Ochoa Solis 205
Ochoa Solis 205
Ochoa Solis 205
El texto de la prueba
Para cada uno de los cuatro aspectos de la rúbrica se señalan seis ni-
veles que indican el grado de competencia alcanzado. Los resultados de la
evaluación se organizan en tres niveles: superior, entre 5 y 6 puntos; medio,
entre 3 y 4; y bajo, entre 1 y 2 puntos. Es lo que se conoce como una rúbrica
(baremo) holística o sintética (Cassany, 1999).
El aspecto A se centra en la tarea. Son importantes la precisión y las
conexiones entre las partes. La tarea implica un trabajo crítico que, como
mencionamos anteriormente, va más allá de la comprensión del material
leído. El aspecto B permite observar la comprensión de dicho material, así
como la pertinencia de la selección del material citado en el ensayo. En el
aspecto C se pone atención en la capacidad de referir adecuadamente los
materiales. Finalmente, en lo que toca al aspecto D, se juzga la eficacia de la
comunicación lograda en el ensayo a partir de las convenciones en el uso
del lenguaje. En el momento en que los estudiantes recibieron la parte uno
se les solicitó su aprobación para utilizar sus ensayos como parte de la in-
vestigación y, en su caso, publicarlos en la versión final del instrumento.
Las partes 2 y 4, “¿Qué es la comprensión?” y “Errar es humano”, con-
forman las lecturas utilizadas en el piloto. En la selección de estas lec-
turas se enfrentaron tres retos: el primero fue la pertinencia, es decir, su
adecuación para ser leídas por estudiantes de los diversos campos de la
MADEMS (Biología, Ciencias Sociales, Español, Filosofía, Física, Historia,
Letras Clásicas, Matemáticas y Química). La solución fue utilizar material
vinculado con la educación y el aprendizaje, pues éstos son asuntos rele-
vantes para quienes estudian una maestría en docencia. El segundo reto
fue el nivel de dificultad del material, esto es, que si bien estuviera inscrito
dentro del dominio del aprendizaje y la educación, no fuera extremada-
mente especializado y pudiera, por ello, representar un obstáculo. “¿Qué es
la comprensión?” resulta un material adecuado, pues no incluye conceptos
de una disciplina particular, salvo aquéllos que el propio texto de Perkins
despliega en el texto; mientras que “Errar es humano” es un texto cuya ar-
gumentación se sostiene a través de ejemplos que prueban lo que el título
del artículo propone, así como el valor del error en el aprendizaje. El tercer
reto fue la extensión del material: el texto de Perkins fue entregado 15 días
antes de la prueba, por lo que la dificultad se concentraba entonces en la
extensión del material a leer en la prueba; esto se resolvió con la extensión
Por otro lado, el comentario sobre el ensayo I: “Responde [el ensayo es-
crito por I] con precisión a la tarea. Utiliza el material leído seleccionándolo
por su relevancia. Lo incorpora a través de referencias formales e informa-
les. Se comunica con una prosa clara y eficaz. Muestra una adecuada com-
prensión del material leído” confirma la primacía de la tarea, lo que implica,
como afirmamos anteriormente, analizar y relacionar conceptos, explicar
la relevancia de alguno de ellos, y vincular tales conceptos, en la medida
que sea pertinente, con las experiencias u observaciones de quien escribe
el ensayo.
Conclusiones
Referencias
Barnet, Sylvan y Hugo Bedau (2005), Critical Thinking Reading and Writing. A brief guide
to argument, Boston, Bedford/St. Martin´s.
Behrens, Laurence y Leonard F. Rosen (2004), Writing and Reading across the Curriculum,
Nueva York, Pearson Longman.
Carlino, Paula (2005), Escribir, leer y aprender en la universidad. Una introducción a la alfa-
betización académica, México, Fondo de Cultura Económica.
Cassany, Daniel (1999), Construir la escritura, Barcelona, Paidós.
Cassany, Daniel (2006), Tras las líneas. Sobre la lectura contemporánea, Barcelona,
Anagrama.
Fletcher, Ralph (1992), What a Writer Needs, Newport, Heineman.
Flower, Linda (1985), Problem-Solving Strategies for Writing, Orlando, Harcourt Brace
Javanovich.
Flower, Linda (1990) (ed.), Reading to Write. Exploring a cognitive and social process, Nueva
York, Oxford University Press.
Land, Ray, Jan H. F. Meyer y Jan Smith (eds.) (2008), Threshold Concepts within the Disci-
plines, Rotterdam, Sense Publishers.
Lerner, Delia (2001), Leer y escribir en la escuela: lo real, lo posible, lo necesario, México,
Fondo de Cultura Económica.
Maxwell, Rhoda J. (1996), Writing Across the Curriculum in Middle and High Schools, Bos-
ton, Allyn and Bacon.
O´Brien, Emily, Jane Rosenzwig y Nancy Sommers (2004), Making the Most of College
Writing, Boston, The President and Fellows of Harvard Collage.
Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) (2005), PISA para docentes.
La evaluación como oportunidad de aprendizaje, México, INEE .
Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) (2010), México en PISA
2009, México, INEE .
Perkins, David (1999), “¿Qué es la comprensión?”, en Martha Stone Wiske (ed.), La en-
señanza para la comprensión. Vinculación entre la investigación y la práctica, Buenos
Aires, Paidós, pp. 69-92.
Thomas, Lewis (1982), La medusa y el caracol, México, Fondo de Cultura Económica.
Zorrilla Alcalá, Juan Fidel (2007), Desarrollo de la expresión oral y escrita de los estudian-
tes que ingresan a la División de Ciencias Sociales y Humanidades de las UAM-I, Mé-
xico, UAM.
Ensayo X
El aprendizaje como elemento fundamental en el proceso educativo inclu-
ye algunos componentes que estan presentes indiscutiblemente en dicho
proceso; el conocimiento, las habilidades y la comprensión (Perkins, 2005).
Dichos componentes según el contexto o campo, el grado de sofisticación
de la persona, los factores de desarrollo (Perkins, 2005) e inclusive el enfo-
que didáctico del momento pareciera que ocupan un mismo nivel de re-
levancia y carentes de secuenciación. Sin embargo, la capacidad de cierto
grado o tipo de comprensión aparece como un elemento primero en todos
los procesos de aprendizaje cotidianos presentes en niveles de desarrollo
tan tempranos como el del infante que tira objetos al suelo repetidamente.
A diferencia del desarrollo de ciertas habilidades y la adquisición de cono-
cimientos que van apareciendo —sobre todo este último elemento— con-
forme el individuo va experimentando diferentes vivencias.
La comprensión entendida como un desempeño flexible según Perkins,
2005 es la “habilidad de pensar y actuar con flexibilidad” cuyo nivel de éxito
aceptable segun este autor sugiere una serie de condiciones propicias que
incluso pueden desarrollarse (por adquisición o construcción) hasta llegar
a la cúspide: la representación como lo es un esquema, la imagen, el diagra-
ma, los modelos mentales, entre otros.
Bajo esta perspectiva, el concepto de “error” no cabría en un contexto
de aprendizaje ya que por un lado, el grado o tipo de comprensión depen-
de de ciertas condiciones no controladas por el individuo mientras que
por otro, el alcance de esa comprensión puede llegar a ser una decisión
propia. De tal modo que las alternativas en este caso no pueden ser con-
sideradas como “errores” sino decisiones que mucho menos tendrían los
calificativos de “erroneas” o acertadas ya que cada una de estas decisiones
nos conducen a un grado de comprensión deseable según el contexto en
que se encuentre el individuo, en este caso el estudiante y sobre todo lo que
se espera de él.
En el sistema educativo actual, lejos de las modas pedagógicas y didác-
ticas un cuestionamiento inquietante reconoce la importancia de que las
habilidades, el conocimiento o la capacidad de comprensión puedan de-
sarrollarse o adquirirse de una manera adecuada para lograr un objetivo
deseable como elaborar esquemas de acción o modelos metales lo suficien-
temente rápido como se pretende en algunas currículas de nivel medio su-
perior ya que dichos procesos van desarrollándose en diferente medida y
velocidad en cada persona.
Ensayo I
¿Cómo sabemos cuando hemos aprendido algo? ¿Qué formas tenemos
para corroborar nuestro aprendizaje? Perkins sugiere que es mediante la
comprensión que podemos evaluar el aprendizaje. “Comprender” dice