La Sexualidad Al Servicio Del Amor
La Sexualidad Al Servicio Del Amor
La Sexualidad Al Servicio Del Amor
Para la Iglesia, el amor es una virtud teologal, una "ddiva de si mismo" y "es lo opuesto de usar";
el amor verdaderamente vivido y plenamente realizado es una comunin de ddiva mutua de s
mismo, "lleva no solo a la satisfaccin, sino tambin a la santidad". Ese tipo de relacin conyugal
propuesto por la Iglesia "exige permanencia y compromiso" que solo puede ser autnticamente
vivida "en el seno de los lazos del Matrimonio".
RESUMIENDO;
La sexualidad no slo tiene una funcin de procrear, sino tambin un papel importante en
la vida ntima conyugal. "es una fuente de alegra y agrado CIC 2362,
La sexualidad es la gran expresin del amor recproco, donde el hombre y la mujer se unen
y se complementan.
El verdadero amor conyugal, donde la relacin sexual es vivida dignamente, solo es posible
gracias a la castidad conyugal.
La virtud de la castidad permite una vivencia conyugal perfecta basada en la fidelidad a
Dios y a la pareja matrimonial.
La castidad conyugal no implica la abstinencia sexual de los casados y existen tambin
diversos regmenes de castidad: la virginidad o el celibato consagrado (para los religiosos,
las personas consagradas, los clrigos etc.) y la castidad en la abstinencia (para los nocasados).
Preservativos y anticonceptivos
Segn la doctrina catlica, el uso actual e indiscriminado de preservativos incentiva un estilo de
vida sexual inmoral, desordenada e irresponsable, donde el cuerpo es usado como simple objeto
de placer. Ese tipo de vida sexual es fuertemente condenado por la Iglesia.
En el ao 2010, el Papa Benedicto XVI advirti que el uso de preservativos para evitar
enfermedades de transmisin sexual no es "una solucin verdadera y moral". l volvi tambin a
reafirmar la doctrina catlica que defiende que a fidelidad en el casamiento, el amor recproco, la
castidad, la humanizacin de la sexualidad y la abstinencia son los mejores medios para combatir
dichas enfermedades.
Con relacin al uso del preservativo como un mtodo anticonceptivo, la Iglesia Catlica condena
tambin expresamente su uso.
Homosexualidad y catolicismo
Los actos sexuales entre personas homosexuales son considerados moralmente equivocados
porque violan la "diferenciacin y complementariedad sexuales" entre el hombre y la mujer y
porque son incapaces de generar vida. Sin embargo, para la Iglesia, tener tendencias
homosexuales no es considerado un pecado, ni un castigo, sino solo una prueba. El pecado est en
ceder a esas tendencias y adoptarlas en la prctica. La Iglesia repudia tambin cualquier
reconocimiento legal de las uniones entre personas del mismo sexo.
La Iglesia Catlica no solo no discrimina a los homosexuales sino aconseja a sus fieles a respetar
siempre a las personas, y pretende ayudarlos ante todo a vivir en castidad y "en la integridad del
amor en la entrega de s mismos y para evitar actos sexuales que son, por la naturaleza,
La Iglesia la defiende que la fertilidad es una riqueza y una ddiva de Dios que puede y
debe ser utilizada como una expresin de la paternidad y maternidad responsables en la
construccin prudente de familias.
La Iglesia instruye que los mtodos naturales (como el mtodo Billings) son formas
humanistas de vivir la responsabilidad procreadora.