Vitamina e Dietas
Vitamina e Dietas
Vitamina e Dietas
MECANISMO DE ACCIÓN:
Muchos de estos factores son, además dependientes de otros nutrientes esenciales como
el selenio, el zinc o el cobre.
Por lo tanto, la función antioxidante de la vitamina E puede ser afectada por el estado
nutricional con respecto a uno o varios nutrientes. Esto se pone de manifiesto en algunas
enfermedades debidas a deficiencias graves por ejemplos:
Miopatías
Desordenes vasculares
FUNCIONES DE LA
VITAMINA E
La vitamina E funciona en general como un
antioxidante biológico, previniendo la oxidación
de los ácidos grasos poliinsaturados de las
membranas celulares y de las proteínas ricas en
radicales con azufre.
Previene la arteriosclerosis.
ALTERACIONES EN LA CANTIDAD DE
VITAMINA E
DÉFICIT DE VITAMINA E:
Se relaciona con determinadas enfermedades causadas por problemas de mala absorción
o con problemas de digestión de las grasas, ya que las grasas son necesarias para poder
absorber la vitamina E.
Enfermedades como Enfermedad de Crohn, fibrosis quística, enfermedades hepáticas o
enfermedades genéticas poco frecuentes (abetalipoproteinemia y la ataxia con
deficiencia de vitamina E). También pueden existir deficiencias si se sigue una dieta
muy baja en grasas.
El déficit de vitamina E puede causar:
Si el exceso es realmente elevado, puede traer consecuencias muy negativas para la salud, ya
que disminuye la capacidad de coagulación sanguínea (vitamina K), aumentando el riesgo de
sangrado tras un corte o herida y de hemorragia cerebral (derrame cerebral hemorrágico).
Antes de tomar suplementos de vitamina E, es muy importante consultarlo con el especialista,
porque además de los efectos mencionados, puede interactuar con ciertos medicamentos y
disminuir la eficacia de éstos.
Los frutos secos (como maníes, avellanas y, en especial, almendras) y las semillas
(como las semillas de girasol) también se encuentran entre las mejores fuentes de
vitamina E.
Ciertos cereales para el desayuno, jugos de fruta, margarinas y productos para untar,
entre otros alimentos, son fortificados con vitamina E agregada. Lea la etiqueta del
producto para saber si un alimento contiene vitamina E.
Muchos alimentos contienen vitamina E, entre ellos los aceites vegetales (como
aceites de germen de trigo, girasol y cártamo), frutos secos (como almendras),
semillas (como semillas de girasol) y hortalizas de hojas verdes (como espinaca
y brócoli). El mayor consumo de estas fuentes nos va a ayudar a reducir el riesgo
de padecer cáncer, trastornos oculares y algunos suplementos podrían ayudar a
los adultos mayores a mantenerse mentalmente lúcidos y activos, es por ello
realmente importante, el consumo de vitamina E.