Derecho Constitucional Ii

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 14

DERECHOS, LIBERTADES Y GARANTÍAS

6.1 Definiciones. Clasificación. Jerarquía. Colisión de derechos.


 Definiciones: hablar de este tema requiere algunas puntualizaciones previas. La

historia enseña que es en el mundo de la Grecia antigua en donde hace su


aparecimiento la concepción individualista aparejada al concepto de libertad.
Una libertad distinta a lo que hoy entendemos por ella, ya que, se entendía
como “el ejercicio de la ciudadanía, en la participación, directa e indirecta, en el
gobierno de la ciudad. De modo, que la polis se convierte en el fundamento de
la libertad”, de acuerdo con el constitucionalista Álvarez Conde (1999).
Los romanos reducían la libertad, a la participación en las Asambleas Populares
y al derecho al voto -ius sufragii- lo que se conocía como civitas. Con los
estoicos, quienes afirmaban valores como la ley natural, la razón, la igualdad y
la dignidad del hombre, los cuales se sitúan más allá del estado.
Con el cristianismo se desarrollan los conceptos iusnaturalistas con base en que
ante Dios todos los hombres son iguales y que el hombre es un sujeto de
derechos.
Posteriormente los derechos se positivizan, especialmente en el Derecho
Estatutario inglés: la Carta Magna (1215); la Petition of Rights (1628); el Habeas
Corpus Amendment (1679); y el Bill of Rights (1689). Estos documentos se
refieren a situaciones concretas de un grupo social y no del individuo en
particular, su objetivo era limitar el poder del soberano.
En tanto que, a partir del siglo XVIII con las revoluciones estadounidense y
francesa, el planteamiento cambia, se habla de derechos y libertades
fundamentales, de las relaciones ente el estado y la sociedad y la prevalencia
del uno sobre el otro. Pero, es la Declaración de Derechos del Hombre y del
Ciudadano se configura la concepción moderna de los derechos y libertades
protegidos jurídicamente.
Se puede decir que los derechos y libertades son las prerrogativas que la
Constitución reconoce y que materializa con las garantías para posibilitar una
vida y convivencia con los otros, de manera digna, libre e igualitaria. Lo
anteriormente expresado da a los derechos un carácter de fundamentalidad; a
dicha descripción de derechos se les da el nombre de derechos fundamentales,
derechos humanos o derechos del hombre1.
Es importante dejar en claro que, los derechos son una facultad para exigir que
se cumpla o se respete todo lo que la constitución y las leyes le reconocen
como persona humana; en cuanto a las libertades van más allá de los derechos
y su esencia es política2, como actividad ciudadana sin que ello quiera decir que
no se toma en cuenta que libertad también es la facultad y capacidad de decidir
o hacer algo sin coacción. Se han definido como libertadas básicas y derechos
inalienables de las personas: la libertad de expresión, la libertad de culto, la
libertad para vivir sin miseria y la libertad para vivir libre de temor. Y las
garantías son la protección que la Constitución establece y que el Estado tiene
que hacer efectivas para su respeto y observancia.
Decíamos antes que, estos derechos y libertades que son consustanciales al ser
humanos, se les han denominado derechos fundamentales, derechos del
hombre, derechos constitucionales y derechos humanos y como tales se
caracterizan por:
o Universalidad, dichos derechos son propios de todos los seres humanos;

1 Entendida la expresión ‘hombre’ como la condición de individuo o ser humano.


2 Para el diccionario de la RAE, política es “actividad del ciudadano cuanto interviene en los asuntos públicos
con su opinión, con su voto o, de cualquier modo.”
o Innegociables, es una protección que todos los estados deben a sus
habitantes;
o Fundamentales, son precedentes a cualquier organización o autoridad; o
Históricos, permanecen a través del tiempo;
o Progresivos, su ámbito de protección es extensible y no dependen del
reconocimiento del Estado;
o Irrevocables, una vez reconocidos no pueden ser desconocidos; o
Prioritarios, tienen protección preferente ante otros derechos; o
Transnacionales, la titularidad de esos derechos no depende de la
nacionalidad ni del lugar en donde deban ser protegidos, van más allá de
la soberanía de un Estado, tienen protección internacional.

 Clasificación
Los derechos humanos por razones didácticas se clasifican por
generaciones, además, al hacerlo de esa manera se denota su desarrollo
cualitativo sin que con ello se excluya los comprendidos en otra generación.
No se puede pensar en un derecho humano sin la existencia de los otros.
- Derechos de primera generación: Derechos civiles y políticos
Los titulares de los derechos civiles son todos los seres humanos, y de los
derechos políticos son los ciudadanos. En cuanto a estos últimos,
se determinan en cada legislación nacional. El Estado tiene que respetar y
garantizarlos y estos derechos son reclamables salvo excepciones por
circunstancias de emergencia.
En un inició la lucha es por la dignidad del ciudadano, su
reconocimiento y respeto y el derecho a participar en política;
posteriormente -en nuestro continente- por el respeto a la vida y la
integridad, el debido proceso, a la exhibición personal o habeas
corpus.
El reconocimiento -a nivel internacional- si da con el Pacto
Internacional de los Derechos Civiles y Políticos en la Asamblea
General de Naciones Unidad de 1966.
- Derechos de segunda generación: derechos económicos, sociales y
culturales
Esta segunda generación de derechos, se desarrolla en el
constitucionalismo social, mismos que son reconocidos -también a
nivel internacional- en el Pacto Internacional de Derechos
Económicos, Sociales y Culturales, aprobado en la Asamblea General
de Naciones Unidad de 1966. El papel del Estado es garantizar el
bienestar económico, acceso al trabajo y el desarrollo integral de
todos con respeto a la dignidad humana, en libertad y democracia.
El Pacto establece que toda persona tiene derecho a:
 La seguridad social y a la satisfacción de sus derechos económicos,
sociales y culturales;
 Al trabajo en condiciones equitativas y satisfactorias;
 Formación de sindicatos para la defensa de sus intereses;
 Un nivel de vida adecuado, que incluye: alimentación, vestido,
vivienda, asistencia médica y los servicios sociales indispensables;
 La salud física y mental;
 Asistencia y cuidados especiales (maternidad e infancia); 
Educación primaria y secundaria obligatoria y gratuita.
Estos derechos tienen su eje en la igualdad.
- Derechos de tercera generación: los derechos de la solidaridad
Estos derechos obedecen a la necesidad de superar las
desigualdades económicas y culturales entre países ricos y países
pobres, con especial énfasis en medio ambiente, respeto a los
bienes culturales de la humanidad, derechos de las minorías étnicas
y la autodeterminación de los pueblos. Ellos son el objeto de la
Declaración de Teherán de 1968 o Declaración de la Comisión
Internacional de Derechos Humanos de Teherán.
- Derechos de cuarta generación:
Hemos dicho que los derechos humanos son progresivos y a raíz de la
evolución científica y tecnológica se han definido y siguen definiéndose,
nuevas formas sociales, morales, culturales lo que ha dado origen a los
derechos de cuarta generación. Consecuentemente, esta generación de
derechos aún está definiéndose.

• Jerarquía:
“(…) el artículo 46 de la Constitución Política de la República les otorga
preeminencia a estos cuerpos normativos sobre el derecho interno. Ello
únicamente provoca que, ante la eventualidad de que la disposición legal
ordinaria se ese orden entre en conflicto con una o varias normas contenidas en
un tratado o convención internacional sobre derechos humanos, prevalecerán
estas últimas (…)”. Gaceta 93. Expediente 3396-2008. Sentencia de
09/07/2009
Como se desprende del parágrafo anterior, la Corte de Constitucionalidad
de forma reiterado ha sentado la doctrina legal que la normativa
internacional en materia de derechos humanos, es preeminente a la
legislación nacional ordinaria.

• Colisión de derechos
Cuando se habla de conflicto de derechos fundamentales, se refieren al
eventual caso de una colisión de estos derechos, lo cual significa que un
titular de uno de ellos al ejercerlo puede confrontarse con el titular de otro
derecho fundamentar. Evidentemente, la solución más lógica sería que se
tendría que priorizar uno de los derechos en conflicto. Pero, ¿cómo se
justifica dicha priorización? La respuesta podría ser por jerarquía y
ponderación de derechos, lo que implica también aplicar el principio de
proporcionalidad.
Ahora bien, si la colisión fuera de un derecho fundamental y otro que no lo
es, la respuesta es obvia, se admite la prevalencia del derecho
fundamental. En el caso de nuestra Constitución, establece un parámetro
de forma expresa en el artículo 44, empieza por establecer que los
derechos y garantías que ella otorga no excluyen a otros, ya que aquellos
son “inherentes a la persona humana” y agrega, “el interés social prevalece
sobre el interés particular”. Es decir que, agrega un criterio, que adquiere
más importancia cuando el conflicto se da entre titulares individuales y
titulares colectivos, entre personas individuales y personas jurídicas, etc.

1.2 Derechos personalísimos


Los derechos personalísimos son los relativos a la personalidad y se constituyen
por tanto en los derechos esenciales que le son innatos al individuo por el hecho
de ser humano. Se encuentran regulados en el Capítulo I del Título II de la
Constitución Política.
Los derechos personalísimos son subjetivos (privados), innatos, vitalicios,
extrapatrimoniales, necesarios e intrasmisibles. Al ser manifestaciones personales
su número no es cerrado, sino que de acuerdo con las condiciones irán
reconociéndose. Su fundamento es la autodeterminación del individuo y su límite
son los derechos e intereses del otro.
Estos derechos pertenecen a la persona humana con independencia de cualquier
sistema o ideología y el Estado tiene el deber y obligación de reconocer, garantizar
y respetar.
El artículo 278 constitucional establece que los derechos personalísimos
(individuales) únicamente pueden ser reformados por el poder constituyente, es
decir que tienen una protección especial y extraordinaria.
• Clasificación:
o Derechos a la integridad física: se focalizan en la protección a la persona
humana y su integridad física.
o Derechos de libertad, comprenden no únicamente a la libertad física
sino también a la libertad de hacer o no hacer, a la libertad de
conciencia.
o Derechos sobre la integridad espiritual: derecho de la imagen, derecho a
la intimidad o vida privada.
o Derecho al reconocimiento y respeto de la propia individualidad : por
ejemplo, el derecho al nombre.
• Otros derechos: aparte de los derechos personalísimos, se le reconocen a los
individuos los denominados derechos personales y en contraposición los

derechos reales.
Los derechos personales son los que conceden la facultad de exigir un
comportamiento a otra persona. Los derechos reales son el poder jurídico que
tiene el titular de obtener una ventaja económica de una cosa frente a otros.

6.3 Derechos económicos, sociales y colectivos


En el preámbulo del Pacto Internacional de Derechos Económico, Sociales y
Culturales, los Estados signantes reconocen que “(…) no puede realizarse el ideal
del ser humano libre, liberado del temor y de la miseria, a menos que se creen
condiciones que permitan a cada persona gozar de sus derechos económicos,
sociales y culturales, tanto como de sus derechos políticos.” Reconocen además
que al igual que los derechos individuales, estos derechos se “desprenden de la
dignidad inherente a la persona humana”.
“Los derechos económicos, sociales y culturales tienen por objeto asegurar la
protección plena de las personas en tanto que tales, partiendo de la base de que
las personas pueden gozar de derechos, libertades y justicia social
simultáneamente”.
Nuestra Constitución regula estos derechos en el capítulo segundo:
Derecho a la salud: seguridad y asistencia social; derecho a la educación; derecho
al trabajo; derecho a la vivienda; derecho al medio ambiente; derecho a la cultura;
derecho a la protección de la familia; derechos de las comunidades indígenas
derechos del consumidor y usuario; derecho al desarrollo económico y social;
derecho al deporte; derecho a los servicios públicos.
6.4 Límites a los derechos y libertades
Las limitaciones a los derechos y las libertades tienen su origen en el respeto a los
derechos de las demás personas, una génesis material y en el derecho positivo.
Todos los miembros de la sociedad son titulares de derechos fundamentales por lo
que, nadie puede utilizar su derecho en perjuicio de otro. Artículo 32.2 de la
Convención Americana Sobre Derechos Humanos. El texto de este artículo va en
igual sentido que el artículo 4º. de la Declaración de Derechos del Hombre y del
ciudadano (1789), la que agrega que “Estos límites solo pueden estar
determinados por ley”.
La otra categoría de restricciones es de orden material y estas tienen que ver con
las posibilidades del Estado de forma directa o a través de instituciones no públicas
que por el principio de subsidiariedad prestan su colaboración a la satisfacción de
derechos de la segunda generación, no así de los otros derechos fundamentales
que su satisfacción corresponde de forma exclusiva al Estado. Artículo 1.1 del
Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales.
Un último tipo de limitación son las que prevé el orden jurídico positivo, y en él se
expresan las misma de manera explícita.
La Constitución establece las limitaciones a los derechos constitucionales en los
artículos 138 y 139. Se resalta la obligación del estado de mantener a los
habitantes en el pleno goce de sus derechos, luego establece las salvedades que
son: “Invasión del territorio, de perturbación grave a la paz, de actividades contra
la seguridad del Estado o calamidad pública” dejando expresados cuales artículos
no tendrán plena vigencia en esas situaciones y la gradación de las limitaciones y
que la Ley de Orden Público establece las medidas y facultades que procedan para
cada una de las gradaciones (Estado de prevención, de alarma, calamidad pública,
de sitio y de guerra).

6.5 Seguridad jurídica y garantías constitucionales


Todo ordenamiento jurídico pretende realizar el valor de la seguridad jurídica el
que además de ser abstracto es multívoco e implica que, por una parte, se
entiende como la sujeción del poder del Estado al ordenamiento jurídico, la
división de poderes y respeto a los derechos fundamentales.
Para la Declaración de Derechos del Hombre y el Ciudadano (art. 8) es la
protección que la sociedad otorga a cada uno de sus miembros para proteger su
persona, sus derechos y su propiedad.
De ahí que la seguridad jurídica sea vista desde dos dimensiones, una, con la
previsibilidad de los comportamientos y sus consecuencias jurídicas y la otra
referida al funcionamiento del poder público.
Se ha dicho que las garantía son la protección que la Constitución otorga a los
habitantes del país y que el Estado está en la obligación de prestar, dicha
prestación al mismo tiempo es reconocimiento real y respeto a los derechos y
libertades del individuo de los grupos sociales.
Al relacionar ambos conceptos, se tiene que, para que las garantías fundamentales
o no, sean efectivas se hace necesario que exista por parte del Estado, sus órganos,
instituciones y funcionariado sometimiento irrestricto a la Constitución y las leyes y
su consecuencia de reconocimiento, respeto y adecuación de sus actos a los
derechos y libertades fundamentales.
Lo cual se traducirá en la confianza para los habitantes del país y los extraños la
certeza de que, el Estado en todas sus actuaciones lo hará conforme al sistema
jurídico vigente y positivo. Es decir, actuará de conformidad a las reglas del juego,
será previsible.
6.6 Derechos políticos
Para todo derecho existe un correlato que es un deber u obligación. Sí, el derecho
es la facultado de exigir que se cumpla con lo que la Constitución y la ley establece,
ya que ello es el condicionamiento básico para la satisfacción de nuestras
necesidades, la realización de la justicia y procurar el bien común. El deber o la
obligación frente al derecho de que se trate es cumplir con la ley.
La Constitución Política de Guatemala en su Capítulo III del Título II, se refiere a los
deberes y derechos cívicos y políticos.
El artículo 136 establece los deberes y derechos políticos de los ciudadanos:
a) “Inscribirse en el Registro de Ciudadanos;
b) Elegir y ser electo;
c) Velar por la libertad y efectividad del sufragio y la pureza del proceso electoral;
d) Optar a cargos públicos;
e) Participar en actividades políticas; y,
f) Defender el principio de alternabilidad y no reelección de la Presidencia de la
República.”

A lo que hay que agregar que únicamente los guatemaltecos tienen derecho de
petición en materia política.
Por su parte en el preámbulo del Pacto Internacional de los Derechos Civiles y
Políticos declara que,

“(…) con arreglo a la Declaración Universal de los Derechos, no puede realizarse el


ideal del ser humano libre en el disfrute de las libertades civiles y políticas…, a
menos que se creen condiciones que permitan a cada persona gozar de sus
derechos civiles y políticos, tanto como sus derechos económicos, sociales y
culturales”.

Importante es señalar que en artículo 5.1 deja en claro que ninguna disposición del
Pacto puede ser interpretada como que se concede al Estado, grupo o individuo
“para emprender actividades o realizar actos encaminados a la destrucción de
cualquiera de los derechos y libertades reconocidos en el Pacto o su limitación en

mayor medida que la prevista…”


En conclusión, el respeto irrestricto por parte del Estado de los derechos,
libertades y garantías, reconocidos como Derechos Humanos por la Constitución
por ser inherentes a la persona humana y siendo estos un reconocimiento a su
dignidad y de su “realización de un ser humano libre”, encaja perfectamente con la
vivencia de un Estado constitucional y democrático de Derecho.
BIBLIOGRAFÍA

Álvarez Conde, Enrique (1999). Curso de Derecho Constitucional. 3ª. edición, Editorial
Tecnos, Madrid.
Asamblea de Naciones Unidas. Pacto Internacional de Derechos Económico, Sociales y
Culturales. https://www.ohchr.org/sites/default/files/cescr_SP.pdf
Asamblea de Naciones Unidas. Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
https://www.ohchr.org/es/instruments-mechanisms/instruments/international-
covenantcivil-and-political-rights
Castillo-Córdova, L. ¿Existen los llamados conflictos entre derechos fundamentales?
Universidad de Piura.
https://pirhua.udep.edu.pe/bitstream/handle/11042/1911/Existen_los_llamados_conflict
os.pdf;sequence=3
Corte de Constitucionalidad. Constitución Política de la República de Guatemala con notas
de Jurisprudencia (2017). Serviprensa. Guatemala
Corte IDH. Cuadernillos de jurisprudencia de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos. Jurisprudencia sobre Guatemala, No. 34, 2021,
https://www.corteidh.or.cr/tablas/R21739.pdf
Gutiérrez, Carmen María. Los derechos humanos en el derecho interno y en los tratados
internacionales. Su protección por la jurisdicción constitucional guatemalteca.
https://www.corteidh.or.cr/tablas/R21739.pdf

También podría gustarte