La Verdadera Fe
La Verdadera Fe
La Verdadera Fe
LECTURA EN CLASE:
Santiago 2:1–4,8–18,21,22,24,26.
INTRODUCCIÓN:
✓ En la lección de hoy exploraremos la relación entre
la fe y las obras.
✓ Las obras no nos llevan a la salvación, pero nuestra
fe en Jesús resulta en buenas obras.
✓ Los que aceptamos Cristo por fe somos desafiados
a encontrar formas de ayudar a los necesitados.
✓ Al dar a conocer su fe a otros a través de sus
buenas obras glorificaran a Dios.
✓ Aspectos importantes de esta lección.
AMONESTACIÓN
CONTRA LA
PARCIALIDAD
Santiago 2:1-7.
1
Santiago 2:1-7
Reina-Valera 1960
Amonestación contra la parcialidad
2 Hermanos míos, que vuestra fe en nuestro glorioso Señor Jesucristo sea sin
acepción de personas. 2 Porque si en vuestra congregación entra un hombre con
anillo de oro y con ropa espléndida, y también entra un pobre con vestido
andrajoso, 3 y miráis con agrado al que trae la ropa espléndida y le decís: Siéntate tú
aquí en buen lugar; y decís al pobre: Estate tú allí en pie, o siéntate aquí bajo mi
estrado; 4 ¿no hacéis distinciones entre vosotros mismos, y venís a ser jueces con
malos pensamientos? 5 Hermanos míos amados, oíd: ¿No ha elegido Dios a los
pobres de este mundo, para que sean ricos en fe y herederos del reino que ha
prometido a los que le aman? 6 Pero vosotros habéis afrentado al pobre. ¿No os
oprimen los ricos, y no son ellos los mismos que os arrastran a los tribunales? 7 ¿No
blasfeman ellos el buen nombre que fue invocado sobre vosotros?
El favoritismo puede destruir una iglesia. Si bien todos
tenemos relaciones cercanas con algunas personas, no
podemos permitir que el favoritismo obstaculice nuestra
relación con los demás. El favoritismo se puede manifestar
entre los que asisten regularmente a la iglesia o hacia los que
recién llegan.
Al dirigirse a sus lectores como «hermanos míos»
(v. 1; «mis amados hermanos», ntv), Santiago reconocía el vínculo
en Cristo entre cada
individuo en la iglesia, judíos y gentiles por igual
La fe genuina en la vida de la iglesia.
2
Santiago 2:8-13
Reina-Valera 1960
8 Si en verdad cumplís la ley real, conforme a la Escritura: Amarás a tu prójimo
3
Santiago 2:14-26
Reina-Valera 1960
La fe sin obras es muerta
14 Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras? ¿Podrá la fe
salvarle? 15 Y si un hermano o una hermana están desnudos, y tienen necesidad del mantenimiento de
cada día, 16 y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais las cosas que
son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha? 17 Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en
sí misma.
18 Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe
por mis obras. 19 Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y
tiemblan. 20 ¿Mas quieres saber, hombre vano, que la fe sin obras es muerta? 21 ¿No fue justificado por
las obras Abraham nuestro padre, cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar? 22 ¿No ves que la fe
actuó juntamente con sus obras, y que la fe se perfeccionó por las obras? 23 Y se cumplió la Escritura
que dice: Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia, y fue llamado amigo de Dios. 24 Vosotros
veis, pues, que el hombre es justificado por las obras, y no solamente por la fe. 25 Asimismo también
Rahab la ramera, ¿no fue justificada por obras, cuando recibió a los mensajeros y los envió por otro
camino? 26 Porque como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe sin obras está muerta.
:Los cristianos son salvos por la fe, no por las obras. No
tenemos que ganarnos
nuestra entrada al cielo. Este es uno de los principios que
separa al cristianismo
de las religiones falsas, la mayoría de las cuales
dependen de las obras. En una
declaración que puede ser una simplificación, podríamos
decir que es un asunto de
«causa y efecto». Las buenas obras no causan nuestra
salvación; más bien, las buenas
obras son el efecto de la obra de Cristo en nuestra vida
Una verdadera fe
estará acompañada de
acción. V.14.
Aspectos
importantes
de una
Una fe viva no se verdadera fe. Una fe viva sin
puede separar
obras es muerta.
de las obras.
V.15-17.
V.18,19.
El ejemplo de Abraham. V.20-24.
• Su obediencia al ofrecer a su hijo Isaac demostró su fe inquebrantable en
Dios.
• Su fe y sus obras cooperaron juntas perfectamente.
• Su aplicación: “Las obras deben acompañar a una fe genuina.