LEYENDAS
LEYENDAS
El Cerro Chaparr
Se dice que el cerro Chaparr est encantado ya que cuenta con jageyes; el
agua de estos es muy cristalina, quien se deje vencer por la tentacin de
tomarla quedar encantado.
Entonces esa persona ver abrirse una puerta y ver dentro de ella una
moderna ciudad, si la persona no avanza, atractivas mujeres saldrn a
atraerlo tocando msica; si l no entra quedar libre y podr contar su
hazaa, caso contrario esa puerta se cerrar y se quedar all para siempre.
La Cuda
Un hombre lleg a verla y pudo darse cuenta que era una mujer muy
hermosa y le pregunt: Por qu llora seorita?, y esta no le contest,
sigui su camino ignorndolo. El hombre intrigado por saber el paradero de
la misteriosa mujer la sigui; ella se detuvo y una luz apareci de pronto y le
enfoc la pata de gallina; el hombre al observar esto empez a convulsionar
y a votar espuma por la boca.
La Raya
El Alma de Josefa
En San Juan de llimo, cuentan los pobladores de la zona que en las orillas
del ro La Leche, se aparece todos los das a la medianoche una mujer
llamada Josefa, una mujer de cabellos largos, sentada sobre una roca
peinndose, asustando a todas las personas que pasan por el puente,
cruzando el ro.
Se dice que su alma se qued all porque esta mujer mat ahogando a su
hijo, y luego se quit la vida ahogndose tambin en el ro, y es por eso que
su alma se qued en ese sitio.
EL RBOL MILENARIO
LA CAPULLANA DE LAMBAYEQUE
Una capullana llamada Susa Cunti tena dos hijas: la mayor, Anya Cusa y la
menor Cusi Chunca. Cuando lleg Pizarro a Per traj con l a Alcn de
quien la capullana pensaba que era un Dios que vena del mar pues sta
quiso casarlo con su hija Cusi Chunca para que se cumpliera la leyenda que
le haban contado del Dios del mar.
Alcn no se fijo en Cusi Chunca sino en Anya Cusa pues ste ignoraba
totalmente las leyendas de los indios.
UN CERRO MALIGNO
Cuenta una seora: Mara Vsquez que ese cerro fue partido por la mitad
para que se construya una carretera que uniera a los aledaos.
La gente llama a un sacerdote para que ponga en cada cerro una cruz. El
sacerdote logra poner una cruz al cerro del costado izquierdo y a partir de
esa fecha se llama Cerro La Cruz. Al otro cerro, cuando el sacerdote estaba
subiendo con la cruz, slo llega hasta la mitad; el cerro se abre y el
sacerdote se hunde hasta la altura del pecho muriendo instantneamente,
no logrando ponerse ninguna cruz hasta la fecha.
Hay das que a las seis de la tarde se escucha tocar una banda de msica en
ese cerro y por eso le llaman Cerro La Banda.
EL CERRO ENCANTADO
Los habitantes del casero de nsculas, distrito de Olmos, narran que existe
un cerro encantado llamado en cuya cumbre hay un jardn de bellas
flores y a un costado se amontona el oro.
A este jardn es imposible llegar, las personas que lo han intentado han
cado o resbalado, hallndoselos muertos.
Relatan que un brujo logr llegar hasta este lugar, comprobando que existe
gran cantidad de oro. Al no poder llevrselo todo, baj a buscar ayuda.
Grande fue su sorpresa al regresar a la cumbre no encontraba el sitio, haba
niebla densa y no poda moverse. Estuvo buscndolo por cinco das y no
encontr nada. Desde all nadie se atreve a subir a ese lugar encantado.
LA LEYENDA DE MURRUP
Hicieron un pozo hacia cuyos alrededores todos se fueron a vivir, a ese lugar
lo llamaron Murrup que fue el sonido onomatopyico de la iguana.
LA VENGANZA DE LA LUNA
LAMBAYEQUE
Hace mucho tiempo exista un reino muy poderoso donde siempre destac
un general muy soberbio el cual tena una hija muy bella que era su orgullo
y siempre sobrepotega.
Un da el general decidi que su hija debera casarse con el hijo del rey a
quien serva. Le dio la noticia a su hija quien muy molesta rechaz esta
propuesta.
Se dice que todas las noches estos cerros se insultan. Chaparioc reclama
por la planta de higo y Yanahuanca por la conversin de los suyos en
piedras.
El mito de la KUDA
La kuda es un espritu maligno que se presenta en las noches de luna llena
a los hombres que vagan sin compaa; este espritu se transforma en una
mujer bellsima de cabellos dorados. Dicen que los ms incautos han
perdido la razn, pero los ms listos han descubierto su nico defecto y es
que tiene una pata de mula que la hace cojear.
Los jvenes de miedo huyen hacia sus hogares donde se esconden y no
vuelven a salir.
MITO DE INKARI EN LAMBAYEQUE
Cabellos de balboa da noticias que los chims e inca se enfrentaron con los
Jayanca y en la sierra de lambayeque , un grupo tnico llamado Penaches
combati a los incas.
Entres los aos 1470-1480,el Seor de Jayanca fue llevando preso al Cusco,
por los generales y tos de Tpac Yupanqui.Acusado de sublemacin estuvo
varios aos preso, hasta que se comprob su inocencia.
Francisco de Jerez narra com al llegar por estos parajes Hernando Pizarro
encontr a indios alzados que tenan temor de Atabalipa (Atahualpa).Los
espaoles tomoran un principal y lo atormentaron.Este digo que Atabalipa
los esperaba en pie de guerra.
El cacique de cinto inform que de cinco mil indios que tena,le mat,
Atahualpa cuatro mil y le tom seiscientos mujeres y seiscientos
muchachos para repartir entre la gente de guerra.
La Yacana
La capullana de lambayeque llamada Susi Cunti tenia dos hijas cuando asu
territorio llego Pizarro. Su hija mayor se llmaba Anya y la menor Cusi.
Cuando nacio el nio, los sabios estaban seguros que caeria una maldicion
por no haber sido fieles a sus dioses , asi que se decidio que madre e hijo
deberian morir enterrada .
Antes de que el sol fuera dueo de las esferas, seor de los espacios y amo
de los cielos era un simple mortal, casado con la luna, s humano como l.
La Luna, aun cuando era un ser femenino, no dispona de los hijos ni de las
necesidades, de la moda o de la apariencia y, por lo mismo no conoca los
espejos, los collares, los aretes o las pinturas, y el matrimonio viva feliz y
dichoso. Pero una, maana que la luna se baaba en la Laguna, que en lo
ms alto de ese cerro exista, un bejuco de color verde plido le rode el
cuello y las hojas azules, rojas y violetas de la Misha de los siete colores le
cubrieron la cara. Tranquilizada la superficie de las aguas, la Luna se miro
as misma, convirtiendo a aquella laguna en el primer espejo de la
humanidad, se vio bella adornada con el primer collar y las primera pinturas
de la mujer y enamorndose de s misma se neg a abandonar la laguna, a
pesar de los requerimientos del Sol su esposo.