Especies en Extinción y Las Especies en Peligro
Especies en Extinción y Las Especies en Peligro
Especies en Extinción y Las Especies en Peligro
En el mundo se pierde cientos de miles de especies, muchas de ellas aún antes de ser
descubiertas por la ciencia. De ese modo, no sólo se pierde la variabilidad biológica,
sino además la diversidad genética, fuentes de sustentos para las generaciones futuras.
Una especie en peligro de extinción es una especie que puede extingirse en un futuro
próximo. A través de la historia de la evolución, millones de especies han desaparecido
debido a procesos naturales. En los últimos 300 años, sin embargo, los humanos han
multiplicado la tasa de extinción por mil.
Para todas las especies naturales, vegetales y animales, vivir constituye un peligro
cotidiano, deben cuidarse de sus congéneres, especialmente del más poderoso predador
que existe sobre la Tierra: el hombre. Los desastres ecológicos, la deforestación y otras
consecuencias de la acción humana provocan daños en la cadena trófica. En el mundo
actual la extinción de especies animales no está tan directamente relacionada con la
escazes de alimentos o la contaminación, como con acciones violentas directas (la caza
no reglamentada y el comercio ilegal de especies salvajes) o indirectas (la introducción
de especies exóticas, en determinados ambientes, que compiten por uno o más recursos
con individuos nativos o ya adaptados al lugar).
Según los conservacionistas, la depredación de la fauna a crecido vertiginosamente y se
estima actualmente que una especie desaparece cada 15 minutos. Para la naturaleza, lo
peor que le puede suceder, es la extinción de las especies, ya que con eso se pone en
peligro el equilibrio necesario en todo ecosistema. En esta cadena natural, cada especie
necesita de la otra para sobrevivir. La acelerada destrucción del hábitat es pretexto de
un desarrollo sin parámetros de sustentabilidad, condena a la extinción a una
biodiversidad en cuyas potencialidades se basa la vida del futuro. Y aunque esta actitud
represente a simple vista una postura antropocéntrica, el hombre en su afán de
búsqueda de nuevas alternativas, no puede apartarse de esa visión, pues de lo contrario
la misma existencia no tendría razón de ser. Introduciendo estos conceptos a la filosofía
de la comunicación, consideramos de vital importancia contribuir a la protección de los
recursos naturales, difundiendo las potencialidades de la riqueza faunistica.
Tráfico de especies
El tráfico de la flora y la fauna se ha convertido en uno de los emprendimientos
económicos más redituables y figura en el mundo en tercer lugar luego del de armas y
de las drogas.
El de la fauna mueve alrededor de 10.000 millones de dólares anuales y la flora, está
superando los 7.000 millones. A estas cifras habría que sumarle el tráfico clandestino...
Cada año se consumen en el mundo entre 600 y 900 toneladas de marfil, que se
obtienen de unos 150.000 colmillos de elefantes adultos. En 1990, el comercio de marfil
se prohibió internacionalmente.
Según el CITES, el tratado mundial que regula el comercio de especies protege a las
que están en peligro de extinción, la población de elefantes africanos se redujo de 1,3
millones de ejemplares a poco más de 600.000, durante la década del ochenta. Otra
década similar bastaría para provocar la extinción de la especie. Pero no es este el único
caso. Según los datos de las organizaciones TRAFFIC y WWF, cada año se comercia
ilegalmente con primates, ave, pieles de reptil y de mamíferos, orquídeas, cactus y peces
exóticos. Su destino son EEUU, Europa, Japón y parte del sudeste asiático. Y los usos
que se les dan son tan variados como la peletería de lujo (una piel de pantera siberiana
alcanza los 100.000 dólares en el mercado negro), ornamentos, productos
pretendidamente afrodisíacos y, en algunos casos, animales de compañia o plantas para
jardines. A causa de este comercio ilegal, unas 700 especies se encuentran al borde de la
extinción. Pero, además, otras 2.300 especies animales y 24.000 vegetales están
amenazadas.
Especies Invasoras
Es un tipo de contaminación o depredación que excede el ámbito de las ciudades. Es lo
que los ecólogos denomina "contaminación por especies" y que consiste en la
introducción por parte del hombre de plantas y animales extraños y que ejercen efectos
negativos sobre la flora y la fauna autóctonas.
Un animal o una planta introducidos en hábitat que no le es una de y propio compiten
con ventajas con las especies autóctonas por algún recurso esencial, se hibridan con
otras especies o bien se convierten en agentes transmisores de enfermedad. De esta
forma alteran las reglas de juego de un Ecosistema y pueden llegar a provocar cambios
sustanciales en su equilibrio. Las causas que conducen a la introducción de especies
foráneas pueden ser accidentales, como el caso de los animales y algas que viajan en el
agua de lastre o en las bodegas de los barcos, o de los individuos que se detienen en
puntos imprevistos durante sus migraciones. No obstante, la mayor parte de las
introducciones son, por lo general, forzadas. Se trata de animales de compañía, especies
introducidas para la caza y la pesca o para su consumo agrícola y ganaderos, además de
aquellas especies de las que, como los visones, se pretende un gran aprovechamiento
industrial.
Organismo: Viruela:
Origen: Cuenca del mediterráneo
Zonas afectadas: Casi todas las zonas habitadas
Efectos importantes: Dos tercios de la población indígena de América del sur
sucumbieron víctimas de la viruela en el siglo XVI. En Europa, a mediados de este
siglo, la viruela ocasionó la muerte de dos millones de personas. Actualmente está
erradicada.
La caza de ballenas.
La caza de ballenas empezó hace unos 8.000 años, de forma rudimentaria, con la
ballena negra, llamada franca porque flotaba al morir, facilitando así la tarea de los
cazadores. Anteriormente, se cazaba con arpones lanzados de pequeñas chalupas.