual. "Desde esta perspec
tiva es el orgasmo masculino el que determina la duracion y el exito de la rela
cion sexual de la pareja, asi como el que define las posibilidades del orgasmo
femenino "4). La falta de comunicaci6n en materias de sexualidad se expresa tam
bien en las estrategias que las mujeres deben desplegar para rehuir los contactos
sexuales cuando elias no tienen deseos y sus parejas sf, De este modo, algunas
Valdes y Olavarrta, 1998.
Sharim. Silva. Rod6 y Rivera, 1996.
Vidal Y Donoso, 2002.
Sharim, Silva. Redo y Rivera, 1996.
idem.
Vidal y Donoso, 2002.
Sharim, Silva, Rode y Rivera, 1996: 37.
38
Francisco Javier Vidal Sexualidad v modemidad en Chile: una ...
Por otro lado, existirfan factores vinculados con la clase social que intervienen en la
capacidad de la mujer para experimentar placer en la relacion sexual. Asi, las aproxi
maciones cualitativas indican que todas las mujeres de sector medio alto entrevista
das estan satisfechas de su vida sexual. "La mayoria ha superado inhibiciones y ha
logrado una sexualidad satisfactoria y plena. (...) Por su parte, entre las entrevista
das de sectores bajos, solo una mujer manifiesta disfrutar parcialmente de las rela
ciones sexuales, mientras que todo el resto se encuentra insatisfecha" 46. Sin embar
go, la incidencia del estrato socioecon6mico en la sexualidad no solo se aplicarfa en
el caso de las mujeres, ya que una encuesta aplicada a 250 varones mayores de 18
alios residentes en Santiago, concluy6 que el 70,6% de los entrevistados se rnani
fiesta satisfecho con su relaci6n de pareja en el plano sexual. Sin embargo, es en los
sectores altos y medios donde se concentra la mayor frecuencia de relaciones consi-
Idem. pag. 73.
Gysling, Benavente y Olavarria, 1997: 31.
Vidal y Donoso, 2002.
Rod6, 1987.
Valdes, Benavente y Gysling, 1999: 91.
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Sexualidad v modemidad en Chile: una .. Francisco Javier Vidal
5. Reflexiones Finales
Sin embargo, esta alianza no siempre ha sido 10suficientemente fuerte como para
impedir que determinados grupos sociales adquieran un rol protagonico en la pro
duccion de cambios en el ambito de la sexualidad. En la revision expuesta sobre
los cambios que ha experimentado la sexualidad en la sociedad modema consta
tamos que los movirnientos de mujeres han resultado ser un importante motor de
cambio social a nivel de la sexualidad. De este modo, con sus dernandas de igual
dad en el terreno sexual, las mujeres han puesto a los hombres en una posicion
que hasta entonces desconocfan, viendose en la obligacion de velar por el goce y
el placer sexual de su pareja y de compartir con ella muchos de los roles tradicio
nalmente conceptualizados como femeninos. Los hombres, de igual modo, tam
bien han planteado la necesidad de un cambio en las concepciones hegemonicas y
tradicionales de la sexualidad, consideraci6n que comparten los movimientos de
minorfas sexua1es, que se visibilizan como actores sociales propulsores de trans
formaciones en el ambito de la sexualidad y de la ciudadanfa.
40
Francisco Javier Vidal Sexualidad y modemidad en Chile: una ...
Uno de los elementos que podrfa explicar esta tradicionalista vivencia de la sexua
lidad, principalmente entre las mujeres, son las polfticas del Regimen Militar sa
bre sexualidad. En 1984, Lucfa Hiriart destac6 las funciones de adoctrinamiento
que debia cumplir la Secretarfa Nacional de la Mujer. En la revista Amiga, propie
dad de esa entidad gubemamental, se observa una clara tendencia a restringir la
vida de la mujer a su rol procreador, sefialando: "La mujer, desde que se hace
madre, ya no espera nada en eL terreno materiaL; busca y encuentra en su propio
hijo La finaLidad de su vida, su unico tesoro y La meta de sus suenos"48. Esta
polftica no s610 se impuso desde el discurso, sino tambien desde la practica, Exis-
Citado en Rajcvic. 2000.
41
Sexualidad y modemidad en Chile: una ... Francisco Javier Vidal
Por otra parte, los grupos mas jovencs y de mayor nivel educacional -que no vi
vieron la represion sexual caracterfstica del regimen militar- parecen estar vivien
do una sexualidad distinta a la que vivieron sus progenitores. Los varones perte
necientes a estos segmentos evidencian mayor preocupacion por que su pareja
alcance la gratificacion sexual, dedicando una importante cantidad de tiempo a
los juegos sexuales previos a la penetracion, Las universitarias, en tanto, tienen
incorporada la idea de que si bien es importante la afectividad en la relacion de
pareja, tambien Ie asignan valor a los aspectos vinculados con la gratificaci6n
sexual y con la posibilidad de decidir respecto de utilizacion de anticonceptivos y
otras medidas preventivas. La poblaci6n universitaria tambien pareciera ser el
grupo que mas cambios ha experimentado en relacion a las practicas sexuales en
las cuales se involucran. Es asf como dentro del repertorio sexual de estos grupos
habitualmente se encuentran la masturbacion conjunta con su pareja, la realiza
cion de practicas bucogenitales y, en algunos casos, la penetracion anal.
Este es uno de los temas que seria interesante profundizar, ya que parece poco
claro que los grupos que se oponen a una mayor apertura de la sociedad en el tema
de la sexualidad sean, por una parte, quienes voluntariamente han optado por el
celibato y, por otra, quienes se encuentran viviendo una modernizacion de las
costumbres sexuales que se contrapone a la forma en que se vivencia la sexuali
dad en los estratos mas desposeidos,
42
Francisco Javier Vidal Sexualidad v modernidad en Chile: una ...
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