Milton

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JUEZ DE DISTRITO EN MATERIA DE AMPARO CIVIL,

ADMINISTRATIVO, Y DEL TRABAJO Y JUICIOS FEDERALES EN EL


ESTADO DE PUEBLA, EN TURNO.

MILTON TADEO GARZA RENTERIA por propio derecho, mexicano,


mayor de edad, para mantener contacto y seguir con los protocolos
sanitarios derivado de la contingencia sanitaria derivada por el virus
Sars cov2 (covid-19), señalo como medios de comunicacion el número de
celular "2226547839" y el correo electrónico:
[email protected], autorizando para tales efectos y en
términos amplios del artículo 12 de la ley de amparo al licenciado en
derecho GUSTAVO ANGEL SANTOS DÍAZ, con cedula profesional
número 11863899, debidamente registrada en el sistema computarizado
para el registro único de profesionales del derecho, ante los tribunales
de circuito y juzgados de distrito bajo el número de registro único
193668; luego, respecto de los licenciados en Derecho GUSTAVO ANGEL
SANTOS DIAZ, con nombre de usuario dentro del sistema electronico:
"ABOGADOSANTOS", sistema electrónico de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación (sistema de notificaciones electrónicas del portal
de servicios del Poder Judicial de la Federación) solicito se les de acceso
al expediente electrónico para poder dar seguimiento puntual al mismo
bajo la modalidad de "juicio en línea", asi mismo para que las
notificaciones las reciba por ese medio, en términos de los acuerdos
generales números 12/2020, 15/2020 y 17/2020, todos del pleno del
Consejo de la Judicatura Federal, que regula la integración y trámite del
expediente electrónico y uso de videoconferencias en todos los asuntos
competencia de los órganos jurisdiccionales a cargo del propio consejo;
ante usted respetuosamente comparezco para exponer:
Que por medio del presente, con fundamento en lo dispuesto en
los artículos 8, 103, fracción I y 107 de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos; 1, 107,fracción II de la Ley de Amparo
Reglamentaria de los artículos 103 y 107 de la Constitución Política de
los Estados Unidos Mexicanos, vengo a solicitar EL AMPARO Y
PROTECCIÓN DE LA JUSTICIA FEDERAL contra del acto y la autoridad
que más adelante se describe, por considerar que dicho acto es
violatorio de los derechos humanos reconocidos por la Constitución
Federal y en los Tratados Internacionales de los que el estado Mexicano
es parte.
En cumplimiento a lo dispuesto, en el artículo 108 de la Ley de
Amparo, expresamos lo siguiente:
NOMBRE Y DOMICILIO DEL QUEJOSO
MILTON TADEO GARZA RENTERIA, con domicilio ubicado en la plaza
de la Españita edificio c 5, depto. 5, u.h. La Margarita, en esta ciudad
de puebla, Puebla.

NOMBRE Y DOMICILIO DEL TERCERO INTERESADO:


Manifiesto bajo protesta de decir verdad que desconozco la
existencia de alguna persona que le revista este carácter.
AUTORIDADES RESPONSABLES:
a) LA COMISION FEDERAL PARA LA PROTECCION CONTRA
RIESGOS SANITARIOS (COFEPRIS), con domicilio público conocido y
ubicado en calle OKLAHOMA #14, planta baja, colonia Nápoles, alcaldía
Benito Juárez, ciudad de México, código postal 03810.
ACTO QUE SE RECLAMA:
Se reclama de la responsable la omisión y falta de contestación a
el escrito libre de fecha 3 de marzo de 2021, en el cual se solicitó para el
suscrito una autorización para poder llevar a cabo actividades
relacionadas con el autoconsumo de cannabis con fines personales
(sembrar, cultivar, cosechar, preparar poseer y transportar).
ANTECEDENTES DEL ACTO RECLAMADO:
Bajo protesta de decir verdad manifiesto que los hechos y
abstenciones que a continuación se narran constituyen los antecedentes
de los actos que se reclaman.
1.- Con fecha veintiocho de septiembre de dos mil veinte, derivado
del juicio de amparo indirecto con número de expediente 357/2020 del
Juzgado Primero de Distrito en Materia de Amparo Civil, Administrativa
y de Trabajo y de Juicios Federales en el Estado de Puebla, se concedió
al que suscribe, el amparo y protección de la justicia federal para los
siguientes efectos:
" quedaran desincorporados de la esfera jurídica del quejoso los
artículos 235, último párrafo, 237, 245, fracción I, 247, último
párrafo, y 248, de la Ley General de Salud, sólo en su porción
normativa que establece una prohibición absoluta a las dependencias
del Estado emitan autorizaciones para realizar las actividades
relacionadas con el autoconsumo con fines lúdicos o recreativos
del estupefaciente “cannabis” (sativa, índica y americana o
marihuana, su resina, preparados y semillas) y del psicotrópico
“THC” (tetrahidrocannabinol, los siguientes isómeros: ∆6a (10a), ∆6a
(7), ∆7, ∆8, ∆9, ∆10, ∆9 (11) y sus variantes estereoquímicas), en
conjunto conocido como marihuana, En la inteligencia de que la
concesión del amparo no faculta al quejoso para realizar actividades
de sembrar, cultivar, cosechar, preparar, poseer y transportar
marihuana, sino solo a tener la posibilidad de solicitar la
autorización correspondiente y que esta le sea eventualmente
concedida, al ya no existir en el ordenamiento jurídico, por lo que
a él se refiere, las disposiciones normativas que vedaban esa
posibilidad.
Luego, que la autorización administrativa respectiva deberá
garantizar el ejercicio del derecho al libre desarrollo de la personalidad,
y su interdependencia con los restantes derechos humanos del
quejoso, como el de la salud y los de terceros. Aunque atendiendo al
caso especificó, esas limitantes y requisitos, deberán tener un fin
constitucionalmente válido, ser necesarias y proporcionales."
2.-Posteriormente al haberse desincorporado tales dispositivos de
mi esfera jurídica me encuentro con la aptitud y capacidad necesaria
para solicitar una autorización para fines de autoconsumo de cannabis,
por lo que el día TRES DE MARZO DEL AÑO DOS MIL VEINTE, presente
un escrito libre en la Oficialía de partes de la dirección de protección
contra riesgos sanitarios del estado de puebla, oficina que tiene la
función de ser buzón de tramites de COFEPRIS, anexo al presente
escrito el original del acuse de recibido del escrito libre que presenté.
3.- La solicitud mencionada en el punto anterior fue recibida por
la COFEPRIS el día UNO DE ABRIL DE DOS MIL VEINTIUNO
asignándole el número de trámite: 213301EL350922, para acreditarlo
anterior exhibo en original el comprobante de trámite 213301EL350922
de fecha 01/04/2021 recibido a las 13:16hrs.
Cabe destacar que el suscrito se ha estado comunicando al
numero que proporciona COFEPRIS para atención a tramites el:
8000335050, y casi nunca contestan, cuando lo hacen me dicen que no
me pueden dar información y/o que mi tramite esta en evaluación,
situación que vulnera mis derechos constitucionales en específico mi
derecho de petición pues el tiempo ya ha transcurrido en exceso sin que
yo tenga la resolución de mi petición, la cual deberá ser positiva pues la
responsable ya no puede aplicarme los artículos que se desincorporaron
de mi esfera jurídica.
4.- Del día 1 de abril de dos mil veintiuno a el día de hoy 14 de
octubre de dos mil veintiuno, ya han transcurrido los 40 días que el
reglamento de insumos para la salud le concede a la secretaria para que
resuelva sobre las solicitudes planteadas, máxime que también ya
transcurrió en exceso el plazo de 90 días que el código federal de
procedimiento administrativo le concede a la responsable para resolver,
Sin embargo, al día de la fecha de la presentación de esta demanda de
amparo, no existe contestación de parte de la autoridad señalada como
responsable, ni mucho menos alguna actividad encaminada a continuar
con la resolución de las solicitudes planteadas. De esa manera al
considerar como violatorio de derechos humanos el actuar de la
responsable, acudimos a este Juzgado constitucional a fin de que los
derechos que nos confiere la constitución del estado mexicano, así como
los tratados internacionales de los que el estado mexicano es parte sean
respetados. Violación que se hace valer al tenor de los conceptos de
violación que se expresan en el capítulo respectivo.
PRECEPTOS CONSTITUCIONALES QUE CONTIENEN LOS
DERECHOS HUMANOS VIOLADOS:
1.- El artículo 8 de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, el cual establece el derecho de petición.
CONCEPTOS DE VIOLACIÓN:
ÚNICO. La autoridad responsable vulnera flagrantemente el
derecho de petición consagrado en el artículo 8 de nuestra Constitución
Política Federal, pues como ya se dijo, no ha dado contestación al
escrito presentado por el suscrito, no obstante que cumpli con los
extremos que exige dicho precepto.
En efecto, el artículo 8 constitucional establece la responsabilidad
de los funcionarios públicos de respetar el derecho de petición, el cual
debe ser satisfecho en un breve termino, imponiendo como única
obligación a los gobernados el que dicha petición se formule por escrito,
de manera pacífica y respetuosa. Lo cual es claro que los suscritos
cumplimos con los extremos que señala dicho precepto. A mayor
abundamiento transcribimos el artículo citado:
“Artículo 8. Los funcionarios y empleados públicos respetarán el ejercicio del
derecho de petición, siempre que ésta se formule por escrito, de manera pacífica y
respetuosa; pero en materia política sólo podrán hacer uso de ese derecho los
ciudadanos de la República. A toda petición deberá recaer un acuerdo escrito de la
autoridad a quien se haya dirigido, la cual tiene obligación de hacerlo conocer en breve
término al peticionario".
De tal premisa se desprende que, de la solicitud hecha por el
suscrito a la COFEPRIS, tiene que recaer un acuerdo, mismo que debe
resolver sobre la solicitud de una autorización para llevar a cabo
actividades relacionadas con el autoconsumo de cannabis o marihuana
con fines personales. (sembrar, cultivar, cosechar poseer, preparar,
transportar, etc.), tal como lo señala el artículo 154 del reglamento de
insumos para la salud:
"Cuando el presente Reglamento no especifique un plazo expreso
para resolver sobre una solicitud, la Secretaría dispondrá de cuarenta
días para ese efecto. En todos los casos los plazos se contarán a partir
del día siguiente al de la recepción de la solicitud de autorización
sanitaria debidamente requisitada."
Del articulo antes citado se desprende que la autoridad tiene un
plazo de 40 días para emitir una resolución, este plazo empieza a correr
un día después de que es recibida la solicitud, entonces si la solicitud
fue recibida el día uno de abril de dos mil veintiuno, para el día de hoy
14 de octubre de dos mil veintiuno esta ya ha excedido el plazo que la
ley le concede.
En conclusión, la omisión de la responsable de dar contestación a
la solicitud hecha por la suscrita contraviene el artículo 8
constitucional, en relación con el artículo 154 del reglamento de
insumos para la salud.
Muchos han sido los criterios aislados y jurisprudenciales que
han emitido distintos órganos jurisdiccionales del Poder Judicial de la
Federación, por virtud de los cuales, de una interpretación al precepto
constitucional transcrito, han determinado cuáles son los requisitos que
debe satisfacer la petición que formula el gobernado para que le asista
la garantía de respuesta, y han definido las características de la
contestación que debe dar la autoridad.
Así las cosas, si bien es cierto que el ejercicio del derecho de
petición tiene la correlativa obligación de la autoridad de producir una
respuesta, los elementos que deben contener una y otra son los que a
continuación se apuntan.
La petición Debe formularse de manera pacífica y respetuosa; Ser
dirigida a una autoridad y recabarse la constancia de que fue entregada,
y El peticionario ha de proporcionar el domicilio para recibir la
respuesta.
La respuesta La autoridad debe emitir un acuerdo; Ha de
producirse en breve término, entendiéndose por éste el que
racionalmente se requiera para estudiar la petición y acordarla; Tendrá
que ser congruente con la petición; La autoridad debe notificar el
acuerdo recaído a la petición en forma personal al gobernado en el
domicilio que señaló para tales efectos;
No existe obligación de resolver en determinado sentido, esto es, el
ejercicio del derecho de petición no constriñe a la autoridad ante quién
se formuló, a que provea necesariamente de conformidad con lo
solicitado por el promovente, sino que está en libertad de resolver de
conformidad con los ordenamientos legales que resulten aplicables al
caso; y La respuesta o trámite que se dé a la petición debe ser
comunicado precisamente por la autoridad ante quien se ejercitó el
derecho y no por autoridad diversa. Respecto de tales requisitos,
resultan ilustrativos los siguientes criterios:
Jurisprudencia P./J. 42/2001 del Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación, publicada en la página 126 del Semanario Judicial de la Federación y su
Gaceta, Tomo XIII, abril de 2001, Novena Época, que establece: "PETICIÓN.
LAEXISTENCIA DE ESTE DERECHO COMO GARANTÍA INDIVIDUAL PARA SU
SALVAGUARDA A TRAVÉS DEL JUICIO DE AMPARO REQUIERE QUE SE FORMULE
AL FUNCIONARIO O SERVIDOR PÚBLICO EN SU CALIDAD DE AUTORIDAD.

El derecho de petición es consagrado por el artículo 80. de la Constitución


Política de los Estados Unidos Mexicanos como uno de los derechos públicos
subjetivos del gobernado frente a la autoridad dotada de facultades y atribuciones por
las normas legales en su calidad de ente del Gobierno del Estado, obligado como tal, a
dar contestación por escrito y en breve término al gobernado, por lo que la existencia
de este derecho como garantía individual y la procedencia del juicio de amparo para su
salvaguarda requieren que la petición se eleve al funcionario o servidor público en su
calidad de autoridad, es decir en una relación jurídica entre gobernante y gobernado, y
no en una relación de coordinación regulada por el derecho privado en que el ente
público actúe como particular."

Tesis que sostuvo la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la


Nación, publicada en la página 127, Volúmenes 205-216, Tercera Parte, del Semanario
Judicial de la Federación, Séptima Época, que es del tenor literal siguiente:

"PETICIÓN, DERECHO DE. CORRESPONDE A LA AUTORIDAD COMUNICAR


AL INTERESADO, EN BREVE TÉRMINO, TANTO LA RESOLUCIÓN DEFINITIVA COMO,
EN SU CASO, LOS TRÁMITES RELATIVOS A SU PETICIÓN. Las garantías del artículo
80. constitucional tienden a asegurar un proveído sobre lo que se pide; impone a las
autoridades la obligación de dictar a toda petición hecha por escrito, esté bien o mal
formulada, un acuerdo, también por escrito, que debe hacerse saber en breve término
al peticionario. Se viola la garantía que consagra el artículo 80. constitucional cuando
no se comunica por escrito algún acuerdo recaído a la solicitud; y la sola negativa de
los actos reclamados por la autoridad responsable, tratándose de la violación al
artículo 80. constitucional, fundada en que se dio respuesta a la solicitud formulada
por el gobernado, no es bastante para tenerla por cierta, en virtud de que, dada la
naturaleza propia de los actos reclamados, habiendo reconocido la autoridad que se le
formuló la solicitud por escrito, corresponde a la propia autoridad demostrar el hecho
positivo de que sí hubo la resolución respectiva y de que se hizo del conocimiento del
peticionario. Por último, el artículo 80. constitucional se refiere, no sólo al derecho que
los gobernados tienen para que se les haga conocer la resolución definitiva que pone
fin a su petición, sino también a los trámites que se vayan cumpliendo en los casos en
que la ley requiera la sustanciación de un procedimiento, imponiendo a las
autoridades la obligación de hacer saber en breve término a los interesados todos y
cada uno de los trámites relativos a sus peticiones."

Tesis que sostuvo la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la


Nación, publicada en la página 21, Volumen 90, Tercera Parte, del Semanario Judicial
de la Federación, Séptima Época, que dice:

"PETICIÓN, DERECHO DE. AUTORIDAD RESPONSABLE. DEBE DEMOSTRAR


QUE LA CONTESTACIÓN SE DIO A CONOCER AL PETICIONARIO. El hecho de
contestar por escrito una solicitud no significa forzosamente que el solicitante haya
recibido la contestación; y como el artículo 80. constitucional ordena, no sólo que toda
petición que llene los requisitos a que se refiere ese precepto sea acordada, sino que el
acuerdo se haga saber en breve término al peticionario, la autoridad responsable debe
demostrar el cumplimiento de esta última obligación." Tesis que sostuvo la Sala
Auxiliar de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en su anterior integración,
publicada en la página 17, Volumen 66, Séptima Parte, del Semanario Judicial de la
Federación, Séptima Época, que establece: "PETICIÓN, DERECHO DE. SENTIDO. La
garantía que otorga el artículo 80. constitucional, tiende a asegurar un proveído sobre
lo que se pide; es decir, sólo obliga a la autoridad a contestar oportunamente y en
breve tiempo, por escrito, las promociones que se hagan; pero de ahí no se sigue que
se viole el aludido artículo 80. constitucional por el hecho de que la autoridad no
resuelva precisamente en el sentido que quieran los interesados."

Tesis de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación,


publicada en la página 37, Volumen 62, Tercera Parte, del Semanario Judicial de la
Federación, Séptima Época, que literalmente establece:
“PETICIÓN, DERECHO DE. NOTIFICACIONES QUE DEBEN HACERSE DE LOS
ACUERDOS QUE RECAEN A LAS SOLICITUDES. SU PRUEBA. El amparo que se pide
porque la autoridad responsable no proveyó y contestó determinada solicitud, debe
concederse al quejoso, aunque dicha responsable acredite con un anexo de su informe
que proveyó a ese escrito, si no demuestra haber notificado el proveído o acuerdo que
al respecto hubiere dictado, y no es de considerarse que la falta de aquella notificación
se subsana con el informe justificado, en virtud de que no existe algún precepto legal
que autorice a las autoridades responsables a reparar la violación de garantías en que
incurran, mediante tal informe. Por tanto, el artículo 80. constitucional debe cumplirse
no sólo proveyendo el escrito o solicitud respectivo, sino también haciendo conocer el
proveído personalmente y en breve término, al interesado para que a partir de esa
fecha pueda hacer valer las defensas que considere oportunas."

Tesis de la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación,


publicada en la página 138, Volumen CXXXII, Tercera Parte, del Semanario Judicial de
la Federación, Sexta Época, que expresa: "PETICIÓN, DERECHO DE. A LA
AUTORIDAD RESPONSABLE CORRESPONDE LA PRUEBA DE QUE SE DICTÓ LA
RESOLUCIÓN A LO SOLICITADO Y LA DIO A CONOCER AL PETICIONARIO. La sola
negativa de los actos reclamados por la autoridad responsable, tratándose de la
violación al artículo 80. constitucional, fundada en que dio respuesta a la solicitud
formulada por el quejoso, no es bastante para tenerlos por no ciertos, en virtud de que,
dada la naturaleza propia de los actos reclamados, habiendo reconocido que se le
formuló una solicitud por escrito, le corresponde a la propia autoridad demostrar el
hecho positivo de que sí hubo la contestación respectiva, y de que se hizo del
conocimiento del peticionario, sin que sea admisible arrojar sobre éste la carga de un
hecho negativo, como lo es el de que no hubo tal contestación."

Es por lo anterior que se debe conceder el amparo y protección de


la justicia federal, para efectos de que respecto del derecho reclamado la
autoridad responsable de contestación de forma idónea a lo solicitado
por el suscrito, no siendo suficiente la simple contestación, sino que
la misma debe ser acorde a lo solicitado.
PRUEBAS:
I.- LA DOCUMENTAL PÚBLICA, consistente en:
a) original del comprobante de trámite 213301EL350922 de fecha
uno de abril de dos mil veintiuno, expedido por la COMISION FEDERAL
PARA LA PROTECCION CONTRA RIESGOS SANITARIOS, prueba con la
cual se pretende acreditar el dia en que ingreso el tramite y con la cual
se acredita que la responsable violento lo ya descrito en los conceptos d
e violacion.
II.- LA DOCUMENTAL PRIVADA: consistente en:
a) ORIGINAL DEL ACUSE DE RECIBIDO DE FECHA TRES DE
MARZO DE DOS MIL VEINTIUNO COMPUESTO POR DOS
FOJAS, descrito como “Escrito libre dirigido al DIRECTOR
EJECUTIVO DE REGULACION DE ESTUPEFACIENTES,
PSICOTROPICOS Y SUSTANCIAS QUIMICAS DE LA COMISION
FEDERAL PARA LA PROTECCION CONTRA RIESGOS
SANITARIOS”, mediante el cual solicite a la (COFEPRIS) una
autorización para llevar a cabo actividades relacionadas con el
autoconsumo de cannabis para fines personales.
III.- PRESUNCIONAL EN SU DOBLE ASPECTO LEGAL Y
HUMANA. En todo lo que favorezca a los intereses del quejoso,
fundando lo dispuesto por el artículo 119 de la Ley de Amparo y
demás relativos y aplicables de la misma ley de la materia. Medio
probatorio, que relaciono con todos los numerales contenidos en
el presente escrito.
IV.- LA INSTRUMENTAL DE ACTUACIONES: Consistente en
todo lo actuado en los expedientes administrativos de los que
emana el acto reclamado, así como todo lo que favorezca a los
intereses de los quejosos. Medio probatorio, que relaciono con
todos los numerales contenidos en el presente escrito. Es
importante destacar que tal como se narra en el punto número 1
de hechos de la presente demanda de amparo, quedaron
desincorporados los artículos de la ley general de salud que
mantenían una prohibición para que el quejoso pudiera obtener
una autorización para los fines ya mencionados con anterioridad,
por lo que sus efectos son los de proteger al quejoso contra su
aplicación presente y futura por lo que en las resoluciones que
recaigan sobre las solicitudes que se plantearon a la responsable,
no se deberán aplicar los dispositivos declarados
inconstitucionales, tal como lo interpreta la jurisprudencia con el
siguiente rubro y texto:
“AMPARO CONTRA LEYES. SUS EFECTOS SON LOS DE
PROTEGER AL QUEJOSO CONTRA SU APLICACIÓN PRESENTE Y
FUTURA. El principio de relatividad de los efectos de la sentencia de
amparo establecido en los artículos 107, fracción II, constitucional y 76
de la Ley de Amparo, debe interpretarse en el sentido de que la
sentencia que otorgue el amparo tiene un alcance relativo en la medida
en que sólo se limitará a proteger al quejoso que haya promovido el
juicio de amparo. Sin embargo, este principio no puede entenderse al
grado de considerar que una sentencia que otorgue el amparo contra
una ley sólo protegerá al quejoso respecto del acto de aplicación que de
la misma se haya reclamado en el juicio, pues ello atentaría contra la
naturaleza y finalidad del amparo contra leyes. Los efectos de una
sentencia que otorgue el amparo al quejoso contra una ley que fue
señalada como acto reclamado son los de protegerlo no sólo contra actos
de aplicación que también haya impugnado, ya que la declaración de
amparo tiene consecuencias jurídicas en relación con los actos de
aplicación futuros, lo que significa que la ley ya no podrá válidamente
ser aplicada al peticionario de garantías que obtuvo la protección
constitucional que solicitó, pues su aplicación por parte de la autoridad
implicaría la violación a la sentencia de amparo que declaró la
inconstitucionalidad de la ley respectiva en relación con el quejoso; por
el contrario, si el amparo le fuera negado por estimarse que la ley es
constitucional, sólo podría combatir los futuros actos de aplicación de la
misma por los vicios propios de que adolecieran. El principio de
relatividad que sólo se limita a proteger al quejoso, deriva de la
interpretación relacionada de diversas disposiciones de la Ley de
Amparo como son los artículos 11 y 116, fracción III, que permiten
concluir que en un amparo contra leyes, el Congreso de la Unión tiene el
carácter de autoridad responsable y la ley impugnada constituye en sí el
acto reclamado, por lo que la sentencia que se pronuncie debe resolver
sobre la constitucionalidad de este acto en sí mismo considerado;
asimismo, los artículos 76 bis, fracción I, y 156, que expresamente
hablan de leyes declaradas inconstitucionales por la jurisprudencia de
la Suprema Corte de Justicia de la Nación; y, finalmente, el artículo 22,
fracción I, conforme al cual una ley puede ser impugnada en amparo
como autoaplicativa si desde que entra en vigor ocasiona perjuicios al
particular, lo que permite concluir que al no existir en esta hipótesis
acto concreto de aplicación de la ley reclamada, la declaración de
inconstitucionalidad que en su caso proceda, se refiere a la ley en sí
misma considerada, con los mismos efectos antes precisados que
impiden válidamente su aplicación futura en perjuicio del quejoso.
Consecuentemente, los efectos de una sentencia que otorga la
protección constitucional al peticionario de garantías en un juicio de
amparo contra leyes, de acuerdo con el principio de relatividad, son los
de proteger exclusivamente al quejoso, pero no sólo contra .el acto de
aplicación con motivo del cual se haya reclamado la ley, si, se impugnó
como heteroaplicativa, sino también como en las leyes autoaplicativas,
la de ampararlo para que esa ley no le seá aplicada válidamente al
particular en el futuro."

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