Santesmases Mestre - Capitulo 1
Santesmases Mestre - Capitulo 1
Santesmases Mestre - Capitulo 1
© Ediciones Pirámide 43
1. ¿QUÉ ES EL MARKETING?
1.1. El marketing como filosofía y actividad
La actividad de comercialización o de intercambio de bienes y servicios es
una de las primeras que llevó a cabo el ser humano en cuanto se relacionó con
los demás de su especie. Pero esta actividad, con el transcurso del tiempo y el
incremento del número y complejidad de los intercambios, ha ido evolucionando
tanto en la forma de entenderla como de practicarla. El marketing aporta preci-
samente una forma distinta de concebir y ejecutar la función comercial o relación
de intercambio entre dos o más partes.
El marketing es, por consiguiente, tanto una filosofía como una técnica. Como
filosofía, es una postura mental, una actitud, una forma de concebir la relación
de intercambio, por parte de la empresa o entidad que ofrece sus productos al
mercado. Esta concepción parte de las necesidades y deseos del consumidor y
tiene como fin su satisfacción del modo más beneficioso, tanto para el comprador
o consumidor como para el vendedor. Como técnica, el marketing es el modo
específico de ejecutar o llevar a cabo la relación de intercambio, que consiste en
identificar, crear, desarrollar y servir a la demanda.
La gestión de la actividad de comercialización desarrollada por una empresa
o por cualquier otra entidad, si aplica los principios del marketing, constituye lo
que se denomina dirección de marketing (marketing management), que incluye
el análisis de la situación (mercado, competencia, entorno, etc.) y el diseño de
estrategias para alcanzar los objetivos de la entidad, así como la puesta en prác-
tica de dichas estrategias y el control de los resultados.
El diseño y la ejecución de las estrategias se basan en los cuatro instrumen-
tos fundamentales del marketing: el propio producto ofertado (cualquier bien
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Introducción y conceptos básicos
1
Robert W. Ruekert y Orville C. Walker, Jr., «Marketing’s Interaction with Other Functional Units: A
Conceptual Framework and Empirical Evidence», Journal of Marketing, 51, 1, enero 1987, págs. 1-19, y
Regis McKenna, «El nuevo concepto de marketing: marketing es todo», Harvard-Deusto Business Review, 48,
cuarto trimestre 1991, págs. 25-38.
2
Afirmaciones sostenidas por Theodore Levitt en diversos de sus escritos. Ver, por ejemplo, La moda del
marketing, Ediciones Grijalbo, Barcelona, 1975, y Comercialización creativa, CECSA, México, 1986.
3
Véase Robert Bartels, The Development of Marketing Thought, Richard D. Irwin, Homewood, Illinois,
1962, pág. 24, y Paul D. Converse, «The Development of the Science of Marketing-An Exploratory Survey»,
Journal of Marketing, 10, julio 1945, págs. 14-23.
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Marketing: conceptos y estrategias
4
Véase, por ejemplo, José María Suárez Campos, «El marketing en España», Esic-Market, núm. 52,
abril-junio 1986, págs. 43-57; Enrique Ortega, «¿Hacia dónde va el marketing en España?, IPMARK, núm.
301, 16-31 diciembre 1987, págs. 177-183; Caridad Ciudad, «El arte de vender mejor», Mercado, 18-9-87,
páginas 43-45, y Paula del Sol, «El irresistible empuje del marketing», Dinero, 2-12-86, págs. 87-88; Mar
Heras Pérez, «El paisaje del Nuevo Marketing», MK Marketing + Ventas, núm. 228, octubre 2007, págs. 58-68.
5
Shelby D. Hunt, «Marketing is...», Journal of the Academy of Marketing Science, 20, 4, otoño 1992,
páginas 301-321.
6
Enrique Ortega Martínez, «La aportación de la universidad al desarrollo del marketing en España»,
Esic-Market, 65, julio-septiembre 1989, págs. 35-47, y José María Sánchez Cremades, «La primera escuela
de Marketing en España cumple veinticinco años», Esic-Market, 67, enero-marzo 1990, págs. 135-167.
7
Las características del EEES y del proceso de Bolonia pueden consultarse en: http://www.educacion.es/
espacio-europeo-educacion-superior.html.
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Introducción y conceptos básicos
© Ediciones Pirámide 47
Marketing: conceptos y estrategias
culturales, sociales y ambientales, y los estímulos del marketing. Así, por ejemplo,
la manera de satisfacer la necesidad básica de comer varía según se trate de un
español o de un indígena africano, de un cristiano o de un musulmán, y de un
niño o de un anciano. El deseo supone un acto de voluntad, posterior a la nece-
sidad, pero de la cual no se deriva necesariamente. Se puede necesitar algo pero
no querer satisfacer esta necesidad. Así, por ejemplo, un testigo de Jehová puede
necesitar una transfusión de sangre, pero bajo ningún concepto la admitirá, aun
cuando esté en peligro su vida.
La demanda es una formulación expresa de un deseo, que está condicionada
por los recursos disponibles del individuo o entidad demandante y por los estí-
mulos de marketing recibidos. Las necesidades son ilimitadas, pero los recursos,
en cambio, son limitados, y los compradores los asignan de distinto modo, según
sus preferencias, utilidad percibida o estímulos recibidos.
Hay muchas necesidades distintas, que pueden ser satisfechas con productos
diferentes, y un mismo producto puede satisfacer varias necesidades a la vez. Así,
por ejemplo, la necesidad de transporte puede ser satisfecha mediante diferentes
alternativas: automóvil particular, autobús, tren, etc.; pero cualquiera de ellas no
sólo satisface la necesidad primaria de transporte, sino también otras: el automó-
vil proporciona, además, estatus, independencia; el tren o el autobús, posibilidad
de realizar otras actividades mientras se viaja, como leer, ver una película o des-
cansar.
El marketing, por tanto, actúa fundamentalmente sobre la demanda. Identifi-
ca, crea o desarrolla demanda, haciendo posible que los deseos se conviertan en
realidad. Además, como factor cultural que es, propio de una sociedad desarro-
llada, contribuye también a orientar los deseos y canalizarlos hacia demandas
efectivas. Pero no ha de crear necesidades artificiales. Éstas deben existir, bien
de forma manifiesta o latente. Han de ser reales y no aparentes.
Aunque puede estimularse la demanda sin existir una necesidad previa, esta
demanda será artificial, y acabará desapareciendo. Los posibles compradores
terminarán rechazando lo que realmente no se necesita. El marketing ha de iden-
tificar las necesidades y, posteriormente, dar una respuesta efectiva a las mismas.
En la figura 1.1 se resume gráficamente la actuación del marketing con respecto
a las necesidades, deseos y demandas.
No es fácil, sin embargo, traducir en términos operativos las necesidades de
los consumidores. Puede ser que éstos no sepan lo que quieren o sean incapaces
de expresarlo, hasta que se enfrentan a elecciones específicas. Y en algunas oca-
siones quieren que se les diga qué tienen que comprar, e incluso que se les pre-
sione8. A menudo, deben percibir los productos de forma tangible, antes de que
puedan juzgar, porque no son capaces de percibir cómo los atributos de un pro-
8
Stephen Brown, «Torment Your Customers (They’ll Love It)», Harvard Business Review, octubre 2001,
páginas 82-88.
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Introducción y conceptos básicos
Factores Factores
culturales/sociales. económicos.
Características Recursos
personales disponibles
Orienta Canaliza
Identifica Estimula
MARKETING
ducto están conectados con sus necesidades hasta que lo prueban. Por otra parte,
los consumidores pueden ser inconsistentes al fijar sus preferencias y necesidades,
pidiendo que un producto reúna simultáneamente características muchas veces
contrapuestas (por ejemplo, calidad y bajo precio, versatilidad y simplicidad).
Finalmente, las preferencias de los consumidores varían ampliamente, en función
de las características personales, estilos de vida y niveles de satisfacción de otras
necesidades previas9.
3. CRÍTICAS AL MARKETING
La característica más importante del concepto actual del marketing puede
resumirse en la orientación al consumidor. Pero esta forma de concebir el mar-
keting no es la que está o ha estado siempre presente en la comercialización de
un producto o servicio. No son muchas las organizaciones que tienen, en reali-
dad, una orientación hacia el consumidor. Aunque manifiesten que aplican el
marketing, lo único que hacen es, muchas veces, publicidad y venta, sin preocu-
parse efectivamente de conocer las necesidades del cliente potencial. El concep-
to actual de marketing no siempre tiene el protagonismo que se merece 10. Como
9
Harper H. Boyd y William F. Massy, Marketing Management, Harcourt, Brace Jovanovich, Nueva York,
1972, págs. 6-7.
10
Nigel F. Piercy, «Marketing Implementations: The Implications of Marketing Paradigm Weakness for
the Strategy Execution Process», Journal of the Academy of Marketing Science, 26, 3, verano 1998, pági-
nas 222-236.
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Marketing: conceptos y estrategias
4. EL CONCEPTO DE MARKETING
El concepto de marketing no es una definición sobre lo que es y hace el mar-
keting. Se trata de una forma de pensar, una filosofía de dirección, sobre cómo
debe entenderse la relación de intercambio de los productos de una organización
con el mercado.
11
Robert L. Steiner, «The Prejudice against Marketing», Journal of Marketing, 40, 3, julio 1976, páginas 2-9.
12
Peter Drucker, La gerencia. Tareas, responsabilidades y prácticas, Editorial «El Ateneo», Buenos Aires,
1975, pág. 46.
13
Steven H. Star, «Marketing and Its Discontents», Harvard Business Review, 67, 6, noviembre-diciem-
bre 1989, págs. 148-154. Traducción española: «Consideraciones prácticas para segmentar un mercado»,
Harvard-Deusto Business Review, 43, tercer trimestre 1990, págs. 93-100.
14
Véase Theodore Levitt, Comercialización..., ob. cit., págs. 143-154.
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Introducción y conceptos básicos
15
Levitt, La moda..., ob. cit., pág. 432.
16
Philip Kotler, Dirección de Marketing, 7.ª ed., Prentice-Hall, Madrid, 1992, págs. 13-29.
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Marketing: conceptos y estrategias
TABLA 1.1
Concepción/orientación de la relación de intercambio
Competencia Orientación Énfasis
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Introducción y conceptos básicos
fin producir lo que el mercado demanda, y para ello trata de identificar previa-
mente cuáles son las necesidades de los consumidores.
Hay muchas pruebas de la influencia del nivel de competencia en la aplicación
del marketing, en especial en aquellos sectores dominados anteriormente por
monopolios, como los combustibles, las comunicaciones, el transporte aéreo, etc.,
que han tenido un proceso de privatización. Estas empresas, acostumbradas a
mercados cautivos, empezaron a aplicar el marketing en cuanto tuvieron que
competir con otras para conseguir el favor del mercado.
A pesar de los avances registrados en la aplicación del marketing, todavía está
muy presente en las organizaciones la orientación al producto o a las ventas.
Ofrecer un buen producto es necesario, pero no es suficiente. Un buen producto
puede ser un fracaso de ventas si no se distribuye adecuadamente, no se comu-
nican suficientemente sus beneficios o el precio es elevado. Pero tampoco es
suficiente llevar a cabo intensas campañas publicitarias y de promoción para es-
timular las ventas, si el producto que se ofrece no es el que el mercado necesita
o desea. Hay que orientarse al mercado y descubrir qué necesitan los consumi-
dores.
17
Levitt, La moda..., ob. cit., pág. 311.
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Marketing: conceptos y estrategias
puesto que trata de crear o adaptar los productos a las necesidades de los consu-
midores18.
La venta considera que el consumidor potencial, si se le persuade mediante una
promoción intensa, demandará el producto o servicio ofertado. Pero, en realidad,
lo que el comprador adquiere no es el producto en sí, sino la expectativa de satis-
facer una necesidad. El que compra un teléfono móvil lo hace porque le ofrece la
posibilidad de comunicarse en cualquier sitio; el que va al cine a ver una película,
busca entretenimiento, y si hay un medio alternativo que se lo ofrezca de modo más
efectivo, cambiará su elección. Tampoco se compra el servicio de correos, porque
se necesite de él. Lo que se necesita realmente es comunicación escrita, o comunica
ción, en términos más amplios; y si ésta puede efectuarse de modo más ventajoso
mediante un servicio de mensajeros, un fax o a través de Internet, se cambiará tam-
bién la elección. El centrarse en el producto que se vende y no en la necesidad que
satisface puede constituir una «miopía» de fatales consecuencias19. El producto es
sólo el medio para alcanzar un fin, que es el de satisfacer una necesidad. El que se
pueda conseguir de un modo efectivo es, precisamente, lo que persigue el marketing.
El marketing, en definitiva, trata de convertir las necesidades de los consu-
midores en oportunidades de negocio para la empresa. El marketing crea valor
ofreciendo soluciones mejores, ahorrando al comprador tiempo y esfuerzo en la
búsqueda y adquisición del producto y proporcionando mayores niveles de vida
a la sociedad en su conjunto20.
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Introducción y conceptos básicos
También Zara, la marca principal del grupo español de confección Inditex 22,
con más de 1.500 tiendas en 78 países, supo descubrir lo que quería el mercado.
Apostó claramente por «moda a un precio razonable» y con una capacidad de
respuesta impresionante a las demandas de sus clientes. Los responsables de estas
tiendas transmiten diariamente a la central sus impresiones sobre el diseño y el
color de la ropa que los clientes manifiestan a sus empleados.
Es necesario que toda la organización crea en la importancia del cliente, por
cuanto los resultados positivos de la gestión de la entidad dependen del grado de
satisfacción de sus clientes. Si el cliente está satisfecho, continuará relacionán-
dose con la organización y atraerá nuevos clientes. Por el contrario, si no lo está,
no volverá a tener tratos con ella y puede evitar que otros los tengan.
Para una eficaz aplicación del concepto de marketing a una organización se
requiere, en primer lugar, disponer de un adecuado sistema de información que
identifique las necesidades de los clientes potenciales, y, en segundo lugar, que
exista un departamento de marketing con suficiente autoridad para dirigir y
coordinar todas las actividades destinadas a desarrollar la demanda y servir al
cliente. Aunque la filosofía de marketing debe ser compartida por toda la orga-
nización, la tarea de dirección de las actividades de marketing no puede estar
dispersa en diversos departamentos, por cuanto podrían perderse de vista las ne-
cesidades reales de los clientes y se dificultaría la coordinación de las acciones a
desarrollar para satisfacer de modo efectivo tales necesidades23.
Pero cualquier organización que desempeñe una actividad en la sociedad res-
ponde también ante ella. Si los productos que vende o los servicios que presta
perjudican a las personas o el entorno, deben eliminarse o reducirse al mínimo
los daños causados. Si los envases de los productos vendidos, o los gases que
desprenden, contaminan el medio ambiente, deben buscarse soluciones alternati-
vas. Si los alimentos vendidos no tienen un valor nutritivo equilibrado, debe
mejorarse su composición.
La organización, por tanto, considerando la responsabilidad social que debe
asumir, ha de hacer un balance entre las necesidades de sus clientes y el interés
y bienestar de la sociedad en general.
22
http://www.inditex.com/es/quienes_somos/cadenas/zara#
23
Véase William M. Pride y O. C. Ferrell, Marketing. Basic Concepts and Decisions, 5.ª ed., Houghton
Mifflin Company, Boston, 1987, pág. 17, y Peter D. Bennet, Marketing, McGraw-Hill, Inc., Nueva York, 1988,
páginas 10-11.
© Ediciones Pirámide 55
Marketing: conceptos y estrategias
TABLA 1.2
Clasificación de las escuelas de pensamiento del marketing
Perspectiva Perspectiva
no interactiva interactiva
24
Philip Kotler, «A Generic Concept of Marketing», Journal of Marketing, 36, abril 1972, págs. 46-54.
25
Kotler, «A Generic...», ob. cit., y Robert Bartels, «The Identity Crisis in Marketing», Journal of Mar-
keting, 38, octubre 1974, págs. 73-76.
26
Jagdish N. Sheth, David M. Gardner y Dennis E. Garrett, Marketing Theory: Evolution and Evaluation,
John Wiley & Sons, Inc., Nueva York, 1988.
56 © Ediciones Pirámide
Introducción y conceptos básicos
27
Melvin Copeland, «The Relation of Consumers’ Buying Habits to Marketing Methods», Harvard
Business Review, 1, abril 1923, págs. 282-289.
28
William J. Reilly, The Law of Retail Gravitation, The University of Texas, Austin, Texas, 1931; Paul D.
Converse, A Study of Retail Trade Areas in East Central Illinois, University of Illinois Press, Urbana, 1943, y
«New Laws of Retail Gravitation», Journal of Marketing, 14, 4, octubre 1949, págs. 379-384.
29
E. T. Grether, «A Theoretical Approach to the Study of Marketing», en Cox y Alderson (ed.),
Theory in Marketing, Irwin, Homewood, Ill., 1950, págs. 113-123, y «Regional-Spatial Analysis in Marketing»,
Journal of Marketing, 47, 4, otoño 1983, págs. 36-43.
30
Sheth, Gardner y Garrett, ob. cit., pág. 77.
31
Wroe Alderson, Marketing Behavior and Executive Action, Richard D. Irwin, Homewood, Illinois, 1957,
y Dinamic Marketing Behavior, Richard D. Irwin, Homewood, Illinois, 1965.
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Marketing: conceptos y estrategias
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Introducción y conceptos básicos
facer sus numerosas necesidades. Consideran, por el contrario, que la teoría del
marketing debe profundizar en las acciones, procesos y causas del comportamien-
to del consumidor. Esta escuela se apoya en conceptos desarrollados en otras
disciplinas, especialmente la psicología y la sociología, por lo que, a veces, se ha
apartado de los planteamientos estrictos del marketing34.
La escuela activista supone un enfoque orientado hacia la crítica, a veces
emocional, de los efectos del marketing sobre el entorno. Se centra más en el
consumidor o en el comprador que en el productor o el vendedor. Se inicia fuera
de los confines tradicionales de la disciplina del marketing, surge de los movi-
mientos ciudadanos de defensa del consumidor. Aborda temas tales como la se-
guridad del producto, la satisfacción del consumidor, los efectos del uso de pro-
ductos sobre el entorno y la responsabilidad social de las empresas. La escuela
activista guarda relación con la del comportamiento del comprador y la del ma-
cromarketing. Sin embargo, se diferencia por su perspectiva más normativa y en
favor de los consumidores y la falta de una perspectiva institucional o macro 35.
La escuela del macromarketing, surgida en los años sesenta, dirige su atención
al papel e impacto de las actividades e instituciones del marketing en la sociedad
y viceversa. En especial, se centra en los temas relativos a la responsabilidad
social del marketing, a la ética comercial, a la protección y defensa de los con-
sumidores y al marketing ecológico.
34
Ibídem, págs. 110-124.
35
Ibídem, págs. 127-135.
36
Ibídem, págs. 150-158.
37
Kenneth Boulding, «General Systems Theory - The Skeleton of Science», Management Science, 2, abril
1956, págs. 197-208; Jay W. Forrester, «Industrial Dynamics: A major Breakthrough for Decision Makers»,
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Marketing: conceptos y estrategias
Harvard Business Review, 36, julio-agosto 1958, págs. 37-66, e Industrial Dynamics, MIT Press, Cambridge,
Mass., 1961; y Ludwig von Bertalanffy, General System Theory, George Braziller, Inc., Nueva York, 1968.
38
Sheth, Gardner y Garrett, ob. cit., págs. 162-171.
39
Richard P. Bagozzi, «Marketing as Exchange. A Theory of Transactions in the Marketplace», American
Behavioral Scientist, 21, 4, marzo-abril 1978, págs. 535-556.
40
Shelby D. Hunt, «The Nature and Scope of Marketing», Journal of Marketing, 40, 3, julio 1976, pági-
nas 17-28.
60 © Ediciones Pirámide
Introducción y conceptos básicos
Kotler y Levy fueron, a continuación, los que de una forma más expresa se
manifestaron a favor de una ampliación del concepto de marketing, a fin de in-
cluir organizaciones distintas de las empresas. En un artículo escrito en 1969,
resaltan el hecho de que hay otras organizaciones sin ánimo de lucro que tienen
productos y clientes y realizan actividades análogas a las llevadas a cabo en las
empresas41. Dos años más tarde, en 1971, Kotler y Zaltman introducen y definen
el concepto de marketing social, cuya finalidad es influir en la aceptación de
ideas sociales42.
A partir de las propuestas anteriores, se han ido manifestando en los últimos
años dos vías de ampliación, que son aceptadas en la actualidad por la mayoría
de autores. Por una parte, se ha ampliado el alcance del marketing a fin de incluir
organizaciones distintas de las empresas. Por otra, se han planteado las dimen-
siones sociales del marketing, tanto para incluir la promoción de causas sociales
(lo que ha dado origen al denominado marketing social), como para considerar
la responsabilidad social derivada de la práctica del marketing. Esta última inclu-
ye no sólo el deber de proporcionar un producto que no sea perjudicial para la
salud y el bienestar de los consumidores actuales y futuros, sino también el de
preservar el medio ambiente, con la elaboración de productos que respeten y
conserven los recursos naturales. Esta concepción amplia del marketing, que tie-
ne en cuenta tanto los aspectos sociales como los ecológicos o medioambientales
de la relación de intercambio, se denomina marketing sostenible43.
41
Philip Kotler y Sidney Levy, «Broadening the Concept of Marketing», Journal of Marketing, 33, ene-
ro 1969, págs. 10-15.
42
Philip Kotler y Gerald Zaltman, «Social Marketing: An Approach to Planned Social Change», Journal
of Marketing, 35, julio 1971, págs. 3-12.
43
Frances Brassington y Stephen Pettit, Principles of Marketing, 3.ª ed., Prentice-Hall, Essex, 2003,
páginas. 19-20.
44
Se siguen a lo largo de esta exposición las tesis de Shelby D. Hunt contenidas principalmente en su
artículo «The Nature...», ob. cit., y en su libro Marketing Theory: The Philosophy of Marketing Science, Richard
D. Irwin, Inc., Homewood, Illinois, 1983.
© Ediciones Pirámide 61
Marketing: conceptos y estrategias
TABLA 1.3
Esquema de clasificación del alcance del marketing (ejemplos de temas a incluir
en cada apartado)
Positivo Normativo
Micro — Cómo utiliza el usuario los servi- — Cómo deben las instituciones no
cios públicos lucrativas decidir su marketing-
— Cómo determinan sus marketing- mix
mix las instituciones no lucrativas — Cómo debe organizarse y contro-
— Casos de estudio de aplicación del larse la actividad de marketing
Sector sin ánimo marketing
de lucro Macro — Cómo es la infraestructura de los — Cuál es la infraestructura adecuada
servicios públicos y cuál es su efi- de servicios públicos
ciencia — Puede anunciarse un político como
— Cómo influye la televisión en los un detergente
resultados electorales — Debe estimularse el uso de servi-
cios públicos
Fuente: Adaptado de Shelby D. Hunt, «The Nature and Scope of Marketing», Journal of Marketing, vol. 40, 3, julio 1976,
páginas 17-28.
62 © Ediciones Pirámide
Introducción y conceptos básicos
La división entre sector con ánimo de lucro/sector sin ánimo de lucro fue la
que dio lugar, como se ha indicado, a los planteamientos iniciales sobre una po-
sible ampliación del alcance del marketing.
Los primeros estudios sobre el marketing, hasta 1920 aproximadamente, se
correspondían con una orientación «ánimo de lucro/macro/positiva», por cuanto
se dedicaban fundamentalmente a describir las instituciones comerciales dentro
del contexto de las empresas con ánimo de lucro.
A lo largo de los años sesenta, principalmente, tuvo su auge la orientación
«lucro/micro/normativo», sobre todo por parte de los que proponían el enfoque
«decisionista» o «gerencial». Éste ha sido el ámbito más corriente del marketing
durante muchos años. El problema de abordar el estudio del marketing con una
orientación normativa, tratando de establecer recetas o reglas de actuación, es que
los supuestos en los que se basan los modelos elaborados para tomar decisiones
«óptimas» se apartan muchas veces de la realidad, y sus soluciones, por tanto, no
son válidas.
Actualmente hay un consenso generalizado entre la mayoría de autores de que
el ámbito del marketing debe abarcar la totalidad de las ocho celdas contempladas
en la tabla 1.3 y no limitarse sólo a algunas de ellas. Aunque se acepta que el
marketing cumple los requisitos de una disciplina científica (tener un objeto de
estudio propio, poseer un cuerpo de doctrina amplio y adoptar métodos de inves-
tigación objetivos y sistemáticos), se considera que cuanto mayor sea el alcance
del marketing, más posibilidades tiene de ser una ciencia y no sólo una técnica o
un arte.
En su evolución como ciencia, el marketing se ha basado en disciplinas tales
como la psicología, que ha proporcionado los fundamentos para diversos modelos
de comportamiento del consumidor y análisis de actitudes; la estadística, cuyas
técnicas han sido ampliamente utilizadas para analizar relaciones entre variables;
y la investigación operativa, empleada en los modelos de optimización. Asimis-
mo, la economía ha proporcionado un importante soporte teórico a muchos prin-
cipios del marketing, especialmente a los relacionados con el análisis de la de-
manda46.
Si bien el marketing ha desarrollado, como disciplina científica, un conside-
rable cuerpo de doctrina en los últimos años con abundantes teorías, métodos y
modelos propios o adaptados de otras ciencias47, su grado de evolución todavía
está lejos respecto de otras disciplinas, que, con mucha mayor tradición científi-
ca, poseen un bagaje doctrinal mucho más amplio y evolucionado. No obstante,
los considerables progresos, tanto en el desarrollo de teorías como de métodos
46
Dan Horsky y Subrata K. Sen, «Interfaces between Marketing and Economics: An Overview», Journal
of Business, 53, 3, parte 2, julio 1980, págs. S5-S12.
47
John G. Meyers, Stephen A. Greyser y William F. Massy, «The Effectiveness of Marketing’s “R & D”
for Marketing Management: An assessment», Journal of Marketing, 43, enero 1979, págs. 17-29.
© Ediciones Pirámide 63
Marketing: conceptos y estrategias
7. DEFINICIÓN DE MARKETING
La definición de marketing viene determinada por el concepto y enfoque del
mismo, así como por su alcance (véase figura 1.2). Una definición completa de
marketing deberá contemplar, en primer lugar, el concepto actual del mismo, que
parte de las necesidades del consumidor y trata de satisfacerlas. En segundo lugar,
deberá tener en cuenta el enfoque más reciente del marketing, que toma la rela-
ción de intercambio como su objeto de estudio. Por último, deberá incluir todos
los ámbitos o situaciones de su objeto de estudio —la relación de intercambio—
que se considera que están dentro de su alcance. La tarea para conseguir que una
breve definición contenga todos los aspectos indicados no es, por tanto, nada
fácil.
CONCEPTO
ENFOQUE DEFINICIÓN
ALCANCE
48
American Marketing Association, Committee on Definitions, Marketing Definitions: A Glossary of
Marketing Terms, AMA, Chicago, 1960.
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Introducción y conceptos básicos
El marketing está constituido por todas las actividades que tienden a generar y
facilitar cualquier intercambio cuya finalidad sea satisfacer las necesidades o
deseos humanos52.
49
W. J. Stanton, Fundamentos de Marketing, Ediciones del Castillo, Madrid, 1969.
50
Philip Kotler, Dirección de Mercadotecnia, 2.ª ed., Editorial Diana, México, 1974.
51
Philip Kotler, Marketing Management. Analysis, Planning and Control, 3.ª ed., Prentice-Hall Interna-
tional, Londres, 1976, pág. 5.
52
William J. Stanton y Charles Futrell, Fundamentals of Marketing, 8.ª ed., McGraw-Hill, Inc., Nueva
York, 1987, pág. 4.
53
«AMA Board Approves New Marketing Definition», Marketing News, 19, 5, 1 marzo 1985, pág. 1.
© Ediciones Pirámide 65
Marketing: conceptos y estrategias
54
Christian Grönroos, «Defining Marketing: A Market-Oriented Approach», European Journal of Mar-
keting, 23, 1, 1989, págs. 52-60.
55
Kotler define más recientemente el marketing como «proceso social y de gestión por el cual los indi-
viduos y grupos obtienen lo que necesitan y desean, creando, ofreciendo e intercambiando productos de valor
con otros» (Philip Kotler, Marketing Management, 9.a ed., Prentice Hall International, Nueva Jersey, 1997,
página 9).
56
http://www.marketingpower.com/AboutAMA/Pages/DefinitionofMarketing.aspx.
66 © Ediciones Pirámide
Introducción y conceptos básicos
TABLA 1.4
Definición de marketing de la AMA (American Marketing Association) de 2007
Definición Observaciones
para crear, comunicar, suministrar e inter- El intercambio de valor como objetivo del
cambiar ofertas que tengan valor marketing, por medio del producto, la comu-
nicación, la distribución e, implícitamente, el
precio.
para los consumidores, clientes, colaborado- Fin último del marketing: beneficiar a todas
res y la sociedad en general. las partes de la relación de intercambio.
Aunque esta última definición de la AMA de 2007 supone una mejora sus-
tancial en relación con la anterior de 2004, sigue sin considerar el marketing como
una filosofía de dirección, es decir, una forma de concebir la relación de inter-
cambio y orientar la gestión de la misma.
De acuerdo con las críticas anteriores de las últimas definiciones de la AMA,
y considerando las posibles limitaciones y riesgos que conlleva reducir todo el
contenido de lo que es el marketing a una breve definición, se propone la siguiente:
© Ediciones Pirámide 67
Marketing: conceptos y estrategias
68 © Ediciones Pirámide
Introducción y conceptos básicos
57
Kotler, Marketing Management, 9.ª ed., ob. cit., pág. 11.
58
Theodore Levitt, Comercialización..., ob. cit., págs. 115-118.
© Ediciones Pirámide 69
Marketing: conceptos y estrategias
Beneficios DEMANDANTE
OFERENTE
(comprador/
(vendedor)
Coste (dinero) consumidor)
59
Shelby D. Hunt, «General Theories and the Fundamental Explananda of Marketing», Journal of Mar-
keting, 47, 4, otoño 1983, págs. 9-17.
70 © Ediciones Pirámide
Introducción y conceptos básicos
TABLA 1.5
Ejemplos de intercambios monetarios entre dos partes
Oferente Objetivo del intercambio Demandante
Alimentos, droguería
SUPERMERCADO
AMA DE CASA
Dinero
Transporte
EMPRESA DE
AUTOBUSES VIAJERO
Importe billete
Curación/tratamiento
MÉDICO
PACIENTE
Importe consulta
Dinero prestado
PRESTAMISTA
PRESTATARIO
Intereses más principal
Póliza de seguros
ASEGURADOR
ASEGURADO
Importe primas
Neumáticos
FABRICANTE FABRICANTE
NEUMÁTICOS AUTOMÓVILES
Dinero
© Ediciones Pirámide 71
Marketing: conceptos y estrategias
Beneficios
DEMANDANTE
OFERENTE
(comprador/
(vendedor) Coste: tiempo, consumidor)
esfuerzo, voto
9. MARKETING DE RELACIONES
En los últimos años se ha observado en la práctica del marketing una evolu-
ción en el alcance de su objeto de estudio, pasando de la transacción aislada a las
relaciones de intercambio. Esto ha supuesto considerar que el objetivo de la acción
comercial no es sólo conseguir una transacción, sino el establecimiento de rela-
ciones estables y duraderas con los clientes, mutuamente beneficiosas para las
partes. Estas relaciones han de conseguir la satisfacción y la lealtad del compra-
dor y asegurar la rentabilidad o los beneficios perseguidos por el vendedor. Se
ha pasado, por tanto, de un marketing de transacciones aisladas a un marketing
de relaciones. Todo ello con la ayuda de las modernas tecnologías de la infor-
mación y las bases de datos relacionales60. Al marketing de relaciones se le de-
nomina también «marketing interactivo»61.
60
Evert Gummerson, Total Relationship Marketing, 3.ª ed., Butterworth-Heinemann, Oxford, 2008, y
Regis McKenna, Marketing de relaciones, Ediciones Paidós, Barcelona, 1994.
61
Robert C. Blattberg y John Deighton,«Interactive Marketing: Exploiting the Age of Addressability»,
Sloan Management Review, 33, 1, otoño 1991, págs. 5-14.
72 © Ediciones Pirámide
Introducción y conceptos básicos
TABLA 1.6
Ejemplos de intercambios no monetarios entre dos partes
Oferente Objetivo del intercambio Demandante
Asistencia social
CÁRITAS
ESPAÑOLA DESVALIDO
Estima/agradecimiento
Servicios públicos
ADMINISTRACIÓN
PÚBLICA CIUDADANO
Impuestos (pago indirecto)
Programa/ideología
POLÍTICO
VOTANTE
Voto
Formación/oportunidades
ESCUELA
PÚBLICA ALUMNO
Tiempo, esfuerzos
Información/consejos
PROGRAMA DE
PREVENCIÓN
DEL SIDA ENFERMO
Atención, molestias POTENCIAL
Sensación de cumplimiento
de los deberes cívicos
CAMPAÑA
DE DONACIÓN
DE SANGRE DONANTE
Sangre, tiempo, molestias
© Ediciones Pirámide 73
Marketing: conceptos y estrategias
EMPLEADOR
Primas
Trabajo
Reducción
impacto
SEGURIDAD enfermedad
SOCIAL
Salarios
Pago
Cuotas costes
Curación
62
Frederick E. Webster, Jr., «The Changing Role of Marketing in the Corporation», Journal of Marketing,
56, 4, octubre 1992, págs. 1-17.
74 © Ediciones Pirámide
Introducción y conceptos básicos
clientes actuales como potenciales, facilita cada vez más la aplicación del mar-
keting de relaciones a mercados de consumo.
Pero, además de las razones técnicas, hay otras de mercado que explican la
tendencia actual hacia un marketing de relaciones. La liberalización del mercado
y el aumento de la competencia incrementan las exigencias de los clientes, que
desean un mejor servicio, más adaptado a sus necesidades y más personalizado.
El marketing de relaciones es una consecuencia de los cambios del entorno. En
una situación competitiva, en la que los consumidores o usuarios pueden elegir
entre muchas opciones, es muy difícil conseguir su lealtad. No basta sólo con la
calidad del producto. La solución es desarrollar un marketing que integre al clien-
te en la empresa, para crear una relación permanente entre ambos y que sirva de
referencia para la captación de nuevos clientes63.
El establecimiento de un marketing de relaciones, en contraposición al de
transacciones, supone una orientación a largo plazo que beneficia a todas las
partes que intervienen en la relación de intercambio. Su desarrollo está en función
del compromiso aceptado y la confianza mutua entre comprador y vendedor. El
compromiso y la confianza llevan directamente a comportamientos cooperativos
que conducen al éxito del marketing de relaciones64.
El desarrollo de la gestión de las relaciones con los clientes ha originado un
nuevo término en marketing. El acrónimo CRM (Customer Relationship Mana-
gement) se utiliza para incluir un conjunto de métodos, software y normalmente
tecnologías de Internet que facilitan la gestión sistemática y organizada de las
relaciones con los clientes. De acuerdo con esta concepción, una empresa puede
diseñar un sistema de información y gestión de base de datos, así como de rela-
ciones con los clientes, al que pueden acceder la dirección, los vendedores y
cualquier otro suministrador de servicio, así como los clientes, para obtener in-
formación. Este sistema ha de permitir consultar el historial de compras de los
clientes, segmentar y seleccionar los mejores clientes, identificar los productos y
servicios que se adaptan mejor a sus necesidades y dirigir ofertas personalizadas
a los clientes seleccionados. El sistema ha de servir también para prestar la ayu-
da y el soporte técnico que requieran los clientes.
Con la ayuda de las nuevas tecnologías CRM, el marketing de relaciones
permite llegar a una relación personalizada o individualizada con un gran núme-
63
Richard G. Barlow, «Relationship Marketing - The Ultimate in Customer Services», Retail Control, 60,
3, marzo 1992, págs. 29-37; Richard B. Harris, «Relationship marketing: Trust - A foundation for building
business», Managers Magazine, 68, 6, junio 1993, págs. 14-17, y Manuel Alfaro Rius, «Marketing relacional.
La gestión de los clientes», IPMARK, 459, diciembre 1995, págs. 7-9.
64
Shankar Ganesan, «Determinants of Long-Term Orientation in Buyer-Seller Relationships», Journal of
Marketing, 58, 2, abril 1994, págs. 1-19; Manohar U. Kalwani y Narakesari Narayandas, «Long-Term Manu-
factures-Suplier Relationships: Do They Pay Off for Supplier Firms», Journal of Marketing, 59, 1, enero 1995,
páginas 1-16, y Robert M. Morgan y Shelby D. Hunt, «The Commitment-Trust Theory of Relationship Mar-
keting», Journal of Marketing, 58, 3, julio 1994, págs. 20-38.
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Marketing: conceptos y estrategias
a) Suministradores:
• Relaciones con suministradores de bienes.
• Relaciones con suministradores de servicios.
b) Colaterales:
• Relaciones con competidores (alianzas estratégicas).
• Relaciones con instituciones privadas sin fines de lucro.
• Relaciones con instituciones gubernamentales.
c) Compradores:
• Relaciones con clientes finales, como es habitual en marketing de ser-
vicios.
65
Término popularizado por Don Peppers y Martha Rogers. Véase Don Peppers y Martha Rogers,
Uno × Uno. El marketing del siglo xxi, Ediciones B Argentina, Buenos Aires, 2000; y Don Peppers y Martha
Rogers, Uno × Uno. Herramientas para poner en práctica su plan de marketing, Ediciones B Argentina,
Buenos Aires, 2000.
66
Christian Grönroos, «From marketing mix to relationship marketing: Towards a paradigm shift in
marketing», Management Decision, 32, 2, 1994, págs. 4-20, y David Morris, «What’s old is new in relation-
ship marketing», Marketing News, 28, 4, 14 de febrero de 1994, págs. 4, 8.
67
Morgan y Hunt, ob. cit.
76 © Ediciones Pirámide
Introducción y conceptos básicos
DE
ENTRADA
- Suministradores
DE
SALIDA
- Clientes finales
- Intermediarios
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Marketing: conceptos y estrategias
• Ambient marketing.
• Buzz marketing.
• Field marketing.
• Marketing 2.0.
• Marketing de permiso.
• Marketing emocional.
• Marketing one to one.
• Marketing sensorial.
• Marketing viral.
• Neuromarketing.
• Street marketing.
78 © Ediciones Pirámide
Introducción y conceptos básicos
RESUMEN
El marketing es tanto una forma de concebir como de llevar a cabo la relación
de intercambio entre dos o más partes. El concepto de marketing es una fi
losofía de cómo debe entenderse la relación de intercambio, que implica
partir del conocimiento de las necesidades del consumidor y tratar de que la
transacción resultante sea satisfactoria para todos los que intervienen en la
misma, en particular, y para la sociedad, en general. El desarrollo de este
concepto es llevado a cabo por la dirección de marketing, que para el análi
sis de las necesidades del consumidor y la detección de oportunidades utili
za la investigación comercial y para diseñar estrategias se vale de cuatro
instrumentos básicos: el producto, el precio, la distribución y la promoción.
El término «marketing», acuñado en Estados Unidos a principios del siglo
pasado, tiene hoy en día una aceptación universal. Sus principios se aplican
no sólo a empresas o entidades de naturaleza económica, sino a todo tipo
de intercambio, ya sea de bienes, servicios o ideas, que pueda ser beneficio
so a las dos o más partes que lo llevan a cabo.
El marketing identifica o crea demanda, pero no crea necesidades, aunque
se le acusa, en ocasiones, de hacerlo. Tal error procede de confundir el mar
keting con la venta o la publicidad, que sólo son algunos de sus instrumen
tos, pero no los únicos. El concepto de marketing y el de venta difieren
sustancialmente. Mientras la venta tiene como objeto que el cliente quiera
lo que la empresa posee, el marketing, en cambio, trata de que la empresa
tenga lo que el cliente quiere.
El enfoque actual del marketing toma la relación de intercambio entre dos o
más partes como el objeto de estudio de la disciplina. Pueden distinguirse
doce enfoques distintos del marketing, desde las perspectivas económica/no
económica e interactiva/no interactiva.
Aunque el desarrollo doctrinal del marketing en los últimos años ha sido
notable, se considera por la mayoría de autores que el alcance del marketing
debe abarcar el triple criterio de clasificación «micro/macro», «positivo/nor
mativo» y «ánimo de lucro/sin ánimo de lucro», para que pueda tener la
categoría de disciplina científica.
La definición de marketing está determinada, en primer lugar, por el concep
to actual del mismo, centrado en la satisfacción de las necesidades del con
sumidor, considerando los aspectos sociales. En segundo lugar, por el enfo
que, que toma la relación de intercambio como el objeto de estudio del
marketing. Y, en tercer lugar, por el alcance que se considere que debe tener
la disciplina.
Para que tenga lugar una relación de intercambio deben darse varias condi
ciones. Si se alcanza un acuerdo entre las partes, se produce una transacción.
Las transacciones pueden ser monetarias o no monetarias y entre dos o más
partes. El marketing se concibe actualmente como un medio para establecer
relaciones de intercambio estables y duraderas con los clientes, que sean
mutuamente satisfactorias.
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