Eichmann en Jerusalen
Eichmann en Jerusalen
Eichmann en Jerusalen
y su defensor)
Al igual que todos los ciudadanos de Israel, el fiscal estaba convencido de que sólo un
tribunal judío podía hacer justicia a los judíos.
Delicias de la política internacional: se hizo gran énfasis en las relaciones de los árabes
con los nazis, al tiempo que se ocuparon bien de dejar sentado la “inocencia” de los
“alemanes honrados” (Adenauer & cía.) “no se hizo referencia alguna a los árabes
honrados” (27)
Cap 2: el acusado
…lo horrible puede ser no sólo grotesco sino completamente cómico. Parte de la
comedia no puede ser traducida, pues radica en la heroica lucha de Eichmann contra el
idioma alemán, que invariablemente lo derrota. (79)
Sin duda, los jueces tenían razón cuando por último manifestaron al acusado que todo lo
que había dicho eran palabras “hueras” pero se equivocaban al creer que la vacuidad era
amañada. (79-80)
Cuanto más se le escuchaba, más evidente era que su incapacidad para hablar iba
estrechamente unida a su incapacidad para pensar, particularmente, para pensar desde el
punto de vista de otra persona. No era posible establecer comunicación con él, no
porque mintiera, sino porque estaba rodeado por la más segura de las protecciones
contra las palabras y la presencia de los otros, y por ende contra la realidad como tal.