Endodoncia Mala Praxis

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Int. J. Med. Surg. Sci.

,
2(1):367-375, 2015.

Eventos Adversos y Demandas


por Mala Praxis en Endodoncia

Adverse Events and Malpractice Claims in Endodontics

Gabriel M. Fonseca*; Karina Mira**; Héctor Beltrán**;


Katherine Peña** & Violeta Yendreka***

FONSECA, G. M.; MIRA, K.; BELTRÁN, H.; PEÑA, K. & YENDREKA, V. Eventos adversos y demandas por
mala praxis en endodoncia. Int. J. Med. Surg. Sci., 2(1):367-375, 2015.

RESUMEN: Se ha definido al “evento adverso” como una complicación no intencional producto de la


atención sanitaria, y aunque puede poseer diferentes etiologías, siempre será imputable a ésta y no a una
condición previa de salud del paciente. Calificados como tales, los conceptos de iatrogenia y mala praxis han
sido claramente diferenciados pues sólo los segundos ocasionan responsabilidad: mientras la iatrogenia
puede resultar de un accionar correcto, la mala praxis supone un daño producido por un acto imperito o
negligente, potencialmente demandable y obligable ser a reparado. En odontología, la endodoncia constitu-
ye una de las especialidades de mayor desafío donde los eventos adversos y las demandas de mala praxis
han sido reportados con importante frecuencia. Se presenta una revisión de la literatura pesquisando las
principales causas y resultados de demandas por mala praxis en endodoncia. Se seleccionaron 3 artículos
provenientes de Italia, Israel y Dinamarca, donde los eventos adversos más demandados fueron las perfora-
ciones radiculares, las terapéuticas medicamentosas inadecuadas, las obturaciones defectuosas y las fractu-
ras de instrumentos. Uno de los artículos refirió sentencias de mala praxis en el 97,5% de las demandas.
Dado que en Chile la endodoncia lidera las demandas por mala praxis odontológica, se discuten estrategias
de gestión de riesgos para estos procedimientos, se propone la adhesión a estrictos protocolos y se reco-
mienda adoptar conductas preventivas para minimizar los efectos negativos de estos eventos.

PALABRAS CLAVE: Endodoncia; Mala praxis; Eventos adversos.

INTRODUCCIÓN

Se ha definido al “evento adverso” como carátula de “accidente”, “complicación” ó


una lesión o complicación no intencional pro- “iatrogenia”, o en el peor de los casos, “mala
ducto de la atención sanitaria, y aunque puede praxis” como generadora del daño (y de res-
poseer diferentes etiologías, siempre será im- ponsabilidad: el tener que responder por ese
putable a ésta y no a una enfermedad base o daño) si se corroboran impericia, imprudencia,
condición de salud del paciente (Kraemer & Vera, negligencia o inobservancia de los reglamentos
2008). Contemplados dentro de estos eventos, o deberes a su cargo con apartamiento de la
los errores médicos suelen llamar poderosamen- normativa legal aplicable (Kraemer & Vera;
te la atención cuando han resultado en un daño Chomali & Miranda, 2003; García et al., 2005).
o minusvalía para el paciente. La “predecibilidad”
y “evitabilidad” de los mismos puede llegar a Dentro de las especialidades
establecer condicionantes para una eventual odontológicas, la endodoncia constituye una de

*
Laboratorio de Pericias en Odontología Forense –LPO-, Centro de Investigación en Morfología Aplicada –CIMA-, Facultad
de Odontología, Universidad de La Frontera, Temuco, Chile.
**
Estudiante Facultad de Odontología, Universidad de La Frontera, Temuco, Chile.
***
Docente de Endodoncia, Clínica Odontológica Integral Adulto I, Facultad de Odontología, Universidad de La Frontera,
Temuco, Chile.

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FONSECA, G. M.; MIRA, K.; BELTRÁN, H.; PEÑA, K. & YENDREKA, V. Eventos adversos y demandas por mala praxis en endodoncia.
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las de mayor desafío por sus refinados procedi- que la endodoncia de por sí compone una cau-
mientos diagnósticos y por sus necesarias téc- sa frecuente de litigios y demandas a nivel mun-
nicas secuenciales (Webber, 2010). A pesar de dial (Givol et al., 2010; Pinchi et al., 2013), en
que el porcentaje de casos de evolución favora- Chile los reclamos posicionan a esta especiali-
ble es cercano al 90%, el restante 10% (los dad con un nada honroso primer lugar en las
llamados “fracasos endodónticos”), aun compo- estadísticas (Portela, 2013).
ne una realidad difícil de erradicar (Pineda Mejía,
2003). Cuando la causa de ese fracaso ha sido Si bien se ha subrayado que la notifica-
explicada en errores profesionales, la mayor ción de los eventos adversos (y más
cantidad de estos ha sido detectada durante las específicamente de los errores profesionales
fases intraoperatorias (Givol et al., 2010). Una causantes de estos) configura una medida por
falta demostrada de adhesión a los estrictos pro- demás eficiente para el control de riesgos, la
tocolos endodónticos no sólo explicará resulta- evitabilidad de los eventuales fracasos y la dis-
dos de pobre calidad sino que también hará in- minución de los litigios que emanan de ellos
defendible cualquier fracaso o falla ante un re- (Kraemer & Vera), en el área odontológica se
clamo (Webber). ha subrayado que existe una muy escasa canti-
dad de reportes que refieran el tipo de trata-
Si bien es cierto no todos los fracasos miento endodóntico reclamado y la responsabi-
endodónticos obedecen a errores de procedi- lidad profesional que ha devenido de estos
miento, cuando estos podían evitarse bajo con- (Pinchi et al.). Se presenta una revisión sobre
ceptos de riesgo y prevención, las circunstan- eventos adversos en endodoncia demandados
cias pueden cambiar drásticamente el resulta- por mala praxis, y se discuten estrategias para
do de estos litigios (Lin et al., 2005). Bajo este aumentar su evitabilidad.
punto de vista, el reconocimiento de las situa-
ciones potencialmente litigables en endodoncia
y la adhesión a normas técnicas y estándares MATERIAL Y MÉTODO
para disminuir el riesgo de caer en ellas, han
pretendido prevenirlas potenciando con ello los
resultados favorables (Webber). Sin embargo, Se realizó una búsqueda en las bases
y aunque dada la naturaleza de la práctica exis- PubMed/MEDLINE, LILACS y SciELO de los tér-
te una exposición permanente a la ocurrencia minos “endodoncia”, “demanda” y “mala praxis”
de eventos adversos, parece existir una reti- en español e inglés. Se incluyeron artículos a
cencia manifiesta a asumirlos, informarlos y a texto completo, sin límites de tiempo que espe-
adoptar mecanismos de prevención y gestión cificaran procedimientos endodónticos reclama-
de esos riesgos, no sólo asignando relevancia a dos como erróneos pre, intra o postoperatorios.
eventos causantes de daño sino también a aque- Se excluyeron cartas al editor, artículos que de-
llos que, sin haberlo producido, pueden tallaran procedimientos in vitro o que no espe-
originarlo por repetición (Chomali & Miranda). cificaran los procedimientos reclamados.

Una demanda por mala praxis puede ser


percibida como una crítica a la competencia del RESULTADOS
odontólogo, y una señal de ruptura en su rela-
ción con el paciente (Givol et al., 2010). Aún
cuando no existen metodologías consensuadas Se seleccionaron 3 artículos procedentes
capaces de garantizar la ausencia de eventos de Dinamarca, Israel e Italia (Tabla I). Los ve-
adversos, el Ministerio de Salud de Chile realiza redictos más frecuentemente asociados con
importantes esfuerzos para intentar controlar mala praxis fueron los relacionados a la pobre
todas aquellas variables que pueden influir en calidad de las obturaciones, a instrumentaciones
la seguridad del paciente conjugando aspectos defectuosas (con perforación radicular) y a la
propios de los sistemas sanitarios y las accio- falta de consentimientos informados. Los vere-
nes humanas, y siguiendo los estándares esta- dictos de mala praxis fueron establecidos en el
blecidos por la Organización Mundial de la Sa- 97,5%, 72,2% y 37,14% en Italia, Israel y Di-
lud (Kraemer & Vera). En odontología, y aun- namarca respectivamente, en el último caso li-
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mitadas exclusivamente a endodoncia sólo en el 50% de las deman- las demandas, estas fue-
das. No se determinó responsabilidad profesional cuando el odontólo- ron desestimadas como
go dio razones lógicas y atingentes por las que no fue posible mejorar malas praxis cuando pu-
el resultado técnicamente (por ejemplo por la anatomía desfavorable dieron comprobarse fa-
del canal pulpar), cuando el evento fue de carácter no previsible (acci- llas de fabricación (deri-
dentes), cuando no hubo patología asociada (objetivación del daño) o vando responsabilidad a
cuando el paciente recibió oportuna información sobre eventuales com- las empresas fabrican-
plicaciones. Aunque la fractura de instrumentos motivó gran parte de tes) o cuando no se co-
rroboró daño, siempre
22,4
17,8
13,3
10,4

49,4
46,5
37,4
36,9
36,3
35,3
24,0
72,5
53,3
12,5
Tabla I. Artículos seleccionados en esta revisión sobre eventos adversos en endodoncia demandados por mala praxis.

9,1
4,8
4,4
3,3
3,3
2,9
2,5
2,5
1,9
0,8
0,6

9,2
5,8
%

que fueron informadas


oportunamente por los
odontólogos a sus pa-
108

356
335
269
266
261
254
173
86
64
50
44
23
21
16
16
14
12
12

87
64
15
11
cientes. Bjørndal & Reit
n

9
4
3

7
Evento adverso demandado

(2008) refieren que en


5 de 16 reclamos por
Tratamiento incorrecto sin detallar
Intoxicación con Paraformaldehido
instrumentos fractura-
Dolor persistente intraoperatorio
Dolor persistente postoperatorio

dos y dejados en el ca-

Sobreobturación con extrusión


nal radicular, el odontó-

Preparación acceso cavitario


No ficha y/o consentimiento

No ficha y/o consentimiento

No ficha y/o consentimiento


logo fue encontrado cul-
Descripción

Tratamiento prolongado

pable de mala praxis de-

Diagnóstico equivocado
Instrumento fracturado

Instrumento fracturado
Obturación defectuosa

Obturación defectuosa

bido a que la fractura


Falla en restauración
Síntomas o infección

Perforación radicular

Perforación radicular

Perforación radicular
Tratamiento erróneo

Otro procedimiento

ocurrió en un canal con


Diente fracturado

72,2 Instrumentación

97,5 Subobturación anatomía no complica-


Otras razones

da, a que el instrumen-


to evitó la reparación
37,1 Sin datos

periapical y que el pa-


ciente no fue informado
de la situación.
veredicto de

Givol et al. (2010)


%

informaron que la mayo-


Con

ría de los errores en el


diagnóstico y en el plan
179

520

117
n

de tratamiento fueron
identificados en el 24%
de los casos revisados.
endodónticas
Demandas

Dado que los autores no


tota les

encontraron diferencias
482

720

120

significativas entre los


errores producidos en
los tratamientos endo-
dónticos electivos o los
realizados por patologías
reportados
1995-2002

1992-2008

2006-2010

preexistentes, sugieren
Años

una especial atención a


considerar todos los po-
sibles resultados negati-
vos de un tratamiento
electivo ofreciendo al pa-
Dinamarca

Israel

ciente la información ne-


Italia
País

cesaria sobre tratamien-


tos alternativos, riesgos
y pronósticos.
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Bjørndal & Reit y Pinchi et al., encontraron cían los prestigiosos Cohen & Schwartz (1987):
que entre el 69% y el 80% de los casos, los “Cualquier desviación con un daño resultante,
odontólogos reclamados fueron hombres y los de los mínimos estándares de calidad del trata-
pacientes demandantes fueron mujeres; según miento endodóntico que un profesional razona-
los autores, esta tendencia debería ser tomada blemente prudente debería realizar bajo las
con precaución si se desconoce el porcentaje real mismas o similares circunstancias”. Distorsiones
de profesionales masculinos/femeninos para un serán entonces:
contexto geográfico determinado, pero podría
estar indicando aspectos de género en lo que a) Un diagnóstico erróneo: No emplear mé-
refiere a la relación paciente-profesional, impor- todos y pruebas exhaustivas que aseguren un
tantes para los reclamos de responsabilidad. diagnóstico apropiado del estado pulpar; la fa-
lla en identificar la causa de dolor puede resul-
tar en el tratamiento de un diente equivocado.
DISCUSIÓN De igual modo, el estudio radiográfico debe ser
indefectiblemente realizado después de que to-
das las pruebas han sido realizadas. Un trata-
En los últimos años, las prestaciones sani- miento no debe ser realizado con base sólo en
tarias se han visto modificadas, entre otros fac- síntomas, debería ser iniciado sólo cuando las
tores, por el aumento de presión del paciente exi- pruebas reproducen una respuesta igual a la
giendo mejores resultados con menores compli- que motiva la queja del paciente. Si no es así,
caciones. Esto ha favorecido el nacimiento de una no se debe adivinar. Todos los autores coinci-
floreciente actividad: la “industrialización de los den en que cada una de las etapas diagnósticas
daños originados por los malos resultados médi- debe quedar registrada en la ficha clínica del
cos”, no sólo derivados de factores tecnológicos, paciente (Cohen & Schwartz; Webber).
institucionales o de la variabilidad biológica de
las enfermedades, sino también de una mala b) Registros radiográficos incompletos o de
praxis profesional (Morales, 2007). mala calidad: Evitar actitudes negligentes en
los registros radiográficos; una mala técnica
Los conceptos de “mala praxis” (el daño puede evitarse con la atención adecuada. Utili-
ocasionado como consecuencia de una acción pro- zar sólo técnicas convencionales de manera
fesional equivocada, imperita, imprudente, ne- apresurada es invitación a un diagnóstico po-
gligente o inobservante de derecho) e “iatrogenia” bre. Cualquier técnica manual debe garantizar
(la acción perjudicial que resulta directa o indi- que la película sea procesada, lavada y secada
rectamente de la actividad diagnóstica o tera- de manera apropiada. Pretender defender una
péutica del equipo de salud) suelen ser errónea demanda con radiografías defectuosas es como
e indistintamente utilizados. Estos conceptos, “ir a la batalla sin armadura” (Webber).
ambos calificables como “eventos adversos”,
deben ser claramente diferenciados tratándose c) No uso de goma dique: No existe justifica-
de elementos del derecho médico y la determi- ción alguna para eludir el empleo de goma di-
nación de responsabilidad: mientras la que, en ninguna especialidad tan relevante como
iatrogenia es consecuencia de una acción co- en la endodoncia. No sólo garantiza un ambien-
rrecta, adecuada (incluso la indicada), el daño te aséptico sino que también disminuye las po-
propiamente dicho (resultado de una mala sibilidades de accidentes por ingestión o inha-
praxis) es resultado negativo de un acto inco- lación de instrumentos o sustancias. De produ-
rrecto, errático, negligente, imperito o impro- cido el evento debe interrumpirse inmediata-
pio. La iatrogenia se identifica en el paciente (a mente el tratamiento, controlar las vías aéreas
través de algún tipo de alteración), mientras que y verificar si estas están comprometidas. El pa-
la mala praxis se identifica en el médico o el ciente debe ser notificado por escrito de la si-
equipo de salud (García et al.). tuación y derivado a evaluación médica, de pre-
ferencia acompañado por el odontólogo (para
¿Qué constituye entonces un legítimo re- proveer la información necesaria sobre las cir-
clamo por mala praxis en endodoncia? Resulta cunstancias del evento y las características del
sumamente interesante la respuesta que ofre- objeto ingerido/inhalado). Ningún consentimien-
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to informado verbal o escrito exonera de res- clorhexidina, subordinados al NaOCl. El peróxido


ponsabilidad a la no utilización del dique de goma de hidrógeno es un producto del pasado y su uso
(Cohen & Schwartz; Webber; Silva et al., 2011). nunca debe ser indicado. Sin embargo, cuando el
NaOCl supera inadvertidamente los límites del
d) Fracturas dentarias postoperatorias: foramen apical –inyectado en solución bajo pre-
Luego de realizada la endodoncia, los dientes sión- han sido descritas reacciones severas. Se
deben ser rehabilitados para prevenir fracturas, ha recomendado utilizar jeringas con agujas lo
una de las situaciones más frustrantes y suficientemente finas como para ser colocadas a
generadoras de demanda. Esta información debe nivel apical, siempre que estén sueltas y permi-
ser provista al paciente antes del tratamiento y tan al movimiento mientras se irriga. Si se pro-
registrada en su ficha clínica para demostrar que duce el accidente, este puede ser rápido y de
ha sido informado y que entiende los riesgos de consecuencias graves, con dolor intenso a pesar
no restaurar apropiadamente ese diente. Reha- de la anestesia local. Deberá incrementarse el
bilitaciones protésicas de mala calidad asocia- bloqueo anestésico, lavar copiosamente el canal
das a estas fracturas aumentan el “riesgo fi- con solución salina, secar con conos de papel y
nanciero” y con ello el riesgo médico-legal cerrar el canal. Más allá de la prescripción de
(Webber; Rosen et al., 2012). medicación antiinflamatoria o antibiótica, es re-
comendable que el profesional se mantenga ex-
e) Instrumentos fracturados: Cualquier ins- pectante y a disposición del paciente. Si la reac-
trumento metálico puede fracturarse si es utili- ción es grave o compromete estructuras vitales,
zado dentro de un canal radicular forzándolo puede ser necesaria la derivación a un centro
más allá de su módulo de elasticidad o simple médico de emergencia. Aunque no intencional,
falla de fabricación. Sin embargo, en estos ca- las consecuencias de un accidente con hipoclorito
sos las demandas más frecuentes obedecen a pueden ser severas y motivo de demanda
la falta de notificación escrita y entendida del (Webber).
paciente respecto del evento inmediatamente
producido, los problemas resultantes y lo que g) Obturaciones defectuosas: La sobre y
el profesional hará para resolverlo. Sólo si la subobturación o la falta de condensación pue-
fractura se ha producido a finales de tratamien- den originar situaciones de litigio. La mayoría de
to (lo que supone un canal limpio), con ubica- los protocolos endodónticos publicados dejan cla-
ción apical del remanente y una obturación apro- ro que la obturación debe impedir el paso de
piada evitando la remoción del objeto, podrá microorganismos y fluidos no sólo al canal
esperarse un resultado sin complicaciones pos- radicular sino también a los conductillos
teriores. Se ha sugerido que la decisión de man- dentinarios y canales accesorios; el material
tener o retirar ese remanente debe pertenecer debe ser semi-sólido en conjunción con un ce-
al especialista una vez derivado el caso, deriva- mento que selle los vacíos entre el relleno y la
ción que debe ser costeada por el profesional; pared del canal. La obturación debe acercarse
esto demostraría su interés y preocupación por lo más posible al ápice radicular. Si bien la gu-
el resultado, por ende, del paciente (Cohen & tapercha es un material de reconocida acepta-
Schwartz; Bjørndal & Reit; Webber). ción, una extrusión grosera de material acom-
pañada de síntomas, sin haber tomado una ra-
f) Accidentes con Hipoclorito de Sodio: Se diografía de control, plantea un evento de difícil
han enfatizado los problemas del uso del defensa ante una demanda. Aunque algunos
hipoclorito de sodio (NaOCl), el irrigante más am- reportes indican que una sobreobturación no
pliamente utilizado en el campo de la endodoncia: origina persé un fracaso endodóntico, el paciente
es potencialmente perjudicial para la ropa, los debe ser informado de todos los asuntos rela-
ojos, la piel y la mucosa oral y debe ser utilizado cionados con el resultado final de su tratamien-
con precaución. Sin embargo, sus efectos positi- to. Si la endodoncia no es satisfactoria como
vos en concentraciones que van del 0,5 al 5% en para justificar una rehabilitación protésica cos-
el campo de la endodoncia están bien documen- tosa, ésta no debe ser colocada; es poco pro-
tados y no pueden esperarse resultados exitosos bable que un paciente se sienta feliz con un tra-
sin su utilización, a pesar de disponerse de otros tamiento endodóntico fracasado luego de ins-
productos como el yoduro de potasio o la talada (Webber).
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h) Perforaciones radiculares (Fig. 1): j) Ficha clínica y consentimiento informa-


Siempre existe la posibilidad de producir una do ausentes o inadecuados: Es sumamente
perforación del piso cameral o de los márgenes importante que el odontólogo complete de ma-
radiculares mientras se está buscando un ca- nera legible los registros de tratamiento, con-
nal. La clave está en informarla previamente al servando además todas las radiografías
paciente cuando el caso va a ofrecer segura- diagnósticas, operatorias y de control. En cual-
mente dificultades, o registrar apropiadamente quier demanda de mala praxis, contar con ade-
si el paciente ha declinado el ofrecimiento de cuados registros ayudará sin dudas a una sóli-
derivación a un especialista. De producido el da defensa. De igual modo, registros incomple-
evento, este debe ser tratado con productos tos siempre serán mejores que registros falsea-
apropiados (hidróxido de calcio, MTA, etc.) y dos; la detección de adulteraciones hará impo-
ser informado al paciente con todas sus even- sible cualquier tipo de defensa razonable. El
tuales posibilidades pronósticas (Cohen & consentimiento informado es un deber no
Schwartz; Webber). delegable y sólo el profesional puede obtenerlo
de su paciente; no posee ningún valor si el pa-
ciente no ha entendido lo que se le ha explicado
por lo que deben utilizarse expresiones razona-
bles para permitir su comprensión. Un paciente
informado será un paciente menos aprensivo
que cuestionará menos la competencia de su
odontólogo en casos de dolor o inflamación una
vez que dejó la consulta (Cohen & Schwartz;
Selbst, 1990).

k) Incumplimiento de normas de buen


proceder: Es sumamente recomendable que el
endodoncista se encuentre disponible para el
paciente de producirse alguna situación de
emergencia postoperatoria, incluso hacer lo
posible para que este acuda a la consulta ese
mismo día; en muchos casos la demanda suele
sobrevenir buscando compensación por dolor y
sufrimiento excesivo alegando haber sido aban-
Fig. 1. Perforación cervical con obturación endodóntica
donados. Es importante hacer saber al paciente
aberrante y mal pronóstico de la estructura coronaria.
Laboratorio de Pericias en Odontología Forense (Cór- que el profesional está preocupado por su bien-
doba, Argentina). estar y que hará lo posible por aliviar esos sín-
tomas. Si el tratamiento aparenta ofrecer difi-
cultades, una derivación en tiempo y forma a
i) Daños neurológicos: Aunque infrecuentes, un especialista, incluso hablándolo personalmen-
han sido reportados como causantes de deman- te con él asegurará al paciente empatía y com-
da en odontología endodóntica. Givol et al. pañía haciendo su transición más sencilla y apro-
(2011) informaron 16 casos relacionados a piada. Evitar utilizar terapéuticas experimenta-
endodoncia de un total de 262 de sensaciones les sin el conocimiento, los convenientes sopor-
alteradas por tratamientos odontológicos. Once tes científicos o sin el consentimiento del pa-
casos involucraron a lesiones al nervio alveolar ciente para tales prácticas (Cohen & Schwartz;
inferior y 5 al nervio mentoniano, la mayoría Morales).
por tratamientos sobreobturados al segundo
molar inferior (68%). De igual modo, la El manejo del riesgo
neurotoxicidad del uso de pastas con
paraformaldehído y esteroides sobre tejido ner- El profesional debe informar a su pacien-
vioso (y consecuentes parestesias irreversibles) te cuáles son los riesgos razonablemente previ-
ha sido claramente demostrada cuando sobre- sibles del tratamiento: la naturaleza del proce-
pasan el ápice (Cohen & Schwartz). dimiento, sus riesgos inherentes, las alternati-
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vas terapéuticas, los beneficios esperables, y la El reporte de los errores ha demostrado ser
oportunidad de consultar al profesional respec- una estrategia de gran eficiencia preventiva
to a cada uno de esos puntos. Luego de evaluar (Kraemer & Vera); en odontología, un sistema
una serie de 3308 casos registrados por 43 es- de notificación de eventos adversos y el análisis
pecialistas, Selbst (1990) identificó y cuantificó de diferentes fuentes de información (bibliográ-
una serie de riesgos inherentes a tratamientos ficas, originadas en instituciones deontológicas,
endodónticos convencionales que necesitan ser provenientes de reclamos o de reportes volunta-
informados y discutidos con los pacientes de rios anónimos) representa la clave estratégica
manera previa a sus tratamientos: para aprender de los errores y evitar repetirlos.
Esto permitiría revertir la casi total ausencia de
1- La terapéutica endodóntica no puede ser datos cuando de litigios se trata; los odontólogos
garantizada y algunos dientes se perderán in- sólo pretenden olvidarlos incluso conciliando con
dependientemente de la intervención otros colegas su ocultamiento (Pinchi et al.; Perea-
endodóntica; Pérez et al., 2011). Esto hunde sus raíces en la
2- La sobreobturación o subobturación del ca- misma cultura médica: es un medio en que no se
nal radicular puede ocurrir hasta en un 5% de está dispuesto a aceptar el equívoco creando una
los casos; sensación de que el médico es infalible, asumien-
3- El paciente puede experimentar dolor por do los errores como un defecto, falta de cuidado
su tratamiento endodóntico hasta un 5% de los o de acuciosidad. Sumado a esto, la realidad de
casos; la mala praxis y el marco legal y judicial actual
4- El paciente puede experimentar inflama- en Chile originan un fuerte incentivo contra la
ción hasta un 2% de los casos. revelación o investigación de eventos adversos,
5- El paciente puede sufrir daños en la corona pues una demanda o una sentencia desfavorable
existente o restauración como resultado de la pueden afectar gravemente la carrera completa
endodoncia en menos del 0,5 % de los casos. de un profesional. Este no estará dispuesto a re-
velar la ocurrencia de un error sino que incluso
La máxima seguridad del paciente se con- estará menos dispuesto a reconocerlo en perjui-
sigue por un conocimiento adecuado de los ries- cio de otro colega (Chomali & Miranda).
gos, la eliminación de aquellos que son innece-
sarios y la prevención y protección de aquellos Establecer el carácter de error, complica-
que hay que asumir de forma inevitable. Esta- ción o accidente es ocasionalmente difícil con lo
blecer qué es lo que puede ir mal identificando que distinguir un error terapéutico de una com-
los sucesos adversos potenciales (el “riesgo sig- plicación prevenible no es simple. La “evitabilidad”
nificativo”, aquel probable de causar daño al pa- (la posibilidad de un suceso de ser previsto y
ciente que genere una demanda legal si no es evitado) de un suceso adverso es un punto im-
controlado), analizando histórica, bibliográfica portante a considerar: para Perea-Pérez et al.
y judicialmente estos eventos; analizando y (2014), un muy significativo porcentaje (44,3%)
evaluando las consecuencias tanto de los even- de 415 eventos adversos en odontología se de-
tos iatrogénicos como los emanados de una mala bieron a errores y complicaciones previsibles y
praxis (los errores de percepción -falsos nega- evitables. La endodoncia fue la segunda especia-
tivos- siempre son sospechosos de negligencia, lidad con mayor frecuencia de eventos adversos
mientras que un error cognoscitivo -falsos po- (comprendió 86 de 415 casos), con una correla-
sitivos y errores de valoración por conclusiones ción positiva entre esa especialidad con los acci-
o lógicas diagnósticas erróneas o una laguna dentes y una negativa con las complicaciones in-
de conocimiento- suelen ser indicios de igno- evitables.
rancia o impericia); previniendo, reduciendo,
transfiriendo y eliminando las situaciones de Sin lugar a dudas lo primero y más impor-
riesgo utilizando protocolos de buenas prácti- tante será reconocer que la ocurrencia de even-
cas preventivas y de notificación (asegurar el tos adversos es una realidad (Chomali & Miran-
derecho a la información y una efectiva rela- da). Este cambio de percepción de los riesgos
ción de confianza con el paciente) parecen ser establecerá también nuevas formas de mitigar
la respuesta a este creciente problema (Kraemer las consecuencias si el evento se ha producido.
& Vera; Chomali & Miranda; Morales). La contratación de seguros de responsabilidad
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FONSECA, G. M.; MIRA, K.; BELTRÁN, H.; PEÑA, K. & YENDREKA, V. Eventos adversos y demandas por mala praxis en endodoncia.
Int. J. Med. Surg. Sci., 2(1):367-375, 2015.

civil profesional con coberturas específicas en Más allá de toda hipótesis y elucubración,
sus pólizas o contar con odontólogos contrata- el mejor modo de manejar los eventos adver-
dos en esas compañías de seguros no sólo como sos es evitar que éstos se produzcan; las leyes,
peritos sino también ofreciendo asesorías para normas y códigos nunca serán superadores de
los asegurados ha dado altas tasas de recono- una correcta, idónea, actualizada y empática ad-
cimiento y recibido gran aceptación al limitar hesión a los protocolos de cada especialidad,
los efectos negativos de los litigios. La posibili- sin lugar a dudas la manera correcta de eludir
dad de que el odontólogo asegurado pueda dis- estos eventos, minimizar los riesgos de que es-
cutir cualquier incidente desafortunado con un tos se produzcan asegurando calidad y resulta-
consultor de su misma compañía de seguros dos lo más favorables y seguros posibles para
puede reducir o incluso evitar la escalada pro- el paciente.
gresiva del conflicto (Pinchi et al.).

FONSECA, G. M.; MIRA, K.; BELTRÁN, H.; PEÑA, K. & YENDREKA, V. Adverse events and malpractice
claims in endodontics. Int. J. Med. Surg. Sci., 2(1):367-375, 2015.

SUMMARY: An "adverse event" has defined as a non-intentional complication result of health care
treatment, and although it can have different causes, always involves the providing care, but not the
complications inherent to the patient’s disease itself. Adverse events, iatrogenic complications and malpractice
have been clearly differentiated because only malpractice causes liability: while iatrogenic events can be
result of a well-performed procedure, malpractice involves damage caused by negligence or lack of knowledge,
and it is a potential for complaint and liability claim. In dentistry, endodontics is one of the specialties of
greatest challenge where adverse events and malpractice claims have been reported with significant frequency.
We present a literature review searching the main causes and results of malpractice claims in endodontics.
Three articles from Italy, Israel and Denmark were selected, where the most claimed adverse events were
root perforations, inappropriate drug therapies, defective root fillings and instrument fracture. One of the
articles referred to malpractice verdicts in 97.5 % of claims. Since endodontics leads dental malpractice
claims in Chile, strategies of risk management for these procedures are discussed; the adherence to strict
protocols is proposed and measures to minimize the negative effects of these events are recommended.

KEY WORDS: Endodontics; Malpractice; Adverse events.

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