Tema 4.7. La Velocidad
Tema 4.7. La Velocidad
Tema 4.7. La Velocidad
1. CONCEPTO Y DEFINICIÓN.-
V=S/T
Mora (1989)
Mora, nos hace comprender que la velocidad existe, en tanto que la necesidad
de realizar las acciones en el mínimo tiempo es la exigencia principal. No existe
velocidad si no hay exigencia de realizar la acción motriz en el menor tiempo posible.
La definición de Frey nos indica la relación que esta capacidad mantiene con
el sistema neuromuscular y la fuerza muscular, aspectos estos que condicionan la
posibilidad de conseguir determinados valores de velocidad. No hace sino señalar
una relación manifiesta de dos factores que influyen a la hora de conseguir mejoras
en la velocidad.
Aun así, esto no nos deja afirmar que una determinación genética o hereditaria
del sujeto más preparado para la velocidad sea cierta, aunque si es cierto que puede
ayudar.
Lo que nos podría hacer concluir que el sujeto veloz, rápido, nace, pero
también se hace.
2. FACTORES BÁSICOS QUE INFLUYEN EN LA VELOCIDAD.-
La velocidad con la que los ramales nerviosos transmiten los estímulos varían
según los individuos, la desencadena su propio Sistema Nervioso Central. Así, a
mayor velocidad de transmisión, mayor será la velocidad de contracción y mayor la
de movimiento. Además, depende del grosor, del diámetro del nervio que la
transmite. Las fibras tipo II, blancas o rápidas, están inervadas con ramales nerviosos
de mayor grosor o diámetro que las del tipo l, rojas o lentas.
Fuerza muscular:
Frecuencia de movimientos:
Elección de respuesta:
respuesta esta aprendida de antemano, permite que esta se efectúe en menor tiempo
y por lo tanto con mayor velocidad.
Dominio técnico:
Calentamiento:
3. TIPOS DE VELOCIDAD.-
Aparece en aquellos movimientos que solo se repiten una vez, como la batida de
un salto, el remate de voleibol, un lanzamiento de fútbol, balonmano, etc. Se conoce
también como ”velocidad gestual o velocidad segmentaria", en el sentido de que a
veces solo afecta a un segmento del cuerpo o una parte de él, donde el
desplazamiento durante la acción es mínimo, como en recepciones, paradas, ciertos
golpeos, etc. Sería, un solo movimiento realizado a gran velocidad.
Para finalizar este apartado sobre los tipos de velocidad, hay que atender al
hecho de que a veces será difícil aislar determinadas situaciones para atender a uno
solo de los tipos de velocidad. Si bien esta situación es fácil en actividades de tipo
cíclico, andar, correr, nadar, ciclismo, patinaje, etc., donde el entorno es una influencia
menor y muchas veces determinado por el lugar donde se realiza, ya preparado para
la actividad, no ocurre lo mismo con muchas actividades y ejercitaciones.
Sería una velocidad que englobaría varias de las señaladas y con necesidades
de desarrollo diferenciadas.
4. EVOLUCIÓN DE LA VELOCIDAD.-
Esto queda de manifiesto en los estudios que nos ayudan a diseñar el proceso
evolutivo que la velocidad sigue desde la infancia hasta la edad adulta.
“La diferenciación de las fibras hacia una u otra, lentas a rápidas, en el músculo
esquelético, se pone de manifiesto entre los dos y tres años, produciéndose
supuestamente una mayor formación de las fibras rápidas, y según este mismo
autor, este desarrollo de fibras rápidas se puede estimular”.
Este hecho lo comparte Martín ( 1982, cit. por Hahn, 1988), un autor que ha
desarrollado sus investigaciones acerca de la teoría de las fases sensibles o mejores
momentos del desarrollo para construir determinados aprendizajes motrices:
Entre los seis y once años, se observa una clara mejora en la velocidad de
acción. Se mejora en movimientos acíclicos y hay una notable mejora en la frecuencia
de los movimientos. Estos aumentos vienen influidos por el nivel de desarrollo del
alumno/a. Esta mejoría considerable de la velocidad o tiempo de reacción es debido
a un acortamiento del período de latencia, parece ser que gracias al desarrollo del
sistema nervioso.
estas edades.
Se tiene constancia de que la estructura y las funciones del substrato
morfofuncional para la velocidad maduran alrededor de los catorce años, al igual que
el analizador cinestésico, de manera que hasta los quince años, la capacidad de
coordinación y la apreciación espacio - tiempo, con influencia en la velocidad, se
perfeccionan continuamente. Después de esta edad los adelantos son muy pequeños
y mas difíciles de conseguir.
Hacia los veinte años es cuando se considera que se alcanzan los mayores
niveles de velocidad en todas su posibilidades de manifestación.
Ya son ampliamente conocidos los estudios sobre las “fases sensibles” que
varios autores han desarrollado. Ellos han dejado constancia de ciertos momentos
donde el organismo de los jóvenes estaría en las mejores condiciones para desarrollar
determinados aprendizajes motrices, y esto incluye las capacidades condicionales
que esta lleva asociadas.