Quimica
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Quimica
Todos los orbitales con el mismo valor del número cuántico principal, n, se encuentran en
la misma capa electrónica principal o nivel principal, y todos los orbitales con los mismos
valores de n y l están en la misma subcapa o subnivel.
El número de subcapas en una capa principal es igual al número cuántico principal, esto es,
hay una subcapa en la capa principal con n=1, dos subcapas en la capa principal con n=2, y
así sucesivamente. El nombre dado a una subcapa, independientemente de la capa principal
en la que se encuentre, esta determinado por el número cuántico l, de manera que como se
ha indicado anteriormente: l=0 (subcapa s), l=1 (subcapa p), l=2 (subcapa d) y l=3 (subcapa
f).
Los orbitales s (l=0) tienen forma esférica. La extensión de este orbital depende del valor
del número cuántico principal, asi un orbital 3s tiene la misma forma pero es mayor que un
orbital 2s.
Los orbitales p (l=1) están formados por dos lóbulos idénticos que se proyectan a lo largo
de un eje. La zona de unión de ambos lóbulos coincide con el núcleo atómico. Hay tres
orbitales p (m=-1, m=0 y m=+1) de idéntica forma, que difieren sólo en su orientación a lo
largo de los ejes x, y o z.
Los orbitales d (l=2) también están formados por lóbulos. Hay cinco tipos de orbitales d
(que corresponden a m=-2, -1, 0, 1, 2)
Los orbitales f (l=3) también tienen un aspecto multilobular. Existen siete tipos de
orbitales f (que corresponden a m=-3, -2, -1, 0, +1, +2, +3).
Una vez descritos los cuatro número cuánticos, podemos utilizarlos para describir la
estructura electrónica del átomo de hidrógeno:
1s1
en donde el superíndice 1 indica un electrón en el orbital 1s. Ambos estados de espín están
permitidos, pero no designamos el estado de espín en esta notación.
1- Números cuánticos
Especifica el nivel energético del orbital, siendo el primer nivel el de menor energía, y se
relaciona con la distancia promedio que hay del electrón al núcleo en un determinado
orbital. A medida que n aumenta, la probabilidad de encontrar el electrón cerca del núcleo
disminuye y la energía del orbital aumenta.
Por ejemplo si tengo un elemento químico que su último nivel es el 3s, su número cuántico
principal sería el 3.
Si tengo un elemento químico en que su último nivel es el 1s, entonces su número cuántico
principal sería 1.
Describe la forma geométrica del orbital. Los valores de l dependen del número cuántico
principal. Puede tomar los valores desde ℓ = 0 hasta ℓ =n-1. Por ejemplo:
si n = 2 ; ℓ = 0, 1.
si n = 4 ; ℓ = 0, 1, 2, 3.
En el caso de los átomos con más de un electrón, determina también el subnivel de energía
en el que se encuentra un orbital, dentro de un cierto nivel energético. El valor de l se
designa segun las letras:
Los orbitales que tienen el mismo valor de n, reciben el nombre de "nivel" y los orbitales
que tienen igual n y ℓ, "subnivel".
Por ejemplo si tenemos un elemento químico en que su último orbital es el 2p: el número
cuántico principal sería 2 y el número cuántico secundario (ℓ) sería 1, ya que si nos fijamos
en la tabla p=1.
- ℓ...0...+ℓ
Solo pueden tomar valores enteros que van desde –3 hasta +3, incluyendo el cero.
Así, Si ℓ=0, m= 0
si ℓ=1, existen tres posibilidades de mℓ;estas son: -1, 0, +1. El subnivel p tiene 3 orbitales,
que se designan por: px, py y pz.
- Si ℓ=2, existen 5 posibilidades -2, -1, 0, 1, 2. el subnivel d tiene 5 orbitales, que se
designan por : dxy, dyz, dxz, dx2- y2, dz2.
En resumen:
Para el subnivel s : m = 0
Para el subnivel p : m = –1 , 0 , +1
Para el subnivel d : m = –2 , –1 , 0 , +1 , +2
Configuración electrónica
La configuración electrónica del átomo de un elemento corresponde a la ubicación de los
electrones en los orbitales de los diferentes niveles de energía. Aunque el modelo de
Scrödinger es exacto sólo para el átomo de hidrógeno, para otros átomos es aplicable el
mismo modelo mediante aproximaciones muy buenas.
Ejemplo:
Los orbitales se llenan en orden creciente de energía, con no más de dos electrones por
orbital, según el principio de construcción de Aufbau.
Litio (Z = 3). Este elemento tiene 3 electrones. Empezaremos llenando el orbital de menor
energía con dos electrones que tendrán distinto spin (ms). El electrón restante ocupará el
orbital 2s, que es el siguiente con menor energía:
La flecha indica el valor del cuarto número cuántico, el de spin: para +1/2: y para –1/2,
respectivamente.
También podemos describir la distribución de electrones en el átomo de litio como:
Los electrones que tienen números de espín opuestos cancelan los efectos magnéticos y se
dice que son electrones apareados. Un ejemplo son los dos electrones que ocupan el orbital
1s en el átomo de Litio. De manera similar decimos que el electrón que ocupa el orbital 2s
orbital está desapareado.
En la tabla a continuación vemos como se distribuyen los electrones de los átomos en
orden creciente a su número atomico (Z):
En el helio se completa el primer nivel (n=1), lo que hace que la configuración del He
sea muy estable.
Para el Boro el quinto electrón se sitúa en un orbital 2p y al tener los tres orbitales 2p la
misma energía no importa cuál de ellos ocupa.
En el carbono el sexto electrón podría ocupar el mimo orbital que el quinto u otro
distinto. La respuesta nos la da:
la regla de Hund: la distribución más estable de los electrones en los subniveles es
aquella que tenga el mayor número de espínes paralelos.
Los electrones se repelen entre sí y al ocupar distintos orbitales pueden situarse más lejos
uno del otro. Así el carbono en su estado de mínima energía tiene dos electrones
desapareados, y el nitrógeno tiene 3.
El neón completa el nivel dos y al igual que el helio tiene una configuración estable.
Las configuraciones electrónicas pueden también escribirse de manera abreviada haciendo
referencia al último nivel completo. Para ello, debemos ocupar la configuración de los
gases nobles, ya que ellos tienen todos su orbitales completos con electrones (s2p6), como
por ejemplo en el caso del helio (s2) y neon (s2p6) como se muestra en la tabla anterior.
Ar 18
Lo mismo ocurre a partir del elemento Sc (Z = 21) [Ar] 3d1 4s2. El último electrón no se
agrega al subnivel 4p, sino al 3d, como lo indica el orden energético. Lo mismo sucede con
las configuraciones de los emenetos Ti (Z = 22) y V (Z = 23). Con el cromo (Cr Z = 24)
surge otra aparente anomalía porque su configuración es [Ar] 3d5 4s1. La lógica de llenado
habría llevado a [Ar] 3d4 4s2, sin embargo la distribución fundamental correcta es la
primera. Esto se debe a que el semillenado de orbitales d es de mayor estabilidad, puesto
más estable.